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118 Los valores jurídicos La concepción iusnaturalista de Ia justicia 119

deI Derecho (es decir, de obligatoriedad de Ias normas jurídicas a Ia justicia o a Ia libertad, ya que Ia justicia no es otra cosa
aun cuando sean ignoradas), de jerarquía normativa (Ia norma que Ia seguridad de que el Derecho nos proporciona un máximo
superior prevalece, en caso de ccinflicto, sobre Ia inferior), de de libertad y de igualdad. La seguridad no es -o no debe ser-
cosa juzgada (Ias decisiones de los órganos supremos son defi- un valor que remita necesariamente a una ideología de signo
nitivas, sobre ellas no cabe volver a entrar), de irretroactividad, conservador; más bien cabe decir que cualquier conjunto de
de respeto aios derechos adquiridos, de prohibición de interpre- valores -cualquier ideología coherente- tiene que presuponer
tación analógica en ciertos sectores dei Derecho como el Derecho Ia idea de que también es un valor saber que aqué!los se van a
penal. etcétera. realizar: si A, B Y C son conductas o normas valiosas, poder
Certeza y La idea de certeza jurídica está también vinculada con Ia de prever, tener Ia seguridad de que A, B Y C se realizarán, también
sistema jurídico.
sistematización dei Derecho que inspiró Ias movimientos de co· es un valor.
dificación de Ias siglos XVIII y XIX. Para que un conjunto de nor- Como ya se ha sugerido anteriormente, los conflictos valora·
mas constituya un sistema en sentido estricto es preciso, fun- tivos no deben contemplarse en un plano puramente abstracto,
sino más bien como conflictos entre Ias diversas maneras de en-
damentalmente, que sea completo (que carezca de lagunas, que
regule todos los casos posibles) y consistente (que carezca de tender Ia libertad, Ia igualdad, Ia seguridad y, en definitiva, Ia
contradicciones). Desde luego, se trata de un ideal, de. una exi· justicia. En los próximos apartados -una vez concluida esta
gencia, y no de una cuestión de hecho: como veremos en un primera tarea de esclarecimiento conceptual- examinaremos,
capítulo posterior, el que un conjunto de normas jurídicas in· muy someramente, algunas de Ias concepciones de Ia justicia
tegre o no un sistema es una cuestión meramente contingente. que han tenido un mayor peso a 10 largo de Ia historia.
Pero, en todo caso, hay una serie de principios jurídicos que
tratan precisamente de lograr Ia sistematicidad dei Derecho:
llenando Ias lagunas (principio de inexcusabilidad de decidir
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por parte de los jueces) o resolviendo Ias contradicciones (prin- 3.5. La concepción iusnaturalista de .la justicia
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cipios de jerarquia, de temporalidad y de especificidad). Más
i' adelante veremos también que los principios de sistematicidad,
de conocimiento dei Derecho y muchos otros vinculados a Ia Y, entre todas ellas, Ia que ocupa el primer lugar, es, sin duda,
idea de seguridad jurídica -especialmente en este segundo ni· Ia concepción iusnaturalista, que se remonta a Ias obras de Ho·
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vel en el que ahora estamos situados- exigen hoy Ia incorpora- mero y Hesíodo o, por 10 menos, a Ia de Heráclito y !lega, de
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ción de nuevas técnicas -en particular, informáticas- que de· alguna manera,: hasta nuestros días. Precisamente, el haber per-
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ben sumarse a Ias más tradicionales de los juristas. vivido durante un lapso tan dilatado hace que su caracterización
Seguridad Por seguridad jurídica en S!entido estricto debe entenderse, presente no pocas dificultades. A primera vista, no parece muy
jurídica en
en mi opinión, Ia capacidad de un determinado ordenamiento claro 10 que puedan tener en común concepciones de Ia jus ti-
sentido eSlriclo.
jurídico para hacer previsibles, es decir, seguros, los valores de cia tan dispares entre sí como Ias de los sofistas, Platón, Aris-
libertad e igualdad. Esto quiere decir que Ia seguridad -en este tóteles, los estoicos, san Agustín, santo Tomás, los voluntaristas
tercer nivel, que presupone los anteriores- se concibe esen- medievales, Ia escuela racionalista de Derecho natural, Ia escue·
La seguridad es cialmente como un valor adjetivo respecto de los otros dos que ia espaiíola de Derecho natural y de gentes, Locke, Rousseau,
W1 valor Hobbes ...
