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INTRODUCCION A LA TERAPIA
A BASE DE ULTRASONIDOS
01513 ES
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Sumario PHYSIOMED ELEKTROMEDIZIN AG
Sumario
Capítulo 1 Ultrasonidos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
1.1 Historia de la terapia a base de ultrasonidos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
1.2 Fundamento funcional de los dispositivos terapéuticos de ultrasonidos . . . . . 1
1.3 Efectos de la terapia a base de ultrasonidos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
1.3.1 Efectos físicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
1.3.1.1 Efectos térmicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
1.3.1.2 Efectos mecánicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
1.3.2 Efectos fisiológicos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Capítulo 4 Contraindicaciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
Apéndice A Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
Índice . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26
Capítulo 1 Ultrasonidos
En medicina, los ultrasonidos abren un amplio abanico de posibilidades de diagnóstico y de terapia. Por ul-
trasonido se entiende la oscilación de la materia, a una frecuencia superior a 20 kHz. Tales frecuencias es-
tán por encima del intervalo de detección del oído humano. En la terapia a base de ultrasonidos se sue-
len aplicar frecuencias de 1 a 3 MHz.
Pero algunos efectos negativos, que eran el resultado de la realización de tratamientos a intensidades ex-
cesivas, pusieron en duda, temporalmente, la conveniencia de la terapia a base de ultrasonidos. Sin em-
bargo, hoy en día la terapia a base de ultrasonidos está firmemente establecida en fisioterapia. Basándose
en el hecho de que este tipo de terapia tiene mucho más éxito cuando se utilizan intensidades bajas, en
los últimos años la tendencia ha sido la de reducir al mínimo la intensidad utilizada (véase KNOCH et al.
1991, pág. 47 y siguientes). Así, la potencia de los dispositivos terapéuticos de ultrasonidos modernos sue-
le oscilar entre 0,1 W/cm2 y 3,0 W/cm2. Esto ha ampliado el abanico de posibilidades de tratamiento, ya
que se pueden aplicar combinaciones, por ejemplo, con corrientes de frecuencia baja o intermedia, sin
ningún riesgo (véase Terapia simultánea en página 10).
Inicialmente, el generador de alta frecuencia transmite una corriente alterna al transductor. El campo eléc-
trico en continua alternancia genera los cambios correspondientes en el material piezoeléctrico, que se
convierte en modulador. Así se producen ondas de ultrasonido que se propagan por el tejido adyacente
y se utilizan para la terapia.
Figura 2: Reabsorción de los ultrasonidos en diferentes tejidos con diferente contenido proteico. Adaptado de LOW /
REED 2000, 181.
La oscilación del ultrasonido tiene un efecto mecánico sobre las estructuras biológicas. El tejido tratado se
encuentra alternativamente bajo compresión y expansión. Esto produce cambios mínimos en la forma de
algunas de las células del organismo. Este efecto mecánico, que tiene una alta importancia para la fisiote-
rapia, se suele denominar micromasaje. También se manifiesta en forma de inducción de potenciales
eléctricos en las células (microcorrientes). Además, se ha demostrado que se producen efectos piezoeléc-
tricos que pueden detectarse especialmente en las áreas óseas. (GILLERT et al. 1993, pág. 189 y siguien-
tes; KNOCH et al. 1990, pág. 43 y siguientes).
El calentamiento del tejido (efecto térmico), que es el efecto más significativo que se produce al aplicar
ultrasonidos continuos (véase Ultrasonidos continuos en página 4), genera los efectos ya conocidos
del calor:
• hiperemia
• aceleración del metabolismo (microcirculación, procesos de difusión)
• mayor elasticidad de las estructuras del tejido conjuntivo (fibras de colágeno).
• analgesia
• destonización muscular y resolución de los espasmos
• aceleración del proceso de curación (LOW et al. 1993, 145; GILLERT et al. 1993, pág. 188 y siguientes)
• estimulación de la curación de las fracturas (KNOCH 1990, 44)
Cuando se realiza tratamiento con ultrasonidos pulsatorios, los efectos térmicos son más reducidos (véase
Ultrasonidos pulsatorios en página 4). No obstante, se logran efectos de micromasaje similares.
