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CONCEPTO.-
TIPOS DE INMUNIDAD
INMUNIDAD NATURAL.-
Durante el proceso de evolución los individuos de cada especie han logrado
desarrollar una serie de mecanismos que les permiten repeler el ataque de
diferentes microorganismos patógenos. El conjunto de procesos que protegen
a cada individuo del primer ataque de los gérmenes presentes en su medio
ambiente, constituyen la llamada inmunidad natural.
INMUNIDAD ADQUIRIDA.-
La respuesta de defensa inmunitaria contra el agente agresor se perfecciona
gracias a un proceso de “aprendizaje” que tiene lugar durante el primer
contacto del hospedero con el agente patógenos. Gracias a este contacto,
grupos de linfocitos son “programados” en tal forma que puedan iniciar una
respuesta inmune, rápida y eficaz cuando el mismo agente patógeno trate de
ingresar por segunda vez al organismo, la inmunidad adquirida puede, a su
vez, subdividirse en activa o pasiva.
INMUNIDAD ACTIVA.-
La inmunidad activa es aquella que se desarrolla en el curso de una
enfermedad infecciosa. Durante el proceso del control de la infección, varias
células integrantes de sistema específico inmunidad, “aprenden” procesos
metabólicos que le permitirá ante ulteriores ataques por el mismo germen,
evitar que se presente la enfermedad, bien sea por la producción de
anticuerpos o por la acción de las células que actúan directamente contra el
agente agresor. Este tipo de inmunidad explica la resistencia que se adquiere
contra ciertas enfermedades infecciosas, especialmente algunas producidas
por virus, que una vez sufridas no se vuelven a presentar durante la vida del
individuo.
Mediante los procesos de vacunación, se logra “enseñar” al sistema inmune a
defenderse de determinado microorganismos, sin necesitar que se produzca la
manifestación clínica de la de la enfermedad infecciosa.
INMUNIDAD PASIVA.-
Se llama inmunidad pasiva al proceso de defensa que se logra contra
determinado agente patógeno mediante el empleo de anticuerpos protectores
que provienen del exterior. De esta forma es posible controlar una infección sin
que el sistema inmunitario del individuo haya tenido contacto previamente con
el agente patógeno. Este mecanismo explica también la defensa que contra las
infecciones tiene el recién nacido, gracias a los anticuerpos que recibe de la
madre a través de la placenta, en el calostro y en la leche. En la práctica clínica
es de uso frecuente el empleo de procedimientos inductores de inmunidad
pasiva, tales como administrar a la persona que sufre una enfermedad
infecciosa, concentrados de anticuerpos específicos contra microorganismos
responsables de la entidad. De esta forma se logra controlar rápidamente la
infección.
CÉLULAS Y ÓRGANOS DEL SISTEMA INMUNITARIO
El sistema inmunológico es una serie de órganos y células que se extiende por
todo el cuerpo y que actúa como la última línea de defensa frente a la infección
el Sistema inmunitario sólo a sido reconocido como un sistema independiente
en los últimos 40 años. También se le conoce como sistema linfoide, debido a
que sus células principales son los linfocitos, uno de los cinco leucocitos que
existe. Los linfocitos son células uniformes y redondeadas, que carece de
gránulo visible y que son relativamente pequeñas.
Existen dos tipos de linfocitos: linfocitos B (células B) y linfocitos T (célulaT).
Los órganos de importancia inmunológica primaria, denominados órganos
linfoides primarios, son la médula ósea y el tino (que se encuentra localizada
delante del corazón).
Los órganos de importancia inmunológica secundaria denominados órganos
linfáticos secundarios, son los ganglios linfáticos y el bazo.
RESPUESTA INMUNITARIA.-
EL RECONOCIMIENTO INMUNITARIO.-
ANTÍGENOS.-
LA ACTIVACION INMUNITARIA.-
LINFOCITOS B.-
Gracias a que hemos nacido con millones de linfocitos B, cada uno de los
cuales produce un anticuerpo diferente que puede reconocer un epítopo
diferente, podemos defendernos frente a los microorganismos que nos
amenazan continuamente. Las células B se diferencian de la médula ósea en
las primeras etapas de desarrollo, antes de que estemos expuestos a los
antígenos extraños. En otras palabras, durante la diferenciación de la médula
ósea, las células B se hacen inmunocompetente (adquiere capacidad de
producir anticuerpos, que es un receptor antigénico exclusivo).
