Culto de Adoración

para el 23 de enero

FIEL A TODA PRUEBA

I. INTRODUCCIÓN
a. Saludo. Es un privilegio saludar a la iglesia y desearles un feliz sábado, y que
juntos en esta mañana podamos adorar el nombre de Dios.
b. Propósito. El propósito del mensaje de esta mañana es mostrar que cuando
una persona se coloca en las manos de Dios completamente llega a ser fiel
frente a toda prueba.
Desde la rebelión en el cielo todo ser creado ha tenido que probar su fidelidad
a Dios. A toda criatura Dios le dio libertad, porque Dios es amor y donde hay
amor hay libertad. Dios no obliga a sus hijos a que le sean fieles, Él quiere hijos
que le sirvan por amor. Desde la entrada del pecado a nuestro mundo hasta
que termine el tiempo de gracia, la lealtad del hombre seguirá siendo probada
a través de actos de adoración que pongan en evidencia su entrega y amor
hacia nuestro creador, redentor y sustentador.
c. Texto: Deuteronomio 7:9
II. FIEL EN MEDIO DE LOS PROBLEMAS (Daniel 6:23)
Los problemas desgastan las fuerzas, consume la vitalidad, hasta puede enfermar, pues
intimida, deprime y angustia, y así una persona no tiene capacidad de vivir plenamente.
Por otro lado los problemas son una realidad, y hay que enfrentarlos. Son parte de
nuestro diario vivir, por lo tanto nadie puede escapar de ellos.
Pero miremos como enfrentó sus problemas Daniel.
1. Daniel se encontró en medio de un problema en donde él no dejó de confiar
en el Señor.
a. Era imposible resolver, pues su muerte era inminente ya que era un de-
creto del rey, contra el cual no se podía hacer “nada”. Pero Daniel alzó sus
ojos de la fe, depositó toda su confianza en Dios, se entregó por completo
y sin reservas a Dios. Y como resultado experimentó uno de los más gran-
des milagros que solo Dios hace por sus hijos fieles a él.
b. Daniel paso una noche con su ángel, lo pudo ver, pudieron conversar. Es
simple la vida de un hijo fiel, cuanto más grande es el ataque del enemi-
go, mientras más grande es tu problema, más grande se muestra el poder
de Dios. Y lo hizo de una manera inesperada, Dios usó a un ángel para
tapar la boca de los leones.
1
 Dios usó la manera en que Daniel fue librado del foso de los leones para crear
una impresión favorable en el espíritu de Ciro el Grande. (Fe y Valor, 258).
2. Fue así como Dios permitió este decreto para que la fe de Daniel se viera pro-
bada, pero también fue en esta circunstancia que Dios probó el poder de Dios.
Es notorio solo un Dios vivo, responde a la persona que mantiene su fe viva.
3. Fue un testimonio para Ciro, quien venía acreditando que Daniel tenía un Dios
vivo, que actuaba en favor de la verdad, lealtad, y sobre todo sobre la vida de
un fiel adorador, como era Daniel.
4. Ninguna lesión se halló en él, porque cuando Dios actúa cuidando, protegien-
do, sustentando, lo hace tan perfecto y completo, que quien experimenta se
sorprende y quien observa el milagro, solo queda decir: “Tu Dios te ha salvado”.
5. Lo que empieza de rodillas termina de pie, cuando las rodillas tocan el suelo, el
corazón toca el cielo. Era justamente lo que Daniel experimento toda su vida,
antes del decreto y aun después: Una vida de oración (Daniel 6:10).
6. Aplicación:
a. ¿Cuál es tu problema más grande que enfrentas hoy? ¿Enfermedad, deu-
das, familia, etc.?
¿Qué se espera por su propio peso de cada situación? Una muerte, en
estrago económico, es decir ¿avizoras una sentencia adelantada contra
la cual no puedes hacer nada?
b. Te invito a levantar esa mirada de fe viva, y creer en el Dios eterno, que cuido
de Daniel y que hoy puede ser tu Dios en forma viva y real.
c. Recuerda que cuando una persona se coloca en las manos de Dios com-
pletamente llega a ser fiel frente a toda prueba. Y así frente a cualquier
problema Dios se mostrará y luchara por ti.
III. FIEL EN MEDIO DE LAS TENTACIONES (Gen: 39:9)
Lo primero que debemos entender es que las tentaciones son obra de Satanás y no
de Dios, sin embargo, Dios no nos dejará ser tentados más de lo que no podamos
resistir. (1 Cr 10:13)
José pasó por una de las tentaciones más difíciles para los varones. La tentación
sexual es una de las artimañas que Satanás utiliza hoy para hacer caer a muchos
jóvenes.
a. En medio de la tentación, debemos pensar que Dios está dispuesto a ayudar-
nos a no caer. (Santiago 4:7)
Aquel que cree plenamente en Cristo llega a ser un participante de la natu-
raleza divina, y el poder así recibido le servirá para hacer frente a cualquier
tentación. No caerá en la tentación ni será derrotado por falta de ayuda. En
los momentos de prueba podrá valerse de las promesas y por medio de ellas
escapar de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia.
(Dios nos cuida, 159)
2 3
b. Aplicación:
1. ¿Cuál es la tentación más grande de tu vida? ¿Cómo estás
enfrentando esa tentación? ¿Consideras el dinero como tentación?
¿consideras el codiciar a una señorita como una tentación?
2. Por qué no imitas a José enfrentando las tentaciones, es decir, no
las enfrentes si no huye, huye de esos lugares oscuros que te traen
destrucción y tristeza.
3. Sí, huir de la tentación o sino resístela, pero no con tus fuerzas, sino
mediante una comunión permanente con Dios.
4. Recuerda que cuando una persona se coloca en las manos de Dios com-
pletamente llega a ser fiel frente a toda prueba. De esta manera frente a
cualquier problema Dios se mostrará y luchara por ti.
IV. RECOMPENSA DE LA FIDELIDAD
1. La fidelidad tiene su recompensa. Aunque en muchas oportunidades te ven-
drán problemas, tentaciones, etc. Recuerda que si en lo poco eres fiel, en lo
mucho te pondrá el Señor.
2. Sé fiel, no importando si lo que viene es lo inesperado, pero la Biblia pide
fidelidad hasta la muerte (Apocalipsis 2:10)
3. Dios siempre se mantuvo fiel a su pacto con su pueblo, es decir, su fidelidad
hacia su pueblo lo mantiene, por lo tanto, la fidelidad que profesamos hacia Él
debe ser eterna. Esto dará como resultado ser parte del banquete mesiánico.
“Para proveernos lo necesario, nuestro Padre celestial tiene mil maneras de las
cuales nada sabemos”. (Ministerio de curación, p. 382)
4. Recuerda que cuando una persona se coloca en las manos de Dios completa-
mente llega a ser fiel frente a toda prueba. De esta manera frente a cualquier
problema Dios se mostrará y luchara por ti.
V. CONCLUSIÓN
1. Resumen.
a. Los problemas debemos mirarlos como retos de los cua les, en muchos
de ellos, solo será posible resolverlos con la ayuda de Dios como en el
caso de Daniel.
b. Ser fiel en medio de la tentación es una lucha que se libera todos los días,
sin embargo, esto va a depender
2. Aplicación:
Tal vez no entiendas las circunstancias adversas, lo importante es
mantenerse del lado de Dios, sin embargo, lo entenderás después, cuando
Dios recompense tu fidelidad.
 a. Cuántas veces has tenido que faltar a un examen en sábado, cuántas ve-
ces has sido desafiado por jefes que te sacarán del trabajo, sin embargo,
recuerda que tu fidelidad fue recompensada.
b. Tal vez haya un hermano hoy en la Iglesia que esté experimentando las
consecuencias de su fidelidad, sepa usted mi hermano, que es mejor man-
tenerse del lado de Dios, porque Él tiene mil formas de ayudar a sus hijos.
c. Mucho de la comunión que tengamos con nuestro Dios, debemos consa-
grarnos así como se consagró José a Dios.
d. Todos los fieles iremos con Dios a disfrutar de las bendiciones que Él nos
ha preparado, mantengamos la fidelidad a Dios, de tal manera que sea-
mos parte de ese pueblo que disfrutará las mansiones celestiales.
3. Llamado:
Hoy se necesita de hombre y mujeres que sean leales a Dios como la brújula
al polo (EGW), que tengan la disposición de entregarse por completo a Dios y
aprender a vivir por fe.
Recuerda que cuando una persona se coloca en las manos de Dios completa-
mente llega a ser fiel frente a toda prueba. De esta manera frente a cualquier
problema Dios se mostrará y luchara por ti.
Deseas ser triunfador sobre cada prueba o tentación, puedes entregar tu cora-
zón en una oración con corazón sincero, quieres hacerlo… ven y oremos juntos.
4 5
Culto Joven
para el 23 de enero
MI DINERO Y SU DESTINO
I. INTRODUCCIÓN.
1. Saludo.
2. Motivación:
Comenzar y no terminar. La misma y vieja historia. Se repite una y otra vez.
¿Y por qué no se puede concluir? Puesto que el entusiasmo está presente en
todo proyecto cuando lo iniciamos.
¿Por qué se pierde la motivación que se necesita para concluirlo? Comenzamos
muy bien nuestros proyectos financieros, con mucho entusiasmo, pero aca-
bamos muy mal al dejarlos a medio camino o al no más comenzar. ¿Por qué?
Los proyectos financieros pueden entusiasmar a cualquiera, por el tipo de
éxito que prometen, por lo que cualquier persona estaría dispuesta a co-
menzarlos; ¿pero por qué no pueden concluirlos?
La respuesta es muy simple: falta de planificación. Ninguna meta en la vida pu-
ede alcanzarse sin una cuidadosa planificación, y este principio se aplica por ex-
celencia a nuestras finanzas. El objetivo financiero puede ser grande o pequeño,
pero si no está respaldado por una meticulosa planificación simplemente estará
condenado al fracaso. Lo que se comenzó con entusiasmo termina en desilusión.
Fue justo lo que le ocurrió al hombre de la parábola. Inicio con entusiasmo un
gran proyecto, pero no tenía un plan que le asegurara concluirlo de manera exi-
tosa. Al quedarse a medio camino, frustrado y desilusionado, se dijo de él: «Este
hombre ya no pudo terminar lo que comenzó a construir».
3. Propósito:
El propósito del mensaje es mostrar a la iglesia que Dios nos da los recursos
diarios y nosotros somos los responsables para administrarlos de la mejor
manera.
4. Texto: Lucas 14:30.
II. LA PLANIFICACIÓN QUE TRIUNFA
1. La mala planificación.
Una mala planificación financiera puede desatar un auténtico infierno. La
declaración puede parecer exagerada, pero es real. Por ejemplo, está dem-
ostrado que la primera causa por la cual los matrimonios se divorcian es por
 problemas financieros.
Si esto es así, ¿qué mayor infierno puede haber en una familia que un di-
vorcio?
Por mala planificación financiera esos matrimonios no pudieron llevar a feliz
término el hogar que comenzaron a construir. Así ocurre con todo proyecto
en el cual hay finanzas involucradas: se puede empezar bien, pero si las fi-
nanzas no se cuidan, el final es desastroso.
2. ¿Cómo salvarnos del descalabro económico?
a. Miles de cristianos han sido redimidos por la sangre de Jesús, pero no
han permitido que sus finanzas también sean redimidas. Aunque han
sido salvos por gracia, viven perdidos en sus finanzas. Esto se debe a
la desobediencia de aquel mandamiento que ordena presupuestar la
vida financiera. Es una ordenanza bíblica, y la hallamos en el versículo
28 de Mateo 14. Dice así: si “alguno de ustedes quiere construir una
torre, ¿acaso no se sienta primero a calcular el costo, para ver si tiene
suficiente dinero para terminarla?”.
b. La orden de este mandamiento indica que primero debemos calcular
el costo de cualquier proyecto, y hasta que hayamos hecho estos cálcu-
los, hasta entonces estaremos en la capacidad de verificar si tenemos
suficiente dinero para financiarlo. Este es el orden. Simple. Primero se
calcula el costo, y después se asegura de contar con la capacidad para
financiarlo. Si notamos, entender el mandamiento es fácil; ¡lo difícil
es obedecerlo! ¿Cómo lograrlo? ¿Cómo costear la universidad de los
hijos, o la compra de una vivienda, o de un automóvil, o enseres do-
mésticos, o ropa y alimentos, sin gastar más de lo que ganamos?
c. ¡Prepárese! pues hay un principio general que no falla. Es científico, y
dice así: ¡Una persona debe planificar su vida financiera de acuerdo a
las posibilidades que le permitan sus ingresos! Cualquier proyecto que
necesite dinero para llevarlo a cabo debe ser planificado dentro de los
límites que le son impuestos por sus ingresos. Si usted vive fuera de
estos límites, es cuando la vida financiera se convierte en un infierno.
Su alma puede haber sido redimida, pero no sus finanzas. Si nota, el
principio no tiene nada de nuevo ni de complicado. Es sencillo, fácil de
entender, pero la gran mayoría de las personas no lo practica. Por no
hacerlo tienen que pagar el precio, y muy elevado: ¡se vuelven esclavos
de sus finanzas!
3. Recuerde el gran principio general: Usted debe planificar su vida financiera
de acuerdo a las posibilidades que le permitan sus ingresos. No puede ir más
allá. Debe “calcular el costo” de todos sus proyectos, necesidades y deseos.
Una vez calculado, debe sujetarse a los límites que sus ingresos le imponen.
Si traspasa esos límites está violando una ley, que es bíblica y científica, y no
lo dude, las consecuencias no se harán esperar.
4. Recuerde que los cálculos matemáticos son fríos. No se deje llevar por las
emociones, ni para comprar lo que no puede pagar, ni para sentirse una po-
6 7
bre víctima por no poder hacerlo. Dios sabe lo que usted necesita. Si obe-
dece su instrucción de calcular su vida dentro de los límites de sus ingresos,
él se encargará de proveerle lo necesario. Si cada día lo hace con las aves,
¿cómo no lo hará con usted?
III. CÓMO GANAR LA GUERRA
CÁLCULOS PREVIOS. Pero volvamos al capítulo 14 de Lucas y leamos ahora el ver-
sículo 31. Dice: “Supongamos que un rey está a punto de ir a la guerra contra otro
rey. ¿Cómo ganar esta guerra? ¿Cómo gastar menos de lo que ganamos? El prin-
cipio es: hacer cálculos antes de enfrentar la guerra de precios y productos del
mercado. Si los comerciantes diseñan veinte mil estrategias para arrebatarle su
dinero, usted tiene que contraatacar elaborando estrategias para evitarlo. Así de
simple. El problema es que no empleamos esas estrategias, quizá por no conocer-
las. Si este es el caso, ¡prepárese una vez más! Póngase alerta, en estado de guerra
económica, pues a continuación vamos a darle cinco sencillas estrategias para que
usted salga vencedor en esta permanente guerra comercial. Si practica estas es-
trategias la planificación financiera que usted diseñó para realizar sus proyectos
contarán con un respaldo sólido para ejecutarse de manera exitosa.
Veamos pues esas cinco estrategias:
1. Sígale la pista a su dinero. ¿Cómo? Durante un mes debe anotar en una
pequeña libreta todo lo que gaste dentro de ese período de tiempo. Esto
incluye alimentos, ropa, servicios públicos, comidas afuera, combustible, li-
bros, lavados de carro, propinas, transporte, periódicos, revistas, pasatiem-
pos, etcétera. Este es el primer paso.
2. Balance mensual. Con el registro anterior, haga un balance comparando lo
que gastó en el mes con sus ingresos durante el mismo período. Si gastó
veinte mil y su ingreso son diez mil, significa que perdió la guerra, pues gas-
tó diez mil pesos de demás que en la realidad usted no posee. De alguna
manera tuvo que conseguirlos: adelantos de salario, préstamos o tarjetas de
crédito. Ahora note, cada mes que termine con pérdidas después de hacer
este balance, usted se convierte en un prisionero de guerra, y como tal debe
pagar las consecuencias. Vayamos al siguiente paso.
3. Evalúe cada gasto. La idea es hacer un análisis de cada gasto registrado en
el mes. Marque con una “I” los gastos que son Inevitables, y con una “E”
los que son Evitables. Una vez que haya marcado todos los gastos, todos
aquellos que aparezcan con la marca “E” no deben repetirse el siguiente
mes, ni tampoco serán sustituidos por otros gastos parecidos.
Después de hacer esto, analice todos los gastos que tienen la marca «I»,
los que son Inevitables. Luego trate de determinar en cuánto puede reducir
esos gastos. Por ejemplo, el gasto en comida es inevitable, pero puede evitar
alimentos suntuosos o comidas fuera de casa. Tampoco compre en tempo-
radas altas o en días de celebraciones especiales, pues en estas circunstan-
cias los comerciantes suben los precios de sus productos. Vamos al siguiente
paso.
4. Establezca una meta. Esto es vital. Está directamente relacionado con la pl-
 anificación financiera de sus proyectos. Pregúntese: ¿Por qué quiero gastar
menos de lo que gano? Debe haber una buena razón, una meta, un objetivo
financiero. Puede ser ahorrar para la compra futura de un terreno; o para
comprarse un vehículo u otro propósito que requiera dinero para poder eje-
cutarlo de manera exitosa. ¡Debe haber una meta! Vamos al último paso:
5. Resista las tentaciones. En la guerra comercial hay cosas que nos “disparan”
el deseo de comprar. ¡Identifíquelas y aléjese de ellas! ¿Se encuentra con
esas cosas en el mejor Mall de la ciudad? ¡Pues entonces huya de ese mal!
Simplemente no lo visite. No se exponga a las tentaciones. Mire, si usted se
descuida, unos cuantos disparos en esta guerra comercial pueden acabar
con sus finanzas.
IV. CONCLUSIÓN
Casi todos los días, usted va a la guerra en el mercado de precios y productos, pero
si practica estas sencillas estrategias, después de trabado el combate, saldrá de allí
sin ningún rasguño, victorioso. Eso es gozar de libertad financiera en lugar de ser
un esclavo del dinero.
Es lo que Dios quiere para usted.
Por lo tanto, sea sabio y déjese guiar por el consejo bíblico. A través de las dos
parábolas estudiadas el Señor le ha enseñado el principio de la planificación finan-
ciera. Si un hombre proyecta la construcción de una torre, antes de comenzar debe
planificar cuidadosamente las finanzas del proyecto, a fin de asegurarse de que
cuenta con el suficiente dinero para concluirlo.
Si usted proyecta la construcción de una casa, la compra de un terreno, la universi-
dad de sus hijos, la adquisición de un automóvil, etcétera; antes de comenzar debe
sentarse a planificar con cuidado el financiamientos de esas buenas intenciones. Si
no cuenta con el dinero necesario, entonces debe echar mano de las cinco estrate-
gias que le hemos expuesto para que pueda ahorrar el dinero que necesita para
echar a andar su sueño.
Vamos a dar un par de minutos para que usted piense ese proyecto y luego lo
anote en su Guía de Inducción… Ahora vamos a inclinar nuestra cabeza allí donde
estamos, y cada uno orará al Señor pidiéndole sabiduría para ordenar sus finanzas.
Llamado: Dios está dispuesto a dar sabiduría a quien desee ser un buen admin-
istrador de los recursos, finanzas, economía, para dar un buen destino al dinero.
¿Quién desea pedir a Dios esta sabiduría?
Oración.
8 9
Culto de Adoración
para el 20 de febrero
ADMINISTRANDO EL TEMPLO DE DIOS
I. INTRODUCCIÓN
a. Saludo. Es un privilegio saludar a cada uno de ustedes en esta mañana de
Adoración a nuestro Dios.
b. Motivación. Aunque han pasado más de 6,000 años de la creación de la prim-
era pareja en el Edén, Dios sigue considerando nuestros cuerpos como tem-
plos del espíritu Santo y desea morar plenamente en nuestro corazón.
c. Propósito. Mostrar a la iglesia que Dios desea que consideremos a nuestro
cuerpo como el Templo del Espíritu Santo, cuidándole de todo peligro y dedi-
cándole solo a Dios.
II. DIOS CONSIDERA A CADA UNO: TEMPLO DEL ESPÍRITU SANTO.
1. “¿Acaso no saben ustedes que son templo de Dios, y que el Espíritu de Dios
vive con ustedes?” 1Corintios 3:16
2. A Dios le gusta habitar en los templos (Cuerpos) que Él creó, y bajo este prin-
cipio habitó en el Templo construido por Salomón.
- Su construcción duró 7 años. Fue hecho con madera fina; y cubierto de oro
puro. (1Reyes 6:38)
- El objetivo de tener un templo dedicado para Dios es uno solo: Para que habite
Jesucristo habite con ellos (1Reyes 8:13)
- En su dedicación: Salomón ofreció 22,000 bueyes y 120,000 ovejas.
- El cuerpo humano es el Templo de Dios. Por lo tanto es considerado por Dios
como templo del Espíritu Santo, y desea vivir en él.
3. “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en
vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido
comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro
espíritu, los cuales son de Dios.” 1 Corintios 6:19,20
4. ¿Cómo creó Dios al ser humano, para considerarlo templo del Espíritu Santo?
“Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su
nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.” Génesis 2:7
- Lo hizo de:
- 200 huesos
 - 500 músculos c. EL TERCER REMEDIO NATURAL
- 10 metros de intestino en el aparato digestivo La Abstinencia
- El corazón de 15 centímetros de largo
“La abstinencia de los alimentos y bebidas perjudiciales es el fruto de la ver-
- Los pulmones con 58,000 células de aire por cada cm2 dadera religión. El que esta cabalmente convertido abandonará todo hábito y
- El maravilloso cerebro pesando solo 1.500 gr. apetito perjudicial”. (Consejos sobre la Salud, p. 441)
- La piel con 225,806 poros por cada cm2 d. EL CUARTO REMEDIO NATURAL
5. LA CORONA DE LA CREACIÓN El Descanso
Dios hizo al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza. Génesis 1:27. El ser “Algunos enferman por exceso de trabajo. Para los tales, el descanso, la tran-
humano se construyó en la corona de la creación de Dios, con la capacidad de quilidad y una dieta sobria son esenciales para la restauración de su salud”.
pensar, amar, decidir, sentir, con individualidad y con creatividad. MC. 180
III. DIOS DESEA HACER SU MORADA EN EL TEMPLO DEL CUERPO e. EL QUITO REMEDIO NATURAL
“Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le El Ejercicio
amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.” Juan 14:23
“El ejercicio aviva y regula la circulación de la sangre. Vigoriza los órganos de
¿Cómo debemos administrar el cuerpo que Dios nos ha dado? la digestión.” MC. 182, 183
Debemos de hacer uso de los 8 remedios naturales para sentir salud.
f. EL SEXTO REMEDIO NATURAL
1. LOS OCHO REMEDIOS NATURALES
Un Régimen alimenticio conveniente
“El aire puro, el sol, la abstinencia, el descanso, el ejercicio, un régimen alimenticio
conveniente, el agua y la confianza en el poder divino son los verdaderos remedios” “Los cereales, las frutas carnosas, las oleaginosas, y las legumbres, constituyen el ali-
(Ministerio de Curación pág. 89) mento escogido para nosotros por el Creador.” MC. 228

