Sunteți pe pagina 1din 30
Leopoldo Valinas Coalla LA UNIDAD LINGUISTICA EN TORNO A LA DIVERSIDAD. Discurso de ingreso ala Academia Mexicana de Ia Lengua 10 de marzo de 2011 Respuesta de Concepeién Company Company 8 & Universidad Nacional Academia Mexicana ‘Aatnoma de Mexico ‘tela Lengua Mésieo, 2011 ws Valiias Colla, Leopao Tawnidadngistearatrnoala ders sce. sodeingresoain Aademia Mexicana dela Leng, 10 ‘marzo de 201 / Leopoldo Valias Coalla respuesta ‘ie Concept Company Company Meco UNAM, Direecion General de Publicaciones Fomento Eo ‘al: Academia Mercana dela Lengua, 2011 mp. ISON 978-507.02247058 1. Academia Mexicana dels Lengua, 2. Espatot + Sociedatles 3, Discursos mexicanos. 1 Company ‘Company, Concepcin. tt Primera ediciin: 27 duo de 2011 DIR © Ussvensinay Nucions AUTONOMA HE MExIC0 Cooedinain de Dies Carat Direcein General de Publicaciones Fomento Editorial (Giudad Universitaria, 4510, México DF. DLR. © Acaonais Mexicans ae ta Lass Liverpoot 7, col Juren, 6600, Mésico, DE Coordinacién editorial: Leone! Rivers (Giada de eine Eric May Focracin: Escban Granados Prohibit reproduci alo pari por cuslguir medio, sore excita el alae os dorechs patios Isa o7e-607 2768 Impresoy hecho en México/ Made and rind Mave Sefior director de la Academia Mexicana de la Lengua, don Jaime Labastida: Sefiores académicos: Respetable ptiblico: Inrropuoci6N ‘Un diame enteré que en México habia dos grupos de estudiosos de los fenémenos del lenguaje. Unos que se Hamaban hispanistas, y otros que eran nombrados indigenistas. También me enteré que su diferencia era tun poquito més que meramente de objeto de estudio 0 de metodologia. Unos, los pri- 7 meros, se dedicaban basicamente a las letras ytenian como variables nodales: la perfecta definicién, la produccién estética y la homo- geneidad; sus centros de trabajo estaban, en México, en las escuelas 0 facultades de letras o literatura. Porst parte, los segundos, se interesaban en la oralidad y tenfan en la indefinicién, en las discusiones tecricas y en las diferencias sus puntos de referencia. Su. prictica se relacionaba fundamentalmente con la antropologia. También me enteré que yo era indigenista. Término que, debo decir, me parecia implicar cierta carga pe- yorativa (lo cual a mf en lo personal nunca me ha preocupado), Lo curioso esque en la antropologia, indigenista si era un término con cierta carga despectiva. Por mi puede haber tantos tipos de estu- diosos como sea, pueden focalizary priorizar (¢ incluso excluir) lo que sea, pueden creer ‘estar convencidos de lo que sea, pero es la 5 lengua, en absolutamente todas sus dimen- siones y alcances, un universo de objetos de investigacin preciso y nitido. En este sentido s6lo hay una lingiifstica, tan amplia como Jo son los hechos de la lengua y tan rigida y ‘exacta como los principios y los modelos lo permiten...0 lo obligan. ‘Yaqui estoy, en este lugar, en esta solemni= sima ocasién para dar mi discurso de ingreso ala Academia Mexicana de la Lengua. Dis- curso que me permitiré ocupar la silla xxmt, silla que ocupara antes muy dignamente don Andrés Henestrosa y masantes don Francisco Santamaria, insigne lexicégrafo. Discurso que, ademas, representa la declaracién ex- plicita de mi compromiso de trabajar para esta noble corporacién. Discurso mediante el cual, también, hago paiblico mi sincero agra- decimiento (ante testigos) a los académicos {que pensaron que yo podia llenar el perfil de lingitista con conocimiento de las lenguas 9 indigenas mexicanas, que la Academia pon- deré como necesario, y porque depositaron su confianza en mf proponiéndome al pleno para ocupar la silla xxi —muchisimas gra- cias don Emesto de a Pei, dofa Julieta Fierro, doita Goncepcién Company~. Por supuesto también agradezco al pleno por creer que lo que sé puede ser provechoso para las tareas que la corporacién se ha impuesto y por el apoyo que todos me han dado a lo largo de este aito. Qué honor. Yhhe pensado que una de las mejores ma- neras de hacer patente mi compromiso y de mostrar mi agradecimiento es hablarles de ‘cémo veo los fenémenos de la lengua, como es que entiendo la plural realidad lingiistica de México y la relacién del espafiol con las lenguas indigenas. Pero antes, si me lo permiten, creo que ces del todo pertinente recordara don Andrés Henestrosa que, como ya mencioné antes, 10 ‘ocupé de manera por demas destacada la silla xxi, 1. Don ANpais HeNESTROSA Don Andrés Henestrosa fue un gran poeta, narrador y ensayista mexicano. y zapoteco (de sangre, cultura e idioma). Crecido con el siglo xx (si, en el México barbaro) vivi6 toda su niiiez y parte de su adolescencia en Ixhuatan, en el istmo de Tehuantepec. Tuvo como tinica lengua al zapoteco de la planicie costera (0 divaza) pero también tuvo el“don de las lenguas’ ~ignorando la parte mi- lagrosa divina- con el que aprendié espaol. Lengua que comenzé a utilizar yatardiamente, de joven aqui en la ciudad de México. Pero no la aprendié nada més para hablarla © para evitar las burlas y los menosprecios.. 