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El monstruo en el armario o el otro diferente:

La política del miedo en EE.UU. y su influencia en la niñez/juventud

Iván Castiblanco Ramírez


2005

En Bowling For Columbine, Michael Moore presenta lo que a su parecer es una ex-
plicación de la causa de las matanzas realizadas por estudiantes con armas de fuego
en escuelas de Estados Unidos. Lo que para algunos es un enigma, para Moore
guarda una estrecha relación con una tradición armamentista fundada en estructu-
ras sociales y políticas de exclusión y desigualdad. Un cuestionamiento que surge a
partir de este documental es saber si los niños/jóvenes1 son más susceptibles de ser
influenciados por la trama de códigos estructurados en las relaciones cotidianas y
en los medios de comunicación masiva, basados en una cultura del miedo que bus-
ca el mantenimiento de un orden social al servicio del consumo. La intensión de
este texto es indagar sobre las estructuras de exclusión y desigualdad en Estados
Unidos, cómo estas se ven reflejadas tanto en el lenguaje de los medios de comuni-
cación observados en el documental como en el lenguaje cotidiano, fenómeno que
está acompañado de un debilitamiento del núcleo familiar, para posteriormente
encontrar pistas sobre cómo esas estructuras se encuentran en el repertorio de na-
rrativas en el que niños/jóvenes se hallan inmersos y que, por lo tanto, pueden fo-
mentar la inculcación de habitus que tiendan a reproducir estas estructuras en
ellos. Finalmente pretendo apostar que este tipo de estructuras ha servido para
construir una cultura política del miedo.

La exclusión y desigualdad son las principales causas de la inestabilidad social, lo


cual es utilizado por el gobierno para justificar la industria armamentista en pro de
la supuesta búsqueda de seguridad para los ciudadanos. Siendo EE.UU. el país más

1 Utilizo niños/jóvenes siguiendo a Germán Muñoz, quién la define como una etapa difícil de sepa-
rar en niñez y juventud.

1
rico del mundo, un gran número de sus pobladores no cuentan con las mínimas
condiciones de subsistencia materiales, encontrándose por debajo de la línea de
pobreza. A esto se suma que la acumulación de riqueza es el principal objetivo de
los empresarios y políticos, quienes construyen para su propio beneficio una políti-
ca de consumo, mediante la cual legitiman las estructuras de poder a la vez que for-
talecen la construcción del imaginario del “sueño americano”, implementando el
ideal de bienestar en la consecución de bienes materiales para el beneficio indivi-
dual. Estas estructuras generan amplias brechas entre los diferentes grupos socia-
les, siendo observable una mayor exclusión y desigualdad en las comunidades ne-
gras, indígenas y de inmigrantes, que en el caso de las últimas es agravada en gran
mayoría por su condición de ilegalidad. La tensión creada por estas condiciones de
exclusión y desigualdad, crea un ambiente propicio para fomentar la idea de la se-
guridad como garantía de la libertad, ya que, en lugar de crear una política social y
económica que tienda a la disminución de la brecha de desigualdad, se crean repre-
sentaciones sociales en las que se estigmatiza a los pobres como causantes de la
inseguridad y la violencia, entendiendo las representaciones sociales como formas
de conocimiento socialmente elaborado que posibilitan la construcción de una rea-
lidad compartida para un grupo social, que funcionan como sistemas de interpreta-
ción que organizan conductas y comunicación, y median en el aprendizaje, el desa-
rrollo individual y colectivo, así como en la definición de identidades individuales y
colectivas2. Este proceso es aprovechado para utilizar un discurso que apoya la
construcción de una política del miedo, en la que se asegura que el ciudadano debe
protegerse a través del uso de la fuerza, convirtiendo la venta de armas y de artícu-
los para la seguridad en un negocio muy lucrativo (se puede ver en el documental la
facilidad con que se pueden comprar municiones en las tiendas estadounidenses).
Un aspecto que vale la pena destacar, es la relación que Moore encuentra entre el
Ku Klux Klan y la NRA (National Rifle Association), con la cual devela una trama

2 Benedicto, José y Morán, María Luz. La construcción de una ciudadanía activa entre los jóvenes.
Instituto de la Juventud. Madrid, 2002.

2
de manejo de los hilos de poder para mantener excluidos a grupos poblacionales
considerados étnicamente inferiores.