a. PRIMER REMEDIO NATURAL g. EL SÉPTIMO REMEDIO NATURAL

El sol El Agua
Cambia las condiciones del organismo contribuyendo para mejorar sus fun- “El agua pura es para nosotros una de las más exquisitas bendiciones del cie-
ciones. lo…Ingerir en cantidad suficiente, el agua suple las necesidades del organismo
y ayuda a la naturaleza a resistir la enfermedad.”
Equilibra la circulación.
Destruye gérmenes y bacterias. h. OCTAVO REMEDIO NATURAL
Aumenta la resistencia del organismo. Confianza en el Poder Divino
Calma el sistema nervioso. “La verdadera fe es la que recibe a Cristo como su Salvador personal… Una fe
Mejora el metabolismo del calcio. viva entraña un aumento de vigor y una confianza implícita, que por medio de
la gracia de Cristo, dan al alma un poder vencedor.” MC. 40
Solo hay que tener cuidado sobre las horas de exponerse al sol. Es recomend-
able antes de las 10:00 am y después de las 3:00 pm. IV. QUE CRISTO HABITE EN NUESTRO CORAZÓN
b. SEGUNDO REMEDIO NATURAL • Para ayudarnos a erradicar nuestros apetitos y pasiones.
El Aire • Para desarrollar buenos hábitos en tu vida
“Las inspiraciones hondas y completas de aire puro, que llenan los pulmones • Para sanar nuestras enfermedades.
de oxígeno, purifican la sangre. La buena respiración calma los nervios, hace • Para darnos paz.
más perfecta la digestión y produce sueño sano y reparador”. MC. 206,207
• Para ayudarnos a tomar decisiones sabias.
10 11
 • Para fortalecer cada día nuestras relación con Dios.
a. CAUSA DE MUCHAS ENFERMEDADES
“Muchas enfermedades son el resultado de la depresión mental, las penas, la an-
siedad, el descontento, remordimiento, sentimientos de culpabilidad y desconfi-
anza, menoscaba las fuerzas vitales, y llevan al decaimiento y muerte.” MC. 185
b. EL CORAZÓN ALEGRE ES BUENA MEDICINA
“El valor la esperanza, la fe, la simpatía y el amor fomenta la salud y alargan la
vida. Un espíritu satisfecho y alegre como salud para el cuerpo y fuerza para el
alma.” Prov. 17:22 MC. 185
c. PROMESAS QUE CURAN
“Jehová redime el alma de sus siervos, Y no serán condenados cuantos en él
confían.” Salmos 34:22
- DIOS NO TE ABANDONA
“Pero Sion dijo: Me dejó Jehová, y el Señor se olvidó de mí. ¿Se olvidará
la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su
vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti. He aquí que en
las palmas de las manos te tengo esculpida; delante de mí están siempre
tus muros. “Isaías 49:14-16
- DIOS SIEMPRE NOS AYUDA
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios
que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra
de mi justicia.” Isaías 41:10
V. CONCLUSIÓN:
a. LA APELACIÓN DEL APOSTOL PABLO PARA NOSOTROS
“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presen-
téis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es
vuestro culto racional.” Romanos 12:1
b. Llamado:
- Es el momento oportuno venir a la presencia de Dios para entregar
nuestros corazones como los templos vivos.
- Ahora que Dios nos sigue considerando templos vivos, ¿cuantos de-
sean pedir ayuda Divina para esforzarnos y ser buenos administrado-
res de nuestro propio cuerpo?
“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la reno-
vación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena
voluntad de Dios, agradable y perfecta.” Romanos 12:2
c. Oración.
12
Culto Joven
para el 20 de febrero
TESTAMENTOS Y LEGADOS:
UNA RESPONSABILIDAD OLVIDADA
LECTURA BÍBLICA
Romanos 14: 12. “De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí”.
PROPÓSITO
Mostrar cómo la inspiración nos orienta e instruye sobre qué hacer con aquellos bienes
materiales que aun no hemos tenido oportunidad de de-volver al Señor.
INTRODUCCIÓN
Dios, el amante propietario del ganado esparcido en millares de colinas, nos da conti-
nuamente muchas evidencias de su amor. Él creó todas las cosas y nos da lo creado para
que la disfrutemos. Pero todos estos dones y el dominio que nos ha dado llevan consigo
ciertas condiciones y responsabilidades. Y Dios no omite nada cuando nos dice exacta-
mente cómo debemos cumplir con dichas responsabilidades. Vez tras vez usa las Escritu-
ras para enunciar principios tanto generales como especíἀcos de Mayordomía (Génesis
28:22, Éxodo 22: 25-30, 2 Crónicas 31: 5, Nehemías 13: 10-12, Job 1: 21, Malaquías 3:
7-12, Lucas 12, etc.) Y complementa estas instrucciones con consejos claros y evidentes
a través de la pluma de Elena de White.
I. INSTRUCCIONES DEL ESPÍRITU DE PROFECÍA SOBRE LA MAYORDOMÍA DE LOS BIENES.
Entre las más claras, más preciadas, importantes y sorprendentes instrucciones
que aparecen en los escritos de Elena de White, hay una sección compuesta de
tres breves capítulos, casi al finn del libro Consejos Sobre Mayordomía Cristiana. Se
titula: Testamentos y Legados. Tan solo un total de trece páginas que impresionan
al lector sincero.
1. Contenido de las instrucciones. La instrucción dada aquí es es específicamen-
te de carácter eterno. Además, nos llama a la acción, contrariamente a las
prácticas tradicionales. La primera vez que la leí, temblé ante mi prolongada
negligencia y, en años recientes, he sido testigo, repetidas veces, de senti-
mientos similares en miembros que me han pedido consejo. A continuación
presentamos algunos de estos principios e instrucciones:
a. Dios es dueño de todo y su dominio es eterno.
b. Él nos presta, nosotros somos solamente depositarios de sus riquezas para
distribuirlas en la forma que Él nos instruya, mientras estemos vivos.
13
 c. Se deben tomar medidas a ἀn de que, si morimos, le devolvamos lo que
tuvimos prestado.
d. No debemos esperar que llegue el día de nuestra muerte para arreglar
estas cosas, tales arreglos rara vez son enteramente satisfactorios.
e. Nuestros bienes no deberían ir a parar a nuestros hijos u otros familiares
más allá de lo necesario. Esto quiere decir que, una vez crecidos y educa-
dos, los hijos deben valerse por sí mismos, a menos que estén afligidos o
luchan en la pobreza (CMC, p. 345, 346).
f. Dar dinero a los hijos de esta manera no los acerca a Dios sino que, por
el contrario, tiende a aislarlos de Él (Idem).
g. Los legados o donaciones a los hijos u otros familiares que se han apartado de
la iglesia, no favorecen su retorno a ésta sino que, por el contrario, coloca so-
bre ellos una doble y peligrosa responsabilidad; la de ellos y la nuestra (Idem).
h. Los ministros deben ser más decididos al enseñar a nuestro pueblo acer-
ca de estos temas tan importantes para su relacio-namiento con Dios.
(CMC, p. 337).
2. Aplicando las Instrucciones.
a. De nueve casos entre diez, nuestros miembros al morir no disponen que sus
bienes sean para la gloria de Dios. (Idem). No solo se pierden para la iglesia
grandes propiedades y sumas de dinero todos los años, sino que también se
dejan personas de lado. Con frecuencia, gran parte de la amargura que reina
en las familias se debe a legados que Dios no puede bendecir.
b. El ser rico o pobre no hace ninguna diferencia. Todos los que somos men-
talmente responsables deberíamos preparar nuestro testamento o lega-
do, sólidamente orientado en el aspecto legal, ni bien entremos en años.
Muchos hombres de quienes se pensaba que tenían muy poco o nada, se
encontró al morir que eran herederos o estaban en posesión de bienes de
gran valor. En cualquier caso, nuestro motivo principal debe ser el espíritu
de devolver a Dios lo que Él nos ha conἀado por un poco de tiempo.
c. Consideremos cómo desea Él que se lo devolvamos. La mayoría pensa-
mos en nuestros hijos y otros parientes. Y esto es importante mientras
ellos no pueden cuidar de sí mismos en forma adecuada. Todo hijo me-
rece un sustento normal antes de ser adulto. Generalmente se espera
que los padres lo ayuden en su educación secundaria y superior. Si un
hijo es inválido, está en la miseria o necesitado de alguna manera, y hace
lo mejor que puede con lo que tiene, es diferente. Tenemos una clara
obligación con él como algo que Dios nos ha conἀado.
d. Pero Consejos sobre Mayordomía Cristiana deja bien claro que, una vez
cumplido con esto, debemos devolver nuestros bienes a Dios por medio
de un testamento o legado debidamente preparado, para que sea usado
en su obra. Y esto debe ser hecho AHORA, no en una ocasión futura más
conveniente, pues ésta rara vez se presenta. (CMC, p. 338-343). Todo los
años nuestra iglesia pierde muchísimos recursos debido a estas dilaciones,
a nuestra indecisión en distribuir nuestros bienes en la forma requerida
por Dios, y dando dinero a nuestros familiares simplemente por tradición.
14
e. En la medida de lo posible, deberíamos devolver a Dios nuestras riquezas
día a día a través de una entrega de lo que somos y tenemos. Pero aque-
llos bienes materiales que no hemos tenido oportunidad de entregar son
los que deberíamos dis 38poner en favor de la obra de Dios por medio de
testamentos, legados, donaciones con usufructo, etc.
3. La ayuda de parte de la iglesia para aplicar estas instrucciones.
a. Nuestra asociación/misión tiene personal capacitado para brindar a nues-
tros miembros cualquier información segura, detallada y conἀdencial,
de cómo dar los pasos efectivos y económicos a ἀn de cristalizar aquellas
disposiciones de voluntad que nuestros hermanos desearen realizar a ἀn
de beneἀciar ἀnancieramente a la obra del Señor.
b. Algunos miembros vacilan en poner sus asuntos en manos de la iglesia
y preἀeren ser guiados por especialistas mundanales. Hemos visto que
no siempre esto ha dado los mejores resultados, pues los ideales y afa-
nes de aquellos que no comparten nuestra fe son bien diferentes de los
nuestros. Por eso siempre recomendamos asesorarse por miembros lai-
cos de la iglesia especializados en estos asuntos o por el mismo personal
que la iglesia tiene para estos menesteres.
II. NUESTRA RESPONSABILIDAD
1. Inconveniencia en el traspaso de bienes a familiares.
a. Muchas veces sentimos remordimiento porque nuestros hijos, nietos y
otros familiares no están ἀrmes en la iglesia. Razonamos que no desea-
mos apartarlos más y que si le damos nuestros bienes mientras vivimos o
al morir, de acuerdo a la costumbre general, se sentirán mejor en relación
con nosotros y con Dios. Pero se nos advierte categóricamente que esta
forma de pensar es cometer pecado contra el Maestro (CMC, p. 344).
b. La experiencia lo demuestra claramente. Por lo general, tales legados:
• Llegan a manos de familiares que están satisfechos con los bienes
mundanos y son menos dependientes de Dios, o
• Excitan aún más las pasiones del mundo, o
• Disminuyen la actividad personal y el dominio propio, o 39
• Producen desdichas porque unos herederos reciben tanto o más que
otros.Y aún más serio que esto es que se hace recaer una doble res-
ponsabilidad de mayordomía sobre los herederos. (CMC, p. 345).
c. Ninguno de los cónyuges debe imponer sobre su compañero una do-
ble responsabilidad. Deberían tomarse las medi-das necesarias para la
seguridad del otro. Pero, fuera de esto, nuestros bienes deberían ser
puestos a un lado para el Señor. (CMC, p. 348).
d. El conocimiento del absoluto dominio de Dios está implícito en el credo
de cada verdadero cristiano. Debemos estar seguros de que este credo
recibe tanto el servicio del corazón como el de los labios. Pues si descui-
damos esto, impedimos que corazones se llenen de bendiciones y cose-
chamos ojos llenos de lágrimas.
15
 e. El Salmo 50: 21 nos dice que es tiempo de que pensemos en términos de
la majestad de Dios. No debemos pensar en Él como en un ser humano.
Se nos amonesta con inἀnito amor y sabiduría que no atender el consejo
de nuestra mayordomía sobre testamentos y legados es la peor clase de
robo (CMC, p. 339).
2. Examen de los pasos a seguir.
a. Todo hijo de Dios que espera compartir la eterna herencia de su Hijo
debería examinar cuidadosamente su experiencia pre-paratoria como
mayordomo aquí.
b. Es nuestro privilegio:
• Leer cuidadosamente la Palabra de Dios, a ἀn de aprender más acer-
ca del uso de lo que Él nos ha prestado.
• Observar detenidamente las instrucciones especíἀcas acerca de la
disposición de nuestras riquezas grandes o pequeñas mientras este-
mos vivos y al morir, especialmente... Consejos sobre Mayordomía
Cristiana, p. 337-349.
• Buscar AHORA ayuda legal de nuestra asociación o institución de igle-
sia, o de una persona consagrada cuyo consejo esté en armonía con
la mente de Dios.
• Descansar en la promesa de la segura protección del cielo, la herencia
de Dios. Ésta es la eterna responsabilidad por la cual somos probados.
CONCLUSIÓN
Cómo asegurar vuestra propiedad
¿Queréis asegurar vuestra propiedad? Colocadla en la mano que lleva la marca
de la cruciἀxión. Si la retenéis en vuestra posesión será para vuestra pérdida
eterna. Dadla a Dios y, a partir de ese momento, llevará su inscripción. Queda-
rá sellada con su inmutabilidad. ¿Queréis disfrutar de vuestros bienes? Enton-
ces utilizadlos para bendecir a los que sufren. 9 T p.51
En esta hora deseo que recapacitemos acerca de la responsabilidad que des-
cansa sobre nosotros.
Entre los presentes hay hermanos cuyo tiempo de gracia está llegando a su fin,
y nuestra pregunta es:
¿Estamos siguiendo las instrucciones de la inspiración? ¿Dónde hemos depo-
sitado los bienes prestados?
El año pasado, en el territorio de la UA, los miembros donaron 13 casas y 26
terrenos que serán aplicados a la construcción de templos y capillas en dife-
rentes lugares.
Relato: Los esposos Méndez fallecieron dejando su casa a nombre de una aso-
ciación. El producto de la venta de esa vivienda se aplicó a la construcción del
templo de Río Gallegos. Los miembros de esta iglesia quieren encontrarse con
los Méndez en la tierra nueva y agradecerles por lo que hicieron.
16
Culto de Adoración
para el 12 de marzo
ADORANDO AL CREADOR Y SUSTENTADOR
I. INTRODUCCIÓN
1. Saludo: Es el mejor momento para expresar nuestro afecto cristiano con un abrazo
y juntos seguir adorando a nuestro Creador. Dios nos acompañe y al abrir su pala-
bra sintamos que Dios nos habla.
2. Motivación: El pecado alteró los planes de Dios para nuestro mundo. Si no fuera
por el pecado la Biblia tendría apenas dos capítulos: Génesis 1 y 2; que describen
el acto creador de Dios. Sería todo lo que usted y yo precisaríamos conocer. De Gé-
nesis 3 a Apocalipsis 22 encontramos la descripción pormenorizada de la historia
del pecado – su origen, consecuencias y solución.
Resumiendo la Biblia en una palabra esa sin duda sería – Adoración. Fuimos crea-
dos, como ya vimos, para adorar a Dios. La entrada del pecado, robó de Dios la
adoración que le era debida. Fuimos redimidos para volver a adorarlo. Le adora-
mos con los bienes – Diezmos, reconociéndolo como creador, y ofrendas agrade-
ciéndole por la salvación.
Los escritores del Antiguo Testamento percibieron los derechos de Dios sobre la
vida del hombre a la Luz de la creación – Diezmo. Los profetas del Nuevo Testa-
mento enfocan la luz del Calvario – Ofrendas.
3. Propósito: Mostrar a la iglesia, que el diezmo es sagrado, el cual cumple un propó-
sito específico: el cumplimiento de la misión.
4. Texto: Proverbios 3:9, 10.
II. Dios Creador y propietario.
1. Dios es el Creador de todas las cosas.
Podemos dar gloria a Dios, porque no somos un aborto de la naturaleza, ni tampoco
el resultado de millones de años de evolución. ¡No somos primos del mono! Somos
hijos de Dios. Fuimos creados por Él y para Él. Fuimos creados para adorarlo.
Desde el Edén Dios ha procurado inculcar en la mente del hombre la verdad: que
fuimos creados por Él.
2. El árbol del conocimiento del bien y del mal.
El árbol del conocimiento del bien y del mal, fue la única prueba de Dios para revelar si
nuestros primeros padres, realmente darían a Él el primer lugar en la vida y en el corazón.
17
 El día en que el matrimonio edénico comió de aquel fruto, rechazó la idea de Dios
como el Creador, soberano, a quien debían obediencia. Estaban diciendo – sabe-
mos lo que es mejor para nosotros, sabemos lo que queremos y lo que queremos
es “bueno”.
III. Diezmo en lugar del árbol del conocimiento del bien y del mal.
Hoy, no tenemos más el árbol del conocimiento del bien y del mal entre nosotros,
para recordar que tenemos un creador, en su lugar, Dios estableció el sistema de
diezmos.
1. Primero Dios
“Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos; Y serán llenos
tus graneros con abundancia, tus lagares rebosarán de mosto”. Proverbios 3:9,10.
Este texto enseña que Dios es quien donó todos nuestros bienes:
• Tiene poder sobre todos ellos;
• Su petición debe ser nuestra primera consideración;
• Una bendición especial vendrá para todo aquel que honre esa petición.
El diezmo es hoy, una de las pruebas de Dios que revelan específicamente si real-
mente damos a Él el primer lugar en nuestra vida.
2. Los diezmos son del Señor, santos son al Señor. Lev 27:30
No hace mucho tiempo falleció, en Estados Unidos, un hombre que dejó para su
única hija una pequeña fortuna. El abogado que cuidaba de los intereses del padre
de la joven le entregó una carta que su padre había dejado: “Te dejo un depósito
en el banco y espero que sea suficiente para cubrir sus gastos. QUIERO QUE PIEN-
SES EN ESA CANTIDAD, NO SÓLO COMO DINERO, MAS COMO PARTE DE MI VIDA,
DEDICADA A TU BIENESTAR Y FELICIDAD. Te pido por tanto, que no lo desperdicies,
más que lo uses como usaría mi tiempo, mi esfuerzo y mi amor. Me alegro en
entregarte, ahora que no estaré más a tu lado, esto es parte de mi vida para res-
guardarte de la necesidad y mostrarte mi amor.
3. El diezmo es un acto de adoración y reconocimiento a Dios como Creador, pro-
pietario de todas las cosas.
El verdadero hijo de Dios al adorarlo con los bienes materiales, lo hace con la cons-
ciencia de que cada centavo entregado a Dios, sea como diezmo u ofrenda, ya
pertenecía al Señor.
Algunas personas hoy parecen olvidar esta verdad y el hecho de que según el mo-
delo de adoración, establecido en la biblia – basado en sacrificios – sería imposible
adorar a Dios sin entregarle ofrendas; por eso Dios pedía: “…y ninguno se presentará
delante de mí con las manos vacías”. Ex 34:20; 25:15, Deuteronomio 16:16.
Esas dádivas nosotros las clasificamos en Diezmos y Ofrendas.
Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según
la promesa”. Gálatas 3:29. Jesús entonces concluye que debemos seguir el ejem-
plo de Abraham: “... Si fueseis hijos de Abraham, las obras de Abraham haríais”.
18
Juan. 8:39
IV. El designio de Dios para el uso del diezmo.
El Diezmo pertenece al Señor y Él lo ha dado a los levitas. Números 18:21
No me pertenece, por tanto no tengo el derecho de administrarlo, o usarlo a mi
gusto. Pertenece al Señor y Él lo dio a sus ministros. Su devolución debe ser un acto
de adoración, en la casa del Señor. Mal 3:10.
“La porción que Dios se ha reservado no debe usarse para ningún otro propósito
fuera del que él ha especificado. Que nadie se sienta libre para retener sus diez-
mos con el fin de usarlos según su propio juicio. No debe emplearse en caso de
emergencia, ni como parezca conveniente, aun en cosas que conciernan a la obra
de Dios” (C.S.M. Pág.106)
Cómo algunos han desviado el uso del diezmo:
a. El diezmo no puede ser usado para atender a los pobres.
“El diezmo ha sido puesto aparte con un propósito especial. No debe considerarse
como un fondo para pobres. Debe dedicarse especialmente al sostén de los que
predican el mensaje de Dios al mundo; y no hay que desviarlo de este propósito”
(C.S.M. Pág.108).
b. El diezmo no puede ser usado para atender los gastos de la iglesia.
Pero estáis robando a Dios cada vez que ponéis vuestras manos en la tesorería y
extraéis fondos para satisfacer los gastos corrientes de la iglesia” (C.S.M. Pág.108).
V. CONCLUSIÓN
Guillermo Colgate es el nombre de uno de los hombres ricos del mundo y fabricante
de productos que llevan su nombre. Con 16 años de edad, Colgate salió de casa porque
faltaba el pan para la familia. En la calle, se encontró con un viejo conocido que, de
rodillas, oró con él y dijo: “Alguien será brevemente el principal fabricante de jabón de
Nueva York. Espero que usted sea un hombre prudente. De su corazón a Cristo. Entré-
guele de cada dólar que reciba, la parte que Le pertenece; haga un jabón honesto; que
pese una libra entera, y sé que usted se tornará rico”. Y el joven entró a la gran ciudad
de Nueva York llevando consigo todo lo que poseía envuelto en una toalla... Fue con
gran dificultad que Guillermo Colgate encontró empleo. Con nostalgia de su casa y
recordando siempre las palabras de su madre, como aquellas que oyó del viejo señor,
aconsejándolo a buscar el Reino de Dios, se unió a una iglesia. Del primer dinero que
recibió dio la décima parte, el diezmo, al Señor. Algunos años en ese empleo, llegó a
tornarse socio del patrón. Después, el patrón murió, Colgate quedó como único dueño
de la fábrica de jabón. Inmediatamente procuró evaluar cuanto era el diezmo de la
fábrica que había ganado. Guillermo prosperó en los negocios, se enriqueció como
jamás imaginó... Más nunca dejó de ser fiel al Señor en sus diezmos.
Llamado: Dios te invita hoy a ser un fiel adorador, que dediques tu vida a la adoración
completa; que incluya adoración con tu tiempo, con tus talentos, con tu vestimenta,
con tu tiempo, con tus recursos. Poniendo a Dios en primer lugar, entonces hoy de-
cide ser fiel mayordomo y un buen adorador sin reservarte el diezmo que es de Dios.
Oración.
19

