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Análisis Estructural
Ing. Jaime García Badillo
A 26 de enero de 2018
Clasificación de cargas estructurales
1. Las cargas muertas son cargas con magnitud constante que se mantienen
en una sola ubicación. Las constituyen el peso propio de la estructura, muros,
pisos, techos, tuberías, etc.
2. Las cargas vivas son cargas que no permanecen en una sola ubicación y
cuya magnitud puede variar. En otras palabras, todas las que no son cargas
muertas, son cargas vivas. Las que se mueven por si solas se denominan
móviles, como vehículos, personas y grúas; por otra parte, las que pueden
ser desplazadas se denominan cargas movibles, como los muebles, el
material almacenado en una bodega, la nieve, etc.
3. Las cargas por impacto se originan por la vibración de cargas móviles o
movibles. Resulta obvio que un pesado embalaje que cae al piso de una
bodega, o un camión que rebota en el pavimento irregular de un puente,
producen esfuerzos mayores a los que se tendría si las cargas de aplicaran
de manera suave y gradual.
4. Las cargas laterales son de dos tipos principales: las causadas por el viento
y las que se originan por sismos o terremotos. Uno de los casos más
tristemente memorables sean las ocurridas en el puente Tay, en Escocia en
1879 y en el puente Tacoma Narrows, en Washington en 1940.
5. Las cargas longitudinales son otro tipo que debe considerarse en el diseño
de algunas estructuras. Dichas cargas actúan, por ejemplo, al detener un tren
sobre un puente ferroviario, o un camión sobre el puente de una carretera.
No es difícil imaginar la magnitud de las fuerzas longitudinales que se
generan cuando un conductor va por un puente a 90 km/h (25 m/s) aplica
súbitamente los frenos a un camión de 20 toneladas.
Con el objeto de estimar las cargas vivas para las que diseñara una estructura,
puede recurrirse a publicaciones de diversos organismos en las que se sugieren
cargas mínimas. Algunos ejemplos son:
Bibliografía
McCormac Jack C. (1983). Análisis Estructural. México: Editorial Harla. 3ra edición.