Sunteți pe pagina 1din 36

UNIDAD CURRICULAR: PENSAMIENTO POLÍTICO

LATINOAMERICANO Y VENEZOLANO

DESCRIPCIÓN
Esta unidad aborda desde una perspectiva histórica y analítica las
transformaciones del pensamiento político en América Latina y su actualidad,
resaltando las condicio006Ees que han hecho posible las formas de recepción de
las corrientes de pensamiento político de alcance universal en los distintos hitos
de su desarrollo. Se le hará especial énfasis en la vertiente integracionista, desde
su emergencia en la conocida fase de emancipación latinoamericana hasta hoy.
Unidad Común y Obligatoria para todos los Programas de Formación de Grado.

PRESENTACIÓN
En esta unidad curricular se ofrecerá al estudiante herramientas teóricas-
metodológicas, para que estén en capacidad de interpretar, analizar y evaluar el
Pensamiento Político Latinoamericano y Venezolano, sus transformaciones, el
alcance universal de dicho pensamiento y su perspectiva histórica, al tiempo de
reconocerlo como parte fundamental en la formación de una cultura política del
nuevo ciudadano venezolano.
Asimismo, se abordarán diversas categorías de análisis sobre movilización local y
regional, los sujetos y formas de organización social (grupos sociales,
movimientos, partidos políticos, redes y otras formas de organización); en virtud de
que constituyen tópicos de importancia capital para el abordaje de los estudios
sobre las distintas corrientes de pensamiento; las respuestas surgidas frente a las
ideologías impuestas desde los centros de poder y/o grupos hegemónicos, que
han excluido históricamente a los actores y organizaciones emergentes en sus
luchas por profundizar y desarrollar la democracia en América Latina.
El rumbo de la actual etapa histórica que vive la sociedad venezolana, orienta un
nuevo período de profundos cambios y transformaciones, que respondan a las
expectativas y verdaderas demandas que surgen, no sólo a nivel local sino
también a nivel regional y nacional.
Dicho rumbo descansa, en primer lugar, en las formas de recepción de las
corrientes de pensamiento político e ideológico desarrollados en América Latina;
en segundo lugar, al proceso de globalización que ha generado cambios y
movilizaciones en toda la región, debido a su influencia en lo económico, político,
social e ideológico de las naciones. En tercer lugar, por la crisis desencadenada
en los años 80 y 90 del Siglo XX, que de alguna manera, dieron origen a sujetos
sociales dinámicos, capaces de organizarse socialmente como resistencia frente
al desarraigo, a los programas de ajustes estructurales, desregulación financiera,
privatización de empresas; y al auge e impacto del desarrollo tecnológico, propio
del proceso de globalización.
La unidad curricular ofrecerá conocimientos teóricos y metodológicos para explicar
la capacidad política de individuos y grupos, la consolidación de proyectos
democráticos para el ejercicio de la ciudadanía, así como comprender las distintas
corrientes ideológicas (sociales o políticas), que han signado las luchas,
resistencias y permanencias en América Latina.
Igualmente, la unidad curricular impulsará los nuevos enfoques del desarrollo que
vitalizan las potencialidades humanas a través de una serie de procesos y
estrategias autogestionarias, centradas en la participación democrática como
derecho humano, político, económico, social y territorial. Todo esto en
consonancia con los nuevos valores de convivencia, solidaridad, democracia
participativa y protagónica, justicia social, igualdad, responsabilidad y pertinencia
social; así como la preeminencia de los derechos –sin exclusión y discriminación-
a la educación, salud, cultura, trabajo, participación política, entre otros aspectos;
necesarios para una vida digna dentro de nuestras sociedades latinoamericanas.

OBJETIVO GENERAL.
Interpretar el pensamiento político latinoamericano como elemento teórico
fundamental para la formación del comunicador social en el contexto de la
contemporaneidad.
UNIDAD DIDÁCTICA I: EL PENSAMIENTO POLÍTICO INDÍGENA
1. Cosmovisión del mundo indígena.
2. Resistencia indígena como germen del pensamiento emancipador.
3. Confederación indígena: Guaicaipuro.
4. Popool Vuh, Ollantay, Tupac Amaru, Tupac Atari, Manco Capac, Artigas,
otros.

UNIDAD DIDÁCTICA II: IMPLANTACIÓN DEL EUROCENTRISMO EN


AMÉRICA.
1. El colonialismo: germen del Pensamiento conservador:
2. La iglesia como productora del conocimiento.
3. La inquisición española.
4. Cronistas de Indias: Bartolomé de Las Casas, Oviedo y Baños.
5. La Ilustración en América: Juan Jacobo Rosseau, Montesquieu, Voltaire y
otros.
6. Los Enciclopedistas: La universidad en América.
7. Impacto de la Revolución Francesa en América.

DESARROLLO DE LA UNIDAD DIDACTICA II.

EUROCENTRISMO:

El término Eurocentrismo se aplica a cualquier tipo de actitud, postura o


enfoque intelectual, historiográfico y de la evolución social, que considera que
Europa y su cultura han sido el centro y motor de la civilización, y que por ello
identifica la historia europea con la Historia Universal. El Eurocentrismo es una
forma de etnocentrismo.
El Eurocentrismo (como las otras formas de etnocentrismo) es también un
prejuicio cognitivo y cultural, que supone la existencia de experiencias históricas
lineales movidas por esquemas culturales fijos, correspondientes a los provistos
por la historia europea, considerando a las trayectorias no europeas como
formaciones incompletas o deformadas.
EL COLONIALISMO: GERMEN DEL PENSAMIENTO CONSERVADOR:
El colonialismo es el dominio territorial, económico y cultural establecido
durante largo tiempo sobre un pueblo extranjero que se ve sometido al país
dominante. Aunque este término existe desde la época de la Antigua Grecia, hay
variantes en su significado, pues en el caso de las antiguas colonias griegas o en
el de América se usaba más bien la palabra “colonización” en vez de colonialismo.

El colonialismo europeo moderno comenzó en el siglo XV con los viajes de


los portugueses a lo largo de la costa oeste de África. Junto con los españoles,
fueron los primeros en establecer sus colonias en ultramar, y se aferraron a ellas
incluso después de que su fuerza imperialista se hubiera perdido. Sin embargo, el
colonialismo alcanzó su momento de máxima importancia desde finales del siglo
XIX hasta mediados del XX. Los países europeos que más protagonismo tuvieron
en este proceso fueron Inglaterra, Francia y Alemania, que se repartieron el
continente africano, (donde tan sólo quedaron dos países independientes: Liberia
y Abisinia) e intentaron extender sus zonas de influencia por diferentes zonas del
mundo como Europa Oriental, Oriente Medio, Extremo Oriente o el Caribe. Países
como Italia, España, Portugal y Bélgica también intentaron llevarse su parte en
este reparto, aunque no consiguieron tantos territorios.

Características del colonialismo en América:

Antiguas colonias griegas o en el de América se usaba más bien la palabra


“colonización” en vez de colonialismo, ya que en estos casos los territorios
colonizados no estaban subordinados a la metrópolis. Y a todos los habitantes de
estos, se les considera como otros ciudadanos más de la potencia europea.

El movimiento colonizador, a pesar de mostrar un idéntico concepto, no era


de características homogéneas. Estas cambiaban de acuerdo a la cultura de la
nación que estuviese ejerciendo la acción y políticas de coloniaje.
En los siglos posteriores al siglo XV, el ejemplo dado por España fue
rápidamente seguido por otras potencias europeas que, conocedoras de los éxitos
y provechos recogidos por los hispanos, se entusiasmaron en seguir sus pasos.

Esas naciones seguidoras del ejemplo español fueron en orden de


importancia, Inglaterra, Portugal y Holanda.
Cada una de ellas se empeño en empresas y aventuras por los mares y
tierras recién descubiertos; lo que dio, como resultado inmediato, el
establecimiento de colonias con mayor o menor importancia, que representaron
sus propias características en las tierras que ocuparon.

Pensamiento conservador:
No es dogmático, lo que ofrece es un pensamiento coherente y lógico sobre
la vida, acerca del cosmos, sobre Dios, sobre el hombre y la sociedad y en
relación con la función política.

