La guerra en curso

La guerra en curso
Leonor Silvestri

NOS ES NADA ED.

Poesía
© Leonor Silvestri
La guerra en curso
NENED-PO01

La guerra en curso

© de la presente edición
Nos Es Nada ed., 2015
París
nnn-ed.blogspot.fr

ISBN-13: 978-1516949618
ISBN-10: 1516949617

Foto y diseño de la cubierta: Arturo Valentino Ramírez

Gómez
 I.
EL DON DE CREER
Astillas, clavos miguelitos, cabezas de tormenta, marabunta suelta
y errante en el panal psíquico del orden burgués…fogoneros de un
tren fantasma…Los anarquistas creían. Eso es un don que no se
concede a cualquiera.
CHRISTIAN FERRER
1936

frágil y delicada como la felicidad

nada dejo que no doliera
en el recuerdo
no hay propaganda
como la memoria de un mi abuelo
solo palabras, quieto aletear
de golondrina, voces de la noche
la milicia, el frente
y nada más

13
Media clase
cuando el miedo visita
envuelvo mis juguetes
en un ovillo de miedo
nada se mueve
nada se muda
nada conmueve
ni el frío ni las hojas
ni este otoño celeste
como torbellino
de polvo pobre hambre
muerte quieta allí
estoy bien
14
Amas de casas
somos muy afortunadas
no podemos estropear nuestra fortuna
con la preocupación por personas
desafortunadas
no es nuestra culpa
toda esa gente muerta de hambre
somos recompensadas
con la ropa interior sucia
de nuestros maridos
en una cesta y con las emociones
desechadas de
nuestros hijos
en el jardín hay unas prímulas para cortar
y disponer en un vaso sobre la mesa de la cocina
al final del día
se habrán marchitado
15
La Sociedad Rural El anarquismo es un amparo

sangre y serrín PARA LEANDRO

sobre la carne troceada Los lugares o creencias que nos brindan refugio y certeza a
veces caben en la cabeza de un alfiler
envuelta en una corteza de grasa
blanca y tendones
sé que no se usa ser militante este verano
manotones de vísceras retorcidas
–se dejó de usar como el flequillo de Betty Page–
dispuestas en bandejas metálicas
pero no puedo evitar el destino que me permite
lívidos los cuerpos colgando de ganchos
dormir más o menos tranquila a la noche
cera que se derrite en rojo
sin evaporarme en una buena
bombas de sangre contra el piso
dosis de rivotril, clonazepan, centralina
tic tic tic enloquecedoramente
¿te acordás de entonces? allí,
nuestro placer basado en la superioridad
donde yo vivía, no quiero volver
justificando el dolor de quien no se puede
sé que no está de moda, ya no se usa
defender, la carne picada se sienten
sabrás entender si me ausento
acompañadas de costillares, extremidades y
sino no llego a cuidar la planta de aloe vera como
espaldas fueron de alguien sin vida
quisiera, como se lo merecería
hoy heladas en las fuentes de plástico
porque lo anticuado, los vestidos
pollos anónimos ya no sufren
de flecos, las faldas tubo y los guantes largos,
la espera sin poder tocar nunca el piso
lo infructuoso así y todo ineluctable
en su prisión sacándose los ojos
me hacen juego con esta franca sonrisa
con el pico atenazado
llena de contradicciones a superar
pasan el tiempo
y sueños que tanto te encanta
matan la espera
la carne aumentó hoy

16 17
 excepto felicidad
los poetas de mi edad
2007
no leen libros rojos y negros
cada casi 100 años nieva forrados con papel araña
en buenos aires burócratas del reformismo
el pueblo, no sé de que clase, votan vetan desalientan
se atreve recién a quienes resisten
a tomar las calles la estupidez
celebra o festeja
el mundial de nieve
frente a la ventana
con la calefacción central
los ideales se derriten
los poetas de cierta edad
se sonríen
esta misma noche
la gente
estará muerta
o ya se han muerto
no lo sé
en el día de ayer

tapa la chapa la nieve

embotamiento adentro en el hueso
frío el colchón
o la catrera congelada
la habilidad de sentir
nada nada

18 19

Sea side town
observada por
un tenebroso público
la imagen se congela
ante la casa, sin dejar
de aplaudir, me espían
por la rendija de mis parpados
entornados al amanecer
la angustia es plomo
en las venas, una placa de mármol
cae sobre mi pecho
en algún lugar una flor se abre,
los pétalos se abren apretujados
en el interior vivir y desear
ya no son la misma cosa
al que sucumbir en enamoramiento
obsesivo y fútil,
quisiera arrojarme delante
de él para protegerlo de las balas,
perdida, y yo
tengo el pecho tan agujereado,
como si me hubieran cagado a tiros
el viaje es aterrador y turbulento
días y días y noches enteras
sin detenerse jamás
sin saber qué significa vivir
adelante, aferrada
sin soltarse jamás
a esta duración sin sentido

un montón de ropa abandonada

farsante, como restos de un suicidio
el timbre se confunde con las olas
perfora los pliegues grises de la mañana
la lentitud de los sucesos penetran
la inmensa marisma de la vida
provocan profundas palpitaciones

el rostro es un novio formal y afligido

20 21
La curtiembre Intersex en el programa de la tarde frente a su
cirujano
acostada en la cama
de la pieza de mi hermana no tengo problemas en presentarme
me hurgo los pelos del pubis frente a mil ojos, reflectores y cámaras
negros y crespos el frío helado, la refrigeración
dudo aún pero creo del estudio de TV
voy a masturbarme nos recordará
5 barra bravas me violan a vos y a mí
abiertos y fijos la camilla y la sala
los ojos en las cortinas nuestro lecho nupcial
cascada de plumetí rosa me desposaste
se derrama sobre la cómoda penetrándome
montaña de cueros curtidos con cromo trece veces al mes
hedor de vacas pútridas abyecta topadora de durante 26 años
hegemonía humana mi tejido elastizando
coágulos de brea espesa sangre repta río abajo de la con un tutor
ventana reeducándome
afuera el sol corrigiéndome
no lo puedo ver adolescente o niño
estoy ocupada dormido fui
vos, susurrándome al oído
palabras de enamorado
vos, Pigmalión con bisturí
yo, un mármol ardiente
un angelito, anestesiado
el tajo, irreversible

22 23
despellejarme la vida de todos modos cicatriz
para que me quieran insensible es lo que abunda
antropofagia de la tele audiencia y no le temo
zanjar, lijar, hurgar ni a pedófilos ni a carniceros
asir mi cuerpo el deseo se agota
hacerlo concha la sangre no es maná
valva salada la herida toda herida se cierra
sobre mí toda marca es poderosa
tu
tratamiento
me extrañás, lo sé
Turco Julián con su antifaz
Científico
tiene sentimientos
me echa de menos
objeto de su pasión
mi padecimiento
tu apetito
del cuerpo+del sexo
del cerebro
herramientas, técnicas
cierras para cimentar
mi materialidad
mi subjetividad
tu lugar en la saciedad
no tengo problemas le digo señorita
de asistir a su programa
en esos términos

