Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Noi viví no tuvo el éxito de público esperado y durante muchos ron los teóricos del grupo Cinegramma, un intento de cine-fcui-
años se convirtió en una de las películas más olvidadas del cine lletofi, hecho que curiosamente queda reflejado por «el uso siste
fascista. Su estreno se vio perturbado por ios acontecimientos po mático de los primeros planos, por la importancia que se da al ros
líticos que siguieron a Ui proclamación de la República de Saló y tro de los actores utilizados de manera estática sin interpretación
fue eludida de la mayoría de las historias del cinc italiano. A pesar y sin dirección, por el contexto esquemático y aproximadvo»
de su condición de panfleto anticomunista, el díptico de Goffre- ( G r u p o C in e g r a m m a , 1982, 169).
do Alessandrini tiene una importancia fundamental como obra Por otra parte, Goffredo Alessandrini parece querer rehuir los
prototípica de un cierto modelo retórico presente en el interior postulados típicos que explotó el cine fascista oficial de los años
del cine fascista. En la película se lleva hasta la maestría una serie treinta, en los que se estableció un cierto paralelismo entre el kitsh
de figuras estilísticas completamente impermeables a cualquier grandilocuente de ascendencia operística y la glorificación del
forma de realidad, exceptuando la realidad de carácter estricta cuerpo interpretativo visto como estatua ( D a l l e V a c h e , 1992,
mente metafórico/simbólico. Noi viví representa el triunfo de la 42). Alessandrini se concentró en las estructuras folletinescas y lle
imagen cerrada. vó hasta el límite los enunciados estilísticos de las convenciones de
En Noi viví, la tensión determinante entre el marco y la intriga un cine rodado en estudio y ambientado en exóticos universos de
acababa resolviéndose siempre a favor de esta última. La película difícil verosimilitud. Noi viví acabó convirtiéndose en una obra
propone un milimetrado ensamblaje de causas y efectos distribui clave para comprender la consolidación, en el marco del cine ita
do a partir de una hermética lógica secuencial. El filme certifica el liano, de ios fundamentos más elementales del método de repre
triunfo de una narra tividad transitiva de carácter novelesco y en el sentación institucional.
ámbito representativo perfila un universo donde los elementos es La película de Alessandrini no fue sólo una especie de canto
cenográficos se colocan en un plano cercano a la abstracción. El del cisne estilístico que ponía en evidencia la crisis irreversible
relato funciona como una estructura cerrada, como un mundo fic de la imagen cerrada del cine fascista, sino que paradójicamente
ticio ajeno a las leyes del mundo exterior. Los hechos fluyen a par se convirtió en una obra enigmática de posible doble lectura en
tir de los principios de un mecanismo estilístico que continua la que «bajo una Rusia de cartón piedra, se fueron proyectando
mente parece poner en evidencia los delicados resortes de la muchos de ios signos inquietantes de la catástrofe irreversible
representación. La esclerosis escenográfica y la plástica del cartón del propio fascismo» ( B r u n e t t a , 1991, 232). El guión de signe
piedra dominan el trabajo de puesta en escena. La planificación es anticomunista presentaba algunas curiosas contradicciones. Tras
ajena a la descripción y está escrupulosamente atenta a la hiper la historia de ios amores y servidumbres del dirigente bolchevique
trofia dramática que permite resaltar los grandes movimientos de Andrei Taganov hacia la hermosa Kira, se entreveía el sufrí miente
la trama a partir de la frialdad de un trabajo interpretativo basado de ios servidores que fueron fieles a una causa y que observaban
en el estatismo gestual. El proceso de enunciación no responde a cómo sus ideales aparecían traicionados por la mayoría de su;
los tradicionales parámetros de invisibilidad del cine clásico. La jerarcas. La férrea estructura narrativa de Noi viví vislumbraba l-¿
cámara pone en evidencia, mediante diferentes formas de subra existencia de un m undo— y consecuentemente de unas formas de
yado, la existencia de un locutor omnipresente que domina todos representación— a punto de resquebrajarse, la existencia de ur
los resortes de la puesta en escena. Dicho locutor establece, me sistema de poder herido de muerte.
diante el montaje, algunos forzados enlaces temporales entre las
diferentes secuencias. Nvi m-v es, tal como sabiamente advirtió*-
48 i EL C,iNE ITALIANO, 1942-1961 LA C R ISIS D E LA REALID A D (1942-1945) 49
Ii
lítico impuesto por el Estado, el cine fascista dei período no fue
2. El monopolio de la producción italiana sólo un cine de carácter propagandístico, sino un cine de evasión
articulado según las leyes de la oferta y la demanda. La intención
La cerrazón argumenta! y dramática Noi vivi puede conside primordial del fascismo consistió en promover un cine de consu
rarse como un reflejo del régimen de autarquía productiva en que, mo, altamente controlado por los grandes estamentos estatales.
desde 1939, se. hallaba sumido el cine ita lia n o . Los infructuosos Las ciento veinte películas producidas en. 1942 reflejan las dife
intentos de la EN JC, el e n te e s t a t a l responsable de la distribución, rentes líneas del cine fascista, entre las que se hallan el cine pseu-
por C o n s e g u ir el monopolio de las películas de los cuatro grandes dohistórico ambientado en la Roma antigua o en el Renacimiento,
del mercado americano — Metro Goldwyn Mayer, Paramount, las comedias sofisticadas de teléfonos blancos,2 las comedías po
Warner Bros y 20th Century Fox.— provocó un fuerte conflicto pulares de marcado ámbito dialectal y los filmes de carácter cali
diplomático entre la industria hollvwodiense y las instituciones ci gráfico, que proponían una cierta apertura en el cine del periodo.
nematográficas fascistas. Como consecuencia de dicho conflicto, No todo el cine participó de la retórica fascista. El cine propagan
las m ajan acabaron abandonando, el 13 de febrero de 1939, el dístico ocupaba una posición discreta y se concentraba básica
mercado italiano, ya que no aceptaban el monopolio de exhibí* mente en los trabajos documentales producidos por el Istituto
cióni De esta forma acabó abriéndose un período de cinco años de Luce, Tal como recordó el escritor Alberto Moravia, el gran pro
autarquía durante el cual los cines italianos no pudieron estrenar blema del cine bajo el fascismo no se hallaba en su consistencia in
películas americanas. (Q u ag ljo tti, 1980, 31). Dicha autarquía re dustrial, sino en su significación social. El cine fascista era un cine
presentó, para el posterior cine italiano que se rodaría en los años que intentaba forzar una imagen optimista de la realidad:
de la liberación, una pesada carga impuesta por el fascismo. En la
inmediata posguerra, el proceso de recuperación de las obras más El cine de la época fascista refleja inconscientemente la situa
comerciales del mercado americano frenó, como veremos más ción social de Italia bajo el fascismo, refleja la existencia de una
adelante, el desarrolló comercial de un cine autóctono y limitó la pequeña burguesía de origen campesino que creía en los mitos de
aceptación popular de la estética neorrealista. la Roma antigua y del Renacimiento. Por dicho motivo, el cine al
El autarquismo de la distribución permitió un importante cre ternaba las obras históricas y los dramas pequeño burgueses, sen
timentales y desprovistos de toda problemática dramática moder
cimiento de la producción autóctona. Cuatrocientos cincuenta
na. Viendo dichas películas el espectador podía conocer hasta
millones de espectadores acudieron a las salas cinematográficas en
cierto punto cómo era la vida italiana, digo hasta cierto punto,
1942;, año en que llegaron a producirse ciento veinte películas. La porque había una tendencia a privilegiar una imagen más o menos
industria italiana se convirtió cuantitativamente en la más impor
tante de Europa. Dicho éxito no fue más que el triunfo ele una po
2. Las llamadas comedías sofisticadas de teléfonos blancos estaban ambienta
lítica; impuesta, a partir de 1934, por los organismos instituciona das en paraísos irreales y representadas por personajes provenientes de la alta
les del aparato fascista que se generaron después de la creación de burguesía o de la aristocracia. Dichas comedias adquirieron una gran populari
la Direzione Generale per la Cinematografía, dirigida por Luigi dad durante el fascismo y han sido contempladas muchas veces como ejemplo
Freddi. La dirección consolidó una importante estructura estatal prototípico de las propuestas de evasión de la realidad. Dichas comedias, en mu
chos casos, no íucron más que una extensión de las comedias sofisticadas que du
consistente en una. empresa de. distribución — la E N IC — , un cen
rante los años treinta también irrumpieron en el cine americano. En el neorrealis
tro d;e producción — Cinecittá— y unos laboratorios — el Istituto mo, a las comedias de teléfonos blancos se contrapusieron ios melodramas de
Luce-— . A pesar dei alto nivel de proteccionismo económico y po- teléfonos negros, protagonizados por personajes de extracción social humilde.
50 EL CIN E ITALIANO, 1942-1961 I.A C R I S I S D E L A R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 51
optim ista d e las co sas... N o creo haber visto u na sola película d u nían una cierta aproximación del arte a la realidad. Los intelec-1
rante el fascism o que me haya gu stado , to d as eran insignificantes, tu ales empezaron a tomar conciencia de una cierta crisis del senti
incIuso las p eiícu las m ás prestigiosas co m o L a corona de hterro [ La do de la real idad. El arte fascista reivindicaba la retórica de la fal
corona di ferro, 1941] de B lasetti ( G iu , 1990, 194). sedad, reclamando la necesidad de recuperar la italianizad. Sus.
postulados estéticos fueron los conceptos de orden, solidez y cla
A pesar del clima de euforia que vivía el cine italiano en 1942, ridad, teorizados por Gí o van ni Gen tile y el ilustrado Giuseppe
la sociedad estaba sumida en una guerra en la que el fascismo iba Bottai, ambos ministros de Educación Nacional durante el fascis
perdiendo gloria y posiciones, En 1943, con el desembarco aliado mo. El gran reto de la intelectualidad residía en sustituir la imagen
en Sicilia, la caída del gobierno de Mussolini, la proclamación del oficial de la Italia fascista por la imagen de una Italia real. No po
armisticio del mariscal Badoglio y la creación de la República de día existir la obra de arte sin una cierta idea del compromiso. El
Saló, la industria del cine se trasladó de Roma a Ve necia, inte problema de fondo se hallaba formulado en una pregunta clave:
rrumpiéndose una parte importante de la producción; dicha si ¿cómo habituar los ojos a la visión de lo real?
tuación acabó provocando el £in definitivo de una etapa de la his Mientras en ios ámbitos artísticos v literarios pudo articularse
toria cinematográfica italiana. No obstante, antes de que el una cierta resistencia contra ei fascismo, en el cine italiano dicha
inoperante cine de la República de Saló acabará enterrando las resistencia no fue posible. En los años treinta, el cine no había
formas más caducas de representación, en ei interior del cine ita conseguido aún una respetabilidad como forma artística institu
liano se empezaron a evidenciar algunos síntomas de un cierto cionalizada. La vanguardia artística italiana había vivido de espal
cambio cualitativo, un cambio que se gestó a la sombra del fascis das ai fenómeno cinematográfico y la.:estética idealista crociaría,
mo y que sentó las bases del cine de la posguerra. Un cambio que, que marcó el desarrollo del liberalismo intelectual en la Italia an
tal como se ha ido debatiendo en la historiografía italiana, no re terior al fascismo, no situó nunca el cine en el panteón de las gran
presentó ninguna transformación radical, sino una reformulación, des artes. Los movimientos intelectuales consideraban el cine
o tal como afirmaron los miembros del grupo Cinegramma, un como un objeto de diversión y de entretenimiento. La política ci
transtexto, es decir, una ligera modificación del campo textual en nematográfica del fascismo también estuvo orientada a potenciar
el que una serie de experiencias consolidadas del aparato cinema dicho sentido de evasión y los cineastas que trabajaron en ella*
tográfico pesaron en la gestación ele las nuevas experiencias (Ci- —Alessandro Blasetti, Mario Catnerini, Carmine Galione— actua
NEGRAMMA, 1982., 144). ron como profesionales al servicio de los intereses de la industria.