La intensidad elegida depende sobre todo de la indicación (tipo y fase de la afección, y objetivo del trata-
miento), de la constitución del paciente, de la región que se va a tratar, y de la estructura tisular predomi-
nante en esa región. La experiencia reunida a lo largo de los años con la terapia a base de ultrasonidos de-
muestra que los mejores resultados terapéuticos no se obtienen necesariamente utilizando intensidades al-
tas. Al contrario: la terapia moderna a base de ultrasonidos ha demostrado que las intensidades bastante
bajas (la intensidad mínima óptima) son las más eficaces.
Así, el efecto térmico del tratamiento con ultrasonidos pulsatorios es mucho menor (DREXEL et al. 1993,
143; KNOCH et al. 1991, 66). Por ello, los ultrasonidos pulsatorios son preferibles para realizar tratamien-
tos cuando no se desea producir un calor excesivo o si el calor provocaría daños: por ejemplo, para tratar
neuralgias e inflamaciones subagudas, para tratamientos iniciales, para aumentar la profundidad de pene-
tración sin causar irritación cutánea, o para la destonización muscular. Según YOUNG (en LOW et al.
2000, 196), los ultrasonidos pulsatorios son preferibles también para el tratamiento de los tejidos blandos.
Figura 4: Tasa de repetición de los ultrasonidos pulsatorios 1:3; tasa de repetición de los ultrasonidos pulsatorios 1:5; tasa
de repetición de los ultrasonidos pulsatorios 1:10;
Figura 5: Profundidad de penetración de los ultrasonidos en relación con la frecuencia, para diferentes tipos de tejido.
Adaptado de HOOGLAND en KNOCH et al. 1990, 52.
Por lo tanto, los ultrasonidos de una frecuencia de 1 MHz siguen siendo los que más nos interesan, espe-
cialmente en lo aplicable al tratamiento de los tejidos profundos (por ejemplo, periostio, cartílago, tendo-
nes).
La frecuencia de 3 MHz es más relevante para el tratamiento de la piel y de los tejidos adyacentes, por
ejemplo, para el tratamiento de las cicatrices. Además, se supone que la frecuencia de 3 MHz tiene un
efecto mecánico más intenso, y mayor efecto relajador de la musculatura (KNOCH et al. 1990, pág. 90 y
siguientes).
2.3 Intensidad
La intensidad de las ondas ultrasónicas emitidas se suele medir en W/cm2, es decir, en relación con la su-
perficie del transductor aplicado. La intensidad emitida está estrechamente relacionada con el tipo de ul-
trasonido, con la frecuencia, con la duración del tratamiento y con el tamaño del área que se va a tratar.
CALLIES (en KNOCH et al. 1990, 91) estableció las siguientes pautas para la intensidad de los ultrasonidos
continuos de 1 MHz de frecuencia. Según STEUERNAGEL (1997, 95), los mismos valores, aproximadamen-
te, son aplicables a los ultrasonidos pulsatorios:
• intensidad baja: 0,1 ... 0,3 W/cm2
• intensidad intermedia: 0,4 ... 0,8 W/cm2
• intensidad alta: 0,9 ... 1,2 W/cm2
Las intensidades bajas se utilizan principalmente para el tratamiento, a base de ultrasonidos, de articula-
ciones pequeñas o salientes óseos, para el tratamiento inicial y para los estados agudos, así como para es-
timular la formación de tejido calloso. Las intensidades altas se utilizan para tratar procesos crónicos, capas
gruesas de tejido adiposo, osificaciones, o cuando hay que alcanzar estratos tisulares profundos. Todos los
demás casos se suelen tratar con intensidad intermedia (LOW et al. 2000, pág. 197 y siguientes; KNOCH
et al. 1990, pág. 90 y siguientes).
Figura 6: Efecto terapéutico de los ultrasonidos, diagnóstico clínico - estructura tópica (de: SMOLENSKI 2000, 22)
Cuanto más aguda es una afección, menor es la intensidad y más corta es la duración del tratamiento. Los
estados crónicos precisan de una intensidad más alta y de sesiones de tratamiento más largas, así como de
un mayor número de sesiones.
Respecto de la duración del tratamiento, se considera que un tratamiento de 3 a 5 minutos por área a tra-
tar es corto, 6 a 10 minutos es intermedio, y 11 a 15 minutos es largo.
