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Infantilismo sexual: durante esta búsqueda de satisfacción de su libido (deseo sexual), el niño
experimenta fracasos y reprimendas por parte de sus padres o la sociedad por lo que podrá
asociar la angustia con la zona erógena en particular. Para evitar esta angustia, el niño crea
fijación, preocupado por los temas psicológicos relacionados a esta zona en cuestión, que persiste
en la adultez y subyace en la personalidad y la psicopatología del hombre o la mujer, incluyendo
neurosis, histeria, trastornos de personalidad, etc.
Rango de
Fase Zona(s) erógena(s) Consecuencias de la fijación psicológica
edad
11+ años
Frigidez, impotencia, relaciones
Genital (Pubertad e Intereses sexuales maduros
insatisfactorias
n adelante)
A partir de los diferentes modos en los que la etapa de crecimiento de los menores condiciona la
aparición de uno u otro tipo de fijación, Sigmund Freud formuló la teoría que uniría la sexualidad
con el desarrollo del inconsciente freudiano.
En ella, se propone que en los primeros años de nuestras vidas atravesamos distintas etapas de
desarrollo vinculadas a la sexualidad y a distintas fijaciones, y que lo que ocurra durante ellas
influirá en el modo en el que el inconsciente condicione a la persona una vez haya llegado a la
adultez. Es decir, que cada una de las etapas del desarrollo psicosexual marcarían los tempos que
delimitan qué tipo de acciones son necesarias para expresar la líbido de manera satisfactoria y
cuáles pueden llegar a crear conflictos que queden enquistados en nosotros de manera
inconsciente.
Según la teoría freudiana, las etapas de desarrollo psicosexual y sus características son las
siguientes.
1. Etapa oral
La etapa oral ocupa aproximadamente los primeros 18 meses de vida, y en ella aparecen los
primeros intentos por satisfacer las demandas promovidas por la libido. En ella, la boca es la
principal zona en la que se busca el placer. También es la boca una de las principales zonas del
cuerpo a la hora de explorar el entorno y sus elementos, y esto explicaría la propensión de los más
pequeños a intentar "morderlo" todo.
Si se impide tajantemente que los bebés utilicen su boca para satisfacerse, esto podría producir un
bloqueo que haría que ciertos problemas quedasen fijados en el inconsciente (siempre según
Freud).
2. Etapa anal
Esta etapa se produciría desde el fin de la etapa oral y hasta los 3 años de edad. Se trapa de la fase
en la que se empiezan a controlar el esfínter en la defecación. Para Freud, esta actividad está
vinculada al placer y la sexualidad.
Las fijaciones relacionadas con esta fase del desarrollo psicosexual tienen que ver con la
acumulación y con el gasto, vinculadas con el espíritu ahorrador y la disciplina en el primer caso, y
con la desorganización y el derroche de recursos en el segundo.
3. Etapa fálica
Esta fase pulsional duraría entre los 3 y los 6 años, y su zona erógena asociada es la de los
genitales. De este modo, la principal sensación placentera sería la de orinar, pero también se
originaría en esta fase el inicio de la curiosidad por las diferencias entre hombres y mujeres, niños
y niñas, empezando por las evidentes disimilitudes en la forma de los genitales y terminando en
intereses, modos de ser y de vestir, etc.
Además, Freud relacionó esta fase con la aparición del "complejo de Edipo", en el que los niños
varones sienten atracción hacia la persona que ejerce el rol de madre y sienten celos y miedo
hacia la persona que ejerce el rol de padre. En cuanto a las niñas que pasan por esta etapa del
desarrollo psicosexual Freud "adaptó ligeramente la idea con Complejo de Edipo para que
englobas a estas, a pesar de que el concepto había sido desarrollado para que cobrase sentido
principalmente en los varones. Fue más tarde cuando Carl Jung propuso el complejo de Electra
como contraparte femenina al Edipo.
