Conversatorio en la Escuela con la Constitución Política de Colombia
Nubia Lucía Gaitán Feo. PUJFacultad de Educación 2007
El Estado en sus orígenes
En esta búsqueda se encuentra la sociedad que
en su conformación sortea momentos que van
desde la gens y la tribu, hasta la organización
nacional. La sociedad gentilicia como grupo
independiente, está formada por personas
descendientes de un tronco común. Con el auge
de la producción, estas gens o familias se separan
y conforman tribus. Con la aparición de la
propiedad privada y la contradicción entre los
diversos grupos sociales surgen las tribus
territoriales. Estas nuevas organizaciones al dejar
de estar aisladas, modifican su conformación y
pasan de un gobierno colectivo a uno de carácter
obligatorio, detentado por una sección de la
sociedad, la dominante económicamente, que
hace valer su dominio y voluntad a través de la
fuerza, la coercitividad que le brinda el Estado y
las normas jurídicas o el derecho.
Desde sus inicios el problema del Estado se torna
en reflexión obligada de grandes pensadores, en
especial desde Platón, quien hace una
aproximación a su esencia, a su función frente al
individuo y a la sociedad. Sus planteamientos
abordan un tema de carácter aún más complejo y
general: La Justicia. Tanto en la dialéctica de
Platón como en la Política de Aristóteles se
considera al Estado como la mejor forma de
organización social, como entramado efectivo
de los individuos y de las clases sociales que
materializan en lo posible la idea de la justicia,
como equidad, de dar a cada quien lo que en
derecho le corresponde: "neminen laedere,
2
suum cuique tribuere" ; en contradicción con
algunos sofistas que definen el Estado ligado al
poder, fincado en el interés del más fuerte, como lo
argumenta Trasímaco, en la República. “La
3 2000
justicia es el interés del más fuerte"
Entre los griegos la discusión en torno a las
diferentes formas de Estado de acuerdo con el
grupo que ejerce el poder, es fundamental y
conduce a examinar la Constitución Política. El
término político significa ciudad,
organización, sociedad organizada. En
consecuencia, este análisis conlleva tres
aspectos importantes: El reconocimiento del
hombre por el hombre; la determinación de lo
que es bueno para la sociedad y las relaciones
entre gobernantes y gobernados. Tanto Platón
como Aristóteles asumen profundamente estos
temas y tratan de dilucidar el fundamento, la
legitimidad del poder en el Estado, en una
Constitución que se distancia de la anarquía y de
la oligarquía. Aunque el poder de gobernar esté
en manos de un reducido grupo de
ciudadanos, no se puede afirmar que su poder
sea oligárquico, pues no se sustenta en sus
propios intereses sino en el interés del Estado,
sus relaciones son determinadas por lo justo. Si
en un negocio una de las partes recibe de la otra
menos de lo que le corresponde de acuerdo con
lo pactado, este intercambio no se aprecia como
justo. Si a una persona le corresponde cierta
propiedad y se le niega esta negación no es
justa.
De lo anterior surgen dos de las fuentes de la
justicia: La primera es la igualdad entre las
partes; la segunda es poseer lo que les
corresponde o su consecuente restitución. Sin
embargo, esto no es suficiente. Para Platón, la
justicia es el deseo en sí mismo que no puede
estar mediado por los resultados.
2
Aristóteles. La Política. Madrid: Alianza, 1999
3
Platón La República. México: Universidad Autónoma de México,
 La justicia es la más alta virtud esencial y
suprema del Estado, en el Estado Ideal debe
dominar la justicia. Para Aristóteles, además se
debe incluir la justicia distributiva que consiste
en la repartición entre los ciudadanos de lo que
les corresponde en relación con sus méritos y la
justicia retributiva, como lo afirma en su Ética a
Nicómaco.
La Edad Media y el desarrollo político
Ya en la Edad Media la reflexión acerca del
Estado versa sobre su prioridad frente a la Iglesia
o la de ésta frente al Estado. Se concibe al
Estado como comunidad temporal e histórica, y
á la Iglesia como la comunidad espiritual que se
halla en la historia, pero que trasciende a ella.
