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EL JESÚS CRISTO HISTÓRICO y EL CRISTO MÍTICO

Por Richard, Duc de Palatine

Traducido por Frater Lucis Fiducius

Cualquiera que haya hecho un estudio de Religión Comparada y Mitología


pronto llegará a la conclusión de que en la historia de José y María yendo a
Belén donde María dio nacimiento a un niño llamado Jesús, que estamos
tratando con una historia mitológica. Por ejemplo, la historia dada en LUCAS
de María y José yendo a Belén a ser censados bajo el Edicto de Augusto Cesar
es obviamente un mito; esto puede ser dispensado pues no hay registro de tal
práctica en el Imperio Romano. Esta afirmación es además nulificada por el
hecho de que Galilea en esa época estaba todavía gobernada por Herodes
Antipas cuando Quirinius fue a cobrar impuestos a Judea.

La historia secular no sabe nada de la existencia de Jesús Cristo fuera de la


Biblia Cristiana. Lo que sabemos es que hubo un hombre llamado “Jehoshua
Ben Pandira” cuya existencia histórica puede ser establecida más allá de toda
duda. Encontramos que esa historia afirma que Jeshu o Jehoshua nació en el
cuarto año del rey Judío de Judea Alejandro Janneaus, esto contradice las
afirmaciones de los seguidores de Jesús que él nació en el reinado de
Herodes, pues Herodes murió antes del nacimiento de su Jesús.

La historia afirma que Jeshu Ben Pandira nació entre el 125 al 105 A.C., él fue
puesto bajo la guía de Jehoshua, hijo de Perachia, quien fue uno de los
presidentes del Sanedrín, él fue el quinto desde Ezra, y estaba en línea directa
de la tradición oral. Sabemos que Ben Perachia comenzó a enseñar en el año
154 A.C., lo que significaría entre el 180-170 A.C., y esto indicaría que durante
el asesinato de los Iniciados (Inocentes) por Alejandro Janneaus alrededor del
100 A.C., él huyó a Egipto llevando con él al niño Jeshu. También sabemos
que hubo una persecución de los Rabinos por Alejandro cuando los Fariseos
se revelaron contra el rey.

Jehoshua, el hijo de Perachia cuando fue a Egipto, llevó con él al niño de 15


años Jeshu y no retornó a Judea hasta después del 79 A.C. cuando Alejandro
Janneaus murió y su viuda Salomé, llamada Alexandra por los Griegos,
ascendió al trono en el 79 A.C. Esta reina se mostró favorable a Jeshu, el hijo
de Pandira y Stada y fue testigo de sus obras maravillosas y poderes de
curación. Ella trató de salvarlo de sus enemigos sacerdotales, puede ser
debido a que Jeshu estaba relacionado con ella.
Salomé murió en el 71 A.C. , Jeshu fue tomado por los sacerdotes y acusado
de ser un mago instruido en la sabiduría de Egipto, él fue lapidado a muerte
sobre las paredes de la ciudad de Lidia y después crucificado para ser colgado
sobre un árbol, en la víspera de Pascuas, o el Passah. Los Judíos afirmaron
siempre que ellos tenían otra más verdadera historia del nacimiento y vida de
Jeshu, que en nuestra opinión fue el prototipo para la creación de la vida mítica
de un tal Jesús de Nazaret. Esto ha sido confirmado por los escritos de Justino
Mártir y Josefo. Justino escribió un libro llamado el “Verdadero Logos”, un libro
que los Cristianos se ocuparon en deshacerse, como lo hicieron con muchos
otros libros.

El hecho interesante que emerge de todo esto es que Celsus dice que Jesús
no fue una verdadera Palabra, no un verdadero Logos, sino alguien que fue
bien versado en las artes de hechicería en Egipto. Debemos mantener en
mente que los Judíos tenían toda razón para detestar a los Egipcios y su
sabiduría. En los “Reconocimientos Clementinos”, es en la persona de Jeshu
Ben Pandira que Jesús se dice elevarse de nuevo como el mago. Los Judíos
no sabían nada de la historia de “Jesús de Nazaret” como un personaje
histórico, pero ellos sabían de un Jeshu que vivió una centuria antes. Epifanio,
un Gnóstico vuelto renegado, escribe que los Cristianos fueron forzados a
derivar su mítico Jesús de Pandira, y él da la genealogía del Jesús Canónico
en esta forma: Jacobo, llamado Pandira el Tigre, sedujo a María una virgen del
Templo, quien dio a luz a Jeshu. María se casó con José el hermano de
Cleofás.

Por lo tanto, esto prueba que en la cuarta centuria el linaje del Jesús Cristiano
fue trazado a Pandira, el padre de Jeshu quien fue un alumno de Ben Perachia,
y cuando ellos fueron a Egipto de uno de los grandes magos de ese país.
Tanto para los antecedentes de Jeshu, que fue convertido en el Jesús de los
Evangelios.

