Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
TOMO V GEOGRAFIAAGRARIA
Volumen 2
Charles Hu ttel
Claude Zebrowski
Pierre Gondard
•
Publicaci6n realizada en el marco deI acuerdo de Cooperaci6n Cientifica entre el Instituto Paname-
ricano de Geografia e Historia -IPGH-, secci6n Nacional deI Ecuador, y el Institut de Recherche
pour le Développement -!RD (ex üRSTüM)-, con el auspicio deI Institut Français d'Études
Andines -IFEA-, el Instituto Geogrâfico Militar -IGM- y la Pontificia Universidad Cat6lica
deI Ecuador -PUCE-.
Comité: Editorial de la PUCE para la revisi6n cientifica y literaria de "Los paisajes agrarios deI
Ecuador":
Dr. Hernân Andrade, Rector
Lic. Emilio Cerezo, Decano de Ciencias Humanas 4.
IRD Institut de Recherche pour le Développement, 75480 Paris Cedex 10, Francia
IPGH Instituto Panamericano de Geografia e Historia, Calle Seniergues y General Pazmiiio,
Apartado 3898, Quito, Ecuador
IFEA Institut Français d'Études Andines, Contralmirante Montero J..41, Casilla 18-1217, Lima 18,
Pero
IGM Instituto Geogrâtico Militar, Calle Seniergues y General Pazmiiio,Apartado 3898, Quito,
Ecuador
PUCE Pontificia Universidad Cat6lica deI Ecuador, Avenida 12 de octubre y Carri6n, Apartado
17-01-2184, Quito, Ecuador
•
© 1999 Derechos de la primera edici6n : IFEA, IGM-IPGH, IRD YPUCE
Este libro corresponde al Tomo 119 de la serie "Travaux de l'Institut Français d'Études Andines".
(ISSN 0768-424X) Il
ISBN 9978-92-163-X
Las opiniones expresadas en este libre son de responsabilidad exclusiva de sus autores
GEOGRAFIA BASrCA DEL ECUADOR
TOMO V GEOGRAFIAAGRARIA
Volum en 2
: ~ ' a,
~ ~\6.~
~~~
Institut Français
d'Etud esAndines ~r'rt~", n.t •
.
Indice general
Indice general G
Presentaci6n K
Agradecimientos M
Introducci6n 67
l Bosques, arboles y recolecci6n 68
1 Explotaci6n forestal 68
2 Plantaciones forestales 72
3 Arboles aislados 76
4 Las cercas 76
5 Recolecci6n 77
II Pastos, ganaderia bovina y cria de otros animales 81
1 Las condiciones de la ganaderia 83
2 El ganado 89
3 La alimentaci6n deI ganado 91
4 La producci6n animal 99
5 Perspectivas 102
6 Otras crias para carne 103 1:
III Cultivos principales 105
1 Cultivos nativos y especies introducidas 105
2 Abaca 107
3 Algod6n 110
4 Arroz 114
5 Banano 120
6 Cacao 128
7 Café 133
8 Cana de azucar 139
9 Caucho 143
10 Cebada 146
I l Maiz 151
12 Palma africana 158
13 Papa 163
14 Soya 170
15 Té 174
16 Trigo 177
17 Yuca 183
IV Cultivos secundarios 186
1 Cultivos altoandinos 186
2 Hortalizas (principalmente de la zona fria) 189
3 Flores . 191
4 Frutales de la Sierra 199
5 Frutales de la zona calida 204
6 Otros cultivos secundarios 207
V Superficies de los cultivos principales 210
3 Pastizales 263
4 Cultivos de ciclo corto 265
5 Plantaciones perennes 269
6 Los sistemas deI piso câIido y sus dinâmicas 278
Anexos
Fuentes 1
indice de cuadros XIV
indice de figuras XVI
indice de autores XIX
•
Introduccion K
PRESENTACIÔN
El volumen V de la geografia basica deI Ecuador trata de geografia agraria. Su objetivo es dar
una vision de la distribucion de las actividades agricolas en el pais, mostrando las diferentes
'". relaciones que mantienen dichas actividades con el medio natural y con el mercado. Constituye la
descripcion deI sector agricola dentro deI panorama que la geografia basica se propone dar deI
pais. Pero es a la vez un complemento indispensable deI mapa de utilizacion actual de los suelos a
escala 1: 1000000.
Este mapa -distribuido con este volumen- resulta de la sintesis de los mapas a mayor escala,
elaborados dentro deI inventario de recursos naturales realizado por el Programa Nacional de
Regionalizacion Agraria -PRONAREG- y el "Institut de Recherche pour le Développement -
IRD- (mejor conocido bajo su precedente denominacion "Institut Français de Recherche Scienti-
fique pour le Développement en Coopération -ORSTOM-). El paso a una escala menor conduce
obligatoriamente a una pérdida de informacion, por la «generalizacion» que suaviza los contomos,
elimina unidades demasiado pequefias y agrupa unidades tematicamente cercanas, ignorando 10
que las diferencia, para no conservar sino las caracteristicas dominantes comunes.
Para captal' la diversidad y la riqueza de la agricultura ecuatoriana, para conocer mejor sus
productos y sus sistemas de producci6n, el mapa solo no bastaba; era indispensable una larga nota
explicativa. Para hacerlo de manera satisfactoria, ha sido necesario volver al campo, actualizar las
observaciones, consultaI' las estadisticas, preguntar a los sectores productivos, desde el agricultor
hasta los organismos corporativos u oficiales. También ha habido que tomaI' en cuenta el reciénte
desarroHo de cultivos no mencionados en el mapa, pero que presentan un nuevo interés econ6mico.
Las etapas Rucesivas de elaboraci6n deI documento han sido las siguientes:
·Cartografia a gran escala, de 1: 500000 1: 200000 segtin la regi6n, incluyendo primera un reco-
nocimiento samero deI terreno, luego la interpretaci6n de las fotografias aéreas 1, después la actua-
lizaci6n y la verificaci6n sobre el terreno y, finalmente, la restituci6n sobre un fondo cartografico.
Esta primera fase de trabajo se Hev6 a cabo de 1975 a 1985 en el marco de un inventario nacional
de recursos naturales realizado pOl' PRûNAREG-IRD (antes ûRSTûM).
·Sintesis de la informaci6n a escala 1 : 1000000, después de una rapida actualizaci6n en el campo
y de trabajos complementarios en la regi6n ar.:laz6nica (L6pez F.). El mapa fue hecho pOl' Gondard
P., Huttel C., L6pez F., WinckeH A. y Zebrowski C., con la coordinaci6n cientifica de Gondard P.
Fue impreso en 1990 pOl' el IGM.
• Antes de la elaboraci6n de este tomo de la Geografia Agraria, una ultima misi6n pluridisciplina-
ria de campo recogi6 las informaciones necesarias, en 1993. A la misma fecha se reunieron las
estadisticas oficiales publicadas para el ano 1991.
• La redacci6n de este volumen fue larga, con una evoluci6n desde la nota cartografica inicialmente
prevista hasta la obra presente. Las informaciones, que aqui se presentan, estan parcialmente
desactualizadas, debido al dinamismo de ciertos sectores de la agricultura ecuatoriana; sin
embargo, dan una imagen fiel de la situaci6n a principios de la década deI noventa. Nos ha pare-
cido interesante, en aIgunos casos, incluir los ultimos datos hasta 1997. En la redacci6n, hemos
tratado de dar mayor importancia, siempre que ha sido posible, a las ilustraciones, los mapas 2 y
los graficos, para asi facilitaI' la lectura de las informaciones. La confecci6n deI presente volumen,
iniciada pOl' Gondard P., ha estado a cargo de Huttel C. y Zebrowski C., con colaboraciones para
algunos temas particulares. Al final deI volumen hay una lista de los capitulos con sus autores.
Hemos ampliado el campo inicial de la obra, en una progresi6n que va desde las condiciones que
rigen la actividad agricola hasta una tentativa de descripci6n de los sistemas de producci6n,
pasanrl,) pOl' fichas de los cultivos.
La segunda parte describe los componentes de los paisajes, bosques, pastos y campos identifi-
cados pOl' las especies que crecen en eHos. Se insiste en los cultivos mas importantes.
La tercera parte presenta los paisajes y los sistemas de producci6n. Se basa en 10 observable,
los paisajes, para abordaI' los tipos de usa deI suelo, los sistemas de producci6n.
1 Fotografias a diferentes escalas, principalmente entre 1:40 000 y 1:80 000, tomadas entre 1956 y 1978.
2 En los mapas de este volumen, los limites deI territorio nacional inc1uyen las delimitaciones acordadas en
octubre 1998 entre Ecuador y Peru
Introducci6n M
AGRADECIMIENTOS
Los autores agradecen en primer lugar a los equipos, jefes de departamentos y directores deI
Programa Nacional de Regionalizaci6n Agraria -PRONAREG-, cuyos trabajos de inventario
cartogrâfico bâsico se han realizado dentro deI marco de acuerdos celebrados entre el Ministerio de
Agricultura y Ganaderfa -MAG- y el "Institut de Recherche pour le Développement" -IRD-
(antes ORSTOM).
Para conseguir informaciones complementarias a las que se pueden leer en los paisajes, hemos
tenido que solicitar la ayuda de numerosos organismos nacionales 0 regionales, generales 0 espe-
cializados, de derecho publico 0 privado, asf coma la de muchas empresas comerciales 0 agroindus-
triales. Les agradecemos el habernos facilitado sus datos estadfsticos y la visi6n general de los
sectores que cubren.
Las conversaciones con los agricultores constituyen un aporte de gran importancia para la
interpretacion de los paisajes, la conduccion de los cultivas y la comprensi6n de los sistemas de
producci6n. Estas entrevistas improvisadas, a menudo realizadas al borde de las parcelas, s610 han
sido posibles gracias a la amabilidad y paciencia de los campesinos. Agradecemos a todos, tanto al
humilde minifundista serrano 0 montubio coma al hacendado.
PARTE A
1 FACTORES CLIMATICOS
Sin considerar la disminuci6n, con la altitud, de los promedios anuales, las temperaturas son
practicamente constantes a todo 10 largo deI ano (la amplitud de las variaciones cotidianas es
superior a la de los promedios mensuales).
1 Zonas climâticas 1
Esmeraldas
/
/
/
/
/
<,
1
1
(
1
.;
1
Condiciones de la Agricultura l Condiciones climâticas 3
Pinta
41 Genovesa
Marchena
Santa
Cruz San
Crist6bal
Santa Fe
Puerto Ayora ~
Puerto
Baquerizo
Moreno
o 100 200 km
Zona Élrida (12 meses secos) LImite superior dei piso de baja altitud
limite interior dei piso de altitud intermedia
Zona muy seca (10-11 meses secos)
LImite superior dei piso de altitud intermedia
limite interior dei piso de altitud elevada
1 Zona seca (8-10 meses secos)
1
1-------1
! Zona muy humeda (1-4 meses secos)
Manglares
1~
Riobamba
Quito y Guayaquil
Capitales provinciales
•
Daule Otras ciudades
•
'-----. Carreteras principales
Arida 12 <300
no
Humeda 4-8 600-2500 800-1 500 600-1 200 600
identificadas
MuyhUmeda 1-4 1 800-6500 700-3000 600-2000 1000
Cuadro Al: Los pisos altitudinales y las zonas de humedad con sus precipitaciones anuales promedias
• •
Condiciones de la Agricultura 1 Factores climâticos 5
1 Heliofanfa y Nubosidad 1
. ~-~,~
,
,
,,
,
,
,
'.
.
"
,
,
,
,,
, ,,
,,
/
"
"
"
"
,
,,
-----J
----,.
.=.
•••
,
,
, ,, , Carreteras principales
o 100 200 km
.--~=--===------''''''====--_''!
.......... ,
• masde1800
hacen que los totales anuales no reflejen sino pisos térmicos (en el volumen de Geografia
de manera imperfecta su efecto biol6gico. El Fisica). El cuadro Al resume las caracteristicas
parâmetro que mejor corresponde a la distribu- de los pisos y de las zonas, e indica igualmente
ci6n de la vegetaci6n natural y de los cultivos la correspondencia entre la divisi6n en pisos de
es el numero de meses secos por aIÏo, es decir la «Geografia Fisica» y la utilizada en este
aquellos durante los cuales las lluvias no bas- volumen de la «Geografia Agraria».
tan para una adecuada alimentaci6n hidrica de
las plantas. Se estim6 dicho parametro para
todas las estaciones pluviométricas deI pais y, 3 Otros factores
luego, se 10 relacion6 con los cultivos 0 la vege-
taci6n natural vecina a cada estaci6n. Poste- Otros parametros climaticos pueden tener
riormente, se reunieron los datos de las esta- importancia en la distribuci6n de los cultivos.
ciones en diferentes clases, en funci6n de la 19ual numero de meses secos por aIÏo no tendra
utilizaci6n deI suelo (ver capitulo «Clima y el mismo efecto si las lluvias se reparten en
vegetaci6n» deI tomo de Geografia Fisica). una 0 dos estaciones lluviosas. Asi, el régimen
pluviométrico incidira también en los calenda-
El mapa de la figura Al representa la divi- rios agricolas de varios cultivos.
si6n deI pais en pisos térmicos y en zonas de
humedad. Para facilitar la localizaci6n, se han En la zona calida, muchos cultivos requieren
agregado las principales carreteras, las capita- un elevado numero de horas de insolaci6n. En
les provinciales y otras grandes ciudades. En el la regi6n costera, valores elevados de insolaci6n
resto de la obra, se daran, muy a menudo, se encuentran s610 en la franja litoral y los
croquis cartograficos con los mismos elementos valores disminuyen rapidamente tierra
de base (limites deI pais, red vial, ciudades y adentro, debido a las neblinas de estaci6n seca
limites climaticos). (garda) en los relieves costeros 0 a las nubes
casi permanentes existentes en las vertientes
Para dar cuenta de la distribuci6n de las andinas. El mal estado de las plantaciones de
formaciones vegetales naturales, se utilizaron 5 palma africana en la regi6n costera son conse-
mm/afio
4000
A
3000
Promedio
2000
1 000
0
1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990 •
mm/afio
2000 8 Promedio
1 000
0 x xx JO( x
1900 1910 1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990
Condiciones de la Agricultura 1 Condiciones climaticas 7
50 % 50 %
40 40
30 A 30
20 20
10 10
Numero de meses
0 --.-----, secos seguidos
0 2 4 6 8 10 12 0 2 4 6 8 10 12 porano
•
cuencia de una insuficiencia de insolacion (ver varian muy poco de un afio a otro, no sucede 10
«palma africana» en la parte B 11112). Las mismo con las lluvias en las que inciden las
cuencas interandinas y, en menor medida, la modalidades deI paso deI FIT y sobre todo los
llanura amazonica tienen valores fuertes de eventos excepcionales de El Nifio. La estacion
insolacion (mapa de la figura A2) climatica mas antigua de la regi6n costera,
Guayaquil, tiene registros pluviométricos desde
Los aportes de humedad de las neblinas y 1915 (figura A3A). Tomando coma base una
nubes (figura A2) tienen también un efecto pluviometria media deI orden de 1100 mm y la
positivo, al prolongar la estacion humeda mas distribucion promedio de las l1uvias, se
alla de la estacion lluviosa y al permitir la encontraron 7 a 8 meses secos por afio en esa
ampliacion de ciertos cultivos fuera de su zona estacion, pero estimando el ntimero de meses
climatica optima. La existencia de café arabica secos afio por afio, los valores varian desde 3
fuera de su zona optima de humedad se debe a hasta 10 (figura A4A).
la gartia. La importante nubosidad de los
piedemontes andinos reduce la insolaci6n y Los registros de la estacion climatol6gica
aumenta la humedad atmosférica, 10 que favo- mas antigua deI pais, Quito, se remontan a
rece parcialmente a los pastizales de esas 1891 (figura A3B). Si bien en ella las variacio-
regiones pero, debido a la proliferaci6n de los nes de las precipitaciones anuales son menos
epifitos, perturba la produccion de citricos en importantes (sobre todo porque los eventos de
las plantaciones de piedemonte (ver unidad - El Nifio tienen una incidencia mucho menor),
cartogrâfica T58). la gama deI ntimero de meses secos por afio
sigue teniendo la misma amplitud (figura A4B).
II FACTORES MORFOEDAFOL6GICOS
A los factores responsables de la evoluci6n de los suelos se suman las caracteristicas de los >.
materiales originales y de las pendientes. Es el conjunto de todos esos factores el que determinara
sus potencialidades agricolas.
•
1 Suelos mente fértiles en esa zona hiperhlimeda, donde
las fuertes precipitaciones tienden a empobre-
Los materiales originales fueron clasificados cer los suelos al lixiviar los elementos mine-
en aluviones, proyecciones volcanicas y otros raIes.
tipos de rocas. El mapa de la figura A5 muestra
un esbozo de la distribuci6n de los grandes 1.2 Suelos sobre materiales volcanicos
tipos de suelos deI pais, mientras que el mapa •
de la figura A6 esquematiza la distribuci6n de Los suelos que descansan sobre proyecciones
los principales factores que limitan la agri- volcanicas, cenizas y lapilli, cubren cerca de un
cultura. tercio de la superficie deI pais. Son ricos, blan-
dos y generalmente profundos y sus caracteris-
1.1 Suelos sobre aluviones ticas estan estrechamente vinculadas al clima
y a la edad de los materiales:
Los suelos que descansan sobre aluviones, -Cerca de los volcanes cuya actividad subac-
distintos a los deI medio f1uviomarino que tuaI se remonta maxima a 5 000-8 000 afios, la
abarcan playas, manglares inundados y sala- textura de los suelos es arenosa debido al
dos, partes situadas detras de los manglares aporte reciente y continuo de cenizas y lapilli
(localmente Ilamadas salitrales) transformadas que, por falta de tiempo, no pueden alterarse,
actualmente en piscinas camaroneras, son sobre todo en las zonas secas. Los contenidos
generalmente ricos y facilmente cultivables de materia organica asi coma la reserva de
gracias a su topografia. Pueden sin embargo agua, indispensables para un desarroIlo ade-
presentar algunas caracteristicas desfavorables cuado de las plantas, son bajos debido a la
tales coma textura arenosa 0 existencia de falta de elementos finos en el suelo.
piedras en la parte aguas arriba de las zonas -En las regiones mas hlimedas y alejadas de
de esparcimiento; pero es sobre todo el exceso los volcanes recientes, la alteraci6n de las
de agua y la consecuente aparici6n de suelos arenas es posible. Los suelos resultantes son
hidromorfos, frecuentes en las zonas hiperhli- limosos, pardos, con minerales arcillosos en
medas de la Amazonia 0 de Esmeraldas, 10 que las regiones con mas de 4 meses secos al ano,
hace dificil e incluso imposible el cultivo, en y productos amorfos (andosoles) en las zonas
particular en el casa de los suelos empapados con menos de 4 meses secos al ano. En la
en cuyo casa la napa freatica asciende hasta la Amazonia hiperhlimeda, tales andosoles se
superficie. toman muy desaturados y perhidratados, con
un contenido de agua de mas deI 200 %. En •
La textura arcillosa que caracteriza a los altura, a mas de 3800-4000 m.s.n.m., es decir
suelos de la baja Ilanura deI Guayas limita el en el paramo, aumentan los contenidos de
drenaje, favoreciendo las inundaciones en esta- materia organica, los andosoles son negros,
ci6n Iluviosa. humiferos, pero son las temperaturas, y no las
caracteristicas de los suelos, las que imposibi-
La existencia de materiales volcanicos finos litan los cultivos. Las cenizas volcanicas no
en los aluviones, fuente de nutrimentos (f6s- han cubierto los paramos situados al sur de
foro, potasio, calcio), torna a los suelos limosos Ona, pero aIli los suelos son aparentemente
andicos de la Ilanura de Lago Agrio relativa- muy similares, negros y sumamente humi-
Condic.iones de la Agricul ura II Factores morfoedafo16gicos 9
80 0 W
uelos 1
-0°
0 100 200 km
tl 90° W
0 Q
~\C)
0°
~;J0
( a
no 0 poco hldrOm<lr1rcoli
2c
coluvionados
Limosos. pardos
3bD
$J§!Qs..!'èrticos
De limo·arcrliosos
a arcillosos. pli>7
31 Pardos, arcillosos, mas 0
menas desaturados
Arcillosos, desaturados.
39 toxlcidad aluminlca
1 d[[I] Limosos, andicos 2d~ Umosos, pardos,
=:= perhidlalados
3e
De limo-arcJllosos
a arcillosos. pH<7
3h~ Rejuvenecidos, arcillosos, desa-
~ turados. de prolundldad variable
1 eO- Limo·arcillosos.
hidrom6rticos
26
lImosos, negros,
hl/miteras
~fersialiticos
, ::t • •
D 3d Aralllo.os Principales ciudades
11 L mo-arcillosos. salurados Andosol 5 coluvionados
de agua
21 IDII Lîmosos. erosionados
~ Carreteras principales
feros, y en el esbozo cartografico (figura A5), tran s\lcesivamente, a medida que aumentan
no han sido separados de los andosoles. las precipitaciones, suelos fersialiticos, arcillo-
• En las pendientes fuertes de las laderas exter- sos, saturados, relativamente ricos en nutri-
nas de la Sierra, la cobertura de cenizas ha mentos y, luego, los suelos ferraliticos y
sido remodelada en mayor 0 menor medida pseudo-ferraliticos, todos desaturados, pobres
por la erosion, y los andosoles coluvionados y y con un pH bajo a muy bajo que provoca una
erosionados ceden lugar, en ocasiones, a af1o- toxicidad aluminica para los cultivos. Los
ramientos rocosos. suelos ferraliticos rojos y amarillos se locali-
• En las Galapagos, los suelos, debido a la ari- zan en las bajas colinas deI norte de la pro-
dez deI clima, son esencialmente «minerales», vincia de Esmeraldas asi coma en las partes
excepta en los f1ancos humedos de los volcanes altas, humedas de la parte meridional de la ..
donde las proyecciones volcânicas han podido Sierra. Los suelos pardos ferraliticos son
alterarse dando nacimiento a andosoles, mien- caracteristicos de las mesas volcano-sedimen-
tras que las lavas, en tales condiciones, dan tarias disecadas de la Amazonia, mientras
lugar solo a suelos poco evolucionados 0 maxi- que los suelos ferraliticos y pseudo-ferraliticos
mo a algunos suelos arcillosos fersialiticos, cubren todas las colinas sedimentarias de la
poco profundos. parte oriental de esa regi6n y presentan una
toxicidad aluminica particularmente elevada.
1.3 Suelos sobre otros materiales Finalmente, los suelos ferraliticos rejuvene-
cidos son suelos erosionados, coluvionados,
Los suelos situados sobre otros materiales ubicados en las pendientes abruptas de la
(antiguas rocas metamorficas, eruptivas y sedi- parte meridional de la vertiente occidental de
mentarias) presentan igualmente caracteris- la Sierra asi coma en los relieves de fuertes
ticas que dependen deI clima, aunque también pendientes de la regi6n suroccidental de la
deI relieve y, en menor medida, de la natura- Amazonia. Alli los cultivos deben proscribirse
leza deI material original. dadas la pobreza de los suelos, la existencia de
• Los suelos calificados de «poco evolucionados» afloramientos 'rocosos asi coma las fuertes
por ser poco espesos, se encuentran en las pendientes.
zonas de fuerte pendiente donde la erosi6n
impide la formacion de suelos profundos. Es
sobre todo en las zonas secas de las cuencas 2 Pendientes
interandinas, de la zona costera y de las Gala-
pagos, donde las condiciones climaticas, conju- Fuera de la gran llanura costera situada
gadas con el limitado espesor deI suelo y los entre Santo Domingo y Balzar, al igual que las
af1oramientos rocosos, limitan drasticamente zonas aluviales, repartidas desigualmente
los cultivos. entre las tres zonas naturales deI pais que son
• Los suelos vérticos, de pH superior a 7, son la Amazonia, La Sierra y la Costa, todo el
caracteristicos de algunos fondos de cuencas relieve es pronunciado (pendientes compren-
sedimentarias interandinas pero, sobre todo, didas entre 25 y 70 por ciento) e incluso muy
de las zonas secas a aridas de la region cos- pronunciado (pendientes superiores al 70 por
tera, en especial sobre rocas sedimentarias ciento) y abrupto cuando se trata de las ver-
antiguas tales como arcillas y areniscas. Loca- tientes extemas de la cordillera andina, donde
lizados en colinas de pendientes fuertes a las pendientes son a menudo mayores al 100
medianas, su profundidad es tanto mayor por ciento.
cuanto menor es la pendiente. No presentan
mayores limitaciones salvo en el casa de En estas ultimas, hay serios riesgos de
aquellos situados en las regiones muy secas y derrumbes incluso bajo vegetacion natural,
sobre todo aridas (10-11 y 12 meses secos al debidos a deslizamientos de terrenos después
ano), donde la acumulaci6n de sales de calcio, de fuertes lluvias 0, afortunadamente de
carbonatos y sulfatos, determina una eleva- manera menos frecuente, durante cataclis~os
cion deI pH, perjudicial para los cultivos. tales coma el terremoto de 1986 que provoc6 el
• Los suelos pardos y vérticos de pH inferior a 7 derrumbe de miles de hectareas en los alrede-
se ubican en la parte humeda de la cordillera dores de El Reventador.
costera de fuertes pendientes, localizandose
los segundos sobre todo en los relieves menos Aunque tales derrumbes son muy escasos en
pronunciados. El unico obstaculo a su cultivo pendientes mas débiles, la erosi6n es frecuente
es el importante declive deI relieve. en cuanto el suelo queda descubierto antes de
• En las regiones aun mas humedas, se encuen- su cultivo. Asi, De Noni et al. (1990) mencionan
Condiciones de la Agricultura II Factores morfoedafo16gicos 11
80" W
Limitaciones
edafologicas
l '
/' -
1
1
1
/
o 100
, (
Galà-
o
pagos
, ..
muy importantes
Miles de Region
hectâreas costera
'. ~ ~
Totalidad
dei pais Region insular
Principales cuidades Carreteras principales Limite de los pisos (Galâpagos)
serranos
REGION AMAZONICA
Lomas Feraliticos y seudo- Nutrientes escasos 3g
feraliticos desaturados Toxicidad aluminica
Lomas con cobertura Andosoles perhidratados Nutrientes escasos 2d
de proyeccions volcanicas
Mesa disectada Pardos feraliticos Nutrientes escasos 3f
Toxicidad aluminica localizada
Lomas con pendientes Feraliticos rejuvenecidos Pendientes fuertes 3e-3h
fuertes Nutrientes escasos
Toxicidad aluminica
L1anura aluvial Aluviales andicos Nutrientes escasos 1d
Aluviones fluviatiles Hidromôrficos Exceso de agua 1e
Hidrom6r1icos organicos Agua permanente 11
REGION SERRANA
Zona septentrional con proyecciones volcanicas
Vertientes exteriores Andosoles erosionados y Suelos heterogéneos 21
coluvionados Pendientes muy fuertes
Vertientes y cuencas intra-andinas Pardos, limosos Pendientes fuertes 2b
Arenosos Materia organica y 2a
reserva de agua deficientes
Zona meridional sin proyecciones volcanicas
Vertientes exteriores Feraliticos Suelos heterogéneos 3h
orientales rejuvenecidos Nutrientes escasos
1
Toxicidad aluminica
Pendientes muy fuertes
Vertientes exteriores occidentales, cuencas y vertientes intra-andinas
Feraliticos Nutrientes escasos 3e
Toxicidad aluminica
Pendientes fuertes
Fersialiticos Pendientes fuertes 3d
Vérticos pH fuerte 3b
Poco evolucionados erosionados Suelos poco profundos 3a
Parames (altitud superior à los 3 800 m)
Negros, humîferos Temperatura baja 2e
REGION COSTERA
Lomas y mesas Feralîticos rojos y Nutrientes escasos 3e
diseetadas amarillos Toxicidad aluminica
Pendientes tuertes
Feraliticos rejuvenecidos Nutrientes escasos 3h
Toxicidad aluminica
Feraliticos y seudo- Nutrientes escasos 3g
feralîticos Toxicidad aluminica
Fersialiticos Pendientes fuertes 3d
Pardos, vérticos Pendientes fuertes 3c
Poco evolucionados Suelos poco profundos 3a
Lomas de pendientes débiles Vérticos pH fuerte 3b
L1anuras con cobertura de Andosoles 2c
proyecciones volcanicas
Su elos pa rdos 2b
L1anuras sin cobertura de
proyecciones volcanicas
Vérticos pH fuerte 3b
..
L1anura aluvial Aluviales arenosos y Iimosos Textura gruesa 1b 4-
REGION INSULAR
Volcanes de pendientes fuertes Poco evolucionados Suelos superficiales 3a
Andosoles y suelos feralîticos Suelos poco profundos 2c-3d
Cuadro A2: Los grandes tipos de suelos deI Ecuador y sus limitaciones para la agricultura
Condiciones de la Agricultura II Factores morfoedafol6gicos 13
que cerca deI 50 % de las tierras son afectadas • En la zona andina, a una altitud inferior a los
por la erosi6n. Ademas, el importante declive 3800 m.s.n.m., el principal factor limitante
de las vertientes limita la mecanizaci6n de los deI cultivo son las pendientes. A ellas se
cultivos de modo que, en numerosas zonas agri-· suman, en el sur de la Sierra, diversas limi-
colas deI pais, la siembra, el mantenimiento de taciones propiamente edaficas (pobreza de los
los cultivos y las cosechas deben realizarse suelos, toxicidad aluminica de los suelos ferra-
manualmente. liticos). En cambio, la parte septentrional de
la Sierra es mas rica debido a los aportes de
Aunque factor limitante importante para la cenizas volcânicas.
agricultura, el relieve, con la erosi6n de él • La zona costera, fuera de su parte septentrio-
derivada, representa un aspecta benéfico en los nal humeda y con limitaciones muy similares
. antiguos suelos desaturados, debido al continuo a las observadas en la Amazonia, es una
decapado de los horizontes empobrecidos y al regi6n potencialmente muy rica. Si bien las
consecuente afloramiento de las capas profun- fuertes pendientes de la cordillera costera
r das mas ricas. Asi, en la Amazonia, los suelos constituyen limitaciones ciertas para los culti-
pardos ferralfticos corresponden en realidad, a vos, la existencia, entre Quinindé y la frontera
una yuxtaposici6n de suelos profundos, desatu- peruana, de una llanura sumamente fértil
rados, en los relieves menos marcados, y de permite el desarrollo de una agricultura alta-
suelos poco profundos y relativamente ricos en mente rentable. Ésta justificaria las inversio-
las pendientes mas fuertes. nes por realizarse para el manejo deI aguaen
la baja llanura deI Guayas y el riego en las
La distribuci6n de los suelos en el Ecuador zonas secas de la peninsula de Santa Elena y
se presenta en la figura A5, mientras que en el deI sur de Machala.
cuadro A2 se recuerdan, para cada regi6n natu-
raI deI pais, las caracteristicas de los suelos y El mapa de las limitaciones edafol6gicas
de sus factores limitantes para la agricultura, (figura AG) resume perfectamente esta oposi-
al igual que el c6digo con el que estan represen- ci6n entre las grandes regiones naturales deI
tados en la leyenda deI mapa. Ecuador. La zona costera se revela coma la mas
favorecida aunque las partes que no presentan,
Al examinar dicho cuadro y la figura AG, se o apenas 10 hacen, limitaciones edafol6gicas no
puede deducir que: alcanzan el 50 % de su superficie.
• En la Amazonia, los suelos aluviales ândicos y
aquellos derivados de cenizas volcanicas son Por otro lado, el paralelismo existente entre
los unicos con factores limitantes poco el mapa de utilizaci6n deI suelo y el de las limi-
importantes. Los demas suelos, aluviales con taciones edaficas es sorprendente: las zonas
problemas de hidromorfia, ferralfticos con sus mas desfavorecidas aparecen cubiertas de bos-
deficiencias quimicas, presentan graves ques primarios mientras que las zonas mas
limitaciones para la agricultura y hacen de la ricas son las mas intensamente cultivadas
Amazonia un medio particularmente fragil. (coniparar los mapas de las figuras AG y C2).
14 Paisajes Agrarios deI Ecuador
IlnundaCiones 1
,
,
,
Zonas lolal-
mente inun-
dadas y con dafios
importantes
-
o
- 100
•
Suelos salados y diariamente inundados, manglares
~
Principales ciudades
Pantanos permamentes
Arida
12 >1000 0 154 156 48
Muyseca
10-12 850-1000 121 1 061 1098 281
Seca
8-10 500-850 4219 5660 7841 3738
Hûmeda
4-8 250-500 6680 6136 4531 8445
Muy hûmeda y
0-4 <250 6975 27276 5275 6747
hyperhûmeda
Cuadro A3: Superficies (km 2) de las unidades cartograficas segtin las zonas de humedad
* Valores de la zona baja y calida; las cifras de la zona serrana son mas elevadas .
en zonas con pocas limitaciones hîdricas. Estas El agua necesaria para el riego puede
actividades, a menudo de bajo rendimiento, uti- provenir de las aguas superficiales de zonas
lizan de la mejor manera las condiciones natu- mas humedas, u obtenerse gracias al almace-
raIes y no requieren el desarrollo de técnicas namiento local deI excedente de la estaci6n
costosas coma el riego. Para el ganado lechero, humeda (Poza Honda), 0 a ambiciosos proyectos
el riego permite establecer la producci6n de de transferencia deI recurso, de una cuenca
forrajes a un nivel constante independiente- hidrografica a otra (Daule-Peripa).
mente de la pluviosidad. Los cultivos perennes
constituyen un casa analogo y solamente las En la regi6n montanosa, las zonas secas
plantaciones industriales, coma el banano 0 la nunca estan muy alejadas - a vuelo de
cana de azucar, rentabilizan la creaci6n y el pajaro- de las partes mas altas que presentan
mantenimiento de una red de riego. un balance hîdrico excedentario. Las aguas que
fluyen de las alturas pueden captarse facil-
Los cultivos anuales son los mejor repre- mente. Mas aguas abajo, en los grandes valles
sentados en las zonas con limitaciones hîdricas. interandinos, los cursos de agua estan encajo-
Las dos soluciones aplicadas para cultivar tales nados en profundas quebradas siendo la toma
zonas son, por un lado, hacer coincidir el perîo- de agua mas difîcil. En la regi6n costera, los
do vegetativo con el cielo pluviométrico y, por gradientes son menos cortos y las zonas defi-
otro, compensar el déficit hîdrico mediante citarias en agua pueden estar muy alejadas de
riego. Este permite también practicar, en el las zonas excedentarias.
mismo ano, dos cultivos de cielo corto, y posibi-
lita asî asegurar y/a intensificar la producci6n En 1987, se estimaba que cerca de 420 000 ha
agrîcola. eran regadas, es decir la cuarta parte de las
• Limitaciones hidricas muy fuertes (zona arida y zona muy seca; 10- 12 meses secos por ana)
superficies cultivadas en esa fecha. Esta cifra, transcurre entre dos riegos no permite asegu-
dudosa en su origen, reaparece en todos los rar a las plantas una alimentaci6n hidrica
documentos relativos al riego sin detalles ni continua.
analisis critico: por ejemplo, no se sabe si se
trata de perimetros que disponen de una El modo de aplicaci6n de agua a la parcela
infraestructura 0 de perimetros efectivamente es diversificado. La mayoria de agricultores
regados. De ese gran total, todos convienen en practican el riego en raya y una baja propor-
atribuir al sector privado una superficie aproxi- ci6n utiliza ya sea una técnica mas eficaz
mada de 330000 ha, correspondiendo el.resto al (aspersi6n) 0 mas primitiva (inundaci6n).
sector publico.
Aunque se emprendi6 un censo general de
2.1 El sector privado las obras y las superficies, se dispone de datos
confiables s610 para la cuenca deI rio Mira (Le
Este sector maneja el 80 % de las superficies Goulven et al., 1992).
regadas deI pais. El Estado, a través deI
INERHI, entregaba una concesi6n de agua a En la regi6n costera, el riego privado es
una 0 varias personas naturales 0 a una minoritario y no comenz6 a implantarse sino en
empresa que se encarga de toda la infraestruc- el siglo XIX, cuando las grandes propiedades se
tura -desde la toma hasta las parcelas rega- orientaron hacia cultivos industriales (banano,
das- y el manejo deI volumen de agua atri-
cafta de azucar). El riego y su funcionamiento
buido. Las reglas de concesi6n estan definidas
se conocen poco y ello por varias razones:
por la Ley de Aguas de 1972, siendo las princi-
numeroso.s agricultores operan sin autorizaci6n
pales obligaciones respetar el caudal atribuido
y pagar la cuota correspondiente. y, por 10 tanto, no estân registrados; no existen
infraestructuras visibles, las cuales que pueden
Lo esencial deI riego privado se situa en la limitarse a una bomba que toma agua de un
regi6n andina y tiene ya una larga historia (Le cauce; casi sistematicamente, las propiedades
Goulven y Ruf, 1996). La realizaci6n de infra- estan cerradas mientras que, en la regi6n
estructuras comenz6 a inicios de la colonizaci6n montaftosa, son mas facilmente accesibles; no
espaftola y jamas se ha detenido desde entonces. existe una tradici6n de riego coma en la Sierra.
La mayor parte de la red actual se realiz6 entre
los siglos XVII y XIX. La situaci6n actual resulta 2.2 El sector publico
de la superposici6n de realizaciones y adecua-
ciones antiguas y recientes. Se llega incluso a la La intervenci6n deI sector publico en el riego
interferencia entre el sector publico y el privado, es reciente: en 1936, se estableci6 un c6digo
pues un mismo perimetro regado puede utilizar legal a fin de resolver los numerosos confiictos
aguas provenientes de los dos sectores. entre usuarios. Mas tarde, en 1944, se cre6 un
organismo central (Caja Nacional de Riego)
La red tradicional de los Andes es densa, encargado de desarrollar las infraestructuras.
con 10000 km de canales. Es rustica a todo El INERHI, fundado en 1966, se transform6 en
nivel: bocatomas en los cursos de agua, siste- el unico organismo competente en el campo deI
mas de regulaci6n y de repartici6n, acequias de riego y, a partir de 1972, asumi6 dos papeles
tierra en un 95 %. El transporte es sin embargo mayores:
eficaz y, gracias a su rusticidad y a las caracte- -manejo de los recursos (planificaci6n nacional,
risticas deI suelo, su mantenimiento puede ser atribuci6n y control de las concesiones deI
realizado facilmente por las comunidades de sector privado);
utilizadores. -operaci6n de sistemas de riego (creaci6n y
manejo deI sistema publico).
• La distribuci6n entre los agricultores se
efectua sobre la base de un «turno de agua» que En el casa de las realizaciones deI sector
establece, para cada utilizador, el caudal y la publico, todo esta a cargo deI Estado, desde las
frecuencia de agua disponible. Los turnos de obras de construcci6n de bocatomas, y a veces
agua son el resultado de costumbres heredadas de grandes reservorios, hasta la ultima red de
y de influencias politicas. Son dificilmente distribuci6n deI agua en las parcelas. Los orga-
cuestionados aunque rara vez respetados. nismos técnico-administrativos reciben de los
Habitualmente, las dosis son demasiado espa- usuarios un pago por el servicio.
ciadas 0 muy elevadas. Los aportes pueden ser
claramente superiores a la capacidad de reten- El sector publico, que no maneja directa-
ci6n de agua de los suelos, y el tiempo que mente sino el 20 % de las tierras regadas, esta
18 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Regi6n
80 0 W montanosa
o 100 Riego actual 1 San Vicente de Pusir
2 Montufar
3 Salinas
4 Tabacundo 1
5 CAME
6 Pisque
7 Tumbaco
8 MAG
9 Canal dei Norte
10 Pujili
11 Belisario-Ouevedo
12 Jiménez-Cevallos
13 Salcedo
14 Ambato
15 Patate
16 Garcia Moreno
17 Pachanlica
18 Chambo
19 Vinchoa
20 Yurac-Yacu
i 21 Cebadas
i 22 Cooperativa Shuya
1
•
1
23
24
Paute
Gualaceo
/ 25
26
Checa-La Dolorosa
Machangara
i
27 Cochapata
28 Tabl6n de Qna
29 Paquishapa
30 Chucchucchir
31 La Papaya
32 La Era
33 Vilcabamba
34 Ouinara
35 Ellngenio
Regi6n de
=="-'--J baja altitud
36 Ambuqui
37 Poza Honda
38 INIAP
39 Babahoyo
40 Chilintoma 1
41 Milagro
42 Banco de Arena
43 Azucar
,
( 44 Manuel J Calle
45 Pogua
46 Guabo
47 Pasaje-Machala
48 Talaguro·Trabladeras
49 Chacras-Huaquillas
50 Arenillas
51 El Tabl6n
52 Macara
Limites de las
zonas de humedad
Limite superior dei
pise calido
•__\ Carreteras
principales
f
l,.. Principales
~. ciudades
Figura A10: Perimetros actualmente regables - sector pliblico
Fuente: Whitaker & Alzamora, 1990
Condiciones de la Agricultura III Manejo deI agua 19
PROYECTOS EN
80° W -1 . . 1 CONSTRUCCION
o 100 Riego potenclal . . Region montafiosa
1
~ Region de
~ baja altitud
20 Jama
21 Bricefio
22 Poza Honda
(rehabilitacion)
23 Daule-Peripa 1
24 San Vicente
25 Santa Elena 1
26 Ines Maria
27 Ducas Rajaro
28 Jubones 1
29 Tahuin
30 Rio Playas
PROYECTOS EN
ESTUDIO
Region montafiosa
A Mira-El Angel
B Alor-EI Rosai
C Cordova-Pimampiro
D Perucho
E Tabacundo Il
F Cangahua
G Nayon Calderon
H Alurnis
1 Chalupas
J Tambayacu
K Chaupi Paloma
L Nagsiche
" M Mocha-Tisaleo
N Guano
o Licto
Region de
baja altitud
P Carrizal-Chone
o Catarama
R Daule-Peripa Il
S Pedro Carbo
T Santa Elena Il
U Banco de Arena
V Churute
W Jubones Il
X Puyango-Tumbes
',- y Zapotillo Bajo-Alto
Limites de las
() zonas de humedad
/ ''" Limite superior dei
<!./ piso cali do
_.,-\ Carreteras
principales
•
Condiciones de la Agricultura IV Panorama hist6rico 21
Aqui se presentan los grandes periodos de funcionamiento agrario homogéneo asi coma las
rupturas que marcan el final de un modo de explotaci6n deI medio, la recomposici6n de los paisajes
. y de la sociedad, al igual que la consecuente evoluci6n territorial a nivel nacional.
Este analisis cronol6gico se fundamenta en la noci6n de sistema agrario definido coma «un
modo de explotaci6n deI medio constituido hist6ricamente y durable, adaptado a las condiciones
bioclimaticas de un espacio dado, resultantes de la combinaci6n de los factores naturales, sociocul-
." turales, econ6micos y técnicos, y que responden a las condiciones y necesidades sociales deI
momento» (Mazoyer, 1995-96). Para cada una de las etapas deI desarrollo deI agro, resumidas en
la figura A12, se esboza una descripci6n de la organizaci6n, deI funcionamiento y de la renovaci6n
de los ecosistemas cultivados, asi coma deI sistema social productivo.
1 Los cazadores-recolectores (hace 10 000 flecha, raspadores, etc... Los materiales utili-
aiios) zados eran piedras duras existentes en ellugar
(obsidiana, andesita, basalto, riolita). La obsi-
1.1 La llegada deI hombre diana fue objeto de intercambios a grandes
distancias entre el Norte y el Sur deI pais
El poblamiento deI continente americano es (Asaro et al., 1981). Los yacimientos correspon-
tardio: se efectu6 durante las glaciaciones deI dientes han sido datados de hace 8000 a 10000
Pleistoceno, a partir de migraciones, a través aiios. Esta época corresponde a un calenta-
deI estrecho de Behring, de poblaciones deI miento deI clima, un retroceso de los glaciares
noreste asiatico. La hip6tesis de un acceso andinos y la declinaci6n de la megafauna deI
directo a Sudamérica por una navegaci6n Pleistoceno. La caza se dirigia a mamiferos
transpacifica no ha sido confirmada (Salazar, (conejos, ciervos, tapires), la recolecci6n de los
1988). Las modalidades y la velocidad deI productos vegetales era completada, en la
avance deI hombre en el continente no se han regi6n litoral, por la recolecci6n de productos
aclarado por completo pero, hoy en dia, se marinos (conchas).
reconoce que cazadores-recolectores estaban
presentes en Sudamérica a partir de los -11 000 El poblamiento de la regi6n amaz6nica es
(Wünsch y Piqué, 1995). mal conocido, debido a los pocos trabajos
arqueol6gicos realizados (esencialmente en el
Se admite que el poblamiento deI actual sitio de Jondachi). En las otras dos regiones, los
territorio deI Ecuador se efectu6 esencialmente sitios son mas numerosos y han sido mejor
por el callej6n interandino, habiendo podido estudiados -volcan Ila16 cerca de Quito en el
. producirse migraciones menores por la regi6n casa de la regi6n andina (Salazar, 1980), los
costera 0 por la Amazonia (Salazar, 1996). El yacimientos de la peninsula de Santa Elena en
reducido numero de estudios que tratan de los la regi6n costera-. La poblaci6n vivi a en
cazadores-recolectores en el Ecuador no da sino grupos semi-n6mados -familia ampliada- de
una imagen fragmentada e incierta de esas 30 a 100 individuos (Steward, 1955, citado por
sociedades. Desde ese punta de vista, la Ama- Salazar, 1988), las densidades eran bajas (0,1
zonia sigue siendo una tierra casi virgen (tra- habitante por km 2 seglin Dollfus, 1981). Las
bajos de P. Porras, 1980, 1987). . importantes diferencias de los ecosistemas
entre la zona montaiiosa y la zona costera se
1.2 El poblamiento deI periodo «arcaico» refiejaban ya en las técnicas y las culturas de
las poblaciones de ambas regiones.
En las tres regiones deI pais se han encon-
trado huellas de poblamiento humano antiguo: Este periodo termina hacia fines de -4 000
herramientas de piedra tallada, puntas de con la aparici6n de la piedra pulida, de la cera-
Figura A12: Resumen historico de la agricultura en Ecuador
1
~.l~~_+_-!-!_
1
~ __.._.''.0•.•..•.•..•.•.·•·..T.·.·._........
1
..................•........·······f· .. or
1
····r·····
1
Caza-recolecci6n
zonasbajas
sierra
Agricultura de roza y quema
1
...- - -..-,.""1"" 1..1..1 '11 """""".,
i "1"" "
"T" !
-····r······ zonasbajas
", sierra
i i
Ii. . 1
_ _........_ _...........
' ......
i "1 "" 1"""" "" "l······
l
Agricultura manual
l 11I1 Agricultura con tracci6n animal
l I
illllll
i - Mecanizaci6n
FASES NOTABLES
1
,
!
~
_ ..-
+-+_~ __ 1
.IIII
Ocupaci6n inca
Encomiendas
Haciendas
'ï:I
.....
Il)
rn
~.
CD
rn
1
~
1 1 Despegue de la regi6n Iitoral
1 ! 1
1 1 1 Il)
.. ..
Condiciones de la Agricultura IV Panorama hist6rico 23
mica y de la agricultura. La transici6n se oper6 costera, es tejido e intercambiado entre los dife-
mas temprano en la regi6n costera que en la rentes grupos.
montaftosa, coma 10 han demostrado las exca-
vaciones de los sitios de Valdivia. 2.2 La agricultura itinerante (de 2000 A.C. a
600 D.C. y hasta hoy en dia)
Ciertas plantas pueden haber sido selec- En las zonas calidas, el maiz es también
cionadas simultâneamente en mas de un centro importante, seguido por la yuca, el camote y el
(capuli, fréjol...), al igual que una li otra puede fréjol. Numel'osos cultivos conocidos sobre todo
haber sido domesticada fuera de ellos -coca, por los objetos de ceramica (Jambeli, Guangala,
jicama, naranjilla (piedemonte oriental colom- Bahia, Jama-Coaque, La Tolita) se encuentran
biano y ecuatoriano), pallar (Andes orientales), principalmente en la franja litoral, a 10 largo de
algod6n (costa deI Peru)-. Se estima que los los cursos inferiores de los rios y cerca de las
amerindios cultivaban alrededor de 150 plan- fuentes de agua en las partes mas secas.
tas diferentes (Salazar, 1988), de las cuales
muchas se encuentran en el Ecuador bajo la Varios autores resaltan la importancia de
forma de restos calcinados 0 representados en intercambios entre las regiones -sal, algod6n,
piezas de ceramica (Marcos, 1983). ajies provenientes de las tierras calidas (Obe-
rem, 1978 - Salomon, 1980 - Ram6n, 1990)-,
La alimentaci6n a base de carne provenia incluso la existencia de mercados (Hartmann,
aun en buena parte de la caza (en las excava- 1978 - Salomon, 1980).
ciones, se encuentran numerosas osamentas de
cérvidos), aunque también de la cria de cuyes y
llamas. 3 El sistema agrario de cultivo manual
(600 - fines deI siglo XVI)
Ademas de la adquisici6n de nuevas técnicas
(ceramica, piedra pulida), aparecen nuevas La progresiva perpetuaci6n de las parcelas
herramientas: cuchillo, maja, metate, recipien- de cultivo, el empleo de herramientas manua-
tes. Se construyen también viviendas con mate- les y la intensidad de los intercambios entre las
riales vegetales y los primeros pueblos albergan zonas de producci6n diversa, marcan esta etapa
mas alla del grupo centrado en la familia cronol6gica. El incremento demografico ha
ampliada. El algod6n, cultivado en la regi6n llevado localmente a densidades comparables a
24 Paisajes Agrarios deI Ecuador
las actuales. La sociedad se estructura en territorio es dividido en tierras deI Sol, tierras
seiiorios sin que se pueda hablar de verdaderos deI Inca y lotes individuales. Estos ultimos
reinos (Salazar, 1996; Ayala, 1997). La produc- sirven al sustento familiar mientras que las
ci6n de un excedente alimentario permite la demas tierras, trabajadas por toda la comu-
emergencia de nuevas clases sociales. Hasta el nidad, cubren las necesidades deI ejército y de
establecimiento de los espaiioles, la gama de las clases dirigentes. Los excedentes son alma-
plantas cultivadas se mantiene invariable. cenados en los graneros colectivos, redistri-
buidos a los necesitados de la comunidad 0
3.1 La organizaci6n preincaica (hasta finales transferidos a otras regiones.
deI siglo XV)
Los desplazamientos de poblaci6n, de tropas
Las herramientas son de piedra, de madera o de productos a largas distancias requieren la
ode cobre. En la regi6n montaiiosa, las necesi- creaci6n de una notable red de caminos con
dades de tierras agricolas llevaron a la aplica- tambos y aposentos, coma otras tantas etapas y
ci6n de nuevas técnicas: construcci6n de terra- puntos de control entre las ciudades; toda esa
zas, drenaje de las zonas pantanosas -came- infraestructura es mantenida con el trabajo
llones (Batchelor, 1980)- y construcci6n de obligatorio de todos.
redes de riego. En: la regi6n costera, se encon-
traron camellones en las zonas inundables y Las técnicas agricolas no recibieron practi-
albarradas en las zonas secas, pero ningun camente la influencia de la colonizaci6n inca.
indice de red de riego propiamente dicha. La La aculturaci6n solo empezaba (lengua que-
poblaci6n ocupa la costa y el interior de las chua para las solas élites, vestuario de las
tierras. Las huellas de ello son numerosas a 10 mujeres de la nobleza, influencia en el arte de
largo de los rios mayores (cultura Milagro- la ceramica, queros, etc.) cuando los espaiioles
Quevedo). irrumpieron en escena.
