Changing Climate Past Present and Future - Quante - En.es

El clima cambiante: pasado, presente y futuro
Markus Quante
Abstracto Durante los 4,6 mil millones de años de su existencia, la Tierra se ha visto una gran variedad de estados
climáticos. Durante la evolución de nuestro planeta, su clima se caracteriza por períodos de una mayor variabilidad
del clima o incluso columpios y algunos más o menos estables - períodos - casi silencioso. la variabilidad climática
natural era la regla más que una excepción y la evolución de la vida en la Tierra está estrechamente relacionada con
el clima y su cambio.
Por cerca de 250 años, la humanidad ha interferido más fuerte con el sistema climático a través
de la liberación de gases y partículas radiactivas en cantidades sustanciales en la atmósfera. Una
media global cerca de aumento de la temperatura de superficie - el calentamiento global - se puede
deducir a partir de observaciones instrumentales, que comenzaron en el 1860. El ritmo y la cantidad
de este aumento de temperatura no tiene precedentes por lo menos los últimos 1600 años, como
reconstrucciones de datos proxy indican. El calentamiento observado se puede atribuir en gran parte
a las actividades humanas como el más reciente informe del Grupo Intergubernamental sobre el
Cambio Climático estados. El aumento de la temperatura atmosférica se acompaña de un aumento
de la temperatura de la superficie del mar y un aumento del nivel del mar.
proyección climático impulsado por escenarios socioeconómicos indican que la temperatura global y el
aumento del nivel del mar continuará durante todo el siglo XXI y más allá, la cantidad de la que depende en
gran medida de las suposiciones subyacentes de emisiones.
Hay algunos elementos climáticos que pueden ser sensibles a los cambios repentinos y bruscos, cuando un
conjunto de parámetros de acondicionamiento se excedió o se superan ciertos umbrales; Un ejemplo destacado es
un posible colapso de la circulación termohalina en el Atlántico Norte. Aquí, la investigación adicional en necesario
cuantificar los umbrales, los efectos y los horizontes de tiempo.
En general se puede decir que una cierta cantidad del futuro cambio climático es inevitable,
independientemente del itinerario de reducción de emisiones a la humanidad va a seguir y que las
emisiones del siglo XXI afectará notablemente el clima durante todo el milenio.
M. Quante
GKSS Centro de Investigación, Instituto de Investigación Costera, Geesthacht, Alemania e-mail:
Markus.quante@gkss.de
JC Habel y T. Assmann (eds.), Las especies relictas: Filogeografía y Biología de la Conservación, 9

DOI 10.1007 / 978-3-540-92160-8_2, © Springer-Verlag Berlin Heidelberg 2010
10 M. Quante
1. Introducción
Hace alrededor de 4,6 mil millones de años se formó el sistema solar, incluyendo el planeta Tierra. Durante la
evolución de nuestro planeta su clima se caracteriza por períodos de variabilidad mejorada o incluso columpios y
algunos más o menos estables - fases casi silencioso. La historia de la Tierra es una historia de la co-desarrollo de los
océanos, la atmósfera, la corteza terrestre, el clima y la vida en una perspectiva cósmica (Cloud 1978) . Desde el punto
de vista de nosotros los seres humanos, una de las cuestiones más llamativas en este contexto es: ¿qué se necesita y
en qué calidad y cantidad para permitir que los planetas para sustentar la vida? Si los planetas son adecuados para la
vida depende en gran medida de sus abundancias volátiles, especialmente agua, y, como condición previa para su
clima que está estrictamente determinado por la disponibilidad de energía, en la distancia de su estrella central.
El clima de la Tierra ha permanecido propicio para la vida durante al menos los últimos 3,5 mil millones de años, a pesar
de la luminosidad solar mucho más bajo a principios de este lapso de tiempo (alrededor de un 30% menos, Gough 1981) ,
Que se conoce como joven Sol débil (Kasting et al.
1988 ; Kasting y Gatling 2003) . El hecho de que la temperatura global varió sólo entre valores que permitieron
para el agua líquida durante la fase temprana (débil paradoja sol joven) es muy probablemente debido a las
elevadas concentraciones de dióxido de gases de efecto invernadero de carbono (CO 2) y / o metano (CH 4), que
están implicados en largo plazo bucles de retroalimentación, que estabilizan el clima de una manera tal que
permita un ciclo de agua que se mantiene (Broecker 1985 ; Pavlov et al. 2000 ; Kasting 2005) . Los principales
factores naturales externos e internos de la variabilidad del clima que tenía más o menos influencia sobre todo
el lapso de tiempo de la historia de la Tierra están relacionados con cambios en la salida del sol en diferentes
escalas de tiempo (por ejemplo Haigh 2007) , Cambios orbitales con diferentes periodicidades (por ejemplo,
Berger 1988) , Tectónica de placas (Raymo y Ruddiman 1992) Y volcánica (Lamb 1970 ; Robock 2000) . Después
de una fase determinada puramente físico-química en el comienzo de la evolución de la vida, el clima comenzó
a ser fuertemente influenciado por la biosfera. Con la aparición de la fotosíntesis en los océanos y en tierra, la
biosfera contribuyó esencialmente a la alta concentración de oxígeno en la atmósfera y por lo tanto ganó una
influencia importante en la química de los gases traza. La biosfera comenzó a participar en muchos de los
ciclos de la materia, y con el ciclo del agua y el ciclo del carbono estableció la firma más fuerte en el sistema
climático. El desarrollo y la expansión de la vegetación sobre la tierra cambiaron sustancialmente el albedo de
la superficie de la Tierra, afectando de ese modo sobre el presupuesto energético del planeta.
La estabilidad del clima a lo largo de varios milenios reciente ha permitido la tierra a que se solucione,
desarrollado y activado para permitir la producción de alimentos necesarios para una población creciente. Con el
desarrollo de la agricultura hace unos 1.000 años, y la liberación correspondiente de gases de efecto invernadero,
principalmente CO 2 y CH 4, y los cambios en la cobertura del suelo que afecta a los ciclos de albedo y biogeofísicas de
la Tierra, los seres humanos comenzaron a influir en el clima global (Ruddiman 2003) . Con la llegada de las fábricas
que queman carbón y plantas de energía en los tiempos modernos, las sociedades industriales comenzaron a liberar
CO 2 a gran escala en la atmósfera. El desarrollo de la sociedad móvil con un número cada vez mayor de vehículos
motorizados (locomotoras, barcos y coches)
El clima cambiante: pasado, presente y futuro 11
añadido a la cartera de emisiones. Crutzen y Stoermer (2000) llamado la era industrial con los seres humanos alterar
masivamente la concentración de gas de efecto invernadero en la atmósfera como la “Antropoceno”; el año 1800 se
ha asignado como el comienzo de esta época (véase también Steffen et al. 2007) . Todas las concentraciones de
gases de efecto invernadero pertinentes han aumentado considerablemente en los últimos 200 años y la temperatura
media mundial está aumentando y prevé que aumente a lo largo de los siglos siguientes (IPCC 2007a) . Hoy en día, la
humanidad se encuentra en una posición en la que las decisiones urgentes deben hacerse y abordar las cuestiones -
en qué forma y cantidad de las emisiones relacionadas con su actividad tienen que ser reducidos - con el fin de evitar interferencias
peligrosas en el sistema climático, como se postula por la Convención de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático
(ONU 1992) .
La estabilización del componente de dióxido de carbono del cambio climático está fuertemente relacionada con el
cambio de cómo producimos nuestra energía. Estabilización requerirá carbono emissionfree fuentes de energía
primaria, además de una demanda de energía de uso final reducida y mejoras en la eficiencia energética. En un
artículo ampliamente reconocido, Pacala y Socolow (2004) construir un escenario con un valor objetivo de 500 ppm CO 2
sobre una escala de tiempo 50 años, que se basa enteramente en las tecnologías actuales. En contraste, Hoffert et
al. (2002) concluir a partir de su evaluación que sólo una ruta de tecnología avanzada puede conducir a un clima
estabilizado y que la investigación y el desarrollo intensivo en este sector es una necesidad urgente. Además de
mitigación, medidas de adaptación (IPCC
2007b) También se están discutiendo, dada la posibilidad de que un cierto cambio del clima global es casi
inevitable (IPCC 2007a) . En los últimos años, una idea esencialmente diferente y más para abordar el
calentamiento global se ha reanimado, se concentra en una activa y deliberada interferencia en el sistema climático
con el fin de reducir los riesgos asociados con el cambio climático. Las medidas propuestas para un intento de
transformar el clima de la Tierra a escala planetaria se resumen básicamente por la geoingeniería expresión
(Keith 2000 ; Schneider 2001 ; Weart 2008) . La geoingeniería está siendo ampliamente discutida pero controvertido,
ya que muchas consecuencias de los conceptos propuestos son muy inciertos, y podrían permanecer incierta
durante mucho tiempo, y los aspectos éticos, políticos y legales son únicamente se refirió a la cebada (Fleming 2007
; Robock 2008 ; Schneider 2008) . Es muy probable que el cambio climático es y estarán que afecta a la fisiología, la
fenología y la distribución de las especies de plantas y animales en todo el mundo. Los estudios de observación y
modelación están apoyando esta declaración, con detalles siendo aún objeto de debate. Las plantas y los
animales están respondiendo de una manera sorprendente, en general, como lo hicieron al final de la última edad
de hielo. Principalmente en un esfuerzo para mantener la zona de temperatura que se adaptan a (pero otros
parámetros también pueden ser importantes), que están cambiando su gama hacia las latitudes más altas y, de
ser posible, hacia altitudes superiores tales como las regiones montañosas. Tales cambios se han observado en
una amplia gama de especies. mariposas europeas pueden servir como un ejemplo bien documentado, y
parmesano et al. (1999) encontraron que más de 2/3 de las especies que siguieron habían cambiado su gama
hacia el norte durante el siglo XX. En los Alpes y las montañas rocosas, los árboles y las hierbas han estado
emigrando pendiente ascendente. Los detalles sobre este tema, no se pueden presentar en el marco de esta
visión general; Sin embargo, alguna información relevante con respecto a las especies, la biodiversidad y el
cambio climático se puede extraer
12 M. Quante
de las siguientes publicaciones y las muchas referencias citadas en los mismos: Hughes
2000 ; Sala et al. 2000 ; Walther et al., 2002 ; Parmesano y Yohe 2003 ; Walther
2003 ; parmesano 2006 ; Botkin et al. 2007 ; Fischlin et al. 2007 ; Hoegh-Guldberg et al. 2007, 2008 ; Kerr et al. 2007 ;
Midgley et al. 2007 ; Thuiller 2007 ; bonan 2008 ; Lee y Jetz 2008 ; Rosenzweig et al. 2008 ; Thuiller et al. 2008 . La
ciencia del cambio climático está tocando en un gran número de temas con muchas facetas, que no puede ser
plenamente en cuenta aquí, y los aspectos seleccionados no puede ser elaborado en profundidad. Por lo tanto,
un intento se ha hecho en las siguientes secciones para proporcionar una selección extensa de referencias
relevantes para el estudio adicional, muchos de ellos en revistas fácilmente alcanzables. En las secciones
siguientes, y después de un breve resumen de los principales fundamentos científicos, la historia del clima de la
Tierra durante la última se recapitula con mayor énfasis en el Holoceno. La sección sobre el clima actual se
basa en observaciones basadas en medidas directas de los parámetros climáticos, principalmente temperatura y
precipitación. Finalmente, las perspectivas en el futuro los informes sobre los estudios de modelización de las
evaluaciones del cambio climático global y regional sobre la base de simulaciones de escenarios impulsada. Las
limitaciones de las predicciones del modelo, especialmente con respecto a la regionalización, también serán
tocados. En cuanto el clima presente y futuro, los resultados del último informe de evaluación (AR4) publicado
por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC 2007a) se utilizan como una línea
de base. A medida que el IPCC AR4 sólo considera publicado artículos científicos hasta 2005, para algunos
aspectos trabajo más reciente se ha considerado, además.
2 base científica
2.1 El sistema climático y procesos pertinentes
La definición habitual del clima es que abarca los aspectos de variación lenta del sistema superficie-atmósfera
hidrosfera terrestre. En cierto sentido, el clima es la condición media del tiempo durante varios años para decenas
de años (tiempos de promediado deben ser cuidadosamente elegida), como se ejemplifica por los parámetros viz.,
Temperatura, velocidad del viento, la humedad relativa, la nubosidad y la cantidad de precipitación. definiciones
climáticos modernos incluyen estadísticas de orden superior más allá de los valores medios, tales como las
magnitudes de día a día o variaciones de año a año, desviaciones o medidas de formas de las distribuciones de los
parámetros estándar.
El clima no sólo depende de los procesos atmosféricos y su composición, sino también físicos, químicos
y biológicos que afectan a otros componentes del sistema Tierra jugar un papel crucial. Con el fin de
entender lo que los factores son que controlan la evolución del clima, las interacciones entre los diferentes
componentes del sistema de la Tierra necesitan ser evaluados (por ejemplo, Brasseur et al. 1999) . Esto se
suma a la complejidad del tema ya que la evolución y las reacciones implicadas se ejecutan en una
variedad de diferentes escalas de tiempo. La atmósfera, la hidrosfera, la biosfera,
la criosfera y la litosfera son los cinco regímenes del sistema de la Tierra con diferentes impactos muy
variables y escalas de tiempo que componen el sistema climático.
los abundancia de agua en sus tres estados de agregación y un ciclo global del agua en funcionamiento es de
suma importancia para el sistema climático (por ejemplo Pagano y Sorooshian 2006 ; Quante y Matthias 2006) . La
fase de agua depende de la temperatura y la presión se expone a. En el rango normal de presiones atmosféricas y
temperaturas en el agua de la Tierra pueden existir en sus tres estados básicos, como es evidente a partir de su
diagrama de fases en la Fig. 1 , Que muestra las curvas de transición de fase como función de la temperatura y la
presión parcial (véase Webster 1994) . La trayectoria de la Tierra en la Fig. 1 , Impulsado por un efecto invernadero
vapor de agua en aumento, intercepta las curvas de fase en la proximidad del punto triple del agua (273,16 K), lo que
permite la formación de un ciclo hidrológico complejo. Por el contrario, porque Venus es una estrella con una
temperatura de la superficie primitiva considerablemente más caliente, la curva para Venus no intercepta cualquiera
de las líneas de transición de fase de agua en absoluto. El agua permanece en la fase gaseosa en este planeta. La
curva de estado para Marte comienza a una temperatura relativamente baja (~ 240 K; no mostrado aquí) y
rápidamente intercepta la transición de fase vapor-hielo.
Todos los subcomponentes del sistema climático están implicados en o mantienen procesos que
pueden tener un gran impacto en el clima. La interacción entre la radiación y la convección en la atmósfera
regula la temperatura en la superficie de la Tierra. Los océanos, que cubren aproximadamente el 72% de la
superficie de nuestro planeta, influyen en el clima por su gran inercia térmica y su papel importante en la
toma de dióxido de carbono de la atmósfera. Si está presente, la criosfera con amplia nieve y
10 3
líquido
10 2
hielo
vapor
10 1
presión parcial [hPa]
10 0
Tierra Venus
10- 1
10- 2
200 250 300 350
temperatura [K]
Figura 1 Diagrama de fase de agua que ilustra la posible aparición de los tres estados del agua para la gama de
temperaturas observadas en la superficie de la Tierra y en la atmósfera inferior; ~ 190 K-325 K y 0-50 hPa intervalo de
presión parcial en la superficie. Figura adaptada de Quante y Matthias (2006)
14 M. Quante
zonas cubiertas de hielo tiene una fuerte influencia en el albedo planetario (Parkinson 2006) . Además de su gran
influencia en el albedo Earth's con un efecto de enfriamiento neto correspondiente, las nubes también están
contribuyendo a un calentamiento de la superficie mediante la absorción de radiación infrarroja y emitirla en parte de
nuevo hacia el suelo (por ejemplo, Quante
2004) . Las nubes cubren en cualquier momento dado entre el 60 y el 70% del globo. Los organismos vivos sobre
la tierra y en los océanos están involucrados en oxígeno liberador y secuestro de carbono en la corteza terrestre
y reducir así las emisiones de CO 2 concentración de la atmósfera. La evolución de la vegetación está fuertemente
acoplado con el de suelo y el clima, y hay una miríada de interacciones implicadas (por ejemplo, Berry et al. 2005 ;
Barth et al. 2005) . La tectónica de placas ejerce una influencia sobre el clima en escalas de tiempo de más de
millones de años a través de la deriva continental, la creación de montañas (Turcotte y Schubert 2002) y volcánica
(Robock 2000) . De todos los ciclos biogeoquímicos, el hidrológico (por ejemplo, Quante y Matthias 2006 ; Oki y
Kanae 2006) y el ciclo de carbono (por ejemplo, Houghton 2007 ; Doney y Schimel 2007) son los más relevantes
para el clima y su evolución.
La principal forzamiento externo del sistema climático proviene del sol. Todo en la Tierra depende de un flujo
constante de energía proporcionada por nuestra estrella central. La cantidad de radiación producida por el sol no
es constante, especialmente en el corto, las longitudes de onda ultravioletas. Debido a cambios en la estructura
magnética del sol gaseosa, la actividad solar muestra variaciones, que se manifiestan en un ciclo de 11 años.
Aunque se han hecho intentos, un acoplamiento teórica firme de este corto plazo las fluctuaciones de la actividad
solar con los cambios climáticos no se pudo encontrar. Un depósito de energía ligeramente mejorada en la
estratosfera es uno de los efectos más reconocidos. Algunas pruebas de la influencia de las variaciones de la
actividad solar en la atmósfera inferior y el clima se evalúa críticamente por Bard y Frank (2006) , Foukal et al. (2006)
y Haigh (2007) . Estas variaciones desempeñan algún papel en la discusión sobre el calentamiento global
moderna, ya que si los cambios climáticos debidos al sol fueron significativamente más grande, sería más difícil
de extraer la señal antropogénica del registro climático (ver Sect. 4.4). La historia es diferente, sin embargo,
cuando se trata de la evolución a largo plazo del sol; en su infancia, la intensidad del sol era aproximadamente
un 30% menos de lo que se observa hoy (Gough 1981) , El clima relativamente moderado en estas condiciones
se conoce generalmente como “débil sol joven paradoja” (por ejemplo, Sagan y Chyba 1997) . Una posible forzar
más externa del clima de la Tierra podría llegar a través de los rayos cósmicos galácticos y su influencia en las
nubes (Marsh y Svensmark 2000 ; Carslaw et al. 2002 ; Kristjánsson et al. 2004 ; Kirkby 2008) . La ciencia relacionada
y la magnitud potencial de efectos postuladas Actualmente se está debatiendo y planearon experimentos en el
Conseil Européen pour la Recherche Nucléaire (CERN) debe, al menos, proporcionar alguna información sobre
los procesos de nube microfísicos subyacentes.
En resumen, la Fig. 2 esboza el sistema de la Tierra y sus interacciones, que abarca el sistema físico
del clima, los ciclos biogeoquímicos, fuerzas externas, y los efectos de las actividades humanas. Para un
tratamiento más riguroso de los diferentes aspectos relacionados con el sistema climático y los procesos
subyacentes, los libros de Peixoto y Oort 1992 ; Graedel y Crutzen 1993 ; Hartmann 1994 ; Brasseur et al. 1999 ;
Seinfeld y Pandis 2006 ; Ruddiman 2008 ; y Pierrehumbert 2009 se recomiendan.
Figura 2 diagrama esquemático del sistema climático y sus interacciones entre los diferentes componentes del sistema Tierra (Sistema de
Ciencias de la Tierra: Generalidades, la NASA)
2.2 Variabilidad del Clima
El clima varía en escalas de todos los tiempos ya que su límite definición y en una amplia gama de escalas
espaciales, desde la regional a lo global. La variabilidad del clima se puede expresar en términos de dos modos
básicos: el modo forzado con variaciones que son la respuesta del sistema climático a los cambios en el
forzamiento externo, que a su vez no están influenciados por las variables climáticas a sí mismos, y las
variaciones modo libre debido a inestabilidades internas y evaluaciones que conducen a las interacciones no
lineales entre los diversos compuestos del sistema climático (Peixoto y Oort 1992 ; ghil 2002a) . Además, los
forzamientos estocásticos pueden producir impulsos repentinos en las variables climáticas (Hasselmann 1976) .
Es debido a esta compleja naturaleza de la variabilidad que una identificación fiable de una influencia humana
sobre el clima y sobre todo su cuantificación resulta ser tan difícil.
La variabilidad temporal del sistema climático en los últimos 10 millones de años puede ser visualizado
mediante la reproducción de un espectro de potencia de la temperatura cerca de la superficie (fig. 3 ), Que es un
compuesto de varias series de tiempo climático. Las líneas nítidas en el espectro corresponden a variaciones
(ciclos diarios y anuales) forzado periódicamente, surgen picos más amplios de modos internos de la
variabilidad, y los segmentos continuos del espectro reflejan variaciones estocásticamente forzadas, así como
caos determinista que resultan de la interacción de no evaluaciones -linear (Ghil 2002b) .
dieciséis M. Quante
Fig. 3 espectro de potencia compuesto de la variabilidad climática en los últimos 10 millones de años (después de Ghil 2002b)
La firma inmediatamente a la izquierda del pico a la de 1 año de período refleja la influencia de una variabilidad
interanual, que se conoce como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) (Neelin et al. 1998) e implica modos
internos del Pacífico tropical variabilidad del océano-atmósfera. Los períodos de varias décadas, ya que se
producen en el espectro son el objeto de la investigación en curso. A medida que la variabilidad interdecadal se
relaciona con los procesos internos del sistema climático esta parte del espectro podría contener algunas
pistas para la extensión de la previsibilidad del sistema océano-atmósfera.
La parte espectro con períodos comprendidos entre 1.000 años (1 KYR) a aproximadamente 1 millón de años (1 MYR)
en la Fig. 3 representa la variabilidad paleoclimática. Los datos de temperatura se basa el espectro lejos fuera del registro
instrumental venir de indicadores indirectos tales como registros de arrecifes de coral, anillos de árboles, núcleos de
sedimentos marinos, y los registros de núcleos de hielo. El lapso de tiempo capturado por el espectro se llama era de edad de
hielo con sus principales ciclos de glaciación (Imbrie y Imbrie 1979) , Que ocupa no más de aproximadamente la décima parte
de la historia de la Tierra documentado. El pasado 2,5 Myr con las oscilaciones climáticas marcadas se llama período
cuaternario.
Los forzamientos externos comprenden variaciones causadas por las fluctuaciones más pequeñas en la luz del
sol llega a la tierra, que se producen en escalas de tiempo más largos. Estos implican cambios en la forma de la
órbita de la Tierra alrededor del sol y los cambios en la distancia Tierra-Sol en el momento de los equinoccios. A
principios del siglo XX, en Belgrado, Milutin Milankovic' produjo una teoría matemática que se convirtió en la base
para un general
explicación del comportamiento dinámico del sistema climático, es decir, los principales cambios en el pasado y
el futuro (Berger 1988) . En particular, la teoría que se basa en las variaciones astronómicas deterministas en los
parámetros orbitales de la Tierra debe explicar las últimas edades de hielo en la Tierra. La teoría no fue
totalmente aceptado por sus estudiosos contemporáneos, y hoy sabemos que son órbitas no todo (Broecker y
Kunzig
2008) , Pero la variabilidad básica órbita se puede utilizar para reconstruir los registros climáticos. Los picos
prominentes alrededor de 20, 40 y 400 ka en el espectro de la fig. 3 son el resultado de variaciones periódicas cuasi
en la órbita de la Tierra (Berger 1988) , Lo que afectará a la insolación de verano en las latitudes altas. En intervalos
relativamente débil con la nieve depositada la insolación de verano durante el invierno no se funde por completo, por
lo que durante miles de años gruesas capas de hielo se puede acumular (forzada por el hielo albedofeedback). El
ciclo de alrededor de 100.000 años es debido a cambios en la excentricidad de la órbita (elliticity), las variaciones de
la inclinación del eje de rotación con respecto al plano de la órbita (la oblicuidad) de la Tierra conduce a la del ciclo
de 41.000 años y el 23 000 -Año ciclo (19.000 años) marca la precesión de los equinoccios cambiante. Los detalles
de la teoría orbital de la variación del clima están todavía bajo investigación (Paillard 2006) . En general, se puede
decir que los resultados de la variabilidad del clima a partir de las interacciones complejas de las variaciones
forzadas y gratuitas porque el sistema climático es un altamente no lineal, sistema disipativo con muchas fuentes de
inestabilidades (Peixoto y Oort 1992) . Los mecanismos de retroalimentación actúan como controles internos del
sistema, se originan a partir de acoplamientos especiales entre los subcomponentes abiertas y son de particular
importancia para el sistema climático de la Tierra. Comentarios pueden amplificar o amortiguar las distorsiones
originales del sistema. evaluaciones importantes son el agua-vapor, cloud-, nieve / hielo-albedo-evaluaciones, y la
retroalimentación dióxido de ciclo de carbono / carbono-silicato (Held y Soden 2000 ; Stephens 2005 ; Kasting y Gatling 2003)
.
2.3 Balance de energía y Efecto Invernadero
La Tierra recibe la abrumadora cantidad de su energía del sol en forma de radiación visible e infrarrojo cercano;
se trata principalmente de este último la energía que calienta su superficie. Nuestro planeta se enfría por la
emisión de radiación térmica infrarroja al espacio. El tratamiento de la Tierra como un radiador de cuerpo negro
con una temperatura efectiva T mi,
el equilibrio de la radiación entrante y saliente de la radiación conduce a la siguiente relación (por
s T= - UN) , dónde s es el
4
ejemplo, Wallace y Hobbs 2006) : e
S / 4 (1
Stefan-Boltzmann constante, donde S es el flujo solar a la distancia Sol-Tierra, y A es el albedo planetario.