Culto joven
para el 12 de marzo
UN LLAMADO A LA ADORACIÓN
I. INTRODUCCIÓN
1. Saludo: Es un privilegio saludar a esta iglesia que se reunió para adorar a Dios.
Y al dirigirme a ustedes espero que la gracia de Dios llene cada corazón, porque
estamos en la presencia de Dios.
2. Motivación: “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores
adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adora-
dores busca que le adoren”. San Juan 4:23
3. Propósito: Mostrar a la iglesia que Dios tiene un pueblo en esta tierra y espera
que este pueblo le adore correctamente sin reservas.
4. Texto: Apocalipsis 14:6,7
II. URGENTE: TEMED, EXALTAD Y ADORAR.
Los pasajes de la Palabra de Dios que acabamos de leer, contienen el Primero
de los tres mensajes conocidos como el Triple Mensaje Angélico, registrados en
Apocalipsis 14:6-12.
1. Hoy, con el auxilio de las Sagradas Escrituras y del Espíritu de Profecía, meditar-
emos sobre el Mensaje del Primer Ángel.
2. En este mensaje destacan tres imperativos vinculados directamente con la
adoración al verdadero Dios.
a. “Temed a Dios”, El temor es una actitud de respetuosa lealtad a la voluntad
de DIOS.
b. “Dadle gloria” La gloria se refiere a exaltar al Creador que merece de parte
de cada criatura.
c. “Adoradlo” La adoración es la sumisión al único SER que es digno de recono-
cimiento, digno de temor REVERENTE y digno de ADORACIÓN suprema.
3. Para esto, es necesario que entendamos la simbología utilizada por la inspiración
en este triple mensaje angélico; así tenemos que:
a. El Mensaje de los Tres Ángeles, representa la predicación del Evangelio de
salvación a todo el mundo para el tiempo del fin.
b. Los Ángeles volando: Simbolizan a los Mensajeros que DIOS utiliza en la
predicación del Evangelio eterno; en este caso el pueblo Remanente de
20
DIOS. El hecho que estos Ángeles predican “volando”, significa la rapidez y
urgencia del mensaje. Romanos 13:11.
c. La frase “Por en medio del cielo”: Se refiere al ámbito, a la naturaleza mun-
dial del mensaje. Es decir que estos mensajes tienen un alcance mundial,
porque están dirigidos “a todos los moradores de la tierra, a toda nación,
tribu, lengua y pueblo”. Lo que implica que los mensajes no son de carácter
local, no son para una región de la tierra, sino para todo el mundo.
d. “El Evangelio eterno”: Es el Mensaje total, íntegro e inmutable de la Biblia;
básicamente la VERDAD PRESENTE que como Iglesia tenemos la sagrada
responsabilidad de predicar al mundo entero en el tiempo del fin.
III. ¿QUÉ SIGNIFICA TEMER A DIOS?
1. La frase “temer a DIOS” no implica miedo, terror, pánico o espanto.
a. El mensaje, está orientado a la obediencia, el respeto, la honra, alabanza y
reverencia, al DIOS que nos creó a ti y a mí.
b. Es decir “temer a Dios”, implica básicamente acercarse al CREADOR con ab-
soluta REVERENCIA, lealtad, sumisión a su voluntad y respeto a sus sagrados
mandamientos.
c. Es el sentimiento de respeto REVERENTE que el hombre, hecho a la imagen
de DIOS, debería sentir por la majestad, el poder y la posición exaltada de
su divino CREADOR.
d. La expresión “temor a DIOS” debe entenderse como fidelidad y obediencia
a las ordenanzas divinas. No se refiere solamente a un sentimiento o con-
ducta reverente en el culto público, sino que es, un estilo de vida que honra
a DIOS en todo momento.
2. En la Biblia este tipo de temor tiene la siguiente connotación:
a. El reconocimiento de la misericordia abundante de DIOS. Sal. 5:7 “Mas yo
por la abundancia de tu misericordia entraré en tu casa; adoraré hacia tu
santo templo en tu temor”.
b. La obediencia a los mandamientos de DIOS. Deut. 5:29; 10:12; Ecl. 12:13.
c. Tiene que ver con la sabiduría divina. Sal. 111:10.
d. El temor de Jehová nos aparta del mal. Prov. 16:6.
3. Existen en la Biblia muchas hermosas promesas y bendiciones para los que te-
men a DIOS.
a. En Deuteronomio 6:24 está escrito que al que teme a JEHOVÁ, es decir
al que es REVERENTE, se le promete que le irá bien todos los días y se le
preservará la vida.
b. En el Salmo 25:12-14 encontramos que la comunión íntima con DIOS pro-
duce en el corazón un temor REVERENTE. Lo que significa que la IRREVER-
ENCIA es consecuencia de la falta de comunión íntima con DIOS.
21
 c. Según el Sal. 34:7-9, el ángel de JEHOVÁ está siempre cerca a los que le te-
men, los defiende y nada les falta.
d. En el Sal 112:1 y 128:1 se nos dice que quien teme a DIOS es bienaventurado.
e. Cuando DIOS es el objeto de la adoración, el temor se expresa siendo
REVERENTES; es por esto que debemos entender con absoluta claridad que
el verdadero culto al REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES, no puede dejar
de lado a la REVERENCIA.
IV. ¿QUÉ SIGNIFICA DAR GLORIA A DIOS?
1. “Dar gloria a DIOS” significa exaltarlo, honrarlo, alabarlo, homenajearlo, esti-
marlo, amarlo, respetarlo, reverenciarlo y sobre todo ¡ADORARLO! en un culto
estrictamente REVERENTE.
a. El término “gloria” generalmente se utiliza en relación con la adoración; en tal
sentido, dar gloria a DIOS significa reconocer su honor, su valor y su dignidad.
b. También significa revelar su carácter en el nuestro: “Dar gloria a DIOS es
revelar su carácter en el nuestro, y de esta manera hacerlo conocer. Y glo-
rificamos a DIOS en cualquier forma en que hagamos conocer al Padre y al
Hijo”. (MS 16, 1890).
c. Dar gloria a DIOS, significa reconocer su honor, su majestad, y que es digno
de suprema alabanza en un CULTO TOTALMENTE REVERENTE. DIOS es glori-
ficado más con la vida que con las palabras.
2. ¿Cómo se da gloria a DIOS?
a. Darle gloria a DIOS, va más allá de la alabanza y de la adoración. DIOS es
glorificado más con la vida que con las palabras.
b. Se da gloria a DIOS diciendo la verdad: “Entonces Josué dijo a Acán: Hijo
mío, da gloria a Jehová el Dios de Israel, diciendo la verdad, y declárame
ahora lo que has hecho. No me lo encubras”. Josué 7:19.
c. Se glorifica a DIOS mediante un estilo de vida que refleje su carácter en
alguna medida. DIOS es glorificado con nuestros pensamientos, nuestras
palabras, nuestros sentimientos y actos que lo honran.
3. Glorifica en cuerpo y espíritu a Dios. Pablo en 1 Corintios 6:20 enseña y asi-
mismo en 1 Corintios 10:31, que DIOS debe ser glorificado en el comer, el beber
o en hacer cualquier otra cosa.
a. Igualmente, todo lo que DIOS creó glorifica a Dios, refleja de una u otra
manera su gloria. La vemos en todas partes: desde las formas de vida mi-
croscópicas más diminutas hasta la extensión de la Vía láctea, desde los at-
ardeceres y las estrellas hasta las tormentas y las cuatro estaciones. La cre-
ación revela la gloria de nuestro Creador.. La Biblia dice: “Los cielos cuentan
la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos”. Sal. 19:1.
b. La gloria de DIOS sugiere su grandeza, su poder, su majestad, su esplendor,
su santidad su poder CREADOR. 1 Crónicas 29:11-13.
22
c. La gloria de DIOS es la esencia de su naturaleza, el peso de su poder y la
atmosfera de su presencia.
d. La gloria de DIOS es la expresión de su bondad y todas las demás cualidades
intrínsecas y eternas de su persona.
V. “ADORAD A AQUEL QUE HÍZO EL CIELO Y LA TIERRA”.
1. “Adorad a Aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas”.
Apocalipsis 14:7.
a. El deber de adorar al DIOS TRIUNO se fundamental en el hecho que, Él y
solamente Él, es el Creador de todo lo existente.
b. Cada vez que la Biblia presenta el derecho de DIOS a nuestra adoración y
REVERENCIA, frente a los otros dioses, menciona las pruebas de su poder
creador. Salmo 95:6; Isaías 40:25,26, 45:18.
c. Los santos que adoran a DIOS en el cielo dan como razón del homenaje que
le deben diciendo en Apocalipsis 4:11: “Señor, digno eres de recibir la gloria
y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad
existen y fueron creadas”.
2. Adorar es tan vital en la religión como lo es la creencia en DIOS. Es la parte cen-
tral, primordial e indispensable en la vida del cristiano.
a. Sin adoración al verdadero DIOS no hay vida espiritual sólida, consistente; porque
adorar es algo muy significativo, ya que expresa e ilustra la fe de los adoradores.
b. La adoración a DIOS es tan vital en la vida de la iglesia que debe ser considera-
da una DOCTRINA. ¿Saben por qué? Porque está. Contenida en toda la Biblia.
c. Norval Pease, profesor de Andrews University refiere que:
“Desde el Génesis hasta el Apocalipsis, “la adoración es uno de los grandes
temas de la Biblia. Fue uno de los puntos controvertidos en el gran conflicto
entre el bien y el mal. Fue la base de la primera tabla de la Ley. Ocupó el
centro de la vida del creyente, tanto en el Antiguo Testamento como en el
nuevo. Es el tema de gran parte de la poesía bíblica. Es un tema destacado
por los profetas. Fue una de las preocupaciones de Cristo. Fue parte de la
experiencia de la iglesia primitiva… Para un adventista, la adoración está
incluida en su carta fundamental, los mensajes de los tres ángeles”.
(Citado por Daniel Oscar Plenc en su libro El Culto que agrada a Dios, págs.
13 y 14).
3. La razón para adorar al DIOS TRIUNO y no a los otros dioses. Es que ÉL es el Cre-
ador de todo lo que existe en este vasto universo.
a. “El deber de adorar a Dios estriba en la circunstancia de que él es el Creador,
y que a él es a quien todos los demás seres deben su existencia. Y cada vez
que la Biblia presenta el derecho de Jehová a nuestra reverencia y adoración
con preferencia a los dioses de los paganos, menciona las pruebas de su
poder creador”. Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, pág. 489.
23
 b. En el corazón de la eterna, santa, justa, buena y perfecta Ley de DIOS, se
menciona como argumento para la adoración al verdadero DIOS en el Sép-
timo Día de la semana o santo Sábado, precisamente el hecho que ÉL es el
Creador de todo lo existente (Éxodo 20:8-11). “La importancia del sábado,
como institución conmemorativa de la creación, consiste en que recuerda
siempre la verdadera razón por la cual se debe adorar a Dios, porque él es
el Creador y nosotros somos sus criaturas”. Ibíd. 490.
c. “Si el sábado se hubiese observado universalmente, los pensamientos y las
inclinaciones de los hombres se habrían dirigido hacia el Creador como objeto
de reverencia y adoración, y nunca habría habido un idólatra, un ateo o un in-
crédulo. La observancia del sábado es señal de lealtad al verdadero Dios, que
hizo el cielo y la tierra, y el mar y las fuentes de las aguas”. Ibíd. 491.
d. “El que cree adora”. El creyente simplemente adora. Nunca se ha visto que
el incrédulo, el no creyente, el que se dice ateo adore a Dios. Solo el que
cree, el que mantiene una fe viva Adore a Dios.
A Dios se le adora con la vestimenta, con los pensamientos, con la forma de
vivir y el estilo de alimentarse, a Dios se le adora con los recursos (diezmos
y ofendas) con los talentos, a Dios se le adora en la primera hora de cada
mañana y en el día de adoración que es el sábado.
Una vida de viva adoración, es una vida que vive en la presencia de Dios.
VI. CONCLUSIÓN
1. En el mensaje del primer Ángel se destacan tres imperativos vinculados directa-
mente con la adoración al único DIOS verdadero: “Temed a DIOS”, “dadle gloria”
y “adoradlo”.
2. El mensaje del primer Ángel vincula la adoración con la Creación y el sábado.
3. El paralelismo existente entre el primer mensaje angélico y el 4to. Mandamien-
to, es una prueba bíblica categórica e irrefutable que la adoración al Creador
requiere inevitablemente la observancia del ÚNICO día que conmemora la cre-
ación; esto es el santo sábado o 7mo. Día de la semana; ¡NO OTRO!
4. Dios nos invita adorarle en espíritu, en carácter, en esencia, es decir que el
carácter de Cristo sea reflejado en el carácter del adorador, a “tales adoradores
quiere” (Juan 4:23)
Cuando nos despojemos del carácter egoísta, y adquiramos el carácter bonda-
doso, benevolente, generoso, y dediquemos a Dios lo que le pertenece, nuestra
vida, talentos, tesoros.
Llamado:
Dios te invita hoy, cuando el tiempo de gracia aún no ha terminado, a Temerle, a
Exaltarle dándole gloria y Adorarlo con toda mente y corazón. Dios se goza en sus
adoradores, ¿Quieres ser un adorador íntegro sin reservarte nada?
Oración.
24
Culto de adoración
para el 23 de abril
EL REMEDIO PARA LA LEPRA DEL EGOÍSMO
I. INTRODUCCIÓN
a. Saludo. Les deseo un feliz sábado y que alegría saludar a quienes hoy vinieron a
adorar a Dios, en estas horas sagradas de entrega y reflexión.
b. Motivación.
a. Alguien dijo: Si el egoísta se diera cuenta de la sombra terrible que
proyecta por su “orgullo”, hasta por orgullo quisiera cambiar”.
b. En una conversación Rosita dijo: “María (Su “amiga”) disculpa que sea
directa, pero el peinado y el vestido que llevas es completamente feo y no
queda contigo. Y le replico: disculpa pero yo soy directa y no tengo rodeos
para expresar mis sentimientos”.
Frente a esta situación María respondió a Rosita: “María, acepto tu ob-
servación y acepto que tú seas directa al expresar tus sentimientos. Sin
embargo a ti, te cae muy bien el vestido que llevas y el peinado te hace
muy bonita. Déjame expresar mis sentimientos, pero cuando yo digo lo
que siento, soy bien hipócrita”. ¿Quién de las dos “amigas”, es la más o
menos egoísta?
c. Propósito. Mostrar que la lepra del egoísmo es el pecado más grande que
separa a la iglesia de Dios y sólo Cristo y el Espíritu Santo pueden sanar a su
iglesia de esta lepra.
d. Texto: Mateo 16:24 “…si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mis-
mo y tome su cruz y sígame”.
II. DEFINICION DEL EGOÍSMO
a. El egoísmo es el primer ingrediente del pecado, y todos los seres humanos
somos afectados por ese terrible cáncer.
b. ¿Qué es el egoísmo”
1. Es el uso insensato y necio de la vida, y consiste en seguir nuestros pro-
pios planes para vivir y dar; en vez de seguir los planes de Dios.
2. Es la lucha que el “yo” tiene a prevalecer.
3. Es la devoción así mismo.
4. Es retirar al “yo” de Dios.
25
 5. Es transferir el centro de la vida, de Dios así mismo.
6. Es el servicio propio. Buscar las cosas en beneficio propio.
7. El amor así mismo.
8. Es la adoración propia.
9. Es la esencia de la depravación. (Consejos sobre Mayordomía Cristiana
[CMC], p. 27)
10. Es la pasión humana más poderosa. (CMC, p. 28)
11. Es el espíritu de Satanás. (CMC, p. 21)
12. Es el cáncer del alma. (Testimonios, tomo 3, p. 519)
13. Es la raíz de todos los pecados. (Patriarcas y Profetas, p. 318)
14. Es el más grande pecado de la Iglesia. (Testimonio, t1, p. 194)
15. Es el tropiezo más efectivo en el camino al cielo. (CMC. p. 24)
c. “Negar al yo”, no es un asunto del carácter humano solamente. Este se realiza
como producto de la intervención de Cristo y el Espíritu Santo en el Corazón
humano.
d. El egoísmo se inició en el cielo cuando Lucifer dijo: “Subiré al cielo” “Levantaré
mi trono” “Seré semejante al Altísimo” (Isaías 14:13,14)
e. El egoísmo pasó a esta tierra con el mismo Lucifer convertido en Satanás cu-
ando dijo a Eva: “Seréis como Dios”. Génesis 3:5
Hoy el egoísmo es el dios de este siglo. No hay normas morales de conducta
que el ser humano acepta, sino solo lo que a él le parece bueno “él es el dios
de sí mismo”.
Por esa razón hay luchas, guerras, muertes. El egoísmo está en el mismo cen-
tro de la existencia humana. Solo Cristo y el Espíritu Santo podrán sanar al ser
humano lleno de egoísmo.
III. EL EGOÍSMO VISTO EN EL JUICIO
“En la mañana del 23 de octubre de 1879 a eso de las dos, el Espíritu del Señor
descansó sobre mí y contemple escenas del juicio venidero. Las palabras me
faltan para describir adecuadamente las cosas que pasaron delante de mí y el
efecto que tuvieron sobe mí espíritu.
Parecía haber llegado el gran día de la ejecución del juicio de Dios. Diez mil vec-
es diez millares estaban congregados delante de un trono, sobre el cual estaba
sentado un personaje de majestuosa apariencia. Delante de él había varios
libros y sobre las tapas de cada uno estaba escrito en letras de oro semejantes
a llamas de fuego “El Libro mayor del Cielo”. Uno de esos libros, que contenía
los nombres de los que aseveran creer en la verdad, fue abierto entonces. In-
mediatamente perdí vista los incontables millones que profesaban ser hijos de
la luz y la verdad. A medida que se nombraban una tras otra a estas personas,
y se mencionaban sus buenas acciones, sus rostros se iluminaban con un gozo
santo que impresionó con más fuerza mi espíritu.
26
Se abrió otro libro en el cual estaban anotados los pecados de los que profe-
saban la verdad. Bajo el encabezamiento del egoísmo venían todos los demás
pecados. Había también encabezamientos en cada columna, y debajo de ellos,
frente a cada nombre, estaban registrados en sus respectivas columnas los pe-
cados menores. Bajo la codicia nenia la mentira, el robo, los hurtos, el fraude y
la malicia, la envidia y el odio; y la intemperancia, otra larga lista de crímenes
terribles, como la lascivia, el adulterio, la complacencia de las pasiones ani-
males, etc. Mientras contemplaba esto me sentía abrumada de angustia inde-
cible y exclamé: ¿Quién puede salvarme? ¿Quién puede ser justificado delante
de Dios? ¿Cuyas vestiduras están sin mancha? ¿Quién está sin defecto a la vista
de Dios puro y santo? (JT, tomo 1, pág. 520,524)
IV. DIFICULTADES Y RESULTADOS DEL EGOÍSMO.
a. Negligencia:
“Una clase de personas estaban anotadas por haber estorbado la siem-
bra. A medida que el ojo escrutador del Juez descansaba sobe ellos, se
le revelaban distintamente sus pecados y negligencia. Con labios pálidos
y temblorosos reconocían que habían traicionado su santo cometido.
Habían recibido advertencias, privilegios, pero no los habían escuchado
ni aprovechado. Podía ver ahora que habían presumido demasiado de la
misericordia de Dios.
En verdad, no tenían que hacer confesiones como las de los viles, bajos
y corrompidos; pero, como la higuera, eran malditos, porque no llevaron
frutos, porque no aprovecharon los talentos que se les había confiado”.
(JT, t1, pág. 521,522)
b. Egoísmo, Incredulidad:
“Se mencionaron los nombres de todos los que profesan la verdad. Se
reprendió algunos por su incredulidad y a otros por haber sido perezosos.
Habían dejado que otros hicieran la obra de la viña del Señor y llevasen
las más pesadas responsabilidades, mientras que ellos servían egoísta-
mente sus propios intereses temporal”. (JT, t. 1 pág. 522)
c. RESULTADOS DEL EGOÍSMO
1. Distorsiona el concepto de Dios. (Consejos sobre Mayordomía Cris-
tiana [CMC], p. 23)
2. Entorpece el derramamiento del espíritu Santo. (CMC, p. 56)
3. Impide la recepción de las bendiciones de Dios (CMC, p. 26)
4. Socava la espiritualidad. (CMC, p. 31)
5. Causa miseria, lucha, discordia, produce descuido del deber al re-
tener los recursos. (diezmos y ofrendas ) (CMC, p. 27,29)
6. Es una mancha en el carácter. (CMC, p. 20)
7. Produce el desagrado divino. (CMC, p. 151)
8. Seca la simpatía, la ternura, el amor, considerado y el interés por el
27
 prójimo. (Testimonios, tomo 3, pág. 519)
9. Corrompe la fe de los que desean seguir a Cristo y lo hacen defici-
ente en la fuerza moral. (Testimonios, t1, p. 406)
10. Causa sentimientos de culpa. (Mente, Carácter y Personalidad
[MCP], tomo 1, p. 277)
11.
12.
Confunde los sentimientos. (MCP, t1, p. 278)
Pervierte los principios. (MCP, t1, p. 278)
13. Daña la utilidad. (MCP, t1, p. 271)
14. Separa al hombre de Dios. (MCP, t1, p. 31)
15. Enceguece a la iglesia. (Administración de los bienes de Dios, pág. 65)
“Cada hora de trabajo pasa por el escrutinio de Dios, y queda anotada la fideli-
dad o infidelidad con que este se realizó. Cuando el Juez se siente y los libros
se abran y cada uno sea juzgado de acuerdo con las cosas escritas en los libros,
tendremos que hacer frente al registro de los momentos despilfarrados y las
oportunidades no aprovechadas. El egoísmo, la envidia, el orgullo, los celos,
la ociosidad, o cualquier otro pecado que se acaricie en el corazón lo excluirá
a uno de la bienaventuranza del cielo”. (Joyas de los Testimonios, t1 p. 524)
V. CONCLUSION
a. Apelación: ¿Cómo se cura el egoísmo?
“El Espíritu Santo, obrando sobre los corazones y los caracteres humanos
expulsaran toda tendencia hacia la codicia, todo egoísmo…” (CMC, pág.
327)
“Cuando la luz divina (de Cristo y su Palabra) resplandece en el corazón
con claridad y poder inusitados, el egoísmo habitual pierde su asidero”.
(Joyas de los Testimonios, t1, p. 41)
b. Llamado:
Cada uno de nosotros tenemos un corazón que naturalmente es egoísta,
y de esta manera no intentemos llegar al cielo, donde Dios reinará por la
eternidad con su bondad y generosidad. Sin embargo Dios ofrece interve-
nir y cambiar nuestra naturaleza, Él dice:
“Yo les daré un solo corazón y pondré un espíritu nuevo dentro de ellos. Y
quitaré de su carne el corazón de piedra y les daré un corazón de carne”
Ezequiel 11:19.
¿Estás dispuesto en permitir que Dios opere ese cambio en tu corazón?
¿Puedes, levantar la mano, venir al frente y rendir tu egoísmo para recibir
de Dios su Espíritu Santo y cambiar por ese poder transformador?
c. Oración.
28
Culto joven
para el 23 de abril
QUITA EL CALZADO DE TUS PIES
I. INTRODUCCIÓN
1. Saludo: Cuando los adoradores se reúnen para alabar la presencia de Dios, el
lugar es considerado santo y los que entran en esa actitud son considerados
santos. Por eso, en esta ocasión tengo la gran alegría de saludar a esta iglesia que
se ha reunido para, cantar, adorar, testificar y en estos momentos para escuchar
la voz de Dios.
2. Propósito: Mostrar a la iglesia que el lugar donde es invocado el nombre de
Dios, se convierte en lugar santo, por lo tanto debemos ser reverentes en su
presencia.
3. TEXTO CLAVE: Éxodo 3:1-6
II. DIOS CONVIERTE EN LUGAR SANTO DONDE ES ADORADO. (Éxodo 3:1-6)
Hoy deseo con la ayuda de Dios meditar en dos frases que se encuentran en los
versículos 5 y 6.
a. “Quita el calzado de tus pies, porque el lugar en que tú estás, tierra santa
es.” (Vers. 5).
Ese lugar desértico, árido por el cual, posiblemente muchos pastores con
sus rebaños transitaron y pisaron, llegó a ser santo con la santa presencia
de Dios.
La experiencia de Moisés con la zarza ardiendo nos enseña que, cualquier
lugar por más humilde que sea, llega a ser un lugar santo, cuando la santa
presencia de Dios es una realidad.
Por el contrario, cualquier lugar por más suntuoso o lujoso que fuere, jamás
será un lugar santo, si la santa presencia de Dios no es una realidad en dicho
lugar.
b. “Entonces Moisés cubrió su rostro, porque tuvo miedo de mirar a Dios”.
(Vers. 6).
La actitud de Moisés hacia un lugar santo por la santa presencia de Dios, fue
una actitud de total y absoluta reverencia.
Jamás olvides que el lugar que hoy estás pisando es santo porque realmente
Dios aquí.
Entonces debes quitar tu calzado, es decir debes dejar todo aquello que
29
 es ajeno a la adoración a Dios, tales como conversaciones seculares, sen-
timientos y actitudes ajenos al sentimiento de alabanza y adoración al Se-
ñor de los Señores.
c. “Quitarse el calzado y cubrirse el rostro”, era un acto de reverencia que ex-
presaba la propia indignidad de la persona ante Dios. Dios es nuestro ami-
go, qué duda cabe, pero también y por sobre todo, es nuestro SEÑOR SO-
BERANO. De modo que, acercarse a Él de una manera frívola e irreverente,
muestra una total falta de respeto a las diversas etapas de la historia de la
humanidad; así por ejemplo: La Edad de Piedra, la Edad de la Razón, la Edad
de Acuario, la Era de las luces, la Era de los Viajes Espaciales, la Generación
Perdida, la Era del Engaño, La Edad Moderna, La Edad Contemporánea, la
era de las comunicaciones etc., etc.
1. Creo que, si como Iglesia, tuviéramos que poner un nombre a nuestro
tiempo, considerando nuestro comportamiento espiritual en los cultos
de adoración a Dios, tal vez el nombre más apropiado sería: La Edad o la
Era de la Irreverencia. Porque en nuestro tiempo la REVERENCIA es una
virtud cada vez en serio peligro de extinción.
III. ¿QUÉ ES LA REVERENCIA?
1. Según el diccionario de la lengua española:
a. Respeto o veneración que tiene una persona a otra. Inclinación del cuerpo
en señal de respeto.
b. Sinónimos: Veneración, respeto, devoción, obediencia, venia, deferencia,
homenaje, honor, mesura, sumisión. Antónimos: Grosería, desprecio, ir-
reverencia, desacato, desatención, desconsideración, desestima, vilipendio,
indiferencia.
c. Reverenciar: Respetar, venerar, acatar, adorar, considerar, obedecer, ser-
vir, enaltecer. Antónimos: Ofender, insultar, rebelarse, desairar, desdeñar,
menospreciar, rehusar, ultrajar.
IV. ¿QUÉ Ó QUIENES MERECEN NUESTRA REVERENCIA?
2. ¿Qué enseña Elena G. De White acerca de la Reverencia?
a. En los escritos de Elena G. De White encontramos conceptos y consejos
muy claros sobre la reverencia y reprensiones muy enérgicas contra la Ir-
reverencia.
b. Igualmente habla de la trascendencia y soberanía de Dios, invitando a los
adoradores a un culto solemne, digno, ordenado y reverente.
c. Destaca, asimismo, la presencia amorosa de Dios entre nosotros en los cul-
tos de adoración, animándonos al compañerismo con el Rey del Universo y
con otros creyentes en un culto caracterizado por la naturalidad, la espon-
taneidad, la alegría y el respeto reverente a Dios.
3. ¿Qué dice la Biblia, el diccionario de la vida, sobre la reverencia?
a. Si bien es cierto que no existe un texto que defina literalmente a la REVER-
ENCIA, existen muchos pasajes bíblicos que nos amonestan para que adore-
mos a Dios con un espíritu de respeto, gratitud, recogimiento y un temor
30
reverencial; adorándolo en su santo templo. Salmo 5:7
“Más yo por la abundancia de tu misericordia entraré en tu casa; adoraré
hacia tu santo templo en tu temor”. Eclesiastés 5:1 – “Cuando fueres a la
casa de Dios, guarda tu pie, y acércate más para oír que para ofrecer el
sacrificio de los necios; porque no saben que hacen mal”.
b. La reverencia, según la Biblia, comprende acciones concretas de respeto,
sumisión y obediencia a Dios en los cultos de adoración en su santuario,
como consecuencia de la profunda convicción de su presencia. Dice: Lev.
19:30 “Mis sábados guardaréis, y mi santuario tendréis en reverencia. Yo
Jehová”.
c. La presencia de Dios santifica el lugar por más humilde que sea. En Génesis
28:16,17 Jacob: “Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía”.
“... ¡Cuán terrible es este lugar! No es otra cosa que casa de Dios, y puerta
del cielo”.
4. En síntesis, Reverencia es. Básicamente el respeto y la veneración del hombre
hacia lo divino. En el libro OE, pág. 187 dice que “La verdadera reverencia hacia
Dios es inspirada por un sentimiento de su grandeza infinita y de su presencia.
Y cada corazón debe quedar profundamente impresionado por este sentimiento
de lo invisible”.
a. La reverencia es una expresión de profundo respeto, honor y adoración por
el Señor. Es tener veneración por su nombre, su Palabra, sus mandamientos
y ordenanzas; respeto también por sus siervos, sus capillas y templos.
b. Es una manifestación externa de lo que sentimos por nuestro Dios. Mientras
nos encontremos en su casa debemos actuar como si estuviéramos en la
misma santa presencia del SOBERANO DEL UNIVERSO.
c. La reverencia comprende el pensar, hablar, sentir y actuar como lo haríamos
si estuviéramos en la misma presencia de nuestro Creador.
1. DIOS en primer lugar. Porque Él es grande, hacedor de maravillas y porque es el
único Dios. Sal. 86:8-12.
a. Debemos ser cuidadosos con el nombre de Dios, incluso cuando oramos.
“También se debería mostrar reverencia hacia el nombre de Dios. Nunca
se debería pronunciar ese nombre con ligereza o indiferencia. Hasta en la
oración se debería evitar su repetición frecuente o innecesaria.” La Edu-
cación, pág. 238.
b. Algunos usan el nombre de Dios con mucha liviandad, frivolidad, falta de
respeto y hasta con vulgaridad.
c. El sagrado nombre de Dios debe usarse con mucha reverencia y temor: “Vi
que el santo nombre de Dios debe usarse con reverencia y temor”. Primeros
Escritos, pág. 122.
2. La Sagrada Palabra de Dios y su Santa Ley. Apocalipsis 1:3
31
 a. La Sagrada Palabra de Dios debe manejarse con sumo cuidado y con la más
absoluta reverencia. Nunca abras las Sagradas Escrituras, sin primero, orar
a Dios pidiendo que el Espíritu Santo despeje tu entendimiento y abra tu
corazón, para que te haga comprender y atesores en lo profundo de tu ser,
el mensaje que el Señor quiere impartirte. “Deberíamos abrirlas con gran
reverencia y no en forma descuidada y desganada”. Alza tus Ojos, pág. 366.
b. El consejo divino es que la Biblia, así como su santa, perfecta y eterna Ley
deben ser tratadas con el máximo respeto, reverencia y obediencia; con
humilde reconocimiento de nuestras limitaciones y la majestad de Dios. Sal.
19: 7,8; 119:33,34.
c. Se debe estudiar la eterna Palabra de Dios, con paciencia, profunda reflexión
y oración; dejando de lado toda liviandad y frivolidad. Igualmente, se debe
solicitar la iluminación del Espíritu Santo. “Hemos de abordar el estudio de la
Biblia con reverencia, sintiendo que estamos en la presencia de Dios”. Men-
sajes para los Jóvenes, pág. 259.
3. La casa de Dios. Lev. 26:2; Habacuc 2:20.
a. Cuando se tiene un adecuado concepto de la grandeza, santidad y poder
de nuestro maravilloso Dios, producirá un sentimiento de temor reverente
cuando estamos en la casa del Señor. “La humildad y la reverencia deben car-
acterizar el comportamiento de todos los que se allegan a la presencia de
Dios”. Patriarcas y Profetas, pág. 256,257.
b. El cuidado por el arreglo y la higiene personal son factores importantes de
reverencia en la casa de Dios. En Mensaj. Selec. 2, pág. 250 se nos exhorta a
no ser descuidados en la manera de vestir, ni llevar al culto de adoración la
misma ropa que usamos durante la semana.
c. Se debe evitar toda conversación durante el sermón, así como risas y los
cuchicheos. Al término del culto se debe salir en orden, sin detenerse a con-
versar en los pasillos, porque el templo “es el lugar donde Dios se encuentra
con su pueblo y lo bendice”. Joyas de los Testimonios 2, págs. 194,196.
d. Lamentablemente: “Hay quienes se comportan en la casa de Dios como no
se atreverían a hacerlo en la sala de audiencias de un soberano terrenal”. PP.
256,257. Elena G. De White señala claramente la relación que existe entre
la santidad, la adoración y la reverencia: “Dios es superior y santo; y, para
el alma humilde y creyente, su casa en la tierra, el lugar donde su pueblo se
reúne para adorarlo, es como la puerta del cielo”. Mensaje para los Jóvenes,
pág. 263.
V. ¿CÓMO SE FOMENTA LA REVERENCIA Y CÓMO SE CURA LA IRREVERENCIA?
1. Reconociendo la grandeza, la santidad y el espíritu perdonador de Dios. Sal.
86:5, 8-10; Isa. 6:1-5.
a. Lo que los cristianos realmente necesitamos para ser reverentes, es una
vislumbre de la santidad de Dios, y de su profundo amor por nosotros peca-
dores, que lo movió a dar a su propio hijo para salvarnos.
b. Cuando reconozcamos la grandeza, santidad, misericordia, majestuosidad y
el espíritu perdonador de Dios; así como, nuestra pecaminosidad e indigni-
32
dad, entonces seremos realmente reverentes y dejaremos para siempre de
ser IRREVERENTES.
c. Cuando con los ojos de la fe mires a JESÚS muriendo crucificado en la Cruz
del Calvario, y entiendas que el que sostiene todas las cosas, el Creador del
Universo, el Alto y Sublime cuyo nombre es el SANTO, ocupa tu lugar como tu
sustituto en esa cruz, por el profundo amor que te tiene; entonces realmente
serás reverente en su santo templo.
2. Enseñando en el hogar a los niños desde su tierna edad a ser reverentes en el
culto familiar y en la casa de Dios; en esta labor, los padres deben asumir un rol
docente. Prov. 22:6, 29:17.
a. “A todo niño se le debe enseñar a manifestar verdadera reverencia hacia
Dios.” Profetas y Reyes, pág. 178. La necesidad es generalizada y el tema
es imperativo. En el libro JT 2, pág. 199, dice: “Casi todos necesitan que
se les enseñe a conducirse en la casa de Dios. Los padres no deben sólo
enseñar, sino ordenar a sus hijos que entren en el santuario con seriedad y
reverencia”.
b. Esta enseñanza no debe ser teórica solamente, sino práctica, es decir por
precepto y por ejemplo. Cuando los padres conducen bien a su familia ll-
evarán a la iglesia una influencia de orden y reverencia. “La reverencia, ... es
una gracia que debe cultivarse con cuidado. A todo niño se le debe enseñar
a manifestar verdadera reverencia hacia Dios”. Profetas y Reyes, pág. 178.
c. Los niños educados en el hogar para que sean reverentes con el santo y
sublime nombre de Dios, su Palabra, su santa y eterna Ley, así como con
su Santuario, traerán alegría y respecto a sus padres y a toda su familia.
Por el contrario cuando los hijos, sean niños, adolescentes o jóvenes son
irreverentes, causarán desprestigio y deshonra a sus padres y a toda su fa-
milia por más buenos líderes que sean, como sucedió con el Sacerdote Elí.
“Muéstrese a los niños que la verdadera reverencia se revela por la obedi-
encia”. Conducción del Niño, pág. 92:1.
3. Erradicando toda costumbre y actitud que fomente la irreverencia, en los cultos
de ADORACIÓN a DIOS; tales como:
a. Murmurar, dormir, leer, conversar o reírse.
b. Improvisaciones e impuntualidad en los cultos.
c. Llegar tarde al templo, como si la cita con Dios no fuese importante.
d. Uso de celulares en el templo en los momentos sagrados de los cultos a
Dios.
e. Vestimenta inapropiada para la ocasión.
f. Presentación inadecuada del templo, bancas sucias; dejar papeles o cual-
quier otro tipo de desperdicios. Diáconos y diaconisas: ¡Mayor control!
g. Ingesta de alimentos mientras, estamos adorando a Dios.
h. Introducir fuego extraño en la música que se presenta como alabanza a
Dios.
33
 4. Teniendo la plena convicción que Dios, el SOBERANO de nuestras vidas está pre-
sente en el lugar donde le rendimos tributo y adoración. Esto implica:
a. Tener la plena convicción que ésta es la casa de Dios y puerta del cielo.
b. Tener la plena convicción que aquí la presencia de Dios es una irrefutable
realidad.
c. Tener plena convicción que acá se viene para adorar a Dios y rendirle honra
debida a su santo nombre.
VI. CONCLUSIÓN
1. Dios desea que quienes vienen a su santuario para adorarlo, lo hagan en espíritu
y verdad. No desea cultos pomposos, con un alto contenido de formalismo o
espectacularidad, sino cultos sencillos, pero con un alto contenido de sinceridad
y reverencia. Juan 4:23, 24.
2. Jamás olvides que Jehová está en su santo templo, porque Él ha prometido en
su Palabra que su nombre, sus ojos y su corazón estarán aquí para siempre. Esta
realidad merece que tú la tengas siempre en cuenta, a fin de que te presentes a
Dios con un corazón humilde y un espíritu reverente. 2 Crónicas 7:15,16.
3. La orden dada por Dios a Moisés: “Quita tu calzado de tus pies”, también es para
nosotros hoy e implica eliminar, con el poder del Espíritu Santo, todo acto de ir-
reverencia que impida que nuestro culto sea aceptado por nuestro Señor.
4. Recuerda siempre que la adoración sin REVERENCIA, no tiene sentido y que no
es aceptada por nuestro Dios.
5. Por todo lo dicho, con la ayuda de Dios, grava en tu mente y en tu corazón que:
La más levada forma de adoración a Dios es el culto reverente. Te invito a que te
comprometas a ser un vigilante y promotor de la REVERENCIA. Amén.
ORACION.
34
Culto de adoración
para el 14 de mayo
ADORADOR SANO Y FELIZ
I. INTRODUCCIÓN:
1. Saludo. Es una alegría dirigirme esta mañana a esta hermosa iglesia que recurrió a este
templo para adorar a Dios, quien nos creó y ahora venimos para escuchar su palabra.
2. Motivación. Dice un verso que tiene mucha razón, aunque no vamos hablar de
trabajo, pero sí de la salud:
Romero en su juventud, en busca de dinero gasto su salud.
Romero con dinero no buscó más virtud.
Romero en su adultez en busca de salud,
Gastó su dinero.
Ahora Romero sin dinero y sin salud,
Allí va en ataúd.
3. Propósito: Mostrar a la iglesia que Dios desea nuestra prosperidad espiritual
y también nuestra prosperidad física, porque desea que vivamos como adora-
dores felices y sanos.
4. Texto: 3 Juan 2 y Juan 10:10
II. NUESTRA RESPONSABILIDAD COMO CRISTIANOS
1. ¿Cuánto vale su Salud? Frecuentemente las personas son llevadas al hospital.
Más de una vez, el doctor se ve forzado a dar detalles del peligroso estado del
enfermo y declara que es a consecuencias del mal trato que se le da a nuestro
organismo.
2. El conocido estadista ingles Disraeli dijo:
a. “La Salud pública es el cimiento sobre el cual descansa la felicidad del pueb-
lo y el bienestar de la nación. Cuidar de la Salud Publica es el primer deber
del estadista”.
b. Parafraseando estas palabras podemos decir: “Cuidar de la salud de la fa-
milia es el primer deber de cada miembro de la misma”.
3. Porque después de todo las estadísticas no muestra mucha verdades.
Se nos dice que el 80% de las enfermedades se deben (excluyendo acciden-
tes e infecciones) a los malos hábitos de la salud.
35
 Ilustración:
Un hombre, aun joven, yacía en cama en uno de los mejores hospitales de
la ciudad. Estaba demacrado, pálido y muy débil. A cada rato le faltaba la
respiración. Padecía de dolores, toda la ciencia médica podía hacer muy
poco para que mejore su salud. El mismo presentía y lo afligía mucho, la
idea de tener que abandonar a su familia.
Una señora amiga lo visito. Muchas veces esta señora le había aconsejado que
cuidara su salud, pero nunca el joven la hacía caso. “Soy joven, decía. Tengo que
gozar la vida, de algo hay que morir, déjame gozar”.
Ahora su expresión era distinta “Daría todo lo que posea para recobrar mi
salud”. Es lo único que me importa. Lamentablemente todo fue inútil su
salud estaba totalmente minada.
Veinte años de abuso, comió lo que quiso bebió cuanto se le antojó y fumo.
Ahora estaba pagando su abuso. Falleció
Hay un mandamiento en la Ley de Dios que dice: “No mataras” Al descuidar
nuestra salud y maltratar nuestro cuerpo mediante malos hábito, es como
suicidarse poco a poco.
Un alto porcentaje de las enfermedades que aquejan a la humanidad, provi-
enen directamente e indirectamente de una mala alimentación.
4. La ciencia ha comprobado que el hombre al nacer, trae a este mundo la base de
la vitalidad y de la Salud. Esto nos acompaña toda la vida.
a. Los primeros meses y años son decisivos; la madre debe proporcionar ma-
teriales en la edificación del cuerpo. De acuerdo a este material el resultado
será físicamente admirable.
b. La mala alimentación de la criatura, antes de nacer, y la adquisición de vicios
de parte de una madre embarazada, es desastroso para el futuro de un hijo.
5. Algunos creen que se resuelve con más medicamentos.
Es verdad que en todos los países necesitan más médicos. Los médicos pueden
hacer mucho… Pero hay que recordar: La salud es un asunto individual; depende
del individuo, de su diario vivir, etc.
III. ¿QUÉ ES LA SALUD?
Algunos conceptos de salud:
“La salud no es simplemente algo misterioso que nadie lo aprecia antes de
perderlo”.
“Su reconquista se considera digna de los mayores esfuerzos. No lo apreciamos
sino hasta haberlo perdido. Conservemos la salud mientras la tengamos. La
salud es la mejor condición posible de nuestro organismo”.
Salud es el gozo de vivir: Es sentirse vivir. Es estar siempre de buen ánimo. Es
sentirse fuerte, y hacer frente a las dificultades.
36
1. DIOS DESEA QUE TENGAMOS SALUD Y QUE CUIDEMOS NUESTRO CUERPO
3 Juan 2 y Juan 10:10
a. Debemos glorificar a Dios con nuestro cuerpo (1 Cor.6:19,20)
b. Según las Sagradas Escrituras, nuestro cuerpo pertenece a Dios. Dios nos ha
mandado un manual de instrucciones con detalles claros, en cuanto al per-
fecto desenvolvimiento de las facultades físicas, intelectuales y espirituales.
c. “Si pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de
Dios” 1Cor 10:31
2. ES UNA NECESIDAD CONOCER LAS LEYES DE LA SALUD
a. La temperancia ayuda a la salud. En ellas se cumplen las leyes de la siembra
y la cosecha.
b. ¿Qué es temperancia? “Es la abstención de todo lo que hace mal, y el uso
moderado de lo que bueno”.
IV. LA ALIMENTACIÓN ORIGINAL DEL HOMBRE (Génesis 1:29, 3:18)
Los alimentos señalados Adán incluían granos, nueces, frutas y vegetales. La
carne no formó parte de la dieta original. Fue incluida después del diluvio. Gé-
nesis 1:29; 3:18
1. LA BIBLIA Y EL USO DE LOS ALIMENTOS LIMPIOS E INMUNDOS
a. Animales clasificados en limpios e inmundos(Génesis 7:1,2)
b. Regla para clasificar los animales limpios e inmundos (Deuteronomio 14:4-
6)-lo que dice acerca de la sangre (Gén. 9:4)
c. Peces que se pueden consumir (Deuteronomio 14:7,8)
d. Lista definida de animales proscritos para comer (Deuteronomio 14:7,8)
e. La carne de cerdo más que cualquier otro animal, al ser consumida trans-
mite enfermedades, una de las más terribles es la triquinosis.
f. “Al señalarle el alimento al hombre en el Edén, el Señor mostró cuál era el
mejor régimen alimenticio. Dio el uso de alimentos animales, pero bajo pru-
dente restricciones, encaminadas a mitigar el mal que esta ocasionarían.”.
Elena G. de White
2. EL DOCTOR WALDEN PRESENTA LA RECETA DE COMO MORIR JOVEN
a. “Le enseñaré”, dice él, “como morir más joven”
b. Coma más de lo que su cuerpo necesita. Coma muchas cosas dulces; combi-
naciones de leche, huevos, azúcar (pasteles, helados, biscochos, etc.)
c. Beba alcohol en abundancia
d. Fume abundantemente. La persona que fuma resulta en blanco para la se-
nilidad, los ataques cerebrales y coronarios.
e. Beba mucho café
37
 f. Trabaje más de lo necesario. Traiga trabajo para su casa. VI. CONCLUSION:
g. Nunca haga ejercicio 1. Dios desea un pueblo adorador sano y feliz.
h. Viva en permanente tensión. 2. Por eso se preocupa por nuestra salud, y nos recomienda algunos consejos para
i. No se haga jamás un examen médico. que nuestra estadía en esta tierra sea la más placentera.
“Porque tener buena salud significa el balance de las facultades: Físicas, 3. El cuidado de la salud a través de la buena alimentación nos traerá hasta for-
mentales, sociales y espirituales” taleza mental y espiritual.
V. LA SALUD DEL ESPÍRITU ES MENTE SANA, CUERPO SANO 4. Y tener fortaleza física, paz mental y una vida espiritual poderosa, hará de cada
uno de nosotros fieles adoradores.
1. Un caso interesante: 5. Llamado:
(Francia). Un lavador de vagones de frigorífico quedó encerrado inadvertidam- Quieres ser un fiel adorador sano y feliz en la presencia de Dios, y vivir en pleni-
ente dentro del vagón, y fue hallado muerto después de un recorrido de apenas tud en la medida que obedeces las recomendaciones sobre la alimentación y el
30 kilómetros. cuidado del cuerpo.
El suplicio fue espantoso, se descubrieron en el piso del vagón algunas frases que Dios a tales adoradores ama y bendice, porque consideras a tu cuerpo como
permitieron reconstruir el drama. templo del Espíritu Santo.
¿Quiénes deciden entregar sus vidas a Dios en sacrificio vivo y agradable a Dios,
- “El frío aumenta” comprometiéndose en cuidar la salud?
- “Temo que nadie vendrá a salvarme”
6. Oración
- “Me enfrió lentamente y me muero”
- “Ya me voy adormeciendo”
- “No tengo más fuerzas para escribir”
Lo interesante es que no fue el frio lo que causó la muerte del hombre
La instalación del equipo frigorífico estaba descompuesto. El pobre hombre no
lo sabía. Si tan solo hubiera mirado el termómetro dentro del vagón se hubiera
salvado.
El dominio de una idea negativa puede matarnos, o producir en nosotros toda
clase de enfermedades. El 80% de las enfermedades son mentales.
2. Otro caso interesante:
Una mañana un matrimonio discutió en el desayuno: El esposo, le tiro una taza
de té en la cara a la esposa.
Ella llena de ira quedó ciega. Fue llevada a un oculista. No tenía nada en la vista.
Pero estaba ciega, no veía, en realidad.
El oculista dijo que debía operarla, que había una pequeña telita sobre los ojos.
Preparó la operación la venda hacía sentir cierto dolor. Luego de hacer varias
cosas, le preguntó: “Señora”, ¿ve ahora? “Si veo”. No hubo tal operación.
El imperio de la mente sobre el cuerpo:
¿Qué mató al trabajador que quedó atrapado en el vagón? Su mente
¿Qué volvió ciega a la señora? Su disposición mental.
38 39