0 para poder comunicarse. No. Se apropié del espanol para jugar con él, para doblarlo y cstirarlo, para encontrarle sus esquinas y sus rincones, para convertir las palabras “como 1 dijo en uno de sus poemas~ en pequefias balsas préximas a naufragar su contenido... Lo volvis suyo para expresar sus emociones, sus temores y difundir conocimiento sobre la historia, sobre la literatura, sobre la politica... y sobre su ser zapoteco y sobre los suyos. Politico, historiador riguroso y periodista del diario, Reconociéndose orgullosamente bilingiie, don Andrés no desaprovechs oca- sién alguna para expresarse en zapoteco. Afirmaba que sualma tenfa dos mitades, una indigenay otra hispanizada. El se decia indio hispanizado. ¥ nunca olvid6 ni sus raices ni su pasado, ampli pasado porque estaba armado por esas dos mitades. Investigador de siempre, y comprometido con su gente, su verdadera gente, propuso un alfabeto para el zapoteco de la planicie costera y elabors un breve vocabulario zapoteco-espaiiol. Gants y escribié tanto en su lengua materna 2 (la familiar y comunal) como en su lengua adquirida. Fue un extraordinario difusor de lasculturas. Su obra Los hombres que disper la danza, como sabemos, es referencia obligada cuando se habla de literatura mexicanay de literatura indigena... y de zapotecos. Traduca del zapoteco al espanol? No creo. Pienso que cada mitad de su alma hablaba por si misma. Decfa lo que queria decir en la lengua en la que lo podia decir, Y asf como fue autor de una de las obras mis bellas de la literatura latinoamericana, a decir de los que saben, Retvato de mi madre (carta a Ruth Dworkin) también lo fue de una, gran cantidad de notas periodisticas, ensayos, articulos y relatos dispersos en las paginas le muchas revistas y periédicos. Don Andrés fue zapoteco desde nifto y para siempre, y “mexicano integro” (como €l decia) desde que aprendié espaiol. Su ‘aturaleza dual fue esencial para convertirse 13 ‘en uno de los mas importantes hombres de letras mexicanas. Ademés de recibir nu- ‘merosas distinciones, fue miembro de esta corporacién siendo el segundo en ocupar Ia silla xm, 1o cual hizo durante 48 aftos Fue, en esta corporacion, en esta Academia Mexicana de la Lengua, el séptimo biblio- tecario-archivero, y tanto por su biblioteca personal (inmensa) como por su obsesién por'lalectura, el poeta espanol Rafael Alberti Jo apods “El gran indio biblioteco”. Su discurso de ingreso a esta Academia Mexicana fue Los hispanismas en el idioma za- poteco. Qué conste que pudo haber hablado deliteratura,de historia o deun tema en donde el espaiiol fuera el tema central, Pero no. Don Andrés no podfa ni ignorar ni esconder su esencia dual. ¥ habl6, en su diseurso de ingreso, de su lengua materna. Compartié con losacadémicos (y de hecho con todos) la sonoridad de su zapoteco, la inteligencia de “4 suidioma, junto con los recursos gramaticales para asimilar (adecuando y amoldando) Jas palabras castellanas que acompariaron la realidad que se les impuso a los indigenas desde el periodo novohispano. 2. EL ESPANOL YAS LENGUAS INDIGENAS Porque, como sabemos, en México, el espa iol corre por todas partes... bueno, por casi todas partes. No es el tinico idioma usado en México... y nunca lo ha sido yjamés lo sera. Existen cerca de ocho millones de mexicanos {que tienenal espaol, en México, como segun- do idioma, que son bilingties, que aprendieron a hablar espafiol a golpe de vara y escarnio (porque en México no existe un solo lugar en donde se enseiie espariol como segunda lengua a los hablantes de lengua indigena). Estos cerca de ocho millones de mexicanos hablan, ademas del espanol, una de las 364 ariantes lingitsticas indigenas. Término ~este, 15 €l de variantes lingiiisticas~ que suaviza la discusién politica sobre el mimero de idiomas que se hablan en México y, ademas, oculta cl desinterés ¢ irresponsabilidad oficial por los fenémenos y hechos lingifsticos que, por cierto, incluyen al espaol Estos mexicanos bilingties (que saben escuchar, hablar, que piensan, son y actéan en dos idiomas) participan de dos culturas, de sus detalles y peculiaridades, Pero gra- cias a ciertos estereotipos culturales que se reproducen a diario (presentes en el Tizoc de Pedro Infante, en la Maria Candelaria de Dolores det Rio yen Ta mismisima india Marfa, entre otros y muy variados personajes mas) se mantiene y fortalece la idea de que las Jenguas indigenas son dialectos, que no son ‘otra cosa que idiomas incompletos inttiles , Jos mas, son