Asesor Jurídico en el Procedimiento Penal.

Índice.
Introducción. 4
Capítulo 1. Antecedentes del asesor jurídico. 6
1.1. Antecedentes mediáticos. 8
1.2. Antecedentes Jurídicos. 9
1.3. Conclusiones preliminares sobre los antecedentes. 12
Capítulo 2. Aspectos teóricos y conceptuales del asesor jurídico. 12
2.1. Requisitos para ser asesor jurídico. 16
2.2. Conceptos. 16
2.3. Análisis teórico conceptual del asesor jurídico. 17
2.4. Conclusiones preliminares sobre aspectos teóricos y conceptuales. 22
Capítulo 3. Marco legal de la actuación del asesor jurídico en el procedimiento
penal. 23
3.1. El asesor jurídico en el artículo 20 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos. 24
3.2. El asesor jurídico y el artículo 21 de la Constitución. 26
3.3. El asesor jurídico en la Ley General de Víctimas. 26
3.4. El asesor jurídico en el Código Nacional de Procedimientos Penales. 32
3.5. El asesor jurídico en la Ley Federal de Defensoría Pública. 35
3.6. El asesor jurídico en la Ley Federal para la Protección a Personas que
Intervienen en el Procedimiento Penal. 37
3.7. Conclusiones preliminares sobre el marco legal del asesor jurídico. 38
Capítulo 4. Análisis crítico del asesor jurídico. 39
4.1. Aspectos a favor. 41
4.2. Aspectos en contra. 42
4.3. Conclusiones. 42
4.4. Propuestas. 43
Conclusiones Generales. 43

1
 Agradezco muy en especial al Dr. Elías Polanco Braga,
por su apoyo, colaboración y paciencia durante
la elaboración de la presente tesina,
la cual tiene el propósito de cumplir con el Examen General de
Conocimientos para la obtención del grado de Maestro en
Derecho con orientación en Derecho Penal.
Agradezco a la Coordinadora
del Posgrados en Derecho de FES Aragón la
Mtra. Elizabeth Mendoza Esparza las facilidades prestadas y al
Lic. Francisco Javier Juárez Mendoza
por sus aportaciones y comentarios.

2
Dedicado a mi familia Hugo, Romy, Blanca,
Frida, Jorge, Mayra,
Javier y Yolanda.

3
Introducción.
En la presente tesina me propongo analizar, explicar y hacer propuestas
complementarias a las figuras del asesor jurídico de la víctima particular y del
asesor jurídico gratuito, también conocido este por la ley en la materia,
denominándolo Asesor Jurídico Federal de Atención a Víctimas.
En un primer capítulo me planteo abordar los antecedentes más próximos del
sujeto procesal que acompaña a la víctima. Analizando las distintas reformas
en materia penal y en materia de Derecho Humanos.
En el segundo capítulo me propongo describir que es el asesor jurídico, tanto
el gratuito como el privado; así como sus deberes ante la víctima,
relacionados con aspectos procesales propios del juicio penal y aspectos
éticos y deontológicos.
Mientras que en el tercer capítulo abordo el aspecto del marco legal que
sustenta la figura del sujeto procesal del asesor jurídico desde la enunciación
de algunos de los tratados y normas internacionales celebradas por México,
así como una referencia y profundización en el análisis detenido de las
normas nacionales en México.
En este mismo capítulo analizo las tres principales normas que enuncian,
tanto la garantía como los derechos de la víctima a contar con asesoría
jurídica siendo estas; la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, la Ley General de Víctimas y el Código Nacional de
Procedimientos Penales; las cuales se estudian y analizan desde la
perspectiva garantista del asesor jurídico.
Todas ellas, vigentes a la fecha. También se emplearon en el presente trabajo
manuales elaborados por la Secretaría Técnica del Consejo de Coordinación
para la Implementación del Sistema de Justicia Penal, el Protocolo de la
Asesoría Jurídica Federal de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas,
todas ellas pertenecientes al Poder Ejecutivo Federal. Desde luego,
acompañamos al presente, las fuentes de consulta académicas relacionadas
con aspectos propios del tema del asesor jurídico.
4
En el cuarto y último capítulo realizo un análisis crítico y me propongo
plantear una serie de propuestas breves.
La primera de ellas; respecto a la autonomía del Asesor Jurídico de Víctimas
Federal.
La segunda es respecto a la remuneración recibida por el trabajo realizado
por parte del asesor jurídico.
También se hace propuesta de una relación de abogados particulares
certificados para asistir a las víctimas.

5
Capítulo 1. Antecedentes del asesor jurídico.
En el presente trabajo me concentro en la figura del asesor jurídico,
advirtiendo que existen pocas fuentes teóricas que atienden el tema de
manera definida y clara. En su mayoría encontraremos obras que relacionan
el aspecto garantista de la víctima y el ejercicio del asesor jurídico como
derecho de la víctima en el ámbito del procedimiento penal. Pero pocas desde
una visión despejada atendiendo únicamente lo relacionado al asesor jurídico.

En los tiempos recientes del Estado Mexicano se ha dado la

necesidad de reivindicar los derechos y garantías de las
personas que han sido víctimas de delitos, como los 49 niños
fallecidos en el incendio del 5 de junio del 2009 en la Guardería
ABC de la Ciudad de Hermosillo, Sonora.1

La reparación del daño causado a las víctimas, así como la importancia de

estas durante el procedimiento penal, es parte del planteamiento del cambio
de paradigma del sistema inquisitivo al sistema acusatorio.

En materia de víctimas del delito es en 1993 cuando se

adicionó un párrafo final al artículo 20 constitucional (Diario
Oficial de la Federación, 3 de septiembre de 1993), para
incorporar los derechos de las víctimas del delito, entre éstos,
los derechos a la asesoría jurídica, a la satisfacción de la
reparación del daño, a coadyuvar con el Ministerio Público.2

1 Gustavo Castillo García, La Jornada, Condenan a entre 20 y 29 años de

cárcel a implicados en incendio de la Guardería ABC, 15 de mayo de 2016,
pág. 6, consultado el 1 de marzo de 2017,
http://www.jornada.unam.mx/2016/05/15/politica/006n1pol

6
Es en ese año de 1993 cuando se le otorga relevancia a la figura de la
víctima, así como a sus derechos dentro del procedimiento penal.

La asistencia jurídica se traduce en garantizar el derecho de

acceso a la justicia y de reparación integral del daño. Este
derecho antes de la multicitada reforma constitucional, se
transformó en una obligación para el Ministerio Público, pero
con la expedición de la Ley General de Víctimas y
posteriormente el Código Nacional de Procedimientos Penales,
se crea la figura del Asesor Jurídico de la víctima como una
opción viable para asistir y representar a la misma cuando así
lo decida sin quitarle la obligaciones al Ministerio Público como
las de informarle el estado en que se encuentra el
procedimiento así como de los derechos que tiene a su favor
explicándole las actuaciones y las consecuencias en todas las
etapas del procedimiento como en el supuesto de otorgar el
perdón.3

En resumen la actual figura del asesor jurídico es creada mediante la

expedición de la Ley General de Víctimas y el Código Nacional de
Procedimientos Penales.

La Ley General de Víctimas publicada el 9 de enero de 2013, y reformada el 3

de mayo de ese mismo año (Diario Oficial de la Federación, 3 de mayo de
2015) es muy puntual respecto a la figura del asesor jurídico, al establecer en
su artículo 7, entre otros, más de 30 fracciones con un catálogo de derechos

2 Pedroza, Susana Thalía, Revista Nuevo Sistema de Justicia Penal, SEGOB,

Año VI, 2015, núm. 9, pág. 8.
3 COBO, Téllez, Sofía M., Proceso Penal Acusatorio y Víctimas del Delito,
Revista Nuevo Sistema de Justicia Penal, núm. 9, 2015, pág. 121.
7
de las víctimas muy amplio. Veamos lo relativo al asesor jurídico y el derecho
de la víctima:

A ser asesoradas y representadas por un asesor jurídico dentro

de la investigación y el juicio, es decir, dentro del proceso penal.4

Con lo anterior afirmo que la víctima puede y debe contar con un asesor
jurídico desde el momento en que el hecho delictuoso le categoriza como
víctima.

Asimismo, lo novedoso ahora (en pleno siglo XXI) es que,

además de la ya existente figura del defensor público que es
para toda persona imputada, se establece la figura del Asesor
Jurídico Federal de Atención a Víctimas y sus equivalentes en
las entidades federativas a través de la creación, conforme los
artículos 79, 82, 165 a 180 de la Ley General de Víctimas y sus
transitorios, de una Comisión Ejecutiva de Atención en cada
entidad federativa.5

La implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal concerniente a los

ámbitos locales sobre todo respecto a los derechos de las víctimas conlleva a
la garantía de tener un asesor jurídico.