24 25

Luna Park
En el ring de tu locura Quiero parir este hijo tuyo por
la boca al que llamo con voz de tango vapuleo senti-
mental De pie ululando y aullando tomás tomás tomás
de mí para luego arrojarme al estante vacío de tu pieza
de servicio donde la camarera se llama rubia y es
oprimida por tu amigo y el patrón habita allí un
cajón polvoriento de viejos zines que vos y yo
coincidimos cambiaron nuestras vidas pero que ya
nadie lee y todo el mundo olvidó (¿todo el mundo o
solo vos?) vos, en esa habitación iluminada por la
lamparita de tu llama que se extingue yo, doy a luz las
campanadas, cascabeles, sonajeros o caballos
desbocados que quedaron sueltos en mi habitación
cuando te fuiste no hay en mí ni cofres relegados ni
viejos juguetes tirados, tampoco promesas de un
mundo nuevo en mi corazón de eterna inocencia,
pathos pathos pathos nada pedí que no quisiera dar,
nada fingí que no pudiera ser armado, un
modelo, ya no más de tu verbo mi masaje, ya no más
de tu boca de fuego la escansión, jamás en la frente el
tatuaje de esclava (¿otra más?) cincelado a fuerza de
amor, … Ay patriarcado, si pudiera ser otra, toleraría
esta afrenta y todas sería linda limpia buena madre
esposa amante que incondicionalmente amamanta a tu
hijo –un acto de amor– durante 4 años tirando
cuchillas al aire, pegando mal la piña, adrede, pero no.
Stop. No voy a permitir que te hundas en el cieno de
hacerme blasfemar “me cagaste la vida”… “todo esto
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es por tu culpa”. No. La citación llega a mi casa, no me
entrego. Stop. ¿Qué parte de no quiero hablarte
quiero dejarte no entendiste qué parte? Todo es
ficción. Stop.
¿Qué ciñe lo que ciñe y constriñe la entraña abierta por
el ave de rapiña carroñera que devora de allí Es la
pérdida del padre y su golpiza la casa familiar el grito
de la madre la traición del hermano Es acaso la
soledad más desolada en procesión encaminada al
funeral Qué es lo que pega qué daga hiende la sien y
estalla el vibrante cristal de la demencia en el pecho,
no me dejes, ¿quién habla? Senil el padre la madre el
hermano la casa yo ¿quién dice lo que dice que decís
que dije? y vos te volvés ellos.
No
me abandones. Es una performance El género El
melodrama. Él. brote redivivo de la letra familiar, y el
puño hecho de lengua en la cara Bofetón de acciones
varias ¿Me dejás escapar de esto? reproche tácito, no
quiero pagar las cuentas de la propiedad privada de
una familia que no concebí ¿Un acto de amor? Así se
llama al desatino en esta canción.
El sexo es el dispositivo por donde emerge el poder. El
poder. Agarrarlo, tomarlo por su lado resbaladizo, al
sexo como un bat de baseball, meter un home round.
Ser un skinhead, pegarle en la cabeza a quien supo ser
sujeto y hoy… reificación. El proceso por el cual nos
27
convertimos en res. La cama se convierte en un lecho
nupcial. Algo peor. Ring de box. Camión rectangular
que transporta ganado. Matadero. Juego, timba, asado,
choripán. ¿Cómo es? Me repetís que no entendí. Lo
que te gusta en mí es lo que querés doblegar. ¿Y si me
aceptas en tu vida en todo sentido? Sentido es lo que
hiere, tu imperio sobre mi tiempo, fantasía de un
valiente mundo nuevo. Continuará…
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Alto Palermo
chicas con lentes de sol
sobre los reflejos amarillo-naranja
chicas enfundadas en minúsculas remeras
y musculosas chicas
chicas de pelo teñido, permanentado o alisado
chicas gordas de blancas piernas de paquidermo en
minifalda
chicas que hablan ríen y juegan a gritos
chicas adiestradas que lloran por celular rosa
por el novio
un bosque carnoso y parlanchín
serán algún día señoras de bien
madres de familia
que le hacen agujeros en las orejas
a sus bebas
no duele no
se reproducirán en una ciénaga de carne, cuerpos
confinados durante tanto tiempo
que como gusanos y bacterias
generan otros cuerpos
frente a las hileras de camas matrimoniales,
desnudas y adustas, como tumbas abiertas
en las vidrieras de los centros comerciales
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Kronstadt, no te olvido no Kronstadt, o acerca del centralismo democrático en el
deslizamiento de la masa en los espacios públicos
el joven anarquista dogmático y febril no lo entenderá
el tonto y mesiánico troskista no lo entenderá la gente camina
el limitado militante limitante no lo entenderá por los pasillos de los subtes
el anacrónico enamorado de santos, mártires y pseudo por veredas y calles
glorias por andenes y terminales
del pasado no lo entenderá. como perdida
que se sepa, que se sepa: la gente anda
el marinero de Kronstadt era puto, por pasillos, corredores y
amaba a otro marinero, puto, como él plazas, perdida
le gustaba otro varón, con olor
a arenque marinado, yo no les pido que se muevan y circulen
le gustaba, insisto, calentarse cucharita, como si los guiara
pija contra culo, barba contra barba el Mesías redivivo, o como si
piel contra piel en el horizonte naranja
puto puto puto se divisara
para mí no es un dato menor, una gran estrella roja, la vanguardia
contra toda evidencia como si el gran León
como señoras de barrio avergonzadas Troski estuviera otra vez
de la pasión que otra pasión excita y alimenta vivo, al frente
no querrán ver no, no querrán de la revolución
que aplastará el derecho
inalienable de 30.000 marineros
anarco rusos, finlandeses
sin contemplaciones
sin miramientos

30 31
¿todo el poder a los soviets
o
Santiago del Estero al 600
todos los soviets al poder?
en el balcón de la ventana de enfrente
caminan, sí, perdidos
una paloma gris, urbana
ha hecho su nido dentro de
solo les pido que circulen
una maceta abandonada
respetando derecha
debajo de un cantero colgante
e izquierda
de plástico verde donde unas flores
por escaleras y espacios
se secan
públicos
todas las mañanas
el vecino gordo y velludo abre los postigos
y con su aliento a fernet con coca delante
de la televisión de plasma
de su departamento reciclado a nuevo
ahuyenta sin verla a la paloma
que se adelgaza empollando
y vuelve
rápida a posar el culo sobre su cosecha.
la sirvienta del gordo de musculosa
con mancha de tuco y ropa interior
(bóxers) blanca
pasa el trapo todas las mañanas
no ve o no le interesa
la paloma gris flaca
y también la espanta
ella regresa, presa de un destino
que no concibe, ni comprende

32 33
a echar raíces sobre unos huevos
removidos por el dedo, gordo, del
vecino gordo de la musculosa
manchada, asombrado ante “el milagro”
de la naturaleza, que no nacerán
por la interrupción constante del calor
34
Margaret Hassan
I
una mujer se pone un velo
un velo en el rostro
impudicia del pie desnudo de la modelo
de la planchita y del rouge lancom
una mujer se pone un velo
una mujer elige y habla otra lengua
elige y piensa otra lengua
elige y usa otro apellido
elige el apellido del varón que más le gusta
inmundicia de mi nombre occidental
que violó todos mis sueños de mujer
una mujer se pone un velo
que dice no
que aprendió a decir no
lo estabas pidiendo
a gritos
deberías aprender
a decir NO
sobrevivir a eso
una mujer se puso un velo
35
II III
explicarte lo que siento ante la evidencia incuestionable soy una muñeca vestida de musulmana
la respuesta es simple soy una parte de mí
la respuesta es fácil una mujer
sonreía, lisonjeaba, suplicaba ante las cámaras ¿por el resto de mi vida?
que no se olvide
¿tenemos derecho a decir que ya te has muerto? soy una boca de arroz y leche
se nos olvida cuántas antes han estado en tu lugar una mueca horrible
ese lugar, del que no se sale un pastel y un caballito
soy preciosa
este es mi cuerpo, una marioneta
estos, mis orificios vestida de azul
con los que te levanto
con los que me acuesto
a falta de lengua
me dieron manos
Margaret, llora de yegua
Margaret, se desmaya para escribirte mejor
un vaso de agua, a la cara
para que vuelvas, a mí
Margaret, implora
a una mujer le sacaron su velo

36 37
IV Bakunin
esta es mi lengua
me corto el pelo al rape
vivo, muero, hablo, trabajo
para que los ojos no me jalen
es mi propiedad, mi dirección
por la espalda
es mi mundo, privado
siento tras de mi
yo soy mía, mi dueña, de esta, mi lengua, que me han su jadeo en la nuca
cortado, para que no hable, para que no vuelva a como dardos
crecer, como la cola de una lagartija y corro sin más datos
para recuperar
nos construyo, lengua mía, sin andamios, sin red y sin la fe en la fe
paracaídas en la gente
el don de creer
ni buenas ni malos
una posibilidad:
el basurero que comparte
mandarinas con el cartonero
nuevos oficios de esta nueva ciudad
no me alcanza
ni el color ni la hechura
ni los jugos ni sus gestos
de dulzura
clase: una abstracción
tras la cual ya no cabe sujetarse
nada tiene que ver la bondad
con la capacidad ético-amatoria.

38 39
 yerma y agrietada como el cuero
de la cara de cansancio
Diggers
de esos jardineros nocturnos, improvisados
en cada ciudad del mundo
la edad del pueblo
hay por lo menos
en sequía, el valor es un constructo
una persona que se reclama
social
anarquista
transciende el orden
de la botánica ideológica
partidaria de plantación
fertilizante que con sus pesticidas
y disciplinas desgastan la tierra
un tesoro a compartir por todxs

pánico y consuelo
brasa ardiente y don de arder
contra el malestar de la jerarquía
y la dominación
intransigencia y ansia de ir más allá
en un coche que se destartala
con cada cambio
en medio de la noche
en el medio de la nada
un parque en Gualeguaychú
dos bidones de agua
regar un roble enclavado
caprichosamente
en el único pedazo de tierra libre

40 41
 Patriarcado.
Hoy un slogan
Translatio
para obtener subsidios, una coartada
La poesía no es la revolución sino que gambetea el pensamiento
un modo de entender que la revolución es necesaria crítico, mujer: una ficción contingente
ADRIENNE RICH una asignación
política y maniquea.
Leí tu poema Adrienne Biología, una vieja de mierda
de cuando aún se podía que te tira encima
creer en las mujeres a la policía.
unidas contra un enemigo
común, el varón; Afino la puntería
habla de una traducción de un mentira secreto silencio
poema de otra mujer ceden la posta a las ideas
para que vos puedas como navajas hiende
entenderlo en una lengua que la garganta la noche oscura
no es tuya. Esa otra es fogonazo, un faro guía mis acciones
una referencia literaria, una mira telescópica
la musa de una mujer blanca. asestarle un disparo certero
al binomio.
Señalás tres palabras y un tema:
Enemigo Horno Pena ¿Había acaso modo de saberlo?
Amor- dan vida a lo tuyo propio La biología no es destino.
para poder hablar de un tipo de
“dolor compartido, innecesario y político”
de cuando aun parecía lícito
creer en las mujeres unidas
contra un enemigo común:

42 43
 II.
GUERRA FRÍA
PARA FELIPE GRANADOS. IN MEMORIAM.
La hermandad de los hombres

A PARTIR DE LA CIUDAD AUSENTE DE RICARDO PIGLIA.

tape Burgos troperito

conchabado en Chacabuco para arreo
hacer su trabajo y que los otros
sepan que él sabe hacer
su trabajo, único orgullo bajo el poncho
encerado

cuando amaina la lluvia y el cielo aclara

campean vacuno perdido
Burgos ve al ternero que se ahoga y
recuerda la cruz de plata sobre las tetas
duras de la puta alemana de la pulpería
que no se cogió, por vergüenza
giraba y le decía
a los hombres les gusta ver sufrir
al Cristo lo vieron
los atrajo su sufrimiento
su padecer

casi como una compadrada

ahora que era menos que nadie
demostrando destreza

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enlaza con una mano sobre el barrial, los ojos blancos
sola sin bajarse del criollo de terror, espuma en el hocico
al ternero guacho descarriado un paisano se baja de su zaino
después de la tormenta hiende el cuchillo como si fuera hembra
con la pata rota el animal no alcanza lo degüella de un tajo, limpio
a trepar la ladera se acabó
de la laguna y se hunde asado de pez, todos ríen
en la zanja Burgos siente al fin
la hermandad de los hombres
Burgos ya de a pie
lo sostiene del cogote en el aire
boquea el bicho
se retuerce desesperado en el vacío
asfixiarse en el agua
jugar a ser pescado
es mejor, pensó

los otros, peones,

por primera vez
al pie de la barranca
lo vieron a Burgos
de nuevo
lo enlaza en el aire
ya casi ahogado
el animalito elude el lazo
a nado huye
pero entre chanzas
Burgos lo pesca

