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Cómo podemos
implementar la
“cátedra de la
paz” (MEN, 2015)
en la educación
preescolar?
santillana.com.co/rutamaestra/
edicion-13/implementar-la-
catedra-de-la-paz
2 Preescolar
3 quien las ejecuta; c. Determinar la reacción que ge-
nera el comportamiento en los demás; d. Imaginar
qué se podría hacer para generar una respuesta
diferente en los otros; e. Y, finalmente, actuar de
Comunidades Didácticas manera que se promueva el bienestar social para
en paz para la paz sí mismos y los demás. Es decir, los niños y las ni-
ñas son conscientes de los efectos que generan sus
comportamientos y emociones en los demás así no
comprendan a plenitud las razones. Su interpreta-
1. Currículo para la paz ción sobre los principios ciudadanos está sujeta al
en la primera infancia hecho mismo y al efecto directo que observan.
Díaz-Barriga (2012) en su reflexión sobre los esti- Puesto en el currículo, implica que los diseños cu-
los didácticos analiza la dinámica de los modelos rriculares del nivel inicial se orienten a explorar
educativos centrados en el contenido. Al respecto cuáles son los fines sociales de las acciones que
anota que en esa perspectiva el estudiante avan- tienden hacia la construcción de la cultura de paz
za en la medida que trata una información dada, (ver Tabla N.° 1 y 2), a saber:
mientras el maestro induce los aprendizajes priori-
Razonamiento
Comportamiento
emotivo
selectivo
(corazón)
Ambientes
Modelamiento emocionalmente
positivos
Didácticas para
construir la
cultura de paz
Gráfica N.° 2. Estrategias
pedagógicas para promo-
ver la Cultura de paz.
Antes de analizar cada estrategia es importante en las vidas de los niños y las niñas; conciencia de
fijar algunas condiciones. La primera es que se ne- sus posturas éticas y sociales, así como de los ses-
cesita mediar el aprendizaje desde las situaciones gos y los valores de su contexto; conciencia ética
reales y el contexto en el cual interactúan los niños desde la ciudadanía global e, incluso, de las ambi-
y las niñas (Rest, 1986). Es necesario que los adul- güedades personales y comunitarias. Los adultos
tos relevantes tomen hechos de la cotidianidad o próximos deberían establecer acuerdos tácitos o
creen simulaciones que capturen la atención de los implícitos sobre las normas sociales que realmen-
pequeños. De nuevo, retomando lo dicho anterior- te quieren construir. Aún falta mucho tiempo para
mente con base en Rest, J. (1986), el razonamien- que la maduración moral de los niños y las niñas
to moral del pequeño requiere hechos concretos les permita establecer una posición crítica sobre
desde los cuales pueda explorar el efecto que ge- su contexto (Piaget, J. 1983), así que quienes mol-
neran las emociones, los pensamientos y los com- dean las primeras experiencias deben ser plena-
portamientos en sí mismos y los demás: evidencias mente sensibles y consecuentes.
concretas que sirvan de referencia para actuar con-
forme a la expectativa social. Las didácticas. Retomando el tema de las didácti-
cas, en la Tabla N.° 3 se exploran cuatro didácticas
La segunda condición es que debe existir una cla- sugeridas, sus métodos y algunos aspectos rele-
ra conciencia de la responsabilidad social de los vantes para profundizar la discusión pedagógica,
educadores; conciencia sobre el poder que tienen a saber:
3.Modelar, es decir, actuar los tipos de comporta- Necesidad de un modelo. En ocasiones los adultos
mientos esperados: los adultos deben manifestar lo verbalizan a los niños y las niñas los comporta-
que sienten, piensan e, incluso, exagerar las acciones mientos que esperan, pero no brindan referencias
socialmente adecuadas que deberían desplegar ante sobre el comportamiento. En lugar de decirles que
la situación. Es importante que los niños y las niñas las personas amables actúan de una u otra forma,
estén atentos a la forma como actúan los adultos y los los adultos próximos deberían modelar los com-
efectos que logran en los demás. portamientos que consideran apropiados. Tam-
bién es importante que resalten lo que piensan en
4.Evaluar la situación y, desde el lenguaje de los ni- una situación dada y lo expresen en público para
ños, explorar qué tipo de acción es conveniente y cuá- que los niños y las niñas escuchen las elucubracio-
les son los efectos más adecuados para sí mismos y nes.
para su comunidad. Analizar las consecuencias cuan-
do la acción no es la esperada. Coherencia entre lo que dicen y hacen. Los niños
y niñas son bastante susceptibles ante el lenguaje
5.Inmiscuir a los niños y las niñas y pedirles que re- verbal de los adultos, pero también a la prosodia y
pitan lo observado hasta que se asemejen al modelo. el lenguaje no verbal. Por esto es importante que
Desde el contexto de un juego de imitación, motivar- los adultos tengan claridad frente a lo que quieren
los a que repliquen los gestos, verbalizaciones y emo- inculcar para que guarden la debida coherencia.
ciones que modelaron los adultos. Insistir en el análi-
sis de los efectos sociales del comportamiento.