Usando las constantes y cantidades numéricas apropiadas, la resolución de la ecuación se obtiene una
temperatura de emisión efectiva de 255 K. La realidad es, sin embargo, un poco más complejo, en el que la
Tierra junto con su atmósfera es
no un cuerpo negro perfecto. La atmósfera se calienta la superficie por el llamado efecto invernadero; partes
de la radiación infrarroja emitida desde la superficie es absorbida selectivamente y reemitida por los gases
de infrarrojos-activos dentro de la atmósfera. Con el flujo solar entrante de hoy en día (~ 1,368 Wm -2), albedo
(~ 0,3) y atmosférica
18 M. Quante
composición, una temperatura superficial media global de 288 K resultados. La diferencia entre la temperatura de
emisión eficaz y esta temperatura de superficie de 33 K es la magnitud del efecto real de efecto invernadero. Un
tratamiento más completo de la energía involucrada flujos con énfasis en el presupuesto de energía resuelta para
procesos adicionales se da en Kiehl y Trenberth (1997) . El factor más difícil en la cuantificación de los flujos de
energía a través de la atmósfera es el albedo planetario, que está determinada por las características del océano
y de la superficie de la tierra (tipo de suelo, humedad del suelo, la vegetación) y la distribución de las nubes en
tres dimensiones en la atmósfera, que es responsable de la fracción más grande. Las propiedades de las nubes
pertinente (y aerosol) son difíciles de predecir. Por lo tanto, los cálculos de los climas pasados y futuros basados
en los principios de energía (flujos radiativos y turbulentos) están sujetas a grandes incertidumbres,
es decir, desde las nubes están involucrados en varios circuitos de retroalimentación (Stephens 2005) . En el ambiente
de hoy en día los gases de efecto invernadero más importantes son el vapor de agua y dióxido de carbono, de los
cuales el primero contribuye alrededor de dos tercios del calentamiento asociado. contribuciones menores provienen
de metano, óxido nitroso, ozono y diversos clorofluorocarbonos. Es importante distinguir entre los gases de larga vida
de efecto invernadero, que se retiran lentamente de la atmósfera en una escala de tiempo de cientos a miles de años,
y los gases de efecto invernadero de corta duración, que se eliminan en cuestión de semanas a un año por
condensación o química rápida reacciones. Los gases de efecto invernadero de corta duración actúan principalmente
como un mecanismo de retroalimentación. En el siglo XVIII, la concentración atmosférica de la mayor parte de estos
gases (con la excepción de vapor de agua) comenzó a ser alterado de manera significativa debido a las emisiones de
las plantas de energía, la industria, la agricultura y la cría de animales, así como el sector de la movilidad. La discusión
efecto invernadero en curso es impulsado por las emisiones antropogénicas de CO 2, CH 4, norte 2 O, O 3 y CFC que
muestran incrementos fuertes, sobre todo en las últimas décadas. Se ha de señalar que todos estos gases tienen un
tiempo de residencia relativamente largo en la atmósfera y, por lo tanto, un alto potencial de calentamiento de
invernadero.
El vapor de agua como el principal jugador en el presupuesto energético de la Tierra es amortiguada por los enormes
océanos en una escala de tiempo de unas pocas semanas. Este gas ajusta su concentración en la atmósfera en respuesta a
los cambios climáticos, y tiene una fuerte retroalimentación positiva en el sistema climático, amplificando así el calentamiento
global causado por otros forzamientos (Held y Soden 2000) . El vapor de agua, a pesar de un importante gas de efecto
invernadero, no es un motor principal del cambio climático moderna (que desempeña un papel esencial a través de su
retroalimentación positiva). Como no hay emisiones antropogénicas significativas, vapor de agua no se ha convertido en
objeto de protocolos normativos políticos.
Por supuesto, los seres humanos comenzaron a influir en la composición de la atmósfera, y las concentraciones
de gases de efecto invernadero, así antes de que comenzaran la industrialización masiva. Hace unos 11.000 años
los agricultores de la Edad de Piedra pueden ya han alterado el clima de la Tierra en la limpieza de bosques y
campos de irrigación para los cultivos. Además resulta en cambios en el albedo, estas actividades pueden haber
dado lugar a considerables cantidades de CO 2 y CH 4 siendo emitida. Cabe mencionar que algunos eruditos incluso
han planteado la hipótesis de que esta interferencia temprana en el sistema climático, posiblemente, podría haber
evitado el inicio de una nueva edad de hielo (Ruddiman 2003, 2005) . Esta hipótesis controversial se discute, por
ejemplo, por Claussen et al. (2005) , ya que
las concentraciones de CO 2 durante el Holcene también podría atribuirse a procesos naturales (por ejemplo
Broecker y Stocker 2006 ; Steffen et al. 2007) .
2.4 CO 2: El buque insignia de gases de efecto invernadero Lived-Long
CO 2 Actualmente es el gas de efecto invernadero más importante (IPCC 2007a, b) . Está implicado en un ciclo de
carbono complejo (que también incluye CH 4), que a su vez está estrechamente conectado a través de evaluaciones en
el sistema climático total (Houghton 2007) . CO 2 es un gas de traza en la Tierra y que está presente en la atmósfera en
una concentración relativamente baja. Sin embargo, esta concentración ha variado fuertemente con el tiempo
geológico (Doney y Schimel 2007) . CO 2 está implicado en prácticamente todos los grandes cambios climáticos en la
historia de nuestro planeta, incluyendo el ir y venir de las edades de hielo, estados cálidos libres de hielo y el colapso
de la tierra en un estado global congelado hace unos 600 millones de años, este último evento que se conoce como tierra
de bola de nieve ( Hoffman y Schrag
2002 ; Pierrehumbert 2005) . También estuvo involucrado en la preservación de las condiciones favorables para la vida en
la Tierra joven, cuando el sol era mucho más débil (25-30%) que en la actualidad (Kasting y Gatling 2003) . Por supuesto,
hay mucho que decir acerca de CO 2 en el ciclo biogeoquímico del carbono y sus múltiples relaciones con el clima. Para
un estudio adicional, las publicaciones de información general compilados por Doney y Schimel (2007) , Hansen et al.
(2007a) Y Houghton (2007) y los artículos citados por los autores pueden ser referidos.
Inmediatamente antes del comienzo de la era industrial, el CO atmosférica 2

concentración ascendió a aproximadamente 280 ppm y varió entre 260 y 280 ppm en el 1000 de años previamente
(Houghton 2007) . Debido a que hay relativamente poco CO 2 en la atmósfera, para empezar, la actividad humana
moderna tiene la posibilidad de duplicar su concentración en el siglo XXI. Una gran monte del CO emitido 2 es
absorbido por los océanos y la vegetación, pero una parte importante se mantiene dentro de la atmósfera. Estado
actual de la técnica de las evaluaciones basadas en parte en los métodos de medición de oxígeno desarrollados por
Ralph Keeling, el hijo del famoso Dave Keeling, destinará alrededor de 35% del CO emitido 2 a una absorción océano
y aproximadamente 15% a fregaderos, principalmente los grandes bosques distribuidos sobre los continentes de la
tierra (Sabine et al. 2004 ; Broecker y Kunzig 2008) . Debido a su largo tiempo de residencia atmosférica, CO 2 se
mezcla bien durante los hemisferios y su aumento de la concentración con el tiempo puede evaluarse a primer
orden mediante la determinación de los valores relevantes en una ubicación. Hoy en día, hay aproximadamente 100
estaciones de todo el mundo, donde las muestras de aire semanales se recogen y analizan para CO 2. Keeling
comenzó el primer seguimiento sistemático de CO 2 concentraciones en 1958 en el observatorio Mauna Loa, Hawaii,
en el medio del Pacífico y lejos de cualquier grandes fuentes industriales (Keeling et al. 1976) . La curva de
concentración resultante se ha convertido en una especie de un icono del calentamiento global en los tiempos
modernos, y es también conocido como Keeling-curva ( Broecker y Kunzig 2008) . En la Fig. 4 , El Mauna Loa CO 2 la
concentración se representa, a partir de 1958 y que incluye los datos observados más recientes. atmosféricas de
CO 2 aumentó de alrededor de 315 ppm cuando las mediciones comenzaron a aproximadamente 385 ppm en 2007,
alrededor
20 M. Quante
Fig. 4 concentraciones medias mensuales de dióxido de carbono medido en Mauna Loa Observatory, Hawaii. El pequeño gráfico inlay muestra las tasas
de crecimiento de dióxido de carbono medios anuales de la estación de Mauna Loa. Esta información fue proporcionada por el Dr. Pieter Tans, NOAA /
ESRL
38% por encima del valor pre-industrial de 280 ppm. La concentración actual es la más alta, que ha sido
registrado en los últimos 800.000 años (Lüthi et al. 2008) y es, probablemente, también la más alta en los últimos
20 millones de años (Pearson y Palmer 2000) . Las fluctuaciones anuales visto en la curva ascendente en general
se deben a estacionalmente cambios en la absorción de CO 2 por la vegetación principalmente en el hemisferio
norte; la curva correspondiente (no mostrado aquí) tomada en el Polo Sur se ve bastante suave en comparación.
El gráfico de incrustación en la Fig. 4 muestra el CO 2 aumentar la velocidad a la Mauna Loa, con valores positivos a
lo largo y una clara tendencia a valores más altos en los últimos años. Las sutiles variaciones en las tasas de
crecimiento anuales indican la respuesta de los procesos terrestres y marinos a la variabilidad climática (Doney y
Schimel 2007) . La tasa de aumento en la concentración promedio global de la atmósfera CO 2 entre 2000 y 2006
fue de 1,93 años ppm -1. Esta tasa es la más alta desde el comienzo de la vigilancia continua en 1958 y es un
aumento significativo sobre las tasas de incremento en las décadas anteriores; las tasas de crecimiento promedio
para los años 1980 y 1990 fueron 1,58 y 1,49 ppm año -1, respectivamente (Canadell et al. 2007) . Los autores
también estiman que el 35% del aumento en el CO atmosférica 2 tasa de crecimiento entre 1970-1999 y 2000-2006
fue causado por una disminución en la eficiencia de los sumideros de la tierra y el mar en la eliminación de CO
antropogénico 2 ( 18%) y por un aumento en la intensidad de carbono de la economía global (17%). El 65% restante
se debió al aumento de la economía mundial. Debido a la todavía fuertemente el aumento de CO 2 las emisiones,
la concentración
ción de CO 2 seguirá aumentando en las próximas décadas, por lo tanto mejorando aún más el efecto invernadero
antropogénico. En relación con estos clientes potenciales y para el tratamiento de otros gases de efecto invernadero,
Sección 4 y el más reciente informe de evaluación del clima de la ONU (IPCC 2007a, b) se debe a que se refiere.
Pasado 3: vista a través de servidores proxy
Este punto de vista sobre el clima del pasado, es en su núcleo orientados a lo largo de los tratamientos ofrecidos
por condensados Graedel y Crutzen (1993) , Wallace y Hobbs (2006) Y Pierrehumbert (2009) y complementado
por nuevos hallazgos seleccionadas y algunas adiciones.
3.1 Pasado profunda: el registro geológico
Durante los primeros 700-800 millones de años de su historia, la Tierra estaba todavía bajo bombardeo
continuo por planetesimales. Los geólogos llaman a esta temprana fase de la Hadeano Época ( 4.6 a 3.8 Gyr
atrás), para los que el registro geológico es casi inexistente. Dichos impactos deben tener vapor de agua
liberado y otras sustancias volátiles, lo que resulta en la formación de una atmósfera primordial. No es
sorprendente que el clima de la Hadeano es muy mal entendida, con sólo declaraciones conceptuales y
basados en modelos predominantes (Kasting y Ono 2006) .
Un registro geológico escasa está disponible para la época Arcaica posterior (hace 3.8 a 2.5 Gyr), y donde la
Tierra se ha convertido en lo suficientemente estable como para permitir la vida temprana de desarrollar en los
océanos. El clima durante la primera arqueana fue probablemente caliente, ya que las temperaturas superficiales de
70 ± 15 ° C, reconstruidas a partir de las relaciones isotópicas de terreno de montaña en Sudáfrica, sugiere (Kasting y
Ono 2006) . De paleoweathering análisis se puede concluir, que durante las temperaturas de la superficie moderados
arqueanos finales deben haber predominado (Holanda 1984) . A pesar de que existen grandes incertidumbres aquí, el
balance de la evidencia sugiere una Tierra temprana relativamente fría con respecto a los posibles eventos océano
vaporización (Kasting y Ono 2006) .
3.1.1 débil Sun Young
Se sabe que la emisión de radiación de las estrellas aumenta gradualmente a lo largo de su vida. Se cree que
la luminosidad del sol haber aumentado más o menos linealmente en un 30% desde la formación del sistema
solar (Gough 1981) . Esto, a su vez, significa que la radiación solar recibida por la Tierra primitiva era
considerablemente menor en comparación con el valor actual día de 1370 W m -2 en la parte superior de la
atmósfera. Las evaluaciones de clima histórico deben dar cuenta de este comienzo con menos energía y que se
conoce como el problema del joven Sol débil (Kasting et al. 1988) .
22 M. Quante
A pesar de la joven Sol débil, la evidencia geológica indica que los océanos han sido en gran parte libre de
hielo y que la superficie de la Tierra no se congeló perpetuamente durante su fase temprana de la evolución. Por
otra parte, tampoco hay pruebas convincentes en el registro geológico, lo que sugiere que las glaciaciones
generalizadas ocurrieron antes, alrededor de 2,3 Gyr atrás. La atmósfera debe haber contenido concentraciones
mucho más altas de gases de efecto invernadero en comparación con los tiempos modernos. La respuesta del ciclo
del carbono inorgánico y el silicato de ciclo carbonato a cambios en el clima mantuvo el CO 2 nivel en la atmósfera a
un nivel suficientemente elevado, en este contexto vulcanismo ya la intemperie eran procesos pertinentes dentro
del proceso de retroalimentación negativa sobre el clima (Berner 2004) .
3.1.2 El metano
En los últimos años, se ha hecho evidente que el CO 2 solo, no podría haber compensado la entrada solar
notablemente reducida. Debido a una concentración de oxígeno mucho más bajos en la atmósfera primitiva, el
metano podría haber tenido una duración de vida considerablemente más larga que, además de una posible
fuente temprana para el metano (metanógenos), hecho CH 4 un candidato para el gas de efecto invernadero
responsable de estabilizar el clima de la tierra primitiva. Los detalles del papel de metano en el clima principios
son bastante complicados y sólo en parte resuelto. Para una discusión más en profundidad sobre el metano se
remite al lector a Kasting y Catling (2003) , Kasting (2005) Y Kasting y Ono (2006) .
3.1.3 Tierra bola de nieve
Actuando en concierto con los patrones orbitales orientado de periódicos de la radiación solar, tanto el reflujo y
océanos crecientes, así como los continentes que forman conducir a cambios en la reflectividad de la Tierra en la
superficie (albedo). Las áreas de tierra también pueden influir en el albedo considerablemente por la formación de
capas de hielo y por el crecimiento de la vegetación. La distribución mundial de tipos, condiciones, y la posición de
las rocas permiten una determinación de los períodos y el alcance de la nieve y la formación de hielo en el mundo
(Broecker y Kunzig 2008) . Esta evidencia lleva a la conclusión de que la Tierra ha pasado por una serie de ciclos de
glaciación. La extensa época glacial más temprana verificable cae en el intervalo de tiempo 2.4 a 2.2 Gyr BP
(glaciaciones Paleoproterozoica). glaciaciones principales que se extienden hasta el final en los trópicos se han
denominado “Tierra bola de nieve” (Hoffman y Schrag 2002 ; Pierrehumbert 2002 ; Allen 2006) . eventos “duro” Tierra
bola de nieve se caracterizan por la capa de hielo del mar global (Pierrehumbert
2005) . El segundo período de glaciación extendida con al menos dos eventos se produjo entre 750 y 600 Myr hace y hace la
tercera, la glaciación Pérmico sobre 280 Myr. El mecanismo de retroalimentación hielo-albedo está implicado en la
extensión de las la bola de nieve, mientras que un efecto de gas de efecto invernadero en aumento, eventos de formación y
el polvo arrastrado por el viento de carbonato se encuentran entre los complejos procesos que intervienen en la reversión
de este fenómeno, con posibles saltos bruscos en un estado libre de hielo ( fase invernáculo extendido). los
papel de CO 2 durante el eon Fanerozoico se trata explícitamente por Crowley (2000b)