50 51

Libertad es un lugar lejos de casa
Siento la misma náusea que el tigre frente al aro y sin embargo
salto e ingenuamente creo que es a mí a quien aplauden
FELIPE GRANADOS
Tegucigalpa-2009
En San Pedro La Laguna, Guatemala, existe un hostal
que mira al monumental bloque de agua volcánica,
honda, y habitada por espíritus que ahogan en su
centro de gravedad a quienes se descuidan. Ese lugar,
donde ahora disfruto una cerveza bien helada contra el
calor centraleño se llama Freedom, en inglés Libertad.
Freedom ofrece agua caliente en todas sus habitaciones
que pueden ser compartidas o individuales, comida
internacional, típica y vegetariana, water-sports como
kayak y ski, happy hour, fiestas con DJ residente,
ambiente cool –el mejor de la región–, servicio de
habitación las 24 hs y lavandería, fogones, vista al lago
y a los volcanes con guías expertos, artesanías y tejidos
guatemaltecos, TV por cable, masajes, piedras energé-
ticas, aroma terapia, excursiones, yoga, meditación, et
cetera, et cetera. En el mundo del turismo ecológico,
esto es la libertad, un lugar que, como dice Loquero,
queda lejos de casa, y que, en la confusión entre
viajeros y vacacionistas, ofrece un chingo de opciones,
el derecho a libremente consumir.
En el lounge de ensueño de Freedom, lleno de gringos
rubios de pieles al rojo vivo, tensas pero hidratadas
52
con cremas reconstitutivas y botellas de agua mineral,
un poeta exiliado y bien pensante afirma la libertad y
autonomía absoluta del sujeto, y el derecho de lxs
menores de edad (de 18 para abajo, todxs iguales) a
ejercer el libre comercio sexual sobre sus cuerpos, con
adultos, a partir de una interpretación confusa y
bastante peligrosa de El Banquete de Platón y de la
institución conocida en la Atenas del siglo V como
pederastia. Libertad parecería ser trabajo sexual,
trabajo infantil y tráfico, donde dos personas son
colocadas en una relación isométrica ejerciendo libre-
mente, de nuevo, una transacción económica, de
nuevo, también. Él parece no entender que a falta de
libertad, el poder se convierte en dominación y el
sujeto en objeto, y que, en definitiva, las luchas por
liberación (la sexual, por ejemplo) pueden ser una
condición necesaria, pero, en todo caso, no son
condición suficiente porque abren un campo para
nuevas relaciones de poder, donde la libertad del
cuerpo y la autonomía del sujeto se convierten en la
coartada de las posiciones más conservadoras y
retrogradas que sostienen que esas decisiones, por lo
general desesperadas, y más destructivas forzadas por
la supervivencia, se realizan en plena libertad de
elección.
Esa conversación a la vera del lago me recuerda
también a Libertad, el más chiquito de tamaño y más
fuerte de temperamento de todos los personajes de la
tira Mafalda de Quino, con la que algunxs de nosotrxs
crecimos veranos infinitos y calientes, en el club
leyendo; una infancia donde imprimimos la cicatriz
visible y permanente de nuestra ceja izquierda contra
53
el filo de piedra y a la cual, por muy bellas que hoy
puedan ser invocadas las historias de cómo tenemos
las rodillas fregadas como baseball de lustradores, no
queremos volver. Así, entendimos quizás la mitad de
lo que leíamos y pedimos explicaciones sobre las otras
cosas, y aprendimos desde bien temprano política. La
diminuta e indignada Libertad, la más intransigente,
recalcitrante, agresiva y malhumorada de todos los
personajes, pero también muchas veces la más acer-
tada y aguda en todas las reflexiones.
Prendo una vela, insurrecta y solitaria, y apuro un
poco de guaro ardiente y un purito para pedirle a uno
de los pocos santos que venero que me libre de la
tentación de creer en la libertad como una coartada
individual para engañar a lxs demás, o como una
esencia oculta dentro mío, innata a mi alma que pugna
por salir a la luz, una libertad abstracta y metafísica,
que a la sazón me causa nauseas; le ruego, en cambio,
que me permita acceder a un “arte de vivir contra la
dominación” para que mi libertad trascienda a través
de la de lxs demás, y se múltiplique con la de lxs otrxs,
por medio de prácticas éticas, críticas, experimentales
y de resistencia forjada en el mero mero centro de las
relaciones específicas de la dominación y de un poder
creativo, que solo existe en tanto soy libre… prácticas
de libertad, le pido, hic et nunc, ahora mismo, en este
preciso momento, una praxis vital, sin declamación;
porque hace ya tiempo que no quiero tan solo vivir
libremente aquello que tiende a brotar espontánea-
mente de mí, ni siento acaso que mi “naturaleza” esté
aprisionada.
54
Y junto con las luces opalinas y cálidas feng shui del
bar lounge de Freedom y quizás la posibilidad de que
me inviten a un evento poético internacional, abando-
no ese gran mito humanista, decimonónico, y demodé
de la esencia humana que cree y busca una sustancia.
Lo abandono en pos de una forma, histórica, pero
también espontánea e individual, que se sitúa en la
interacción con lxs demás y no sin ellxs; para
constituir, y construir, una ética (libertaria, amatoria,
sexual, selectiva, electiva, corporal, expresiva…) que
abre un abanico de posibilidades y de relaciones de
toda clase susceptibles de modificación. Prácticas de
libertad que den forma a mi subjetividad, a la par de
mis afines, para anarquizar jerarquías corporales,
privilegios, afectos, normalidades.
En San Pedro La Laguna el sol se pone, y la tempe-
ratura baja. Me cierro el abrigo hasta el cuello, y
escondo la boca tras la cafiá. Emprendo el camino,
empinado, cuesta arriba, hasta la casa de mi amigo
Tz’utuhil. Tal vez todavía muchxs quieran creer en la
libertad ideal, abstracta y metafísica como a tierra
prometida hacia la cual peregrinar, una libertad, digo,
irreal y fantástica, que como cristales soñadores, tal
solo imaginarla la hará emerger desde la poza absoluta
del nuestro interior a descubrir. Pero, no. Unas pala-
bras de aliento me acompañan mientras me alejo de lxs
turistas, las buenas intenciones, y lxs poetas: “La
libertad es la condición ontológica de la ética. Pero la
ética es la forma refleja que toma la libertad”. Siento la
mirada de los volcanes, oscuros y severos, sobre mí. El
vendaval comienza a chillar.
55
 no serán dichas, jamás pronunciadas
un antídoto contra la soledad
Honduras-Nicaragua
de un bus sofocante
con la delicadeza oriental rodeados de enemigos
de trazo o mano que sueña misioneros y taekwondistas
o imagina ideograma antiquísimo donde compartimos naranjas
y conjura en tinta negra juegos y afanes
un carácter que suena a cuerdas en la intimidad del secreto nunca
las yemas, palmas de jaguares, confesado de anhelarnos
en mi espalda acarician
***
las hojas, pétalos, cual abrazo
de hiedra enamorada de su muro,
sí, soy yo la que te toca
que se enroscan en tu brazo
la que hace como si
imperceptibles y finas
no te toca pero te siente
nadie se dé cuenta
desde atrás
–ni vos, tal vez–
sobre la espalda
del roce, mi apetito por
y arquea el lomo
un diminuto pedazo de tu piel
de gata
que escapa a la duerme vela
mírame, sí
en este viaje interminable
también yo he querido
y a la estricta vigilancia de la ropa
que me toques
por arte de magia
¿qué soñabas o pensabas?
logro posar sobre tus dedos
o fingías no mirarme
fingen no saber
y me olisqueabas
fingen incluso ignorarme
como gato, nocturno
no dormiremos, pero nuestros ojos
que esperando la noche
persisten en mantenerse cerrados
hace siesta al sol
las visiones y las utopías abundan

56 57
fiel a un sueño tan claro
y tan negro
La interpretación de nuestros sueños
–oh tremenda paradoja–
como roja nuestra bandera ...ahora es cuando, ahora y todo
y obsesión HÉCTOR HERNÁNDEZ MONTECINOS

Voy a escribir sobre poetas. Mal que me pese ese es y

será mi único gremio, lo único que bien o mal sé hacer.
No soy una de esas cuarentonas reinas de la música
indie noventera que cantan, bailan, investigan las
ciencias, periodistas, madres, vedettes. Solo soy poeta.
No mucho más. Voy a escribir con lo que siento mejor
en mí. Dos características que concito y convoco en
este viaje. Dos alhajas, diamantes, rubíes facetados,
tallados contra toda doma social que en vano intentó,
y con su escarnio sigue intentando, erradicarlas de mi
cuerpo. No son verdes esmeraldas, bilis de envidia o
de esperanza. Sino rojo odio y negra violencia. Con
este odio mío más profundo que la garganta escupe
fuego de un volcán, odio inconmensurable, eterno, que
los hierve en mi sangre, incomprensible en un mundo
de «está bueno», «buena onda», «todo bien», vomito
violentas balas, palabras enérgicas con las que pienso a
partir de ahora abandonarlos a todos ustedes que
nuevamente en vano conspiran y conciertan contra
quienes resistimos; somos enormes e infinitas en
nuestra arrogancia, resistentes y más inmensas que el
silencio o el sonido. Pretendo hoy mismo enterrarlos
en vida, bajo un basural de wasca, genocidas de la
diversidad, de lo distinto, poetas burócratas y refor-
mistas. Mi odio radical e insano, los acompaña,