Para dichos directores, no existía una conciencia de crisis de la rea
lidad en el cine del período, a pesar de que algunos de ellos ha
3. La intriga y el marco exterior bían conseguido introducir algunos esporádicos fermentos de rea
lismo en la puesta en escena del cine italiano de los primeros años
Las transformaciones que se perpetuaron en el interior del treinta.
cine fascista fueron una extensión ele la aguda crisis que vivió la Ei realismo se encontraba enraizado en la cultura popular ita
intelectualidad italiana durante el uentennio negro. A principios liana y en sus tradiciones; para conectar con el populismo campe
de los años treinta, la crisis de las vanguardias europeas permitió sino o pequeño burgués era necesario explorar la geografía de los
el resurgir de un cierto debate en torno a la necesidad de recupe espacios, que estableciera una cierta lógica con la psicología de los
ración de una serie de formas expresivas e ideológicas que propo- personajes protagonistas de las ficciones. Así, algunas de las pelí
52 F.L C I N E I T A L I A N O , 1 9 4 2 - 1 9 6 1 LA C R I S I S D E LA R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 53
culas de finales de! período mudo, como Solé (1929), de Alessan- tiempo después protagonizarían la película clave del cine de la li
dro Blasetti, o Rotaie (.1929), de Mario Camerini, contienen algu beración, Roma ciudad abierta, de Roberto Rossellini. Vive... si te
nos elementos realistas en la puesta en escena. También introdu dejan tiene como protagonista a uno de los últimos cocheros
jeron un cierto realismo las comedias de Amleto Palermi. Estos romanos, quien un día descubre que una vedette se ha olvidado
fermentos no desaparecerán en las obras más emblemáticas que un maletín con joyas en su coche. La película mezcla elementos
dichos cineastas realizaron en los primeros años del. sonoro, como sentimentales y humorísticos en exteriores naturales. Campo de
el celebradvo drama histórico 1860 (1933), de Blasetti, y la come Fiori, en cuyo guión colaboró el debutante Federico Pellín i, rea
dia pequeño-burguesa G li uotnini che mas calzo ni (1932), de Ca liza un retrato costumbrista de ribetes melodramáticos en torno
merini, En dichas películas, el realismo aparece condicionado por a ios individuos que pueblan el popular Campo de Fiori, una pla
las relaciones que se establecen entre la intriga y el marco/decora- za situada en el centro de Roma. En la película Aldo Fabrizzi es
do de la acción. La f ilmación en un marco real permite la presen el propietario de una pescadería enamorado de su cliente de
cia de personajes o situaciones que podían haber estado excluidos clase acomodada — Caterina Boratto— , que lo introduce en un
o marginados forzosamente en un segundo plano de la acción oscuro círculo social, mientras Anna Magnani vende verduras y
(B runl-tta , 1986, 159). acaba enamorada del propietario de una barbería, personaje in
A mediados de los años treinta, coincidiendo con la política terpretado por Peppino De Filippo. A pesar de su tono ligero,
de recuperación del legado de la italianidad en fas artes, se pro dichas películas crearon una tipología popular que reaparecerá
dujo un cambio en los objetivos políticos del régimen que con en algunas obras del llamado neorrealismo rosa de los años cin
dujo al cine a la abstracción escenográfica, la reducción del cua cuenta.
dro de la intriga y la intensificación del. carácter funcional de la La hipertrofia escenográfica del cine fascista generó un cierto
narrativa y de la dramaturgia. Un ejemplo representativo de di debate de carácter ético que coincidió con el descubrimiento de la
cha política es el clásico de Blasetti La corona de hierro, una de conciencia artística del fenómeno cinematográfico. El sentimiento
las mayores superproducciones del cine fascista, rodada entera del absurdo social de la época llevó a los cineastas a comprender
mente en los estudios de Cinecittá, donde se cuenta una historia que los falsos mundos ideales de la italianidad épica debían ser
mítica en torno a la leyenda de los poderes mágicos de la corona sustituidos por fragmentos de verdad. El arte no debía estar aisla
de los reyes lombardos. El filme está tenido de una cierta ideolo do del mundo. La alternativa era el realismo y la gran tradición
gía pacifista que se contradice con la justificación patriótica del realista de las artes se hallaba en las formas literarias del siglo xix,
cine oficial de los primeros años de la guerra. No obstante, en el especialmente en el naturalismo y su versión italiana, el verismo.
nivel formal, La corona de hierro es una obra fiel a los estereoti Para conseguir la maduración del cine como medio de expresión,
pos escenográficos de la estética cerrada y de la grandilocuencia. era fundamental que éste adquiriera una conciencia claramente li
Las únicas obras que anunciaron un cierto realismo en el trata teraria. Tal como lo ha formulado Alberto Asor Rosa, la preocu
miento del cuadro fueron las comedias producidas a partir de los pación común de los jóvenes cineastas consistía en conceder una
cánones del tipismo y el populismo dialectal, entre las que desta importancia fundamenta! al relato «como forma originaria v ejem
can especialmente Vive... si. te dejan (L’ultima carrozzella, 1943), plar de realismo» ( A s o r R o s a , 1990, 85). La reivindicación del re
de Mario Mattoli., y Campo de Fiori, de Mario Bonnard, ambas lato como camino hacia la comprensión del mundo era absoluta
protagonizadas por los entonces cómicos provenientes de los mente contraria a la idea de homogeneízación del. relato como
teatros de variedades Aldo Fabrizzi y Arma Magnani, que poco único mundo posible, explorada en las obras cerradas del fascis-
54 EL CINE ITALIANO, 1 9 4 2 -1 9 6 1
LA C R IS IS D E LA R E A L ID A D (1942-1945) 55
d io . El relato abría un camino hacia la madurez del cine y era u n
sino en la introducción de algunos elementos de carácter docu
importante vehículo como transmisor de ideología. El relato po
mental en el marco de la ficción de carácter parapubiieitario. D i
día acercar el cine a una cierta objetividad permitiéndole penetrar
chos elementos documentalistas constituyeron un punto de par
en historias simples, articuladas a la medida del hombre. El gran
tida fundamental para la exploración de la determinante estética
reto, especificado años después por Cesare Za val ti ni en sus textos
de la coátifcgüidad en el cine italiano. Las figuras clave de dicho
teóricos, se encontraba en la búsqueda de una poética de la inme
cine propagandista fueron Francesco D e Robertis y Roberto
diatez o contigüidad. Sin embargo-, para llegar a dicha inmediatez
Rossellini.
era indispensable una fase previa en la que la observación de la re
alidad estuviera en contacto constante con la invención, es decir, El comandante Francesco De Robertis fue nombrado en 1940
director del departamento de cinematografía del Ministerio de
con lo literario.
En la reivindicación inicial del relato desempeñó también un Marina, desde el que impulsó diferentes documentales. Entre és
tos destaca Hombres sobre el fondo (Uomini sul fondo, 1941), que
papel determinante la estética crociana. Para Benedetto Croce, el
debía justificar y defender la actuación de los marinos italianos
relato es el producto de una síntesis superior del espíritu y cual
durante la segunda guerra mundial. De Robertis rodó la película
quier relato, por su intrínseca condición literaria, constituye una
documental en el interior de un auténtico submarino, introdu
manifestación poética del estilo. Para conseguir su madurez como
ciendo elementos de ficción protagonizados por actores no profe
arte, el cine debe recorrer un camino desde el relato como forma
sionales, los propios marinos. El éxito de dicha película indujo a
hacía la visibilidad del estilo, infligiendo un duro golpe al pro
Francesco De Robertis a realizar un filme divulgativo sobre el
fesionalismo impuesto por la industria que había í renado la ma
trato que los marineros heridos en combate recibían en los hospi
nifestación de la individualidad artística. La reivindicación de
tales del Ministerio de Marina. De Robertis escribió el guión de la
los parámetros literarios del relato del xix abrió, en el interior del
película, pero delegó la dirección de La nave bidnea (194.1) al de
cine italiano, dos caminos contradictorios; el caligrafísmo nove
butante Roberto Rossellini, proveniente de una familia de la alta
lesco concentrado en la exaltación del estilo y el retomo ai veris
burguesía romana. La filosofía de La nave bianca consistía en fun
mo y a los modelos del xix, reivindicados por los teóricos de la re
dir, de forma simbólica, los hombres con las máquinas convirtién-
vista Cinema. Junto a estas dos vías se gestó una vía intermedia
dolos en estandartes de la futura nación italiana. Francesco De
consistente en la progresiva transformación realista de los pará
Robertis buscó, a partir del documentalismo, un tono verista que
metros del cine pequeñoburgués, sustentada por Cesare Zavatti-
rompiera con la retórica propia del propagandismo fascista. La
ni, que trabajó como guionista en obras clave de Alesandro Blas-
misión era imposible, debido al forzado contenido ideológico pu
seti y Vittorio Ue Sica. La gran obra que condensó los debates
blicitario de las imágenes — marcado por una estética inspirada
sobre las formas de realismo literario fue Ossessionc (1943), de
remotamente en el cine soviético de Sergei M. Eisenstein, sobre;
Luchino Visconti, película que operó una profunda transgresión
todo en El acorazado Potemkin (Bronenosets Potemkin, 1925)— ,
en la estética oficial del período.
pero en ella se dejó entrever una tensión entre la imagen retórica
Antes de abordar dichas corrientes, conviene precisar que
del fascismo y una imagen ínformalista que replanteaba los meca
también se abrió una interesante vía realista en el interior del
nismos formales de la ficción. Roberto Rossellini continuó rodan
cine propagandista, en productos rodados por encargo del Mi
do otros filmes propagandísticos como Un pilota ritorna (1942),
nisterio de Defensa. La fuente de inspiración de dicha vía no se
centrada en las aventuras de un joven teniente de la aviación ita
encontraba en ningún tipo de construcción de origen literario,
liana que es capturado por las tropas aliadas y hecho prisionero en
56 EL C IN E ITALIANO, 1942-1961 LA C R I S I S D E L A R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 57
G recia/ y L'uomo clella croce (1943), sobre la campaña italiana en lizaban los giros dialectales lombardos, opuestos al italiano están
Rusia. dar. En el nivel estilístico, las preocupaciones de Soldati se cen
traron en un buen uso de la sintaxis expresiva del cine, en el man
tenimiento de una cierta fidelidad ai texto literario y en demostrar
4. El caligrafismo, un frustrado cine burgués un buen gusto en los elementos decorativos. Soldati repitió la ex
periencia de Tiempos pasados en otra adaptación de Fogazzaro,
En 1941, el escritor y cineasta Mario Soldati — antiguo ayu Malombra (1942).
dante de Mario Carnean i— realizó su quinto largometraje, Tiem Las obras de Soldati abrieron el camino a una nueva corriente
pos pasados (Piccolo mondo antico, 1941), basado en la adapta que no tardó en ser bautizada, por el entonces teórico de la revis
ción de una novela de Antonio Fogazzaro (1842-1911). En el ta Cinema Giuseppe De Santis, como caligráfica. La corriente, ca
guión del filme participaron algunas figuras emblemáticas del cine racterizada por la adaptación fílmica de textos del ottocento, aus
italiano, como el intelectual Emilio Cecchi —un nombre clave en pició el debut de algunos nombres clave del cine italiano como
el resurgir de una cierta conciencia liberal en el interior de la Ita Renato Castellani y Alberto Lattuada. Castellani rodó Un tiro en
lia fascista— y Alberto Latinada, uno de los nombres determi reserva (Un colpo di pistola, 1941), una libre adaptación de una
nantes del cine italiano de los anos cuarenta y cincuenta, Tiempos novela de Pushkin4 protagonizada por Fosco Giacchetti y Assia
pasadost interpretada por Alida Valí i y Massimo Serati, cuenta la Noris, en la que los excesos formalistas acabaron siendo cercanos
clásica historia de amores desgraciados entre Franco y Luisa, dos ai decorativismo, provocando el distanciamiento de la joven críti
jóvenes amantes torturados por la intransigencia social de su ca, que en un primer momento había defendido el cine caligráfi
abuela, una rica marquesa. La melodramática historia transcurre co. Alberto Lattuada trasladó a la pantalla una novela de Emilio
en 1850 y tiene como telón de fondo un pequeño mundo antiguo, De Marchi, Giacomo Videalista (.1.942), que relataba los conflictos
el de la aristocracia piamentesa instalada junto al lago de Como, de un joven soñador ante los misterios de la vida. El cine caligrá
durante los años de la lucha contra la ocupación austríaca. Los fico también permitió que debutara en la dirección cinematográ
amantes que luchan contra la intransigencia son los representan fica uno de los grandes teóricos, Luigi Chiaríni, director del Cen
tes de la nueva Italia del Risorgimento, un nuevo mundo que aca tro Sperimentale de Cinematografía y fundador de ia revista
bará destruyendo las tradiciones del pasado. En el trabajo de Bianco e Ñero. Chiarini filmó, con alumnos del Centro, Via delle
adaptación, Soldati se mantuvo fiel a la novela de Fogazzaro, pero cinque lune (1941), a partir de una novela de Matilde Serao, y con
introdujo una serie de cambios sustanciales respecto a las recons solidó su posición con La bella adorméntala (1942), adaptación de
trucciones históricas del período. Tiempos pasados fue la primera . Es interesante comprobar que a lo largo de la historia dei cine italiano siem
película histórica — a excepción de 1860, de Blasetti— rodada en pre ha habido un cierto acercamiento hacia los clásicos de la literatura rusa, fac
exteriores naturales —el lago de Como y sus alrededores— y fue tor que se pondrá de manifiesto en algunos títulos representativos como, además
una de las primeras veces en que, en una gran producción, se uti de! mencionado de Castellani, El alcalde, el escribano y su abrigo (II capono), de
Alberto Lattuada (1952), inspirado en un texto de Gogol, el filme de aventuras
Águila negra (AquiJa ñera, 19*16), de Riccardo Freda, que parte de un relato de
3. El guión de Un pilóla rilorna parte de una idea original de Tito Silvio Mursi- Pushkin, o incluso Las noches blancas (Le notte bianche, 1957}, de Visconti, libre
nó, pseudónimo utilizado por Vittorio Mussoliní — hijo del Duce— , que desem adaptación de un texto de Dostoievski. Tampoco es casual que King Vidor filma
peñó el cargo de supervisor general. Emve los guionistas acreditados también fi ra en Italia, producida por Dino de Laurcntiis y contando con Mario Soldati
gura Michelnngclo Antonioni. como ayudante de dirección, Guerra y paz (War and Pea ce, 19.56}.