y una excelente revisión en sus paleo-proxies está dada por Royer et al. (2001) .
3.2 Los últimos 100 millones de años
Durante la época cretácea, que terminó 65 Myr BP, las temperaturas del aire de superficie fueron mayores de lo que
son en la actualidad. Esto es especialmente cierto para las latitudes más altas. Un intervalo prolongado de
enfriamiento siguió la época Cretacous, que fue junto con la disminución de CO 2 concentraciones. El enfriamiento
culminó en la glaciation Pleistoceno, que comenzó hace aproximadamente 2,5 Myr. Se cree tectónica de placas que
regulan el ciclo de carbonato-silicato junto con la glaciación del continente Ártico hace alrededor de 30-15 Myr y su
deriva hacia latitudes más altas haber sido responsable de esta tendencia gradual de enfriamiento. Desde hace
unos 65 millones de años, el clima de la Tierra ha experimentado una evolución significativa y compleja. cambios
graduales impulsados por los procesos tectónicos y ciclos periódicos causados por ritmos orbitales son
responsables de los cambios rápidos y transiciones extremas. Un ejemplo es el Late máximo térmico del Paleoceno
en Hace aproximadamente 55 Myr, que domina la era Cenozoica (Zachos et al. 2001) . Este evento podría ser el
mejor clima análogo antiguo para futuros aumentos en la atmósfera de CO 2,
y aunque se ha avanzado mucho en los últimos años en revelar los “misterios de carbono” (Pagani et al. 2006) todavía
hay muchos aspectos que siguen siendo desconocidos. El repentino calentamiento global en torno a 55 Myr hace
proporciona evidencia de la alta sensibilidad del clima a la atmósfera de CO 2. Los rápidos cambios registrados en las
profundidades marinas núcleos de isótopos de sedimentos han ayudado especialmente para mejorar nuestra
perspectiva sobre los mecanismos implicados en alteraciones rápidas en el sistema climático. Un tratamiento detallado
de la evidencia geológica y paleogeography se puede encontrar en Pierrehumbert (2009) . El clima de invernadero
Cretácico y el clima depósito de hielo del Pleistoceno representan extremos opuestos del estado típico clima de la
Tierra en los últimos 500 millones de años.
3.3 Los últimos millones de años
En los últimos 2,5 millones de años, el llamado período cuaternario, el clima de la tierra ha sido marcada por
cambios de temperatura entre períodos extendidos glaciares, que se caracterizaron por gruesas capas de hielo que
cubren grandes partes de América del Norte, Europa del Norte y Siberia, y los tiempos interglaciares caracterizado
por una cubierta de hielo sólo en la Antártida y algunas veces Groenlandia, como es el caso hoy en día. A
esquemático que ilustra estos cambios de glaciares e interglaciares y poniendo las tendencias de la temperatura de
este período en una perspectiva histórica se muestra en la Fig. 5 .
La perforación es una valiosa manera de obtener información sobre el período Pleistoceno. núcleos de sedimentos que
llegan a unos pocos millones de años atrás en los registros de núcleos de hielo que datan de alrededor de 800.000 años
tiempo y han sido ampliamente analizado. El hielo en la base de la Antártida es aproximadamente un millón de años. La
composición del aire pasado es
24 M. Quante
21
20
19 presente Interglaciar
18 Última (Eemiense)
mioceno Interglaciar Holoceno Período Cálido
17 Era de los
máx Medieval
Dinosaurios Intergalacials
16 anteriores
15
Temperatura (° C)
14
Última
13 edad de hielo
12
11
Dryas más
10 jóvenes
siglo 20
9
7
- 10 millones - 1 millón - 100 000 - 10 000 1000 1900 2000
años BP ANUNCIO
Fig. 5 tendencias de la temperatura de los últimos 10 millones de años. Tenga en cuenta los diferentes ajustes a escala en el eje del
tiempo: se muestra el siglo XX en escala lineal. períodos anteriores se muestran en términos de aumento de potencias de diez, pero son
lineales dentro de cada periodo (figura adaptado de Oficina de Meteorología, Australia)
conservado en burbujas dentro del hielo y estables isótopos, derivados del propio hielo, son esencialmente los
grabadores de la temperatura en ese momento. Los cambios en el CO atmosférica 2 concentraciones en el último
800 ka, se ilustran como un compuesto de EPICA Dome C, Vostok y núcleos de hielo Taylor Dome junto con el
registro de anomalía de temperatura EPICA Dome C en la Fig. 6 ; esta figura se ha tomado de Lüthi et al. (2008) .
datos similares para el metano se pueden encontrar en Loulergue et al. (2008) . Basándose en el análisis de los
registros de hielo como las que se muestran en la Fig. 6 y una alineación con muchos núcleos de sedimentos
marinos, está claro que en escalas de tiempo de decenas de miles de años o más, la temperatura y otros
parámetros climáticos varían de forma coherente entre sí y que las variaciones son globales en su extensión.
atmosféricas de CO 2 y las concentraciones de metano han subido y bajado de forma sincronizada con la
temperatura. La correlación entre CO 2 y la temperatura no, sin embargo, determinar completamente las causas
subyacentes y las evaluaciones de tiempo que como detalladas revelan (Pierrehumbert 2009) , Para muchas partes
del expediente CO 2 se lleva la temperatura por unos cientos de años, lo que sugiere que existen diferentes
mecanismos que actúan en comparación con aquellos dominante en la actual calentamiento por efecto invernadero
antropogénico. Sobre el último
Fig. 6 compuesto CO 2 ( superior curva) y CH 4 ( concentraciones más bajas curva) de EPICA Dome C, Vostok y núcleos de
hielo Taylor Dome cubren el pasado 800 ka. (De Lüthi et al. 2008 y Loulergue et al. 2008) . La anomalía de la temperatura
(curva media) es la desviación de la temperatura media del último milenio (Jouzel et al. 2007)
800.000 años, los ciclos Milankowitch fueron las causas dominantes y marcapasos para la variabilidad del clima. Las
temperaturas globales se enfriaron a tasas irregulares durante las épocas glaciares extendidos y aumentaron mucho
más rápido en el comienzo de los interglaciares. Estos interglaciares recurrido durante el período registrado a
intervalos de más o menos
100.000 años y tenían una duración típicamente de aproximadamente 15.000-20.000 años. El último máximo glacial se
produjo hace alrededor de 20.000 años. Se cree que los cambios de climáticos pronunciados durante este período
cuaternaria para ser accionado por sutiles variaciones en los parámetros de la órbita, que afectan a la insolación de
verano a altas latitudes del norte. Cuando la insolación de verano fue relativamente débil durante períodos más largos, la
nieve de invierno podría sobrevivir parcialmente, lo que lleva a gruesas capas de hielo durante un lapso de tiempo de
miles de años, con el efecto albedo del hielo amplificar el forzamiento orbital. Aunque su correlación con la temperatura no
está totalmente resuelto, porque el CO 2 es un gas de efecto invernadero, es bastante seguro de que un aumento en CO 2 concentración
calienta el planeta y refuerza la terminación de las edades de hielo, mientras que una disminución en CO 2 concentración
mejora el enfriamiento y refuerza la aparición de glaciación.
Los datos mostrados en la Fig. 6 son los registros más largas y cuidadosamente estudiados de historias clima
polar de hielo publicados. El registro nos dice que la temperatura más alta se produjo durante este período hace
alrededor de 130 ka. El CO 2 la concentración durante el pasado 800 ka nunca excedió el valor actual de 385 ppm.
Para los muchos detalles interesantes, tales como fluctuaciones a corto plazo como se describe por el análisis de
los registros de sedimentos y núcleos de hielo, los artículos de Jouzel et al. (2007) , Lüthi et al.
(2008) , Loulergue et al. (2008) y el libro de Pierrehumbert (2009) debe ser consultado. hallazgos
interesantes sobre el monzón asiático importante en el último cuarto de millón de años son reportados
por Wang et al. (2008) .
26 M. Quante
Los océanos, que cubren más de dos tercios de nuestro planeta azul, sin duda contribuyen con tanta fuerza como
las grandes capas de hielo a la sincronización de los eventos climáticos. Estas aguas se mueven en un sistema de
circulación global, que es accionado por diferencias de densidad sutiles y de ese modo el transporte de grandes
cantidades de energía térmica. circulación de los océanos es, pues, un jugador activo y altamente no lineal en el juego
global del clima. pruebas cada vez más claro implica la circulación del océano en los cambios climáticos bruscos y
dramáticos, como los cambios bruscos de temperatura en Groenlandia del orden de 5-10 ° C y masivas oleadas de
icebergs en el Océano Atlántico Norte - eventos que han ocurrido en varias ocasiones durante el último ciclo glacial
(Rahmstorf 2002) .
3.4 El final de la última Edad de Hielo y el Holoceno
Los registros de proxies climáticos de los últimos 20.000 años, es decir, desde aproximadamente el final del último
máximo glacial, son tan completa que se conocen los patrones no sólo la temperatura típica y precipitación, sino también
características tales como los rangos geográficos de especies específicas de árboles.
La transición de la última glacial a la época interglacial actual fue dramático. Las capas de hielo comenzaron
encoge hace alrededor de 15.000 años. Por hace 12.000 años, la capa de hielo Laurentino fue vertiendo grandes
volúmenes de agua de deshielo en los lagos y ríos de nueva formación preparando el escenario para eventos de
inundación, que dieron forma al paisaje, como se le conoce hoy en día.
Uno de los eventos de cambios abruptos más llamativos se produjo cuando la Tierra salió de su más reciente edad
de hielo, el resultado fue un fuerte calentamiento repentino, llamado el período de calentamiento Bolling (Pierrehumbert 2009)
, Que reunió el clima posterior a un período de calentamiento interglaciar completa. Sin embargo, este evento no duró
mucho tiempo y el clima volvió de nuevo bruscamente a temperaturas glaciales completos. Esta recaída en condiciones
de edad de hielo duró unos 800 años y terminó hace unos 11.700 años y se conoce como el Younger Dryas. La escala
de tiempo del evento Dryas reciente es mucho más corta que la de los ciclos orbitales. Una explicación para este evento
repentino, que todavía está en discusión, pero favorecido por importantes científicos (Broecker y Kunzig 2008) , Podría ser
el drenaje masivo de un enorme lago glaciar en el océano, influyendo así en la formación de agua profunda provocando
el cierre de la circulación termohalina oceánica y por lo tanto, reduciendo el transporte de calor hacia los polos por la
corriente del Golfo. Si el evento Younger Dryas era verdaderamente global en extensión, tales como los columpios
climáticas en las escalas de tiempo de 10.000 años y ya han sido, sigue siendo objeto de debate. Las firmas de este
evento, sin embargo, muestran claramente en los núcleos de hielo de Groenlandia y en los registros climáticos de proxy
europeos.
En comparación con estos cambios fuertes, el período de calentamiento Bolling y los Younger Dryas en los
primeros 1.000 años después del final de la era de hielo y los relativamente suaves cambios durante los últimos
10.000 años, los años de nuestra civilización, y un calor tranquilo y cese de amplitud alta variabilidad del milenio
parece, desde el punto de vista de la dinámica del clima, a ser bastante aburrido. Sin embargo, esto es muy
probable que no permanezca así desde que los seres humanos comenzaron a interferir intensamente con el
sistema.
3.4.1 Holoceno
El Holoceno es la parte más joven de la historia de la Tierra. Su definición se da geológicamente y se corresponde con el
período de calentamiento post-glacial, empezando por el retroceso de los glaciares de las morrenas en el centro de
Escandinavia. Su puesta en servicio está fechada como
Hace 11.550 años. El Holoceno no ha sido testigo de las grandes oscilaciones de temperatura que
caracterizan las épocas glaciares anteriores. Hubo algunas variaciones de temperatura menor escala, y
algunos de ellos parecen haber tenido un impacto considerable en algunas sociedades que se asentaron y
comenzaron la agricultura dentro de esta época. La pequeña edad de hielo, que comienza en el siglo XIV y
que duró hasta el siglo XIX, es un ejemplo popular para este nuevo tipo de impacto sobre el clima. Una
colonia vikinga en Groenlandia falló, la población de Islandia disminuyó considerablemente y las granjas
fueron abandonados en algunas partes de Noruega y los Alpes (Wallace y Hobbs 2006) . Un tratamiento
integral de la dinámica de la variabilidad natural del clima durante el Holoceno basado en un análisis
integrador combinando evaluaciones teóricas, datos de observación y modelización del clima es
proporcionado por Fischer et al. (2004) . Posible influencia antropogénica sobre el clima del Holoceno
temprano es discutido por Ruddiman (2003, 2005) y Claussen et al. (2005) .
variabilidades paleoclimáticos reconstruidas se basan en muestras de hielo, sedimentos lacustres, anillos de