58 59
alimento diario y escudo personal cuasi infranqueable
con el que repelo sus infundadas, irrisorias infamias e
ignominias, flechas, débiles hasta la injuria. Cierto, la
violencia no se usa más, excepto que la utilice el
Estado del cual ustedes se vuelven parte, ahora sólo
queda bien el asistencialismo de los talleres a gente
inocente en cárceles. Pero a mí solo me interesan los
culpables, quienes efectivamente asesinaron y robaron
a mano armada, quienes mataron a su madre y a toda
su familia. La poesía joven no existe, los poetas
jóvenes no importan, lo que existe –y pugna por
perdurar– son escrituras nuevas, y luego NADA, decía
el poeta antes de volverse anti-abortista. Poemas
desencantados, desorbitados de rara rabia ardiente
claridad que nos hablan sólo a quienes nos hablan y a
nadie más, de solidaridad freak para quienes vivimos
atormentadas por los temas y las prácticas de nuestros
colegas, y pese a todo sonreímos, y logramos la alegría,
sea lo que fuera que eso nos signifique, y sobre todo
cogemos, sí, cogemos, cogemos, cogemos. Pienso a
partir de hoy y para siempre reconciliarme con mi
intransigencia absoluta, intransigencia de malos
modos y maneras, de codos en la mesa, y pocos
amigos, con mi impaciencia en los juicios, rápidos,
vehementes y precipitados, y con mi visión: camino
junto al tiempo, aunque me valga la soledad más
absoluta en procesión encaminada al funeral. Nunca
más pediré perdón, ni disculpas ni trataré de esconder
que veo lo que ustedes quieren esconder, para así
congraciarme. Veo lo que veo y punto, y mis ojos
basiliscos también los ven a ustedes, odiados y
mediocres poetas del poetaje universal. Hoy dejo de
60
postrarme y persignarme y me convierto en raza de
maíz a la cual jamás tendrán acceso porque viajan en la
ruta con peaje, como turistas de la vida con 20 kilos de
sobrecarga de equipaje. Sépanlo, las ideas no son
trajes, ni sacos, no se prueban a ver si calzan, a ver si
podemos darle a nuestras agotadas vidas un sentido.
¿Para qué conocer a estrellas de rock y poetas
malditos? Sangran una lengua muerta. Yo no quiero ni
a poetas ni a rockeros conocer, ni ser su compinche,
pipi, pana, mano. Deseo que lejos de mí se encuentren
quienes disfruto en la lectura o la escucha, como
Narciso, un deseo original en un amante. Poetas no
quiero, ni mujeres, excepto aquellas que tienden las
camas para sus hijxs por las mañanas y con ellxs hacen
la tarea por las tardes, pero dentro, bien adentro de la
concha anhelan una vida de bataclana, y no ser novia
del nuevo regente del boliche poetil de moda, no deseo
ser poeta nacional, ni que me lean militantes, ni
Buenos Aires no es poesía, y a las cosas por su nombre,
Bob Dylan se llamaba Robert Allen Zimmerman y era
judío. Por eso dejaré de leer en público y escribir hasta
que se olviden de mí, de que formé parte de ese
gremio infame, hasta que me convierta en nadie, hasta
tener la gran suerte de estar solo para mí, de tan sola
encontrarme, más sola aún que hoy y ser la amante del
vacío. Pero soy péndulo de fuego y reacciono. Carlos
Martínez Rivas para emocionar a las nuevas –y no tan
nuevas– generaciones de poetas maledicentes, la poza
«absoluta de la infancia» o «te lloré un mar», para
volarle verga a todo mundo en mi insurrección
solitaria, aprender a burlarme de quien me levanta la
lengua, una risotada en su cara, una chanza, el
61
grotesco. ¿Por qué me he callado entonces si de todas
formas me niego a cooperar y golpearme sola? ¿Para
qué poesía de slogan, consignar frases magnánimas
grandilocuentes para la eternidad que mueven y
conmueven a la acción y la emoción, si no vamos a
vivir a la altura de lo que escribimos?
Ay, pobrecitos poetas, tan llenos de sí, su propia
bandera, su propia conmiseración, de entierro cris-
tiano, de nadie nos quiere, nadie nos lee, nadie nos
publica, no se nos aprecia, ni se nos tiene en cuenta;
pobrecitos poetas chupando pija, sobando verga,
aguantando desplantes, negándose a pensar, no vaya a
ser que alguien se ofenda si decimos lo que pensamos,
si le pedimos «che, por qué no me hacés bien la
liquidación de los libros». Hay que creer en lo que se
escribe más que en sí misma. Hay que creer en lo que
se escribe más que en la propia sangre, en la familia, y
en la progenie. Hay que creer en lo que se escribe más
que en el amor y en el futuro. Hay que creer en lo que
se escribe con la fe en la santa muerte y en la soledad,
con la fe de un cementerio para enterrar miedos,
poetas y mal paridos. Los niños pródigos de poetas
vírgenes homosexuales entenderán menos que nadie y
se mofarán de estas ideas, dirán cosas como «no hay
que discriminar ni a los dictadores ni a los fascistas
para no discriminar», y tarareando una canción de esas
que se usan ahora y comiendo un pancho bailaran en
una fiesta gay friendly, y volverán a las mansiones de
sus padres con derecho a herencia, y 90 empleados, sí,
90, en una gasolinera costera que bancan las publica-
ciones del comunismo. No es que busque un estúpido
purismo, yo también tendré mi culo sucio en algún
62
lado; pero hay límites. Poetas que de tan ignorantes
pasarían por rebeldes frente a quienes entienden nada,
y nunca miraron la cultura popular más que por el
filtro de las series de canal de televisión, incluso
ostentan palabras todavía más acomodaticias que sus
voluntades y sus egos. Crisis de una generación, por
ponerle un mote y ser dadivosa, “mediocre” en su
cruzada por la nada misma, huyendo de cualquier
idea. Se unen entonces, tácitamente a las filas de los
que pregonan dos demonios, la baja de edad de la
imputabilidad, el que mata tiene que morir, y tanta
otra verborragia que en última instancia no comprende
que todo crimen tiene en sí el germen de la venganza y
de la justicia, que todo crimen es contra la propiedad
privada y los derechos de exclusión que concitan. O
esos otros poetas más o menos cobardes, siendo
amigos de otros poetas a los que solo cabría el tiro en
la nuca y la expropiación, que sueñan con un polvo de
existencia en una antología para que alguien sepa que
hoy estuvieron aquí e hicieron de su vida tres carajos.
Pero hoy estuvieron aquí, y fueron amigos de zutano,
mengano y mamole, y «todo menos mi poco talento
me importa algo menos que un bledo».
¿Se entendió? Pero un mundo nuevo crece dentro de
nuestros corazones, palpita. No nos importa construir
sobre las ruinas que evaden el gesto oligárquico que
ellos representan, sean de la clase que sean. Me
importa poco si a tu novia sin trabajo de todas formas
le hacés pagar las expensas a medias de tu departa-
mento comprado con la herencia de tu padre y los
negocios que alquilás en el conourbano. La mala leche,
la mala voluntad y la mala poesía en mucho se parecen
63
a la codicia y a la usura, todos signos a disolver en
soda cáustica. Y una escritura poderosa que se
manifiesta hombro con hombro junto a alguna idea
más o menos sólida es un arma filosa, pues prefiero los
cuchillos y los lanzallamas, para la venganza y el
ataque. Puedo verles a ellos, el poetaje, negando y
ridiculizando todo lo que haya de subversivo, y
corrosivo, o de tierno en las juventudes incendiarias,
solo porque jamás han podido prenderse fuego y
arder. En cambio, se han divorciado, cuando la verdad
nadie jamás debería casarse; por dinero y propiedades,
han derramado sangre sobre las terrazas de sus
propiedades inmensas, y han discutido por las
expensas, y los hijos, y los coches incluso vendidos, a
posteriori, en trincheras de clase media que se armaron
con cacerolas de teflón y becas conseguidas con las
firmas de poetas otrora militantes y hoy tan sólo
añosos tiramierda embebidos en licor. Oscilan entre la
inseguridad y yo puse dólares quiero dólares y la
culpa de todo la tiene Omar Chabán que se pudra en la
cárcel. Su prepotencia patoteril de patrón de estancia o
sindicalista peronista de la CTA, o la CGT aleccio-
nadora, su ninguneo ejemplificador contra quienes
eligen no alistarse en sus filas de cenitas en Palermo
sin siquiera dejar propina a la camarera. Puedo verlos
defender el chabonismo de quien sólo ha escrito un
libro o dos, ninguno bueno, y sin embargo por ser
chabón, fierita de barrio, se vuelve mito, a la vera de
sus otros amiguitos, que levantándole a él se levantan
entre ellos. Puedo ver cómo sostienen el progresismo,
los pantalones de cuero, las discusiones en los blogs
que jamás serán llevadas a la calle ni a la cara, siervos
64
de las mazmorras literarias y del clientelismo googlero
para llegar a la publicación ¿de qué?... de su pura
mierda que nadie de todos modos leerá, curado y
seleccionado por poetas directores de museo anquilo-
sado, y no te excusa el no haberte informado, el no
saber, ni el haber nacido en una familia sin recursos
literarios, para haber clavado las guampas y decir «No,
gracias, paso, esto prefiero no hacerlo, no quiero ser
cómplice de tus despidos». Poesía política de lectura
municipal oficialista en jardines botánicos. Político
solo será lo que cualquiera pueda leer, algún día, y
entender, y gozar, y completar con su interpretación en
la instancia de la recepción y sienta entonces que aquel
día, y tal vez su vida, valió la pena ser vivida, junto
con la pena que le llevó a leer ese poema y la pena que
llevó, a quien escribió ese poema, escribirlo. Juventud
que desde donde puede y con lo que tiene a mano
repele y lleva a cabo una revolución tan sutil y hermo-
sa que ciertamente no podrían ellos comprenderla.
La expansión de su nada no saldrá de esta declaración
porque yo aquí hoy mismo los sepulto con un ladrillo
en la boca para tapiarles el bien que hacen al mundo
tal como lo conocemos. Y todos los poetas omitidos y
silenciados por su tiempo, algunos hoy exhumados
como letra muerta, jamás como cuerpo vivo, para que
algún imbécil pueda coger levantándole la pollera a
una nenita confundida de taller literario: todos esos
poetas despiertan y se alzan y reviven hoy. Las
palabras reconocen el desafío, y sus ataques por las
espaldas son heridas viejas hechas con un filo de
plástico, oportunismo puesto en peligro, que temió a la
diversidad y a la crítica cual doña de barrio delatora
65
de la militante frente al falcón. Del limbo de la década
pasada a este texto, pese a mi edad, no me hice
cómplice. Mis poemas no forman parte de rankings Felipe
como listas de radio o revistas teens del corazón, ni me
vendí a la novedad ni a tener amigos cool y editores pido perdón al viejo amor
que con la guita de los subsidios de sus padres por amar al nuevo
luchadores fundaron mini feudos desde donde como si fuera el primero
parapetarse posmodernamente (demodé, reeditando lo
asegurado y lo fácil) para decirse “eysoyeditor- te hubiera conocido antes,
musicopoeta” contra otros feuditos del mercado de la un chingo de años antes
palabra cuya guita fue sacada de lugares aún más
cuando te faltaban menos dientes, cuando
oprobiosos que el estado. Mientras esté en contra del
mundo más vital seré, mientras esté en contra del no te habías pegado el bicho
mundo, mientras más en contra del mundo esté,
menos me pareceré a ellos. Quienes quieran sacarse los cuántas veces he pensado
ojos, ponerse el palo en la rueda, pisarse la cola, ojalá te enamoraras de mí, tan fuerte, tan solida-
ponerse el pie, no me tendrán a mí entre sus filas, ni mente hasta pensar “por ella, me cuidaré, por ella,
ciega ni muda, ni amiga. Porque ya hace tiempo que viviré por verla envejecer cerca de mi vida,
dejé de confundir lo que me alimenta con lo que me da
en órbita” ojalá, ojalá ojalá un enamoramiento
de comer y la lucha con la pelea.
fulminante que te sustrajera de la muerte
Esto no es ni violencia, ni un ventilador de mierda.
Esto, decía, no es violencia. Violencia es lo que ustedes pero, el amor jamás ha salvado a nadie
hacen contra la poesía, es su falsa y doble moral, su
conozco bien el cuento, y contra quién compito
hipocresía, su otorgar credenciales, sus festivales. Mi
odio no te engaña, soy verde mordedura que te encera, no siempre una yunta de bueyes tira menos que
lengua bífida sincera, profundo, fiel, mi odio no te un pelo de concha
engaña. Nunca andás solo, mi odio te acompaña, hasta contra el guaro, sagrado, y la milonga
que el rostro se te vuelva cera, tendré en tu sombra la nada puede hacer esta mujer
forma de pantera, mi odio no duerme, mi odio te ni ninguna otra
acompaña, como decía la poeta.