Culto joven
para el 14 de mayo
SALVO PARA VIVIR EN SANTIDAD
I. Introducción:
Cuando se menciona a David, la mayor parte de personas hace inmediatamente
la siguiente asociación: David y Goliat. O piensan en David el hombre que pecó
con Betsabé. O en todo caso, es recordado por haber sido el joven que mató a un
oso y un león. O inclusive por haber sido ungido como rey por Samuel. O por su
amistad profunda con Jonatán. No son pocas las veces que David es recordado
como el joven que tocaba el arpa para calmar a Saúl, o cuando el rey Saúl lo
perseguía.
Pero ninguna de estas cosas es tomada en cuenta por Dios en relación a su rey
fiel- su escogido, su hombre ideal. Si quisieras saber lo que Dios recuerda de
David, tendrás que buscarlo en el libro de:
TEXTO CLAVE: Hechos 13:22: “… he hallado a David, hijo de Isaí, varón conforme
a mi corazón…”
II. EL DESEO DE UN HOMBRE SEGÚN EL CORAZÓN DE DIOS
¿Por qué será que a David se lo llama: “un hombre según el corazón de Dios”?
Vamos a analizar un poco la vida de este hombre.
En los días de David el centro de la adoración era el tabernáculo. Durante el
reinado de Saúl, este había descuidado la importancia del tabernáculo, y como
consecuencia, este templo perdió la importancia que debería tener. Tal fue el
abandono, que una pieza importantísima del santuario fue separada del resto
del mobiliario santo. El Arca del Pacto cayó en manos del enemigo.
Veamos, el arca era tan importante para el Señor, que dio instrucciones especí-
ficas de cómo construirla y hacerla portátil, de modo que los israelitas pudiesen
transportarla juntamente con el santuario por el desierto hasta la tierra pro-
metida, Canaán. En todo lugar en el que el arca del Señor era puesta, la gloria de
Dios descansaba allí – esto es, la luz, la Shekinah, descendía sobre el arca.
Cuando David subió al trono, vio que el arca del pacto no se encontraba más allí.
No había un centro de adoración. El camino espiritual del pueblo se volvió me-
diocre. El corazón de ellos no ardía por Dios. Como líder, David sabía que debía
hacer algo, necesitaba poner esta parte del mobiliario en su debido lugar, como
Dios lo estableciera. Así que este hombre, según el corazón de Dios, ansiaba
hacer lo mejor por agradar a Dios, hacer lo que era correcto, pues cuando se
trataba de Dios, ningún detalle era sin importancia para David.
40
1. ¿Qué hizo entonces David?
“David volvió a reunir a lo más selecto de Israel, unos 30.000 hombres. Y se
levantó David, con todos sus hombres, y se puso en marcha desde Baal de Judá,
para traer el Arca de Dios, que lleva el Nombre del Eterno Todopoderoso, que
mora entre querubines. Pusieron el Arca de Dios sobre un carro nuevo, y la ll-
evaron de casa de Abinadab, que estaba en el collado. Uza y Ahío, hijos de Abi-
nadab, guiaban el carro nuevo. Al transportarla, Uza iba junto al Arca de Dios, y
Ahío iba delante. Y David y toda la casa de Israel danzaban ante el Eterno, con
toda clase de instrumentos de madera de haya; arpas, salterios, panderos, flau-
tas y címbalos.” 2 Sam.6:1-5
a. David se alegró. Sabiendo que el arca del pacto estaba volviendo a la casa a
la que pertenecía, en Sión. Había música y la alegría de la obediencia palpi-
tando en el corazón de David.
David era el rey y como rey, él tomaba las decisiones. El sabía que para adorar,
el pueblo necesitaría del arca del pacto. Para que el arca pudiese ser traída de
la casa de Abimelec, el medio más rápido sería una carreta o carruaje. David
mandó preparar un carruaje nuevo, puso el arca sobre el carruaje y ordenó a
sus hombres: “Llévenla a Jerusalén”.
Los hombres de David estaban llevando el arca del pacto hacia Sión, con los
hijos de Abinadab, Uza y Aío, cuando ocurrió algo terrible.
b. David solo pensó en una sola cosa: “Necesitamos traer el arca a Jerusalén, para
ponerla en el tabernáculo. Necesitamos traerla ahora mismo. No importa cómo
sea transportada, ¡lo importante es que llegue!”
Cuando cambiamos detalles de la orientación y principios de Dios, de modo
que se ajusten a nuestra conveniencia, a nuestra manera de pensar y estilo
de vida, corremos riesgos.
Tal vez pensemos: “¿A quién puede importarle esto?” A Dios le importa. Y
para demostrar esto, Dios quitó la vida a Uza (“Samuel 6:6,7)
Dios había dado instrucciones claras y precisas de cómo cargar el arca. Dios
había dicho que era un mueble sagrado. Dios había dicho que era un mue-
ble que no debería ser tocado. Sólo los hombres escogidos por Dios podían
transportar el arca. Pero David solo pensó en la alegría que sería traer el
arca de vuelta y se olvidó de los detalles que debían ser obedecidos.
Todo en el santuario era sagrado y dedicado al Señor. (Éxodo 40:9)
Dios nos llama a nosotros: “… vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio,
nación santa, pueblo adquirido por Dios…” 1 Pedro 2:9
III. LOS CUANDO DIOS DICE QUE ALGO ES SANTO, OBEDECE, PORQUE ES SANTO.
1. Cuando Dios dice que Su Palabra es santa, es por ella es santa. Y el hombre no
tiene derecho de decir que ella no es totalmente inspirada, queriendo de esta
manera que la palabra de Dios se adapte a su estilo de vida o su conveniencia.
“… y que desde la niñez has sabido las Escrituras… Toda escritura es inspirada
por Dios” (2Tim.3:15,16)
41

“La Biblia, y sólo la Biblia ha de ser nuestro credo, el único vínculo de unión.
Todos los que se inclinen ante esta Santa Palabra, estarán en armonía.” Elena de
White, Mensajes Selectos, tomo 1, pág. 487.
Los santos actúan como santos, los santos obedecen, los santos viven en santidad.
2. Cuando Dios habla que su ley es santa, es porque es santa. Y el hombre no tiene
el derecho de transgredir ningún mandamiento de esta ley.
“… de modo que la ley es santa” Romanos 7:12
“El que llegue a ser participante de la naturaleza divina estará en armonía con la
gran norma de justicia de Dios, su santa ley. Ésta es la regla por la cual Dios mide
las acciones de los hombres. Esta será la prueba del carácter en el juicio.” Elena
de White, Palabras de Vida del Gran Maestro, págs. 254, 255.
Los santos actúan como santos, los santos obedecen, los santos viven en santidad.
3. Cuando Dios dice que el matrimonio es santo, es porque lo es. Y no le corre-
sponde al hombre, por ninguna razón, intentar anular esta unión a menos que
haya adulterio de una de las partes involucradas.
“Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla…” Hebr.13:4
Honrar en la Biblia es sinónimo de respeto y “sin mancilla” es algo relacionado
con santidad.
Dios nos está hablando que el matrimonio debe ser una relación respetuosa y santa.
“(Dios) Había dispuesto que hombres y mujeres se unieran en el santo lazo del
matrimonio, para formar familias cuyos miembros, coronados de honor, fueran
reconocidos como miembros de la familia celestial.” HA, p. 84.
IV. SENTIMIENTOS Y ACTITUDES DE UN HOMBRE SEGÚN EL CORAZÓN DE DIOS.
4. Cuando Dios dice que nuestro cuerpo, que es templo del Espíritu Santo es
santo, es porque es santo. Y el ser humano no tiene derecho de destruirlo, sea
comiendo, bebiendo o haciendo cualquier otra cosa.
“Si alguien destruyere el templo de Dios, Dios destruirá al tal; porque el templo
el cual sois vosotros, santo es”. 1 Cor.3:17
“El nos dice que nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo; y nos exige que
cuidemos este templo, a fin de que sea una habitación adecuada para su Espíritu.”
Elena de White, Consejos Sobre Régimen Alimenticio, p. 23.
Los santos actúan como santos, los santos obedecen, los santos viven en santidad.
5. Cuando Dios dice que el sábado es santo, es porque es santo. Y el hombre no
debe ni siquiera pensar por un minuto en dejar de santificar ese día.
“Más el séptimo día es sábado para el Señor tu Dios…” Ex.20:10 “Y bendijo Dios
es séptimo día y los santificó…” Gen.2:3
“El sábado fue hecho para beneficio del hombre; y transgredir a sabiendas el
santo mandamiento que prohibe trabajar en el séptimo día es, a la vista del cielo,
un crimen…”. Elena de White, Joyas de los Testimonios, tomo 1, pág. 175.
42
Los santos actúan como santos, los santos obedecen, los santos viven en santidad.
6. Cuando Dios dice que los diezmos son santos al Señor, es porque son santos. Y
el hombre no tiene derecho a hacer lo que bien le parece respecto a este asunto.
“Y el diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los
árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová” Levítico 27:30
“Asimismo el diezmo de nuestras entradas es “santo a Jehová”. Elena de White,
Consejos sobre Mayordomía Cristiana, pág. 70.
Los santos actúan como santos, los santos obedecen, los santos viven en santidad…
No podemos dejar de considerar que somos una “nación santa, pueblo adquiri-
do de Dios” 1 Pedro 2:9
Y como santos debemos actuar como tales, obedeciendo aquello que el Señor ha
indicado como sagrado, pues los santos obedecen, los santos viven la santidad.
Infelizmente, hoy, existen muchas personas que sólo piensan y actúan como Da-
vid actuó, sólo miran el placer y bienestar del momento y dicen: “¿Qué impor-
tancia tiene si llevamos el arca en un carruaje? O ¿qué importa si no usamos las
argollas y las varas? ¿Qué mal hay en tocar eso o aquello que el Señor dice que
es santo? Al final de cuentas, es por una causa noble”.
Hermanos, los santos actúan como santos, los santos viven en santidad – esto
quiere decir – que obedecen. Si Dios ha dicho que es santo, será santo para los
verdaderos santos. Esto quiere decir que no lo tocarán, no lo llevarán de cual-
quier manera. Obedecerán a pie juntillas las indicaciones del Señor.
Recordemos que siempre tendremos problemas cuando dejemos de hacer
aquello que el Señor ha pedido que hagamos.
La Biblia nos dice que David se “entristeció” por lo que le ocurrió a Uza.
(2Sam.6:8) en la versión en portugués dice que “David se disgustó…” Imagina,
un hombre según el corazón de Dios, disgustado con el Señor. En efecto él era
un hombre según el corazón de Dios pero no era perfecto. Amar a Dios no sig-
nifica que tú eres perfecto. Las personas según el corazón de Dios también son
sensibles, poseen sentimientos. Pero las personas según el corazón de Dios se
esfuerzan en corregir sus errores.
1. ¿Qué hizo David?
“Reunió también David a los hijos de Aarón y a los levitas… y llamó David a los
sacerdotes Sadoc y Abiatar, y a los levitas… y les dijo: vosotros que sois los prin-
cipales padres de las familias de los levitas, santificaos, vosotros y vuestros her-
manos, y pasad el arca de Jehová Dios de Israel al lugar que le he preparado;
pues por no haberlo hecho así vosotros la primera vez, Jehová nuestro Dios, nos
quebrantó, por cuanto no le buscamos según sus ordenanzas” (1Cor.15:4, 11-13)
Saben hermanos y amigos, David quería ardientemente hacer la voluntad de
Dios. Sólo que ahora, él entiende que tiene que hacerlos de acuerdo con las
especificaciones divinas.
43
 Dios le dijo a David muy claramente lo que debía hacer. Dios debe haberle dicho:
“David, escúchame! Hay una manera de traer el arca de vuelta. Pero esa manera
debe ser del modo que yo indico. Tienes que poner las varas en aquellas argollas
y apoyar las varas sobre los hombros. Sólo los levitas podrán cargarlas. Si haces
de la manera como yo indico, todo va a salir bien”.
2.
Como David era un hombre según el corazón de Dios, el entendió y obedeció.
¿Cuál es el mensaje que encontramos en las varas, en las argollas del arca? Dios
se interesa en los pequeños detalles de nuestra vida.
El sistema del mundo dice: “No te preocupes con esos pequeños detalles, Dios
es más grande que unas argollitas de oro”. No es así de simple. Dios ve el esce-
nario completo. El prueba nuestra obediencia hasta el las cosas más insignifican-
tes como una argolla, una vara o un hombro.
Un hombre según el corazón de Dios, que vive en santidad siempre será obedi-
ente a la palabra divina.
V. CONCLUSIÓN.
En la familia de Dios siempre existieron dos categorías de personas. Las del
primer grupo pasan mucho tiempo en el camino de la deslealtad, mucho tiempo
gimiendo y lamentándose, y posteriormente recuperándose de las incursiones
fuera del plan de la voluntad de Dios.
Pero las otras no caminan mucho tiempo antes de comenzar a examinar donde
están. Ellas están atentas. Vuelven rápidamente al camino correcto, cuando se
dan cuenta que estaban yendo por el equivocado. Quieren ser personas “según
el corazón de Dios”. Para esas personas, nada es insignificante en su relación con
Dios. Los que viven la mayor parte de la vida en esta segunda categoría son raros.
No hay mucha gente cuyos corazones tienen ansias de Dios, que obedezcan los
preceptos y principios divinos. Pero David era un hombre así. Un hombre según
el corazón de Dios.
“David fue llamado hombre según el corazón de Dios cuando andaba de acuerdo
con su consejo.” Patriarcas y Profetas, pg. 782
La mejor prueba de tu amor por el Señor, es la obediencia… nada más, nada
menos, ni cualquier otra cosa.
Llamado:
¿Quieres ser como David? ¿Quieres vivir en santidad? Entonces presta atención
a las cosas que Dios considera sagradas e importantes. Observa los detalles. En
una palabra: obedece.
Oración.
44
Culto de adoración
para el 18 de junio
UNA OFRENDA AL SEÑOR
I. INTRODUCCIÓN
Cuando escuchamos las palabras Mayordomía Cristiana, ¿qué nos viene a la
mente? Por favor, no diga aquello que sea el ideal, sino lo que su corazón le
dice. Para muchos, infelizmente, Mayordomía Cristiana es el departamento “tra-
ga monedas” de la iglesia. Queridos, no podemos borrar esa idea de aquellos
que piensan así, sin embargo, no podemos callarnos frente a esta situación tan
complicada e incorrecta teológicamente.
PROPÓSITO: Mostrar que el entendimiento adecuado de la mayordomía cristia-
na nos ayudará a darle la importancia debida a este ministerio.
II. El fundamento de la Mayordomía Cristiana
La Biblia es el fundamento sobre el cual está construida la teología de la Mayor-
domía Cristiana. Consecuentemente cualquier estudio, en esta área, que no ten-
ga su enfoque en Dios y en su Palabra, inevitablemente resultará en conclusio-
nes distorsionadas. Si es así, las preocupaciones fundamentales de Mayordomía
Cristiana deben ser tomadas de la Biblia como autoridad de fe y práctica. Esto
debe ser entendido y afirmado como algo básico.
Amados, existen algunas preguntas y afirmaciones básicas que necesitamos ana-
lizar, antes de definir Mayordomía Cristiana:
a. ¿Quién es Dios? (Génesis 2:1-3; Romanos 5:8; Mateo 6:31-33).
• Dios es el Creador. En el principio, Dios creó el cielo y la tierra y todas las
huestes.
Mayordomía Cristiana, una ofrenda al Señor
SÁBADO 8
• Él es el Dios de la redención. En él, el plan de la redención y propósito
eterno se encuentran para formar un perfecto círculo.
• De igual modo, Dios es sustentador.
b. ¿Quién soy yo dentro de este contexto? (Gén. 2:7; Romanos 8:14; Sal. 34:9)
• Yo soy criatura, también puedo ser un hijo guiado por el Espíritu, y también ser
santo, separado por Dios. Todo dependerá de mis elecciones.
45
 c. Existe un gran contraste entre el reino de la luz y el reino de las tinieblas: ha dado oportunidades de trabajar para él, y acepta nuestras labores como
prueba de nuestro amor y lealtad”. (Joyas de los testimonios, t. 2, p. 499).
• El reino de la luz es dar, distribuir (Mat. 7:7-11; Mar. 10:45).
IV. Conclusión
• El reino de las tinieblas es recibir, quitar (1 Pedro. 5:8; Ageo 1:6).
Amados, como mayordomos cristianos, podemos aprovechar de la maravillosa
d. El tesoro de Dios es la gente (Sal. 135:4; Efe. 1:3-6; Mal. 3:17). creatividad de Dios, que es evidente en todas las cosas que él creó. Podemos
transformar el día a día en oportunidades de adoración al Creador y lecciones de
Así, Dios quiere actuar en la experiencia humana. Él está interesado, en pri- aprendizaje a nuestros hijos y amigos.
mer lugar, en las personas: “Dame, hijo mío, tu corazón…” (Pro. 23:26). Aquí
no hay espacio para regateos, porque Dios está interesado en mí totalmente: Necesitamos entender que la Mayordomía Cristiana incluye recursos financie-
“Todo de mí en respuesta al todo de Dios”. ros, sin embargo, esta aceptación por parte de Dios dependerá del espíritu del
adorador, porque Dios ama a quien da con alegría, y no el valor monetario.
e. La bendición del mayordomo es Dios (Sal. 27:1). ¿Hay bendición más grande
que tener al mismo Dios? Feliz es el hombre que entiende eso. Es bueno recordar que el sábado, monumento de la creación; el matrimonio, base
de la familia; y el diezmo, indicador de que Dios es dueño de todo; son principios
III. Definiendo Mayordomía Cristiana establecidos en el Edén que Satanás ha intentado desesperadamente destruir e infe-
a. Después de responder las preguntas y analizar las afirmaciones, podemos lizmente, en muchos casos, ha obtenido la victoria.
entonces presentar la siguiente definición: Pero sabemos que Dios nos promete la victoria sobre el enemigo en esas áreas
“Mayordomía es el estilo de vida de la persona que tiene una relación viva fundamentales relacionadas con la Mayordomía Cristiana: sábado, familia y fidelidad.
con Dios y acepta su señorío, andando en sociedad con Dios y actuando como Alabado sea el nombre de Dios por la Mayordomía Cristiana de la Iglesia Adven-
su agente para administrar sus negocios en la tierra”. tista del Séptimo Día porque, por su propia existencia, es una ofrenda al Señor.
Queridos, eso nos lleva a concluir que Mayordomía Cristiana es la base de Cuando cuidamos lo que Dios ama, Dios cuida lo que nosotros amamos. Que
todos los ministerios de la iglesia, y se transforma en la llave principal para Dios nos bendiga y que seamos, por la gracia de Cristo, mayordomos fieles y
el crecimiento espiritual y asimismo el crecimiento en la evangelización de amigos de la Mayordomía Cristiana.
la iglesia local, una ofrenda en sí misma. Alguien puede preguntarse: ¿y la
mayordomía financiera? Ella es muy importante, pero es parte de la Ma-
yordomía Cristiana, sin embargo, existe un factor que debe ser tomado en
cuenta: “Dios ama al dador alegre”. (2 Corintios 9:7).
b. La visión equivocada sobre la Mayordomía Cristiana se debe, en gran par-
te, al entendimiento superficial de la función de cada miembro dentro del
cuerpo de Cristo.
c. Un teólogo alemán llamado Karl Heim, hablando sobre esto, escribió: “Los
miembros de la iglesia no son solo discípulos de Cristo, sino ingredientes de
personalidad expandida del mismo Cristo”. En otras palabras, somos partes
visibles de la persona de Cristo y cuidamos de los negocios de él aquí en la
tierra. Un procedimiento común en la vida práctica de un súbdito fiel a él. Es
importante dejar claro que Dios no necesita de nosotros. Si por ventura no
hacemos nuestra parte, otros la harán, incluso las piedras. Dios es autosufi-
ciente, pero nos da el privilegio de trabajar para él. No solo usando nuestros
talentos, sino todo lo nuestro en respuesta al todo de Dios.
d. Contribuyendo con ese pensamiento, la sierva del Señor escribió: “El Señor
podría llevar a cabo su obra sin nuestra cooperación. No depende de noso-
tros por nuestro dinero, nuestro tiempo, nuestro trabajo. Pero la iglesia es
muy preciosa a su vista. Es el estuche que contiene sus joyas, el aprisco que
encierra su rebaño, y él anhela verla sin mancha, tacha ni cosa semejante.
El siente por ella anhelos de amor indecible. Ésta es la razón por la cual nos

46 47

Culto joven
para el 18 de junio
LA MAYORDOMÍA, SALVACIÓN TOTAL
INTRODUCCIÓN
Un hombre ἀel como Job demostró frente a las tremendas pruebas que le tocó vivir, que
continuaba siendo un ἀel mayordomo del Señor (Job 2: 9).
TEXTO
1. Job 1: 7-11: “Y dijo Jehová a Satanás, ¿de dónde vienes? Respondiendo Satanás a
Jehová dijo: De rodear la tierra y de andar por ella. Y Jehová dijo a Satanás? ¿No has
considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y
recto, temeroso de Dios y apartado del mal? Respondiendo Satanás a Jehová dijo:
¿Acaso teme Job a Dios de balde? ¿No le has cercado alrededor a él y a su casa y
a todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos has dado bendición; por tanto, sus
bienes han aumentado sobre la tierra. Pero extiende ahora tu mano y toca todo lo
que tiene y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia”.
I. UN ALMA FIEL ES ATACADA POR SATANÁS
1. Acusación Básica de Satanás. La acusación del enemigo consistía en que la consa-
gración personal de Job para con Dios se debía a un calculado interés. El Señor lo
había prosperado y Job aparecía como ἀel cuando no lo era. Indudablemente Job
se estaba burlando del Señor.Job no era lo que parecía ser: un hijo de Dios por la
gracia redentora, sino que era ἀel por interés.En esto Satanás estaba cuestionan-
do, no solamente a Job sino también al Señor.
2. Satanás invade el corazón de egoísmo. Satanás ha invadido el corazón del hom-
bre natural de egoísmo. El egoísmo es la característica básica de Satanás, es su
propio capital. El egoísmo es la característica prominente en Satanás como lo es
el amor en el Padre Todopoderoso. Satanás considera que la obediencia tiene
que ser movida por el interés personal y egocéntrico.
3. Tócale el bolsillo. Podríamos decir que Satanás le dijo al Señor: Tócale el bolsillo
a Job y verás sino te blasfema en la cara. (Job 1: 11).
4. Job triunfa como ἀel mayordomo. Job tuvo la oportunidad de vindi-carse y tam-
bién de vindicar a su Dios que había sido cuestionado por el enemigo. Fue re-
conocido ἀnalmente como sincero en su servicio ἀel a Dios y justiἀcado como
excelente mayordomo.
5. Reconocimiento extraordinario de Job. Ante la prueba por la cual tuvo que pasar,
Job dijo: Jehová dio y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. (Job 1: 21).
Después de tal aparente fracaso y pérdida, el Señor terminó duplicán-dole sus bie-
nes y quitándole toda aḀicción. (Job 42: 10).
48
II. IMPORTANTES CONCEPTOS SOBRE MAYORDOMÍA
1. Dios debe ocupar el primer lugar. El Señor debe ocupar siempre el pri-mer lugar en
todos los aspectos de la vida de un hombre convertido.
a. Lo mencionado en la vida y conducta de Job es un ejemplo muy claro.
b. Colocar siempre primero a Dios en todo, es un principio de las Sagradas Es-
crituras.
Lucas 10: 27: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con
todas tus fuerzas, y con toda tu mente…Deuteronomio 6: 5-9: Y estas palabras que yo te
mando hoy, estarán sobre tu corazón.
c. Los requerimientos de Dios ocupan el primer lugar. No estamos hacien-do su
voluntad si le consagramos lo que queda de nuestras entradas después que han
sido suplidas todas nuestras necesidades imagina-rias. Antes de consumir cual-
quier parte de nuestra ganancia, debemos sacar y presentar a Dios la porción
que él exige. (JT, 1, p. 555).
2. Dios es el dueño de todo:
a. Algunos pasajes bíblicos:
1 Corintios 10: 26: Porque del Señor es la tierra y su plenitud.
Salmo 50: 10-12: Porque mío es el mundo y su plenitud.Hageo 2: 8: Mía es la
plata y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos.
1 Crónicas 29: 14: Pues todo es tuyo y de lo recibido de tu mano te damos.
b. Nosotros somos mayordomos y no propietarios. Adán Dios lo colocó
como mayordomo, administrador y responsable de todas las obras crea-
das (Génesis 2: 15), pero desgraciadamente en esto se equivocó Adán al
tomar lo que no le pertenecía. Así entró en tremendas diἀ-cultades con
Dios por no ser un ἀel mayordomo. (Génesis 2: 16, 17).
c. Todavía existen árboles prohibidos en el moderno huerto de Dios. Hay
algunas cosas que el Señor reclama como suyas:
1/7 de nuestro tiempo - el sábado
1/10 parte de nuestras entradas - diezmo
(Estas cosas no nos pertenecen)
d. La mayordomía es una prueba en la cual todos participamos, para que
probados, demostremos nuestra idoneidad para el reino de los cielos,
caracterizado por:
• el altruismo
• el amor
• el desprendimiento
49
 e. Los diezmos, las ofrendas, los pactos y cualquier otra dádiva constituyen un de-
ber de gratitud y reconocimiento por el amor del dueño hacia el mayordomo.
f. El desprendimiento y la liberalidad caracterizada por el desinterés perso-
nal, constituyen fuentes de paz y felicidad para los leales hijos de Dios, y
parte de la disciplina para la idoneidad celestial.
3. Devolviendo al Señor con amor y voluntariamente.
a. Un concepto de mera obligación, puede conducir al legalismo. Las dá-
divas tienen únicamente valor delante de Dios si están inspiradas en el
amor semejante al de Cristo.
b. No se debe hacer de la benevolencia sistemática una compulsión siste-
mática. Lo que Dios considera aceptable son las ofrendas voluntarias. La
verdadera generosidad cristiana brota del principio del amor agradecido.
El amor de Cristo no puede existir sin que se maniἀeste en forma pro-
porcional hacia aquellos a quienes él vino a redimir. El amor de Cristo
debe ser el principio dominante del ser, que rija todas las emociones y
todas las energías... Cuando tal sea el caso, no se necesitarán llamados
conmovedores para quebrantar su egoísmo ni despertar sus simpatías
dormidas para arrancar ofren-das en favor de la preciosa causa de la ver-
dad. (JT1, p. 376)
c. Las ofrendas voluntarias y el diezmo constituyen la renta del evangelio.
Dios pide cierta porción de los recursos conἀados al hombre, un diezmo;
pero deja a todos libres para decir cuánto dará de ofrenda, y si ellos quie-
ren o no dar más que esto. (JT2, p. 40).
d. El plan de redención fue enteramente voluntario por parte del Re-dentor,
y es el propósito de Cristo que toda nuestra benevolencia sea en forma
de ofrendas voluntarias... a él no le agrada tener la tesorería llena de
recursos forzados. Dios ama al dador alegre (Testimonies, T3, p. 413).
4. Debemos dar como Dios dio.
a. a) El Señor nunca nos pedirá más de lo que él mismo dio. Jamás nadie
podrá igualarle al dar. (San Juan 3: 16).
b. b) No debiéramos tener nada que nos sea tan caro y que no podamos
rendírselo al Señor. El amor de Cristo nos constriñe. (2 Corintios 5: 14).
c. c) Tan solo nos pide uno de cada siete días= el sábado y la décima par-te
de los que recibimos= el diezmo, mientras que él nos da todo, incluso la
vida, sin la cual no podríamos tener absolutamente nada de lo que tene-
mos, ni gozar de las tantas cosas que él nos da.
d. d) Quien más se beneficia es quien da, luego quien recibe. Dios no ne-
cesita de nuestros medios, los hombres sí necesitan de la salvación que
solo Dios puede dar y en la cual sus hijos regenerados pueden colaborar.
e. e) Más interés tiene Dios en nuestro corazón (Pro. 23: 26). En nuestra
vida, el tiempo y los medios es lo menos que nos pide. El corazón es lo
que hay que darle primero. La vida, el ser entero.
50
III. RESULTADOS DE UNA MAYORDOMÍA FIEL
1. ¿Qué abandonamos cuando damos todo? Cuando lo damos todo, aban-dona-
mos un corazón corrompido para que Jesús haga tres cosas en él:
b. Para que lo puriἀque.
c. Para que lo limpie con su propia sangre.
d. Para que lo salve con su incomparable amor.
2. Facilita la lucha en esta vida
a. La entrega de todas las facultades a Dios simpliἀca grandemente el proble-
ma de la vida. Facilita mil luchas con las pasiones del corazón natural y les
pone ἀn. (MJ, p. 27).
b. Quien no se entrega por entero a Dios, se ve gobernado por otro poder, es-
cuchando otra voz, cuyas sugestiones revisten un carácter completamente
distinto. El servicio a medias coloca al agente humano en el lado enemigo
como aliado eἀcaz de los ejércitos de las tinieblas. (DMJ, p. 79).
3. La vida eterna.
a. Para cada mayordomo: Cada mayordomo sabio de los bienes conἀa-dos a
él, entrará en el gozo del Señor. (CMC, p. 363).
b. Almas salvadas y la abnegación: La abnegación que practicaron a ἀn de sos-
tener la obra no es más recordada. Cuando contemplan las almas que pro-
curaron ganar para Jesús, y las ven salvadas, salvadas eternamente como
monumentos a la misericordia de Dios y al amor del Redentor, hacen reso-
nar en las bóvedas celestes exclamaciones de alabanza y de agradecimien-
to. (CMC, p. 364).
CONCLUSIÓN
1. La desobediencia trajo desarmonía y consecuencias desastrosas en el cielo (Lucifer)
y en la tierra (Adán y los hombres).
2. Cristo vino obedeciendo. Así dio todo. Dios también dio todo: lo mejor que tenía.
3. Dios nos pide: tiempo, medios, talentos, pero mayormente nos pide el corazón, la
vida, el ser entero. Quien dedica todo a Dios no hace ningún tipo de reservas, impi-
diendo el avance de la obra de Dios en esta tierra.
4. Al morar Cristo en el corazón, llena el alma de virtudes poniendo en nosotros el
amor de Dios. El amor por el mundo que perece, nos hará desprendidos y ἀeles
mayordomos.
5. Ilustración: Un pastor visitaba a una hermana para bautizarla. Repasó algunas doc-
trinas antes de hacerlo. La señora trajo luego un cajón y un hacha. Procedió a abrir
el cajón. En su interior, introducida por una ranura dejada a propósito, había una
gran suma de dinero: su diezmo ἀel de cuatro años.
6. Llamado e invitación a la congregación a consagrar todo lo que tenemos al Señor.
51