árboles, corales y sedimentos marinos. Durante el Holoceno, la distribución global de las precipitaciones ha
variado en muy gran medida. Debido a la orientación cambiante del eje de la Tierra en órbita alrededor del sol y
una disminución de la distancia Sol-Tierra, por el 9 ka BP la radiación solar promedio en el hemisferio norte fue
8% superior en julio y el mismo porcentaje inferior en enero en comparación hasta hoy. Un contraste de
temperatura mejorada entre océano y la tierra fue el mayor efecto, causando más fuerte evaporación oceánica y
precipitación más fuerte sobre los continentes. La formación gradual de un patrón monzón fuerte probablemente
también dio como resultado, que a su vez condujo a un aumento de la vegetación. En una visión centrada en el
norte, los años con los veranos más cálidos comenzaron a aproximadamente 7, Óptimo Climático.
Sin embargo, esto ciertamente no era óptimo para las áreas continentales en el hemisferio sur, que
experimentó un enfriamiento débil.
Como fósiles de lechos de los lagos indican, las áreas del desierto del Sahara fueron con vegetación, el
llamado “Sahara verde”, y algunas partes fueron aún pantanosa hace unos 6.000 años. Partes de Oriente Medio,
donde se formaron los primeros asentamientos agrícolas se han convertido posteriormente extremadamente seco.
En respuesta al debilitamiento de la insolación forzando, un monzón africano reducida y bruscos cambios
hidrológicos como resultado de secado progresivo de los ecosistemas terrestres regionales. Existe un consenso
general de que durante el Holoceno óptima, el Sahara era más verde que lo que es hoy (Claussen 2003) .
movilización polvo a gran escala seguido de alrededor de 4300 años antes del presente. desiertos de hoy y
los sistemas meteorológicos regionales se establecieron en alrededor
2700 años BP (Kroepelin et al. 2008) .
Las variaciones en escalas de tiempo más pequeñas en el orden de décadas a un siglo se superpusieron sobre la
variabilidad a largo plazo (Witt y Schumann 2005) Y también tuvieron su influencia en los seres humanos que dependen
de un clima adecuado. El colapso de los mayas
28 M. Quante
y civilizaciones Anasazi se ha atribuido a la incapacidad de estas sociedades para adaptarse a las tendencias hacia
climas más secos.
Los interiores continentales calentados en latitudes norte crearon un clima que era muy cómoda para
los seres humanos y también fue, sin duda, cómodo para los seres vivos en general. Estas condiciones,
sin duda contribuyeron a la expansión de la actividad humana en estas latitudes y fueron un factor
determinante en la historia de la civilización (Cloud 1978 ; Cordero 1995) .
Un amplio estudio basado en reconstrucciones seleccionados basado en proxy de diferentes variables climáticas,
junto con series de tiempo del estado de la técnica de forzamientos naturales (variaciones orbitales, variaciones de la
actividad solar, grandes erupciones volcánicas tropicales, cobertura de la tierra y gases de efecto invernadero), puede
se encuentran en Wanner et al. (2008) . A continuación, los resultados más recientes en relación con todos los
aspectos que van desde la desertificación del monzón turnos a los avances de los glaciares alpinos son presentados y
discutidos. El trabajo se basa en los resultados de Modelos de Circulación General (MCG) y modelos del sistema
Tierra de Complejidad Intermedia (EMIC) para establecer un marco explicativo más completa. Un recorrido
serpenteante del Holoceno investigación paleoclimática centrado en Europa y el norte de África es proporcionada por
Battarbee y Binney (2008), estos autores reunir a un grupo interdisciplinario de paleoclimatólogos.
3.4.2 El último milenio: El Holoceno tardío
Los registros detallados de cambio climático durante el último milenio provienen de indicadores indirectos tales como los
glaciares de montaña, anillos de árboles, corales y almacenados en los archivos de datos. Además, las observaciones
históricas registradas por los seres humanos durante varios siglos por varias regiones están también disponibles.
Hasta el comienzo de los cambios climáticos siglo pasado eran pequeñas y variadas en el patrón de región a
región. Un pequeño enfriamiento en altas latitudes del norte que rodea el Océano Atlántico Norte y conocemos como
la pequeña edad de hielo es una de las fluctuaciones climáticas de interés.
Se han hecho varios intentos para sintetizar los registros de alta resolución a partir de los núcleos de hielo,
longitudes glaciar, anillos de los árboles, corales y temperaturas de pozo en una sola estimación del hemisferio norte o
los cambios globales de la temperatura durante el último milenio. Estas reconstrucciones de temperatura superficial a
gran escala no están exentos de problemas. registros de proxy están todos relacionados de alguna manera a la
temperatura, y además, también se ven afectadas de una manera compleja por otros factores climáticos, biológicos y
ecológicos.
La primera de estas reconstrucciones complejas fueron publicados en 1998 y 1999 por Mann,
Bradley y Hughes. La conclusión básica de Mann et al. (1998,
1999) fue que a finales del siglo XX el calor en el hemisferio norte no tenía precedentes durante, al menos,
los últimos 1.000 años. Esta investigación ha recibido una gran atención, en parte debido a que se ilustra
con un gráfico simple, la llamada curva de palo de hockey, que muchos interpretaron como prueba
definitiva de causas antropogénicas del cambio climático reciente. La investigación se le dio prominencia
en el informe del Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático 2001. Todavía hay una
debate en curso acerca de los detalles de algunos de los registros de temperatura publicados, los medios de
su reconstrucción y las medidas estadísticas subyacentes. Algunos puntos básicos de interés fueron dirigidas
por von Storch et al. (2004) y McIntyre y McKitrick (2005) . actualizaciones más recientes o evaluaciones de las
reconstrucciones de la temperatura, métodos y aspectos estadísticos se pueden encontrar en Mann y Jones
2003 ; Jones y Mann 2004 ; D'Arrigo et al. 2006 ; NRC 2006 ; Rybski et al. 2006 ; y Mann 2007 .
A pesar del debate científico antes mencionado se puede afirmar que las reconstrucciones de temperatura superficial a
gran escala producen un cuadro generalmente consistente de tendencias de la temperatura durante el milenio anterior, que
incluye las condiciones relativamente cálidos centradas alrededor de 1000 BP (identificado por algunos como el “período
caliente medieval”) y un período relativamente frío (o “pequeña edad de hielo”) centrado alrededor de 1.700. La existencia de
una pequeña edad de hielo de aproximadamente 1,500-1,850 está apoyada por una amplia variedad de pruebas que incluye
muestras de hielo, anillos de los árboles, las temperaturas del pozo, los registros de longitud de los glaciares, y documentos
históricos (NRC 2006) . Figura 7 muestra una recopilación de las reconstrucciones de la temperatura superficial a gran escala a
partir de diferentes grupos de investigación, cada uno con su propia metodología y la selección de la representación, así
como el registro instrumental (comenzando en 1856) de la temperatura superficial media global. Las temperaturas
reconstruidas todas muestran una disminución gradual más o menos pronunciada de casi 900 años después de que el
período de calentamiento medieval y un calentamiento considerable
Fig. 7 reconstrucciones suavizados de gran escala (hemisferio norte significan o media global) las variaciones de temperatura de
superficie en los últimos 1.100 años a partir de los seis grupos de investigación diferentes se muestran junto con el registro instrumental
de la temperatura superficial media global. Cada curva representa una historia algo diferente de las variaciones de temperatura y está
sujeta a un conjunto algo diferente de incertidumbres que generalmente aumentan ir hacia atrás en el tiempo (como se indica por la sombreado
gris).
Figura adaptada de NRC (2006)
30 M. Quante
que se inició a mediados del siglo XIX. Comparando los resultados de los diferentes métodos revela
que no parece haber mucha más certeza en las temperaturas reconstruidas durante los últimos 400
años.
El calentamiento en el siglo pasado está representada en la Fig. 7 se destaca como raro dentro de la serie
temperatura visualizada.
El informe de evaluación especial del Consejo Nacional de Investigación (NRC 2006)
concluye que se puede decir con un alto nivel de confianza en que la temperatura superficial media global fue mayor
durante las últimas décadas del siglo XX que durante cualquier período comparable durante los cuatro siglos
anteriores. El comité NRC colocado menos confianza en las reconstrucciones de temperatura superficial a gran
escala para el período comprendido entre anuncio 900 a 1600. En la actualidad pruebas de proxy disponible indica
que las temperaturas en muchos, pero no todos, ubicaciones individuales fueron mayores durante los últimos 25
años que durante cualquier período de longitud comparable desde anuncio
900. Sobre la base de los análisis presentados en los documentos originales de Mann et al. (1998,
1999) y la más reciente evidencia de apoyo, el comité NRC le resulta plausible que el hemisferio
norte era más cálido durante las últimas décadas del siglo XX que durante cualquier periodo
comparable en el milenio anterior (NRC
2006) . los intentos de reconstrucción de los últimos dos milenios se presentan en Mann y Jones (2003) ,
Jones y Mann (2004) , Mann (2007) Y estas reconstrucciones de proxy sugieren que el calor de finales
del siglo XX es anómalo también en el contexto de los últimos 2.000 años.
La conclusión de un estudio persistencia a largo plazo en seis de los registros de temperatura hemisferio norte
reconstruidas, Rybski et al. (2006) Estado: “En consecuencia, la hipótesis de que al menos parte del calentamiento
reciente no puede ser únicamente en relación con los factores naturales, puede ser aceptado con un riesgo muy bajo,
independientemente de la base de datos utilizada”. El calentamiento sin precedentes en los últimos 150 años se
discutirá más de cerca en el siguiente capítulo.
4 El Antropoceno: El Registro Climático Instrumental
Durante los dos últimos siglos, las actividades humanas han alterado profundamente muchos aspectos del
sistema de la Tierra, incluyendo su clima y su biogeoquímica, y hasta el punto que hay quienes sostienen que
estamos entrando en una nueva era geológica, el Antropoceno (Crutzen y Stoermer 2000 ; Steffen et al. 2007) .
En otras palabras, la concentración atmosférica de algunos gases de efecto invernadero se ha mejorado
hasta tal punto (IPCC 2007a) durante el curso de la Antropoceno, que regional a cambios globales en la
temperatura de la superficie y otros parámetros climáticos son de esperar.
La era de las observaciones meteorológicas instrumentales comenzó con la invención del termómetro de
Galileo a finales del siglo XVI y el barómetro de mercurio por Torricelli en el siglo XVII. registros instrumentales
son, con mucho, el más fiable de todos los datos sobre el clima, ya que son precisamente fechada y emplean
calibraciones físicas. Las mediciones instrumentales modernos de los parámetros climáticos incluyen
temperaturas de la superficie a base de termómetro de las regiones de la tierra y de los océanos,
presión el nivel del mar, la precipitación continental y oceánica, mar extensión del hielo, el viento y la humedad. Por
desgracia, sólo ha sido desde finales de 1800 que las estaciones han sido suficientes registrando sistemáticamente estos
datos para permitir una estimación razonable de los medios globales.
Hay una gran cantidad de literatura disponible abordar muchos aspectos del cambio climático durante
el período de observación instrumental. La evaluación más completa se publica en el cuarto informe de
evaluación del IPCC (IPCC 2007a , Cap. 3). Sólo unos pocos puntos clave se pueden resaltar con esta
revisión.
4.1 Los cambios de temperatura
medios globales fiables de la temperatura de la superficie están disponibles desde 1850. Varias compilaciones de
diferentes grupos de investigación proporcionan cuadriculadas estimaciones mensuales de la temperatura media vuelta a
través de la mitad del siglo XIX a gran escala (Jones y Mann 2004) . Las reconstrucciones de los diferentes grupos son
muy similares, aunque hay algunos desacuerdos sobre todo en la década de 1900 cuando la cobertura de la estación
seguía siendo escasa.
Figura 8 muestra una serie temporal de estimados temperaturas superficiales medias globales anuales para el
período 1850-2007 sobre la base de mediciones del termómetro; los valores mostrados en la figura son
desviaciones de la media del período de base 1961-1990. Esta serie de tiempo está siendo compilado
conjuntamente por la Investigación Climática
Fig. 8 anomalías de la temperatura mundial anual media (de la media del periodo base 1961-1990) para los años 1850-2007, la línea más suave muestra un
promedio de funcionamiento de 11 años. Datos proporcionados por la Unidad de Investigación Climática, Norwich, Reino Unido, y el Centro Hadley de la
Oficina Meteorológica del Reino Unido

32 M. Quante
Unidad y el Meteorológica del Reino Unido. Centro Hadley de oficina; ver Brohan et al. (2006) para más detalles y
estimaciones de error. Hay poca tendencia de la temperatura entre 1850 y 1920, pero entre 1920 y 2007, la temperatura
media global ha aumentado aproximadamente 0,8 ° C. Esto no ha habido un aumento constante, sin embargo, la
temperatura aumentó rápidamente durante la década de 1920 a principios de 1940, se estabilizó o se redujo ligeramente
desde la década de 1940 hasta finales de 1970, y ha vuelto a aumentar desde 1980 a su valor actual. La década de
1990 fueron la década más cálida completa de la serie. El año más caliente de toda la serie fue 1,998, con una
temperatura de 0.546 K por encima de la media del período climático actual (1961-1990). Doce de los trece años más
cálidos de la serie ahora se han producido en los últimos 13 años (1995-2007). Los 10 años más calientes registrados
son 1998, 2005, 2003, 2002,
2004, 2006, 2001, 2007, 2001, y 1997. El aumento de concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera
(véase por ejemplo la Fig. 4 para CO 2) debido a las actividades humanas son muy probablemente la causa subyacente de
calentamiento en el siglo XX (IPCC 2007a) . El calentamiento de la Tierra no se distribuye uniformemente sobre el mundo,
hay algunas diferencias bastante regionales y de temporada que informar. Continentes muestran más aumentos rápidos
de temperatura en comparación con los océanos. Un calentamiento distinto se puede observar en invierno y primavera en
las latitudes septentrionales superiores, es decir en el Ártico. Las temperaturas del Ártico promedio aumentaron en casi el
doble de la tasa media mundial durante los últimos 100 años.
cambios generalizados en las temperaturas extremas también se han observado en los últimos 50 años. Los
días fríos, las noches frías y heladas han vuelto menos frecuentes, mientras que los días calurosos, las noches de
calor y olas de calor se han vuelto más frecuentes (IPCC 2007a ; Easterling et al. 2000a) . Varios estudios han
demostrado que las tendencias de calentamiento antropogénico en Europa implican una mayor probabilidad de
veranos muy calientes. Por ejemplo, el verano de 2003, con sus temperaturas de verano de Europa Central récord
fue probablemente el más caluroso desde 1500 (Stott et al. 2004) , Y un cambio hacia un régimen con un mayor
variabilidad de la temperatura además de los aumentos en la temperatura media puede haber sido responsable de
esta ola de calor notable (Schär et al. 2004) .
Además de los cambios en las temperaturas de la superficie con una tendencia calentamiento general, los análisis de
globo transmitidas y las mediciones por satélite muestran un enfriamiento de la estratosfera, que es consistente dentro de
cambio climático impulsado por gas de efecto invernadero. El patrón observado de calentamiento troposférico y el
enfriamiento estratosférico es muy probable debido a las influencias combinadas de gas aumenta de efecto invernadero y el
agotamiento del ozono estratosférico.
4.2 Otros cambios
4.2.1 Parámetros Hidrológicos
Debido a una alta variabilidad del ciclo del agua en todas las escalas de tiempo, las tendencias significativas en
cantidades hidrológicos son difíciles de verificar. Sin embargo, Huntington (2006)
concluye una revisión de los estudios disponibles que aunque los datos son a menudo incompleta en
el sentido espacial y temporal, el peso de la evidencia indica una intensificación en curso del ciclo del agua. Una de las
cuestiones centrales es, sin embargo, si el calentamiento global conduce a una mayor evaporación y por lo tanto a un
aumento del contenido de vapor de agua en la atmósfera. Trenberth et al. (2005) el aumento observado del agua
precipitable sobre los océanos mundiales desde mediados de la década de 1980. Sin embargo, se recomienda
precaución por Trenberth et al. (2005) para extraer información sobre las tendencias de vapor de agua en la troposfera de
productos globales de reanálisis, ya que sufren de variabilidad y tendencias relacionadas con el cambio de calidad de los
datos y la cobertura espuria. Los datos de satélite presentados por Soden et al. (2005) apoya tendencias humectantes
columna integrada por los años de la década de 1980. Una evaluación más recientemente publicado de en los datos de
temperatura del aire de la superficie y del punto de rocío situ encontrado aumentar muy significativamente las tendencias
de la humedad específica hemisférica global y del Norte (Dai 2006) . Más detalles sobre los cambios de evaporación se
dan en Quante y Matthias (2006) .
El contenido de humedad atmosférica aumentado asociado con un calentamiento podría esperarse que conducir a una
mayor precipitación media global. Sin embargo, la precipitación es también fuertemente influenciada por los cambios en el
balance de energía de la troposfera y la circulación atmosférica, por lo que los patrones espacio-temporales en los cambios
de la precipitación son propensos a ser compleja. En cuanto a las precipitaciones, la más reciente de los informes del IPCC
estados (IPCC 2007a): precipitación media anual terrestre global mostró una pequeña tendencia al alza durante el siglo XX,
de aproximadamente 2,1 mm por década (basado en la Red Global de Climatología Histórica, GHCN, datos). Las tendencias
a largo plazo de 1900 a 2005 se han observado en la cantidad de precipitación en muchas regiones grandes. Es significativo
aumento de las precipitaciones se ha observado en las partes orientales de América del Norte y del Sur, Norte de Europa y el
norte y el centro de Asia. La frecuencia de fuertes precipitaciones ha aumentado desde 1950 sobre la mayoría de las áreas
terrestres, consistente con el calentamiento y el aumento de vapor de agua atmosférico observado. El secado se ha
observado en el Sahel, el Mediterráneo, el sur de África y partes de Asia meridional. La precipitación es muy variable espacial
y temporalmente, y los datos se limita en algunas regiones. Más intensas y prolongadas sequías se han observado en vastas
zonas desde la década de 1970, particularmente en las zonas tropicales y subtropicales. El aumento de secado vinculado con
temperaturas más altas y la disminución de la precipitación han contribuido a los cambios en la sequía (IPCC El secado se ha
observado en el Sahel, el Mediterráneo, el sur de África y partes de Asia meridional. La precipitación es muy variable espacial
y temporalmente, y los datos se limita en algunas regiones. Más intensas y prolongadas sequías se han observado en vastas
zonas desde la década de 1970, particularmente en las zonas tropicales y subtropicales. El aumento de secado vinculado con
temperaturas más altas y la disminución de la precipitación han contribuido a los cambios en la sequía (IPCC El secado se ha
observado en el Sahel, el Mediterráneo, el sur de África y partes de Asia meridional. La precipitación es muy variable espacial y temporalmente, y
4.2.2 Componentes criogénicos
El calentamiento en el Ártico causó una disminución en la capa de nieve desde 1980, es decir, en la primavera de tiempo,
así como una disminución en el hielo del mar de aproximadamente 2,7% por década, este último es especialmente
pronunciado a finales de verano (septiembre) que muestra una tendencia de 7,4 % por década. Un mínimo registro se ha
observado en septiembre de 2007, que no está incluido en las tendencias reportadas. También, en otras partes de los
cambios de globo en los componentes criosféricos se puede observar. Los glaciares de montaña y la cubierta de nieve han
disminuido en promedio en ambos hemisferios. Las pérdidas de las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida han
contribuido muy probable que el aumento del nivel del mar observado entre 1993 y 2003 (IPCC 2007a) . velocidad de flujo ha
aumentado desde hace algún Groenlandia y
34 M. Quante
glaciares antárticos, que drenan hielo desde el interior de las capas de hielo. La pérdida de masa incrementado capa de hielo
correspondiente ha seguido a menudo adelgazamiento, reducción o pérdida de las plataformas de hielo o la pérdida de
lenguas glaciares flotantes.
4.2.3 subida del nivel del mar
nivel medio del mar a nivel mundial aumentó a una tasa promedio de 1.8 mm año -1 ( variar 1,3-2,3) durante los
años 1961-2003. La tasa fue más rápido durante los años 1993-2003, con alrededor de 3.1 mm año -1 ( variar
02/04 a 03/08). Si la velocidad más rápida para 1993-2003 refleja la variabilidad decenal o un aumento de la
tendencia a largo plazo no está claro. Ahi esta alta confianza que la tasa de aumento del nivel del mar
observado aumentó desde el siglo XIX al siglo XX. El aumento total de siglo XX se estima en 0,17 m (rango de
0,12 a 0,22) (IPCC 2007a) . Una evaluación extendida por la Iglesia, y Negro
(2006) concluido un aumento global del nivel medio del mar desde enero 1870 hasta diciembre 2004 de 0,195 m, una
tasa del siglo XX de la subida del nivel del mar de 1,7 ± 0,3 mm año -1
y una aceleración significativa de la subida del nivel del mar de 0,013 ± 0,006 mm año -2.
4.2.4 viento
Latitudes medias vientos del oeste se han fortalecido en ambos hemisferios desde la década de 1960. Existe evidencia
observacional de un aumento de la actividad ciclónica tropical intensa en el Atlántico Norte desde aproximadamente
1970, en correlación con el aumento de las temperaturas superficiales del mar tropical (IPCC 2007a) . También hay
indicios de aumento de la actividad ciclónica tropical intensa en algunas otras regiones (Emanuel 2005 ; Webster et al. 2005)
donde las preocupaciones sobre la calidad de datos son mayores. la variabilidad de varias décadas y la calidad de los
registros de ciclones tropicales antes de las observaciones por satélite de rutina alrededor de 1970 complican la
detección de tendencias a largo plazo en la actividad de los ciclones tropicales. No hay una tendencia clara en el
número anual de ciclones tropicales.
4.3 Reconocimiento
Un tema central en el debate sobre el clima de los últimos años era si, o hasta qué punto, los cambios observados
en el clima pueden atribuirse a las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero o se deben a la
variabilidad natural. Este debate llevado a cabo ampliamente no puede ser completamente resume aquí; Sin
embargo, se podrían destacar algunos aspectos.
Un argumento central de los llamados “escépticos del clima” se basa en los cambios observados en la
actividad del sol y un aumento de la intensidad de la radiación solar. Surge la pregunta: ¿en qué medida los
cambios en el sol responsable del calentamiento reciente? Aunque la rareza del episodio actual de número de
manchas solares medias altas (Solanki et al. 2004) puede indicar que el sol ha contribuido al cambio climático
inusual
durante el siglo XX, la obra de Solanki y Krivova (2003) revela que la variabilidad solar es poco probable que haya
sido la causa dominante de la fuerte calentamiento observado durante los últimos tres decenios. Un modelo basado
en estudio exhaustivo por Allen et al. (2006) llega a la conclusión de que el aumento las concentraciones de gases
antropogénicos producido un 0,3-0,5 K por calentamiento del siglo 1906-1996 y son la causa principal del
calentamiento global después de 1976. Por el contrario, Scafetta y Occidente (2006, 2007) informan que los análisis
empíricos sugieren que la variabilidad solar representa tanto como el 69% del calentamiento del siglo XX y del 25 al
35% del calentamiento reciente, a nivel mundial. El informe IPCC (AR4) compara los cambios Continental- y de
escala global observados en la temperatura superficial con resultados simulados por modelos climáticos utilizando
forzamientos naturales y antropogénicos. Una conclusión relevante es (IPCC 2007a) : “El calentamiento generalizado
observado de la atmósfera y el océano, junto con la pérdida de masa de hielo, apoyan la conclusión de que es extremadamente
improbable que el cambio climático global de los últimos cincuenta años se puede explicar sin forzamiento externo, y
muy probable que no se debe a causas naturales conocidas”.
Un análisis multivariado utilizando las estimaciones más fiables de los parámetros relevantes junto con el
registro de la temperatura superficial observado 1889-2006 habilitado de Lean y Rind (2008) para evaluar las
respuestas globales y regionales a diferentes forzamientos. Su conclusión con respecto a la influencia solar es que
forzamiento solar contribuyó despreciablemente al calentamiento a largo plazo en los últimos 25 años y alrededor del
10% del calentamiento durante el último siglo. Este resultado está en fuerte contraste con la estimación de 69% de
Scafetta y Occidente (2006) .
5 El futuro: la “era” de Evaluaciones Modelo
La única manera racional para alcanzar una estimación razonable del futuro cambio climático es mediante el uso de
modelos físicos complejos del sistema climático. Con el fin de producir las proyecciones climáticas durante décadas o
siglos venideros, el gas de efecto invernadero antropogénico razonable y los datos de emisiones de aerosoles, así como
escenarios de uso de la tierra son necesarios en conjunto con códigos informáticos sofisticados como obligar a los
valores límite. Los modelos climáticos y escenarios de emisiones se introducen brevemente en las siguientes secciones
antes se presentan los resultados de estas evaluaciones modelo de situaciones climáticas futuras.
5.1 Modelos Climáticos
Los modelos climáticos se basan en representaciones matemáticas, que intentan reproducir el comportamiento
del sistema climático de la Tierra (Trenberth 1992) . Como se indica en la Sección. 2.1 el sistema climático se
compone de un número de subcompartimentos (por ejemplo, la atmósfera, la hidrosfera, criosfera y la biosfera),
cada componente es un sistema no lineal en sí mismo y se asocia con una escala de tiempo característica.
36 M. Quante
Las representaciones de los modelos climáticos intentan dar cuenta de los forzamientos externos e internos
más importantes, sino que también tratan de incluir los procesos más importantes que están involucrados en
evaluaciones dentro del sistema. Los modelos se basan en principios físicos tales como la conservación de la
energía, el momento y masa. Aunque los principios fundamentales parecen ser robustos, límites computacionales
impiden su solución numérica en todas las escalas que incluyen los muchos procesos que son importantes en el
sistema climático. Para estos procesos, los modeladores tienen que depender de parametrizaciones que intentan
capturar la fenomenología fundamental de un proceso de pequeña escala. Para más detalles sobre el estado de
la técnica de modelado del clima ver, por ejemplo, Washington y Parkinson (2005) , Kiehl y Ramanathan (2006) O
Donner y grande (2008) .
Los modelos climáticos actuales simulan la atmósfera, con una composición de la atmósfera prescrito y la
radiación solar entrante, e incluyen el modelado explícito de generales dinámica de la circulación y del hielo marino
del océano, y los procesos de la Propiedad. A modo de interfaces de los subcomponentes pueden intercambiar
energía, el momento y masa. Una resolución de la cuadrícula horizontal típico de los modelos atmosféricos
globales de hoy en día es de unos 180 km; los modelos climáticos regionales, por otra parte, capturar sólo una
parte del mundo, y por lo general trabajan con una resolución horizontal de malla 25-50 km. En la dimensión
vertical, la resolución disminuye con la distancia desde la superficie de la Tierra y varía desde unos pocos
decámetros a unos pocos kilómetros. Entre las evaluaciones más importantes modelos climáticos tienen que hacer
frente es el vapor de agua y las evaluaciones de la nube, así como la nieve, mar y albedo-hielo terrestre
evaluaciones, que también deben ser mencionados. evaluaciones nube pueden ser sustanciales para el
rendimiento general de un modelo climático, pero el signo y la magnitud de la respuesta media global de la nube
depende de muchos factores que sigue siendo muy incierto (Stephens 2005 ; Bony et al. 2006) .
Los modelos climáticos no son perfectos, pero son sin igual en su capacidad para cuantificar hipótesis de lo contrario
cualitativos. Más de una docena de instalaciones en todo el mundo a desarrollar y mantener el estado de la técnica de
los modelos climáticos y las comparaciones de modelos integrales se han realizado utilizando el clima de hoy en día
como un banco de pruebas primaria. Estos modelos han capturado con éxito los aspectos fundamentales de transporte
aéreo, marítimo y circulaciones del hielo marino, así como su variabilidad. En estudios recientes del clima (IPCC es decir, 2007a)
, Se ha informado de resultados de conjuntos de un número de modelos (tal como se describe en. Sección 5.3.). Es
interesante sin embargo, los estudios comparativos han revelado que el promedio a través de una serie de modelos
superaron a ningún modelo determinado. Los modelos climáticos están evolucionando más y más en modelos de
sistemas de la Tierra, que incluyen procesos químicos y biológicos (por ejemplo, dinámica de la vegetación), así como
simples submodelos socioeconómicas.
5.2 Escenarios de Emisiones
Un escenario es una descripción de las condiciones potenciales futuras producidas para informar y ayudar en lo
que sería la toma de decisiones con una incertidumbre aún mayor.
Sin embargo, más que un modelo fiable del sistema climático físico es necesario para las proyecciones climáticas
del futuro. En este caso, también existe la necesidad de suministrar los modelos con las estimaciones de la
evolución de los parámetros de forzamiento. De interés central son futuras modificaciones antropogénicas de gases
de efecto invernadero atmosféricas y las concentraciones de aerosoles, así como características de la superficie de
la Tierra. El IPCC ha producido tres conjuntos de escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero veinte
primer siglo, los más ambiciosos e importantes de los cuales fueron producidos para la Informe especial sobre
escenarios de emisiones ( SRES) (IPCC 2000) . SRES produjo cuatro tramas cualitativos en que se basan seis
escenarios “marcador” - una cuantificación modelo de cada trama además de dos variantes tecnológicas de una
historia que estresados tecnologías de suministro fossilintensive y la energía de bajo carbono - y cada uno
producido por un modelo económico-energía diferente. Los escenarios son descripciones de (diferentes) futuros
posibles, que son una serie de visiones alternativas del futuro (historias), que son posibles, plausibles, pero
internamente consistente no necesariamente probable (von Storch
2008) . La información de la que realmente se requiere, esta basada en escenarios de emisiones de sustancias
activas radiactivamente, y estos mismos escenarios dependen de una variedad de desarrollos futuros en diferentes
sectores y en particular en el crecimiento de la población, los cambios en la tecnología y el sistema de energía y su
eficiencia. Muchos de los factores de tesis no son fáciles de predecir y así una variedad de supuestos han subido
en estos escenarios. No es de extrañar, por tanto, que las discusiones críticas surgieron como resultado (por
ejemplo Tol 2008 ; Pielke et al. 2008) . Los escenarios SRES no incluyen iniciativas climáticas adicionales, lo que
significa que no se incluyen escenarios que asumen explícitamente la aplicación de la Convención Marco de las
Naciones Unidas sobre el Cambio Climático o los objetivos de emisiones del Protocolo de Kyoto. En otras palabras,
estos escenarios no anticipan las políticas específicas de mitigación para evitar el cambio climático. Los escenarios
del IPCC se agrupan de la siguiente manera:
(A1) representa un mundo de rápido crecimiento económico y una rápida introducción de tecnologías nuevas
y más eficientes. La historia y escenario familiar A1 describe un mundo futuro de crecimiento económico muy
rápido, una población mundial que alcanza su máximo a mediados de siglo y disminuye posteriormente, y una
rápida introducción de tecnologías nuevas y más eficientes. Más importantes son la convergencia entre
regiones, la creación de capacidad y el aumento de las interacciones culturales y sociales, con una reducción
sustancial de las diferencias regionales en el ingreso per cápita. (A2) representa un mundo muy heterogéneo,
con énfasis en los valores familiares y tradiciones locales (de alta CO 2). La historia y escenario familiar A2
describe un mundo muy heterogéneo. El tema de fondo es la autosuficiencia y la preservación de las
identidades locales. Los patrones de fertilidad entre las regiones convergen muy lentamente, lo que da lugar a
una población en continuo aumento. El desarrollo económico es, principalmente, de orientación regional y el
crecimiento económico per cápita y el cambio tecnológico están más fragmentados y son más lentos que en
otras líneas evolutivas. (B1) representa un mundo de “desmaterialización” y la introducción de tecnologías
limpias (bajo CO 2). La familia evolutiva B1 y escenario describe un mundo convergente con la misma población
mundial, que alcanza su máximo a mediados de siglo y disminuye posteriormente, como es el caso en la línea
evolutiva A1, pero con rápidos cambios en
38 M. Quante
estructuras económicas hacia una economía de servicios y la información, las reducciones en el consumo
de materiales y la introducción de tecnologías limpias y eficientes en recursos. El énfasis está en las
soluciones globales a la sostenibilidad económica, social y ambiental, incluyendo la mejora de la equidad,
pero sin iniciativas climáticas adicionales.
(B2) representa un mundo con un énfasis en las soluciones locales a la sostenibilidad económica y
ambiental. Es un mundo con una población aumenta progresivamente, a un ritmo menor que en A2, niveles
intermedios de desarrollo económico, y menos rápido y más diverso cambio tecnológico en comparación con
el B1 y A1. Aunque el escenario también está orientado hacia la protección del medio ambiente y la equidad
social, se centra en los niveles locales y regionales. Un escenario ilustrativo fue elegido para cada uno de los
seis grupos de escenarios A1B, A1FI, A1T, A2, B1 y B2, y todo se debe considerar igualmente sonido. El
escenario A1 se divide en algunas variantes: en los últimos años, la A1B (equilibrada - no depender
demasiado de una fuente de energía particular y las tasas de mejoría similares para todas las tecnologías de
suministro de energía y de uso final) fue ampliamente utilizado junto con el escenario B2. A1F representa un
mundo, que todavía se basa en gran medida en el uso de combustibles fósiles (peor caso) y A1T es un
escenario, que incorpora el uso de tecnologías avanzadas. Una selección de los resultados presentados en la
siguiente sección se referirá a estos escenarios.
5.3 El clima de la siglo XXI
Por cerca de dos décadas, los modelos climáticos acoplados océano-atmósfera han estado en uso para hacer
proyecciones sofisticadas de cambio climático para el siglo actual. La mayor parte de los estudios en modelos
publicados son revisados por los sucesivos informes de evaluación del IPCC a partir de 1990. Con los años, las
simulaciones subyacentes se han vuelto más avanzada, ya sea a través de la inclusión de sub-modelos
dinámicos adicionales, la mejora de parametrización o una mayor resolución espacial. Los resultados de las
simulaciones más recientes son la base de las proyecciones climáticas e impactos discutidos en el cuarto informe
de evaluación del IPCC (IPCC 2007a, b) . Los resultados presentados en esta sección, en gran medida, se basan
en estos estudios.
5.3.1 Temperatura
Uno de los gráficos más comunicadas de la IPCC AR4 se reproduce en la Fig. 9 . El gráfico muestra la evolución
temporal de la multi-modelo-media global de temperatura superficial en experimentos conducidos escenario de
emisiones transitorias de acuerdo con el estudio más completo modelo. Como puede verse en la Fig. 9 , Los
cambios de temperatura proyectados dependen decisivamente el escenario subyacente. Sobre la base de los seis
escenarios y tomando las gamas de modelos, expresada por las barras verticales en el lado derecho de la figura. 9 ,
Dentro de escenarios individuales en cuenta, el calentamiento global entre 1,8 ° C
Fig. 9 Multi-modelo significa de calentamiento de la superficie (con relación a 1980-1999) para varios escenarios A2, A1B y B1, mostrados como
continuaciones de la simulación del siglo 20a. Las líneas muestran los medios multi-modelo, el sombreado de puntos marca el rango de desviación
estándar ± 1 de medios anuales modelo individual. Tenga en cuenta que no todos los escenarios son administrados por el mismo número de modelos, por
lo tanto diferentes desviaciones estándar no son adecuados para la interpretación a través de los escenarios (IPCC 2007a)
(1.1 a 2.9 ° C) para B1 y 4,0 ° C (2.4 hasta 6.4 ° C) para A1FI tiene que ser anticipada por el final del siglo XXI (2090
a 2099 con respecto a 1980-1999). En las simulaciones climáticas subyacentes a los cambios de temperatura
observados del siglo pasado se reproducen (parte izquierda de la figura. 9 ) Y se amplifica en el curso del siglo XXI.
La incertidumbre en las proyecciones climáticas se debe no sólo a la sociedad camino desconocido tomará con
respecto a los aspectos socioeconómicos y el desarrollo tecnológico, según lo expresado por los escenarios, sino
también a las diferencias considerables entre los modelos participantes. Estas diferencias inter-modelo son, en gran
medida, debido a la representación de los procesos de retroalimentación en los modelos de circulación general
atmosféricas, y aquí especialmente la retroalimentación de las nubes (Bony et al. 2006) . Sin embargo, todos los
modelos muestran un calentamiento considerable a finales de siglo, e incluso simulaciones del clima de
mantenimiento de las mismas concentraciones de gases de efecto invernadero como el año 2000 muestran un
aumento de la temperatura media global de la otra mitad de un grado, lo que refleja la inercia térmica en el sistema
climático. Mesa 1 proporciona los valores numéricos para el calentamiento global al final del siglo. La mejor
estimación, así como el rango probable de la evaluación de múltiples modelos para los diferentes escenarios se dan.
La distribución geográfica del cambio climático es de interés primordial para muchos estudios de
impacto climático. existe considerable variación espacial en modelada
40 M. Quante
tabla 1 Proyección de calentamiento de la