Tiene que existir una legitimación del Estado durante la vigencia de la

garantía del debido proceso. Es preciso que la víctima experimente la solidez
del Estado al cumplirse la mencionada garantía a su favor.

1.1. Antecedentes mediáticos.

En México, previa entrada del Nuevo Sistema de Justicia Penal, también

4 Pedroza, Susana Thalía, Revista Nuevo Sistema de Justicia Penal, SEGOB,

Año VI, 2015, núm. 9, pág. 8.
5 Pedroza, Susana Thalía, Revista Nuevo Sistema de Justicia Penal, SEGOB,

Año VI, 2015, núm. 9, pág. 11.

8
conocido como Sistema Penal Acusatorio, adversarial,6 se dio una amplia
difusión dentro de los círculos académicos, barras de abogados, en el sistema
de justicia penal, incluso se llegaron a patrocinar por instituciones como el
Centro de Investigación y Docencia Económica en colaboración con la
Universidad de Stanford, películas como la llamada Presunto Culpable, donde
se exponían las vicisitudes y los padecimientos provocados por el sistema
inquisitivo.

Las opiniones en algunos casos se veían encontradas. Algunos abogados a

favor y algunos otros en contra. La reforma se inició con el Decreto
Constitucional en Materia Penal el diez y ocho del mes de junio del dos mil
ocho, con la cual se modificaron los artículos 16, 17, 19, 20 y 21 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Cuya implementación se dividió en siete etapas y la cual se

terminó de implementar en el mes de junio del dos mil diez y
seis. Como dato adicional esta reforma en el Estado de Baja
California se dio muy cerca del termino para finiquitar la
instauración del NSJP.7

Dentro de este nuevo sistema puesto en marcha con una cobertura total en el
país se plantea la figura de asesor jurídico dotado de una personalidad que en
teoría busca equilibrar dándole mayor presencia y capacidad de acción a la
víctima y a su consultor legal.

1.2. Antecedentes Jurídicos.

a) Reforma del 2008.

6 La palabra adversarial es un anglicismo cuyo significado más cercano al

idioma español es el de contradictorio.
7 Implementacióndel Nuevo Sistema de Justicia Penal, Poder Judicial de la
Federación, Consejo de la Judicatura Federal, junio del 2016, pág. 12 a la 19.
9
El cambio de paradigma constitucional que inicio en 2008 con la publicación
de las reformas a nuestra Constitución Nacional en materia de seguridad
pública y justicia penal, que terminaron con la reforma en materia derechos
humanos y amparo del 2011, con esto se ha diseñado el marco jurídico
vigente de garantías y defensa de los derechos humanos de las víctimas del
delito.
Este ejercicio de los derechos de las víctimas de ninguna manera pretende
sustituir la acción del Ministerio Público, puesto que la víctima, no cuenta con
las facultades, ni los medios que la Constitución le ha otorgado al órgano
persecutor de los delitos.
Aun con lo anterior, no se puede negar que la participación de la víctima junto
con el asesor jurídico, que ha pasado de ser una mera coadyuvante a una
sujeto procesal importante en la investigación y el proceso penal, es pieza
elemental del debido proceso.
También, no se puede negar el efecto directo de las sentencias de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos, las cuales constituyen jurisprudencia
internacional de carácter obligatorio para el Estado Mexicano, mismas que en
diversas ocasiones, han declarado la existencia de graves violaciones a los
derechos humanos de las víctimas del delito, por pretender limitar su
intervención tanto en la etapa de investigación como en el juicio penal y
restringir su derecho a la reparación del daño desde el aspecto económico y
no desde el aspecto integral como lo dispone el Derecho Internacional de los
Derechos Humanos.
Los legisladores diseñaron la figura del sujeto procesal denominado asesor
jurídico, cuyo propósito es el de dar acompañamiento a la víctima y al
ofendido del hecho delictivo. Teniendo esta última la calidad de parte. En una
relación simétrica lo encontramos en la concomitancia entre el Imputado y el
defensor jurídico y el Ministerio Público.

10
 Con la publicación de Ley General de Víctimas, donde se amplía
el catálogo de derechos de las víctimas desde una perspectiva
de derechos humanos e incluye no sólo sus derechos
procesales en materia penal, sino en otras materias como la
civil, laboral y administrativa, entre otras. Por ello, para
garantizar el acceso a la justicia de las víctimas del delito, se
crea la Asesoría Jurídica Federal de Atención a Víctimas y la
figura del Asesor Jurídico de Atención a Víctimas.8
Esta ampliación se da en el sentido de aportar una cobertura profunda y
extensa para los efectos de una verdadera reparación integral del daño. Se
otorga una connotación importante al aspecto integral de restitución de los
daños.

Con la creación del asesor jurídico, se pretende evitar una de las

violaciones más recurrentes a los derechos de las víctimas, que
ha sido negarles su participación en las investigaciones y
procesos penales. Esa negativa implica no sólo una violación de
derechos humanos, sino que de facto representa un obstáculo
para el acceso efectivo a la justicia, entendida está en su
aspecto más amplío de reparación integral, que incluye tres
derechos relevantes:
1. A la verdad, esto es, la posibilidad de conocer lo que sucedió;
2. A que se haga justicia y que no haya impunidad; y,
3. A la reparación integral del daño que se le ha causado.9

8 Diario Oficial de la Federación, 9 de enero del 2013.

9 Programa de Capacitación, Dirección General de Planeación, Capacitación y
Difusión, 2014. Available at http://redxlajusticia.mx/biblioteca-
digital/capacitacion/49.pdf
11
Las anteriores tres garantías son la novedad planteada con la reforma del
2008 concerniente a la víctima y a los ofendidos. La primera de ellas alude al
aspecto histórico de los hechos, la segunda a la persecución del delito y la
impartición de justicia mientras que la última atañe aspectos económicos.
Que en esta ultima (económica) es donde se vierten las recomendaciones
por parte del Comisión Interamericana de Derechos Humanos que le han
hecho a nuestro país.
b) Reforma derecho humanos.

1.3. Conclusiones preliminares sobre los antecedentes.

1. Sobre las conclusiones preliminares podemos advertir que, en efecto, la
figura del asesor jurídico de la víctima quedó replanteada con la reforma penal
del 2008 mediante el llamado cambio de paradigma y la implementación del
nuevo arquetipo penal en el 2016.
2. El nuevo modelo penal dentro de sus múltiples cambios propone una mayor
injerencia por parte de la víctima. Dado el amplio catálogo de derechos que
ésta tiene, en consecuencia, el asesor jurídico tiene mayor participación y
protagonismo en el juicio.
Todos los derechos referidos en el artículo 20 incisos C, así como su óptima
ejecución están condicionados a una correcta y debida asesoría jurídica. Por
tal motivo el profesionista o funcionario público que lleva a cabo tal actividad
debe de estar capacitado en la materia penal así como en las instituciones
que albergan el nuevo sistema penal.

Capítulo 2. Aspectos teóricos y conceptuales del asesor jurídico.

El asesor jurídico es el defensor de los intereses de la víctima u ofendido
dentro del proceso penal. El concepto con el que se refiere al asesor jurídico
sirve para distinguirlo del defensor jurídico en un aspecto meramente
taxonómico, desde un punto de vista de participación durante el proceso,

12
pues ambos pueden concurrir durante las dos etapas de investigación y a las
tres de juicio penal:
1. Investigación inicial.
2. Investigación complementaria.
3. Etapa intermedia.
4. Etapa de juicio oral.
5. Etapa de ejecución de sanción.
La primera de las etapas inicia con el conocimiento de los hechos y
esto puede ser por medio de la denuncia o querella y puede haber
detenido o no y concluye hasta la fecha de audiencia que determina
el juez. En esta etapa se ponen en marcha los mecanismos de
protección a las víctimas y ofendidos.
En la etapa de Investigación complementaria se formula la
imputación, el juez se declara respecto a la legalidad de la
detención, se resuelve sobre el auto de vinculación o no
vinculación, el juez de control puede resolver sobre la prisión
preventiva o aplicar las medidas cautelares.
En la etapa intermedia el juez de control señala fecha de audiencia,
se presentan las excepciones y dialogan las partes, se habré el
proceso de exclusión y admisión de pruebas, el juez de control
declara cerrada la audiencia intermedia y envía el auto de apertura
al Tribunal de Enjuiciamiento.
En la etapa de juicio oral el juez establece el protocolo de audiencia,
se realizan los alegatos de apertura, desahogo de pruebas y
alegatos de apertura. El juez emite el fallo y en caso de ser
condenatorio se fija audiencia para la individualización de la penal.

