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Atentando el Patrimonio Cultural

Cuando hablamos de Patrimonio Cultural nos podemos referir a una gran

variedad de recursos tanto físicos como orales que existen en el Perú, pero para este

trabajo nos enfocaremos al Patrimonio físico en especial el relacionado al

arquitectónico.

El Estado y la Institución Nacional de Cultural (INC), son los que deberían velar

por la protección del patrimonio, ya sea físico u oral.

En la actualidad podemos ver que estas instituciones no cumplen correctamente

con su trabajo, ya que la destrucción del patrimonio sigue avanzando y las grandes

empresas con su poder económico dominan y van destruyendo todo a su paso, sin

importa lo mucho que se pueda dañar o perder una estructura, que no es nada para las

personas que no tienen conciencia con su identidad patrimonial.

E incluso hay un gran desorden y descuido con respecto a los requisitos de

construcción, por ejemplo a partir del año 2009 – aproximadamente – se han dado

nuevas normas en las que menciona que ya no es necesario contar con el CIRA, que es

el Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos, entonces si se va eliminando o

haciendo menos estricto los requisitos previos a una construcción en zonas

arqueológicas, cómo vamos a seguir confiando en estas instituciones que en vez de

cuidar nuestro patrimonio, se deja llevar por las influencias de grandes empresas,

obviamente estas omisiones siempre van en beneficio de a quienes conviene.

En este caso si es que fuera más beneficioso hacer un hotel de 5 estrellas en la

punta del Machu Picchu, se construirá ya que esto generaría más ingresos económicos

para los que construyen este hotel, este pensamiento en que el ‘dinero’ es lo que manda

y mueve masas se ve reflejado en la mayoría de las construcciones que se han permitido


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construir, no es una simple ocurrencia propia ya que con mencionar unos simples

ejemplos es obvio esta intuición.

Hubo un proyecto de ley en la que el Congreso sería el encargado de designar

qué es patrimonio y se le retiraría este cargo a la Institución Nacional de Cultural,

seguramente por no realizar su trabajo debidamente, o por retrasar proyectos por los

estudios correspondientes, pero sea lo que fuera son especialistas los encargados de este

trabajo y pasar este cargo a miembros del Congreso, que no son especialistas para este

cargo, sería la forma más rápida de perder nuestro patrimonio cultural por la corrupción.

Esto fue una vista general de cómo nuestro patrimonio se va perdiendo aun

estando en cuidado de las instituciones correspondientes.

Ahora, si bien hay empresas inmobiliarias que realizan proyectos atentando con

el patrimonio, y aun teniendo mágicamente los permisos para la realización de cada

proyecto; estos muchas veces están a cargo de arquitectos, o ingenieros que quieren

ocupar el lugar de ellos, aquí viene la pregunta ¿dónde está la conciencia de cada

arquitecto? ¿Dónde queda la ética profesional de cada uno?

El colegio de arquitectos cuenta con una ‘código de ética’ en la que se ve lo

referido a la labor del arquitecto para con la sociedad, aquí no solo hay que fijarse en

qué tanto cuidemos a los ciudadanos en la sociedad, sino tener en cuenta el medio en el

que realizamos nuestra labor profesional.

Un arquitecto debe respetar las leyes y ordenanzas no solo de lo que dicta el

Reglamento Nacional de Edificaciones, este respeto debe ser con todos los reglamentos

que estén a su disposición, por ejemplo trabajar en un Centro Histórico requerirá de

ciertas reglas, entonces el arquitecto debe seguirlas ya que estas no están por capricho
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de las autoridades, esto es para continuar con el diseño planteado en un Centro Histórico

y no atentar o dañar lo que se encuentre en esta.

El patrimonio forma parte de nuestra identidad como ciudadanos, y los

arquitectos debemos de ser más coherentes con esto, no simplemente construir por un

beneficio económico, esto parece ser el motivo principal por lo que se sigue realizando

y autorizando obras que atentan con el patrimonio.

En el año 2015 en Jirón Huallaga 731 existía una casona histórica que fue

demolida en su totalidad.

Autor: Miguel Pozo

Y aun habiendo demolido esa vivienda dentro del Centro Histórico de Lima, se

puede apreciar que las viviendas aledañas están en posible peligro de colapso ya que

escavan sin medidas protección a estas, y así se sigue corriendo el deterioro del

patrimonio, cuál es la actitud del arquitecto a cargo de esta ‘destrucción’.