impronunciables o de plano feos ("zPara qué aprendes la mazahua?”). A tal ‘grado que hay gente, entre ellosintelectuales, ‘queafirma que con las lenguas indigenas no se pueden expresar conceptos abstractos. Esto es totalmente falso (por no decir os- tentosa estupidez) y facilmente demostrable. Desde el punto de vista de las ciencias del Ienguaje no existen ni idiomas completos ni incompletos, ni bonitosni feos, ni mejores ni peores, ni tinos filos6ficos ni unos ms meta {f6ricos. Toda valoracién, absolutamente toda valoracién, en To positivo 0 en lo negativo, surge como resultado de las estrategias iden titarias de las personas, del deseo, del poder © por el gusto que se tiene por excluir. Es imposible medir la completitud, la belleza © la bondad de algo, mucho menos de un. idioma. Dejando afuera la belleza y el si es mejor © peor (porque estos valores son totalmente subjetivos e indemostrables), permitaseme decir algo puntual sobre la completitud. Todo idioma tiene absolutamente todo lo W que necesita para cumplir rigurosamente con todas sus funciones sociales. No sobran. géneros ni concordancias, no faltan tiempos ni pronombres ni preposiciones. ‘Dos de los cuatro componentes de la len- gua, la gramatica y €1 médulo fonolégico (el que, dicho de manera simple, tiene que ver con la pronunciacién), son fijos, cerra- dos; por naturaleza relativamente pequefios yeonocidos por los hablantes (aunque nun- ca de manera consciente). En cambio el Uxicoyla produccién lingiisticalos otros dos componentes- son, mas que incompletos, infinitos. El primero, el Iéxico, es un capital «que circula, que se pierde, que constantemente se crea, que ¢s apropiable e intercambiable, Las palabras corren, yuelan, cambian sus significados. En este sentido, las palabras no son de nadie ni propiedad de ningiin idioma, Como antes lo era el dinero, estan a la vista yal portador. La produccién lingitistica, por 18 su parte, es lo dicho, lo decible, lo dicho sin haber sido pronunciado ylo verdaderamente imposible de decir. Es lugar del encuentro y de conflictos entre la identidad y sus eas, entre las proposiciones sociales “Io que Jos sujetos quisieran deciy las disposiciones gramaticales ~1o que la lengua les permite decir- entre la égica del mundo yla tiraniade las lenguas. ¥, por supuesto, es el lugar en €l que aparecen y juegan un importante rol los hablantes, los sujetos sociales. Nosotros. Y cada uno de nosotros representa, de manera muy simple, el lugar de encuentro deo social con el pensamiento ycon lalengua, 3 deci, Con aquello que nos es externo, con. ‘aquello interno y con la gran intermediaria y factor aghtinante. Ni hablamos por hablar ni lalengua noses opcional. Al hablaractivamos ‘nuestra naturaleza social, ponemos en juego las normas, las estrategias, las pretensiones, nuestro conocimiento del mundo. Habla- 19 ‘mos con oraciones, no con palabras. Con ideas verbalizadas e intenciones falsamente escondidas. En uno y otro caso, nada sobra, nada falta Por ejemplo, el tarahumara de Tonachi lengua hablada en el estado de Chihuahua-, no tiene un término genérico pararbol. Por Jo tanto no se puede preguntar zqué érbol es ese? Esto, en consecuencia, obliga a que los hablantes de este tarahumara tengan desde ‘muy temprano, desde la nite, desde donde ‘comienza su siempre, un amplio conocimiento de los sirboles y de sus nombres. El espaiiol, ‘en cambio, sicuenta con el término genérico Gzbol pero esta falsa ventaja provoca que la absoluta mayoria de la gente (sobre todo la urbana) ignore la diversiad arbérea. El arbo- lito de navidad es simplemente un arbolito.. yl de la noche triste, un drbol Enespafiol tenemos dos pronombresde ter cera persona, 4y ila, dos primeras personas 20 del plural, nosotrasy nosotros. Su diferencia es el género gramatical (no el sexo). Elmixe de Tlahuitoltepec, por otra parte, también tiene dos pronombres de tercera persona, pero uno sefiala side quien se habla o de lo que se habla esta visible, yel otro siestd ausente, de la mirada inmediata. También tiene dos nosotros, uno que incluye al interlocutory el ‘otro que lo excluye. El huave, por su parte, tiene un solo pronombre de tercera persona del singular y seis de primera del plural; de hecho, tiene una palabra especial para ‘tity yo. Elzapoteco de San Pablo Gili, finalmente, tiene un tinico nosotros pero seis pronom- bres de tercera persona: uno para cosas, otro para animales, otro para seres sagrados, otro para el trato familiar, otro para el de confianza y otro que indica respeto. 2 6 27991 euoH 2 SojodonBy 2p FeHODEN EPH cooler pos wine ensc ado MOURN & op vamos. 