La idea de justicia es desbordada para la época
por dos conceptos cristianos: la caridad y la
misericordia. Según San Agustín-pensador de
la edad media-,el amor es el fundamento pues
no hay riesgo de que en tal acto se sea injusto
pues se otorga a cada quien lo que se le debe;
en la caridad se le otorga a cada quien más de
lo que se le debe. Sigue aquí a Aristóteles en
su afirmación acerca de la amistad y la justicia:
"cuando los hombres son amigos no necesitan
de la justicia, en tanto que, si son justos han de
4
necesitar de la amistad" .
Otro exponente del pensamiento de la Edad
Media, Santo Tomás considera que la justicia
es la regulación fundamental de las relaciones
humanas y añade a la justicia distributiva de
Aristóteles, -que para él significa la participación
de los miembros de una comunidad entre sí-,
la conmutativa, que es el intercambio que regula
las relaciones de la comunidad, y la legal o
general que define las normas que la comunidad
obedece para la regulación de los individuos
entre sí y de la comunidad en su conjunto.
4
Ferrater Mora. José, Diccionario de Filosofía, Aristóteles, página
134. Buenos Aires Sudamericana. 1971.
El Renacimiento y la formación de los
Estados Nacionales
El Renacimiento da un vuelco profundo a la
concepción del Estado que pasa a ser una obra
de arte, como reacción al predominio de la
Iglesia y como consecuencia de la formación de
los Estados nacionales. En El Príncipe, de
Maquiavelo, se exige la separación del Estado y
la Iglesia. El Estado prevalece y no se basa en
la voluntad divina sino que es temporal e
histórico. Según este autor, los hombres aspiran
bien al poder o bien al orden ya la seguridad.
Quienes aspiran al poder y lo conquistan y
manejan, son los "príncipes" de las ciudades;
aquellos que aspiran al orden y a la seguridad
son los subditos por naturaleza. Desde el punto
de vista político establece una diferencia entre
los miembros de la comunidad y estima que
dado que los hombres están naturalmente
corrompidos es necesario limitarlos, a fin de
hacer posible la existencia de la sociedad,
donde el orden sin coacción tampoco lo es. Así
las cosas, le corresponde al "jefe" o "príncipe"
ser hábil y astuto, sin escrúpulos morales; debe
humillarse, de ser necesario, para luego
imponerse, aunque deba usar la violencia. Para
manejar las multitudes debe halagarlas y pasar
por encima de los demás poderes, más aún
sobre el poder de la Iglesia para ponerla a su
servicio. La moral la circunscribe al sujeto, a lo
privado, a quien no tiene que ejercer el poder,
pues el principe se encuentra "más allá del bien
y del mal", para colocarse al frente del Estado,
para enfrentar al enemigo; Igualmente Maquiavelo
también considera esencial para quien posee el
poder poner la fortuna a su favor o resistirla como
prueba de astucia y habilidad, como ejercicio de
la virtud.
Las concepciones planteadas en el feudalismo
5
como lo sostiene André Hauriou en su libro,
Derecho Constitucional e Instituciones Políticas,
aportan a la sociedad:
- El desarrollo de un poderoso individualismo
de naturaleza aristocrática que, generalizado,
aparecerá más tarde como una de las raíces
de la libertad.
- El desarrollo de los lazos de hombre a hombre
y la idea de que la sociedad reposa, en gran
parte, sobre el intercambio de servicios.
- La exaltación, con la caballería, de los
sentimientos del honor y de la fidelidad, que
se transpondrán a continuación, en la lealtad
frente al príncipe y, más tarde aún, en el
civismo moderno.
Por último, la perspectiva de igualdad entre los
hombres, necesaria para equilibrare! sentimiento
de la jerarquía social, se encuentra en la Edad
Media, época de fe ardiente, en la igualdad ante
Dios.
El Liberalismo Clásico
En los siglos XVII y XVIII, la teoría del Estado
que predomina es la del pacto, como el contrato
realizado entre los hombres para no caer en el
aniquilamiento que provoca la guerra de todos
contra todos, tal como lo plantea Tomas Hobbes,
quien concibe al hombre como un ser antisocial,
por la disputa que deviene de tener las mismas
capacidades, las mismas esperanzas de
conseguir los fines que apetecen y al no poder
gozar de ellos, los hombres se convierten en
enemigos naturales. Las causas de la disputa
se pueden cifrar en tres aspectos: la.
competencia, que guía a los hombres a la
ganancia; la desconfianza, que hace que deseen
la seguridad y el deseo de la fama, que los hace
buscar la reputación. En su condición natural, el
hombre es un lobo para el hombre en
Hauriou André Derecho Constitucional e Instituciones Políticas.
