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TEMA 22

ADMINISTRATIVOS DE LA CARM

1. HACIENDA PÚBLICA REGIONAL: PRINCIPIOS GENERALES


Y DERECHOS ECONÓMICOS
I. HACIENDA PÚBLICA REGIONAL: PRINCIPIOS GENERALES Y DERECHOS
ECONÓMICOS.
El término Hacienda Pública puede definirse desde diferentes puntos de vista, así,
podemos hacerlo desde el punto de vista subjetivo, el objetivo y el funcional.

I.1. HACIENDA PÚBLICA EN SENTIDO SUBJETIVO


Podemos definir la hacienda pública en sentido subjetivo como aquella parte del
aparato estatal a la que se encomienda la realización de la actividad financiera. Es
decir, la propia Administración en cuanto realiza el conjunto de actuaciones y
funciones conducentes a la realización de los derechos y de las obligaciones de la
Hacienda Pública.
En el caso de la CARM, el Texto Refundido de la Ley de Hacienda de la Región de
Murcia atribuye la mayor parte de las funciones de carácter financiero a la Consejería
de Economía y Hacienda, sin embargo, algunas le son atribuidas a otros órganos (ver
por ejemplo artículos 8, 10 y 11 del TRLHRM).
Por lo tanto, no se puede limitar el concepto de Hacienda Pública en su sentido
subjetivo a la Consejería de Hacienda, sino que otras partes de la administración
regional son también hacienda pública en sentido subjetivo.

I.2. HACIENDA PÚBLICA EN SENTIDO OBJETIVO


Para definir la hacienda pública desde el punto de vista de su objeto podemos
referirnos en el caso de la CARM al art 1 del TRLHRM, en el se establece que: “La
Hacienda Pública Regional está constituida por el conjunto de derechos y obligaciones
de contenido económico cuya titularidad corresponde a la Administración Pública
Regional y a sus organismos autónomos.”
Vemos que el concepto de hacienda pública en sentido objetivo la hace coincidir con
el patrimonio de la Comunidad Autónoma, en su totalidad, cuyo activo estaría
constituido por los recursos integrantes del Tesoro Público Regional y por el resto de
los bienes y derechos que integran en sentido técnico jurídico su dominio, y su pasivo,
por los débitos.
I.3. HACIENDA PÚBLICA EN SENTIDO FUNCIONAL
El concepto de Hacienda pública en sentido funcional se identifica con un conjunto
muy variado y complejo de actuaciones administrativas, aglutinadas en dos series
fundamentales de procedimientos administrativos: la percepción de ingresos y la
ordenación de gastos y pagos. Tales actuaciones constituyen la "actividad financiera"
en sentido estricto.

I.4. PRINCIPIOS GENERALES DE LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL


Conviene empezar este apartado haciendo referencia a los principios generales del
derecho financiero que inspiran la regulación de esta materia, para pasar
posteriormente a ver los regulados explícitamente en nuestra ley de hacienda

1.4.1 Principios generales del Derecho Financiero


Como hemos dicho con anterioridad, se trata de una serie de principios
fundamentales que subyacen en la regulación de todo el derecho financiero. En
particular vamos a hablar de los siguientes:
1. Principio de Legalidad Financiera.
2. Principio de Justicia Financiera.
3. Principio de Control.
4. Principio de Redistribución de la renta y la riqueza.
5. Principio de solidaridad y coordinación entre las diversas Haciendas Central
y Autonómica.
El principio de legalidad financiera exige que se regulen por ley ciertas materias
relacionadas con la hacienda pública. Este principio aparece reflejado en múltiples
ocasiones a lo largo de nuestro ordenamiento jurídico tanto en materia de ingresos
como de gastos, por ejemplo:
En materia de ingresos cabe citar:
9 Art. 31.3 CE «sólo podrán establecerse prestaciones personales o
patrimoniales de carácter público con arreglo a la Ley».
9 Art. 133.1 CE determina: «La potestad originaria para establecer los
tributos corresponde al Estado mediante Ley».
9 Art. 133.2 CE según el cual «Las Comunidades Autónomas y las
Corporaciones Locales podrán establecer y exigir tributos de acuerdo con la
Constitución y las Leyes».
9 Art. 45 EARM: que determina que se regulará necesariamente
mediante Ley de la Asamblea Regional el establecimiento, modificación y
supresión de sus propios impuestos, tasas, y contribuciones especiales, así
como los elementos directamente - determinantes de la deuda tributaria,
inclusive exenciones y bonificaciones.
9 Art. 134.7 CE que impide el establecimiento o creación de tributos por
la Ley de Presupuestos, la cual tan sólo «podrá modificarlos cuando una ley
tributaria sustantiva así lo prevea».
9 Art. 47 EARM que determina que el Consejo de Gobierno deberá estar
autorizado por una Ley de la Asamblea para emitir Deuda Pública.
En materia de gastos podemos encontrarlo entre otros en:
9 El apartado 4° del art. 133 CE: «Las Administraciones públicas sólo
podrán contraer obligaciones financieras y realizar gastos de acuerdo con
las leyes»
9 El art. 46.1 EARM «Corresponde al Consejo de Gobierno la elaboración
del Presupuesto de la Comunidad Autónoma, y a la Asamblea Regional su
examen, enmienda, aprobación y control.»
El principio de justicia financiera hace referencia al concepto de equidad, tanto a la
hora de recaudar los ingresos como de repartir los gastos. Lo encontramos por
ejemplo en:
9 El art. 31 CE que establece: «Todos contribuirán al sostenimiento de los
gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica, mediante un
sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y
progresividad que, en ningún caso, tendrá alcance confiscatorio».
9 El art. 31.3 CE que determina que «El gasto público realizará una
asignación equitativa de los recursos públicos y su programación y
ejecución responderán a los criterios de eficiencia y economía».
El principio de control de la actividad financiera establece que esta estará sujeta a
diversos mecanismos de control que se regulan con carácter general en la
Constitución y en el Estatuto de Autonomía (Defensor del Pueblo, Tribunales de
Justicia, Asamblea Regional, etc.).
Además, la Constitución dispone respecto de la actividad financiera un especial
control al configurar en su art. 136.1 el Tribunal de Cuentas como «supremo órgano
fiscalizador de las cuentas y de la gestión económica del Estado, así como del sector
público».
Por su parte, el Estatuto de Autonomía de la Región de Murcia en su art. 54 establece
que el control económico y presupuestario de la Región, se ejercerá por el Tribunal de
Cuentas del Estado, sin perjuicio de las facultades que corresponden a la Asamblea
Regional.
El principio de redistribución de la renta y la riqueza se encuentra recogido en el
art.131.1 CE donde se determina que «El Estado, mediante Ley podrá planificar la
actividad económica general para atender a las necesidades colectivas, equilibrar y
armonizar el desarrollo regional y sectorial y articular el crecimiento de la renta y de
la riqueza, y su más justa distribución».
En el mismo sentido, el art. 138.1 CE propugna el «establecimiento de un equilibrio
económico, adecuado y justo entre las diversas partes del territorio español».
El principio de solidaridad y coordinación entre las diversas Haciendas Central y
Autonómica tiene su manifestación concreta en el artículo 158.2 CE que establece
que con el fin de corregir desequilibrios económicos interterritoriales y hacer efectivo
el principio de solidaridad, se constituya un Fondo de Compensación con destino a
gastos de inversión, cuyos recursos serán distribuidos por las Cortes Generales entre
las Comunidades Autónomas y provincias, en su caso. (el denominado Fondo de
Compensación Interterritorial
Además, El art. 156.1 CE afirma que «las Comunidades Autónomas gozarán de
autonomía financiera para el desarrollo y ejecución de sus competencias, con arreglo
a los principios de coordinación con la Hacienda estatal y de solidaridad entre todos
los españoles».
Por su parte, el art.40 del Estatuto de Autonomía de la Región de Murcia establece
que «La Región de Murcia tiene autonomía financiera, dominio público y patrimonio
propio de acuerdo con la Constitución, este Estatuto y los principios de coordinación
orgánica y funcional con las Administraciones Estatal y Local, así como de solidaridad
entre todos los españoles».
Resulta de especial interés citar aquí el principio de estabilidad presupuestaria, ya
que para su desarrollo fue necesaria la reforma del artículo 135 de la Constitución
Española en 2011, la segunda que se ha realizado desde la aprobación de la misma en
1978.
Aunque la introducción del principio de estabilidad presupuestaria en nuestro
ordenamiento jurídico arranca en el año 2001 con la aprobación de dos leyes, la Ley
18/2001, de 12 de noviembre, de estabilidad presupuestaria, y la Ley Orgánica
5/2001, de 13 de diciembre, complementaria de la anterior, este ha sido ampliamente
modificado y elevado a rango constitucional para cumplir con los compromisos
asumidos por España al integrarse en la Unión Económica y Monetaria Europea, un
marco en el cual la estabilidad presupuestaria adquiere un valor estructural y
condicionante de la capacidad de actuación financiera y presupuestaria de las
Administraciones Públicas.
A raíz de la aprobación de la reforma del artículo 135 de la Constitución, se aprobó la
Ley Orgánica 2/2012, de 27 de abril, de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad
Financiera, con el objeto de dar cumplimiento a lo establecido en la nueva redacción
del artículo 135 de la Constitución tras la reforma.
El artículo 135 de la CE tras la reforma queda como sigue:

1. Todas las Administraciones Públicas adecuarán sus actuaciones al principio de


estabilidad presupuestaria.
2. El Estado y las Comunidades Autónomas no podrán incurrir en un déficit
estructural que supere los márgenes establecidos, en su caso, por la Unión Europea
para sus Estados Miembros.
Una ley orgánica fijará el déficit estructural máximo permitido al Estado y a las
Comunidades Autónomas, en relación con su producto interior bruto. Las Entidades
Locales deberán presentar equilibrio presupuestario.
3. El Estado y las Comunidades Autónomas habrán de estar autorizados por ley para
emitir deuda pública o contraer crédito.
Los créditos para satisfacer los intereses y el capital de la deuda pública de las
Administraciones se entenderán siempre incluidos en el estado de gastos de sus
presupuestos y su pago gozará de prioridad absoluta. Estos créditos no podrán ser
objeto de enmienda o modificación, mientras se ajusten a las condiciones de la ley de
emisión.
El volumen de deuda pública del conjunto de las Administraciones Públicas en relación
con el producto interior bruto del Estado no podrá superar el valor de referencia
establecido en el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea.
4. Los límites de déficit estructural y de volumen de deuda pública sólo podrán
superarse en caso de catástrofes naturales, recesión económica o situaciones de
emergencia extraordinaria que escapen al control del Estado y perjudiquen
considerablemente la situación financiera o la sostenibilidad económica o social del
Estado, apreciadas por la mayoría absoluta de los miembros del Congreso de los
Diputados.
5. Una ley orgánica desarrollará los principios a que se refiere este artículo, así como
la participación, en los procedimientos respectivos, de los órganos de coordinación
institucional entre las Administraciones Públicas en materia de política fiscal y
financiera. En todo caso, regulará:
a) La distribución de los límites de déficit y de deuda entre las distintas
Administraciones Públicas, los supuestos excepcionales de superación de los
mismos y la forma y plazo de corrección de las desviaciones que sobre uno y
otro pudieran producirse.
b) La metodología y el procedimiento para el cálculo del déficit estructural.
c) La responsabilidad de cada Administración Pública en caso de
incumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria.
6. Las Comunidades Autónomas, de acuerdo con sus respectivos Estatutos y dentro de
los límites a que se refiere este artículo, adoptarán las disposiciones que procedan
para la aplicación efectiva del principio de estabilidad en sus normas y decisiones
presupuestarias.

Precisamente, la propia LOSEF recoge diversos principios que son de obligada


observación para todas las AA.PP. Además de los relativos a la plurianualidad,
transparencia, lealtad institucional, eficiencia en la asignación y utilización de los
recursos públicos y responsabilidad, queremos destacar aquí los dos siguientes:

1) Principio de estabilidad presupuestaria en sentido estricto (art. 3): “La


elaboración, aprobación y ejecución de los Presupuestos y demás actuaciones
que afecten a los gastos e ingresos de los distintos sujetos comprendidos en el
ámbito de aplicación de esta Ley se realizará en un marco de estabilidad
presupuestaria, coherente con la normativa europea. Se entenderá por
estabilidad presupuestaria de las AA.PP la situación de equilibrio o superávit
estructural (…)”. Este principio se traduce en la fijación de un objetivo de déficit
en términos porcentuales sobre en el PIB regional en el caso de las CC.AA (art.
16).
2) Principio de sostenibilidad financiera (art. 4): “Se entenderá por
sostenibilidad financiera la capacidad para financiar compromisos de gasto
presentes y futuros dentro de los límites de déficit, deuda pública y morosidad
de deuda comercial (…)”. Este principio se traduce en un doble compromiso. Por
una parte, las CC.AA deben cumplir un objetivo de deuda público en términos
porcentuales sobre el PIB regional (art. 16). De otra parte, “se entiende que
existe sostenibilidad de la deuda comercial, cuando el periodo medio de pago a
los proveedores no supere el plazo máximo previsto en la normativa sobre
morosidad” (art. 4.2).

1.4.2 Principios generales de la Hacienda Pública Regional


Desarrollamos esta pregunta ateniéndonos a las fuentes jurídicas antecedentes de la
regulación en el Decreto Legislativo 1/1999, de 2 de diciembre, por el que se
aprueba el Texto Refundido de la Ley de Hacienda de la R. de Murcia (TRLHRM, en
adelante):

• En la Constitución española:
Artículo 31. Sistema tributario: principios
1. Todos contribuirán al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su
capacidad económica mediante un sistema tributario justo inspirado en los
principios de igualdad y progresividad que, en ningún caso, tendrá alcance
confiscatorio.
Artículo 128. Subordinación de la riqueza al interés general
1. Toda la riqueza del país en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad está
subordinada al interés general.
Artículo 133. Potestad tributaria: reserva de ley y principio de legalidad
1. La potestad originaria para establecer los tributos corresponde exclusivamente
al Estado, mediante ley.
2. Las Comunidades Autónomas y las Corporaciones locales podrán establecer y
exigir tributos, de acuerdo con la Constitución y las leyes.
3. Todo beneficio fiscal que afecte a los tributos del Estado deberá establecerse en
virtud de ley.
4. Las Administraciones Públicas sólo podrán contraer obligaciones financieras y
realizar gastos de acuerdo con las leyes.
Artículo 136. Tribunal de Cuentas
1. El Tribunal de Cuentas es el supremo órgano fiscalizador de las cuentas y de la
gestión económica de Estado, así como del sector público.
Dependerá directamente de las Cortes Generales y ejercerá sus funciones por
delegación de ellas en el examen y comprobación de la Cuenta General del Estado.
2. Las cuentas del Estado y del sector público estatal se rendirán al Tribunal de
Cuentas y serán censuradas por éste.
El Tribunal de Cuentas, sin perjuicio de su propia jurisdicción, remitirá a las Cortes
Generales un informe anual en el que, cuando proceda, comunicará las
infracciones o responsabilidades en que, a su juicio, se hubiere incurrido.
3. Los miembros del Tribunal de Cuentas gozarán de la misma independencia e
inamovilidad y estarán sometidos a las mismas incompatibilidades que los Jueces.
4. Una ley orgánica regulará la composición, organización y funciones del Tribunal
de Cuentas.
• Ley Orgánica 2/1982, de 12 de mayo, del Tribunal de Cuentas

Artículo 153. Control económico y presupuestario de la CC.AA.


El control de la actividad de los órganos de las C. Autónomas se ejercerá: […]
d) Por el Tribunal de Cuentas, el económico y presupuestario.