Guión Mejor estimado rango probable
superficie media global al final de la siglo
B1 1.8 1,1-2,9
XXI ((en ° C a 2090 a 2099 con respecto a
A1T 2.4 01.04 a 03.08
1980-99)
B2 2.4 01.04 a 03.08
A1B 2.8 01.07 a 04.04
A2 3.4 2,0-5,4
A1FI 4.0 02/04 a 06/04
Los datos del IPCC (2007a)
La Fig. 10 Medio Multi-modelo del calentamiento anual media en superficie (superficie de cambio de la temperatura del aire con relación
a 1980-1999 en ° C) para el escenario A1B (escenario de emisiones medio) y el período de tiempo 2080-2099. Figura extraído de IPCC (2007a)
cambios en el clima. Hay un cierto patrón de cambio climático en el mundo, que se reproduce
constantemente por todos los modelos que contribuyen. Como un ejemplo, la multi-modelo de distribución de
temperatura de la superficie al final del siglo resultante de escenario A1B se ejecuta se muestra en la Fig. 10 ;
todas las otras simulaciones de escenarios dan el mismo patrón principio. En general, sin embargo, los
continentes se calentará más rápidamente que los océanos. El calentamiento más fuerte es evidente sobre
las masas terrestres del norte y las regiones polares debido al efecto del hielo-albedo positivo. En estas
regiones, la tendencia al calentamiento es aproximadamente el doble que la media mundial, y es por lo tanto
similar a la observada para el siglo anterior. El cambio de temperatura más baja se podría esperar en los
océanos del sur en la banda de latitud entre 40 y 50 ° S y sobre el Océano Atlántico Norte. Oceans
responden con un retraso, ya que la mezcla vertical distribuye el calor adicional de más de un volumen
mucho más grande en comparación con masas de tierra. la mezcla vertical es especialmente eficaz en el
Atlántico Norte y el Océano Antártico. Tiene que ser mencionado,
distribuciones de temperatura regionales producidas por los modelos globales son inspeccionados más de cerca (Fig. 10 ).
5.3.2 Precipitación
Las consecuencias directas del calentamiento global son más altas tasas de evaporación y, por lo tanto, las tasas
de precipitación más altos. Como promedio-modelo de múltiples global y, un incremento en la precipitación de
aproximadamente 4-5% se puede esperar hacia el final de la siglo XXI (Meehl et al. 2005) , Con una variación neta
de la tierra representa el 24% del aumento global promedio de las precipitaciones. También debe señalarse que
para la precipitación sobre la tierra, especialmente, existen grandes desviaciones entre modelos, y éstos se
producen no sólo en la media regional, sino también en la media global. Figura 11 muestra la distribución de los
cambios en la precipitación media anual como un escenario A1B multi-modelo de la media expresada en mm por
día durante las dos últimas décadas del presente siglo XXI. Se puede observar que un gran aumento general de
la precipitación no es de esperar, pero que no será regiones del globo donde será más agua disponible y otros
donde podría ocurrir el secado. Más lluvia se simula para el cinturón ecuatorial y latitudes geográficas mayores.
Menos precipitación (hasta 20%) se proyecta sobre todo para los subtrópicos (océanos, mar Mediterráneo, África
del Sur, Australia). Esta disminución proyectada se considera especialmente robusto, y muy probable que se
produzca (IPCC 2007a). A partir de los resultados de las evaluaciones inter-anuales del modelo de un cambio en
el tiempo y la fuerza de las precipitaciones ha sido diagnosticado, y esto podría ser de gran importancia para la
futura gestión del abastecimiento de agua potable y el destino de los ecosistemas donde el agua es crítica.
La Fig. 11 cambios medios en la precipitación (en mm día -1). Los cambios son medios anuales para el escenario A1B para el
período 2080-2099 respecto de 1980-1999. Figura de Daisuke Nohara
42 M. Quante
5.3.3 subida del nivel del mar
Se puede considerar como un sólido resultado de la proyección del IPCC modelo que el nivel del mar seguirá
subiendo en el siglo XXI debido a la expansión térmica y la pérdida de hielo terrestre. aumento del nivel del mar no
era uniforme geográficamente en el pasado y no va a ser en el futuro. El calentamiento previsto debido a las
emisiones de gases de efecto invernadero durante el siglo XXI seguirá contribuyendo al aumento del nivel del mar
durante muchos siglos por venir. aumento del nivel del mar debido a la expansión térmica y la pérdida de masa de
las capas de hielo continuará durante siglos o milenios incluso si el forzamiento radiativo iban a ser estabilizado.
Mesa 2 proporciona también se proporciona los valores numéricos para el aumento del nivel del mar al final del siglo,
y el rango probable de la evaluación de múltiples modelos para los distintos escenarios. La gama excluye futuros
cambios dinámicos rápidos en el flujo de hielo, que no está parametrizado en el actual sub-modelos de hielo.
En todos los escenarios, la tasa media de aumento del nivel del mar durante el siglo XXI es muy probable a
exceder la tasa promedio 1961-2003 (1,8 ± 0,5 mm año -1). Durante 2090-2099 bajo A1B, la estimación central de la
tasa de aumento es de 3,8 mm año -1. Para un modelo de media, el escenario extendido en aumento del nivel del mar
está a sólo 0,02 m por la mitad del siglo, y hacia el final del siglo es de 0,15 m. La expansión térmica es el
componente más grande, lo que contribuye 70-75% de la estimación central en estas proyecciones para todos los
escenarios. también se proyectan glaciares, capas de hielo y la capa de hielo de Groenlandia para contribuir
positivamente a nivel del mar. La capa de hielo de la Antártida recibirá aumento de las nevadas sin experimentar
fusión superficial sustancial, por lo tanto ganar masa y contribuyendo negativamente al nivel del mar. Otras
aceleraciones en el flujo de hielo de la clase observada recientemente en algunos glaciares de Groenlandia y las
corrientes de hielo de la Antártida occidental podría aumentar sustancialmente la contribución de las capas de hielo
(IPCC 2007a) . 2005 fue la fecha límite para la entrada de científicos en el informe del IPCC AR4; sin embargo, no ha
habido algún trabajo adicional llevado a cabo sobre el nivel del mar que fue motivado por la aceleración observada
de la fusión de hielo de Groenlandia. Los modelos utilizados para la evaluación del nivel del mar AR4 tienen ciertas
deficiencias relativas a los pequeños procesos a escala de la física de fusión. Todas las estimaciones más recientes
de la posible elevación del nivel del mar hacia el final del siglo XXI vienen con estimaciones más altas en
comparación con los reportados en IPCC (2007a) . Por ejemplo, Rahmstorf (2007) utiliza una relación semi-empírica
que conecta la subida del nivel del mar global de la temperatura superficial media global en el siglo XX. El uso de tal
relación semi-empírica es, sin embargo, no exento de críticas. Cuando las correlaciones establecidas se aplican a
Guión rango probable
B1 0,18 a 0,38
A1T 0,20 a 0,45
B2 0,20 a 0,43
A1B 0,21 a 0,48