3.2 La ocupaci6n inca (hasta 1534) 3.3 El sistema colonial de encomienda (de la
conguista hasta inicio deI siglo XVIII)
Afect6 sobre todo a la Sierra, con un gra-
diente de intensidad y de duraci6n decreciente Los nuevos conquistadores aprovecharon la
desde el Sur, territorios' de los Paltas y los infraestructura y la organizaci6n incaicas de
Caiiaris (capital Tomebamba), hacia el Norte, control deI espacio y de la poblaci6n.
rebelde por mucho tiempo. El sur de la actual
Colombia fue sometido antes de la completa En cuanto termin6 la conquista, la corona
dominaci6n deI territorio Cara (Gondard y espaiiola deiego a los conquistadores el manejo
Lopez, 1983). de la poblaci6n indigena. Estos estaban encar-
gados de «proteger a los indios», de catequizar-
La conquista inca acarre6 perturbaciones los y de recibir tributo bajo la forma de produc-
demograficas, numerosas migraciones forzadas tos agricolas, de trabajo 0 de dinero (Ram6n,
de los mitimaes que venian deI actual Peru 0 1987 - Espinosa Soriano, 1988). Los colonizado-
eran deportados hacia el centro deI imperio, res no se apropian de la tierra, sino que utili-
huida de quienes temian la represi6n (migra- zan las estructuras sociales existentes. Si bien
ci6n hacia ûyacachi), exterminio de los grupos la mita espaiiola diferia de la mita incaica, el
hostiles (episodio de Yaguarcocha -lago de trabajo obligatorio de los 18 a los 50 aiios de
sangre-) que sella el final de la conquista edad aporta la fuerza laboral necesaria para la
inca. De ello result6 una disminuci6n de la economia colonial. El sistema de la encomienda
densidad de poblaci6n en el norie de la regi6n se aplic6 sobre todo a la regi6n montaiiosa. La
montaiiosa y una colonizaci6n agraria parcial regi6n litoral se convirti6 en una zona de paso,
deI piedemonte oriental de los Andes. Las con raras encomiendas encargadas de reco-
incursiones incas en la regi6n amaz6nica y la lectar algod6n, azucar y frutas tropicales desti-
region litoral no tuvieron futuro, con la notable nadas a la Sierra y a abastecer a los barcos.
excepcion de la isla Puna que servia de relevo
mercantil y de la peninsula de Santa Elena. La regi6n amaz6nica, rica en placeres auri-
feros en el piedemonte, fue el lugar de una
Aunque integradas al nuévo orden general intensa pero efimera explotaci6n minera. Ésta
deI imperio, las estructuras locales de base se sangr6 a la poblaci6n en el marco de la mita y
mantienen, al igual que los jefes que no se disminuy6 la fuerza de trabajo global de la Real
opusieron al ingreso de los nuevos amos. El Audiencia en detrimento de la agricultura. En
Condiciones de la Agricultura IV Panorama hist6rico 25
30 aftos, el numero de tributarios de las circuns- religiosas. Las comunidades pueden igualmente
cripciones de Cuenca y Zamora disminuy6 en vender sus tierras para poder pagar el tributo y
un 82 y 89 % respectivamente, y en 40 aftos, el mecanismos legales permiten avalar los despo-
de Quijos en un 90 %. La gran rebeli6n de los jos (Borchart De Moreno, 1981 y 1983; Ram6n,
jibaros, quienes destruyen Sevilla de Oro en 1987). Las primeras propiedades asi adquiridas
1599, acaba con la presencia espaftola efectiva seguian siendo de tamafto modesto -178 ha en
y pone término al espejismo amaz6nico deI la regi6n de Tabacundo (Cliche, 1995)-. Sin
siglo XVI (Deler, 1981). Las dificultades reales embargo, la concentraci6n de la propiedad en
de las implantaciones amaz6nicas, la baja deI pocas manos puede conducir rapidamente a las
rendimiento de los placeres y el descubrimiento 12 000 ha de la hacienda Guachala a finales deI
de minas mas rentables en Peru y Bolivia siglo XVIII (Bonifaz Andrade, 1995) 0 a las 111
(Potosi) y en Colombia (Popayan y Antioquia) haciendas pertenecientes a los jesuitas en el
orientaron la especializaci6n manufacturera de momento de su expulsi6n (Gonzalez Suarez
la Real Audiencia. citado por Mills, 1983).
~ Importante
~
Oleaginosas
Camarones
Flores
Peru y de Bolivia, las concesiones comerciales extiende entonces (ver parte A VI) amplifica a
establecidas por las reformas borbonicas a los su vez el desmonte de los bosques y la integra-
ingleses y franceses y el contrabando contri- cion de la region costera al espacio nacional
buyen a disminuir la demanda externa de «util». La poblacion de la region de Quevedo
tejidos locales (Saint-Geours, 1980). ' aumenta en un 140 % entre 1950 y 1962 (Deler,
1981).
El cacao toma entonces el relevo coma motor
economico principal. Asegura a la vez 10 esen- Los pequeiios productores son numerosos: el
cial de los ingresos monetarios y un cambio 45 % de las plantaciones tienen menos de 25 ha,
sustancial en la organizaci6n deI territorio. pero su produccion no es mas que un comple-
Hasta alli fundamentalmente andino, el pais mento de las entregas de las grandes propie-
adquiere otra base regional que no dejara de dades. Las explotaciones de mas de 100 ha
desarrollarse. Es la liberaci6n deI comercio de representan el 15 % de las propiedades yel
la «pepa de oro» -disminucion deI impuesto en 46 % de la superficie (Larrea et al, 1988).
Acapulco (1774) y reforma borb6nica (1789)-
que provoca el vasto movimiento de coloniza- Por muy famosos que fueran los ,demas
cion de las nuevas tierras y la explosi6n de las productos de exportaci6n, nunca ocuparon un
exportaciones (Gondard, 1989). Estas se cuadri- lugar tan importante coma el cacao 0 el banano.
plican entre 1765 y 1809 (Collin Delavaud, En el primer cuarto deI siglo XX, la tagua
1979). Asimismo, la independencia de Guaya- (marfil vegetal, producto de recolecci6n) repre-
quil en 1820 libera definitivamente al comercio senta el 10 % deI valor de las exportaciones, el
de la obligacion de transito por Lima-Callao 0 'café el 7 % (explotaciones familiares de Manabi
Espaiia. De 5 000 toneladas en 1855, los volu- y deI suroeste andino) y la cascarilla 0 quin-
menes exportados pasan a 20 000 toneladas en quina 1 %, frente al 72 % en el casa deI cacao
1900 y 47000 en 1914. El Ecuador es el primer (Deler, 1981). La paja toquilla, recogida en la
exportador de cacao y abastece a una cuarta region costera, es trenzada para confeccionar
parte deI mercado mundial. La caida sera seve- sombreros en Jipijapa (Manabi) y en toda la
ra con la disminuci6n de las compras durante provincia deI Azuay, donde esta artesania
la Primera Guerra Mundial, la extensi6n de las procura un ingreso complementario impor-
plantaciones en las colonias europeas y la tante.
consecuente sobreproduccion. En 1920 el precio
deI quintal baja de 26 a 12 d61ares, mientras
que el sucre se devalua de 2,1 a 4,8 por un 5 Ocaso de la gran hacienda e ÏIitegraci6n
d61ar. territorial (siglo XX)
La cafta de azucar que, en los valles calidos El primer volumen de Geografia Agraria
de los Andes, habia suplantado a la coca desde (1988) esta enteramente dedicado a mostrar las
el siglo XVIII y se ubicaba al lado deI algod6n, transformaciones recientes deI agro. Por 10
se extiende también a la Costa a inicios deI tanto, no se trata de retomar esos temas ni
siglo XX. Grandes ingenios azucareros poseen resumirlos. Se abordaran nuevamente solo en
las tierras y se ocupan tanto de la produccion la medida en que permitan avanzar en 10 que
coma de la transformacion. Las exportaciones es el prop6sito de este capitulo, una vision
nunca fueron muy importantes. conjunta de las modificaciones de los sistemas
agrarios y de la organizacion deI espacio a largo
Desde los aiios 1940, el banano toma el plazo.
relevo deI cacao para impulsar a la economia
(ver figura A13). La explosion es brutal. Se 5.1 De la hacienda tradicional a la explotacion
trata primeramente de un mercado de susti- agricola moderna
tuci6n para responder a la demanda de las
grandes compaiiias norteamericanas que El ciclo deI banano nos llevo ya bastante
sufren muchos sinsabores en Centroamérica. lejos en el siglo XX costero. Las transforma-
Se debe también responder a la expansion deI ciones en la regi6n montaiiosa son menos
comercio internacional, después de la Segunda espectaculares pero los cambios en curso son
Guerra Mundial. El consumo aumenta en un muy profundos. «Desde inicios deI siglo XX,
168 % en Europa, entre 1945 y 1949, mientras unos grandes propietarios comenzaron a
que se inician las compras japonesas. El precio invertir sus ingresos en la modernizaci6n:
deI racimo pasa de 4 a 18 d61ares (Collin Dela- desarrollo deI riego, plantaciones de eucaliptos,
vaud, 1979). El frente pionero bananero que se importaci6n de ganado y de semillas seleccio-
28 Paisajes Agrarios deI Ecuador
80 0 W
- - -" ,
~
Carreteras carrozables
todo el ana (1950)
,'>•...• '
,., .. ~....,. ..:.,
.. ~~ .. ~
~:~~~g,
LImite superior
dei pise calido
«'...•.,.
. ~
Principales ciudades
...• !
~:.!.".~r.·.·.·.:'
~~d~b'mœ
"~"':"'''N
Carreteras principales
(red actual)
..
.....-:':;O'W'f',·· ···-\,,::::,:··~.:.~:;;:::;L
.
El Triunfo·
\":\. " . . __ ,d- "'<;.
ri>' Azogues
o 100 200 km
vera mas adelante (parte A VI). La nueva En la Sierra, mientras que las plantaciones
frontera esta ahora, ya no al Oeste sino al Este. de piretro y de guantug fueron abandonadas, se
Es la integracion deI piedemonte amaz6nico debe evocar el éxito de la agroindustria lechera
«abandonado» desde el siglo XVI la que marca y de los nuevos cultivos como las fresas, los
este fin de siglo. esparragos y, sobre todo, las flores (parte B IV3).
La mano de obra es exc1usivamente asalariada,
5.3 Los nuevos productos a menudo periurbana. El capital invertido es
importante. Las técnicas de producci6n son
Las fichas de cultivo (ver parte BIll) permi- avanzadas: el desarrollo· de las plantas puede
tiran precisar la importancia de varios nuevos ser programado en funci6n de los picos de
productos. Sera posible remitirse al articulo de demanda, y las irÎ:rraestructuras de comunica-
M. Cuvi y R. Urriola (1988), «Oleaginosas, cerea- ci6n deben aliar la gran distancia y la rapidez de
les y agroindustria en la Costa ecuatoriana», en expedici6n. El puerto maritimo habia permitido
el volumen 1 de la Geografia Agraria. A titulo la exportaci6n deI cacao y deI banano pero la
de indicacion, citaremos solamente entonces la comercializaci6n de productos frescos requiere •
soya y la palma africana. una infraestructura aeropuertuaria adecuada.
Condiciones de la Agricultura V Poblaci6n 31
10 Millones de personas
o
1950 1962 1974 1982 1990
'.
·
,. ~ .. "l
. .:.:;.:,. ..
-.-,... ~ ... " ....'
0°
'.
... · "" ~:~- .,
y -..: - - .
. .:.
..
: ......
;_........... '
.. . ".... . :..-.. ..
.,~
.. , .
-:....
: .
.,'.,,
.. ·... ... ,
,' ... .. ':.
,
,
,
,
,
,
,
.. ""
:
.' ,
... '.
-. . : .....
'. ~
, -. " .
" '
,
.(
1/< 1 Pisos montaiiosos
.. ,'
:t ,- . Principaies ciudades
o 200 km
10--==-_=_..1:::::====-__....1'
100
90 0 W
o
0°
[)
34 Paisajes Agrarios deI Ecuador
SIERRA
Figura A17: Saldos migra-
torios intra e inter-regio-
/
80215
\ 38111
nales, 1943-1974
Fuente:Bernard,1982
403Cl
'= CO~(--- ~ 4691
~~RIENTG16910
.
-en la Amazonia, los grupos selvaticos no utili- Bernard muestra aun la importancia de las
zan la tierra coma agricultores. migraciones intrarregioniales con relaci6n a
las interregionales (figura A17). Estas ultimas
El contraste entre tierras sobrecargadas de corresponden a las migraciones de la Sierra
hombres y «tierras vacias» parecia extrava- hacia la Costa y la Amazonia asi coma de la
gante. La Reforma Agraria y la Colonizaci6n Costa hacia la Amazonia.
(ver parte A VI) apuntaban, entre otros obje- En 1974, el flujo migratorio sigue estando
tivos, a corregir estas desigualdades. La coloni- orientado de manera privilegiada de la Sierra
zaci6n dirigi6 y estimu16 en parte las migra., hacia la Costa. La migraci6n hacia la Amazo-
ciones rurales y la transferencia regional de la nia, desde la Sierra y la Costa, representa
poblaci6n rural hacia las Hamadas tierras cerca de la mitad de las salidas totales de la
baldias. Sierra. El movimiento hacia la Amazonia es
ocho veces mayor desde la Sierra que desde la
Costa.
4 Las migraciones rurales
-periodo 1974-1982: las tasas migratorias
Un breve vistazo a las migraciones rurales, 100 x (N-R)/N, calculadas por Le6n (1990),
por grandes regiones, permite captar la impor- comparando la diferencia entre poblaci6n
tancia de los flujos y su evoluci6n. nativa (N) y poblaci6n residente (R) con la
poblaci6n nativa, muestran un cambio radical
-periodo 1943-1974: el estudio de Bernard en los destinos (cuadro A6).
(1982) muestra que las migraciones no han - La colonizaci6n de la Amazonia adquiere
dejado de crecer (cuadro A5), alcanzando la cierta amplitud. Las 4 provincias orientales
tasa promedio total de un 22,2 %0 entre 1970 y alcanzan las mayores tasas de inmigraci6n,
1974. Sin embargo, las migraciones son sobre con maximos deI 90 y deI 86 %, cifras
todo interurbanas. Las tasas de la poblaci6n comparables a las deI crecimiento de la
rural migrante, aunque creciendo tan rapido poblaci6n rural deI pais en 40 anos. La
coma las de la poblaci6n urbana migrante, son atracci6n de la provincia de Galapagos
dos veces menores. Solamente a partir de resulta deI movimiento de colonizaci6n de
inicios de los anos 1970 se puede hablar de los anos 1973 a 1977 y deI desarroHo deI
éxodo rural en el Ecuador. turismo.
VI TENENCIA DE LA TIERRA
A falta de un censo agropecuario completo y reciente, los ultimos datos disponibles a nivel
nacional son los de Bernard (1982), los cuales que retoman las encuestas realizadas por
PRONAREG-ORSTOM en 1975. Mas de 20 aiios han pasado desde entonces. Es evidente que una
comparaci6n con las cifras deI pr6ximo censo seria sumamente interesante.
•
1 Tamaiio de las propiedades rurales A nivel nacional, las Unidades de Produc-
ci6n Agricola (UPA) de menos de 5 ha repre-
El tamaiio de la unidad de producci6n sigue sentan mas de dos tercios deI total de las
siendo un indicador esencial pues, de una explotaciones, pero no ocupan sino el 8 % de la
manera general, es directamente revelador de superficie, mientras que las de mas de 100 ha,
otras caracteristicas de la explotaci6n, coma la que no representan sino el 1,9 % deI total,
capacidad de inversi6n en términos tanto de ocupan el 42,8 % de la superficie total de las
financiamiento propio coma de acceso al explotaciones (cuadro A10 y figura A18).
crédito, 10 que a su vez influye directamente en
el manejo de la explotaci6n. Las encuestas de El minifundio es sobre todo caracteristico
PRONAREG-ORSTOM demostraron igual- de la Sierra puesto que aHi las UPA de menos
mente el vinculo existente entre el tamaiio de de 5 ha representan las tres cuartas partes deI
las unidades de producci6n y los grandes tipos total de las explotaciones, mientras que en la
de utilizaci6n deI suelo. Costa no son sinn un poco mas de la mitad y en
NUMEROS DE UPA
menos de 1 132231 34,1 39814 17,5 1665 6,9 173710 27,0
de 1 a 2 77716 54,1 34439 32,7 691 9,8 112846 44,8
de 2a5 89018 77,1 56212 57,5 1974 18,0 147204 67,8
de 5 a 10 41776 87,9 33692 72,3 2052 26,5 77520 80,0
de 10 a 20 20363 93,1 25527 83,5 3087 39,3 48977 87,7
de 20 a 50 15939 97,2 25186 94,6 8451 74,4 49576 95,5
de 50 a 100 5296 98,6 6422 97,5 5288 96,4 17006 98,1
mas de 100 5506 100,0 5762 100,0 872 100,0 12140 100,0
% 5
Sierra 4 Costa
3
2
% Il
Oriente 4
Total pars
•
3
< 1- 2- 5- 10- 20- 50- > 100 < 1- 2- 5- 10- 20- 50- > 100
2 5 10 20 50 100 ha 2 5 10 20 50 100 ha
Porcentaje dei Porcentaje de la
numero total de UPA • superficie total
el Oriente no alcanzan una quinta parte. La -la disminuci6n deI tamafio promedio de la
tasa particularmente baja de UPA de tamafio pequefia propiedad, de menos de 5 ha, que
reducido en esta ultima regi6n se explica por pasa de 1,7 a 1,5 ha.
una menor densidad, una ocupaci6n reciente y
la legalizaci6n por parte deI Instituto Ecuato- Estos resultados permiten entrever la
riano de Reforma Agraria y Colonizaci6n influencia deI aumento de la poblaci6n rural
(lERAC) de lotes de colonizaci6n con la norma (ver parte A V) Y los primeros efectos de la
te6rica de 50 ha. Colonizaci6n y de la Reforma Agraria. La inci-
dencia de esta ultima fue probablemente eficaz,
La proporci6n de las familias rurales sin mas por la presi6n que ejerci6 en las grandes
tierra, es decir que tienen menos de 0,1 ha, no explotaciones que por su intervenci6n directa.
es despreciable. Alcanza el 9,3 % en la Sierra y En efecto, dinamiz6 el mercado de la tierra en el
se eleva al 17,5 % en la Costa, donde nume- caso de las medianas y grandes explotaciones.
rosos obreros agricolas no poseen sino su casa a Fauroux (1988) reporta el siguiente caso en el
veces rodeada de un huerto (Bernard, 1982). sector de El Angel-La Libertad: «Racia 1960,
seis enormes haciendas totalizaban algo mas de
1.1 Evoluci6n deI tamafio de las propiedades 10000 ha de tierras cultivables, ademas de ex-
tensos pastizales de altura (paramos) de limites
La comparaci6n de los datos de los censos imprecisos. De esas seis haciendas, una desapa-
agricolas de 1954 y de 1974 dio lugar a nume- reci6 por completo y las otras cinco se transfor-
rosos trabajos, entre ellos los de Chiriboga maron en 18 haciendas «adaptadas» que tota-
(1988) y Fauroux (1988) que fueron publicados lizan 5346 ha en 1976».
en el primer tomo de la Geografia Agraria. De
alli retomaremos algunos aspectos tales como : El numero de las explotaciones de menor
-la disminuci6n de las superficies controladas tamaïio tiende a un constante aumento debido
por las grandes propiedades y su divisi6n, al fraccionamiento por herencia. Esta situaci6n
-un significativo desarrollo de la mediana pro- no deja de ser preocupante, y ademas se ampli-
piedad de 20 a 100 ha, fica por el crecimiento demografico. Los traba-
-el considerable incremento de las unidades de jos deI Instituto de Estrategias Agropecuarias
menos de 20 ha que aumentan en cerca de (lDEA) muestran la amplitud deI fen6meno en
130000 mientras la superficie que controlan se Salcedo. Desde el censo de 1974, «el cambio
incrementa en aproximadamente 200000 ha, mas notorio es el incremento en el numero de
Condiciones de la Agricultura VI Tenencia de la tierra 39
REGION SE RR ANA
menas de 1 48891 93,1 2384 4,5 1246 2,4 52521
de 1 a 2 80837 85,2 9584 10,1 4489 4,7 94910
de 2 a 5 175040 71,1 51900 21,1 19436 7,9 246376
de 5 a 10 151 669 56,0 77690 28,7 41343 15,3 270702
de 10 a 20 119890 44,7 83945 31,3 64503 24,0 268338
de 20 a 50 168340 35,7 158963 33,7 144241 30,6 471 544
de 50 a 100 93527 27,5 124746 36,7 121 401 35,7 339674
mas de 100 161 539 12,2 559571 42,3 601 109 45,5 1322219
•
TOTAL 999733 32,6 1068783 34,9 997768 32,5 3066284
REGION COSTERA
menas de 1 18959 94,9 519 2,6 491 2,5 19969
de 1 a 2 41433 92,8 1 315 3,0 1888 4,2 44636
de 2 a 5 130019 75,6 18432 10,7 23606 13,7 172057
de 5 a 10 153828 67,1 40172 17,5 35417 15,4 ·229417
de 10 a 20 173520 51,7 81925 24,4 80151 23,9 335596
de 20 a 50 293265 37,9 252486 32,6 228811 29,5 774562
de 50 a 100 136424 32,2 139487 32,9 147587 34,9 423498
mas de 100 348883 18,9 934316 50,6 562423 30,5 1 845622
TOTAL 1296331 33,7 1468652 38,2 1 080374 28,1 3845357
REGION ORIENTAL
menas de 1 422 88,1 16 3,3 41 8,6 479
de 1 a 2 500 65,2 110 14,3 157 20,5 767
de2 a 5 1844 30,3 2082 34,2 2169 35,6 6095
de 5 a 10 3313 25,0 5661 42,6 4307 32,4 13281
de 10 a 20 6297 15,4 19944 48,7 14712 35,9 40953
de 20 a 50 26532 10,2 113414 43,7 119404 46,0 259350
de 50 a 100 17176 5,5 117604 37,5 179178 57,1 313958
mas de 100 5027 4,5 45182 40,8 60523 54,7 110732
TOTAL 61 111 8,2 304013 40,8 380491 51,0 745615
80
o Vegetaci6n natural y
otras zonas sin uso
20
5000
1000
50
•
500
500 .
•
o 0 O-F'T-.--r..,....,...,......TTTT................,....,..,...,,...-,r--r;,,-+O
1965 1970 1975 1980 1985 1990 1965 1970 1975 1980 1985 1990
Superficies entregadas por ano Superficies cumuladas
(miles de hectareas) (miles de hectareas)
con 63631 km 2 legalizados, afect6 al 23 % deI gobierno deI general Rodriguez Lara que da
territorio nacional (todas las cifras citadas un nuevo impulso tanto a la Colonizaci6n, con
provienen de IERAC). el tema de las «fronteras vivas», como a la
Reforma Agraria.
Siendo el numero de beneficiarios similar,
119500 en el casa de la Reforma Agraria y Chiriboga (1988) ha Hamado la atenci6n en
115 000 en el de la Colonizaci6n, los promedios cuanto a la diferencia esencial entre el primer
de superficie por beneficiario son muy contras- periodo de legalizaci6n de tierras en el marco
tados, de 7,5 ha y 53 ha respectivamente. Estas de la Reforma Agraria y los siguientes. Aquel
cifras ocultan a su vez valores muy disimiles se caracteriza por «la abolici6n deI precarismo
seglin los periodos y las provincias. Tratandose y la entrega en propiedad de las tierras de
de la Reforma Agraria se pueden dar dos usufructo que significan el 61 % deI total de
ejemplos: en Imbabura 6 123 personas, en su las afectaciones. En el periodo posterior, las
mayoria ex-precaristas, recibieron 14500 ha negociaciones, reversiones y expropiaciones
(2,3 ha/persona) y en N apo 4 beneficiarios se representan el 68 % deI total, mientras que la
dividieron 170 ha (42,5 ha/persona). La misma abolici6n deI precarismo se reduce al 16 %». El
desproporci6n sucede en el casa de la Coloniza- analisis de este autor va solamente hasta
ci6n, siendo los extremos de 3,5 ha en Chimbo- 1985, pero después no pudo haber grandes
razo 0 Tungurahua y de 400 ha en Pastaza. La modificaciones ya que no existia precarismo.
Reforma Agraria y la Colonizaci6n tuvieron El ano 1974 marca entonces el inicio de una
una aplicaci6n disimétrica en las diferentes fase mas drastica de la Reforma Agraria y las
regiones deI pais y una marcada periodizaci6n. luchas campesinas aumentaron al mismo
tiempo que creci6 la resistencia de los terra-
2.1 Periodos tenientes. Dubly y Granda (1991) dan nume-
rosos ejemplos de violencia en todas las
Il
En ambos procesos, el primer periodo va regiones deI pais.
desde el inicio con la Junta Militar hasta 1973-
1974; el segundo corresponde a los dos siguien- A partir de 1981, la Reforma Agraria dismi-
tes gobiernos militares y a los primeros anos de nuye en intensidad, en términos tanto de
gobierno civil; el tercera empieza hacia 1981- superficie intervenida coma de numero de
1982 (fases A, B YC en la figura A20). beneficiarios, mientras que, en 1983, la Coloni-
zaci6n entra en su periodo mas activo. Desde
Al intenso comienzo con la Junta Militar le entonces, las cifras oficiales ocultan cierta
sigue un estancamiento relativo hasta el ambigüedad.
Condiciones de la Agricultura VI Tenencia de la tierra 43
Colonizacion y
Reforma Agraria
.,.,
1 .............. '" , , _ ' ... ,"" .. , ...
, "" 1
• "
, ,
..............
••
,. ,
, .
':
,
.
,
• ,
,
l''' - '-
,
,
.
,
,
,
~/ • • Principales ciudades
.
•
" , 'i{[[[17 Colonizaci6n
•
f .. · ... '"
,
,'- ...
, .. '
,
o 100 200 km
..
' -==--==-....1===---'
.......... '
---.........,--- 1 504255
o
345949
., 21023
En los datos de 1982, Hama la atencion que nal, la Reforma Agraria intervino prioritaria-
un solo beneficiario de la provincia de Chimbo- mente en el triangulo Sierra Norte - Guayaquil
razo reciba 1 546 ha. Se trata en realidad de - Sierra Sur, el nucleo historico deI pais, aHi
una adjudicaci6n colectiva, antecedente de una donde se asent6 el sistema de hacienda.
pnictica que se ampliara en los aiios poste-
riores, al legalizarse tierras de grupos nativos La Colonizaci6n, en cambio, ha significado
en la Amazonia y Esmeraldas. Se formaliza asi la expansion de la frontera interna. La c1asifi-
el derecho legal de los pueblos indigenas sobre caci6n de las provincias segun la superficie
su tierra, reconociéndoles la propiedad de la acumulada 10 refleja claramente. De mayor a
misma. Por ejemplo, de las 978725 ha legali- menor legalizaci6n, las provincias se ordenan
zadas en 1990, 630869 10 fueron en la provincia de la siguiente manera: Pastaza, Napo/Sucum-
de Pastaza, y de ellas 612560 corresponden al bios, Morona Santiago, Pichincha, Esmeraldas,
territorio Huaorani (Gondard y Mazurek, Manabi, Zamora Chinchipe, etc.
1997).
La Colonizacion abarca principalmente las
Pese a este reconocimiento de grandes super- zonas extensas y menos densamente pobladas
ficies de tierras a las comunidades nativas, que deI Oriente y deI cuadrilatero noroccidental
atane local mente a pocos individuos, a nivel costero, limitado al sur par la linea Chone-
nacional el numero de beneficiarios de la Coloni- Quevedo, en el mismo lugar donde se detuvo el
zaci6n se incrementa considerablemente a partir boom bananero de los aiios 1950.
de 1983. Se duplica con relaci6n a la fase
anterior de aplicaci6n, pasando de 3000 a 6000 Por su anterioridad y por el numero total de
beneficiarios por ano, y se triplica en compara- beneficiarios, Pichincha es la primera provincia
ci6n con la primera fase. receptora de colonizaci6n organizada. Fue
inc1uso la primera zona de acci6n deI Instituto
En el campo de la Reforma Agraria, se regis- de Colonizaci6n Agricola (INCA) en 1957, entre
tra un promedio de 3300 beneficiarios/ano Quevedo y 10 que seria Santo Domingo de los
hasta 1974, de 7400/ano de 1975 a 1980 y de Colorados, incluso antes de que existiera la Ley
3100/ano a partir de 1981. En este casa se pro- de Reforma Agraria y Colonizaci6n (Trujillo,
dujo entonces una desaceleraci6n deI proceso. 1988).
El trabajo como factor de produccion puede ser proporcionado por la mana de obra familiar 0
contratado como mana de obra asalariada. Se la contratarâ si se requiere fuerza de trabajo
adicional y si se la puede remunerar. Se restringe entonces a las explotaciones que presentan al
menos una de las siguientes caracteristicas:
- grandes superficies explotadas,
- importantes trabajos estacionales,
- rendimiento econ6mico suficiente,
- empleo de tecnologia.
En la parte sobre la tenencia de la tierra, se observa que la mayor parte de las explotaciones
son de tamaiio pequeiio y que solamente el 20 % de ellas tienen una superficie mayor a 10 ha. S610
una proporci6n muy reducida de propiedades puede satisfacer la condici6n de tamaiio; sin
embargo, dicha proporci6n se aumenta tomando en cuenta los criterios de rendimiento econ6mico,
de estacionalidad de las taréas y de necesidad de profesionales especializados.
Los modos arcaicos de relaciones laborales (ver parte A IV) tienden a disminuir considerable-
mente bajo las presiones conjugadas de la Reforma Agraria y de los sindicatos. El modo de
contrataci6n de la mana de obra varia segtin el volumen de la demanda. Las propiedades que·
necesitan pocos empleados los contratan directamente, mientras que las grandes explotaciones se
dirigen a un intermediario 0 contratista para disponer de mana de obra no 0 poco calificada. Este
método permite al propjetario disponer de una mayor flexibiiidad: masa laboral siempre adecuada
al trabajo pendiente, leyes laborales menos rigidas y menores problemas sindicales. Al final de
esta parte, el cuadro A13 resume los perfiles de la mana de obra agricola en los principales tipos de
explotaciones deI pais.
1 Las explotaciones con Mano de obra de trabajo de los padres se agrega la de los hijos
familiar maYores. En los Andes existe ulla marcada espe-
cializaci6n de género que, por ejemplo, reserva
Son todas aquellas que no tienen ninguna tradicionalmente el arado al hombre y el cui-
de las caracteristicas' mencionadas anterior- dado deI ganado menor a las mujeres.
mente. Se las puede describir como pequeiias
explotaciones con pocas ganancias econ6micas. Las tareas excepcionales y muy pesadas
Se encuentran tanto en zonas donde la agricul- pueden realizarse con la ayuda de los vecinos
tura no se ha establecido jtotalmente (zonas (prestamano). Cabe también seiialar que una
pioneras), como en practicamente todas las pequeiia parte de la fuerza de trabajo familiar
pequeiias explotaciones tradicionales deI pais. pued~ ser movilizada para obras de interés
comunitario (mingas), tales como manteni-
Habitualmente, el nivel técnico es bajo. Se miento de acequias y caminos.
pueden citar dos excepciones:
-los cultivos de hortalizas de los' valles secos En esas pequeiias explotaciones no hay
cerca de Portoviejo, exclusion entre las funciones de asalariado y de
-los vergeles tradicionales de los fondos mas propietario: en periodos de poco trabajo, un
secos de los valles andinos (aguacate, tomate propietario puede ser contratado temporal-
de ârboD. mente, y en otro momento deI cielo agricola,
puede a su vez contratar brazos adicionales por
Las familias de los productores de estas pro- periodos cortos (caso de los pequeiios produc-
piedades son generalmente amplias y a la fuerza tores de café de la regi6n costera).
46 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Explotaciones pequei'ias
Zonas pioneras
Mano de obra esencialmente familiar
Ganaderia
Posibilidad de intercambio entre vecinos
Minifundio tradicional
Minifundio empresarial Mano de obra familiar y temporal
Explotaciones grandes
Mano de obra poco importante, poco calificada
Ganaderias de carne y permamente
Cultivos de renta en Mano de obra medianamente importante, poco calificada,
la zona calida a veces complementos de mana de obra temporal
Cuando las condiciones 10 permiten, la ten- mente superior solamente a los conductores de
dencia es de mecanizar, coma se nota en los maquinas 0 a los jefes de cuadrilla, el que
cultivos de cielo corto de la llanura baja deI alcanzan empiricamente. En efecto, entre el
Guayas (cultivos de maiz, soya, arroz). Para los trabajador manual y el profesional altamente
pequenos productores, las limitaciones de especializado, hace falta técnicos medios
tamaiio y de capital puede ser solventadas por disponibles para trabajar en el campo.
su asociaci6n en cooperativas 0 grupos campe-
sinos. Incluso, la maquinaria pueden ser alqui- La introducci6n de nuevos cultivos de renta
lada a empresas prestatarias de servicios. En y de tecnologia demanda una competencia
una ocasi6n se mencion6 una negativa a la particular. Los veterinarios fueron los primeros
mecanizaci6n: la cosecha de la cana de azucar especialistas solicitados en las explotaciones
podria ser mecanizada pero la empresa no opt6 ganaderas (producci6n de carne 0 de leche).
por ello, pues prefiere continuar empleando Producciones de implantaci6n 0 extensi6n
mana de obra estaciona1. reciente, coma las de manzanas, las flores 0 las
fresas en cutivo hidrop6nico, demandan una
El primer esfuerzo de mecanizaci6n se con- nueva mana de obra compuesta de grau canti-
centra en los medios de transporte de la cose- dad de obreros cuidadosos y de algunos técnicos
cha. Por falta de medio de transporte, los pro- altamente calificados.
ductores pequenos se ven obligados a recurrir a
intermediarios que pueden aprovecharse de un La asistencia técnica esta disponible en los
monopolio de hecho. Las empresas agroindus- servicios descentralizados deI MAG (delega-
triales implantaron, en ciertos casos, soluciones ciones regionales, agencias de servicios
adaptadas para la mobilizaci6n interna deI agropecuarios) que son el unico recurso para
• producto: cables para el transporte de los raci- las explotaciones pequenas 0 poco rentables .
mos de banano hacia la planta de tratamiento y Unicamente las explotaciones mas eficientes
acondicionamiento; ferrocarriles de via estre- pueden contar con los servicios permanentes de
cha para el transporte de la cana de azucar a la personal técnico. Las de situaci6n intermedia
refineria. recurren a consultas mas 0 menos peri6dicas de
expertos deI sector privado. En ocasiones,
empresas comerciales que operan en el sector
6 Calificaci6n de la mano de obra agricola ofrecen sus consejos.
debajo deI mInImo. Los contratos de tales tiempo 0 a destajo, con derecho a comida u
obreros son precarios y muchas veces no otras ventajas 0 no. Los obreros especializados
incluyen una cobertura social. y los técnicos calificados son mucho mejor
tratados, y los productores de flores no vacilan
El salario Msico Iegal sufre muchas modu- en poner a disposici6n de sus empleados servi-
laciones segûn el tipo de contrato: empleo de cios tales coma transporte y seguimiento
media jornada 0 de jornada completa, pago por médico.
..
Condiciones de la Agricultura VIII Acceso al crédito 49
El crédito es uno de los factores de producci6n de mayor importancia. Se menciona con frecuen-
cia en este trabajo, asi coma en cualquier dialogo con los productores. En si el crédito no decide de
la 10calizaci6n potencial de los cultivos, pero si incide en su 10calizaci6n efectiva, operando una
selecci6n ente los espacios potenciales en funci6n de otros criterios que son principalmente relacio-
nados a la discriminaci6n entre los actores, tal coma ocurri6 con la producci6n de camarones en la
Costa y mas recientemente de flores' en la Sierra centraL
Desde los aiios 60 hasta mediados de los 80, el crédito agropecuario estuvo al servicio de las
politicas intervencionistas estatales. En este modelo de desarrollo bajo la conducci6n deI Estado, el
crédito formaI constituye una herramienta privilegiada de apoyo a la agricultura, con el prop6sito
de incrementar la producci6n nacional, sustituir asi las importaciones yapoyar al sector campe-
sino. La politica de Reforma Agraria fue acompanada deI apoyo a instituciones financieras especia-
lizadas, a fin de dirigir las inversiones necesarias para fomentar la producci6n agropecuaria y rea-
lizar la capitalizaci6n deI desarrollo rural: financiamiento de infraestructuras de comunicaci6n -
en particular en las zonas de colonizaci6n-, de riego (representa ahora cerca deI cuarto de la
deuda naciona1), de salud, educaci6n, electrificaci6n, control deI mercado externo e interno de pro-
ductos basicos y su distribuci6n a través de una instituci6n estatal (Empresa Nacional de Comer-
cializaci6n -ENAC-), creaci6n de una red de silos, etc.
Con las politicas neoliberales de ajuste estructural y el repliegue deI papel deI Estado, el crédito
no es sino un elemento mas deI libre mercado.
modus operandi y sus politicas, las cuales que L6gicamente, el BNF reservaba la mayor
pueden haber cambiado en las ultimas décadas, parte de su actividad crediticia al financia-
sobre todo en el sector publico. miento de la producci6n deI sector agropecua-
rio, pero este rubro baj6 de un 73 % al inicio deI
2.1. Sector estatal decenio de los 90, a un 36 % actualmente
(Figura A22).
El sector estatal estaba conformado por un
organismo poseedor de fondos, el Banco Cen- En 1993, los créditos destinados a la agri-
tral deI Ecuador -BCE- y de dos organismos cultura por el BNF se repartian de la manera
principales gestores de préstamos, el Banco siguiente:
Nacional de Fomento y la Corporaci6n Finan- • 36 % para pequeiios agricultores (menos de
ciera Nacional a los que se uni6, por un tiempo 10 ha),
limitado y con un objetivo especifico, el Fondo • 40 % para medianos (de 10 a 50 ha),
de Desarrollo deI sector Rural Marginal. Los • 24 % para grandes (mas de 50 ha).
fondos provenian deI presupuesto general de la
Naci6n, de préstamos conseguidos en el extran- La estructura administrativa deI BNF signi- •
jero, de dep6sitos bancarios, 0 de otros organis- fica para el candidato prestatario la obligaci6n
mos financieros ecuatorianos y de la venta de de entregar un abultado expediente que teuna
Bonos en el mercado nacional. Los organismos documentos a veces dificiles de conseguir, y no
gestores otorgaban lineas de crédito seglin las es raro que el crédito no se desbloquee a tiem-
categorias definidas por el BCE: agricultura y po, comprometiendo asi la producci6n de la
ganaderia, industria y artesania, proyectos misma manera que la falta de crédito. La nego-
integrados de "Desarrollo Rural Integral", ciaci6n con el Estado para la condonaci6n de
incentivo a las exportaciones. las deudas de los prestatarios explica su pro-
gresiva descapitalizaci6n y su elevada tasa de
2.1.a El Banco Nacional de Fomento ·-BNF- morosidad.
30
Figura A22: Porcentajes de los fondos
destinados a la agricultura den-
tro de cada organismo, 1997 •
Fuente: Estadisticas deI Banco Cen-
tral deI Ecuador
Ban. Corn.
priv. Mut. Co~. fin. BNF BE BEV CFN IECE
Cuadro A14: Crédito destinado a la agricultura, caza, silvicultura y pesca seglin organismos
(millones de sucres), 1997
Fuente: Estadfsticas deI Banco Central deI Ecuador
• vidades deI sector industrial y el sector de bie- sectorial de 200 millones de sucres, y al "boom"
nes de exportacion no tradicionales. Para ope- de nuevas producciones para la exportacion,
rar, capta recursos externos de créditos multi- tales coma los camarones y las flores, sectores
laterales, asi coma recursos internos mediante donde el tiempo de retomo de la inversion es
mecanismos de emision monetaria controlada muy corto, a diferencia de los productos tradi-
por el Banco Central, pero no capta ahorros cionales y productos de consumo nacional.
privados en el pais: es una entidad de "segundo
nivel" que otorga créditos obtenidos para otros La distribucion deI crédito muestra un alto
organismos. La tas a de interés es de nivel grado de concentracion en cuanto a numero de
comercial y el monto prestado en cada opera- beneficiarios y localizacion regional: el 15 % de
cion es muy alto. De esta forma, se intenta evi- las operaciones suma el 86 % deI crédito otor-
tar un manejo politico deI crédito. gado; en efecto, la CNF se ha especializado en
préstamos de mas de 50 millones de sucres,
Al inicio de los aiios 90, la proporcion de los destinados a la inversion a largo plazo. Los
créditos canalizados por la CFN hacia el sector clientes se concentran en las dos provincias
agropecuario se ha incrementado considerable- mas urbanizadas, -Guayas y Pichincha-,
mente, pasando de 8,3 % en 1991 a 21,8 % en pero esta alta concentracion refleja también el
1993 y a 27,4 % en 1997 (figura A22); el sector tipo de prestatarios.
agropecuario es el primer sector de actividad,
seguido por el sector seguros (20,3 %) Y deI sec- Debido a que la CFN exige garantias banca-
tor consumo (13,2 %). Esta fuerte alza se debe a rias a los bancos que prestan dinero, los clien-
nuevos recursos, coma la linea de crédito multi- tes seleccionados son los que presentan alta
Bancos privados
• ~ Cooperativas
ffiIIIIilll Compafiias financieras
•
.. I:':':-::':::} Banco Nacional de Fomento
~ Corporacion Financiera Nacional
Esta integrado por bancos, compaiiias finan- La participaci6n deI millar de cooperativas
cieras y cooperativas de crédito y mutualistas de crédito en la agricultura esta limitada por
que las fuentes deI Banco Central no elasifican su autofinanciamiento, unicamente a partir de
entre los bancos privados. Los objetivos de cada los aportes de sus miembros, y también por su
uno difieren notablemente. orientaci6n preferencial hacia el comercio, la •
pequeiia industria y la construcci6n. Su partici-
2.2.a Los bancos privados paci6n financiera sigue siendo muy reducida •
(cuadro A14).
Dada la disminuci6n de la actividad deI sec-
tor publico, los bancos privados se convierten Sin embargo, para el sector rural pobre las
casi en la unica fuente de financiaci6n de las cooperativas constituyen una altemativa a las
actividades agricolas; representan el 87 % de deficiencias deI sistema financiero, gracias a su
los créditos otorgados en 1997 (cuadro A14 y experiencia en materia de gesti6n deI crédito:
figura A23). destino, garantia, plazo, etc. La demuestra su
Condiciones de la Agricultura VIII Acceso al crédito 53
grado de solvencia, muy superior al de los ban- ci6n, a diferencia de las demas instituciones deI
cos. La viabilidad de las CAC se debe a sus sistema financiero formaI, orientadas sobre
fines sociales orientadas a favorecer el ahorro, todo hacia el sector terciario.
que les permiten vincular las dos funciones, el
ahorro y los dep6sitos, coma recursos de corto
plazo, y el crédito. Pero padecen de falta de En conclusi6n, cabe recalcar la importancia
recursos de mediano y largo plazo y de las deI crédito formaI privado para el sector agro-
grandes diferencias entre tasa pasiva y tasa pecuario, cada vez mas involucrado en la eco-
activa. nomia de mercado, y a la vez los grandes vacios
deI sector estatal para dar acceso al crédito a
El principio de funcionamiento de las coope- sectores completos deI campesinado, a los
rativas es de redistribuir los fondos captados pequefios y medianos agricultores, asi coma a
entre sus adherentes. Este sistema, que funcio- un gran numero de zonas rurales que por esta
naba sobre todo en las ciudades, ha sido trans- raz6n resultan marginadas.
ferido a zonas campesinas alejadas y con parti-
cipantes que no ofrecen garantias formales. Asi
se crearon cooperativas a partir de la imple- 2.3 Las Organizaciones No Gubernamentales
mentaci6n de cajas comunitarias, a iniciativa -ONGs-
de los mismos campesinos 0 con el apoyo de
algunas ONGs. Las ONGs que actuan en el sector rural
tienen a veces una actividad crediticia impor-
2.2.d FINAGRO tante que, en algunos casos, puede representar
su componente principal. Como disponen de
Este organismo, creado en 1989, tiene coma fondos extranjeros -donaciones, préstamos 0
objetivo compensar la falta de atenci6n al agro compra de la deuda exterior- no pasan por el
de parte de las instituciones financieras, control monetario nacional. Generalmente los
mediante programas especificos de crédito para créditos se destir.an a productos de bajos pre-
pequefios y medianos agricultores. Pero no se cios y a productores de poca experiencia y con
trata s610 de distribuir créditos sino de hacer escaso respaldo de capital.
deI crédito una herramienta que, junto con los
programas de asistencia técnica, permita Las ONGS tienen las siguientes estrategias
elevar la productividad, la producci6n y la de trabajo:
rentabilidad de la actividad y, finalmente, los • cubrir los espacios donde no llega el crédito
ingresos deI agricultor. Con este fin, se favo- formal -estatal 0 privado-, y ofrecer prés-
recen cultivos no tradicionales y de exporta- tamos con mejores condiciones que las de los
ci6n, con la introducci6n de cambios técnicos prestamistas particulares;
(semillas certificadas, riego, etc.), y se mejora • integrar el crédito coma componente de un
la relaci6n con la agroindustria. Su actividad conjunto de intervenciones;
agropecuaria iniciada en el Oro se ha ampliado • llevar alternativas a zonas marginadas para
rapidamente en el Guayas para cultivos coma desarrollar un potencial que las politicas
la soya, el arroz y el maiz, pero se ha limitado a nacionales no han tomado en cuenta;
la costa. • capacitar a la gente;
• generar un proceso de aprobaci6n y manejo
Lo especifico de FINAGRO es llegar a ope- deI crédito;
rar con pequefios campesinos y medianos agri- • iniciar el establecimiento de sistemas alter-
cultores (menos de 30 has) en las mismas con- nativos y autogestionados de intermediaci6n
diciones de crédito deI mercado: el productor financiera.
• paga los costos de gesti6n deI crédito y la asis-
tencia técnica; no hay subsidios en los pro- El ambito de intervenci6n y el modo de
•
gramas. actuar de las ONGs varia de un organismo a
otro; algunas, coma el FEPP (Gallard, 1997) y
La actividad de la instituci6n creci6 rapida- el ECLOF, procuran brindar una asistencia
mente desde su creaci6n, hasta convertirse en integrada.
banco en 1994 con una cartera de créditos para • El Fondo Ecuatoriano Populorum Progreso
la agricultura y la agroindustria deI 37 % deI -FEPP- inici6 sus actividades en los afios
total de préstamos otorgados. Estos dos secto- 80 para acompafiar los procesos de reforma
res constituyen su principal area de interven- agraria; ofrece créditos a los minifundistas
54 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Sucres (miles de
millones CI)
80000
•
60000 Figura A24: Créditos totales en sucres
. y US $, 1987-1998
Fuente: Superintendencia de
40000
Bancos
20000 10
o Q=.=ijJ::~~~+---+--+---+---+-f------J. 0
1987 1990 1995 1998 Ario
En los anexos, ellector encontrara una curva de evoluci6n de la tasa de cambio US $-Sucre
56 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Figura A25: Créditos destinados a la agricultura; aportes de los diferentes organismos, 1987-1997
Fuente: Superintendencia de Bancos
Porcentajes otorgados
por cada organismo
.
Las mutualistas que contribuyen con
porcentajes reducidos no pudieron
ser representadas en este gratico
o
1987 1990 1993 * 1997 * 1994 sin datos
Ano
Desde ya hace algunos aIÏos este porcentaje apoyo a la produccion y el apoyo al consumo es
esta por debajo deI 10 % (figura A26). el sintoma de un profundo deterioro de la
economia nacional.
Este lento deterioro deI financiamiento no es
exclusivo deI sector agricola. Si observamos el Esta evolucion se acompaIÏa de un aumento
destino de los créditos seglin el tipo de activi- apreciable de las tasas de interés deI crédito
dad (figura A27), advertimos que otros dos que perjudica efectivamente al sector produc-
sectores también reciben menos créditos, con cion. El crédito se hace escaso y caro. Para la
una disminucion lenta y constante para la in- actividad agricola, en la que el retomo sobre la
dustria y una restriccion mas reciente para el inversion no es muy rapido, las consecuencias
comercio. Sin embargo, vemos que en el rubro son graves. Sin garantias solidas ya no se pue-
"otros" y en el campo de la construccion la pro- de conseguir crédito. Es imposible financiar
porcion deI crédito total permanece mas 0 proyectos a largo plazo (infraestructuras, equi-
menos constante. El unico sector que acapara pamientos productivos, plantaciones forestaIes,
una proporcion de fondos cada vez mas cre- etc.). Para el pequeIÏo 0 mediano productor
ciente es el de las actividades no especfficas, existen muy pocas posibilidades de conseguir
término que cubre principalmente los créditos un crédito deI sector formaI, sea estatal 0 pri-
al consumo. Esta creciente diferencia entre el vado. El crédito informaI, con sus modalidades
Figura A27: Evoluci6n deI destino deI crédito nacional, 1987- 1998
Fuente: Superintendencia de Bancos
Industria manufacturera
Comercio, restaurantes
50 y hoteles
Actividades no especificadas
(a menudo créditos de consumo)
Agricultura, silvicultura
ypesca
o
1987 1990 1995 1998 Ario
•
58 Paisajes Agrarios deI Ecuador
IX EXPORTACIONES
Desde la época precolombina, la costa deI actual Ecuador era famosa por sus entregas de muHu
(Spondylus princeps) a todas las culturas surenas, costenas 0 andinas. En la época colonial, la
Audiencia de Quito -el territorio deI actual Ecuador- exportaba productos codiciados coma los
tejidos de lana 0 la corteza deI arbol de quina. En la época republicana, los mal Hamados sombre-
ros de Panama y los cacaos finos representaban la excelencia de los productos deI pais; hasta los
anos 1920 Ecuador conserv6 el primer rango mundial coma exportador de cacao. La banana, el
café, el atun y mas tarde el petr61eo (l mill6n de US d61ares en 1971, primer ano de exportaci6n de
este producto), a los que se juntaron los camarones a partir de los allOS 1980, constituyen 10 esen- •
cial de las exportaciones.
1 Valor total y destinatarios sobre todo una menor dependencia con relaci6n
al mercado de los Estados Vnidos (figura A29).
El valor total de las exportaciones, de 1 000
roillones de VS d61ares en 1971, pas6 a 2 100
millones en 1979; luego se estabiliz6 durante 2 Los productos agricolas en las exporta-
casi una década antes de experimentar una ciones ecuatorianas
progresi6n espectacular, elevandose de 2200
millones en 1988 a 3100 millones en 1992 y a El petr61eo, que representaba el 63 % de las
4 800 millones en 1996 (figura A28). exportaciones en 1980, s610 representaba el
52 % en 1990 y el 32 % en 1995 (figura A28).
Esta expansi6n se vi6 acompanada de una Dificultades de exportaci6n debido a la rotura
diversificaci6n y un reajuste de los paises de deI oleoducto a raiz deI terremoto de 1986, el
destino. En 1994, el 40 % deI comercio exterior continuo aumento deI consumo nacional y la
se hacia con los Estados V nidos, el 25 % con el baja deI precio intemacional deI crudo durante
resto de América, el 20 % con la Comunidad los ultimos anos son los causantes de la dismi-
Econ6mica Europea y el 10 % con Asia, 10 que nuci6n constante de la participaci6n porcentual
significaba un mayor equilibrio. En compara- de este producto en el comercio exterior deI
ci6n con la situaci6n diez anos atras, se observa pais.
80 4
Figura A28: Exportaciones anuales y
.
porcentajes de los grandes
60 3 grupos de productos
Fuente: Estadfsticas deI Banco
Central deI Ecuador, 1971-1996
40 2 •
20
En los anexos, ellector encontrara una curva de evoluci6n de la tasa de cambio US $-Sucre
Condiciones de la Agricultura IX Exportaciones 59
1984 1994
Entre las producciones agricolas, las expor- cacao. La progresi6n de las exportaciones de
taciones tradicionales de los productos de la banano ha sido mucho mas sostenida (grafico
zona costera -banano, cacao y café- se vieron A30 y las fichas correspondientes en la seccion
complementadas por una vasta gama de pro- B III). En 1998, a pesar deI impacta deI feno-
ductos denominados "no tradicionales", a mena deI Niiio, sus ventas han superado las deI
menudo cultivados en la zona andina: frotos y petroleo, cuyo precio habia caido hasta menos
verduras fuera de temporada para el hemisfe- de 7 US dolares por barril.
rio norte -fresas, esparragos, brocolis-, pro-
ductos autoctonos -papas para Colombia,
babaco, tomate de arbol para mercados mas 3 Productos de crianza-pesca y productos
lejanos- y flores (ver parte B IV 3). forestales
. 1 000 Millones US $
(valorFOB) Cl Banano
• Camarones
800
o Cacao
• lCFlores
Figura A30: Variaciones de las exporta-
600
tiones de algunos productos
Fuente: Estadisticas deI Banco
400 Central deI Ecuador, 1971-1996
200
o.ft;lfl;;;:p!...~~~~"""""-~--r--o""""'-""""""""~~~"""
1971 1975 1980 1985 1990 1995
60 Paisajes Agrarios deI Ecuador
80
• Resto dei mundo
60 !':::'::.J Asia
~ Resto de Europa
40 ~ Uni6n Europea
• Resto de las Américas
20 III Pacto Andino
Estados Unidos •
o
Total Petréleo Banano Cacao Café Madera Flores
gistas -técnicas de pesca que no respetan a los Los demas paises riberefios deI Pacifico -
mamiferos marinos-. Actualmente los camaro- hasta Asia- compran la mayor parte de las
nes de criadero constituyen la mayor parte de disponibilidades de petr6leo. Fuera deI petr6-
este rubro: su participaci6n ha pasado de leo, Asia se caracteriza por demandas muy
menos deI 30 % en 1971 a alrededor deI 50 % reducidas de flores y productos tropicales. Los
en 1980 y a mas deI 80 % en 1991 (ver también miembros de la Comunidad Andina son gran-
grafico A30). Este nuevo producto, que también des compradores de madera, pero esta deman-
se vende principalmente a la UE y a los Esta- da no es constante afio tras afio. La Uni6n .
dos Unidos (grafico A31) esta afectado por la Europea participa en gran medida en las com-
cOITlpetencia de la producci6n de América Cen- pras de camarones, flores y productos tropica-
tral, mas pr6xima al mercado norteamericano y les clasicos; en cambio, no compra el petr6leo
por la de los paises asiaticos que proporcionan ecuatoriano y muy poca madera. El resto de
un producto mas barato. Europa, mercado marginal, compra principal-
mente bananas, flores y café.