4. Etapa de latencia
Esta fase empieza hacia los 7 años y se extiende hasta el inicio de la pubertad. La etapa de latencia
se caracteriza por no tener una zona erógena concreta asociada y, en general, por representar una
congelación de las experimentaciones en materia de sexualidad por parte de los niños, en parte a
causa de todos los castigos y amonestaciones recibidas. Es por eso que Freud describía esta fase
como una en la que la sexualidad queda más camuflada que en las anteriores.
La etapa de latencia ha estado asociada a la aparición del pudor y la vergüenza relacionada con la
sexualidad.
5. Etapa genital
La etapa genital aparece con la pubertad y se prolonga en adelante. Está relacionada con los
cambios físicos que acompañan a la adolescencia. Además, en esta fase del desarrollo psicosexual
el deseo relacionado con lo sexual se vuelve tan intenso que no se puede reprimir con la misma
eficacia que en etapas anteriores.
La zona erógena relacionada con este momento vital vuelve a ser la de los genitales, pero a
diferencia de lo que ocurre en la fase fálica, aquí ya se han desarrollado las competencias
necesarias para expresar la sexualidad a través de vínculos de unión de carácter más abstracto y
simbólico que tienen que ver con el consenso y el apego con otras personas. Es el nacimiento de la
sexualidad adulta, en contraposición a otra ligada solo a las simples gratificaciones instantáneas y
obtenidas mediante actividades estereotípicas.
La teoría del desarrollo psicosexual puede llevar a producir cierto alarmismo si se piensa que una
mal gestión de la educación de los menores durante estas fases puede dejarles con traumas y todo
tipo de trastornos si no se entienden bien las ideas de Freud. Sin embargo, hay que tener en
cuenta que esta teoría durante fue formulada y desarrollada en un punto en el que la psicología
acababa de nacer.
Cuando Sigmund Freud desarrolló sus teorías, se basaba en casos concretos de pacientes que
conocía, es decir, que su manera de investigar se fundamentaba en una mezcla de estudios de
casos e interpretación de los contenidos simbólicos del comportamiento de las personas. Apenas
establecía hipótesis que pudieran ser contrastadas con la realidad, y cuando lo hacía, se limitaba a
observar, no a realizar experimentos. La teoría del desarrollo psicosexual no fue una excepción a
esta norma.
Tampoco tiene mucho sentido investigar acerca de la utilidad de la teoría del desarrollo
psicosexual utilizando para ello análisis estadísticos, porque la formulación de estas ideas se
basaba en la interpretación que se hacía acerca de los actos de los pacientes y de su pasado.
En parte por esto y en parte porque el psicoanálisis freudiano no se ciñe a la epistemología usada
en la ciencia actual, no hay ningún motivo para pensar que esta teoría sirve para explicar y
predecir los problemas vinculados a la sexualidad y la socialización de las personas. Eso significa
que la teoría psicosexual no puede servir para detectar señales de alarma acerca de si los niños o
adolescentes se desarrollan correctamente o no, ni puede servir para asegurar que los trastornos
mentales se deben a esta clase de mecanismos.
Adolecente
La adolescencia es el período de la vida que se ubica entre la niñez y la adultez, si lo tenemos que
ubicar temporalmente en una edad determinada, la adolescencia comprendería más o menos
desde los 13/14 años hasta los 20 años aproximadamente.
Desde el aspecto físico, los cambios que comienzan a registrarse son varios. En las mujeres, se
presenta la primera menstruación, comienzan a crecer los pechos, se desarrolla el vello en todo el
cuerpo, las caderas se ensanchan y al estar “activo” el sistema reproductor, la mujer comienza a
ser fértil (apta para procrear, tener hijos). En el hombre, los cambios son otros: se desarrolla el
pene y los testículos, comienzan a experimentarse las primeras erecciones y eyaculaciones, la voz
se torna más gruesa, aparece el vello en diferentes partes del cuerpo, pero sobre todo en el
pecho, la cara y el pubis.