Grandes principios del pensamiento conservador:

Estos son algunos de los principios centrales:


1. Dios es el centro del universo.
2. Un orden natural y una Ley natural de la humanidad.
3. La persona humana tiene dignidad y debe respetarse.
4. Existe una moral universal y uno valores éticos culturales.
5. La razón humana tiene límites.
6. El hombre es libre de hacer bien o el mal.
7. Los grandes maestros son la civilización, la cultura y la tradición.
8. La estabilidad social requiere autoridad fuerte y legalidad.
9. La propiedad privada es un derecho natural y cumple una función social.
10. La equidad y la justicia social reflejan la solidaridad y el amor cristiano.
11. La autonomía local y la desconcentración del poder son importantes para
preservar el orden y la tradición.
LA IGLESIA COMO PRODUCTORA DEL CONOCIMIENTO:

La ciencia medieval, regida por la iglesia como única productora de


conocimiento incuestionable radicado en la divinidad, dejaba a la sociedad
inmersa en una mentira que se creía como la verdad o que se dudaba pero tenía
miedo de su benefactores; los príncipes, los terratenientes y clérigos, que
intimidaban a la sociedad para que creyeran en su verdad incuestionable y así
solo ellos disfrutar de la verdad y de los placeres de la ciencia. La ciencia
comenzó su lucha por medio de la duda de una sociedad demasiado ignorante
para desarrollar sus propias fuerzas. De esta manera la ciencia le proporciono una
salida de sus represores a la sociedad, por medio de la búsqueda por aliviar los
problemas de la existencia humana como principal arma contra la dominación del
orden medieval. Aun así la sociedad se encontraba inmersa en un mundo de
ignorancia regido por las creencias religiosas, en este panorama la ciencia se
encontraba con un nuevo obstáculo que era hacer comprender a la sociedad que
no era necesario regirse por el saber religioso, si no que con la ayuda de la ciencia
y la búsqueda del saber por el saber mismo, para poder escapar de la ignorancia,
la sociedad podría valerse de su razón y entendimiento para entender la
percepción del mundo y convertir su vida en una vida activa.

LA INQUISICIÓN ESPAÑOLA:

La Inquisición española fue una institución fundada en el año 1478 por los
Reyes Católicos en España. El conocimiento de esta institución es fundamental
para conocer la problemática de los judíos y de los conversos que existía en los
reinos peninsulares en la Baja Edad Media y para conocer como se desarrolló la
sociedad española durante la Edad Moderna. La Inquisición española investigó a
conversos, moriscos, protestantes, entre otros. y todas aquellas prácticas que iban
en contra de la ortodoxia de la Iglesia católica. Esta institución funcionó durante
varios siglos, aunque será entre finales del siglo XV y el siglo XVII cuando tendrá
una mayor actividad. En esta entrada explicaré sus orígenes, su devenir a lo largo
del tiempo y su organización. De esta forma se podrá conocer a esta famosa
institución española y comprenderás mejor la vida de las minorías étnico-religiosas
en España durante la Edad Moderna.

Fue una institución creada para mantener la ortodoxia católica en sus


reinos. La Inquisición española tiene precedentes en instituciones similares
existentes en Europa desde el siglo XII (véase el artículo Inquisición),
especialmente en la fundada en Francia en el año 1184. La Inquisición española
estaba bajo el control directo de la monarquía. No se abolió definitivamente hasta
1834, durante el reinado de Isabel II. Pero su abolición fue aprobada en las cortes
de Cádiz en 1812 por mayoría absoluta.
La Inquisición, como tribunal eclesiástico, sólo tenía competencia sobre
cristianos bautizados. Durante la mayor parte de su historia, sin embargo, al no
existir en España ni en sus territorios dependientes libertad de cultos, su
jurisdicción se extendió a la práctica totalidad de los súbditos del rey de España.
Precedentes
La institución inquisitorial no es una creación española. Fue creada por
medio de la bula papal Ad arboleda, emitida a finales del siglo XII por el papa
Lucio III como un instrumento para combatir la herejía albigense en el sur de
Francia. Existieron tribunales de la Inquisición pontificia en varios reinos cristianos
europeos durante la Edad Media. En la Corona de Aragón operó un tribunal de la
Inquisición pontificia establecido por dictamen de los estatutos Excommunicamus
del papa Gregorio IX en 1232 durante la época de la herejía albigense; su principal
representante fue Raimundo de Peñafort. Con el tiempo, su importancia se fue
diluyendo, y a mediados del siglo XV era una institución casi olvidada, aunque
legalmente vigente.
En Castilla no hubo nunca tribunal de la Inquisición Pontificia. Los
encargados de vigilar y castigar los delitos de fe eran los diferentes obispados, por
medio de la Inquisición episcopal. Sin embargo, durante la Edad Media en Castilla
se prestó poca atención a las herejías.
Contexto
Pedro Berruguete: Santo Domingo presidiendo un auto de fe (1475). Las
representaciones artísticas normalmente muestran tortura y la quema en la
hoguera durante el auto de fe.
Gran parte de la Península Ibérica había sido dominada por los árabes, y las
regiones del sur, particularmente los territorios del antiguo Reino nazarí de
Granada, tenían una gran población musulmana. Hasta 1492, Granada
permaneció bajo dominio árabe. Las grandes ciudades, en especial Sevilla y
Valladolid, en Castilla, y Barcelona en la Corona de Aragón, tenían grandes
poblaciones de judíos, que habitaban en las llamadas «juderías».
Durante la Edad Media, se había producido una coexistencia relativamente
pacífica —aunque no exenta de incidentes— entre cristianos, judíos y
musulmanes, en los reinos peninsulares. Había una larga tradición de servicio a la
Corona de Aragón por parte de judíos. El padre de Fernando, Juan II de Aragón,
nombró a Abiathar Crescas, judío, astrónomo de la corte. Los judíos ocupaban
muchos puestos importantes, tanto religiosos como políticos. Castilla incluso tenía
un rabino no oficial, un judío practicante.
No obstante, a finales del siglo XIV hubo en algunos lugares de España una
ola de antisemitismo, alentada por la predicación de Ferrán Martínez, archidiácono
de Écija. Fueron especialmente cruentos los pogromos de junio de 1391: en
Sevilla fueron asesinados cientos de judíos, y se destruyó por completo la aljama,
[1] y en otras ciudades, como Córdoba, Valencia o Barcelona, las víctimas fueron
igualmente muy elevadas.
Una de las consecuencias de estos disturbios fue la conversión masiva de
judíos. Antes de esta fecha, los conversos eran escasos y apenas tenían
relevancia social. Desde el siglo XV puede hablarse de los judeoconversos,
también llamados «cristianos nuevos», como un nuevo grupo social, visto con
recelo tanto por judíos como por cristianos. Convirtiéndose, los judíos no
solamente escapaban a eventuales persecuciones, sino que lograban acceder a
numerosos oficios y puestos que les estaban siendo prohibidos por normas de
nuevo cuño, que aplicaban severas restricciones a los judíos. Fueron muchos los
conversos que alcanzaron una importante posición en la España del siglo XV.
Conversos eran, entre muchos otros, los médicos Andrés Laguna y Francisco
López Villalobos, médico de la corte de Fernando el Católico; los escritores Juan
del Enzina, Juan de Mena, Diego de
Valera y Alfonso de Palencia y los banqueros Luis de Santángel y Gabriel
Sánchez, que financiaron el viaje de Cristóbal Colón. Los conversos —no sin
oposición— llegaron a escalar también puestos relevantes en la jerarquía
eclesiástica, convirtiéndose a veces en severos detractores del judaísmo.[3]
Incluso algunos fueron ennoblecidos, y en el siglo XVI varios opúsculos pretendían
demostrar que casi todos los nobles de España tenían ascendencia judía.[4] La
revuelta de Pedro Sarmiento (Toledo, 1449) tuvo como principal elemento
movilizador el recelo de los cristianos viejos hacia los cristianos nuevos,
sustanciado en los estatutos de limpieza de sangre que se extendieron por
multitud de instituciones, prohibiéndoles su acceso.

CRONISTAS DE INDIAS: BARTOLOMÉ DE LAS CASAS, OVIEDO Y BAÑOS:

Las primeras crónicas sobre los sucesos del Nuevo Mundo y especialmente
sobre el escenario sobrecogedor que se ofreció a los ojos de los conquistadores,
se deben a los propios protagonistas del gran encuentro entre dos mundos, hasta
entonces solamente presentido. El que inicia la secuencia es sin duda el Almirante
Cristóbal Colón. Sus cartas a los Reyes Católicos en las que expresa su
admiración por el paisaje y sus habitantes de las tierras por él descubiertas abren
una tradición y toda una corriente descriptiva del Nuevo Mundo, que contará en lo
adelante con extraordinarios cultivadores, muchos de los cuales nos toca
enumerar en esta reseña. Como cronistas de la nueva realidad histórica de Tierra
Firme.