Los productos forestales nunca han formado
parte de las grandes exportaciones deI pais. El
sector esta en expansi6n con el eucalipto -en 5 Perspectivas
forma de madera rollizada 0 de aserrin- desti-
nado a las industrias de papelera deI Lejano La renovaci6n de la estructura de las expor-
Oriente y Europa. Los volumenes exportados taciones ha tenido un efecto muy importante en
hacia los paises deI pacto andino, mercado tra- la organizaci6n deI territorio ecuatoriano.
dicional de estos productos, varian en funci6n Mientras que hasta 1970 la casi totalidad de
de las alternancias de apertura y cierre de las las exportaciones provenia de las provincias
fronteras a los productos ecuatorianos. costeras, la llegada deI petr6leo provoc6 un
primer cambio a beneficio de la regi6n amaz6-
nica y deI Estado central; la apertura de las .
4 Destino de los productos exportados carreteras para la exploraci6n y posterior
explotaci6n de las zonas petroleras arrastr6
Si pormenorizamos, no todos los productos una fuerte ola migratoria hacia la Amazonia
se distribuyen de manera homogénea hacia las (ver A IV 2 Reforma Agraria y Colonizaci6n), y
diferentes zonas importadoras (figura A31). las regalias beneficiaron sobre todo a la capital
que experiment6 una expansi6n considerable.
El mercado de los Estados Unidos, vasto,
rico y cercano, constituye aun la principal sali- Un segundo cambio se esta produciendo con
da para las exportaciones nacionales. Adcmas la incorporaci6n de las empresas agricolas en el
de los camarones, bananas y madera, absorbe sector deI comercio internacional, las de la Sie-
grandes proporciones de las exportaciones de rra -especialmente las que estan cerca a los
otros sectores, sobre todo flores, cacao y café. aeropuertos equipados para el flete internacio-
Condiciones de la Agricultura IX Exportaciones 61
nal-, de Quito y recientemente de Latacunga. valor agregado y tienen que competir con las
Desde hace una década, la diversificacion y producciones de otras partes deI mundo. La
especializacion de las producciones de mercan- floricultura, de reciente expansion y cuyo
cias frescas para la exportacion (fresas, verdu- aporte es relativamente modesto en el conjunto
ras fuera de estacion, flores) completan los de las exportaciones, alin se ve beneficiada con
procesos de modemizacion de las haciendas deI ciertas ventajas pero otros paises con condicio-
Norte y Centro de la Sierra, iniciados hace 20 0 nes climaticas y sociales similares empiezan
30· aiios y mayormente dedicadas hasta nues- tambien a competir en esta actividad (ver B IV 3
tros dias a la produccion de leche. Los nuevos Flores).
cultivos, por su alta rentabilidad, compiten
ahora con las inversiones en el sector lechero Finalmente, la firma deI acuerdo de paz con
que podria sin embargo convertirse en un sec- el Pern abre nuevas perspectivas, entre ellas el
tor dinamico (quesos) de las exportaciones incentivo al comercio bilateral, hasta ahora
nacionales no tradicionales. sujeto a los azares de la politica y a las tensio-
nes fronterizas. Estas posibilidades de aumen-
La mayor parte de las exportaciones ecua- tar los flujos comerciales forman parte de las
torianas sigue siendo conformada por produc- potencialidades regionales, ya que los inter-
ciones primarias, ya se trate deI petroleo 0 de cambios entre los paises andinos fluctuan
productos de la agricultura, de la pesca 0 de la desde 1993 alrededor deI 10 % solamente deI
acuacultura. Estas mercancias presentan poco total de sus exportaciones.
•
62 Paisajes Agrarios deI Ecuador
La repartici6n general de los grandes tipos de uso actual deI suelo traduce los efectos de todos
los factores antes descritos. Las condiciones fisicas (sobre todo clima y relieve) delimitan zonas
favorables a diferentes gamas de cultivo. La evoluci6n deI agro ecuatoriano, autoconsumo, cornple-
tado mas tarde por cultivos de renta, deja también hondas huellas en el espacio agrario nacional.
La desiguai distribuci6n de la poblaci6n lleva a zonas agricolas contrastadas, desde las con uso
intensivo hasta otras sin aprovechamiento ninguno. En la época actual, la abertura de nuevas
zonas productivas amplia el espacio agrario deI pais.
-la peninsula de Santa Elena, la isla Puna y la en el bajo valle deI Guayas, caracterizada por el
regi6n costera cercana a la frontera peruana, cultivo deI arroz regado, y la otra en zonas mas
que tienen también un clima muy seco; secas y dedicadas al cultivo deI maiz.
-el norte de la regi6n costera, zona forestal sin
una red importante de vias de penetraci6n; 1.5 Plantaciones permanentes (unidades T)
-el macizo amaz6nico, comparable a la zona
anterior. Este modo de agricultura no existe sino en
las zonas bajas y relativamente humedas. For-
A las dos zonas forestales se suman las ver- ma, deI norte al sur de la regi6n costera, una •
tientes de los Andes con una mejor cobertura franja practicamente continua a 10 largo deI
vegetal natural dellado amaz6nico que dellado piedemonte andino. Se encuentran macizos
deI Pacifico. discontinuos mas al Oeste, en los relieves cos-
teros mas humedos de las llanuras vecinas.
1.2 Mosaicos vegetaci6n natural-cultivos (uni- •
dades D)
2 Repartici6n regional
Las partes donde existen sistemas pioneros
se situan generalmente en la periferia de las La repartici6n de las superficies de los
zonas forestales, coma una transici6n entre las grandes tipos de utilizaci6n de los suelos en
tierras no deforestadas y sistemas agricolas cada regi6n deI pais se representa en la figura
mas evolucionados. En la regi6n amaz6nica, A33 (columna de la izquierda). De todo el terri-
Condiciones de la Agricultura X Los grandes tipos de uso actual deI suelo 63
80 0 W
00
., ,
",1"..
•
\i ;
,,
,
.,,
,
,
,
.'
.,
,
,
.... '
~~ 0 0 Principales ciudades
o........
~=~-===>o.......l_l====-
100 200 km
!
00
Pastos
Cultivos anuales
• Plantaciones permanentes
Costa Mosaicos D
Amazonfa
1,2 0,8
Galapagos Cultivos
anuales C
98,0
1,5
Plantaciones
Sierra pennanentes T
Vegetaci6n
D natural V • MosaicosD Dcosta Amazonfa
;:':;;';:';;;'0";:1 Pastos P
1':;;'0"." IIDDII Cultivos anuales C • Galapagos mSierra
Plantaciones
• permanentes T
Condiciones de la Agricultura X Los grandes tipos de uso actual deI suelo 65
torio nacional, alrededor de dos tercios estân La regi6n montaiiosa presenta una tasa de
aun cubiertos de vegetaci6n natural, las unida- antropizaci6n equivalente al promedio nacional,
des P, C y T ocupan porcentajes similares cer- pero se destaca de las demas regiones por la
canos al 7 %, mientras que los mosaicos (unida- importancia de los cultivos anuales que cubren
des D) totalizan un 15 %. cerca de la mitad de las areas utilizadas.
Las tres zonas de la regi6n calida muestran La columna de la derecha de la misma ilus-
aspectos diferentes, siendo la regi6n costera la traci6n A33 resume la distribuci6n de cada tipo
mas desmontada con solamente un 36 % de de uso deI suelo en las regiones deI pais. La
cobertura vegetal natura1. En la regi6n costera mitad de la vegetaci6n natural deI pais corres-
las zonas aprovechadas muestran proporciories ponde a la regi6n amaz6nica. Los mosaicos se
iguales (poco mas deI 20%) de zonas pioneras y encuentran principalmente en las regiones cos-
de cultivos permanentes, mientras que los cul- tera y amaz6nica y s6lo un 10 % corresponde a
tivos anuales y los pastos suman casi la misma la regi6n serrana. Los pastos presentan propor-
proporci6n. El uso de la regi6n amaz6nica reve- ciones similares pero una distribuci6n diferente,
la el caracter pionero de la agricultura con un abundancia en la Costa y la Sierra y s6lo un 9,5
fuerte predominio de zonas de mosaico (unida- % en la Amazonia. Los cultivos anuales estan
des 0). S6lo el 2% de la regi6n se encuentra con compartidos por dos regiones, la costera y la
us os ya asentados, pastos y plantaciones serrana, con un ligero predominio para esta
permanentes. En la regi6n insular las superfi- ultima. Por fin, las plantaciones permanentes
cies aprovechadas llegan apenas al 2%. son casi exclusivas de la Costa.
•
Componentes deI paisaje 67
PARTEB
INTRODUCCI6N
Los componentes deI paisaje agricola son los remanentes de vegetacion natural, cuando existen,
y las parcelas de cultivo. Este capitulo describe, bajo la forma de fichas técnicas, los diferentes cul-
tivos encontrados en el pais, con una ficha por cada uno. Éstas son de extension variable segu.n la
importancia de los cultivos.
En primer lugar se presentan dos textos mucho mas extensos que reu.nen informaciones propor-
cionadas generalmente por las fichas de cultivo pero que, dada la importancia deI asunto tratado,
no pueden redactarse de la misma manera. Se trata de textos relativos, por una parte a la explota-
cion deI medio natural (unidades V) y, por otra, a los pastizales y a la ganaderia (unidades P).
En el casa de los otros cultivos (unidades C y T), la ficha comprende informaciones generales
coma su origen, sus cultivares y sus requerimientos c1imaticos y edaficos, igualmente informacio-
nes especificas al pais tales coma la zona de cultivo, el tamaiio de las explotaciones, los modos de
cultivo, la produccion, las perspectivas, etc. Se adjunta un mapa a pequeiia escala de las unidades
cartograficas en las que esta presente el cultivo. Tales mapas se derivan directamente de aquel a
escala 1/1000000 y presentan a veces informaciones adicionales. La base utilizada es la deI mapa
Al tomado en su totalidad 0 solo en parte, cuando el cultivo es localizado. No se mencionan los
nombres de las ciudades, para cuya identificacion habra que remitirse al mapa mencionado. Segu.n
los casos, cuadros y graficos aportan informaciones complementarias.
El primer grupo de fichas (parte B Ill) se refiere a cultivos 10 suficientemente importantes coma
para caracterizar un paisaje 0 un sistema de cultivo, 0 10 suficientemente extensos coma para ser
representados por una unidad cartografica a la escala de 1/1 000 000. Las fichas se presentan en
orden alfabético. El segundo grupo (parte B IV) reune observaciones menos detalladas sobre culti-
• vos que pueden ocupar superficies a veces importantes pero demasiado diseminadas coma para
conformar una unidad cartografica 0 marcar el paisaje. Comprende igualmente cultivos de desa-
•
rrollo reciente, coma la floricultura, que no aparecen en el mapa. Mediante informaciones sobre las
superficies de los principales cultivos, la ultima parte permite balancear sus importancias rela-
tivas.
Salvo que se indique 10 contrario, los precios mencionados en ciertas fichas son valores recogi-
dos en 1991.
68 Paisajes Agrarios deI Ecuador
En este capitulo, se trata de describir modos de utilizaci6n deI medio que marcan los paisajes
pero que, casi siempre, estân representados de manera imperfecta en el mapa a escala 1/1 000 000.
Tales modos se caracterizan por una fuerte proporci6n de formaciones vegetales naturales, de
plantas nativas y rara vez de especies introducidas. En esa descripci6n, los ejemplos escogidos
estân clasificados en capitulos que tratan de dar cuenta de la disminuci6n de su importancia en el
paisaje. Para cada uno se presenta toda la informaci6n sin dividirla en los rubros utilizados para
los cultivos.
Se pasarâ de la explotaci6n de los bosques naturales (esencialmente V31 y V23 deI mapa) a las
plantaciones forestales (representadas en parte por TIl y T21, pero que superan ampliamente
eSl;iS dos unidades) y luego a los ârboles aislados en los campos y praderas, para continuar con los
setos vivos y terminar con la recolecci6n. Los ârboles aislados, los setos y las actividades de
recolecci6n no estân representados en el mapa, forman parte de sistemas de cultivo descritos en la
parte C.
Los bosques tropicales son ricos en especies. hasta el nivel de género. Para ello, se utilizaron
Muchas son explotadas, mas de un centenar, los trabajos de Campuzano y Valencia, 1974, de
pero la mitad de ellas no se mencionan sino de Pasaca Mora, 1983 y de Lescure et al., 1987.
una a 3 veces en la encuesta (figura BI). La
mas utilizada, Cordia alliodora, es citada por Las especies extraidas de plantaciones re-
mas de las tres cuartas partes de los profesio- presentan el Il % de las citadas en la encuesta.
nales y la clasificada en segunda posici6n ya no La principal es Eucalyptus globulus, especie
es mencionada sino en el 36 % de las respues- australiana e introducida en 1896 a través de
tas. En total, solamente 13 especies son citadas Francia. Ciertas especies nativas coma Cordia
por al menos 10 % de los utilizadores. alliodora y Ochroma lagopus (balsa) -que sera
tratada en el capitulo «Recolecci6n»- son
La mayor proporci6n de tales especies pro- también plantadas (las plantaciones forestales
viene de los bosques naturales y en particular son objeto deI siguiente capitulo).
de los bosques siempreverdes de las llanuras
costera y amaz6nica (figura B2). Los nombres 1.2 Los modos de explotaci6n
proporcionados por los profesionales son evi-
dentemente los comunes que han sido traduci- En los dos macizos de bosque siempreverde,
dos a nombres cientificos. Este trabajo enfrento principales fuentes de madera de construccion,
ciertas dificultades: los 129 nombres comunes la explotacion forestal se realiza segUn una mo-
citados se redujeron a 121, debido a los sinoni- dalidad original. En una parcela virgen inter-
mos, y 102 pudieron ser identificados al menos viene primeramente una empresa que tala so-
Numero de especies
25
20 Figura BI: Numero de especies se-
glin el numero de citaciones por
15
trabajadores deI sector maderero
10 Fuente: encuesta CENDES, 1993
5
o 21- 31~ 51- 101- NNumero de
1 2-3 4-5 30 50 100 200 >200 citaciones
70 Paisajes Agrarios deI Ecuador
VEGETACION NATURAL 89 %
Region cali da 78 %
Bosques siempreverdes
o Bosques secos
2 • Bosques litorales
Region serrana 9 %
Figura B2: Origen de las especies
maderables
~ Bosques de las vertientes
Fuente: encuesta CENDES, 1993
Origen indeterminada 2 %
•
PLANTAC/ONES FORESTALES 11 %
~":j.":j.l
,
bre todo las especies que permiten la fabrica- mentos que falsean las estadisticas: los permi-
ci6n de contrachapado -sande (Brosimum sos de explotaci6n pueden atribuirse tres veces
utile) y chalviande (varios Virola); en el bosque para la misma parcela, una vez para cada
costero, se estima en 30-40 m 3/ha esta primera modo de tala, los controles deI transporte de la
reserva explotable. Luego, una segunda empre- madera no verifican todos los volumenes des-
sa tala los arboles de madera preciosa, especies plazados. El consumo de madera anual se esti-
mas numerosas pero que proporcionan un volu- ma en 8 millones de m 3 , 3 de madera de cons-
men menor, de alrededor de 10-15 m 3/ha. Am- trucci6n y 5 de lerra. Oficialmente, las super-
bas empresas intervienen con maquinaria pe- ficies sometidas anualmente a la explotaci6n
sada para el transporte de los arboles: son tro- serian de 140000 ha y la deforestaci6n deberia
zos de madera sin desbastar de 2,5 m de largo situarse entre las 150000 y 300000 ha.
llevados a las plantas de transformaci6n en
chapas 0 de aserradura. Finalmente, empresas 1.3 Los productos
menores, que operan con serrerias m6viles,
realizan una tercera tala y obtienen aproxima- La lerra es el principal producto foresta1. En
damente 30 m 3/ha de especies de madera ordi- 1985 y segun la FAO (1988), las necesidades
naria exportada bajo la forma de madera ase- energéticas deI pais estaban cubiertas en sus
rrada de diferentes diametros. Operan a una dos terceras partes por la madera y en 1986 ese
distancia de 1,5 a 2 km desde las carreteras. consumo fue superior a 6 millones de metros
Los volumenes indicados corresponden a los cubicos. Esta utilizaci6n tiende a disminuir len-
promedios observados en el macizo de la pro- tamente, tanto por las dificultades de abasteci-
vincia de Esmeraldas y, en el casa de la regi6n miento coma por la extensi6n de la red de venta
amaz6nica, las cifras deberian reducirse en un de gas en tanques. En las vertientes andinas 0
20 a 30 %. en los bosques secos, la fabricaci6n de carb6n es
una actividad que permite elaborar un pro-
Otro tipo de explotaci6n es el de los colonos, ducto facilmente transportable y hacer rentable
sobre todo los de la regi6n amaz6nica. En ese una reserva de arboles pequerros 0 de especies
caso, es el propietario deI lote quien corta la poco interesantes.
madera, tronzandola aUi mismo en tablas. Des-
tina una parte a su usa personal -sobre todo La madera de construcci6n es, en gran par-
para la construcci6n de su casa- y vende la te, transformada en el pais (ver mas adelante
otra seglin sus necesidades de liquidez, en es- •• 1.4 Exportaciones»). Los tableros aglomerados,
pera, en particular, de las primeras cosechas. de contrachapado y de listones son la principal
El transporte de la madera aserrada se realiza producci6n. Se utiliza para eUo sobre todo la
utilizando mulas 0 cabaUos pudiéndose operar madera de los bosques siempreverdes y sola-
de esa manera hasta 3 km de una carretera. mente tres fabricas tratan especies de planta-
ci6n -pino y eucalipto- para hacer aglomera-
Es practicamente imposible estimar las su- dos. La segunda producci6n es la de derivados
perficies afectadas por la explotaci6n made- de madera de balsa -madera aserrada y table-
rera. Por un lado, las talas realizadas por los ros-. Los muebles y elementos para la cons-
colonos escapan a cualquier conteo. Por otro, trucci6n ocupan el tercer lugar (AIMA, corn.
el seetor de las empresas es regido por regla- pers.).
Componentes deI paisaje l Bosques... 71
ValorFOB
millones de US $
(histograma)
% dei total de las
exportaciones
30
(curva) Figura B3: Evoluci6n de las exportaciones
deI sector maderero
20 2 Fuente: estadisticas deI Banco Central
1971-1991
10
0
["lm~ ~
1975 1980 1985 1990
o
~
Seg'Un la FAO (1988), el 72,4 % de la madera coma minimo y un 1,79 % como maximo, y con
cortada es de uso doméstico 0 se pierde, el valores inferiores al 1 % en los ultimos aiios. De
23,3 % es aserrada, el 2,4 % industrializada en 1971 a 1981-1982, los valores FOB han aumen-
tableros, el 1 % utilizada para postes y el 0,9 % tado considerablemente de 3,55 a 33,6 millones
exportada para pulpa de papel. Las elevadas de US$, 10 que se debe a la evoluci6n de la
pérdidas son imputables al modo de explotaci6n industria nacional que ha podido poner a la
de los colonos 0 de las pequeiias empresas. Los venta cantidades crecientes de tableros, de
otros factores de pérdida son la no recuperaci6n contrachapado sobre todo. La caida posterior se
de los troncos que caen de los camiones, el tra- debe a las limitaciones de exportaciones de ta-
bajar de los troncos con motosierra e incluso con bleros impuestas por los paises andinos, Colom-
hacha, el bajo rendimiento deI aserrado de pie- bia y Venezuela en particular.
zas de madera muy pequeiia y el secado de la
madera sin precauciones. La reducida industria El CENDES y la Corporaci6n para el desa-
papelera nacional emplea viejos papeles 0 tra- rroUo deI sector forestal y maderero deI Ecua-
pos y no existe explotaci6n forestal para esa dor (CORMADERA) han publicado estadisticas
industria. que permiten diferenciar algunas especies y
tipos de tratamiento de la madera (cuadro B2).
Los productos forestales no participan sino Tales estadisticas son compatibles s6lo parcial-
en un 1,1 % en el PIE y las industrias madere- mente con las utilizadas en la figura B3. La
ras representan deI 4 al 5 % deI sector indus- madera de balsa representa, para el periodo
trial. El sector forestal en su conjunto emplea considerado, un total de la a 13 millones de
alrededor de 90 000 personas (sin incluir los US$ equivalentes a la mitad 0 los dos tercios de
colonos que cortan la madera en sus tierras). las exportaciones deI sector. Los tableras son el
segundo rubro con valores muy variables pero
1.4 Exportaciones (figura B3) aun considerables. Las exportaciones de
madera sin desbastar y la madera aserrada son
El sector forestal no contribuye sino en un poco importantes, pues el Ecuador nunca ha
bajo porcentaje al total de las exportaciones podido imponerse en el mercado internacional
(ver igualmente figura A28), entre un 0,42 % coma productor de madera. Los bajos volu-
.
Balsa 10739 10485 13407 11750 11299
Bambu 90 421 163 198 223
Otras especies Cuadro B2: Evoluci6n de las exportaciones
madera rollizada 0 7 100 82 0 deI sector maderero; FüB (millones de
madera aserrada 88 142 256 71 61
tableros' 4131 9504 7236 7746 10068
US $)
madera laborada" 1 021 1 462 2 081 2 170 515 Fuente: CENDES - CORMADERA, 1991
Especies introducidas
o F G* H* 1* J
las superficies, sin que el contraste entre las provee una madera ligera, de duramen pardo,
dos principales regiones deI pais haya variado facil de trabajar y muy apreciada para muebles
en ese periodo. El inventario no publicado de E. de ebanisteria de mediana calidad. La segunda
Cabrera menciona, para 1989, una superficie en iinportancia es, en 1985, Schizolobium para-
de 96000 ha, entre ellas 6000 de balsa. Asi, de hibum (pachaco), de crecimiento muy rapido y
1981 a 1989 se produjo un aumento importante que en 5 afios produce una madera blanca y
de las superficies. suave utilizada para la confecci6n de cajas. El
pachaco parece estar mas difundido en la Ama-
2.2 Especies utilizadas zonia que en la Costa. Por otra parte, su forma
original, alargada y sin ramificaciones cuando
La figura B4 representa las superficies plan- joven, hace de él también un arbol ornamental.
tadas con diversas especies. Las plantaciones La tercera especie es Tectona grandis (teca)
forestales de la Sierra son las mas extensas, plantada en zonas mas secas que las especies
con dos especies que ocupan las mayores super- anteriores pues soporta hasta 10 meses secos.
ficies: Eucalyptus globulus (eucalipto) y Pinus Se la encuentra sobre todo en la cuenca deI
radiata (pino) -ver también los comentarios Guayas y en las partes bajas de las provincias
de las unidades Tll y T21-. Los otros Euca- de Loja y El Oro. Su crecimiento es mas lento
lyptus proveen también lefia y madera a bajos pero su madera mas codiciada. Dos especies
precios. Entre las especies secundarias de este muy secundarias pero que aparecen en los
género, figura E. citriodora, plantada a veces inventarios son Pseudosamanea guachapeli
en la Costa y que produce, en otros paises, acei- (guachapeli) y Virola dixonii (chalviande). La
tes esenciales. El ciprés, Cupressus macrocar- primera, frecuente en las zonas humedas y
pa, pas6 de ser arbol ornamental para las ala- secas, provee una madera medianamente dura
medas de entrada a ser objeto, bajo el impulso utilizada en las construcciones de madera de la
de la moda, de plantaciones destinadas a la fa- regi6n costera. La segunda encontrada en las
bricaci6n de muebles de estilo escandinavo zonas muy humedas y hiperhumedas se utiliza
para el mercado local. La ultima especie que para la fabricaci6n de contrachapado.
cubre una superficie notable es Cedrela odorata
(cedro), de crecimiento medianamente rapido, Tradicionalmente, las plantaciones de Ochro-
mientras que todas las anteriores son de creci- ma lagopus (balsa), no se toman en cuenta entre
• miento mas bien rapido. Produce una madera las plantaciones forestales. Cubren 6000 ha
• rojiza utilizada en carpinteria y en artesania aproximadamente, y ocuparian el primer lugar
(uso tradicional para la fabricaci6n de cajas de en la zona baja y calida.
lujo para cigarros).
Es notable que en la regi6n andina predomi-
En las regiones bajas, la especie mas abun- nen los arboles introducidos y de crecimiento
dantemente plantada es Cordia alliodora rapido, mientras que en la zona baja, las espe-
(laurel) que se encuentra en las zonas litoral y cies nativas -con excepci6n de la teca- y de
amaz6i1ica. A menudo es plantada en los pas- velocidad variable de crecimiento, proveen 10
tizales, puede ser explotada a los 20 afios y esencial de los arboles plantados.
74 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Cuadro B4: Rendimiento de plantaciones forestales Fuente: elaborado seglin Mc Cormick, 1987
O'+------.---r----..,---i'~-...,---------+'-----,
3 500 4 000 altitud m
Componemtes deI paisaje 1 Bosques... 75
neraci6n deI suelo, y por otro, producci6n de creando asi un barbecho forestal productivo.
madera y frotos. Pareceria que, en la elecci6n Los ganaderos de las zonas humedas pueden
de especies disponibles, hay cierta influencia de plantar, al mismo tiempo que la graminea de
la moda. Se ha visto también crecer (y a menu- pastizal, especies forestales explotables. El
do decaer nuevamente) el interés por Eugenia crecimiento y la producci6n son menores que en
stipitata (araza), Caryodendron orinocense el casa de plantaciones en bloques 0 en lineas
(mani de arbo1), Pollalesta karstenii (pigüe). de enriquecimiento, pues los sistemas radicales
Borja y Lasso (1990) han inventariado cerca de pueden verse afectados por el pisoteo deI gana-
250 especies nativas que proveen madera. do. La plantaci6n de arboles de sombra para las
plantaciones de café 0 cacao son otro sistema
2.3 Modos de plantaci6n agricola que incluye una producci6n arb6rea.
Los sistemas agrosilvopastoriles son mas com-
Las plantaciones forestales pueden realizar- plejos y se practican en las granjas experimen-
se de varias maneras: en grandes bloques mo- tales.
noespecificos, en lineas a 10 largo de los limites
de las parcelas (asimilables a rompevientos), Se han implantado diversos modos de parti-
enriquecimiento en bosques explotados (mucho cipaci6n deI Estado para favorecer la extensi6n
mas raro... ) 0 mezcladas con cultivos y pastos. de las plantaciones forestales. En el 70 % de los
casos, los propietarios prefieren que los orga-
Las cifras deI cuadro B3 y las ilustradas en nismos oficiales s6lo les entreguen las plantas y
la figura B4 se refieren s6lo a las plantaciones se ocupen deI seguimiento sanitario de las
en bloques. Narvaez (1976) presenta datos so- plantaciones. Otra altemativa consiste en una
bre las plantaciones en lineas y las estima en repartici6n deI trabajo de la plantaci6n entre el
mas de 7 millones de arboles, 10 que correspon- propietario y el Estado.
de a aproximadamente 4000 ha, es decir cerca
deI 15 % de la superficie plantada en bloques 2.4 Perspectivas
en esa época. En la regi6n andina, los eucalip-
tos son plantados frecuentemente al borde de Se debe disociar la producci6n de lefia de la
las parcelas. Conjuntamente con pinos y cipre- de madera de obra. La provisi6n de lefia es
ses, se los encuentra igualmente al borde de las indispensable en las zonas no forestales, es
alamedas de acceso a las grandes propiedades. decir las mas secas y las mas altas. Es igual-
En las regiones bajas, a menudo se plantan asi mente necesaria en las zonas donde se desea
la teca y el pachaco. disminuir la presi6n sobre las formaciones le-
fiosas naturales. Esas plantaciones deben en-
La plantaci6n de especies interesantes en tonces ubicarse cerca de la poblaci6n y tal vez
bosques empobrecidos por la explotaci6n fore- su distribuci6n actual no corresponde alin a las
stal tiende a reconstituir, a mediano 0 largo necesidades, particularmente en las zonas mas
plazo, la reserva explotable. Segu.n la legisla- secas. Por otro lado, en el casa de la poblaci6n
ci6n, los explotadores forestales deberian plan- que habita en las mayores alturas, por razones
tar nuevamente las zonas forestales que han climaticas, dificilmente puede satisfacerse la
sido objeto de explotaci6n, pero prefieren esta- demanda de combustible.
blecer plantaciones en bloques. Este método es
empleado también por los colonos de la regi6n El mercado interno de madera de construc-
amaz6nica con buenos resultados de crecimien- ci6n es abastecido satisfactoriamente y el exce-
to (Boese, 1992). dente seria exportable. Segun E. Cabrera (co-
municaci6n persona!), el desarrollo de las plan-
Las plantaciones forestales mezcladas, en la taciones depende primeramente de la existencia
parcela, con otros cultivos agricolas de especu- y luego de la cercania de un mercado. Habria
laci6n, forman los sistemas agrosilvicolas, sil- posibilidades de exportaci6n a condici6n de que
• vopastoriles 0 agrosilvopastoriles. Son nume- el Ecuador pueda crear y mantener un abasteci-
rosos, aunque practicamente restringidos a la miento adecuado en cantidad y calidad. Sin
regi6n calida, y mas diversificados en las zonas embargo, coma los exportadores buscan reducir
humedas. Los sistemas tradicionales (indi- los gastos de transporte, habria que cuidar de
genas de la Amazonia), empiricos (plantadores disminuir las distancias entre la plantaci6n, el
«blancos••) 0 cientificos (granjas experimenta- taller de tratamiento y el punto de exportaci6n.
les) tienen todos un componente foresta1. Los
indigenas de la Amazonia plantan, al mismo En 1989, segu.n el MAG, todo el sector fo-
tiempo que la yuca y el banano, arboles frutales restaI ---explotaci6n deI bosque natural y de las
76 Paisajes Agrarios deI Ecuador
mûn sobre todo en las zonas mas hûmedas. En cos ligeros de recreo, 0 de cisternas, coma ais-
el piso calido, las especies son mas diversifica- lante térmico (en el casco de los barcos metane-
das aunque con predominio de Jatropha curcas ros), coma madera para muebles (bajo la forma
(pi'n6n). Entre las especies anexas, se pueden de tableros cubiertos por maderas mas duras 0
mencionar sobre todo leguminosas (Gliricidia, maciza para los muebles de estudios de cine).
Erythrina, Cassia) y otras especies ûtiles tales Sin embargo, su utilizaci6n mas popular es
tales coma Crescentia cujete (mate) que produce para la construcci6n de maquetas de aviones 0
las calabazas. También se utiliza frecuente- de barcos, 10 que no representa sino el 15 % de
mente ciruela u hobo, Spondias mombin en las las exportaciones deI Ecuador, siendo el resto
zonas hûmedas 0 Spondias purpurea en las exc1usivamente tableros entoldados utilizados
zonas mas secas. para los cascos de barcos 0 las aImas de las cis-
ternas. La madera de balsa sigue siendo un
material costoso, que tiene un mercado reduci-
5 Recolecci6n do y estable desde hace varios anos.
Aunque numerosos productos cultivados, en Los arboles de balsa talados provienen esen-
la zona calida sobre todo, pueden considerarse cialmente de bosques naturales, y las plantacîo-
coma productos de recolecci6n en plantas culti- nes ocupan apenas 6000 ha. La tala es efectua-
vadas, algunos se encuentran en un grado de da por el propietario de la parcela y los troncos
agricultura aûn menor. Son recogidos en plan- transportados y vendidos a la serreria mas cer-
tas silvestres a menudo protegidas durante el cana. Se trata, casi siempre, de talleres poco
desmonte y, en ocasiones, plantadas. De esos equipados y que no trabajan sino esa madera.
productos, algunos han dado renombre interna- Alli, los troncos son aserrados en bloques 0 ta-
cional al pais, coma los sombreros llamados «de blones segûn el destino de la madera. En este
Panama», tejidos con fibras de una Cyclantha- estado deI tratamiento, las pérdidas se estiman
ceae nativa, la balsa, cuyo principal proveedor en 50-60 % (corteza, cilindro central de médula,
mundial es el Ecuador, y la semilla de tagua 0 nudos). Existirian mas de 250 serrerias de este
marfil vegetal que tuvo su época de gloria has- tipo, entre ellas algunas m6viles. La madera
ta inicios de este siglo y cuyo cornercio puede aserrada es entonces transportada y vendida a
esperar un nuevo repunte gracias a la prohibi- las fabricas 0 industrias de transformaci6n
ci6n deI de colmillos de elefante. (una decena, todas situadas en Guayaquil).
Esas empresas necesitan cantidades relativa-
La recolecci6n es un componente fundamen- mente importantes de mana de obra entrenada
tal de los sistemas tradicionales de ciertos gru- para la selecci6n de las piezas de esta madera
pos indigenas de la Amazonia. Es también el fragil, sensible a la humedad y a los ataques de
principal modo de abastecimiento de plantas insectos xil6fagos. Esta selecci6n produce un
medicinales presentes en todos los mercados nuevo desecho deI 20 %.
locales. Estos dos empleos de la recolecci6n, am-
pliamente descritos por numerosos autores, no Las talas son estacionales en funci6n deI ca-
marcan el paisaje y no seran presentados aqui. lendario agricola (fuera de la estaci6n de traba-
jos en el campo) y deI cielo c1imatico (imposibili-
5.1 Balsa -Ochroma lagopus- dad de sacar la madera en estaci6n lluviosa si
no fuera por via fluvial). La venta proporciona
Es un arbol de crecimiento rapido, comûn en en promedio 6 000 sucres por un arbol de 4
los bosques secundarios de las zonas seca, hû- anos. La presencia de arboles de balsa en una
meda e hiperhûmeda. En condiciones normales, pequena propiedad es como una alcancia en pie
no alcanza sino a los 1000-1200 m.s.n.m., pero que permite obtener a pedido un ingreso mone-
• se la puede encontrar plantada como arbol tario sin trabajo preliminar. Las plantaciones
ornamental hasta 2300 m.s.n.m. Aunque se la de balsa, que a veces pertenecen a empresas
encuentra en zonas de humedad muy diversa, exportadoras de tableros de esa madera, se
es explotada sobre todo en las regiones mas realizan a partir de semillas con tasas de éxito
hûmedas, pues en las zonas secas su creCimien- variables (germinaci6n escasa, lenta y sobre
to es mucho mas lento y su madera se torna todo irregular, pero que puede mejorarse ya sea
dura y tenida, siendo eliminada al escogerse las con un paso de fuego 0 mediante la siembra en
piezas por utilizarse. fundas de plastico). Se mantienen 1500 plantas
por hectarea el primer ano para no conservar
Esta madera sumamente liviana es emplea- después sinD 1 000 a 1200. Se puede entonces
da sobre todo como el alma de los cascos de bar- esperar una producci6n por hectarea deI orden
78 Paisajes Agrarios deI Ecuador
de 6 millones de sucres al cabo deI cuarto ano. 5.2 Higuerilla -Ricinus communis
Los industriales que utilizan la balsa serradiza Informaciones obtenidas en la empresa CASTOR
se lamentan por las reducidas dimensiones de ECUADOR en Manta
las piezas recibidas, atribuibles a la poca edad
de los arboles talados. Para ellos, el arbol ideal En condiciones naturales, la higuerilla es un
para la tala tendria de 5 a 6 aiios, 10 que permi- arbusto perenne comun en todas las formacio-
tiria aumentar la fracci6n utilizable. Ârboles nes arbustivas de la regi6n costera. Es una
mas viejos deben evitarse pues su madera, en planta que se encuentra au.n a altitudes deI or-
proceso de duraminizaci6n, se torna dura, se den de los 2000 m. Su gran dispersi6n se debe
colorea y ya no es apreciada. Las informaciones probablemente a la elevada demanda de aceite
de este parrafo y deI anterior fueron proporcio- de ricino durante la segunda guerra mundial.
nadas por la empresa BALSAPAC de Guaya- De sus semillas se extrae un aceite muy estable
quil. cuyas cualidades pueden mejorarse aun por
hidrogenaci6n. Es utilizado tradicionalmente
Parece existir un equilibrio espontaneo en farmacia, pero entra cada vez mas en la •
entre la oferta de los propietarios a las serre- composici6n de lubricantes para motores 0 en
rias, la oferta de éstas a las empresas y la posi- la fabricaci6n de materias tan diversas coma
bilidad de exportaci6n de estas ultimas. La re- cera, plasticos termoresistentes 0 cuerdas para
glamentaci6n actual prohibe la exportaci6n de raque tas de tenis. El Ecuador cuenta con
la madera de balsa sin tratar, por 10 que se alrededor de 30 variedades, pero s610 2-3 de
debe obligatoriamente trabajarla localmente. ellas son muy difundidas.
No existe utilizaci6n local de esa madera, a no
ser para la escultura tradicional de barcos co- Una planta de extracci6n de aceites de Man-
mo souvenirs y mas recientemente de anima- ta dedica parte de su actividad al tratamiento
les, todo para la venta a turistas. (complicado, seglin se dice, y secreto) deI aceite
de ricino. Ha implantado una red de recolecci6n
Una estadistica ya antigua deI CENDES de semillas en la que trabajan usualmente mu-
(1984) presenta datos de producci6n y de expor- jeres y ninos. Esta red es densa sobre todo cer-
taci6n de madera de balsa, representadas en la ca de la planta, en la parte seca de la provincia
figura B6. La tendencia general es mas bien a de Manabi. Dicha planta es propietaria de una
la baja, estando el mercado ampliamente abas- plantaci6n de 300 ha pero compra todos las se-
tecido. La diferencia entre la producci6n (arbo- millas de ricino que le son ofrecidas (a raz6n de
les talados) y la exportaci6n es deI 30 al 40 % 30000 sucres el quintal). Introduce progresiva-
hasta 1980 y aumenta rapidamente después de mente variedades anuales que pueden rebrotar
esa fecha, sin que se pueda atribuir tal fen6me- de un ano a otro si las lluvias son suficientes y
no a la imposibilidad de exportar mas 0 al au- que presentan la ventaja de ser mas producti-
mento de los desechos por explotaci6n de arbo- vas (producci6n de semillas hasta 2 tlha/ano y
les muy pequenos. con contenidos de aceite hasta el 50 %). Ade-
mas deI aceite, el tratamiento provee las tortas
utilizadas localmente 0 exportadas. Una baja
Figura B6: Producci6n y exportaci6n de proporci6n es tratada para la alimentaci6n
madera de balsa local deI ganado pero se exporta también coma
Fuente: estadisticas CENDES, 1984 abono en horticultura 0 coma soporte de cultivo
de champinones.
Miles de toneladas
El cultivo de la higuerilla 0 la recolecci6n de
las semillas de las plantas espontaneas ofrece
un ingreso adicional a los cultivadores de maiz
de las regiones muy secas. La producci6n ecua-
toriana de aceite de ricino es baja (6000 tlano •
en decenio 1980, 9000 t previstas para 1993) y
exportada en un 90 %.
de tagua. Otros son objeto de un pequefio co- Los aserrines y los desechos molidos se uti-
mercio coma las semillas de palma real, las fi- lizan en la elaboraci6n de alimentos balancea-
bras de Aphandra, las j6venes hojas de Ceroxy- dos para el ganado. Por otro lado, se utilizan
lon, mientras que un ultimo grupo es utilizado las hojas coma material de cubierta de las ca-
s6lo localmente, coma las fibras de chambira. sas, el palmito es comestible, las fibras de la
En todos los casos se explotan formaciones base de las hojas sirven para fabricar escobas y
naturales. En algunos casos, las plantas de las los estipites que se descomponen albergan lar-
especies interesantes se conservan en los des- vas comestibles de cole6pteros (Barford, 1991).
montes y se las encuentra bajo la forma de
arboles aislados en los pastizales. A inicios de 1993, las exportaciones anuales
.. eran estimadas en algo menos de 100000 li-
Dos especies de las zonas calidas y muy hu- bras, es decir 44 toneladas. El ingreso estimado
medas proveen los palmitos (Borgtoft-Pedersen, es de 3,6 a 4,8 millones de US$.
1991). En los bosques de la provincia de Esme-
raldas, son las formaciones naturales de Euter- De las semillas de Attalea colenda (palma
pe chaunostachys (palmito) las que abastecen real) se extrae un aceite alimentario de uso do-
a la industria de conservas, mientras que las méstico 0 empleado en la industria jabonera.
de Prestoea trichoclada deI piedemonte costero Esta palmera crece en la regi6n costera, en las
estan destinadas mas al consumo local. Las re- zonas muy humedas a hiperhumedas. Las for-
comendaciones de recolecci6n formuladas por la maciones naturales "explotadas tienen el mismo
empresa que compra los palmitos tienden a origen que las de Phytelephas y coma en el casa
mantener la producci6n de las formaciones na- anterior se observa, en los pastizales, unica-
turales. mente algunos individuos adultos y ninguna re-
generaci6n (Balslev y Blicher-Mathiesen, 1991).
El marfil vegetal, tagua 0 corozo es produ-
cido por otra palmera (Phytelephas aequato- Las fibras de la base de las hojas de Aphan-
rialis) frecuente en las zonas humeda, muy dra natalia (fibra) sirven para la confecci6n de
humeda e hiperhumeda de la regi6n costera escobas. Aunque la tagua provee una fibra uti-
calida. El mesocarpio de los frutos inmaduros lizable con el mismo fin, Aphandra es la espe-
es comestible y las pepas maduras son suma- cie mas codiciada. Esta palmera crece en el sur
mente duras con un endospermo blanco de de la regi6n amaz6nica y se cosechan las fibras
aspecta similar al deI marfil, al que sustituye tanto en plantas de bosque como en plantas
en la fabricaci6n esencialmente de botones y mantenidas en los pastizales. Por los cuidados
accesoriamente de figuritas 0 piezas de que se dan a la planta asi coma por las técnicas
ajedrez. utilizadas para favorecer una regeneraci6n na-
tural, se esta en una situaci6n intermedia entre
Las formaciones naturales explotadas son el cultivo y la recolecci6n en el sena de un siste-
arboles preservados durante el desmonte. ma silvopastoril. El ingreso obtenido mediante
Seglin Barford (1991), coma tales formaciones la venta de las fibras supera ampliamente al
no se regeneran, estan condenadas, a largo obtenido de la ganaderia bovina en la misma
plazo, a desaparecer, por 10 que se recomienda superficie (Borgtoft-Pedersen, 1991).
plantar esa palmera a fin de mantener la oferta
de materia prima que seria la principal limita- Se explota también Ceroxylon andicola (pal-
ci6n para la producci6n industrial. Los talleres ma de ramos), planta de la parte media de las
compran los racimos (4000 a 7000 sucres por estribaciones exteriores de los Andes. Las hojas
pieza) 0 las semillas descascaradas (10000 a j6venes que aun no se han abierto, de color
14000 sucres el quintal) y los intermediarios amarillo, son cortadas y con los foliolos se tejen
• ofrecen a los campesinos aproximiadamente la trenzas con motivos religiosos utilizadas el
mitad de esos precios. domingo de ramos en toda la regi6n montafio-
sa. Se explotan las plantas riaturales y una
La exportaci6n de las pepas sin laborar no planta, a la que se le han retirado las hojas
esta autorizada, exportandose productos semi- centrales, tiene pocas probabilidades de sobre-
elaborados. Los tratamientos (selecci6n y ase- vivir, por eso, seglin conversaciones manteni-
rrado de las pepas en placas, corte, confecci6n y das con habitantes de las estribaciones, esa
pulido de los discos) se realizan en plantas 0 palmera tiende naturalmente a desaparecer.
pequefios talleres familiares. Estas actividades
ocupan a alrededor de 2 000 familias, de ellas Las fibras de dos especies sirven, la una,
1500 en Manta. Astrocaryum chambira (chambira), a la fabri-
80 Paisajes Agrarios deI Ecuador
caci6n de cesteria, bolsos, canastos y hamacas conocido contra el paludismo. Este género
de los indigenas de la regi6n amaz6nica, y la arborescente comprende numerosas especies
otra, Astrocaryum standleyanum (mocora), a la que crecen en los bosques siempreverdes de las
confecci6n de sombreros en la provincia de Es- estribaciones medias; sobre todo en la parte
meraldas. En ambos casos, se trata de utiliza- meridional deI Ecuador. Las quinquinas atra-
ci6n de formaciones naturales. jeron rapidamente la atenci6n de las autorida-
des y de los cientificos y, después de la primera
Otras palmeras sirven localmente para la descripci6n cientifica realizada por La Conda-
cubierta de las casas 0 la extracci6n de aceite mine seglin notas de Jussieu en 1738, el rey de
de uso doméstico, sin que tales usos alcancen Espafia envi6 a sus posesiones en América
niveles similares a los observados en el casa de Latina expediciones que multiplicaron los
las especies presentadas en este capitulo. descubrimientos de nuevas especies: Mutis, en
1772, Tafala en 1805-1806 (Estrella, 1991).
5.4 Paja toquilla -Cardulovica- Spruce se interes6 también en este género .
durante su paso por el Ecuador en 1859-1860
Los sombreros de paja toquilla, sumamente (Spruce, 1908).
flexibles y que estuvieron muy a la moda hasta
finales de la segunda guerra mundial, son teji- Dos especies son particularmente ricas en
dos con las fibras tomadas de una Cyclantha- quinina y han sido buscadas activamente. Cin-
ceae de las formaciones secundarias de las zo- chona succirubra (cascarilla dorada) y Cincho-
nas humedas a hiperhumedas de baja altitud, na ledgeriana (cascarilla amarilla). Como el re-
Cardulovica palmata. Se recogen las hojas j6- tiro de la corteza de las raices determina la
venes aun no desplegadas y que son enriadas y muerte deI arbol, ha habido que explotar for-
luego tejidas sobre un molde. El trabajo de la maciones cada vez mas alejadas. La aparici6n
fibra no se realiza en la zona de crecimiento de en el mercado de antipaludicos de sintesis ha
Cardulovica. La planta es abundante en la disminuido considerablemente la demanda de
parte septentrional de la regi6n costera y los cortezas de quinquina y la recolecci6n es muy
artesanos mas renombrados trabajan en hlS limitada, a pedido de laboratorios farmacéuti-
regiones de Jipijapa y de Cuenca. cos en busca de nuevas moléculas.
Introducci6n
Los pastos destinados al ganado bovino son la principal forma de utilizaci6n deI suelo: en 1991
y segu.n las estadisticas deI SEAN, ocupaban casi 50000 km 2 , es decir el 19 % deI territorio nacio-
nal y cerca deI 60 % deI espacio utilizado. Son inexistentes unicamente bajo ciertas condiciones
muy particulares (mapas B9 y BIO): las zonas selvaticas inhabitadas (Amazonia, el norte de la
regi6n costera, vertientes de los Andes), las tierras deI callej6n interandino destinadas mas a la
agricultura que a la ganaderia, las regiones sumamente secas de la llanura occidental (aunque alli
las formaciones herbaceas naturales sirven de pastizales estacionales extensivos) y las tierras
altas donde los paramos (alrededor de 15000 km 2 ) pueden ser utilizados por el ganado, pero mas
bien ovino que bovino. Salvo en el callej6n interandino, tal inexistencia se debe a factores deI
medio y no a una opci6n deliberada de los agricultores.
El ganado bovino representa algo menos de 4 millones de cabezas y, durante el decenio 1980-90,
aument6 regularmente en un 2,2 % anual (figura B7). En el decenio 1980, la producci6n anual de
carne bovina fue de aproximadamente 100000 toneladas. Las otras fuentes de carne son los pollos
(de 50000 a 60000 toneladas por aiio) y los puercos (50000 toneladas), mientras que las cabras y
ovejas no proveen sino un complemento reducido (6000 toneladas).
El consumo de carne bovina corresponde a una tasa de extracci6n que fluctua de manera al
parecer circunstancial entre 14,6 y 17,3 % (figura B7). La producci6n nacional cubre las
necesidades deI pais e incluso las supera y cantidades significativas de ganado pasan de con-
trabando a los dos paises vecinos donde los precios son mas atractivos. La producci6n de leche
Escala de izquierda
4
4
- ~ ....
0---0
Poblaci6n bovina
(millones de cabezas)
•
3 ~~ 3 0--0 Animales sacrificados
• (millones de cabezas por ana)
Escala de derecha
~
~ ..--e Litros de leche/dia/vaca
0 0
1980 1982 1984 1986 1988 1990
82 Paisajes Agrarios deI Ecuador
1000
D Cansumida par
el praductar . . Leche pasteurizada .
Transfarmada par
el productar Transfarmada
• industrialmente
..,ventade
'0, ',J; leche cruda
alcanza 1 500 millones de litros por aiio con una tasa de incremento anual deI 3,6 % entre 1980 y
1990 (figuras B7 y B8) -seglin la Asociaci6n de Ganaderos de la Sierra y deI Oriente (AGSO)-.
Mas de la mitad de ella (55 a 60 %) esta destinada a la alimentaci6n humana (figura B8),
utilizandose el resto para la alimentaci6n de los terneros. El consumo promedio anual seria de 75-
83 litros/habitante, valor c1aramente inferior a los 120 litros recomendados habitualmente. El
déficit cr6nico de leche implica importaciones anuales de leche en polya y permite un alza regular
deI precio de este producto, mas rapida en promedio que la deI precio de la carne.
La doble utilizaci6n deI ganado bovino, coma productor de leche y de carne, es el primer factor
de distinci6n entre los tipos de ganaderia. La gama varia desde explotaciones dedicadas a la
producci6n de leche donde la venta de becerros y vacas dadas de baja no representa sino deI 10 al
15 % de los ingresos, hasta propiedades que no proveen sino ganado de carniceria y donde la leche
sirve solo para criar a los terneros. Entre estos dos extremos se situa toda la diversidad de explo-
taciones de doble prop6sito que tratan de producir carne y leche en proporciones variables.
La variabilidad tanto de las condiciones fisicas coma de las condiciones socioecon6micas de los
ganaderos determina una gran variabilidad de los pastizales, de las razas bovinas utilizadas y de
los modos de producci6n empleados. Ademas de la producci6n de carne y de leche, la ganaderia
parece tener una funci6n social complementaria: en el casa de los pequeiios propietarios, la posesi6n
de ganado les da un cierto estatus; tratandose de los grandes propietarios, la ganaderia es signo de
ocupaci6n deI suelo 0 de perpetuaci6n de un modo de funcionamiento vinculado tradicionalmente a
la noci6n de poder. Por cierto, estos ultimos se han organizado en poderosos grupos de presi6n.
En este capitulo sobre los pastos, se describiran, en una secuencia l6gica, las limitaciones
responsables de la diversidad de los pastizales en si, el ganado utilizado, los alimentos disponibles
y la producci6n obtenida.
Los datos recogidos para la redacci6n de este capitulo son de calidad variable. El ultimo censo ..
bovino se remonta a 1974, y desde ese entonces se publican cifras sobre la evoluci6n anual deI
ganado basadas en extrapolaciones. Inc1uso las estadisticas establecidas con base en encuestas
son, seglin los autores de éstas, dudosas debido a una fuerte tendencia de los ganaderos a subes-
timar el numero de cabezas. El usa de nombres locales para los forrajes puede llevar a errores: por
ejemplo, la bibliografia, tanto extranjera coma nacional, seiiala que el «pasto miel» es Paspalum
dilatatum, pero se trata en realidad de una Setaria (S. sphacelata).
en particular con Carlos Letort) y la de la Costa -Asociaci6n de Ganaderos deI Litoral (AGL, con
Manuel Baquerizo)-. En ambas asociaciones, la inscripci6n es voluntaria y la cuota correspon-
diente se basa en la producci6n lechera en la primera (AGSO) 0 es fija (AGL). Las asociaciones pro-
porcionan asistencia técnica y dan acceso a una cooperativa para cornpras de insumos. La primera
es mâs poderosa y mejor organizada. Retine a casi el 80 % de los ganaderos de su zona de influen-
cia mientras que la AGL s610 cuenta con 300 miembros (datos de 1993), pero en ambos casos, los
responsables, ademas de seguir la evoluci6n de la ganaderia en otros paises a fin de identificar las
mejoras que podrian trasladarse al Ecuador, conocen perfectamente los tipos de ganaderia practi-
cados en sus respectivas zonas.
Dos publicaciones generales sirvieron para apoyar las observaciones de campo: INIAP-
PROTECA, sin fecha y MAG-GTZ, 1991. En 10 que a producci6n lechera se refiere, informaciones
necesarias fueron encontradas en Lasso y Robayo, 1990, IDEA, 1990 Y De Walt et al., sin fecha.
Informaciones adicionales pueden ser conseguidas en documentos coma los numerosos folletos
editados por INIAP.