Barcelona: Ariel, 1980,página 61
constante guerra de todos contra todos. Dada
esta situación, es indispensable evitar la guerra
civil; cada uno debe ceder, una parte de lo que
apetece. Además de ceder, el hombre debe
transferir los derechos propios, es decir, debe
realizar un contrato. Se funda así la sociedad
sobre "el contrato social", en un acuerdo mutuo
de no aniquilarse. Pero este contrato debe ser
garantizado por el soberano que concentre el
poder en sus manos, como depositario de los
intereses particulares, como monarca absoluto.
Para Hobbes, el poder no puede estar dividido,
debe ser unipersonal y estatal, pero no tiene que
ver con el poder recibido por derecho divino ni el
adquirido por la acción de la fuerza. A quien le es
transferido el poder tiene, sin duda, el poder
absoluto, pero no para imponer su voluntad
personal, sino para hacer valer y aplicar el
contrato social establecido, como
autopreservación de la sociedad.
Lo mismo propone Rousseau el Contrato Social de
donde el hombre renuncia al egoísmo
producido por el estado innatural de civilización y
se somete a la voluntad general o en El Emilio
donde muestra el camino, el lugar común para
llegar a la pureza del hombre natural, previa
aniquilación de toda maldad guardada tras años
de cultura artificiosa, de desigualdad humana.
Para lograrlo se requiere desarrollar las fuerzas
naturalmente buenas del hombre, apreciadas
desde sus sentimientos puros, para la formación
de un estado social nuevo, donde las pasiones,
egoísmos, fruto de la sociedad innatural son
abolidas por el contrato social a través del cual
se renuncia voluntariamente a las formas de
relación entre individuos para someterse a leyes
determinadas por la voluntad general.
Estas leyes, que coinciden con la forma natural de
la existencia humana, tampoco representan la
coacción de las pasiones y el egoísmo sino la
igualdad expresada tanto en la ley común como
en el sentimiento. Este contrato es la
manifestación de la voluntad general en un
Estado Democrático puro; no es el producto de
una reflexión meramente intelectual para evitar la
destrucción del individuo o para la constitución de
la sociedad sino la renuncia a la libertad de obrar
con el egoísmo propio del estado de falsa
civilización.
Las teorías del Contrato Social aportan
elementos a la Revolución Francesa que adopta la
"Igualdad, Libertad, Fraternidad" como lema y
que en la Constitución de 1793 copia líneas
esenciales de la doctrina jurídica del Contrato.
Paralelamente, se elabora la teoría del Estado
que defiende la comunidad de los hombres libres
que viven en el Estado según el decreto común.
6
Para Baruch de Spinoza , el Estado es la
organización de la sociedad que garantiza la
libertad, cuyo fin es, la libertad de pensamiento, la
tolerancia religiosa e ideológica dentro del
Estado, es decir, la posibilidad de profesar una
religión sin sometimiento forzoso a la oficial.
El Siglo de las Luces, la Ilustración, optimiza el
poder de la razón y la posibilidad de
reorganizar la sociedad con base en principios
racionales, en el advenimiento de la conciencia
de la humanidad. La razón ilustrada va del hecho al
principio, más que un fundamento es un camino
que todos los hombres pueden recorrer y que por
consiguiente, es deseable que todos recorran. El
Estado es concebido, de acuerdo con la
doctrina del despotismo ilustrado, como la
organización que puede conducir a los
Op, cit. vol 1 página 580 vol 2 página 714.