Artículo 156. Autonomía financiera de la CC. AA y colaboración


1. Las Comunidades Autónomas gozarán de autonomía financiera para el
desarrollo y ejecución de sus competencias con arreglo a los principios de
coordinación con la Hacienda estatal y de solidaridad entre todos los españoles.
2. Las Comunidades Autónomas podrán actuar como delegados o colaboradores
del Estado para la recaudación, la gestión y la liquidación de los recursos
tributarios de aquél, de acuerdo con las leyes y los Estatutos.
Artículo 157. Recursos de las CC.AA.
1. Los recursos de las Comunidades Autónomas estarán constituidos por:
a) Impuestos cedidos total o parcialmente por el Estado; recargos sobre
impuestos estatales y otras participaciones en los ingresos del Estado.
b) Sus propios impuestos, tasas y contribuciones especiales.
c) Transferencias de un Fondo de Compensación interterritorial y otras
asignaciones con cargo a los Presupuestos Generales del Estado.
d) Rendimientos procedentes de su patrimonio e ingresos de derecho privado.
e) El producto de las operaciones de crédito.
2. Las Comunidades Autónomas no podrán en ningún caso adoptar medidas
tributarias sobre bienes situados fuera de su territorio o que supongan obstáculo
para la libre circulación de mercancías o servicios.
3. Mediante ley orgánica podrá regularse el ejercicio de las competencias
financieras enumeradas en el precedente apartado 1, las normas para resolver los
conflictos que pudieran surgir y las posibles formas de colaboración financiera
entre las Comunidades Autónomas y el Estado.
• Ley Orgánica 8/1980, de 22 de septiembre,
de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA).

Artículo 158. Asignación y Fondos de Compensación Interterritorial


1. En los Presupuestos Generales del Estado podrá establecerse una asignación a
las Comunidades Autónomas en función del volumen de los servicios y actividades
estatales que hayan asumido y de la garantía de un nivel mínimo en la prestación
de los servicios públicos fundamentales en todo el territorio español.
2. Con el fin de corregir desequilibrios económicos interterritoriales y hacer
efectivo el principio de solidaridad, se constituirá un Fondo de Compensación con
destino a gastos de inversión, cuyos recursos serán distribuidos por las Cortes
Generales entre las Comunidades Autónomas y provincias, en su caso.

• En el Estatuto de Autonomía
Artículo 40. Autonomía financiera regional
La Región de Murcia tiene autonomía financiera, dominio público y patrimonio
propio de acuerdo con la Constitución, éste Estatuto y los principios de
coordinación orgánica y funcional con las Administraciones Estatal y Local, así
como de solidaridad entre todos los españoles.

Artículo 42. La Hacienda regional


La Hacienda de la Comunidad Autónoma está constituida por:
a) Los ingresos procedentes de su patrimonio y demás de Derecho privado.
b) Los ingresos procedentes de sus propios impuestos, tasas y contribuciones
especiales.
c) Los ingresos procedentes de los tributos que sean cedidos total o
parcialmente por el Estado.
d) Los recargos que pudieran establecerse sobre los impuestos del Estado.
e) Las participaciones en los ingresos del Estado.
f) El producto de las operaciones de crédito y de las emisiones de Deuda.
g) El producto de las multas y sanciones en el ámbito de su competencia.
h) Las asignaciones que se puedan establecer en los Presupuestos Generales del
Estado.
i) Las transferencias del Fondo de Compensación Interterritorial para la
inversión en el territorio de la Región.
j) Cualesquiera otros ingresos públicos o privados.

Artículo 43. Competencias en materia de Hacienda


1. Corresponde a la Comunidad Autónoma:
a) La administración de los tributos propios, en sus fases de gestión, liquidación,
recaudación e inspección, pudiendo solicitar de la Administración Tributaria
del Estado la colaboración que precise para el mejor cumplimiento de estas
funciones.
b) Por delegación del Estado, la administración de los tributos cedidos por éste
en la forma y límite que señale el acto de cesión.
2. En los demás casos, dicha administración corresponderá al Estado, sin perjuicio
de la delegación que la Región pueda recibir de éste y de la colaboración que pueda
establecerse, especialmente cuando las necesidades y circunstancias así lo
aconsejen.
3. El Consejo de Gobierno podrá colaborar con las Corporaciones municipales para
la recaudación de los tributos propios de éstas, sin perjuicio de la gestión,
liquidación e inspección que corresponde a tales entidades.

Artículo 44. Reclamaciones económico–administrativas


1. El conocimiento de las reclamaciones interpuestas contra los actos dictados en
materia tributaria, corresponderá:
a) Cuando se trate de tributos propios de la Comunidad Autónoma, a sus propios
órganos económico–administrativos.
b) Cuando se trate de tributos cedidos y de recargos establecidos sobre tributos
del Estado, a los órganos económico–administrativos del mismo.
2. Las resoluciones de los órganos económico–administrativos de la Comunidad
Autónoma podrán ser objeto de recurso contencioso–administrativo, en los
términos establecidos por la normativa reguladora de está jurisdicción.

Artículo 45. Reserva de Ley tributaria


Se regularán necesariamente mediante Ley de la Asamblea Regional las siguientes
materias:
1. El establecimiento, modificación y supresión de sus propios impuestos, tasas
y contribuciones especiales, así como de los elementos directamente
determinantes de la deuda tributaria, inclusive exenciones y bonificaciones
que les afecten.
2. El establecimiento, modificación y supresión de los recargos sobre los
impuestos del Estado.

Artículo 54. Control económico–presupuestario: el Tribunal de Cuentas


El control económico y presupuestario de la Región se ejercerá por el Tribunal de
Cuentas del Estado, y sus investigaciones y actuaciones podrán producirse tanto a
iniciativa de los órganos regionales como del Consejo Auditor del Tribunal de
Cuentas (hoy Sección de Fiscalización), todo ello sin perjuicio de las facultades que
corresponden a la Asamblea Regional.
El informe del Tribunal de Cuentas será remitido a la Asamblea Regional y a las
Cortes Generales.

DISPOSICIONES ADICIONALES PRIMERA. Tributos cedidos


1. Se cede a la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia el rendimiento de los
siguientes tributos:
a) Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, con carácter parcial, en el
porcentaje del 50 por ciento.
b) Impuesto sobre el Patrimonio.
c) Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones.
d) Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos
Documentados.
e) Los Tributos sobre el Juego.
f) El Impuesto sobre el Valor Añadido, con carácter parcial, en el porcentaje del
50 por ciento.
g) El Impuesto Especial sobre la Cerveza, con carácter parcial, en el porcentaje
del 58 por ciento.
h) El Impuesto Especial sobre el Vino y Bebidas Fermentadas, con carácter
parcial, en el porcentaje del 58 por ciento.
i) El Impuesto Especial sobre Productos Intermedios, con carácter parcial, en el
porcentaje del 58 por ciento.
j) El Impuesto Especial sobre el Alcohol y Bebidas Derivadas, con carácter
parcial, en el porcentaje del 58 por ciento.
k) El Impuesto Especial sobre Hidrocarburos, con carácter parcial, en el
porcentaje del 58 por ciento.
l) El Impuesto Especial sobre las Labores del Tabaco, con carácter parcial, en el
porcentaje del 58 por ciento.
m) El Impuesto Especial sobre la Electricidad.
n) El Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte.
ñ) El Impuesto sobre las Ventas Minoristas de Determinados Hidrocarburos.
La eventual supresión o modificación por el Estado de alguno de los tributos antes
señalados implicará la extinción o modificación de la cesión.
2. El alcance y condiciones de la cesión se establecerá por la Comisión Mixta a la
que se refiere la disposición transitoria quinta que, en todo caso, los referirá a
bienes, valores o rendimientos sitos u obtenidos en la Región de Murcia. El
Gobierno no tramitará el acuerdo de la Comisión como proyecto de Ley, en el plazo
de seis meses a partir de la aprobación por las Cortes del presente Estatuto.
3. En tanto no estén en vigor los impuestos referidos en los epígrafes a) y c) del
apartado uno de está disposición, se ceden a la Comunidad Autónoma los
siguientes impuestos:
1.º En sustitución del impuesto reseñado en el epígrafe a), el actual Impuesto
Extraordinario sobre el Patrimonio de las Personas Físicas.
2.º En tanto no entre en vigor el impuesto reseñado en la letra c), el actual
Impuesto General sobre Sucesiones.
4. El contenido de está disposición se podrá modificar mediante acuerdo del
Gobierno con la Comunidad Autónoma siendo tramitada por el Gobierno como
proyecto de Ley ordinaria. A estos efectos, la modificación de la presente
disposición no se considerará modificación del Estatuto.
• Redacción dada por la Ley 22/2010, de 16 de julio, del régimen de cesión de
tributos del Estado a la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia y de fijación
del alcance y condiciones de dicha cesión

• En la LOFCA
Se contemplan los «principios generales» (artículos 1 a 3) y los «recursos de las
CC.AA.» (artículos 4 a 16), que serán estudiados en el tema 25.