Culto de adoración
para el 16 de julio
ADORANDO CON LA ACTITUD CORRECTA
I. INTRODUCCIÓN
Saludo:
Motivación: Caín y Abel, hermanos muy diferentes. Caín era desleal y desobedien-
te. (Judas 11:1; 1Juan 3:12; Hebreos 11:4) Abel era leal y obediente. (Hebreos 11:3;
Mateo 23:35) Ambos, aprendieron, lo mismo, directamente de Dios y de sus pa-
dres.
Propósito: Mostrar a la iglesia que la adoración correcta, es la entrega completa
del corazón y producto de esta actitud es la compañía de Dios llena de bendiciones.
Texto: Génesis 4:1-4.
II. CAÍN Y ABEL PROBADOS
“El sacrificio de animales fue ordenado por Dios para que éste fuese para el hom-
bre, un recuerdo perpetuo, y un constante reconocimiento de su pecado y una
confesión de su fe en el Redentor prometido. Tenía por objeto manifestar a la raza
caída la solemne verdad de que el pecado era lo que causaba la muerte.” (Patriar-
cas y Profetas, p. 54)
1. Caín y Abel conociendo esta orden, debían presentar al Señor un sacrificio
(Minjah: en lengua hebrea equivale a una ofrenda cruenta - con derrama-
miento de sangre - para expiación de sus pecados, en adoración, entrega y
dedicación a Dios.)
2. Los dos hermanos levantaron altares semejantes, y cada uno de ellos trajo
una ofrenda.
a) Abel (Gén. 4:4)
- Presentó su ofrenda de un primogénito de lo más gordo de sus ovejas. Esto
era una disposición de él, de dar al Señor lo más escogido, debido a que este
símbolo representaba a Cristo. De esta manera, él expresaba su pecaminosi-
dad y sentía la necesidad de un substituto, para alcanzar la misericordia y el
perdón divino.
“…y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda.” (Gén. 4:4)
- Descendió fuego el cielo y consumió la víctima. Así él fue aprobado por Dios.
b) Caín (Gén. 4:5)
52
- Desobedeciendo el directo y expreso mandamiento del Señor, presento sólo
una ofrenda de frutos.
Aquí también se usa la palabra hebreo “Minjah”, que además de significar una
ofrenda cruenta de animales, también significaba una ofrenda de vegetales,
que sólo expresaba la dedicación de los recursos materiales. Con esta actitud
Caín no aceptaba el medio provisto por Dios, que es Cristo, para recibir el
perdón divino.
La dedicación de los recursos materiales, sin que primero haya una entrega de
la vida a Cristo no es aceptable para Dios. Una entrega de la vida a Cristo, sin
una dedicación de los recursos materiales no está prevista en el plan de Dios.
- Caín reconoció parcialmente y a regañadientes los derechos de Dios sobre él.
- Un espíritu secreto de resentimiento y rebelión lo movió a responder a las ór-
denes de Dios, según su propia elección, antes que seguir el plan establecido
por el cielo.
- Obedeció en apariencia, pero su forma de proceder revelaba un espíritu de-
safiante.
- Se propuso justificarse a sí mismo por sus propias obras. Ganar la salvación
por sus méritos personales, rehusando reconocerse como pecador que nece-
sitaba de un Salvador.
- Consideró que era conveniente apaciguar y eludir la ira divina mediante una
ofrenda, aunque la ofreciera de mala gana.
- No aceptó el cumplimiento parcial y formal de los requisitos explícitos de Dios
no es sustituto de la verdadera obediencia y contrición de corazón.
- Ofreció a Dios, ofrendas sin valor e inaceptables, Fue un intento de ganar la
salvación por las obras.
III. DIOS MIRÓ CON AGRADO A ABEL PRIMERO, DESPUÉS A SU OFRENDA (Gén. 4:4)
1. El sacrificio de Abel fue consumido por el fuego divino. Esta es la forma en que
Dios le dijo: te acepto, has sido perdonado.
a) Su entrega a Cristo fue aceptada.
b) Sus pecados fueron perdonados.
c) Abel entró en el agrado divino.
d) Dios está primero interesado en la limpieza y purificación del ofrendante,
habilitándolo así para ser un canal de bendición. Después viene la ofren-
da como una consecuencia, en forma espontánea, voluntaria y con amor.
IV. DIOS NO MIRÓ CON AGRADO A CAÍN Y ASU OFRENDA (Gén. 4:5)
1. Caín notó la ausencia de una señal visible del agrado de Dios y de la aceptación
de su ofrenda.
53
 a) Como resultado de este rechazo divino, se llenó de una ira concentrada y
temeraria. Sintió un fiero resentimiento contra su hermano y contra Dios.
b) Caín no dejo que el Espíritu de Dios trabajase en él. No sintió dolor por
su pecado, no sintió la necesidad de hacerse un autoexamen ni de pedir
perdón. Se convirtió en un pecador contumaz.
c) Dios, rechazó su ofrenda, pero no lo rechazó a él. Con misericordia y
paciencia le dio otra oportunidad. (1 Juan 3:12). Las obras de Caín eran
malas.
2. Cuando el ofrendante no se entrega a Cristo, reconociéndolo como a su Sal-
vador personal, su ofrenda no es aceptada por Dios. Por otro lado, es erróneo
creer que una dedicación de los recursos es todo lo que Dios quiere.
V. EL DONATIVO SIN EL DONANTE NO TIENE NINGÚN VALOR (2 Cor. 8:1,3-5)
Son Ofrendas inaceptables
1. “…Se dieron primeramente al Señor, y luego a nosotros, por la voluntad de
Dios”. (2 Corintios 8:5)
a) La dádiva de los macedonios, así como la de Abel, procedía de corazones
convertidos y entregados a Cristo. Se dieron a Cristo primero, luego die-
ron sus ofrendas.
VI. CONCLUSIÓN
1. Abel primero se entregó al Señor y expresó su entrega a través del cordero
inmolado sobre el altar. Él se entregó a Cristo y Dios acepto su ofrenda.
2. Los macedonios se entregaron a Cristo primero y Dios aceptó sus ofrendas.
3. Caín no se entregó a Cristo, por lo tanto su ofrenda fue rechazada por Dios.
4. Primero es la entrega a Dios, después viene la ofrenda y con seguridad Dios
aceptará la ofrenda y la multiplicará.
Llamado: ¿Cuál es su actitud actual hermano? ¿Podría usted hoy entregarse
totalmente a Cristo? Deje que Cristo posea su vida entera y que Él ponga
en usted el amor y la disposición de dar ofrendas, sin tener necesidad que
nadie lo presione para dar usted espontáneamente dará al Señor con alegría,
considerando que es un privilegio dar su ofrenda. Entonces el Señor lo
aceptará a usted y a su ofrenda, así como lo hizo con Abel. La consagración de
la vida incluye la consagración de los recursos.
Tome usted hoy una buena decisión y Dios lo mirará con agrado a usted y a
su ofrenda.
Oración.

- Fluyeron espontáneamente.
- Se entregaron junto con sus donativos.
- El cristiano que da su corazón a Dios no retiene nada.
- El donativo sin el donante no tiene ningún valor.
- El que se entrega a sí mismo sin reservas, no vacilará en dar también
sus posesiones.
- Los macedonios como ejemplo para nosotros permitieron que Dios
dirigiera sus vidas, y la voluntad divina se convirtió en la voluntad
suya.
- La gracia de Dios movía sus corazones a dar con generosidad y sa-
crificio.
- Cristo implanta un espíritu generoso que no necesita que le hagan
presiones para dar. Los macedonios tenían una buena disposición,
tanto en la mente como en el corazón, que se manifestaba en mucha
generosidad.
- Su tendencia era a excederse dando. Daban espontáneamente sin
que se les recordará.
- Ellos pedían que se les diese el privilegio de participar con sus ofren-
das para los santos de Jerusalén.
- Su espíritu demostraba completa abnegación y dedicación a la obra
del Señor.

54 55

Culto joven
para el 16 de julio
SED LLENOS DEL ESPÍRITU
I. INTRODUCCIÓN
1. Saludo.
2. Motivación:
a. Todos los hijos de Dios son nacidos del Espíritu; pero es algo distinto se
llenos con el Espíritu.
b. ¿Qué quiere decir, ser llenos del Espíritu?, ¿Acaso el Espíritu Santo es
como el agua que llena un vaso o un balde? Ser llenos significa que Él nos
POSEE EN FORMA COMPLETA.
c. Cuando la vida espiritual es tibia, es porque el Espíritu Santo aún no tomó po-
sesión total de la vida. Así, no podemos ser victoriosos en nuestro crecimiento
espiritual, como tampoco lo seremos en nuestra testificación por Cristo.
3. Propósito: Mostrar a la nuestros jóvenes que después de la conversión del
creyente. Dios desea llenarlo(a) completamente del Espíritu Santo, así como
aconteció con los apóstoles.
4. Texto: Efesios 5:18 “…Sed llenos del Espíritu”.
II. LOS APÓSTOLES ESTABAN LLENOS DEL ESPÍRITU SANTO
1. Pedro: Hechos 4:8 “Entonces, Pedro, lleno del Espíritu Santo…”
2. Esteban: Hechos 6:5; 7:55 “…hombre lleno de fe y del Espíritu Santo”
3. Bernabé: Hechos 11:24 “Porque era varón bueno y lleno de Espíritu Santo”
4. Pablo: Hechos 9:17 “Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre
él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que te apareció en el camino
y por donde venias, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del
Espíritu Santo”.
5. Los Apóstoles: Hechos 2:4 “Y fueron todos llenos del Espíritu Santo”
6. La Iglesia: Hechos 4:31 “… el lugar en que estaban congregados tembló y todos
fueron llenos del Espíritu Santo”.
III. PARA SER LLENOS DEL ESPÍRITU SANTO ES NECESARIO CUMPLIR CINCO CONDI-
CIONES
56
“Cristo prometió el don del Espíritu Santo a su Iglesia, y la promesa nos per-
tenece a nosotros tanto como a los primeros discípulos. Pero, como toda otra
persona, nos es dada bajo condiciones”. DTG. Pág. 626
1. La Primera es la ENTREGA: Hechos 1:14; Marcos 8:34 “Mientras los discípu-
los esperaban el cumplimiento de la promesa, humillaron sus corazones con
verdadero arrepentimiento y confesaron su incredulidad”. (Los Hechos de los
Apóstoles, pág. 29)
“Hay muchos que creen y profesan aferrarse a la promesa del Señor; hablan
acerca de Cristo y acerca del Espíritu Santo, y sin embargo no reciben beneficio
alguno. No entregan su corazón para que sea guiado y regido por los agentes
divinos. Quieren manejarse así mismo. Esta es la razón por la cual no reciben el
don celestial”. (DTG, pág. 626)
2. La Segunda es UNA VIDA CONSAGRADA: Hechos 2:44-47; 4:32-35
“No hay limite a la utilidad del que, poniendo a un lado el yo, permite que el
Espíritu Santo obre sobre su corazón y vive una vida enteramente consagrada
a Dios”. (SC, pág. 315)
3. La tercera es TENER UNA DISPOSICIÓN PARA SERVIR COMO TESTIGO DE CRIS-
TO
“El Espíritu Santo será derramado sobre todos que están pidiendo el pan de
vida para darlo a los vecinos”. (SC, pág. 312)
Los primeros discípulos entendieron que la testificación era motiva por dos
cosas:
a. Su experiencia con Jesús era tan fuerte e impactante en ellos que no po-
dían callar. 1 Juan 1:1,3
b. También consideraban que la testificación era un asunto de obediencia.
Hechos 5:29, 32
“El espíritu Santo ha sido dado a los que le obedecen”
“Cuando tengamos un Pueblo iluminado que conozca por experiencia lo
que significa ser colaboradores de Dios. Cuando la mayor parte de la Igle-
sia colabore con Dios. Cuando nos hayamos consagrado plenamente y de
todo corazón a Dios. Dios lo reconocerá por un derramamiento sin medida
de su Espíritu”. (SC, pág. 314)
4. La cuarta es LA ORACIÓN PERSEVERANTE
En la experiencia de la iglesia primitiva y de los apóstoles, el Espíritu Santo
siempre descendió como resultado de la oración ferviente.
a. Hechos 1:14 “Unánimes en oración y ruego” pidiendo el Espíritu Santo.
b. Lucas 11:13 “El Padre otorga el Espíritu Santo a quien se lo pide”
57
 c. Hechos 3:1 “Habiendo ellos orado, el lugar donde estaban consagrados
tembló y todos fueron llenos del Espíritu Santo”.
¿Cuál era el contenido de sus oraciones?
“Los discípulos oraron con intenso fervor pidiendo capacidad para encontra-
se con los hombres y en su trato diario hablar palabras que pudieran guiar
a los pecadores a Cristo. Poniendo aparte toda diferencia: todo deseo de
supremacía, se unieron en estrecho compañerismo cristiano”. (HA, pág. 30)
d. La palabra “UNANIMES” (usada 6 veces en el AT) expresa la unidad de
corazón y mente, oraron juntos con el mismo propósito.
5. La quinta es UNA ACTITUD DE HUMILLACIÓN, ARREPENTIMIENTO, CONFE-
SIÓM Y PERDÓN.
“Mediante la confesión, la humillación, el arrepentimiento y la oración fer-
viente nos corresponde cumplir las condiciones en virtud de las cuales ha pro-
metido Dios concedernos su bendición. Solo en respuesta a su oración debe
esperarse un reavivamiento”. (MS, T 1 pág. 141)
IV. CONCLUSIÓN:
1. Más de 500 creyentes vieron al Señor después de su resurrección y antes del
Pentecostés. (1 Corintios 15:6) Sin embargo sólo un grupo de 120 personas
compuesto por apóstoles, ciertas mujeres y algunos creyentes, perseveraban
en oración y ruego. De modo que solo 1 de cada 4 esperaban como el Señor
les mandó. (Hechos 1:13-15)
“Tal vez encontrar animo en este incidente, en vista de las condiciones y
tendencias de hoy. Si esperamos que toda la iglesia reciba la lluvia tardía,
ese día nunca llegará”. (La Venida del Consolador, pág. 102)
2. Cada día podemos recibir un bautismo diario del Espíritu Santo. Cumplamos
con las 5 condiciones constantemente.
“Mañana tras mañana, cuando los heraldo del evangelio se arrodillan
delante del Señor y renueven sus votos de re consagración, él les con-
cederá la PRESENCIA DEL SU ESPÍRITU con PODER VIVIFICANTE Y SANTI-
FICADOR. Y al salir para dedicarse a los deberes diarios tienen seguridad
de que el agente invisible del Espíritu Santo los capacite para ser colabo-
radores de Dios”. (Los Hechos de los Apóstoles, pág. 46,47)
3. Con la presencia constante y permanente del Espíritu Santo en nuestras vidas;
solo así podremos reconocer y valorar lo que le pertenece a Dios, y nuestra
fidelidad será a prueba de fuego.
4. LLAMADO: Dios nos invita a vivir junto a Él a través de su Espíritu Santo, y es
un privilegio para quienes lo aceptan. Dios quiere llenar el vacío que existe en
cada persona y que nadie lo va suplir. Esta es la oportunidad de decirle a Dios
quiero tu Espíritu Santo. ¿Cuántos quieren abrir hoy el corazón a Dios? Y em-
pezar a vivir una vida de consagración, oración y entrega diaria para que esta
promesa maravillosa sea una realidad en tu vida?
5. ORACIÓN
58
Culto de adoración
para el 20 de agosto
Un Mandato Terrenal con Pro-
pósitos Eternos
I. Introducción
a. Saludo:
b. Propósito: Mostrar a la iglesia que Dios pide a su pueblo “La Adoración Com-
pleta”, y parte de la adoración es la entrega fiel de los diezmos.
c. Ilustración:
Un joven le pregunta a su pastor:
- Pastor, hay algo que no comprendo de Dios; si la Biblia me dice que Dios lo
puede todo, que hizo el mundo a partir de la nada ¿Por qué constantemente
la biblia lo presenta pidiendo a hombres que cumplan sus propósitos? Si Él es
todo poderoso porque no lo hace sin la intervención del hombre. Por ejemplo:
Cuando quería liberar a su pueblo de Egipto, llamo a Moisés; cuando quería
enviar un mensaje a su pueblo enviaba a un profeta; la misión de predicar el
evangelio se la dejo al hombre ¿Cuál es la intención de Dios al pedir cosa al
hombre? – el joven termino haciendo una pregunta más – y si lo puede todo
¿Por qué Dios nos pide el diezmo? ¿Acaso no puede tomar las cosas sin necesi-
dad de pedirnos y si es todo poderoso porque necesita del diezmo?
¿Qué le responderías a este joven?
Todo lo que Dios le pide al hombre tiene un propósito eterno. Visto desde un
punto de vista terrenal pareciera que no tendría sentido. Una de las cosas que
Dios estableció como mandato para su pueblo fue la devolución del Diezmo.
Detrás de este mandato hay un propósito y principio eterno, el cual debemos
entender y es la adoración.
d. Texto bíblico: Génesis 28:22, Levítico 27:30 y 32.
II. PROPÓSITO DEL ESTABLECIMIENTO DEL DIEZMO EN LA BIBLIA
1. Adoración: la adoración es una dinámica entre Dios y el hombre, Dios la pro-
picia y el hombre acude a su invitación, Dios llama y el hombre responde, Dios
habla y el hombre en respuesta entrega. “Parte de la adoración es el diezmo”.
• Devolver los diezmos es un acto por medio del cual reconocemos que toda
adoración pertenece a Dios. “... adorad a aquel que hizo el cielo y la tie-
rra, el mar y las fuentes de las aguas.” Apoc.14:7
59
 • En la rebelión en el cielo Lucifer quiso desviar la adoración que era para
Dios hacia él.
• Utilizar el Diezmo para hacer nuestra voluntad es desviar la adoración que
debe ser para Dios.
• Adoraremos a Dios por la eternidad.
2. Eliminar el egoísmo del corazón:
• Cuando practicamos la fidelidad en toda su plenitud, permitiendo que
Dios tome el control de nuestro corazón y de nuestra vida, el egoísmo no
tiene lugar. Al diezmar y ofrendar, Dios nos da la oportunidad de eliminar
el egoísmo de nuestro corazón; y así, prepararnos para la eternidad.
• Elena de White, en visión escucho las palabras del enemigo cuando dirigía
una reunión para ver estrategias de como impedir que la obra de Dios
avance. Ella escribió lo que dijo en enemigo:
“Cuanto más medios obtengan ellos, más perjudicarán nuestro reino arre-
batándonos nuestros súbditos. Preocupadlos más por el dinero que por la
edificación del reino de Cristo y la difusión de las verdades que nosotros
odiamos, y no necesitamos temer su influencia; porque sabemos que toda
persona egoísta y codiciosa caerá bajo nuestro poder, y finalmente será
separada del pueblo de Dios” (Testimonios para Ministros, p. 482)
3. Reconocer a Dios como “El Señor”:
• Lucas 6:46.
• Para muchos, el dinero es su señor; hasta dicen haber aceptado a Jesús
como su salvador, pero no están dispuestos a aceptarlo como Señor. Sin
embargo, la propia negativa de aceptarlo como su Señor indica que tam-
poco lo aceptaron como su salvador.
Cuando un corazón realmente se abre y recibe a Jesús como su Salvador,
también lo recibe como Señor.
• Devolver el diezmo es resultado de haber reconocido a Dios como nuestro
Señor.
4. Reconocer que Dios es Creador y sustentador:
• Hageo 2:8 y Salmos 24:1.
• No debemos sentirnos orgullosos de las cosas o bienes materiales que
poseemos; cuando en verdad nada pertenece al hombre. Necesitamos
recordar siempre esta gran verdad. Todo este mundo pertenece a Dios;
inclusive nosotros mismos. Le pertenecemos por creación, gracia y reden-
ción. Por su misericordia despertamos cada nuevo día.
• Devolver el diezmo es na manera de reconocer que todo lo que somos y
tenemos es por voluntad de Dios, sin Él no tendríamos nada.
60
• Hacer lo contrario es decir que lo que somos y tenemos es
por nuestra propia fuerza.
III. El diezmo y el cumplimiento de la misión:
a. Elena de White dice: “Es Dios quien bendice a los hombres con propiedades, y
lo hace a fin de que puedan dar para el avance de su causa. Él envía la luz del
sol y la lluvia. El hace crecer la vegetación. El da la salud y la habilidad de adqui-
rir medios. Todas nuestras bendiciones proceden de su generosa mano. A su
vez, quiere que los hombres y mujeres manifiesten su gratitud devolviéndole
una parte como diezmos y ofrendas.” HA 61.
b. ¿Cómo se distribuyen y utilizan los diezmos del Señor?
Destino Distribución Propósito
División Sud Americana 10% Predicación del evangelio en Sudamérica y el mundo
Unión Peruana del Sur 10% Predicación del evangelio en el centro y norte del Perú
Publicaciones 1% Predicación del evangelio a través de la página impresa
Nuevo Tiempo Suda- Predicación del evangelio a través de los medios de co-
1%
mérica municación.
UPeU - Facultad de Predicación del evangelio a través de la formación de
1%
Teología pastores.
Educación 1.5% Predicación del evangelio a través de la red educativa
Predicación del Evangelio a través de proyectos de in-
Proyectos Especiales 2%
fluencia y alcance nacional.
Predicación del evangelio a través de: Sosteniendo el
Asociación/Misión 73.50% ministerio pastoral, apertura de nuevos distritos, profe-
sores de Biblia y proyectos misioneros del campo local.
IV. Conclusión
Dios pide adoradores, que escuchemos su Palabra, la obedezcamos y respondamos
con una entrega completa, por la Adoración a Dios es completa.
Adoramos a Dios con nuestra mente, adoramos a Dios con nuestra vestimenta,
adoramos a Dios con nuestro tiempo, Adoramos a Dios con las buenas relaciones
dentro de la familia, adoramos a Dios con los diezmos y ofrendas.
Parte de nuestra respuesta en la adoración es la entrega del diezmo.
No es un mandamiento, por no entregar el diezmo la persona no se salva, pero Dios
salvará a los fieles, porque en nuestra Adoración Completa a Dios, el desea que no
reservemos nada, y que nuestra adoración sea completa.
Llamado:
Estamos viviendo momentos cuando la gente no desea adorar a Dios, pero esta
mañana un pueblo vino a este lugar para adorarle, por tanto te invito a que no
reserves nada a Dios en el deseo de querer ser un fiel adorador.
61
 Al oír su voz de devolver los diezmos, más que dinero estas reconociendo a Dios
como tu Señor, tu creador y sustentador. Todo lo que eres y lo que tienes se lo de-
bes a su misericordia, aunque no merezcas nada Él confió en mí.
Quieres, devolver los diezmos, adorar a Dios reconociéndolo como mi Señor, Crea-
dor y Sustentador; que la predicación del evangelio pueda fortalecerse como resul-
tado de la fidelidad.
Y en este momento solemne cuando las tinieblas quieren oscurecer la esperanza
Gratitud, Una Expresión de Amor
de salvación a la gente, es cuando debe levantarse un pueblo adorando con lo que
Dios pidió para el cumplimiento de la predicación.
I. INTRODUCCIÓN
Romanos 13:11 “Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del
sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando
creímos”.
Oración.
II. CLAMOR DE LOS LEPROSOS (Lucas 17:11-13)
62
Culto joven
para el 20 de agosto
a. Saludo: Queridos amigos y hermanos, les saludo en el nombre de nuestro Se-
ñor Jesucristo, recordando sus palabras que dicen: “Donde estén reunidos dos
o tres en mi nombre, ahí estaré”, pues prestemos atención el día de hoy a su
presencia.
b. Motivación: Hace algunos meses leí un informe acerca de los modales. En este
informe se hablaba acerca de algunas palabras claves, que según decía, “abri-
rán las puertas de toda persona de éxito”. Son palabras que pueden parecer
insignificantes, pero que encierran el valor y la dignidad de una persona. Una
de estas palabras es “Gracias”. Uno nunca debe dejar de agradecer.
A veces nos sentamos en la mesa y “exigimos” que se nos atienda, ya sea a la
madre o a la esposa, pero cuántos, luego de recibir esa atención, agradecen
por el acto. La gratitud es una virtud que se está perdiendo en el tiempo de
manera muy rápida, y muy pocos hacemos algo por rescatarla.
c. Propuesta: Durante los siguientes minutos analizaremos la historia de un
hombre que, a pesar de todas las cosas por las cuales pasaba, supo valorar
el esfuerzo divino para su transformación y respondió agradecidamente a su
bienhechor.
d. Texto: Lucas 17:11-19.
a. Empezamos la última sección del evangelio de Lucas llamada “La jornada ha-
cia Jerusalén”. Nos dirigimos una vez más a Betania y al momento que precede
a la entrada triunfal en Jerusalén. La noticia que Jesús se dirigía a Jerusalén
causaba una gran expectativa en los alrededores y en la misma ciudad.
b. Jesús pasaba “en medio de Samaria y Galilea”. Algunos comentadores toman
esta declaración de Lucas como una imprecisión. Es cierto que para pasar en-
tre Samaria y Galilea uno debe dirigirse de Este a Oeste, y no de Norte a Sur,
que debería ser para dirigirse a Jerusalén. Sin embargo, la palabra griega “dia-
meson” traducida aquí como “en medio de”, también puede significar “entre”
pero dando la idea que se encontraba “en el límite entre” Samaria y Galilea.
c. Lucas da la idea que por el camino hacia Jerusalén, en el límite entre Samaria
y Galilea, existía una villa, la cual no menciona su nombre. Ésta era una ca-
racterística de Lucas (5:12; 9:52; 11:1; 13:10; 14:1; etc.). Lucas en este relato
63
 muestra en énfasis en el milagro y no en el lugar.
d. Diez hombres leprosos que habían escuchado que Jesús pasaría por ese ca-
mino se reunieron y vinieron al encuentro. Era inusual que tantos hombres
leprosos juntos anduviesen juntos. Hay un registro en el AT donde e relata
una concentración de cuatro leprosos (2Rey 7:3). Pero en esta reunión de 10
leprosos estaban juntos para un evento especial.
e. El nombre hebreo de lepra, “sara’at”, significa “ser castigado por Dios”. Esta
enfermedad era considerada como un azote de Dios.
Cuando alguien se le detectaba alguna forma de lepra, era el sacerdote el en-
cargado de declararlo leproso luego de examinarlo (Lev 13:1-44). Es entonces
cuando el leproso debía ser expulsado fuera del campamento para vivir en ca-
vernas (Números 5:2; Lev. 13:45,46). Perdía todos sus derechos, propiedades
y hasta la familia no podía acercarse hasta que sea sanado. Cuando caminaban
hacían sonar unas campanas para que nadie se acercara. Por esta razón los
diez leprosos “se pararon a distancia” (Lucas17:12).
f. La lepra representa al pecado que no solo degrada al ser humano sino tam-
bién lo despoja de sus valores y principios dejándole arruinado, también lo
separaba de la presencia divina y lo alejaba del único que es capaz de resolver
el problema del ser humano.
g. La sabiduría de estos hombres se ve reflejada en su clamor desesperado.
La misma expresión griega era “fonen” significa: “Tomaron la iniciativa”. Estos
10 leprosos tomaron la iniciativa y gritaron, pues comprendieron que Jesús
era la única alternativa de salvación.
Aplicación
h. Ilustración: En cierta oportunidad conocí a un hombre que había caído hasta
lo más profundo del pecado. Había perdido todo lo que un día lo hizo feliz: Un
buen hogar, una hermosa esposa, unos preciosos hijos, un trabajo rentable,
todo porque el enemigo echó mano de él y lo llevó hasta el oscuro mundo
del alcohol. Uno nunca pensaría que un hombre prominente y exitoso podría
truncar sus planes y proyectos. Pero ahí está él, arruinado y sin familia, dur-
miendo en la calle, viviendo de cantina en cantina. Cuando lo encontré me dio
lastima. Me contó llorando la peor tragedia de su vida. ¿Qué decir a alguien
frente a ese cuadro? Uno podría enseñarle cómo salir de ese vicio con terapias
o a través de un centro de rehabilitación. Pero ¿no es Cristo la única salida?
i. Tal vez me digas: “yo no tengo vicios, o yo no soy un borracho”. Sin embargo
hay desgracias tan malas o hasta peores que ésta. El egoísmo, la envidia, los
bajos instintos, los “deseos de la carne”, consumen la vida por dentro aunque
por fuera mostremos apariencia de piedad. Andamos por la vida con el temor
que nos descubran y nos refugiamos en hacer cosas buenas y caritativas.
j. Sin embargo, hay una salida. La misma esperanza que hacía clamar a aquellos
leprosos, el mismo anhelo por ser restaurados, es el que nos puede conducir
a Cristo quien es la única salida. Tan solamente al mirar a la cruz y clamar por
salvación. Él actúa y nos limpia de todo pecado.
64
III. LA OBRA DE DIOS ACTUANDO (Lucas 17:14)
Veamos como Dios actúa frente al sufrimiento del ser humano.
a. Cuando Jesús los vio, a pesar que ellos “se pararon lejos” (Lucas 17:12c). Esta
observación de Jesús a los leprosos encierra más que solo “ver”. Jesús ya sabía
quiénes eran. Sabía qué enfermedad padecían y qué frustraciones y comple-
jos tenían por causa de esta enfermedad. A pesar que ellos se encontraban
lejos, Jesús los sentía cerca.
b. No hay distancias para Jesús. No hay barreras cuando Él quiere hacer su obra.
Cuando ve la necesidad, cuando ve el sufrimiento humano, simplemente ac-
túa. Solo que muchas veces espera que “clamemos” a él como lo hicieron los
leprosos.
c. La orden de Jesús a aquellos varones fue directa. Les dijo que se muestren a
los sacerdotes. Solamente un leproso debía ir a un sacerdote cuando veía las
heridas sanadas y quería ser considerado limpio. Sin embargo, los leprosos
veían aún las llagas de esta horrible enfermedad. “¿Cómo presentarme ante
el sacerdote con estas llagas? Me avergonzará ante la gente y me echará de su
presencia”, tal vez pensaría alguno de los leprosos. No veían sus llagas sana-
das, sin embargo obedecieron. Se ponía en juego no solo la obediencia, sino la
fe. La fe no puede ir separada de la obediencia, ni tampoco al revés.
d. “Mientras iban”, o también se podría traducir como “cuando empezaron a ca-
minar”. Era necesario que caminaran. Era necesario que pusieran de su parte.
Es que Dios no puede obligarnos a aceptarlo. Él espera que nosotros decida-
mos aceptarlo. La obediencia a Dios y a sus mandamientos es la forma cómo
mostramos nuestra fe en Él.
e. De la misma forma Dios espera que nosotros le obedezcamos. Pero esta obe-
diencia no está cimentada por la fuerza. Esta obediencia está cimentada en
nuestra fe que tengamos en Él.
Aplicación
a. Ilustración: Hace algún tiempo vivía un famoso malabarista. Era conocido por
sus hazañas fabulosas. Cierto día hizo una de las más maravillosas demostra-
ciones. Tendió una cuerda entre dos de los edificios más grandes de la ciu-
dad de New York. Luego reunió a una gran multitud y les preguntó: “¿Cuántos
creen que puedo pasar por esta cuerda hacia el otro extremo?”. Y la gente que
conocía a este hombre respondió afirmativamente.
b. Entonces se puso a caminar. Cuando llegó al otro extremo, la gente entusias-
mada gritó y coreó su nombre. Luego de ello, cogió una carretilla y nuevamen-
te hizo la misma pregunta: “¿Cuántos creen que puedo pasar al otro extremo
por esta cuerda pero llevando esta carretilla?”, a lo que la gente respondió
como en la primera oportunidad.
c. La hazaña se repitió y nuevamente la gente con algarabía gritaba su nombre.
Cuando nuevamente tomó la carretilla e hizo la pregunta de siempre: “¿Cuán-
tos creen que yo puedo pasar de nuevo, con los ojos cerrados hacia el otro
65
 extremo y con esta carretilla?”. La gente creía que ésta era una hazaña mucho Aplicación
mayor a las otras, pero aun así gritaron: “tú puedes”.
Ilustración: Una de las cosas que nos enseña la madre es a saber agradecer.
Entonces él les dijo: “Si todos creen que puedo hacerlo, quiero la primera per-
sona que me acompañe y se siente en la carretilla y podamos cruzar”. Ellas no esperan que nosotros devolvamos lo que ellas invirtieron en nosotros.
Simplemente ellas se esfuerzan porque nos aman. No esperan agradecimien-
Solo se sintió un silencio, sin que nadie tuviera el valor de pasar. to, a pesar que ellas se lo ganaron.
Lo mismo pasa a todos aquellos que dicen que creen en Jesús, pero que no De igual forma, nuestro Señor Jesucristo se ganó nuestra gratitud al entregar
están dispuestos a obedecerle. su vida por nosotros. Y se lo sigue ganando por los cuidados que nos brinda, y
porque siempre está dispuesto a ayudarnos.
IV. LA RESPUESTA DEL SAMARITANO
V. CONCLUSIÓN
a. Los diez leprosos tenían las mismas características:
Hace mucho tiempo un hombre perdió todo por consecuencia de dejar a Cristo.
1. Todos estaban afectados con la misma enfermedad. Sus seres más queridos lo abandonaron. El enemigo de Dios lo dejó en la ruina. Sin
embargo, Dios siempre estaba dispuesto a sacarlo de ese lodo. Dios siempre está
2. Todos habían oído acerca de Jesús y creían que podría sanarles. dispuesto y nos ayuda.
3. Todos clamaron a Jesús y lo llamaron Maestro. Sin embargo, le costaba decidir por entregar su vida a Cristo. A pesar que sentía
4. Todos obedecen el mandato de Jesús y deciden ir a los sacerdotes. cómo Dios lo ayudaba. Sin embargo, no valoraba todavía lo que Dios estaba ha-
ciendo por él.
5. Todos fueron sanados mientras caminaban.
Apelación: Tal vez tú dirás: “pero yo vengo a la iglesia, doy mis diezmos, hago vida
¿Cuál fue entonces la diferencia? Uno de ellos, quien era samaritano y misionera, y todo lo que me piden los dirigentes de Iglesia”.
quien debía caminar más lejos para ir a un sacerdote para ser considerado
limpio, regresó. Pero la pregunta que yo te haría es: ¿lo haces por agradecimiento a Dios o porque
es una obligación como miembro de iglesia? Con la misma fuerza que le pides a
b. La palabra u`pe,streyen (volver, retornar), ésta es una palabra favorita de Dios por los cuidados, por algún milagro o por tu conversión le agradeces.
Lucas, para “regresar, volver atrás”, y en casi todos los casos es en un
sentido positivo. Aunque muchas veces “regresar” tiene un aspecto ne- Llamado: Si has sentido hoy que en verdad Jesús te ama mucho y has experimenta-
gativo, sin embargo, esta palabra encierra un regresar para algo bueno do un cambio en tu vida y no has sido agradecido a Dios, hoy puede ser el comien-
(4:14; 7:10, etc.). zo de esa experiencia. Hoy puedes pararte y decirle: “Señor, perdóname si hasta
hoy no he sido agradecido. Ayúdame a serlo, Ayúdame a hacer las cosas como tú
c. El samaritano vio sus heridas que estaban sanadas. A pesar que para serlo quieres que las haga. Si ése es tu deseo, hoy quiero que te pongas en pie para orar
debía ir primero al sacerdote, no esperó para agradecer a Cristo. Se sentía juntos.
curado pese a que el sacerdote no dio su veredicto. Es que para el sama-
ritano era más importante el sanador que las tradiciones o ritos. Haber Oración.
sentido el cuidado de Dios, haber sido rescatado del horror que produce
el pecado y, más que todo, haber tenido un encuentro con Jesús, era más
importante que las mismas tradiciones. No solo se sintió físicamente sa-
nado, sino también espiritualmente.
d. Con la misma fuerza que había clamado misericordia a Jesús. Con el mis-
mo ánimo que le había impulsado acercarse a Él para ser sanado.
Con esa misma actitud regresó alabando y glorificando a Dios hasta caer
de rodillas ante Él.
e. Cuán triste debe sentirse Jesús, cuando lo ignoramos. A pesar que Él siem-
pre está dispuesto a resolver nuestros problemas, muchas veces cuando
recibimos el milagro no nos acercamos para agradecerle. O, cuando le agra-
decemos, no lo hacemos con la misma fuerza, que cuando le pedimos.