7
Op, cit, vol 2 página 1047
hombres por el sendero seguro y confiable de la
razón al librarlo del oscurantismo, las tinieblas y las
supersticiones del pasado. Manuel Kant
considera que el Estado debe ser constituido de
tal modo, que sin importar su origen histórico, la
ley corresponda a una organización establecida
7
por pacto y contrato . El fin del Estado es la
libertad que se entiende como el respeto de la
libertad moral de cada uno con relación a la
libertad moral del conjunto, que es posible
mediante la aplicación de la ley y no como no la
decisión arbitraria del sujeto. Los hombres que
componen el Estado son fines en sí que deben
someterse al fin en sí de su moralidad y no deben
ser empleados en ningún caso como medios.
La filosofía Romántica que surge en Alemania,
identifica Nación con Estado y le otorga
funciones dadas antiguamente tanto a las clases
sociales como a los individuos y hasta a la
Iglesia, pues lo considera el verdadero
representante de aquella, de la comunidad de
todos los hombres unidos por un mismo fin. Por
su parte, W. Hegel que se encuentra,
intelectualmente, entre el idealismo
trascendental y el romanticismo, rechaza partir de
lo Absoluto, al calificar esta postura como la
ingenuidad del vacío en el conocimiento ya que
no permite explicar, de manera alguna, la
producción de las diferencias y su realidad. Su
tendencia a lo concreto y su decidida afirmación
del poder del pensamiento y de la razón lo
contrapone a la vaguedad del sentimiento y de la
intuición intelectual. El Estado es para Hegel el
lugar donde el espíritu objetivo, superada la
oposición entre la familia y la sociedad civil, llega a
realizarse plenamente. Así mismo el Estado es la
síntesis de la exterioridad de lo legal y de la
arbitrariedad subjetiva de la moral. El Estado es la
forma más elevada de la ética objetiva, de la idea
moral y de la libertad objetiva. Por tanto, su papel
no se limita a ser el protector de los intereses del
individuo, de su libertad subjetiva. Lo define como
manifestación de la divinidad del mundo y su
mejor forma está en la monarquía constitucional.
El que rige el Estado debe ser, él representante
del espíritu del pueblo o del espíritu nacional, el
cumple los fines objetivos planteados por este
8
espíritu . Las apreciaciones y teorías acerca del
Estado durante casi todo el siglo XIX se mueven
entre la lucha del individualismo contra el
colectivismo. En ambos casos - individualismo y
colectivismo-lo conciben como un equilibrio,
pero mientras para el individualismo el Estado
es el equilibrio de la tensión entre las voluntades
particulares, para el colectivismo es el
resultado de la superación de estas voluntades,
cuya presencia y actuación son negativas para el
Estado.
En la doctrina Marxista el Estado es el dominio
de una clase, la cual ejerce el poder de forma
total con la máscara del equilibrio y de la justicia,
sin dejar de ser dominación, por eso propugna
por su desaparición una vez se haya conseguido,
mediante la dictadura proletaria, la abolición
definitiva de las clases y con ella la libertad del
hombre.
Como se ha visto, la concepción del El Estado
ha sufrido fuertes modificaciones y sentidos, por
ejemplo el Estado Liberal, es sinónimo de
libertad como valor supremo y rechazo a la
coerción, también de fuerza, sin negar la
existencia de la ley. Estas ideas son expuestas
por Jhon Locke, Montesquieu, Hume, Adam
SmithYJohnStuartMill. Locke con su Ensayo
sobre el Gobierno Civil aporta su teoría política,
que es por un lado, la racionalización de
tendencias del partido" Whig", que ponen en el
trono a Guillermo de Orange, y de otro lado, la
fundamentación del liberalismo.
Op. cit.vol 1 página
814
Para este pensador los hombres son iguales y
libres en su estado de naturaleza; por acuerdo
forman una sociedad que no es el resultado de
evitar "la guerra de todos contra todos" de
Hobbes, sino del consentimiento libre, la
expresión de los derechos naturales como el de
existencia y de propiedad. El derecho de
propiedad no es absoluto, tiene su fuente en el
trabajo y en los demás miembros de la sociedad a
quienes no debe perjudicar. El gobierno, en
este sentido, debe ser representativo, está
constituido por quienes la sociedad ha confiado el
poder y el derecho de dirigir, para el bien común.