adjetivo.
componen Ia idea de justicia. Entendida de esta forma, creo
Evidentemente, los elementos comunes sólo pueden encontrar- Caracterlsticas
que puede evitarse un uso ideológico de Ia expresión «seguridad dei
jurídica» que se basa precisamente en Ia substantivización de este se en un nivel muy abstracto. Antes hemos visto que Ias teorias iusnaturalismo.
concepto. O para matizarlo más, Ia seguridad -Ia previsibili- iusnaturalistas eran teorías descriptivistas, pero el descripti-
dad- es por si misma un valor social, pero se trata de un valor vismo es una categoría muy amplia, y aunque los autores ius-
graduable en función de qué sea 10 que se hace previsible. En naturalistas han solido ser transnaturalistas, sin duda, esto no
consecuencia, no tiene mucho sentido contraponer Ia seguridad es aplicable a todos ellos. Por otro lado, ·un ejemplo de teoria
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tipicamente descriptivista es el utilitarismo que. no obstante. en ximadamente iguales- por naturaleza, y desacuerdo en cuanto
muchos aspectos es Ia antítesis dei Derecho natural. Y si tomá- a considerar como justo que el Derecho fomente esa igualdad o,
semos Ia otra variante clasificatoria ocurriría algo parecido: es por el contrario, trate de establecer mayores desigualdades. 4)
evidente que 105 iusnaturalistas son cognoscitivistas. pero. des- Los autores iusnaturalistas no parecen haber logrado encontrar
de luego. no son el único ejemplo de cognoscitivismo. y, por ningún principio que pl-leda considerarse como universal e in-
otro lado, Ias diversas corrientes o autores iusnaturalistas han mutable, salvo tautologias dei tipo «debe hacerse el bien y evi-
abogado por formas muy distintas de conocimiento, incluida Ia tar el mal» o «dar a cada uno 10 suyo». 5) Ciertamente. no hay
revelación. En definitiva, Ias únicas características comunes que que excluir Ia posibilidad de llegar a acuerdos sobre ciertos
pueden predicarse de todos Ias tipos históricos de iusnatura· principias y normas de justicia que no sean puramente formales
lismo serían Ias siguientes: 1) 10 justo se identifica con una se- (tal es el caso de Ias «derechos humanos» en nuestros días).
rie de principias (más o menos amplias según el autor o escuela pero no hay por qué pensar que taJes principios y normas deri-
de que se trate) que derivan de Ia naturaleza (que se interpreta van de Ia «naturaleza» y. sobre todo. Ias derechos humanos.
también de maneras muy distintas) y que son cognoscibles por como luego veremos. na tienen un fundamento absoluto, sino
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el hombre (aunque se hayan propuesto formas muy distintas de simplemente histórico. ~
conocimiento); 2) estas principias son verdaderos en Ia medida Como es lógico, estas criticas. ai situarse en un nível muy
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en que describen fidedignamente Ia naturaleza; 3) ai menos ai· abstracto, no dan una visión adecuada de 10 que ha significado
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guno de estas principios tiene carácter inmutable y universal el iusnaturalismo, o mejor dicho, Ias diversos tipos de iusnatu- .'L

(es decir, Ia naturaleza, ·por 10 menos en sus rasgos esenciales, ralismo. a 10 largo de Ia historia. Esta último requeriria un am- II
es aquello que no cambia ni en el tiempo ni en el espacial. plio estudio que aqui no podemos acometer. Pero sí vamos a
Argumentos Esta caracterización nos permite también sintetizar Ias nu- tratar de explicar un hecho tan notable como es Ia pervivencia Perviven.cia
COl1tra el histórica deI
merosos argumentos dirigidos contra el Derecho natural en cuan- dei iusnaturalismo durante unos veinticinco siglas. Las razones iusnaturalismo.