66 67

Culto de adoración
para el 10 de setiembre
La Verdadera Riqueza
I. INTRODUCCIÓN.
a. Saludo: Feliz sábado mis apreciados hermanos. Es un gran gozo ver una iglesia
comprometida con la adoración a Dios y ver a cada familia que vino a entregar
la vida y los planes a Dios.
b. Propósito: Mostrar a la iglesia que la verdadera riqueza es la que Cristo pone
en el corazón y esta es para vida eterna.
c. Texto: San Lucas 12:13-21
II. CRISTO ARREGLA EL PROBLEMA DE FONDO, NO EL PROBLEMA SUPERFICIAL.
1. Para que comprendamos mejor el propósito de esta parábola de Jesús, es
necesario que entendamos en qué contexto fue escrita.
2. Jesús se encontraba nuevamente hablando a una multitud de personas (ver-
sículo 1)
3. Su sabiduría y autoridad era apreciada por todos los presentes. Todos veían en
Él a un hombre sabio. Sus argumentos eran infalibles.
4. La multitud, vio en Cristo Jesús la solución para sus problemas familiares. “Di
a mi hermano que parta conmigo la herencia”. (Vers. 13)
5. En aquella época era costumbre que el hermano mayor recibiese el doble de
la herencia, con esto no estaba de acuerdo aquel hombre.
6. El hombre interesado en solucionar su problema quería que Jesús, con toda su
sabiduría e influencia lo ayudase en esta situación.
7. Quería beneficiarse directamente del poder de persuasión de Cristo.
a. Él no procuraba un juez imparcial, sino uno que lo favoreciese.
b. Él fue a Jesús, no para buscar perdón. No para buscar paz. No para buscar
salvación. No con sed y hambre de pan de vida. Fue a Jesús con una mente
carnal.
8. Jesús no le atendió de la manera que este hombre quería ser atendido. Como
siempre, Jesús, aprovechó la oportunidad para quitar de la mente de aquel
pobre ser las cosas superficiales y le llevó a un conocimiento más profundo e
hizo ver las cosas espirituales.
68
9. Aquel joven se encontraba infeliz por no recibir la misma cantidad que su her-
mano. Pensaba que la riqueza le podía traer más felicidad, mayor seguridad
en la vida.
Jesús procuró dar la idea correcta sobre la vida de un cristiano.
I. RIQUEZA NO ES FUENTE DE VIDA
El joven que fue a Jesús pensaba que Él era quien podía darle éxito y dinero en la vida.
1. Jesús le dijo: “La vida… no consiste en la abundancia de los bienes que posee”
(Vers. 15)
2. La seguridad de esta vida no está en las propiedades. No está en el ganado…
No está en las casa. No está en los automóviles. No está en el dinero. No está
en el oro. No está en las acciones. No está en la riqueza.
3. Jesús advirtió: Mirad y guardaos de toda avaricia”. (Vers. 15)
En otras palabras, “no dejéis que la riqueza tome cuenta de la vida”. No pen-
séis que la riqueza es la solución de todas las cosas”.
La seguridad de la vida no está en lo que se tiene, sino en lo que se es.
No en lo que pensamos que somos o tenemos, sino en lo que realmente somos.
No en la reputación, sino en el carácter.
La seguridad de esta vida está en Cristo.
4. La seguridad de la vida futura no está en lo que tenemos.
La seguridad de la vida futura está en lo que hoy somos en Cristo Jesús.
Dios aprecia al hombre no por lo que él tiene, sino por lo que él es.
Juan dice: “El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no
tiene la vida. (1 Juan 5:12)
5. Jesús quería decir: Hijo, tú estás preocupado con las cosas de este mundo. Tú
estás preocupado con las posesiones terrenales. Tú piensas que eso va hacer
feliz. Tú estás engañado. El hombre no es feliz por poseer mucho o poco. Vivir
realmente no consiste en tener muchas posesiones.
Entonces: Jesús contó una parábola (Leer: Lucas 12:16-19)
II. LA RIQUEZA SIN DIOS
1. La herencia de un hombre rico produce mucho.
Nada malo. Es Dios quien hace que las plantas crezcan. Es Dios quien da el
sol, la lluvia.
69
 “La Biblia no condena al rico por el hecho de ser rico. Tampoco declara que la
adquisición de riquezas sea un pecado, ni dice que el dinero es la raíz de todo
mal. Todo lo contrario, las Escrituras declaran que Dios es el que da el poder
para conseguir riquezas”. (Consejos sobre Mayordomía Cristiana, p. 144)
El problema del hombre de la parábola no estaba aquí.
2. Derribaré los graneros viejos.
Tal vez el problema tampoco esté aquí. El cereal tenía que ser almacenado. No
podía quedar a la intemperie.
Los viejos deben caer para que otros puedan ser construidos.
3. Construiré nuevos.
Ningún problema en construirse nuevos graneros.
El propósito era guardar la cosecha.
Dios no tiene nada contra la construcción de grandes graneros para almacenar
la cosecha.
Fue con su orientación que José, en Egipto, construyó grandes graneros para
almacenar cereales.
4. Recogeré mis frutos y mis bienes.
Tal vez el problema comienza aquí. Él consideraba todo como suyo: Mis frutos,
mis bienes.
Él no se consideraba un “administrador” de los bienes de Dios.
Consideraba todo como “suyo”.
5. Muchos bienes tienes guardados.
Aquí está un hombre que coloca su confianza en lo que tiene.
III. CONCLUSIÓN.
Aquí está un hombre que piensa que los bienes en la vida, son la razón de la
existencia.
Muchos viven en este mundo egoístamente, acumulando tesoros para sí.
Acumulan haciendas, casas, automóviles, ganado, dinero y entonces dice:
6. “Descansa, come, bebe, regocíjate”.
El rico de la parábola pensaba que había alcanzado su objetivo supremo. No
pensó en Dios. No pensó en el huérfano, en la viuda, en el enfermo, en el
afligido, en los empleados. Sólo se vio a sí mismo. Pensó en administrar su
propio bienestar.
El rico hizo del mundo su todo, olvidándose que todo lo recibió de Dios. Hizo
grandes planes para sí mismo: Bebida, comida, viajes, tierras, sexo. Pensó en
70
conocer lindas playas… bellos campos… lindas mujeres.
“Colocaré todo en ahorros y viviré tranquilo.” Viviré una vida de rey.
Te has preguntado: ¿Cuánto bien pude hacer hecho por mi familia y por otros,
y no hice? Para él no existía nadie más, menos Dios. No había vida futura. No
había cielo.
7. Dios le dijo: Necio.
Él era sabio, Dios dijo: “Necio”. Así es para Dios, eres sabio o necio.
Él pensaba que tenía mucho. Dios dijo: “Tú no tienes nada”.
El rico hizo planes para muchos años sin Dios. Los planes de Dios para él tuvi-
eron poca duración, pocas horas.
El dinero no puede dar vida. No puede comprar tiempo. No puede comprar a
Dios. No puede comprar bienes eternos.
Se olvidó que era mortal. Pensaba que era inmortal.
Acumuló para la tierra. Quedó en la tierra.
Pensaba que tenía todo. No tenía nada.
Era rico de bienes del mundo. Pobre de los bienes futuros y eternos.
Al final de todo, lo que más valor tenía, no había asegurado vida. Rechazó la
vida y escogió lo material en vez de lo espiritual. Escogió lo pasajero en vez de
lo eterno. Cosechó lo que sembró.
8. “Lo que tienes, ¿Para quién será?”.
Lo que pensaba que era “suyo” no puede usar.
Aquello que no dio espontáneamente, le fue arrebatado de otra manera.
Dios no tiene nada en contra de los ricos, recuerden que Dios da la riqueza y espera
la buena administración de ella. El problema no es la riqueza, sino la ambición a
ella. Esta parábola del rico insensato nos enseña algunas lecciones:
1. El problema no es cuanto tenemos o que tenemos, sino el uso que hacemos
de aquello que tenemos.
2. Elena de White dice: “Vivir para sí mismo es perecer…El espíritu de Satanás es
conseguir, atraer hacia sí. El espíritu de Cristo es dar, sacrificarse para bien de
los demás…” (Lecciones Prácticas del Gran Maestro, p. 234)
3. Hoy, muchos viven como el rico de la parábola. Plantan, cosechan, guardan…
dicen: descansa, come, bebe, regocíjate…
Muchos están acumulando tesoros en la tierra y quedarán en la tierra.
71
 Jesús dice: “… porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los
bienes que posee” (Lucas 1215) Culto joven
4. LLAMADO: para el 10 de setiembre
Apreciados hermanos Dios desea que seamos buenos administra-
dores de los recursos que Él nos ha dado, no haciendo tesoros en
esta tierra sino en el cielo “Vended lo que poseéis, y dad limosna;
haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se
NUEVA CRIATURA EN CRISTO
agote, donde el ladrón no llega, ni polilla destruye. Porque donde
está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.” (Lucas
12.33 y 34) INTRODUCCIÓN

Decide reconocer a Dios en tu corazón como el dador de todo re- María Durán tenía solo 15 años cuando, en 1730, fue sentenciada a la infamante torre de
curso, trabajo, ganancias. Y entrega en forma fiel lo que a Dios le la reina... el comando militar esperaba enseñarle a ella, como a los otros, la necesidad de
pertenece, el diezmo, la ofrenda, ayudar a los demás, administrando ceder a las leyes sociales y religiosas del país. María, sin embargo, no cedía. Vientos fríos
bien lo que tú puedes gastar. silbaban a través de las estrechas aberturas en la pared de más de 50 cm. de espesor
de la torre redonda. Mosquitos transmisores de ἀebre enjambraban en los pantanos
El Señor te dice, si administras bien lo que te doy “…Entra en el gozo alrededor. La gran humedad destruía tanto cuanto podía.
de tu Señor”. (Mateo 25:23)
Durante 38 años vivió en esa prisión llena de gusanos, solo fue liberada cuando tenía 53
¿Deseas entrar en el reino de Dios? años, siete años y medio antes de su muerte. María escribió: Dios nos dio las preciosas
verdades de la Biblia; a éstas importa que yo sea ἀel, y no me demuestre traidora como
5. ORACIÓN. Judas. Qué clara visión la de María!
¿Hemos estado tratando de presentarnos fieles a Dios? ¿Hemos sido fieles? ¿Somos
ἀeles aún?
Queremos analizar la vida de un hombre inἀel que, al encontrarse con Cristo, demostró
su deseo de ser una persona diferente. Este hombre fue Zaqueo.
TEXTO
Lucas 19: 1-10
I. ¿QUIÉN ERA ZAQUEO?
El nombre de Zaqueo quiere decir puro, pero así como otros, el nombre de la per-
sona no siempre revela su carácter. En el caso de Zaqueo, esta realidad se cumplió
posteriormente.
Zaqueo era un hombre rechazado por el pueblo de Jericó, pues su oficio, cobrador
de impuestos, lo tornaba insensible a las necesidades humanas, al sufrimiento, la
miseria y el hambre; y sobre todo lo volvió codicioso, deshonesto. Como jefe de
los publicanos, sin duda, estableció un convenio de manera que todos los demás
publicanos oprimiesen al pueblo, apoyándose unos en los otros en sus prácticas
fraudulentas y él recibía un porcentaje. En realidad, toda esta extorsión se tornó
una costumbre general. Con esto había un enriquecimiento ilícito y deshonesto.
No obstante a pesar que este sistema lo enriqueció ilícitamente, no era tan insen-
sible para no sentir la inḀuencia de Cristo en su corazón. Escuchó hablar de Jesús,
en todos los lugares la fama de Cristo era evidente. Escuchó que Él se dirigía a
toda persona, a toda clase social y como era de bondadoso y cortés. Fue entonces
cuando Zaqueo sintió el deseo de tener un cambio de vida.
72 73
 Zaqueo conocía las Escrituras y estaba convencido de que era injusto y deshonesto.
Quería encontrarse con Jesús. Porque siempre que hay un encuentro de un hom-
bre injusto y pecador con el Señor, algo bueno sucede.
Cuán bueno sería si reconociésemos nuestras limitaciones y, además, sintiésemos
el deseo de encontrarnos con Jesús.
San Lucas 19: 4. Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle.
Zaqueo tenía tantos deseos de ver a Cristo, que estaba dispuesto a hacer cualquier
cosa, inclusive subirse a un árbol.
Un cobrador de impuestos, una autoridad que no era bien vista, podría ser ridiculi-
zado; pero a él no le importaba, solo quería una cosa: ver a Jesús.
Es interesante notar que el deseo sincero de ver a Cristo lleva a un ser humano a
un comportamiento y actitud diferentes de las que el mundo establece y acepta.
II. ZAQUEO Y CRISTO
El sicómoro donde Zaqueo subió es un tipo de árbol que se parece a la higuera en
su fruto y a la morera en sus hojas. Son árboles de ramas bajas, que proporcionan
una buena sombra. Era común encontrar estos árboles en el camino hacia la ciudad
de Jericó. Y exactamente en este tipo de árbol, Zaqueo subió.
En aquel camino, debajo del árbol, exactamente por allí pasó Cristo y probable-
mente alguien debe haberle dicho a Cristo: Mira hacia arriba, ves a aquel hombre,
es Zaqueo, el cobrador de impuestos: Mira lo que está haciendo este deshonesto
cobrador de impuestos.
¿Ud. qué haría y diría si viese a su pastor subido a un árbol? Si fuese el anciano
o cualquier miembro que ocupase un cargo de responsabilidad en su iglesia, qué
pensaría o diría usted de esa persona?
Con seguridad diría: Él no está bien de la cabeza, tiene algún problema mental.
Piense un poco en las observaciones y críticas que se levantaron al ver a Zaqueo
trepado en un árbol.
Estamos más propensos a hacer observaciones y críticas, que a investigar las razones
que llevan al ser humano a comportarse de una manera diferente o poco común.
Pero Cristo no lo ve así. Él vio a aquel hombre en el árbol, pero mucho más de que a
un ser raro, Cristo vio la necesidad de Zaqueo, por eso rápidamente él dijo: Zaqueo,
date prisa, desciende porque hoy es necesario que pose yo en tu casa (Luc. 19: 5).
Cristo conoce las intenciones, investiga nuestro corazón y pensamientos. Él sintió
que allí estaba un hombre que se veía como un pecador, pero que también com-
prendía la necesidad de encontrar a un ser santo.
¡Cuán bueno sería si nosotros también sintiésemos esa necesidad!
Cuando Cristo vio a Zaqueo y su necesidad, solicitó que Zaqueo descendiese de
74
prisa, pues es deseo de Dios colocarse rápidamente al lado de la criatura humana
para satisfacer las necesidades del alma.
Zaqueo descendió rápidamente y Jesús fue a la casa de ese pecador.
Zaqueo solo quería ver a Jesús, sin embargo, sucedió algo más, se encontró con
Jesús. Él fue a su hogar.
Al encontrarse el ser humano con el Creador y Redentor, las bendiciones alcanza-
das son mayores de lo que pensamos y esperamos.
Quien sabe lo que nos falta para ser personas diferentes. Sin duda, en-contrarnos
con Cristo porque Él hace la diferencia.
III. CRISTO EN EL CORAZÓN DE ZAQUEO
Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hom-
bre pecador. (Lucas 19:7).
Cristo va más allá de los prejuicios humanos. Él quiere entrar en el hogar, en la vida
del ser humano, aunque sea el mayor pecador.
Cristo expresó su deseo de ir a la casa de Zaqueo. Nuestro Señor no lo acusó, no lo
criticó, mi le hizo observaciones respecto a su falta de honestidad.
Solo por el hecho de estar delante de un Ser santo, Zaqueo fue impre-sionado con
la necesidad de ser ἀel a Dios y a sus semejantes: “He aquí, Señor, la mitad de mis
bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cua-
druplicado” (vers. 8).
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, ahuyenta el egoísmo y la ava-
ricia.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, ahuyenta el orgullo.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, desaparece la exal-tación pro-
pia.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, destruye la codicia.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, lo lleva al arrepen-timiento.•
Cuando Jesús entra en la vida de una persona, hay confesión ge-nuina.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, hay restitución.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, ahuyenta el deseo de supre-
macía.
• Cuando Jesús entra en la vida de una persona, hay abandono del pecado.
¿Por qué Zaqueo procedió así? Porque Jesús entró en su hogar, en su vida, en su
corazón. Tal vez, dejamos de vivir como deberíamos, dejamos de hacer lo que Dios
desea, porque no permitimos que Cristo entre en nosotros.
Sin duda lo que nos falta para vivir un cambio, como Zaqueo, es la pre-sencia de
75
 Cristo en nosotros. Porque Cristo hace la diferencia. alcanzado por su gracia.
Cuando Jesús entra en la vida de una persona, hay generosidad. “Se-ñor... la mitad No hacemos algo para alcanzar la gracia, obramos porque ya fuimos alcanzados
de mis bienes doy a los pobres”. (vers. 8) por su gracia.
Cuando Jesús entra en la vida de una persona, hay ἀdelidad y honestidad. Cuando Cristo es recibido como Salvador personal, viene el perdón, la confesión y
el cambio. Zaqueo no había recibido a Jesús meramente como a un forastero, sino
Cristo en nuestro corazón proporcionará una vida de ἀdelidad, de ho-nestidad y como al que moraba en el templo del alma. (DTG, p. 510).
generosidad. Dios espera eso de mí y de usted.
Cuando Cristo habite en nosotros habrá: entrega, arrepentimiento, confesión,
“Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa”. (Mal 3:10). conversión, abandono del pecado, ἀdelidad, generosidad y deseo de cumplir la
voluntad de Dios.
Cuando Jesús entra en la vida de un hijo/a suyo, hay confesión... “le de-vuelvo
cuadruplicado” (Vers. 8). “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido”. (Luc.
19: 10).
Nuestras ofrendas son pruebas de gratitud a Dios. Y como Dios nos ama extraor-
dinariamente e inigualablemente, por haber disfrutado este amor, demostramos La salvación que Cristo ofrece, comienza cuando usted y yo permitimos que Él en-
nuestra gratitud siendo generosos con nuestras ofrendas. tre en nuestro corazón, y comience a operar la transformación que tanto necesita-
mos, en todos los aspectos de la vida.
Zaqueo, por haber visto y sentido tan grande prueba del amor de Cristo con él, dijo:
“... la mitad de mis bienes doy a los pobres”. (Luc. 19: 8). Cristo, que transformó al codicioso, deshonesto y extorsivo cobrador de impuestos
en un hombre generoso, honesto y humilde, también puede cambiar cualquier ras-
Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por nece-sidad, por- go pecaminoso de nuestro carácter para transformarnos a su imagen y semejanza y
que Dios ama al dador alegre. (2 Cor. 9: 7). así nos pueda trasladar a su reino cuando se maniἀeste en gloria.
Pues la experiencia de esta ministración gloriἀcan a Dios por la obediencia que Aceptemos su llamado, descendamos de nuestro propio sicómoro, iniciemos o re-
profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución para tomemos una comunión estrecha con Cristo para que también hoy haya llegado la
ellos y para todos. (2 Cor. 9: 13). salvación a esta casa. (Luc. 19: 9).
Santidad al Señor en el diario y el libro mayor, en escrituras, recibos y letras de
cambio. Los que profesan seguir a Cristo y comercian de un modo injusto dan un
testimonio falso contra el carácter de un Dios santo, justo y misericordioso. Toda
alma convertida querrá, como Zaqueo, señalar la entrada de Cristo en su corazón
mediante el abandono de prácticas injustas que caracterizaban su vida. (DTG, p.
509).
En el momento que reconocemos a Cristo como el todo, lo que poseemos y somos
será nada. Y con este nada estaremos dispuestos a colocarlo en las manos de
Dios, para que el Todopoderoso transforme esta nada tan insigniἀcante, en algo
útil para su honra y gloria.Todo aquel que procura ver a Cristo y lo contempla y lo
encuentra, no sale de este encuentro sin recibir el poder que tanto necesita para
vencer el pecado.
Si no hemos vivido como Dios espera, como verdaderos y ἀeles mayor-domos, lo
que nos falta es encontrarnos con Cristo en el camino de la vida, y escuchar Su
llamado, solicitando que bajemos de prisa del sicómoro de nuestro yo, para que Él
venga y esté en nuestro hogar, en nuestra vida y en nuestro corazón.
CONCLUSIÓN
“Hoy ha venido la salvación a esta casa”, (vers. 9)
Jesús dijo: ha venido, él no dijo: Vendrá en un futuro. Porque lo que hizo y habló
Zaqueo no era un mérito para su salvación, y sí era una evidencia de ya haber sido
76 77