Es indudable que ante los sucesos singulares de los que los


Conquistadores son testigos con frecuencia, surge la expresión asombrada
del Cronista. En vez de la historia reflexiva, sujeta a ciertos cánones de tipo
académico, como dijera Luis Alberto Sánchez, la función del cronista fue la
de «ver y contar». Se extasiaron en la soberbia naturaleza americana, para
entonces de una virginidad a toda prueba, e impelidos por el reclamo de lo
maravilloso convirtieron en relatos fantásticos muchos de los sucesos que
les tocó narrar.
La lista de los llamados Cronistas de Indias es verdaderamente
numerosa. De ellos hemos seleccionado unos cuantos nombres muchos de
los cuales están intimamente relacionados con la aparición de Venezuela
como entidad geográfica, en el escenario de Tierra Firme.
La lista comprende los siguientes nombres: Cristóbal Colón, Gonzalo
Fernández de Oviedo, Fray Bartolomé de las Casas, Pedro Mártir de
Anglería, Francisco López de Gómara, Juan de Castellanos, Fray Pedro de
Aguado, Fray Pedro Simón, José Oviedo y Baños, José Gumilla y Fray
Antonio Caulin.

Fray Bartolomé de las Casas (1484-1566):

Nace Fray Bartolomé de las Casas en el año 1484 en la ciudad


española de Sevilla. Este hom bre abnegado cumplíó en las Indias
Occidentales una gran labor como protector de los primítivos habitantes, y
aún se conservan sus crónicas en las que narra episodios históricos del
Nuevo Mundo. con cierto apasionamiento. Entre las obras escritas por el
célebre religioso se encuentran las siguientes: Historia de las Indias. La
Destrucción de las Indias. Relaciones y Cartas de Cristóbal Cólón, etc.
En el libro titulado Historia de la Indias, hace Fray Bartolomé de las Casas
un análisis de las leyes que regían a los habitantes del Nuevo Continente.
Su búsqueda se centra en los puntos negativos que contenían los
preceptos, dictados por las autoridades supremas de la colonia. La
explotación del indigena; por parte de los colonos es una de las principales
preocupaciones del ilustre prelado. No concebia él una justicia a media en
la que se desobedeciera la premisa máxima del respeto por la condición
humana. Por eso, se convirtió en portavoz y luchador a tiempo completo a
favor de los antiguos pobladores de nuestra América.
Sus apreciaciones en cuanto al proceso de evangelización resultan
agudas y reveladoras de que el pensamiento de Fray Bartolomé de las
Casas era de avanzada para la época. Veamos el siguiente fragmento,
extraido de la Historia de las Indias: «Por la tercera ley se mandaba que
cada uno de los españoles que tenian indios hiciese una casa de paja, para
que fuese iglesia (...) y que fuese una persona con ellos para les decir el
Ave Maria, y el Paternoster, y el Credo la Sawe-Regina: esta persona era el
minero de las minas y el estanciero de las estancias o granjas, para
escarnio de la fe y la religión cristiana, que; como arriba dijimos, las dijesen
las dichas oraciones en latin o en romance, que no entendian más que si en
algarabia se las dijeran, ni más ni menos, como si a papagayos
instruyeran.

José de Oviedo y Baños (1671-1738):

Con José de Oviedo y Baños se inicia una nueva etapa en el proceso


constitutivo de la historia nacional. Es verdad que entramos en el pórtico del
siglo XVIII. La influencia de Solis y de Melo. afirma el rumbo de nuestra
historiografia. Ya la labor de Oviedo y Baños no es la de “ver y contar”
simplemente, sino que estudia, coteja, consulta documentos. Su vida
misma se diferencia absolutamente de la de sus antecesores. Ya no anda el
historiador en busca de hazañas y de gloria. En su casa posee biblioteca y
tranquilidad. Es casi un profesional de las letras. Sus largos ratos de
estudio y su holganza económica le permiten imprimir a su obra histórica un
sello distinto al de sus antecesores. Ya Oviedo y Baños precisan la
necesidad de un estilo. Como el infante Don Juan Manuel en el siglo XIV
español, Oviedo es presa de cierto narcisismo literario. Julio PlanChart, en
su magnífico trabajo sobre el historiador, incluido en su libro Temas Críticos,
asienta que «Lo pintoresco, lo colorido y lo musical distinguen la prosa de
Oviedo y constituyen las cualidades características de ella». El historiador
transitaba por rumbos definidos.
Si realmente todavía la Historia no contaba con una orientación
científica, como la del siglo XIX. Oviedo y Baños, a pesar de no haber
superado en forma absoluta la etapa de las crónicas, echa las bases de lo
que vendría a ser, andando el tiempo, la verdadera literatura nacional.
Aunque nacido fuera de Venezuela, Oviedo y Baños amó como el que más
esta tierra y en ella acabó los últimos días de su vida. Por eso Julio
Panchart en el estudio citado afirma: «Los cronistas vieron con ojos
españoles los hechos narrados por ellos: Oviedo los mira con ojos
venezolanos. En las reflexiones que de cuando en cuando inserta en su
narración está el interés y el sentido del criollo y, sobre todo, amó esta tierra
y dejó demostración de ello escribiendo su Historia como no lo hicieron
otros venezolanos por nacimiento y con raíces venezolanas más hondas en
el tiempo, el gusto por el estilo sugerente y adornado es cosa muy
venezolana y se repite en la historia literaria con caracteres muy' definidos:
los escritores más glorificados entre nosotros son los que gustan del
saboreo de la palabra. Oviedo, por su vida y por el hecho esencial de ella.
Es un venezolano tipíco y su gloria nos pertenece». El entronque literario de
Oviedo y Baños con nuestros mejores poetas y prosistas subsiguientes a él
es notorio y elocuente. Su descripción de Caracas, de aquella ciudad
apacible en la que vivió y quiso. tuvo profundas resonancias en poetas
románticos del siglo XIX, como Heriberto Garcia de Quevedo, Pérez
Bonalde y muchos otros que siguieron repitiendo la imagen de la perpetua
primavera que el viejo historiador, en su Historia de la Conquista y
Población de la Provincia de Venezuela, aplicó al paisaje y al clima de la
ciudad fundada por Diego de Losada.

Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés (1478-1557):

Gonzalo Femández de Oviedo y Valdés fue otro de los personajes


que escribió acerca del nuevo continente. Nace Oviedo en Madrid en
agosto de 1478 Y durante su existencia se dedicó a recorrer las vastas
tierras hasta entonces desconocidas. De todo aquel caudal de experiencias
nacen sus crónicas en las que describe con estilo sencillo. pero elegante. la
belleza de los paisajes y la naturaleza americana. Su obra fundamental se
titula Historia General y Natural de las Indias, Islas y Tierra Firme del Mar
Océano. Este documento histórico es uno de los que ofrece mayor
información acerca de la época. En sus descripciones no escapa ningún
detalle acerca de la fauna. la flora y las costumbres de los primitivos
habitantes. A tal respecto. resalta su crónica sobre la isla de Cubagua en la
cual Oviedo y Valdés demuestra su desarrollado espíritu de observación.
En el libro XXV de la Historia General y Natural de las Indias. hay un
capítulo en el que el cronista reseña algunas informaciones sobre la
provincia de Venezuela. En cuanto al origen de las informaciones. Oviedo
señala: «Preguntando yo a un testigo de vista tan reverendo Y Sabio y de
tanta autoridad, como es el señor Obispo don Rodrigo de Bastidas, las
cosas de los indios de la provinzia de Venezuela é sabiendolo él tan bien
como pastor de aquellas ánimas,é assi en sus ritos e ceremonias como en
la fertilidad de la tierra é otras particularidades, me dixo las que en este
capítulo diré». Aunque él no fue testigo directo. su narración está llena de
precisiones. En un primer momento. nos refiere la fertilidad y las bondades
que ofrecen los paisajes naturales de la provincia; para luego ahondar en
las costumbres y rituales de los aborígenes, habitantes de la región.

LA ILUSTRACIÓN EN AMÉRICA: JUAN JACOBO ROSSEAU,


MONTESQUIEU, VOLTAIRE Y OTROS:

La ilustración ejerció una poderosa influencia en el pensamiento


filosófico y político durante el siglo XVIII. La idea de la ilustración contribuyó
a romper la tiranía política y el poder del alto clero. Su ideal de la libertad
religiosa fue una de las causas principales de la separación de la iglesia y el
Estado.
A partir del siglo XVII, y muy especialmente en el siglo VXIII, se
observa en EUROPA gran efervescencia intelectual que se conoce como la
ilustración o siglo de las luces. Estos cambios ocurrieron desde finales de la
EDAD MEDIA: la influencia del renacimiento, la prosperidad de la clase
media, y los amplios horizontes que abrió el conocimiento de las tierras
recién descubiertas.
La revolución intelectual se inspiró en las ideas de RENATO
DESCARTES (1569-1650), fue el defensor firme del racionalismo filosófico.
Para él, solo se podia llegar al conocimiento mediante un método de
deducción que consistía en partir de verdades o axiomas simples y
evidentes por sí mismas, y luego deducir de ellas, mediante el
razonamiento, las conclusiones particulares. Su doctrina fue expuesta en su
discurso del método, dominó el pensamiento filosófico del siglo XVII.