Divide el gobierno en tres poderes: el poder
fundamental o el legislativo; el ejecutivo que
incluye el judicial y, el federativo, que permite
declarar la guerra, acordar la paz y aliarse con
otras comunidades. Locke considera necesaria
la rebelión cuando se disuelve la sociedad y el
gobierno no cumple con sus funciones y se torna
en tiranía.
Charles de Secondat, Barón de Montesquieu
sistematiza y expresa sus ideas políticas e
histórico-jurídicas en su Espíritu de la Leyes
9
(1748) . Para él la ley tiene dos aspectos
correlativos: el histórico y el natural. Cada pueblo
tiene un conjunto de leyes que obedecen a su
propia naturaleza y a su historia; la diferencia
entre las legislaciones son la diferencia entre los
pueblos, en sí mismos. Toda ley es parte de la
vida específica de un pueblo como fruto de la
libertad humana. El anhelo de cada pueblo debe
ser alcanzar la libertad máxima dentro de las
circunstancias naturales e históricas que le
correspondan. Precisa también, como Locke, de
la separación de poderes, ahora divididos en:
legislativo, ejecutivo y judicial. Por su parte,
David Hume considera que en la naturaleza
humana, que es igual en todos los hombres,
existe la posibilidad de regular la conducta
moral, aceptar las obligaciones, la justicia y las
Montesquieu,Charles. Del Espíritu de las Leyes. México: Porrua,
1995
normas morales y sociales. Aunque afirma que la
justicia y las obligaciones, en general, son
artificiales se fundan en el egoísmo propio de los
individuos. La acción voluntaria y la conducta no
son el resultado de la obediencia sino de la
expectativa de un sentimiento de placer o de la
desaparición de un sentimiento de desplacer.
El pensamiento de Adam Smith se caracteriza
por su tendencia a unificar la doctrina con la
práctica, con la experiencia. En lo económico
investiga el comercio, la industria, estudia la
formación del capital, su inversión y su
distribución, sienta las bases de la economía
clásica. En lo filosófico, desarrolla la llamada
moral de la simpatía, que determina la aprobación
de las acciones ajenas pues lo más importante
en la filosofía moral, luego de la naturaleza de la
virtud, es el poder o facultad mental que hace
agradable o desagradable ciertos caracteres y
obligan al individuo a proferir determinada manera
de comportarse, o lo conduzca a calificarla de
buena o mala, a considerarla como objeto de
aprobación o de culpa, censura o castigo. Su
idea de imparcialidad y de libertad lo lleva a un
Estado no intervencionista, al libre comercio que
promueve y facilita la riqueza de las naciones.
Las teorías económicas y políticas de Adam
Smith tienen influencia en la Inglaterra de los
siglos XVI11 y XIX como fundamento del liberalismo
económico.
John Stuardt Mili es considerado a la vez
empirista y determinista en materia económica y
social y liberal, que reúne al utilitarismo de
Bentham con el socialismo ético. Su reflexión
acerca de la vida moral y del altruismo como
valor superior supera a la idea del egoísmo como
motor de las acciones humanas, coloca a los
valores religiosos como coadyuvantes del
hombre en la consecución de su ideal moral.
Esta conjunción de pensamientos, ideas y
doctrinas dominan el mundo occidental. La
palabra "liberal" se usa en España a principios
del siglo XIX como aceptación de la monarquía
constitucional que emula la constitución inglesa,
donde el respeto a las libertades individuales es
lo nuevo y, en el terreno económico, la no
intervención del gobierno en la producción,
distribución y consumo de bienes; así mismo la
palabra liberalismo describe el conjunto de
principios ideológicos de algunos partidos
políticos; los principios básicos del liberalismo se
pueden sintetizar así: el individuo es la fuente de
sus valores morales; el proceso de comercio e
intercambio entre individuos apunta tanto al
bienestar colectivo como a la exaltación de la
libertad; el mercado es un orden espontáneo
para la asignación de recursos. El liberalismo
clásico entra en decadencia a fines del siglo XIX y
comienza a usarse el término para describir a un
Estado que corrige las injusticias sociales: El
Estado Socialista y El Estado Social de
Derecho.
