Que, debe anotarse y recalcarse que la finalidad de todo proceso judicial
es resolver totalmente el conflicto de intereses o la incertidumbre jurídica en justicia reponiendo la paz social; que, el conflicto de intereses puesto a conocimiento de este despacho no estaría plenamente resuelto si es que se dejarán sin amparo y no se emitiera pronunciamiento alguno sobre los beneficios de vacaciones y gratificaciones de todo el récord laboral (incluyendo los periodos trunco), mas aún si estos han sido implícitamente demandados, según se desprende del texto de la demanda, pero no detallados en la liquidación acompañada por el demandante; por lo que dejar de pronunciarse sobre tales periodos resultaría contra producente, puesto que ello podría dar pie al entablamiento de un nuevo proceso en el que se debatirían los derechos laborales de la última parte de la relación laboral, generando un sobre carga procesal, ejercitando todo el aparato de administración de justicia, produciendo un costo para el Estado y atentando contra los principios de economía, celeridad y concentración procesal, cuando esto bien puede evitarse con el pronunciamiento sobre todo el récord laboral en está sentencia, que lejos de constituir un pronunciamiento extra petita que atente contra el principio de congruencia procesal, puede y debe considerarse como un pronunciamiento ultra petita puesto que sólo recaerá sobre los derechos taxativamente peticionados en el escrito de demanda, en lo referente a la liquidación erróneamente efectuada, realizándose sólo una corrección en cuanto al calculo de tales derechos, lo que además resulta acorde con el principio de irrenunciabilidad de derechos laborales y que también se condicen con los artículos III y V del Titulo Preliminar del código procesal civil. Véase que la parte demandada no se ha pronunciado en sus escritos de observación acerca de la extensión de los derechos calculados por el perito, asintiendo tácitamente que estos integren parte del thema probando sobre el que recaerá esta sentencia, cuestionando únicamente el cómputo de tales derechos en razón a las diferencias existentes entre las remuneraciones que informo el perito y las que constarían en planillas; también señalase que con este pronunciamiento la demandada disminuirá un coste adicional por gastos del proceso y otros. Que, el juez no debe ser un mero aplicador de leyes, no debe ser la “la boca que dice la ley”, sino que debe actuar con razonabilidad, atendiendo a los contenidos dickelógicos reflejados en los principios antes citados, es por ello que este juzgado considera no sólo pertinente y necesario, sino también práctico, equitativo y justo, el pronunciamiento sobre los derechos expresamente reclamados por el del actor hasta la fecha de cese del actor.
2. Que, la finalidad de todo proceso judicial es resolver el conflicto de
intereses o la incertidumbre jurídica en justicia reponiendo la paz social; que, el conflicto de intereses puesto a conocimiento de este despacho no estaría plenamente resuelto si es que se dejarán sin amparo y no se emitiera pronunciamiento sobre los pocos días no demandados por el actor, pese a que implícitamente se han peticionado; que, dejar de pronunciarse sobre los días transcurridos desde la demanda hasta el cese (15 días) resultaría contra producente, puesto que ello podría dar pie al entablamiento de un nuevo proceso en el que se debatirían los derechos laborales de tan sólo 15 días, generando un sobre carga procesal, ejercitando todo el aparato de administración de justicia, produciendo un costo para el Estado y atentando contra los principios de economía, celeridad y concentración procesal, cuando esto bien puede evitarse con el pronunciamiento sobre todo el récord laboral en está sentencia, que lejos de constituir un pronunciamiento extra petita que atente contra el principio de congruencia procesal, puede y debe considerarse como un pronunciamiento ultra petita puesto que sólo recaerá sobre los derechos taxativamente peticionados en el escrito de demanda, realizándose sólo una extensión de los días que deberán ser computados y calculados, lo que resulta acorde con el principio de irrenunciabilidad de derechos laborales y que además se condicen con los artículos III y V del Titulo Preliminar del código civil. Que, el juez no debe ser un mero aplicador de leyes, no debe ser la “la boca que dice la ley”, sino que debe actuar con racionalidad, atendiendo a los contenidos dickelógicos reflejados en los principios antes citados, es por ello que este juzgado considera no sólo pertinente y necesario, sino también práctico, equitativo y justo, el pronunciamiento sobre los derechos expresamente reclamados por el del actor desde su inicio hasta la fecha de su cese, 30/09/2004. 3. Que, este pronunciamiento en nada vulnera el derecho constitucional de defensa y contradicción del demandado, ya que el computo de todo el récord de servicios, hasta la fecha de cese consignada en el contrato de fojas 163, que presentara esta parte, no enervan su argumento central y único de defensa: inexistencia de una relación laboral, la que ha sido realizada de manera genéricamente, lo que implica que al haber negado la relación laboral, ha negado todos los derechos sociales que de ella se desprenden, sin importar el computo o cálculo de ellos; además, como es obvio, el plazo hasta el cuál se computaran los beneficios pretendidos no excede el tiempo en que el actor efectivamente le presto labores bajo el “contrato de locación” - que en realidad no fue tal - defendido por la demanda; resumiendo, se computará en este proceso todo el récord laboral, pero siempre encuadrado dentro de los derechos reclamados por el actor, lo que equivale, como ya dijimos, a una manifestación de la facultad ultra petita, equiparable a un error en el cálculo o computo del periodo laboral y de los beneficios pretendidos.