58 EL CINE ITALIANO, 1942-1961
la crisis de la rea lidad (1942-1.945) 59
nuestra mejor literatura hayan transcurrido sólo en un plano estric Aldo De Benedetti — autor del guión de algunas de. las mejores
tamente formalista?» ( C a p r a r a , 1991, 28). Para De Santis el cami comedias pequeñoburguesas de Mario Camerini y de algunas
no hacia lo literario debía pasar por una reivindicación de las au obras populistas de Mario Bonnard— y en la que colaboró un es
ténticas bases literarias populares situadas en la novelística verista critor/guionista que empezaba a abrirse camino en el cine, intro
de Giovanni Verga o por una transformación parecida a la llevada duciendo unas ciertas dosis de humanidad en la comedia costum
a cabo en el cine americano con las formas narrativas populares brista, Cesare Zavattini.
serias. Dichas preocupaciones sirvieron para romper con la narra- La escena inicial cíe Cuatro pasos por las nubes nos muestra el
tívidad burguesa y empezaron a sentar un camino hacia un realis despertar doméstico de un viajante, Paolo — Gino Cervi— . Su
mo social que estalló en Ossessione, de Luchino Visconti. Mien casa está desordenada, su mujer le regaña porque es incapaz de le
tras irrumpía en el ámbito cinematográfico la opera prima de vantarse sin hacer ruido y puede despertar a los niños o a su cu
Visconti, se abrieron, en el interior del cine italiano, pequeñas ñado, un parásito que lleva dos años en el paro. La escena, que po
grietas que atentaron contra los modelos genéricos del espectácu see un carácter meramente descriptivo, está marcada por los
lo pequeñoburgués. La películas que desde el interior mismo del gestos repetitivos de los cónyuges y por una inteligente utilización
sistema propusieron ligeras — pero sustanciales— modificaciones del espacio en off donde aparecen subrayados una serie de ruidos
fueron Cuatro pasos por las nubes (Quaftro passi fra le nuvole, estridentes que transforman la cotidianeidad en una auténtica pe
1943), de Blasetti, e I bambini ci guardarlo (1943), de Vittorio de
Sica, las dos con guión de Cesare Zavattini.
62 EL C IN E ITALIANO, 1 9 4 2 - 1 9 6 1 L A CRISI S D E L A R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 63
sadilla. En el prólogo de Cuatro pasos por las nubes, la cámara de prólogo y en su conclusión, en el anticipador retrato de los sinsa
Blasetti parece penetrar en una especie de imaginario del univer bores de ia cotidianeidad pequeñoburguesa. Cuatro pasos por las
so familiar p rencor rea lista. Finalizada la breve introducción em nubes refleja por vez primera la utopía de Cesare Zavattini de un
pieza el relato propiamente dicho y vemos cómo Paolo abandona mundo solidario. La utopía nos remite hacia un paraíso alejado
el hogar para dirigirse al trabajo y entra en un tren abarrotado de del hogar cotidiano, situado en un lugar incierto donde « “ buenos
gente del que es expulsado. A partir de dicho momento, la reali días” siempre quiere decir “ buenos días”». Por otra parte, el su
dad queda suspendida y Paolo penetra en un universo de ficción puesto viaje idílico de los protagonistas hacia un mundo de sueño
estructurado a partir de ios parámetros tradicionales de la come no lo es tanto, ya. que una posible interpretación sintomática nos
dia teatral clásica. El marco de la ficción es la Italia rural, un uni revela que dicho espacio es un reflejo de la impotencia y la frus
verso donde el tiempo parcce haberse detenido— el conductor de tración sexual de la I talia fascista. La relación no consumada en
un autobús da unas cuantas vueltas a la plaza de un pueblo para tre el viajante Gino Cervi y la joven madre Adriana Benedetti está
celebrar el nacimiento de su hijo, sin preocuparse por llevar a los enmarcada en una especie de paréntesis irreal, como si fuera pa
pasajeros puntualmente a un destino— y donde aún rigen ios vie trimonio exclusivo de un frustrado sueño húmedo.
jos códigos del honor, La Italia rural está filmada como un espa La pesadilla también se introdujo en las grietas de la comedia
cio idealizado a partir de los postulados populistas. Es un mundo pequeñoburguesa, descendiente de las comedias de teléfonos
autóctono donde los buenos sentimientos están en estado de ten blancos, para roer sus cimientos y desvelar los más profundos sin
sión permanente contra las tradiciones. Los seres humanos han sabores de una clase social condenada a la inercia del conformis
sido sustituidos por personajes, por los arquetipos que prefiguran mo. I bambini ci guardano (1943), el cuarto largometraje como di
un mundo de ficción. Es el espacio dei sueño, donde para so rector de Vittorio de Sica y el primero en el que colaboró
brevivir es necesario utilizar disfraz, Para poder mantenerse fiel a activamente con el guionista Cesare Zavattini, refleja el paisaje
las leyes de dicho mundo y poder ayudar a una jovencita embara gris de una Roma sumida en una especie de calma fatal. La fami
zada que tiene miedo de no ser aceptada por su familia, Paolo lia ya no puede ser vista de forma idealizada, como refugio de or
debe ponerse el disfraz de marido —acentuando la impotencia se den y de felicidad, ya que existe el adulterio, asumido como el mal
xual de sus deseos reprimidos— e intentar convencer al padre de que corroe la armonía familiar. Tal como ha apuntado Franco
la chica de la humanidad de la joven. AI final del filme, Paolo re Pecori, la propuesta de De Sica en I bambini ci guardano consiste
gresa a su hogar preneorreaiista, donde una vez más oye la ame en «apropiarse del público al que siempre se había dirigido en sus
nazadora voz en off de su mujer. comedias adocenadas y ponerlo directamente en escena» ( P e c o r i ,
La novedad principal de Cuatro pasos por las nubes no reside, 1980, 37). Los mundos amables de las primeras comedias de Vit
tal como han sostenido algunos críticos, en la «resonancia huma torio de Sica, donde las niñas de los internados sueñan con bellos
na de la pintura de costumbres» o en la forma en que Blasetti pre seductores con las facciones del propio Vittorio de Sica — Madda-
tende explorar, durante el viaje al mundo rural, «la poesía de lo lena, zero in condolía (1940)— o donde las internas de los orfanatos
cotidiano» ( H o v a l d , 1962, 58). La mayoría de las escenas de ca- son capaces de hacer perder la cabeza a los inspectores de sanidad
rácter rural fueron rodadas en estudio y remiten a los cánones dei — Nacida en viernes (Teresa Venerdi, 1941)— , se esfumaron mo
viejo cine. Incluso algunos momentos del viaje de ios protago mentáneamente en un cine donde 1a comedia a la italiana de ios
nistas— los dos sentados en un cano— revelan, el uso de transpa años treinta se transmutó en melodrama.
rencias. La gran innovación de Ja película de Blasetti se halla en su I bambini ci guardano parte de una estructura claramente me-
64 !~L O N U I T A L I A N O , 1 9 4 2 - 1 9 6 1 la C R I S I S D E LA R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 65
iodramática. La unidad de una familia romana se rompe debido a berío D (1951)— . La exploración de dicho recurso no rompe con
la relación adúltera que la madre mantiene con su amante. El pa los parámetros del cine clásico, sino que los refuerza. No debemos
dre es incapaz de soportar la situación y se suicida, mientras el hijo olvidar que una de las normas del clasicismo cinematográfico re
acaba recluido en un internado. Las intenciones de Zavattini/De side en situar al espectador dentro del espacio emocional del filme
Sica quedan perfectamente reflejadas en el título de la película, hasta acabar integrándolo.
que podría traducirse al castellano como Los niños nos miran: El modelo de construcción dramática configurado en I bambi-
mostrar el sufrimiento de unos niños que son capaces de contem ni ci guardan o, de Vittorio De Sica, no rompe con los principios
plar con amargura el mundo adulto. El tejido melodramático no del melodrama clásico, basado en los procesos de mediación ilu
está centrado en las diferentes casualidades que impiden a los pro sionista, sino que cambia las estrategias de focalización propias
tagonistas adultos conseguir la deseada felicidad, ya que el ele del género. El sufrimiento, que constituye el principal motor del
mento central del relato son los sufrimientos del niño protagonis relato, se desplaza hacia los personajes secundarios de la ficción, a
ta. Sin embargo, la apuesta de Vittorio De Sica no consiste — tal los que se les conceden plenos poderes para increpar a los perso
como señalaron ingenuamente algunos críticos de la época— en najes centrales. El sustrato de realidad que ofrece I bambini ci
delegar el punto de vista del relato en el niño, articulando desde guardano no está marcado por algunas escenas rodadas en exte
una supuesta conciencia infantil un falseado saber del mundo riores, en espacios de descanso pequeñoburgués — sobre todo
adulto, sino en mantener un saber omnisciente a partir del estilo unos parques públicos y una playa— } sino por el tono gris con que
indirecto libre, focalizado hacia el niño contemplado como sujeto está impregnada la atmósfera ambiental de buena parte de la pelí
determinante de la acción. Es decir, De Sica no pretende, a partir cula. Incluso los rígidos decorados neoclásicos del internado don
del talante objetivo que las imágenes poseen para el espectador, de se desarrolla la última parte del melodrama acaban convirtién
poner en evidencia la subjetiva interiorización del mundo practi dose en un espacio terriblemente frío, casi quirúrgico.
cada por el niño, sino que desea convertir a éste en centro de una
acción que siempre es vista desde el exterior. Así, resulta curioso
comprobar cómo, en muchas escenas en las que la cámara puede 6. La negación naturalista ele los valores.del fascismo; Ossessione
escoger entre subjetivizar la mirada del niño o la de un adulto, De
Sica prefiera crear un efecto de ocularización interna en torno al El acercamiento que los cineastas caligráficos realizaron hacia
adulto. El recurso de Vocalización narrativa permite al espectador las formas literarias del xix estuvo condicionado por una cierta
tomar conciencia de la angustia infantil como reflejo de los dis voluntad de aproximación hacia la hipotética escritura de la visi
gustos adultos.. En 1 bamhini ci guarda no, el tándem De Sica/Za- bilidad de la literatura realista del ottocento. Su modelo de adap
vattini diseñó los recursos dramáticos que debían conformar el tación se limitó a un trabajo de ilustración formal donde el paso
marco sentimental de sus posteriores obras neorrealistas. La loca de la imagen literaria descriptiva a la imagen fílmica sintética es
lización del relato hacia el niño les permitió'buscar nuevas formas tuvo muy condicionado por la exterioridad inmanente del hecho
para resaltar las emociones. En la mayoría de sus películas poste fílmico. Así, la capacidad del discurso descriptivo de los mundos
riores, los problemas sociales sufrieron un proceso de sentimenta- interiores sufrió un proceso de simpliíicación,
lización gracias al recurso de focalización del relato en torno a un Cuando los teóricos de la revísta Cinema empezaron a criticar
personaje o un animal indefenso — un niño en El ladrón de bici los excesos formalistas de los cineastas caligráficos, sacaron a la
cletas (Ladri di bicliclette, 1948) o un perrito en el caso de U hi superficie, de forma indirecta, un importante debate sobre la im
la Crisis de la rea lidad (1942-1945) 67
66 EL CINE ITALIANO, 1942-1961
portancia de la reelaboración crítica clel texto y sobre la forma en Dos Passos, Ernest Hemingway o John Steinbeck. Dicha irrup
que la irrupción de ias estructuras literarias en lo fíimico debía ción de la literatura americana coincide con el reconocimiento de
suponer sobre todo la presencia de un discurso ideológico. Para una admiración crítica hacia el cine americano por parte de algu
los jóvenes críticos de la revista Cinema — Giuscppe De Santis, nos futuros cineastas italianos. La fascinación por la cultura ame
Gianni Puccini, Massimo Mida, Mario Alicaria, Luchino Viscon-. ricana era debida — entre otros motivos— a la buena considera
ti o Michel angelo Antón ion i, la mayoría recién, graduados del ción ideológica que tuvo el tránsito de la política americana hacia
Centro Sperimentale— el mas interesante acercamiento entre el los postulados del new deal, que fue visto en Italia como un in
realismo del xix y el cine se había producido en el cine francés de tento de democratización. El acercamiento al modelo literario
los años treinta. Algunos cineastas como Jean Renoir, Marcel americano permitió que la cerrada cultura italiana pudiera salir
Carné o Juíicn Duvivier, considerados como impulsores del mo del provincianismo al que parecía estar condenada. La literatura
vimiento conocido como «realismo poético», revitalizaron algu americana generó en Europa un interesante debate sobre las nue
nos de los principios estéticos del naturalismo literario francés. vas formas de adscripción realista de la'novela moderna y sobre
Los críticos de la revista Cinema veían periódicamente dicho cómo éstas habían transformado las sólidas estructuras narrativas
cine, que se proyectaba en las salas de la Italia fascista, y dos de decimonónicas a partir de un cambio en las nociones de punto de
ellos habían colaborado de forma indirecta en su producción. vista y temporalidad.