Tabla 2 aumento del nivel del mar global proyectada al final de la siglo XXI
A2 0,23-0,51
(en m entre 2090 a 2099 con relación a 1980-1999; rango basado en
modelos con exclusión de futuros cambios dinámicos rápidos en el flujo de
A1FI 0,26-0,59
hielo) Los datos del IPCC (2007a)
los futuros escenarios de calentamiento del IPCC, los resultados de relación en un aumento del nivel del mar proyectado en el
año 2100 de 0,5-1,4 m por encima del nivel de 1990. Una comparación del pasado aumento del nivel del mar a partir de
estudios del último período interglacial con condiciones actualmente proyectadas, condujo Rohling et al. (2008) a la afirmación
“Nos encontramos con tasas medias de aumento del nivel del mar de 1,6 m por siglo. A medida que las temperaturas medias
globales durante MIS-5e fueron comparables a las proyecciones para el futuro cambio climático bajo la influencia de las
emisiones de gases de efecto invernadero antropogénicos, estas tasas observadas de cambio del nivel del mar informan al
debate en curso acerca alta en comparación con las bajas tasas de aumento del nivel del mar en el próximo siglo”. Un
aumento del nivel del mar sea posible extrema de hasta 5 m se pone en discusión por Hansen (2007 c) que también se refiere
a paleoclima registros que contienen numerosos ejemplos de capas de hielo desintegraciones que producen el aumento del
nivel del mar de varios metros por siglo en situaciones en las que los forzamientos eran más pequeñas que la del escenario
de negocio como de costumbre (cerca de SRES A2).
En general, debe tenerse en cuenta que el futuro aumento del nivel del mar sigue siendo muy incierto, pero
los números dados en el IPCC AR4 parece marcar el límite inferior absoluto de posibilidades, y un posible
aumento del nivel del mar de un metro o poco más hacia el final del siglo parece ser más probable.
5.3.4 Eventos Extremos
Los últimos años han visto una serie de fenómenos meteorológicos que causan grandes pérdidas de vidas
(Easterling et al. 2000b) . mejoras de los modelos climáticos se han traducido en una mayor capacidad para simular
muchos aspectos de la variabilidad y los extremos climáticos. Sin embargo, todavía se caracterizan por errores y
limitaciones sistemáticas en simular con precisión las condiciones climáticas regionales. Sin embargo, un análisis
de la frecuencia de ocurrencia de los parámetros seleccionados han demostrado que, además de un cambio en la
media, un ensanchamiento de la distribución de densidad de probabilidad es también de esperar, implicando de
este modo una mayor variabilidad y los valores más extremos. Las olas de calor serán más frecuentes y de mayor
duración en un futuro clima más cálido (IPCC 2007a) .
Los extremos de precipitación diaria son probable en aumento en muchas regiones. El aumento se considera como muy
probable en el norte de Europa, Asia del Sur, el Este de Asia, Australia y Nueva Zelanda. proyecciones climáticas
multi-modelo para el siglo XXI muestran tanto los aumentos en la intensidad de las precipitaciones y el número de días
secos consecutivos en muchas regiones (Tebaldi et al. 2006) . Intensidad de precipitación aumenta en casi todas
partes, pero en particular en las latitudes medias y altas, donde significan precipitación también aumenta. Hay muchas
regiones en las regiones subtropicales y bajas latitudes medias con un mayor número de días secos consecutivos, el
signo de este parámetro se invierte en altas latitudes medias y altas latitudes, donde se esperan precipitaciones
medias a aumentar.
Aunque algo contrario a la intuición, un incremento previsto en el riesgo de intensa precipitación y las
inundaciones también se asocia con el riesgo de secado. eventos de lluvia episódicos intensos y pesados con
alta escorrentía se intercalan con periodos más tiempo relativamente secas con aumento de la
evapotranspiración especialmente en las sub-trópicos (Bates et al. 2008) .
44 M. Quante
5.3.5 Información Regional Escala: Reducción de escala dinámicos
La reducción de escala es un método que se deriva la información de lo local a escala regional a partir de los
modelos de mayor escala. El método de reducción a escala dinámica utiliza los resultados de modelos climáticos
globales, que normalmente se ejecutan en una resolución gruesa, como motor de los modelos climáticos regionales,
que a su vez se pueden configurar de forma anidada hasta la resolución espacial deseada. El modelo dinámico en
la escala regional permite el valor añadido del desarrollo de fenómenos meteorológicos, que evolucionan debido a
las características de flujo y de flujo superficie regionales. Por supuesto, la calidad del producto a escala reducida
depende en gran medida de la calidad del modelo de conducción.
Está más allá del alcance de esta descripción general para discutir todos los resultados de los estudios de
proyecciones climáticas regionales publicados; Sin embargo, se proporcionarán aquí algunas referencias importantes.
Por ejemplo, Räisänen et al. (2004) y Giorgi et al. (2004) Y Bhend y von Storch (2008) cada uno resaltar diferentes
aspectos de las proyecciones de cambio climático para toda Europa. A continuación, se resumen algunos de los
resultados regionales seleccionados:
Alpes
Raible et al. (2006) evaluado serie de datos reconstruida a partir del pasado y se realizan proyecciones de modelos
climáticos para la región del Atlántico europeo y Alpine. simulaciones de intervalo de tiempo utilizando un modelo
regional se llevaron a cabo. En la simulación escenario A2 (2071-2100) las temperaturas de invierno y verano muestran
un incremento medio de aproximadamente 3 y 4 ° C, respectivamente. Comparando el control de intervalo de tiempo
1961-1990 con el escenario A2, la variabilidad interanual es sin cambios en invierno, mientras que se observa un fuerte
incremento en estas escalas de tiempo en verano (Schär et al. 2004) . Precipitación comporta de manera diferente; en
invierno, un pequeño aumento promedio es simulado en el escenario A2. La tendencia simulado en la precipitación de
invierno para el período de control 1961-1990 es consistente con la tendencia observada y la reconstrucción; por tanto,
este comportamiento puede ser explicado por la variabilidad interna. En verano, la precipitación media muestra una
pequeña disminución en comparación con la media de la simulación de control. La comparación de la A2 con la
simulación de control, la variabilidad inter-anual de la precipitación se mantiene sin cambios en invierno, pero aumenta
en verano.
Región Báltico
Las proyecciones climáticas reportados en BACC (2008) centrado en una Evaluación del cambio climático en la
cuenca del Mar Báltico. Los principales resultados están en el horizonte de tiempo de 2100, y muestran que sin
medidas de mitigación se espera que las temperaturas de la superficie aumentará en aproximadamente 4-6 ° C en la
región del Báltico del Norte y en alrededor de 3-5 ° C en la parte sur de la Báltico incluyendo partes de Polonia y el
norte de Alemania. Este aumento de temperatura dará lugar a una reducción de la capa de hielo del invierno
Mar Báltico en un 50-80%. las precipitaciones de invierno se prevé que aumente en un 25-70% y en la precipitación
del verano se espera que disminuya hasta un 45% a finales de siglo.
Más de extremos Europa
Beniston et al. (2007) evaluados proyecciones de modelos climáticos regionales para futuros eventos extremos en
el clima europeo. Se exploraron cómo las olas de calor, las fuertes precipitaciones, sequías, tormentas de viento y
mareas de tempestad cambio entre el presente (1961-1990) y el futuro (2071-2100).
Los principales resultados del estudio pueden resumirse de la siguiente manera: Las olas de calor -
calentamiento de la superficie regional hace que la frecuencia, intensidad y duración de las olas de calor para
aumentar Europa; Precipitación - invierno pesados precipitación aumenta en Europa Central y del Norte y
disminuciones en el Sur; precipitación aumenta pesada de verano en el noreste de Europa y disminuciones en el
Sur. sequías Mediterráneo comienzan a principios de año y duran más tiempo; Las tormentas de invierno -
velocidades de viento extremas aumentan entre 45 ° N y 55 ° N, excepto una y sur de los Alpes, y se vuelven más
noroccidental de lo que son en la actualidad.
Schär et al. (2004) simulado posible clima europeo futuro utilizando un modelo climático regional y
un escenario con aumento de las concentraciones de efecto invernadero-gas atmosférico. La
evaluación de las olas de calor en Europa en relación con el evento extremo en 2003 (fuerte ola de
calor durante más de 500 años) estaba en el centro del estudio. Los autores encontraron que bajo un
cierto escenario de emisiones (SRES A2) variabilidad de la temperatura Europa aumenta hasta en
un 100%, con cambios máximos en Europa central y oriental. El clima de verano en Europa también
puede experimentar un pronunciado aumento de la variabilidad de año a año en respuesta a forzar
gases de efecto invernadero. Las simulaciones de modelos climáticos regionales sugieren que hacia
el final del siglo - bajo los supuestos del escenario dados - aproximadamente cada segundo verano
podría ser tan caliente o más caliente (y tan seco o secadora) que la de 2003. Por lo tanto,
También, Diffenbaugh et al. (2007) encontraron que las concentraciones de gases de efecto invernadero elevada
aumentan drásticamente el riesgo de estrés térmico en la región mediterránea, con la ocurrencia de los extremos calientes
crecientes por 200-500% en toda la región.
El trabajo de Räisänen et al. (2004) , Por ejemplo, y la labor de evaluación modelo
por el presente autor sustentar la idea de que la calidad de los modelos de conducción determinar
predominantemente la salida de los modelos climáticos regionales. Esta afirmación es especialmente para las
cantidades del ciclo del agua (Graham et al. 2007) . En este caso, las diferencias entre los resultados obtenidos
utilizando dos modelos de conducción acoplados a un modelo climático regional con cada simulando el mismo
escenario de emisiones es mayor que los observados entre un modelo a gran escala y un modelo regional
posterior simular dos escenarios extremadamente opuestas. Con la suite actual de modelos tiene que ser
declarado que los resultados regionales de cambio climático derivados utilizando un solo modelo de conducción
alimentar un modelo regional deben ser interpretados con precaución.
46 M. Quante
5.3.6 Los cambios abruptos
sistema climático de la Tierra es altamente no lineal: entradas y salidas no son proporcionales, el cambio es a
menudo episódica y abrupto en lugar de lento y gradual, y equilibrios múltiples son la norma (Rial et al. 2004) . La
mayoría de los estudios y debates sobre un posible cambio climático, junto con sus impactos ecológicos y
económicos, se han centrado en la actual acumulación de gases de efecto invernadero en la atmósfera industrial y
una siguiente gradual aumento de las temperaturas globales. Esta línea de pensamiento, sin embargo, no tiene en
cuenta otro escenario climático potencialmente perjudicial. No tiene en cuenta la reciente evidencia que avanza
rápidamente y que el clima de la Tierra se ha desplazado en varias ocasiones abruptamente y dramáticamente en el
pasado, y es capaz de hacerlo en el futuro. La evidencia fósil demuestra claramente que el clima de la Tierra puede
cambiar de marcha
dentro de una década, el establecimiento de nuevas y diferentes patrones, que pueden persistir durante décadas o
siglos (NRC 2002) .
La evidencia también muestra que el sistema climático de la Tierra tiene umbrales sensibles. Pasó junto a estos
umbrales y el sistema puede saltar rápidamente de un modo de funcionamiento estable a otra completamente diferente.
Estos umbrales se han comunicado en la literatura reciente bajo el concepto de “puntos de inflexión” (Lenton et al. 2008) .
Muchos factores desencadenantes de los cambios bruscos se han identificado en el sistema climático y algunos de
ellos se analizan en el NRC (2002) , Alley et al. (2003) , Y el IPCC (2007a) . Uno de los efectos más destacados de los
cambios bruscos está relacionada con la formación de aguas profundas en el Atlántico Norte. Los últimos 30 años han
sido testigos de una intrusión de baja salinidad aguas profundas que se extienden sobre toda la sub-polar norte del
Océano Atlántico y los mares entre Groenlandia y Europa, y en sólo aquellas regiones que son críticas para los
cambios abruptos en la circulación termohalina, que ha sido implicado en muchos eventos de cambio climático abrupto
en el pasado (Alley y otros. 2003) . Una característica sobresaliente del cambio climático terrestre es su asimetría. El
calentamiento es rápido, generalmente seguido por un descenso lento en el clima más frío. Dada la simetría de los
forzamientos orbitales, la causa del calentamiento rápido a las terminaciones '' glacial debe estar en una
retroalimentación climático. Claramente, la retroalimentación asimétrica es el flip albedo de hielo y nieve que se
produce cuando se vuelven lo suficientemente caliente para iniciar la fusión (Hansen et al. 2007a) . Un clima obligando a
que 'voltea' el albedo de una porción suficiente de una capa de hielo puede iniciar un cataclismo. Esta retroalimentación
positiva puede conducir-y ha dado lugar a un aumento relativamente rápido de las temperaturas superficiales.
5.4 El clima en la escala de tiempo del Milenio
En el presente capítulo se cerrará con una perspectiva de corto en el cambio climático previsto para el milenio
real. La mayoría de las proyecciones climáticas publicados abordan el siglo XXI y sólo unos pocos estudios
existir, que se ven aún más en el futuro. Debido a la considerable inercia del sistema climático - causado por los
largos tiempos de residencia de muchos gases de efecto invernadero, la gran capacidad calorífica de los
océanos y la memoria a largo plazo de otros componentes del sistema, tales como las capas de hielo - en
la ausencia de medidas de mitigación apropiadas, se espera que las modificaciones humanas del sistema climático
a persistir durante muchos siglos por venir. Por ejemplo, es probable que una fracción sustancial de la proyectada
CO 2 las emisiones se quedan en la atmósfera durante miles de años y por lo tanto, los cambios climáticos
relacionados son de esperar en el largo plazo (Archer y Brovkin, 2008) . Hasselmann et al. (2003) informe sobre
simulaciones hasta el año 3000 utilizando un modelo climático respuesta al impulso no lineal acoplado a un modelo
económico elemental. Sus resultados dependen en gran medida de los escenarios de emisiones asumidos por el
pico estimada de CO 2 concentraciones entre aproximadamente 1.200 y 4.000 ppm, y teniendo en cuenta el uso de
todos los recursos convencionales y exóticos, temperatura global se incrementa de 4-9 ° C se prevé para el
segundo medio de este milenio. El aumento del nivel del mar posterior estará en el intervalo del 3 al 9 m. La
conclusión de Hasselmann et al. (2003) es que el calentamiento global previsto en los siglos siguientes es un
problema potencialmente mucho más grave en comparación con el cambio climático previsto en este siglo, es
decir, si las emisiones de gases de efecto invernadero siguen aumentando sin cesar.
Basándose en simulaciones con ocho modelos de sistemas Tierra de complejidad intermedia (modelos de ciclo
climático-carbono) y diferentes escenarios de emisiones con asumido estabilizado las concentraciones de gases de efecto
invernadero después del año 2100, Plattner et al. (2008)
evaluar los cambios globales de la temperatura y el nivel del mar se elevan hasta el año 3000. Los autores han
identificado un compromiso sustancial cambio climático para el aumento de la temperatura global y el aumento del
nivel del mar, incluso después de la estabilización de las concentraciones de gases de efecto invernadero a la
atmósfera. Para un inicialmente alta-CO 2 A2 plus estabilización escenario, el calentamiento adicional por el año 3000
se calcula para variar desde 1,3 hasta 2,2 K y por un bajo CO 2 B1 plus estabilización escenario 0,6-1,6 K. El nivel del
mar sigue aumentando debido a la expansión térmica y los valores respectivos para el escenarios A2 y B1 son
0,5-5,5 m y 0,3-1,1 m. Los modelos del ciclo climático de carbono revelaron que para el año 3000 la mayor parte de
las emisiones antropogénicas de carbono será finalmente absorbido por el océano, pero que una fracción sustancial
(15-28%) todavía permanecerán en la atmósfera. Incluso si las emisiones de carbono se reducen a cero
hipotéticamente a partir del año 2100, el nivel del mar se elevará aún más debido a la expansión térmica en curso.
En este caso, un aumento de 0,1-0,7 m por el año 3000 se ha calculado. las temperaturas superficiales globales
siguen siendo altos en el cero-post-2100 escenario, y en comparación con el año 2100 una reducción de sólo unas
pocas décimas Kelvin se puede esperar para el año 3000.
En resumen, se puede decir que las emisiones del siglo XXI será
notablemente afectar el clima a lo largo de todo el milenio.
6 Comentarios finales
Durante los 4,6 mil millones de años de su evolución, la Tierra se ha visto una gran variedad de estados climáticos,
que en sus extremos se han extendido, ya sea del Tierra bola de nieve
o casa caliente. Largos periodos de un clima intermedio con sólo cambios moderados también se han deducido a
partir de datos del proxy. Sin embargo, la variabilidad del clima es
48 M. Quante
el regla y no la excepción y la evolución de la vida en la Tierra está estrechamente relacionada con el clima y
su cambio (Kasting y Gatling 2003) .
Por cerca de 250 años, la humanidad ha interferido más fuerte con el sistema climático en el sentido de que,
además de cambios en el uso de la tierra, los gases y partículas activas radiativas han sido liberados en cantidades
sustanciales en la atmósfera. Durante este período especialmente, las concentraciones atmosféricas de la gases de
efecto invernadero CO 2 y metano han aumentado significativamente y dar cuenta de una radiativo forzamiento adicional
de más de 2 W m -2 ( IPCC 2007a) . Un aumento de la temperatura media global se puede deducir a partir de
observaciones instrumentales para el mismo lapso de tiempo. El calentamiento reciente registrada en las observaciones
instrumentales en la última década supera las temperaturas (incluyendo los rangos de incertidumbre) de al menos los
últimos 1.600 años, como reconstruido para el hemisferio norte de un conjunto ampliado de datos proxy (Mann et al. 2008)
. proyecciones del modelo climático impulsados por gas de efecto invernadero y las emisiones de partículas de acuerdo
con un conjunto de escenarios socioeconómicos hacen hincapié en un aumento adicional de la temperatura global para
el siglo presente y más allá (IPCC 2007a) . Estas proyecciones anima a algunos científicos a hablar de una interferencia
peligrosa con el sistema climático, lo que podría colocar a la Tierra peligrosamente cerca de un dramático cambio
climático que podrían funcionar fuera de nuestro control, dando lugar a grandes peligros para los seres humanos, otros
animales y los ecosistemas (Hansen et al . 2007a, b) . Sobre la base de la probabilidad de un fuerte El Niño en el futuro,
Hansen et al. 2006 argumentan que un calentamiento global de más de aproximadamente 1 ° C, en relación con el año
2000, constituiría un '' cambio climático 'peligroso' para algunas regiones, a juzgar por los probables efectos sobre el
nivel del mar y el exterminio de especies. Aunque el término “ interferencia peligrosa ”Ejerce una noción subjetiva, no
parece haber una conciencia ampliamente reconocido que, además de las acciones de mitigación de emisiones,
medidas de adaptación tienen que ser implementado.
Incluso si ha habido veces más caliente en la profunda historia de nuestro planeta, hay dos aspectos que
mejoran la relevancia de la variación de la corriente en la temperatura y otros parámetros climáticos. En primer
lugar, hay muchos mas gente que nunca que viven en las regiones del mundo que son vulnerables a los efectos del
clima. En segundo lugar, la paso
del aumento de la temperatura en relación con la amplitud es casi sin precedentes en los registros climáticos
analizados y dará lugar a un desplazamiento geográfico de las condiciones climáticas, lo que puede hacer que sea
difícil para algunos ecosistemas se adapten a, o para algunas especies a migrar en el tiempo (IPCC 2007b ).
Hay algunos elementos climáticos que pueden ser sensibles a los cambios repentinos y bruscos cuando el
límite de un conjunto de parámetros de acondicionamiento se excedió o cuando se superan ciertos umbrales. Los
grandes cambios, bruscos, y generalizadas del clima con los principales impactos han ocurrido en varias
ocasiones en el pasado (Alley y otros. 2003) . Un ejemplo citado a menudo de un cambio abrupto es la de un
posible colapso de la circulación termohalina se origina en el Atlántico Norte.
La discusión sobre los cambios bruscos ha, por lo general, sólo se considera las implicaciones de un puntos
económicos y ecológicos de vista; Sin embargo, Hulme (2003) También se analizan las implicaciones de una
mayor social y conductual perspectiva de la ciencia. A pesar de los cambios bruscos podrían ser de relevancia
mejorada para la sociedad global, un conocimiento detallado de los procesos geofísicos en cuestión es no tiempo
completo y un consenso científico en cuanto a la pertinencia general y esperado tiene no todavía
sido plenamente alcanzado. Por lo tanto, se necesita urgentemente la ampliación de nuestra investigación en el
área de cambio climático abrupto. Lenton et al. (2008) definir los puntos de inflexión en el sistema climático y
reportar los tiempos de transición de entre 10 y 100 años. Entre los elementos de inflexión discutidos son los de la
circulación termohalina, el hielo ártico, las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida, el monzón indio verano, el
Sahara / Sahel, monzón de África Occidental y de la selva tropical del Amazonas (no una lista completa). Lenton
et al. (2008) También tenga en cuenta que la sociedad se puede caer en una falsa sensación de seguridad por las
proyecciones lisas de cambio global. Según su estudio, una síntesis de nuestro conocimiento actual sugiere que
una variedad de elementos de inflexión podría alcanzar su punto crítico dentro de este siglo. En su análisis más
general, Steffen et al (2007) concluyen con la afirmación: “Lo que se desarrolla, las próximas décadas seguramente
será un punto de inflexión en la evolución del Antropoceno”.
Reconocimiento El autor agradece el Dr. Jan Habel y el profesor Thorsten Assmann por haber dado la oportunidad de
contribuir al simposio sobre las especies relictas en Luxemburgo. Prof. Raymond Pierrehumbert, Universidad de Chicago,
EE.UU., Prof. Leo Donner, la Universidad de Princeton, EE.UU., y el Dr. Victor Brovkin, MPI de Meteorología, Hamburgo,
Alemania, siempre y aún material no publicado, gracias a todos por la amabilidad. valiosos comentarios sobre el manuscrito
proporcionado por el Dr. Desmond Murphy se agradece. Una parte del trabajo se basa en conferencias sobre la meteorología y
la física del medio ambiente climático por el autor en la Universidad de Lüneburg, Alemania.
referencias
Allen PA (2006) Tierra bola de nieve en el juicio. Eos Trans Am Geophys Unión 87 (45): 495 Allen MR, Gillett NP,
Kettleborough JA, Hegerl G, R Schnur, Stott PA, Boer G, G covery,
Delworth TL, Jones GS, Mitchell JFB, Barnett TP (2006) La cuantificación de la influencia antropogénica sobre el reciente cambio
de temperatura cerca de la superficie. Surv Geophys 27 (5): 491-454 callejón RB, Marotzke J, Nordhaus WD, Overpeck JT, Peteet
DM, Pielke RA Jr, Pierrehumbert RT,
Rhines PB, Stocker TF, Talley LD, Wallace JM (2003) El cambio climático abrupto. Ciencia 299: 2005-2010
Archer D, Brovkin V (2008) Milenial vida atmosférica de CO antropogénico 2. Cambio Clim