Los más destacados seguidores del racionalismo fueron BENITO


SPINOZA y TOMÁS HOBBES. Spinoza sostiene que en el universo sólo
existe una sustancia esencial, esta sustancia única es Dios, Hobbes
consideraba la geometría como el único método adecuado para llegar a la
verdad, negaba lo espiritual.
ISAAC NEWTON (1642-1727) creó la concepción de un universo
mecánico. Llegó a enunciar el principio de la gravitación universal “la
materia atrae a la materia en relación directa con sus masas y relación
inversa al cuadrado de la distancia” Newton expresó en forma matemática,
la concepción mecanicista de la naturaleza. JOHN LOCKE (1632-1704)
creó una nueva teoría del conocimiento que sirvió de base a la filosofía de
la ilustración. Considera que no hay ideas innatas que el hombre al nacer
tiene su mente en blanco; No hay nada registrado, ni siquiera la idea de
Dios.
Se le considera el padre de los principios liberales, su obra sostiene,
que en un principio los hombres vivían en un estado natural donde
prevalecía la libertad e igualdad y no existían gobiernos. Locke censuraba
el absolutismo. Sus ideas de un gobierno limitado por los derechos
naturales y el derecho a oponerse a la tiranía, influyeron notablemente en
los acontecimientos revolucionarios del siglo VXIII. La revolución intelectual
alcanzó su máximo desarrollo en el siglo VXIII, en el movimiento conocido
como la ilustración. Se inicio en 1680 e influyo en AMÉRICA,
Las ideas impulsaron los acontecimientos que habrían de derrumbar el
sistema económico, social y político implantado por el absolutismo.
Las ideas más importantes que animaron a la filosofía de la
ilustración son las siguientes: La razón es la única guía para llegar al
conocimiento, idea esta que descansa en el pensamiento cartesiano: cogito
ergo sum. El universo es una máquina regida por leyes inflexibles, la
naturaleza es uniforme. Esta es la esencia del pensamiento filosófico
newtoniano. La mejor forma de vida es la más sencilla y natural. La religión,
el gobierno y las instituciones económicas deben desprenderse de todo
artificio y organizares conforme a la libertad natural. El ser humano no es
malo por naturaleza, la sociedad lo induce a cometer actos de crueldad y
villanía.

LOS ENCICLOPEDISTAS: LA UNIVERSIDAD DE AMÉRICA LATINA:

El término enciclopedista se usa normalmente para nombrar a un grupo de


filósofos franceses que colaboraron en el siglo XVIII en la producción de la
Encyclopédie bajo la dirección de Denis Diderot. También puede utilizarse como
término general para nombrar a personas que ayudan a escribir una enciclopedia.

En la era de las telecomunicaciones, con la circulación de la imagen y de la


palabra, los dispositivos multimedia y el desarrollo formidable de las redes
telemática, la humanidad ha entrado en la era de la información y la comunicación
universal, eliminando las distancias y fomentando las relaciones internacionales y
una concepción global del mundo. Para las universidades esta situación supone
hacer frente al gran desafío de la innovación conceptual y tecnológica que les
permita ser competitivas nacional e internacionalmente.

En América Latina, los mismos objetivos de las universidades están


sufriendo modificaciones y han debido adaptarse a la realidad cambiante pero
previsible en muchos aspectos, entre los que destacan los de orden ecológico y
sobre todo los relacionados con las problemáticas sociales presentes en los
países latinoamericanos. Al mencionar los cambios que tendrá la práctica
educativa universitaria, habrán de considerarse los recursos tecnológicos de
apoyo al proceso de aprendizaje y a la organización de la información, así como a
las nuevas demandas que generan sectores de la sociedad organizados e
interrelacionados en formas no conocidas apenas veinte años atrás. Bajo esta
perspectiva, las universidades latinoamericanas han iniciado a construcción de un
modelo universitario con las siguientes características:
 Flexible
 De calidad
 Dirigido
 Vinculatorio
 Sistémico y autorreferente
Apoyado en medios tecnológicos de comunicación educativa
 Sustentable
 De proyección nacional e internacional.

Del equilibrio que pueda obtenerse entre los elementos del modelo
educativo y los recursos de la comunicación dependerá en gran parte la
satisfacción que pueda darse a las comunidades de aprendizaje, considerando
que desde ahora:

 El conocimiento y la información se organizan en estructuras sistémicas y


globales, de donde un conocimiento afecta a todas las disciplinas del saber
humano;
 Las comunidades de aprendizaje, derivadas de lo que se conoce como
sociedad de la información, demandan diversas fuentes y alternativas para
acceder a los beneficios del conocimiento, de manera de hacer efectivos los
principios de la teorías de la decisión y aplicar el conocimiento estructurado en la
resolución de problemas concretos; y
 La comunicación que se establece entre la institución y las comunidades
de aprendizaje debe pasar por interfases tecnológicas y normarse por estructuras
de entendimiento común, donde la institución garantice formas de operación
flexibles y procesos académicos rigurosos, y los usuarios identifiquen sus
capacidades de aprendizaje y determinen sus expectativas de conocimiento.

Uno de los mayores retos de las institución de educación superior en


América Latina, es el que plantea vincular la oferta educativa con las
comunidades de aprendizaje demandantes, en el entendido de que estas
comunidades pueden estar integradas por individuos distanciados entre sí, e
incluso intercomunicados asincrónicamente. Es indudable que este tipo de
vinculación sería impensable sin el nivel de desarrollo tecnológicos alcanzado
hasta el momento, especialmente en las áreas de la electrónica, la computación y
las telecomunicaciones. Ello ha facilitado una mayor cobertura de la educación y
mejor atención a los usuarios, aunque también ha propiciado un incremento en los
volúmenes de información y un decremento en la vigencia del conocimiento.
La comunicación educativa por diversos medios tecnológicos, así, está siendo un
imperativo surgido más del proceso de globalización que de las necesidades del
proceso educativo. Dadas las condiciones actuales, el reto para las universidades
latinoamericanas es lograr el desarrollo de programas de educación en línea y el
fortalecimiento de una red universitaria de redes , que involucre el diseño de
metodologías y normatividad adecuadas que faciliten la interacción significativa
entre los usuarios, así como la reciprocidad académica entre las instituciones.

El aprendizaje en los individuos y en las comunidades: Así como el


desarrollo de los recursos tecnológicos de la comunicación educativa a distancia
ha impulsado y enriquecido las posibilidades de desarrollo de la práctica educativa
de la metodología de educación abierta, del mismo modo se han generado
exigencias de aprendizaje muy específicos de parte de los individuos y de las
comunidades, muchas de ellas derivadas de las posibilidades que ofrece la
tecnología. Resulta imperativo que los programas educativos que utilizan
tecnologías avanzadas, incorporen de manera sistemática las aportaciones
derivadas de la ciencia cognitiva en general, y de la Psicología Instruccional en
particular.

