Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Epicteto
Por ello es indispensable no dejarse llevar por las impresiones provocadas por
los sentimientos y las pasiones. Una regla concreta y práctica para tomar
decisiones importantes, que tengan que ver con la propia vida o la de los
demás es esta: para tomar las decisiones es preciso esperar los mejores
momentos, es decir cuando hay serenidad y claridad; y nunca hay que
replantearse tales decisiones en los momentos negativos, de oscuridad,
dificultad, prueba, agitación de las pasiones o en presencia de sentimientos
turbulentos.
EL PRUDENTE:
I. ES RESERVADO
II. ES CUIDADOSO
1. Los Padres hablan porque desean lo mejor para sus hijos. No lo hacen
porque desean perjudicar o impedir que se hagan cosas por cuenta propia.
IV. ES CAUTELOSO
V. VISIÓN ESPIRITUAL
1. El hombre prudente ve el camino del Señor como verdadero y recto, tal cual
es el Señor y no hay otra forma de transitarlo sino a través de una vida
totalmente entrega a él en santidad.
4. El prudente reconoce que hay un mundo espiritual mucho más real del que
estamos acostumbrados a ver y sabe que espiritualmente se ganan las batallas.
1. Vivimos tiempos como los del profeta, que los que deben administrar
justicia al pueblo se dejan sobornar y se han vuelto enemigo de lo bueno. Jesús
nunca tuvo temor a hablar, pero ante algunas autoridades del momento
guardó silencio.
2. Llega el día cuando Dios hará justicia, el prudente ese día no interferirá al
Señor, guardará silencio y dejará que él haga como quiera, pues ya habló
cuando era tiempo de hablar.
Se debe:
Amar la prudencia.
Buscarla.
Atesorarla y vivirla todos los días de nuestra vida. Al final siempre triunfa. El
prudente sabe con paciencia esperar su recompensa. Parece que tarda, pero
llega seguro.
El Prudente, llega a ser uno que ha vivido toda una vida de prudencia, de
sensatez, de cordura, ésta, no se consigue de forma instantánea.