La crítica al Liberalismo Clásico y los primeros
gérmenes del Estado Social de Derecho
De la convergencia de la ideología liberal-
capitalista y la revolución Industrial surge una
nueva clase trabajadora, denominada por Carlos
Marx, el proletariado, que se caracteriza por la
explotación desmedida de su fuerza de trabajo,
por la aplicación de principios económicos y
políticos del liberalismo. Como consecuencia, se
da la lucha de clases y de movimientos políticos;
en 1917 con la Revolución Rusa nace la Unión de
Repúblicas Socialistas Soviéticas, URSS, que
imponen un nuevo tipo de Estado: el Estado
Socialista. En 1919 Alemania hace su aporte con la
aparición del Estado Social de Derecho
consagrado en la Constitución de Weimar que
establece la obligación del Estado de satisfacer
los derechos sociales. De igual manera, luego
de la Revolución Mexicana (1910-1917) este país
consagra por primera vez en su Constitución los
d er ec ho s sociales de los tr a b a ja do res
asalariados y los derechos de los campesinos.
La crisis económica de 1929 origina el "Estado de
Bienestar" de Roosevelt y el Estado Social de
Derecho. Esta crisis trajo como consecuencia
la baja de acciones, la quiebra, el descenso de
la producción industrial, el desempleo, el
hambre y la miseria padecidos en la mayor parte
del mundo; en especial se padece en los Estados
Unidos de América. Allí se implanta el modelo
Keynesiano que propone un papel activo del
Estado, desecha el dejar hacer, lo convierte en
generador de empleo por las inversiones públicas
y protagonista de la redistribución de las rentas
con la imposición de impuestos progresivos. Con
la aplicación de los planteamientos de Keynes en
su "Teoría General del Empleo, del Interés y de la
Moneda", se inicia en los Estados Unidos la
economía mixta, esto es, la economía nacional
basada en la coexistencia de dos agentes
económicos, uno de iniciativa privada y otro del
Capitalismo de Estado. También contribuye a
la aparición del Estado Social de Derecho, la
creación de dos vertientes en el movimiento
socialista, como consecuencia de la III
Internacional de 1919 con la que Lenin pretende la
revolución mundial: la vertiente Socialdemócrata
(II Internacional) y la vertiente Comunista (III
Internacional). Los socialdemócratas son
ahora reformistas, abandonan la idea de la
lucha de clases, la abolición de la propiedad
privada de los medios de producción, la
desaparición del Estado, la dictadura del
proletariado y conservan los proyectos de
beneficio social, con un sentido capitalista, dan al
Estado el poder de realizar la reforma social.
Promueven la democracia política, económica,
extienden la propiedad pública hasta las
cooperativas. En este orden de ideas, el Estado
Bienestar es definido como un contrato social que
garantiza la seguridad social, tanto del individuo
como de la colectividad, que propugna la justicia
mediante proyectos que implican la solidaridad de
la
comunidad: derecho al trabajo, lucha contra la
pobreza, prevención de los riesgos sociales, e
igualdad de oportunidades con la ayuda pública en
el apoyo a minorías y zonas deprimidas. El
Estado Bienestar se pone en marcha en los
países en proceso de industrialización desde
cuando el Estado interviene para corregir
desajustes tanto económicos como sociales
producto del capitalismo. Según algunos
estudiosos, el Estado Social de Derecho va más
allá, se extiende a aspectos más generales,
políticos, ideológicos y jurídicos, persigue
direccionar la historia. Pretende perfeccionar la
democracia política como método para organizar
al pueblo para el ejercicio de la libertad en la
designación de los gobernantes y, la
democracia social como materialización del
derecho a la igualdad.
La Constitución Política del Estado Social de
Derecho protege los derechos fundamentales y
los liga con los económicos y sociales; el poder
legislativo se reformula al ceder al ejecutivo un
mayor poder. En cuanto al poder judicial, le da
el control de los actos de la Administración
Pública, el control de Constitucionalidad de las
leyes. En el modelo Social de Derecho la
concepción de derecho se modifica cuando
asume funciones distributivas y promociona
comportamientos; así lo expone Norberto
Bobbio en su texto "Contribución a la Teoría del
Derecho". "Las nuevas técnicas de control social
que caracterizan la acción del Estado Social de
nuestros días se distinguen profundamente de
las del Estado liberal clásico: el empleo cada
vez más difundido de las técnicas de
alentamiento junto a, o en sustitución de las
10
tradicionales de desalentamiento" Bobbio
Bobbio Norberto. Contribución a la Teoría del Derecho. Madrid:
Debate, 1990, página 372
concibe el alentamiento como la operación con la
que un individuo trata de influir el
comportamiento querido de otro facilitándole o
atribuyéndole consecuencias agradables y el
desalentamiento como la operación con la que un
individuo trata de influir el comportamiento no
querido de otro obstaculizándolo o
atribuyéndole consecuencias desagradables. Se
abandona así la imagen del Derecho que protege
y reprime.