Dcrecho natural. i
to teoria de Ia justicia (Ia crítica ai concepto iusnaturalista de de ello podrían ser Ias siguientes:

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Derecho ya Ia efectuamos en el capítulo primero). Serían 105 si-
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guientes (Bobbio, 1966): I) A 10 largo de Ia milenaria historia dei En primer lugar, el iusnaturalismo ofrece Ia posibilidad de ir
iusnaturalismo, Ia «naturaleza •• se ha mostrado como un tér- no considerar como valores últimos o únicos Ias recogidos en J
mino absolutamente proteico y que se ha interpretado de todas el Derecho positivo. En este sentido, suministra una via para :1
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Ias maneras imaginables. De Ia naturale·za se ha extraído tanto criticar ai Derecho p:ositivo y justificar Ia desobediencia a Ias "

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Ia esclavitud como Ia igualdad de todos 105 hombres, tanto mandatos de Ia autotidad que se desvien dei Derecho natural.
Ia .libertad religiosa como Ia persecución de Ias herejes, tanto Ia Pero se trata de una via de circu]ación en ambos sentidos, de
propiedad privada como Ia comunidad de bienes. Por otro lado, manera que 10 anterior ha podido ser utilizado también para Ia
10 .natural •• ha sido en ocasiones un concepto empírico, otras contrario, para justificar el Derecho positivo.
veces una noción teleológica o metafisica y, con mayor frecuen- En segundo lugar. el carácter «blando» de Ia ideología ius-
cia, una mezcla de todo ello; en definitiva, parece imposible sa- naturalista es un argumento importante para justificar su gran
ber 10 que deba entenderse por «naturaleza ••. 2) Lo anterior fortuna histórica. Como antes vimos, 10 que tienen en común los
muestra también ·el fracaso dei iusnaturalismo en Ia búsqueda autores iusnaturalistas no es el haber dado una misma formu-
de un media de conocimiento de Ia naturaleza minimamente se- lación de Ia justicia en el plano prescriptivo, sino más bien el
guro. 3) Allnque existiera lln método fidedigno de conocimiento haber fundamentado de manera análoga (a partir de Ia natura-
de 10 natural (10 que debería facilitar lln consenso entre todos °
leza de Ia ley natural) normas y principias de justicia no coin-
La lalacia Ias autores iusnaturalistas, que no ha existido), no está claro cidentes e incluso con frecuencia contrapuestos. EUo ha permi-
I'lQturalista. tido, por ejemplo, que a 10 largo de Ia historia, el iusnaturalismo
que pueda darse el paso de afirmar «esta es natural •• a afirmar
«esta es justo ••; y prueba de ello es que puede existir acuerdo, haya aparecido en ocasiones. Ias más, como una ideologia con-
por ejemplo, en sostener que Ias hombres son iguales -o apro- servadora (Platón, Aristóteles, Cicerón, Tomás de Aquino), peru
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otras veces como una ideología reformista (1os sofistas) o in- sión, que es alimentada por planes de estudio en los que sigue
cluso revolucionaria (Rousseau). Y esto es 10 que explica que existiendo una asignatura denominada «Derecho natural», 10
en el siglo xx hayan podido considerarse iusnaturalistas desde único que prueba es Ia propensión de 105 autores iusnaturálistas
tomistas recalcitrantes, como M. Villey, hasta marxistas, por a sostener concepciones absolutistas de Ia justicía que excluyen
10 demás atípicos, como E. Bloch. A. Ross (1963) ha escrito de ma- )1 por princípio otros puntos de vista. EI segundo equívoco con-
nera muy expresiva, que el iusnaturalismo ha sido «una cortesana siste en suponer que Ia creencia en el Derecho natural es el
a disposición de cualquiera». mejor antídoto para combatir o evitar «barbaries» dei tipo de Ias
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En tercer lugar, parece existir también una razón psicológi- .~~ que ha conocido este siglo. Sin embargo, és ta es una idea tan
ca que explica el fuerte atractivo de Ia concepción iusnaturalis-
.:; poco fundada que es incluso difícil explicar cómo ha llegado a
ta. La creencia en una ley natural, fija e inmutable, satisface el ,)'
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imponerse: el fascismo italiano fue justificado por autores iusna-