Culto de adoración
para el 15 de octubre
Pruebas de Fe
(Texto: Génesis 12: 1-5)
I. INTRODUCCIÓN (Génesis 12: 1-5)
1. Saludo:
2. Motivación:
La historia de la vida del patriarca Abraham, abunda en actos de fe que debe-
ríamos imitar.
a) Su comunión con Dios. (Génesis 15: 12-21)
b) Su fe determinante y renuncia personal al ofrecer a su único Hijo. (Gé-
nesis 22:1-14)
c) Su amor e intercesión por los impenitentes (Génesis 18: 14-33)
3. Propósito: Mostrar a la iglesia que las pruebas en la vida de un cristiano son
las oportunidades para renunciar a uno mismo y dejar que Cristo refleje su
carácter perfecto en cada corazón.
II. RENUNCIA A SU TERRUÑO: Génesis 12:1-5
1. Dejar nuestro terruño, separarnos de nuestros familiares es siempre una deci-
sión dolorosa y llena de interrogantes.
2. Nada sabemos de la vida del patriarca hasta que aparece esta sorpresiva e
inquietante invitación de Dios.
a) “Vete de tu tierra y de tu parentela y de la casa de tu padre”. (Génesis 12:1)
b) Es muy probable que tuviera una vida cómoda, un buen patrimonio y
que fuera apreciado y respetado por toda la comunidad.
3. En medio de ese bienestar y tranquilidad, Dios lo llama para que salga y se
dirija a una tierra desconocida.
a) Era un desafío que lo debe haber conmovido e inquietado.
b) Vivir en cabañas, enfrentar la intemperie.
c) Sufrir el desarraigo que produce dejar el terruño.
d) Dejas las comodidades.
78
4. Afrontar los riesgos de los viajes.
a) Peligro de ladrones.
b) Falta de agua y alimentos.
5. Dios le hizo esta invitación, felizmente la aceptó.
a) No sólo para ser el depositario de las bendiciones de Dios.
b) No sólo para su salvación eterna y la de muchos de sus descendientes
directos.
c) Sino para ejemplo de todas las generaciones posteriores.
III. RENUNCIA A COMODIDADES MATERIALES (Hebreos 11:8 y 9)
1. Sin duda que su decisión provocó la oposición de sus familiares y amigos.
a) Dejar las comodidades y el núcleo familiar para salir “Sin saber adónde iba”.
b) Lo habrán tratado de persuadir que su determinación de irse de ese en-
torno le causaría grandes pérdidas materiales.
c) Casas, establos y todo un estilo de vida que tenía que abandonar.
2. Muchos hijos de Dios fueron y son bendecidos con posesiones materiales.
a) Pero éstas no deben constituirse en una trampa como lo fue para la mu-
jer de Lot o para el joven rico que quedaron atrapados por las riquezas
del mundo.
3. “Todo lo que poseemos pertenece al Señor, sin ninguna duda. Él nos invita
a despertarnos, a compartir las cargas de su causa para que su obra tenga
prosperidad. Cada cristiano debe llevar a cabo su parte como un mayordomo
fiel.” (C.S.M.C., p. 120)
4. Dios también espera de sus hijos hoy:
a) Que no pongamos nuestra confianza en las riquezas. (Proverbios 23:5 y
Timoteo 6:17)
b) Que administremos nuestro tiempo, nuestros recursos, la vida que Él nos
concede, sabiamente como mayordomos fieles.
c) Que no usemos estas bendiciones en beneficio propio, egoístamente,
para nuestra gratificación o para hacer ostentación.
d) Sino como el patriarca Abraham, seamos mayordomos fieles.
IV. RENUNCIA A DERECHOS ADQUIRIDOS (Génesis 13:7-12)
1. Como tío y tutor durante la infancia de Lot Abraham tenía todo el derecho de
elegir primero él dónde pondría sus tiendas.
79
 2. Prefirió renunciar aun a ese derecho que le asistía, dejándole la oportunidad a
su sobrino Lot que elija primero.
3. “Y alzó Lot sus ojos y vio toda la llanura del Jordán, que toda ella era de riego,
como el huerto de Jehová...” (Génesis 13:10)
a) Lot era ambicioso y manifestó su codicia al apresurarse en elegir, cuando
tendría que haber permitido que su venerable tío escogiera primero.
4. Aún entre los que se dicen hijos de Dios, miembros de la iglesia remanente,
hay quienes dejan hoy aflorar ese mismo espíritu que dominó a Lot.
a) Son egoístas, quieren manejar los asuntos de la iglesia a su arbitrio y
antojo.
b) Enseguida están listos como Lot, para elegir primero, aún se auto propo-
nen para ocupar cargos.
c) Ven las responsabilidades de la iglesia como Lot veía la llanura del Jor-
dán, y las apetecen sin miramientos y sin escrúpulos.
d) Los tales desconocen la regla de oro que nuestro Señor nos recomendó:
“…todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así
también haced vosotros con ellos…” (Mateo 7:12)
V. CONCLUSIÓN
1. Abraham es conocido como “el Padre de la Fe”
2. Sus reiterados actos de renunciamientos revelan su estrecha relación con Dios.
3. En esos actos de generosidad estaba revelando que el carácter de Cristo se
manifestaba en su vida.
4. Fue el Señor quien nos dejó el máximo ejemplo de renunciamiento y genero-
sidad registrada por la revelación divina.
a) Juan 3:16 “De tal manera amó…, que ha dado a su Hijo unigénito…
b) Filipenses 2:6-8: “…sino que se despojó a sí mismo tomando forma de
siervo…”
Llamado: Pidamos de todo corazón al Señor que nos despoje del egoísmo y
nos revista de generosidad y renunciamiento que forman parte de las virtudes
del carácter de Cristo.
Les invito a tomen la decisión de renunciar a las ambiciones terrenales y dejar
que Cristo refleje en vuestros corazones su carácter perfecto.
Oración.
80
Culto joven
para el 15 de octubre
SEÑOR: TE ENTREGO MIS OFRENDAS
(Deuteronomio 26:10)
I. INTRODUCCION
A. Al estudiar Ias religiones antiguas, encontramos que en la integración entre
los seres humanos y el ser divino, la ofrenda que llevaba a los dioses era un
aspecto constitutivo de Ia devoción personal, El propósito era buscar en los
dioses sus bendiciones, protección, perdón y dirección.
B. En la religión bíblica, las ofrendas juegan un papel importante en los servi-
cios del Santuario del Antiguo Testamento y en el culto cristiano del Nuevo
Testamento.
C. Analizaremos algunos aspectos de las ofrendas del antiguo Testamento.
También veremos en el Nuevo Testamento la posición de Jesús en relación
a las ofrendas, como también la del apóstol Pablo. Finalmente veremos cuál
debe ser nuestra actitud al dar y cuáles son las características de una ofrenda
aceptable a Dios.
II. LAS OFRENDAS EN EL ANTIGUO TESTAMENTO
A. Mencionadas más que el Diezmo
1. El Antiguo Testamento menciona mucho más las ofrendas que el diezmo.
2. El culto y las ofrendas son prácticamente inseparables en el Antiguo Tes-
tamento
B. Las Ofrendas y los sacrificios expiatorios eran por el pecado y por la culpa
(Lev. 4 y 5)
1. Eran ofrendas que se apartaban para el Señor fuera del santuario y que
luego se las traía al templo y se las entregaba a Dios
2. La eficacia expiatoria se encontraba en la disposición de Dios a perdonar
los pecados de su pueblo. (Lev. 4:26,31).
3. La única función de estas ofrendas era señalar a Dios como el único que
podía expiar el pecado, porque es imposible para el ser humano traer
una ofrenda al Señor que sea suficientemente costosa como para res-
catarse a sí mismo.
4. Se describe a Dios como dispuesto a dar, como un “Ofrendante”. Esto pro-
vee una plataforma teológica para la dadivosidad de los seres humanos.
81
 La dadivosidad humana debe seguir el modelo divino de dadivosidad. Si
comparamos todo lo que Dios da, su pueblo en realidad de la muy poco.
5. Esto nos ayuda a entender que Dios espera que le traigamos una ofren-
da, porque él mismo ya dio una ofrenda en favor nuestro.
6. Ninguna de nuestras ofrendas cumplen una función expiatoria. Nuestras
ofrendas nunca deben ser un intento de ganar simpatía, el amor o el
perdón de Dios. Lo que hace aceptable nuestras ofrendas es la ofrenda
sacrificada del Hijo de Dios que santifica nuestra dádiva.
C. Otras Ofrendas en el Antiguo Testamento: Las ofrendas quemadas (Lev. 1:3-
17) y las Ofrendas de Paz (Lev. 3:1-17). Sus características nos llevan a la con-
clusión de que:
1. Una ofrenda es algo que cuesta al dador, porque se privaba de un animal
costoso y útil al darlo al Señor.
2. Dios no espera que todos den en la misma cantidad, pero se da entender
que cada cual podía traer algo al Señor.
3. Dios considera especialmente la disposición interior del dador y el deseo
de adorarlo es más importante que el valor monetario de la ofrenda. La
experiencia interna de uno se expresaría al traer al Señor lo mejor que
pudiera ofrecer.
4. Una ofrenda es una expresión tangible de la entrega plena de una per-
sona al Señor, traída con gratitud y amor.
5. Las ofrendas son requeridas por Dios, pero deben ser expresiones volun-
tarias de gozo y gratitud. También el Señor interpreta la negligencia en
traerle ofrendas como un acto deshonesto (Mal 3:6-8).
6. El privar al Señor de las ofrendas equivale a rechazar su señorío y atribuir
las bendiciones recibidas a algún otro poder.
7. Toda ofrenda presupone una firme entrega total y personal. Por ello ex-
iste una conexión entre una reforma espiritual y el incremento de las
ofrendas (2Cron. 31:1,10-14)
III. LAS 0FRENDAS EN EL NUEVO TESTAMENTO
A. Son mencionadas mucho menos que en el A.T.
1. Hay pocas referencias a las ofrendas en el Nuevo Testamento, aunque
se usa extensamente el verbo “dar”. Pero por lo que impresiona es que
alrededor del 25 por ciento de las veces que se usa el verbo “dídomi”,
Dios es el sujeto.
2. Él no da el pan cotidiano (Lucas 11:3), la lluvia, la cosecha el alimento
(Hech.14:17), la vida y todo o que necesitamos (Hechos 17:25). Nos da ar-
repentimiento (Hech.11:18) victoria (1Cor. 15:57), gracia (1Ped. 5:5), amor
(1Juan 3:1), sabiduría (Sant. 1:5_), el Espíritu Santo (Juan 3:34), los dones
espirituales (1Cor. 12:7-10), y la vida eterna (1Juan 5:4) a través de su Hijo
(Juan 3:16).
82
3. El Nuevo Testamento describe a Dios y a Cristo como los grandes Dadores
que enriquecen a los seres hermanos mediante su bondadosa gracia
4. El propósito de la dadivosidad cristiana no es suplir las necesidades de
Dios puesto que él no necesita nada. (Hecho.17:25). Nuestro dar nos
hace más semejantes a nuestro Señor.
B. Jesús y las Ofrendas.
1. Cuando Jesús nació, los magos no vinieron con las manos vacías, sino
que trajeron con ellos dones para el nuevo Rey. Habían venido para
adorarlo (Mat. 2:2). En este pasaje se asocia la ofrenda o don costoso
con los conceptos de adoración, homenaje y sumisión.
2. Para Jesús, una ofrenda reflejaba no sólo un estado de paz con Dios,
sino también con la comunidad de la cual uno formaba parte. El vivir en
armonía era casi un prerrequisito al dar una ofrenda. Una ofrenda nunca
expresara el amor y la gratitud a Dios si proviene de un corazón conflic-
tivo y que está en guerra con sus semejantes.
3. Las dimensiones verticales y horizontales de nuestra experiencia religio-
sa se intersectan en el acto de adoración mediante la ofrenda.
4. El dar una ofrenda a Dios no es evidencia automática de nuestra entrega
indivisa al Señor como persona. La viuda y el rico trajeron ofrendas vol-
untarias para el sostén de los servicios del templo. Para el rico una ofren-
da tal era una formalidad religiosa que podía satisfacerla con un mínimo,
una muestra, no de lo que podía dar, sino de lo que estaba dispuesto a
dar. En cambio la viuda trajo lo único que tenía, confiando en que Dios
proveería para ella. Su dádiva se basaba en una decisión, en una lucha de
fe, en la que prevalecieron su amor y su gratitud a Dios.
5. Todo esto sugiere que la verdadera benevolencia es más que compartir
o dar. Tiene que ver con la condición interior de la persona, la fuerza
espiritual de su amor a Dios. Este entendimiento erradica el egoísmo
del acto de dar. Jesús afirmo claramente que debemos dar sin esperar
recompensa alguna de otros, por consiguiente, nuestra dádiva debe ser
silenciosa y secreta (Mar.6:1-4).
6. Jesús rechaza el egoísmo como motivación para dar por que corrompe la
ofrenda. La dádiva debe provenir de un corazón dispuesto a dar y debe
llegar a ser una respuesta natural de amor a Dios y de fe en Él (Lucas 6:30).
C. San Pablo y las ofrendas.
1. Pablo es el que más aborda la teología de las ofrendas.
2. Pablo era renuente a aceptar ofrendas. De esa forma rechazo el derecho
al sostén financiero de su ministerio de parte de los miembros de la igle-
sia (2Tes. 3:9). Además quería demostrar que no era avaro. Pablo estaba
usando su libertad para proclamar el evangelio sin ocasionarle gastos a
la iglesia a fin de proteger la integridad de su ministerio apostólico.
83
 3. Estando en prisión, Pablo recibe, a través de Epafrodito, una ofrenda de
las iglesias de Macedonia para él (Fil. 4:10-19). La ofrenda de los mace-
donios no era el resultado de un arranque emocional, sino que se basaba
en un análisis racional, en el reconocimiento de una necesidad real de
alguien a quien se está unido emocional y espiritualmente, y con cuya
misión podían identificarse. Mediante esta ofrenda, los macedonios par-
ticiparon de las aflicciones de Pablo (Fil. 4:17) y finalmente este don fue
aceptable al Señor (Fil. 4:18).
4. La ofrenda especial para los hermanos necesitados en Jerusalén fue pro-
movida por Pablo. El don de la gracia de Dios (2Cor. 8:1), el ejemplo de
Cristo (2Cor. 8:9) y las bendiciones de Dios (2Cor. 9:8-11) fueron los ar-
gumentos utilizados por Pablo para que los cristianos gentiles recogieran
la ofrenda para sus hermanos judíos. La participación en la colecta no
era un acto incidental, sino bien planeado. Estaba basada en los ingresos
personales (2Cor. 8:11), debía apartarse en el hogar (1Cor. 16:2), deter-
minando que el poner a parte la ofrenda era un asunto de familia y de-
bía entregarse a personas calificadas (2Cor. 8:17-23), para que la colecta
fuese manejada en forma adecuada.
a) Pablo enfatizó la actitud que se debía tener al dar. Esperaba que
fuese con el espíritu adecuado. Debía experimentarse el dar como
un privilegio (2Cr. 8:4), dar voluntariamente (2Cor. 9:7), y dar gen-
erosamente (2Cor. 9:11,13).
b) Finalmente la colecta tenía varios propósitos: suplir las necesidades
materiales de la iglesia en Jerusalén; también fortalecer la unidad de
la iglesia y dar expresión a esta unidad en forma objetiva; además
era necesario expresar el amor cristiano, y por último, alabar a Dios.
IV. UNA OFRENDA ACEPTABLE A DIOS
El motivo para dar:
A. El amor a Dios es lo que motiva a los cristianos a dar ofrendas, un amor desin-
teresado cuyo foco de atención es Dios y los seres humanos.
Sólo por medio de la ofrenda sacrificial de Cristo somos aceptados por Dios. Por
lo tanto, para que nuestra ofrenda sea aceptable ante Dios es necesario que:
Sea una expresión de nuestra auto entrega a Dios. Una ofrenda es una ex-
periencia profundamente religiosa por que revela una vida enteramente en-
tregada al Señor.
B. Testifica que Dios está primero en la vida del creyente, dándole el mejor y más
costoso don dependiendo de los recursos de la persona.
Expresa fe en el cuidado providencial de Dios por nosotros. Tal ofrenda provi-
ene de un corazón que confía en un Dios personal que suple nuestras verdad-
eras necesidades.
C. Es la manifestación visible de la gratitud, la alabanza, el gozo y el amor del
adorador. Una ofrenda es la forma concreta que toman nuestros sentimientos
y actitudes interiores hacia el amor de Dios en el acto de adoración.
84
D. Es voluntaria. Dios requiere que experimentemos el gozo de dar que en-
riquece nuestras vidas.
Refleja nuestra entrega al mensaje y la misión de la iglesia. Debemos estar dis-
puestos a poner nuestros recursos al servicio del plan de Dios para la humanidad.
E. Proviene de un corazón que está en paz con Dios y con los demás. El tratar a
otros bondadosamente es un deber tan religioso como traer ofrendas a Dios.
Aunque espontanea, la ofrenda debe ser sistemática. Se espera que pla-
neemos nuestra dadiva de acuerdo a nuestros ingresos. Esto nos protege de
dar únicamente motivados por las emociones.
V. CONCLUSION
A. El fundamento teológico de la práctica de traer ofrendas al Señor está for-
mando a su vez por tres conceptos teológicos principales que se encuentran
interrelacionados:
1. El primer concepto es soteriológico, es decir la disposición constante y
amante de Dios a salvar a los seres humanos del poder del pecado. En el
Antiguo Testamento la disposición de Dios para salvar se manifestó de una
manera particular en el Éxodo cuando el Señor redimió a su pueblo del
poder esclavizador de Egipto. En el Nuevo Testamento, la salvación de Dios
alcanzo su manifestación suprema en el don de su hijo como el único me-
dio de salvación. Dios proveyó la ofenda que ninguna otra persona podía
proveer, la dádiva humana es un pálido reflejo de la dádiva divina.
2. El segundo concepto es la fidelidad de Dios a sus promesas, la perma-
nencia de su Palabra. En el ser divino no hay inconsistencia ni en palabra
ni en hechos. Él prometió morar con los seres humanos, proveyéndoles
de identidad y supliendo sus necesidades. El Señor es confiable y respon-
sable. Hay una constante en el carácter divino que lo hace digno de nutra
confianza. Él es fiel a sí mismo, a su propio carácter.
3. El tercer concepto es el Señorío de Dios. El Dios que nos salvó libremente
y que es fiel a sus promesas es también nuestro Señor. Su señorío no se
limita a la esfera espiritual, sino que incluye de una manera más concreta
el reconocimiento de que todo lo que tenemos es suyo porque él nos o
dio. El señorío divino significa que Él es dueño, pero que está dispuesto a
dar en forma natural de los es suyo a su pueblo. Por consiguiente, lo que
su pueblo posee le llega como un don o bendición del Señor.
B. Estos fundamentos teológicos proveen para nosotros la motivación para dar.
Los seres humanos somos llamados e impulsados a dar por que la gracia de
Dios se revelo en el don de gratuito de la salvación mediante Cristo. Nuestra
dádiva debe ser moldeada conforme al modelo divino. Creados a la imagen
de Dios, los seres humanos deben imitar la disposición divina a dar. Siendo
que Dios da generosamente, los seres humanos deberíamos dar de la misma
manera.
C. El reconocimiento del hecho de que hay un Señor que gobierna el universo y
es dueño de lo que hay en él, es la misma base de la benevolencia.
85
 D. Finalmente, podemos estar motivados a dar cuando reconozcamos que Dios
está obrando la salvación de la humanidad a través de su iglesia. Trajo la iglesia
y el ministerio evangélico a la existencia para continuar revelando su gloria al
mundo. Los miembros de la iglesia apostólica encontraron su más grande gozo
al promocionar la causa de Dios mediante sus ofrendas.
E. LLAMADO:
¿Podemos hoy hacer nuestra la experiencia de la iglesia apostólica? Nada
podrá ser más importante para nosotros como creyentes que la proclamación
del evangelio, y considerar un privilegio ser instrumentos de Dios en esta
tarea. Decirles a otros que Dios está reconciliando consigo mismo al mundo,
será significativo para que podamos entregarle al Señor nuestras ofrendas.
Estamos dispuestos a dar las ofrendas que ayudarán en la predicación del
mensaje a todo el mundo.
ORACIÓN.
86
Culto de adoración
para el 12 de noviembre
LA HERENCIA QUE CRISTO NOS DEJÓ
I. INTRODUCCIÓN
a. Saludo:
Reciban un saludo muy afectuoso y cristiano, y que la fragancia del amor de
Dios, y la presencia del Espíritu Santo llene cada corazón que vino adorar a
Dios esta mañana.
b. Propósito:
El propósito de este mensaje es mostrar a la iglesia que Cristo dejó su herencia
en favor de sus hijos y ahora somos llamados a imitar ese ejemplo.
II. SEIS HERENCIAS QUE CRISTO NOS HA DEJADO
1. La Herencia de Paz.
a. Mi paz os dejo, mi paz os doy: no como el mundo da, yo os la doy. No se
turbe vuestro corazón, ni tenga miedo (Juan 14:27).
b. Poco antes de su crucifixión, Cristo les dio a sus discípulos un legado de
paz... Esta paz no es la paz que se adquiere a través de la conformidad
con el mundo. Es una paz interna más bien que una paz externa. (Nues-
tra Elevada Vocación, p. 330)
2. La herencia de la justicia de Cristo. Es la que nos ilumina para cumplir con
nuestra misión de predicar el Evangelio a todo el mundo.
Ellos fueron partícipes de sus sufrimientos. Pero él les dejó la herencia que re-
cibirían. Si se unían unos con otros y con él, su justicia les alcanzaría, y de ellos
llegaría al mundo cuya pecaminosidad aumenta constantemente. (Review and
Herald, marzo 15, 1889)
3. La Herencia de dificultades y pruebas
Se necesitan hombres para este trabajo quienes no murmurarán ni se que-
jarán por las dificultades y pruebas que se presenten, sabiendo que esto es
parte de la herencia que Jesús les ha dejado. (Testimonies, vol. 3, p. 423)
4. La Herencia de los Pobres.
Los pobres son la herencia de Dios para aquellos que se encuentran en situa-
ciones más favorables. El que oprime al pobre reprocha a su Creador. El Señor
87
 nos ha dejado a los pobres a la merced de su iglesia, a que no se les descuide,
ni se los menosprecie y desprecie, pero que se les trate como herencia del
Señor. (Review & Herald, octubre 15, 1895)
5. La Herencia del Espíritu Santo.
a. La rica dote del Espíritu Santo será dada, y mediante su fluencia constan-
te a los hijos de Dios, éstos llegarán a ser testigos en el mundo del poder
de Dios para salvar. (Testimonios para los Ministros)
b. El don del Espíritu Santo traerá todas las demás bendiciones en su estela.
Cuando quiera los asuntos menores ocupen la atención, al poder divino
que se necesita para el crecimiento y la prosperidad de la iglesia, y que
traería todas las demás bendiciones en su estela, falta, aunque se ofrece
en infinita plenitud. (Hechos de los Apóstoles, p. 41.)
c. Cristo está más dispuesto a darnos buenas cosas, incluyendo las bendi-
ciones del Espíritu Santo, de lo que nosotros deseamos darle buenas dá-
divas a nuestros hijos. ¿Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas
dádivas a vuestros hijos, cuánto más vuestro Padre que está en los cielos,
dará buenas cosas a los que le piden? (Mateo 7: 11).
6. La Herencia de la Vida Eterna
a. Para que justificados por su gracia, seamos hechos herederos según la
esperanza de la vida eterna. (Tito 3: 7).
b. Cristo le dejó al mundo la herencia de la vida eterna –nosotros somos
sus ejecutores. Antes de ascender al cielo, Cristo dio a los discípulos su
comisión. Les dijo que debían ser los ejecutores del testamento por el
cual él legaba al mundo los tesoros de la vida eterna. (Los Hechos de los
Apóstoles, p. 22)
III. JESÚS YA DEJÓ SU HERENCIA, ¿TÚ QUE RENDIRÁS?
1. Mediante testamento, se le puede dar a la iglesia una propiedad específica, o
una cantidad o un porcentaje de los bienes.
2. Ejemplo: Testamento de una Maestra:
“Mi esposo, ya fallecido, y yo adorábamos a Dios de acuerdo con la fe de la
Iglesia Adventista del Séptimo Día. Y mi esposo, durante su vida, nuestro hijo y
yo hemos disfrutado de las bondades y bendiciones de Dios en todo tiempo, y
de acuerdo a los deseos de mi esposo, que yo también comparto, procuro legar
aquí nuestra humilde propiedad de manera que, después de mi muerte, pueda
seguir ayudando a la causa de Dios aquí en la tierra a través de nuestra Iglesia,
y también servir de asistencia a nuestro hijo y su familia en la educación de sus
hijos, con la fe y esperanza que nuestra familia permanecerá unida en el cielo”
3. ¿Qué pagaré a Jehová por todos sus beneficios para conmigo? Tomaré la copa
de la salvación, e invocaré el nombre de Jehová. Ahora pagaré mis votos a
Jehová delante de todo su pueblo. Estimada es a los ojos de Jehová la muerte
de sus santos. (Sal. 116: 12-15)
88
“Herencias moribundas son sustitutos miserables para la benevolencia vivien-
te. Los siervos de Dios debieran hacer sus testamentos todos los días median-
te las buenas obras, y las ofrendas liberales a Dios. No debieran permitir que
la cantidad ofrendada a Dios sea desproporcionalmente pequeña cuando es
comparada con lo que se deja para uso personal.
Al hacer sus testamentos diariamente, se recordarán de los objetos y amigos
que ocupan el mayor lugar en sus afectos. Su mejor amigo es Jesús. Él no re-
tuvo su vida por ellos, por ellos se hizo pobre, para que mediante su pobreza
fueran enriquecidos. Él merece todo el corazón, toda la propiedad, todo lo
que son y lo que poseen”. (Testimonies, Vol. 4, p. 481).
4. John Wesley - Cuando murió se dijo que no dejó nada más que unas pocas
monedas y su Iglesia Metodista.
Él dejó tres reglas que los cristianos deben cumplir:
a. Gana todo lo que puedas siendo industrioso y honesto.
b. Economiza todo lo que puedas.
c. Da todo lo que puedas.
Él cumplió lo que predicó regalando unas treinta mil libras durante su vida.
(Cuando cumplió los 28 años había trabajado hasta llegar a ganar 120 libras al
año, y lo regaló todo menos 28 libras). Cuando cumplió los 63 años recibió una
herencia de 1.000 libras, pero tan pronto como le fue posible, lo distribuyó
entre los pobres. Cuando su hermana le escribió preguntando si él podría
darle parte de ese dinero, él respondió:
Querida Patty: “¿Acaso no piensas tú que el dinero nunca queda conmigo?; si
así fuera me quemaría. Lo tiro de mis manos tan pronto como me es posible,
para que no encuentre el camino a mi corazón. Por lo tanto, debiste hablar
conmigo mientras estuve en Londres, antes de que el dinero de la señorita
Lowen volara. Sin embargo, no estoy seguro, pero quizá me queden unas cinco
libras. Querida Patty, quedo como siempre tu afectuoso, John Wesley”
Citado en el libro de Ruth Gordon Short The Windows of Heaven (Las Ventanas
del Cielo), Nashville: Southern Publishing Asan. 1960, p. 22-27)
IV. DEJAR HERENCIAS NO NOS IMPIDE DEJAR UNA PARTE PARA LA IGLESIA.
1. Lo que hizo David antes de morir
Desde los mismos comienzos del reinado de David, uno de sus planes favori-
tos había sido el de erigir un templo a Jehová. A pesar de que no se le había
permitido llevar a cabo este propósito, no había dejado de manifestar celo y
fervor por esa idea. Había suplido una gran abundancia de los materiales más
costosos: oro, plata, piedras de ónix y de distintos colores; mármol y las made-
ras más preciosas.
Y ahora estos tesoros de valor incalculable, reunidos por David, debían ser en-
tregados a otros; pues otras manos que las suyas iban a construir la casa para
el arca, símbolo de la presencia de Dios.
89
 Viendo que su fin se acercaba, el rey hizo llamar a los príncipes de Israel y a
hombres representativos de todas las partes del reino para que recibieran su
llegado en calidad de depositarios. Deseaba hacerles su última recomendación
antes de morir y obtener su acuerdo y su apoyo a favor de esta gran obra que
había de llevarse a cabo. (Patriarcas y Profetas, p. 812, 813)
2. Una precaución que se debe tomar:
Muchos no se preocupan de hacer su testamento mientras gozan aparente-
mente de salud. Pero nuestros hermanos debieran tomar esa precaución; de-
bieran conocer su situación financiera y no dejar que sus negocios se enreden.
Deben ordenar su propiedad de manera que puedan dejarla en cualquier mo-
mento. (Consejos sobre Mayordomía Cristiana, p. 342.)
a. Los testamentos deben poder sostenerse ante la ley, la muerte no llega
un día antes porque hemos hecho nuestro testamento.
Los testamentos deben hacerse de una manera que resista la prueba de
la ley. Después de haber sido formulados, pueden permanecer durante
años, y no causar ningún perjuicio, aunque se continúe haciendo donati-
vos de vez en cuando, según la causa lo necesite. La muerte no llegará un
día más temprano hermanos, porque hayáis hecho vuestro testamento.
(Consejos sobre Mayordomía Cristiana, p. 342)
b. Se deben tomar en cuenta las necesidades del cónyuge y los hijos, pero
no se debe olvidar la causa de Dios.
Al llegar vuestra propiedad por testamento a vuestros parientes, cuidad
de no olvidar la causa de Dios. Sois sus agentes, conservadores de su
propiedad, y debéis considerar primero sus requerimientos.
Vuestra esposa y vuestros hijos no han de ser dejados en la indigencia;
debéis proveer para ellos, si lo necesitan. Pero no introduzcáis en vues-
tro testamento, simplemente porque es costumbre hacerlo, una larga
lista de parientes que no sufren necesidad. (Consejos sobre Mayordomía
Cristiana, p. 342)
3. Se debe considerar la causa de Dios.
Evangelismo: Establecer la obra en ciudades no penetradas.
Educación: Establecer escuelas primarias y colegios.
ADRA-ASA: Construcción de módulos familiares, Hogares de ancianos, etc.
V. CONCLUSIÓN
Cómo asegurar vuestra propiedad
¿Queréis asegurar vuestra propiedad? Colocadla en la mano que lleva la marca
de la crucifixión. Si la retenéis en vuestra posesión será para vuestra pérdida
eterna. Dadla a Dios, y a partir de ese momento llevará su inscripción.
Quedará sellada con su inmutabilidad. ¿Queréis disfrutar de vuestros bienes?
90
Entonces utilizadlos para bendecir a los que sufren. 9 T p. 51.
Oremos para que Dios nos de sabiduría para administrar correctamente los
talentos que nos ha concedido y hagamos desde hoy tesoros en el cielo donde
el orín ni la polilla no corrompen!
Al concluir esta semana y renovar nuestros votos de fidelidad hagámoslo con
fe y amor.
LLAMADO
COMPARTIENDO LOS GOZOS DE LOS REDIMIDOS
Hay una recompensa para los obreros íntegros y abnegados que entran en este
campo, y también para los que contribuyen voluntariamente a su sostén.
Los que trabajan activamente en el campo, y los que dan sus recursos para
sostener a estos obreros, compartirán la recompensa de los fieles.
Cada mayordomo sabio de los bienes confiados a él, entrará en el gozo de su
Señor. ¿Qué es este gozo? “Así os digo que hay gozo delante de los ángeles
de Dios por un pecador que se arrepiente” (Lucas 15: 10). Habrá una bendita
alabanza, una santa bendición, para los fieles ganadores de almas. Se unirán
a los que se regocijan en el cielo, que dan la bienvenida a la cosecha al entrar
ésta en el hogar.
Cuán grande será el gozo cuando los redimidos del Señor se reúnan en las
mansiones preparadas para ellos. ¡Oh, qué gozo para todos los que hayan sido
obreros imparciales y abnegados juntamente con Dios en la tarea de promover
su obra aquí en la tierra! Qué satisfacción tendrá cada segador cuando la voz
clara y musical de Jesús diga: “Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino
preparado para vosotros desde la fundación del mundo”
(Mat. 25: 34). “Entra en el gozo de tu Señor”.
Oremos…
91