La actividad legislativa cambia en el Estado
Social de Derecho en la medida en que
incorpora cada vez más medidas que regulan las
relaciones tanto sociales como económicas de sus
asociados. La ley ya no es general y abstracta, se
torna cada vez más en individual y concreta, se
pacta en una relación de fuerza entre los distintos
partidos y grupos de presión. En el Estado Liberal
la ley abstracta y general es el resultado de
institucionalizar la igualdad formal de los
destinatarios y establecer el ámbito de libertad
necesario para el comercio. En el Estado Social
de Derecho se da una proliferación excesiva de
normas como medio de intervención de los
poderes públicos. Esta sobrenormatividad
causa defectos en las normas y les da, en
ocasiones, un carácter de inteligibilidad.
Con el aumento de las funciones del Derecho se
amenaza la concepción weberiana racional y
formal, que prevé conductas mediante normas
generales y abstractas dictadas por órganos
establecidos con antelación por el propio
Derecho. Cobra fuerza la razón práctica que
considera el sistema jurídico como instrumento
que permite alcanzar fines sociales y conjuga
normas de tradición liberal, que garantizan el
poder de los particulares frente al Estado, con
aquellas que no son instrumentales sino
teleológicas, es decir, que conlleven el logro de los
resultados o la consecución de los fines. El
Derecho así asegura la realización efectiva de los
derechos y no se queda tan sólo en su
reconocimiento. Ahora bien, después de la
Segunda Guerra Mundial en el Oeste de
Europa y en Norteamérica surge una corriente
Neoliberal en oposición tanto política como
teórica al intervencionismo de Estado y del
Estado de Bienestar Social. Su promotor,
Friedrich August Von Hayek en su obra, "La
11
Ruta hacia la Servidumbre" , publicada en 1944,
ataca las barreras impuestas por el Estado al
libre mercado. Para 1947, cuando la Europa de
posguerra hecha a andar el Estado Social de
Derecho, Von Hayek convoca a Salvador de
Madariaga, Milton Friedman, Walter Lippman,
Karl Popper, entre otros, que comparten sus
ideas, para crear la Sociedad de Monte
Peregrino para la divulgación de su
pensamiento neoliberal, para combatir el
keynesianismo y gestar los fundamentos
teóricos de un capitalismo fuerte, sin reglas que
coarten la libertad de mercado.
Estado Social de
Derecho y
Neoliberalismo
Entre 1850 y 1960 el capitalismo vive su etapa
dorada y las advertencias de la Sociedad no
tienen mayor eco. En relación con el Estado
Bienestar que promueve el igualitarismo, este
grupo, defiende la desigualdad como valor
positivo e indispensable para garantizar la libertad
de los ciudadanos y vitalizar la competencia. La
segunda gran crisis del Capitalismo es la de
1970, año en el que cambian las condiciones
económicas: la baja tasa de crecimiento y la
inflación dan origen a la estanflación. Hayek y
demás miembros de la sociedad
responsabilizan de la crisis al movimiento
obrero al impedir la inversión privada por sus
pretensiones salariales y la
Hayek. Friedrich- La ruta hacia la Servidumbre San José de Costa
Rica: Universidad Autónoma de Centro América, 1986
presión hacia el Estado para que incremente los
gastos sociales. Su solución apunta a un Estado
fuerte, con una clara política monetarista,
restringido en el gasto social, que sea capaz de
disminuir el poder de los sindicatos con una
reserva de desempleados que los sustituya. Este
Estado, además, debe introducir reformas
fiscales que signifiquen menos gravámenes para
las ganancias de las entidades empresariales y
reducción de impuestos a los altos ingresos de
las personas. Así se da una "inequidad" que
permite a los países desarrollados superar las
políticas económicas inspiradas por Keynes y
Beveridge, basadas en la intervención Estatal
anticíclica y la redistribución social.