Zona muy hûmec1a Regién de Medianas Pennisetum Carne y leche Bajo a alto
Santo Domingo y grandes purpureum
Pennisetum
Zonas muy hûmeda Cuencas internas Medianas cfandestinum Leche Bajo a alto
y hûmeda y pequeiias Loliumsp
Trifoliumsp
l -
, 1pastosl
/ ,
:: '- r ::;
\
\
1
1
~ Carreteras principales
o 100 200 km
80 0 W
astos 1
/ ,
f' -
1
/
)
Limites de las zonas
de humedad
Principales ciudades
Carreteras principales
o 100 200 km
o
Region serrana
4 000
Regi6n castera Regi6n amaz6nica
3 000
2 000
1 000
OJ-----==----=========::::::::.---:-~~-____+_-+------+_+_-+___+____:_______;_---=====
Piso minerai
Paramo ---------------~~---7___7-------~
,-, - _ 1 - 1
---+-----tl-o 1 __ 1
Holcus + Trifolium repens
Dactylus + Trifolium repens
Lolium + Trifolium pratense
Pennisetum clandestinum
- - - - - + - - - - + - 1-
~
1
1
1
1
1
--.---------r-
1 1
1
---------
-
-
-:
1
1
i
-... 1 1
1
1
:
1 1 1 1
Medicago sativa 1 1 1 1
1 1 1 1
Melinis minutiflora 1 1 1 1
Setaria sphacelata -------
1 1
- - 1- r - . - - - . - - - - , - - - - - , - - - - - - - - - - - . - - - , - - -
1 1
1 - , - - - - - - , - -1; - I1- - -1- < _
Pennisetum purpureum
Panicum maximum -----1------------;----;----;----;----:-:--;- -------i:---+-----i:---j-: -i--- - - - - - - - -
Brachiaria humidicola - - - - - ; ----7-----'-----'----'-;--'----- : -~--~:-+-:----<p..- -------_
Axonopus scoparius + micay------ 1 --:-~--~'- ~'~~--p..--------
Cynodon plectostachyus 1
1 1
1
Andropogon bicornis 1 1
Figura 811: Perfil esquematico Este-Oeste con la ubicaci6n de los principales tipOS de pastos
• • •
Componentes deI paisaje II Pastos... 87
40
* Segun el cuadro, la superficie total seria de mas de 7000000 hectareas, mientras que los organismos
oficiales (SEAN, MAG) dan valores muy inferiores. Sin embargo, se observara que la planimetria incluye
zonas representadas por unidades D (frentes pioneros), C (cultivos anuales) y T (cultivos permanentes)
donde los pastizales estan presentes pero no representan sino una fracci6n reducida, variable e indetermi-
nada de la superficie de cada unidad cartografica.
88 Paisajes Agrarios deI Ecuador
en estaci6n seca; migraciones mas lejanas son época seca. Alli se encuentran gramineas tales
menos corrientes: desde las zonas secas de la coma Erioehloa polystaehya y Leersia hexan-
llanura hasta el piedemonte siempre humedo, dra. Actualmente, se han convertido en arroza-
o en las vertientes deI Sur (Gondard, 1983); les con trasplante en estaci6n seca.
• aporte de forraje, fresco 0 heno, adquirido en
otras zonas, 0 de alimentos balanceados; Las grandes zonas inundables tienen una
• riego, habiendo sustituido progresivamente el fisionomia variada, siendo sobre todo la parte
riego por gravedad al riego por aspersi6n con tierras adentro deI estuario deI rio Chone las
can6n 0 pivote. que puedes considerarse coma pastizales. Alli se
planta Erioehloa polystaehya y Braehiaria mu-
1.2 Condiciones edaficas tiea, proveedoras de un buen forraje que el ga-
nado va a buscar a nado. Los mayores estanques
Como la ganaderia se practica en todo el son utilizados en la estaci6n lluviosa coma
pais, se la encontrara en suelos muy diversos, piscina de engorde de un pez anfibio, el chame
algunos de los cuales pueden tener efectos (Dormitator latifrons)*. •
negativos.
Circunstancialmente, se pueden mencionar,
Los suelos compactos y superficialmente .en estaci6n seca, las trampas para alimanas
acidos de las antiguas formaciones sedimenta- que constituyen las grietas de los suelos arcillo-
rias de la regi6n costera (formaci6n Balzar) no sos con montmorillonita (vertisoles) en los que
soportan las especies forrajeras que se adaptan el ganado puede llegar a romperse las patas.
Dien a suelos mas ricos, y unicamente Andropo-
gon bieornis puede producir una cantidad apre- 1.3 Condiciones socioecon6micas
ciable de forraje.
Al igual que en el casa de muchos productos,
En el Sur de los Andes, donde no existe la existencia y la accesibilidad de un mercado
cobertura de cenizas vo1canicas, los suelos son condicionan el tipo de producci6n. En el casa de
frecuentemente acidos. En este casa particular, la ganaderia, ese factor incide en el paso de la
y cuando la estaci6n seca se prolonga (mas de producci6n de carne a la lechera. La tendencia
6-8 meses), los pastizales estan formados por a este cambio es fuerte pues la producci6n de
una cobertura graminea baja y rala de Paspa- leche permite obtener ingresos constantes y
lum humboldteanum (tapa-tapa). asegurados (importante déficit de leche en el
pais) mientras que la venta de carne es circun-
En la Amazonia, las fuertes y constantes stancial y menos rentable. En un inicio, la
precipitaciones serian a priori un factor favo- leche, alimento de delicada conservaci6n, era
rable a la producci6n de forraje, pero las carac- comercializada s610 si su producci6n se reali-
teristicas de los suelos son limitantes. Estos zaba a proximidad inmediata de un mercado
pueden, a grosso modo, dividirse en suelos anti- urbano. Mas alla debia ser transformada en
guos lixiviados y acidos (ferraliticos) y en suelos queso (fresco, prensado 0 salado) para soportar
recientes aluviales con cenizas vo1canicas (alu- el tiempo de transporte. La generalizaci6n de
viales andicos). En el primer caso, la poca ferti- turnos de recolecci6n de la leche dos veces al
lidad quimica de los suelos limita la utilizaci6n dia en la regi6n andina ha permitido la exten-
pastoral de las tierras, y en el segundo, el piso- si6n de la ganaderia lechera. Recientemente,
teo transforma los pastizales en lodazales tales turnos, aunque una sola vez por dia, se
debido a un drenaje insuficiente. han extendido a las vertientes externas de los •
Andes a 10 largo de las principales vias de
Los pastos de las partes bajas inundables de comunicaci6n (Baeza en la vertiente oriental;
la regi6n costera (P36) son un casa particular Los Bancos, Alluriquin, Pedro Vicente Mal- •
que se encuentra, en superficies reducidas, en donado en la vertiente occidental).
toda la llanura deI Guayas (bajios). Esas peque-
nas depresiones que acumulan agua en la esta- Por otro lado, el capital disponible y el
ci6n lluviosa eran utilizadas coma pasto de acceso a la tecnologia son otros factores que
* El«chame» de la familia de los Gobiideae 0 Eleotridae es un pez de agua dulce, salobre 0 salada de los es-
tuarios deI Pacifico, desde el sur de California hasta el norte deI Peru. Es capaz de respirar a través de una
macula muy vascularizada situada en la parte dorsal de su cabeza. Los peces javenes son capturados en las
piscinas camaroneras 0 en el estuario vecino y colocados en los charcos naturales 0 artificiales donde su cre-
cimiento es mas rapido que en condiciones naturales. Alli se alimentan de plantas flotantes (Eichhornia y
Pistia) 0 sumergidas (Ceratophyllum) y alcanzan su tamaiio comercial en 5 a 8 meses (Bonifaz et al., 1985)
Componentes deI paisaje II Pastos... 89
determinan el tipo de ganaderia practicado. La veer hasta 10 litros de leche por dia en periodo
mayoria de ganaderos que manejan su explota- de lactancia.
ci6n adecuadamente desde varios aiios atras,
son personas que han podido, durante sus La «racionalizaci6n», por parte deI poder
estudios, visitar ganaderias en otros paises. central, deI uso deI espacio agricola nacional ha
Las transformaciones necesarias para la conducido a una especializaci6n, mediante la
obtenci6n de buenos rendimientos requieren introducci6n de razas especificas: la regi6n
disponer de un capital, ya sea para invertir 0 andina en ganaderia lechera y la regi6n costera
para apoyar una solicitud de crédito, por 10 que en producci6n de carne.
una cria de animales bien manejada se limita
a propietarios de grandes y medianas explota- 2.1.b Ganado lechero
ciones. Sin embargo, la difusi6n de una gana-
deria lechera en las explotaciones mixtas de Es a finales de la segunda guerra mundial
tamaiio reducido ha sido favorecida por la cuando el Ecuador comienza a introducir razas
recolecci6n cotidiana de leche y el mejoramien- europeas productoras de leche. La raza mas di-
to genético de los rejos. fundida es la frisona (Holstein) importada ini-
cialmente de los Estados Unidos. Casi siempre
Finalmente, coma la mayor parte de los se la utiliza cruzada en 7/8 con ganado «criollo» y
ganaderos hoy en dia son herederos de las pro- es la favorita pues ha revelado ser muy adaptada
piedades y deI ganado de sus padres, el interés a todas las altitudes deI Ecuador. La segunda en
que se ponga en esa actividad dependera de la importancia es la suiza parda (Brown Swiss) que
voluntad deI heredero. La ganaderia es la no se ha adaptado a alturas importantes ni al
explotaci6n que mejor se presta al absentismo fuerte calor, prefiriéndose utilizarla a una alti-
de los propietarios que ejercen otra profesi6n. tud mediana. La Jersey seria la tercera raza en
Encargan la explotaci6n a un empleado de con- importancia pero su incidencia es totalmente
fianza y se contentan con un rendimiento circunstancial.
mediocre.
2.1.c Ganado de carne
x Brahma puede proveer una decena de litros sea permanente, cuando el tamano de la explo-
de leche diarios. El croce con la Brown Swiss es taci6n 10 justifica, 0 peri6dico.
menos comlin.
Las tres enfermedades principales son la
Menos de 10 ganaderias de la regi6n costera brucelosis, la leptospirosis y la fiebre aftosa.
utilizan bUfalos asiaticos (Bubalus) para pro- Las dos primeras son relativamente graves
ducir came y en este casa tampoco se los hace pues provocan aborto y esterilidad en las vacas.
trabajar. Una pequena manada introducida en Son facilmente controlables con vacunaci6n. La
la regi6n amaz6nica no suscit6 interés alguno. tercera no alcanza, en el Ecuador, niveles alar-
Divaga en semi-libertad a los largo de las orillas mantes (existencia de solamente dos razas deI
de los rios Coca y Napo, mientras que experien- pat6geno, epidemias de poca intensidad) no es
cias similares en el vecino pais de Peru han controlada sino por presi6n de los paises
dado buenos resultados. vecinos.
de 3 a 4 cabezas por hectarea y se puede llegar igualacion, dispersion de las bostas, aportes de
a cifras de 5 06 si se aportan complementos de abono. Va de la mano con hatos mal manejados,
alimentacion. carga animal baja y produccion reducida.
Las vertientes andinas tienen cargas que De manera opuesta, un pasto artificial es
pueden alcanzar 2 animales por hectarea en los una pradera, en este caso siempre de origen
mejores casos, pero los mas corn unes son antropico, en la que se encontraran las carac-
valores cercanos a 1. teristicas contrarias y un hato mejor cuidado y
mas productivo. Si el pasto llamado natural es
En la regi6n amaz6nica, las condiciones no propio de ciertas explotaciones de carne, los
son muy favorables para la ganaderia y ésta es pastizales artificiales se encuentran a nivel
muy poco tecnificada. Rara vez las cargas por tanto de la produccion de came como de la de
hectarea llegan a 1. leche.
Leguminosas importantes
Desmodium sp Pega pega
Leguminosas secundarias
Pueraria phase%ides Kudzu
Sty/osanthes guyanensis AIIalfa tropical
Leucaena g/auca Leucaena
Ca/apogonium mucunoides Rabo de iguana
Centrosema pubescens Centrosema
UnICOS inconvenientes que presenta son la hojas de la base de los tallos controlando asî el
intolerancia frente a la inundaci6n, la baja «salivazo». Cada vez mas, los Axonopus son
capacidad germinativa que obliga a menudo a reemplazadas por especies mas productivas
plantarla por esquejes (operaci6n costosa) y, coma Brachiaria humidicola, por ejemplo. En
en las variedades mas resistentes a la sequîa, una franja intermedia entre la zona de Axono-
la importante pilosidad -la que puede inco- pus y la de Panicum maximum, se encuentra con
modar al ganado-. bastante frecuencia Pennisetum purpureum-
pasto elefante. Esta gramînea de porte similar al
La segunda posici6n es ocupada por un con- de los Axonopus soporta una corta estaci6n seca
junto de gramîneas comunes de las zonas muy y provee un alimento mas rico a condici6n de
htimeda e hiperhtimeda. En las zonas mas hti- utilizarlo antes de la floraci6n.
medas de la regi6n oriental, deI piedemonte occi-
dental de los Andes y de la parte norte de la Finalmente, en la zona baja y calida, algu-
regi6n litoral, predominan Axonopus scoparius nas gramîneas ocupan ciertos lugares particu-
(gramalote) y Axonopus micay (micay). Son lares, como zonas inundables y suelos acidos
gramîneas de tallos caidos y rastreros, que se (ver parte «Condiciones edaficas» en B II 2.2) Y
arraigan en los nudos produciendo otros tallos otras gramîneas son segadas (ver mas adelante
erguidos. Su principal caracterîstica comtin es la parte «Los modos de utilizaci6n de los pas-
un muy elevado contenido de agua (90 %) y, por tos» en B II 4.1.c).
10 tanto, un bajo valor alimentario (8 % de pro-
teînas totales). Ademas, estas dos especies son Las partes bajas de las vertientes andinas "
facilmente atacados por larvas de hom6pteros presentan algunos pastizales originales. En las
que provocan el «salivazo» y por gomosis bacte- zonas mas htimedas se emplea comtinmente
rianos que reducen considerablemente su pro- Setaria sphacelata (pasto miel) y, en las regio-
ducci6n. Son igualmente muy sensibles al piso- nes con una estaci6n seca, predomina Melinis
teo y la técnica usual de pastoreo al sogueo -ver minutiflora (pasto gordura). Esta tiltima gra-
mas adelante "Los modos de utilizaci6n de los mînea no es muy apreciada pues darfa un sa-
pastos"- implica largos periodos de reposo entre bor desagradable a la leche. Los pastos mal ma-
dos pastoreos, de 100 a 120 dîas. La ventaja deI nejados de las vertientes mas secas de la regi6n
sobrepastoreo es que el ganado come también las austral presentan una cobertura baja de Pas-
Componentes deI paisaje II Pastos... 93
Leguminosas importantes
Desmodium sp Pega pega
1
palum humboldtianum (tapa-tapa), graminea Sierra, pero actualmente las opiniones son mas
poco productiva. matizadas. Aunque provee un buen pasto hasta
aproximadamente los 2800 m.s.n.m. (en algu-
En la region andina, los dos tipos de pastos nos casos con riego), debe proscribirse en alti-
predominantes son las praderas mixtas de ray tudes superiores debido a su sensibilidad a las
grass <Lolium multiflorum y L. perenne) y las de heladas. Se ha extendido fuera deI callej6n
kikuyo (Pennisetum clandestinum). El kikuyo interandino, formando hermosos pastizales en
era, al momento de su introducci6n en los aftos las vertientes exteriores hasta alrededor de los
1940, la planta forrajera milagrosa para la 2000 m de altitud. Si es bien manejado, es decir
94 Paisajes Agrarios deI Ecuador
con tallos erguidos, puede ser asociado al tré- razones: por su porte a menudo trepador
bol. Por sus tallos rastreros, forma una espesa podrian invadir la pradera y disminuir la pro-
cobertura que protege bien al suelo y que ha porcion de gramineas, el ganado no mostraria
resistido al pisoteo, pero esa misma caracteris- sino poca apetencia por ellas y se terne el timpa-
tica 10 torna extremadamente agresivo coma nismo cuando son consumidas mojadas.
adventicio en los cultivos 0 los pastizales de
otras especies. 3.1.b Implantacion de las praderas
Los Latium forman praderas destinadas ya Los trabajos difieren seglin el punta de par-
sea a la siega 0 al pastoreo directo. Siempre estan tida, bosque natural u otros cultivos. La defo-
asociados, un ray grass anual con un perenne, a restacion para la implantacion de una pradera
se practica esencialmente en los frentes pione-
•
veces con Dactylis y con leguminosas, trébol rojo
o blanco y a veces una alfalfa baja. Esas prade- ros de las tierras b.1jas 0 de las vertientes
ras que proveen un mejor alimento son, debido a donde subsisten aun macizos forestales. El des-
su riqueza especifica, mas dificiles de manejar, monte es seguido de un cultivo de cielo corto ..
sobre todo en pastoreo directo. Presentan otra intermedio, de papa 0 de haba en altitud, y de
ventaja con relacion al kikuyo, la de resistir maiz 0 arroz pluvial en la zona calida. En esta
mejor a las heladas por 10 que se los puede en- ultima, los cereales se siembran al mismo
contrar a altitudes superiores. tiempo que se implanta, siempre por esquejes,
la graminea forrajera.
Las praderas de Avena bizantina y Vicia sa-
tiva son de origen mas reciente (alrededor de En las zonas ya incorporadas a la produc-
20 afios). Son implantadas en rotacion con los cion, la implantacion deI pastizal se realiza
pastos de ray grass y se prefiere segarlas. Es mas facilmente. En la region montafiosa, era
esa misma combinacion la escogida para el habituaI practicar previamente uno a dos culti-
ensilado. vos de papa. Ello tiene la ventaja de limpiar
bien el suelo de las malas hierbas y dejar un
Gramineas secundarias se emplean en ex- remanente de abono que favorece el desarrollo
plotaciones menos tecnificadas 0 en las marge- de la pradera. La labranza que a menudo pre-
nes altas de los pastizales acondicionados. En cedia a la siembra de la pradera se reemplaza
este ultimo caso, se encuentra sobre todo Hol- actualmente por un rastrillaje. En las zonas
eus mezclada con Trifolim pratense aunque tam- calidas, el unico trabajo preliminar es la lim-
bién con gramineas originarias deI paramo pieza de la parcela, casi siempre manualmente.
(Stipa, Calamagrostis y Festuea).
Es usual, en todas las zonas, plantar los pas-
Las praderas sembradas solamente con le- tos de manera que las plantas jovenes se bene-
guminosas son pocas. La alfalfa se planta en el ficien de la estacion lluviosa. Las jovenes pra-
fondo de algunas cuencas andinas donde es deras se mantienen sin pastoreo direeto el tiem-
cortada para darla a los animales, mas frecuen- po necesario para que las plantas se implanten
temente a los cuyes en las pequefias propie- adecuadamente. En la ganaderia lechera, se
dades que a los bovinos. Los precios de venta de procede a 1 6 2 cortes antes de abrir la nueva
la alfalfa asi coma su elevada productividad parcela al pastoreo direeto.
justifican el riego. En la region calida, ese seria
el casa solo de las coberturas de Pueraria a Los costos de implantacion de un pasto
veces utilizadas coma pasto (ver mas adelante varian seglin la vegetacion preexistente aunque
la parte «El pastoreo informaI» en B II 4.1.D. también en funci6n deI tipo de planta forrajera
sembrada. Los pastizales mixtos de la Sierra
Las mezelas con leguminosas son posibles en demandan una inversion mayor (500000 sucres/ •
el casa de todas las gramineas forrajeras, pero ha en enero de 1991; 580000 sucreslha en octu-
el manejo de una pradera mixta requiere mas bre deI mismo afio) que un pasto simple de la
cuidados que el de una pradera monoespecifica, zona calida (100000 sucres/ha en febrero de
entre otros corte de igualacion y nuevas siem- 1990, seglin COFIEC, corn. pers.).
bras periodicas. En la realidad, esta técnica,
que aumenta considerablemente el valor 3.1.c Los modos de utilizaci6n de los pastos
nutritivo deI forraje, no se praetica sino a una
cierta escala en la ganaderia lechera serrana. Difieren esencialmente seglin el grado de
En el Litoral, los ganaderos rechazan las legu- tecnicidad de las explotaciones. Se pueden dis-
minosas recomendadas comu.nmente por varias tinguir los siguientes:
Componentes deI paisaje II Pastos... 95
• corte deI forraje: es una técnica empleada y y la floraci6n (45-60 dias) en la Costa, pero
encontrada tinicamente tratandose de la ga- las condiciones climaticas perturban a menu-
naderia lechera muy tecnificada con ganado do al esquema ideal. En la Sierra, ta! tiempo
estabulado. Casi siempre el forraje es picado puede llegar a 120 dias en las mayores altu-
antes de darlo a los animales. En la Sierra, la ras, pero excepcionalmente puede ser redu-
mezcla Avena bizantina-Vicia sativa, asi coma cido a 45 dias en casa de necesidad. Este
el maiz cortado en el estado de grano lechoso modo de utilizaci6n de las praderas implica
pueden utilizarse de esa manera. mayores costos de cercado y es practicado en
En la llanura occidental, este método se res- las ganaderias de engorde mas tecnificadas,
tringe a las explotaciones lecheras mas avan- al igual que en gran parte de las explotacio-
10 zadas. Se conoce, cerca de Portoviejo, una nes lecheras.
explotaci6n lechera que cultiva asi una mezcla • rotaci6n cotidiana: es una variante mas sofis-
de Tripsacum laxum con Pueraria phaseo- ticada de la técnica anterior y consiste en im-
loides. Otras gramineas pueden utilizarse de poner una sobrecarga todavia mayor, de 100
esta manera -Echinochloa polystachya, Cyno- a 125 cabezas por hectarea, pero durante un
don plectostachyus, Brachiaria, King Grass solo dia. La delimitaci6n de la franja de pas-
hibrido de Pennisetum purpureum x P. typhoi- toreo se realiza con cercado eléctrico. Este sis-
des-. Sin embargo, la gran mayoria de gana- tema es mas flexible, pues permite adaptar
deros practican el pastoreo directo segtin las cada dia la superficie puesta a disposici6n deI
modalidades descritas a continuaci6n. ganado en funci6n deI estado de crecimiento
• pastoreo continuo: el hato dispone de grandes deI pasto y de las necesidades variables deI
parcelas en las que permanece durante largos hato. Sin embargo, requiere, coma en el casa
periodos y es casi siempre mezclado, vacas y anterior, un adecuado manejo de las parcelas.
toros, temeros y animales adultos, vacas pro- • pastoreo al sogueo: esta técnica, que puede
ductoras y secas. El forraje se consume de parecer mas eficaz que las dos anteriores, es
manera desigual, habiendo zonas de sobrepas- en realidad un método utilizado por los
toreo junto a sitios no utilizados. La pradera pequeftos ganaderos de la Sierra que no
esta entonces sujeta a fuertes degradaciones poseen pastizales (ver mas adelante "El
por pisoteo local, acumulaci6n de bostas en los pastoreo informaI"). Se explotan entonces los
lugares de reposo, coma a la sombra de los bordes de las carreteras. Permite igualmente
arboles por ejemplo. En este caso, el ganado obligar al animal a consumir enteramente el
no utiliza sino una fracci6n deI forraje dispo- forraje disponible en un radio limitado. Es el
nible, deI 30 al 60 % segtin el estado de la método habituaI de utilizaci6n de Axonopus
pradera el cual depende de la estaci6n. Este scoparius. Si bien por un lado el forraje es ex-
modo de utilizaci6n de los pastos permite plotado de la mejor manera, este sobrepasto-
conservar parcelas grandes (varias decenas de reo localizado puede debilitar a las plantas y
hectareas) reduciendo asi los gastos de cer- favorecer un pisoteo intensivo.
cado, pero admite tinicamente bajas cargas • pastoreo «al repelo»: consiste en hacer pastar
por hectarea (inferiores aI). a un segundo hato después de un pastoreo
Es comtin en las explotaciones intensivas des- normal. Se 10 reserva a los bovinos improduc-
tinadas a la producci6n de carne en la regi6n tivos (vacas viejas) 0 a ganado menos exi-
costera y amaz6nica, aunque también en las gente (caballos y mulas). Parcialmente, tiene
tierras mas altas de la regi6n andina. En la el efecto de un corte de igualaci6n al eliminar
zona montaftosa, esta en vias de desapari- los restos de forraje utilizable, pero si se
ci6n, pues es tipico de las grandes propieda- toma demasiado intensivo, puede reducir en
des las cuales se encuentran diminuyend6 en gran medida la capacidad de rebrote deI
importancia. pasto.
• rotaci6n peri6dica: a fin de que el ganado con-
suma una mayor proporci6n deI forraje 3.1.d Cuidados aportados a los pastizales
disponible, se practica una sobrecarga de
alrededor de 85 cabezas por hectarea durante La conservaci6n deI pasto a un nivel de pro-
5 dias. Se obtiene una mejor utilizaci6n de los ducci6n adecuado requiere ciertos trabajos ane-
recursos pero esta practica requiere una cui- xos. El aporte de abono es atin una practica ca-
dadosa planificaci6n de la parcelaci6n de la si inexistente (salvo al momento de instalaci6n
propiedad, basada en el tamafto deI hato y el de las praderas andinas 0 en el casa deI ganado
tiempo necesario para el rebrote de la pra- estabulado donde se recupera el agua de estiér-
dera. Este es deI orden de 60 dias en la regi6n col y las aguas de limpieza de las plataformas).
montaftosa y esta comprendido entre 35 dias Las demas praeticas tienden a favorecer la con-
96 Paisajes Agrarios deI Ecuador
servaci6n de los pastos y a estimular el rebrote Lalium se realiza anualmente mediante una
de las gramineas: nueva siembra de las especies mas fragiles y la
• limpieza con machete de las malas hierbas, renovaci6n se efectua por siembra después de
sobre todo en la Costa; pasar una rastra. Al cabo de 4 a 6 aiios, el
• limpieza con fuego que controla las malas pasto es reemplazado por un cultivo, habitual-
hierbas y la incidencia de los parâsitos inter- mente de papa.
nos en la regi6n castera;
• control de los adventicios que rara vez se rea- 3.1.e Producci6n de los pastizales
liza con herbicidas;
• corte de igualaci6n después deI pastoreo para Debido a la gran diversidad de especies em-
uniformizar el rebrote, sobre todo en la pleadas y a la importante variabilidad de las
Sierra; condiciones c1imaticas y de utilizaci6n, la pro-
• dispersi6n de las bostas de vaca para evitar, ducci6n de forrajes se situa dentro de una gama
durante el siguiente pastoreo, que el ganado sumamente amplia. En las zonas calidas, la se-
evite ciertas zonas, 10 que también permite quia limita en gran medida el crecimiento de
disminuir la incidencia de los parasitos inter- las plantas (ver cuadros B7 y B8). Alli coexis-
nos al exponer al sol una mayor cantidad de ten especies mas 0 menos productivas (cuadro
sus huevos. Esta practica es mas comun en la B8) y, en las explotaciones, la producci6n anual
ganaderia lechera de la regi6n montaiiosa de materia seca va de menos de una tonelada
que en la zona câlida. por hectarea hasta aproximadamente 10 tlha.
Los datos presentados en el cuadro B8 se obtu-
La duraci6n de vida de la pradera varia en vieron en estaciones de investigaci6n y por 10
funci6n de su composici6n floristica, aunque tanto no representan sino maximos posibles.
también de los cuidados de que ha sido objeto. En la Sierra, la producci6n esta limitada por el
Las praderas de Lolium deben renovarse cada frio y los mejores valores son de aproximada-
4-6 aiios mientras que los pastos de Panicum mente 4 tlha/aiio. Localmente, la sequia limita
maximum 0 de kikuyo pueden durar mas de 20 estacionalmente la producci6n, utilizandose
anos. Como los pastos de gramalote son bastan- riego en las explotaciones lecheras tecnificadas.
te fragiles a causa de su modo de utilizaci6n, En todos los casos, la biomasa consumible au-
deben ser readecuados a menudo pero s610 local- menta con el tiempo transcurrido entre dos
mente. El mantenimiento de las praderas de pastoreos 0 dos siegas (cuadro B8).
Poreentaje
de protefnas
o 0 en periodo humedo
• • en periodo seeo
(O.)
Digestibilidad
in vitro %
(O.)
Figura B15: Evoluci6n deI contenido protei-
nico y de la digestibilidad in vitro de pasto 1
Saboya segu.n la edad deI rebrote y de las
60 condiciones c1imaticas .
Fuente: INIAP-PRüTECA, 1989
55
50
21 28 35 42 56
Edad dei rebrote (dias)
Componentes deI paisaje II Pastos... 97
Sin embargo, la producci6n de materia seca pastoreo libre de formaciones vegetales natura-
no da cuenta sino de manera imperfecta de la les coma los paramos 0 las formaciones secas de
calidad deI forraje. El contenido nutritivo varia los fondos de los valles andinos 0 dellitoral.
segful las especies: las proteinas totales repre-
sentan deI 5 al 12 % de la materia seca en el Los paramos no proveen sino un alimento
casa de las gramineas, aproximadamente deI limitado tanto por el reducido crecimiento de
20 % tratândose de las leguminosas, y los forra- las plantas, debido al frio coma por la poca pala-
jes producidos por praderas mixtas tienen tibilidad de la graminea predominante, Stipa
tasas intermedias.Éstas varian igualmente con ichu. Como los j6venes brotes de Stipa son mas
la edad de las plantas y las condiciones climati- tiernos y mas apreciados por el ganado, el
.. cas (figura B15). El manejo de los pastos debe
tener en cuenta dos factores que evolucionan de
«pasto» es a menudo mejorado con fuego que
impulsa el rebrote. La carga sigue siendo elara-
manera opuesta con el tiempo: por una parte el mente inferior a 1 cabeza por hectarea.
aumento de la masa de forraje y, por otra, la
disminuci6n de su valor alimentario. Las formaciones vegetales secas no son utili-
zables sino estacionalmente y casi siempre uti-
3.1.fEl pastoreo informaI lizadas por los caprinos. La producci6n de fo-
rraje herbaceo es reducida: Cortaderia y Cala-
En los minifundios de la Sierra, las encues- magrostis en los valles andinos, Cenchrus,
tas setialan la posesi6n de algunas cabezas de Chloris y Eragrostis en la regi6n litoral. Los
ganado con total carencia de pastos. TaI ganado animales se alimentan también con legumino-
es una fuente de leche para autoconsumo 0 sas arborescentes (Acacia, Prosopis, Mimosa,
destinada a la venta, aunque también consti- Libidibia), es decir con vainas caidas, 0 ramas
tuye una reserva de capital que puede utilizar- a veces cortadas con ese fin (ramoneo).
se en casa de necesidad aguda. Los animales se
alimentan en parte de los restos de las cosechas 3.1.g En el casa de no tener pastos
(ver parrafo siguiente) 0 en las parcelas en bar-
becho, pero sobre todo pastan amarrados en los Muchos pequetios ganaderos, tanto de la
bordes de las carreteras, de los arroyos 0 de las regi6n andina coma deI litoral, poseen algo de
acequias. ganado pero ninglin pasto. Para ellos existen
varios medios de alimentar a sus animales,
Un casa particular de pastoreo informaI es entre ellos el pastoreo informal. En otros casos,
la utilizaci6n de la cobertura herbacea de las sobre todo tratandose de empleados agricolas
plantaciones permanentes. Es sobre todo el de las grandes propiedades, se pueden estable-
casa de Pueraria phaseoloides (kudzu) en las cer acuerdos de derechos a pastoreo para cierta
plantaciones de palma africana. Durante los 2 cantidad de cabezas, elausula prevista en los
a 3 primeros atios de implantaci6n, las plantas contratos entre empleador y trabajador. En
de la palmera no forman sino una cobertura otros casos incluso, el alquiler se realiza sobre
parcial que permite aun un abundante creci- una base econ6mica, repartici6n de la produc-
miento de kudzu. Es entonces tentador hacer ci6n 0 pago de un alquiler en funci6n deI
pastar el ganado que se beneficiara con una numero de cabezas.
producci6n vegetal normalmente perdida y que
paralelamente controla a la planta de cober- 3.2 Reno y ensilado
tura que tiende a invadir a las palmeras. Esta
manera requiere una precauci6n, pues el kudzu La conservaci6n de forraje por henificaci6n 0
mojado 0 consumido en exceso provoca el tim- ensilado sonpracticas recientes, restringidas a
panismo. Presenta también el inconveniente de los sectores mas tecnificados de la ganaderia
entorpecer, por el pisoteo deI ganado, el creci- lechera.
miento de las raices de la palmera y general-
mente es desaconsejado. Por razones climaticas, la henificaci6n no
puede practicarse sino en las zonas muy secas
Otros pastos que no corresponden a prade- con largos periodos sin lluvia. En la Sierra, se
ras implantadas son, por un lado, las parcelas ha identificado su empleo solamente en una
que permanecen en barbecho (sobre todo en la explotaci6n deI valle de Salinas (Imbabura) y
regi6n andina donde a veces el campesino se se la realiza con alfalfa cultivada bajo riego.
abstiene de desherbar los cultivos al final deI El producto es utilizado localmente por algu-
cielo para aumentar la cantidad de forraje dis- nos ganaderos lecheros, pero sobre todo ven-
ponible) y, por otro, la utilizaci6n en tierras de dido en pacas a otras explotaciones lecheras
98 Paisajes Agrarios deI Ecuador
de la regi6n montaftosa. En la Costa, en con- cana de azûcar son algunos ejemplos de ello.
diciones naturales, el pico de producci6n se En el casa de este ûltimo producto, el Ministe-
produce durante la estaci6n lluviosa; los para- rio de Agricultura y Ganaderia ha implantado
metros de humedad no permiten secar el heno todo un sistema de almacenamiento y de
sino mediante uso de secadoras, técnica des co- distribuci6n tanto en la regi6n costera coma en
nocida en el pais. Se notaron algunos casos de la Sierra, pero la demanda de melaza para la
henificaci6n en partes secas de la Costa: la industria deI alcohol, asi coma su pre cio,
producci6n de forraje bajo riego permite secar hacen que este prcducto sea dificil de adquirir
heno durante la estaci6n seca. y utilizado casi ûnicamente en las explotacio-
nes lecheras.
El ensilado es mas frecuente. Es, en ciertas
explotaciones tecnificadas, otra respuesta a la En ocasiones, se utiliza coma alimento para
falta estacional de forraje verde. En la Sierra, el ganado el producto entero de la cosecha. La
la combinaci6n Avena bizantina-Vicia sativa producci6n actual y la limitada venta de
se ha difundido principalmente para este uso. banano liberan grandes cantidades de ese froto
Se emplea también el maiz ya sea cultivado que son regaladas 0 vendidas a precios muy
expresamente para este efecto, en cuyo casa bajos pOl' los plantadores. POl' ello, el banano ha
es cortado en cl estadio de grano lechoso, 0 entrado en la dieta bovina no solo en las zonas
sus hojas secas y rastrojos después de la cose- de producci6n sino también en la regi6n
cha. En todos los casos, el forraje fresco, des- interandina. Los camiones que abastecen a la
pués de un ligero secado, es picado, se le agre- zona costera con legumbres de la Sierra,
ga melaza y a veces urea, y luego se 10 com- regresan cargados de bananos de desecho a un
pacta en silos-zanjas. Los silos son cubiertos precio de 200000 sucres* pOl' cargamento. Los
de chambas, alfombras de tierra con una co- pequenos ganaderos de la regi6n costera
bertura de kikuyu. En la Costa, las fuentes de hûmeda, que no disponen de pastos, alimentan
forraje para ensilado son un tanto mas diver- parcialmente a su ganado con banano verde
sificadas: hojas secas de maiz, de soya, raquis cultivado con ese fin. Esto es igualmente un
de banano. Sin embargo, la praetica deI ensi- medio de paliar la falta de forraje en estaci6n
lado sigue siendo sumamente limitada. seca.
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los anas 1991-1992
Componentes deI paisaje II Pastos... 99
•
posterior plantaci6n de pastos, la incorpora- Ganaderia exclusi- Ganaderia de
ci6n a la producci6n y, por 10 tanto, la pose- D vamente de carne doble proposito
si6n de la parcela otorgada por los organis-
mos de colonizaci6n.
Ganaderia principal-
mente de carne
• Ganaderia lechera
100 Paisajes Agrarios deI Ecuador
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los aiios 1991-1992
Componentes deI paisaje II Pastos... 101
Region litoral
tecnificacion liviana 2-3 4-5 700 2875000
tecnificacion alta 9 10-12 700 27594000
102 Paisajes Agrarios deI Ecuador
nivel de la evaluaci6n deI peso y de la aprecia- hombre por 10 ha, pero la baja calificaci6n pro-
ci6n de la calidad deI animal. El precio indicado fesional de los empleados hace que en realidad,
anteriormente se refiere al animal en pie y esa cifra sea mucho mas elevada, hasta un
pesado en una balanza. Como este instrumento hombre por 2 ha.
no esta siempre a la mano, el primer cornpra-
dor procede a una evaluaci6n en dos etapas. Se
estima primeramente el peso total deI animal, 5 Perspectivas
luego su rendimiento una vez destripado (lige-
ramente superior al 50 % en el mejor de los En raz6n deI déficit de leche en el Ecuador y
casos) para llegar al numero de arrobas (uni- de la rentabilidad de esta producci6n, la gana-
dad de 25 libras, es decir 11,5 kg) pagadas a deria lechera puede aun extenderse en el pais.
aproximadamente 30000 sucres cada una. Los El aumento de la producci6n de leche no debe-
terneros de engorde 0 de carniceria se venden a ria realizarse solamente mediante la multipli-
60000 sucres por cabeza pero alcanzan valores caci6n de las explotaciones sino también
de 300 000 sucres si son de buena raza y estân mediante la busqueda de la elevaci6n de la
destinados a la reproducci6n. producci6n individual. Esto permitiria dismi-
nuir la proporci6n de leche consumida in situ y
..
Como un animal de carniceria necesita apro- liberar proporciones superiores para el merca-
ximadamente 4 anos para alcanzar su peso do. TaI aumento depende sobre todo de los
comercial (alrededor de 1 000 libras en balanza) esfuerzos de los pequenos ganaderos que pu ,-
y la carga es cercana a 1 animal por hectarea, la den mejorar en gran medida la calidad genética
producci6n en bruto es de (1000 x 700 : 4) 0 sea de sus rejos y la alimentaci6n de su ganado. La
175000 sucres por hectarea y por ano. Si se con- actual tendencia de desarrollo de explotaciones
sideran gastos de vacunas y de mana de obra, la lecheras en la regi6n litoral deberia permitir
amortizaci6n de la propiedad, riesgos de muerte abastecer mas facilmente a los mercados
de los animales, se deduce que la ganaderia de importantes de esa regi6n.
carne es una actividad poco rentable.
El mercado de la carne es, debido a los
4.6 Subproductos precios que siguen siendo bastante bajos con
relaci6n a los de la leche, mucho menos atrac-
En el matadero, los animales proveen, ade- tivo. Las explotaciones orientadas unicamente
mas de la carne, las visceras y el cuero. Estos hacia esta producci6n no pueden ser algo renta-
subproductos de un valor no despreciable (el bles sino en superficies muy grandes y con cos-
conjunto de visceras de un animal yale 60000 tos de producci6n muy bajos. Tales criterios
sucres, cada pata de res 1500 sucres y un cuero econ6micos conducirian a recomendar la sub-
25000 sucres) son propiedad deI ultimo inter- utilizaci6n de las tierras ... En la Costa, la
mediario que encuentra aUi una fuente de ganaderia de doble producci6n (de la que no se
ingresos que se suma al margen de ganancia tienen datos estadisticos) seria una soluci6n si
obtenido con la carne. se puede alcanzar, con un moderado grado de
tecnicidad, cargas de aproximadamente 2 cabe-
4.7 Mano de obra zas por hectarea y una producci6n de leche
superior a 5 litros/dia/vaca. Refiriéndose al
La diversidad de situaciones no permite sino cuadro BIO anterior, eUo corresponderia,
dificilmente dar cifras validas para toda la acti- grosso modo, al casa de las mejores explotacio-
vidad ganadera. Los menores valores corres- nes de las vertientes andinas, resultados que • 1
ponden a las explotaciones de carne donde se no parecen imposibles de obtener. En ese caso,
observan valores tan bajos coma 1 empleado la producci6n de carne proveeria 350000 sucres
por 100 ha (aparte de la mana de obra fami- por hectarea y por ano, 10 cual, sumado a los
liar). La busqueda de una producci6n mas ele- 1300000 sucres producidos por la venta de
vada determina un aumento de la mana de leche, proporcionaria un ingreso decente a las
obra. La implantaci6n de una infraestructura explotaciones de mas de 20 ha.
adecuada (banos de insecticidas en lugar de
pulverizaci6n de los animales, conservaci6n deI
rejo lechero cerca de las plantas de ordeno, 6 Otras crias para carne
empleo de cercas eléctricas) permite minimizar
el volumen de personal necesario. En la regi6n La ganaderia bovina es el unico tipo de
andina, la AGSO piensa que una explotaci6n ganaderia que, a través de los pastos, marca
lechera puede manejarse eficazmente con 1 profundamente casi todos los paisajes deI Ecua-
Componentes deI paisaje II Pastos... 103
dor, pero, coma se indicô en la introducciôn, A través de todo el pais, numerosos pequefios
• existen otras crias de animales que proveen criadores mantienen la tradiciôn de los gallos de
came. Nos limitaremos aqui a hacer brevemen- pelea con razas seleccionadas minuciosamente y
te menciôn de ellas y seran tratadas en los sis- cuidados cotidianos de sus animales.
temas en los que participan. El cuadro BU 1"e-
sume algunas de sus caracteristicas. 6.2 Los puercos (segUn Dubly, 1985)
6.1 Los polIos Los porcinos eran, antes deI desarrollo de
las plantaciones de palma africana, la unica
La producciôn de came de pollo a1canzaria
de 50000 a 60000 toneladas por ano, es decir la fuente de materia grasa y su cria es tradicional
mitad de la producida por los bovinos. en todo el Ecuador. Se desarrolla particular-
mente en la regiôn montafiosa. A fines de los
Muchas familias campesinas y periurbanas afios 1980, las estadisticas deI Banco Central
mantienen algunas aves de corral para su deI Ecuador estimaban ese ganado en mas de 2
propio consumo 0 la venta de los excedentes en millones de cabezas y la producciôn de came es
el mercado local. Dichas aves yerran en mas 0 menos equivalente a la de los polIos, es
libertad en los alrededores de la casa, no decir 50000 toneladas/afio.
disponen de un gallinero y se alimentan de los
desechos domésticos ademas de 10 que pueden La mayor parte es producida por pequefios
encontrar en el huerto 0 vergel cercano. No criadores que poseen menos de 10 animales.
reciben ningun cuidado en particular y son Los propietarios de menos de 5 ha poseian en
muy sensibles a las condiciones climaticas, en 1974 cerca de la mitad deI ganado porcino deI
particular a la altitud y a la humedad. pais. Los animales divagan cerca de las casas 0
son llevados con las vacas, y a veces las ovejas,
En ciertos casos, se puede distinguir un tipo a pastar en praderas 0 formaciones herbosas
de cria familiar semi-tecnificada con un numero naturales (paramos, borde de la carretera,
mayor de aves, un gallinero, aportes adicionales barbechos). Esta cria tradicional utiliza razas
de alimento coma granos desechados u otros locales altas y longilineas desarrolladas a
desechos agricolas y una intervenciôn en casa partir de los animales introducidos por los
\ ~
de epidemia. La vocaciôn de esas crias es mas la colonizadores espanoles. Durante el periodo de
venta local que el autoconsumo y prosperan cebo, se da un complemento alimentario
mas en las zonas secas que en la humedas. (afrecho, granos de mala calidad, bananos,
1
cana de azucar, papa china, etc.) y los puercos
Los grandes mercados urbanos son abasteci- cebados son sacrificados para festejos 0 para_
dos esencialmente por crias industriales que satisfacer alguna necesidad imprevista de
mantienen varios miles de aves en hangares dinero.
ventilados y con un seguimiento veterinario. A
fin de evitar los problemas sanitarios ligados al Para la producciôn de carne se utilizan ra-
exceso de humedad, esas crias se implantan zas anglosajonas de reciente introducciôn
preferentemente en las zonas secas. Para la . (Yorkshire, por ejemplo), una tecnologia mas
producciôn de huevos, las gallinas son criadas avanzada y manadas mas numerosas. Este
en bateria. tipo de cria se encuentra ya sea coma activi-
104 Paisajes Agrarios deI Ecuador
,,)
,
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 105
1 Cultivos nativos y especies introducidas trajeron con que satisfacer sus necesidades mas
variadas: trigo para el pan, vinas (oficialmente
Si bien la agricultura estaba muy desarro- para el vino de consagrar... ), plantas medicina-
llada antes de la llegada de los espaiioles, éstos les para curaciones, etc.
introdujeron rapidamente animales y numero-
sas plantas para tratar de conservar en los Si se consideran las seis plantas alimentarias
Andes sus costumbres alimenticias. mas utilizadas hoy en dia -arroz, banano, trigo
(toda la poblacion), maiz (mas en la Sierra),
El cuy y la llama eran los animales domesti- cebada (partes mas altas), yuca (Amazonia)-, se
cados por los grupos prehispanicos. Los coloni- observa que solo dos de ellas, el maiz y la yuca,
zadores introdujeron primeramente el caballo, son cultivos prehispanicos. Entre los cultivos
instrumento esencial de dominacion militar, y industriales 0 de renta, las principalesespecies
luego todos los demas animales domésticos nativas son el cacao y el algodon -la hevea (cau-
existentes ahora en el pais: reses, ovejas, ca- cho), especie amaz6nica, puede también consi-
bras, aves de corral, perros y gatos. derarse como especie local-. Los demas produc-
tos (banano, azucar, café, aceite de palma 0 de
1.1 Cultivos prehispanicos soya, fibras de abaca y té) provienen de especies
introducidas, a veces en épocas muy recientes.
Los pueblos prehispanicos disponian ya de
una gama de plantas alimentarias de las cuales Las estadisticas por cultivo publicadas por
algunas aun subsisten sobre, todo en la region el SEAN (1992) enumeran 28 especies nativas
andina. Estas plantas endémicas comprenden que ocupan 1102 160 ha, mientras que las plan-
principalmente frutas como Cyphomandra beta- plantas introducidas representarian un total de
cea (tomate de arboD, Solanum quitoense (na- 35 y 1472630 ha. De acuerdo a un inventario
ranjil1a), Carica pentagona (babaco), C. chry- mas amplio (Huttel, 1983), de los 149 productos
sopetala (chamburo), C. cundinamarcensis (chi- que se encontraron en el mercado en Quito, so-
hualcan), etc. Los tubérculos son otro grupo lamente 60 provienen de plantas nativas.
importante entre las especies andinas: Sola-
num andigenum (papa), Arracacia zanthor- 1.2.a Historia de las introducciones
rhiza (zanahoria blanca), Oxalis tuberosus
(oca), Ullucus tuberusus (melloco), Tropaeo- Para una gran parte de las plantas introdu-
lum tuberosum (mashua). Otro alimento propio cidas fue posible, utilizando trabajos recopila-
de los Andes son las plantas de granos ricos en dos por Patifio (1964, 1967 y 1969), encontrar
proteinas como Lupinus mutabilis (chocho), las fechas de introduccion, exactas en ciertos
Chenopodium quinoa (quinoa) y Amaranthus casos, aproximadas en otros. Aunqu~ el inven-
sp (bledo). Aunque la papa se ha expandido tario de plantas alimentarias (que no incluye
mundialmente, otras de estas plantas han cai- las medicinales) de los mercados de Quito no
• do poco a poco en el olvido y solo recientemente constituye una lista exhaustiva de las plantas
se han desplegado esfuerzos de investigacion, utilizadas en el Ecuador, se 10 emple6 para
preservacion de variedades e industrializacion estimar la importancia relativa de las plantas
en el caso de la quinoa 0 deI chocho y, en menor nativas y de las plantas introducidas.
medida, de los amarantos.
Fuera de las plantas nativas, entre las cua-
1.2 Plantas introducidas les las endémicas representan una fraccion im-
portante, las introducidas fueron clasificadas
En el caso de las plantas, el proceso de acli- segun su siglo de introduccion (figura BI7).
matacion fue mucho mas importante que en el Desde inicios de la colonizaci6n, se introduje-
caso de los animales, pues los colonizadores ron plantas alimentarias esenciales como el
106 Paisajes Agrarios deI Ecuador
trigo, la cebada, la col y el banano. Los misio- vos actualmente ampliamente difundidos coma
neros introdujeron la vina. En el siglo XVI se la papa, el tomate, el tabaco, algunos fréjoles.
pueden mencionar también frutales coma la •
higuera, el naranjo, el limonar 0 el membrillo. 1.2.b Ürigen y uso
En el siglo siguiente, se trata de plantas ali-
mentarias secundarias coma la remolacha, los Las especies introducidas provinieron prime-
esparragos, el apio y la espinaca que se aclima- ramente de Espana, tratandose tanto de plan-
taron al nuevo continente. Los condimentos tas cultivadas usualmente (garbanzo, haba,
formaron igualmente parte de 10 que se intro- trigo e hi go pOl' ejemplo), coma de cultivos
dujo en el siglo XVII: cebolla, ajo, jenjibre. Esta ex6ticos de ese pais (arroz, cana de azucar, na-
tendencia prosigui6 en el siglo XVIII con ranja y banano, por ejemplo). S610 hay pocos
alimentos accesorios coma la judia, la alcacho- ejemplos de plantas introducidas provenientes
fa, el hinojo 0 la zanahoria, pero es también la de otros continentes: tamarindo y mango de
época de introducci6n de dos plantas que Asia, guandul de Arrica, pimienta de India pero
tuvieron un desarrollo extraordinario, una introducida desde Brasil, y soya, de origen chi-
coma alimento basico, el arroz, la otra coma no pero introducida desde estaciones agron6-
cultivo de renta, el cafetal arabica. Durante los micas de los Estados Unidos.
siglos XIX y XX, la afluencia de plantas exte-
riores parecen disminuir y no se observan sino Cuando se trata de clasificar las plantas en-
legumbres secundarias coma el calabacin contradas seglin su tipo de uso (figura B18), se
(suquini) 0 la lenteja, aunque también plantas observa que los principales aportes se refieren a
para cultivos de renta como el cafetal cane- las legumbres (col, lechuga, etc.), categoria en la
phara 0 la soya. Estos aportes se mantienen que, al menos actualmente, las plantas nativas
aun actualmente y es asi como se ha visto desempenan un papel menor. Es en el rubro de
aparecer a inicios de los afios 1990 frutas como las frutas (no en el sentido botanico sino en el
el kiwi (Actinidia chinensis) cultivado en el sentido de postre 0 dulce), donde las especies
valle de Patate. locales siguen siendo ampliamente predominan-
tes. En el casa de féculas, tubérculos 0 granos,
Si bien el continente sudamericano se ha be- el nUillero ya importante de las especies locales
neficiado con a introducci6n de plantas deI Vie- se ha duplicado pOl' la introducci6n de especies
jo Mundo, también ha aportado mUltiples culti- ex6ticas.
En el Ecuador, el cultivo de este platano productor de fibras comenz6 en los anos 1950 durante
la colonizaci6n intensiva de la parte baja de la provincia de Pichincha, y no ocupa sino 10000 ha
aproximadamente. La fibra de Musa textilis tiene propiedades excepcionales, coma por ejemplo
una longitud de ruptura de 50 a 70 km y, después de haber servido para fabricar cuerdas de mari-
na, es necesaria para la elaboraci6n de papel especial resistente al agua (billetes de banco, boIsas
para infusiones, por ejemplo). La producci6n ecuatoriana es exportada en su totalidad sin que se
,. efectue tratamiento local alguno. Las Filipinas son de lejos el principal productor mundial de aba-
ca (96 %, Encyc10pedia Universalis).
•
80 0 W
Plantaciones de
abaca
-
Unidad T39
,....,,
• __ t ,
,"
,- Plantaciones de
abaca dispersas
\V\
Limite superior
dei piso calido
'"'---!
Limites de las zonas
de humedad
Principales ciudades
Carreteras principales
,,
<
"
...
,
,
.,
,
o 100
,.
•
110 Paisajes Agrarios deI Ecuador
El algod6n es un arbusto perenne cuyas especies cultivadas provienen deI Asia Menor y de
América Latina. El Ecuador se encuentra en el area natural de Gossypium barbadense, mientras
que otra especie, G. hirsutum, cubre la franja costera atlantica colombo-venezolana.
Actualmente, el cultivo de algod6n cubre de 10000 a 30000 ha. El volumen de producci6n varia
seglin las superficies plantadas aunque también en funci6n de las condiciones elimaticas, entre
12000 Y mas de 40000 toneladas de algod6n-semilla (figura B20). La demanda nacional esta esti-
mada en 45000 toneladas, es decir 17000 toneladas de algod6n-fibra.