En el tratamiento directo, el transductor está en contacto directo con la piel del paciente. Es un hecho físi-
co que el aire refleja casi por completo las ondas ultrasónicas. Por lo tanto, es esencial que el aire quede
completamente excluido en el punto de contacto del transductor con la piel, con el fin de lograr una
transmisión óptima de los ultrasonidos. Esto se consigue utilizando un medio de acoplamiento adecuado.
Como medio de acoplamiento se suele usar gel para ultrasonidos o, en algunos casos, aceite. Se aplica
al área de piel adecuada, y a la superficie del transductor. Si no se aplica suficiente gel para ultrasonidos, o
si no se aplica adecuadamente, la transmisión de los ultrasonidos puede verse seriamente dificultada, o in-
cluso no lograrse.
En vez de gel para ultrasonidos pueden aplicarse como medio de acoplamiento medicamentos permea-
bles, por ejemplo, analgésicos, antiinflamatorios, antirreumáticos, etc. Estos medicamentos penetran en el
tejido (fonoforesis). Los mejores resultados en lo que se refiere a la fonoforesis se han logrado con ultra-
sonidos pulsatorios, a una frecuencia de 3 MHz (LOW 1993, pág. 149 y siguientes).
Los dispositivos terapéuticos de ultrasonidos de alta calidad incluyen un control de acoplamiento óptico y
acústico, que indica si la transmisión de los ultrasonidos mediante tratamiento directo es insuficiente, y
que puede ajustarse para que detenga el cronómetro de duración.
El agua sirve de medio de acoplamiento para el tratamiento indirecto. La parte del cuerpo que se va a tra-
tar se sumerge en un baño de agua. Por motivos de seguridad, sólo deben usarse bañeras de plástico, ce-
rámica o vidrio. Además, sólo es posible lograr un tratamiento eficiente si el agua no contiene aire (para
ello, se hierve previamente el agua). Por ello, es también esencial eliminar toda burbuja de aire de la super-
ficie de la piel y del transductor.
El transductor se dirige en el agua, a una distancia aproximada de 2-3 cm de la superficie de la piel. Con el
fin de protegerse de las ondas ultrasónicas reflejadas, el terapeuta debe llevar siempre puesto un guante
de vinilo en la mano que utilice para realizar el tratamiento.
El tratamiento ultrasónico subacuático se emplea principalmente para las regiones del cuerpo que, a causa
de sus limitaciones anatómicas, limitan seriamente o hacen imposible el tratamiento directo (manos, co-
dos, pies).
la terapia de zonas reflejas o neutras se pueden tratar, por ejemplo, afecciones del aparato respirato-
rio y del sistema digestivo, así como numerosas afecciones de los órganos internos. A causa de la
complejidad del tema, no describiremos aquí el tratamiento segmentario de forma más detallada. Para
obtener información adicional, por favor, consulte los libros de referencia estándar (en particular,
KNOCH et al. 1990, pág. 143 y siguientes).
• El tratamiento combinado es la aplicación combinada de un tratamiento local y un tratamiento seg-
mentario.
Si se utiliza una intensidad óptima, un tratamiento combinado de estas características produce un efecto
acumulativo de alivio del dolor, mejora de la circulación y destonizante muscular (se suman los efectos de
los ultrasonidos y de la corriente de estimulación). Así, la terapia simultánea es especialmente importante
para el tratamiento de los estados dolorosos agudos y crónicos, así como de los trastornos degenerativos
crónicos del aparato locomotor. Además, la terapia simultánea ofrece posibilidades de localización y trata-
miento de los puntos desencadenantes (EDEL 1991, 207; GILLERT et al. 1995, pg. 127 y siguientes).
En principio, es posible combinar los ultrasonidos con diferentes corrientes de frecuencia baja e interme-
dia. La corriente y los parámetros que se eligen dependen del objetivo del tratamiento: alivio del dolor,
mejora trófica o aumento de la circulación sanguínea. Para localizar los puntos desencadenantes, la inten-
sidad de la corriente de estimulación debe ajustarse en un valor que desencadene la contracción. En todos
los demás casos, debe ajustarse en un valor igual o superior al umbral de la sensación.
El electrodo neutro se fija lo más cerca posible del área que se desea tratar. En el tratamiento combinado,
el transductor sustituye al electrodo activo, y siempre tiene la polaridad de un cátodo. Se suele aplicar tra-
tamiento dinámico.