Luchino Visconti había formado parte del equipo de ayudantes La primera película de Luchino Visconti, Ossessione, parece
de dirección de Jean Renoir en Una partida de campo (Une partie hacerse eco de las diferentes líneas que convergen en la discu
de campagne, 1936), ocupándose básicamente del vestuario, y sión. El filme se debate entre las formas propias de un naturalis
Michelangelo Antonioni había estado trabajando como ayudante mo proveniente del realismo poético francés y las de la novela
de Marcel Carné en el rodaje de Les visiteurs du soir (1942). Al americana. Inicialmente, Visconti y sus compañeros del grupo
acercarse hacia el naturalismo, el «realismo poético» del cine Cinema — Giuseppe De Santis y Gianni Puccini— querían ser con
francés no se había limitado a incidir en la visibilidad del mundo secuentes con sus postulados teóricos y trasladar a la pantalla la
según los postulados del relato novelesco, sino que había explo novela de Giovanni Verga, L'amante di Gramigna, sobre la que
rado los mundos originarios y las pulsiones de los personajes. Tal habían escrito un primer intento de guión. Para los representan
como ha destacado Juan Miguel Company, un cineasta como tes del grupo, adaptar Verga en Italia podía ser el equivalente de
Jean Renoir rompió con los elementos propios de la ilustración las adaptaciones de Maupassant o Zóla que se realizaron en
filmica al dar visibilidad a las pulsiones invisibles, permitiendo Francia. La obsesión de Visconti era la de conseguir llegar, a par
que los valores sintomáticos pudieran traducirse definitivamente tir de dichas adaptaciones, al ideal de un cine antropomórfico,
en la narración (Company, 1987, 29). modelo que había defendido en un mítico artículo-manifiesto de
En el terreno de las complejas relaciones entre el cine y la li la revista Cinema: «Al cine me ha conducido sobre todo la vo
teratura p rencor realistas, es preciso destacar un fenómeno de una luntad de contar historias de hombres vivos: de hombres vivos en
importancia determinante dentro del marco de la resistencia cul las cosas, no un cine centrado en las cosas por ellas mismas» (Vis-
c o n t i , 1943).
tural al fascismo: la fascinación por el modelo literario americano.
Entre los años 1930 y 1940, la literatura italiana vive la llamada Curiosamente, la primera película antropomórfica de Visconti
«era de las traducciones». Los escritores Elio Vittorini y Cesare no partió de la literatura verista, sino de una novela americana de
Pavese empiezan a traducir las obras de William Faulkner, John James M. Cain que le había proporcionado jean Renoir, El corte
68 EL C IN E ITALIANO, 1942-19 61 LA C R I S I S D E LA R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 69
ro siempre llama dos veces6 Vísconti utilizó el relato de James M. que prefiguran posibles salidas al margen de la pasión destructo
Caín como trama/plot, pero cambió el marco diegético, transfor ra. Los personajes son el de un homosexual apodado Lo Spagnolo
mando la América de la depresión en la Italia de los años cuaren — nombre que hace referencia a su posible participación en la
ta. A pesar de mantener, aparentemente, una serie de fidelidades guerra civil española— , que actúa como símbolo de la razón ante
estructurales en el desarrollo de los acontecimientos de la trama, la aventura irracional de los impulsos pasionales, y el personaje de
Visconti propuso una serie de variaciones fundamentales en el la prostituta Anita, con la que Gino se refugia para intentar olvi
sentido intrínseco del texto. Mientras la novela de jam es M. Cain dar a Giovanna.
es un detallado estudio sobre las ironías del destino, la obra de En Ossessione, Visconti exploró por primera vez su proyecto
Visconti se convirtió en el estudio de una pasión obsesiva. Los mimético, consistente en la elaboración de un mundo de la fábula
personajes del vagabundo Frank, la seductora Cora y el viejo gre- visto como una totalidad cerrada. Visconti construye una obra a
coamericano Nick, fueron sustituidos por unos personajes perfec partir de la elaboración de sofisticadas simetrías estructurales, uti
tamente enmarcados en la tradición italiana, Ossessione cuenta la lizando la realidad como simple sustrato referencia! y estilizándo
historia de Gino — Massimo Girotti— , un vagabundo que conoce la mediante los instrumentos de la materia de la expresión fílmica.
en una hostería a Giovanna — Clara Calamai— , que se ha casado Su preocupación no es la de disimular los diferentes procesos de
con un gordo usurero llamado Bragana. Giovanna ha hipotecado mediación de la escritura fílmica para dar más relevancia ai mun
su sexualidad poniéndola al servicio de la seguridad económica, do referencial anterior, sino la de dar homogeneidad al mundo
frustrando sus instintos. La presencia de Gino encenderá la pa construido. Si examinamos la estructura narrativa de Osessione
sión y planteará en ella un fuerte debate interno entre afianzar la veremos, tal como ha demostrado Lino Micciché, que está mili
seguridad a partir de la represión o lanzarse al peligroso barranco métricamente dividida en dos tiempos homogéneos, el primero
de la pasión. Giovanna caerá en los brazos de Gino y llegará a la dominado por el concepto de eros y el segundo por el de thanatos,
conclusión de que su amor sólo puede consumarse a partir del separados por un hecho fundamental que permanece elíptico, el
asesinato de Bragana. La pareja llevará a cabo el delito pero su si asesinato de Bragana. Cada una de las dos partes está estructura
tuación continuará desequilibrada, no pudiendo alcanzar la felici da de forma ternaria a partir de una alternancia de los conceptos
dad en una sociedad dominada por el contrato social. Vísconti su de pasión-liberación-pasión. Las escenas de pasión remiten a los
prime algunos momentos de la novela — como el primer intento personajes de Giovanna y Gino, las escenas de liberación están
de asesinato— y elimina algunos personajes secundarios clave, protagonizadas por los secundarios —Lo Spagnolo y Anita—
como el diabólico juez Sackett y el abogado Katz, pero introduce (M i c c i c h é , 1990,5.5).
dos personajes secundarios que actúan como alternativa a las de Otro factor determinante en la construcción realista de Osses
cisiones del protagonista, como hipotéticos polos de atracción sione es la relación que, en el interior de la película, se establece en
tre los personajes y el marco de la acción. Visconti quiso transfor
6. La novela de Jam es M. Caín había sido adaptada en Francia en 5939 por mar de forma radical el paisaje exterior del cine italiano. Si en ./
Pierre Chenal en la película Le demier lournant. Posteriormente, en Hollywood, bambtm a guardarlo, los exteriores naturales mostrados por De
Tay Garnett realizó una popular adaptación protagonizada por John Garfield y
Sica difícilmente trascendían el estricto ámbito pequeñoburgués
Lana Turner, El cartero siempre llama dos veces (The Postman AKvays Rings Twi-
ce, 1946). Bob Rafelson volvió a trasladar la novela a la pantalla en El cartero siem —el parque y la playa— . la Italia que muestra Visconti — cercana
pre llama dos veces (The Postman AKvays Rings Twice, 1981), protagonizada por al valle del Po—- está formada por tabernas, mercados y carreteras
fessica Langc y Jack Nicholson. suburbiales. Es una Italia provinciana, en la que han sido anuladas
70 EL CINE ITALIANO, 1942-1961 LA C R I S I S D E LA R E A L I D A D ( 1 9 4 2 - 1 9 4 5 ) 71
todas las posibles notas pintorescns. En Ossessione tanto los paisa ción en Ossessione de la idea de un cine antropomórfico, defendi
jes interiores como lovs exteriores han J e servir para describir la to da por Visconti, tampoco estaba demasiada alejada de la explora
talidad del mundo donde viven tos personajes. Visconti no hace ción que la novela contemporánea planteaba sobre la verdad del
más que aplicar las bases del realismo balzaquiano, según las cua hombre moderno como sujeto, examinando los condicionamien
les el marco debe servir para explicar los personajes que lo transi tos de su clase social y sus instintos primarios — el hambre y la se
tan. La diferencia, estriba en que Osscssione empieza a proponer xualidad— . Todas estas reflexiones nos encaminan hacia una pre
una transformación sutil de dichas ideas, ai empezar a dar una cier gunta clave: ¿qué modelo de (neo)realismo prefigura Ossessione?
ta realidad material a determinados objetos. La planificación de la Para comprender la auténtica dimensión del debate realista en
película, en la que sobresalen los planos medios y en la que espo el ámbito literario y sus posibles influencias en el cine, nos parece
rádicamente se utiliza la profundidad de campo, sirve para acen sumamente ilustrativo un fragmento del diario de Cesare Pavese,
tuar dicha relación entre los personajes y el contexto. La realidad redactado en 1941:
italiana aparece como la negación de todos los valores de la ideo
logía fascista. Tal como ha demostrado Yousscl: ishaghpour, la El naturalismo ha enseñado a los narradores —y ahora ya to
descripción de la pobreza sirve para destruir el mito del bienestar dos lo llevamos en la sangre— que nada que no sea acción debe
económico; la presencia del vagabundo contradice la idea déla Ita entrar en el discurso. Entonces se describía el ambiente, que era
lia responsable y trabajadora; el juego que establece con el adulte parte de la acción, y los acontecimientos, objetivamente; ahora
rio y la pasión destruye los cimientos de la familia; y la presencia tocio eso se describe mirándolo con los ojos del personaje; pero
todos admiten que ya no se deben hacer digresiones. Al igual que
del cosmopolitismo en el ambiente atenta contra el concepto ce
en el naturalismo el autor debía desaparecer ante la realidad, así
rrado de patria (Ishagih’Ouk, 1984, 172).
ahora debe desaparecer ante la mirada del personaje (Pavi-su,
Al plantear el estudio de una pasión obsesiva, Visconti se acer 1980, 239).
ca a una serie de motivos propios del naturalismo literario, como
el sentido del fatalismo o la idea de la destrucción del amor a par Aparte de proponer, de forma implícita, todos los elementos de
tir de una pasión trágica. El gusto por el formalismo estructural y un apasionante debate sobre la influencia de la inmanencia cine
la relación que se establece entre los personajes y el contexto con matográfica en la narrativa americana, el texto de Pavese permite
vierten Ossessione en una obra que traslada el modelo del realis que nos preguntemos hasta qué punto, en Ossessione, las digresio
mo francés a la idiosincrasia italiana, hasta el punto de acabar nes formales que evidencian la presencia de un autor — Visconti—
transfigurándola. Sin embargo, las cusas no son tan fáciles como entran en crisis ante la realidad o si, en cambio, se intenta sustituir
parecen. Si partimos del hecho de considerar la novela dejantes dicha realidad por la mirada del personaje. Visconti, tal como de
M. Cain como tributaria de la gran novelística americana moder mostrará en sus posteriores trabajos cinematográficos, fue un hom
na y su adaptación como representativa del influjo que ésta ejerció bre estrechamente ligado a la tradición decimonónica de la gran
en la intelectualidad italiana de la época, nos hallaremos ante la novela y en sus películas planteó un apasionante debate en torno a
difícil paradoja de encontrar una delinición para el modelo realis las ideas de mimesis —imitación de un mundo— , representación
ta del filme de Visconti. Es evidente que la novela de James M. — construcción de dicho mundo— y reproduccción técnica inhe
Cain entronca con una tradición behavourista, en la que las pul rente al fenómeno fílmico. Ossessione no rompe con el naturalis
siones características del naturalismo han sido sustituidas por un mo, ni introduce las formas narrativas de la novela moderna en el
universo determinado por las conductas. Por otra parte, la aplica cine italiano. Ossessione no representa, tal como ha destacado mu
72 IEL C I N 1• I T A L I A N O , 1 9 4 2 - 1 9 6 1
ca la verdad y se propone desvelar la realidad que la historia ofi asesinato de un líder comunista de la resistencia. El resultado ini
cial ha ocultado; el horror. El cineasta contempla el horror sin en cial consistió en la configuración de un filme ele episodios titulado
fatizarlo, ni subrayar sus electos, lo considera como un hecho ubi inicialmente Storie di ieri. Al final se optó por la realización de una
cado en una realidad histórica pe declamen te delimitada. El película de ficción lineal, concebida como una crónica coral sobre
efecto final implica la perdida de la inocencia del cine ante la la vida romana bajo el control de las tropas nazis. Al no existir pe
crueldad del mundo real. lícula virgen se utilizaron colas de negativo y muchas escenas se
En el cine de ios años de la liberación surgió una nueva iluminaron con focos rudimentarios. No se pudo trabajar el soni
conciencia moral que resuiúyd la nobleza perdida del ser huma do, ya que fue imposible alquilar aparatos de grabación y todo el
no. Las ficciones cinematográlicas remitieron a las crueles histo material sonoro tuvo que sincronizarse en el proceso de montaje.
rias del ayer que aún estaban vivas en la mente de numerosos ci Roma, ciudad abierta se filmó en decorados reales y sus protago
neastas o a las historias de un miserable presente que aparecía nistas fueron dos actores que empezaron a emerger en el cine de
lleno de claudicaciones morales. El neorrealismo sentó las bases ios años cuarenta, Aldo Fabrizzi y Ana Magnani ( P i r r o , 1990).1
de una ética y de una estética que marcarían profundamente las Roma, ciudad abierta fue la segunda película italiana que se estre
formas del cinc italiano de los años de la liberación. nó durante la liberación — la primera se llamó oportunamente La
Roma, ciudad abierta, considerada como película inaugural del vita ricomincia (1945) y lúe dirigida por Mario Mattoli— . El íilme
neorrealismo, proponía, también, un nuevo modelo de cine de la de Rossellini abrió la vía del compromiso neorrealista del cine ita
experiencia. Tal como ha afirmado Fran^ois Debreczni, en los liano frente su propia realidad.