El algod6n silvestre es un arbusto perenne Para el cultivo de algod6n, los suelos deben
que se encuentra en zonas tanto humedas coma ser profundos, permeables y ricos. Se observa
secas, pero las plantaciones actuales se restrin- una notable tolerancia a la saI.
gen a las zonas secas y el cielo de cultivo es
anual. Las liltimas plantaciones de algod6n deI Las exigencias climaticas son mas comple-
Mira eran regadas durante la fase de creci- jas. Ademas de temperaturas elevadas, este
miento, los pies se resecaban después de la co- cultivo demanda una importante insolaci6n y
secha y eran podados antes deI riego, para ini- una gran humedad atmosférica. La pluviome-
ciar otro cielo de producci6n. tria debe ser suficiente coma para garantizar el
crecimiento de la planta hasta su floraci6n pe-
Actualmente, las variedades preferidas per- ro, cuando las capsulas alcanzan la madurez, la
tenecen a los grupos «Cocker» y «8toneville» (G. sequia deberia ser absoluta para no danar las
hirsutum) cuyo cielo es de 5 meses y producen fibras. En 1992, al igual que en 1983 -ver fi-
fibras de mediana longitud. gura B20- se perdi6 buena parte de la cose-
Superficies sembradas
(miles de hectareas) = curva
Cosecha de algodén en semilla
(miles de toneladas) = histograma
.,
40
Figura B20: Evoluci6n de las
30 superficies sem bradas en
algod6n y de la producci6n
ft 20 de 1971 a 1991
:.';;:' ;;-
Fuente: Programa Nacionai deI
10 Algod6n
o
1975 1980 1985 1990
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 111
Sembrios de algod6n
80 0 W importantes
Sembriœde
IAIg od6n l
• a1god6n predo-
minantes Uridad C':Jl
==== Sembriœ de
;;;;;; a1god6n Yreslos
de bosque semi-deciduo
Unidad C38
,. Sembrios de 81godén
secundarios
Asociados con
otros cLilivos anuales
y pastos Unidad P35
r-:l Aoociados con
~ olros cultivos anuales
dentro de formaciones
arbustivas Unidad D36
~ Aoociados con
~ otros cultivos anuaJes
y pastos dentro de forma-
ciones forestales
Undad D35
~ Asociados con
1 ~ pastos, otros cLitivos
y restes de bosque
Uridad D37
Otras zonas
' .. ,
1" ..,
a1godorleras
\V\..
Limite superior
dei pise calido
Pmcipales dudades
"
Carreeras pmcipales
•
,
,
,
o 100 200 km
Figura B21: Mapa de localizaci6n de las unidades cartograficas con plantaciones de algod6n
112 Paisajes Agrarios deI Ecuador
80
60
%
1.'
•
Porcentaje de los cultivadores
Porcentaje de las superficies
Figura B22: Distribuci6n de los campe-
sinos y de las superficies sembradas en
algod6n segun clases de tamano (%),
40 1991
Clases de Fuente: Programa Nacional deI AIgod6n,
20 Guayaquil
superficies
sembradas
0
menos deS de 10 de 20 "'--m-'as-'" en algod6n
deS a10 a20 aSO de SO
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 113
sanos rosados» y los insectos picadores-chupa- brero de 1993, cuando la estaci6n lluviosa ya
dores. habia iniciado, los precios aun no habian sido
fijados y solamente se habian sembrado 6200 ha
Los tallos perforados por una larva de una y en junio de ese mismo ano, las semillas de
mariposa ("minador de tallo», «polilla minado- algod6n se ofrecian a raz6n de 15 sucres el kg
ra», Gasterocercodes) pueden morir si el ataque coma alimento para el ganado...
se produce en plantas j6venes.
Los subproductos deI desfibrado deI algod6n
El "gusano rosado» (Pectinophora) destruye tienen también un mercado. El aceite de las
todos las semillas de una capsula e impide el semillas, una vez sometido a una destoxica-
desarrollo de las fibras. ci6n, puede mezclarse con otros aceites alimen-
1- tarios (producci6n de 3300 toneladas en 1991-
Los insectos picadores-chupadores (Aphis, 1992). Las tortas y cascaras proporcionan un
Thrips, Tatranychus) se alimentan de la savia complemento alimentario para el ganado.
de las plantas, las debilitan y reducen su pro- Dada la prolongada estaci6n seca en las zonas
ducci6n. de cultivo de algod6n, este complemento es
muy apreciado.
3.5.d Cosecha
3.6 Perspectivas
Es manual y deberia realizarse cuidadosa-
mente de modo que se recoja unicamente un La producci6n de las plantaciones ecuato-
producto maduro, seco y sin impurezas. Actual- rianas esta destinada unicamente al mercado
mente no es posible pensar en una mecaniza- local. Las condiciones climaticas (sequias 0 llu-
ci6n pues la gran mayoria de las plantaciones vias excesivas), el elevado costo de producci6n
se encuentran en pendientes fuertes. (importante consumo de productos fitosanita-
rios), la lentitud en la obtenci6n de créditos
3.5.e Rendimiento oficiales indispensables para este cultivo y,
finalmente, la existencia de un excedente mun-
Varia segun las condiciones topograficas. dial de algod6n a bajo precio proveniente de la
Los algodoneros cosechan en promedio de 0,9 a ex Uni6n Soviética son otros tantos factores
1,4 t/ha en las colinas y hasta 1,8 t/h en los fon- limitantes no s610 deI desarrollo de las planta-
dos de valle mas humedos (algod6n-semilla). El ciones de algod6n en el pais sino de su manten-
SEAN senala, para 1989, un rendimiento de ci6n. Este cultivo corre entonces el riesgo de
1,1 t/ha. Los precios establecidos en principio a seguir la evoluci6n observada en Colombia
inicios de cada campana eran de 63000 sucres donde las superficies plantadas con algod6n
por quintal en 1991 y de 76000 en 1992. En fe- pasaron recientemente de 220000 a 60000 ha.
.'
•
114 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Las superficies cultivadas con arroz, poco importantes en 1930 (15000 ha), aumentaron regu-
larmente hasta 1949 (62000 ha) disminuyendo luego, al final de la segunda guerra mundial, antes
de repuntar nuevamente a partir de 1970 (77 000 ha en 1970, 103000 ha en 1977) para alcanzar
188000 ha en 1991 -segUn el Programa Nacional deI Arroz (PNA), aunque 290000 ha seglin el
SEAN; en ambos casos las cifras contabilizan dos veces las superficies que producen dos cosechas
al ano-.
•
La productividad también ha aumentado: los rendimientos pasaron de 1,6 t en 1977 a 3,6 t de
arroz cascara (0 paddy)lha en 1991, es decir 2,3 t de arroz blanco.
El arroz es actualmente uno de los alimentos basicos deI Ecuador. En efecto, su consumo es de
32 kg per capitalano (40 en Quito, 72 en Guayaquil). Una superficie de 120000 a 140000 ha se des-
tina a su cultivo. En aproximadamente la mitad de esa superficie se efectua una segunda cosecha
anual. De aHi una producci6n de 500000 a 600000 t de paddy/ano que no siempre satisface inte-
gramente la demanda nacional, viéndose el Ecuador obligado a menudo a importar una cantidad
que representa deI 10 al 15 % de su propia producci6n.
4.1 Exigencias
Duraci6n dei cielo (dfas) 118-130 97-110
El arroz es poco exigente desde el punto de
Rendimiento (sacos de 200 libras) 43-67,7 60,5-74,5
vista edafico, pero los suelos de textura arci-
Hosa con una buena retenci6n de agua son par- Resistencia a Sogatodes débil buena
Las variedades obtenidas por el INIAP re- la mayoria de las variedades mejoradas provie-
quieren una temperatura constante y elevada nen deI INIAP. Las mas cultivadas con actual-
(25 a 35°) durante su cielo de cultivo. mente INIAP 415 e INIAP 11 creadas en 1984
y que poco a poco reemplazaron a las va,rieda-
El arroz es una planta que requiere gran des INIAP 6, 7 y 10.
cantidad de agua y no puede cultivarse sino en
las zonas con al menos 3 6 4 meses l1uviosos INIAP 415 representa por si sola el 58 % de
por ano 0 bajo riego. En la regi6n costera, rara las superficies cultivadas en estaci6n l1uviosa
vez es posible una segunda cosecha de arroz (como cultivo pluvial pero sobre todo regado) y
pluvial, debido a las limitadas precipitaciones el 32 % de las superficies cultivadas con riego
de finales de la estaci6n humeda. en estaci6n seca. Al igual que INIAP 6, 7 Y 10,
es poco resistente a Sogatodes oryzicola y a Py- -1
4.2 Variedades ricularia oryzae.
La utilizaci6n de variedades mejoradas no INIAP 11, variedad que fue creada esencial-
ha dejado de crecer. Mientras en 1987 se utili- mente para las zonas donde el cultivo deI arroz
zaban linicamente en el 57 % de las superficies es pluvial sin riego (cultivo poco tecnificado),
cultivadas, en 1994 cubren el 92 % de eHas presenta, en cambio, una mejor resistencia a
(cuadro B12). Aparte·de la variedad «Donato», esas enfermedades que INIAP 415 (cuadro B13).
Guayas 3282 1 4004 472 5330 196 5715 96 13236 79 31567 2181
Los Rios 3619 1205 10925 890 11043 337 11215 154 26479 172 63281 2758
Canar 83 32 147 18 133 4 109 2 0 0 472 56
Loja 277 83 313 30 205 8 0 0 0 0 795 121
Manabi 1336 506 805 83 133 3 0 0 0 0 2274 592
Esmeraldas 1877 656 1805 202 0 0 0 0 0 0 3682 858
El Oro 325 235 15 2 0 0 0 0 0 0 340 237
Amazonia 1535 1336 0 0 0 0 0 0 0 0 1535 1336
• TOTAL 12334 5391 18014 1697 16844 548 17039 252 39715 251 103946 8139
l
Cuadro B14: Superficies sembradas con arroz (N. ha) y numero de arrozicultores (N. cult.) por
provincia y clases de superficie sembrada en arroz en cada propiedad
Fuente: Programa Nacional deI Arroz y de Control de Piladores, MAG, 1991
40 Miles de hectareas
30
20
10
2000
o menos .....--J~~..,......E!EŒ!!;ll!!I-,....Iill~m....,Clase de
de 50 mas superficie (ha)
de5 a 100 de 100
116 Paisajes Agrarios deI Ecuador
80 0 W
1 Arroz 1
"
"
?l ~ 0 ° Principales ciudades
Carreteras principales
o _=~~=_",='===~
o.'
100
__"'200
" km
Unidad C47
En la regi6n arrocera deI Guayas y de Los En las zonas favorables, es decir aquel1as
Rios, los arrozales de mas de 100 ha represen- con mas de 7 meses humedos al ano, la cosecha
tan el 36 % de la superficie arrocera total y los deI arroz cultivado en estaci6n lluviosa es sè-
inferiores a 5 ha apenas el 10 y el 5,7 % respec- guida de un segundo cultivo anual, menos exi-
tivamente. Ademas, los agricultores que poseen gente en agua, de maiz 0 soya.
s6lo reducidas superficies arroceras estân agru-
pados generalmente en cooperativas. 4.5.a Siembra
Sembrfo directe
Trasplante
Cuadro B15: Porcentajes de campesinos seglin el método de sembrio
Fuente: INIAP - PNA - ClAT, 1987
118 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Los daiios mas importantes se deben a in- La mayor parte de la cosecha (alrededor deI
sectos tales coma Rupela albinela, Spodoptera 85 %) se dirige a las piladoras, llevada por el
frugiperda y Sogatodes oryzicola, este ultimo mismo agricultor, por un intermediario y mas
vector deI virus que provoca la enfermedad recientemente casi siempre por el propietario
conocida como «hoja blanca». de la piladora quien va a comprar directamente
la producci6n. El arroz es entonces secado y
Un hongo, Pyricularia oryzae, es también pilado.
frecuente, sobre todo en el arroz pluvial.
Seglin INIAP-PNA-CIAT (1987), el aumento
Los tratamientos particularmente onerosos deI precio deI arroz entre el agricultor y el con-
no se justifican sino cuando los ataques son sumidor seria de apenas el 26,8 %. En realidad,
importantes, pero la mayoria de los agricultores el precio de cornpra al productor se duplica
ignoran las normas a partir de las cuales es seglin las estaciones y es mas 0 menos cons-
razonable tratar, y efectuan a menudo trata- tante para el consumidor. Como el agricultor
mientos preventivos excesivos. rara vez puede almacenar el arroz, es la pilado-
•
Rendimiento
t/halafio de paddy 5,04 3,91 3,69 2,90 2,95 2,85
Producci6n miles de
toneladas de paddy 8,18 33,04 30,15 12,19 7,40 6,73
•
120 Paisajes Agrarios deI Ecuador
El banano, coma producto de consumo local, es tradicional en las regiones calidas deI Ecuador.
Su rapida difusiôn hizo incluso creer a los espaiioles de la segunda ola de colonizaci6n que se
trataba de una planta nativa, mientras que es originaria deI Extremo Oriente. Fue cultivada para
la exportaciôn desde 1920, pero no alcanz6 su auge sino en los aiios 1950. Las superficies
cultivadas no dejaron de crecer hasta 1966, fecha en la que cubrian mas de 163000 ha.
Debido al mal de Panama, que afecta a la variedad Gros Michel, la unica ntonces cultivada, las
superficies disminuyeron, y la variedad Cavendish reemplaz6 poco a poco a la anterior para
estabilizarse en alrededor de 60000 ha de 1978 a 1987 (figura B25).
Debido a un aumento deI precio deI banano en el mercado internacional, la extensi6n de las
plantaciones de banano de exportaci6n repunt6 en esa fecha de tal manera que las superficies se
multiplicaron por mas de dos entre 1987 (61400 ha) y 1992 (134400 ha). El consumo interno de
banano se estima en un 30 % de la producci6n. El platano cultivado para el autoconsumo 0 la
comercializaci6n a nivel nacional (alrededor de 100000 ha seglin el SEAN) tiene desde hace poco
salida al exterior (Estados Unidos, otros paises de América Latina) y mas de 10000 ha son culti-
vadas para la exportaci6n.
150
2.000
100
1.000
50
o-'o-,..--,---,--,r-r-....
--,--,---Y-y...y--Y-';J....Y--J-;'--Y-~'-Y-\
.............,.....,.'+'-'-r'-Y-Y-Y~""""I'-"i"-, -'fi,--"1',,--,!,LO.l"-'1'-,-'l"-,-""'-'l.LJII'-. lf'-'-,
1'"-. 0
1950 1960 1970 1980 1990
Itil Variedad "Gros Michel" III Variedad "Cavendish"
Componentes deI paisaje III Cultivas principales 121
IBananol
'~-""
-~::--'
,- ,
!..
"
)c
'~,
,
t:-
- '-
,
,
,
,
ïJ ~ 0 0 Principales ciudades
Carreteras principales
Le
._==--==_-----'_1.0=0====-__..;2;,j9 0 km
Asociaci6n con cultivos anuales mmnn Asociaci6n con cultivos anuales, restos de
Unidades T37, 51 WJlillJJ vegetaci6n natural Unidades 031, P34
Sin cultivos asociados Unidad T50 Asociaci6n con plantaciones permanentes, restos
~ de vegetaci6n natural Unidades P31, 32
Bananeras secundarias
Associaci6n con cultivos permanentes yanuales,
Sin pastos
Asociaci6n con plantaciones permanentes
D restos de vegetaci6n naturalUnidades 032,33,36,38
El banano requiere suelos homogéneos, Las plantaciones son de tamaiïo muy varia-
profundos y de textura franca. Es exigente en ble. Las de mas de 30 ha representan cerca deI
nitr6geno y en potasio y necesita gran cantidad 60 % de las superficies cultivadas, las de 16 a
de agua. De alli que se 10 cultiva en regiones de 30 ha y las de 1 a 15 ha, el 20 % en cada caso.
pluviometria regular (120 a 150 mm/mes) 0
bajo riego. El banano soporta insolaciones muy Cerca deI 50 % de las explotaciones tienen
variadas, pero su producci6n (y su demanda de menos de 10 ha de plantaciones de banano,
agua) aumenta con el numero de horas de sol pero no representan sino el 13 % de la super-
por ano. ficie sembrada. Las superficies mas frecuentes
se situan entre 20 y 6Q ha que corresponden al
5.3 Zonas de cultivo (ver figuras B26 y B27) 24 % de las explotaciones y al 36 % de la super-
ficie. Las propiedades muy extensas se tornan •,
La figura B26 representa el conjunto de las raras, siendo el tamano mayor reconocido por
unidades cartograficas en las que esta presente Alvarez y Chang (1992) de 1 700 ha -hacienda
este cultivo, las que se clasifican seglin la den-
sidad de las plantaciones de banano y luego
La Clementina-. •
seglin los demas cultivos 0 rasgos deI paisaje. Segun Charvet (1987), mas deI 60 % deI
La figura B27 es una simplificaci6n de la ante- banano exportado es producido por las explo-
rior, que muestra s610 dos clases de densidad taciones de mas de 200 ha. Las encuestas de
pero permite representar, coma fondo deI ese mismo autor senalan que los plantadores
mapa, los limites de las zonas de hu~edad. de banano pueden poseer varias explotaciones
unicamente bananeras en las clases de las
El banano cuyos frutos estan destinados a la mayores superficies, mientras que cultivos
exportaci6n, es cultivado sobre todo en la Ila- anexos coma el cacao 0 los cultivos alimenticios
nura costera, sin riego de Quinindé a Quevedo, se encuentran sobre todo en las plantaciones
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 123
80 0 W
1 Bananol
, .
".
'.
f
. t.
)L'~,
, ... -'-
,
,
,
,
,
Principales ciudad es
Carreteras principales
0, 100 200
, km
Bananeras predominantes,
zonas incluyendo las plantaciones para exportaci6n
, 90 W 0
0> Q
~
.. ~
( " ' \ Zonas de intervenci6n dei Programa Nacional dei Banano, 1992
..........
30 %
20
10
•
Clases de superficie
o œ1 'œ5 œ10 œ15' œ2)' œ4)' œOO.,.a,œ"""""OO"-."·œ""""'100œ"'-;--'-1'--SO"""-œ-'2)()""'-;'-œ---'2iQ"""'-I11é6"""'' -'-,dè (hectareas) de las
a5 a10 a15 a2) a4) aOO aOO a1CD a15:l à2JJ a2:D a3J) :DO explotaciones bananeras
•
• Porcentaje dei numero de las explotaciones Porcentaje de las superficies
f
de menor superficie y de un nivel de tecnicidad El riego, necesario en las regiones secas si-
menor. tuadas al sur de Quevedo y al oeste de Esme-
raldas, se realiza de acuerdo con el grado de
5.5 Cultivo ~banano de exportaci6n- tecnicidad (ver cuadro BI8): por gravedad, pero
(Alvarez y Chang, 1992; Pozo, 1992) sobre todo por aspersi6n. La alimentaci6n hidri-
ca 6ptima seria de 160 a 180 mm al mes, compl-
5.5.a Plantaci6n etandose las precipitaciones con riego. En perio-
do seco, éste debe aplicarse cada semana.
Se la realiza después de cavar canales de
drenaje en las zonas donde la napa freatica es 5.5.b Formas de cultivo y cuidados
poco profunda, en particular en los suelos
aluviales de la baja llanura deI Guayas hasta El Programa Nacional deI Banano (PNB)
Arenillas. La plantaci6n es efectuada mediante reconoce tres grados de tecnicidad de las
rebrotes dispuestos en cuadrados 0 hexagonos, plantaciones (entre paréntesis se dan los
forma que presenta la ventaja de lograr una porcentajes de las superficies de cada cate-
mejor ocupaci6n deI suelo (1374 a 1534 plan- goria): las plantaciones tecnificadas (33,2 %),
tas/ha) y una mejor insolaci6n de cada pie. semi-tecnificadas (19,4 %) Y no tecnificadas
Estas plantaciones no son renovadas y los (47,4 %). El cuadro B18 presenta los modos de
Cavendish que reemplazaron a los Gros Michel cultivo empleados en las tres categorîas. Los
se perpetuan por sus hijuelos. cuidados dispensados son tanto mas intensos
%
100 •
80
60
.
40
20 Clases de superficie
(hectareas) de las
0-+-'!'""!"-........
d...e5~del0 de15 de20 de40 de60 de80œl00œl50 explotaciones
a10 a15 a20 a40 a60 a80 a 100 a15:l a2)() bananeras
Ci
o
S
"C
§
CD
Presencia de todos los elementos siguientes
Criterios de Riego por aspersi6n
Presencia de algunos elementos Ausencia de todos los elementos
~
00
Red de drenaje
definici6n
Funicular para el transporte
Instalaci6n de fumigaci6n yempacadora
de la lista de la columna de la izquierda de la lista de la primera columna
-....
j;l.,
CD
"C
~
00
Densidad promedio de
~.
--
1482 1309 1 174
plantaci6n (matas/ha) CD
Buen control sea por herbicidas de contacto Esencialmente con machete Con machete. Los herbicidas son usados
DeshiertJe (aplicaciones todas las 4-6 semanas) 0 por Si uso de herbicidas, las dosis son con frecuencias insuficientes y con Ci
~
herbicidas sistémicos (todas las 12-16
semanas)
insuficientes dosis excesivas. Control ineficaz ....<
:=;:'
@
Corte de las hojas viejas Todas las semanas Todas las 1 a 2 semanas Todas las dos semanas hasta 1 mes ~
S'
Corte de los rebrotes Todas las 8 a 10 semanas Mas 0 menos todas las 12 semanas Todos los 3 meses
....
n
"C
~
Fertilizaci6n
En promedio 7,5 aplicaciones por ano En promedio 3,7 aplicaciones por ano En promedio 2,1 aplicaciones por ano ro-
00
nitr6geno 315 kg/ha - potasio 311 kg/ha nitr6geno 223 kg/ha - potasio 197 kg/ha 161 kg/ha N, 72 kg/ha K
Por aspersi6n sobretodo suprafoliar Por aspersion 0 gravedad Por gravedad 0 sin riego
Riego
49 ciclos por ano 14 ciclos por ano (en las zonas humedas)
97 % de los racimos - en 50 % de los casos 91 % de los racimos - en 20 % de los 94 % de los racimos - ningun uso de
Enfundamiento
con fundas tratadas con insecticidas casos con fundas tratadas fundas tratadas
Cortes todas las dos semanas
Cortes todas las semanas
Cortes todas las semanas Racimos cortados inmaduros y con frutos
Cosecha Racimos de edad menor
Racimos de 10 a 13 semanas de edad pequenos
Transporte usualmente a espaldas
Transporte a espaldas
Producci6n anual
1 845 (36) 1 294 (25) 1094 (21)
cajaslha (toneladas/ha)
Cuadro B 18: Caracteristicas de la plantaciones bananeras Fuente: elaborado segun Alvarez & Chang, 1992 ......
t'V
01
126 Paisajes Agrarios deI Ecuador
,
128 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Este pequeno arbol originario de las zonas humedas de América Latina es, en superficie, el
segundo cultivo deI pais con mas de 300000 ha registradas. Su cultivo experiment6 un constante
desarrollo entre 1860 y 1900, una fuerte expansi6n entre 1900 y 1925 con una producci6n que lleg6
casi a las 50000 toneladas y una fuerte crisis de 1920 a 1950. Luego el cultivo tuvo una recupera-
ci6n frenada por las inundaciones de 1982-1983, por el inicio de la producci6n de las plantaciones .
de Malasia en 1984 y por una segunda ola de expansi6n deI cultivo de banano que, por si solo,
habria hecho disminuir las superficies plantadas con cacao en 35 000 a 38000 ha, seglin el Pro-
grama Nacional deI Cacao. Los volumenes exportados (figura B30) reflejan esta evoluci6n.
•
6.1 Cultivares dedor deI 7 % de las superficies. Se ha multipli-
cado por esquejes y es utilizado sobre todo en
Rasta finales deI decenio de 1910, s610 se las plantaciones recientes, con un buen nivel de
plantaban cultivares locales reunidos bajo el tecnologia. Su producci6n es mayor, pero el
nombre genérico de «nacionai» 0 «criol1o», que cacao que provee no tiene el aroma fino de la
forman parte deI grupo botanico Criollo. Se in- variedad Criollo 0 de sus hibridos.
trodujeron otras variedades en busca tanto de
una buena producci6n en tierras menos fértiles 6.2 Exigencias
coma de una mayor resistencia a las enferme- ,
dades mas frecuentes, la moniliosis y la escoba El cacao requiere esencialmente suelos bien
de bruja. drenados y relativamente fértiles. El clima
debe ser calido con temperaturas minimas
La clasificaci6n de los cultivares plantados absolutas superiores a 10°. Se recomienda una
aetualmente es confusa (existencia de hibridos pluviometria anual superior a 1250 e incluso
naturales) y variable de un autor a otro. Se 1 500 mm. El cacao puede soportar una esta-
debe retener que «nacional» ya no subsiste sino ci6n seca si no es demasiado intensa 0 dema-
en el 6 % de las superficies plantadas, pero que siado prolongada. Las fuertes lluvias de 1982-
con sus hibridos representa mas deI 90 % de las 1983 tuvieron un efeeto negativo en las cose-
mismas (Moyersoen, 1993). Trinitario es la se- chas de esos anos, pero un efecto benéfico en la
gunda variedad plantada representando alre- deI ano siguiente (ver figura B30).
Figura B30: Evoluci6n de las exportaciones de cacao y variaciones deI precio internacional
Fuentes: Programa Nacional deI Cacao, Collin-Delavaud, FAü y Gill & Duffus
Exportaciones anuales de
cacao en grano (miles de toneladas)
100
Precio internacional
(miles de US $ por
tonelada)
1 o
1850
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 129
6.3 Zonas de cultivo (ver figura B3l) Las zonas de cacao forman dos paisajes muy
diferentes. El primero, de grandes superficies
El cacao es un cultivo deI piso calido y no se de monocultivo de cacao, corresponde a varias
10 encuentra sino a altitudes inferiores a los situaciones: grandes haciendas tradicionales
300 m, salvo en las mesetas de Manabi donde (llanuras deI Guayas y de El Oro), pequefias y
puede alcanzar los 400 m.s.n.m. medianas propiedades, en ocasiones producto
deI retaceo de esas haciendas, propiciado por la
Ocupa principalmente la zona climatica Reforma Agraria, 0 de los vestigios de zonas de
humeda. En la zona seca, su presencia esta colonizacion deI piedemonte andino.
subordinada ya sea a la existencia de un nivel
freatico cercano a la superficie deI suelo 0 al El segundo paisaje esta formado de peque-
riego. En las zonas humeda e hiperhumeda, el fias superficies incluidas entre otros cultivos
• impacta de las enfermedades rungicas es dema- (café, banano, mango, cultivos anuales que
siado importante coma para que el cultivo predominan sobre el cacao en los bancos deI rio
pueda, en tales condiciones, alcanzar rendi- Guayas 0 en las bajas terrazas de Manabi;
mientos interesantes. cacao predominante sobre los cultivos secun-
• darios, en los conos deI Guayas, mesetas de
Los bancos de la cuenca deI Guayas fueron Manabi).
la primera zona de extension deI cultivo (Craw-
ford de. Roberts, 1980). Alli ya casi no se 10 en- 6.5 Cultivo
cuentra y las mayor abundancia de cacaotales
se localiza en la parte sur, asi coma mezclado 6.5.a Plantacion
con otros cultivos en las partes humedas deI
piedemonte de la cordillera andina y de las Se realiza con plantas derivadas de semillas
mesetas de la Costa. En la region amaz6nica o de esquejes. En el primer caso, la produccion
existen superficies reducidas de este cultivo se inicia al cabo de 5-6 afios, pero la duracion
(algo mas de 10000 ha, seglin el SEAN, 1991). de vida de la plantacion puede superar los 60
afios. Estas plantaciones son poco densas para
El reciente boom bananero ha desplazado al permitir el desarrollo de las copas -de 400
cacao en numerosas plantaciones deI centro y pies/ha (poco comun) a 1 110 pies/ha-. En el
deI sur de la llanura costera, en las explota- casa de los esquejes, la primera cosecha se
ciones medianas y grandes. En esa misma obtiene al cabo de 3-4 afios (incluso 18 a 20
region, se encuentran sin embargo plantaciones meses tratandose de las varie da des mas
renovadas, asi coma plantaciones jovenes. Es recientes; sin embargo, la produccion intere-
también alli donde el Programa Nacional deI sante no se logra antes de los 5 afios), pero la
Cacao cuenta concentrar sus esfuerzos aprove- duracion de vida es apenas de 25 afios. La plan-
chando las infraestructuras de riego y drenaje taci6n es mas densa, hasta 1 370 pies/ha. Los
instaladas para el banano. pies faItantes en las plantaciones en produccion
no son reemplazados por plantas de cacao, pues
6.4 Tamafio de las explotaciones no podrian desarrollarse adecuadamente. Por
ello,para controlar las malas hierbas, se planta
A inicios de siglo, las plantaciones de cacao banano en los espacios vacios.
de la llanura deI Guayas pertenecian a un
reducido numero de familias y las propiedades Las viejas plantaciones abandonadas e im-
, de mas de 1 000 ha eran la norma (Moyersoen,
1993). Entre 1950 y 1980, su desmembramien-
productivas pueden ser regeneradas mediante
una poda severa (los retofios florecen 1-2 afios
to debido a la Reforma Agraria y las nuevas después de la operacion). Las plantaciones jove-
. propiedades entregadas por la Colonizacion
permitio diversificar los tamafios de las planta-
nes son poco numerosas y no se encuentran
sino en el sur deI pais donde el cacao retoma,
• ciones. en explotaciones de tamafio pequefio y media-
no, algo deI espacio que habia perdido en bene-
Hoy en dia, se 10 cultiva tanto en pequefias ficio deI banano.
(5-10 ha) y medianas (10-40 ha), coma en gran-
des (mas de 100 ha, hasta 800 en el Guayas y Las plantaciones de edad predominan (mas
El Oro) propiedades. Las pequeiias y medianas deI 50 % de las plantaciones tienen mas de 30
representan el 90 % de las superficies planta- afios), y no son pocas aquellas que alcanzan 80
das con cacao y aproximadamente el 65 % de la afios de edad (vestigios deI boom de inicios de
produccion. siglo).
130 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Cacaotales
dominantes
1Cacao 1 ,, Asociados con
• plantaciones
perennes Unidades
T 44,47
Asociados con
bananeras
'- - Unidad T 36
Asociados
lDIID con pastos
Unidades
T48
Cacaotales
secundarios
D Cafetales predomi-
nantes Unidad T42
~ Asociados con
~ cafetales y pastos
Unidad T 45
Vegetaci6n natu-
• rai y pastos domi-
nantes Unidad P31
1'-Jl
LImite superior
dei pise calido
-------/
LImites de las zonas
de humedad
~DO
Principales ciudades
1 Carreteras principales
(".,
"" -'," , ,
/
-j.:
l' \,
,
,
,,
,
,
o 100
.
,
200 km
..
.
•
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los aftos 1991-1992
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 133
7 Café Coffea sp
El café se cultivaba en el Ecuador desde mediados deI siglo XVIII (Patino, 1969), pero s610 en
los ultimos decenios ha ocupado un lugar importante en la producci6n agricola. Constituye unD de
los principales cultivos deI pais, cubriendo actualmente mas de 400 000 ha con 130 000 produc-
tores. En superficie, es el principal cultivo de exportaci6n y proporcion6 110 millones de US$ en
.. 1991. El mercado mundial deI café esta saturado y la repartici6n de las cuotas nacionales es objeto
, de arduas negociaciones anuales. Ûni(lamente cuando las heladas disminuyen la producci6n de
Brasil, los demas paises pueden esperar colocar facilmente su producci6n en el mercado.
•
7.1 Variedades (figura B32) un café rico en cafeina pero de un sabor mas
rustico, 10 que hace que se 10 utilice para la
En el Ecuador se cultivan Coffea arabica, de elaboraci6n de café instantaneo. Los princi-
antigua introducci6n y la variedad «Robusta» pales productores se encuentran en Africa
deI Coffea canephora, introducida a inicios de occidental.
siglo.
7.2 Exigencias
El primero, llamado «Nacional» 0 «Criollo»
tiene a su vez dos variedades, la «Tipica», tradi- Los cafetos son tolerantes en 10 que se re-
cional de la regi6n costera y la «Caturra», fiere a la fertilidad deI suelo, y prosperan en
hibrido introducido desde Colombia hace s610 suelos tanto ricos coma pobres y acidos.
aproximadamente 20 anos. «Tipica» representa
mas de la mitad de las superficies plantadas. C. Las exigencias c1imaticas difieren seglin la
arabica provee un café de contenido relativa- especie.
mente bajo en cafeina pero de un sabor sutil, C. arabica, originaria de las montanas deI
que 10 transforma en la especie mas codiciada este africano, es un café de altura plantado
por el mercado internaciona1. Los principales habitualmente, en las mas bajas latitudes, en-
productores mundiales se encuentran en Amé- tre 1300 y 2000 m.s.n.m. El numero de meses
rica Latina, sobre todo en Brasil (por la canti- secos por ano puede ir hasta 4-5 y las precipita-
dad), en Colombia (por la reputaci6n) y en Cen- ciones deberian ser de 1500 a 1800 mm. por
troamérica. ano. Las temperaturas promedio deben ser de
20 a 25° con minimos absolutos no inferiores a
El segundo variedad pertenece a una espe- 4-5°. Por debajo de esos valores se habla de
cie mas productiva, Coffea canephora. Provee helada de los cafetales.
~
7.3 Zona de cultivo (figura B33)
c. ara!ca C. arabica
olras variedades var. Calurra C. arabica (alrededor de 250000 ha) esta
0,5% 2,6% restringida a altitudes inferiores a los 400 m en
134 Paisajes Agrarios deI Ecuador
80 0 W
C. arabica ""'<-----1
,-
....
~.- ,..
•
,
"
.
..
2J ~ D 0 Principales ciudades
Carreteras principales
o 100 200 km
Cafetales predominantes
• Asociaci6n con plantaciones permanentes Unidades T42, 44
90 0 W
o
~
Cafetales secundarios
Predominio de bananeras Unidad T49
Asociaci6n con otras plantaciones permanentes, cultivos
~ anuales y pastos Unidad T46
~ Predominio de pastos y algunos otros cultivos Unidades P31, 32
Predominio de vegetaci6n natural, algunos otros cultivos y
O pastos Unidades D32, 33
"
'" Limite aproximativo de predominio de las dos especies de café
25 % de las explatacianes
20 Figura B34: Porcentajes de las
15 explotaciones segun la
superficie sem brada con
10 Clases de superficies
sembradas en caletas cafetos
5 Fuente: Programa Nacional
(ha)
o deI Café, 1983
rrenos dei de2 de3 de4 de5 cielO de15 de20 de50 de 100 rffisde
dei a2 a3 a4 a5 al0 a15 a20 a50 aloo a200 200
• la regi6n costera, pero supera ese lîmite en la Si C. arabica se encuentra a menudo en las
zona sur de la Sierra donde, en las provincias asociaciones de arboricultura de la regi6n cos-
de El Oro y 1.,oja (Gondard, 1983), las plantacio- tera, C. canephora es abundante sobre todo en
nes de café prosperan hasta los 1800 m.s.n.m. los frentes pioneros de las zonas muy hurnedas
Matas ais lad as pueden encontrarse excepcio- de esa misma regi6n 0 de la Arnazonia.
nalmente hasta los 1800 m.s.n.m. en el valle
deI Chota. 7.4 Tamaiio de las explotaciones
1- %
100
D Irnproductiva
80 [Sj Basque Figura B35: Porcentajes
f::::.::::.) Pastas de cultivos asociados
60 ~ Otras cultivas con cafetales segun
_Maiz classes de tamafio
40
o Cacaa
Fuente: Programa Na-
cional deI Café, 1983
20 mu Banano
'-Calé
0
rnems dei de5 de 10 de20 de 50 del<D de2aJ mas Clases de tarnafia de
de1 a5 al0 a20 a50 aloo a200 a 500 de5<D las explatacianes (ha)
136 Paisajes Agrarios del Ecuador
el primer lugar 10 ocupan los pastizales que plantaciones no eran suficientes para asegurar,
demandan menos mana de obra. Se pue de a plazo, el mantenimiento de las superficies
también anotar la poca importancia del banano actuales. C. canephora presentaba, en esa
que, en estas explotaciones que producen café, época, una estructura en clases de edad mas
es apenas un cultivo alimentario para el auto- dinamica gracias a las nuevas plantaciones de
consumo. Asimismo, la poca importancia de las los frentes pioneros de las zonas hümedas en la
plantaciones de cacao pareceria indicar que los Costa y la Amazonia.
productores de café plantan poco cacao y que
existiria un cierto grade de exclusion entre 7.6.b Sombra
estos dos cultivos.
La variedad «Robusta» no necesita sombra y
7.6 Cultivo ésta no existe en las plantaciones ecuatorianas
salvo al momento de la plantaciôn y del inicio
7.6.a Plantacién del crecimiento de las plantas. Se limpia el
sotobosque, se instalan las plantulas de café y
C. arabica es un arbusto y se planta, debido solo después se cortan los ârboles. En la region
a su reducido desarrollo, con densidades de 625 am az ônica, se mantienen a veces algunos
a 2500 pies/ha en el casa de «Tipica» (casi siem- arboles, esencialmente de leguminosas 0 de
pre 1100 pies/ha) y de 2500 pies/ha en el casa laurel -Cordia.
de «Caturra». La primera variedad puede plan-
tarse con semillas mientras que la segunda C. arabica cuenta siempre con sombra,
debe serlo mediante esquejes. C. canephora, incluso para su variedad «Caturra» que no la
que forma pequenos arboles, es plantada con requiere. Sin embargo, se la aconseja, de
una densidad de 625-833 pies/ha, se multiplica alrededor del 30 %, a fin de limitar los trabajos
principalmente mediante semillas. de mantenimiento (poda, deshierbe). La som-
bra, al reducir la produccién, reduce igual-
Al implantar un cafetal, es frecuente un mente las grandes exigencias de abono de esta
cultivo intercalado de maïz tanto en el casa de variedad.
C. arabica coma en el de «Robusta». El banano
es la planta asociada mâs frecuente seguido de Los arboles de sombra son ya sea seleccio-
lejos del cacao en las zonas 10 suficientemente nados en la vegetacién natural preexistente 0
hùmedas. plantados antes del café. Un arbol de sombra
debe reunir varias cualidades: no entrar en
Los cafetales empiezan a producir en su competencia (a nivel de las raices) con las
cuarto afio «<Caturra» es un tanto mas pre- plantas de café, conservar su follaje durante la
coz). La producciôn sigue siendo rentable estaciôn seca, no proporcionar una sombra
hasta los 15·20 anos, excepcionalmente hasta demasiado importante y, de ser posible, apor-
los 25. tar un complemento a la plantaci6n. Los arbo-
les utilizados son ya sea frutales (banano, gua-
Cuando se llevé a cabo cense cafetero de ba, mange), ârbolesmaderables (cedro-Cedre-
1983 (figura B36), se constata que una fuerte la, laurel-Cordia), 0 leguminosas (guaba-
proporciôn de plantaciones de C. arabica habia Inga ,samân-Samanea, porotillo-Erythrina).
superado los 20 anos de edad -edad limite A menudo se puede constatar que la sombra es
para una buena producciôn-i-y que las jévenes excesiva.
Miles de hectàreas
• Coffea arabica
100
Coffea canephora Figura B36: Distribuciôn de las
plantaciones por clases de
edad
Fuente: Programa Nacional deI
50
Café,1983
Clases de edad
o (anas)
3 - 10 10 - 15 15 - 20 20 - 25 mas de 25
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 137
·por la via seca, 600 kg de cerezas frescas que quintal de café en: cereza, de 43000 a 54000 el
producen 220 kg de bola seca. quintal de café seco. Fluctuan también estacio-
Aunque la via humeda es mas interesante, nalmente siendo mas bajos durante el periodo
los productores tratan a menudo toda su produc- de mayor producci6n (se han sefialado varia-
ci6n por la via seca por razones de comodidad. ciones de 1 a 3).
Los rendimientos son bajos, de aproximada- Las enfermedades y, sobre todo, la baja de las
mente 340 kglha de café comercial (SEAN), con cotizaciones internacionales, determinan el
variaciones seglin la variedad. desinterés de los agricultores por este cultivo
que cede su lugar a cultivas anuales, a la palma •
La mayoria de las plantaciones de café de africana en las zonas humedas y a los pastizales.
tipo arabica tienen una producci6n inferior a Por otro lado, los precios deI café no han seguido
500 kg/halafio (cuadro B20), mientras que en la misma progresi6n que los costos de la mana
otros paises y con cul tivo normal, se citan de obra. A mediados de los afios 1980, éstos no
valores de 500 a 800 kg/halafio. En el Ecuador, representaban sino el 20 % deI precio de venta,
•
en las mejores condiciones, se han observado . mientras que a principios de los afios 1990, hubo
rendimientos de 900 a 1 500 kg/ha/afio y los una paridad entre los dos. Esto prohibe la explo-
valores mas bajos corresponden a las zonas taci6n de plantaciones de café de cierta impor-
mas secas. Los rendimientos son mas elevados tancia, que demandarian la contrataci6n de
en el casa de «Robusta" pero siguen siendo infe- mana de obra para la cosecha. Asi, la producci6n
riores a los 1000-1500 kg/halafio de las planta- de café se veria restringida a los cultivadores
ciones campesinas africanas. que se limitan a superficies explotables sola-
mente con la ayuda de la mana de obra familiar
Los precios pagados al productor dependen e, incluso en ese caso, el ingreso por hectarea,
deI tipo de producto: de 11 000 a 13 000 sucres el que no deja de bajar, es desalentador.
•
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 139
La cana de azucar es una graminea vivaz originaria de Nueva Guinea y que se cultiva en todos
los paises tropicales. En el actual territorio ecuatoriano, habria sido introducida a inicios deI siglo
XVI expandiéndose en los fondos calidos de los valles interandinos (Patino, 1969). Es apenas desde
hace aproximadamente un siglo cuando se han desarrollado en la regiôn costera grandes complejos
agroindustriales. Éstos comprenden vastas plantaciones de varios miles de hectareas y una planta
de extracciôn y de tratamiento deI azucar. Con la especie original, Saccharum officinarum, se ha
realizado una hibridaci6n utilizando otras especies cercanas de Saccharum para responder a la
• demanda de cultivares productivos y resistentes a parasitos y enfermedades.
Plantaciones
agroindustriales
~Asociadas
~conmarz
Unidad C32
./'-Jl
Umite superior
dei piso calido
~
Umites de las zonas
de humedad
~~oo
Principales ciudades
\ ...
. .<.-
Carreteras principales
,,
, --- .. ~ .
,
,
,,
,
)
z
l'
o 100 200 km
10 000 ha, y disponen de una planta de trata- tecnificadas se realiza después de la labranza,
miento. Alrededor de esa estructura agro-in- el rastrillaje y el acaballonamiento. En el casa
dustrial (ingenio) gravitan plantaciones priva- de las plantaciones familiares de las zonas
das, de menor importancia, de 10 a 200 ha (e humedas en cambio, no se realiza preparaci6n
induso una unica explotaci6n de 1 000 ha) que alguna.
venden su cosecha al ingenio.
En todos los casos, la plantaci6n se efectua
En los valles interandinos, los ingenios no enterrando esquejes (hasta 10 tlha para las
disponen sino de limitadas superficies propias plantaciones industriales). La aplicaci6n de un
y, mediante contrato, adquieren la producci6n herbicida de preemergencia limita la compe-
de cana de azucar a los agricultores de la tencia de los adventicios, sobre todo grami-
.. cuenca. Éstos tienen plantaciones de tamano neas, al momento deI crecimiento de las nue-
'Il
variable, desde algunas hectareas a alrededor vas plantas.
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los afios 1991-1992
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 143
Unidad T31
Este ârbol, originario deI bosque amazonico, cuyas poblaciones naturales han sido explotadas
por recoleccion, es cultivado sobre todo en Extremo Oriente. Fue diseminado a finales deI sig10 XIX
y dio origen a las grandes plantaciones de Malasia e Indonesia que todavia son, hoy en dia, los
principales productores de caucho natural. En Ecuador, plantaciones experimentales fueron
realizadas en la primera mitad de este siglo (Patino, 1967) y, hace mas de 25 anos, una fabrica
nacional de neumaticos establecio una pequena plantacion que paso luego a manos de propietarios
• particulares. Mas recientemente, una filial de esta compania, AGICOM, ofrece el material vegetal
para promover las plantaciones privadas. Se proyecto que de las 4000 ha de 1992 pasarân a 8000
en los proximos 5 anos.
80° W
-..
~.. Plantaciones
.... : de hevea
dispersas
0°
.JVI
Limite superior
dei pise calido "
"J
Limites de las
zonas de
humedad
/'. ..
Principales
ciudades
"-
Carreteras
principales
"
" '
"
•
" -
o 100
dades antiguas y a los 4-5 anos con los nuevos Si ellâtex no es vendido liquido a los fabri-
clones. AGICOM ofrece su asistencia técnica cantes de objetos de caucho, es necesario dispo-
para la capacitaci6n deI personal. Se practica la ner de una unidad de tratamiento de los coagu-
incisi6n en paneles de media circunferencia; los. AGICOM dispone de tal unidad y compra
cada arbol es incisado pasando un dia, tem- los productos; los precios pagados al productor
prano en la manana y ello a todo 10 largo deI son ligeramente inferiores al precio interna-
ano. Cada obrero, ayudado de un portador, se cional (1 560 sucres -es decir 0,84 US $- por
encarga de 1200 arboles. kg de latex contra 0,90 US$). La producci6n de
las plantaciones instaladas por AGICOM es
La recolecci6n puede realizarse en latex coa- comprada totalmente por este organismo.
gulado (anadiendo acido f6rmico en el recipien-
te; industria deI neumatico) 0 en latex liquido 9.6 Perspectivas
t.
(anadiendo amoniaco; otros usos). La aplicaci6n
de estimuladores sobre la corteza -por debajo La demanda nacional de caucho requiere
de la incisi6n- retarda la obturaci6n de los 20000 ha de plantaciones de hevea, es decir
canales laticiferos y aumenta el volumen de multiplicando por 5 las superficies existentes
latex derramado. en 1992. Los precios pagados al productor, la
ausencia de intermediarios en la comercializa-
9.5.e Rendimiento* ci6n de los coagulos y la baja proporci6n de los
gastos anuales (25 % deI rendimiento) hacen
Para el clon retenido, aumenta deI primer deI hevea un cultivo interesante para la susti-
ano de producci6n al quinto desde 700 kg latex tuci6n de las bananeras. Pero, coma no existe
seco/ha para establecerse en 2 tlha; el promedio ninglin tipo de crédito para este tipo de planta-
nacional es claramente inferior y se encuentra ci6n, solamente los grandes propietarios esta-
alrededor de 0,7-0,8 tlha/ano. rân interesados por esta especulaci6n.
•
.
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los aiios 1991-1992
146 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Unidad C12
y accesoriamente CU, C24 y C25
La cebada es originaria deI Medio Oriente, de la misma area geografica que el trigo. Fue intro-
ducida en América por los espaftoles y fue adoptada por la poblaci6n indigena coma planta basica a
la vez en los sistemas de cultivo de altitud y en la dieta cotidiana de los campesinos deI piso mas
frio. Desde mediados deI siglo :XX, la poblaci6n en su conjunto consume cebada bajo la forma de
cerveza. •
Todas las variedades cultivadas en el Ecua- 10.3 Superficies cultivadas y zonas de cultivo
dor son de tipo primaveral, menos resistentes
al frio y de cielo mas corto que las variedades La superficie t~tal sembrada con cebada
de invierno. Se distinguen Clipper, que sirve seria de 63500 ha en 1992 (SEAN).
para la elaboraci6n de cerveza, y variedades
sembradas para el consumo en grano 0 harina. La evoluci6n de las superficies sembradas
Entre éstas, Dorada (INIAP 72) 0 Ducicela recopilada por el INIAP (1993) muestra curio-
(igualmente deI INIAP) son las mas difundidas. sas variaciones. De 113 000 ha estimadas por el
La primera representaria el 80 % de las siem- MAG en 1965, se habria pasado a 75000 en
bras campesinas. Franciscana y Boliviana, que 1974, a 26000 en 1980, para aumentar des-
son cultivadas mas localmente, en Chimborazo pués. En esta serie, el salto de 32000 a 68000
y en el norte de la provincia de Pichincha ha observado entre 1985 y 1986 corresponde al
respectivamente, tienen una filiaci6n incierta y cambio de operadores estadisticos con el paso
"podrian provenir de «préstamos» elandestinos de las estimaciones deI MAG al sistema de
en parcelas experimentales" (INIAP, comunica- sondeo areolar deI INEC-SEAN. Si se tienen en
ci6n persona!). La nueva variedad deI INIAP, cuenta los ajustes necesarios para todo nuevo
Shyri 89, esta bien recibida por los grandes y método de estimaci6n, los ultimos datos presen-
medianos productores. tados mostrarian la recuperaci6n de las super-
ficies que fueron sumamente afectadas por la
10.2 Exigencias roya.
Por 10 que se puede observar en el Ecuador, Las principales zonas de cultivo correspon-
la cebada puede adaptarse a condiciones extre- den a la 10calizaci6n de los sistemas de produc- •
mas. Es una de las plantas cultivadas a mayor ci6n de mayor altura (C12) los que estân mas
altitud. Se la encuentra en altitudes superiores difundidos en las provincias de Chimborazo y
a los 3750-3800 m.s.n.m., aunque los técnicos Cotopaxi (mapa de la figura B39). El SEAN
preconizan que no se la cultive mas alla de los proporciona, para esas dos provincias, 18990 Y •
3600 m.s.n.m. La cebada soporta el frio y las 13 150 ha de cebada en 1992 respectivamente.
heladas mientras aUn no ha espigado. Se estân Les sigue Pichincha (10410 ha), Bolivar (5490
probando variedades invemales aptas a crecer ha) e Imbabura (4940 ha). La inclusi6n de
a altitudes alrededor de los 4 000 m para obte- estas ultimas provincias y el reciente desarrollo
ner un material adaptado a la fuerte expansi6n deI cultivo de cebada en el norte deI pais -Car-
en altura de las zonas cultivadas. chi por ejemplo- reflejan un fenomeno nuevo
de sustituci6n en los sistemas de producci6n
Se la encuentra igualmente en la zona seca que hasta ahora reposaban en parte sobre el
deI piso intermedio (2800 a 3000 m.s.n.m.), sin trigo.
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 147
•
•
El secundarios dentro de
campos de maiz, habilla
y chocho Unidad C 24
Cultivos de cebada
secundarios dentro de
• parce las de trigo, lenteja
y arveja Unidad C 25
?
r-./{
"
1 '
,
, '.
,
1 ..... -
-'
t
CI
o 100 200 km
10.4 Tamano de las explotaciones cielos de cultivos son diferentes entre una zona
y otra; varian con el ritmo anual de las preci-
En 1975, la encuesta PRONAREG-ORSTOM pitaciones y con la altitud. El principal periodo
(Bernard, 1982) estimaba en 40440 el numero de siembra se situa en el ultimo trimestre. El
de explotaciones agricolas que cultivaban principal periodo de cosecha va de mediados de
cebada, con un promedio de 1,7 ha por explo- julio a mediados de septiembre, con un maximo
taci6n. en agosto.
El informe deI INIAP (1993) elasifica a los La duraci6n promedio deI cielo es estimada
productores de 1991 en 3 grupos, segun el por los técnicos en 5,5 meses, pero coma las
tamano de la explotaci6n. Las propiedades de principales zonas de cultivo estan situadas a •
menos de 10 ha representan el 70 % de los una altitud importante, hay un elaro alarga-
productores y el 30 % de la producci6n. Las mien to deI cielo. Por encima de 3 400 m de
medianas y grandes explotaciones (de 10-50 ha altitud, este supera los 6 meses y puede ineluso
y de mas de 50 ha respectivamente) no repre- alcanzar 9 meses. A 2 500 m.s.n.m. es s6lo de
sentan sino el 18 y el 12 % de los productores 4,5 meses.
pero proporcionan el 70 % de la producci6n.
El calendario es igualmente perturbado por
10.5 Calendario agricola (figura B40) la originalidad elimatica local. En la provincia
de Carchi, donde el ritmo estacional deI cultivo
El establecimiento de un calendario agrfcola es poco marcado, las siembras se realizan al
deI cultivo de la cebada en el Ecuador es extre- lado de parcelas que estan siendo cosechadas.
madamente dificil y esta sujeto a numerosos En Tungurahua, en las alturas al oeste de Am-
errores pues las practicas campesinas y los bato (Quizapincha), las siembras se realizan de
Figura B40: Calendario agricola de la cebada (porcentaje deI numero de campesinos por mes)
Fuente: MAG - PRONAREG 1994
81EMBRA C08ECHA
~ ~ Carchi
1 1 1 1
Imbabura
Pichincha
Cotopaxi
Chimborazo
Bolivar
Canar
Azuay
50
1 1 o +--"-~,----;r--"--"--"--r--tff Loja
MAMJJASO 1 i i i
SONDEFMAMJJASO
1 Iii i i i i
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 149
En las grandes propiedades, todas estas ope- seglin el nivel econ6mico de la familia. Se 10
raciones son mecanizadas. sirve en el desayuno y en el almuerzo. Se pre-
para con «machica», harina obtenida a partir de
10.G.e Rendimientos granos que han sido tostados antes de ser mo-
lidos. El tostado es doméstico. Mientras el
El promedio de la producci6n nacional fluc- «chapo» se consume sobre todo en las familias
tua alrededor de 1 t/ha. Es mas bajo tratandose campesinas, la sopa conocida coma «arroz de
de los pequenos productores, debido a las condi- cebada» es también apreciada en la ciudad. El
ciones de cultivo. Es deI orden de 3 t/ha en las elemento principal es la cebada en grano per-
explotaciones tecnificadas y en los mejores lado, descascarado y molido grueso, al que se
casos (productores de semilla) puede alcanzar agregan otros ingredientes para completar el •
5,5 a Gt/ha. sabor. La «arepa» 0 pan de cebada es hecha de
harina amasada con agua, un poco de manteca
10.7 Comercializaci6n* de puerco y saI.
Paea la campafia de 1992, el precio de refe- La paja de la cebada tiene varios usos posi-
.'.
rencia fijado por el MAG era de 13500 sucres el bles en las unidades domésticas de producci6n.