De las tradiciones que tenemos, Jeshu fue debidamente entrenado por los
Esenios en las orillas del Mar Muerto. Por otras fuentes, se sabe que él fue
enviado a la India, el Tíbet, Egipto y Persia y otras lejanas regiones, siendo
iniciado en las diversas hermandades. Hay también tradiciones de un joven
Judío que visitó a los Brahmanes, los Budistas y los Zoroastrianos, él les
enseñó muchas cosas maravillosas y constantemente se refería al Dios Interior
dentro del hombre.

Dondequiera que Jeshu iba, Él era considerado como un activista y un


perturbador del orden social establecido por los sacerdotes de varios templos.
Él retornó a Judea, Su enseñanza contra el formalismo del Templo levantó la
oposición de los sacerdotes y de la clase superior quienes finalmente le dieron
muerte. Jesús o Jeshu retornó como un Hierofante de los Misterios.
Jeshu comenzó a formar sus propios Misterios- el GNOSTICISMO. Él formó
Logias a través del mundo Romano. Él estableció la Disciplina Arcana, un
sistema que fue formado de lo mejor de todos los centros de Religiones de
Misterios que él visitó. Jesús fue un activista, cuando uno llegaba cerca de él,
sentía el poder dinámico del Espíritu Inmortal fluyendo de Él. Él era bueno y al
mismo tiempo comandaba. Su tema constante era la Vida Universal de Dios y
el Cristo Morando dentro del corazón humano. Esta misma doctrina es hallada
en el mismo corazón de todas las Religiones de Misterios.

Cuando él falleció a la edad de alrededor de 50 años, Él permaneció en la


región emocional enseñando a Sus discípulos e iniciándolos hasta el Cuarto
Misterio y no más. Jeshu fue aceptado como el “Maestro de la Rectitud” por los
Esenios, que registran que él fue asesinado por los gobernadores del Templo
alrededor del año 70-65 A.C. él no fue crucificado a la manera Romana, sino
que fue primero apedreado a muerte y luego colgado de un árbol. Sabemos de
varias fuentes Gnósticas que Jeshu el Cristo formó Logias secretas que
sobrevivieron sobre todo el mundo Romano hasta alrededor del año 46 D.C.

Pablo de Tarso comenzó su enseñanza pública, él fue elevado a la posición de


Hierofante y fue ordenado por el Legatus (Cristo) de Dios a revelar al mundo el
Verdadero Logos. Siendo Pablo, como lo era, el Hierofante, sabía de la
verdadera historia de Jesús-Jeshu y repudió las afirmaciones de Simón y de los
otros Apóstoles en Jerusalén. De Pablo Marcio, Cerentius, Basilides, Valentino
y Bardienses, que fueron Gnósticos de grandes vidas santas que siguieron a
Pablo y repudiaron a los Apóstoles y a su Jesús.

El mito Gnóstico de Cristo en la persona de Jesús o Jeshu puede ser


explicado, cuando sabemos las vidas de todos los Salvadores, pero dentro de
la tremenda historia mitológica fueron incorporados muchos de los secretos de
la naturaleza, del hombre y de su divino Origen y su restitución final con su
Legatus Inmortal.

El Espíritu Inmortal del Hombre fue siempre simbolizado por el Sol viajando del
oeste al este. El Sol nace siempre de una Madre Virgen- la Madre de todo lo
viviente. Ella da nacimiento al Legatus Inmortal de Dios, ella se vuelve la madre
de Dios sobre la tierra. El nacimiento toma lugar en la “Caverna de la Luz” que
siempre fue reconocida como el corazón del hombre. Esta es la Cueva y
Pesebre donde el “nuevo nacimiento” toma lugar. Es también la cueva del
renacimiento para el Sol en las profundidades inferiores del solsticio.
Encontramos que Justino Mártir habla de Cristo siendo nacido en el Establo de
Estabulo Augías, y luego toma refugio en la Cueva de la Luz.

Como con Casini, el difunto astrónomo italiano, decimos que la Cueva era el
lugar de nacimiento del Inmortal Hijo del Espíritu desde el año 2410 al año 255
A.C., en cuya última fecha el Solsticio pasó por el signo del Arquero, por lo
tanto ningún Logos pudo haber nacido en la Cueva de Abba Uddu o en el
Establo de Augías el 25 de diciembre después del fin del mayor ciclo Cósmico
de 25.860 años. Este hecho que el Solsticio se ha movido dentro del signo del
Arquero después del 255 A.C., no siempre sigue que el nuevo signo afectará
de inmediato, hay generalmente un lapso de alrededor de 300 años, esto
podría contar para los Gnósticos que afirman que Cristo nació en la Cueva de
Luz.

En Egipto Horus nació en el signo de Apta, que es también el nombre del


Pesebre y de la Cuna, y en esa época la Estrella en el Oriente siempre
apuntaba al sitio de nacimiento Solar, esto es Orión. Dentro de Orión se
encuentran tres estrellas, llamadas los Tres Reyes viajando con Orión al lugar
de nacimiento. Esto significa que la historia de los Tres Reyes tiene cerca de
6000 años de antigüedad.