13
 En la etapa de ejecución de sanciones en esta se plantea la
duración, ejecución y extinción de medidas de seguridad, así como
de la pena y sus efectos. La condición y régimen de reclusión. 10
Es claro, que por una parte, dentro del proceso penal tenemos en la contienda
al acusado y su defensor y por la otra, a la víctima y su asesor jurídico.
Algunos autores también llaman al asesor jurídico el defensor material de la
víctima.
El asignado por el Código Nacional de Procedimientos Penales, en su artículo
tres en el que se plantea un glosario de términos del cual se desprende el
concepto de nuestro interés y que dice así;
I. Asesor jurídico: Los asesores jurídicos de las víctimas,
federales y de las Entidades federativas.11
En contraposición y por descarte se le asigna a la contraparte (acusado) al
Defensor:
El defensor público federal, defensor público o de oficio de las
Entidades federativas, o defensor particular.12
Por lo tanto se utiliza el nombre de asesor jurídico para referirse a la persona
que acompaña a la víctima y la de defensor a quien asiste al imputado.
Podemos decir que de acuerdo con el Dr. Fromow, el propósito del asesor
jurídico de la víctima es:

Orientar, intervenir o asesorar a la víctima desde el primer

momento que tenga contacto con la autoridad, en el
procedimiento penal así como también garantizar sus derechos
humanos, asegurar que tenga un acceso oportuno a la justicia,
que cuente con la posibilidad de optar por hacer uso de los

10 Proyecto de justicia oral, consultado el 1 de marzo del 2017,

http://proyectojusticia.org/sistema-penal-acusatorio-fases-cnpp/
11 Código Nacional de Procedimientos Penales, 2016, art. 3, fracción I
12 CNPP, 2016, art. 3, fracción V.
14
 mecanismos alternativos de solución de controversias y para
que obtenga de forma pronta el acceso a la justicia y a la
efectiva reparación del daño.13
En el Sistema Penal Acusatorio la víctima y ofendido cuentan con la garantía
de asistencia por un asesor jurídico. La autoridad tiene la obligación de
infórmarle sobre sus derechos y la forma en que se llevará a cabo el
procedimiento penal, considerado esto como una de las obligaciones que
tiene los servidores públicos que guardan contacto con la víctima y ofendidos.

Con el sistema Penal Acusatorio la víctima y ofendido tienen derecho a recibir

asesoría jurídica, la cual se traduce no sólo en que la autoridad que la atiende
le debe informar los derechos que tiene y la forma en que se desarrollará el
procedimiento penal, lo cual es una obligación del servidor público.

En palabras de Gómez Columer, el sistema acusatorio pone

por primera vez a las partes a litigar casos en audiencias
orales, en donde las decisiones se juegan realmente en el
trabajo efectivo con la prueba y la argumentación jurídica. De
muchas maneras, esta labor hace de la profesión de abogados
y jueces algo profesionalmente muy atractivo y estimulante. Es
por ello, que la capacitación constante de la defensa o
asesores jurídicos en las destrezas y técnicas de litigación oral
en un contexto de estudio jurídico, científico-dogmático con
relación al caso que atiendan, es “clave” para pretender el éxito
en la prosecución de una efectiva aplicación práctica de la
asesoría o defensa.14

Se hace hincapié a la necesidad de la constante preparación de quienes

13 FROMOW, María de los Ángeles, 2015, ¨Presentación¨, Revista Nuevo

Sistema de Justicia Penal, núm. 9, julio.
14 Hernández, 2015: 273
15
participen en los procesos del nuevo sistema penal. Destrezas como la
oralidad y el conocimiento de la materia penal son indispensables.

2.1. Requisitos para ser asesor jurídico.

Uno de los requisitos esenciales es el contar con cédula profesional y haber
cursado la carrera en una universidad con reconocimiento de validez oficial.
También debe de contar con un registro de cédula que deberá presentar ante
los juzgados como litigante.

Ser especialista y abidido en materia penal y contar con conocimientos en

distintas materias del derecho como lo son el Derecho administrativo, derecho
civil, etc.

2.2. Conceptos.
El concepto de asesor jurídico se remonta por un lado a la época del imperio
romano y a su auge como exportador de dicha cultura y con ello incluyendo el
propio derecho.
El término asesor proviene de la palabra latina adsesor, que
denotaba consejero de un juez o tribunal, también el que
aconsejaba a los funcionarios imperiales en Roma.15
Encontré otras palabras que se utilizaron en distintos periodos de la Roma
antigua para referirse al asesor jurídico como lo son; consultum, consilium.
Mientras que en el alemán encontré la palabra Rechtsberater para referirse al
asesor legal. Compuesto de la unión de dos palabras la primera de ellas;
Rechts, qué significa derecho y la segunda de ellas que es Berater y que su
significado es consultor o asesor.

15 Elías Polanco Braga, Procedimiento Penal Nacional Acusatorio y Oral,

2015, Porrúa, México, D. F., pág. 221.
16
El asesor jurídico se define como el individuo que desarrolla la actividad
profesional de asesorar, aconsejar y representar legalmente a las víctimas
ante las instancias judiciales correspondientes.
Es un sujeto procesal diseñado para generar un
acompañamiento a la víctima u ofendido del hecho delictivo.16
También el Dr. Elías Polanco Braga aporta desde sus luces al concepto de
asesor jurídico diciéndonos que;
El asesor jurídico es la persona letrada que aconseja, orienta,
asiste o actúa en el procedimiento penal en lo relativo al derecho
o se ajusta a él, respecto a los intereses de la víctima u ofendido
durante el desarrollo de ese procedimiento penal.17
Asesor jurídico es el profesionista de las ciencias jurídicas que asiste a la
víctima en la protección de sus derechos e intereses por la vía jurídica o
procedimiento penal.
Víctima: es la persona o ser vivo que sufre un menoscabo en su persona,
integridad física o moral a consecuencia de la comisión de un delito.
Por lo tanto para los efectos del presente trabajo se explica como asesor
jurídico a la persona que acompaña a la víctima u ofendido en la defensa de
sus intereses durante el procedimiento penal.

2.3. Análisis teórico conceptual del asesor jurídico.

Las teorías que actualmente sostienen el avance o estipulación de los
derechos de las víctimas, son las que convergen en los Derecho Humanos.
Reiteradas veces se ha hecho mención por parte de las autoridades
encargadas de la implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal, que

16 TAVILLA Padilla, Carlos, el Asesor Jurídico de la Víctima, 2015, avilable at

http://proyectojusticia.org/asesor-juridico-de-la-victima-sujeto-procesal-en-
muestra/
17 Elías Polanco Braga, Procedimiento Penal Nacional Acusatorio y Oral,

2015, Porrúa, México, D. F., pág. 223.

17
éste gira entorno a las garantías de la víctima u ofendidos, se le da mayor
relieve a estos últimos.
Es en esta protección a sus derechos donde entra como tal el acceso a ser
asesorado, por tal motivo es importantísimo saber cuándo se es víctima.
Uno de los principales y actualizados derechos que se busca proteger
independientemente si se es víctima de un delito o no, es el derecho a la
información y como tal es preciso estar bien informado para la toma de
decisiones. Por tal motivo y bajo esa perspectiva se convierte de capital
importancia el contar con un asesor jurídico.
La persona o personas que siendo víctimas de un delito el Estado les
proporciona un asesor jurídico, en la realidad estos asesores trabajan por
turnos o jornadas. Por tal motivo no existe margen para que las víctimas elijan
al abogado de su conveniencia y por tanto, se le asigna el que se encuentra
en turno o guardia.