66 67
y yo tampoco he
-cómo hubiera alguien-
James Towle
podido salvarte
esta vez A DARIUSH, EN SU CUMPLEAÑOS 34
PARA MIS CUMPAS TICOS Y LOS SUFRIENTES POR AMOR
viajar de noche
la cama está vacía
la forma de tu cuerpo
en ella
quedó grabada con un punzón
caliente en mi cabeza
cada vez que me meto

pero,
materialmente hablando
no queda
nada de vos

así,
pasarme las horas
tratando de recordar
cómo sabía tu piel
qué olor tenías
cuán suaves eran tus manos
cuando me tocabas

–la razón, ¿quién la posee?

vieja mala, no me permite

68 69
pensar–
la mente nunca ha sido una aliada.
solo a través de nuestro tacto
la razón se sindica a los sentidos
así,
olvido por qué es
de algún modo siniestro
una suerte que esta cama hoy
esté tan solo llena de mí
***
amarte así, amarte
¿haberte esperado
toda una vida?
¿seremos los últimos?
destructores de máquinas
amamos como si fuéramos a quedarnos
toda la vida en Liverpool fabril
cuna de paño irlandés
¿y si fuéramos los últimos?
amarte así
haberte amado
tanto
hace siglos que juego este juego:
los cuentos no se cuentan rectos
70
la honestidad propia no existe
nadie puede dar cuenta de sí
todo es pura inquietud y desazón
de memoria
me conozco los mecanismos
con los cuales
quienes aún se aman
escapan al dolor indecible
del fracaso
y de la pérdida
¿por qué demorarme ahora en esta historia?
impelida recodar
el amor es puro intento
propulsión sin resultado
testimonios remanentes inconforme:
actas de juicios, informes de autoridad,
sesiones de terapia futuras
dedicadas en exclusividad, poemas y fotos,
algunas canciones
¿existe un espacio de audición
cuando el lenguaje es
ecolalia, balbuceo, clausura?
Petitio Principi:
71
fracaso luego soy de horca, juego infantil hoy
anónimo, frágil, débil en horas libres
casi absurdo
en fin,
me opongo nada que se acerque a la verdad
a los símbolos de una economía política Ned Ludd nunca existió:
triunfante solo un nombre pergeñado para despistar
una trampa casa bobos
el amor sigue siendo una maquinaria imposible
de adquirir y administrar por mis comunidades entonces ¿cómo podré encontrarte?
me encuentro en una etapa artesanal de la conciencia
amatoria, de nuestra ética Ludismo, romper la máquina
de lo que nos interpela
de todos modos, ideológicamente,
violencia, nuestro pacto ya no se quebrantará. nuevo crimen legislado
atacar la casa del patrón por el deber ser del amor
sabotear sus resortes
siguen siendo mis tácticas me abrazo al cuello de caballo
de lo que está por devenir
*** construiré eslabón de un engranaje
que se fragua a fuego lento,
quien no dobla las rodillas sobre mi regazo reposa
se le rompe la cerviz un amante, o un gato mortal
la nuca quebrada
a la fuerza la paradoja:
cae por el pozo de la horca vociferando fundición alejada de la humanidad,
un viejo himno libertario ama y propietaria,
silencio marcha por la panamericana
las cuerdas se anudan en cerrazón hacia el progreso

72 73
ninguna sublevación espontánea
ninguna ficción del espíritu Epitafio: Wu Shu
salvaje emerge del vacío
por generaciones se transmite A MIS AMIGAS EN CATALUNYA POR SALVARME
una herencia de maltrato,
I
saberes resistentes macerados
para escapar a la lógica maniquea aquí se termina la primera mitad de mi vida
de las culpas, las reacciones estímulo-respuesta, sangre que sangre mane sangre como maná
el gran dirigente de las facturas a pagar sangrar una lengua muerta, hacer un tajo
clausurar el pecho
si el juego no es nuevo cortarse un mechón de pelo
habrá otros jugadores
otros últimos destructores de máquinas duelo, por la primera mitad de mi vida
tal vez nosotros mismos
seamos otros y volveremos
a jugar

74 75
II III

¿cuál es el balance? violenta oscilación, crisis existencial agravada, fobia

tragar arena, morder el polvo clisé masculina, confusión primermundista, envidia de
discapacitado anímico, neurosis de trámite bancario
todo en el tintero morirá
incesante, amor y odio catuliano, sutilezas velos y
la hoja no escrita de crepúsculos opacidades indetectables, inconsistencia emocional,
puzzle que no encaja en la locura de este encuentro neurosis puta y su síntoma, su drama de control,
intenta resolver algo o matarme, la ansiedad del
no hay en tu territorio quien aloje mi querer hombre está a la altura del corazón
tierra yerma para recibir señales
bestia recelosa puro impulso reactividad
noche de mi desesperación que todo mi torso forma
un hueco por donde metés tu puño para extirparme
todo deseo de ser

76 77
IV V
mito presa de un poema de Plath
hablar una lengua muerta los espasmos vuelven y vuelven
el Amor es sólo eso y vuelven se duplican minuto a minuto
y todo el mundo lo sabe me contraigo la cabeza contra la puerta
la cabeza contra la pared la cabeza contra el piso
la cabeza rota
yo toda chiquita, toda carencia toda muertita en mí

quiero despertar o morir

apilo la entereza para dirigir ciega

mis radares hacia los faros, migas de pan
nimiedades en una arqueología que me alcanza
para reconstruir mi ciudad
sin torre y sin puerta

busco en esta mañana de pocos amigos

ramitas secas, hojas en la calle
razones para existir
persisto
no todo es vómito y kebab en las calles de Inglaterra
no todo, hielo y bolsas navideñas
no todo está lleno de pacíficas buenas intenciones y
control

vuelvo a encontrar los deseos por las cartas entregadas

78 79
a las amigas
bien dispuestas vuelvo a encontrar a los amigos que
VI
me esperan
proliferan en mi sangre militantes de nuestra soledad será como abandonar un vicio
colectiva un cigarro sexy en la boca el humo
Garbo
no contiene, no sostiene
mal conocido, volvemos a él
arrastrando los pies
para aferrarnos y no caer