La limpieza del Establo de Augías fue el sexto trabajo de Hércules, de aquí


tenemos el nacimiento de Mitra y el Toro de Tauro. En el curso de la procesión
del sol, es decir alrededor del 255 A.C., el Sol y el Lugar de Nacimiento
pasaron al signo de Piscis o los Dos Pescados, de aquí las razones por las que
el Cristo está simbolizado por los Dos Pescados colgando sobre la cruz. Por
esto, veremos que el Toro de Minos y de Mitra se volvieron deificados durante
los 2155 año antes del 255 A.C. Pero tras ese tiempo el Espíritu Inmortal fue
simbolizado por el Carnero o Cordero. Así el Legado del Hombre fue ahora
representado como un Pescador o Ichthys en Griego.

Aquí llegamos a un rompecabezas: el original del Pescador fue AN de Egipto y


ON de Caldea, significando que el símbolo del Alma del Hombre como el Pez
se levantaba de las aguas del ser animal, simbolizado unos 25.860 años antes
del 255 A.C. Pero también debemos recordar que uno de los Avatares de
Vishnú fue también un Pescador. DE aquí damos un paso más sin revelar
demasiado: El Cristo o Ichthys, el Pez dentro de la naturaleza del hombre, fue
renacido de la diosa pescado María, en el signo de los Peces, en 255 A.C. Esta
puede ser la razón por la cual los Gnósticos Cristianos fueron llamados
pequeños pescados, o Pisciculi.

En el mito Gnóstico Jesús nunca pudo haberse vuelto hombre. Esto significa
que Jesús, en su aspecto mítico, es él quien está por venir. Como no hay una
letra “J” en el lenguaje Hebreo, el nombre Jesús se vuelve “Iessus” a quien los
Gnósticos llamaron el “Siempre Convirtiéndose en Uno” quien no podría ser
nada excepto la Divina Alma Crística del Hombre, que nunca muere
físicamente, pero que siempre viene cuando un niño nace en el mundo. Esto es
mostrado por Jesús afirmando estar en existencia antes de Abraham y no, aún
antes de la fundación del mundo.

Justo como el Jesús de Pablo es el segundo Adam, así es el Alma Divina del
hombre el segundo Adam, nacido del primer Adam- el Arquetipo Celestial. Así
el primer Adam fue el “solo engendrado Dios”, el dios que descendió dentro de
la Cueva de Luz para volverse la “Luz que ilumina a cada hombre viniendo al
mundo”. Ambrosio y Agustín identificaron a Jesús como el “Dios Escarabajo”,
porque el escarabajo es una criatura que es auto producida, identificada con
Jesús que hace todas las cosas, pero que él mismo no fue hecho.

Ra de Egipto es designado como el “Alma que habla”, mientras que Cristo es


llamado la “Palabra o ESO que habla al hombre”. Jesús es también Horus de
Egipto. Horus retorna sufriendo, herido y sangrante tras su batalla con Set, él
desciende al Amenti, donde es transfigurado en un nuevo y viril Horus, y se
levanta de nuevo como el Sol de la resurrección. Esto es lo mismo con Jesús.

El Niño Jesús u Horus fue el “joven” hasta la edad de 12 años, cuando ellos
fueron presentados al Templo, y la transformación del muchacho en un hombre
comienza, pero la completa adultez no es alcanzada hasta que ellos tuvieron
30 años de edad, y ellos se convirtieron en los representantes de la Paternidad.
Lo mismo con Osiris, quien desciende a la tierra como Horus, entrando en la
materia y haciéndose mortal, así Cristo desciende a la tierra como Jesús y se
vuelve un mortal. Así el Padre de Jesús fue la tierra, cuya consorte es María, el
cielo, Jesús es hecho un Messiah, y sufre vicariamente como el Salvador,
Redentor y Justiciero de hombres. Como en Egipto, Judas representa el Poder
Maligno y Jesús el Poder Benigno. Jesús es traicionado por Judas y luego se
levanta superior al Satán-Judas.

Estas dos figuras simbólicas representan el conflicto entre la Luz y la


Oscuridad- el Espíritu y la Materia en todas las religiones de misterios. Por lo
tanto, el Legatus Inmortal, el Espíritu del Hombre, en mitología llamado el Sol,
dio media vuelta alrededor del zodíaco, desde el signo del León, luego cruza el
Río del Aguatero, el Jordán hebreo, donde ocurre el bautismo, la
transformación del niño Jesús en el adulto viril Cristo, quien se vuelve el
conquistador del poder maligno- Judas, y en el bautismo la Paloma descendió
en Jesús. Esto significa que el Espíritu Inmortal se unió con el Alma Inmortal y
Jesús se volvió el Uno Cristificado.

Jesús dice: “Yo soy el Camino, la verdad y la Luz” y Osiris también dice: “Yo
soy el Sendero por el cual ellos (los hombres) atraviesan el sepulcro de Osiris”.
Así, en efecto, el Jesús Cristiano y el Horus Egipcio son uno y el mismo mito,
representando el descenso desde en y el ascenso del Alma Divina del hombre
fuera de la tumba de la materia.

En este artículo hemos deliberadamente evitado revelar demasiado de la


Gnosis, porque a menos que usted pueda entender la enseñanza ya dada a
usted, no hay ningún propósito en revelar más de las más esotéricas verdades.

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