• En el TRLHRM (Decreto Legislativo 1/1999, de 2 de diciembre):

«TÍTULO PRELIMINAR
PRINCIPIOS GENERALES

Artículo 1. Definición y prerrogativas de la Hacienda Pública Regional.


1. La Hacienda Pública Regional está constituida por el conjunto de derechos y
obligaciones de contenido económico cuya titularidad corresponde a la
Administración Pública Regional y a sus organismos autónomos.
2. La Administración Pública Regional y sus organismos autónomos tendrán el mismo
tratamiento fiscal que la ley otorga al Estado. En la gestión de los derechos
económicos y en el cumplimiento de sus obligaciones de la Hacienda Pública Regional
gozará de las prerrogativas reconocidas en las leyes.
Los organismos autónomos regionales gozarán de las prerrogativas y beneficios
fiscales que la legislación vigente establezca.

Artículo 2. Régimen normativo.


1. La administración de la Hacienda Pública Regional se regirá:
a) Por la presente Ley.
b) Por las leyes específicas en la materia que apruebe la Asamblea Regional.
c) Por la Ley de Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para cada
ejercicio y durante su vigencia.
d) Por la legislación general del Estado en la materia, en los casos previstos
expresamente en la Constitución, en el Estatuto de Autonomía y en la presente
Ley.
e) Por las normas reglamentarias que se dicten en su desarrollo.
2. Tendrán carácter supletorio
– las demás normas de derecho administrativo, y,
– a falta de éstas, las de derecho común.

Artículo 3. Funciones de la Administración financiera de la C. Autónoma.


1. Corresponde a la Administración financiera de la Comunidad Autónoma:
a) El cumplimiento de las obligaciones económicas de sus órganos, organismos
autónomos y empresas públicas, a través de la gestión y aplicación de sus
recursos a las finalidades que sean competencia de la Comunidad Autónoma,
conforme a los principios constitucionales de legalidad, objetividad, eficacia y
economía, y su programación y ejecución atenderá, asimismo, a los principios de
territorialidad y solidaridad.
b) La colaboración en materia financiera y tributaria con los entes locales de la
Región, de acuerdo con el Estatuto de Autonomía y la Ley reguladora de las
Haciendas Locales, así como la ordenación y control de las instituciones
financieras y crediticias que operen en el ámbito de la Región de Murcia.
2. Las reclamaciones que se interpongan contra los actos dictados por la
Administración Regional en lo referente a ingresos de derecho público, con excepción
de los tributos cedidos y de los recargos establecidos sobre tributos del Estado,
tendrán naturaleza económico–administrativa, y su conocimiento y resolución
corresponde en única instancia al Consejero de Hacienda y Administración Pública,
que agotará, en todo caso, la vía económico–administrativa.
• Estos órganos son los Tribunales Económico–Administrativos Regionales (TEAR).
Habiendo uno en la ciudad de Murcia (calle San Nicolás n.º 19) y una Dependencia
Local en Cartagena.
• Al TEAR le corresponde:
– Conocer y resolver las reclamaciones económico administrativas que se
interpongan contra los actos de gestión, inspección y recaudación dictados por los
Órganos de la Comunidad Autónoma en relación con los tributos cedidos por el
Estado
– Conocer y resolver las reclamaciones económico administrativas que se
interpongan contra los actos de gestión, inspección y recaudación de los Recargos
que la Comunidad tenga establecidos o pueda establecer sobre los tributos
susceptibles de ser cedidos por el Estado.
• Ley 7/2004, de 28 de diciembre, de Organización y Régimen Jurídico de la
administración pública de la comunidad Autónoma de la Región de Murcia:
«4604730Artículo 30. Reclamaciones económico–administrativas. 459303
Corresponde al Consejero competente en materia de Hacienda conocer, en única
instancia, de las reclamaciones económico–administrativas contra los actos
dictados en materia de gestión, liquidación, inspección, recaudación y devolución de
los tributos propios y de los precios públicos regionales, así como contra los actos de
liquidación, recaudación y devolución de los demás ingresos de Derecho público
propios.
Contra los referidos actos se podrá interponer ante el mismo órgano u Organismo
Público que los haya dictado, el recurso de reposición potestativo previo a la vía
económico–administrativa, sin que, en ningún caso, puedan simultanearse ambos
medios de impugnación. Las resoluciones de las reclamaciones agotarán la vía
administrativa y contra las mismas se podrá interponer recurso contencioso–
administrativo, de conformidad con la legislación reguladora de dicha jurisdicción.

• Ley 22/2010, de 16 de julio, del régimen de cesión de tributos del Estado a la


Comunidad Autónoma de la Región de Murcia y de fijación del alcance y
condiciones de dicha cesión
«Art. 2. Alcance y condiciones de la cesión. Atribución de facultades normativas.
1. El alcance y condiciones de la cesión de tributos a la C. Autónoma de la R. de Murcia
son los establecidos en la Ley 22/2009, de 18 de diciembre, por la que se regula el
sistema de financiación de las Comunidades Autónomas de régimen común y Ciudades
con Estatuto de Autonomía y se modifican determinadas normas tributarias.
No obstante lo dispuesto en el apartado anterior, la Comunidad Autónoma de la Región
de Murcia, de acuerdo con lo establecido en su Estatuto de Autonomía y en el artículo
20, apartados 2 y 3, de la Ley Orgánica 8/1980, de 22 de septiembre, de Financiación
de las Comunidades Autónomas asume la competencia para la resolución de las
reclamaciones económico–administrativas en los términos establecidos en el primer
párrafo de la letra c) del artículo 59.1 de la Ley 22/2009, de 18 de diciembre, por la que
se regula el sistema de financiación de las Comunidades Autónomas de régimen común
y Ciudades con Estatuto de Autonomía y se modifican determinadas normas
tributarias.

Disposición transitoria segunda. Régimen transitorio de la competencia para la


resolución de las reclamaciones económico–administrativas, asumida por la
Comunidad.