años de 1.a inmediata posguerra, «la historia provocó la irrupción La irrupción de Roma, ciudad abierta en el depauperado cine
de la realidad en la conciencia de los cineastas y generó un dolo italiano de la posguerra f:ue un acontecimiento inesperado, que
roso examen de conciencia» ( D h b r l c z n í , 1 9 6 4 , 4 0 ). José Enrique rompió muchos pronósticos y expectativas. La obra fundacional
Moa tercie considera que, después de que Ossessione, de Visconti, del neorrealismo no nacía de las reflexiones teóricas sobre el realis
ofreciera una primera constatación de la realidad reaparecida y mo social impulsadas por los combativos críticos de la revista Cine
convertida á ojos de los personajes en pulsión destructora, Roma ma, sino de las investigaciones llevadas a cabo por Francesco De
ciudad abierta fue el momento de la toma de conciencia. Rosseili- Robertis y Roberto Rossellini en el cine documentalista fascista. La
ni tomó conciencia de la nueva situación histórica, ios personajes presencia de Rossellini como director de la primera película impor
parecen asumir la tragedia para abrirse al futuro y el espectador tante del cine italiano de la liberación también fue una paradoja 2
«recibe el inequívoco mensaje de que no es posible la mera
constatación de la realidad, por cruda que esta sea, sino el com 1. La aventura del rodaje de Roma, ciudad abierta inspiró al escritor Ugo Pi
promiso con ella, a costa de cualquier sacrificio. Dicho compro rro una apasionante novela llamada Celuloide, que posteriormente ha sido adap
miso es capaz de afectar a todos: curas, madres de familia, mili tada al cine por Cario Lizzani, en un filme imposible. La novela Ha sido traducida
al español: Ugo Pirro, Celuloide, Madrid, Ediciones Libertarias, 1990.
tantes comunistas, etc.» ( M o n t l u d l , 1 9 9 2 , 5 3 ). 2. El hecho de que un cineasta que había trabajado en el cine de propaganda
En la génesis de Roma, ciudad abierta desempeñó un papel fascista como Rossellini hiciera la primera película de la liberación fue pura e.1 cine
determinante el guionista comunista Sergio Amidei, que propuso italiano una de las muchas paradojas del cine del período. La mayor paradoja se
a Rossellini la realización de un cortometraje documental sobre vivió un año después, cuando se estrenó la primera película italiana sobre la acti
vidad de ios partisanos, Pian delle si elle {1946), dirigida por G ¡ergio Ferroní, uñó
un cura fusilado por los alemanes. El proyecto se fue completan de los pocos cineastas que había colaborado de forma implícita con el gobierno
do con otros casos reales de los tiempos de la ocupación, como el de la República de Saló.
76 ET. C I N E I T A L I A N O , 1 9 4 2 - 1 9 6 1 L OS A Ñ O S D E L N E O R R E A L I S M O ( 1 94 . 5 - 1 9 4 9 ) 77
3. Antes de rodar Roma, ciudad abierta, Rossellini se apartó del cine propagan
dístico para filmar Desiderio {1943), un filme que contaba con un guión de Giuseppe
Roma, ciudad abierta (1945), de Roberto Rossellini De Santis y que respondía en muchos aspectos al espíritu del grupo concentrado
en romo a la revista Cinema. La película fue interrumpida por la guerra y acaba
da por el ayudante de dirección Marcello Pngüero.
LOS AÑOS D E L N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 79
78 EL C I N E I T A L I A N O , 1 9 4 2 - 1 9 6 1
capturar la verdad de dicha microhistoria era preciso que el filme rica al servicio de ninguna idea política, sólo quería explorar el pa
se transió miara en crónica. En Roma, dudad abierta, Rossellini se sado para comprenderlo mejor ( G a l l a g h e r , 1.994). El cineasta no
preguntó de qué forma podía documentalizarse la ficción cinema pudo llevar a cabo la ruptura con las convenciones de la dramatur
tográfica y creó un efecto de crónica que acabó constituyendo un gia hasta su película posterior, Paisa (1946).
camino práctico de aproximación hacia la historia. Roma, ciudad abierta se gestó bajo el fascismo y se rodó en los
Roma, ciudad abierta rompió radicalmente con algunas conven días anteriores a la liberación del 7 de mayo de 1945, reflejando el
ciones de la escritura fílmica e inauguró la estética del rechazo o el espíritu que marcó el proceso de reconstrucción social de la in
arte pobre, que privilegiaba la escasez de medios técnicos como ca mediata posguerra. El fracasado primer gobierno de Ferruccio
mino hacia la autenticidad y como elemento de transformación de Parri y el primer gabinete presidido por el democristiano Alcide
los aspectos propios de la espectacula rielad. Si estudiamos la es De Gasperi quisieron privilegiar la unidad política. En el filme de
tructura dramática y narrativa de Roma, ciudad abierta nos encon Rossellini, el cura Don Pietro y el comunista Manfredi no presen
traremos con otra de sus nuil tipies paradojas: la estética documen tan discrepancias ideológicas, ya que persiguen un mismo objeti
tal se filtra en el interior de una ficción construida a partir de los vo: luchar contra el nazismo. La idea de la reconciliación histórica
parámetros característicos de la retórica de la persuasión, cuya de Roma, ciudad abierta es cercana a la idea de historia defendida
principal finalidad consiste en convertir al espectador en partícipe por Benedetto Croce. Para el pensador idealista, el factor deter
de la idea de la unidad de las fuerzas políticas en la lucha contra el minante de la unidad italiana reside en el concepto de nación. Se
fascismo ( Q u i n t a n a , .1995, 6 6 ). Roma, ciudad abierta no propone gún ios postulados de Croce, la historia humana es la lucha del
la anulación de los procesos de identificación. Los personajes no hombre por la libertad. El fascismo situó la historia italiana en una
rechazan su condición de prototipos y las tensiones dramáticas es especie de paréntesis, la liberación lúe un intento de recuperación
tán dominadas por una visión maniquea de la existencia. Para con de la unidad perdida. La imagen final de Roma, ciudad abierta re
seguir que la pretendida toma de conciencia de la realidad llegara fleja el ideal de la reconstrucción. Los niños, sin padres, deben le
a ser efectiva para el espectador, fue preciso utilizar como recurso vantar los cimientos de la nueva Italia.'
los mecanismos de implicación sentimental propios de la retórica
cinematográfica. Tal como declaró su guionista, Sergio Amidei,
durante el rodaje de Roma, ciudad abierta no existía ninguna 2, La reconstrucción de la industria cinematográfica
conciencia de renovación del cine ( F a l d in i y F o f i , 1979, 92). El
historiador norteamericano Tag Gallagher ha demostrado que en El desorden político de los años de la inmediata posguerra
la película se produjo una tensión entre los conceptos dramáticos provocó un importante hueco en la industria cinematográfica y
de Sergio Amidei y las ideas documentalistas de Rossellini. Amidei permitió que aflorasen una serie de películas que no estaban suje
consideraba que para recuperar moralmente la verdad, era preciso tas a las convenciones tradicionales de producción. En un texto
realizar una película que planteara la idea ..de la maldad del nazis de 19.55, diez años después de Roma, ciudad abierta, Roberto Ros
mo, la lucha heroica del pueblo romano y mostrara de que manera sellini recordó las condiciones del rodaje:
el triunfo de la libertad podía proyectarse en el futuro. El guión de
bía poseer una estructura melodramática, sus personajes debían En 1944, inmediatamente después de la guerra, en Italia todo
ser estereotipos y despertar un sentimiento de concien dación so estaba destruido. En el cine también, como en todas partes. Casi
cial en el espectador. Rossellini no quería hacer una película retó todos ios productores habían desaparecido. Hubieron algunos in-
80 EL O N U ITALIANO, 1942-1961 LOS AÑOS D E L NEORREALISMO (1945-1949) 81
temos pet o las ambiciones eran muy limitadas. En dichos momen 1989, 33). Los cambios que se produjeron en la industria cinema
tos disfrutamos de una gran libertad, la ausencia de una industria tográfica «acabaron siendo tan superficiales como los cambios po
organizada favoreció la creación de empresas menos rutinarias. líticos de los anos de la liberación que confluyeron en el triunfo de
Toda iniciativa era buena. Fue esta situación la que nos permitió la Democracia Cristiana, que aseguró la permanencia en el poder
realizar obras experimentales, y rápidamente el público percibió
del capitalismo y de la Iglesia» ( A d a m s Sitney, 1994, 10).
que dichas películas, a pesar de su aspecto, podían llegar a ser
A pesar de que el neorrealismo como tendencia estética consi
obras importantes, tanto en el terreno cultural, como en el terreno
comercial (Rosshlj.ini, 195.5, 3-4). guió un gran eco internacional, la rehabilitación industrial del
cine italiano no se debió al neorrealismo, cuya importancia indus
El texto de Rossellini alimenta la leyenda de un neorrealismo trial fue secundaria, sino a la recuperación de un modelo de cine
heroico que contribuyó a que el cine renaciera en medio de un popular que ya existía previamente. Así, no tardaron en volverse a
paisaje en ruinas. Como toda leyenda, esconde una cierta verdad. rodar las películas musicales inspiradas en la gran tradición ope
Los impulsores de las películas neorrealislas no fueron los siste rística italiana, las comedias regional istas y posteriormente los fil
mas de producción característicos del aparato industrial, ya que mes de capa y espada. En 1945, año de crisis absoluta del sistema
éstos estaban en fase de reconstrucción, sino a lg u n o s productores de producción, se rodaron 27 películas. El filme que consiguió si
aislados que aceptaron promover una serie de proyectos organiza tuarse en los primeros puestos de popularidad fue Roma, dudad
dos por los propios cineastas, por cooperativas vinculadas a parti abierta, pero la mayoría de las películas producidas aquel año con
dos políticos o por algunos guionistas. Las principales películas tinuaban viejas tradiciones. El cine regionalista de carácter folcló
del neorrealismo no surgieron de la nada sino que establecieron rico estaba representado por las películas de Gianni. Franciolini
vínculos y pactos con los viejos aparatos productivos del fascismo. — Not te di (en?posta— , Mario Bonn arel — El rapto de las sabinas
La historia de la producción de las obras más significativas del (II ratto delle sabíne), con Totó— o Mario Mattoli — Partetiza ore
cine italiano de la posguerra fue una historia llena de confluencias 7— . Luigi Zampa, con Un americano in vacama, y Giacomo Gen-
impensables, casamientos heterogéneos y pactos entre personali tilomo, con O solé mió (.1946), empezaban a dejarse contagiar de
dades políticamente muy alejadas. algunos rasgos neorreaiistas, pero recurrían también a elementos
Pocos días después de la liberación de Roma, en junio de 1944, característicos del cine de género, especialmente la comedia y el
se reunió una comisión para decidir el futuro del cine italiano. Su melodrama. El mismo año 1945, Mario Soldad rodó en unos estu
presidente era el almirante americano Ellery W. Stone, que de dios cercanos a Milán una obra altamente sugestiva, Le miserie di
claró: «E l llamado cine italiano ha sido inventado por los fascistas, Monsú Travet, donde continuaba proponiendo una cierta renova
por lo cual tiene que ser destruido» ( Q u a g l i e t t i , 1980, ,37-38). ción a partir de la utilización de los modelos literarios y represen
Finalizada la guerra, en Italia, no podía sobrevivir ninguna em tativos del pasado. En Le miserie di Monsú Travet propuso una re
presa potente dedicada a la producción de cine. En Roma sólo flexión sobre las formas de la teatralidad, en un espíritu no
existían los pequeños estudios de la periferia, el material de Ci- excesivamente alejado de Dróle de drame (1937), de Marcel Car
necittá fue trasladado a Alemania y el estudio convertido en un né, o de ciertas películas de Sacha Guitry.
campo de refugiados. No existían laboratorios y era muy difícil Entre los grandes éxitos comerciales de 1946 figuraron E l bar
disponer de los medios necesarios para rodar con comodidad. E n bero de Sevilla (II barbiere di Siviglia), de Mario Costa, y Rigolet-
tre 1945 y 1947, el cine italiano contempló el desorden del viejo to, de Carmine Gallóne, filme que permitió la recuperación en el
aparato del cine fascista, pero nunca llegó a destruirlo ( F a r a s í n o , panorama de la liberación del autor de algunas de las obras más
82 EL CINE ITALIANO, 1942-1961 LOS AN OS DEL N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 83
aparatosas del cinc épico-fascista. Galione planteó una fusión en una serie de ventajas para que la industria americana pudiera pe
tre los elementos típicamente operísticos y la estética neorreaiista netrar con toda comodidad en Italia. Entre dichas medidas figu
en Davúnli a lid tramwa lutia Roma, en la que Alina Magnani raba la abolición de la autarquía en la distribución de películas ex
era una diva operística que interpretaba 1 osea en los años de la tranjeras y la abolición de la lasa de doblaje que protegía la
ocupación. El éxito popular de los modelos operísticos estuvo exhibición del cine italiano. Gian Piero Brunetta cree que la ley
acompañado del resurgir de tas películas ele aventuras ambien transformó el mercado cinematográfico en un «mercado en el que
tadas en la Edad Media como í <’<uaveva de Brabante (Genoveíía se abrió la veda, donde a partir del liberalismo económico se pro
di Brabante), de Primo Zcgiio, o en la Rusia de la zarina Catalina, dujo una colonización absoluta de la exhibición y una relación de
como La jiglia del capitana, de Mario Carne riní, en la que se adap dependencia casi total» ( B r u n e t t a , 1993, .162). Las 65 películas
taba una obra de Pushkin. La película más taquillera del año fue producidas en Italia en 1946 tuvieron que luchar contra las 850
Águila negra (Aquíla ñera), de Riccardo Preda, otra adaptación de películas importadas, de las cuales seiscientas eran americanas.