9p 881 9 ag Ps “euoisy 9 eoqodosnuy 2p FeHOREN wT WLP eanuepusn ap sar "wx9 say pane wns pony qn sf ConeMDeY "E2124 PES | 108 OPN eF TPF lEIFI | eee eT || pom Tg ye iE ie rl t FenerE c y eupes|” gg" eepely |b OP a 2Qué sobra? ¢Qué falta? ‘Con estos dos ejemplos est claro que todo idioma tiene los recursos necesarios para funcionar, incluso para comunicar 0 para nombrar, porque la lengua es muchis mo mds que comunicacién y denominacién: gracias a ella somos alguien (desde el momento mismo en el que tenemos nombre propio y ‘nosapropiamos del “yo"), conocemos (la mayor parte de nuestras creenciasy conocimientos son posibles gracias ala capacidad estructura- dora de la lengua, a su capacidad narrati- va, a esa facultad que tiene de traer ante loausente, de hacer “perceptible” Jo que no lo es y hasta de hacer coherente sxistencia de leyes, de ritos, de la moral, de la religion misma y de la propia historia ~porque todo suceso, todo acontecimiento, no es absolutamente nada si no es aprendido y organizado por 23 Ja lengua-). Dicho en pocas y Manas pala- ‘ma juega roles y cumple funciones sociales bras, lengua, pensamiento y cultura son diferentes. Cada lengua vehicula la ideologiny tres aspectos inseparables del ser humano. Ja cosmovisién propia, en su respectivo ambito El idioma es parte de nosotros (0 nosotros social. Recordando que el mbito social de de l) y no una propiedad 0 una posesion. _Teproduccién de las lenguas indigenas no es i6n, es la comunidad. Esta comunidad 8, LA REALIDAD COMUNITARIA (enun sentido antropolégico, que para nada DE 1AS LENGUAS INDIGENAS ‘correspond con pucblo) es conereta, existen Y cerca de ocho millones de mexicanos son rostros y estos tienen nombres propios, el bilingies, conocen dos idiomas, viven dos tejido de relaciones de parentesco es amplio. culturas y tienen dos estructuras de pensa- yabareador y el acervo cultural es de pro- miento. Esto nos deberia enorgullecer. __ funda tradici6n. Dentro de la comunidad se Pero no. Su realidad lingiifstica, bilingiie, __interactia, se habla, se norma y se sanciona contrasta con su realidad social. Realidad que la produceién lingiifstica, Aqui la lengua 0 noes culpa” de los idiomas. Como sabemos, ‘comunalecto tampoco es homogénea =como ¢s la convivencia entre los hablantes de las en ninguna parte~, Pero la saben una. La lenguas indigenas y los del espaiiol la que dicen una. no es ni simétrica, ni justa, ni neutral. Las Lanacién, en cambio, esimaginaria (esto | Ienguas no son ni la raz6n ni las responsables no significa que sea falsa), es producto de la de lamarginacién y de la pobreza. Tampoco _eficaciaideol6gica por la que se nos convence culpemosal entendimiento. Insisto, cada idio- | de una idemtidad comin gracias a compar- 4 25 ~ tir una historia y tradiciones comunes y un mismo territorio. Hasta se nos convence que hhablamos igual. La nacién nos es tan propia pero alla vez tan ajena y lejana. Somos mexi- canos por la eficacia de las palabras, unas echas leyes y otras que forman parte de nuestros discursos de identidad. El espaiiol { del mexicano es los muy diversos y diferentes espafioles de los mexicanos. 4, La piversinan Lanatistica pe MEXICO La diversidad lingistica en México cs muy grande (incluyendo en esta afirmacién al ‘espaiiol, a sus diferentes manifestaciones, ‘asus dialectos -o formas de hablar segiin la regién~ y a sus sociolectos ~o formas de hablar segtin el grupo social-). Para mucha gente—incluyendo lingitistas— el niimero de 864 variantes lingiifsticas que seitala lat para las lenguas indigenas es exagerado 1, por lo tanto, falso. Para mf, no lo es. De 26 hecho, creo que hay muchas mas, Pero esto no se resuelve ni con opiniones ni votos ni descalificaciones. Lo tinico verdaderamente| cierto es que fata muchsinanvestigacin, Muchisima, Aunque, a decir verdad, la necesidad de saber cudntas lenguas se hablan en México no es una necesidad cientifica.. es pura y exclusivamente politica... yen realidad es tuna necesidad mas de dicho que de hecho (porque de lo contratio, ta cifra se hubiera propuesto desde hace mucho tiempo). Doy tun pequetio botén de la asistematicidad con Ja que las lenguas indigenas mexicanas han sido (y son) tratadas por el estaclo mexica- no, El 1Neci (Instituto Nacional de Estadis- tica y Geografia) registr, en los censos de 1970, solo 30 lenguas (existiendo, en ese iempo, el Instituto Nacional Indigenista que oficialmente identificaba 56 lenguas indigenas; ambas instituciones federales). a7 En los censos de 1980, el niimero aumenté 40. En los de 1990, luego de reuniones con especialistas y otros no tan especialistas (porque ya existia una exigencia académica de disponer de datos “reales” 0 al menos iis apegados a lo que parecia existir), re- gistré 92 lenguas, siete de ellas genéricas 0 indefinidas (por ejemplo, hay una etiqueta chontal, con un mimero determinado de ha- blantes, como si existiera una lengua chont en