Respecto a la gratuidad del acceso a la justicia la Ley General de Víctimas,

refiere;
Todas las acciones, mecanismos, procedimientos y cualquier
otro trámite que implique el derecho de acceso a la justicia y
demás derechos reconocidos en esta Ley, serán gratuitos para
la víctima.18
Por lo anterior, se puede definir a la defensa técnica en palabras de Moreno
Holman, como:

El derecho de todo imputado a contar con un asesor que ejerza

los derechos del imputado ante las autoridades de la
persecución final y de las audiencias. Donde se pueda
reemplazar a un abogado tanto por el inculpado como por la
víctima, y principalmente por el juzgador, ya sea por su falta de

18 LGV, art. 5.
18
 capacidad o sistemática incapacidad, efectividad o inoportuna
defensa o asesoría, donde se tome en cuenta un estándar de
calidad mínima ante una notable incapacidad o falta de interés
de un profesional del derecho que atienda un caso.19

La asignación de un asesor jurídico no es definitiva este puede ser removido

de su cargo si así lo desea la víctima o a consideración del juez, cuando se
le tiene por inepto o ignorante de las instituciones propias del derecho penal.
También debemos de agregar que el asesor jurídico de la víctima debe de
conocer de otras materias del derecho, como lo son el derecho
administrativo, para interponer un recurso por responsabilidad de funcionario
público, pues se habrá de requerir del conocimiento de esa materia en el
momento en que un ministerio público realice actos de omisión o de evidente
negligencia. También deberá de conocer el derecho en materia de Garantías
individuales o DD. HH. El derecho civil en materia de reparación integral del
daño.

Deberes del asesor jurídico con la víctima u ofendido:

El asesor jurídico deberá de hacer efectivos cada uno de los
derechos de la víctima, como el derecho a la verdad, a la
justicia y a la reparación integral; podrá incluso formular las
denuncias y querellas, y vigilará la efectiva protección y goce
de los derechos de las víctimas en las actuaciones del
Ministerio Público, supliendo incluso las deficiencias de éste
ante el Juez.20

Las comunidades indígenas cuentan con la prerrogativa de ser asistidas por

un abogado que hable su lengua o dialecto. Por eso en las comunidades de
los pueblos originarios es un requisito más para el abogado que desee

19 Hernández, 2015: 273.

20 Fromow, 2015: 38
19
emplearse como asesor jurídico el contar con conocimientos plenos de la
lengua o dialecto de la víctima u ofendidos a la cual se propone representar
en el juicio penal.

Dentro de las obligaciones del asesor jurídico con respecto a las víctimas, se
refiere en la Ley General de Víctimas una serie de siete de estas y que en
capítulo correspondiente al análisis del asesor jurídico en la Ley General de
Víctimas se explicara a detalle cada una de estas obligaciones que tiene el
asesor jurídico con la víctima:
I. Procurar hacer efectivos cada uno de los derechos y
garantías de la víctima, en especial el derecho a la protección,
la verdad, la justicia y a la reparación integral. II. Brindar a la
víctima información clara, accesible y oportuna sobre los
derechos, garantías, mecanismos y procedimientos que
reconoce esta Ley. III. Asesorar y asistir a las víctimas en todo
acto o procedimiento ante la autoridad; IV. Formular denuncias
o querellas; V. Representar a la víctima en todo procedimiento
penal; VI. Informar y asesorar a la víctima sobre las medidas
alternativas de resolución de conflictos, y velar por que las
mismas se realicen en estricto respeto de los principios que
sustentan la justicia restaurativa, en especial, la voluntariedad,
y VII. Vigilar la efectiva protección y goce de los derechos de
las víctimas en las actuaciones del Ministerio Público en todas
y cada una de las etapas del procedimiento penal y, cuando lo
amerite, suplir las deficiencias de éste ante la autoridad
jurisdiccional correspondiente cuando el Asesor Jurídico de las
Víctimas considere que no se vela efectivamente por la tutela
de los derechos de las víctimas por parte del Ministerio
Público.21

21 LGV, art. 125

20
Un deber indispensable del asesor jurídico es el conocimiento del proceso
penal, como dice el Código Nacional de Procedimientos Penales, este debe
ser habido en el conocimiento y diestro en las etapas del procedimiento penal.
El procedimiento penal comprende tres etapas.22
El asesor jurídico también deberá conocer sobre aspectos esenciales de la
coadyuvancia:
Si la víctima u ofendido se constituyera en coadyuvante del
Ministerio Público, le serán aplicables en lo conducente las
formalidades previstas para la acusación de aquél. El Juez de
control deberá correr traslado de dicha solicitud a las partes la
coadyuvancia en la acusación por parte de la víctima u
ofendido no alterará las facultades concedidas por este Código
y demás legislación aplicable al Ministerio Público, ni lo eximirá
de sus responsabilidades. Si se trata de varias víctimas u
ofendidos podrán nombrar un representante común, siempre
que no exista conflicto de intereses.23
Las formalidades a que se refiere el artículo mencionado son las que se
encuentran en el numeral 338, denominado cuadyuvancia en la acusación.24

22 CNPP, art. 211

23 CNPP, art. 339
24 CNPP, Art. 338. Coadyuvancia en la acusación. Dentro de los tres días
siguientes de la notificación de la acusación formulada por el Ministerio
Público, la víctima u ofendido podrán mediante escrito: I. Constituirse como
coadyuvantes en el proceso; II. Señalar los vicios formales de la acusación y
requerir su corrección; III. Ofrecer los medios de prueba que estime
necesarios para complementar la acusación del Ministerio Público debiendo
hacerlo de su conocimiento por conducto del juez. En tal caso, el Ministerio
Público, a más tardar dentro del plazo de veinticuatro horas a partir de que
haya recibido el ofrecimiento de medios de prueba de la víctima, deberá
21
2.4. Conclusiones preliminares sobre aspectos teóricos y conceptuales.
1. La teoría que sustenta a la actual figura de la víctima u ofendido así como
al asesor jurídico son las que concernientes a los Derechos Humanos.
2. Es en esta protección a sus derechos donde entran como tal el acceso a
ser asesorados, por tal motivo es importante saber cuándo se es víctima.
3. Uno de los principales derechos que se busca proteger
independientemente si se es víctima de un delito o no, es el derecho a la

comunicarlo al imputado o a su Defensor para que comparezcan ante su

presencia en un plazo que no deberá exceder de cuarenta y ocho horas
contadas a partir del día siguiente de haberse efectuado la notificación, a
tomar conocimiento de ello y, en su caso, para que dé así convenir a sus
intereses, soliciten la expedición de copia de los mismos y/o su acceso según
lo que proceda. La entrega de las copias respectivas y del acceso en su caso
a las evidencias materiales, deberá hacerse inmediatamente así sea
solicitado por la defensa. Una vez que el Ministerio Público entregue copia al
imputado o a su defensa de dichos registros y/o les dé acceso a ellos y,
siempre y cuando la defensa no haya solicitado dentro de los tres días
siguientes a que ello aconteciere que se dé acceso a sus peritos para la toma
de fotografías, videos o práctica de alguna pericial y notificará a la defensa el
cierre del descubrimiento probatorio. En caso que la defensa haya solicitado
el acceso con peritos a los medios probatorios ofrecidos por la víctima u
ofendido dentro del plazo señalado, contará con un nuevo plazo de tres días
contados a partir del día siguiente de su solicitud para presentarlos ante el
Ministerio Público, a fin de que en presencia del mismo lleven a cabo la toma
de fotografías o videos o muestras en su caso, o la práctica de pericia
respectiva, hecho lo cual, el Ministerio Público hará constar en la carpeta de
investigación el cierre del descubrimiento probatorio a su cargo notificándolo a
la defensa para los efectos del artículo 340. IV. Solicitar el pago de la
reparación del daño y cuantificar su monto.
22
información y como tal es indispensable estar informado para la toma de
decisiones. Por tal motivo y bajo esta perspectiva se convierte de capital
importancia el contar con un asesor jurídico.
4. Las figuras de asesor jurídico, defensor así como respectivamente las de
víctima u ofendido y las de imputado están claramente definidas por la
legislación positiva.

Capítulo 3. Marco legal de la actuación del asesor jurídico en el procedimiento

penal.
El marco legal que regula al asesor jurídico que asiste a la víctima se
compone por el artículo 20 apartado C de la Constitución Política de los
Estados Unidos de México, la Ley General de Víctimas, el Código Nacional de
Procedimientos Penales, Ley Federal de Defensoría Pública y por las leyes en
materia de protección a la víctima y los procedimientos en materia penal en
los ámbitos locales de cada entidad.
A continuación menciono algunos de ordenamientos jurídicos desde el ámbito
supranacional, a los cuales se ha suscrito nuestro país:
Carta de las Naciones Unidas.

Carta de la Organización de Estados Americanos.

Convenio Americano sobre Derecho Humanos.

Protocolo a la Convención Americana sobre Derechos Humanos relativos a la

Abolición de la Pena de Muerte.

Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas.

Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de todos los

Trabajadores Migratorios y de sus Familiares.

Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio.

23
Convención Suplementaria sobre la Abolición de la Esclavitud, la Trata de
Esclavos y las Instituciones y Prácticas Análogas a la Esclavitud.