Entre la infancia y la adolescencia, suele denominarse “púberes” a los varones y niñas que
comienzan a experimentar estos cambios pero que aún no son adolescentes propiamente dichos.
Cuando la mayoría de estos cambios ya sea haya registrado, podemos decir que ha comenzado la
adolescencia. Mientras, la pubertad será esa etapa de transición entre “niño” y “adolescente”.
También decíamos que psíquicamente el ser humano experimenta cambios al entrar en esta
etapa, y sobre todo cuando está en su tránsito. Es en esta etapa donde se registra el término de la
escuela secundaria o escuela media, y el interrogante de qué hacer luego de la educación básica y
obligatoria es algo que preocupa a muchos. ¿Estudiar o trabajar?, suele ser un cuestionamiento
recurrente para muchos adolescentes. Claro que la decisión final dependerá de factores internos
(expectativas personales, voluntad, proyección a futuro, intereses, capacidades) así como también
de factores externos (situación económica de la familia, influencia de los padres, relación familiar).
Así como cuando en oportunidad de hablar sobre la infancia, el período anterior a la adolescencia,
acá en Definición ABC, les dábamos cuenta de la importancia de este momento como
consecuencia de ser en el cual se conformaban los sustentos afectivos e intelectuales de la
persona siendo estos clave en el futuro, la adolescencia también resulta ser clave en el sentido
que es aquí donde se va a producir una metamorfosis de cuerpo y mente que será determinante a
la hora de llegar a buen puerto de la adultez.
Por supuesto que esa definición de edad que les marqué más arriba es cierta pero a la vez algo
caprichosa, ya que la edad puede variar de un individuo a otro partiendo de la base que cada
persona tiene una experiencia y un entorno distinto e inigualable al de otro. Por eso es que
muchas veces, solemos escuchar a alguien decir sobre otro que es un eterno adolescente o que se
comporta como tal, aún ya habiendo pasado la edad calendario de serlo. Por ejemplo, existen
estudios que aseguran que la edad límite de la adolescencia es a los 25 años, cuando ya el cuerpo
no tiene posibilidad de experimentar ningún cambio de desarrollo ni continuar su crecimiento.
La adolescencia también se caracteriza por ser el momento de la vida en el cual la persona que lo
atraviesa empieza a padecer una crisis como consecuencia de ese crecimiento, se da cuenta que
está a mitad de camino, o sea ya no es más un niño y no quiere ser tratado como tal por sus
padres por ejemplo, pero tampoco es un adulto todavía por lo cual sigue necesitando de los
consejos y de la guía de los mayores para dar algunos pasos importantes.
También es recurrente que en este momento se den algunos comportamientos rebeldes como
resultado de esto último que hablábamos: los padres quieren poner ciertos límites porque el chico
no es adulto todavía, y este se resiste a tomarlos en cuenta. El contacto con un mundo más adulto
que niño, sumado a los cambios corporales, comienzan a configurar una serie de actitudes
diferentes de las que el “niño” tenía hasta ahora, y en esa crisis de transición entre etapas, la
incertidumbre, la excitación del “cuerpo nuevo” y la interacción con sujetos que atraviesan los
mismos problemas/cambios, pueden acarrear estas actitudes de rebeldía que referenciábamos
antes.
Característica
Características[editar]
Muchas culturas difieren respecto a cuál es la edad en la que las personas llegan a ser adultas. En
diversas regiones, el paso de la adolescencia a la edad adulta va unido a ceremonias y/o fiestas,
como por ejemplo en el Benei Mitzvá, que se celebra a los 12 años para las niñas y 13 años para
los niños (12 Años para los niños ortodoxos).7 Aunque no existe un consenso sobre la edad en la
que termina la adolescencia, psicólogos como Erik Erikson consideran que la adolescencia abarca
desde los doce o trece años hasta los veinte o veintiún años.8 Según Erik Erikson, este período de
los 13 a los 21 años es la búsqueda de la identidad, define al individuo para toda su vida adulta
quedando plenamente consolidada la personalidad a partir de los 21 años.9 Sin embargo, no
puede generalizarse, ya que el final de la adolescencia depende del desarrollo psicológico, la edad
exacta en que termina no es homogénea y dependerá de cada individuo, etc.