90: 283-297
El equipo BACC autor (2008) Evaluación del cambio climático en la cuenca del Mar Báltico. Saltador,
Berlina
Bard E, Frank M (2006) El cambio climático y la variabilidad solar: ¿qué hay de nuevo bajo el sol? Tierra
Planet Sci Lett 248: 1-14
Barth M, McFadden J, Sol J, Wiedinmyer C, Chuang P, Collins D, Griffin R, Hannigan M, Karl T,
Kim S, Lasher-Trapp S, Levis S, Litvak M, Mahowald N, Moore K, Nandi S, Nemitz E, Nenes
A, Potosnak M, Raymond TM, Smith J, Stroud C, Still C (2005) El acoplamiento entre los ecosistemas de la tierra
y el ciclo hidrológico atmosférica. Bull Am Soc Meteorol 86 (12): 1738-42
Bates aC, Kundzewicz ZW, Wu S, Palutikof JP (eds) (2008) El cambio climático y el agua.
Documento Técnico del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, Secretaría del IPCC, Ginebra, pp. 210
Battarbee RW, Binney HA (eds) (2008) variablility natural del clima y el calentamiento global:
Una perspectiva Holoceno. Wiley-Blackwell, p 288
Beniston M, Stephenson DB, Christensen OB, Ferro CAT, Frei C, Goyette S, Halsnaes K, Holt T,
Jylhü K, Koffi B, Palutikoff J, Schöll R, Semmler T, Woth K (2007) eventos extremos futuros en
50 M. Quante
clima europeo; una exploración de las proyecciones de modelos climáticos regionales. Cambio Clim 81: 71-95
Un Berger (1988) Teoría de Milankovitch y el clima. Rev Geophys 26: 624-657 Berner RA (2004) El ciclo del carbono
Fanerozoico: CO 2 y O 2. Oxford University Press, Nueva
York, p 158
Berry SL, Farquhar GD, Roderick ML (2005) Co-evolución del clima, la vegetación, el suelo y el aire. En:
Blöschl G, Sivapalan M (eds) Enciclopedia de ciencias hidrológicas, vol 1, Teoría, organización y escala. Wiley,
Chichester, pp 177-192
Bhend J, von Storch H (2008) Consistencia de las tendencias de precipitación invierno observados en Norte
Europa con las proyecciones regionales de cambio climático. Clim Dyn 31: 17-28
Bonan GB (2008) Los bosques y el cambio climático: forzamientos, evaluaciones, y los beneficios para el clima de
bosques. Ciencia 320: 1444-49
Bony S, Colman R, Kattsov VM, Allan RP, Bretherton CS, Dufresne JL, Hall A, Hallegatte S,
Holanda MM, Ingram W, Randall DA, Soden DJ, Tselioudis G, Webb MJ (2006) ¿Qué tan bien entendemos y evaluamos los
procesos de cambio climático de retroalimentación? J Clim 19: 3445 hasta 3482 Botkin D, Saxe H, Araújo MB, Betts R, Bradshaw
R, Cedhagen T, Chesson P, Davis MB, Dawson T,
Etterson J, Fe DP, Guisan A, Ferrier S, Hansen AS, Hilbert D, Kareiva P, Margules C, Nueva
M, F Skov, Sobel MJ, Stockwell D (2007) Predicción de efectos del calentamiento global sobre la biodiversidad. Bioscience 57: 227-236
Brasseur GP, Orlando JJ, Tyndall GS (eds) (1999) Química atmosférica y el cambio global.
Oxford University Press, Nueva York, p 654
Broecker WS (1985) ¿Cómo construir un planeta habitable ?. Eldigio Press, Nueva York Broecker WC, Stocker TF (2006) El
Holoceno CO 2 aumentando: antropogénico o natural? Eos
87 (3): 27-29
Broecker WS, Kunzig R (2008) clima Fijación: lo que revelan los cambios climáticos en el pasado acerca de la actual
amenaza - y la forma de contrarrestarlo. Simon & Schuster, Nueva York, p 272
Brohan P, Kennedy JJ, Harris I, Tett SFB, Jones PD (2006) La incertidumbre en las estimaciones regionales y
los cambios de temperatura observados globales: un nuevo conjunto de datos a partir de 1850. J Geophys Res 111: D12106. doi: 10.1029 /
2005JD006548
Canadell JG, Le Quéré C, Raupach M, Campo C, Buitehuis E, Ciais P, Conway T, Gillett N,

Houghton R, Marland G (2007) Contribuciones a acelerar atmosférica CO 2 el crecimiento de la actividad económica, la intensidad de
carbono, y la eficiencia de los sumideros naturales. Proc Natl Acad Sci EE.UU. 104 (47): 18866 hasta 18870
Carslaw KS, Harrison RG, Kirkby J (2002) Los rayos cósmicos, las nubes y el clima. Ciencia
298: 1732-1737
Iglesia JA, White NJ (2006) Una aceleración del siglo 20 en la subida global del nivel del mar. Geophys Res
Lett 33 (1): L01602
Claussen M (2003) Simulación del Holoceno cambio climático utilizando modelos del sistema climático. En:
Mackay A, Battarbee R, Birks J, Oldfield F (eds) El cambio global en el Holoceno. Arnold, Londres, pp 422-434
Claussen M, Brovkin V, Calov R, Ganopolski A, Kubatzki C (2005) Quizá la humanidad prevenir una
glaciación temprano? Comentario sobre la hipótesis de un anthropocene pre-histórico de Ruddiman. Cambio Clim 69: 409-417
Nube P (1978) Cosmos, la Tierra y el hombre: una breve historia del universo. Yale University Press,
New Haven, CT, p 372
Crowley TJ (2000a) Causas del cambio climático en los últimos 1000 años. Ciencia 289: 270-277 Crowley TJ (2000b) El
dióxido de carbono y el clima Fanerozoico. En: Huber BT, MacLeod KG, Ala
SL (eds) climas cálidos en la historia de la Tierra. Cambridge University Press, Cambridge, pp 425-444 Crutzen PJ, Stoermer
EF (2000) El “Antropoceno”. Cambio Global Newslett 41: 12-13 Dai A (2006) Reciente climatología, la variabilidad y las tendencias
en la humedad de la superficie terrestre. J Clim
19: 3589 hasta 3606
D'Arrigo R, Wilson R, G Jacoby (2006) En el contexto de largo plazo para fines de calentamiento del siglo XX.
J Geophys Res 111: D03103. doi: 10.1029 / 2005JD006352
Diffenbaugh NS, Pal JS, Giorgi F, Gao X (2007) la intensificación El estrés por calor en el Mediterráneo
el cambio climático punto de acceso. Geophys Res Lett 34: L11706. doi: 10.1029 / 2007GL030000
Donner LJ, Grande modelado climático WG (2008). Annu Rev Environ Resour 33: 02/01 hasta 02/17 Doney SC, Schimel DS (2007) de
carbono y el sistema climático de acoplamiento en escalas de tiempo de. los
Precámbrico hasta el Antropoceno. Annu Rev Environ Resourc 32: 31-66 Easterling DR, Evans JL, Pya G, Karl TR,
Kunkel KE, Ambenje P (2000a) variabilidad observada
y las tendencias en los fenómenos climáticos extremos: una breve revisión. Bull Am Meteorol Soc 81 (3): 417-425 Easterling
DR, Meehl GA, parmesano C, Changnon SA, Karl TR, Mearns LO (2000b) Clima
extremos: observaciones, modelado e impactos. Ciencia 289: 2068-2074 Emanuel KA (2005) El aumento de la destructividad de
los ciclones tropicales en los últimos 30 años. Naturaleza
436: 686-688
Fischlin A, Midgley GF, Precio JT, Leemans R, Gopal B, Turley C, Rounsevell MDA, Dube OP,
Tarazona J, Velichko AA (2007) Los ecosistemas, sus propiedades, bienes y servicios. En: Parry
ML, Canziani DE, JP Palutikof, PJ van der Linden, Hanson CE (eds) Cambio Climático 2007: Impactos, adaptación y
vulnerabilidad. Contribución del Grupo de Trabajo II al Cuarto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental
sobre el Cambio Climático. Cambridge University Press, Cambridge, pp 211-272
Fischer H, Kumke T, Lohmann G, floser G, Miller H, von Storch H, Negendank JFW (eds) (2004)
El clima en tiempos históricos. Hacia una síntesis de datos proxy del Holoceno y los modelos climáticos. Springer, Berlín, p
487
Fleming JR (2007) Los ingenieros del clima. Wilson Q 31: 46-60
Foukal P, Fröhlich C, Spruit H, Wigley TML (2006) mecanismos físicos de luminosidad solar
variación, y su efecto sobre el clima. Naturaleza 443: 161-166
Ghil M (2002a) La variabilidad del clima: aspectos no lineales. En: Holton JR, Pyle J, Curry JA (eds)
Enciclopedia de ciencias de la atmósfera. Académica, San Diego, CA, pp 432-438 Ghil M (2002b) variabilidad natural
del clima. En: Munn T (ed) Enciclopedia de ambien- mundial
cambio tal, vol 1. Wiley, Chichester, pp 544-49
Giorgi F, Bi X, Pal JS (2004) Media, la variabilidad interanual y las tendencias en el cambio climático regional
experimento Europa. II: escenarios de cambio climático (2071-2100). Clim Dyn 23: 839-858 Graham LP, Hagemann S, S
Jaun, Beniston M (2007) sobre la interpretación de los cambios hidrológicos
los modelos climáticos regionales. Cambio Clim 81: 97-122
Gough DO (1981) Estructura y luminosidad interior solar variaciones. Sol Phys 74: 21-34 Graedel TE, Crutzen PJ (1993)
cambio atmosférica: una perspectiva del sistema terrestre. WH Freeman
and Company, Nueva York, p 446
Haigh JD (2007) El Sol y el clima “de la Tierra, Living Rev solar Phys. 4 http: //www.livingre-
views.org/lrsp-2007-2, assesed 16.07.2008
Hansen J, Mki S, Ruedy R, Lo K, Lea DW, Medina-Elizalde M (2006) de cambio de temperatura global.
Proc Natl Acad Sci EE.UU. 103: 14288-14293
Hansen J, Sato M, Kharecha P, Russell G, Lea DW, Siddall M (2007a) El cambio climático y traza
gases. Phil Trans R Soc A 365: 1925-54
Hansen J, Mki S, Ruedy R, Kharecha P, Lacis A, Miller RL, Nazarenko L, Lo K, Schmidt GA,
Russell G, Aleinov I, Bauer S, Baum E, Cairns B, Canuto V, Chandler M, Cheng Y, Cohen A, Del Genio A, Faluvegi
G, Fleming E, amigo A, Hall T, Jackman C, Jonas J, Kelley M, Kiang NY, Koch D, Labow G, Lerner J, Menon S,
Novakov T, Oinas V, Ja P, Perlwitz Ju, Rind D, Romanou A, Schmunk R, Shindell D, Stone P, Sun S, calles D,
Tausnev N, trilladora D, Unger
N, Yao M, Zhang S (2007b) Peligroso interferencia hecho por el hombre con el clima: un estudio GISS modele. Atmos
Chem Phys 7: 2287-2312 Hansen J catástrofe (2007) El clima. Nuevo Sci 195: 30-34
Hartmann DL (1994) climatología física global. Académica, San Diego, CA, p 411 Hasselmann K (1976) los modelos
climáticos estocásticos, Parte I: Teoría. Tellus 28: 473-485 Hasselmann K, Latif M, Hooss G, Azar C, Edenhofer O, Jaeger
CC, Johannessen OM, Kemfert
C, Welp M, Wokaun A (2003) El reto del cambio climático a largo plazo. Ciencia 302: 1923-1925
Held IM, Soden BJ (2000) retroalimentación del vapor de agua y el calentamiento global. Annu Rev Energía Environ
25: 441-475
Hoegh-Guldberg O, Mumby PJ, Hooten AJ, Steneck RS, Greenfield P, E Gómez, Harvell CD,
Venta PF, Edwards AJ, Caldeira K, Knowlton N, Eakin CM, Iglesias-Prieto R, Muthiga N,
52 M. Quante
Bradbury RH, Dubi A, Hatziolos ME arrecifes (2007) Coral bajo el rápido cambio climático y la acidificación de los océanos. Ciencia
318: 1737-1742
Hoegh-Guldberg O, Hughes L, McIntyre S, Lindenmayer DB, parmesano C, Possingham HP,
Thomas CD (2008) la colonización asistida y el rápido cambio climático. Ciencia 321: 345-346 Hoffert MI, Caldeira K,
Benford G, Criswell DR, Verde C, Herzog H, Katzenberger JW, Kheshgi
SA, KS Lackner, Lewis JS, Manheimer W, Mankins JC, Marland G, Mauel ME, Perkins LJ, Schlesinger ME, Volk T, Wigley
TML (2002) rutas de tecnología avanzada para la estabilidad global del clima: la energía de un planeta de invernadero.
Ciencia 295: 981-987
Hoffman PF, Schrag DP (2002) La tierra hipótesis de bola de nieve: a prueba los límites del cambio global.
Terra Nova 14: 129-155
Holanda HD (1984) La evolución química de la atmósfera y los océanos. Universidad de Princeton
Press, Princeton, Nueva Jersey 598
Houghton RA (2007) Equilibrar el presupuesto global de carbono. Annu Rev Tierra Planeta Ciencia
35: 313-347
Hughes L (2000) Consecuencias biológicas del calentamiento global: es la señal ya evidente?
Tendencias Ecol Evol 15: 56-61
Hulme M (2003) abrupto cambio climático: puede hacer frente a la sociedad? Phil Trans R Soc Lond A
361: 2001-2019
Huntington TG (2006) La evidencia de intensificación del ciclo global del agua: revisión y sintetiza
sis. J Hydrol 319: 83-95
Imbrie J, Imbrie KP (1979) Las edades de hielo: la solución del misterio. Harvard University Press, Cambridge,
MA, p 224
IPCC (2000) Informe especial sobre escenarios de emisiones. En: Nakicenovic N, Swart R (eds) Cambridge
University Press, Cambridge, p 570
IPCC (2007a) Cambio climático 2007: la base de las ciencias físicas. En: Solomon S, Qin D, Manning
M, Chen Z, Marqués M, Averyt KB, Tignor H, HL Miller (eds) Contribución del Grupo de Trabajo I al cuarto informe de
evaluación del Panel Intergubernamental sobre el cambio climático. Cambridge University Press, Cambridge, p 996
IPCC (2007b) Cambio climático 2007: impactos, adaptación y vulnerabilidad. En: ML Parry, Canziani
DE, JP Palutikof, PJ van der Linden, Hanson CE (eds) Contribución del grupo de trabajo II al cuarto informe de
evaluación del Panel Intergubernamental sobre el cambio climático. Cambridge University Press, Cambridge, p 976
PD Jones, ME Mann (2004) Clima durante los últimos milenios. Rev Geophys 42: RG2002. doi: doi:
10.1029 / 2003RG000143
Jouzel J, Masson-Delmotte V, Cattani O, Dreyfus G, Falourd S, Hoffmann G, Minster B, Nouet J,
Barnola JM, Chappellaz J, Fischer H, Gallet JC, Johnsen S, Leuenberger M, Loulergue L, Luethi D, Oerter H,
Parrenin F, Raisbeck G, Raynaud D, Schilt A, Schwander J, Selmo E, Souchez R, Spahni R , Stauffer B,
Steffensen JP, Stenni B, Stocker TF, JL Tison, Werner M, Wolff EW (2007) la variabilidad del clima antártico orbital
y milenaria en los últimos 800 años, 000. Ciencia 317 (5839): 793-796
Kasting JF (2005) El metano y el clima durante la era precámbrica. Precámbrico Res 137: 119-129 Kasting JF, Toon OB,
Pollack JB (1988) ¿Cómo evolucionó el clima en los planetas terrestres. Sci Am
258 (2): 90-97
Kasting JF, Catling DC (2003) Evolución de un planeta habitable. Annu Rev Astron Astrophys 41: 429-463 Kasting JF, Ono S
(2006) paleoclimas: los primeros dos mil millones de años. Phil Trans R Soc B
361: 917-929
Keeling CD, Bacastow RB, Bainbridge AE, CA Ekdahl, Guenther PR, Waterman LS (1976)
variaciones de dióxido de carbono atmosférico en Mauna Loa Observatory, Hawaii. Tellus 28: 538-551
Kerr JT, Kharouba H, Currie DJ (2007) La contribución al cambio global macroecológicos