Pushkin realizada con notable habilidad por uno de los grandes
El desconcierto finalizó en 1947, cuando el sistema productivo
maestros tic! cine de aventuras italiano. La .Iglesia católica empe
se reorganizó y se solidificó un cierto neorrealismo industrial. El
zó a desempeñar un cierto papel en la producción impulsando al problema de la materia prima para la realización de las películas
gunas películas que mostraban la lucha por la liberación italiana
dejó de existir y fue posible trabajar a partir de unas bases econó
corno la lucha de unos mártires que defendían ios valores de la
micas más o menos sólidas. Algunas productoras, como la Lux, se
caridad cristiana. Un ejemplo representativo es Montecassino, de
convirtieron en el germen de donde acabaron surgiendo los gran:
Arturo Gemmíti. des productores del cine italiano de los años cincuenta, como Car
Para poder implantarse en el. mercado interior, el neorrealismo io Ponti y Di no De La u rentas.4 Dichas productoras empezaron a
tuvo que superar otro gran handicap heredado de las estructuras comprender que el cine neorreaiista podía llegar a ser un produc
fascistas; la recuperación comercial de las películas americanas
to comercial y subvencionaron algunos de los títulos más carismá-
que durante cinco años no se habían exhibido en Italia como con
ticos del cine neorreaiista del período.
secuencia de la política autarquista. El mes de septiembre de En 1948, el índice de la producción de películas italianas bajó
1944, Cari Miliken, secretario de Will Hays, envió una carta a considerablemente: sólo se hicieron 48 películas frente a las 69 del
Francis Cok de Wolf, jefe de la División de Telecomunicaciones año anterior. Entre las diez películas italianas que más dinero re
del Departamento de Estado americano, donde reconocía que caudaron, sólo dos eran neorrealistas: E l ladrón de bicicletas, de
Italia, antes de las disposiciones contra c.1 monopolio del cine Vittorio de Sica, y Sin piedad (Senza pietá, 1948), de Alberto Lat-
americano de 1938, era uno de los mejores mercados europeos, tuada. Otras producciones como La térra trema, de Luchino Vis-
por lo que era necesaria una nueva y rápida penetración de pelí conti, constituyeron un gran fracaso comercial. El descenso de la
culas americanas. El gobierno americano exigió que se derogasen producción coincidió con la creación de la Oficina Central de Cí>
todas la limitaciones y que se diera vía Ubre para que las principa
les empresas americanas establecieran sus propios canales de dis 4. La Lux, {undada por Rica ido Gualino, í ue una productora clave en el ca
tribución (Bkuní-tta, 1996, K)). La petición no tai do en hacerse mino hacia la industrialización del cine italiano de la posguerra y en !a introduc
efectiva. En octubre de 1945, el consejo de ministros aprobó un ción de la estética neorreaiista en las estructuras del cine comercia!. Algunos ci
decreto ley que derogaba las bases de la política cinematográfica neastas prestigiosos provenientes del caligrafismo, como Lattuada, Cnslcilani o
Soldad, se decantaron hacia la estética neorreaiista en obras gestadas en la Lux.
fascista — la censura y los premios gubernamentales— y proponía La productora desapareció a mediados de ios años cincuenta.
84 E L C I N E I T ALI ANO, 1 9 4 2 - 1 9 6 1 LOS AÑOS D E L NEORREALISMO (19 45-1949) 85
nematografía, que impulsó una serie cié leyes insuficientes — una había aislado a los ciudadanos en una anarquía radical y había
de ellas exigía la programación obligatoria de las películas italia transformado los rincones más miserables de la periferia en un tea
nas durante un período de 80 días a! año— que aseguraron la tro absoluto y exclusivo de la vida italiana» ( A n d r e o t t i , 1952),
protección frente a la invasión americana. Los profesionales que En 1.949, el gran hito comercial del cine italiano fue Fabiola (1949)
habían trabajado en el desarrollo del modelo neorrealista empeza de Alessandro Blasetti, donde a partir de la reconstrucción de las
ron a observar con cierta preocupación la nueva política cinema persecuciones de que fueron objeto los primeros cristianos, se ha
tográfica y temieron que la ansiada reconstrucción industrial de- cía una apología de los valores eternos que defendía la Democra
mocristiana fuera un duro golpe contra su modelo de cine. La cia Cristiana. Fahiola,, coproducida con Francia por la Universalia,
situación se agravó cuando la película de Pietro Germi juventud fue un hito de la nueva política industrial.
perdida (Gioventú perduta, 1947), donde se denunciaban los crí
menes cometidos por los jóvenes burgueses en los años de la pos
guerra, fue censurada. Pocos días antes de las elecciones de abril 3. El neorrealismo social: lucha de clases y resistencia
de 1948, en el periódico L ’Uniia, el autoproclamado Movimien
to para la Defensa del Cine italiano publicó un manifiesto donde La lucha de la resistencia no fue sólo una batalla contra los ex
denunciaba la imperfección de los acuerdos sobre la protección cesos del invasor alemán y sus servidores fascistas, sino también
del cine italiano, la incontrolada invasión de películas extranjeras, una lucha por la utopía de una sociedad renovada. Fue una re
la compra de salas cinematográficas por grupos extranjeros, la vuelta popular en la que participaron los opositores a Mussolini
anulación de créditos banca ríos de ayuda a la producción y el re que durante el fascismo estuvieron fuera déla ley, los jóvenes edu
nacimiento de la censura ( Q u a g l i e t t i , 1980, .55). El manifiesto cados en el fascismo que comprendieron que después de la inva
fue el inicio de una serie de campañas que culminaron con una sión aliada en 1943 se abría una nueva vida y los antifascistas que
gran manifestación de los profesionales del cine en la Piazza del habían apoyado el régimen y que empezaron a actuar como con
Popolo de Roma, el 20 de febrero de 1949. La protesta fue un gri versos ( Q u a z z a , 1976, 115). La euforia de los años de la liberación '
to de alerta contra la política cinematográfica impulsada por el go estuvo controlada por el pactismo, por la búsqueda de un consen
bierno democristiano de Alcide Da Gasperi y en especial por el so que evitara la ruptura y esbozara el camino para la reconstruc
subsecretario de Cinematografía, Giulio Andreotti. ción económica de Italia. Entre 1945 y 1947, una serie de pelícu
El mes de julio de 1949, Giulio Andreotti puso en marcha una las utilizaron el tema de la resistencia como punto de partida para
nueva ley que imponía el control gubernamental sobre la produc plantear una reflexión política. Los teóricos de la izquierda, que
ción italiana. Para conseguir el acceso de una película a las salas, durante el fascismo se concentraron en torno a la revista Cinema,
el productor debía presentarla seis veces a los organismos guber aprovecharon la situación para participar en algunas obras que, si
namentales, que en la práctica actuaban como organismos censo guiendo el modelo del cine de la implicación inaugurado con
res. Andreotti quería potenciar el desarrollo industrial del cine Roma, ciudad abierta, incorporaron la estética documental y esta
italiano reduciendo la realización de las obras propiamente «neo- blecieron las bases de un neorrealismo social que, a partir de la
rrealistas», que comprometían la imagen de Italia en el extranjero. concien dación y el compromiso, forjaba la utopía de una transfor
En un representativo artículo titulado «E l cine italiano no es co mación de la realidad. El reto fue equivalente al objetivo que ha
munista», Andreotti manifestó su rechazo contra un cine que «ha bía planteado el escritor Elio Vittorini en el terreno de la literatu
bía transformado a las chicas italianas en comerciantes del placer, ra social. Vittorini consideraba que la nueva cultura neorrealista
86 EL C I N E ITALIANO, 1 9 4 2 - 1 9 6 1 LOS AÑ OS D E L N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 87
no debía limitarse a consolar al hombre, sino que debía acabar li comentario de la película estaba escrito por el teórico comunista
berándolo de la miseria y de ia opresión. Umberto Barbare. Giorni di gloria fue un documento testimonial
La primera obra que, <lesde una perspectiva marxista, abordó el sobre las esperanzas y las ilusiones generadas durante la lucha por
tema de la resistencia fue un filme documental distribuido en epi la liberación, un documento que pretendía recuperar el pasado
sodios: Giorni di glorió ( .1945), de Mario Serandrci. El historiador para sentar las bases de un discurso revolucionario sobre el pre
Marcel Oms definió la película como la primera obra concebida y sente.
realizada «en un contexto favorable que permitía poner en práctica El desbarajuste económico del sector cinematográfico y las es
los conceptos elaborados en la revista Cinema, durante el régimen de peranzas de cambio de la izquierda incentivaron la existencia de 11
Mussolini» ( O m s , 1991, 103). Las precisiones de Oms son, hasta solé sorge ancora (1946), de Aldo Vergano, el filme que «introdu
cierto punto, exageradas, ya que el documentaiismo de Giorni di jo en el cine italiano una investigación de carácter marcadamente
gloria se hallaba muy lejos del debate sobre el realismo surgido alre social» ( L iz z a n i , 1992, 97). La película, que fue financiada por 1a
dedor ele Ossessione y era más acorde con un determinado modelo de Asociación Nacional de Partisanos Italianos, estuvo realizada por
documentaiismo partisano nacido en la posguerra como oposición un curioso cineasta marxista que en los años veinte participó en
a la visión oficial de los acontecimientos difundida en los noticiarios un atentado frustrado contra Mussolini. En ella colaboraron algu
del IsíítutoLuee. En la producción de Giorni di gloria, participaron nos elementos de orientación comunista,-como Giuseppe D e San
algunos de los nombres clave del grupo Cinema. El di rector/coor tis y Cario Lizzani, junto con el crítico y teórico cinematográfico
dinador Mario Serandrei era un individuo con una cierta sensibili Guido Aristarco. U solé sor ge ancora propone una «visión opti
dad documental partidario de un realismo que resucitara la fealdad mista de la resistencia como prefiguración de una sociedad nueva
del mundo real. Giuseppe De Santis se encargó de la coordinación que está a punto de realizar el sueño de la unidad de las fuerzas
general y del rodaje de las escenas finales, que querían testimoniar populares» ( G o b e t t j , 1970, 5 5 ). La escena clave muestra la eje
la euforia por la reconstrucción nacional en los años de la libera cución, bajo los fusiles nazis, de un cura y de un partisano, perso
ción. Luchi.no Viseen ti, que estuvo encarcelado durante los años de najes que casualmente interpretaron los futuros directores, vincu
la ocupación, se responsabilizó de filmar un episodio documental lados al Partido Comunista italiano, Cario Lizzani y Gillo
sobre el proceso y ejecución del antiguo jefe de la policía de Roma, Pon teco rvo. La escena posee puntos de contacto evidentes con
Pietro Caruso. Finalmente, Marcello Pagliero —el actor que inter Ro/na} ciudad abierta; sin embargo, el discurso social de U solé sor-
pretaba el papel del comunista Manfredi en Roma, ciudad abierta y ge ancora se halla en las antípodas del de Rosseüini, ya que analiza
que completó Desiderio, de Rosseüini— filmó una serie de entrevis la sociedad a partir de su división vertical en clases. Vergano glo
tas que pretendían reconstruir los trágicos hechos acaecidos en la rifica la acción del proletariado, de los campesinos y de la Iglesia
Fossa Aclseatina de Roma, donde los nazis, conu» represalia al ata en la resistencia, pero acusa a los representantes de la burguesía
que de la resistencia contra un camión militar, decidieron ejecutar a de colaboracionismo con los alemanes para poder defender sus
diez presos por cada soldado alemán muerto. El hecho trágico se intereses económicos. El cineasta marxista no cree en el mito ecu
convirtió en el gran símbolo de la represalia nazi sobre Roma; El ménico de la gran reconciliación de la posguerra, no puede con
cebir la resistencia como una prolongación del Risorgimento, por
que la c o n s t r u c c ió n de Italia está sujeta a los intereses de clase.
y. Los trágico? hechos de la Fossa Acke-atíhn inspiraron, años Más tarde, ia pe
lícula Muerte e/i Roma { R epresalia. 19725, de Georjjc Pan C o sm a h 's . protagoni Curiosamente, el pacto social que propone Jl solé sorge ancora» es
zada por Richard Purton y Marcello Ma.ctroiamii. representativo de la política llevada a cabo por el PCI y su líder
88 l’ J. C I N E I T A L I A N O , 1 9 4 2 - 1 9 6 1 L OS A Ñ O S D H L N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 . 9 4 9 ) 89
Pal miro Togliatti en la inmediata posguerra. Para conseguir su ción en el montaje narrativo y la épica de la representación propia
crecimiento como partido, los comunistas tuvieron que disputar del cine popular, inspirándose en las bases teóricas establecidas
se con la Democracia Cristiana los sectores intermedios que inte por el cineasta ruso Vsevolod Pudovkin y en los modelos narrati
graban la sociedad italiana, que, desde una perspectiva política, vos creados por el cine americano.