La asunción efectiva por la C. Autónoma de la R. de Murcia de la competencia para la


resolución de las reclamaciones económico–administrativas establecida en el segundo
párrafo del apartado 1 del art. 2 de esta ley, se producirá con los traspasos de los
servicios y funciones adscritos a dicha competencia, siendo ejercida por los órganos
que la tengan encomendada en la actualidad, en tanto no se produzca dicha asunción
efectiva.»
Artículo 4. Principios de la Hacienda Pública Regional.
1. La administración de la Hacienda Pública Regional está sometida a los siguientes
principios:
a) De presupuesto único anual, el cual se elaborará considerando los objetivos y
prioridades establecidos por la ordenación y planificación de la actividad
económica regional.
b) De unidad de caja, para lo cual se integrarán y custodiarán en el Tesoro Público
Regional todos del fondos y valores de la Hacienda Pública Regional.
c) De control de todas las operaciones de contenido económico, según las normas
contenidas en esta Ley para cada ente.
d) De contabilidad pública, tanto para reflejar toda clase de operaciones y de
resultados de su actividad, como para facilitar datos e información, en general,
que sean necesarios para el desarrollo de sus funciones.
2. Las cuentas de la Hacienda Pública Regional se someterán al control del Tribunal de
Cuentas, sin perjuicio de las competencias de la Asamblea Regional.
Artículo 5. Organismos autónomos. Derogado.
Artículo 6. Empresas públicas regionales. Derogado.
Artículo 7. Principio de reserva de ley.
Corresponde a la Asamblea Regional la regulación mediante ley de las siguientes
materias relativas a la Hacienda Pública Regional:
a) Los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma, así como sus
modificaciones a través de la concesión de créditos extraordinarios y
suplementos de crédito en los términos previstos en la presente Ley.
b) El establecimiento, modificación y supresión de los tributos propios y de los
recargos sobre los impuestos del Estado, así como sus exenciones y
bonificaciones.
c) La emisión y regulación de la deuda de la Administración Pública Regional y de
sus organismos autónomos, así como las autorizaciones para concertar
operaciones de crédito superiores a un año y otorgar avales.
d) El régimen general y especial en materia financiera de los organismos
autónomos regionales.
e) El régimen de patrimonio y contratación de la Comunidad Autónoma.
f) Cualesquiera otras que según el ordenamiento vigente deban regularse por ley.

Artículo 8. Competencias del Consejo de Gobierno. (Potestad reglamentaria)


Corresponde al Consejo de Gobierno en las materias objeto de esta Ley:
a) Aprobar los Reglamentos para la aplicación de la misma.
b) Elaborar y aprobar el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales de la
Comunidad Autónoma; presentarlo para su examen, enmienda y aprobación por
la Asamblea Regional, y ejecutarlo conforme a las normas presupuestarias.
c) Ordenar los gastos en los supuestos legalmente previstos.
d) Prestar o denegar la conformidad a la tramitación de las proposiciones de ley o
enmiendas que impliquen un aumento de los créditos presupuestarios del
estado de gastos o una disminución de los ingresos presupuestarios.
e) Determinar las directrices de la política económica y financiera de la Comunidad
Autónoma.
f) Cualesquiera otras que le estén atribuidas por el Estatuto de Autonomía y las
leyes.
• La Ley 6/2004, de 28 de diciembre, del Estatuto del Presidente y del Consejo de
Gobierno de la Región de Murcia, en materia de Hacienda, dice en su:
«Artículo 22. De las atribuciones del Consejo de Gobierno.
Para el desarrollo de las funciones que el Estatuto de Autonomía le atribuye,
corresponde al Consejo de Gobierno: […]
3. Aprobar el proyecto anual de ley de presupuestos generales de la Comunidad
Autónoma, someterlo a la Asamblea Regional con una antelación mínima de
dos meses a la fecha de inicio del correspondiente ejercicio y ejecutarlo,
conforme a las normas vigentes en la materia. […]
5. Prestar o denegar la conformidad a la tramitación parlamentaria de las
proposiciones de ley, enmiendas o cualesquiera otras iniciativas de la
Cámara, que impliquen aumento de los créditos o disminución de los
ingresos presupuestarios. […]
19. Autorizar los gastos en los supuestos previstos por la legislación reguladora
de la Hacienda pública regional.
20. Disponer la realización de operaciones de crédito y emisión de deuda pública,
de conformidad con lo establecido por la legislación regional en materia de
hacienda. […]
23. Transigir sobre los bienes y derechos de la Hacienda regional, conforme a lo
establecido en la legislación en la materia. […]».

Artículo 9. Competencias del Consejero de Hacienda y Administración Pública.


Corresponde al Consejero de Hacienda y Administración Pública en las materias
objeto de esta Ley:
a) Proponer al Consejo de Gobierno las disposiciones y acuerdos atribuidos a la
competencia de éste en las materias propias de esta Ley.
b) Elaborar y someter al Consejo de Gobierno el Anteproyecto de Ley de
Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma.
c) La administración, gestión y recaudación de los derechos económicos de la
Hacienda Pública Regional, sin perjuicio de las competencias atribuidas a los
titulares de los organismos autónomos.
d) Velar por la ejecución de los Presupuestos Generales de la C. Autónoma y por el
cumplimiento de las disposiciones referentes a la Hacienda Pública Regional.
e) La función de ordenación de pagos.
f) Proponer al Consejo de Gobierno la colaboración en materia financiera y
tributaria con los entes locales de la Región, de acuerdo con el Estatuto de
Autonomía.
g) Dictar las disposiciones y resoluciones que procedan en el ámbito de las materias
propias de esta Ley.
h) Las demás competencias o funciones que le atribuyen las leyes en las materias
propias de esta Ley.

Artículo 10. Competencias de los Consejeros.


Son funciones propias de los Consejeros en los términos establecidos en esta Ley:
a) Elaborar el anteproyecto de presupuesto correspondiente al estado de gastos
de la Consejería en los términos establecidos en esta Ley.
(Por lo tanto, no el "estado de ingresos", que corresponde a la Consejería de
Hacienda y Administración Pública)
b) Gestionar los créditos presupuestarios de sus respectivas Secciones.
c) Contraer obligaciones económicas en nombre y por cuenta de la C. Autónoma.
(Documento contable «O»: reconocimiento de obligaciones).
d) Autorizar, disponer o comprometer los gastos que no sean de la competencia
del Consejo de Gobierno, y elevar a la aprobación de éste los que sean de su
competencia.
(Documentos contables:
«A»: Autorización de gasto; y
«D»: Disposición o compromiso de gasto).
e) Proponer el pago de las obligaciones al ordenador de pagos.
(Documento contable «K»: Proposición de pago.
f) Las demás que les atribuyan las leyes.
• La Ley 6/2004, de 28 de diciembre, del Estatuto del Presidente y del Consejo de
Gobierno de la Región de Murcia, en materia de Hacienda, dice en su:
«Artículo 37. Atribuciones como miembros del Consejo de Gobierno.
1. Los consejeros, en su condición de miembros del Consejo de Gobierno, tendrán
las siguientes atribuciones: […]
f) Formular ante la Consejería competente en materia de Hacienda y de acuerdo
con las directrices emanadas de la misma, la propuesta de anteproyecto del
presupuesto anual de su Consejería.»
• Ley 7/2004, de 28 de diciembre, de Organización y Régimen Jurídico de la
administración pública de la comunidad Autónoma de la Región de Murcia:
«4604716Artículo 16. Funciones de los Consejeros.459285
2. Los Consejeros, en cuanto titulares de sus respectivas Consejerías, ejercen las
funciones siguientes:
j) La aprobación de la propuesta de los estados de gastos de la Consejería, y de
los presupuestos de los Organismos Públicos dependientes, y su remisión a la
Consejería competente en materia de hacienda.
1) La gestión de los créditos para gastos de su Consejería en los términos
establecidos por la Ley de Hacienda de la Región de Murcia y por la Ley de
Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para cada ejercicio.»
Nota: Estas funciones son delegables.

Artículo 11. Competencias de los titulares de los organismos autónomos.


Son funciones propias de los titulares de los organismos autónomos regionales:
a) Elaborar el anteproyecto de presupuesto del organismo.
(Comprensivo del estado de ingresos y de gastos).
b) La administración, gestión y recaudación de los derechos económicos de los
organismos autónomos de los que son titulares.
c) Autorizar, disponer o comprometer los gastos, que no sean de la competencia
del Consejo de Gobierno, y ordenar los pagos según el presupuesto aprobado
del organismo.
(Por lo tanto, ejerce las funciones de ordenador de gastos y ordenación de pagos).
d) Las demás que le atribuyan las leyes.»