El lenguaje utilizado en los medios de comunicación y en los diferentes espacios


cotidianos, reflejan las estructuras de exclusión y desigualdad y la política arma-
mentista. La definición de ciudadano que se maneja en los medios, desde la publi-
cidad, pasando por los noticieros, hasta los seriados y comedias, es la del ciudada-
no/consumidor, como paradigma del ideal de bienestar, es decir el “deber ser” se
convierte en un “deber tener”. En este paradigma se sustenta la idea de que lo prin-
cipal es garantizar el derecho al consumo y la propiedad privada, justificando cual-
quier acción encaminada a la protección de estos derechos. El ciudada-
no/consumidor tiene derecho a defenderse, y el Estado, como garante de este dere-
cho, tiene la obligación de brindarle los medios necesarios para su protección, y
estos medios se le brindan a través de la industria armamentista y de seguridad.
Los medios invisibilizan al “otro excluido”, y en lugar de mostrarlo como víctima
del sistema social inequitativo, crean lo que Skliar llama la imagen del otro maléfi-
co, que estaría inclinado hacia las conductas indebidas e ilegales no por su condi-
ción de pobreza, sino por la asociación errónea con sus características étnicas y cul-
turales, es decir se le tiene miedo porque es el otro y no porque es el malo, para los
niños/jóvenes el monstruo ya no está debajo de la cama o en el armario, el mons-
truo es el otro diferente, en este lenguaje no hay espacio para la alteridad3. Este uso
del lenguaje influye en la vida cotidiana, creando formas de referirse a los otros re-
lacionadas con las clases sociales y la manera como están distribuidos los asenta-
mientos de unas y otras (Se observa en el documental, cómo los blancos crearon los
suburbios para alejarse de los negros y los inmigrantes). Se crean así, representa-
ciones sociales que permiten normalizar el lenguaje de exclusión y desaparición del
otro diferente, y la creación del otro agresor del derecho a la propiedad y el consu-
mo.

3 Skliar, Carlos. ¿Y si el otro no estuviera ahí? Notas para una pedagogía (improbable) de la diferen-
cia. Escuela Marina Vilte CTERA - Miño y Dávila Editores, Buenos Aires, 2002.

3
Debido al creciente debilitamiento del núcleo familiar, generado por la necesidad
de que tanto madres como padres encuentren empleo, muchos niños/jóvenes de-
ben permanecer solos en sus casas, sobre todo los de clase medía y baja, lo que hace
que la mayor parte del día sean “cuidados” por la televisión, lo cual ha generado
que tengan un mayor acceso al lenguaje de los adultos, provocando que los ni-
ños/jóvenes hagan uso de este tipo de lenguaje sin comprender realmente el signi-
ficado del mismo. Esta situación es agravada por el elevado número de divorcios:
los conflictos previos a la separación, la lucha legal por conservar la custodia de los
hijos y la repartición de bienes, el cambio de residencia que normalmente acompa-
ña la separación y la menor cantidad de tiempo que un solo padre/madre le dedica
a los hijos debido a que debe trabajar mas tiempo para mantener el hogar, son cir-
cunstancias que suelen venir acompañadas del uso de un lenguaje cargado de emo-
ciones negativas que pueden incrementar la sensación de soledad en los ni-
ños/jóvenes4.

El repertorio de narrativas5 en el que niños/jóvenes se encuentran inmersos está


atravesado por las estructuras de exclusión y desigualdad, lo que fomenta la incul-
cación de las mismas y su posterior reproducción. Los niños/jóvenes son recepto-
res tanto de las narrativas que se encuentran en las prácticas cotidianas de los es-
pacios en los que se mueven (familia, escuela, barrio, etc.) hasta el lenguaje codifi-
cado en los medios masivos de comunicación (TV, radio, Internet). Vale la pena
mencionar que especialmente en los High Schools se reproducen las estructuras de
poder del mundo de los adultos, creando unos microsistemas sociales cargados de
representaciones e imaginarios sobre “el otro”. La niñez/juventud es una etapa
donde los sujetos están asimilando y aprendiendo los conocimientos y comporta-

4 Woolfolk, Anita E. Psicología Educativa. Prentice Hall Hispanoamerica, S.A. México, 7 edición,
1999. pp. 91-95
5 Por narrativas se entienden “...los artificios, estrategias y convenciones que gobiernan la organiza-
ción de un relato (de ficción o real) en una secuencia, referida usualmente al ámbito literario...”.
Tomado de: Instituto Federal Electoral. “Estudio sobre lo Cívico y lo Político en las Narrativas
Culturales de los Jóvenes Mexicanos”. Cuaderno No. 6. México, octubre de 2003.