eran indecisos ( G i n s b o r g , 1989, .109). En Usóle sorge ancora, Ce Los escritos de Pudovkin fueron traducidos al italiano en los
sare, el hijo del encargado de una fábrica, duda entre quedarse en años treinta por Umberto Barbaro y tuvieron un peso decisivo en
los brazos de la pal roña o en los de una humilde costurera. La pe la formación intelectual y teórica de algunos nombres clave de la
lícula demuestra cómo el futuro puede llegar a estar en las manos posguerra ( B a r b a r o , 1977, 25-3 O).6 En su teoría, Pudovkin afir
de un proletariado no corrompido. ma que la obra de arte es la expresión moral del mundo de su au
El discurso dogmático de II solé sorge ancora constituye la base tor. El problema del cine reside en que durante el proceso de
de una obra donde el realismo es casi epidérmico y se justifica por construcción de la obra intervienen numerosas personalidades,
el modo en que el director utiliza la realidad social como justifica por lo que es absolutamente necesario expresar el eje moral a par
ción. La película parte de la estética del rechazo propia del neo tir de una tesis o tema que confiera la organicidad necesaria a la
rrealismo — rodaje con escasos medios y recursos íílmicos— para obra de arte film tea. Pudovkin cree que el realismo se halla inscri
avanzar progresivamente hacia la búsqueda de un cierto lirismo to en la propia naturaleza fotográfico-reproductora del cine; sin
épico orientado hacia la utopía de un futuro distinto. El lirismo embargo, dicho realismo se supera a sí mismo mediante el monta
acaba colocando 11 sote sorge ancora en un territorio ambiguo, je, que es capaz de crear tanto una realidad deseada como úna rea
donde se reflejan influencias expresionistas en el uso contrastado lidad artística. Para elaborar su teoría, Pudovkin partió del estu
de la iluminación. Vergano pone en escena el horror como si se dio del modelo americano impuesto por Griffith y destacó dos
tratara de una composición operística, adquiriendo un tono de factores primordiales: la linealidad del montaje narrativo y ei de
irrealidad escénica. Así, vemos a un oficial nazi paseando en una sarrollo de la individualidad interpretativa en un contexto épico.
carroza con su amante, por un paisaje nocturno iluminado, a con Dichas ideas se oponen al montaje intelectual de choque y a la teo
traluz, por unas antorchas. El oficial, que recuerda a un moderno ría del tipo, defendidas por Eisenstein ( P u d o v k i n , 1984).
Nerón, dispara contra dos desprotegidos partisanos atados a unas Giuseppe De Santis propone en Caccia tragica una película de
estacas. Para denunciar los abusos del nazismo, Aldo Vergano se tesis que denuncia las estrategias del capitalismo durante la posgue
ve obligado a reconstruir un simulacro de la puesta en escena ar rra para impedir la creación de cooperativas agrarias en el norte de
tificiosa del cine fascista. En II solé sorge ancora, la exultante ro Italia. En el nivel narrativo, se estructura en torno a dos líneas para
manidad reivindicada por la Italia fascista aparece transfigurada lelas que confluyen en determinados momentos — recordemos
en un auténtico aquelarre. cómo Pudovkin, en La madre (Mat, 1926), siguiendo el modelo de
II solé sorge ancora creó el concepto de neorrealismo social, Griffith, jugó constantemente con el montaje paralelo de diferentes
pero no planteó un debate teórico sobre las formas de dicho cine líneas narrativas— , La puesta.en escena potencia un reducido nú-
social. En su primera película como director, Giuseppe De Santis,
6. Umberto Barbaro tradujo y prologó en los años treinta los principios teóricos
el más aventajado teórico del grupo Cinema, llevó a la práctica sus
de Pudovkin y los reivindicó en el Centro Sperimentale. Pura comprender la signi
fundamentos intelectuales. De Santis, que contó con la colabora ficación de la obra de Pudovkin en el cine italiano, es interesante la reflexión que
ción de Michelangelo Antonioni, Cario Lizz-jni y Cesare Zavatti- propone el propio Umberro Barbaro en los textos recogidos en su obra El cinc o ei
ni, investigó en Caccia tragica (1947) las potencialidades de la ac desquite marxiste del arle, Barcelona, Gustavo Güi. 1.977..
90 L OS A Ñ O S D E L N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 91
EL C IN E ITALIANO, 1942-1961
mero de individualidades que están continuamente en tensión fren medida que evolucionaban ios debates en el interior del neorrea
te a las grandes masas que continuamente inundan los encuadres y lismo, chocó con una nueva concepción del realismo, más cercana
dan al filme un tono cercano a la épica popular. La historia avanza al concepto de preexistencia de lo real, que en el terreno filosófi
en una serie de conflictos y casualidades que remiten iiacia las for co habían defendido los representantes de la fenomenología. En
mas más tradicionales del relato épico, instauradas porei cine ame dicho modelo, el cineasta parte de la descripción de los fenóme
ricano. Cacda Inigica presenta como punto de partida la historia de nos y se opone a cualquier forma de explicación y de análisis de
dos jóvenes recién casados, Míe hele y Giovanna, que viajan en un conceptos preestablecidos. El mundo es una realidad existente
convoy que traslada los fondos de una cooperativa agraria. Los jó anterior a cualquier hecho artístico. El principal esfuerzo del cine
venes son atracados por unos bandidos, entre ios que se encuentra consiste en descubrir el contacto primitivo con el mundo y ofrecer
Alberto, un antiguo compañero del protagonista que se ha dedicado al individuo un camino práctico de acceso hacia las ideas. Su pro
a la delincuencia y que esta unido sentimentalmente a una antigua blema básico reside en cómo situar las apariencias por encima de
espía nazi, conocida con el sobrenombre de Liiii Marlene. El con las estructuras, de qué forma llegar a dar más importancia a la
flicto entre ios cuatro protagonistas esta perfectamente insertado en existencia que a la esencia.
un conflicto social de dimensiones más amplias. Los bandidos ac Las obras clave de la nueva concepción realista fueron Paisa
túan a las órdenes de los capitalistas de la zona que quieren frenar (1946), una crónica coral sobre el sentimiento de alteridad duran
el movimiento cooperativo. De Santis relaciona los hechos indivi te el proceso de la liberación italiana, y Gcrmania, armo zero/
duales con los hechos colectivos, la Italia de la reconstrucción con Deustcbland im Jahre Nuil (1947), la más dura descripción que se
la Italia de la ocupación que no ha podido ser borrada de la memo ha llegado a filmar nunca sobre la corrupción moral de la posgue
ria. Las diferentes acciones parecen proyectarse hacia un futuro sin rra. Ambas fueron dirigidas por Roberto Rosseliini. En ellas, el di
conflictos, donde puede materializarse la ansiada transformación rector continuó explorando la estética documental de la inmedia
de la realidad. tez de Ron/a, ciudad abierta, pero empezó contemplar la realidad
como un espacio de búsqueda, un lugar de tensión permanente
con el universo de la ficción. Las dos rompieron con la idea de
4. Paisa y Gcrm ania, afino zero, eí pórtico a la modernidad progresión del clima dramático imperante en la narrativa clásica y
construyeron una nueva forma de dosificación de la emoción, a
El concepto de tesis, que Giuseppc De Santis recicló a partir partir del concepto de revelación. En las.dos películas, Rosseliini
de las teorías de Pudovkin, exigía que en la construcción de la modifica también el concepto de implicación del cine neorrealis-
obra fílmica se llevara a cabo la transformación de los fundamen ta. Su preocupación no reside en generar un proceso de con cien-
tos de la realidad en beneficio del peso de la ideología. El conflic dación social, sino en la constatación de unos hechos, procuran
to dramático y la definición psicológica de los personajes debían do proporcionar al espectador un mayor grado de libertad frente
encargarse de poner de relieve dicha ideología. En el neuncalisnu) a las formas del discurso.
social, la realidad no era más que la materia prima que nutría el Paisa fue concebida cómo una película episódica sobre la tra
imaginario del artista/cineasta que acababa construyendo un gicomedia de la liberación. Los hechos filmados testimonian la
mundo donde, a partir de la estilización y la expresión, las ideas voluntad de establecer una crónica sobre lo que ocurrió entre ju
elaboradas acababan siendo legibles. Dicha concepción materia lio de 1943 y la primavera de 1945. Rosseliini parte déla idea cro
lista del realismo, que, como iremos viendo, fue perfilándose a cían a de la incompleta teoría del Risorgimento, que contempla la
92 EL C IN E ITALIANO, 1942-1961 LOS AÑOS DEL N E O R R E A L I S M O (1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 93
liberación como una conquista fundamental de la libertad y un cine behavourista que privilegiara los factores reproductores del
paso decisivo en la construcción de la nueva Italia. El discurso his medio y en el que la realidad dejara de ser modificada por la psi
tórico de Paisa gira en torno a los problemas de alteridad y de ex cología y las exigencias del drama. Dicho modelo se hallaba en la
tranjería. La vida cotidiana italiana se complica en el marco de la novela americana moderna. El propio Rossellini, en una entrevista
posguerra debido a los difíciles problemas de comunicación con de 1959, reconoció su proximidad con dicha narrativa: «Necesito
los individuos provenientes de una nueva cultura que irrumpe en • ver a las personas y las cosas de cada lado, debo poder servirme del
la historia italiana mientras se lleva a cabo la liberación del fascis corte, de la elipsis y del monólogo interior. No para hacer, para en
mo. La película está dividida en seis episodios, en los que recorre tendernos, lo mismo que Joyce, sino aquello que hizo John Dos
mos, a partir de un movimiento ascendente, el mapa geográfico de Passos... La cámara debe seguir insistentemente a los personajes.
la Italia liberada: Sicilia, Ñápeles, Roma, Florencia, la Romana y el La angustia contemporánea deriva de no poder rechazar el ojo im
valle del Po. placable del objetivo» ( A f r a , 1987,47-48). Paisa abre por primera
Paisa introduce una nueva concepción del sentido de la inme vez las puertas de la modernidad en el cine italiano al proponer
diatez fílmica como factor determinante de la estética documen una primera ruptura de los códigos del Modo de Representación
tal. Los seis episodios van precedidos de unas imágenes docu Institucional. A medida que se desarrolla la película, la estructura
mentales de los noticiarios de la época. Rossellini quiere oponer la narrativa de los diferentes episodios se abre y rompe con los recur
maerohistoria o historia oficial a la microhistoria cotidiana. La sos melodramáticos d éla narración cerrada. Así, en Paisa existe un
historia oficial es enfática y revela cómo el documental histórico fuerte contraste entre el episodio de Roma, el más melodramático
ha generado unos códigos de realidad que lo convierten en testi del filme, y el del Valle deí Po, que presenta una interesante ruptura
monio de una verdad y, en consecuencia, en reflejo de la historia. de la continuidad narrativa. Rossellini ponía en crisis la idea de la
La microhistoria defendida por Rossellini está más cercana a la acumulación dramática de los acontecimientos para introducir una
crónica y se propone reconstruir el pasado como un presente que nueva forma de emoción en el relato, a partir de una estructura ba
acontece en el mismo momento de la visión del filme. La crónica sada en los conceptos de la espera y de la revelación. Los persona
se caracteriza por la fidelidad a los documentos que certifican la jes esperan que algo imprevisto cambie su existencia. Dicho acon
existencia de unos hechos y por la anulación de cualquier inten tecimiento imprevisto surgirá misteriqfsamente y será capaz de
cionalidad propia del discurso en beneficio de la inmediatez. Ros replantear toda la emoción dramática de cada episodio. La revela
sellini muestra la tragedia del pueblo italiano en su lucha contra la ción, concepto en el que nos detendremos más adelante, demues
degradación y recuerda a los espectadores que las guerras no tie tra de qué modo el sentido de las cosas sólo puede ser descubierto
nen héroes ni protagonistas, sólo víctimas. instantáneamente, de forma aleatoria,'Rossellini empezó a solicitar
André Bazin, cuyo posicionamíento crítico estaba cercano a la la participación activa del espectador frente al relato cinematográ
fenomenología, fue uno de los primeros teóricos en precisar que fico.