ansia de encontrar algo seguro, sólido. Ofrece Ia posibilidad de ;~ turalistas, Durante el franquismo, el iusnaturalismo fue práctica-
descargar Ia responsabilidad de tener que decidir cómo actuar mente Ia única ideología jurídica permitida, y 10 mismo ha ocurri-
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moralmente, o conforme a Ia justicia, en cada momento. En
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do recientemente en Argentina durante Ia época de Ia dictadura
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buena medida creo que es válida Ia opinión de González Vicén ;1
militar y ocurre en el Chile de Pinochet. En fin, el nacionalsocia-
(1979) de que el Derecho natural es tan sólo «Ia otra cara del nihi- i\ Iismo alemãn resultó ser radicalmente íncompatible con el mayor
lismo ético». ~! enemigo dei Derecho natural en el siglo xx, H. Kelsen, mien-
Finalmente, Ia palabra «naturaleza» -como ha puesto de
~: tras que fue sostenido p.or autores iusnaturalistas como H. Diet-
manifiesto Garzón Valdés- tiene un valor emotivo muy grande, ze (Garzón Valdés), quien llegó a afirmar cosas tales como Ias
de manera que es especialmente apta para un uso persuasivo siguientes: «EI Führer es infalible y su infalibilidad tiene ca-
dei lenguaje jurídico y político en el que Ia calificación de «na- rácter iusnaturalista comunitario, ai igual que Ia dei Papa (... )
tural» tiene com,únmente el mismo significado que «bueno» o Ia existencía de! Führer es una ley natural de Ia comunidad»,
«correcto». La respuesta más obvia -pero no Ia más dara- a Y el tercero consiste en tratar de construir un Derecho natural
«histórico», de «contenido variable», etcétera, cuando el núcleo
Ia pregunta sobre qué es 10 justo parece ser que 10 justo es 10
natural (el Derecho justo es el Derecho natural). dei significado dei concepto de Derecho natural ha ido siempre
unido, como hemos visto, a Ia existencia de ciertos principios
A pesar de todo, Ia concepclOn iusnaturalista de Ia justicia inmutables y, por tanto, ahistóricos. Como ha escrito González
Vicén (1979): «EI Derecho natural, en toda su complejidad y
perdió gran parte de su vigencia a finales deI XVIII Y comienzos
del XIX, una vez que los principios deI iusnaturalismo raciona- simplicidad es, en efecto, Ia ideología por excelencia de Ia ahisto-
ricidad e incluso de Ia anti-historicidad (... ), Ia noción de un De-
lista pasaron a informar el Derecho positivo' deI <<Duevo régi-
men». Ello no obsta, naturalmente, para que hayan seguido recho natural ha descansado, hasta nuestros días, en Ia acepta-
existiendo corrientes iusnaturalistas Y para que, en nuestro si· ción inconcusa de un orden universal inquebrantable -una idea
glo, especialmente después de Ia segunda guerra mundial, se
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.. que, como hoy sabemos, procede de Ias culturas orientales pre-
helénicas- deI que el hombre puede extraer por el raciocínio
El haya podido klar dei «renacimiento dei Derecho natural». Sin :~
{(renQcim ien to» embargo, 105 nuevos movim,ientos iusnaturalistas (el más sig- o Ia intuición directa normas permanentes para Ia convivencía
dei Dereeho (. .. ). Pero 10 que no puede hacer nunca el Derecho natural, si no
natural.
nificativo es el de los autores "lemanes de <<Ianaturaleza de Ias
cosas»: Radbruch. Welzel, Strcctenwerth, Ballweg, Fechner, Mai- quiere negarse a sí mismo, es confesar sus raíces y su natura-
hofer O Schambeck) suelen descansa~ en una serie de equívocos leza históricas. Su pretensión es y ha sido siempre -pese aios
como los siguientes. EI primero consiste en identificar Derecho ).~
fallidos intentos de un mal llamado Derecho natural de con-
natural y concepción de Ia justicia toul court. Se supone que e1 tenido variable- Ia formulación de proposiciones de validez in-
Derecho natural suministra los únicos criterios posibles para temporal, inquebrantables en si, y ello justamente por estar de-
juzgar un Derecho positivo y, en consecuencia, para fundamen-" ducidas de "Ia naturaleza"».
tar Ia obediencia o desobediencia a sus preceptos. Esta confu- c:,

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