Las perspectivas de la práctica educativa en las universidades


latinoamericanas: El escenario latinoamericano está marcado por enormes
contrastes, donde existen grandes universidades con toda la infraestructura
tecnológica disponible, y universidades pequeñas con escasos recursos, para las
que resulta más necesario aglutinarse y cobijarse en las macrouniversidades. A
nivel regional, resulta imperativo que las universidades grandes y pequeñas sean
capaces de:
 Promover la creación de un sistema de redes.
 Diversificar los planes y programas de estudio tradicionales en nuevas
disciplinas y en apoyo a la formación interdisciplinaria, con lo que la misma
universidad podrá facilitar que el estudiante tenga la oportunidad de organizar
currículos que guarden una mayor correspondencia entre la oferta educativa, la
demanda profesional y las expectativas individuales.
 Integrar sistemas de información y evaluación institucionales para la
inmediata retroalimentación del proceso de desarrollo y su perfeccionamiento.
Fomentar la investigación de nuevas formas de organización curricular, y
difundir los resultados de estas investigaciones a la comunidad académica.
 Promover una cultura de la evaluación y la actualización permanentes
entre sus estudiantes. La educación continúa como modelo de vida.
 Impulsar el aprendizaje apoyado en asesorías, y su evaluación y
medición en escenarios de problemas reales.
 Promover en los estudiantes, conductas tendientes a organizar, asimilar
y utilizar sus contenidos, ya que su crecimiento exponencial obligará a prescindir
de las conductas enciclopedistas en beneficio de las conductas de interpretación y
aplicación de la información.
 Fomentar en la comunidad académica el uso racional de nuevos
espacios de operación apoyados en la supercarretera de información.
 Reforzar la integración de diversas modalidades educativas, de tal
manera que sea posible impulsar mecanismos ágiles de intercambio y
cooperación entre distintas universidades de distintos países
 Apoyar los convenios de colaboración multiinstitucional que les permita
acceder y compartir con sus pares internacionales.
Impulsar nuevas de formas de certificación del aprendizaje, incorporando
elementos de competencia profesional. Uno más de los efectos de la globalización
es que cambiarán los términos clásicos de contratación en el país, y que la
competencia hará que cada vez resulte más evidente que los mejor preparados
obtendrán los mejores puestos y los mejores salarios.
Construir marcos normativos y legislativos, y muy especialmente:
 Promover la formulación y desarrollo de programas de formación
docente, en particular en el campo del manejo de las telecomunicaciones.

IMPACTO DE LA REVOLUCIÓN FRANCESA EN AMÉRICA:


El siglo XVIII europeo fue el de la Ilustración, la Enciclopedia y el
encumbramiento de Inglaterra como gran potencia colonial, comercial y
mundial. Este mundo nuevo produjo la caída del viejo. Por ello, el siglo XVIII
fue también el del hundimiento del "Antiguo Régimen", de la sociedad
estamental, de los gremios, y de una economía basada en la producción
agrícola.
En 1789 una revolución puso fin a siglos de monarquía en Francia. El Rey
Luis XVI y su esposa, María Antonieta fueron ejecutados con el invento del
Dr. Guillotín, la guillotina, una máquina de cortar cabezas que se puso muy
de moda en Francia por esos años. La revolución francesa significó el
principio del fin del Absolutismo monárquico y el triunfo de los principios de
soberanía popular y división de los poderes.
El pueblo de París formó una asamblea que asumió el poder y suprimió
todos los privilegios de los nobles, entre ellos el de no pagar impuestos. La
Asamblea redactó la "Declaración de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano". Sus tres principios eran "Liberté, Egalité y Fraternité"(libertad,
igualdad y fraternidad). La declaración decía en uno de sus párrafos "Los
hombres nacen y viven libres e iguales en derechos. Las distinciones
sociales (el hecho de ser ricos o pobres) sólo pueden estar fundadas en la
utilidad común." También decía que "la soberanía reside en la nación”. Esto
quería decir que el verdadero poder lo tenía ahora el pueblo de la nación y
no ya el rey. Este es el principio de soberanía popular según el cual el pueblo
le da el poder a los gobernantes y si estos no cumplen o se muestran
incapaces, el poder debe volver al pueblo
Muchos son los que vieron en la revolución el triunfo de las ideas de la
burguesía, identificada con las ideas liberales, ideas basadas en la defensa
de las libertades individuales; en el derecho de cada hombre a ejercer sus
derechos esenciales: la libertad de expresión, de comercio, el derecho a la
propiedad y a la seguridad. Por primera vez se proclamó la existencia de los
derechos que todo hombre posee como hombre y como ciudadano, a partir
de un principio hasta ese momento desconocido: la igualdad ante la ley.
De todas las revoluciones contemporáneas, la francesa fue el único gran
movimiento de ideas que produjo un efecto real sobre todo el mundo. Junto
con la revolución norteamericana, la revolución francesa impuso el
constitucionalismo. Al imponer los principios de soberanía popular y abolir la
monarquía Francia quedo enfrentada a toda la Europa monárquica.
Así comenzó una prolongada guerra que se extendería por 23 años. Para
hacer frente a tan formidable enemigo fueron movilizados los sectores
populares urbanos que, con los jacobinos, llegaron a tener presencia en el
gobierno revolucionario. En 1794 desaparecido el peligro de una derrota, la
alta burguesía, integrada por grandes comerciantes, financistas, banqueros y
propietarios de industrias, se hizo cargo del Poder.
En conclusión, el proceso que condujo a la independencia de la América
española la revolución francesa tuvo una gran importancia, junto con el
movimiento de independencia de los Estados Unidos y la invasión
napoleónica en España y Portugal. En este proceso se destacan las ideas
heredadas de la ilustración y, sobre todo, la doctrina de la soberanía del
pueblo, opuesta a la tradición que concentraba la soberanía en el rey, como
base teórica en que se apoyó la independencia. Los hechos, sin embargo,
deben ser matizados. En primer lugar, aunque entre las gentes educadas de
la América Hispana y Portuguesa hubo mucha afición por la lectura,
supliendo los libros la falta de universidades, y que circulaban por estos
suelos, en los siglos XVII y XIX muchos libros de orientación moderna, la
clase culta era una pequeña minoría y la educación controlada por la Iglesia.
En segundo lugar, el hábito democrático que brotó en Francia era una
expresión política de una clase en ascenso que, en su lucha por controlar el
despotismo de la Corona y eliminar los privilegios, buscó crear una
comunidad apoyada en el consenso. Convertida esta comunidad en sujeto
político, tornase soberana e impuso un control sobre el Ejecutivo en un
territorio identificado por una misma cultura (de allí la idea de nación), lo que
supone la aceptación de un gobierno libremente consentido. En otras
palabras, la. Concepción política de la revolución francesa se concretó en el
Estado -Nación. La realidad en América Latina, que heredó un modelo de
Estado en una sociedad muy distinta a la sociedad europea es diferente. El
orden social que se estableció en España y sus posesiones fue el de una
aristocracia latifundista, unida a la Corona y a la Iglesia.

UNIDAD DIDÁCTICA III: EL PENSAMIENTO LIBERTADOR


1. El liberalismo: fundamentos teóricos de la gesta independentista.
2. El pensamiento universal de Francisco de Miranda.
3. El Bolivarianismo: pensamiento político de Simón Bolívar. Manifiesto de
Cartagena, Carta de Jamaica, Discurso de Angostura, Constitución de
Bolivia.
4. Doctrina de Integración Americana: La Gran Colombia, El Congreso de
Panamá.
5. Doctrina Monroe: antibolivarianismo.
6. Ideas educativas: coloniales, emancipadoras. Andrés Bello, Simón
Rodríguez.
UNIDAD DIDÁCTICA IV: HEGEMONÍA DE LA OLIGARQUÍA
1. Hegemonía del pensamiento conservador: desintegración de la obra
bolivariana
2. Hegemonía del pensamiento liberal: el Federalismo. Pensamiento
antioligárquico de Ezequiel Zamora, Benito Juárez, Emiliano Zapata,
Pancho Villa.

UNIDAD DIDÁCTICA V: EL LIBERALISMO ECONÓMICO COMO SOPORTE


PARA EL DESARROLLO DEL CAPITALISMO EN AMÉRICA
1. Corrientes del pensamiento político que sustentan el desarrollo del
capitalismo: Socialdemocracia y Democracia cristiana. Betancourt,
Belaunde Terry, Frei, Caldera.
2. El positivismo como sustento de la educación en América.
3. El bipartidismo en América.
4. Intervenciones imperialistas en América Latina: económicas, invasiones
territoriales, golpes de estado, guerras mediáticas.

UNIDAD DIDÁCTICA VI: CORRIENTES EMANCIPADORAS DEL SIGLO XX EN


AMÉRICA LATINA
1. José Martí: Nuestra América.
2. El Zapatismo.
3. El Gaitanismo.
4. El Sandinismo.
5. El Peronismo.
6. Ejércitos de liberación popular.

UNIDAD DIDÁCTICA VII. EL SOCIALISMO EN AMÉRICA LATINA


1. Socialismo utópico: Abreu De Lima.
2. Socialismo Indigenista: Mariátegui.
3. Socialismo cubano: Ernesto “Che” Guevara, Fidel Castro.
4. Socialismo venezolano: Socialismo del siglo XXI, Hugo Chávez Frías.
ESTRATEGIAS METODOLÓGICAS:
Se propone la recopilación de autores y temas adscritos al contenido programático
en las siguientes fases:
- Investigación
- Lectura
- Discusión
- Conclusiones
- Compilaciones
El estudiante entregará al final del tramo un portafolio.