2. DERECHOS ECONÓMICOS DE
LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL
Los derechos económicos de la Hacienda Pública Regional aparecen recogidos en el
artículo 12 y siguientes del TRLHRM en consonancia con lo establecido en el art. 42
del Estatuto de Autonomía y en la LOFCA.

TÍTULO I
RÉGIMEN JURÍDICO DE LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL
CAPÍTULO I

DERECHOS ECONÓMICOS DE LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL

Artículo 12. Derechos económicos de la Hacienda Pública Regional.


Son derechos económicos de la Hacienda Pública Regional y constituyen el haber de
la misma:
a) Los ingresos procedentes de sus propios impuestos, tasas y contribuciones
especiales.
b) Los ingresos procedentes de los tributos que sean cedidos total o parcialmente
por el Estado.
c) Los ingresos procedentes de su patrimonio y demás de derecho privado.
d) Los ingresos procedentes de los recargos que pudiesen establecerse sobre los
tributos del Estado susceptibles de cesión.
e) Las participaciones en los ingresos del Estado.
f) El producto de las operaciones de crédito y de las emisiones de deuda.
g) El producto de las multas y sanciones en el ámbito de su competencia.
h) Las asignaciones que se pueden establecer con cargo a los Presupuestos
Generales del Estado o de otros entes nacionales o supranacionales.
i) Los ingresos de sus propios precios públicos.
j) Cualesquiera otros ingresos públicos o privados.

Artículo 13. Principio de no afectación de los recursos.


Los recursos de la Hacienda Pública Regional se destinarán a satisfacer el conjunto de
sus obligaciones, salvo que por ley se establezca su afectación a fines determinados.

Artículo 14. Órganos competentes para la administración de los recursos.


1. La administración de los recursos de la Hacienda Pública Reg. corresponde, según
su titularidad, a la Consejería de Hacienda y Administración Pública o a los Presidentes
o Directores de los organismos autónomos con los controles que la ley establezca.
2. Las personas o entidades que tengan a su cargo la administración de derechos
económicos de la Hacienda Pública Regional dependerán de la Consejería de
Hacienda y Administración Pública o del correspondiente organismo autónomo, en
todo lo relativo a su gestión, entrega o aplicación y a la rendición de las respectivas
cuentas.
3. Estarán obligados a la prestación de fianza las entidades o particulares que
manejen o custodien fondos o valores de naturaleza pública. La misma obligación
podrá exigirse a los funcionarios o empleados públicos en la cuantía y forma que se
determine reglamentariamente.
Artículo 15. Rendimientos procedentes del patrimonio.
Los rendimientos procedentes del patrimonio de la Administración Pública Regional o
de sus organismos autónomos, deberán reflejarse por su importe íntegro en una
cuenta específica del presupuesto respectivo.

CAPÍTULO II
ADMINISTRACIÓN DE LOS DERECHOS ECONÓMICOS
DE LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL

Artículo 16. Administración de los tributos y otros ingresos de derecho público.


1. La administración de los tributos propios, en sus fases de gestión, liquidación,
recaudación, inspección y revisión, se ajustará:
a) A las disposiciones del Estatuto de Autonomía.
b) A las leyes de la Asamblea Regional.
c) A los reglamentos que apruebe el Consejo de Gobierno.
d) A las normas de desarrollo dictadas por el Consejero de Economía y Hacienda.
2. La administración de los tributos cedidos por el Estado que, en su caso, asuma la
Comunidad Autónoma se ajustará a lo establecido en la ley que regule la cesión.
• Ley 22/2010, de 16 de julio, del régimen de cesión de tributos del Estado a la C.
Autónoma de la R. de Murcia y de fijación del alcance y condiciones de dicha cesión.

En cuanto a los demás ingresos de derecho público gestionados en la Comunidad


Autónoma, ésta tendrá las facultades derivadas de la delegación que pueda recibir y,
en todo caso, las de colaboración que puedan establecerse.

Artículo 17. Gestión recaudatoria.


1. La gestión recaudatoria, en el ámbito competencial de la Comunidad Autónoma,
será llevada a cabo exclusivamente por la Consejería de Hacienda y Administración
Pública que asumirá, de modo directo, las funciones de la gestión recaudatoria
conducentes a la realización, en vía voluntaria y ejecutiva, de los créditos y derechos
que constituyen el haber de la Hacienda Pública Regional o aquellos otros que le sean
encargados, en régimen de concierto, por otras Administraciones Públicas, Entidades
o Corporaciones. A los efectos de este artículo, se entiende que la gestión
recaudatoria se inicia una vez notificada por el órgano gestor de la Consejería u
organismo autónomo la deuda a los interesados.
No obstante, la Consejería de Hacienda y Administración Pública podrá delegar en
otros órganos o entidades de la C. Autónoma o de otras Administraciones Públicas la
recaudación total o parcial de aquellos ingresos cuando por razones de unidad de
función, agilidad de gestión, o competencias territoriales, lo considere procedente.
2. Podrán prestar el servicio de caja, los bancos, cajas de ahorro y cooperativas de
crédito, que en adelante serán llamadas entidades de depósito, a las que la
Consejería de Hacienda y Administración Pública atribuya dicho servicio, con el
alcance y condiciones que ésta establezca.
La Consejería de Hacienda y Administración Pública podrá autorizar, con los requisitos
y contenido que se establezcan, a entidades de depósito para actuar como entidades
colaboradoras en la recaudación de los derechos económicos de la Hacienda Pública
Regional.
En ningún caso las autorizaciones anteriores atribuirán el carácter de órganos de
recaudación a dichas entidades.
3. Las deudas de derecho público resultantes de liquidaciones practicadas por la
Administración se ingresarán en los periodos que reglamentariamente se establezcan.
Las deudas de derecho público que deban pagarse mediante declaración–liquidación
o autoliquidación, deberán satisfacerse en los plazos o fechas que se establezcan en
sus normas reguladoras.
Para las deudas de vencimiento periódico y notificación colectiva, tanto por tributos
como por precios públicos, los plazos de ingreso en período voluntario serán los que
se establezcan en la normativa reguladora de las mismas.

Artículo 18. Límites a los derechos económicos de la Hacienda Pública Regional.


1. No se podrán enajenar, gravar, ni arrendar los derechos económicos de la Hacienda
Pública Regional, salvo en los supuestos establecido por las leyes.
2. No se concederán exenciones, condonaciones, rebajas ni moratorias en el pago de
los derechos a la Hacienda Pública Regional, salvo en los casos y en la forma
expresamente determinados en las leyes.
Por ejemplo: En la Ley de Presupuestos Generales para 2017, en su Disposición
Adicional Trigésima novena. Condonación de deudas de usuarios de la prestación
farmacéutica ambulatoria. Se condonan todas las deudas relacionadas en el Anexo de la
Resolución dictada por el Director Gerente del Servicio Murciano de Salud, de fecha 1 de
octubre de 2016, relativa a reintegro por pago indebido, como consecuencia de errores
materiales advertidos en la gestión de los procedimientos de devolución de gastos por
excesos de aportación del usuario en la prestación farmacéutica ambulatoria, previstos en
el artículo 4 del Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes para
garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la calidad y seguridad
de las prestaciones. El importe global de las deudas condonadas asciende a 285.057,14
euros, afectando a un total de 5.694 deudores que ostentan la condición de usuarios con
derecho a la asistencia sanitaria pública a cargo del Servicio Murciano de Salud.