Convenio sobre el matrimonio, la edad mínima para contraer matrimonio y el

registro de los matrimonios.

Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.

3.1. El asesor jurídico en el artículo 20 de la Constitución Política de los

Estados Unidos Mexicanos.
Contar con un asesor jurídico es un derecho constitucional inalienable
comprendido en nuestra Ley Suprema que se menciona en el artículo 20
apartado C de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Por tal motivo es considerada una garantía individual de las víctimas el contar
con un asesor jurídico, puesto que se encuentra expresamente enunciada en
la Ley de leyes.
De los derechos de la víctima o del ofendido:
I. Recibir asesoría jurídica; ser informado de los derechos que en
su favor establece la Constitución y, cuando lo solicite, ser
informado del desarrollo del procedimiento penal.25

La mención de recibir asesoría jurídica está plasmada más como garantía que
como un derecho pues no se describe en que momento o bajo qué
circunstancias se habrá de asignar dicho asesor jurídico.
En materia de derechos humanos, propiamente tal, la víctima
está protegida o cautelada —o cubierta— por los derechos de la
citada Ley, cuya base se encuentra en el apartado C del artículo

25 CPEUM, art. 20, Fracción C

24
 20 de la CPEUM.26

Podemos decir que la garantía de la víctima a contar con un asesor jurídico es

un derecho humano consagrado en la normatividad nacional e internacional.
Su ejercicio debe de ser práctico e inmediato.

El derecho a la asesoría jurídica de la víctima, precisa su

garantía inmediata, es decir, en el momento del proceso penal
por las diversas autoridades y no hasta que se ejerza otro
recurso administrativo, como el de responsabilidad profesional,
lo que podría ser factible empleando una eficaz metodología e
interpretación nacional o internacional atendiendo al caso en
concreto y basado en derechos humanos fundamentales, en
pro de un equilibrio de partes, como con la creación de
instrumentos jurídicos, que ayuden a distinguir, equilibrar o a
eliminar una sistemática incapacidad de un profesional en
derecho.27

De las críticas a la reforma relacionadas con la víctima y sus derechos dentro

del artículo 20 Constitucional, se encontró que:

Una crítica de técnica legislativa, que se ha formulado contra

esta reforma constitucional, apunta que los derecho de las
víctimas u ofendidos quedaron dentro del mismo artículo que
recoge las garantías de los inculpados, sin ninguna separación
formal entre unas y otras.28

Una de mis propuestas es integrar en otro artículo de nuestra Constitución lo

26 Witker, 2016: 95 WITKER, V., Jorge, Juicios Orales y Derecho Humanos,

UNAM, IIJ, México, 2016.
27 Hernández, 2015: 282
28 Islas, 2003: 9
25
que son los derechos y garantías de las víctimas y ofendidos. Con la finalidad
de salvaguardar las garantías plenas de manera íntegra, evitando que estén
sujetas a acuerdos o negociaciones legislativas o de cualquier ámbito de la
justicia, que pudieran dar pasos a un retroceso en el avance obtenido.

3.2. El asesor jurídico y el artículo 21 de la Constitución.

Encontré que este precepto legal plantea de inicio el acceso a la justicia
penal, pues este garantiza el ejercicio de la acción penal por parte de la
autoridad investigadora como el ejercicio de la acción penal por parte de los
particulares, siendo este el punto de inicio del proceso penal. Este aspecto es
importante para el asesor jurídico porque en el precepto aludido se determina
o justifica cuando se puede constituir como coadyuvante la víctima y su
asesor jurídico.
Artículo 21. La investigación de los delitos corresponde al
Ministerio Público y a las policías, las cuales actuarán bajo la
conducción y mando de aquél en el ejercicio de esta función. El
ejercicio de la acción penal ante los tribunales corresponde al
Ministerio Público. La ley determinará los casos en que los
particulares podrán ejercer la acción penal ante la autoridad
judicial.29
El texto puede resultar algo parco o limitado pues no describe los tipos de las
acciones penales que existen lo cual se puede justificar que pertenece al
campo teórico del Derecho Procesal. Que encierran a la denuncia y a la
querella.

3.3. El asesor jurídico en la Ley General de Víctimas.

El contar con un asesor jurídico es uno de los derechos de las víctimas
enunciados en la ley de la materia respectiva, referido de manera textual en la
fracción cuatro de su artículo doce.

29 Artículo 21, Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

26
 El artículo doce en su fracción cuatro, habla sobre el derecho
que tiene toda víctima u ofendido de contar con una asesoría
jurídica y las demás fracciones se relacionan entre si
describiendo las principales funciones del asesor jurídico como
conocedor del derecho y, de las que se podría beneficiar la
víctima son en general; las de recibir orientación, representación
y asesoría, entre otras funciones específicas que se señalan en
el artículo 12, de la LGV.30

A continuación el texto de la fracción en mención de la Ley General de

Víctimas que refiere sobre la cuestión del derecho a contar con un asesor
jurídico:

Las víctimas gozarán de los siguientes derechos: IV. A ser

asesoradas y representadas dentro de la investigación y el
proceso por un Asesor Jurídico. En los casos en que no quieran
o no puedan contratar un abogado, les será proporcionado por el
Estado, de acuerdo al procedimiento que determine esta Ley y
su Reglamento; esto incluirá su derecho a elegir libremente a su
representante legal.31
También en la misma ley se refieren los artículos relacionados con la
información y asesoría complementaria conocidas como medidas en materia
de asesoría jurídica, que las autoridades deben de otorgarles a las víctimas u
ofendidos, estos artículos son los 4232 y 43.33 Los mencionados preceptos son

30 Hernández, 2015: 269

31 LGV, art. 12
32 Artículo 42. Las autoridades del orden federal, de las entidades federativas
y municipios brindarán de inmediato a las víctimas información y asesoría
completa y clara sobre los recursos y procedimientos judiciales,
administrativos o de otro tipo a los cuales ellas tienen derecho para la mejor
27
de observancia para los tres órdenes de gobierno.

Por lo que se deduce, que las autoridades deberán procurar que

los profesionales del derecho que defiendan a toda víctima,
deberán vigilar que se encuentren capacitados o que en caso
contrario puedan ser sustituidos tanto por la víctima como por el
órgano jurisdiccional.34

La víctima podrá solicitar al juez la remoción del asesor jurídico que se le

haya asignado o si el propio juez le considerara incompetente.

Las personas que den la información deberán ser expertos y

encontrarse actualizados en la materia penal la cual deberá ser
dada de manera gratuita; La información y asesoría deberán
brindarse en forma gratuita y por profesionales conocedores de
los derechos de las víctimas, garantizándoles a ellas siempre un
trato respetuoso de su dignidad y el acceso efectivo al ejercicio
pleno y tranquilo de todos sus derechos.35

defensa de sus intereses y satisfacción de sus necesidades, así como sobre

el conjunto de derechos de los que son titulares en su condición de víctima.
La Comisión Ejecutiva garantizará lo dispuesto en el presente artículo a través
de la Asesoría Jurídica federal o de las entidades federativas, en los términos
del título correspondiente.
33 Artículo 43. La información y asesoría deberán brindarse en forma gratuita y
por profesionales conocedores de los derechos de las víctimas,
garantizándoles a ellas siempre un trato respetuoso de su dignidad y el
acceso efectivo al ejercicio pleno y tranquilo de todos sus derechos.
34 Hernández, 2015: 270
35 LGV, art. 43
28
Se le garantiza a la víctima su derecho a tener un asesor jurídico. Si en
algún momento no se le otorgase, éste podrá ser asignado en cualquier
tiempo bajo el siguiente precepto legal:
Sobre las medidas de restitución que la víctima tiene derecho:
Las víctimas tendrán derecho a la restitución en sus derechos
conculcados, así como en sus bienes y propiedades si hubieren
sido despojadas de ellos. II. Restablecimiento de los derechos
jurídicos.36
Como se puede observar en la Ley General de Víctimas se amplía lo
referente en el artículo veinte párrafo C de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos sobre los derechos de las víctimas, a lo cual
podemos mencionar que los derechos de rehabilitación y el derecho a la
asesoría jurídico están relacionados.
Respecto a las medidas de rehabilitación y el asesoramiento
jurídico; Las medidas de rehabilitación incluyen, entre otras y
según proceda, las siguientes: II. Servicios y asesoría jurídicos
tendientes a facilitar el ejercicio de los derechos de las víctimas
y a garantizar su disfrute pleno y tranquilo.37
Respecto a las compensaciones que deberá recibir la víctima la relacionada
con gastos y costas por accesoria jurídica privada:
VI. El pago de los gastos y costas judiciales del Asesor Jurídico
cuando éste sea privado.38
Los asesores jurídicos asignados por el estado son gratuitos y no causarán el
pago de gastos y costas exigidos por la contraparte:
En el caso que el asesor jurídico fuera asignado por el Estado, o de manera
gratuita, éste deberá observar lo que expresa el artículo 120 de la Ley
General de Víctimas que habla sobre los servidores públicos.