PLAN DE EVALUACIÓN
U.C. PENSAMIENTO POLÍTICO LATINOAMERICANO
TRAYECTO: 1 TRAMO: 1
NÚMERO DE HORAS SEMANALES: 2 PROFESOR (A):
___________________________

seman fech Unidad Contenid Estrategias Activida Ponderaci Observacion


a a didáctic os metodológic d ón es
a as

Referencias bibliográficas

ACOSTA, Vladimir. El continente prodigioso. Mitos e imaginario medieval en la


conquista americana. Caracas, Universidad Central de Venezuela, 1992

ANDERSON, Benedict. Comunidades imaginadas. Reflexiones sobre el origen y la


difusión del nacionalismo. México, D.F., Fondo de Cultura Económica, 1887

ARCILA FARÍAS, Eduardo. El régimen de la propiedad territorial en


Hispanoamérica. Caracas, Universidad Central de Venezuela, 1968

ARCILA FARÍAS, Eduardo. El Siglo Ilustrado en América. Caracas, Ministerio de


Educación, 1955

ARCINIEGAS, Germán. El Caballero de El Dorado. México, Aguilar, 1978

ARCINIEGAS, Germán. Los alemanes en la conquista de América. Buenos Aires,


Editorial Losada S. A., 1941

ARCINIEGAS, Germán. Los Comuneros. Madrid, Sedmay Ediciones, 1977

ARNAULT, Jacques. Historia del colonialismo. Buenos Aires, Ed. Futuro, 1960

BAGU, Sergio. Economía de la sociedad colonial. Ensayo de historia comparada


de América Latina. Buenos Aires, Librería El Ateneo Editorial, 1949

BARBOSA RAMÍREZ, René. La estructura económica de la Nueva España.


México, Siglo Veintituno Editores S. A., 1971

BAYON, Damián. La transición a la modernidad. Bogotá, Tercer Mundo Editores,


1989
BENZ, Wolfgang y Hermann GRAML (comp.). El siglo XX. Problemas mundiales
entre los dos bloques de poder. México, Siglo XXI, 1988

BETANCOURT, Rómulo. Venezuela, política y petróleo. Caracas, Edit. Senderos,


1969

BLANCO, José Félix y Ramón AZPÚRUA. Documentos para la historia de la vida


pública del Libertador de Colombia, Perú y Bolivia. Caracas, Imprenta de La
Opinión Nacional, 1875 – 1877

BOBBIO, Norberto (1996). Liberalismo y democracia. México, D.F.: Limusa

BOLÍVAR, Simón. Obras completas. La Habana, Editorial Lex, 1947

BRICEÑO GUERRERO, José Manuel. El laberinto de los tres minotauros.


Caracas, Monte Ávila Editores Latinoamericana, C.A., 1993

BRITO FIGUEROA, Federíco. Tiempo de Ezequiel Zamora. Caracas, Universidad


Central de Venezuela, Ediciones de la Biblioteca, 1996

BROUÉ, Pierre y Émile TÉMIME. La Revolución y la guerra de España. México,


Fondo de Cultura Económica, 1962

BURKE, Edmund. Textos políticos. México, Fondo de Cultura Económica, 1984

CABALLERO, Manuel. Gómez, el tirano liberal. Caracas, Monte Ávila Editores,


1994

CABRUJAS, José Ignacio. “El Estado del disimulo”. En: Heterodoxia y Estado: 5
respuestas. Caracas, edición especial de la COPRE, Revista de Ideas, Estado y
Reforma, Noviembre de 1987

CAPPELLETI, Ángel (1992) Positivismo y evolucionismo en Venezuela. Monte


Ávila Editores. Caracas

CARDOSO, Ciro Flamarion, y Héctor PÉREZ BRIGNOLI. Historia económica de


América Latina. Barcelona, España, Edit. Crítica, 1981

CARMAGNANI, Marcelo. Estado y sociedad en América Latina, 1850 – 1930.


Barcelona, España, Edit. Crítica, 1984

CARMAGNI, Marcelo (coordinador) Federalismos Latinoamericanos:


México/Brasil/Argentina. México, D.F., Fondo de Cultura Económica, 1996

CARMAGNI, Marcelo; HERNÁNDEZ CHÁVEZ, Alicia; ROMANO, Ruggiero


(coordinadores) Para una historia de América Latina. I Las Estructuras. México,
D.F., Fondo de Cultura Económica, 1999
CARRERA DAMAS, Germán, Lourdes FIERRO, Francisco RODRÍGUEZ. Proyecto
Nacional y Clase Dominante en el Caribe. (Mímeo, 4 vols.). Caracas, Consejo de
Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT) y Biblioteca Nacional, 1992

CARRERA DAMAS, Germán. De la dificultad de ser Criollo. Caracas. Editorial


Grijalbo. 1993

CARRERA DAMAS, Germán. La disputa por la independencia y otras peripecias


del método crítico en la historia del ayer y del hoy. Caracas, Ediciones ge, 1995

CARRERA DAMAS, Germán. Una nación llamada Venezuela. Caracas. Monte


Ávila. 1986

CARVALHO NETO, Paulo. Estudios afros (Brasil, Paraguay, Uruguay, Ecuador).


Caracas, Universidad Central de Venezuela, 1971

CARVALLO, Gastón. Próceres, Caudillos y rebeldes. Crisis del sistema de


dominación 1830-1908. Caracas, Grijalbo, 1994

CASTRO LEIVA, Luis. La Gran Colombia. Una ilusión Ilustrada. Caracas. Monte
Ávila. 1985

CHARTIER, Roger. Espacio público, crítica y desacralización en el siglo XVIII. Los


orígenes culturales de la Revolución Francesa. Barcelona, Editorial Gedisa, S.A.,
1995

COBO BORDA, Juan Gustavo. Leyendo América Latina: poesía , ficción, cultura.
Caracas, Academia Nacional de la Historia, 1989

COLECCIÓN DE DOCUMENTOS INÉDITOS DE ULTRAMAR. Madrid, Impresores


de la Real Casa, 1890

COLECCIÓN DE DOCUMENTOS INÉDITOS DE ULTRAMAR. Segunda serie..


Madrid, Estudio Tipográfico Sucesores de Rivadeneyra, 1890

COLECCIÓN DE DOCUMENTOS INÉDITOS, RELATIVOS AL


DESCUBRIMIENTO, CONQUISTA Y COLONIZACIÓN DE LAS POSESIONES
ESPAÑOLAS EN AMÉRICA Y OCEANÍA, SACADOS EN SU MAYOR PARTE DEL
REAL ARCHIVO DE INDIAS. Madrid, Imprenta de Manuel B. de Quirós, 1864 –
1884

CORDERO VELÁSQUEZ, Luis. Betancourt y la conjura militar del 45. Caracas,


Lumevec, 1978

Cronistas y primitivos historiadores de la Tierra Firme. Caracas, Fundación de


Promoción Cultural de Venezuela., 1988. 2 tomos
CROUZET, Maurice (dir.). Historia general de las civilizaciones. Barcelona,
España, Ediciones Destino, 1967

CUNILL GRAU, Pedro. Las transformaciones del espacio geohistórico


latinoamericano, 1930-1990. México, D.F., Fondo de Cultura Económica, 1995

DE AMÉZAGA ARESTI, Vicente. Hombres de la Compañía Guipuzcoana.


Caracas, Banco Central de Venezuela, 1963

DE ARTÍÑANO, Gervasio. Historia del comercio con las Indias durante el dominio
de los Austrias. Barcelona, España, edición del autor, 1917

DE LA PLAZA, Salvador. La formación de las clases sociales en Venezuela.


Caracas, Fondo Editorial Salvador de la Plaza, s/f.

DE LA VEGA, Garcilaso. Comentarios reales de los Incas. Buenos Aires, Eudeba,


1977

DE STEFANO, Luciano. La sociedad estamental de la baja edad media española


a la luz de la literatura de la época. Caracas, Facultad de Humanidades y
Educación/Instituto de Filología “Andrés Bello”, Universidad Central de Venezuela,
1966

DI TELLA, Torcuato (1983) El Socialismo y la Realidad de América Latina. Primer


Congreso del Pensamiento Político Latinoamericano. Ediciones del Bicentenario
del Natalicio de Simón Bolívar. Tomo II. Volumen IV. Caracas

DOCTRINA DEL LIBERTADOR (Prólogo de Augusto Mijares; compilación, notas y


cronología de Manuel Pérez Vila) Caracas, Biblioteca Ayacucho, 1985

DOCUMENTOS RELATIVOS A LA REVOLUCIÓN DE GUAL Y ESPAÑA. Instituto


Panamericano de Geografía e Historia. Caracas, 1949

DORRONSORO, Josune, Pàl Rosti: Una visión de América Latina. Caracas,


Ediciones Galería de Arte Nacional, 1983

EASTWICK, Edward B. Venezuela o apuntes sobre la vida de una república


sudamericana, con la historia del empréstito de 1864. Caracas, Banco Central de
Venezuela, 1959

El cambio del papel del estado en América Latina / coordinado por Menno Vellinga.
México, Siglo Veintiuno, 1997

ENCINA, Francisco y Leopoldo CASTEDO. Resumen de la Historia de Chile.


