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LOS MICROORGANISMOS PATÓGENOS

1 de noviembre de 2010 Publicado por Javier García Calleja


Las enfermedades producidas como consecuencia de la penetración de un virus o de un
microorganismo se llaman enfermedades infecciosas y se manifiestan de muy diversas
formas: por ejemplo, los virus penetran en tipos específcos de células y las destruyen.
También las bacterias pueden producir una destrucción de las células.

Niño afectado por varicela.


En muchas ocasiones, el patógeno llega a un individuo sano procedente de otro parasitado:
entonces se dice que la enfermedad infecciosa es contagiosa.

Infecciones y enfermedades contagiosas.


Niño afectado por varicela.
La enfermedad infecciosa es el resultado de la interacción de las dos partes implicadas: el
microbio invasor y el organismo invadido. Vamos a analizarla de modo más detallado.

Fases de la infección microbiana


Suelen distinguirse varias etapas, pero no siempre son fácilmente separables, ya que pueden
solaparse en parte:

Adherencia: el microbio toma contacto con el organismo o sus células por reconocimiento
mutuo de moléculas específicas.
Invasión o penetración: ocupación de distintos tejidos, órganos, etc., donde pueden quedar
concentrados.
Crecimiento o proliferación: multiplicación del microbio al reproducirse, aumentando a su
vez la capacidad invasiva.
Infección propiamente dicha y desarrollo de la enfermedad: manifestaciones de la alteración
producida en los órganos afectados.
Factores de la patogenicidad microbiana.
Unido con lo anterior, el que una enfermedad infecciosa se desarrolle dependerá de ambos
componentes de la relación, es decir, del poder patógeno del microbio invasor y de la
capacidad del hospedador para ser invadido.

Poder patogénico: el poder patógeno del microbio vendrá determinado por su virulencia, es
decir, su capacidad para provocar trastornos en el organismo invadido, lo que a su vez
depende de dos factores: la capacidad de invasión y la producción de toxinas o venenos o de
otras sustancias de actividad enzimática.

La capacidad invasora consiste en una activa multiplicación de los microbios que se


difunden, principalmente por la sangre, llegando a invadir la mayor parte de las células del
organismo y provocando en ellas diversos trastornos. Algunos microbios desarrollan su poder
patógeno solo por su capacidad invasora, por ejemplo, el bacilo del carbunco, Pasteurellas,
etc.
La producción de toxinas puede permitir que las bacterias productoras de tales enfermedades
se acantonen en el lugar de penetración sin apenas invadir el organismo, difundiendo una
gran cantidad de sustancias tóxicas, que son las responsables de los trastornos que
caracterizan a la enfermedad. Un ejemplo muy significativo es el de los bacilos
Corynebacterium diphteriae, productores de la difteria, que se aspiran con el aire y se instalan
en el tracto respiratorio superior, en el que producen una toxina que se distribuye a todas las
células del organismo humano a través del riego sanguíneo. Pero, sorprendentemente, esta
toxina, que produce una inhibición de la síntesis proteica, no se forma si a su vez la bacteria
no es infectada por un determinado fago, siendo esta infección el factor desencadenante de
la difteria.
Tipos de toxinas: se pueden distinguir dos tipos de toxinas: exotoxinas y endotoxinas. Las
exotoxinas son sustancias tóxicas o venenos de naturaleza proteica que el microbio segrega
a su medio externo, por lo que su efecto se difunde por las células y tejidos del organismo
parasitado, incluso en ausencia del microorganismo productor (como la botulina en los
alimentos), y provocan la formación de anticuerpos.

Las endotoxinas son sustancias de naturaleza lipopolisacárida que forman parte de la propia
superficie celular del microbio, desde donde ejercen su efecto tóxico, o al disgregarse los
componentes del mismo. Su toxicidad suele ser inferior y no provocan la formación de
anticuerpos.

Entre las sustancias de naturaleza enzimática que pueden producir algunos microorganismos
se pueden citar: la hialuronidasa, que hidroliza el ácido hialurónico, responsable de la
cohesión entre las células de los tejidos; coagulasas, que transforman el fibrinógeno en fibrina
en la sangre; las hemolisinas, que rompen los glóbulos rojos.
https://biologia.laguia2000.com/inmunologia/los-microorganismos-patogenos
Capacidad receptiva: La receptividad por parte del organismo es el estado más o menos
favorable que este presenta y que hará que el microbio encuentre una predisposición
favorable para poder invadirlo y desarrollar su poder patógeno. Este estado se halla en
función de una serie muy compleja de factores (malnutrición, fatiga, inmunodeficiencia por
existencia de otras enfermedades, etc.).

En todo caso, el organismo objeto de la infección cuenta con mecanismos de defensa que
constituyen las barreras inmunológicas externas e internas y que a veces se confunden con
los síntomas de la propia enfermedad infecciosa.

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