4
mientos que les son llevados a través de la escuela, la familia y los medios. Esta
condición de aprendices hace que niños/jóvenes de alguna manera sean pasivos
receptores de las estructuras sociales, haciéndolos más vulnerables al contenido
violento y a la política del miedo. Lo que se puede observar es la conformación de
un sistema de habitus que promueven la reproducción de dichas estructuras, esto
sumado a la apropiación del lenguaje y conductas adultas por parte de ni-
ños/jóvenes que no tienen una conciencia completa del significado de las mismas,
puede mostrar un precedente de las posibles causas de la exacerbación de los com-
portamientos violentos y discriminatorios.

La política del consumo y el miedo, basada en la legitimación de las estructuras de


exclusión y desigualdad, permite la construcción del imaginario del otro maléfico
para fomentar el negocio de la seguridad, apoyada en la inculcación de dichas es-
tructuras del lenguaje de exclusión y desaparición del otro diferente y la mediación
de dicho lenguaje entre los medios masivos y la vida cotidiana, así como la configu-
ración de una familia cada vez más fragmentada que aumenta la sensación de sole-
dad e inseguridad de los niños/jóvenes, mostrarían la configuración de una cultura
política del miedo, entendiendo cultura política como el contexto compuesto por
las tensiones generadas entre los imaginarios colectivos y las propiedades estructu-
rales del campo de lo político inculcados en los actores sociales6. La implementa-
ción de esta cultura política le permite a la clase dominante mantener su hegemon-
ía y distraer la atención de los ciudadanos, sobre los asuntos que realmente están
causando la inestabilidad social en Estados Unidos. Ante este panorama es posible
entender por qué es a través de los niños/jóvenes que se evidencian las debilidades
de este sistema, debido a que son ellos los que se encuentran mayormente influen-
ciados por los factores anteriormente presentados, pero no tienen la posibilidad de
comprender los constantes cambios que observan a su alrededor y cuya única al-
ternativa es asumir el modelo de ciudadano/consumidor, apoyado en un modelo de

6 Echegollen, Alfredo. Cultura e imaginarios políticos en América Latina”, Metapolítica, vol. 2,


núm. 7, julio-septiembre 1988, pp. 495-511.

5
educación que no les da herramientas para comprender su realidad próxima y pa-
rece enfatizar las representaciones de exclusión y discriminación del otro diferente.

Fuentes

Moore, Michael. Documental “Bowling for Columbine”, 2002.

Benedicto, José y Morán, María Luz. La construcción de una ciudadanía activa en-
tre los jóvenes. Instituto de la Juventud. Madrid, 2002.

Echegollén Guzmán, Alfredo. Cultura e Imaginarios Políticos en América Latina,


Metapolítica, vol. 2, núm. julio-septiembre 1988. pp. 495-511.

Herrera, Martha Cecilia y otros. La Construcción de Cultura Política en Colombia.


Proyectos Hegemónicos y Resistencias Culturales. UPN. Bogotá D.C. – Colombia,
enero de 2005.

Huergo, Jorge A. y Fernandez, Maria B, Cultura Escolar, Cultura Mediáti-


ca/Intersecciones. Universidad Pedagógica Nacional, Bogotá D.C., 2000.

Instituto Federal Electoral. Estudio sobre lo Cívico y lo Político en las Narrativas


Culturales de los Jóvenes Mexicanos. Cuaderno No. 6. México, octubre de 2003.

Skliar, Carlos. ¿Y si el otro no estuviera ahí? Notas para una pedagogía (improba-
ble) de la diferencia. Escuela Marina Vilte CTERA - Miño y Dávila Editores, Buenos
Aires, 2002.

Woolfolk, Anita E. Psicología Educativa. Prentice Hall Hispanoamerica, S.A. Méxi-


co, 7 edición, 1999. pp. 91-95

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