Por favor, siga las instrucciones de uso del dispositivo o dispositivos que utilice en la terapia simultánea.
Figura 8: Terapia simultánea con un dispositivo combinado; (a) dispositivo combinado (corriente de estimulación + ultra-
sonidos), (b) electrodo neutro (ánodo), (c) transductor de ultrasonidos (cátodo), (d) área tratada
Capítulo 4 Contraindicaciones
Extreme las precauciones al tratar a pacientes que tengan trastornos de la sensibilidad, arterioesclerosis
avanzada o secuelas postraumáticas, así como las áreas de los pacientes cercanas a endoprótesis. Además,
debe evitarse el tratamiento directo, con ultrasonidos, de la médula espinal, y de la médula espinal prolon-
gada desde la tercera vértebra cervical hacia arriba.
Las afecciones en las siguientes regiones deben excluirse del tratamiento con ultrasonidos: ojos, oídos, teji-
do cerebral, epífisis, corazón, pulmón, hígado, bazo, ovarios, testículos, venas varicosas, zonas de creci-
miento en los niños, y áreas cercanas a marcapasos cardíacos. (¡No realice nunca terapia simultánea en
pacientes que lleven marcapasos!).
Es esencial que no se aplique tratamiento con ultrasonidos en caso de afecciones agudas, inflamatorias y
proclives a la fiebre; tampoco en caso de tuberculosis, úlceras de estómago sangrantes y con riesgo de
perforación, trastornos vasculares de las extremidades (trombosis, tromboflebitis), tumores, insuficiencia
circulatoria, enfermedades coronarias, reumatismo articular agudo, diabetes mellitus, o septicemias; y tam-
poco después de un tratamiento con torio radiactivo, de una terapia a base de rayos x en profundidad, o
de una laminectomía.
5.1 Absceso
Si es posible, realice un tratamiento subacuático. ¡Aplique la intensidad con precaución! Los procesos muy
agudos deben tratarse con intensidad baja. Si no es posible detener el proceso, continúe con la terapia
hasta que sea posible realizar una intervención quirúrgica.
Indicación Absceso
Área de tratamiento absceso o perifocal
Tipo de ultrasonidos pulsatorios
Frecuencia en MHz 3
Intensidad en W/cm2 0,5 ... 0,8
Duración en min 2 .. 6 una vez al día
Sesiones 2 ... 6
5.2 Aquilodinia
Figura 9: Aquilodinia
Indicación Aquilodinia
Área de tratamiento local
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
Intensidad en W/cm2 0,5 ... 0,7
Duración en min 6 ... 7 una vez al día
Sesiones 6 ... 12
Notas: Las articulaciones se deben tratar ligeramente flexionadas. Dirija también el transductor entre los
extremos óseos de la articulación. Es posible realizar un tratamiento combinado. Según STEUERNAGEL
(1997, 97), son aplicables las siguientes asignaciones:
• hombro C5-C7
• codo C6-C8
5.7 Bursitis
Indicación Bursitis
Área de tratamiento local y periarticular
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,1 ... 0,4
Duración en min 3 ... 4
Sesiones 5 ... 10
5.8 Distorsión
Indicación Distorsión
Área de tratamiento local
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,1 ... 0,8
Duración en min 3 ... 8 una vez al día
Sesiones 5 ... 10
5.10 Fracturas
Inicie el tratamiento 7 días después de que la fractura se haya colocado en posición de reposo/osteo-
síntesis. El tratamiento está especialmente recomendado para la formación de callo retardada, y se aplican
2-3 series. Existe la posibilidad de realizar el tratamiento a través de una abertura en la escayola.
Indicación Fracturas
Área de tratamiento local a) por encima de la fractura o b) por encima
del fragmento distal/ proximal
Tipo de ultrasonidos continuos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm (a) 0,1 ... 0,2, (b) 0,3 ... 0,5
Duración en min (a) 2 ... 3, (b) cada 2 - 3 días
Sesiones 10
5.11 Hematoma
Indicación Hematoma
Área de tratamiento local
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,1 ... 0,4
Duración en min 1 ... 3 una vez al día
Sesiones 5 ... 10
5.13 Isquialgia
Indicación Isquialgia
Área de tratamiento local (todas las regiones afectadas) y apófisis espino-
sas L5-S1
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,3 ... 0,8
Duración en min 5 ... 10 una vez al día
Sesiones 5 ... 15
5.14 Contractura
Aumente la intensidad gradualmente a medida que el tratamiento avance. Es posible realizar un trata-
miento subacuático.