80 81
VII VIII
cursi y rosa en el último minuto aplico la hipótesis del tiempo
antes de partir, sí antes de subir a un avión ¿qué seremos o volveremos a ser?
podría ser el último un recuerdo o el olvido del anecdotario
cuando los amantes hablan
del amor y del extrañarse a house of brick in Japan using electricity inhabited by
del deseo y del reencuentro lovers
siquiera tal vez de lo bien
a la noche prendemos una hoguera delante de la
que la pasamos la otra vez
audiencia y
vos hablaste de compartir mis libros
sacudimos los cimientos con primeros ruidos
con otra persona a la cual hasta ahora
ejerceremos presión sobre la estructura del tiempo
olvidaste mencionar
avisamos:
cada quien puede hacer lo que le apetezca mientras
esa es tu idea de becario de la deconstrucción
esto
dure
podríamos haber hablado de la esperanza, del creer, de
la fe –pero no dura–
mañanas nevadas, mañanas mullidas
edredones y sexo de revoluciones
ballenas, todo el sonido del mundo en esta sala vacía
vislumbrar pequeños fractales de manada
sonido, anarquía, Anarquía, Silencio, Amiga, anarquía
mi barrio el tuyo el nuestro Poesía, ars politica
el futuro aquí y ahora, aquí y ahora el arte de la soledad, el arte:
no dejarme herir nunca más, zaherir.
pero no, mejor, no.
decidís por mí una vez más
tramitar tu involución destruyendo a mi otra parte subir la guardia, jab jab, cross, hook, uppercut, frontal
al pecho, circular a la cabeza

82 83
te alejo
IX
bajar la guardia
Wu shu, dejar pasar no armar el ring, combate a fuerza de no olvidar
inexistente entre tu discapacidad y mi carencia uno a uno los agravios
desaciertos improperios
memoria y olvido
recordaremos por qué
nos fuimos yendo
sostendremos el esfuerzo
la angustia cederá
sutil corte en el vientre
una cesárea impuesta

a fuerza de recordar la soledad infinita

sumida me encuentro

odio adiós, no todo es perdonable

no volveré

84 85
X Conventry – La Floresta – Valencia – Barcelona
arrastro la pala, sepulturera
La poesía lleva tatuado el jeroglífico:
el cuerpo al hombro
el arte de ver el vuelo de los gansos salvajes
cavo una fosa (desde mi ventanita)
honda oscura ronca profunda como si me perteneciera
es como el llanto hueco de una amante PAULINA VINDERMAN
como el hambre de amor rancio
ahí dormirá esta fatalidad una casa inglesa
clavo una estaca de acero y 3 balas de plata una ventana
en tu pecho un poema de Plath
incrusto un ladrillo en tu boca ramas de arboles fantasmagóricos
silencio manos de hueso de abedul
nunca más me harás callar se ciernen agudas sobre mí
echo tu cuerpo adentro
tierra y cal polvo al polvo te cubro este cementerio
estás muerto esto que observo entristecida
en la superficie trazo un pentagrama con sal y lúgubre por la ventana
escupo mi última sangre mi último vómito en esta casa
encima una tonelada de mármol le dicen jardín
Carrara para liquidar
este romance para que resuena tu voz todavía
jamás vuelva a surgir aflautada histérica
ni en forma de poema me demanda un deber ser
esa mayor mierda femenina
"ternura", le dicen
también en este, tu pueblo

86 87

durante la noche suben otras voces
hombres
conversan bajo los tejos
bajo la ventana
en idiomas desconocidos
fuman sobresaltos de medianoche
mi verdugo es fascinante
mi verdugo es un incendio
mi verdugo habita la represión de los cuerpos
sin espacio común donde esparcirse
mi verdugo me obliga a convivir
entre tímidos y tibios
mi verdugo me conmina a
despertar allí frente a esa ventana
mi verdugo es despertar a la muerte
es desear morir
una barricada en el medio del camino
entre la libertad y la desesperación
ante mis 33 años
complejo propio de Cristo
por la noche la ventana abierta
el aire es helado y tu pie nervioso
prohíbe conciliar mis sueños
se mueve automático y frenético
88
como nuestras diferencias
tu pie jamás descansa, se mueve y se mueve
por la noche la niebla tiende su mortaja
sobre estos árboles muertos
al compás de la ansiedad
te consume y te carcome
en el piso al lado de la cama
tu botella de agua
tu botella de agua biberón
la botella de agua
es buena el agua
es buena el agua y su botella
es buena el agua y aferrarse a la botella
de agua como tu biberón
la mano del tejo en la garganta
los huesos de rama se enroscan
la traquea se estrecha
la glotis hacia adentro
es buena el agua dice
y yo, me ahogo
esa ventana no es única
no es la única ventana frente a la cual despertaré
viajar es mirar a través de muchas ventanas
viajar es la ventana de la casa de la amante
una ventana que brinda un bosque
89
su casa tiene siempre un fuego romántico abrir la amistad
encendido, un fuego cálido viajar es vivir
no sofoca ni hace frío desear
su casa tiene una puerta siempre abierta
la llave en un velero en la puerta
siempre abierta
viajar es despertar entre amigas
viajar es enfermar de dicha, compartir el pan,
la mesa, los cuerpos
viajar es esa ventana roja de burdel
desde la calle se ve su marco negro
la amante rubia me espera dentro
es valiente como una navaja
sabia, manipula objetos de placer
solo ella conoce para mí
viajar es el cuarto de la amiga exiliada
no tiene ventanas y la cama
es pequeña. Sin embargo, la luz
de manera misteriosa se escabulle
viajar es el cuarto de mi hermana siamesa
salta al vacío la ventana
su gata reposa pletórica de sol
no dan ganas de arrojarse
las paredes tienen fotos de mujeres
enérgicas y desnudas
viajar es dormir con estas amigas
compartir estas, sus camas
viajar es cerrar ventanas, cerrar el amor

90 91

La casa de la escritura
PARA HELEN Y PAOLA
Nadie ha escrito nunca a dúo
MARGUERITE DURAS
En una casa, sola como perdida.
Tan en la casa, tan sola.
Esta soledad la hice yo.
Hecha por mí y para mí, esta soledad es mía.
Esta soledad es lo único que algún día
no me va a decepcionar. Es lo único que
poseo. Guardo esta soledad, en un cofre pirata.
Con ella en mi maleta vengo viajando. Ella, conmigo
como el recuerdo de un primer amor. Es un pasaporte
a mi libertad. Adondequiera que vaya
ella viene. Mi viaje es una cama ajena,
una ventana cualquiera, ritos de los cuales no me
desprendo.
Mi viaje es esta soledad.
Sola en la casa de la escritura.
Mi amante no pudo soportarlo
no puede tolerar leerse en mis poemas.
Soy cruel, le cargo cruces, le hago reproches
y lo abandono, lejos, como deseo sin objeto.
Soledad o muerte. Muerte o viaje.
Literatura y Libertad.
92
Un agujero, en el fondo, en el fondo de un agujero,
una soledad casi total. Una inmensidad, vacía.
Fatal este momento donde todo se pone en duda.
Esta soledad ha nacido de este momento, de esta
interrogante
sobre el sentido de la vida, sobre todo, la duda, sobre
el amor
y la vida, sobre la libertad.
Más fuerte que yo misma,
más fuerte que los alaridos de las bestias nocturnas,
perros y lobos, monstruosidades oscuras,
vulgaridad masificante, aúllan en silencio o
clavan por la espalda.
Esta soledad es sincera, franca
esta soledad es fresca, he luchado por ella,
honesta, una palma extendida en un abrazo
una mano que acaricia, dedos en mi coño.
Velo por este inmenso territorio de mi soledad,
también la noche, desesperada, la noche de la
escritura,
con la desesperación. Desesperación, no sé tu nombre,
aunque de a ratos te invento uno. Un nombre de paso.
Una posta en el camino, un amante. Solo eso, una
parada.
Soledad universal de ser humano,
soledad singular y vida ubicua
en este viaje.
93
 vivido.
Esto también es necesario que suceda, inútil hacer
Antiespecismo
tangible
la desesperación y el desconsuelo que conlleva la vida,
Una mosca muere en la mesa de mi cocina
la muerte,
una mesa blanca, una mosca negra
el recuerdo de la desesperación no nos mata
el sol es blanco y amarillo
la escritura avanza es viento, está desnuda,
la mosca brilla, tornasol
pasa como nada pasa en la vida, pasa y se vuela
la muerte de la mosca es la muerte
el cuerpo muerto de esta nada, de esta mosca, ya no
la muerte del amor no es la muerte viva,
describir el espanto, escribir del espanto, pasa como nada pasa excepto esto que llamamos vida.
escribir de tu locura, escribir sin pausa,
sobre la muerte sobre la mosca, sobre nuestro amor
muerto. Tengo la atroz lentitud
del olvido y temo el instante de pavor absoluto
la locura también parece muerte, pero no es.
Aún veo, aún veo la mosca en la mesa blanca
como si fuera tu voz provocando mi locura en
esa ratonera, contra las paredes, sobra la mesa donde
la mosca elige morir, donde elijo escribir, y
no olvidar el debate entre la soledad y la muerte
entre la vida y el amor, triste pero no trágico,
como dejar un vicio incontrolable
no por eso menos placentero.
Elijo vivir el invierno, la vida injusta,
el horror absoluto de la incertidumbre
elijo vivir la calma de tu ausencia.
De a ratos lloro por la irreductible muerte
de esta mosca. No llorar nunca es como no haber

94 95
 III.
AMISTAD POLÍTICA
LLEVO por todo nombre
el de una reina cátara
rebelde
mi papá me llamaba
prince
cita de memoria versos de Darío
Sonatina
mozart y vestidita
o desnuda solita
me metía en el
baño

hoy
tengo algo más y no sé
usar un lavarropas
había una vez
tiempos que había suficiente
para pagar cualquier cosa
y los dueños del dinero elegían
un colegio inglés
una mucama

deserté
lavo mi ropa
cuando me ducho
el flujo es flujo
casi que no tiene clase

99
dejo de ser la princesita triste
enclaustrada en sus tules ANULAR
las distancias entre cuerpos
la propiedad privada es robo
la bioasingación crimen
familiar magia, contagio, afinidad
el sol esta tarde
aprendo arde
a convidarme
a compartir
gracias
a ustedes