México existen dos idiomas chontales: uno de Tabasco y otro de Oaxaca. Totalmente diferentes): Para la década de los afios 90, los ongaanismos oficiales indigenistas reconocian yala existencia de 62 grupos étnicosy, porlo tanto, de igual ntimero de lenguas indigenas. Enllos censos del 2000, el nfimerode lenguas contadas bajé a 85 (con 5 genéricas) y en ‘eleonteo del 2005, 70 (con cuatro genéricas). Pero, gen verdad no es una necesidad lingiiistica, cientifica? Pues claro que no. 28 No, porque las ciencias del lenguaje no tienen Ja capacidad te6rica ni metodolégica para determinar cudindo dos formas de hablar son dos idiomas diferentes y cwindo no. La | Neritadera necesidad, en todo caso, es la de “estudiar todas las hablas. No puede haber “dialectos sin antes haberse realizado una investigacién dialectal. En todo caso, para definir cuando dos ha- blas son un mismo idioma, lo determinante eberian ser las caracteristicasy peculiaridades ‘gramaticales, estructurales. Yatin asi, no hay ‘ni pardimetros ni criterios ‘Tratando de salvar lo insalvable, se ha acu- dido al nombre de los idiomas (tanto al ac- “otros” como al eténimo); se han-tomado ‘como verdaderos y fables los juicios de algu- nos hablantes sobre mismicidad o diferencia ingiifstica (37S la misma lengua o no) y se “Han realizado, incluso, investigaciones sobre la 29 inteligibilidad mutua 0 entendimiento mutuo. Resultado: la indefinicidn sigue... pero ahora el caos ya tiene cifras. ‘Veamos como ejemplo el caso del zapote- co, lalengua de don Andrés Henestrosa. Por ‘un lado, segtin los resultados de la glotocro- nologia (una pseudotécnica que entre otros logros pretende aportar criterios de tiempo para identificar claramente dialectos, lenguas y familias) tay Benge mp Por otro lado, segiii Tos resultados sobre la mutua intcligibilidad, hay 38 grupos; y por otro lado, algunos lingitistas y organismos académicos a su entender-manejan entre 6 57 lenguas (esta tiltima cifra es la que maneja Ethnologue -la enciclopedia de referencia de las 6909 lenguas vivas conocidas-). El Instituto Lin- ico de Verano (una de las instituciones ‘ms importantes en el estudio de las lenguas indigenas), por ejemplo, habla de 40. Elias, por su parte, propone 62 variantes lingiisti- 30 cas. A esto sumémoste que el mei registra 7 | Jenguas zapotecas en 1990 y 2000 y 8 en 2005. Por fin, ccudintos idiomas zapotecos hay? | 5. La DIVERSIDAD EEMPLIFICADA ‘CON SIETE. COMUNIDADES NAHAS Pero zes cierta tanta diferencia? Sin lugar a dudas. Pero mas que creerme (porque la Ciencia no se basa en creencias ni en opinio- nes), veamos un caso conereto, El de una de las lenguas mexicanas cuya variaci6i sido negada constantemente:-el-néhuatl. En un acto como este entrar en detalles es més que imposible. Simplemente presentaré algunos datos para dejar entrever el tamaiio. dela realidad, porque en esto de las lenguas, la mismicidad, lo que es “lo mismo” y lo que no lo ¢s, tiene muchos y muy variados sentidos ¢ interpretaciones. He escogido un tanto cuanto al azar siete comunidades nahuas, tres del estado de__ a ‘altepec), Mextepec (municipio de Sultepec) y Goatepec (municipio de Tlatlaya) y cua- tro del de Guerrero: Ia cabecera municipal de Coatepec Costales, Xalitla (municipio de ‘Tepectacuilco), Xalatzala (municipio de Tla pa),y la cabecera municipal de Cuantepec.? pe 43 Los datos provienen de material recogido en traba- “jo de campo y de Yolanda Lastra, La ees daletales 7iod mahal! modern, Instituto de Investigaciones An- {wopoligicas, UNAM, Mexico, 1986 2 Veamos, para comenzar, dos sustantivos. Comencemes con | ‘viento’ (aclarando que la escritura fonética se ha simplificado para evitar distractores): ay cokwiwi ky yeyeha COxtotilpan, Temascaltepec Mextepec, Sultepec Coatepee, Tlatlaya Coatepec Costales kw ow vyeyéka yeyeka yeyekal kai ky obit vyehyékatl yeyegait yeyekatl Tepecuacuilco Cuautepec 2 En efecto, las palabras para ‘viento’ son “muy iguales”. La forma es [yeyékal] en las tres primeras comunidades; la palabra de Coate- pec Costales termina en [I] y tiene ademas tuna consonante llamada saltillo ~represen- tada por un apéstrofo [’]-. Es muy parecida a Jade Xalitla, aunque no hay saltllo y termina cn [tl]; la de Xalatzala tiene aspirada, (h], y también termina en [tl]; la de Cuautepec, ademas de la (g] (en lugar de la [k]), termi- na con [t] yla palabra, ademés, es aguda. Si, pero son muy iguales, / En a palabra ‘Arbol’ ya se evidencian mu- ‘chas mas diferencias: en Oxtotilpan hay un [to] “extraiio”; las palabras de Mextepec y Coatepec son idénticas; la de Coatepec Cos- tales ademas de terminar con [I] tiene una {a llamada “a larga” ~indicado esto con los dos puntos-, (porque dura mas en el tiempo; esta caracteristica es importante y puede ser la