Con Margaret Tatcher en 1979, Inglaterra se
compromete decididamente a aplicar las
políticas del neoliberalismo. En 1980 Ronald
Reagan en Estados Unidos de América, Helmut
Kohl en 1982 y paulatinamente Europa
occidental consolida la ideología de Van Hayek y
la Sociedad de Monte Peregrino.
La aplicación del modelo neoliberal en Inglaterra,
frena la emisión de la masa monetaria, eleva las
tasas de interés, reduce los impuestos sobre los
ingresos altos, no ejerce control sobre flujos
financieros, impone una legislación laboral
antisindical que promueve el desempleo y
reprime las huelgas. Igualmente, recorta el gasto
público para luego iniciar un programa de
privatización de entidades públicas como las
dedicadas a la industria básica del acero, la
electricidad, el agua y el petróleo.
Estados Unidos aplica con Reagan una política
exterior tendiente a derrotar el comunismo de la
Unión Soviética con un alto gasto militar, compra
armas y provoca un déficit en las finanzas
públicas; Al interior del país subvenciona a
un sector de la industria, baja los impuestos a los
adinerados, eleva las tasas
de interés y minimiza la huelga de los
controladores aéreos.
En Europa del sur con la subida al poder de un
grupo de izquierda se habla de un
eurocomunismo que con el apoyo del
movimiento obrero y popular aplica una política
de redistribución, de pleno empleo y de
protección social. Pero bajo la presión de los
mercados financieros internacionales en Francia
se deja de lado con una orientación muy próxima al
neoliberalismo: se prioriza la estabilidad
monetaria, se controla el déficit de las finanzas
públicas y se hacen concesiones fiscales a los
capitalistas. En 1991 el capitalismo entra en una
profunda recesión, se comprueba que el
endeudamiento público de los países
occidentales, incluidos Estados Unidos e
Inglaterra, se eleva considerablemente, se dan
nuevos aires al neoliberalismo que entra con más
fuerza.
En Latinoamérica también se sigue
este proceso.
En Chile desde 1973, luego del golpe de
Estado al gobierno legítimo de Salvador
Allende, con Pinochet, irrumpe el
neoliberalismo, inspirado en Milton Friedman y
diez años antes que en Inglaterra, con la
desregulación, el desempleo, la represión, el anti
-sindicalismo, redistribución de la riqueza entre
los ricos, en síntesis, la abolición de la
democracia.
En 1985, Bolivia aprueba un plan de ajuste
estructural inspirado en el plan del economista
norteamericano Jeffrey Sach que tiene como
objetivo acabar la hiperinflación. De esta manera
Chile y Bolivia son el laboratorio experimental
del neoliberalismo. Los demás países
paulatinamente vuelven su mirada al
neoliberalismo: México, con Carlos Salinas de
Gortari en 1988; Argentina, con Carlos Menem
en 1989; Venezuela, en ese mismo año, con
Carlos Andrés Pérez y Perú en 1990 con Alberto
Fujimori. La experiencia de México, Solivia y Perú
reporta éxito sobre la hiperinflación pues en estos
tres países se goza de las condiciones políticas
necesarias para la aplicación de la deflación. La
rama ejecutiva de México concentra el poder
debido a la existencia de un partido único, el
PRI. En cuanto a Perú y Bolivia, instauran
legislaciones de " urgencia ", reforman la
constitución y organizan un autogolpe de Estado.
América Latina dirige su atención a la reforma
del área comercial, cambiaría, tributaria y
financiera; a la reducción de restricciones y
permisos de tipo arancelario, a la unificación y
desregularización cambiaría, al uso del IVA, a la
reducción a las empresas de las tasas de interés, al
desmonte de los controles a las tasas de interés,
y a la reducción del encaje bancario. Igualmente,
se inclina a las reformas laborales, a la
privatización, y en materia de seguridad social a
reformar las estructuras administrativas y
financieras y el sistema pensiona! mediante la
capitalización individual.