100 101
 ESTADO de excepción VIAJOun poco más adelante
que algunas de mis más íntimas amigas
el placer de este agenciamiento no tan lejos
debe durar más que a media cuadra
un spot publicitario no más
la amistad y el sabor del encuentro
no debería ser suficiente
una propaganda de cerveza rubia para jugar
a la mancha
a la escondida
en el mismo
potrero

nos esperamos y nos corremos

nos saludamos
sonreímos
mostramos nuestros
dientitos de jauría
acercarnos

esta distancia demuestra

he nacido antes
soy más vieja
moriré
primero
me sobrevivirán

102 103
 no soy indispensable
sin mí pueden
EL CORAZÓN palpita
vivir
nosotras
un galgo
fondo y figura
4 patas en el aire
anulamos las distancias
ondulamos
vivir en el mundo
como en una foto
contra el mundo
una aventura
atentar

galgo
corre y corre
siente la pena de domingo
detrás de sus talones
muestra los colmillos
no se detiene

no va más
no corramos una liebre muerta
la única apuesta es contra el propio orden

nuestro corazón es un galgo que galopa

fuerte

104 105
Luciérnagas Zombie fighter

mal que mal pelear hasta matarme

visto la misma talla de jeans o morir peleando
y zapatillas
desde los 12 años de ningún modo
ni las tetas me crecieron la angustia rivotrilizada
siempre fui un poco del desierto de esta ausencia
insignificante llamada vida

mi vida tiene poco sentido más le decimos mundo

que hacer que puedas donde viven los zombies
resignificar con palabras de la mujer ya viene sin flexibilidad en la cadera
adulto programada para perder
las vergüenzas de niño el varón viene sin flexibilidad en el abrazo
preparado para no sentir
no encontrabas y nadie
creyó deseo vivir sin perder
esta elongación de corredora
de fondo
yo sí creo deseo vivir corriendo
yo sí quiero 4 patas en el aire
creer
como un galgo de pueblo
contra los autos
ladrando sin finalidad

106 107
 un regalo de nena
aprende el placer de saltar
Kick boxing
la soga
A IAN desafía el vacío y la gravedad

gracias mi amigo una nena grande

dice que dijo su hijo con apodo de hombre
solo las nenas tienen una soga recuerda lo que toda nena sabe
para saltar y su madre se esmera en que olvide
a la cuerda el don de sus potentes piernas
solo las mujeres se suicidan la rotación de la cadera
colgándose pueden abrirse en loto
yo siempre quise tener una pueden rotar la cabeza
como una mantis
partir un esternón
curioso...
en un salto frontal
servirá acaso precisar el momento
cuándo el cómo
saltar la soga se convierte saltamos
en una elección de género
gano capacidad
un nene chiquito pulmonar indispensable
con el nombre de un rockero desaprendemos
suicida y etéreo hacia la alegría
a quien solo conozco que el placer no tiene
a través del relato de su padre género
hermoso y afectada por la casualidad
de nuestro encuentro
disfruta de mi mano

108 109
 de todas las mujeres
las que más me gustan
VIAJO a Rosario
cuidan a sus hijos
a ver a un gran amigo
como amantes
técnicamente tiene de todas las mujeres
la edad de un hijo las que más deseo
quieren a sus amantes
elegimos como amigos
definirnos
amantes afines anónimas de todas las mujeres
resignifico las tres A que mataron a mi tío las que más me gustan
amiga anarquista absoluta son las que no tienen
hijos
maté a mi hijo
y con él
todo instinto maternal
devorando en mí
lo que no nació ni nacerá
nunca más

lo volvería a hacer
sin atisbo de duda

elegir no ser madre

elegir ser amante
elegir ser amiga y afín
de un monito

110 111
 heterosexualidad equivale a
niños en cárceles de noche
Cuchulain
extraños ritos de pasaje
la vida de Facundo nuestra civilización agonizante
pende de hilos hacia la adultez y la muerte
atado con fuerza enfrentan máquinas asesinas
a los rayos del sol solo por existir en la masculinidad
de este mundo hegemónica
su pulmón se debate
hace días su madre
entre mascarillas y oxígeno
duerme en el hospital
un Goliat cualquiera fijó la sentencia donde puede
patada tras patada donde la dejan
encadenada a la cama
ayer lo desconectaron si así fuera necesario
de todas las máquinas
dicen el agua es vida perro –fiel–
pero Facundo se ahoga no hay para ella
por dentro horarios, reglas, guardias
como Darth Vader cuida de
solo resta un agenciamiento su Amo moribundo
maquínico
necesario para los biopoderes

la ciencia no entrega respuesta

cómo los golpes llenan hasta implotar
el cuerpo, y no desinflan

112 113
Grupo de afinidad PARA DIANA LA PORNOTERRORISTA Y LUCY SOMBRA
A PATRI, S.T.T.L.
como la calle es muy angosta
para tomarnos todas NINGÚN recuerdo es tan potente
de la mano para repeler el embate
elegimos caminar de una novia celosa
sin agarrarnos
llovizna esta noche en el recuerdo
evitamos las miradas el frío escarcha
el dispositivos el suelo donde nuestras ruedas pisan
pasamos piola una capa cuasi imperceptible
lo que nos une sobre nuestras narices
–hoy el sol, la vida, el enfrentamiento– heladas
opaco no tengo frío
una a la otra a la vida no hace frío
junto a ustedes esta noche
en Barcelona
vamos sueltas
tecno-vivas conectadas como un nene
te demuestro que puedo
andar la bici que me convidaste
como un varón, un bici-volador

un poco de esto o aquello

para empolvarnos
nos hace más libre
nos hace más veloces

114 115
no duraremos toda la noche
ningún recuerdo puede
de carreritas por las calles
contra la misoginia de
ni las bicis sin dueño
una mujer celosa
ni este invierno caliente
contra un par de novias
todo es prestado
débiles
ilegalmente ocupado

cuando su propietaria vuelva

novia sudamericana
reclamará sus derechos de autor

esta semana, ya estoy del otro lado,

las calles arden en tu ciudad
vaga general
¿las habrás tomado?
¿habrás preferido el frío gélido de la pareja?

no es metáfora
el Yo que reclama y clama
justicia
respeto
plagio
robo
indignada

no es metáfora el Yo
que se aleja
literalmente abandona

116 117
 VI.
UN MEDIO PARA ADOPTAR UNA POSICIÓN
Primer acto y único acto

la guerra recién ha comenzado

¿adónde vamos?
te agarro la mano y comienzo a caminar
desertamos, desistimos, avanzamos
hacia el desierto del encuentro con quienes han
despertado
aleatoriamente, por arte de magia,
en medio de la noche de la profunda desertificación

¿adónde vamos?
pase lo que pase, no nos quedemos en el medio del
camino

a estas horas de la noche

a esta altura del partido
ahora, en este momento
preciso
los grandes vigías han muerto

no es que lo presienta
hemos ido a la evidencia

manifiesto
con los dedos de mis ojos

121
la inmensidad de la pérdida
nunca la noche fue tan oscura
nunca fue tan de noche la vida
nunca estuvimos tan solas
¿adónde vamos?
inquilinas de una existencia exiliada
alquilamos una pieza de servicio
una breve cárcel
una pensión
refugiadas del desierto
fugitivas de la política antigua

camino la guerra comienza con la risa brutal

envolvente
quien ríe primero, exilia y gana
pese a las bombas
la pelea consigo
pese a la confusión
de las bombas la ciudad habitable
que estallan por todas las sin techo
silenciosamente está aquí mismo
nuestro tiempo aquí dentro
devuelve esa risa
pese a los intentos
el sonido a las bombas
desesperados
sacude el sueño
por distanciarnos
de las encías y las yemas
el tedio no ha logrado
pulveriza el tedio
capturarnos
enteramente hemos sido arrojadas
sin previo aviso
hemos sido abandonadas
camino sin sentido

¿adónde vamos?

122 123
experiencia del vacío
esta casa
adónde vamos
una nada amueblada
llevando el desierto
del cuál somos oceánicamente
el único anacoreta
camino

la risa deshace todo

pathos
vivir como si
indignado
como si hubiéramos
tolerancia respeto justicia
muerto
juicio y castigo
tu risa colmillos blancos como sí
manchados con mi sangre
la risa, tu risa ¿vivimos?
es vida
presas de
la penetrante sexuación no sensual

en lo sucesivo vivimos
no hay más que noche y silencio esencialmente
noche silencio espectrales
huida de la ciudadela naturalmente
en llamas que no arden pornificadas
siniestramente
ausentes
camino noticias
noticias

124 125
 puñado de tierra en guante
triste esta carne sin misterio que pretende conjurar
la presencia del encuentro inevitable de los cuerpos y lanzarlo en la fosa común
que persisten en el exilio
donde ha sido arrojado
anónimamente

este desastre no halla en parte alguna

¿no vivir
duda, certeza o sostén
único deseo
partimos oponible
las posibilidades viajan conmigo al poder
la potencia y el acto pretende forzar
una piedra en la cara a vivir?
del gran bufón que no ríe

¿adónde vamos?
camino

quienes admiran las virtudes humanas

han muerto con el Hombre
han perecido
con él

solo resta asistir al entierro

pico y pala

126 127
 ¿qué es peor?
Celan
anhelar
la seguridad
somos esta nada
burguesa
blanca
la dignidad
muda nada blanca
obrera
esta nada
rosa
gira en torbellino en rededor
del eje vacío nunca tan reunidos
ese pozo sin paredes semejante número de totales
esa nada blanca extraños
nunca tan enajenados
somos este remolino nunca antes hasta tal punto
experiencias miserias y sensaciones separados
henchidas de viento por esta promiscua proximidad
nos disponemos a saltar de transporte público en hora pico
al abismo de la palabra hermética hacia el conourbano
opaca post jornada de trabajo

experiencia vacía metrópolis

esta nada amueblada
un ejército se alista
huérfana de una clase para sobrevivir a la moda
que nunca existió de vivir como si
huérfana de una ficción peligrosa su única cultura
contingente se obliga a la estricta disciplina
de mentiras