raz6n para diferenciar palabras; como M por ejemplo [untaka], con [u] normal, es “lo segut’ y [unti:ka], con (u:] larga, es ‘lo sembré’); en Xalitla, “arbol’ ya es diferente, [kihtl’), 1o mismo que en Cuautepee (que s [goBit}). Pero comparar palabras por comparar no sirve absolutamente de nada. Lo importante ¢s encontrar las regularidades, en caso de haberlas. Para mostrar alguna, agreguemos otros tes sustantivos: ‘falda’, ‘pino’ y ‘olla’ 35 sadamen wwia6os gases ygo8 omit 2080 yun epHrex, “9 sadavv0 weary qy22dar03 reyes repiat gata % apt psy, pray Pant panqon i Reee Beas EEEE 36 @ oadansay uedorx0 pio op yaks i E E 31,984 z pum mD yor MyNOL moO | ON Ahora las regularidades se ven con mas dlaridad y la homogencidad de estas siete hhablas se cuestiona de inmediato. Oxtotipan, por ejemplo, presenta dominantemente un “to” que ninguna otra habla tiene, Todas las palabras de Oxtotilpan, Mextepec y Coate- pec Tlatlaya, las tres del estado de México, terminan con vocal: [yeyékal, [kwawi], [kwé'le], [tiku] y [kimi], a diferencia de las palabras de las comunidades de Gue~ rrero que todas terminan en consonan- te. Todas las de Coatepec Costales, fuera de otros detalles, erminan con [I]: [ye'yékal] [kwa-wil], (kw6'il] y Daiimil]). Las palabras de Xalitla que terminan con [ti], “irbol, falda’ y‘olla’ terminan con [itl] 0 [it] en las otras lenguas (ejemplifico comparando Xalitla con Xalatzala) 37 jum —rofin ant} go apladak—aadamneng PUEY NOK NY play peypsyad —YeaLTEX MIG OM EPP ETP OMT oo :eezw[ex 9p sey woo seuti0y sns opueseduos ooyydusofy “[p] wou <9 seno se] apuiop fp] ur yuasasd & [M] udHI8N seNO se 9puOp ~.4, 9p odn un- ([g} weniosaid *[] uouan senguay seno se] apuop [$] uvjuasoid “Sepne 298 op spurgpe ‘sadoinen ap seaqeied sey Viemto. Arbol Fala Pino Olla haul? —kwé-tl)Skomtl Kén-tl” 8) kewéi-tl G:ko-d Ké:mict Nalitla —_ yeyéka-tl Xalatzala —yehyéka-t! —_kwiwictl oadaneng) epeneex w wrto-w pod-pu apaip-w ung-ap—nu eai-qBA-0U EeeEgs 2 El nahuatl es una lengua que marca la po- ERRRS ZF sesién mediante prefijos (en estos ejemplos, fii F E: esl de primera persona singular ‘mi’, cuya i egas forma es {no}, {nu-} 0 {n-}). "Mi petate’ tiene siclclis ig Foss basicamente dos formas: [nopéLa] -la RREREE 252: representa a una lateral sorda~y [n6petl]-En BERS g5as ‘cambio, ‘mi marido’ tiene tres: (notoL kal, | Pak SEge {nundmi] y [ndkich]; tres formassin relacién 4° Fee R alguna entre si. e “PPE Pero el punto a destacar es la marca de g 3 : plural del sustantivo poseido. Oxtotilpan, 2 28 aa: yes la Ginica lengua nahua hasta ahora re- PL ick BB. gistrada con esta caracterfstica, indica el § BE BRE plural mediante un pretijo {ke [kenticha]. z eee Porotro ado, Coatepec, Tatlaya, emplea la 8a marca de plural [-me} para los sustantivos - ae poseidos (estrategia que es propia de las ha- : ZF Bas blas nahuas del occidente: Durango, Nayarit, & oe Fas Jalisco y Michoacan): z fF Fe J Boke Fo BB 5 wpa ‘remo, “pel weds, {ey “e;ouodesy mug emeg souuyeyou umetpou uyypyou ouiqeyou 2 -ofig ‘sezooif oxpad Wes (9) 6, LENGUAS EN CONTACTO Y podriamos continuar presentando mate- rial lingiiistico de estas siete comunidades, buscarles semejanzas, diferencias. Pero mas que defender el punto de la heterogeneidad ode discutirsobre la mismicidad, larelevancia_ de lo hasta ahora expuesto es sefialar que lo cesperado, lo Iogico, es que las lenguas—o las variantes lingiisticas o los comunalectos~sean_ diferentes. Por ser la lengua, el pensamiento yla cultura una unidad compleja y porque cada comunidad tiene su propia historia, lo ‘obvio, lo natural, es que lengua, pensamiento_ y cultura sean distintos. Cada comunidad tiene su derrotero, sus problemas y, en suma, su vida. 2Qué es lo que nos obliga a creer {que los idiomas usados en distintos lugares deban de ser iguales 0 el mismo? Y en esta pregunta va incluido el espaiol, Pero mas que responder a esta cuesti6n, debemos recordar que nada sucede al azar. 48 Las diferencias semejanzasapenas descritas, han de relacionarse con la historia; la de la Jengua y la de sus sujetos hablantes, recono- ciencdlo que la historia humana es resultado de voluntadesy circunstancias, yla de la lengua de las determinaciones internas en pugna con sus condicionantes externos, Si observamos detenidamente un idioma (no tnicamente su léxico sino toda él) podemos descubrir fiagmentos deshistocie: Tingos Bilbarpleaic ineluso, sistemas de pensamiento aunque-no i Mesmos tpremienkc ye deiloa: pee: 10, 1 del nahuatl de Oxtotilpan, San Miguel Oxtotilpan. Ya se vio que es la tinica lengua nahua que tiene un prefijo de plural {ke-), ademas de llevar en ocasiones un “extraiio” {to-}. Su vecindad con San Francisco Oxto- tilpan, comunidad de habla matlatzinca, nos cde campo en la regi6n. Y es que existe