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Ciudad Guzmán, Jalisco, que desde 1997 cambia su nombre del municipio por el de Zapotlán El
Grande, su ubicación geográfica es en la región sur de Jalisco a una altura promedio de 1,580 metros
sobre el nivel del mar y tiene una superficie de 295.29 kilómetros cuadrados ubicado en lo que se le
denomina una cuenca cerrada. La población según censo del INEGI en 2010 es de 100,534 habitantes.
Las actividades económicas principales son: agricultura, ganadería, silvicultura y pesca. El clima es
semi-seco con invierno y primavera secos, semicálidos con estación invernal definida.
El municipio no cuenta con ríos, pero sí con numerosos arroyos (Chuluapan, Los Guayabos,…), que son
de importancia para el sistema de riego de las tierras del municipio; cuenta además con parte de la
laguna de Zapotlán que se encuentra contaminada. La riqueza natural con que cuenta el municipio
está representada por 11,200 hectáreas de bosque donde predominan especies de pino, encino y
oyamel, principalmente; que últimamente han estado cambiando por aguacates.
Los principales cultivos: maíz, sorgo, frijol en poca cantidad, así como la caña de azúcar, y últimamente
una creciente producción de aguacate, jitomate y berries. La producción industrial se limita a
productos: madera, cerillos, granito, carbonato de calcio, marmolina y cal agrícola. No existe
producción minera, ni pesca en la laguna por la contaminación.
Sus recursos minerales son yacimientos de arcilla, caliza y yeso. La cabecera municipal está enclavada
a una altura de 1,530 metros sobre el nivel del mar.
Los recursos energéticos son producidos fuera de la localidad, la energía eléctrica se produce en la
planta termoeléctrica de Manzanillo, Colima. El suministro de combustibles líquidos se produce en el
golfo de México, mismo que se traslada a respectivas refinerías en el extranjero o en Salamanca,
Gto. Para después distribuirlas a lo largo del territorio Nacional. Es una región que no se caracteriza
por una alta irradiación solar, ni por vientos sostenidos, por tal motivo no lo planteo como una
opción energética en este momento, aunque podría pensarse como alternativa en la energía solar, y
por la gran cantidad de desperdicio de biomasa, en la producción de bio-hidrógeno a partir de
hidrocarburos oxigenados derivados de biomasa y en la producción de combustibles líquidos para
motores a partir de moléculas derivadas de biomasa.
Los recursos energéticos en mi comunidad han presentado por varios años un deterioro ambiental
provocando que las actividades que le circundan se vean afectadas en varios aspectos como:
Mi selección de recurso energético existente es: El uso de la biomasa, que lo veo como potencial para
ser aprovechado de manera sostenible.
La razón de utilizar la biomasa en esta localidad para producir energía es pensada en los problemas
ambientales y políticos generados por nuestra dependencia de los combustibles fósiles, junto con la
disminución de los recursos petroleros, motivando mi búsqueda de nuevas fuentes renovables de
energía. En este sentido, la biomasa es una fuente promisoria debido a que es renovable y neutra en
el balance de CO2; además, los combustibles derivados de biomasa queman más limpio que los
combustibles fósiles. Las fuentes primarias de conversión de biomasa en combustibles líquidos
incluyen a la gasificación termoquímica para producir gas de síntesis, la licuación/pirólisis hacia bio-
aceites, la conversión de azúcares hacia etanol e hidrocarburos aromáticos, y la esterificación de
triglicéridos para formar biodiesel. En particular, la biomasa y los residuos de biomasa son fuentes
promisorias para la producción sustentable de hidrógeno y combustibles líquidos.