Indicación Contractura
Área de tratamiento local; posibilidad de fonoforesis
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,2 ... 0,6
Duración en min 5 una vez al día
Sesiones 5 ... 10
5.15 Contusión
Aumente la intensidad gradualmente a medida que el tratamiento avance. Es posible realizar un trata-
miento subacuático.
Indicación Contusión
Área de tratamiento local
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,2 ... 0,8
Duración en min 3 ... 8 una vez al día
Sesiones 5 ... 10
5.16 Lumbago
Indicación Lumbago
Área de tratamiento local (apófisis espinosas L2- S1 y paravertebral L3-
S1)
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,3 ... 0,8
Duración en min 5 ... 10 una vez al día
Sesiones 2 ... 10
5.17 Luxación
Inicie el tratamiento una vez concluido el período de posición de reposo.
Indicación Luxación
Área de tratamiento local (músculos tensos y región dolorosa)
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
Intensidad en W/cm2 0,2 ... 0,6
Duración en min 5 una vez al día
Sesiones 5 ... 15
Si está afectada toda la columna vertebral, es necesario realizar el tratamiento sección por sección (en dos
o tres sesiones independientes), o en más series.
5.20 Fibromialgia
Indicación Fibromialgia
Área de tratamiento local
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos, simultáneos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,3 ... 0,6
Duración en min 5 ... 7, una vez al día
Sesiones 5 ... 15
5.21 Cicatrices
Indicación Cicatrices
Área de tratamiento local, posibilidad de fonoforesis
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos
Frecuencia en MHz 3
2
Intensidad en W/cm 0,2
Duración en min 3 ... 10, una vez al día
Sesiones 10 ... 15
5.25 Periostitis
Indicación Periostitis
Área de tratamiento local (regiones dolorosas); posibilidad de fonoforesis
Tipo de ultrasonidos pulsatorios, continuos
Frecuencia en MHz 1
2
Intensidad en W/cm 0,1 ... 0,3
Duración en min 3 una vez al día
Sesiones 5 ... 10
Apéndice A Bibliografía
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fundamento funcional 1
Índice
G
A
gel 7
absceso 12 gel para ultrasonidos 7
aquilodinia 12 generador de alta frecuencia 1
artrosis
articulaciones 13 H
cadera 14
columna vertebral 13 hematoma 17
asma bronquial 14 herpes zoster 17
B I
bursitis 15 inflamaciones 11
insuficiencia circulatoria 11
C intensidad 5
isquialgia 17
cicatrices 21
ciclo de tratamientos 6 L
contractura 18
contraindicaciones 11 laminectomía 11
control de acoplamiento 7 lumbago 19
contusión 18 luxación 19
corriente de estimulación 10
M
D
marcapasos 11
desarrollo de calor 2 métodos de acoplamiento 7
diabetes mellitus 11 métodos para dirigir el transductor 7
distorsión 15
distrofia muscular 20 N
dosis 5
neuralgia
duración del tratamiento 6
intercostal 21
trigémino 22
E
efectos 2 O
efectos de la terapia 2
osteocondrosis 23
efectos físicos 2
efectos fisiológicos 3
P
efectos mecánicos 3
efectos térmicos 2 parámetros 4
ejemplos de aplicación 12 periartritis humeroescapular 22
endoprótesis 11 periostitis 23
enfermedad de Bechterew 20 profundidad de penetración 5,5
enfermedades coronarias 11
epicondilitis humeral 16 R
esclerosis
sistémica progresiva 23 rango de potencia 1
espondilosis 23 reumatismo articular 11
F T
fibromialgia 21 tendomiopatía 24
fracturas 16 tendovaginitis 24
frecuencia terapéutica 5 terapia a base de rayos x en profundidad 11
ultrasonidos 1
ultrasonidos continuos 4
ultrasonidos pulsatorios 4
úlcera de la pierna 24
úlceras de estómago 11
zonas reflejas 8