128 129
ilusión óptica actual
un Yo que elige
deseos que no desea
fetichismo de la diferencia
diversidad
la ausencia
multiculturalismo
inalterable cemento que nos une
catalizamos la reacción
pura inquietud que a nadie inquieta
en cadena
ni da curiosidad
zombificación

pontífices máximos
de lo ordinario camino

qué reside tras esta nada...

la crisis de la presencia
consume
su fantasma desdicha extrema
irrumpe con amplitud el apego desnudo
titánica hiperbólica a la supervivencia
su criatura sin más objeto que
el sujeto sobrevivir
trabajador este Infierno
obrero fabril
figura de lo civil
en el seno universal
inapelable
desear el vacío
de la militarización del desastre

130 131
la pura nada blanca
nada es más ordinario que
ONG
la propia felicidad
individual I
grave infección
el voluntariado
el granito de arena, hacer algo, salvar una ballena,
desde nuestro lugar, ahorrar agua, y comprar
productos del Fair Trade, el boicot en la compra

la guerra en curso
eugénesis nazi de la no contradicción pura
activismo prefabricado de góndola de supermercado
ubicuidad de la vida por doquier
eterna efímera vana e idénticamente
ausente
vida
forma notoria de tortura prolongada
vivir es el camino más largo hacia el infierno
el suicidio no es una salida
lo que acontece tras él
podría ser aún peor

132 133
II
huyamos juntas te digo
al fondo de la cosa misma
despierta al mundo
despierta
desvía lo tuyo propio
despierta a nuestra condición
distanciarnos y unirnos
desubjetivarnos
devenir juntas te digo
que mi casa no sea mía
un cuerpo donde podamos habitar
todas las sin casa
una nueva forma
134
Budismo
I
en la góndola del supermercado espiritual
se nos ofrecen salidas
una repugnante sórdida espiritualidad
de feria americana
para asalariados plenos de
clonazepan
deprimidos y abúlicos
enseñanza ambiciosa
para imbéciles y maravillados
fieles empresarios
privados
el peligroso arte de chapotear
en su propia humanidad
nirvana
135
 del amigo que agradece los mínimos gestos
II de humanidad
condición sine qua non
PARA VIOLETA PERCIA
agradece como si fuera presencia
no es tanto la estúpida algo tan mínimo como no estar muertas
prostituta que no cobra para significar la nada y la doxa
confunde emancipación de la femenina vulgaridad masificante
sexual y construcción de zaguán nocturno
de una nueva educación sentimental
con chupadas de pija memento:
todo el club de rockeros erectos ya lo sentenciaron todas las feministas que valían la
al ritmo de las becas doctorandas pena ser leídas acerca de la emancipación sexual
en tecnocracia
lo único peor que vender el cuerpo a los varones
no es tanto la chusma de barrio
es venderlo una vez y para siempre
aggionarnada y sin ruleros
no ponerle precio
con la ropa vintage
y prodigarlo
se convierte en el equipo más usado
por nada a cambio
por la troupe de fascinerosos
del underground de la distorsión de la guitarra
gratuitamente
sino
la pobre lección de gramática
del amigo que usa el adjetivo
“interesante”
y el verbo copulativo reflexivo
“me parece”

136 137
III IV
brota el orgullo humano tu gesto
como petróleo sobre plataforma submarina acontecimiento
aniquilando todo el plancton de la biodiversidad presencia
intestinal de nuestro cansancio magia

bailemos
violencia se acaba el tiempo
todo aquello que se quiere dominar mediante la fuerza de la urgencia
humanista que niega la agresividad

se hunde el barco
el feminismo actual es tiempo de aprender a nadar
cómplice cristiano y envuelto en miedosas buenas
intenciones
políticamente correctas
un mundo de esclavos sin amos
un mundo de delatores
un mundo de tiranos
al servicio del
voluntarismo obligatorio
de servidumbre
un mundo de putas impagas
usadas por la patota
podrías formar parte
vos

138 139
el acto más sencillo contra este mundo
lo dicta una piedra sangrante
V
que canta tu canción
contra tu irremediable cara de rebelde hacia el corazón del desierto
caminar
resueltamente
sin reconciliación

prueba y luz
ilumina nuestro andar

¿adónde vamos?

parto
a partir de mi locura
mi disociación
absoluto abandono
parto
hacia la experimentación
que me salve de este entierro
parto
desde mi locura
desde el desconcierto
desde la intransigencia de no pactar
nunca un mejor final

esta es la guerra en curso

140 141
quien tema el arco de acción
piense en el mar la barricada o el juego
o fuera del mundo de la nada
en el beso de su amante abstracta de la economía
al interior de la situación

¿príncipe azul
caballo con alas mejor que armas y escudo
milagrosa salida? tiempo de comunas y afinidades

no creo en mi oficio tiempo de fuego

no creo en mentiras

se me ha dicho atentados
sexo palabras
raza atracos
género encuentros
edad acontecimiento, desertamos
clase
amor el viento sopla liviano
en todas las calles
creo en nosotras caminando juntas
camino
¿adónde vamos?
caminamos

tiene que desistir hasta el fin que nuestra situación contiene como
posibilidad

142 143
vayámonos
pronto

la palabra golpe es la casa de citas

de quienes estamos en el camino
Índice
La guerra en curso
una piedra sangrante en la cara de todo lo
anteriormente conocido
I.
EL DON DE CREER (9)
helechos
1936 (13)
enredaderas
Media clase (14)
pulverizamos los muros Amas de casas (15)
compost La Sociedad Rural (16)
El anarquismo es un amparo (17)
todo debe ser vuelto 2007 (18)
a plantar Sea side town (20)
La curtiembre (22)
Intersex en el programa de la tarde frente a su cirujano
caminemos (23)
Luna Park (26)
Alto Palermo (29)
Kronstadt, no te olvido no (30)
Kronstadt, o acerca del centralismo democrático en el
deslizamiento de la masa en los espacios públicos (31)
Santiago del Estero al 600 (33)
Margaret Hassan (35)

144
 Bakunin (39)
Diggers (40)
Translatio (42)
II.
GUERRA FRÍA (45)
La hermandad de los hombres (49)
Libertad es un lugar lejos de casa (52)
Honduras-Nicaragua (56)
La interpretación de nuestros sueños (59)
Felipe (67) UN MEDIO PARA ADOPTAR UNA POSICIÓN
James Towle (69)
Epitafio: Wu Shu (75)
Conventry – La Floresta – Valencia – Barcelona (87)
La casa de la escritura (92)
Antiespecismo (94)
EL CORAZÓN palpita (105)
Luciérnagas (106)
Zombie fighter (107)
Kick boxing (108)
VIAJO a Rosario (110)
Cuchulain (112)
Grupo de afinidad (114)
NINGÚN recuerdo es tan potente (115)
VI.
(119)
Primer acto y único acto (121)
Celan (128)
ONG (133)
Budismo (135)

III.
AMISTAD POLÍTICA (97)
LLEVO por todo nombre (99)
ANULAR (101)
ESTADO de excepción (102)
VIAJO un poco más adelante (103)
La guerra en curso es una tetralogía compuesta por El
don de creer aparecido en Santa Muerte Cartonera
(México, 2009), Editorial Germinal (Costa Rica, 2009) y
Editorial Curcuma (Buenos Aires, 2010); Guerra Fría
publicado en Editorial Germinal (Costa Rica, 2013); y
los libros inéditos Amistad Política y Un medio para
adoptar una posición, escritos ambos a partir de la
participación de la poeta en la plataforma sexoafectiva
Ludditas Sexxxuales.
 Títulos anteriores:
Nos Es Nada editorial es un sello itinerante de poesía
establecido en la actualidad en París, cuyo lanza- Luis M. Hermoza, Pueblo Joven II.
miento fue posible gracias al apoyo económico desin- Miguel Lerzundi, Pequeño Manual Antiayuda.
teresado de las siguientes personas: Laëtitia Saint-Dic,
Laurent Bouisset, Alicia Esteves, Alejandro Telleria-
Torres, Elizabeth Melgarejo, Raquel Martín, Miguel Próximo título:
Lerzundi, Sabine Berger, Miguel Rodríguez, Juan Luis Galo Ghigliotto, Monosúper.
Godoy Becerra, Carla González, Jose Luis Donayre,
Miuler Vásquez González, Carmen Olivas, Enrique
Góngora Padilla, Fabricio Tocco, José V. Gianuzzi,
Caroline Nautré, Maricela Sánchez Rodríguez, Nicu-
lina Loredana Soare, Reinhard Huamán Mori, Yesika
Enríquez, Erika Cuba, María Magdalena Pons, Sara
Mijichich, Cristina Silva-Santisteban, Josevi Segarra,
Norma Hermoza Moreno, Gilda Zamora, Amrei
Kreutzer, Evelyne Saint-Dic, Mila Lazo, Eleonora
Malacarne, Nicolas Saint-Dic, Julian Ferré, Leonardo
Aguirre, Elqui Burgos, Mónica Mendoza, Didier
Warnet, Alfredo Pita, Parwa Mounoussamy, María
Teresa Meléndez Irigoyen, Carlos Sánchez, Abel Santa
Cruz, Michel Leleu, Federico Delgado Scholl, Tulia
Guisado, Sonja Tiefenbaher, Luisa Andriollo, José
Naveiras García, Ethel Palomino, Juan Carlos Co-
ronado, Diego Suárez, Clorinda Suárez Zuzunaga,
Fabrizio Saccogna Suárez, Dora Zuzunaga de Suárez,
Magaly Martín, Carlos Esteban Giraldo Rojas, Miguel
Ángel Torres Vitolas, Marco Povis, Diego Sarmiento,
Carla Tellez Cisneros, Christian Delgado, Liliam
Suárez y Sergio Urday.

Poesía es más allá