36 LGV art. 61
37 LGV, art. 62
38 LGV, art. 64, fracción VI

29
Se hace alusión específica del asesor jurídico a lo que está obligado o como
dice la propia Ley General de Víctimas en su capítulo ocho titulado Del Asesor
Jurídico de las Víctimas;
Corresponde al asesor jurídico de las víctimas:
I. Procurar hacer efectivos cada uno de los derechos y
garantías de la víctima, en especial el derecho a la
protección, la verdad, la justicia y a la reparación
integral; II. Brindar a la víctima información clara,
accesible y oportuna sobre los derechos, garantías,
mecanismos y procedimientos que reconoce esta Ley;
III. Asesorar y asistir a las víctimas en todo acto o
procedimiento ante la autoridad; IV. Formular denuncias
o querellas; V. Representar a la víctima en todo
procedimiento penal; VI. Informar y asesorar a la víctima
sobre las medidas alternativas de resolución de
conflictos, y velar por que las mismas se realicen en
estricto respeto de los principios que sustentan la justicia
restaurativa, en especial, la voluntariedad, y VII. Vigilar
la efectiva protección y goce de los derechos de las
víctimas en las actuaciones del Ministerio Público en
todas y cada una de las etapas del procedimiento penal
y, cuando lo amerite, suplir las deficiencias de éste ante
la autoridad jurisdiccional correspondiente cuando el
Asesor Jurídico de las Víctimas considere que no se vela
efectivamente por la tutela de los derechos de las
víctimas por parte del Ministerio Público.39
Se amplía el margen de actuación del asesor jurídico más allá de un mero
informador; se plantea la posibilidad de que a iniciativa de éste se puedan

39 LGV, art. 125

30
suplir las deficiencias del Ministerio Público. Esto contribuye a eliminar los
vicios que pudieran existir en la etapa de investigación.
En la primera de las obligaciones del asesor jurídico con su asistido o
representado las pretensiones de dicho asesor deberán ser las de hacer
efectivos los derechos y garantías de las víctimas, siendo estos los
contenidos en los artículos 20 párrafo C y artículo 21 segundo párrafo. Los
contenidos en la propia Ley general de Víctimas y en los artículos 17, 105,
109 fracción XXI y 110 del Código Nacional de Procedimientos Penales.
Sobre el primero de los derecho se debe decir que el asesor jurídico debe
procurar la protección de los derecho y garantías de las víctimas. El segundo
de ellos alude a que toda víctima u ofendido tiene derecho a conocer la
verdad histórica de los hecho que condujeron a la constitución del delito que
lo victimizo. El derecho a la justicia y esto implica su acceso a ella así como el
cumplimiento del debido proceso apegado a la legislación vigente y
observando a los principios de publicidad, contradicción, concentración,
continuidad e inmediación. Y el último de ellos enunciados en esta primera
fracción el denominado derecho a la reparación integra comprende la
restitución, rehabilitación, compensación, satisfacción y las medidas de no
repetición.
Los grupos, comunidades u organizaciones sociales tiene derecho a la
reparación colectiva así como a la implementación de las medidas colectivas.
Respecto al segundo de estos compromisos del asesor jurídico con la víctima
es sobre la información que el primero debe compartir al segundo debiendo
ser esta información compartida de manera clara, accesible y oportuna.
Respecto a la claridad esta información debe de ser compartida en el mismo
idioma o lengua que hable la víctima en un lenguaje llano no barroco ni
rebuscado.
Respecto al tercero de las obligaciones del asesor jurídico con la víctima, en
todo momento procesal y ante toda autoridad el asesor deberá acompañar a
la víctima y esto quiere decir que el asesor deberá de promover ante las
31
instancias adecuadas los recursos legales correspondientes con el fin de
proteger los intereses de la víctima u ofendidos.
Respecto al cuarto de los compromisos el asesor jurídico deberá de formular
las denuncias o querellas a nombre y en representación de la víctima según
sea el delito de que se tratara.
Sobre la quinta de las responsabilidades que es la de representar por parte
del asesor jurídico a la víctima durante el procedimiento penal, en las etapas
de Investigación que comprende dos fases la de Investigación Inicial y la de
Investigación complementaria así como las etapas Intermedia o de
preparación de juicio y juicio.
Sobre la sexta de las obligaciones del asesor jurídico de Informar y asesorar a
la víctima sobre las medidas alternativas de resolución de conflictos, las
cuales son: Acuerdos reparatorios y la Suspensión condicional del
procedimiento. También tiene la obligación de velar por que estas se realicen
en estricto respeto de los principios que sustentan la justicia restaurativa, en
especial, la voluntariedad.
Sobre la séptima y última de las obligaciones del asesor jurídico con la víctima
es crucial e innovadora en cuanto a su arribo a nuestra legislación. Es esta la
fracción que da la pauta para suplir las deficiencias del Ministerio Público. Las
deficiencia deben de ser de las de tipo que vulneren las garantías y derechos
de las víctimas. Estas deficiencias pueden ser suplidas en cualquiera de las
etapas referidas anteriormente.
Las siete obligaciones que antes se han expuesto y explicado deben de ser
consideradas de manera importante por parte de los asesores jurídicos, sean
particulares o públicos.

3.4. El asesor jurídico en el Código Nacional de Procedimientos Penales.

Respecto al derecho que tiene toda víctima de contar con un asesor jurídico
el código adjetivo en materia penal se hace mención de que la víctima puede
acceder a un asesor gratuito otorgado por el Estado Mexicano. En el caso

32
hipotético de que la víctima en un inicio contará con un asesor jurídico
particular y en una etapa posterior optara por uno público, esta opción es
viable conforme al artículo 17 de la ley en mención.
La víctima u ofendido tendrá derecho a contar con un Asesor
jurídico gratuito en cualquier etapa del procedimiento, en los
términos de la legislación aplicable. Corresponde al Órgano
jurisdiccional velar sin preferencias ni desigualdades por la
defensa adecuada y técnica del imputado.40
Respecto a la figura procesal del asesor jurídico se plantea un equilibrio frente
al defensor, esto representa una novedad contenida en la actual reforma
constitucional del 2008:
Conforme al CNPP, el asesor es un sujeto procesal y posee
calidad de parte (artículo 105), calificación que resulta
cuestionable, aunque el asesor se aproxime cada vez más a
dicha calidad conforme a la normativa del Código,
emparejándose progresivamente a la situación del defensor.
Nada de esto implica, sin embargo, que ocupe uno de los
vértices de la relación jurídica procesal; ello corresponde al
ofendido o víctima.41

Ha sido de manera gradual este acercamiento que menciona García, pues

en las legislaciones anteriores a la reforma del 2008 no se consideraba
sujeto procesal al asesor jurídico.

Los sujetos del procedimiento que tendrán la calidad de parte

en los procedimientos previstos en este Código, son el
imputado y su Defensor, el Ministerio Público, la víctima u
ofendido y su Asesor jurídico.42

40 CNPP, art. 17
41 García,
2016: 43
42 CNPP, art. 105

33
En el artículo 109 del Código Nacional de Procedimientos Penales, se
establece que la víctima u ofendido tendrán los siguientes derechos respecto
a la comunicación e información con su asesor jurídico:

A comunicarse, inmediatamente después de haberse cometido el

delito con un familiar, e incluso con su Asesor jurídico.43
Conforme a la nueva legislación la víctima tiene la oportunidad de impugnar
por medio de su asesor jurídico o por si misma las omisiones o negligencias
que cometa el Ministerio Público; esto representa un progreso en materia de
salvaguardar las garantías e intereses de la víctima, pues anterior a la
reforma, las actuaciones de la autoridad investigadora eran definitivas:

A impugnar por sí o por medio de su representante, las

omisiones o negligencia que cometa el Ministerio Público en el
desempeño de sus funciones de investigación, en los términos
previstos en este Código y en las demás disposiciones legales
aplicables.44
Otro punto a considerar es que desde la legislación se da entrada a la
aceptación de que una autoridad en este caso el Ministerio Público puede ser
susceptible de errores, equivocaciones o de una conducta errada.
Una crítica que se hace al monopolio de la investigación por parte del
Ministerio Público en el sistema inquisitivo y advirtiendo como parte del
cambio de paradigma contenido en el artículo 110 del Código Nacional de
Procedimiento Penales, la menciona el Dr. Jorge:
Conviene recordar que en el proceso inquisitivo los derechos de
la víctima eran prácticamente expropiados por el Ministerio
Público, quien actuaba en su representación, sin consentimiento
o conocimiento alguno de la víctima. Por el contrario, hoy la

43 Artículo 109, fracción IV del Código Nacional de Procedimientos Penales.

44 Artículo 109 fracción XXI del Código Nacional de Procedemos Penales.
34
 víctima participa de manera activa ya sea personal o a través del
asesor jurídico en el curso del procedimiento. Esto lo establece
el artículo 110 del CNPP, en su párrafo primero.45

Esto representa una clara flagrancia a la garantía de búsqueda de la verdad y

de la justicia. Pues una vez realizada la actuación por parte del Ministerio
Público y cerrada la etapa correspondiente la víctima no podría inconformarse
contra las actuaciones del ente investigador. Algo totalmente diferente a lo
que se plantea hoy consagrado en el artículo 109 fracción XXI 46 del Código
Nacional de Procedimientos Penales, relacionándose de manera implícita con
el artículo 21 de la Constitución y de manera explícita con el artículo 125
fracción VII de la Ley General de Víctimas.

3.5. El asesor jurídico en la Ley Federal de Defensoría Pública.

La ley que a continuación habré de analizar y explicar en lo relacionado con el
asesor jurídico contiene el marco regulatorio de la prestación de servicios por
parte de los defensores y asesores jurídicos. Estos últimos son considerados
servidores públicos cuya relación laboral con el Consejo de la Judicatura
Federal es de trabajadores de confianza.

La ley que me encuentro en estudio y me propongo explicar regula la

prestación de los servicios gratuitos que proporcionan tanto los defensores a
los imputados como a los asesores jurídicos a las víctimas u ofendidos.

Respecto a los servicios prestados por el asesor jurídico la ley dice:

Los servicios de defensoría pública se prestarán a través de:

45 Witker,2016: 93 y 94
46 A impugnar por sí o por medio de su representante, las omisiones o
negligencia que cometa el Ministerio Público en el desempeño de sus
funciones de investigación, en los términos previstos en este Código y en las
demás disposiciones legales aplicables.
35
 Asesores jurídicos, en asuntos de orden no penal, salvo los
expresamente otorgados por la Ley a otras instituciones.47

A la institución entre otras a que se refiere de manera excepcional en materia

penal es a la propia institución de la víctima u ofendidos.

En esta ley también se refieren una serie de siete obligaciones casualmente el

mismo número de obligaciones con las víctimas referidas en la Ley General
de Víctimas.

Los defensores públicos y asesores jurídicos están obligados a: I.

Prestar personalmente el servicio de orientación, asesoría y
representación a las personas que lo soliciten en los términos que
establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
esta Ley y las demás disposiciones aplicables; II. Representar y
ejercer ante las autoridades competentes los intereses y los
derechos jurídicos de los defendidos o asistidos, a cuyo efecto harán
valer acciones, opondrán excepciones o defensas, interpondrán
incidentes o recursos y realizarán cualquier otro trámite o gestión
que proceda conforme a Derecho que resulte en una eficaz defensa;
III. Evitar en todo momento la indefensión de sus representados; IV.
Vigilar el respeto a los derechos humanos y sus garantías de sus
representados; así como promover el juicio de amparo respectivo o
cualquier otro medio legal de defensa, cuando aquellos se estimen
violentados; V. Llevar un registro y formar un expediente de control
de todos los procedimientos o asuntos en que intervengan, desde
que se les turnen hasta que termine su intervención; VI. Atender con
cortesía a los usuarios y prestar sus servicios con diligencia,
responsabilidad e iniciativa, y VII. Las demás que se deriven de la

47 Ley Federal de Defensoría Pública, artículo 4, 2016.

36
 naturaleza de sus funciones y de las disposiciones legales
aplicable.48

En la ley también se refieren una serie de tres prohibiciones que de manera

implícita también está obligado a cumplir el asesor jurídico.

A los defensores públicos y asesores jurídicos les está prohibido:

I. Desempeñar otro empleo, cargo o comisión en alguno de los
tres órdenes de gobierno, salvo el 
 desempeño de actividades
docentes; II. El ejercicio particular de la profesión de abogado,
salvo que se trate de causa propia, la de su cónyuge o su
concubina, concubinario, así como parientes consanguíneos en
línea recta sin limitación de grado, y colaterales hasta el cuarto
grado, por afinidad o civil, y III. Actuar como mandatarios
judiciales, tutores, curadores o albaceas, depositarios judiciales,
síndicos, administradores, interventores en quiebra o concurso, ni
corredores, notarios, comisionistas, árbitros, ni ser mandatarios
judiciales ni endosatarios en procuración, o ejercer cualquier otra
actividad cuando ésta sea incompatible con sus funciones.49

3.6. El asesor jurídico en la Ley Federal para la Protección a Personas que

Intervienen en el Procedimiento Penal.
De una manera implícita la ley otorga protección al asesor jurídico, esto lo
podemos constatar en el capítulo cinco sobre las personas protegidas en el
artículo quince que dice:

De acuerdo con el artículo 2, fracciones IX y X, de la presente

Ley, podrán incorporarse al Programa: a) Víctimas. h) Quienes
hayan colaborado eficazmente en la investigación o en el

48 Artículo 6 de la Ley Federal de Defensoría Pública, 2016.

49 art. 7, LFDP. 2016
37
 proceso. i) Otras personas cuya relación sea por parentesco o
cercanas a las señaladas en los incisos anteriores y por la
colaboración o participación de aquellos en el Procedimiento
Penal les genere situaciones inminentes de amenaza y riesgo. 50
Se protege a la víctima refiriéndola de una manera explícita y literal en el
inciso a y al asesor jurídico en los incisos h e i del mencionado artículo.

3.7. Conclusiones preliminares sobre el marco legal del asesor jurídico.

1. El marco legal del asesor jurídico y la víctima queda compuesto por el
artículo 20, Apartado C de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, por la Ley General de Víctimas, por el Código Nacional de
Procedimientos Penales, Ley Federal de Defensoría Pública y la Ley Federal
para la Protección de las Personas que Intervienen en el Procedimiento
Penal.
2. Sobre el apartado C del artículo 20 de la Carta Magna, es preciso decir que
la complejidad de la figura de la víctima pone de manifiesto la necesidad de
contener los derecho de ésta, poniendo en relieve la pronta necesidad de
incluir a la víctima y ofendidos en un articulado propio.
3. En específico, respecto al asesor jurídico se hace mención en su primera
fracción teniendo efectos en las siguientes fracciones; pues no se puede
impugnar como se refiere en la fracción siete sin una debida asesoría. De
acuerdo con lo anterior, lo deseable es que surta efecto favorable a las
pretensiones de la víctima.
4. Sobre la Ley General de Víctimas se puede advertir que de manera amplia
se alude a la asistencia jurídica por parte del asesor jurídico, en el segundo y
tercer artículo de la mencionada ley.

50 art. 15, Ley Federal para la Protección a Personas que Intervienen en el

Procedimiento Penal.
38
5. Respecto al Código Nacional de Procedimientos Penales, se hace alusión
del asesor jurídico en lo relacionado a los aspectos adjetivos de índole
procedimental de la asistencia a la víctima por parte del asesor jurídico.
6. Sobre la Ley Federal de Defensoría Pública en ella también se encuentran
los lineamientos por los cuales indistintamente se deben conducir el Defensor
y el asesor jurídico, esto de inicio puede parecer algo confuso, por eso es de
considerarse la creación de una nueva ley que contenga los propios elemento
con los cuales se debe conducir el asesor jurídico únicamente.
7. Sobre la Ley Federal para la Protección de las Personas que Intervienen en
el Procediendo Penal, la propuesta se vierte en el sentido de que en la
legislación se debe de ser explícito a la protección del asesor jurídico como
interviniente en el procedimiento penal.

Capítulo 4. Análisis crítico del asesor jurídico.