Culto joven
para el 12 de noviembre
TESTAMENTOS Y LEGADOS:
UNA RESPONSABILIDAD OLVIDADA
LECTURA BÍBLICA:
Romanos 14: 12. “De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí”.
PROPÓSITO:
Mostrar cómo la inspiración nos orienta e instruye sobre qué hacer con aquellos bienes
materiales que aun no hemos tenido oportunidad de devolver al Señor.
INTRODUCCIÓN
Dios, el amante propietario del ganado esparcido en millares de colinas, nos da conti-
nuamente muchas evidencias de su amor. Él creó todas las cosas y nos da lo creado para
que la disfrutemos. Pero todos estos dones y el dominio que nos ha dado llevan consigo
ciertas condiciones y responsabilidades. Y Dios no omite nada cuando nos dice exacta-
mente cómo debemos cumplir con dichas responsabilidades. Vez tras vez usa las Escritu-
ras para enunciar principios tanto generales como especíἀcos de Mayordomía (Génesis
28:22, Éxodo 22: 25-30, 2 Crónicas 31: 5, Nehemías 13: 10-12, Job 1: 21, Malaquías 3:
7-12, Lucas 12, etc.) Y complementa estas instrucciones con consejos claros y evidentes
a través de la pluma de Elena de White.
I. INSTRUCCIONES DEL ESPÍRITU DE PROFECÍA SOBRE LA MAYORDOMÍA DE LOS BIENES.
Entre las más claras, más preciadas, importantes y sorprendentes instrucciones que
aparecen en los escritos de Elena de White, hay una sección compuesta de tres breves
capítulos, casi al ἀn del libro Consejos Sobre Mayordomía Cristiana. Se titula: Testa-
mentos y Legados. Tan solo un total de trece páginas que impresionan al lector sincero.
1. Contenido de las instrucciones. La instrucción dada aquí es es 36pecíἀcamente
de carácter eterno. Además, nos llama a la acción, contrariamente a las prác-
ticas tradicionales. La primera vez que la leí, temblé ante mi prolongada negli-
gencia y, en años recientes, he sido testigo, repetidas veces, de sentimientos
similares en miembros que me han pedido consejo. A continuación presenta-
mos algunos de estos principios e instrucciones:
a. Dios es dueño de todo y su dominio es eterno.
b. Él nos presta, nosotros somos solamente depositarios de sus riquezas
para distribuirlas en la forma que Él nos instruya, mientras estemos vivos.
c. Se deben tomar medidas a ἀn de que, si morimos, le devolva-mos lo que
tuvimos prestado.
92
d. No debemos esperar que llegue el día de nuestra muerte para arreglar
estas cosas, tales arreglos rara vez son enteramente satisfactorios.
e. Nuestros bienes no deberían ir a parar a nuestros hijos u otros familiares
más allá de lo necesario. Esto quiere decir que, una vez crecidos y educa-
dos, los hijos deben valerse por sí mismos, a menos que estén aḀigidos o
luchan en la pobreza. (CMC, p. 345, 346).
f. Dar dinero a los hijos de esta manera no los acerca a Dios sino que, por el
contrario, tiende a aislarlos de Él. (Idem).
g. Los legados o donaciones a los hijos u otros familiares que se han aparta-
do de la iglesia, no favorecen su retorno a ésta sino que, por el contrario,
coloca sobre ellos una doble y peligrosa responsabilidad; la de ellos y la
nuestra. (Idem).
h. Los ministros deben ser más decididos al enseñar a nuestro pueblo acer-
ca de estos temas tan importantes para su relacio-namiento con Dios.
(CMC, p. 337).
2. Aplicando las Instrucciones.
a. De nueve casos entre diez, nuestros miembros al morir no dis 37ponen
que sus bienes sean para la gloria de Dios. (Idem). No solo se pierden
para la iglesia grandes propiedades y sumas de dinero todos los años,
sino que también se dejan personas de lado. Con frecuencia, gran parte
de la amargura que reina en las familias se debe a legados que Dios no
puede bendecir.
b. El ser rico o pobre no hace ninguna diferencia. Todos los que somos men-
talmente responsables deberíamos preparar nuestro testamento o lega-
do, sólidamente orientado en el aspecto legal, ni bien entremos en años.
Muchos hombres de quienes se pensaba que tenían muy poco o nada, se
encontró al morir que eran herederos o estaban en posesión de bienes de
gran valor. En cualquier caso, nuestro motivo principal debe ser el espíritu
de devolver a Dios lo que Él nos ha conἀado por un poco de tiempo.
c. Consideremos cómo desea Él que se lo devolvamos. La mayoría pensa-
mos en nuestros hijos y otros parientes. Y esto es importante mientras
ellos no pueden cuidar de sí mismos en forma adecuada. Todo hijo mere-
ce un sustento normal antes de ser adulto. Generalmente se espera que
los padres lo ayuden en su educación secundaria y superior. Si un hijo
es inválido, está en la miseria o necesitado de alguna manera, y hace lo
mejor que puede con lo que tiene, es diferente. Tenemos una clara obli-
gación con él como algo que Dios nos ha confiado.
d. Pero Consejos sobre Mayordomía Cristiana deja bien claro que, una vez
cumplido con esto, debemos devolver nuestros bienes a Dios por medio
de un testamento o legado debida-mente preparado, para que sea usado
en su obra. Y esto debe ser hecho AHORA, no en una ocasión futura más
conveniente, pues ésta rara vez se presenta (CMC, p. 338-343). Todo los
años nuestra iglesia pierde muchísimos recursos debido a estas dilaciones,
a nuestra indecisión en distribuir nuestros bienes en la forma requerida
por Dios, y dando dinero a nuestros familiares simplemente por tradición.
93
 e. En la medida de lo posible, deberíamos devolver a Dios nuestras riquezas
día a día a través de una entrega de lo que somos y tenemos. Pero aque-
llos bienes materiales que no hemos tenido oportunidad de entregar son
los que deberíamos dis 38poner en favor de la obra de Dios por medio de
testamentos, legados, donaciones con usufructo, etc.
3. La ayuda de parte de la iglesia para aplicar estas instrucciones.
a. Nuestra asociación/misión tiene personal capacitado para brindar a nues-
tros miembros cualquier información segura, detallada y conἀdencial, de
cómo dar los pasos efectivos y económicos a fin de cristalizar aquellas
disposiciones de voluntad que nuestros hermanos desearen realizar a ἀn
de beneficiar financieramente a la obra del Señor.
b. Algunos miembros vacilan en poner sus asuntos en manos de la iglesia y
preἀeren ser guiados por especialistas mundanales. Hemos visto que no
siempre esto ha dado los mejores resultados, pues los ideales y afanes
de aquellos que no comparten nuestra fe son bien diferentes de los nues-
tros. Por eso siempre recomendamos asesorarse por miembros laicos de
la iglesia especializados en estos asuntos o por el mismo perso-nal que la
iglesia tiene para estos menesteres.
II. NUESTRA RESPONSABILIDAD
1. Inconveniencia en el traspaso de bienes a familiares.
a. Muchas veces sentimos remordimiento porque nuestros hijos, nietos y
otros familiares no están firmes en la iglesia. Razonamos que no desea-
mos apartarlos más y que si le damos nuestros bienes mientras vivimos o
al morir, de acuerdo a la costumbre general, se sentirán mejor en relación
con nosotros y con Dios. Pero se nos advierte categóricamente que esta
forma de pensar es cometer pecado contra el Maestro. (CMC, p. 344)
b. La experiencia lo demuestra claramente. Por lo general, tales legados:
• Llegan a manos de familiares que están satisfechos con los bienes
mundanos y son menos dependientes de Dios, o
• Excitan aún más las pasiones del mundo, o
• Disminuyen la actividad personal y el dominio propio, o 39
• Producen desdichas porque unos herederos reciben tanto o más
que otros.Y aún más serio que esto es que se hace recaer una doble
responsabilidad de mayordomía sobre los herederos. (CMC, p. 345).
c. Ninguno de los cónyuges debe imponer sobre su compañero una doble
responsabilidad. Deberían tomarse las medidas necesarias para la segu-
ridad del otro. Pero, fuera de esto, nuestros bienes deberían ser puestos
a un lado para el Señor (CMC, p. 348).
d. El conocimiento del absoluto dominio de Dios está implícito en el credo
de cada verdadero cristiano. Debemos estar seguros de que este credo
recibe tanto el servicio del corazón como el de los labios. Pues si descui-
94
damos esto, impedimos que corazones se llenen de bendiciones y cose-
chamos ojos llenos de lágrimas.
e. El Salmo 50: 21 nos dice que es tiempo de que pensemos en términos de
la majestad de Dios. No debemos pensar en Él como en un ser humano.
Se nos amonesta con inἀnito amor y sabiduría que no atender el consejo
de nuestra mayordomía sobre testamentos y legados es la peor clase de
robo. (CMC, p. 339).
2. Examen de los pasos a seguir.
a. Todo hijo de Dios que espera compartir la eterna herencia de su Hijo
debería examinar cuidadosamente su experiencia preparatoria como
mayordomo aquí.b. Es nuestro privilegio:
• Leer cuidadosamente la Palabra de Dios, a ἀn de aprender más
acerca del uso de lo que Él nos ha prestado.
• Observar detenidamente las instrucciones especíἀcas acerca de
la disposición de nuestras riquezas grandes o pe-queñas mientras
estemos vivos y al morir, especialmente... Consejos sobre Mayordo-
mía Cristiana, p. 337-349.
• Buscar AHORA ayuda legal de nuestra asociación o institu-ción de
iglesia, o de una persona consagrada cuyo consejo esté en armonía
con la mente de Dios.
• Descansar en la promesa de la segura protección del cielo, la herencia
de Dios. Ésta es la eterna responsabilidad por la cual somos probados.
CONCLUSIÓN
Cómo asegurar vuestra propiedad
¿Queréis asegurar vuestra propiedad? Colocadla en la mano que lleva la marca de la
cruciἀxión. Si la retenéis en vuestra posesión será para vuestra pérdida eterna. Dadla a
Dios y, a partir de ese momento, llevará su inscrip-ción. Quedará sellada con su inmuta-
bilidad. ¿Queréis disfrutar de vuestros bienes? Entonces utilizadlos para bendecir a los
que sufren. 9 T p.51
En esta hora deseo que recapacitemos acerca de la responsabilidad que descansa sobre
nosotros.
Entre los presentes hay hermanos cuyo tiempo de gracia está llegando a su ἀn, y nuestra
pregunta es:
¿Estamos siguiendo las instrucciones de la inspiración? ¿Dónde hemos de-positado los
bienes prestados?
El año pasado, en el territorio de la UA, los miembros donaron 13 casas y 26 terrenos
que serán aplicados a la construcción de templos y capillas en diferentes lugares.
Relato: Los esposos Méndez fallecieron dejando su casa a nombre de una asociación.
El producto de la venta de esa vivienda se aplicó a la construc-ción del templo de Río
Gallegos. Los miembros de esta iglesia quieren en-contrarse con los Méndez en la tierra
nueva y agradecerles por lo que hicieron.
95

Culto de adoración
para el 10 de diciembre
DAR COMO CRISTO DIO
I. INTRODUCCIÓN
a. Saludo. Cuan feliz me siento dirigir este mensaje a esta iglesia que se reúne
para adorar, que se reúne para prepararse y que se reúne con el propósito de
ser más semejantes a Cristo sábado, tras sábado.
b. Motivación. Para la mayoría de las personas, la idea de sacrificio involucra la
idea de renuncia de algo deseable, como un sentido de pérdida o de privación.
Pensamos en sacrificio como si este fuese un acto exterior, siendo todo lo con-
trario un acto interior que responde a una motivación.
Sacrificio es una actitud, debido a ella, desinteresadamente, voluntaria y cari-
ñosamente disponemos de nuestra vida, y recursos para Dios.
Cristo tuvo esa actitud, fue de un amor abnegado que lo llevó a renunciar a
muchas cosas. Ahora, Dios nos invita a tener el mismo sentido de renuncia.
c. Propósito. Mostrar a la iglesia que Cristo motivado por un profundo amor
por cada uno, renunció a muchas cosas, para que nosotros motivados por ese
amor perfecto renunciemos a todo aquello que ocupa su lugar y así permanec-
er en su presencia.
d. Texto: Filipenses 2:5-8
II. UNA MOTIVACIÓN Y TRES RENUNCIAS.
Cristo motivado por un profundo amor por cada uno renunció a muchas cosas,
pablo en Filipenses nos muestra tres de ellas:
a) LA PRIMERA RENUNCIA DE CRISTO: ÉL NO SE AFERRÓ A SU DIVINIDAD (Fili-
penses 2:6)
“El cual siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que
aferrarse” “En forma de Dios” en griego “morfé”, que aquí denota todas las
características esenciales y los atributos de Dios.
1. Cristo teniendo todas las características de Dios.
En igualdad con el padre, no se aferró a ellas. Cristo era consciente de
su igualdad con Dios. En su omnipotencia, en su omnipresencia, en su
Omnisciencia, en su eternidad, en su dominio y gloria, en su grande poder
creador y soberanía.
96
2. Cristo, resolvió abandonar la gloria inherente a esa altísima condición para
llevar a cabo su compasivo propósito de salvar la humanidad.
3. Cristo no mostró avidez para retener esa gloria y poder.
b) LA SEGUNDA RENUNCIA: SE DESPOJÓ A SÍ MISMO (Filipenses 2:7)
“Sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante
a los hombres.”
1. Cristo, literalmente “se vació, se humilló a sí mismo” (Filipenses 2:7)
Se humilló a sí mismo. Ese vaciamiento fue voluntario (Juan 10: 17-18)
Tomó forma de siervo. “siervo” en griego “dóulos” que más bien se refiere
a un esclavo (Romanos 1: 1); por lo tanto, el apóstol está diciendo que
Cristo se vació a sí mismo y asumió los atributos esenciales de un esclavo.
Asumió los atributos esenciales de un esclavo a través de:
- Obediencia dócil y completa sumisión
- Una vida de total servicio
- Toda su vida estaba subordinada al Padre.
2. Hecho semejante a los hombres. (Filipenses 2:7b) y (Hebreos 2:17)
a. Cristo era Dios pero se hizo hombre.
b. Cristo era un hombre completo y sin embargo también era Divino.
c. Su divinidad no modificó en lo más mínimo su humanidad.
Hoy, cuando contemplamos al Cristo encarnado, vemos a alguien seme-
jante a toda la humanidad.
c) LA TERCERA RENUNCIA: COMO HOMBRE, SE HUMILLÓ HASTA LA MUERTE DE
CRUZ. (Filipenses 2:8)
“Y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obe-
diente hasta la muerte, y muerte de cruz.”
1. Cristo, como ser humano se humilló a sí mismo.(v. 8a) ¿De qué manera?
b. El acto supremo de humillación,
Este acto culminó, cuando Cristo se sometió voluntariamente a la
muerte.
c. Cristo, se hizo obediente a Dios. Hebreos 5:8
“Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia”
Hasta la muerte
97
 d. La obediencia de Jesús lo llevó a entregar su vida.
e. Cristo era hombre, sometido a los mismos deseos de conservar su
vida como lo somos nosotros.
f. No ejerció en él ningún poder que nosotros no podamos emplear.
2. Hasta la muerte de cruz. (v. 8b)
a. El énfasis se halla no solo en su muerte, sino en la clase de muerte
que sufrió.
b. Era una muerte que implicaba una gran vergüenza e intenso sufri-
miento.
c. La crucifixión la aplicaban los romanos a los esclavos, a los no roma-
nos y a los más viles criminales.
d. Sobre esa muerte la ley de Moisés había pronunciado una maldición,
y hasta los gentiles lo consideraban como el más vil y cruel de los
castigos. Deuteronomio 21:23
III. CON LA AYUDA DE DIOS, ¿PODEMOS HACER RENUNCIAS? Mi tercera renuncia: todo lo que poseo en forma progresiva.
Sí, podemos hacer grandes renuncias como Cristo con la poderosa ayuda del Espí-
ritu Santo. Cristo, hablando de esto decía a todos:
Lucas 9:23 “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz
cada día, y sígame.”
A. Mi primera renuncia: negarme a mí mismo.
1. “Niéguese a sí mismo” ¿Qué quiere decir esto?
Que yo someteré mi voluntad a Cristo, para vivir en adelante para Cristo y no
para mí mismo. Esta entrega es el milagro de la Justificación, que ocasiona tres
muertes:
a. Muerte a la vieja vida, por la Justificación. 2 Cor 5:17
La justificación me libra de la condenación del pecado
Me arrepiento, confieso a Dios mi pecado y él me perdona.
b. Muerte al viejo hombre. Gal 5:22
Aunque los pecados hayan sido perdonados y abandonados, la vieja na-
turaleza carnal aún continúa actuando, y necesito vencerlos por la gracia
de Dios.
Esta es la santificación que me libra del poder del pecado.
c. La muerte diaria del nuevo hombre.
1 Corintios 15:31 “…que cada día muero.”
98
Puede haber aquí una aparente contradicción, el nuevo hombre no puede mo-
rir, porque ya murió. Sin embargo hay algunas cosas que deben morir:
- Muerte a la comodidad, no hacer nada por Cristo.
- Muerte a la confianza en las cosas materiales.
- Muerte diaria al egoísmo.
2. “Tome su cruz cada día” ¿Qué quiere decir esto?
Que yo asumiré todas las responsabilidades, los riesgos, los sacrificios y peli-
gros que acompañan este discipulado, aún a riesgo de mi propia vida. Cada día
debo consagrarme a Cristo. Debo estar dispuesto a llevar cualquier cruz que
el deber me pida.
B. Mi segunda renuncia: a mis propios planes y deseos.
“Porque lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la
vanagloria de la vida no proviene del Padre, sino del mundo.” 1 Juan 2:16, Tito 2:12
“Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede
ser mi discípulo.” Lucas 14:33
1. La renuncia que los discípulos hicieron fue progresiva.
a. Al comienzo Cristo llamó a Pedro, Andrés, Jacobo y Juan y no les pidió que
vendieran sus barcas y redes. Jn 1:35-51
b. Cuando ellos fueron llamados definitivamente, lo dejaron todo para seguir
a Jesús. (Lucas 5:11)
2. Nuestra renuncia como discípulos de Jesús debe ser progresiva.
En el área de los bienes debemos dar estos pasos:
a. El Primer Paso:
 Devolver nuestros diezmos.
 Expresar nuestra gratitud dando ofrendas sueltas.
b. El Segundo paso:
 Expresar nuestra gratitud a Dios dando como ofrendas un segundo
diezmo.
 Expresar nuestra gratitud a Dios donando parte de las posesiones
que tenemos a la causa de Dios.
c. El Tercer paso es: entregarlo todo a Dios.
99
 “Ahora es cuando nuestros hermanos debieran estar reduciendo sus propiedades
en vez de aumentarlas...Me fue mostrado que la voluntad de Dios es que, antes
que venga el tiempo de angustia, los santos se libren de todo cuanto los estorbe
y hagan pacto con Dios por medio de sacrificio. Si ponen sus propiedades sobre
el altar y preguntan fervorosamente a Dios cuál es su deber, les enseñará cuando
deberán deshacerse de aquellas cosas.” CSMC Pág. 63
IV. CONCLUSIÓN
Ilustración: En Asia ocurrió una gran guerra y muchas familias que trataban de sal-
var sus vidas, escapaban a zonas que estaban fuera de peligro. Millones lograron
salir con seguridad, pero, otros tuvieron que pagar caro cuando fueron aprisio-
nados por los soldados. Un padre, después de haber juntado todo el dinero que
pudo, lo ofreció a sus opresores, pero aun así no lo soltaron. En su desesperación
este padre exclamó: “Es todo lo que tengo. Por favor dejen cruzar la frontera a mi
familia y castíguenme a mí”. Los soldados tomaron su palabra, y lo azotaron con
cañas de bambú con tal brutalidad que le hicieron saltar un ojo. Después lo dejaron
escapar con toda su familia. ¿Qué les viene a sus mentes con esta historia?, ¿eso es
sacrificio? De la misma forma hizo Cristo. ¿Cuantas renuncias hiciste ya?
A. Resumen:
Las tres grandes renuncias que Cristo hizo por amor a la humanidad, son la
base principal para que el poder del Espíritu Santo actúe en nosotros, lleván-
donos a realizar las renuncias que nos calificaran como verdaderos discípulos
de Dios.
Si las renuncias son progresivas. Usted puede evaluarse y ver en qué paso está.
Si el mundo y sus deseos te apartan de Dios, es tiempo de hacer una gran
renuncia.
Si las posesiones de esta tierra constituyen ídolos a los cuales rindes adoración
y devoción, recuerda que tu única esperanza es renunciar a esa vida materia-
lista e invertir en la obra del Señor a través de la Iglesia.
B. Llamado:
Jesús tomo la decisión por amor a ti, de renunciar a sus privilegios.
Dios te invita tomar una decisión, que renuncies a las cosas que ocupan su
lugar.
Que tendrías que renunciar para permanecer en su presencia y un día estar
allá en reino celestial y vivir por siempre.
100
Culto joven
para el 10 de diciembre
SEÑOR: TE ENTREGO MIS OFRENDAS
(Deuteronomio 26:10)
I. INTRODUCCION
A. Al estudiar Ias religiones antiguas, encontramos que en la integración entre
los seres humanos y el ser divino, la ofrenda que llevaba a los dioses era un
aspecto constitutivo de Ia devoción personal, El propósito era buscar en los
dioses sus bendiciones, protección, perdón y dirección.
B. En la religión bíblica, las ofrendas juegan un papel importante en los servi-
cios del Santuario del Antiguo Testamento y en el culto cristiano del Nuevo
Testamento.
C. Analizaremos algunos aspectos de las ofrendas del antiguo Testamento.
También veremos en el Nuevo Testamento la posición de Jesús en relación
a las ofrendas, como también la del apóstol Pablo. Finalmente veremos cuál
debe ser nuestra actitud al dar y cuáles son las características de una ofrenda
aceptable a Dios.
II. LAS OFRENDAS EN EL ANTIGUO TESTAMENTO
A. Mencionadas más que el Diezmo
1. El Antiguo Testamento menciona mucho más las ofrendas que el diezmo.
2. El culto y las ofrendas son prácticamente inseparables en el Antiguo Tes-
tamento
B. Las Ofrendas y los sacrificios expiatorios eran por el pecado y por la culpa
(Lev. 4 y 5)
1. Eran ofrendas que se apartaban para el Señor fuera del santuario y que
luego se las traía al templo y se las entregaba a Dios
2. La eficacia expiatoria se encontraba en la disposición de Dios a perdonar
los pecados de su pueblo. (Lev. 4:26,31).
3. La única función de estas ofrendas era señalar a Dios como el único que podía
expiar el pecado, porque es imposible para el ser humano traer una ofrenda
al Señor que sea suficientemente costosa como para rescatarse a sí mismo.
4. Se describe a Dios como dispuesto a dar, como un “Ofrendante”. Esto
provee una plataforma teológica para la dadivosidad de los seres hu-
101
 manos. La dadivosidad humana debe seguir el modelo divino de dadi-
vosidad. Si comparamos todo lo que Dios da, su pueblo en realidad de
la muy poco.
5. Esto nos ayuda a entender que Dios espera que le traigamos una ofren-
da, porque él mismo ya dio una ofrenda en favor nuestro.
6. Ninguna de nuestras ofrendas cumplen una función expiatoria. Nuestras
ofrendas nunca deben ser un intento de ganar simpatía, el amor o el
perdón de Dios. Lo que hace aceptable nuestras ofrendas es la ofrenda
sacrificada del Hijo de Dios que santifica nuestra dádiva.
C. Otras Ofrendas en el Antiguo Testamento: Las ofrendas quemadas (Lev. 1:3-
17) y las Ofrendas de Paz (Lev. 3:1-17). Sus características nos llevan a la con-
clusión de que:
1. Una ofrenda es algo que cuesta al dador, porque se privaba de un animal
costoso y útil al darlo al Señor.
2. Dios no espera que todos den en la misma cantidad, pero se da entender
que cada cual podía traer algo al Señor.
3. Dios considera especialmente la disposición interior del dador y el deseo
de adorarlo es más importante que el valor monetario de la ofrenda. La
experiencia interna de uno se expresaría al traer al Señor lo mejor que
pudiera ofrecer.
4. Una ofrenda es una expresión tangible de la entrega plena de una per-
sona al Señor, traída con gratitud y amor.
5. Las ofrendas son requeridas por Dios, pero deben ser expresiones volun-
tarias de gozo y gratitud. También el Señor interpreta la negligencia en
traerle ofrendas como un acto deshonesto (Mal 3:6-8).
6. El privar al Señor de las ofrendas equivale a rechazar su señorío y atribuir
las bendiciones recibidas a algún otro poder.
7. Toda ofrenda presupone una firme entrega total y personal. Por ello ex-
iste una conexión entre una reforma espiritual y el incremento de las
ofrendas (2Cron. 31:1,10-14)
III. LAS 0FRENDAS EN EL NUEVO TESTAMENTO
A. Son mencionadas mucho menos que en el A.T.
1. Hay pocas referencias a las ofrendas en el Nuevo Testamento, aunque
se usa extensamente el verbo “dar”. Pero por lo que impresiona es que
alrededor del 25 por ciento de las veces que se usa el verbo “dídomi”,
Dios es el sujeto.
2. Él no da el pan cotidiano (Lucas 11:3), la lluvia, la cosecha el alimento
(Hech.14:17), la vida y todo o que necesitamos (Hechos 17:25). Nos da
arrepentimiento (Hech.11:18) victoria (1Cor. 15:57), gracia (1Ped. 5:5),
amor (1Juan 3:1), sabiduría (Sant. 1:5_), el Espíritu Santo (Juan 3:34), los
102
dones espirituales (1Cor. 12:7-10), y la vida eterna (1Juan 5:4) a través
de su Hijo (Juan 3:16).
3. El Nuevo Testamento describe a Dios y a Cristo como los grandes Dadores
que enriquecen a los seres hermanos mediante su bondadosa gracia
4. El propósito de la dadivosidad cristiana no es suplir las necesidades de
Dios puesto que él no necesita nada. (Hecho.17:25). Nuestro dar nos
hace más semejantes a nuestro Señor.
B. Jesús y las Ofrendas.
1. Cuando Jesús nació, los magos no vinieron con las manos vacías, sino
que trajeron con ellos dones para el nuevo Rey. Habían venido para
adorarlo (Mat. 2:2). En este pasaje se asocia la ofrenda o don costoso
con los conceptos de adoración, homenaje y sumisión.
2. Para Jesús, una ofrenda reflejaba no sólo un estado de paz con Dios,
sino también con la comunidad de la cual uno formaba parte. El vivir en
armonía era casi un prerrequisito al dar una ofrenda. Una ofrenda nunca
expresara el amor y la gratitud a Dios si proviene de un corazón conflic-
tivo y que está en guerra con sus semejantes.
3. Las dimensiones verticales y horizontales de nuestra experiencia religio-
sa se intersectan en el acto de adoración mediante la ofrenda.
4. El dar una ofrenda a Dios no es evidencia automática de nuestra entrega
indivisa al Señor como persona. La viuda y el rico trajeron ofrendas vol-
untarias para el sostén de los servicios del templo. Para el rico una ofren-
da tal era una formalidad religiosa que podía satisfacerla con un mínimo,
una muestra, no de lo que podía dar, sino de lo que estaba dispuesto a
dar. En cambio la viuda trajo lo único que tenía, confiando en que Dios
proveería para ella. Su dádiva se basaba en una decisión, en una lucha de
fe, en la que prevalecieron su amor y su gratitud a Dios.
5. Todo esto sugiere que la verdadera benevolencia es más que compartir
o dar. Tiene que ver con la condición interior de la persona, la fuerza
espiritual de su amor a Dios. Este entendimiento erradica el egoísmo
del acto de dar. Jesús afirmo claramente que debemos dar sin esperar
recompensa alguna de otros, por consiguiente, nuestra dádiva debe ser
silenciosa y secreta (Mar.6:1-4).
6. Jesús rechaza el egoísmo como motivación para dar por que corrompe la
ofrenda. La dádiva debe provenir de un corazón dispuesto a dar y debe
llegar a ser una respuesta natural de amor a Dios y de fe en Él (Lucas 6:30).
C. San Pablo y las ofrendas.
1. Pablo es el que más aborda la teología de las ofrendas.
2. Pablo era renuente a aceptar ofrendas. De esa forma rechazo el derecho
al sostén financiero de su ministerio de parte de los miembros de la igle-
sia (2Tes. 3:9). Además quería demostrar que no era avaro. Pablo estaba
103
 usando su libertad para proclamar el evangelio sin ocasionarle gastos a
la iglesia a fin de proteger la integridad de su ministerio apostólico.
3. Estando en prisión, Pablo recibe, a través de Epafrodito, una ofrenda de
las iglesias de Macedonia para él (Fil. 4:10-19). La ofrenda de los mace-
donios no era el resultado de un arranque emocional, sino que se basaba
en un análisis racional, en el reconocimiento de una necesidad real de
alguien a quien se está unido emocional y espiritualmente, y con cuya
misión podían identificarse. Mediante esta ofrenda, los macedonios par-
ticiparon de las aflicciones de Pablo (Fil. 4:17) y finalmente este don fue
aceptable al Señor (Fil. 4:18).
4. La ofrenda especial para los hermanos necesitados en Jerusalén fue pro-
movida por Pablo. El don de la gracia de Dios (2Cor. 8:1), el ejemplo de
Cristo (2Cor. 8:9) y las bendiciones de Dios (2Cor. 9:8-11) fueron los ar-
gumentos utilizados por Pablo para que los cristianos gentiles recogieran
la ofrenda para sus hermanos judíos. La participación en la colecta no
era un acto incidental, sino bien planeado. Estaba basada en los ingresos
personales (2Cor. 8:11), debía apartarse en el hogar (1Cor. 16:2), deter-
minando que el poner a parte la ofrenda era un asunto de familia y de-
bía entregarse a personas calificadas (2Cor. 8:17-23), para que la colecta
fuese manejada en forma adecuada.
a) Pablo enfatizó la actitud que se debía tener al dar. Esperaba que
fuese con el espíritu adecuado. Debía experimentarse el dar como
un privilegio (2Cr. 8:4), dar voluntariamente (2Cor. 9:7), y dar gen-
erosamente (2Cor. 9:11,13).
b) Finalmente la colecta tenía varios propósitos: suplir las necesidades
materiales de la iglesia en Jerusalén; también fortalecer la unidad de
la iglesia y dar expresión a esta unidad en forma objetiva; además
era necesario expresar el amor cristiano, y por último, alabar a Dios.
IV. UNA OFRENDA ACEPTABLE A DIOS
El motivo para dar:
A. El amor a Dios es lo que motiva a los cristianos a dar ofrendas, un amor desin-
teresado cuyo foco de atención es Dios y los seres humanos.
Sólo por medio de la ofrenda sacrificial de Cristo somos aceptados por Dios. Por
lo tanto, para que nuestra ofrenda sea aceptable ante Dios es necesario que:
Sea una expresión de nuestra auto entrega a Dios. Una ofrenda es una ex-
periencia profundamente religiosa por que revela una vida enteramente en-
tregada al Señor.
B. Testifica que Dios está primero en la vida del creyente, dándole el mejor y más
costoso don dependiendo de los recursos de la persona.
Expresa fe en el cuidado providencial de Dios por nosotros. Tal ofrenda provi-
ene de un corazón que confía en un Dios personal que suple nuestras verdad-
eras necesidades.
104
C. Es la manifestación visible de la gratitud, la alabanza, el gozo y el amor del
adorador. Una ofrenda es la forma concreta que toman nuestros sentimientos
y actitudes interiores hacia el amor de Dios en el acto de adoración.
D. Es voluntaria. Dios requiere que experimentemos el gozo de dar que en-
riquece nuestras vidas.
Refleja nuestra entrega al mensaje y la misión de la iglesia. Debemos estar dis-
puestos a poner nuestros recursos al servicio del plan de Dios para la humanidad.
E. Proviene de un corazón que está en paz con Dios y con los demás. El tratar a
otros bondadosamente es un deber tan religioso como traer ofrendas a Dios.
Aunque espontanea, la ofrenda debe ser sistemática. Se espera que pla-
neemos nuestra dadiva de acuerdo a nuestros ingresos. Esto nos protege de
dar únicamente motivados por las emociones.
V. CONCLUSION
A. El fundamento teológico de la práctica de traer ofrendas al Señor está for-
mando a su vez por tres conceptos teológicos principales que se encuentran
interrelacionados:
1. El primer concepto es soteriológico, es decir la disposición constante y
amante de Dios a salvar a los seres humanos del poder del pecado. En el
Antiguo Testamento la disposición de Dios para salvar se manifestó de una
manera particular en el Éxodo cuando el Señor redimió a su pueblo del
poder esclavizador de Egipto. En el Nuevo Testamento, la salvación de Dios
alcanzo su manifestación suprema en el don de su hijo como el único me-
dio de salvación. Dios proveyó la ofenda que ninguna otra persona podía
proveer, la dádiva humana es un pálido reflejo de la dádiva divina.
2. El segundo concepto es la fidelidad de Dios a sus promesas, la perma-
nencia de su Palabra. En el ser divino no hay inconsistencia ni en palabra
ni en hechos. Él prometió morar con los seres humanos, proveyéndoles
de identidad y supliendo sus necesidades. El Señor es confiable y respon-
sable. Hay una constante en el carácter divino que lo hace digno de nutra
confianza. Él es fiel a sí mismo, a su propio carácter.
3. El tercer concepto es el Señorío de Dios. El Dios que nos salvó libremente
y que es fiel a sus promesas es también nuestro Señor. Su señorío no se
limita a la esfera espiritual, sino que incluye de una manera más concreta
el reconocimiento de que todo lo que tenemos es suyo porque él nos o
dio. El señorío divino significa que Él es dueño, pero que está dispuesto a
dar en forma natural de los es suyo a su pueblo. Por consiguiente, lo que
su pueblo posee le llega como un don o bendición del Señor.
B. Estos fundamentos teológicos proveen para nosotros la motivación para dar.
Los seres humanos somos llamados e impulsados a dar por que la gracia de Dios
se revelo en el don de gratuito de la salvación mediante Cristo. Nuestra dádiva
debe ser moldeada conforme al modelo divino. Creados a la imagen de Dios,
los seres humanos deben imitar la disposición divina a dar. Siendo que Dios da
generosamente, los seres humanos deberíamos dar de la misma manera.
105
 C. El reconocimiento del hecho de que hay un Señor que gobierna el universo y
es dueño de lo que hay en él, es la misma base de la benevolencia.
D. Finalmente, podemos estar motivados a dar cuando reconozcamos que Dios
está obrando la salvación de la humanidad a través de su iglesia. Trajo la iglesia
y el ministerio evangélico a la existencia para continuar revelando su gloria al
mundo. Los miembros de la iglesia apostólica encontraron su más grande gozo
al promocionar la causa de Dios mediante sus ofrendas.
E. LLAMADO:
¿Podemos hoy hacer nuestra la experiencia de la iglesia apostólica? Nada
podrá ser más importante para nosotros como creyentes que la proclamación
del evangelio, y considerar un privilegio ser instrumentos de Dios en esta
tarea. Decirles a otros que Dios está reconciliando consigo mismo al mundo,
será significativo para que podamos entregarle al Señor nuestras ofrendas.
Estamos dispuestos a dar las ofrendas que ayudarán en la predicación del
mensaje a todo el mundo.
ORACIÓN.

106