una tereera comunidad vecina, San Mateo Almo- moloa, de habla nahua. La gente del lugar dice que los santos patronos de estas tres comunidades, San Francisco, San Miguel y San Mateo, son primos y que los tres habla- ban matlatzinca. Los dos tiltimos ahora usan el nahuatl. Como lo sospechabamos, el bilingdismo. no es exclusivamente humano. ‘Si vemos cémo se pluralizan los sustanti- vos en matlatzinca descubrimos que es muy semejante a como se hace en el nahuatl de San Miguel. En matlatzinca se utiliza un prefijo {ne} de ‘plural’ mientras que en San Miguel Oxtotilpan, el {ke-} ya mencionado:* 4 Los ejemplos del matlatzinea fueron proporciona: dos por Etna Pascacio Montijo, 45 ayerad-ep tut couerad-aep usud-oron anyon comersd i, rouqidoratp omersd, —yrydor—armad, ‘wourZaeTtey (8) a 2ommerad tux, zmnydoqayy w9 1109) rersns [a < 10paasod jap wore vy anu soazede oxnmuru jod 1, ap ered ‘od (7) Matlatzinca de S. Feo, Oxtotilpan Nahuatl deS. Miguel Oxtotlpan péLa ‘petate’ KepéLa ‘petates! ke-péla e plurel-petate ‘cuando estén en contacto. Veamos, para terminar con este €aso, dos hechos mas. 1 matlatzinca, cuando el sus- = ie ‘Ya con la mera existencia del prefijo {to-} BFoa ‘en matlatzinea y en el nahuatl de las comuni- as q : dades vecinas bastaria para investigar como ee funciona este elemento en ambas lenguas. ye 2 Pero fale mets e Reig Jos idiomas son tan simples y mucho menos ae ormerd—y wypd-or epdon prefijo Ike-J. En estos casos, las estructura | de las palabras ya no son iguales: { onmed, wppdoiou e1oye 10d opuazuodns) renqyut euLso§ ¥] UOD ojsouipredutoy, joneaad yur, oun, PqUIOIO ome, edpyanor ) :(orodsoa op osn un uoig spur seoypur es4pod sou ois2) sospuersns | uo> aoarede ojos ‘vourziepeur wy “soqiaa ua & soanafpe ua a2ey OL ‘upiqure ‘soanurasns soy ua aoasede aauoureaqun ou onbiod oan AULIP, OWIOD BAOYe AeIYNUAp! 9pand as ou Penyeu jap {—o1) TH ( (10) Matlatzinca de S. Feo, Oxtotilpan Nahuatl de 8, Miguel Oxtotilpan thetophiwhé ‘mis petatitos’ —kenotopéLa_—_—_ ‘mis petates’ the-to~phisw-hé ke-no-to-péla & mi-dim-petate-plural Pluval-mi-to-perate \ Asunto complejo. Este es un clasico ejemplo a 2 de Ienguas en contacto. err e El segundo ejemplo es el de Xalatzala, gegags comunidad guerverense que, 22232 ieafpcta wilsenieralisweeccecquetian aaa varios rasgos que no corresponden con los z que se identifican como caracteristicos del tatht ndhuatl de la region central de Guerrero, Por aEaaa5 cjemplo, a)existe una clase de sustantivos en ae 3088.8 el centro de Guerrero que tienen un sufijo EEEERS (-tli} que en otros lugares (como Xalatzala) eg 5258 terminan con [itl] (por ejemplo, mano’); GEEEEE D)asimismo, Xalatzala emplea la negacién, a:mo tanto en él imperativo negativo (para 5 i decir, por ejemplo, "no the regaiies') como icativo (en ‘no estan comiendo’), las demas comunidades utilizan maka para el imperativo negativo y {x-} para la negacién ¢n indicative (o {kox-], como Xalpatlahuac) rmasitl smatli sma ‘atl Xalpatlahuae Xalavala ‘Oapan Auiaca Acatlin a2) 52 Xalavzala no se ve muy guerrerense. Yen _cfecto no lo es. Sus caracteristicas lingais- ticas nos indican que algo ha sucedido. ¥ es gracias a la existencia de un documento que narra una migraci6n-y-a.su traduccién, Yestudio, que sabemos ahora que la gente de Xalatzala no era originaria de Guerrero sino, al parecer, del valle de Toluca (lo que hace a este ndhuatl més interesante). Por cierto, los habitantes de Xalatzala siempre han sabido que no son originarios de Guerrero. Loscjemplos nahuas queacabamosdeverson tuna de las infinitas pruebas de que un idioma ‘en contacto con otras lenguas (como el caso del nahusatl de Oxtotilpan con el matlatzinca) con otras formas del—digamos- mismo idio- ma (como el caso de Xalatzala con los demas 'Véase Danile Deowve, “Dos relatos sobre mi- _graciones nahuas en el estado de Guerrero", en Estudios de Cultura Nahuatl, 12:137-194, 1976. 4 comunalectos guerrerenses) ince de diversas :maneras ens eoluain lngstica, Evolucion, no corrupcin, no fragmentacién, no degrada- cin, Para as ciencias del lenguajeno existen niidiomas de segunda, niidiomas mestizos, ni ‘mezclados. Las stuacionesbilingiies generan \ varios fenémenos gramaticales naturales, entre Jos mas comunes estan: los préstamos, los / calcos y las interferencias, Por ejemplo, este fragmento de un dilogo en el naluatl de San Francisco Ozomatlin, Guerrero, es mas que evidente:* {6 Véase Jonathan Amith (ed) ,Ok nem totlahtd vo. 1 Instituto Nacional de Lengwas Indigenas, México, 2000. 