«la estética del cine italiano, sobre todo en las partes mas elabora En los seis episodios de Paisa, Rossellini integra los personajes
das de las obras de cineastas tan conscientes de sus medios como en un paisaje real estableciendo una interesante relación de conti
Rossellini, no es más que el equivalente de la novela americana» güidad y reconstruye el pasado como si éste acaeciera en el presen
( B a z i n , 1981, 283). Bazin cuestionó la existencia de un cine que te. En Gemianta, anuo zero, el paisaje en ruinas del Berlín de la
quisiera crear la ilusión de lo real a partir del artificio, según los es posguerra es el protagonista de un filme donde la crónica ya no
quemas propios de la novelística del xix, contraponiéndolo a un parte de la anulación del efecto de reconstrucción del pasado, sino
94 E L C I N E I T A L I A N O , 1942-1.96.1. LOS AÑOS D E L N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 95
102 E L C IN E IT A L IA N O , 1942-1961
LO S A Ñ O S D E L N E O R R E A L IS M O (1945-1949) 103
mentos representativos propios de la tradición popular italiana,
especialmente la comedia regionalista, las dos películas estable campañas del norte de África y en Rusia. Con la llegada de la li
cen un interesante puente de conexión con las comedías de beración espera ganarse un puesto, pero acabará viviendo con la
Frank Capia. angustia de ser la única persona castigada por su pasado fascista,
La voz en ofj que nos introduce en el relato de Vivir en paz re mientras contempla cómo la mayoría de dignatarios municipales,
cuerda que los hechos contados son reales y que, en el pueblo que estuvieron vinculados con el viejo orden, son los que gobier
montañés donde transcurre la acción, la ocupación alemana se nan con el nuevo régimen. Desde una perspectiva política, Anni
vivió con .relativa tranquilidad. El único alemán destinado en el difficili propone una reflexión sobre el transformismo, sobre la
poblado era íntimo amigo del médico, dei cura y de Zio Tigna imposibilidad del hombre de vivir atendiendo a las reglas de ho
— Aldo Fahrizgt— , un hombre con fuerte arraigo popular que nestidad y conciencia civil. La película tuvo su continuación en
pretende vivir al margen de la política. No obstante, ias cosas se Anni fadíi (1953).
complicaron el día en que las hijas de Zio Tigna acogieron en su La influencia del lenguaje hollywoodiense marcó también los
casa a dos soldados americanos evadidos. El tono interpretativo primeros años de la actividad del cineasta genovés Pietro Germi,
de Vivir en paz es crispado y caricaturesco. La amable anarquía que debutó como director con II testimone (194.5). En sus prime
apolítica dei lugar recuerda el desorganizado universo de Vive ras obras, su visión de la realidad estuvo profundamente marcada
como quieras (You can’t take it with yon, .1938), ya que, en el nivel por ias convenciones expresivas del cine clásico americano adop
estilístico, la película está más cerca del cine de Frank Capra que tando una posición crítica frente a las diferentes teorías del neo
del modelo neorrealista, con el que solamente enlaza a partir de la rrealismo. La película más representativa de dicha etapa fue In
construcción de un mundo referencia! inspirado en la historia re nome delía legge (1948), donde trasladó los códigos del western al
ciente. Noble gesta es como una variante feminista de Caballero paisaje siciliano para construir una obra de denuncia contra la
sin espada (Mr. Smith Goes to Washington, 1939), de Capra, am omnipotencia de. la mafia agrícola. Un juez desplazado a un pue
bientada en una Roma periférica. Angelina — Anna Magnani— es blo de Sicilia se encuentra solo ante las fuerzas caciquiles que do
una popo ¡a na que.el día en que los panaderos se niegan a distri minan la región y que utilizan a la mafia para atemorizar a la po
buir pan con las cartillas de racionamiento va hasta los Fabricantes blación. Sí sustituimos la figura del juez por la de un sberiff y
y descubre un problema de mercado negro. Su sentido de la reali trasladamos las estructuras caciquiles a un poblado dei oeste ame
dad y su capacidad de liderazgo harán que le propongan ocupar ricano, nos encontraremos ante un brillante western, resuelto con
un escaño de diputada en el parlamento, que acabará rechazando gran pulso dramático. Germi no se limita a utilizar el western
por no saber leer ni escribir. Anna Magnani es la mujer qualunque como modelo estructural, sino que propone también un intere
cuyo sentido común acaba convirtiéndose en una eficiente arma sante trabajo en torno al árido paisaje siciliano, su conflictivídad y
política. las relaciones que los personajes mantienen con el ambiente. Su
Zampa cambió de tono en Anni dificili (1948), donde partió de observación del paisaje se mueve entre la composición simbólica
una novela del escritor siciliano Vitalino Branca ti —con quien rea propia del western y la visión antropológica de un cineasta que in
lizaría diferentes colaboraciones en años posteriores— para con daga en un mundo desconocido.
tar la historia de un individuo que nunca encuentra el momento Los modelos estructurales americanos, especialmente algunos
del triunfo. El protagonista es un hombre gris que durante el fas códigos de la serie negra, también marcaron la etapa neorrealista
cismo participa como voluntario en la guerra de España, en las de Alberto Lattuada, un cineasta personal formado en el cine ca
ligráfico. Tanto en II bandito (1946) como en Sin piedad, Lattuada
L OS A Ñ O S D E L N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 )
104 EL C IN E IT A L IA N O , .1942-1961
10. El tema de! estraperlo en la pineda de Tombolo había sido tratado un año
antes, con menos sordidez y con un cierto tono populista, porG iorgío l'erroni en
Sin piedad (1948), de Alberto Lattuada
Towlvtln, paradiu» /u ro {1 V-i71.
106 EL CINE ITALIANO, 1942-1961
L O S A Ñ O S D HL N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 107
morados mueren abrazados en un gesto de amor interracíal eter sobre los amores de un chico de diecisiete años del barrio romano
no.11 Filippo María de Sanctis considera que en el cine de Lat de Porta di San Giovanni con su guapa vecina. La película se di
inada existe una cierta fidelidad temática centrada en torno a
vide en cuatro grandes escenas situadas entre el verano de 1943 y
unos personajes que por culpa de unas motivaciones sociales em la posguerra. A pesar de que, en su momento, fue acusada de obra
prenden una caída al vacío. Dichos personajes recogen una tradi
involucionista, Bajo el sol de Roma posee una frescura especial,
ción heredada de Dostoievski, son «humillados y ofendidos» ( D e debida principalmente a la vitalidad con que Casteilaní procura
S a n c t i s , 1965, 23).
capturar la expresividad de los rostros adolescentes. El cineasta
Entre sus dos aportaciones neorrealistas, Lattuada rodó El de
no olvidó ni el intimismo ni la caligrafía, que se pusieron de mani
lito de GiovanniEpiscopo\ donde el humillado era un discreto fun
fiesto en el estilizado trabajo de la cámara (Menon, 1983, 133).
cionario —Aldo Fabrizzi— que sucumbía bajo el amor destructor
Bajo el sol de Roma avanza algunos elementos estilísticos del pos
de una especie de ángel azul — Yvonne Sansón— . La película es
terior cine de Pier Paolo Pasolini.
la adaptación de una novela de Gabrielie d’Annunzio y constitu
A pesar de que Mario Soldati quiso mantenerse al margen del
yó un acto de afirmación del pasado caligráfico del cineasta. La
neorrealismo, realizando un cine cerrado en su rica cultura litera
contribución más interesante de Lattuada al neorrealismo fue una
ria, filmó por encargo de Cario Pon ti una obra remotamente cer
obra de ambiente histórico, que adaptaba una nóvela de Riccardo
cana al neorrealismo, Fuga in Francia (1948). La película muestra
Bacchelli, sobre los conflictos obreros del fin de siglo, El molino la fuga hacia Francia de un transfigurado asesino fascista que aca
del Po (11 muiino del Po, 1948). La película establecía una tensión
ba infiltrándose en un grupo de emigrantes del sur que atraviesan
entre los elementos novelescos de carácter caligráfico y la recons
las montañas en busca de trabajo. El tema, cercano en algunos as
trucción de carácter realista sobre la situación del campo italiano,
pectos a El extraño (The stranger, 1946), de Orson Welles, pre
afectado por las primeras revueltas socialistas, durante el reinado
senta una construcción dramática propia del cine de intriga y un
de Umberto I. El molino del Po, que es el punto de referencia es
trabajo estilístico de carácter expresionista alejado de los postula
tético de algunas obras sobre el nacimiento del socialismo agrario
dos neorrealistas; sin embargo, Fuga in Francia participa de la vo
rodadas en los años setenta, como N avecen lo (Novecento, 1977),
luntad moral de resucitar y denunciar los fantasmas del pasado.
de Bernardo Bertolucd, plantea un apasionante debate sobre de
La estética neorrealista también marcó la obra de algunos ci
qué forma la óptica cultural y moral que dominó la estética neo-
neastas de la vieja guardia que intentaron hacer un cine donde la
rrealista podía llegar a indagar en una posible reconstrucción so
realidad social servía de coartada estética a una apología de los va
cial del pasado. Lattuada se adelantó en la exposición de un pro
lores católicos. Alessandro Blasetti, que en el cine italiano de la
blema que, a partir de Senso (1954).. de Luchino Visconti,
restauración volvió a ocupar un papel central gracias al éxito de
generaría una gran polémica, principalmente en la ortodoxia crí Fabiola, lo hizo con Un día en la vida (Un grorno nella vita, 1946),
tica neorrealista.
sobre los problemas de un grupo de monjas que cobijan a un gru
Renato Casteüani también se acercó a los postulados neorrea- po de resistentes. F^l filme nos muestra la ejecución de unas mon
listas en bajo el sol de Roma (Sotto il solé di.Roma, 1948), un filme
jas, desde una perspectiva que puede considerarse como antitéti
ca a la ejecución de 11 solé sorge ancora, de Vergano, ya que está
í i . La película tic Lattuada fue la primera obra que mostraba a un negro ame envuelta en un sentimiento redencionista, ortodoxamente católi
ricano enamorado de una blanca. Cn Lstados Unidos, el Código Hays prohibía de co. Augusto Genina, autor de auténticos panfletos fascistas como
forma explícita ios amores ímíci raciales.
Sin novedad en el Alcázar (L ’assedio dell’Alcazar, 1939), después
108 I*L C I N E I TALI ANO, 1 9 4 2 - 1 9 6 1 los años del neo rrea lism o (1945-1949) 109
ele haber estado apartado de la profesión por el nuevo régimen, como la construcción de una poética de la representación cercana
filmó un universo rural de marcada inspiración neorrealista en a las estructuras novelescas del xix, mientras que las segundas in
Cielo sobre el pantano (Cíelo sulla palude, 1948), una obra biográ dagan en una concepción del realismo entendido como imitación
fica sobre santa María Corel ti que en el nivel estilístico presenta fílmica del mundo exterior. La diferencia fundamental entre las
una interesante depuración formal, que a su vez parece preludiar dos opciones parte de la confianza que los autores depositan en el
un cierto modelo de cinc católico marcado por el peso de la feno mundo preexistente como posible transformador de las ideas pro
menología que aparecerá en Francia a inicios de Jos años cincuenta. pias de la imaginación. Para unos, una obra realista puede partir
de la ilusión referencia! más absoluta proponiendo la construc
ción de un mundo cerrado, estéticamente auto suficiente, que fun
7. L a térra trema, la ilusión neorrealista y la subjetividad poética cione como reflejo del mundo exterior. Para otros, el azar, los he
chos aleatorios que pueden producirse durante el proceso de
Los diferentes cineastas que introdujeron la óptica neorrealista rodaje/construcción de la película, pueden transformar la arqui
en unas formas narrativas heredadas de la tradición clásica del cine tectura de la obra.
americano, 110 establecieron ninguna posible reconversión de los En La térra trema (1948), Luchino Visconti participa plena
procedimientos propios del Modo de Representación Institucional; mente del debate entre las dos categorías de neorrealismo y pare
sólo cambiaron el paisaje o marco de la acción abriéndolo hacia un ce quererlo conducir hacia un grado elevado de teorización ai
mundo referencia! cercano a la realidad, donde podían llegar a re contrastar la subjetividad poética propia del creador de formas es
flejarse los problemas sociales derivados de una determinada situa téticas con la pretendida objetividad neorrealista que parecía que
ción histórica. El estudio de las películas de Lattuada, Germi, Zam rer privilegiar los aspectos reproductores del cine. Superados los
pa y Castellani sirve para descalificar los absurdos mitos en torno a postulados naturalistas que habían marcado su debut con Osses-
la improvisación, la no actuación de no profesionales y la no cons sione, Visconti investiga, en su segundo largometraje, ios recursos
trucción estética de las películas neorrealistas. La mayoría de las pe de la construcción realista preguntándose de qué forma la verdad
lículas neorrealistas de género sitúan en un primer término las es estética, construida por la cámara cinematográfica, puede identi
tructuras dramáticas, a las que dan más valor que a! mundo rea!, ficarse con la verdad histórica propia de la experiencia, de qué
que es utilizado como paisaje social o histórico. Pal como afirma forma lo vivido durante la representación puede acabar confun
Paolo Bertetto, el cine neorrealista es una «lormn lingüístico-repre diéndose con la propia vida. En La térra trema, Visconti radicaliza
sentativa históricamente determinada de reconducción de los he algunos de los postulados estéticos y temáticos clave del neorrealis
chos a las convenciones» ( B e r t e t t o , 1983, 31). mo para descubrir cómo la ilusión referencial puede convertirse
A partir del estudio de las diferentes tendencias, podemos ob en un eficiente vehículo transmisor de una ideología y en un ele
servar — tal como hemos planteado en el primer capítulo— que mento constructor de una poética que «desrealiza la propia reali
las películas neorrealistas se agrupan en dos categorías: aquellas dad filmada» (M icciché, 1990, 182).
que diseñan un orden de la representación homogéneo respecto al En la arquitectura form.al de La térra trema aparecen todos los
presunto orden de las cosas y las que privilegian la función repro elementos que han configurado la estética de la contigüidad y del
ductora del cine, su capacidad referencia! y sus posibilidades de rechazo característica del cine neorrealista. La película se rodó
creación de un verosímil. Las obras de la primera categoría se ubi íntegramente en escenarios naturales de Sicilia; ninguno de los ac
can en una tradición que considera el realismo cinematográfico tores era profesional; los diálogos, de naturaleza antiliteraria, se
L OS A Ñ O S D HL N E O R R E A L I S M O ( 1 9 4 5 - 1 9 4 9 ) 111
EL CIN E ITALIANO, 1 9 4 2 - 1 9 6 1