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1. El texto que vas a leer a continuación tiene errores ortográficos. A medida que vayas
leyendo realiza las actividades que a continuación se detallan:
a. Indentificar los errores y subrayarlos.
b. Decir qué tipo de error es. (de acentuación, de escritura, uso de mayúscula, etc)
c. Corregir el error reescribiendo la versión correcta del mismo en el espacio de la derecha.
Fábula de Esopo.
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3. Completá las siguientes definiciones con una sola palabra en cada espacio.
4. En el texto del punto 1, encontrar 3 (tres) ejemplos de palabras que sean agudas y graves.
AGUDAS
GRAVES
El Mastín español
El Mastín español se conoce también en su país de origen con los nombres de
“Mastín de Extremadura” o “Mastín de la Mancha” pero se trata de la misma raza. Como
la mayor parte de sus parientes cercanos, hubo un tiempo en que se le utilizó en la guerra
y, más adelante en las peleas de perros.
Hoy en día se le utiliza para la caza del jabalí y también guardar rebaños de ovejas o
de ganado vacuno.
Es un perro de gran talla, musculoso, robusto e imponente, pero sin que ello
parezca pesado y torpe en sus movimientos.
Son de varios colores: gris lobo, cervato, abigarrado o blanco con manchas negras,
leonado o amarillo.
Su peso suele ser de entre 50 y 60 kilos y alcanza una alzada a la cruz de entre 65 y
70 centímetros.
Me llamo Eva, que quiere decir vida, según un libro que mi madre consultó para
escoger mi nombre. Nací en el último cuarto de una casa sombría y crecí entre muebles
antiguos, libros en latín y momias humanas, pero eso no logró hacerme melancólica,
porque vine al mundo con un soplo de selva en la memoria.
Mi padre, un indio de ojos amarillos, provenía del lugar donde se juntan cien ríos,
olía a bosque y nunca miraba al cielo de frente, porque se había criado bajo la cúpula de
los árboles y la luz le parecía indecente.
Consuelo, mi madre, pasó la infancia en una región encantada, donde por siglos los
aventureros han buscado la ciudad de oro puro que vieron los conquistadores cuando se
asomaron a los abismos de su propia ambición. Quedó marcada por el paisaje y de algún
modo se las arregló para traspasarme esa huella.
Isabel Allende. “Eva Luna”