55 ndiog, pandry ear ‘sedynostp suepyepry yado enonyry sondsoq (¢1) nb seednostp sspad e g2uswtos ‘aqp: ‘ereuopiod e Eneste ejemplo, despuss,disculpasy el verbo ‘perdonarson claramente préstamos del espa- fiol. Pero toda la frase, absolutamente toda, es 100% nahuatl. Sus estructuras sintécticasy | semdntica son “perfectas, puleras, nahuas de ‘Ozomatlan, No hay nada que le cuestione su nahuatidad, 2E1léxico? ¢Qué tiene el léxico? Pues todas las palabras que aparecen en la oracién ~todas- son total yadecuadamente nahuias porque son, estructuralmente, propias del nahuatl de Ozomatlan. Por ejemplo disculpas. En espaol es phu- ral, en nahuatl no. ¥ no lo es porque en la cosmovisién de Ozomatlan, solo los seres ‘animados pueden ser pluralizados (y disculpas ho es un ser animado). Esto se corrobora por la concordancia que va sefialada en el | verbo pedir. Mucho mas claro es el caso de perdonar: ¢s totalmente nahua, 87 Ya construccién kitlahtlani disculpas es, de hecho, un calco del espaftol. En nbuatl yen espaiiol las disculpas se piden. Por supuesto que no es mi intenci6n con- vencer anadie. Lo dicho del nahuatl también aplica, cien por ciento, al espaiiol. No hay ni espaiiol de segunda, ni mestizo, ni mezclado. Lo que se dice es porque la gramética de la Jengua lo permite, Frases © palabras en es- pafiol que WeMTG¥ como extraiias o diferentes no se deben ala ignorancia de sus hablantes ni tampoco a una campaiia para fragmentar 0 para corromper el espatiol. No. Toda persona bilingiie, toda, justamente por ser bilingite, puede hablar en Ia lengua que le sea mas cfectiva (en lo identitario, en lo estético, en loafectivo, en lo comunicativo, en to ritual). Esto significa, en pocas y silvestres pa- labras, que el espafiol mexicano rural y el muy diverso espaiiol indigena es... espaiiol. Como dije antes, el espati 38 yexicano es la suma de los diversos espatioles que se hablan ycorren en México, 7. La TAREA PLANTEADA baa terminar mi discurso insistiendo sobre el constante cambio, Sobre la igualdad —que solo es de dicho-y la mismicidad -que solo aparece dentro de las practicas identitarias, como parte de nuestros ejercicios de po- der-. Iba a insistir en la omnipresencia de las diferencias (siempre acompaitadas de semejanzas) y de nuestra terca necesidad de minimizar o ignorar esas diferencias con los que suponemos iguales 2 nosotros, y de maximizarlas 0 sobrevalorarlas con Jos que pensamos o queremos distintos. Pen- saba insistir en nuestra igualdad pero.no en él ser idénticos. Somos iguales porque nos pensamos, nosaceptamos y nos decimasiguales. Perono. He decidido terminar mi discurso haciendo una muy breve reflexién en torno 59 alespaiiol mexicano, Yaceptando sin acep- tar que soy indigenista, simplemente seftalo que todo lo aqui dicho incluye, por supuesto, al espaol, al espaiiol hablado, al oral y al escrito, En este sentido, valdria la pena des- ry explicar, con la misma atencién, con el mismo rigor, el espaiiol que genéricamente puede ser identificado como indigena 0, si fiol de contacto. Esto significa que habria que conocer =no por el mero gusto de saber sino por su importancia~ sus pronunciaciones, sus comportamientos ‘gramaticales y su léxico. Sus peculiaridades. Faltaria reconocer esas formas de hablar por lo general ocultas, negadas y fuertemente ,estigmatizadas. ¥ con esto “todos los modes peculiares de hablar” el espariol en México serian,en efecto, tadaslos mods peculiares de | hablar espanol. Yesto, no esta de mas recordar lo, es el objetivo que explicitamente se plantea la Academia Mexicana de la Lengua en el mis- oo misimo primer articulo de sus estatutos. ¥ esto, curiosamente, nos obliga a conocer la diversa realidad lingitistica mexicana, La \tarea, pues, esté planteada, 8. Eritoco En fin, ahora si, para terminar debo decir que estoy convencido de que hay diversas maneras de agradecer. Al menos hoy, el que esté yo aqui con este discurso, que va en prenda, y que con él asuma mi compromiso con esta muy noble corporacién me parecen dos modestas y sinceras formas de dar las gracias. Pero debo mucho. Le debo muchi- simo a muchisimas personas instituciones. Algunas estan aqui. Nombrarlas no tendria sentido (porque, por lo regular, los nombres y los rostros mas frescos en la memoria son también los mas cercanos en el tiempo... ysiempre hay olvidos)... Solo mencionaré dos instituciones: a la Escuela Nacional de a Antropologia ¢ Historia y al Instituto de Investigaciones Antropolégicas de nuestra Universidad Nacional Auténoma de México. por supuesto que hay mas. Lo sabemos bien: mis logros no son exchusivamente mis méritos. En verdad, muchisimas gracias. ' Samuel Herrera, Alineamiento y frase verbal ‘en huace de San Mateo det Mar, Oaxaca, tesis de licenciatura de la Escuela Nacional de Antropologia e Historia, México, 2010. * Ausencia L6pez Cruz, Morfologia verbal del ‘apoteco de San pablo Gil, resis de icenciatura de la Escuela Nacional de Antropologia e Historia, México, 1997. 2

S-ar putea să vă placă și