En el año 2009 se dio en el Cusco la construcción de un hospital por parte del

gobierno, que atentaba con el entorno del Centro Histórico, pasaron por alto los
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reclamos de la población que se negó a la construcción de este proyecto que atentaba

con arquitectura del Templo Colonial Marcapata.

En el Cusco se tiene uno de los máximos representantes de esta destrucción, el

Hotel Sheraton que es de los que más daños ha causado no solo por romper con la

imagen del Centro Histórico, sino que por la realización de este proyecto la UNESCO

puede declarar al Cusco como Patrimonio Mundial en Peligro.

A qué arquitecto coherente se le ocurre diseñar una edificación de 7 niveles, en

un Centro Histórico el cual permitía un máximo de 2 niveles.

Fuente: La República

Basta con ver solo algunos casos para preguntarnos ¿qué sucede con los

arquitectos que realizan estas obras? Algunos son sancionados y se van desprestigiando.

¿La corrupción puede llegar a ser tan fuerte como para llevarlos a realizar estos

desastres? Por lo visto el factor económico llega a tal punto que los arquitectos se

vuelven inmunes al dolor de perder la identidad arquitectónica en determinadas zonas.

¿Dónde queda el compromiso para con nuestra sociedad? Simplemente el compromiso

quedó hasta donde la corrupción llegó.


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¿Habría una forma de solucionar esta cadena de destrucción? Para todo hay

solución, pero los daños quedan marcados, el patrimonio que hoy en día perdimos no se

podrá recuperar ni con toda la corrupción del mundo. Algunas posibles soluciones

serían por parte de las mismas autoridades que tengan más rigurosidad y cuidado

cuando se tramitan permisos de construcción.

Viendo todo esto no podría decir quien tiene más culpa en todo esto, si las

empresas por querer aumentar sus ingresos, o si culpar a los arquitectos por dejarse

manipular ante la corrupción, o culpar a las instituciones que se la pasan pensando en

cómo solucionar estos problemas y se dejan manipular con un simple ‘sencillo’.


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CONCLUSIONES

El que exista un código de ética para los arquitectos no soluciona el problema de

la destrucción del patrimonio cultural, ya que es según como lo aplique cada arquitecto,

no todos siempre trabajaran de la forma más adecuada y respetuosa con el medio, pero

deberían.

No hay una forma de erradicar con la corrupción y tampoco hacer que

arquitectos corruptos cambien de un día para otro; se tendría que concientizar pero eso

parte de cada uno.

El patrimonio perdido ya no se puede recuperar, pero podemos tomarlo como

guía para que lo futuros arquitectos vean cual es la realidad con respecto a ese

patrimonio que nos compete a todos, hacerles entender que no todo se arregla con

dinero.

La corrupción llega a tal punto de cegar a las personas y manipularlas según su

antojo, siempre buscando beneficiarse a costa de la conservación de nuestro patrimonio

cultural, la destruyen en vez de aprovecharla.


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REFERENTES BIBLIOGRÁFICOS

 FUNAP (s.f.). Recuperado el 25 de noviembre del 2017 del sitio web:

http://www.funap.org

 Pereira D. (2015). La reciente aprobación de este texto del ministerio de cultura

facilita la desaparición de nuestro Patrimonio Cultural. UTERO.PE. Recuperado

el 5 de diciembre del 2017 del sitio web: http://utero.pe/2015/02/18/la-reciente-

aprobacion-de-este-texto-del-ministerio-de-cultura-facilita-la-desaparicion-de-

nuestro-patrimonio-cultural/

 Anónimo (2009). Se inicia la Destrucción del Qhapaq Ñan bajo el Amparo del

Decreto Supremo Nº 009-2009-ED emitido el 19 de agosto del 2009: PARTE 1.

CULTURANDINA. Recuperado el 5 de diciembre del 2017 del sitio web:

http://blog.pucp.edu.pe/blog/culturandina/2009/09/

 Redacción LR (2017). Contraloría confirma que hotel Sheraton en Cusco se

construyó violando la ley. La República. Recuperado el 5 de diciembre del 2017

del sitio web: http://larepublica.pe/politica/1014844-contraloria-confirma-que-

hotel-sheraton-en-cusco-se-construyo-violando-la-ley

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