3. No se podrá transigir judicial ni extrajudicialmente sobre los derechos de la


Hacienda Pública Regional, ni someter a arbitraje las contiendas que se susciten
acerca de los mismos, sino mediante Decreto acordado en Consejo de Gobierno,
previo informe de la Dirección de los Servicios Jurídicos.
Artículo 19. Prerrogativas de la Hacienda Pública Regional. Procedimiento de
apremio.
1. Para el cobro de los tributos y demás ingresos de derecho público, la Hacienda
Pública Reg. gozará de las prerrogativas establecidas legalmente para la Hacienda
Pública Estatal, y actuará de acuerdo con el procedimiento administrativo
correspondiente.
2. El procedimiento de apremio se iniciará mediante providencia notificada al deudor
en la que se indentificará la deuda pendiente y requerirá para que efectúe su pago
con el recargo correspondiente. Esta providencia, expedida por el órgano competente,
es el título suficiente para iniciar el procedimiento de apremio y tiene la misma
fuerza ejecutiva que la sentencia judicial para proceder contra los bienes y derechos
de los obligados al pago.
3. No podrán suspenderse los procedimientos administrativos de apremio por virtud
de recursos interpuestos por los interesados, así como en los casos de solicitud de
concesión de aplazamiento o fraccionamiento de la deuda, si no se realiza el pago, se
consigna su importe, se garantiza éste mediante aval bancario o en otra forma
reglamentariamente establecida.
4. No obstante, podrá suspenderse el procedimiento de apremio, sin los requisitos
establecidos en el apartado anterior, si el interesado demuestra que ha existido en su
perjuicio error material o aritmético en la determinación de la deuda tributaria, o
cuando se interponga reclamación en concepto de tercería de dominio 1. En este
último supuesto se tomarán las medidas de aseguramiento de la deuda que sean
oportunas.
Desestimada la reclamación en la vía administrativa, proseguirá el procedimiento de
apremio, salvo que de la ejecución puedan derivarse perjuicios de difícil o imposible
reparación, en cuyo caso podrá acordarse la suspensión de aquél, siempre que se
adopten las medidas reglamentarias aplicables para el aseguramiento de la deuda.

5. Sin perjuicio del régimen de responsabilidad previsto para otras materias en su


normativa específica, responderán solidariamente del pago de deudas de derecho
público de naturaleza no tributaria, junto a los deudores principales:

a) Los miembros, partícipes o cotitulares de las herencias yacentes, comunidades de


bienes y demás entidades que, carentes de personalidad jurídica, constituyan una
unidad económica o un patrimonio separado susceptibles de imposición, en
proporción a sus respectivas participaciones respecto de las obligaciones de pago de
dichas entidades.

b) Las personas o entidades que sean causantes o colaboren activamente en la


realización de infracciones administrativas. Su responsabilidad se extenderá también a
la sanción.

c) Las personas o entidades en quienes concurra alguna de las circunstancias del


artículo 42.2 de la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria, hasta el
importe del valor de los bienes o derechos que se hubieran podido embargar o
enajenar. [42.2 LGT:

“a) Las que sean causantes o colaboren en la ocultación o transmisión de bienes o derechos del
obligado al pago con la finalidad de impedir la actuación de la Administración tributaria.

b) Las que, por culpa o negligencia, incumplan las órdenes de embargo.

1 Propietario tercero de un bien sujeto a apremio.


c) Las que, con conocimiento del embargo, la medida cautelar o la constitución de la garantía,
colaboren o consientan en el levantamiento de los bienes o derechos embargados, o de aquellos
bienes o derechos sobre los que se hubiera constituido la medida cautelar o la garantía.

d) Las personas o entidades depositarias de los bienes del deudor que, una vez recibida la
notificación del embargo, colaboren o consientan en el levantamiento de aquéllos]

Sin perjuicio del régimen de responsabilidad previsto para otras materias en su


normativa específica, serán responsables subsidiarios del pago de deudas no
tributarias que se rijan por el derecho público los administradores de hecho o de
derecho de las personas jurídicas, aquellos que ostenten su representación legal y
demás personas o entidades en los supuestos previstos en las letras a), b), c), g) y h)
del artículo 43.1 de la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria.

[43.1 LGT:

a) Sin perjuicio de lo dispuesto en el párrafo a) del apartado 1 del artículo 42 de esta ley, los
administradores de hecho o de derecho de las personas jurídicas que, habiendo éstas cometido
infracciones tributarias, no hubiesen realizado los actos necesarios que sean de su incumbencia para
el cumplimiento de las obligaciones y deberes tributarios, hubiesen consentido el incumplimiento por
quienes de ellos dependan o hubiesen adoptado acuerdos que posibilitasen las infracciones. Su
responsabilidad también se extenderá a las sanciones.

b) Los administradores de hecho o de derecho de aquellas personas jurídicas que hayan cesado en
sus actividades, por las obligaciones tributarias devengadas de éstas que se encuentren pendientes
en el momento del cese, siempre que no hubieran hecho lo necesario para su pago o hubieren
adoptado acuerdos o tomado medidas causantes del impago.

c) Los integrantes de la administración concursal y los liquidadores de sociedades y entidades en


general que no hubiesen realizado las gestiones necesarias para el íntegro cumplimiento de las
obligaciones tributarias devengadas con anterioridad a dichas situaciones e imputables a los
respectivos obligados tributarios. De las obligaciones tributarias y sanciones posteriores a dichas
situaciones responderán como administradores cuando tengan atribuidas funciones de
administración.

g) Las personas o entidades que tengan el control efectivo, total o parcial, directo o indirecto, de las
personas jurídicas o en las que concurra una voluntad rectora común con éstas, cuando resulte
acreditado que las personas jurídicas han sido creadas o utilizadas de forma abusiva o fraudulenta
para eludir la responsabilidad patrimonial universal frente a la Hacienda Pública y exista unicidad de
personas o esferas económicas, o confusión o desviación patrimonial. La responsabilidad se
extenderá a las obligaciones tributarias y a las sanciones de dichas personas jurídicas.

h) Las personas o entidades de las que los obligados tributarios tengan el control efectivo, total o
parcial, o en las que concurra una voluntad rectora común con dichos obligados tributarios, por las
obligaciones tributarias de éstos, cuando resulte acreditado que tales personas o entidades han sido
creadas o utilizadas de forma abusiva o fraudulenta como medio de elusión de la responsabilidad
patrimonial universal frente a la Hacienda Pública, siempre que concurran, ya sea una unicidad de
personas o esferas económicas, ya una confusión o desviación patrimonial] .
El régimen jurídico aplicable a estas responsabilidades será el contenido en la Ley
General Tributaria y en su normativa de desarrollo, salvo que en la normativa
reguladora de cada derecho se establezca otro específico, en cuyo caso aquel será de
aplicación supletoria.

Artículo 20. Intereses de demora.


1. Las cantidades adeudadas a la Hacienda Pública Regional devengarán intereses de
demora desde el día siguiente a su vencimiento.
2. Respecto a las deudas no tributarias, el tipo de interés aplicable será el interés
legal del dinero vigente el día del vencimiento de la deuda, sin perjuicio de lo
establecido en leyes especiales.
3. Para las deudas tributarias se aplicará el interés de demora, que será el interés
legal del dinero vigente a lo largo del período en el que aquél se devengue,
incrementado en un veinticinco por ciento; salvo que la Ley de Presupuestos
Generales del Estado establezca otro diferente, en cuyo caso se aplicará este último.

Artículo 21. Prescripción de los derechos de la Hacienda Pública Regional.