En este último capítulo me propongo dar clausura al presente trabajo de una
manera analítica, en los elementos positivos y negativos que actualmente se
circunscriben al tema relacionado con el ejercicio de la profesión del abogado,
de manera particular con el profesional de la ley en la rama penal desde una
postura que nos obliga a realizar de forma transversal, dando entrada al
actual sistema y a las últimas reformas en materia penal que se han vertido
en la legislación positiva de nuestro país.
Como es sabido por aquellos conocedores del tema, en estas últimas
reformas llevadas a cabo en materia penal, se le dan especial énfasis a los
derechos y garantías de las víctimas. Por lo tanto y con el propósito de que el
presente trabajo sea tomado de manera seria y en sentido de aportación al
entendimiento y mejora de las condiciones que atañen al ejercicio de los
derechos de las víctimas relacionados con el asesor jurídico.
En los aspectos a favor encontramos que se eleva como garantía
constitucional el acceso a contar con un asesor jurídico, sea éste público o
privado. También se plantea como aspecto positivo el que la víctima y
39
ofendidos cuenten con una ley que contenga mecanismos de reparación del
daño. Sin lugar a duda este es un gran avance en nuestro sistema de
impartición de justicia penal.
Respecto a los puntos que despojan o que desprovee de trascendencia en el
mejoramiento de la democracia cuya finalidad de manera amplia plantea la
reforma penal, consideramos que se requiere de un debido protocolo para
que el asesor jurídico sea asignado para asistir a la víctima, sobretodo en el
caso de la consultoría legal privada.
Otro aspecto que considero negativo es la situación de que la víctima se
encuentra todavía en el mismo artículo de la carta magna que el imputado o
su posible agresor. Por lo cual considero que la víctima u ofendidos
constitucionalmente deben encontrarse en un artículo exclusivo que refiera
sus derechos y garantías, plenamente resguardados y sin posibilidad de ser
quebrantados.
Respecto a los inconvenientes que encontramos en la Ley General de
Víctimas coincidimos con lo que expresamente ha señalado el Dr. Natarén:

De los principales problemas a examinar en la aplicación de la

Ley General de Víctimas, en congruencia con los lineamientos
sustantivos y procesales que regula el Código Nacional de
Procedimientos Penales, advertimos entre otros no menos
importantes, los siguientes: 3) Carencia de protocolos
especializados por delitos y sus variantes, que impide un
verdadero análisis de las características y de las necesidades de
cada víctima. El Protocolo de la Asesoría Jurídica Federal no es
un protocolo especializado, sino un documento que describe
lineamientos generales a los asesores jurídicos para el
desarrollo de sus funciones.51

51 Natarén, 2016: 97 y 98
40
Un último aspecto en contra que referimos son los mecanismos tan dilatorios
para el resarcimiento de los daños causados, así como la entrega de las
compensaciones a las víctimas y ofendidos.

4.1. Aspectos a favor.

Se puede observar que los aspectos a favor principalmente son la protección
de los derechos de la víctima u ofendidos. El Nuevo Sistema de Justicia Penal
pone especial énfasis en ellos.
Es positivo su arribo en el ámbito de nuestra Suprema Ley. También es de
considerar positivamente en el mismo sentido la referencia que se hace
respecto a la asesoría jurídica.
Otro aspecto a favor pero en esta ocasión concerniente al asesor jurídico es
la oportunidad de coadyuvar de manera directa no nada más con el órgano
persecutor por excelencia que es el Ministerio Público como anteriormente a
la reforma penal y de manera limitada se daba esta oportunidad, ahora la
víctima junto con su asistencia técnica jurídica puede también coadyuvar con
el juez y aportar indicios, pruebas, etc., en el juicio.
Un aspecto importante aunado a lo anterior es que la ley en materia de
víctimas contempla de manera amplia la reparación del daño económico por
las afectaciones sufridas.
Los planteamientos de la autoridad en elaborar manuales y talleres en miras
de la preparación y capacitación de personal interno y externo en el ámbito de
la formación para el ejercicio de la asistencia legal a la víctima y ofendidos,
albergan objetivos positivos.
Un asesor jurídico que asiste a la víctima preparado y actualizado en las
necesidades legales que tiene la persona que lo contrata o lo requiere, sin
lugar a duda será beneficioso de manera directa para la víctima y ofendidos y
de manera indirecta para la sociedad al conducirse con amplia destreza en la
técnica jurídica y con elemental probidad.

41
4.2. Aspectos en contra.
Dentro de los puntos negativos considero que son varios a tratar de manera
inmediata y otros que son importantes en la medida en que las fases
posteriores a la implementación de la reforma política en materia de justicia
penal e implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal se advierten.
Respecto al ámbito legal consideramos de manera poco clara el hecho de que
no exista un protocolo adecuado al nuevo sistema de justicia penal para la
designación del abogado particular.
También consideramos que no se cuenta con estándares o metodologías
claras de evaluación al personal capacitado como asesor jurídico de víctimas.
Los mecanismos aunque enunciados en la norma son poco funcionales en el
aspecto de su acceso limitado o los modos en que son puestos en práctica
por las víctimas.
Se ha incrementado el número de delitos y con ello el de víctimas, pero poco
se ha visto el incremento a la reparación de los daños, pero sobretodo de
aquel daño que es el económico.

4.3. Conclusiones.
1. Respecto al presente trabajo considero que el sistema acusatorio
promoverá que los abogados y demás partes procesales exploren todas las
tácticas y técnicas legales disponibles. Advertimos que pareciera que el
imputado cuenta con más recursos procesales contenidos en el Código
Nacional de Procedimientos Penales, como son, el reconocimiento de
inocencia y la anulación de sentencia.
2. También considero que para que la víctima tenga garantizado el principio
de igualdad es necesario que el Estado Mexicano verdaderamente asegure la
libre elección del asesor jurídico, sea éste público o privado. Es necesario que
el Estado otorgue todas las facilidades para que la víctima se vea
verdaderamente representada desde la etapa de Investigación Inicial,
investigación complementaria, pasando por la etapa Intermedia o también

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llamada de preparación de juicio, en el propio juicio durante el periodo de
impugnación y hasta la ejecución de sentencia.

3. Y por último considero que es importante que, así como hay una Ley
Federal de Defensoría Pública debería de haber una Ley Federal de Asesoría
Pública, que permita establecer de manera detallada y clara la relación de la
víctima, de los ofendidos y del asesor jurídico para determinar las
obligaciones y derechos que tienen entre sí.

4.4. Propuestas.
Propongo que los sueldos o retribuciones por el trabajo que desempeñe el
Asesor Jurídico de Víctimas Federal deberá ser equiparable al del Defensor
de Oficio Federal y Este al del Juez. Lo anterior para estar en igualdad de
condiciones retributivas ante el Estado Mexicano.
También propongo de utilidad el tener un registro no obligatorio de abogados
particulares para que una vez que la víctima u ofendido sean constituidos
como tales, soliciten su intervención o presencia; dándoles oportunidad de ser
asesorados desde el inicio mismo de la etapa de investigación inicial.

Conclusiones Generales.
El nuevo modelo penal dentro de sus múltiples cambios propone una mayor
participación por parte de la víctima. Dado el vasto inventario de derechos que
ésta tiene. Por lo tanto, el asesor jurídico tiene mayor participación y
protagonismo en el juicio. Respecto a las conclusiones de los antecedentes
del asesor jurídico puedo decir que la figura de lo que actualmente se conoce
como asesor jurídico quedó determinada con la reforma constitucional en
materia penal del 2008 y la culminación de su implementación en el 2016.
Aspectos teóricos y conceptuales del asesor jurídico. Respecto a los aspecto
conceptuales podemos concluir que se advierten tres de ellos de primordial
importancia siendo estos los de víctima u ofendido, asesor jurídico, defensor

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jurídico e imputado. La teoría que hoy sostiene los conceptos que abordamos
y los cuales están basados en la de los Derechos Humanos.
Marco legal del asesor jurídico. Definitivamente encontramos la determinación
del Estado en salvaguardar los intereses y garantías de las víctimas en las
actuales legislaciones contenidas; en el artículo 20 apartado C, Ley General
de Víctimas y el Código Nacional de Procedimientos Penales. Lo anterior fue
crucial dentro del presente estudio para entender la participación del asesor
jurídico dentro del procedimiento penal.
Análisis crítico del asesor jurídico. Respecto al presente trabajo considero que
el sistema acusatorio promoverá que los abogados y demás partes
procesales exploren todas las tácticas y técnicas legales disponibles.
Para que la víctima tenga garantizado el principio de igualdad es necesario
que el Estado Mexicano verdaderamente asegure la libre elección del asesor
jurídico, sea éste público o privado. Y por último considero que es crucial, que
deba haber una Ley Federal de Asesoría Pública, que establezca de manera
detallada y clara la relación entre la víctima u ofendidos y el asesor jurídico.

44
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