Los cambios biológicos y orgánicos durante la adolescencia marcan de modo casi definitivo el
dimorfismo sexual. Estos cambios dependen en gran medida del tipo constitucional, factores
genéticos y otros más circunstanciales como la nutrición o la presencia o no de determinados
desbalances hormonales que no necesariamente tienen que ser patológicos. En ocasiones los
adolescentes se preguntan el por qué de la diferencia en el desarrollo y la aparición de los
caracteres sexuales entre unos y otros, y la respuesta puede encontrarse en cualquiera de los
elementos señalados anteriormente. No obstante hay características que deben aparecer en una
edad determinada, independientemente de las variables, por lo que se recomienda que ante
cualquier inquietud se consulten a los especialistas en la temática.
Crecimiento y desarrollo
Desde el punto de vista del proceso de maduración,físico
se
observan dos grandes cambios:
Proporciones corporales:
Crecimiento Físico: En un principio es disarmónico, hasta
que logra el desarrollo completo, llegando a tenerPiel
un
cuerpo adulto. El peso y la altura se incrementan y los
músculos se desarrollan. Los principales órganos doblan
Desarrollo Sexual
el tamaño y la voz se modifica.
Desarrollo Cognitivo
Desarrollo Afectivo
Desarrollo Psicosocial
Desarrollo Moral
---
Grados de Tanner
Varones Mujeres
Piel
La piel es mucho más firme y existe una conexión fuerte entre las
capas lo que le da mayor resistencia a los agentes externos, los
cambios de ella más evidentes en el adolescente son las erupciones
de puntos negros que anteceden a la aparición de acné. Esto es
producto de la creciente actividad de las glándulas sebáceas, que
torna la piel más grasosa por el crecimiento de los poros y la
textura más gruesa de la misma.
Cambios hormonales.
Redistribución de grasa.
Desarrollo Sexual
Desarrollo Cognitivo
A esta edad por primera vez logran tratar con lo posible, lo hipotético, estos cambios afectan
tanto su razonamiento científico como su visión social y empatía.
Desarrollo Psicosocial
Según Erikson el adolescente debe enfrentar la crisis de la identidad versus la confusión de roles,
este se refiere al hecho de que el joven en su etapa anterior a la adolescencia aprendió ciertas
habilidades que ahora requiere desarrollar para alcanzar la vida adulta de manera exitosa y no
de una forma acelerada o tardía.
En esta etapa el joven debe aprender a ser tolerante, tratar
tanto con su propia generación como con otras, debe
orientar su energía y asumir que el camino a la adultez ya
comenzó y su llegada es inminente. La virtud que se obtiene
en esta etapa es la fidelidad, puede ser al nivel de pareja,
como de creencias e ideologías, es la capacidad de
identificarse con los propios valores y ser fiel a ellos, ya que
estos a veces difieren de los inculcados por los padres,
debido a que los valores y creencias de los jóvenes se ven
definidos por la educación recibida en el hogar y por su
entorno social que no siempre es acorde al del hogar.
vida en pareja
Según Kohlberg desde los 13 años se debería desarrollar la moralidad post-convencional. En una
primera etapa ellos piensan en términos racionales, valora la voluntad de la mayoría y el
bienestar de la sociedad, con mayor razón si éstos se ven sustentados por la ley, aunque
reconoce que hay ocasiones en que la necesidad humana y la ley entran en conflicto. A largo
plazo se opta por estar del lado de la ley, la mayoría de las personas se mantiene en esta etapa
durante toda la vida, sólo muy pocos llegan a la etapa superior, que consiste en valorar los
principios éticos universales en donde se hace lo que se considera correcto sin tomar en cuenta
las restricciones legales, se actúa bajo estándares internos y se cae en una autocondena si se les
ignora.