•
quintal. Subi6 a 18000 sucres antes de la cose- Casi siempre se la da coma forraje a los ani-
cha, en el mes de mayo. Al iniciarse las cose- males. Puede servir igualmente de combusti-
chas, el precio baj6 a 15 000 para caer conside- ble, en esas zonas de altura que no cuentan con
rablemente en julio-agosto, en plena cosecha, suficiente lena. Picada, se la mezcla al barro
coma cada ano. Si bien aquellos que pudieron para fabricar ladrillos de tierra. Puede ademas
entregar su producci6n directamente a los moli- utilizarse en lugar de la paja de Stipa para re-
nos recibieron 13000 sucres/quintal, los peque- parar los techos de las viviendas.
nos productores que venden su excedente a los
intermediarios transportadores, vieron descen- 10.9 Perspectivas
der el precio hasta 8000 sucres el quintal. A
inicios de 1993, antes de la cosecha, se situa en Por su rusticidad, la cebada ocupa un lugar
20000 sucres. que pocos cultivos, 0 incluso ninguno, podria
ocupar en los sistemas de producci6n campe-
Existe un sistema particular en la provincia sinos. Es entonces indispensable para su equi-
de Carchi donde los compradores colombianos librio aunque no sea muy rentable. Las condi-
hacen pagos adelantados para asegurarse la ciones fisicas y econ6micas de la producci6n
cornpra de la cosecha. La llevan a Colombia, en limitan ademas la utilizaci6n deI potencial de
grano trillado y a veces descascarado, benefi- productividad deI pais.
ciandose con el diferencial de precio entre los
dos paises. El 70 % de la producci6n, que se debe a pro-
ductores medianos y grandes, es sensible a los
10.8 Utilizaci6n de la producci6n* efectos deI mercado y la apertura actual de las
fronteras somete la producci6n nacional a la
Segun el INIAP (1993), la producci6n de confrontaci6n con el precio internacional. Éste
cebada para cerveceria satisface el 30 al 40 % era de 13240 sucres el quintal en 1991. La
de las necesidades nacionales a finales de los inflaci6n nacional deja entonces aun un mar-
aiios 1980 y principios de los 1990. El saldo deI gen que los importadores colombianos recono-
GO al 70 % se cubre con importaciones. cen y saben aprovechar. A diferencia deI trigo
que ha sido reemplazado progresivamente por •
El consumo culinario de la cebada se limita el grano importado, la cebada exige menos
a la regi6n andina, en gran parte para autocon- insumos y es por 10 tanto mas atractiva en esta
sumo. El grano es molido en los pequenos cen- competencia abierta. i,Podra por ello mante-
tros de puebla a raz6n de 2000 sucres por quin- nerse durablemente frente a la competencia •
tal. El plato mas comunmente preparado es el internacional, en las grandes y medianas
«chapo», colada mas 0 menos espesa y mas 0 explotaciones? Ello depende en gran parte deI
menos dulce, seglin el gusto aunque también mercado. .
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los anos 1991-1992
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 151
Unidades C21, 22, 23, 24, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 43, 44,46,47
P23,31,32, 33, 34,35
T37, 43, 45, 46, 48, 51
D31, 32, 33,34,35,36, 37,38,41, 42
El maiz ocupa el primer lugar por el numero de hectareas sembradas: 524000 ha de 2528630
(es decir el 20,7 % de la superficie cultivada), de las cuales, seglin el SEAN (1992),315000 produ-
cen maiz duro, 187310 maiz suave en grano y 21580 maiz suave en choc1o.
• (Moreno, 1992). Practicamente, cada zona En las regiones costeras mas secas, la adop-
tiene su propio conjunto de variedades adap- ci6n, por parte deI campesino, de variedades
tadas a las condiciones c1imaticas y edaficas mejoradas 0 de hibridos ha sido mas lenta pero
locales. Ademas, los diferentes grupos etnicos mas segura. Asi, en la provincia de Manabi, si
tienden a mantener una colecci6n especifica de bien en 1985 el 60 % de los agricultores culti-
variedades coma se 10 puede apreciar en los vaban variedades tradicionales, en 1993 ya no
mercados rurales. Por fin, cada tipo de usa es el casa sino de un 12 %. Sin embargo, los
alimentario requiere de cultivares de cali- hibridos siguen poco difundidos (el 1 % de los
dades distintas. agricultores siembran INI1\P H551 yel 16 %
152 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Cosechado
en chodo 1,68 1,32 3,35 0,65 2,10 2,08 ·5,62 1,63 1,00 0,91 0,27 20,83
Cuadro B 22: Superficies de maiz suave cosechadas en la region serrana (miles de hectareas)
Fuente: SEAN 1992
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 153
80 0 W
. ~'
1t . ~"
.~,
1 ..... -
.···
.
..
D
,
/
~~ 0 0 Principales ciudades
'\.
'-.~~ Carreteras principales
o 100 200 km
1......_==--==-"""='====-
.. '
Presencia de pastos
Ausencia de pastos Vegetaci6n natural ausente
Vegetaci6n natural ausente Presencia de cultivos anuales
•
Predominio de los cultivos anuales ~ Unidades P23, C37, 43, 44, 46
Unidades C21, 22, 23, 24, 34, 36, 47 Presencia de plantaciones penmanentes
Predominio de las plantaciones permanentes ~ Unidades P33, C31, T43, 45, 48, 51
Unidad C32 Presencia de cultivos anuales y de
• Vegetaci6n natural preseote ~ plantaciones permanentes Unidades P35, T37, 46
• W'HA Presencia de cultivos anuales Vegetaci6n natural presente
WUAl Unidades C33, 35, 38 Presencia de cultivos anuales
O Unidades 035, 37, 41, 42
~ Presencia de plantaciones permanentes
Figura B41: Mapa de las unidades cartograficas bS::=l Unidades 038, P34
con campos de maiz I;'~~~:;I Asociaci6n con cultivos anuales y plantaciones
'" ." permanentes Unidades 031, 32, 33, 34,36, P31, 32
154 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Figura B42: Calendario agricola deI maiz suave (porcentaje deI numero de campesinos por mes)
Fuente: MAG - PRüNAREG, 1994
SIEMBRA COSECHA
l Carchi
Imbabura
Pichincha
'-.'
1 1
l , Cotopaxi
Tungurahua
Chimborazo
Bolivar
•
Canar .
Azuay
5~i ,, 1 1
~_)f''>' Loja
i i i i
FM À M J JAS DNDEF
i i 1 i 1
FMAMJJA E F
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 155
Superficies
Cuadro B24: Superficies de maiz cosechadas y
(ha) 263290 180960 20830
Producci6n
producci6n
(toneladas) 408120 110610 41430 Fuente: SEAN 1992
Rendimiento
(toneladas/ha) 1,39 0,61 1,99
casa deI maiz duro, en 1,99 t/ha en el deI maiz de almacenamiento en la propiedad son suma-
suave en choclo y en 0,61 tlha en el deI maiz mente limitadas y los precios bajan considera-
suave en grano seco (cuadro B24). Los resulta- blemente al momento de la cosecha, a menudo
dos mas bajos se registrarian en las tres pro- en un 50 %. Por otro lado, a falta de un almace-
vincias de los Andes donde este cultivo es mas namiento adecuado, las pérdidas por ataque de •
frecuente: 0,46 tlha en Imbabura, 0,45 tlha en gorgojo pueden representar, en casos extremos,
Cotopaxi y 0,49 tlha en Pichincha. mas deI 90 % de 10 almacenado de modo tradi- •
cional por el campesino. Una parte minima es
En el casa deI maiz duro, los rendimientos al parecer exportada c1andestinamente a
promedios mencionados tanto por los técnicos Colombia.
deI Programa Nacional deI Maiz coma por los
agricultores, varian de 2 a 2,3 tlha y se situa- La comercializaci6n deI maiz duro fue
rian entonces muy por encima deI promedio controlada durante largo tiempo por la Asocia-
nacional indicado por el SEAN. En realidad, si ci6n de Fabricantes de Alimentos Balanceados
bien algunos rendimientos alcanzan excepcio- (AFABA) que compraba, a través de 2 6 3 inter-
nalmente 4 tlha, y aunque la provincia de Los mediarios, toda la producci6n, imponiendo sus
Rios registra efectivamente un promedio de precios. Un reciente acuerdo entre los pro-
2,15 tlha, todas las demas provincias presentan ductores de maiz y dicha asociaci6n, asi coma la
resultados mucho menores a esa cifra. El Oro y cornpra directa, por parte de los comerciantes
Esmeraldas, que siguen siendo marginales por colombianos, han permitido romper este mono-
los volumenes producidos, también 10 son en tér- polio y garantizar al agricultor el pago de un
minos de rendimientos, con solamente 0,83 tlha. precio mas remunerador por su producto.
Manabi, que cuenta con las mayores superficies
cultivadas con maiz duro (26 % deI total nacio- 11.6 Perspectivas
nal), produce 1,42 tlha. Estos resultados son el
reflejo de una doble variaci6n, de las condicio- En el casa deI maiz suave, las superficies
nes naturales de la producci6n y de la tecnici- pueden tender a aumentar en funci6n tanto de
dad de las explotaciones. La naturaleza deI la densificaci6n de las zonas rurales y de las
suelo, pero sobre todo las condiciones climati- periferias urbanas, coma de la divisi6n de las
cas son mucho mas limitantes en la parte seca haciendas. El mayor cambio parece consistir en
de Manabi que en la rica llanura de Los Rios, un importante desarrollo de la producci6n de
donde puede desarrollarse una agricultura choclo. Esta tendencia deberia mantenerse
capitalista de alto rendimiento. para abastecer a los mercados urbanos en
expansi6n.
l1.5.f Comercializaci6n
Fuera de los Andes, donde el maiz es culti-
La producci6n de maiz suave satisface la vado sobre todo para el consumo familiar, las
demanda deI mercado interno. Las capacidades superficies sembradas dependen deI precio deI
Cuadro B25: Rendimientos de maiz (tlha) en paises deI pacto andino (1972-73)
Fuente: Frere et al, 1975
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 157
grano. Las superficies cultivadas con maiz En el marco de la apertura oficial deI mer-
duro aumentaron a partir de 1976, a expensas cado hacia Colombia, el diferencial de precio en
de las de cacao y banano, para alcanzar un beneficio deI Ecuador puede provocar un fuerte
maximo en 1986. A partir de 1987-1988, dismi- impulso a los tres tipos de producci6n de maiz y
nuyeron en favor de la soya cuyo precio era provocar menos que una extensi6n de las super-
mas interesante. Actualmente, los dos cultivos ficies, sobre todo en los Andes donde el espacio
presentan igual rentabilidad y en las zonas 10 es limitado, que unamayor tecnificaci6n de la
suficientemente humedas como para soportar producci6n. En efecto, la productividad nacional
dos cultivos por aiio, la elecci6n entre el maiz 0 queda baja. En 1972-1973, los rendimientos deI
la soya como segundo cultivo depende en parte maiz en el Ecuador eran inferiores a los obte-
de su precio de compra que varia de un aiio a nidos en los paises vecinos (cuadro B25) y ape-
otro. nas se han modificado desde entonces.
"
"
158 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Unidad T38
La palma africana, originaria de los bosques humedos deI Arrica Occidental es una de las
principales fuentes de aceite alimentario deI mundo. En el Ecuador, las primeras plantaciones
datan de 1964, pero hubo que esperar 1970 para superar las 1000 ha (<<El Palmicultor», N° 2). A
inicios de 1993, la superficie plantada con palma africana representa alrededor de 80000 ha de las
cuales 12000 estan ubicadas en la regi6n amaz6nica y 68000 en la Costa. El aceite de palma
africana es la principal produccion de materia grasa deI pais (aproximadamente 150000 t/ano). La
segunda fuente nacional de aceite alimentario, la soya, representa menos de 20000 t/ano. Los
principales productores de aceite de palma se encuentran en el Asia (Malasia e Indonesia, con 5,5
y 2,0 millones de toneladas de aceite por ano respectivamente).
80 0 W
"
'.
1 Palma africana 1
..,
, _....
•
.
-.. ~....
•••••:
Palma africana
Unidad T38
Extension de las
plantaciones en la
regi6n castera
1990ANCUPA
'~\
-l,
i
:. \:P t ) o
; 'i
\...
100
Iiiil
'-
CD Principales ciudades
Carreteras principales
200 km
. -- , o.' _-===-_-===-_.1::'====- d
ha
20000
Las dos principales enfermedades son locali- La cosecha se practica a 10 largo de todo el
zadas, la una propia de la regi6n amaz6nica aiio. Es manual y la mecanizacion s610 puede
aunque presente en la Costa con una incidencia intervenir en el transporte. Al cabo de una
menor, y la otra restringida a la Costa. decena de aiios de plantaci6n, las variedades de
• bajo crecimiento se cosechan mas facilmente
La pudrici6n deI cogollo es una enfermedad que aquellas de un desarrollo mas vigoroso.
fatal en la Amazonia y sues) agente(s) respon- Como la cosecha debe ser llevada 10 mas rapi-
sablees) es(son) atin desconocido(s), pese a un damente posible a la planta de extraccion y sin
importante esfuerzo de investigaci6n. El tinico demasiados golpes, las plantaciones de palma
remedio es cortar y quemar toda planta infec- africana deben disponer de una red vial densa
tada. El mantenimiento de un cord6n sanitario de buena calidad (alrededor de 40 m lineales
de kudzu entre la plantaci6n y el bosque natu- por hectarea de plantacion).
ral, la eradicaci6n de las palmeras nativas deI
bosque cercano a la plantaci6n, el control de las 12.5.e Rendimiento*
gramineas en los circulos de plantaci6n y en la
red de caminos son otras tantas practicas que Es muy variable, dependiendo principal-
parecen disminuir la incidencia de la enferme- mente de dos factores: la zona de producci6n y
dad. Ésta habia afectado en las plantaciones los cuidados dispensados a la plantacion (cua-
industriales al 7 % de las plantas al décimo dro B36).
tercer mes de plantaci6n en la Amazonia, pero
solamente a un 1% al tercer aiio de plantaci6n La oposicion de rendimiento entre las dos
en la regi6n costera. regiones es mas marcada en el caso de las
pequeiias plantaciones mal manejadas. La
En la Costa, el amarillamiento de las hojas ANCUPA y el SEAN (1991) concuerden en
puede reducir en un 40 % la producci6n de las seiialar una producci6n promedio nacional de
palmeras afectadas. Es provocado por un dese- 12,5 tlha/aiio. Esta cifra se acerca mas al valor
quilibrio mineraI magnesio/potasio y se 10 ob- inferior de los rendimientos pues numerosas
serva s610 en periodo seco. Un aporte equilibra- plantaciones registran valores bajos haciendo
do de magnesio corrige esta deficiencia que se disminuir considerablemente el promedio na-
manifiesta estacionalmente. cional, mientras que las plantaciones tecnifi-
cadas obtienen resultados netamente encima
Otras enfermedades secundarias como la deI promedio.
pudrici6n de la flecha, la marchitez sorpresiva,
las manchas anulares, asi como esporadicos ata- La cosecha es vendida en racimos a las plan-
ques de insectos como los de Sagalassa (picador- tas de extraccion a raz6n de 120 000 sucres la
chupador de raices), se controlan ya sea me- tonelada de racimos. La tonelada de aceite rojo
diante aplicaciones locales de insecticidas 0 por (tasa de extraccion alrededor deI 20 %) se ven-
medio de practicas de cultivo (mantenimiento de en el mercado nacional a 800 000 sucres, es
de la planta de cobertura, limpieza de los decir, un precio ligeramente inferior al deI mis-
arboles). mo aceite importado.
••
Cuadro B26: Produccion (toneladas de racimos
Plantaciones industriales
por ha) seglin regi6n y tecnologia 20 23
con alta tecnologfa
Fuente: ANCUPA
Plantaciones familiares
7-8 20
con tecnologfa reducida
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los aiios 1991-1992
162 Paisajes Agrarios deI Ecuador
.
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 163
El centro de domesticaci6n de la papa se situa entre los Andes centrales deI Pero y los deI norte
de Bolivia. Hoy en dia cultivada en la costa peruana y en todos los paises templados, la papa sigue
siendo en el Ecuador un producto de altura, especificamente andino. Esta asociada a otras activi-
dades, cultivos 0 pastizales, para constituir diferentes sistemas de producci6n agricola, seglin las
condiciones elimaticas 0 edaficas y el tamano de las explotaciones.
La papa constituye una de las bases esenciales de la alimentaci6n campesina en los Andes y,
~ para muchos pequeiios y grandes productores, el principal cultivo comercial.
En el Ecuador, donde la papa amarga esta La papa es una planta muy exigente en
totalmente ausente, se distinguen dos grandes agua, elemento que necesita durante todo su
subgrupos, los cultivares nativos -derivados de cielo vegetativo. Demanda suelos ligeros, pro-
S. tuberosum andigenum-, y los elaborados en fundos y ligeramente acidos. Los cultivares
los centros de investigaci6n deI INIAP ecuato- presentes en el Ecuador son adaptados al piso
riano, deI IICA colombiano 0 deI CIP en Pero. frio y relativamente humedo.
Los cultivares nativos se utilizan en el 60 % 13.3 Zonas de cultivo (figura B45 y cuadro B28)
de las superficies sembradas con papa (Uqui-
lIas, 1992). La colecci6n ecuatoriana cuenta con Fuera de los Andes, practicamente no hay
300 variedades (Moreno J., corn. pers.). Chola, cultivo de papa. En orden de importancia de las
Uvilla 0 Bolona, Leona, Chaupi, Rubi y Violeta superficies sembradas por provincia se elasifi-
son los mas conocidos. Por sus variaciones de can Carchi, Chimborazo, Tungurahua, Coto-
forma, tamaiio, color de la piel y de la carne, paxi y Pichincha. Ninguna de las otras provin-
sabor y USD, la papa es unD de los productos cias alcanza el 5 % deI totaL La producci6n se
nativos mas diversificados. concentra entonces esencialmente en las zonas
norte y centro de los Andes, en el piso frio
Los nuevos hibridos se obtienen por cruce de (altura superior a los 3 100-3200 m.s.n.m.), en
variedades nativas, con descendencias produci- suelos negros, ligeros y profundos.
das en los paises templados. El INIAP lanz6 5
cultivares nuevos (cuadro B27). Al norte deI La provincia de Carchi esta marcada por
pais, se siembran algunas variedades de origen una gran tradici6n «papera». Goza todo el ano
colombiano (lcahuila, Roja, Parda Pastuza). de un clima bastante humedo y sin gran riesgo
0-
f.
Duraci6n dei
(
cielo (dfas) 210 210 180-195 165 180 150-160
.,
Resistencia
al mildiu sensible mediana mediana moderada buena sensible
a la roya sensible sensible mediana moderada buena
a las heladas sensible
a la granizada moderada
al nematodo dei kiste tolerante tolerante
a los virus sensible
Cuadro B27: Caracteristicas de algunos cultivares ecuatorianos de papa
Fuente: Andrade 1991b
164 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Cultivos de papa
• predominantes
dentro de campos de haba
y cebada Undad C 11
~ Cultivos de papa
~ secundarios dentro
de otros cultivos y pastos
Unidades D 21, P 22 Y C 12
~ Escasos cultivos de
~ papa dentro de otros
cultivos y pastos.
Unidades D 22 Y C 22
1 BI 0 Principales ciudades
.
~
., ,
,
,- .
o 100
, 200 km
Figura B45: Mapa de localizaci6n de las unidades cartogrâficas con cultivos de papa
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 165
de heladas. El vecino mercado colombiano ciona ni las superficies sembradas ni las canti-
desempeiia desde hace mucho tiempo un papel dades cosechadas para cada una de las clases.
estimulante en la producci6n. El empleo de Se puede estimar que es en el grupo de 5 a 50 ha
grandes cantidades de insumos, incluso a veces donde se encuentra la mayor parte de la pro-
de manera exagerada, refleja un importante ducci6n nacional.
vinculo con el mercado e ingresos elevados.
Mientras algunos cultivadores se especializan 13.5 Cultivo
en la papa, las haciendas lecheras la integran
coma planta de escarde al renovar los pasti- 13.5.a Preparaci6n deI suelo
zales (Gondard, 1986).
La preparaci6n deI suelo es a menudo muy
En la zona central, las haciendas le reser- laboriosa, pues la papa encabeza la rotaci6n de
van el mismo papel pero ya no hay productores cultivos después deI barbecho 0 deI desmonte.
especializados. Ademas, en los sistemas de pro- Los trabajos se inician unos meses antes de la
ducci6n tradicionales de altura, los bajos rendi- siembra, cuando se trata de un terreno muy
mientos obtenidos se reflejan en los rendimien- enyerbado y algunas semanas antes en el casa
tos promedios provinciales (cuadro B28). de un campo con s610 residuos de la cosecha
precedente (Muiioz, 1978).
En la zona sur, s610 pequeiias explotaciones
incluyen la papa en sus sistemas de cultivo. • La labranza se realiza con tractor, cuando el
Los rendimientos son alli sumamente bajos, tamaiio y la pendiente de la parcela 10 permi-
probablemente a causa tanto de las dificiles ten, incluso tratandose de los pequeiios agri-
condiciones socioecon6micas de la producci6n cultores quienes alquilan la maquinaria. En
coma de los suelos menos fértiles y deI clima ciertos casos de pendiente extrema, 10 unico
.. mas seco. posible es el empleo deI azad6n. Los terrones
El cuadro B29 muestra la clara preponde- Cuadro B29: Tamaiio de las explotaciones con
rancia de los pequeiios productores (explota- cultivos de papa
ciones de menos de 5 ha). Esta fuente no men- Fuente: MAG - PSRA 1992
166 Paisajes Agrarios deI Ecuador
tienen que ser desmenuzados, pero en menor (25-30 cm), se obtendrân tubérculos de tama-
grado que para otros cultivos, ya que la se- no semilla, mientras que con intervalos mayo-
milla de la papa es mas gruesa. res se obtendran tubérculos de tamaiio comer-
• La desinfecci6n deI suelo, aunque muy reco- cial, mediano 0 grande (Andrade, 1991a).
mendada para eliminar las larvas de insectos • La profundidad de la siembra cambia seglin la
y en particular las deI gusano blanco, no es de época, la humedad deI suelo y el tamano de
practica frecuente. Las rotaciones, comunes las semillas (Andrade, 1991a). Esta compren-
en el caso deI cultivo de papa, s610 constituyen dida entre 5 y 15 cm. Una siembra superficial
una altemativa parcia1. que favorece una emergencia rapida de los
tallos es posible cuando no hay riesgo de hela-
13.5.b Siembra da ni de sequia. Se la recomienda en periodo
de gran humedad. La siembra profunda
• La semilla consiste en papas escogidas en fun- permite una mejor resistencia a la sequia. ..
ci6n de su aspecto, redondeado, liso y sano, y
de su tamaiio, cercano al de un huevo de galli- 13.5.c Abonos
na. La demanda de semilla certificada es sa-
tisfecha por la producci6n nacional-Peterson El estiércol es utilizado sobre todo por los •
(1992) y Uquillas (1992)-, pero corresponde pequenos productores. Por comodidad, se 10
s610 al 1-3 % de las superficies sembradas con esparce en seco por 10 que pierde parte de sus
papas. cualidades. Proviene de los animales de la
Sin embargo pretender que los cultivadores explotaci6n 0 a veces es comprado ya sea a los
producen siempre ellos mismos sus semillas criadores de ovejas deI paramo 0 a los criaderos
seria falso. Ello depende en gran parte de los de polIos de la regi6n costera.
precios al momento de la cosecha. Si estos son
altos, la venta es casi total y habra una com- Los abonos quimicos son empleados por
pra complementaria para sembrar, la cual se todos pues el aporte de estiércol no basta para
realiza ya sea en el mercado 0 a los vecinos. Si compensar la exportaci6n de nutrientes por la
los precios son bajos, los pequenos productores cosecha. Las cantidades utilizadas varian,
escogen parte de su producci6n como semilla. desde 10 6ptimo recomendado hasta 10 posible,
Asi, los precios influyen a la vez en el origen y en funci6n de las disponibilidades financieras,
en la calidad de la semilla. por ejemplo de 900 a 270 kglha de 12-38-12 0
Se estima entre 3 y 5 aiios el intervalo prome- de 10-30-10 y de 180 a 90 kglha de urea (Cace-
dio de renovaci6n de la semilla. Es mas largo res, 1991).
en las pequenas explotaciones que en las
grandes que venden mas frecuentemente toda 13.5.d Trabajos durante el cielo vegetativo
su cosecha.
• La apertura de los surcos se realiza con el • El rascadillo, que se realiza de 30 a 45 dias
arado si la pendiente 10 permite, 0 de 10 con- después de la siembra, cuando los primeros
trario, con el azad6n. Se efectua en el sentido tallos salen de la tierra, tiene como objetivo
de la mayor longitud de la parcela, para primeramente mantener la humedad deI
facilitar los trabajos posteriores que pueden suelo. Se diferencia deI deshierbe porque la
ser mecanizados. En las vertientes, se reco- presencia de las adventicias es en ese momen-
mienda orientar los surcos en sentido perpen- to poco importante, puesto que el suelo estaba
dicular a la pendiente, pero con una ligera limpio al momento de la siembra.
inelinaci6n que permita el flujo de las aguas • El deshierbe se torna imperativo alrededor de ..
de lluvia. los 2-2,5 meses. Como los herbicidas son poco
• La densidad promedio de siembra es de 22 000- utilizados, se 10 practica con azad6n 0 mecâni-
25 000 pieslha. La separaci6n entre las filas camente y se acompaiia de un primer aporque
varia de 1 a 1,5 m seglin la variedad utilizada o medio aporque.
y la pendiente. Las variedades nativas que ·El aporque, realizado manual 0 mecanica- .
tienen un radio de tuberizaci6n mayor que las mente, se efectua hacia los 3-3,5 meses.
variedades seleccionadas exigen una separa- Varios son sus efectos: ablandar el suelo,
ci6n mayor. Asimismo, en pendiente, se deben mantener su humedad, sostener a la planta y
separar las filas para compensar la inestabili- sobre todo favorecer la tuberizaci6n mediante
dad deI terreno y la dificultad deI aporque. aporte de tierra encima de los estolones.
La distancia entre las plantas en las filas in- • El riego, inutil en la mayor parte de las zonas
fluye directamente en el tamano de los tubér- de producci6n que se encuentran en el piso
culos cosechados. Con intervalos reducidos mo, generalmente bastante humedo, se toma
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 167
indispensable en las zonas mas bajas, particu- tieriana que forma pustulas anaranjadas en
lannente en los suelos arenosos de Tungura- las hojas.
hua, donde la papa puede ser integrada a rota- Enfennedades secundarias pueden reducir la
ciones de sistemas agricolas muy intensivos. producci6n: Rhizoctonia soZani (sarna negra 0
- La defoliaci6n se recomienda para la produc- costra negra) provoca el marchitamiento deI
ci6n de semilla, a fin de evitar que demasiados follaje y la aparici6n de costras negras en los
tubérculos crescan mas alla de las normas de tubérculos; Alternaria soZani, lancha tempra-
50 a 70 g. Practicada a la mano, presenta el na, produce necrosis en las hojas; Dermatho-
inconveniente de dejar la hojarasca alli mismo, phora 0 Rosellinia ataca a las raices provo-
con grandes riesgos de difusi6n de las virosis. cando su pudrimiento y a los tubérculos que
cubre con una pelicula micélica blanca.
13.5.e Enfermedades y plagas -Bacterias
Atacan a los tubérculos y provocan en ellos
La lista de enfermedades y plagas que pue- ya sea el pudrimiento de las partes afectadas
den afectar a la papa es larga. Esta planta, al -Erwinia, podredumbre deI tubérculo, pata
igual que la mayoria de solanaceas, esta sujeta negra-, 0 lesiones localizadas, superficiales 0
• a numerosas infecciones (CESA 1986, Gallegos profundas -Streptomyces scabZes, sarna
1991, Muftoz 1978, Oleas 1991, Orellana 1991, comun 0 morena-.
Vega 1991). -Virus
- Plagas deI suelo Se identificaron tres mosaicos de la papa, de
Nematodos y larvas de cole6pteros atacan a la los cuales el mosaico leve, causado por el virus
base de los tallos, a las raices y a los tubércu- X de la papa, es el mas comun. Los otros dos
los. Premnotrypes vorax (gusano blanco) es el estan menos difundidos: el mosaico severo
insecto mas temido, con daftos que pueden al- debido a otras razas deI virus X y al virus Y y
canzar el 90 % de la cosecha en casa de infes- el mosaico rugoso, resultado de la interacci6n
taci6n severa. Baritheus (cutzo) y Agrotis ipsi- de los virus X y Y. Como en el casa de los
Zon (gusano negro trozador) pueden provocar hongos, la elecci6n de variedades resistentes,
pérdidas menores. Su infestaci6n se controla de semillas sanas y la eliminaci6n de las
mediante insecticidas y, sobre, todo con la rota- partes afectadas son los mejores medios de
ci6n de cultivos. Heterodera div. sp., entre ellos lucha.
el nematodo deI quiste, son combatidos con ne- El enrollamiento de las hojas de la papa es
maticidas, la rotaci6n de los cultivos y la selec- provocado por el virus EH. El amarillamiento
ci6n de cultivares tolerantes. de las venas se debe probablemente a un virus,
- Insectos deI follaje que por el momento no ha sido identificado.
El insecto mas daftino es Epitrix (pulguilla),
cole6ptero que ataca tanto a las partes aéreas 13.6 Cosecha
coma a las subterraneas. FrankZinieZa (trips),
Copitarsia (gusano de la hoja) y Proba sallei La cosecha de papa se inicia en marzo y se
(chinche de la hoja) se alimentan deI follaje y distribuye en el tiempo hasta el mes de diciem-
pueden daftarlo considerablemente en esta- bre. Los bajos volumenes cosechados en enero
ci6n seca. Insectos chupadores, Macrosiphum corresponden a las escasas siembras deI periodo
euphorbiae y Myzus persicae (pulg6n) son vec- estival Gunio a septiembre), limitadas por la
tores de virus. El primero ataca también a los ausencia de humedad (figura B46). La amplitud
gérmenes 0 yemas de la papa almacenada. deI periodo de cosecha se explica principalmente
Ûnicamente la utilizaci6n de insecticidas per- por el alargamiento deI cielo vegetativo con la
mite luchar eficazmente contra estas plagas. altitud (160 dias a 2800 m.s.n.m., 180 dias a
-Hongos 3000 m.s.n.m., 210 dias a 3500 m.s.n.m. en el
La incidencia de las enfermedades fUngicas es casa de la variedad Gabriela).
la mas importante en estaci6n humeda. El
empleo de semillas sanas, de cultivares resis- Ûtil para satisfacer una demanda constante
tentes y la eliminaci6n de las partes infecta- en un pais donde los sistemas de conservaci6n
das son los medios cornunes de lucha. son poco 0 nada u~ilizados, este alargamiento
El mildiu y la roya son las enfennedades mas deI cielo acarrea un aumento considerable de
difundidas. Phytophtora infestans, agente deI los costos y una menor rotaci6n deI capital.
mildiu 0 lancha, afecta primeramente al folla- Varias practicas tienden a modificar el ritmo de
je y luego a los tubérculos. Los tratamientos la cosecha para avanzar <:> retrasar la colocaci6n
quimicos pueden prevenir la diseminaci6n deI en el mercado, segun el nivel de los precios
hongo. La roya es provocada por Puccinia pit- (L6pez 1987, FUNDAGRO 1991).
168 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Figura B46: Calendario agricola de la papa (ordenada = porcentaje deI numero total de campesinos)
Fuente: MAG-PRüNAREG, 1994
.·8 .. •
Ew•09t-··
• ---r-1 Carchi
1
•
1
s ' la-, m1
Imbabura
m ~
Pichincha
?
r
.'
1
1
l1
,
Cotopaxi
Tungurahua
, Chimborazo
3D ~
.'
E p
~
, ,
Bolivar
Canar
Azuay
i 1 i i i i i i i i i i i , i , , , , , i , , ,
ASONDEFMAMJJA MA M J J A SON D E F M
menores rendimientos de esta provincia. Las dormancia y no pueden, por 10 tanto, conser-
demas provincias presentan rendimientos varse.
menores de 5 tiha (hasta 2,35), 10 que es muy
bajo. Para la comercializaci6n, las papas son colo-
cadas en sacos. La ventilaci6n es indispensable
13.8 Destino de la producci6n para una buena conservaci6n. En las grandes
explotaciones, en espera deI mercado y por un
La papa es un cultivo de renta. Lo esencial corto periodo, los sacos son almacenados bajo
de la producci6n se comercializa en el mercado grandes carpas blancas, que constituyen unD de
interior. Sin embargo una proporci6n no despre- los elementos deI paisaje caracteristicos de los
ciable de las cosechas de Carchi esta destinada grandes sistemas de producci6n de papa.
al mercado deI vecino pais.
13.10 Perspectivas
En las grandes explotaciones, la proporci6n
deI autoconsumo esta limitada a la alimenta- Una mas amplia utilizaci6n de las semillas
ci6n de los trabajadores durante la cosecha y a certificadas, 0 al menos una desinfecci6n mas
la reserva de semillas para la campafia si- frecuente de las semillas, tendrian probable-
guiente; pero, si el precio de venta es 10 bas- mente efectos inmediatos de aumento de los
tante atractivo, toda la producci6n tendra una rendimientos.
salida inmediata.
La gran variaci6n de los precios de la papa
En las pequefias explotaciones, la propor- es unD de los problemas mayores de la produc-
ci6n de la producci6n consumida en la finca es ci6n nacional. Es un mercado de alto riesgo
relativamente mas importante. Si una parte de para los productores. A falta de una flexibilidad
la cosecha se destina al mercado, se escoge los de la oferta y la demanda, los precios pueden
tubérculos mas gruesos para la venta. Si los generar beneficios sustanciales 0 pérdidas
precios son interesantes, las reservas de se- catastr6ficas cuando el precio de venta no cubre
millas seran también vendidas. los costos de producci6n que siempre son eleva-
dos. La regulaci6n deI mercado es tanto mas
13.9 Conservaci6n dificil cuanto que no hay una real posibilidad
de almacenamiento: ésta es casi nula a nivel de
En el Ecuador, el escalonamiento posible las explotaciones e inexistente a nivel nacional.
de las cosechas durante casi todo el afio no ha
favorecido el desarrollo de numerosas técnicas La demanda de papa es y seguira siendo
de conservaci6n tradicional que se conocen en fuerte en el Ecuador, donde el tubérculo se
los Andes peruanos y bolivianos. Las varieda- mantiene coma unD de los elementos particu-
des nativas precoces (<<chauchas») no tienen larmente apreciados de la dieta comUn.
•
170 Paisajes Agrarios deI Ecuador
La soya es una planta de clima templado, originaria de China. Las variedades adaptadas a los
dias cortos fueron seleccionadas en los Estados Unidos e introducidas luego en los paises tropica-
les, entre ellos el Ecuador en 1971, a fin de paliar el déficit de aceite alimentario deI pais. En 1973,
el MAG cre6 un Programa Soya-Maiz. Rasta 1987, el cultivo se desarro1l6 rapidamente gracias a
una politica de subvenci6n deI precio de compra de la cosecha. A partir de esa fecha, las superficies
se mantuvieron mas 0 menos estables hasta 1992 cubriendo, segllil los a:fi.os, de 60000 a 70000 ha
(Programa de la Soya). Sin embargo, seglin el SEAN, las superficies cultivadas serian mas exten-
sas, alcanzando 92360 ha en 1991. Con un rendimiento promedio de 1,8 t/ha, la producci6n era de
105570 t de grano en 1992 (Programa de la Soya).
Las variedades cultivadas en el Ecuador Al area de cultivo de soya, seglin las previ-
derivan de cultivares de los Estados Unidos, siones iniciales muy extensa en toda la regi6n
deI Brasil y de Centroamérica. costera, se restringi6 rapidamente a la zona
central, humeda, de la llanura deI Guayas que
La variedad «Americana», seleccionada a corresponde a la provincia de Los Rios, entre
partir de un cultivar introducido a finales deI Babahoyo y Quevedo.
decenio de 1950, dio lugar a otros cultivares
tales coma «Manabi», precoz y resistente al En 1991, segun el SEAN, el 96 % de las
encamado, y «Jupiter», recomendado en 1974 superficies cultivadas de soya estaban localiza-
para los cultivos mecanizados. El INIAP em- das en esa regi6n. Alli, los suelos, desarrollados
prendi6 investigaciones con el objetivo de crear sobre cenizas volcanicas 0 aluviones recientes,
variedades de mayor rendimiento, resistentes son particularmente fértiles.
a los nematodos, pero, sobre todo, adaptadas a
una amplia gama climatica. Se trat6 de la 14.4 Tamaiio de las explotaciones
serie INIAP 301 a 305. Esta ultima fue creada
a partir de un material introducido deI Brasil La soya se cultiva en parcelas de gran tama-
en 1988. no, a menudo superiores a 20 ha, en explotacio-
nes medianas a grandes, algunas de las cuales
De todas las variedades existentes, INIAP- superan las 200 ha (ver la distribuci6n en el
Jupiter e INIAP 303, 304 y 305 son las mas di- cuadro B32 y figura B48). Sin embargo, en
fundidas. 1991, segun la Divisi6n de Estadisticas deI
,MAG, de los 3400 productores de soya, el 66,3 %
14.2 Exigencias poseia explotaciones inferiores a 20 ha, repre-
sentando el 23 % de las superficies cultivadas.
La soya es exigente en agua pero no soporta Esta transferencia relativa deI cultivo, de las •
el exceso de humedad. Durante el Nino de grandes explotaciones hacia las pequeiias,
1982-1983, se perdi6 toda la cosecha. Las resultaria en parte deI reemplazo de la soya
temperaturas deben ser elevadas y regulares. por el banano por parte de los propietarios de
Prefiere los suelos ricos y ligeros. las grandes explotaciones.
•
80 0 W
Cultivas de soya
relativemente
frecuentes
'- - ,-~, Asociados
f"
anuales Unidad C31
',
..
, __. 1
0°
1
~ Arboricultura
~ predominante
Unidades T37, 45
,
~ Maiz predominante
~ Unidades C43, 44
1
f AJf
1 Limite superior
(f dei piso caMo
"'J
Limites de las zonas
de humedad
Principales ciudades
Carreteras principales
"
"
,
,
,
,
o 100 200 km
20
Figura B48: Reparticion de los cultivadores y •
10 de las superficies seglin las superficies sem-
0+--....-'= bradas
Fuente: Programa Nacional deI Maiz y de la Soya
% de las superficies
30
20
10
0-1-;-;-.-"
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 173
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los aiios 1991-1992
174 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Unidad T 40
80 0 W
-,
- -'. ,,
,
Plantaciones
• agroindustriales
de té Unidad T40
-..
0°
~
Limite superior
deI piso câlido
"-..1
Limites de las zonas
de humedad
1'.··
Principales ciudades
Carreteras principales
,
. ,
.., , . "
'
,, '
. ,.
o 100 200 km ~!
•
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 177
El trigo es originario deI Medio Oriente, de la misma area geografica que la cebada. Fue intro-
ducido en América por los espalloles a inicios de la colonizaci6n. Constituia en efecto unD de los
tres elementos esenciales deI sistema alimentario mediterrâneo y, coma tal, formaba parte integral
deI bagaje cultural de los conquistadores. La tradici6n quitena, basada en la opini6n de Gonzalez
Suarez entre otros autores, atribuye al hermano franciscano Jodoco Rique la siembra de las
primeras semillas en 10 que se convirti6 en la plaza de San Francisco. Patino (1969) emite serias
reservas en cuanto a esta opini6n y establece que el primer cultivo en Quito dataria de 1541 y no
de 1534. Una acta deI Cabildo en octubre de 1541 prohibe «la reventa de trigo hasta que se coja la
f
sementera primera que se cogera en esta ciudad".
•
La reciente urbanizaci6n y la elevaci6n general deI nivel de vida hasta los allOS 1980, han favo-
recido la adopci6n cada vez mayor de productos a base de trigo por todos, incluso en el campo. En
todas las tiendas de puebla se encuentran pan, galletas, fideos, tallarines...
Mientras que la proporci6n deI trigo en la dieta alimentaria ecuatoriana se duplicaba durante
los ultimos treinta allOS, pasando de 20 a 40-45 kg por habitante (Peltre-Wurtz, 1988), las super-
ficies sembradas con trigo disminuyeron a la mitad en 20 allos. A principios de los anos 1990, la
producci6n nacional no cubre el 5 % de las necesidades internas. Lo esencial deI trigo consumido
en el pais es entonces importado (figura B50).
100 5
0 .L---.----.----.-----,------."'""'""L..J....L.O
1970 1980 1990
178 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Seglin el INIAP (1993), ya no se encontrarian Los técnicos deI PRONAREG, citados por el
en el Ecuador variedades criollas. Frere et al. INIAP (1993) Y UITiola & Cuvi (1986), estima-
(1975) sefialaban una, la 150, seleccionada por ron que las zonas de produccion potencial de
un agricultor por su resistencia a las heladas. trigo en los Andes cubren aproximadamente
135 000 ha, de las cuales 80 000 no presentan
16.2 Exigencias limitaciones particulares. Estân ubicadas entre
los 2200 Y los 3100 m.s.n.m. Es en esta franja
Su cielo vegetativo dura de 5 a 7 meses, de altitud donde se ubica efectivamente 10
seglin el cultivar y la altitud que influye direc- esencial de los campos de trigo, pero no es raro
tamente en las temperaturas. El trigo ya crece encontrar algunos hasta los 3300 m.s.n.m.
ni por debajo cie 5 a 6°, ni por encima de los 28°
de temperatura promedio. Las superficies provinciales sembradas con
trigo no superan las la 000 ha sino en Bolivar
El trigo es unD de los cereales mas exigen- donde representan, desde 1986, deI 25 al 35 %
tes. Necesita, para su optimo desarrollo, una deI total nacional. Son deI orden de 6 000 a
lamina de agua comprendida entre 600 y 700 7 000 ha en Chimborazo (14 a 19 %). Las pro-
mm que puede ser aportada por las precipita- vincias de Imbabura y Pichincha, y en algunos
ciones 0 por el riego, y una insolacion deI orden afios de Carchi, representan cada una un la %.
de 1050 horas anuales (Frere et al., 1975). Las
precipitaciones deben repartirse durante el Las zonas representadas en el mapa (figura
cielo ya que se requieren 350 mm de la siembra B5l) reflejan esta distribucion pero desde otro
a la floracion y 300 mm adicionales al momento punta de vista, puesto que se trata de la repre-
de la cosecha. Una deficiente distribucion de sentaci6n de los sistemas de producci6n que
las lluvias puede ser compensada en parte ineluyen al trigo entre otras utilizaciones deI
mediante suelos con una buena capacidad de suelo. Asi, se observa que no aparece zona de
retenci6n de agua; pero fuertes precipitaciones monocultivo especifico alguna. En cambio, la
son perjudiciales pues la planta no soporta los 10calizaci6n de C21 en la provincia de Bolivar y
excesos de humedad. Asimismo, los suelos no en las partes altas de las cuencas deI Chota y
deben tornarse demasiado compactos bajo el deI Jubones subraya la existencia de zonas de
efecto de la sequia. importante poblacion mestiza (Gondard, 1988;
Pouille, 1993).
16.3 Zonas de cultivo
16.4 Tamafio de las explotaciones
El primer trigo cultivado en Sudamérica 10
fue probablemente en la costa peruana (Frere et En 1986, el 87 % de las propiedades que sem-
al., 1975), pero se adapta mucho mejor en el piso braban trigo tenian una superficie inferior a las
templado por la altitud. El programa de cerea- la ha. S610 representaban el 52 % de las superfi-
les deI INIAP, que emprendi6 investigaciones cies cultivadas (lNIAP, 1993).
para conocer las posibilidades de su difusi6n en
la region litoral ecuatoriana, menciona (1993) 16.5 Cultivo
que no existe futuro «debido a un costo elevado
de producci6n, una menor rentabilidad que en Los modos de cultivo son muy similares a
los Andes y la falta de infraestructura de riego». los descritos en el casa de la cebada. Se encuen-
.
..
Carchi 2,77 6,8 364S 1S,2 1,33
Imbabura 4,1S 10,1 40S2 16,9 0,98
Pichincha S,OS 12,3 4123 17,2 0,83 Cuadro B33: Superficies cultiva-
Cotopaxi 1,S3 3,7 624 2,6 0,42 das en trigo, producci6n y ren-
Tungurahua 0,63 1,S 364 1,S 0,S8
Bolivar 14,12 34,S 7066 29,4 O,SO
dimiento por provincia, 1992
Chimborazo 7,76 19,0 2 SOS 10,4 0,32 Fuente: SEAN 1993
Caiiar 0,28 0,7 201 0,8 0,77
Azuay 1,98 4,8 527 2,2 0,27
Loja 2,45 6,4 842 3,S 0,3S
El Oro 0,16 0,4 46 0,2 0,28
Cultivos de trigo
importantes
ITrigo 1 Asociacién con campos
• de mafz-fréjol, pastos y
aigunos campos de papa
Unidad C 21
Cultivos de trigo
secundarios
~ Pastos predominantes
~ y algunos cultivos de
papa Unidad P 22
Principales ciudades
.
,
, .
*
o.'_-===-_==:11_I11III:::'=====-
100 200 km
'
tran bâsicamente las mismas prâcticas y la mas campesinos deI sur deI Azuay, en suelos
misma diferencia entre las grandes y pequenas relativamente pobres y en un contexto hidrico
explotaciones. Sin embargo, se deben anotar menos favorable, el trigo sigue a menudo al
algunas especificidades, tratandose sobre todo maiz al mismo titulo que la papa, a veces antes
de la aplicaci6n de abonos. de ella, pero mientras esta planta recibe 10
esencial de la estercoladura doméstica disponi-
16.S.a Abonamiento y rotaci6n ble (estiércol de gallina), el trigo es poco 0 nada
estercolado.
Mas que en el casa de la cebada, el aporte de
abonos es indispensable para una buena pro- 16.S.b Siembra y cosecha
ducci6n. Ahora bien, s610 el 42 % de los agricul-
tores abonarian sus parcelas y aun 10 harian La fecha de siembra es determinada en
con aportes que no representan sino la cuarta funci6n de la de la cosecha, que debe tener
parte de las dosis recomendadas (200 kglha de lugar en estaci6n seca, y de la duraci6n deI
18-46-0 y SO kg/ha de urea); 0 con una abona- cielo. Asi, el cultivo se beneficia con las preci-
dura menos apropiada pero de uso mas comun pitaciones invernales para su crecimiento, y •
(10-30-10) y todavia en subdosis (INIAP, 1993). puede haber un desfase de una provincia a
otra (figura BS2).
En la rotaci6n papa-trigo-pastos, tal coma se
la practica en la parte humeda de la provincia De una manera general, enero y febrero
de Carchi, el cereal se beneficia excepcional- son los meses de la siembra mientras que
mente de los restos deI abono aplicado para el julio y agosto son los de la cosecha. Las excep-
tubérculo (Gondard, 1986). Esta rotaci6n puede ciones son los calendarios de cultivo originales
ser considerada coma la rotaci6n tipo en la que de Carchi y Tungurahua, muy alargados en el
se introduce el cultivo de trigo. Casi siempre, el casa deI Carchi y casi fuera de tiempo para el
cereal sigue en efecto a la papa que encabeza el Tunguruhua. Esto refleja los regimenes plu-
cultivo. viométricos particulares, estaci6n seca poco
marcada en Carchi y una estaci6n lluviosa
En la provincia de Bolivar, la rotaci6n se suplementaria a mediados deI ano (influencia
basa en la sola altemancia deI trigo y el maiz, amaz6nica) en ciertas zonas de Tungurahua
de un ano a otro (Pouille, 1993). En los siste- (ver parte B lIllO).
SIEMBRA COSECHA
~
~ •
.' ...
1 1
...:.
l
~
• 1 1
1 1
Carchi
Imbabura
Pichincha
Il.
•
1
1 1 1 1
~ ] Cotopaxi
.• •
1 1
~
1 1
1 11
1 1
al Tungurahua Figura BS2: Calendario agricola
deI trigo (ordenada = porcenta-
~ Chimborazo
je deI numero de campesinos)
Fuente: MAG - PRONAREG, 1994
..
1 1
.. ~
1 1
Bolivar
Caiiar
.
]
+
1
Azuay
1
5gi
-+ •
1 1
Loja
Rendimientos tlha
1,2
1,0
........----.... Figura B53: Evoluci6n de los rendimientos
0,8
de trigo
0,6 Promedios moviles calculados con
los datos deI cuadro B34
0,4
0,2
Aiios
O+-.---,....,.......,..--r-~-.-...,.-,....,r-T----.---.---.--...,.-r-r--,.----.-,
1975 1980 1985 1990
182 Paisajes Agrarios deI Ecuador
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los allOS 1991-1992
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 183
IVucal
,
,
.
"
~'
~
..."
"";' l
•
., . -"- -'t'
o
• ,"
. ,
"
.,.
"
~~ 0 c Principales ciudades
~_ Carreteras principales
o 100 200 km
....-===-_-==-........I_'=====-__.....l'
Pastos Predominantes
~
~
Presencia de cultivos anuales y de
plantaciones permanentes Unidad 038
Pastos importantes
Presencia de cultivos anuales
Unidad 034
Presencia de plantaciones permanentes
~ Presencia de cultivos anuales Unidad P 35 D
•
Unidades 031, 32, P31,32
Asociacion con cultivos anuales y Asociacion con cultivos anuales y
plantaciones permanentes Unidad P33 plantaciones permanentes Unidad P34
Figura B54: Mapa de lacalizaci6n de las unidades cartagraficas can cultivas de yuca
Componentes deI paisaje III Cultivos principales 185
El empleo de abonos, nitrogenado y potasico, para la sola provincia de Manabi habrian pasa-
no se practica sino en las grandes explotaciones do de 7 000 ha en 1985 a 13 000 ha en 1988.
tecnificadas.
Sin embargo, seglin el SEAN, la producci6n
Los tratamientos fitosanitarios son general- nacional no seria sino de 90 280 toneladas en
mente inexistentes. El control de las malezas 1991 para una superficie cosechada de 19120 ha
se realiza mediante tres 0 cuatro pulverizacio- (jsolamente 3590 ha en la provincia de Manabi!)
nes de herbicidas -gramoxone- en las explo- y el rendimiento nacional promedio de 4 tlha, es
taciones tecnificadas, y manualmente al ma- decir un valor inferior a la mitad deI indicado
chete en las demâs. por FUNDAGRO.
IV CULTIVOS SECUNDARIOS
1 Cultivos altoandinos
A esta lista habria que afiadir Tropaeolum tuberosum (mashua), una capuchina tuberosa cuyo
cultivo, en el Ecuador, ya no subsiste sino cerca de las casas en las tierras agricolas mas altas (re-
gi6n de Zumbahua, provincia de Cotopaxi). Se pueden citar aun tres especies andinas en vias de
regresi6n y que ya no se encuentran sino en algunos pocos huertos, un tubérculo, Polymnia sonchi-
folia (jicama) y dos seudocereales, otra especie de quenopodio, Chenopodium pallidicaule (cafia-
hua), y los amarantos Amaranthus div. sp. (bledo, amaranto).
Sin embargo, coma esta lista reune especies productores de melloco, por ejemplo, la muestra
bastante diferentes, no podian faltar las excep- estudiada por Peralta y Nieto (1991) enseiia
ciones: el chocho y la zanahoria blanca pueden que mas de la mitad de ellos no cultiva mas de
ser cultivados a menores altitudes, es decir en 1000 m 2 . La quinoa es cultivada a veces en su-
zonas mas secas. El chocho puede también perficies mayores, en grandes propiedades que
adaptarse a suelos arenosos de textura mas tienen acceso a los nuevos mercados.
gruesa.
Algunas de estas plantas, coma chocho,
1.3 Modo de cultivo haba 0 quinoa, son cultivadas a menudo en aso-
ciaci6n, en forma lineal, alrededor 0 al interior
1.3.a Superficies de otros cultivos. Todas forman siempre parte
de rotaciones.