1. Salvo lo establecido en las leyes reguladoras de los distintos recursos, prescribirá a
los cuatro años el derecho de la Hacienda Pública Regional:
a) A reconocer o liquidar créditos a su favor, contándose dicho plazo desde el día en
que el derecho pudo ejercitarse.
b) Al cobro de los créditos reconocidos o liquidados, a contar desde la fecha de su
notificación o, si ésta no fuere preceptiva, desde su vencimiento.
2. Las multas impuestas por cualquier órgano de la Administración Pública de la
Región de Murcia, tanto si derivan de la imposición de una sanción en un
procedimiento sancionador, como si son coercitivas en cualquier tipo de
procedimiento administrativo, una vez liquidadas, adquieren plenamente la condición
de ingresos de derecho público de la Hacienda Pública Reg., siéndoles de aplicación
en todo caso, a partir de ese momento, el plazo de prescripción de cuatro años
establecido en el apartado anterior.
3. La prescripción se aplicará de oficio, sin necesidad de que la invoque o excepcione
el sujeto pasivo.
4. La prescripción regulada en los apartados 1 y 2 de este artículo quedará
interrumpida por cualquier acción administrativa realizada con conocimiento formal
del deudor y conducente al reconocimiento, regularización, inspección,
aseguramiento, comprobación, liquidación o recaudación de los derechos, así como
por la interposición de cualquier clase de reclamación o de recurso y por cualquier
actuación del deudor conducente al pago o liquidación de la deuda.
5. Los derechos declarados prescritos serán baja en las respectivas cuentas, previa
tramitación del oportuno expediente.
6. La declaración y exigencia de responsabilidades a que, en su caso, haya lugar por
la prescripción de derechos de la Hacienda Pública Regional, se ajustará a lo
establecido en el Título V de esta Ley.
7. Se autoriza a la Consejería de Hacienda y Administración Pública para que pueda
disponer la anulación y baja en contabilidad de todas aquellas liquidaciones de las
que resulten deudas inferiores a la cuantía que estime y fije como insuficiente para
la cobertura del coste que su exacción y recaudación representen.

• Son los «derechos económicos de baja cuantía»: Orden de 3 de febrero de 2009, de


la Consejería de Hacienda y Administración Pública por la que se establece la
anulación y baja en contabilidad de las liquidaciones practicadas en periodo
voluntario cuya deuda pendiente de recaudar no sea superior a seis euros:
«Artículo 1. Anulación de derechos de cobro propios.
1. Se anularán y darán de baja en contabilidad todas aquellas liquidaciones
practicadas en período voluntario, correspondientes a derechos de cobro por
ingresos propios de la Administración Pública de la Comunidad Autónoma, de
naturaleza tributaria o no, de las que resulte una deuda pendiente de recaudar con
un importe no superior a seis euros. Dicha cantidad se estima insuficiente para
cubrir el coste que su exacción y recaudación representan.
2. Lo anterior no será de aplicación a las tasas, precios públicos y los derechos de
cobro que sean resultado de un procedimiento sancionador.
Artículo 2. Anulación de derechos de cobro cedidos.
1. Se anularán y darán de baja en contabilidad todas aquellas liquidaciones
practicadas en período voluntario, que rectifiquen autoliquidaciones o
declaraciones-liquidaciones que lleven aparejado un ingreso y que correspondan a
tributos cedidos por el Estado de las que resulte una deuda pendiente de recaudar
con un importe no superior a seis euros. Dicha cantidad se estima insuficiente para
cubrir el coste que su exacción y recaudación representan.
2. Lo anterior no será de aplicación a las tasas y los derechos de cobro que sean
resultado de un procedimiento sancionador.
Artículo 3. Anotación en contabilidad. La Dirección General de Tributos y las
distintas Consejerías anotarán las bajas mencionadas en los artículos 1 y 2 en el
sistema corporativo de información contable SIGEPAL o en el sistema de gestión de
ingresos QUESTOR, en función de donde se haya registrado el derecho de cobro.»

3. OBLIGACIONES ECONÓMICAS DE
LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL
Se regula en el Título III, que se reproduce a continuación:

CAPÍTULO III
LAS OBLIGACIONES ECONÓMICAS
DE LA HACIENDA PÚBLICA REGIONAL

Artículo 22. Fuentes y exigibilidad de las obligaciones económicas de la Hacienda


Pública Regional.
1. Las obligaciones económicas de la Administración Pública Regional y de sus
organismos autónomos nacen
– de la ley,
– de los negocios jurídicos y
– de los actos o hechos que según derecho las generen.
2. El cumplimiento de las obligaciones de pago solamente podrá exigirse de la
Hacienda Pública Regional cuando resulte
– de la ejecución de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma, de
conformidad con el artículo 35 de esta Ley,
– de sentencia judicial firme, y la subsiguiente y preceptiva resolución
administrativa, o
– de operaciones de tesorería legalmente autorizadas.
3. Cuando estas obligaciones tengan por causa prestaciones o servicios a la
Comunidad Autónoma, el pago no podrá realizarse hasta que el acreedor haya
cumplido o garantizado su correlativa obligación.
Artículo 23. Prerrogativas de la Hacienda Pública Regional.
1. Las obligaciones económicas de la Hacienda Pública Regional no podrán exigirse
nunca por el procedimiento de apremio. Los Tribunales, Jueces y autoridades
administrativas no podrán despachar mandamientos de ejecución, ni dictar
providencias de embargo contra los derechos, fondos, valores y bienes en general de
la Hacienda Pública Regional.
2. Las resoluciones judiciales que determinen obligaciones a cargo de la
Administración Pública Reg. o de sus organismos autónomos serán cumplidas
puntualmente por la autoridad administrativa competente, en los términos por ellas
establecidos, sin perjuicio de la posibilidad de instar su ejecución de acuerdo con la
Constitución y las leyes.
3. La autoridad administrativa acordará el pago en la forma y con los límites de los
Presupuestos Generales de la C. Autónoma. Si para el pago fuere necesario un crédito
extraordinario o suplemento de crédito, deberá solicitarse uno u otro a la Asamblea
Reg., dentro de los 3 meses siguientes al día de la notificación de la resolución judicial.

Artículo 24. Intereses de demora.


1. Sin perjuicio de lo establecido en leyes especiales, si el pago de las obligaciones de
la Administración Pública Regional o de sus organismos autónomos no se hiciere
efectivo dentro de los tres meses siguientes al día de la notificación de la resolución
judicial o del reconocimiento de la obligación, habrá de abonarse sobre la cantidad
debida el interés señalado en el artículo 20.2 de esta Ley, desde que el acreedor
reclame por escrito el cumplimiento de la obligación.
2. Los contribuyentes y sus herederos o causahabientes tendrán derecho a la
devolución de los ingresos que indebidamente hubieran realizado en el Tesoro Público
Regional con ocasión del pago de las deudas tributarias, aplicándose a los mismos el
interés de demora regulado en el artículo 20.3 de esta Ley.

Artículo 25. Prescripción de las obligaciones de la Hacienda Pública Regional.


1. Salvo lo establecido por leyes especiales, prescribirá a los cinco años:
a) El derecho al reconocimiento o liquidación por la Hacienda Pública Regional de
toda obligación que no se hubiese solicitado con la presentación de los
documentos justificativos. El plazo se contará desde la fecha en que se concluyó
el servicio o la prestación determinante de la obligación.
b) El derecho a exigir el pago de las obligaciones ya reconocidas o liquidadas, si no
fuese reclamado por los acreedores legítimos o sus derechohabientes. El plazo se
contará desde la fecha de notificación del reconocimiento o liquidación de la
respectiva obligación.
2. No obstante lo dispuesto en el punto 1 anterior, prescribirá a los cuatro años el
derecho a la devolución de ingresos indebidos y, en su caso, a los intereses
correspondientes. El plazo se contará desde la fecha en que dicho ingreso hubiera
sido realizado.
3. La prescripción se interrumpirá conforme a las disposiciones del Código Civil,
quedando a salvo lo que pueda establecerse por leyes especiales.
4. Las obligaciones que hayan prescrito serán dadas de baja en las cuentas
respectivas, previa tramitación del expediente que corresponda, en el cual, en todo
caso, se dará trámite de vista y alegaciones a los acreedores afectados o a sus
derechohabientes.
CAPÍTULO IV
TERCERÍAS Y RECLAMACIONES
PREVIAS A LA VÍA JUDICIAL

Artículo 26. Tercerías y reclamaciones previas a la vía judicial.


1. Tercerías: Corresponde al Consejero de Hacienda y Administración Pública la
resolución de las tercerías que se susciten en el procedimiento de apremio, y su
interposición en vía administrativa será requisito previo para que puedan ejercitarse
ante los tribunales de la jurisdicción ordinaria.
2. Reclamaciones previas: Igualmente compete al Consejero de Hacienda y
Administración Pública la resolución de las reclamaciones previas a la vía judicial en
cuestiones de propiedad.

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