LINFOCITOS T.-
. Las células T se dividen en dos clases principales (las células T 4 y las células T8,
respectivamente. Las células T4 don células TH (cooperadoras). Regulan el sistema inmunitario
aumentando la respuesta inmunitaria. Las células T 8 se diferencian a su vez en células T C
(citotóxicas) y células TS (supresoras). Las células TC atacan y matan a los microorganismos
invasores; las células TS regulan el sistema inmunitario reduciendo (suprimiendo) la respuesta
inmunitaria.
RECONOCIMIENRO ANTIGÉNICO.-
Las células T producen proteínas receptoras de los antígenos con los que se
unen los antígenos foráneos (y, por tanto reconociéndolos). En muchos,
aspectos los receptores de los antígenos de las células T se parecen a las
moléculas de anticuerpos que actúan como receptores antigénicos de las
células B. Al igual que durante la diferenciación de las células B, se producen
por procesos de recombinación del DNA millones de células T genéticamente
distintas, cada una capaz de producir un receptor antigénico proteico
determinado y exclusivo, que posee una única y determinada especificidad de
unión al antígeno. También al igual que sucede con los anticuerpos, cada
receptor antigénico de las células T posee una región variable que se une y
reconoce el antígeno y una región constante, que se fija a la superficie de la
células T.
.
RESPUESTA DE LOS LINFOCITOS T. INMUNIDAD CELULAR.-
Las células T reconocen antígenos que previamente han sido capturados y
procesados (parcialmente digeridos) por células presentadoras de antígenos,
como los macrófagos, las cuales producen además citocinas que ayudan a la
respuesta. Una vez activadas, las células T pueden realizar diversas funciones:
ENFERMEDADES INMUNITARIAS.
ALERGIAS.-
Por lo general, la alergia se manifiesta por primera vez durante la infancia y los
primeros años de la adolescencia, pero también puede hacerlo más tarde. En alguna
ocasión, determinados factores psicológicos, como los conflictos emocionales, juegan
un papel importante en los fenómenos alérgicos, llegando a clasificarse algunas
alergias como alteraciones producidas por el estrés.
Este virus, conocido en la actualidad como VIH, resultó ser el agente causante
del SIDA.
Conviene recordar que la infección por VIH no implica necesariamente que la
persona vaya a desarrollar la enfermedad; en esta fase el individuo se
considera “seropositivo o portador”, pero es erróneo considerar a la persona
infectada con el VIH un enfermo de SIDA. De hecho, se tiene constancia de
que algunas personas han sufrido una infección por VIH durante más de diez
años sin que, durante este tiempo, hayan desarrollado ninguna de las
manifestaciones clínicas que definen el diagnóstico de SIDA.
DESARROLLO DE LA ENFERMEDAD.-
Desde que una persona se infecta con el VIH hasta que desarrolla el SIDA
suelen transcurrir entre 6 y 10 años. Desde 1996, la determinación de la
cantidad de virus circulante en la sangre de la persona infectada, que recibe el
nombre de carga viral, se ha convertido en el marcador más importante de la
evolución de la enfermedad.
Durante esta etapa los individuos son altamente contagiosos.
En la última fase, denominada SIDA o fase de enfermedad avanzada por VIH,
aparecen las infecciones y tumores característicos del síndrome de
inmunodeficiencia adquirida.
MODO DE TRANSMICIÓN.-
DIAGNÓTICO
Aunque el síndrome de inmunodeficiencia adquirida se detectó en 1981, la
identificación del virus VIH como agente causal de la enfermedad no se produjo
hasta 1983. En 1985 empezó a utilizarse en los bancos de sangre la primera
prueba de laboratorio para detectar el VIH, desarrollada por el grupo de
investigación de Roberto Gallo. Esta prueba permitía detectar si la sangre
contenía anticuerpos frente al VIH. Sin embargo, durante las 4 a 8 semanas
siguientes a la exposición al VIH, la prueba es negativa porque el sistema
inmunológico aún no ha desarrollado anticuerpos frente al virus.
TRATAMIENTO