Santiago de Chile, Editorial Zig-Zag, 1954
FELICE CARDOT, Carlos. Rebeliones, motines y movimientos de masas en el
siglo XVIII venezolano (1730 - 1781). Caracas, Academia Nacional de la Historia,
(El libro menor, 2), 1977

FIELDHOUSE, David K. Los imperios coloniales desde el siglo XVIII. México, Siglo
XXI, 1986

FILIPPI, Alberto (dir.). Bolívar y Europa en las crónicas, el pensamiento político y la


historiografía. Siglo XIX. Caracas, Ediciones de la Presidencia de la República,
(Bicentenario del Nacimiento del Libertador Simón Bolívar), 1988

FLOYD, Mary B. Guzmán Blanco. La dinámica de la política del Septenio.


Caracas, Instituto Autónomo Biblioteca Nacional/Fundación para el Rescate del
Acervo Documental Venezolano, 1988

FOHLEN, Claude. La América Anglosajona, de 1815 a nuestros días. Barcelona,


España, Editorial Labor, 1967

FORMACIÓN HISTÓRICO SOCIAL DE AMÉRICA LATINA (Coordinador, Germán


Carrera Damas). Caracas, Ediciones de la biblioteca, Universidad Central de
Venezuela, 1982

FRIEDE, Juan. Los Welser en la Conquista de Venezuela. Caracas - Madrid,


Edime, 1961

Furtado, Celso (1977). La economía latinoamericana, formación histórica y


problemas contemporáneos. México, D.F., Siglo XXI Editores

FURTADO, Celso. La Economía latinoamericana desde la conquista ibérica hasta


la Revolución Cubana. Santiago de Chile, Universidad de Chile, 1969

GAOS, José. Historia de nuestra idea del mundo. México, D.F., Fondo de Cultura
Económica, 1992

GARCÍA ORO, José. Prehistoria y primeros capítulos de la evangelización en


América. Caracas, Ediciones Tripoide, 1988

GELLNER, Ernest. Cultura, identidad y política: el nacionalismo y los nuevos


cambios sociales / Ernest Gellner. -- 3 ed Barcelona, España: Gedisa , 1998.

GILIJ, Felipe Salvador. Ensayo de Historia Americana. Caracas, Petróleos de


Venezuela S. A. (Colección V Centenario del Encuentro entre dos Mundos), 1992.
2 vols.
GONZÁLEZ CASANOVA, Pablo (dir.). América Latina: historia de medio siglo.
México, Siglo XXI, 1985

GONZÁLEZ STEPHAN, Beatriz y otros. Esplendores y miserias del siglo XIX.


Cultura y sociedad en América Latina. Caracas, Monte Ávila Editores
Latinoamericana, C.A., 1994

GUEDEZ CAÑIZALES, Emigdio. El indio en la guerra de independencia. Dirección


de Cultura, UCV, Caracas. 1993

GUZMAN PÉREZ, José Eduardo. López Contreras, el último General. Caracas,


Ediciones de la Dirección de Información y Relaciones Públicas de la Gobernación
del Distrito Federal, 1983

HEERS, Jacques. Occidente durante los siglos XIV y XV. Barcelona, España,
Editorial Labor, 1968

HERRERA LUQUE, Francisco J. Los viajeros de Indias. Ensayo de interpretación


de la sociología venezolana. Caracas, Imprenta Nacional, 1961

HOBSBAWM Eric. La era de las revoluciones 1789-1848. Barcelona. Editorial


Crítica. 1997

HOBSBAWM, E. John. La era del capitalismo. Madrid, Ediciones Guadarrama,


1977

HUMBOLDT, Alejandro de. Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo


Continente hecho en 1799, 1800, 1801, 1803, y 1804. Caracas, Escuela Técnica
Industrial, Talleres de Artes Gráficas, 1941 – 1942

IDEAS DE LA FEDERACIÓN EN VENEZUELA 1811 – 1900. Caracas, Monte Ávila


Editores, Biblioteca del Pensamiento Venezolano José Antonio Páez, 1995

INSTITUTO PANAMERICANO DE GEOGRAFÍA E HISTORIA. Conjuración de


1808 en Caracas para la formación de una Junta Suprema Gubernativa. Caracas,
Comité de orígenes de la Emancipación, (Publicación núm 3), Instituto
Panamericano de Geografía e Historia, 1949

IZARD, Miguel. El miedo a la Revolución. La lucha por la libertad en Venezuela


(1777 – 1830). Madrid, Editorial Tecnos, 1979

JHONSON, Lyman; TANDETER, Enrique. Economías coloniales. Precios y


salarios en América Latina, siglo XVIII. Buenos Aires, Fondo de Cultura
Económica, 1992
KONETZE, Richard. Colección de documentos para la historia de la formación
social de Hispanoamérica, 1493.1810. Madrid, Consejo Superior de
Investigaciones Científicas, Vol. III, 1691-1779

KONETZKE, Richard. América Latina. La época colonial. México, Siglo XXI, 1991

KRISPIN, Karl. La Revolución Libertadora. Caracas, s/e, 1990

LA DOCTRINA POSITIVISTA. Caracas, Congreso de la República de Venezuela,


colección Pensamiento Político Venezolano del siglo XIX. Textos para su estudio,
Tomos I y II, Nros. 13 y 14, 1983

LEVEL de GODA, Luis. Historia contemporánea de Venezuela, política y militar


(1858-1886). Caracas, Presidencia de la República, Oficina Central de
Información, 1976

LIBERALES Y CONSERVADORES. Textos doctrinarios. Caracas, Congreso de la


República, Colección Pensamiento Político Venezolano del siglo XIX, textos para
su estudio, Tomos I y II, 1983

LIEHR, Reinhard (ed.). América Latina en la época de Simón Bolívar. (La


formación de las economías nacionales y los intereses económicos europeos,1800
- 1850). Berlín, Colloquium Verlag, 1989

LIEUWEN, Edwin. Generales contra Presidentes en América Latina. Buenos Aires,


Ediciones Siglo XX, 1965

LOMBARDI, John V. Venezuela. La búsqueda del orden; el sueño del progreso.


Barcelona, Editorial Crítica, 1985

LYNCH, John. Las revoluciones hispanoamericanas 1808-1826. Barcelona.


Editorial Ariel. 1976

MARAVALL, José Antonio. Antiguos y modernos. Madrid, Alianza Editorial, S.A.,


1986

MARAVALL, José Antonio. Estado moderno y mentalidad social. Madrid, Alianza


Editorial, S.A., 1986, 2 tomos

MELLAFE, Rolando. La Esclavitud en Hispanoamérica. Buenos Aires, Eudeba


(Editorial Universitaria de Buenos Aires), 1964

MIJARES, Augusto. La interpretación pesimista de la sociología


hispanoamericana. Madrid, Afrodisio Aguado, S. A. 1952

MIRES, Fernando (1993). El discurso de la miseria o la crisis de la sociología en


América Latina. Caracas. Editorial Nueva Sociedad
MOMMSEN, Wolfgang J. La época del imperialismo. Europa 1885 – 1918. México,
Siglo XXI, 1989

MONTERO, Maritza. Ideología, Alineación e Identidad Nacional. Caracas,


Ediciones de la Biblioteca, Universidad Central de Venezuela, 1991

MONTESQUIEU. Del espíritu de las leyes. Barcelona, Editorial Orbis, 1984, dos
tomos

MOSONYI, Esteban (1982) Identidad Nacional y Culturas Populares. Editorial La


Enseñanza Viva. Caracas

MUJERES LATINOAMERICANAS EN CIFRAS. Madrid, Ministerio de Asuntos


Sociales, Instituto de la Mujer y Santiago de Chile, Facultad Latinoamericana de
Ciencias Sociales (FLACSO), 1993

NORIA, Omar. La teoría de la representación política del abate Sieyés. Caracas.


Universidad Católica Andrés Bello. 1999

NUCETE-SARDI, José. Aventura y tragedia de don Francisco de Miranda.


Caracas, ministerio de Educación Nacional, s/f.