Las superficies totales indicadas tanto por
Frere et al. (1975) coma por Nieto et al. (1992) 1.3.c Cielo
o por el SEAN, son reducidas. Debido a su dis-
persi6n, su caracter familiar y su 10calizaci6n Los calendarios de cultivo estân determina-
en zonas a veces retiradas, estos cultivos dos por la duraci6n de los cielos y por el régi-
cubren superficies dificiles de estimar. Sin men de precipitaciones. Se busca sobre todo no
embargo, las habas se destacan elaramente con tener que cosechar en plena estaci6n lluviosa.
superficies netamente superiores a la 000 ha. Peralta y Nieto (1991) publicaron datos relati-
vos al cultivo deI melloco (figura B55): coma en
1.3.b Tamaiio de las explotaciones el casa de los demas cultivos de la zona monta-
iiosa (trigo, maiz, cebada, papa), las estaciones
Estos cultivos son casi siempre cultivos se- secas poco marcadas en la regi6n Norte se tra-
cundarios en las explotaciones basadas sobre ducen en épocas de siembra y cosecha dispersas
todo en la cebada y la papa. Se encuentran a 10 largo deI aiio, mientras que la estaci6n
esencialmente hacia el limite superior de las humeda, mas corta y mas marcada en la regi6n
• tierras cultivadas, siendo mas frecuentes en las sur, provoca una concentraci6n de estas activi-
regiones donde se mantienen los grupos indige- dades agricolas.
nas mas tradicionales, en el norte y el centro de
los Andes. 1.3.d Trabajos agricolas
En el casa de la mayoria de estos cultivos, Las labores dedicadas a estos cultivos son
las parcelas en si son pequeiias. Los producto- limitadas: dos labranzas cruzadas, uno a dos
res poseen reducidas propiedades explotadas deshierbes manuales, aporcadura en el casa de
por la mana de obra familiar. Tratândose de los los tubérculos. Los cuidados, son también rela-
188 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Figura B55: Calendario agricola deI melloco (ordenada = porcentaje deI numero de campesinos)
Fuente: elaborado segti.n Peralta & Nieto, 1991
SIEMBRA COSECHA
tivamente reducidos: la estercoladura esta lige- puestos durante varios dias seguidos al sol
ramente mas difundida que el abonamiento para destruir los cristales de oxalato.
mineraI y, en ocasiones, s610 se cuenta con los
aportes realizados para el cultivo anterior (casi 1.4 Perspectivas
siempre de papa). Asimismo, aun, especies bas-
tante expuestas a enfermedades fungicas (cho- Las perspectivas de estos productos siguen
cho y haba), no reciben sino rara vez un trata- siendo reducidas para la mayoria de especies,
miento apropiado. esencialmente a causa de un mercado restrin-
gido. Unicamente las habas ocupan un lugar
1.3.e Producci6n importante en la alimentaci6n tanto de la po-
blaci6n urbana como de los habitantes rurales.
La producci6n es, en el casa de los tubércu- Los tubérculos secundarios, en cambio, sirven
los, de 5 a 7 tlha, mientras que en parcelas ex- sobre todo para el autoconsumo de la poblaci6n
perimentales los rendimientos son de alrededor rural y estarian en regresi6n, salvo tal vez el
de 20 tlha. Las especies productoras de granos melloco.
dan cosechas de 0,5 a 1 t/ha, mientras que se
puede esperar una producci6n de 2 a 3 tlha en Un programa de investigaci6n especifico deI
parcelas experimentales. Los bajos rendimien- Instituto Ecuatoriano de Investigaciones Agro-
tos observados reflejan a la vez el mediocre pecuarias (INIAP) se dedica al establecimiento
nivel de tecnicidad y el rigor de las condiciones de una colecci6n de variedades tradicionales y a
climaticas de las zonas de cultivo. su evaluaci6n. Algunos productos pueden en-
contrar una salida al exterior gracias a la boga
Para ser consumibles, algunos de estos pro- de los productos «naturales» 0 ex6ticos, como es
ductos deben ser objeto de tratamientos ya el casa actualmente de la quinoa y tal vez, a
mencionados. Los tubérculos de oca requieren mas largo plazo, de Chenopodium pallidicaule,
igualmente un tratamiento particular: son ex- los amarantos y el chocho.
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 189
El cultivo de legumbres se desarrolla sobre todo en la regi6n andina. Estâ prâcticamente ausen-
te en la Amazonia y, en la Costa, se limita a los huertos familiares y a unas pocas unidades carto-
grâficas de superficie reducida (C46, C47 y C48). En la regi6n andina se encuentran evidentemen-
te los huertos cercanos a la vivienda aunque también cultivos en pleno campo. En este ultimo caso,
se deben separar las legumbres cultivadas en asociaci6n con el maiz (principalmente fréjo1) de
aquellas cultivadas en parcelas de un solo cultivo.
Los frejoles cultivados en campo abierto en Las demâs leguminosas de campo abierto se
asociaci6n con el maiz son cultivares trepado- encuentran en zonas relativamente secas y en
res (variedad communis). Utilizan el maiz coma suelos arenosos. La segunda leguminosa en
tutor y le proporcionan el aporte de nitr6geno. importancia es la arveja que se cultiva de dos
Son cosechados en seco y consumidos en grano. maneras diferentes, ya sea para la venta en
Existen numerosas variedades que se pueden grano fresco en los sistemas hortenses (C26), 0
reconocer por sus formas y colores. Phaseolus para la cosecha en grano seco (C25). Seglin los
vulgaris es el fréjol clâsico deI norte y deI centro datos deI SEAN, estos dos modos ocupan apro-
de la regi6n montaiiosa. En la provincia sureiia ximadamente la misma superficie, entre la 000
de Loja, el féjol es reemplazado por la saranda- y 15 000 ha. La lenteja y el haba menor (0 ha-
ja, Dolichos lablab, a veces cultivada en mono- billa) se cultivan también en las depresiones
cultivo. secas de los Andes centrales. El guandul estaba
190 Paisajes Agrarios deI Ecuador
restringido al valle calido deI Mira, y su cultivo equilibrada y ser faciles de trabajar (terrenos
parecia estar ligado a la presencia de poblaci6n pIanos). La necesaria fertilidad se obtiene habi-
negra, pero se puede observar una reciente tualmente mediante una importante abona-
extensi6n de este cultivo en la regi6n de Pedro dura de fondo completada con aportes peri6di-
Carbo. Estas tres ultimas especies se cosechan cos de fertilizantes. Todas las operaciones (pre-
unicamente en granD seco. paraci6n de la tierra, eventualmente germina-
ci6n en vivero y trasplante, control de las en-
Los cultivos de cebolla y de ajo en campo fermedades y plagas, deshierbe y cosecha) se
abierto (incluidos en C26) se practican en tie- realizan a la mana y demandan una atenci6n
rras mas altas, alrededor de los 3000 m.s.n.m. constante. El trabajo es 10 suficientemente in-
Esta 10calizaci6n se debe tanto a las condicio- tenso coma para limitar las explotaciones fami-
nes sanitarias benéficas encontradas en este liares a superficies reducidas, pues un hombre
piso coma a la tradici6n de ciertos grupos indi-
genas. Pese al aspecta de campos abiertos, es-
no puede manejar sino 0,15 ha. ..
tos cultivos se asemejan claramente a los huer- Este tipo de explotaci6n agricola tiende a
tos: la mana de obra es importante, asi coma la extenderse para satisfacer una creciente de-
utilizaci6n de insumos (productos fitosanitarios manda, debida tanto al incremento demografico •
yabonos). coma a la modificaci6n de las costumbres ali-
mentarias de una clase acomodada de la pobla-
Entre los demas cultivos de legumbres en ci6n. Se comercializan sobre todo productos
pleno campo, se pueden citar las pequefias par- frescos vendidos en los mercados de las aglome-
celas de col (zonas humedas alrededor de Qui- raciones 0 a través de cadenas de supermerca-
to) 0 de tomate (zonas secas y medianamente dos. Una reducida proporci6n se destina a las
calidas de Pimampiro, deI valle de Guaylla- fabricas de conservas 0 a la exportaci6n de
bamba, etc.). Mas recientemente, el cultivo de productos frescos durante el inviemo boreal.
esparragos para la exportaci6n ha adquirido
cierta importancia al norte de Quito (zonas me- El cul tivo de hortalizas en zona calida,
dianamente humedas con suelos arenosos). mucho menos desarrollado que en la regi6n
andina, comprende, ademas de especies culti-
El cultivo de hortalizas se practica mas en vadas en la regi6n montafiosa, algunos cultivos
parcelas pequefias que en pleno campo. El ta- mas exigentes en calor. El pallar (Phaseolus lu-
mafio es, sin embargo, suficiente coma para natus) y el caupi (Vigna unguiculata), comple-
producir un volumen comercializable. Al con- tan la gama de frejoles secos y la segunda espe-
trario de los cultivos en pleno campo, un pro- cie proporciona igualmente vainitas. El cultivo
ductor hortense tendera a cultivar varios pro- deI pimiento (Capsicum annuum) esta bastante
ductos en su propiedad. Las parcelas de horta- difundido en el valle de Santa Ana, y el aji
lizas se caracterizan también por la proximidad (Capsicum frutescens) se encuentra en todos los
de un mercado, habitualmente un centro huertos caseros.
urbano, aunque también por una posibilidad de
comercializaci6n: tradicionalmente, gran parte La temperatura mas elevada amplifica los
de la producci6n de Riobamba se destina a problemas sanitarios de estos cultivos, a menu-
Guayaquil. do sensibles. Tales problemas se convierten en
un verdadero freno a la implantaci6n de este
Las técnicas de cultivo son esencialmente tipo de cultivos en las regiones mas humedas,
manuales. Son sin embargo intensivas con el cuando las enfermedades criptogamicas vienen
empleo de productos fitosanitarios y abonos, a sumarse a las otras plagas. En la Costa, se
rotaciones entre las parcelas y a menudo riego. encontraran cultivos de hortalizas, sobre todo
Los suelos escogidos deben tener una textura en las zonas secas regadas.
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 191
3 Flores
Especies principales
aster Aster acuminatus Michx., A. alpinus Lin., A. Amellus Lin., A. cassiarabus
Maund., A. cf cordifolius Lin., A novae angliae Lin., A. novi belgii Lin., A.
thomsonii Clarke
clavel Dianthus barbatus Lin., D. caryophyllus Lin., D. plumarius Lin.
clavelin Dianthus chinensis Lin.
gerbera Gerbera aurantiaca Sch. Bip., G jamesonii Bolus, Gerbera viridifolia Sch.
Bip.
gypsophila Gypsophila elegans M. Bieb., G. muralis Lin., G. oldhamia Miq., G. pani-
culata Lin., G. repens Lin.
rosa Rosa x grandifiora Hort., Rosa spp.
Flores de veranD
agapanthus Agapanthus africanus Hoff.
• alheli Cheiranthus cheiri Lin., C. kewensis Hort
astilbe Astilbe x arendsii Arends, A. chinensis Franch. & Sav., A. crispa Arrends,
A. glaberrima Nakai
alstromeria Alstroemeria aurantiaca D. Don, A. caryophyllacea Jacq., A. haemantha
Ruiz & Pavon, A. versicolor Ruiz & Pavon
azucena Lilium amabile Palibin, L. auratum Lindl., L. cf hansonii Leichtl. ex
Moore, L. henryi Baker, L. longifiorum Thunb.
bouvardia Bouvardia spp.
campanula Lisianthus spp. 0 Eucomia spp.
dalia Dahlia x pinnata Hort.
delphinium Delphinium consolida Lin., D. elatum Lin., D. formosum Hort ex Beaton,
D. grandifiorum Lin., Delphinium perigrinum Lin.
clavel Dianthus caesius Sm., D. deltoides Lin.
eryngium Eryngium alpinum Lin., E. cf amethystinodes Kuntze, E. x olivieranum
Hort.
fresia Freesia refracta (Jacq.) Klatt, F. x hybrida Bailey
girasol Helianthus annuus Lin., H debilis Nutt., H. mollis Buchoz.
hypericum Hypericum spp.
jacinto Hyacinthus orientalis Lin.
leatherleaf fem cf Rumohra adiantiformis (F.) Ching
liatris Liatris pycnostachya Michx.
limonium Limonium latifolium Kuntze, L. sinuatum (Lin.) Miller, L. tataricum Mill.
margarita Chrysanthemum maximum Ramond
snapdragon Antirrhinum majus Lin.
solidago Solidago canadensis Lin., S. virga aurea Lin.
solidaster x Solidaster luteus Hort.
statice Statice cf reticulata Lin.
trachelium Trachelium spp
Esta dinamica se produce no solamente en el Ecuador, sino también en otros paises coma
Kenya, India y Mozambique, donde las condiciones climaticas y los bajos costos de trabajo son los
principales motores de una explosi6n de la producci6n de flores frescas cortadas de clima templa-
do. Holanda, tradicional y primer productor mundial de flores cortadas, esta hoy forzada a aban-
donar la rosa y el clavel para dedicarse a la producci6n de otras especies.
3.1 Candiciones deI auge de la floricultura -exportaciones favorecidas pOl' la politica deI •
cielo abierto que atrae numerosas compafifas
Todo un conjullto de factores favorables per- aéreas, multiplica los vuelos y reduce el precio
mitieron el desarrollo de esta especulaci6n deI flete.
nueva para el pais.
Gracias a sus bajos costos de producci6n, las
Las condiciones climaticas son favorables flores ecuatorianas pueden llegar a los merca-
para el cultivo de flores de clima templado: dos deI hemisferio norte con precios competiti-
-temperaturas estables durante todo el afio, vos, a pesaI' deI transporte aéreo. Ademas, el
-temperatura suficientemente alta para no Ecuador puede exportaI' en épocas de fuerte
necesitar calefacci6n, ni aislamiento térmico demanda (Navidad, San Valentin) mientras
de los invernaderos, que la producci6n europea esta en su mas bajo
-temperatura suficientemente baja para limi- nivel (estaci6n inverna1).
taI' las enfermedades.
-iluminaci6n estable de 12 horas pOl' dia todo Otro factor favorable al desarrollo de la flo-
el ano. ricultura en el Ecuador es la posibilidad legal
Estos factores permiten obtener productos de facturaI' la producci6n a unos precios infe-
de alta calidad (tallos grandes, colores inten- riores a los reales y asi tener la oportunidad
sos). de realizar una evasi6n fiscal hacia los parai-
sos fiscales (Gasselin, 1996). A pesaI' de la efi-
Las condiciones socioecon6micas son otro cacia econ6mica de la floricultura para gene-
factor favorable: l'al' una riqueza nacional, este sistema conta-
- bajos costas de la tierra en relaci6n a otras
regiones coma la de los p6lderes holandeses Figura B56: Evoluci6n de las proporciones de
(tierras ganadas en el mal') 0 la periferia de especies exportadas
Bogota, Fuente: Banco Central deI Ecuador, 1998
- bajos costos de la mana de obra; pOl' ejemplo,
100°;'
un dia de trabajo en el sector de Quito tiene el
mismo costo que una hora de trabajo en Esta-
dos Unidos, 6 US$, •
- bajos costos de los invernaderos, los cuales
pueden sel' realizados con estructuras livianas
de madera 0 de metal cubiertas de plastico 50
gracias a un clima suave,
- bajos costos de los insumos energéticos (diesel
y electricidad) en un pais productor de petr6leo,
- gastos de productos fitosanitarios reducidos
en comparaci6n con zonas mas humedas y Or----,---.,--
calidas, 1983 1985 1988 1991 1994 1997
-reducida presi6n de la legislaci6n de protec-
li 1 Rosas f:-:::":':::'~J Claveles
ci6n deI medio ambiente y poca vigilancia
sanitaria, • Gypsophila .Otras
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 193
.1986
.1987
.1994
11 1998
Numero
•
1985 1990 1995
Una importante y minuciosa mana de obra Cabe senalar que existe también en el Ecua-
(ver adelante 3.6.f) asi coma facilidades para la dor una producci6n de flores tropicales repre-
exportaci6n por via aérea son otros requeri- sentando 6 % de las superficies cultivadas en
mientos para el desarrollo de una plantaci6n de 1997 (cuadro B37) y ubicada en las regiones de
flores. la costa (figura B57) y deI oriente (CFN, 1995a
y PROEXANT, 1992).
3.4 Zona de cultivo y superficies sembradas
Desde su inicio el numero de plantaciones
Una de las particularidades de la floricul- (figura B58) asi como las superficies dedicadas
tura ecuatoriana es la de haberse desarrollado a la floricultura (figura B59) han aumentado de
principalmente en el espacio periurbano de manera exponencial. En enero de 1985, EXPO-
Quito pùr la cercania al aeropuerto. Sin embar- FLORES et al. (1996) registraban 3 empresas
go, la floricultura tiende hoy en dia a extenderse exportadoras, cifra que pasaba a 320 en enero
a otras provincias serranas -particularmente de 1998 (EXPOFLORES, 1998). Las superficies
Cotopaxi, Imbabura y Azuay, figura B57-: el sembradas muestran una evoluci6n similar: de
precio de la tierra mas barato que en las inme- 96 ha en 1986 pasan a 2947 ha al inicio deI ano
diaciones de la capital y el reconocimiento de 1998 (figura B59).
las aptitudes c1imaticas y edafol6gicas de estas
regiones son elementos que influyen en la ex- 3.5 Tamano de las explotaciones
tension de las zonas productoras. En 1985, la
floricultura era casi exc1usivamente en la pro- La floricultura se observa principalmente
vincia deI Pichincha; en 1994, el 65 % de las en medianas y grandes explotaciones (4 a 40
138 plantaciones de flores en el Ecuador esta- ha) muy a menudo dedicadas solamente a este
ban instaladas cerca de Quito; en 1997, esta- producto. El principal objetivo de los duenos de
proporci6n sigue manteniénciose en un 67 % de las plantaciones es rentabilizar de la mejor
las plantaciones y el 70 % de las superficies. manera el capital invertido. El propietario 0
Superficie (ha)
3000 •
1000
sita agua limpia, 10 que requiere a veces un Los costos de mantenimiento pueden ser
tratamiento con cloro y/a filtros. elevados y llegar hasta 70000 US$ por hectarea
y por ano en el casa de las rosas (CFN, 1995b).
La fertilizaci6n se realiza de acuerdo con
los analisis quimicos deI suelo, a veces a tra- 3.6.d Cosecha.
vés deI riego. Los quimicos son entonces
disueltos en el agua y conducidos por sistemas La cosecha es siempre manual. Su fecha se
-computarizados 0 no- de microaspersi6n determina por el estado feno16gico de la planta
y/a goteo. En este casa se necesitan reser- -normalmente apertura deI bot6n pero varia-
vorios, tanques y bombas para la distribuci6n ble seglin la especie-, y por el destino de la
deI agua en el terreno. planta -de acuerdo con el tiempo para llegar
hasta el florero deI consumidor final-.
Las podas permiten ajustar los calendarios
de producci6n a los picos de producci6n para El transporte hacia la sala de postcosecha se
satisfacer la gran demanda de San Valentin,
deI dia de las madres, dia de la mujer 0 de la
realiza en baldes y mallas plasticas especiales,
llevadas a mana 0 por medio de rieles con
..
Navidad. Son de varios tipos: pinchar el tallo, canastillas metâlicas, para evitar todo dano a
eliminaci6n de las flores pequenas 0 danadas, las flores.
deshojado ---eliminaci6n deI exceso de hojas-,
corte de algunas partes terminales de los Los rendimientos son variables segun las
tallos a fin de promover la brotaci6n secunda- flores y se expresan de diferentes maneras
ria y tener unas flores de mejor calidad y faci- seglin 10 que se quiere medir (bunches/ha/cose-
litar la cosecha. El mantenimiento consiste cha, toneladas métricas/ha/cosecha, botones/
también en tutorar con postes de madera y planta/cosecha, botones/planta/mes ... ). Las
alambre. flores desechadas (5-10 %) pueden ser vendidas
en el mercado nacional a precios inferiores a los
El control de malezas se realiza en forma costos de producci6n 0 utilizadas para el com-
continua para evitar la competencia entre las post.
plantas y problemas sanitarios. Los trata-
mientos fitosanitarios -en contra de insectos, 3.6.e Tratamientos postcosecha
hongos, bacterias, nematodos, acaros, molus-
cos, roedores- se aplican con bomba rnochila Casi todas las etapas de la postcosecha son
y requieren medidas apropiadas. Entre otras manuales. Las flores son colocadas en recipien-
cosas se necesita prohibir el consumo de ali- tes con agua, para su hidrataci6n, y productos
mento, no fumar, no masticar chicle y llevar fitosanitarios, para aumentar el tiempo de con-
un equipo especial de protecci6n -guantes de servaci6n y matar los insectos que podrian
puno largo de caucho, gafas, mascarilla con dafiar el bot6n y/a provocar el rechazo de la flor
filtros para pesticidas, botas de goma 0 PVC y durante la expedici6n 0 en la venta. Posterior-
ropa impermeable con capucha-. mente se clasifican las flores tomando en cuen-
ta la calidad deI producto -tamafio y apertura
La frecuencia de aplicaci6n y la toxicidad de deI bot6n, mancha en los pétalos, verde de la
los productos usados son un peligro para el hojas, colores, perfumes, tamafio, consistencia
medio ambiente y la salud de los trabajadores y rectitud deI tallo-, y su caracteristica: bou-
(enfermedades neuro16gicas, cardiovasculares, quet 0 acompanamiento. Se eliminan algunas
respiratorias, gastro-intestinales, dermato16gi- hojas de la parte baja de los tallos. Después se
cas). Algunas plantaciones estan probando sis- forman bunches de conformaci6n variable ,
temas de control bio16gico, otras tratan de con- seglin la especie, el tamano de las flores y el
trolar el uso de los plaguicidas y de los pestici- pedido deI comprador.
das con el fin de obtener los "Sellos Verdes"
europeos 0 americanos. Todas las grandes em- Después de la clasificaci6n los bunches se
presas floricultoras realizan determinaci6n de colocan en cubetas con una soluci6n nutritiva y
los niveles de colinesterasa por medio de anali- preservantes. Éstas son introducidas en el
sis de sangre peri6dicos, para prevenir y dia- cuarto frio, a una temperatura de 2-4 grados
gnosticar las intoxicaciones. Es un tema de gran centigrados (las flores tropicales no entran en
importancia en el desarrollo repentino de la cuarto frio). El tiempo de preenfriamiento de-
floricultura en el Ecuador: todas las consecuen- pende de la resistencia y durabilidad de cada
cias ambientales y sanitarias de la floricultura especie, coma deI tiempo requerido para el
aun no estan bien conocidas (Struve, 1998). transporte.
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 197
•
O+.....a.,..al........~~~~,.---,----.:.--.-----r--r--.-----r---,
1980 1985 1990 1995
Estados Unidos 76 73 70 69
Canada ? ? 2 2 Cuadro B38: Repartici6n de las exportaciones (%)
Europa 17 16 15 14 Fuente: Banco Central deI Ecuador, 1998
América dei Sur 4 2 2 2
Asia 2 6 9 10
Otros 1 3 2 3
198 Paisajes Agrarios deI Ecuador
apropiacion de los recursos naturales y medios les, politicas y ambientales deI desarrollo re-
de producci6n agricolas. Tales como la exigen- pentino de este nuevo sistema de produccion
cia de un abastecimiento regular en agua de justifican estudios mas profundizados.
riego limpia y la demanda en tierras planas de
buena calidad cercana a los ejes de comunica- A pesar de su desarrollo explosivo, la flori-
cion, la floricultura introduce nuevas reglas de cultura tiene sus lados vulnerables. Siendo el
juego en la dinamica agraria de las zonas resultado de fuertes inversiones buscando la
donde se instala. mejor rentabilidad, la floricultura sera descar-
tada por los inversionistas si alguna otra activi-
La floricultura induce la aparici6n de nue- dad puede proveer mayores ganancias. Por otro
vas relaciones salariales con los campesinos lado, las buenas condiciones climaticas y socio-
anteriormente atados a la hacienda u obligados econ6micas no son exclusivas deI Ecuador y
a migrar hacia las ciudades. El campesino otros paises, vecinos 0 lejanos, pueden interve-
doble activo representa una mano de obra libre- nir en la oferta y propiciar une fuerte compe-
mente comprada y despedida segu.n las fluctua- tencia en este nuevo mercado de producto de
ciones deI mercado. Ademas, se observa un lujo. Sin embargo, gracias a la gran diversidad
incremento de los salarios de la mano de obra de especies cultivadas, el sector floricultor
agricola que pone en riesgo la estabilidad de las ecuatoriano puede responder rapidamente a
explotaciones campesinas y de las haciendas variaciones mas 0 menos conyunturales deI
lecheras. Las consecuencias economicas, socia- mercado.
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 199
4 Frutales de la Sierra
De la larga lista anterior que trata de men- cies son también plantadas en los jardines
cionar incluso las frutales menores cultivadas urbanos.
en la regi6n montaiiosa, se deben separar de - El acerola es una introducci6n reciente aun
entrada las especies que no se encuentran sino limitada a los jardines de los alrededores de
en los jardines y que no aparecen en las listas Quito.
publicadas por el SEAN. - El anis estrellado no es cultivado sino en su-
perficies muy reducidas en el valle câlido deI
- El chamburo y el chihualcan son dos especies Chota. Sus semillas sirven para perfumar
andinas, de las cuales la primera seria un ciertos alcoholes locales.
hibrido entre Carica pubescens y C. stipulata - El nogal se encuentra en toda la zona humeda
(Badillo, 1983). Los frutos, relativamente pe- deI callej6n interandino, pero es particular-
queiios, se consumen cocidos en almibar. El mente abundante en el norte deI pais. Sus
• chamburo se encuentra sobre todo en los jar- magras nueces, envueltas en una câscara re-
dines de la regi6n de Baiios y en otros valles lativamente espesa, sirven para preparar dul-
câlidos, mientras que el chihualcan es culti- ces, pero el principal interés de esta especie es
vado a menudo a mayor altitud. su madera codiciada para la escultura y la
-El membrillo, el nispero, el higo y el arrayân carpinteria de lujo. .
se encuentran en los jardines de las zonas re- -Las dos Passiflora. el taxo y la granadilla son
lativamente câlidas y preferentemente hacia especies andinas de las cuales la primera pa-
los 2 300 m.s.n.m. El membrillo y el arrayân rece estar restringida a los jardines, mientras
son los menos difundidos y las otras dos espe- que la segunda es objeto de pequeiias planta-
200 Paisajes Agrarios deI Ecuador
ciones en la regi6n de Banos. La uvilla, el Las parcelas son pequenas y, después deI
ruibarbo y el pepino estan en una situaci6n desmonte, las j6venes plantas de naranjilla
similar a la deI taxo. obtenidas de germinaciones en vivero, son im-
- El albaricoquero parece ser la rosacea menos plantadas en 2 x 2 m aproximadamente. Una
difundida pese a la creciente presencia en el plantaci6n dura normalmente 2 anos y, con
mercado de jugos 0 mermelada de esa fruta; el cuidados particulares, se puede prolongar su
albaricoquero se encuentra en la zona de las producci6n hasta los 4 anos.
otras rosaceas de clima templado, casi
siempre en los alrededores de Ambato. El cultivo esta sujeto a todo tipo de ataques
-El capuli es muy comun en las altitudes media- en todas sus partes. Los agentes pat6genos y
nas deI callej6n interandino; es plantado en las plagas son numerosos (nematodos, bacte-
los limites de parcelas 0 cerca de las casas y rias, hongos e insectos), y las pérdidas pueden
ademas de sus frutos, proporciona una lena ser totales.
apreciada.
- La vid, aunque forma parte de las primeras Para mantener una producci6n satisfactoria,
plantas introducidas durante la Colonizaci6n, se exploran tres soluciones. La mas tradicional
no es muy comun. Pequenos vinedos producen es el tratamiento con productos fitosanitarios, •
ya sea vino (sobre todo al norte de Quito) 0 fungicidas, nematicidas e insecticidas. En el
uvas de mesa (valle deI Chota y deI Patate) y mismo orden de ideas, un aporte de calcio, ade-
son regados. Una pequeîia colonia chilena pro- mas deI mejoramiento deI pH deI suelo, dismi-
b6 la implantaci6n de vinedos cerca de Pedro nuye los ataques de nematodos (Valarezo y
Carbo, en la llanura costera, pero la tentativa Samaniego, 1982a). Si bien estos tratamientos
fracas6 rapidamente. son de una cierta eficacia, su costo y su deli-
cado manejo los coloca fuera deI alcance de los
Los demas cultivos frutales de la regi6n pequenos productores. Una segunda soluci6n
montanosa se presentan con algunas de sus consiste en modificar el modo de cultivo, pues
caracteristicas en el cuadro B39. Se trata, en los frutos de S. quitoense producto de una plan-
principio, de cultivos de una superficie sufi- taci6n mezclada con cultivos alimenticios no
ciente coma para poder ser considerados en el son atacados, pero en tal casa la producci6n es
método de estimaci6n utilizado por el SEAN. inferior a la obtenida en una plantaci6n tra-
Tres de ellos, las naranjillas, las fresas y las dicional (Valarezo y Samaniego, 1982b). Final-
moras tienen modos de cultivo originales que mente, 10 que ha llevado a la mejor soluci6n ha
permiten separarlos de los otros. Los manza- sido el mejoramiento de la especie. Un cultiva-
nos, perales, ciruelos y duraznos forman un dor de la regi6n de Mera realiz6 un hibrido de
conjunto homogéneo al igual que el tomate de Solanum quitoense x S. sessiliflorum, estéril
arbol, el babaco y la mandarina por una parte, pero mas resistente a las enfermedades y pla-
y el aguacate y la chirimoya, por otra. gas. Su multiplicaci6n puede hacerse mediante
esquejes y sus frutos tienen las propiedades
La naranjilla es una solanacea arbustiva deI organolépticas de la naranjilla (Camacho,
sotobosque 0 de espacios abiertos de los 1981). Desde entonces, el INIAP ha lanzado un
bosques de mediana altitud de la vertiente programa de investigaci6n de descendencias
oriental de los Andes ecuatorianos. Su fruto se resistentes y de hibridos, en particular con S.
utiliza sobre todo para jugos 0 sorbetes. hirtum CEguiguren et aL, 1985).
Se trata de una planta muy exigente en fer- La diseminaci6n deI hibrido permiti6 un
tilidad y no puede ser cultivada sino al inicio de nuevo auge de las superficies plantadas con ,.
la explotaci6n, después deI desmonte deI bosque. naranjilla que, después de un periodo de decli-
Por otro lado, no soporta los cambios bruscos de naci6n debido a problemas fitosanitarios, se du-
temperatura ni los vientos violentos; finalmente plicaron entre 1989 y 1992 (1800 ha en 1986,
es muy sensible a plagas yenfermedades. 5300 ha en 1989 y 10780 ha en 1992). Los
numerosos intentos de elaboraci6n de jugos 0
Este cultivo es practicado por pequenos agri- concentrados apuntan a conquistar mercados
cultores que practican un sistema pionero ori- mas amplios, en particular de exportaci6n, que
ginal en las partes bajas de las pendientes no pueden abastecerse con productos frescos
hacia la Amazonia. Como sus plantaciones no debido a la fragilidad de los frutos.
son permanentes y es imposible replantarlo en
la misma parcela, se 10 reemplaza por cultivos La fresa tiene igualmente un modo de pro-
alimenticios 0 pastizales. ducci6n original. Tradicionalmente, el mercado
..
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 201
Tradicionales, pequenos
Aguacate Cuencas secas
y medianos
x 3900
~
Tradicionales, pequenos
Tomate de arbol Zonas de Banos y de Patate
y medianos
x x x x 2280
~ Tradicionales, pequenos
Durazno Regi6n de Ambato y medianos; inversionistas x 2610
medianos y grandes
Pera Regi6n de Ambato id x 2540
Tradicionales, pequenos
Chirimoya Cuencas secas x 870
y medianos
Tradicionales, pequenos
Babaco Regi6n de Banos x x x x 120
y medianos
Inversionistas, medianos
Frutilla Alrededores de Quito x x x x 70
y grandes
• «Pequeno». «mediano» y «grande» incluye, ademas dei tamano de la explotaci6n, el volumen de capital
y otros medios de producci6n movilizados
cons. = trutos procesados por conserverfas: jugos. trutos en almibar, concentrados, mermeladas
local de frutas frescas 0 para la elaboraci6n de dante mana de obra, 10 que 10 reserva a un re-
mermeladas era abastecido por una producci6n ducido numero de cultivadores de tipo empre-
en pleno campo de variedades de frutos gran- sarial. Sin embargo, la rentabilidad neta es
des, suaves y odoriferos en su madurez. La elevada, de 11200000 sucres/ha anuales, seglin
apertura deI mercado de exportaci6n acarre6 Ortega (1985).
cambios. La exportaci6n de frutas frescas de-
manda variedades de frutos calibrados, colori- La mora es cultivada por algunos pequeiios
dos y mas consistentes. Se deben también obte- productores en las provincias de Pichincha
ner frutas limpias; de alli el cultivo en camas (San José de Minas) y de Tungurahua (Huachi
cubiertas de plastico, e incluso una tentativa de Grande). Aunque los Andes ecuatorianos dispo-
cultivo hidrop6nico en columnas Ilenadas de nen, entre 1200 y 3000 m.s.n.m., de una dece-
. escorias volcânicas en las que un sistema auto-
matizado aporta el agua, el abono y productos
na de especies reconocidas (An6nimo, 1985), la
mas cultivada es Rubus glaucus Benth., Ilama-
fitosanitarios. da sin raz6n «mora de Castilla».
La fresa era cultivada en suelos arenosos, En las islas Galapagos se introdujo una es-
sobre todo en la periferia de la depresi6n de pecie de mOTa que se muestra particularmente
Guayllabamba, aunque también en la regi6n de agresiva en la isla San Crist6bal. Tentativas de
Ambato. Sin embargo, se ha desarrollado y elaboraci6n familiar de mermelada han tratado
concentrado particularmente en las zonas me- en vano de sacaralglin provecho de esa peste.
dianamente secas, al norte de Quito.
Se trata de un cultivo de las zonas humedas
Este cultivo de renta, muy tecnificado, de- y frescas y se dispone de pocas informaciones a
manda inversiones importantes y una abun- su respecto.
202 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Los frutos son sumamente fragiles y en las Éstos, asociados a la suspensi6n deI riego, si-
condiciones habituales de comercializaci6n, las mulan el periodo invernal de reposo. Los ata-
pérdidas pueden a1canzar el 100 % en tres dias. ques, sobre todo de hongos, son frecuentes en
Se recomienda el transporte en bandejas (Fer- las raices, las hojas y los frutos. Aumentan
nandez y Moreno, 1985). hacia el limite superior deI cultivo. Los trata-
mientos fitosanitarios sistematicos aumentan
Todos los arboles frutales de clima templado, considerablemente la producci6n y la calidad
manzano (5500 ha), peral (2500 ha), ciruelo de los frutos (Orellana et al., 1984; Tamayo,
(2000 ha) y duraznero (2600 ha) y albaricoque- 1985). Este ultimo autor detect6 igualmente
ro son cultivados desde hace tiempo. Ellos for- enfermedades por carencias minerales, impu-
maban parte de sistemas de cultivo bajo riego, tables sobre todo a deficiencias en hierro y ma-
multiespecificos y multiestratos a la imagen de gnesio.
los oasis deI Viejo Mundo (T23). Se trataba de •
vergeles mantenidos por pequenos propietarios El mal estado de los frutos al momento de la
que manejaban su producci6n variada con un cosecha es la principal causa de las pérdidas de
verdadera mentalidad empresarial. Mas recien- producci6n, siendo poco importantes las pérdi-
temente, se han creado vergeles de mayor das de la comercializaci6n. Como el durazno es •
tamano, particularmente en la provincia de una fruta bastante delicada, debe conservarse
Imbabura y en la periferia de las plantaciones en bandejas y de preferencia en camara refri-
tradicionales de Ambato. Se trata casi siempre gerada (Caicedo, 1983).
de inversiones de personas ajenas al sector
agricola que buscan en esta actividad la renta- La amplia variedad de estas especies fruta-
bilidad de sus fondos. les y de padrones y la diversidad de métodos
paliativos deI invierno de las regiones templa-
En 1985, las manzanas representaban el das, permiten numerosas combinaciones, de las
70 % de la producci6n de este grupo de frutales. cuales algunas pueden ser productivas y renta-
La variedad mas antiguamente difundida es bles (Erez, 1987). Los frutos son esencialmente
Emilia, una manzana similar a la reineta deI consumidos frescos y en el mercado nacional.
Canada y, durante los 40 ultimos anos, se han Las superficies plantadas, en ligero pero cons-
introducido variedades tales coma Golden Deli- tante aumento, han permitido disminuir consi-
cious, Rome Beauty, Winter Banana 0 incluso derablemente las importaciones provenientes
Granny Smith. En los vergeles de las partes de Chile.
mas bajas de los valles interandinos, se prefie-
re la variedad Anna, poco exigente en horas- El tomate de arbol. el babaco y, en menor
frio -350 frente a 850 en el casa de Granny medida. la mandarina estan bastante difundi-
Smith por ejemplo (Granges y Barahona, dos en las partes de mediana y baja altitud, en
1985)-. La elecci6n de las variedades para es- un clima relativamente humedo. Sin embargo,
tas especies se realiza en funci6n de este impe- la mayor concentraci6n se encuentra en la
rativo fisio16gico, aunque también en funci6n regi6n de Patate-Banos. El mandarino es el
deI destino deI producto (consumo en estado citrico cuyo cultivo a1canza la mayor altitud y
fresco 0 industrializaci6n), y de la precocidad de se 10 encuentra también a todo 10 largo deI
la cosecha, conviniéndole a cada productor, pa- valle deI Pastaza. Su producci6n esta destinada
ra distribuir su producci6n en el tiempo, mez- unicamente al mercado nacional y al consumo
clar variedades precoces y tardias. Debido a las camo fruta fresca.
incompatibilidades entre polen y estigma, se
debe procurar también la utilizaci6n de varie- Las otras dos son plantas andinas y el baba-
dades compatibles. co no se encuentra sino en el Ecuador. De ella
no existe sinD una sola variedad y, debido a su
Estos arboles demandan en general suelos esterilidad, su propagaci6n se hace mediante
blandos, profundos y bien drenados. Se reco- esquejes tomados en los rebrotes de cepas vie-
miendan aportes de abono organico y mineral. jas. El tomate de arbol deI que se conoce una
Las condiciones climaticas son rara vez 6pti- variedad local y dos introducidas, una de Co-
mas en esos espacios (insolaci6n limitada, llu- lombia y otra de Nueva Zelanda (Morant, 1991),
vias y humedad excesivas, heladas tardias). La se propaga mediante plantulas producto de
inexistencia de las horas-frio necesarias para el germinaci6n.
inicio de la floraci6n y la sincronizaci6n de las
fases feno16gicas, debe ser reemplazada por Estos cultivos son casi siempre manejados
productos Hamados «compensadores de frio». por pequenos propietarios y en superficies re-
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 203
.
204 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Esta lista trata de proporcionar los nombres de especies efectivamente cultivadas, omitiendo
aquellas que proporcionan un producto recogido directamente en las formaciones vegetales natu-
raIes y que son abordados en la parte B 1. Se encuentran sobre todo en los vergeles cercanos a las
casas. Es en las unidades cartograficas de plantaciones permanentes mezcladas, donde se encon-
trara la mayor diversidad de estas especies frutales secundarias. Las pequenas explotaciones poco
tecnificadas son ampliamente mayoritarias. Ûnicamente algunos cultivadores de pina y de mango
practican el cultivo a gran escala y con medios técnicos. Son igualmente los tinicos que producen
para el mercado exterior.
Numerosas especies de esta lista no forman tos, cuya recoleccion se efectua en junio-julio,
plantaciones muy extensas: estan destinados al mercado local. Existen sin
• El frutipan, el mamey y el zapote son especies embargo, en las provincias de El Oro y Guayas, •
de las zonas humedas. Estos arboles jamas entre 200 y 500 ha de plantaciones cuyos
forman plantaciones pero se pueden encontrar frutos estân destinados a la exportaci6n bajo
algunos pies delante de las casas. la forma de pulpa. La chirimoya es una fruta •
• El maranon es plantado en forma diseminada mas fragil. Los arboles son plantados en las
en las partes humedas de la region costera. No zonas câlidas de la Sierra y estan destinados
se comercializa sino el «falso-fruto» que es el al abastecimiento de los mercados urbanos
pedunculo floral inflado y carnoso pero las al- locales.
mendras comestibles encontradas en el mer- • La carambola y la grosela, el primera un pe-
cado nacional son importadas. queno arbol y el segundo un arbusto, son par-
• La guanabana es el fruto de un arbol frecuen- ticularmente frecuentes en las porciones rela-
te en los jardines de la region costera. Los fru- tivamente secas de la provincia de Manabi. La
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 205
carambola, que hasta inicios deI decenio de carnosos pero muy perfumados, son vendidos
1990, no se encontraba sino en el mercado de al borde de la carretera y en el mercado urba-
Portoviejo, ahora se comercializa hasta Quito. no mas cercano. El mas difundido es Spondias
-El papayo, se encuentra practicamente en purpurea y se 10 encuentra particularmente en
toda la regi6n calida. Inc1uso en las zonas mas la peninsula de Santa Elena y en el valle deI
secas, es plantado en huertos regados. Algu- Chota.
nas plantaciones de la zona humeda (el SEAN
menciona mas de 1 000 ha), cerca de Santo Otras especies frutales que ocupan superfi-
Domingo 0 en la regi6n amaz6nica, abastecen cies mas extensas pueden proporcionar produc-
a los mercados urbanos. tos para la agroindustria nacional y/o para la
- La pomarosa se encuentra en plantaciones exportaci6n.
ubicadas a 10 largo de las carreteras deI sur
deI pais. Sus frutos se consumen alli mismo. Los cftricos forman el grupo mas importante
- El araza es un pequeno arbol de la regi6n ama- de los frutales secundarios de la zona calida.
z6nica donde se han plantado algunos peque- Unicamente el mandarino (mas de 3000 ha) es
nos vergeles. El fruto, sumamente acido, no es cultivado en los valles calidos de la regi6n mon-
• comido fresco y sirve sobre todo para la prepa- tanosa. Esos arboles frutales, originarios deI
raci6n de sorbetes. Sur de China, fueron introducidos por los espa-
-Varias especies de Inga (guaba) producen gran- noIes que los recibieron de sus invasores moros.
des vainas con semillas rodeadas de un arilo Las diferentes especies de este grupo ocupan
esponjoso con un jugo dulce. Como el guayabo, superficies muy desiguales. El naranjo, que
son especies comunes en las formaciones se- cubre de 10000 a 12000 ha seglIn el SEAN, es
cundarias, pero presentan una distribuci6n la especie mas comun y sus plantaciones son
diferente: prefieren las zonas humedas a muy localmente 10 suficientemente densas coma
humedas. Ciertas especies pueden encontrar- para justificar la creaci6n de una unidad carto-
se mas alla de los 2000 m.s.n.m. Los frutos de grafica (T53); se localiza en la parte baja de la
Inga no son sino una producci6n secundaria, provincia de Bolivar y reüne la mitad de las
siendo la utilizaci6n principal de estos arboles superficies. El pequeno lim6n verde, con
la sombra para los cafetales 0 cacaotales. S610 aproximadamente 3 000 ha, es la segunda
hacia los limites de su zona de distribuci6n especie en importancia y su cultivo esta difun-
natural se plantan especies de este género, dido en toda la zona calida. La producci6n de
aisladas en los jardines coma arbol de orna- toronjas y de grandes limones amarillos ocupa
mento. superficies reducidas, 50 y 350 ha respectiva-
- La badea, una liana, es plantada en cenador mente.
cerca de las casas de la zona seca 0 hümeda.
Sus frutos se consumen alli mismo y son obje- La pina es cultivada sobre todo en la Costa
to de un comercio muy limitado. (75 % de la superficie total de ese cultivo), en la
- El guayabo es una especie frecuente de las Sierra (22 %) Y muy poco en la regi6n amaz6-
formaciones vegetales secundarias. Este pe- nica. En la regi6n costera, el cultivo era prac-
queno arbol se encuentra tanto en las zonas ticado tradicionalmente en las zonas relativa-
humedas coma en las relativamente secas. Es mente secas de la cuenca deI Guayas (en espe-
plantado en un numero reducido de pies cerca cial en la regi6n de Milagro), al igual que en la
de las viviendas y a menudo utilizado para la provincia de El Oro. En los anos 1980, el culti-
cria doméstica de gallinas, pues sus frutos son vo se extendi6 a la regi6n mas humeda, parti-
invadidos por larvas de insectos apreciados cularmente en los alrededores de Santo Domin-
por las aves de corral. Fue introducido en las go. Alli, pese a las condiciones c1imaticas menos
• islas habitadas deI archipiélago de Galapagos, favorables a este cultivo dada la limitada inso-
pero sus semillas, facilmente diseminadas por laci6n, se encuentran las mayores plantaciones
los pajaros, 10 transformaron en una especie (hasta 200 ha) y las mas tecnificadas. La pro-
. invasora de los barbechos y las formaciones ducci6n se destina principalmente a la expor-
vegetales abiertas. taci6n.
- Las dos especies de hobos, Spondias mombin
y Spondias purpurea, el primero se encuentra La superficie total de los pinales es cercana
preferentamente en las zonas humedas mien- a las 3 000 ha. La producci6n, de 33 580 t en
tras que el segundo es mas abundante en las 1990, estaba destinada principalmente al con-
regiones mas secas, no forman sino rara vez sumo local puesto que s610 1 900 t se exporta-
vergeles y se encuentran sobre todo coma pos- ban, esencialmente a Chile y a Argentina. Para
tes vivientes en los cercados. Los frutos, poco 1997, Promoci6n de Exportaciones Agricolas No
206 Paisajes Agrarios deI Ecuador
teros (3000 a 4000 ha) se encontraban al borde 1995 con un rendimiento de 10 tiha, de las cua- .
deI mar, sobre todo en la provincia de Esme- les la mitad es exportable.
raldas. En 1993, esta no totaliza sino aproxi-
madamente el 20 % de las superficies planta- La maracuya es producida por una liana
das, siendo en la provincia de Manabi donde se cuyo cultivo se restringia a plantaciones case-
encuentra la mayor parte de las plantaciones ras para el consumo doméstico y algunas plan-
(70 %). Ademas, el cocotero es también cultiva- taciones semi-industriales para el abasteci-
do en pies aislados 0 pequefios grupos, y ello miento de pequefias plantas de extracci6n de
tierras adentro. jugos. Para aumentar la producci6n con miras
a la exportaci6n, se lanz6 un ambicioso plan de
El mango es el componente caracteristico de desarrollo basado en préstamos bancarios y
los vergeles en las vegas (T52), pero se 10 en- precios de compra garantizados. La exportaci6n
cuentra en densidades variables en los jardines nunca pudo alcanzar los objetivos fijados pues
de la zona humeda. La importante sombra que el mercado internacional fue saturado por la
proyecta hace que se 10 plante cerca de las imponente producci6n brasilefia. Los precios
casas. ofrecidos bajaron entonces y los numerosos pe-
Los mangos ocupan 2 700 ha en 1991,de los quefios propietarios, seducidos por esta nueva
cuales 1600 con variedades locales y 1100 con especulaci6n, se encontraron endeudados.
•
Componentes deI paisaje IV Cultivos secundarios 207
El achira y la chonta son dos cultivos secun- En el sur deI pais, se 10 encuentra en los cul-
darios de la regi6n amaz6nica. De la primera tivos de decrecida (C47 y C48), mientras que en
especie se utiliza el rizoma consumido cocido Manabi, se 10 cultiva ya sea en estaci6n lluvio-
directamente, deI que se puede extraer harina sa 0 en estaci6n seca con riego (valle de Porto-
para pan. La segunda es una palmera disemi- viejo). En todos los casos, se trata de un cultivo
nad a en toda América tropical humeda. La familiar en pequeiias parcelas que requieren
carne de los frutos cocidos en agua salada es importante mana de obra. Las variedades loca-
muy apreciada. Se puede igualmente utilizar el les son bastantes sensibles a las enfermedades
apice coma palmito. Recientemente, un esfuer- y poco productivas. Las variedades mejoradas
zo internacional de prospecci6n ha permitido introducidas por el INIAP tienen caracteristi-
crear colecciones donde se evahian los cultiva- cas mas interesantes pero su difusi6n esta limi-
res, que son muy variables (presencia/ausencia tada a los cultivos mas rentables en zonas bajo
de espinas, numero de retonos, color y tamaiio riego. El mani es casi siempre asociado con el
maiz 0 la yuca y se 10 cultiva al inicio de la
de los frutos, etc.).
rotaci6n.
• El camote es un tuberculo también amplia-
Dos cereales secundarios, avena y centeno,
mente difundido en la Amazonia pero se en-
cultivados para el consumo familiar, ocupan
cuentra igualmente en las zonas hUmedas de la superficies que disminuyen constantemente: en
Costa. 1993, 1880 ha de avena (en las provincias andi-
nas centrales) y 600 ha de centeno (unicamente
El mani, aunque de origen amaz6nico, se en la provincia de Chimborazo).
encuentra en pequeiias parcelas de las zonas
secas de las provincias de Loja y Manabi, y Las sorprendentes plantaciones de marigold
accesoriamente de El Oro. La superficie total es se encuentran tanto en la parte baja coma en la
de 8400 ha (1993), que baja regularmente de mediana altitud, siempre en zonas relativa-
desde hace algunos aiios. Se produce esencial- mente humedas. El objeto deI cultivo es las in-
mente mani para consumo casera con reducidas florescencias, mas precisamente. las ligulas de
ventas en el mercado. las flores que, una vez secadas, son incorpora-
208 Paisajes Agrarios deI Ecuador
das a la dieta de las gallinas criadas industrial- condimento oriental durante el periodo colonial
mente. El caroteno, colorante natural responsa- espaiiol. Como se habla de especies, es precisa
ble deI color naranja de las flores, refuerza en- mencionar dos plantas locales ampliamente
tonces la coloraci6n de las yemas de huevo. difundidas en las regiones calidas, el achiote y
el aji. Otros condimentos son extraidos de plan-
El piretro (unidad T22) era cultivado por sus tas nativas a menudo explotadas por recolec-
cabezuelas que, una vez secas y trituradas, pro- ci6n (azafran de tierra).
porcionan un insecticida apreciado por su efec-
to fulminante y su ausencia de remanencia. El El tabaco, aunque de origen andino, puede
cultivo, muy extensivo, se practicaba en las ser considerado coma un cultivo introducido
partes mas altas de la regi6n montaiiosa inva- nuevamente pues se siembran variedades nor-
diendo los paramos. Este cultivo de renta ha teamericanas produciendo tabacos poco fuertes
desaparecido pues el producto natural ha sido de tipo Virginia. Las plantaciones son a menu-
reemplazado por insecticidas a base de piretri- do manejadas por las empresas fabricant~s de
nas de sintesis mas baratas. cigarrillos y ocupan aproximadamente 1 000 ha.
de 1,52 tlha en 1991) y los precios de venta en el siguiente cultivo hacen considerar a esta
garantizados s6lo inferiores en un 10 % a los planta como peste, las técnicas de cultivo han
deI maiz. evolucionado de manera demasiado rapida
como para poder ser asimiladas por los cultiva-
Pese al esfuerzo de asistencia técnica de dores, los rendimientos siguen siendo bajos,
parte de las empresas de alimentos y servicios inferiores en un 50 % a los obtenidos en Colom-
deI MAG, este cultivo fue un fracaso relativo bia. Junto con el trigo y el girasol, el sorgo
por varias razones: las cosechas pueden ser pertenece a la ultima clase de prioridad y el
destruidas por los pajaros, los rebrotes de sorgo INIAP ya no le dedica investigaci6n alguna.
•
210 Paisajes Agrarios deI Ecuador
La observaci6n deI mapa puede dar cuenta de estaI' muy difundidos, 0 a los que, pOl' el con-
de la importancia relativa de los cultivos. La trario, son muy localizados.
planimetrîa de las unidades permite evaluar
sus superficies y, eventualmente, relacionarlas Las cifras publicadas para 1993 pOl' el SEAN
con un cultivo. Datos cifrados sobre los diferen- pe"'mitieron elaborar la figura B61 donde se han
tes cultivos no pueden obtenerse sino a través clasificado los cultivos pOl' superficies decre-
de un censo agrîcola (el ûltimo tuvo lugar en cientes. Cinco cultivos se destacan c1aramente
1974), 0 estadîsticas agrîcolas. Se encuentran con superficies superiores a las 300000 ha cada
ciertas informaciones en las fichas dedicadas a uno. El primer lugar corresponde al maîz, culti-
los principales cultivos. Aquî se pretende resu- vo de consumo nacional, para el hombre y para
mir datos a fin de permitir allector ponderar la el ganado. El arroz, alimènto de base de la po-
importancia relativa de los principales cultivos. blaci6n ecuatoriana, ocupa el tercer lugar de la
lista. De los tres demas cultivos muy importan-
Informaciones sobre las superficies por cul- tes, dos -el café y el cacao- estan orientados
tivo pueden encontrarse en las dependencias principalmente hacia la exportaci6n. El ûltimo
deI MAG pero, segûn los propios responsables, gran cultivo -el banano- esta orientado par-
sedan poco confiables. Algunas organizaciones cialmente hacia el mercado exterior pero una
agrîcolas disponen de sus propios datos, pero a parte importante, sobre todo el platano, se de-
menu do se refieren a un solo cultivo 0 a los dica al consumo nacional.
miembros de la misma. A partir de 1986, las
estadîsticas agrîcolas nacionales son realizadas Todos los cultivos que siguen representan
pOl' el SEAN (Sistema de Estadîsticas Agrîcolas menos de 100000 ha cada uno. Sus productos
Nacionales). El «sondeo areolar» practicado por estan destinados esencialmente al mercado
este organismo se basa en una estratificaci6n nacional, incluso si algunos cultivos se practi-
deI espacio a partir de los mapas de utilizaci6n can en grandes propiedades individuales 0 en
deI suelo elaborados por PRONAREG-ORSTOM. complejos agroindustriales. La clase «otros cul-
El método da buenos resultados en el caso de tivos» reûne 69 cultivos censados pOl' SEAN Y
los productos principales, pero sigue siendo in- con superficies inferiores a los 20000 ha para
satisfactorio en 10 que se refiere a todos los cul- cada uno. El total de sus superficies llega ape-
tivos que ocupan superficies reducidas, a pesaI' nas a los 229000 ha.