soluciones. Ciencia 316: 1581-1584
Kiehl JT, Trenberth KE (1997) presupuesto anual media global de energía de la Tierra. Soc Bull Am Meteorol
78: 197-208
Kiehl JT, Ramanathan V (eds) (2006) Fronteras de la modelización del clima. Prensa de la Universidad de Cambridge,
Cambridge, p 367
Keith DW (2000) Geoingeniería del clima: historia y perspectiva. Annu Rev Energía Environ
25: 245-284
Kirkby J (2008) Los rayos cósmicos y el clima. Surv Geophys 28: 333-375
Kristjánsson JE, J Kristiansen, Kaas E (2004) La actividad solar, los rayos cósmicos, las nubes y el clima - Un
actualizar. Adv espacio Sci 34: 407-415
Kroepelin S, Verschuren D, Lezine AM, Eggermont H, Cocquyt C, Francus P, Cazet JP, Fagot M,
Rumes B, Russell JM, Conley D, M Schuster, von Suchodoletz H, Engstrom DR (2008) la sucesión de ecosistemas
inducidos por el clima en el Sahara central: los últimos 6000 años. Ciencia 320: 765-768
Lamb HH (1970) El polvo volcánico en la atmósfera, con una cronología y la evaluación de su Météo
rológicas importancia. Philos Trans R Soc Londres, Ser Un 266: 425-533 Cordero HH (1995) clima, la historia y el mundo
moderno, 2ª ed. Routledge, Nueva York, pág 464 JL Lean, corteza DH (2008) ¿Cómo influencias naturales y antropogénicos
alteran sur- mundial y regional
temperaturas cara: 1889 a 2006. Geophys Res Lett 35: L18701. doi: 10.1029 / 2008GL034864
Lee TM, Jetz W (2008) campos de batalla de futuro para la conservación bajo el cambio global. Proc R Soc B
275: 1261-1270
Lenton TM, H Held, Kriegler E, Hall JW, Lucht W, S Rahmstorf, HJ Schellnhuber (2008) de vuelco
elementos en el sistema de la Tierra. Proc Natl Acad Sci 105: 1786-1793
Loulergue L, Schilt A, Spahni R, Masson-Delmotte V, Blunier T, Lemieux B, Barnola JM,
Raynaud D, Stocker TF, Chappellaz J (2008) Orbital y características a escala milenaria de CH4 atmosférica más de los
últimos 800, 000 años. Naturaleza 453: 383-386
Lüthi D, Le Floch M, Bereiter B, Blunier T, Barnola JM, Siegenthaler U, Raynaud D, Jouzel J,
Fischer H, Kawamura K, Stocker TF (2008) de alta resolución dióxido de carbono registro concentración 650,000-800,000
años antes del presente. Naturaleza 453: 379-382
Mann ME (2007) El clima en los últimos dos milenios. Annu Rev Tierra Planet Sci Lett
35: 111-136
Mann ME, Bradley RS, Hughes MK (1998) los patrones de temperatura a escala mundial y el forzamiento climático
en los últimos seis siglos. Nature 392: 779-787
Mann ME, Bradley RS, Hughes MK (1999) temperaturas del hemisferio norte durante el pasado
milenio: inferencias, incertidumbres y limitaciones. Geophys Res Lett 26: 759-762 Mann ME, Jones PD (2003) temperatura
de la superficie global durante los últimos dos milenios. Geophys Res
Lett 30 (15): 1820. doi: doi: 10.1029 / 2003GL017814
Mann ME, Zhang Z, Hughes MK, Bradley RS, SK Miller, Rutherford S basado en proxy (2008)
reconstrucciones de las variaciones de temperatura superficie hemisféricos y globales en los últimos dos milenios. Proc Natl Acad Sci
EE.UU. 105: 13.252 hasta 13.257
Marsh N, Svensmark H (2000) rayos cósmicos nubes y el clima. Espacio Sci Rev 94: 215-230 McIntyre S, McKitrick R
(2005) palos de hockey, componentes principales y significación espuria.
Geophys Res Lett 32: L03710
Meehl GA, Arblaster JM, Tebaldi C (2005) La comprensión de los futuros patrones de aumento de precipita-
ción de intensidad en los modelos climáticos. Geophys Res Lett 32: L18719
Midgley GF, Thuiller W, SI Higgins (2007) la migración de especies de plantas como una incertidumbre clave en predecible
ing impactos futuros del cambio climático en los ecosistemas: avances y desafíos. En: J Canadell, Pataki DE, Pitelka LF
(eds) Los ecosistemas terrestres en un mundo cambiante. Springer, Berlin, pp 129-137
NRC (2002) abrupto cambio climático: sorpresas inevitables, Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos,
Comité Nacional de Investigación Consejo sobre Cambio Climático Abrupto, National Academy Press NRC reconstrucciones de
temperatura (2006) de superficie para los últimos 2.000 años. Investigación nacional
Consejo, Comité sobre la superficie reconstrucciones de la temperatura de los últimos 2.000 años. National Academies
Press, Washington, DC
Neelin JD, Battisti DS, Hirst AC, Jin FF, Wakata Y, Yamagata T, Zebiak SE (1998) teoría ENOS.
J Geophys Res 103: 14261 hasta 14290
Oki T, Kanae S (2006) ciclos hidrológico global y los recursos mundiales de agua. Ciencia
313: 1068-1072
Pacala SW, Socolow RH (2004) cuñas de estabilización: la solución del problema climático para el próximo 50
años con las tecnologías actuales. Ciencia 305: 968-972
54 M. Quante
Paillard D (2006) ¿Qué impulsa el ciclo de la edad de hielo? Ciencia 313: 455-456
Pagani H, K Caldeira, Archer D, Zachos JC (2006) Un misterio de carbono antigua. Ciencia
314: 1556-1557
Pagano T, Sorooshian S (2006) ciclo global del agua (fundamentos, teoría, mecanismos). En: Anderson
MG (ed) Enciclopedia de las ciencias hidrológicas, vol 5. Wiley, Chichester, pp 2697-2711 Parkinson CL (2006) de la Tierra
Cryosphere: estado actual y los cambios recientes. Annu Rev Environ
Resour 31: 33-60
Parmesano C, Ryrholm N, Stefanescu C, Colina JK, Thomas CD, Descimon H, Huntley B, Kaila L,
Kullberg J, Tammaru T, Tennent WJ, Thomas JA, Warren M (1999) se desplaza hacia los polos en rangos geográficas de las
especies de mariposas asociados con el calentamiento regional. Naturaleza 399: 579-583
Parmesano C, Yohe G (2003) Una huella digital globalmente coherente de los efectos del cambio climático a través
los sistemas naturales. Naturaleza 421: 37-42
las respuestas ecológicas y evolutivas para el cambio climático reciente parmesano C (2006). Annu Rev
Ecol Evol Syst 37: 637-669
Pavlov AA, Kasting JF, Brown LL, Rages KA, Freedman R (2000) Invernadero calentamiento por CH4
en la atmósfera de la Tierra primitiva. J Geophys Res 105: 11981 a 11990
Pearson PN, Palmer MR (2000) las concentraciones de dióxido de carbono a la atmósfera en los últimos 60
millones de años. Naturaleza 406: 695-699
Peixoto JP, Oort AH (1992) La física de clima. American Institute of Physics, Nueva York,
p 522
Pielke R Jr, Wigley T, Verde C (2008) suposiciones peligrosas. Naturaleza 452: 531-532 Pierrehumbert RT (2002) El ciclo
hidrológico de los problemas ambientales lo profundo. Naturaleza
419: 191-198
Pierrehumbert RT (2005) la dinámica del clima de la Tierra una bola de nieve dura. J Geophys Res 110: D01111.
doi: 10.1029 / 2004JD005162
Pierrehumbert RT (2009) Principios de climas planetarios. Prensa de la Universidad de Cambridge,
Cambridge (en prensa)
Plattner GK, Knutti R, Joos F, Stocker TF, von Bloh W, Brovkin V, Cameron D, Driesschaert E,
Dutkiewiz S, Eby M, Edwards NR, Fichefet T, Hargreaves JC, Jones CD, Loutre MF, Matthews HD, Mouchet A,
Müller SA, Nawrath S, Precio A, Sokolov A, Strassmann KM, Weaver AJ (2008) a largo plazo compromisos
climáticos proyectados con el clima - modelos del ciclo del carbono. J Clim 21: 2721-2751
Quante M (2004) El papel de las nubes en el sistema climático. J Phys 121: 61-86 Quante M, Matthias V (2006) de agua en la
atmósfera Earth's. J Phys 139: 37-61 Rahmstorf S (2002) La circulación oceánica y el clima durante los últimos 120.000 años.
Naturaleza
419: 207-214
Rahmstorf S (2007) Un enfoque semi-empírica para proyectar un futuro aumento del nivel del mar. Ciencia
315: 368-370
Raible CC, Casty C, Luterbacher J, Pauling A, Esper J, Frank DC, Büntgen U, Roesch AC,
Tschuck P, Wild M, Vidale PL, Schär C, Wanner H (2006) clima variabilidad observaciones, reconstrucciones, y
simulaciones modelo para la región Atlantic-Europea y Alpine 1500-2100 AD. Cambio Clim 79 (1-2): 9-29
Räisänen J, Hansson U, Ullerstig A, Döscher R, Graham LP, Jones C, Meier HEM, Samuelsson
P, T Willen (2004) clima europeo a finales del siglo XXI: simulaciones regionales con dos modelos globales de
conducción y dos escenarios de forzamiento. Clim Dyn 22: 13-31 Raymo ME, Ruddiman WF (1992) tectónico forzando de
finales de clima cenozoico. Naturaleza
359 (6391): 117-122
Rial JA, Pielke RA Sr, Beniston M, Claussen M, Canadell J, Cox P, Held H, de Noblet-Ducoudré
N, R Prinn, Reynolds J, Salas JD (2004) no linealidades, evaluaciones y umbrales críticos en el sistema climático de la
Tierra. Cambio Clim 65 (1-2): 11-38 Robock A (2000) Las erupciones volcánicas y el clima. Rev Geophys 38: 191-219 Robock
A (2008) 20 razones por las que la geoingeniería puede ser una mala idea. Bull En Sci 64 (2): 14-18.
doi: doi: 10.2968 / 064002006 59

Rohling EJ, Grant K, Hemleben Ch, Siddall M, Hoogakker BAA, Bolshaw M, M Kucera (2008)
Las altas tasas de aumento del nivel del mar durante el último período interglacial. Nat Geosci 1: 38-42 Rosenzweig C, Karoly D,
Vicarelli M, Neofotis P, Wu Q, Casassa G, Menzel A, Root TL, Estrella
N, Seguin B, Tryjanowski P, Liu C, Rawlins S, Imeson A (2008) La atribución de impactos físicos y biológicos para el
cambio climático antropogénico. Naturaleza 453: 353-357 Royer DL, Bemer RA, Beerling DJ (2001) fanerozoico
atmosférica CO 2 cambio: la evaluación
geoquímicas y enfoques paleobiológicas. Tierra-Sci Rev 54: 349-392 Ruddiman WF (2003) La era invernadero
antropogénico comenzó hace miles de años. Clim
Cambio 61: 261-293
Ruddiman WF (2005) Arados, plagas y petróleo: cómo los seres humanos tomaron el control del clima.
Princeton University Press, Princeton, p 272
Ruddiman WF (2008) el clima de la Tierra: el pasado y el futuro, 2ª ed. WH Freeman & Company, Nueva
York, p 465
Rybski D, Bunde A, Havlin S, von Storch H (2006) La persistencia a largo plazo en el clima y la
problema de detección. Geophys Res Lett 33: L06718. doi: 10.1029 / 2005GL025591
Sabine C, Feely R, Gruber N, Key R, Lee K, Bullister J, Wanninkhof R, Wong C, Wallace D,
Tilbrook B, Millero F, Peng T, Kozyr A, Ono T, Rios A (2004) El disipador de mar para antropogénicas de CO 2. Ciencia 305:
367-371
Sagan C, Chyba C (1997) El temprana paradoja del sol débil. Science 276: 1217-1221 Sala OE et al (2000) escenarios globales de
la biodiversidad para el año 2100. Science 287: 1770-1774 Scafetta N, West BJ (2006) Contribución solar fenomenológica de la
superficie mundial 1900-2000
el calentamiento. Geophys Res Lett 33 doi: 10.1029 / 2005GL025539
Scafetta N, West BJ (2007) reconstrucciones fenomenológicos de la firma solar en la superficie NH
registros de temperatura desde 1600. J Geophys Res 112: D24S03. doi: doi: 10.1029 / 2007JD008437
Schär C, Vidale PL, Lüthi D, C Frei, Haeberli C, Liniger MA, Appenzeller C (2004) El papel
de aumentar la variabilidad de la temperatura en las olas de calor de verano en Europa. Naturaleza 427: 332-336 Schneider SH
(2001) Sistemas de la Tierra: ingeniería y gestión. Naturaleza 409: 417-421 Schneider SH (2008) Geoingeniería: podríamos o
deberíamos hacer que funcione? Phil Trans R Soc
366: desde 3843 hasta 3862
Seinfeld JH, Pandis SN (2006) la química atmosférica y la física: A partir de la contaminación del aire al clima
cambio, 2ª ed. Wiley, Nueva York, 1203 p
Soden BJ, Jackson DL, Ramaswamy V, Schwarzkopf MD, Huang X (2005) El signa- radiativo
ture de humectación de la troposfera superior. Ciencia 310: 841-844
Solanki SK, Krivova N (2003) ¿Puede explicar la variabilidad solar calentamiento global desde 1970? J
Geophys Res 108. doi: 10.1029 / 2002JA009753
Solanki SK, Usoskin IG, Kromer B, M Schussler, cerveza J (2004) Actividad inusual de la Du- Sun
ing últimas décadas en comparación con 11, 000 años anteriores. Naturaleza 431: 1084-1087 Steffen W, Crutzen PJ, JR McNeill
(2007) El Antropoceno: ¿Son los seres humanos ahora que abruma al
grandes fuerzas de la naturaleza? Ambio 36: 614-621
Stephens GL (2005) evaluaciones de la nube en el sistema climático: una revisión crítica. J Clim
18: 237-272
Stott PA, Piedra AD, Allen MR (2004) contribución humana a la ola de calor europea de 2003.
Naturaleza 432: 610-614
Tebaldi C, K Hayhoe, Arblaster JM, GA Meehl (2006) Ir a la extremes- una intercomparación
del modelo de simulación de los cambios históricos y futuros en los eventos extremos. Cambio Clim 79: 185-211
Thuiller W (2007) el cambio climático y la biodiversidad, el ecologista. Naturaleza 448: 550-552 Thuiller W, Albert C,
Araújo MB, Berry PM, Cabeza M, G Guisan, Hickler T, Midgley GF,
Paterson J, Schurr FM, Sykes MT, NE Zimmermann (2008) La predicción de los impactos del cambio global en las
distribuciones especies de plantas: los retos del futuro. Perspect Plant Ecol Evol Syst 9: 137-152
RSJ Tol (2008) escenarios económicos para el cambio global. En: von Storch H, Tol RSJ, floser G (eds)
Envioronmental crisis - la ciencia y la política. Springer, Berlín, pp 17-35 Trenberth KE (1992) modelado del sistema
climático. Cambridge University Press, Cambridge, p 788
56 M. Quante
Trenberth KE, Fasullo J, Smith L (2005) Trends y la variabilidad en la columna integrada atmosférica
vapor de agua. Clim Dyn 24: 741-758
Turcotte DL, Schubert G (2002) Geodinámica, 2ª ed. Wiley, Nueva York, pág 456 de la ONU (1992) Convención de
Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Informe FCCC /
/ 84, GE.05-62220 (E), de las Naciones Unidas INFORMALES http://unfccc.int/resource/docs/convkp/ conveng.pdf
Wallace JM, Hobbs PV (2006) Ciencias de la Atmósfera: un estudio introductorio, 2ª Ed. Académico,
San Diego, CA 483
Walther GR, Post E, P Convey, Menzel A, C parmesano, Bibi TJC, Fromentin JM, Hoegh-Guldberg
O, Bairlein F (2002) las respuestas ecológicas al cambio climático reciente. Naturaleza 416: 389-395
Walther GR (2003) Las plantas en un mundo más cálido. Perspect Plant Ecol Evol Syst 6 (3): 169-185 Wang Y, Cheng H,
Edwards RL, Kong X, Shao X, Chen S, Wu J, Jiang X, Wang X, An Z (2008)
Millennial- cambios y orbital escala en el monzón de Asia oriental durante los últimos 224 años, 000. Naturaleza 451: 1090-1093
Wanner H, Beer J, Bütikofer J, Crowley TJ, Cubasch U, Flückiger J, Goosse H, Grosjean M,

Joos F, Kaplan JO, Küttel M, Müller SA, Prentice IC, Solomina O, Stocker TF, Tarasovk P, Wagner H, Widmann M (2008)
mediados y finales de cambio climático Holoceno: una visión general. Quat Sci Rev 27: 1791-1828
Washington WM, Parkinson CL (2005) Introducción a la modelización del clima de tres dimensiones.
University Science Books, Sausalito, CA, p 354
Weart S (2008) El descubrimiento del calentamiento global. Edición revisada y ampliada. Harvard
Prensa de la Universidad de Harvard 190
Webster PJ (1994) El papel de los procesos hidrológicos en las interacciones océano-atmósfera. Rdo
Geophys 32: 427-476
Webster PJ, Holanda GJ, Curry JA, Chang HR (2005) Cambios en el número de ciclones tropicales, duración
y la intensidad en un ambiente de calentamiento. Ciencia 309 (5742): 1844-1846 Witt A, Schumann AY (2005) la variabilidad
del clima en escalas Holoceno milenarias registrados en
núcleos de hielo de Groenlandia. Nonlin Procesos Geophys 12: 345-352
von Storch H escenarios de cambio (2008) Clima - propósito y la construcción. En: von Storch H, Tol
RSJ, floser G (eds) Envioronmental crisis - la ciencia y la política. Springer, Berlin, pp 5-15 von Storch H, Zorita E, Jones J,
Dimitriev Y, González-Rouco F, Tett S (2004) más allá de reconstrucción
climático a partir de datos ruidosos. Ciencia 306: 679-682
Zachos J, Pagani M, L Sloan, Thomas E, K Billups (2001) Trends, ritmos, y las aberraciones en
climático global 65 Ma hasta el presente. Ciencia 292: 686-693
http://www.springer.com/978-3-540-92159-2

Changing Climate Past Present and Future - Quante - En.es

Încărcat de

Informații document

Titlu original

Drepturi de autor

Formate disponibile

Partajați acest document

Partajați sau inserați document

Opțiuni de partajare

Vi se pare util acest document?

Este necorespunzător acest conținut?

Drepturi de autor:

Formate disponibile

Changing Climate Past Present and Future - Quante - En.es

Încărcat de

Drepturi de autor:

Formate disponibile

El clima cambiante: pasado, presente y futuro

JC Habel y T. Assmann (eds.), Las especies relictas: Filogeografía y Biología de la Conservación, 9

2.1 El sistema climático y procesos pertinentes

2.2 Variabilidad del Clima

2.3 Balance de energía y Efecto Invernadero

Stefan-Boltzmann constante, donde S es el flujo solar a la distancia Sol-Tierra, y A es el albedo planetario.

objeto de protocolos normativos políticos.

2.4 CO 2: El buque insignia de gases de efecto invernadero Lived-Long

Inmediatamente antes del comienzo de la era industrial, el CO atmosférica 2

Pasado 3: vista a través de servidores proxy

3.1 Pasado profunda: el registro geológico

3.1.1 débil Sun Young

3.1.3 Tierra bola de nieve

papel de CO 2 durante el eon Fanerozoico se trata explícitamente por Crowley (2000b)

3.2 Los últimos 100 millones de años

3.3 Los últimos millones de años

3.4 El final de la última Edad de Hielo y el Holoceno

variabilidades paleoclimáticos reconstruidas se basan en muestras de hielo, sedimentos lacustres, anillos de

3.4.2 El último milenio: El Holoceno tardío

4 El Antropoceno: El Registro Climático Instrumental

4.1 Los cambios de temperatura

Oficina Meteorológica del Reino Unido

4.2 Otros cambios

4.2.1 Parámetros Hidrológicos

4.2.2 Componentes criogénicos

lenguas glaciares flotantes.

4.2.3 subida del nivel del mar

5 El futuro: la “era” de Evaluaciones Modelo

5.1 Modelos Climáticos

5.2 Escenarios de Emisiones

5.3 El clima de la siglo XXI

tabla 1 Proyección de calentamiento de la

A1B 2.8 01.07 a 04.04

Los datos del IPCC (2007a)

5.3.3 subida del nivel del mar

Guión rango probable

A1T 0,20 a 0,45

A1B 0,21 a 0,48

de negocio como de costumbre (cerca de SRES A2).

5.3.4 Eventos Extremos

5.3.5 Información Regional Escala: Reducción de escala dinámicos

Más de extremos Europa

5.3.6 Los cambios abruptos

5.4 El clima en la escala de tiempo del Milenio

Archer D, Brovkin V (2008) Milenial vida atmosférica de CO antropogénico 2. Cambio Clim

Canadell JG, Le Quéré C, Raupach M, Campo C, Buitehuis E, Ciais P, Conway T, Gillett N,

Kerr JT, Kharouba H, Currie DJ (2007) La contribución al cambio global macroecológicos

doi: doi: 10.2968 / 064002006 59

Wanner H, Beer J, Bütikofer J, Crowley TJ, Cubasch U, Flückiger J, Goosse H, Grosjean M,

S-ar putea să vă placă și