NÚÑEZ, Enrique Bernardo. El hombre de la levita gris en los años de la


Restauración Nacional. Caracas, Monte Ávila Editores, C.A., 1986

ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS. Panorama social de América


Latina. Santiago de Chile: Naciones Unidas, Comisión Económica para América
Latina y el Caribe, 1994

OTS CAPDEQUÍ, J. M. El Estado español en las Indias. México, El Colegio de


México, 1941

PALACIO FAJARDO, Manuel. Bosquejo de la Revolución en la América Española.


Caracas, Publicaciones de la Secretaría General de la Décima Conferencia
Interamericana, 1953

PARRA DÁVILA, Álvaro (2000) El Pensamiento Político del Libertador Bolívar y la


Constitución de Bolivia. El Centauro. Caracas

PENSAMIENTO CONSERVADOR (1815-1898) (Prólogo de José Luis Romero;


compilación, notas y cronología de José Luis Romero y Luis Alberto Romero).
Caracas, Biblioteca Ayacucho, 1986

PENSAMIENTO CONSERVADOR DEL SIGLO XIX (Selección y estudio preliminar


de Elías Pino Iturrieta) Caracas, Monte Ávila Editores, 1993
PENSAMIENTO LIBERAL DEL SIGLO XIX (Selección y estudio preliminar de Inés
Quintero) Caracas, Monte Ávila Editores, 1992

PÉREZ ALFONZO, Juan Pablo. Petróleo y dependencia. Caracas, Síntesis Dos


Mil, 1971

PINO ITURRIETA, Elías. Fueros, civilización y ciudadanía. Caracas, Universidad


Católica Andrés Bello, 2000

PINO ITURRIETA, Elías. La mentalidad venezolana de la emancipación. Caracas,


Ediciones Eldorado, 1991

PINO ITURRIETA, Elías. Las ideas de los primeros venezolanos. Caracas, Monte
Ávila Editores Latinoamericana, 1992

QUINTERO, Inés. El Ocaso de una Estirpe. Caracas, Fondo Editorial Acta


Científica Venezolana/Alfadil-Trópicos, 1989

RAMA, Carlos M. Historia de América Latina. Barcelona, España, Bruguera S. A.,


1978

RAYMOND, Aron (1999) Introducción a la Filosofía Política, “Democracia y


Revolución”, democracias representativas y democracias populares, el ejercicio
del poder y sus antinomias. Ediciones Paidós Ibéricas, S.A. Buenos Aires

REY, Juan Carlos (1982) La Condición de Bolívar o la imposibilidad de la


democracia. Politeia Nº 26. Caracas

REX, John (1978). “Introducción: las nuevas naciones y las minorías étnicas.
Aspectos teóricos y comparados.” En: Raza y clase en la sociedad postcolonial.
París, UNESCO

RODRIGUEZ, Simón. Luces y virtudes sociales. Sociedades americanas en 1828.


Facsímile de los textos publicados en Valparaíso en 1840 y en Lima en 1842,
respectivamente. Caracas, Ediciones Centauro, 1975

ROMANO Ruggiero, Alberto TENENTI. Los fundamentos del mundo moderno:


Edad Media tardía, Renacimiento, Reforma. México D.F, Siglo XXI, 1971

ROMERO, José Luis y ROMERO, Luis Alberto. Pensamiento político de la


emancipación. Caracas, Biblioteca Ayacucho. 1977, dos Tomos

ROMERO, José Luis. Latinoamérica: las ciudades y las ideas. Buenos Aires, Siglo
XXI Editores, S.A., 1986

ROSCIO, Juan Germán. El triunfo de la libertad sobre el despotismo. (Prólogo,


cronología y bibliografía de Domingo Miliani) Caracas, Biblioteca Ayacucho, 1996
ROSCIO, Juan Germán. Escritos Representativos. Caracas. Ediciones de la
Presidencia. 1971

ROUSSEAU, Juan Jacobo. El Contrato Social. Bogotá. Editorial Gráficas


modernas. S/D

Rubert de Ventos, Xavier (1990). Nacionalismos. El laberinto de la identidad.


Madrid: Espasa-Bolsillo

SABINE, George Holland. Historia de la teoría política. México - Buenos Aires,


Fondo de Cultura Económica, 1965

SALAS, Alberto M. Tres cronistas de Indias: Pedro Martir, Oviedo, Las Casas.
México - Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 1959

SALAZAR, José Miguel (1986). “El latino americanismo como idea política.” En:
Montero, Maritza (Comp.) Psicología política latinoamericana. Caracas, Panapo

SÁNCHEZ ALBORNOZ, Nicolás. La Población de América Latina: desde los


tiempos precolombinos. Madrid, Alianza Universidad, 1973

SANZ, Miguel José. Teoría Política y Ética de la Independencia. (Compilación por


Pedro Grases) Caracas. Ediciones del Colegio Universitario Francisco de Miranda.
1979

SARRAILH, Jean. La España Ilustrada del siglo XVIII. México, D.F., Fondo de
Cultura Económica, 1969

SEGNINI, Yolanda. Las luces del gomecismo. Caracas, Alfadil Ediciones, 1987

SÉJOURNÉ, Laurette. América Latina. Antiguas culturas precolombinas. México,


Siglo XXI, 1991

SILVA, Ludovico. Teoría y práctica de la ideología. México, Editorial Nuestro


Tiempo S. A., 1975

SORIANO de GARCÍA PELAYO, Graciela. El personalismo político


hispanoamericano del siglo XIX. Criterios y proposiciones metodológicas para su
estudio. Caracas, Monte Ávila Editores Latinoamericana, 1993

SOSA A., Arturo (1985). Ensayos sobre el pensamiento político positivista


venezolano. Caracas, Ediciones Centauro
STOETZER, Carlos. El pensamiento político en la América española durante el
período de la emancipación (1789 - 1825). Madrid, Instituto de Estudios Políticos,
1966

SUNKEL, Oswaldo; PAZ, Pedro. El subdesarrollo Latinoamericano y la teoría del


desarrollo. México, D.F., Siglo XXI Editores, S.A., 1970

Touraine, Alain (1992). Crítica a la modernidad. Buenos Aires: Fondo de Cultura


Económica

URBANEJA, Diego Bautista. La idea política de Venezuela 1830 –1870. Caracas,


Cuadernos Lagoven, (Cuatro Repúblicas), 1988.

USLAR PIETRI, Arturo. La Creación del Nuevo Mundo. Caracas, Grijalbo S. A.,
1992

USLAR PIETRI, Juan. Historia de la rebelión popular de 1814. Madrid, Edime,


1972

VALLENILLA LANZ, Laureano. Cesarismo democrático. Estudios sobre las bases


sociológicas de la constitución efectiva de Venezuela. Caracas, Monte Ávila
Editores Latinoamericana, 1990

VALLENILLA LANZ, Laureano. Disgregación e integración. Caracas, Tipografìa


Universal, 1930

Varios autores. Evolución y crisis de las ideologías de izquierdas. Caracas,


Editorial Nueva Sociedad, 1993.

VESPUCIO, Américo. El Nuevo Mundo. Cartas relativas a sus viajes y


descubrimientos. Buenos Aires, Editorial Nova, Biblioteca Americanista, Estudio
preliminar de Roberto Levillier, 1951

VILLASANTE, Tomás R. (1994). Las ciudades hablan. Identidades y movimientos


sociales en seis metrópolis latinoamericanas. Caracas: Nueva Sociedad

WEBER, Max (1997). Economía y sociedad. Bogotá: Fondo de Cultura Económica

XAVIER-GUERRA, Francois. Modernidad e independencias. Ensayos sobre las


revoluciones hispánicas. México, D.F., Fondo de Cultura Económica, 2000

XAVIER-GUERRA, Francois; ANNICK, Lemperiere, et al. Los espacios públicos en


Ibero América. Ambigüedades y problemas. Siglos XVIII y XIX. México, D.F.,
Fondo de Cultura Económica, 1998
ZEA, Leopoldo. América Latina: largo viaje hacia sí misma. Caracas, Ediciones de
la Facultad de Humanidades y Educación, Universidad Central de Venezuela,
1993

ZEA, Leopoldo. La filosofía como compromiso de liberación. (Prólogo de Arturo


Ardao; selección, cronología y bibliografía de Liliana Weinberg de Magis y Mario
Magallón) Caracas, Biblioteca Ayacucho, 1991

ZEA, Leopoldo. Simón Bolívar, integración en la libertad. Caracas, Monte Ávila


Editores, 1989

ZIEMS, Ángel. El gomecismo y la formación del Ejército Nacional. Caracas,


Ateneo de Caracas, 1979

S-ar putea să vă placă și