500
400
300
200
100
0 N .Q) N 0 0
ro 11l 11l 11l 11l 0 0 C 11l (J)
'0
~
10
()
e
~
11l
u
11l
()
c
11l
c
11l
u
'::J
N
>-
0
(jJ
c
11l
.S!
'0
11l
.0
Q)
a.
11l
IL
c
11l
e,
0>
~
0()
'0
0
0>
U
::J
>-
e
é5
CD 11l
Q)
'0
~ () (5
'iD
«
11l
11l
'c
E
ëii
u:
11l IL
()
Los paisajes y los sistemas de producci6n 211
PARTEe
,
Después de describir la actividad agricola cultivo por cultivo, es decir a nivel de la parcela, este
ultimo capitulo se refiere a segmentos mas amplios que agrupan los cultivos en unidades de
paisaje y sistemas agricolas.
Un sistema puede comprender una sola actividad agricola 0 una combinaci6n de varias activi-
dades. Los sistemas pueden ser puestos parcialmente en paralelo con las unidades cartograficas,
pero una misma unidad cartografica puede abarcar dos sistemas, 0 un mismo gran sistema puede
operar en varias unidades cartogrâficas. Ademas de la 10calizaci6n y de los productos explotados,
se tratara de destacar otras caracteristicas tales como el empleo de mana de obra 0 de medios
técnicos.
Aparte de la divisi6n en pisos altitudinales y en zonas de humedad, otros dos factores influyen
en la variaci6n de los sistemas de cultivo, sobre todo en la regi6n calida donde la gama de
productos de especulaci6n es mas amplia: el tamaiio de las propiedades y, en las zonas mas secas,
el riego.
Una caracteristica importante y cornun a todas las pequeiias explotaciones es el empleo prepon-
derante de la mana de obra familiar, mientras que las grandes explotaciones necesitan una fuerza
de trabajo exterior (ver también parte A VII).
El riego permite superar las limitaciones hidricas. Su impacto en el paisaje es evidente, sobre
todo en estacion seca. Incide en los sistemas aumentando el nivel de inversion, de tecnicidad y de
trabajo necesarios para la obtencion de una buena produccion.
Los sistemas agricolas de las dos grandes regiones (llanura y montaiia) fueron clasificados se-
glin una dinamica, partiendo de los sistemas pioneros hacia sistemas evolucionados. Esto se adap-
ta particularmente bien a la region câlida donde, ademas, los sistemas pueden reorientar facilmen-
te su produccion. En las zonas ma y templada, se encuentra efectivamente un frente y sistemas
pioneros pero su importancia es menor: no se producen transformaciones profundas sino bajo el
efecto de eventos mayores como una reforma agraria.
Las explotaciones menores son mas diversificadas y se establecieron categorias un tanto mas
arbitrarias:
• los sistemas satélites, es decir que dependen en mayor 0 menor medida de grandes plantaciones
dé tipo industrial;
• las haciendas de ganaderia extensiva;
• las propiedades de cultivos anuales;
• las propiedades con arboricultura mezclada;
• los sistemas locales, es decir aquellos cuya existencia y localizacion dependen de factores histo-
ricos 0 de condiciones particulares deI medio.
Los tres capitulos de esta parte tratan, en primer lugar, de los paisajes poco antropizados, es
decir de las amplias zonas donde la actividad agricola actual no es la marca predominante deI
paisaje. Los dos capitulos siguientes se dedican a los paisajes agricolas, separando el pais en sus
pisos térmicos mayores; los dos pisos serranos, el frio y el templado, conforman el segundo capitulo
y el piso calido es el objeto deI ultimo capitulo.
Los paisajes y los sistemas de producci6n 1 Paisajes poco 0 nada antropizados 213
INTRODUCCI6N
En el volumen de Geografia Fisica, el lector interesado encontrara un texto. que presenta las
grandes formaciones vegetales deI Ecuador, clasificadas en funci6n de los principales factores
climaticos que rigen su repartici6n. Alli se describen, cada vez que es posible, los usos encontrados
en las unidades de paisaje. Algunos de ellos estân mas ampliamente descritos en la parte BI.
amplio tratan, a través de ediciones ilustradas, de difundir conocimientos bâsicos (Patzelt, 1985,
Sarmiento, 1987). Acosta-Solis (1977) también resumi6 sus conocimientos en une obra de gran
difusi6n.
Una atenci6n particular se dedic6 a trabajos tratando de zonificaci6n de las formaciones vegeta-
les y de su cartografia. El conocido dibujo de Humboldt (1805) da una primera visi6n deI escalona-
miento de las especies en el Cotopaxi. Ellenberg (1975) generaliz6 la noci6n de pisos en los Andes
tropicales. Los primeros mapas de Wolf (1892) y Troll (1932) fueron completados par Canadas
(1983) que anadi6 al mapa una descripci6n botânica de las zonas identificadas. Finalmente, los
mapas publicados por PRONAREG-ORSTOM (1978-85) para el Ecuador continental y, para la
regi6n insular, por INGALA-ORSTOM-PRONAREG (1987 y 1989) dan la ultima versi6n de la dis-
tribuci6n de las grandes formaciones vegetales naturales.
La correspondencia entre los nombres latinos y espafioles de las plantas se indica al final de
esta parte.
Con relaci6n a los mapas a escala 1:200000 Enock, refiriéndose a los trabajos de Reiss y
(PRONAREG-ORSTOM, 1978-1985), las super- Stübel entre 1870 y 1874, da coma limite infe-
ficies clasificadas coma 00 han sido restringi- rior de las nieves 4770 m.s.n.m. en la cordillera
das. A escala 1:1000000, nos limitamos a la re- Occidental y 4285 m.s.n.m. en la cordillera
presentaci6n de las montanas cubiertas efecti- Oriental. Actualmente, incluso las lenguas
vamente de nieves perpetuas, los nevados. Los glaciares que pueden descender por debajo deI
glaciares, sin ocupar necesariamente toda la limite de las nieves perpetuas, no alcanzan ya
superficie de la cima, cubren sin embargo una altitudes tan limitadas, coma 10 confirman los
gran parte. Por otro lado, no se puede represen- mapas a escala 1:50000 deI IGM y las observa-
tar a escala 1:1000000 todo 10 que es posible ciones de campo.
hacerlo a escala 1:200000. El minusculo glaciar
deI Cotacachi, por ejemplo, no es representable La convergencia de estos testimonios que
a escala 1:1000000. Por esa misma raz6n, el Ili- podrian multiplicarse parece favorecer clara-
niza Sur 0 el Chiles no aparecen dentro de la mente la hip6tesis de un lento calentamiento
unidad 00. global deI clima.
La exclusi6n de numerosas cimas que apare- Esta evoluci6n es sumamente lenta pero un
cen en la lista de nieves perpetuas publicada brusco calentamiento deI cono puede provocar
por Villavicencio (1858) plantea la cuesti6n de la fusi6n subita deI casquete con un efecto ca-
la evoluci6n deI clima. Esa lista era probable- tastr6fico en las llanuras densamente pobladas
mente ya muy larga, pero informaciones de ubicadas al pie de los nevados. La fusi6n de las
otros autores vienen a confirmar la mayor im- nieves libera un enorme volumen de agua que
portancia de las zonas congeladas en el siglo acarrea gran cantidad de elementos s6lidos. El
pasado. agua lodosa puede arrastrar grandes bloques,
Los paisajes y los sistemas de producci6n 1 Paisajes poco 0 nada antropizados 215
Cumbres con
00 Sin Frio intenso Sin vegetaci6n 215
hielo 0 nieve (nevados)
Matorral dei sur Maleza alla, poca densa de las Frio, suelos acidos
V14 Clusia, Embotryum 613
dei pais vertientes menos hûmedas y sequia estacional
116948
Bosques de las zonas Bosque allo, denso, Palmeras, Sapotaceas, incluyendo
V31 Humedad, calor
calidas y hûmedas siempreverde Euphorbiaceas, etc...
V23
Bosques de las zonas Bosque allo, denso, Caler, humedad Leguminasas, palmeras,
V32 2485
menos hûmedas semi-decfduo intermedia Moràceas
PISO
FRIO
PISO
TEMPLADO
Humedad Humedad
coma los que se pueden observar alrededor deI La cobertura vegetal de esta unidad es dis-
Cotopaxi, hasta las tierras agricolas, tanto al continua, baja y poco densa. Localmente, se la
sur como al norte de ese volcan. El valle de denomina «supraparamo», «paramo superior» 0
Latacunga conoci6 tales trastornos en 1534, «nivel andino alto» (Acosta-Solis, 1984). El mo
1742, 1743, 1768, 1877 Y 1904. Las coladas de y la sequia agravados por las insolaciones ins-
lodo (avenidas) son responsables de mas dafios tantaneas a veces fuertes y vientos a menudo
y muertes que la erupci6n volcanica propia- violentos son los principales factores limitantes
mente dicha. Las fumarolas todavia activas re- de este piso. Las zonas rocosas estân desprovis-
cuerdan que la actividad volcânica y el peligro tas de faner6gamas (plantas su periores con
persisten. flores aparentes) y alli se encuentran apenas
unos pocos liquenes incrustados. En los terre-
La utilizaci6n de estos grandes espacios de nos mas blandos, las plantas estan restringidas
altura y silencio corresponde esencialmente a a sitios que ofrecen ya sea un buen abasteci-
la actividad turistica. Humboldt fue el primera miento de agua (al pie de barrancos, por ejem-
en hablar de la avenida de los nevados... que plo), 0 una cierta protecci6n, contra el viento en
ahora alaban los folletos. Los andinistas, y des- particular (al pie de las rocas). Las plantas de
de hace aproximadamente 15 afios, esquiadores este piso han desarrollado procesos fisio16gicos
cada vez mas numerosos siguen las huellas de de adaptaci6n (resistencia a la sequia, a las
Whimper. heladas cotidianas) que se traducen en ciertas
particularidades morfo16gicas (pilosidad impor-
La actividad de los vendedores de hielo, muy tante 0 cuticula espesa, formas recogidas en
dinamica durante el siglo pasado para abastecer roseta, etc.).
a las casas burguesas de bloques de hielo toma-
dos en los glaciares, ya no es casi sino un recuer- Apenas se encuentran plantas herbaceas 0
do plasmado en la pelicula «Los hieleros deI escasas. plantas lefiosas muy bajas con tallos
Chimborazo». Actualmenté (1993), no existen trepadores 0 subterraneos. La familia que pre- .
sino dos hieleros en actividad. domina c1aramente es la de las compuestas de
numerosos géneros --Culcitium, Gnaphalium,
1.2 Rocas yarenas de altura -Unidad 01- Hieracium, Hypochoeris, Senecio, Werneria-.
Otras plantas notables son, entre otras, las gra-
Entre glaciares y pastos naturales de altura mineas bajas Bromus y Poa, las rosetas de Lysi-
se extiende un paisaje predominantemente pomia y Viola, las leguminosas lefiosas rastre-
mineraI, compuesto esencialmente de paredes ras Astragalus y Lupinus y la minuscula lefiosa
rocosas y de extensiones arenosas. Ephedra.
Los paisajes y los sistemas de producci6n 1 Paisajes poco 0 nada antropizados 217
80 0 W
1 Vegetaci6n atural
<
,~ • •
Carreteras principales
Principales ciudades
100 200 km
~ 90 0 W
~ "
..
Bosques densos siempreverdes de las Ilanuras y de la Sierra
Unidades V21, 22, 23, 31
_ Bosque siempreverde dei litoral =manglar Unidad V40
CI Bosque denso semi-deciduo Unidad V 32
Bosque denso deciduo Unidad V34 Vegetacion natural presente, menos importante
Formaciones abiertas (arbustivas, herbaceas, arb6reas 0 ,-------. Restos de vegetaci6n natural dentro de pastizales,
mlxtas) de las zonas secas Unidades V33, 35, 36, 37, 38, 39 L----l cultivos 0 plantaciones Unidades D21, 22, 23, 31, 32,
33,34,35,36,37,38,41,42, P31, 32, 34
Formaciones arbustivas de altura =matorral Unidades V13, 14
La utilizaci6n de estas tierras es marginal y tarse a variaciones positivas deI nivel deI suelo.
no concierne sino el pastoreo totalmente cir- Las capas inferiores denudadas son de textura
cunstancial de alguna oveja 0 llama extraviada. gruesa y muy compactas, y ninguna planta se
instala en ellas.
1.3 Zonas erosionadas por el viento y dunas
(arenales) -Unidad 02- En el valle de Palmira, la zona de ablaci6n
se asemeja a un paramo empobrecido, en parti-
Dos unidades cartograficas remiten a este cular por la ausencia de las gramineas, donde
paisaje: la una, zona masiva de 150 km 2 aproxi- predominan las formas rastreras 0 pegadas al
madamente, al oeste deI volcan Chimborazo, a suelo: Trifolium, Lupinus, Plantago, euforbia-
alturas superiores a los 4 000 m, y la otra, mas ceas y lamiaceas. Las dunas presentan una
dividida, de 110 a 120 km 2 , alrededor deI pue- planta caracteristica aunque existe s6lo ocasio-
blo de Palmira, entre 3200 Y3500 m.s.n.m. nalmente, una compuesta (probablemente un
Helichrysum) cuyas matas emiten numerosas
Estas dos zonas tienen una situaci6n similar ramas laterales de las cuales algunas seran
en la parte aguas arriba de la cuenca deI rio siempre funcionales. En las arenas fijas 0 poco
Pastaza, en la linea divisoria de aguas entre la m6viles se observa una maleza abierta y mono- •
regi6n amaz6nica y la llanura occidental. Mas especifica de Nicotiana glauca.
alla de estas unidades, la bajada hacia la re-
gi6n costera es brusca por los valles de los rios La utilizaci6n de los suelos es muy margi-
Chimbo y Chanchan. Alli, la circulaci6n gene- nal. Alrededor deI Chimborazo no pacen sino
raI de las masas de aire es acelerada, por la di- ovejas y algunas llamas, pero el valle de Palmi-
ferencia de presi6n, debida al fuerte desnivel ra esta en el piso cultivable, y algunas comuni-
entre la regi6n montaiiosa y el golfo de Guaya- dades cultivan los paramos vecinos. Los suelos
quil. Los vientos violentos secan superficial- dejados al desnudo antes deI cultivo son inme-
mente a los suelos vo1canicos poco estructura- diatamente barridos por los vientos que se lle-
dos y movilizan sus elementos arenosos. van la tierra fina, permitiendo asi la rapida ex-
tensi6n de las superficies erosionadas. La acti-
Cuando una importante mata de vegetaci6n vidad agricola constituye con seguridad un fac-
llega a proteger el suelo subyacente, el viento tor adicional de inestabilidad para un medio
deja monticulos testigos que llegan a tener 2 m natural sumamente fragil.
de alto en la zona de Totoras Palmira y 1 m al
pie deI Chimborazo. Los materiales desprendi- Se han emprendido programas de fijaci6n de
dos pueden depositarse relativamente cerca las arenas m6viles, utilizando Opuntia y, con
bajo el viento de un obstaculo -micro-relieve, mayor éxito, Pinus radiata. Los pinos se im-
planta, etc.-, en una zona de acumulaci6n plantaron bien, y son al parecer mas sanos que
coma el fondo deI valle de Palmira donde sor- en las plantaciones deI Cotopaxi. Como esta
prendentes dunas se desplazan, bajo el efecto cobertura forestal sigue siendo abierta, los ar-
deI viento, cortando 0 limpiando la carretera y boles pueden desarrollarse satisfactoriamente,
la via férrea. pero el viento puede atm arrastrar la tierra de
alrededor de los troncos en un radio de 2 a 4 m.
La vegetaci6n natural es escasa, pero difiere Aunque las raices principales son puestas al
mucho de una unidad a otra asi coma entre las desnudo, los arboles no parecen sufrir por esta
zonas de partida y las de acumulaci6n. situaci6n. Las plantaciones comenzarOll en
1982 en el fondo deI valle y prosiguen hasta
En el arenal deI Chimborazo, estamos en el ahora en las vertientes.
piso de paramo, unidad Vll (ver mas adelante)
y la ablaci6n, asi camo el dep6sito, de arenas Este tipo de erosi6n se encuentra, con efec-
finas provocan la muerte, por desca1ce 0 por en- tos menores, a altitudes inferiores en el piso
terramiento, de gran parte de la vegetaci6n. Las agricola, particularmente en la meseta de Mal- •
mayores matas de Stipa 0 las mas grandes almo- chingui, al norte de Quito.
mohadillas logran resistir al descalce. Algunas
plantas leiiosas bajas tratan de luchar contra el 1.4 Playas -Unidad 03-
enterramiento alzando sus ramas frondosas y
emitiendo raiees adventicias en las arenas acu- Este tipo caracteristico de las orillas deI mar
muladas (fen6meno visible en Ephedra y Astra- tiene una extension reducida (menos de 9000 ha
galus). Plantas de tallos rastreros coma ciertos en el mapa a escala 1:1000000). En realidad,
Lupinus y Geranium pueden igualmente adap- las playas son mucho mas numerosas pero, por
Los paisajes y los sistemas de producci6n l Paisajes poco 0 nada antropizados 219
su reducido ancho, no pueden representarse a mente colonizados por las plantas (lahares deI
esta escala. Las arenas son esencialmente de volcan Cotopaxi). Incluso las coladas rocosas
origen mineraI, solamente en Galapagos se relativamente recientes coma las de Pintag 0 de
pueden encontrar playas de arenas de origen Papallacta tienen, pese a su reducida edad (220
bio16gico, de pedazos de conchas y corales. El a 260 anos), una cobertura densa, mixta, her-
relieve a veces acentuado de la fachada mari- bacea/arbustiva, gracias a las condiciones cli-
tima no permite tales dep6sitos de arena. Ade- maticas sumamente humedas.
mas, las zonas relativamente planas, principal-
mente localizadas en las desembocaduras de En las Galapagos, el volcanismo es activo,
los rios, estan colonizadas por los manglares sobre todo en las islas occidentales, y las ulti-
(unidad V40). mas coladas registradas datan de abril de 1991
(caldera de la isla Fernandina) y de agosto de
Por debajo deI limite de la marea alta, la 1992 (isla Marchena). De 1797 a 1981 se han
vegetaci6n no puede implantarse a causa de las censado 53 erupciones (Richards, 1962, ECCD,
mareas y de las concentraciones de saI. Las pri- corn. pers.). Las coladas mas recientes estan
meras plantas encontradas tienen todas la mis- formadas de basaltos. Se trata de amontona-
ma fisonomia: son herbaceas con tallos rastre- mientos ca6ticos de bloques que van de 0,4 m a
ros 0 cepas espesas, pertenecen a las familias mas de 2 m de diametro (lavas «aa») 0 de gran-
de las convolvulaceas (lpomoea pes-caprae),
des superficies subhorizontales, planas y com-
borraginaceas (Heliotropium curassavicum),
pactas (lavas «pahoehoe»). Al momento de la
aizoaceas (Sesuvium), compuestas, ciperaceas y
erupci6n, los materiales de esas coladas matan
gramineas. Un tanto mas arriba, pero aun en
a todos los organismos presentes en su trayecto
la franja sometida a las brumas, se puede en-
contrar una maleza litoral con plantas lenosas y crean un medio nuevo y estéril. Las proyec-
entre las que predominan las formas mas 0 ciones de cenizas pueden, cuando su capa no es
menos sarmentosas coma en los géneros Cae- demasiado espesa, permitir la supervivencia de
salpinia, Cryptocarpus 0 Maytenus. Hippomane plantas lenosas que rebrotaran.
es el arbol mas frecuente en esta franja de tran-
sici6n entre las formaciones litorales y la vege- La sequia reinante en las partes bajas deI
taci6n de tierra firme. archipiélago no permite una rapida implanta-
ci6n de una cobertura vegetal y, en las zonas
En marea baja, los vehiculos utilizan ciertas climaticas arida, muy seca y seca, las coladas
grandes playas coma vias de comunicaci6n pues que tienen hasta varios siglos de edad estan, a
gracias a su perfil pIano, la circulaci6n es facil primera vista, desprovistas de vegetaci6n. En
mientras que las carreteras equivalentes, cuan- ésta formaci6n se reunieron las zonas efectiva-
do existen, presentan un recorrido accidentado. mente sin vegetaci6n alguna, asi coma aquellas
Aparte deI turismo y de la utilizaci6n ocasional donde esta es muy discreta (cobertura inferior
de arena, las playas no tienen otra utilizaci6n. al 10 %). Estos paisajes sombrios, abi6ticos y
Se debe senalar que la arena recogida en las hostiles evocan inevitablemente un paisaje ex-
playas es utilizada a menudo sin tratamiento traterrestre 0 el tercer dia de la Creaci6n.
para la construcci6n. La saI que contiene acele-
ra la corrosi6n de las vigas de hierro y dismi- En las zonas bajas, las primeras plantas en
nuye considerablemente la calidad y la longevi- instalarse son liquenes incrustantes que, alata-
dad de las edificaciones. ' car a las rocas por sus excreciones acidas, hacen
posible la implantaci6n de plantas mas exigen-
1.5 Campos de lava -Unidad 04- tes en los productos de alteraci6n asi formados.
Vienen luego herbaceas, gramineas y ciperaceas,
Esta formaci6n no presenta unidl;l.des repre- asi coma plantas especializadas y a menudo en-
sentables cartograficamente sino en el archi- démicas de las Galapagos, -Mollugo, Jasmino-
piélago de Galapagos. En efecto, en la parte cereus, Brachycereus y, sobre todo, cier.tas espe-
continental deI Ecuador, los terrenos recientes cies de Scalesia-. Cuando la cobertura vegetal
o contemporaneos de origen volcanico no faltan se torna mas densa, es arbustiva y luego arb6-
pero, ya sea se trata de extensiones muy redu- rea (Bursera es abundante) y comparable"a la
cidas coma para poder ser representadas a esta vegetaci6n de los terrenos mas antiguos.· Sin
escala (domo de la cima deI volcan Reventador), embargo, la mediocre capacidad de retenci6n de
o estan situadas a altitudes que impiden un agua de las coladas determina una sequia eda-
desarrollo normal de la vegetaci6n (volcan San- fica y las formaciones vegetales son alli mas
gay), 0 formadas de materiales blandos rapida- similares a las de los terrenos antiguos de las
220 Paisajes Agrarios deI Ecuador
zonas mas secas que a las de la misma altitud dino, estân a menudo en contacto con zonas
-() zona de humedad- (Huttel, 1995). cultivadas y el limite habitualmente situado
alrededor de los 3600 m.s.n.m. puede ascender
En las zonas mas altas y que reciben mayor bajo la presi6n de los frentes pioneros.
humedad, esta vegetaci6n pionera esta consti-
tuida de liquenes foliaceos (Parmelia) 0 ramifi- Cuando se puede observar un contacto con
cados (Cladonia) y de diversas especies de hele- una formaci6n vegetal natural, V13, V14, V21 0
chos. La evoluci6n hacia formaciones compara- V23, la altitud deI limite varia en funci6n de
bles a las de los terrenos antiguos es mas ra- varios factores:
pida. • la latitud: en el caso de la vertiente oriental, el
limite se situa alrededor de los 3800 m.s.n.m.,
La utilizaci6n de estas tierras es muy limi- excepcionalmente en los 4000 m.s.n.m. entre 0
tada no s610 a causa de su catalogaci6n, al igual y ION, mientras que en los 3° S se 10 encuen-
que la casi totalidad deI archipiélago, coma Par- tra alrededor de los 3200-3400 m.s.n.m., y
que Nacional y Patrimonio Cientifico de la Hu- raras veces en los 3600 m.s.n.m.;
manidad, y su falta de recursos, sino, sobre • la situaci6n: el gradiente altitudinal es un
todo, debido a las dificultades de acceso y al tanto menos marcado en el casa deI limite
avance nada fâcil en las coladas de tipo «aa". inferior de los pâramos en las vertientes inter-
En las islas con una importante presencia de nas que en las vertientes externas. Rara vez
cabras (animales introducidos que viven en es- se ubica mas alla de los 3600 m.s.n.m. al nor-
tado salvaje), sirven de zonas de refugio donde te deI pais para alcanzar 3 200-3400 m.s.n.m.
los cazadores pueden encontrar una fuente en los 3° S;
segura, pero difîcilmente explotable, de carne. • la exposici6n: a una misma latitud, los pâra-
Cuando las lavas se dividen naturalmente en mos tienen un limite inferior a mayor altura
bloques de tamafio apropiado, pueden, después en la vertiente externa oriental que en la ver-
de ser transportadas, utilizarse coma material tiente externa occidental.
de construcci6n.
Los paisajes de pâramo son cimas suave-
mente redondeadas de relieves cubiertos, en las
2 Paisajes vegetales de la Sierra regiones central y septentrional, por espesas
capas de cenizas vo1cânicas, sacudidas por vio-
2.1 Paramo deI centro y deI sur deI pais y
lentos vientos 0 envueltas en brumas. El mismo
Pâramos deI extremo norte deI pais
panorama, muchas veces repetido, bajas tem-
Unidades -Vll y V12-
peraturas (frecuentes heladas y nieves noctur-
nas), la incesante ondulaci6n de la hierba, la
Los paramos son formaciones vegetales natu- ausencia de ârboles y la rudeza de los escasos
raIes, originales (Mena y Balslev, 1986) esen- habitantes, contribuye a esa impresi6n mezcla-
cialmente de gramineas, casi siempre densas y da de soledad e inmensidad que experimentan
bajas (Acosta-Solis, 1984). Salvo en condiciones quienes atraviesan esos parajes.
excepcionales, los ârboles estân ausentes y los
arbustos son escasos y de pequefio tamafio. Su En la vegetaci6n predominan las gramineas.
extensi6n ha variado enormemente durante los La mâs importante es Stipa ichu cuyas espesas
recientes episodios glaciares e interglaciares matas cubren todas las pendientes. Gramineas
(Van Der Hammen, 1988). Naturalmente, su secundarias pertenecen a los géneros Agrostis,
limite inferior seria el superior de las formacio- Bromus, Calamagrostis y Festuca. Entre las ma-
nes lefiosas, pero su extensi6n actual estâ con- tas no prosperan sino otras pocas especies y la
dicionada mucho mâs por la actividad humana riqueza al igual que la belleza de la flora deI
que por las condiciones climaticas (ver la parte pâramo deben buscarse en las variantes panta-
final de este punto). Estas ultimas marcan, sin nosas 0 degradadas. Alli se pueden encontrar
embarg, su fisonomia; entre los Andes humedos las espectaculares formas en almohadilla perte-
de Venezuela y de Colombia al Norte y los An- necientes a diferentes géneros -Azorella, Dis-
des secos de Bolivia y deI Peru al Sur, los pâra- tichia, Hypochaeris, Plantago-; plantas en ro-
mos ecuatorianos reflejan esta posici6n climâti- seta de los géneros Draba, Lysipomia, Phyllac-
camente intermedia que es la de todo el pais. tis, Viola, herbaceas de flores vistosas, Gentiana
tiana y Gentianella, Ranunculus, Werneria, for-
Los limites inferiores de los paramos son ex- mas enanas rastreras de los géneros Pedicularis,
tremadamente variables. En el valle interan- Ephedra, Lupinus 0 Geranium.
Los paisajes y los sistemas de producci6n l Paisajes poco 0 nada antropizados 221
Las escasas plantas lefiosas pueden repar- espesa de cenizas volcanicas hacen de ellos el
tirse en dos grupos. Por un lado, estan las espe- «arca de agua» natural para las hondonadas
cies arbustivas bajas, dispersas entre las grami- interandinas. Alli nacen los principales rios y
neas 0 que forman a veces manchas en la cober- los paramos, a manera de esponja, garantizan
tura herbacea; se trata sobre todo de compues- la regulaci6n de los caudales. Numerosos cana-
tas de los géneros Baccharis, Chuquiragua, Di- les, en ocasiones muy antiguos, Bevan las
plostephium, Ribes, Valeriana 0 de ericaceas aguas hacia las tierras habitadas y cultivadas,
muy variadas. El otro componente lefioso, los mas bajas y mas secas. Obras mas recientes
arboles, se localiza a 10 largo de los rios, en que- permiten inc1uso captar las aguas de las ver-
bradas profundas 0 al pie de los acantilados. Al tientes externas de estas tierras altas. A veces
parecer, la persistencia, a esta altura, de forma- abastecen, al paso, pequefias instalaciones
ciones forestales requiere condiciones hidricas hidroeléetricas.
particulares 0 una protecci6n eficaz contra los
vientos. La rosacea Polylepis (con numerosas Tradicionalmente, la graminea predominan-
especies) es el arbol mas frecuente en estas re- te, Stipa ichu, proporcionaba a la vez el mate-
liquias forestales. Forma bosques monoespeci- rial para el techo de las viviendas, cada vez
ficos cuya particularidad es la inexistencia de mas suplantada por la chapa en altura y por
regeneraci6n natural de Polylepis. En los linde- las tejas en la llanura, y es el linico combustible
ros de estos bosquecillos se pueden encontrar vegetal disponible en estas zonas casi siempre
otras especies arb6reas bajas como Hesperome- desprovistas de plantas lefiosas.
les 0 Baccharis.
La principal utilizaci6n de estas praderas
El paramo presenta numerosas variantes naturales sigue siendo la ganaderia extensiva:
(Balslev y De Vries, 1982, Mufioz et al., 1985) ganaderia bovina en las zonas humedas y de
seglin el grado de drenaje y de perturbaci6n. El tendencia latifundista, mas bien localizada en
paramo de Silvan, entre los rios Rurcay y Le6n la cordillera Oriental; ganaderia ovina mas
de 3000 a 3200 m.s.n.m., al Sur de Columbe, frecuente en la cordillera Occidental mas seca,
debe probablemente su existencia mas a los donde predominan las comunidades indigenas
repetidos incendios y a los violentos vientos que y un sistema de minifundio. La practica de una
al frio. Se pueden igualmente distinguir otros quema estacional para favorecer el rebrote es
seglin el grado de humedad (climatica y/o eda- generalizada tanto en las grandes coma en las
fica): el paramo entre Zumbahua y el Quilotoa, pequefias propiedades.
implantado en un suelo muy filtrante desarro-
llado sobre cenizas y materiales piroc1asticos Los bovinos son criados por su carne y, en
gruesos, tiene, con su estrato herbaceo abierto, algunos casos de haciendas especializadas,
una fisonomia que recuerda a la de las punas para las corridas 0 la participaci6n en fiestas
deI altipIano boliviano 0 peruano. La fitogeo- populares. Los ovinos proveen esencialmente
grafia es responsable de otra diversificaci6n de lana; nunca se los ordefia. Cuando los rebanos
esta formaci6n vegetal. Al norte deI pais, la son 10 suficientemente importantes 0 estan
cobertura herbosa esta dominada por una com- concentrados, la recolecci6n deI estiércol en los
puesta arborescente monocaula, Espeletia hart- corrales de estabulaci6n nocturna y su venta a
wegiana -frailej6n-, que imprime una fisono- las explotaciones de hortalizas de la llanura
mia particular a los paramos de esta regi6n proporciona un ingreso complementario.
(distinguida con la sigla V12). Esta especie es
la unica representante en el Ecuador de un gé- Las familias de ganaderos especializados
nero mas diversificado en Colombia y Venezue- que viven en el paramo son pocas. Se encuen-
• la, y los paramos de la provincia deI Carchi cor- tran algunas agrupadas en minusculos caserios
responden al avance extremo meridional deI gé- por encima de Pujili, en el paramo deI Chimbo-
nero Espeletia. Se debe también anotar que los razo y hacia Ozogoche. Las casas estan semi-
paramos de la cordillera Oriental son mas hu- enterradas en el suelo para dar menor poder al
medos que los de la cordillera Occidental. En el viento y el techo de balago es estibado con cuer-
gradiente general de disminuci6n de la pluvio- das trenzadas de Stipa.
sidad hacia el sur, el paramo de Espeletia ocupa
la zona mas humeda de este piso. Con cerca de 15000 km 2 , estas tierras re-
presentan mas de un tercio de los pisos monta-
La principal producci6n natural de los para- fiosos. Sus aptitudes agricolas son reducidas,
mos es el agua: la conjunci6n de condiciones debido a las bajas temperaturas. El avance bas-
c1imaticas humedas y de una capa a menudo tante generalizado de la agricultura, que se
222 Paisajes Agrarios deI Ecuador
observa en todo el perimetro de los paramos piso. El mejor conservado es el deI flanco sur-
(ver CIl) remite nuevamente a la hip6tesis deI oeste deI volcan Tungurahua, que es un bosque
calentamiento deI clima evocado anteriormente alto y de hojas persistentes. Alli se pueden ver
(00). Se debe entonces subrayar aqui el carac- grandes arboles de diversas araliaceas, asi como
ter sumamente artificial deI limite inferior de representantes de los géneros Buddleja, Frezie-
los paramos, particularmente en la Sierra cen- ra, Hedyosmum, Vallea y Weinmannia (Pare-
tral donde las formaciones leiiosas que 10 conti- des, 1942). Se incluyeron también algunos islo-
nuaban hacia abajo han sido todas borradas en tes de bosque denso siempreverde (unidad V21)
grandes distancias. Como las especies deI para- deI perimetro de la hoya de Cuenca, demasiado
mo tienen un poder de regeneraci6n mayor que reduciqos para ser representados cartografica-
las especies leiiosas de matorral, se observan mente a esta escala, pero ellector podra encon-
en numerosas regiones, praderas semi-natura- trarlos facilmente en los documentos originales
les donde se mezclan las especies deI paramo y de PRONAREG-ORSTOM a escala 1:50000 6
las introducidas para el mejoramiento de los 1:200000.
pastizales. En las vertientes externas, la per-
sistencia de brumas reduce considerablemente En efecto, el matorral es una vegetaci6n
la actividad humana y la extensi6n deI paramo, cuya forma original ha desaparecido practica-
asi coma su limite inferior, son mas cercanos a mente deI caIlej6n interandino. La busqueda de
las normas naturales. tierras cultivables asi coma de leiia han degra-
dado esta formaci6n coma otras formaciones
Por encima de los 4000 m.s.n.m., los para- leiiosas. Localmente, ha sido sustituida por una
mos son, en principio, controlados por el Esta- maleza secundaria 0 matorral de reemplazo que,
do. Grandes superficies forman parte de reser- aunque con una fisonomia similar a la cobertu-
vas de diferente categoria -Cotopaxi, Sangay, ra natural, tiene una composici6n floristica dife-
Cotacachi-Cayapas, Cayambe-Coca, Cajas (ver rente. Las formas bajas estan representadas
figura C3)- donde se intenta orientar las acti- por ericaceas y los arbustos 0 las herbaceas gi-
vidades de recreaci6n (caza, pesca, paseo) hacia gantes pertenecen a géneros tales coma Baccha-
un turismo «ecoI6gico». La reserva deI Chimbo- ris, Fuchsia, Cleome y Syphocampylus. Se en-
razo es utilizada por un proyecto de cria de cuentran hojas mas grandes que las deI mato-
Ilamas en semi-libertad. rral original. Es en los terrenos mas escarpa-
dos, en las quebradas mas profundas y aguas
2.2 Transici6n entre paramo y el bosque arriba de las tierras de hacienda, es decir en
-Unidad V13- condiciones protegidas, donde se pueden encon-
trar las mayores superficies que, sin embargo,
El matorral es la formaci6n vegetal situada no pueden ser representadas cartograficamente
inmediatamente por debajo de los paramos. Se a esta escala.
trata de una maleza, a veces con algunos arbo-
les, que realiza la transici6n entre el bosque y En las vertientes externas, se pueden iden-
el paramo. Forma parte de los «bosques de ne- tificar franjas de transici6n 10 suficientemente
blina» de los fitoge6grafos (mist forest, Nebel- amplias entre el bosque siempreverde y el para-
wald). La altura de la vegetaci6n varia de 2 a 4 m mo, principalmente en el norte de la vertiente
y las ramificaciones bajas y tortuosas tornan la
occidental y en toda la vertiente oriental. La
vegetaci6n dificilmente penetrable. La prolife-
humedad es alli mas elevada, las pendientes
raci6n de las plantas epifitas, favorecida por la
mas fuertes, las vîas de comunicaci6n menos
fuerte humedad, da un aspecta particular al
densas y la presi6n humana reducida.
sotobosque. Espesos manguitos de musgo, que
hacen parecer las ramas mucho mas gruesas de
2.3 Matorral deI sur deI pais -Unidad VI4-
10 que son en realidad, sirven de mantillo a or-
quideas, helechos y Peperomia que sobrecargan
a las ramas. La composici6n floristica deI piso Esta unidad no concierne sino una variante
leiioso puede ser variada. En su lindero con el particular deI matorral, restringida a una parte
paramo se pueden encontrar Polylepis y Hespe- deI sur deI pais, en las provincias de Azuay y
romeles. En otros lugares abundan especies de de Loja. Difiere fison6micamente de V13 por un
los géneros Escallonia, Miconia, Brachyotum y estrato leiioso mas abierto y mas bajo, asi coma
Bernadesia. No faltan las lianas con Passiflora, por las caracteristicas de la vegetaci6n de una
Bomarea 0 Mutisia. zona mas seca (hojas reducidas y coriaceas mas
frecuentes, menos plantas epifitas). La compo-
En esta unidad se reunieron los escasos bos- sici6n floristica es también diferente y se la
ques de alta montaiia que subsisten aun en este podria caracterizar por la abundancia, entre las
Los paisajes y los sistemas de producci6n l Paisajes poco 0 nada antropizados 223
80° W
1 Zonas protegidas 1
Carreteras principales
Principales ciudades
o 100
dientes mas abruptas 0 en los valles mas enca- Estan sometidos a la deforestaci6n para el
jonados. establecimiento de pastizales, pero éstos no son
al parecer utilizados demanera intensiva, y
Las condiciones climaticas son diferentes a rapidamente se ven invadidos por las malezas
las reinantes en V21 y se caracterizan por pre- mencionadas anteriormente. Alli no se encuen-
cipitaciones menores, pero sobre todo por la tran cultivos sino esporadicamente y se trata
concentraci6n de las lluvias en una sola esta- ya sea de vergeles tropicales 0 de campos de
ci6n humeda. La unica estaci6n seca es enton- maiz.
ces mas marcada, tanto en duraci6n coma en
intensidad (igual contraste que el existente en- Aqui se puede plantear el problema de la
tre las unidades V13 y V14). El piso altitudinal inexistencia de bosques claramente semi-deci-
. ocupado es igualmente mas bajo, entre 1500 y duos en el piso intermedio deI Ecuador. La defo-
2000 m.s.n.m., y tales condiciones climaticas restaci6n de las tierras incluidas en la zona cli-
originales determinan variaciones que diferen- matica correspondiente a este tipo de formaci6n
cian claramente a este bosque de los de la uni- es intensa y antigua. En el centro y el norte deI
dad V21. Se observa sobre todo la disminuci6n pais, las reliquias se limitan a pies aislados de
en importancia de las familias bien representa- Cassia y de Tecoma, a menudo mezclados con
das en esa unidad: melastomaceas, proteaceas, formaciones de plantas claramente secundarias
clusiaceas y ericaceas. coma Croton, Dodonea, mimosaceas y solana-
ceas. Sin embargo, coma en V21, predominan
Las formaciones vegetales de la unidad V22 dos especies arborescentes introducidas, Pru-
pueden definirse coma una mezcla de especies nus capuli y Eucalyptus globulus. Por otro lado,
de las zonas seca y humeda, de los pisos de baja no se debe excluir que la distribuci6n de los
y mediana altitud. Entre los arboles, el mas meses secos en dos periodos a 10 largo deI ano
abundante es un Jacaranda y el mas notable, permitiria, gracias al almacenamiento de agua
por su floraci6n rosada, Linociera. Los acompa- retenida por el suelo, el mantenimiento de for-
nan otros arboles de los géneros Allophyllus, maciones siempreverdes en lugares donde el
Rapanea y Zanthoxylum, pero en toda la uni- numero total de meses secos implicaria la pre-
dad predominan actualmente las formaciones sencia de formaciones semi-deciduas. Esto es
arbustivas de degradaci6n cuyas dos variantes valido para el norte deI pais donde no se obser-
mas representativas son una de Poiretia y Mi- van formaciones semi-deciduas, y en el Sur, es
mosa y la otra de Cantua y Donodea. esta unidad V22 la que representaria una for-
maci6n semi-decidua.
En los barrancos humedos, la composici6n
floristica se asemeja a la de la unidad V21, con 2.6 Bosques de mediana altitud y Vertientes
arboles de las familias de las araliaceas, clusia- externas -Unidad V23-
ceas, mirtaceas y moraceas.
Estos bosques son el equivalente, en las ver-
La clasificaci6n de este tipo de bosque es tientes externas, de la unidad V21. Las condi-
poco clara (Espinoza, 1949, Emperaire y Ar- ciones térmicas son comparables pero la hume-
naud, 1987). Ciertos autores, al constatar su dad es mayor debido a neblinas persistentes y,
posici6n entre los bosques siempreverdes (V2l) por 10 tanto, a una insolaci6n menor. La compo-
y bosques mas secos y deciduos (V34) y obser- sici6n floristica estamarcada por la de los ma-
var la existencia de especies de hojas caducas, cizos forestales de las dos llanuras adyacentes
10 han clasificado en las formaciones semi-deci- y se observa una evoluci6n continua de las
duas y 10 consideran coma la variante monta- caracteristicas fison6micas y floristicas desde
nosa de la formaci6n V32 (ver mas adelante la su limite superior hasta los bosques densos .
definici6n y la descripci6n de estas unidades). siempreverdes de baja altitud. Muy rapidamen-
Otros, tomando en cuenta la presencia ocasio- te, las hojas se tornan cada vez menos coriaceas,
• nal de especies claramente siempreverdes y aumenta el tamano de las mismas y el de los
admitiendo que son sobre todo las formaciones arboles.
secundarias las que le confieren el aspecta deci-
duo a la vegetaci6n, 10 han clasificado entre los La riqueza floristica se incrementa igual-
bosques siempreverdes. Parece mas acertado mente hacia altitudes menores y presenta pro-
de considerar esta unidad coma una forma de bablemente un maximo en las primeras estri-
transici6n entre los bosques siempreverdes de baciones de los Andes, con un numero de espe-
altitud y los bosques deciduos de la llanura, cies mayor en la vertiente oriental que en la
opci6n adoptada para este mapa. occidental. Se estima actualmente que los bos-
226 Paisajes Agrarios deI Ecuador
ques deI piedemonte amazonico son las forma- tantes macizos forestales en esta vertiente. En
ciones vegetales mâs ricas en especies deI mun- ambos casos, 10 esencial deI uso es para pasto-
do. La transicion hacia bosques siempreverdes reo, apoyado por eficaces redes de recoleccion
deI piso câlido se realiza de manera tan poco de leche.
sensible que no se pudo trazar un limite entre
esta formacion y la de la unidad V31. Algunas fracciones de estos bosques forman
parte de las grandes reservas que van desde los
En la parte mâs alta de la unidad, los bos- pâramos hasta las llanuras -Cotacachi-Caya-
ques estân marcados por los Podocarpus, por la pas, Cayambe-Coca (ver figura C3)-. Por su
abundancia de las especies de la familia de las extensi6n, este tipo de reserva es dificilmente
melastomâceas que alcanza aqui su mayor di- controlable. La reserva de Podocarpus, en cam-
versificacion y por Saurauia que estâ restringi- bio, en el flanco oriental meridional de los An-
da a estos bosques. Aparecen también numero- des, corresponde s610 a este tipo de bosque de
sos representantes de familias de plantas tropi- mediana altitud.
cales: bignoniâceas, burserâceas, meliâceas, sa-
potâceas, palmeras (en particular de los géneros 2.7 Cobertura de las grandes quebradas
Ceroxylon, !riartea y Wettenia) y ciateâceas (he- -Unidad V24-
lechos arborescentes).
En las cuencas interandinas, las grandes
La formacion secundaria mâs notable es una quebradas de origen tect6nico 0 fluvial tienen
maleza monoespecifica, densa y siempreverde una cobertura vegetal compleja y condicionada,
de un pequeiïo bambu (Chusquea) que coloniza tanto por factores edâficos (esencialmente la
los derrumbes 0 los terrenos desmontados y pendiente), coma por la acci6n deI hombre (de-
abandonados. TaI maleza es pobre en especies forestaci6n para obtenci6n de leiïa, pastoreo de
y al parecer no es capaz de evolucionar hacia las cabras). La vegetaci6n que persiste, aunque
una formacion c1imâcica. natural, estâ muy degradada y secundarizada.
Es variable seglin las condiciones c1imâticas
Los bosques siempreverdes de las dos ver- generales deI lugar. Casi siempre forma una
tientes externas se han conservado de manera cobertura completa. El mapa no representa
desigual pues la historia de la penetracion en sino las unidades V24 mâs extensas, aunque
esas zonas difiere considerablemente entre el muchas otras quebradas mâs estrechas recor-
oeste y el este de los Andes. La penetracion y la tan las cuencas interandinas pero no pueden
deforestacion de la vertiente occidental, de pen- ser representadas a la escala 1:1000000.
dientes menos fuertes que la oriental, comenza-
ron en la época historica, cuando los intercam- En las zonas relativamente humedas, la
bios entre la region montaiïosa y los puertos deI vegetaci6n predominante es arbustiva y alcan-
Pacifico, Guayaquil en particular, se tornaron za en promedio un metro de altura. Los escasos
importantes. La explotaci6n agricola de este remanentes arborescentes son sobre todo mimo-
piedemonte data de la misma época con la in- sâceas y excepcionalmente se pueden encontrar
stalacion de plantaciones de naranjos. Mâs algunos pies, a veces viejos, de Buddleja 0 Teco-
tarde, los sucesivos booms deI cacao y deI bana- ma. El estrato arbustivo, mejor desarrollado,
no, relevados por una politica de colonizacion garantiza la cobertura deI suelo. Las especies
lanzada después de la segunda guerra mundial, mâs abundantes son de los géneros Baccharis,
favorecieron la defores"Laci6n a 10 largo de esta Barnadesia, Croton, Duranta y Lantana. Local-
vertiente. mente, se pueden encontrar especies herbâceas,
pero no constituyen un componente importante
La ocupacion, inicialmente lineal a 10 largo de esta formaci6n. Las pendientes de estas que- •
de los ejes, tiende a tornarse coalescente bajo el bradas humedas son el lugar predilecto de la
efecto de una progresiva densificacion de la po- orquidea Epidendrum secundum.
blaci6n. Las comunicaciones hacia la llanura
amaz6nica, aunque ya existian en la época pre- En las zonas secas, los arbustos son a la vez
colombina coma 10 certifican los desmontes en mâs pequeiïos y menos abundantes, predomi-
forma de vastos calveros alargados, no se desa- nando las herbâceas. Los ârboles estan prâctica-
rrollaron sino bajo la influencia de la explota- mente ausentes. Los arbustos mâs comunes son
ci6n petrolera y la colonizaci6n de la llanura Croton, Dodonea, Cleistocactus y varios Opun-
durante los aiïos 1970-1980. Los desmontes que tia. En el estrato herbâceo predominan las gra-
acompaiïan a los nuevos ejes de penetraci6n mineas, de las cuales la mâs grande es Corta-
siguen siendo limitados, subsistiendo impor- deria, acompaiïadas de numerosas especies de
Los paisajes y los sistemas de producci6n l Paisajes poco 0 nada antropizados 227
Las partes mas bajas, mas secas y a menudo de das). La existencia en el suelo, tanto bajo Meli-
pendientes mas débiles son mas intensamente nis coma bajo Pteridium, de una espesa capa de
utilizadas y, muchas veces, las reliquias de ve- materia orgânica poco evolucionada puede cer-
getaci6n natural no se presentan sino bajo la tificar la antigüedad de estas formaciones, y la
forma de pies aislados. Los arboles son caduci- poca importancia de las especies que la acom-
folios con la prescncia de Jacaranda, Tabebuia pafian hace suponer la poca posibilidad de evo-
y una bombacacea. Los arbustos dispersos son luci6n de esas coberturas vegetales. La unidad
Croton, Cantua y Mimosa. Aparecen también V27, representada en el norte deI pais, es com-
especies secundarias propias deI pisa calido parable fison6micamente a las formaciones
comolas d.· los gêneras Ochroma y Cecropia. anteriores pero la graminea predominante es
un Paspalum.
Estas formaciones, que son barbechos mez-
dados con jirones de la formaciôn V27 y prade- Sin un nuevo desmonte preliminar para el
ras mal manejadas. son a menudo limpiados cultivo, estas tierras no sirven. Pteridium no es
para agrandar los pastîzales Los cultivos no apreciado pOl' el ganado y los ganaderos evitan
tienen importo.ncia a19una sino en las partes utilizar Melinis coma pasto pues esa graminea,
mas bajas. Se trsta dp parcelas familiares de pOl' su secreci6n recinosa, daria un sabor desa- .,
café, pifia y carla de azûcar. En la provincia de gradable a la leche. POl' cierto, los pastizales de
El Oro, un organisme regional de desarrollo ha Melinis, despiden, bajo el sol, un 0101' fuerte y
realizado campafias masivas de reforestaci6n, caracteristico.
la mayoria con Tectona.
2.10 Vertientes desmontadas deI sur deI pais - 3 Paisajes vegetales dei piso bajo
Formaciones esencialmente herbaceas
--Unidad V27- 3.1 Bosques de las zonas calidas y humedas
-Unidad V31-
Se trata de una formaci6n casi exclusiva-
mente herbacea que presenta facies muy dife- Esta unidad abarca los dos grandes macizos
rentes de una zona a la otra y de origen varia- forestales deI Ecuador, el deI Noroeste y el de
ble seglin la regiôn. la llanura amazônica. Cubre las nociones vagas
y misteriosas de «selva virgen» 0 «selva tropi-
En un solo caso, en las islas Galapagos, se la cah, <~ungla», «infierno verde».
puede considerar coma primaria, aunque su
extensi6n actual puede verse favorecida pOl' el La «virginidad» de una formaciôn vegetal no
pastoreo de las cabras. Estas praderas natura- es sino una apreciaci6n de su estado de conser-
les llamadas «pampas» que gozan, gracias a la vaci6n y no podria, en ninglin caso, sel' exclusi-
altitud, de condiciones humedas, tienen una va de un solo tipo de bosque. Asimismo, el adje-
composici6n floristica muy rica. Predominan las tivo «tropicah se refiere a un criterio climatico
gramineas pero estan acompanadas pOl' repre- que puede aplicarse a todas las formaciones
sentantes de numerosos géneros no gramineos: vegetales de la zona intertropical y, en el casa
Centella, Cuphea, Cyperus, Jaegeria y Lycopo- deI Ecuador, a todas las mencionadas aqui. Los
dium, asi como muchas especies de helechos. términos <~ungla» 0 «infierno verde» utilizados
pOl' los viajeros 0 los periodistas pretenden uni-
En la parte continental deI Ecuador, esta camente impresionar al lector. De una manera
formaci6n es muy heterogénea. Resulta deI des- mas austera, los fitoge6grafos denominan a es-
monte de formaciones forestales siempreverdes ta formaci6n «bosque ombr6filo» (rain forest,
o semi-deciduas de las pendientes medianas de Regenwald) y la definen coma un bosque denso, •
los Andes y de su posterior abandono. Se pre- siempreverde, con varias estratos y de gran di-
senta bajo dos formas principales, cada una ca- versidad floristica (con la particularidad adicio-
racterizada pOl' el predominio de una sola espe- nal de que ninguna especie predomina clara- ..
cie. En el sur deI pais, se trata de una grami- mente sobre las demas). A veces es Hamada
nea, Melinis minutiflora; en las vertientes de higr6fila y no se encuentra sino en las zonas de
los Andes deI centro deI pais y bajo condiciones estaci6n seca corta, poco marcada 0 inexistente.
climaticas mas humedas, predomina un hele-
cho, Pteridium aquilinum. Esta cobertura vege- La transici6n hacia el piso superior (unidad
tal debe compararse con las malezas de bambu V23) se hace de manera tan graduaI que renun-
mencionadas en V23 (tal vez una formaci6n ciamos a trazar un limite entre esas dos forma-
vicariante 0 propia de las regiones menos hume- ciones cuando estan en contacto.
Los paisajes y los sistemas de produccion l Paisajes poco 0 nada antropizados 229
El estadio siguiente es la incorporaci6n, al 3.2 Bosques de las zonas calidas mas secas
sistema tradicional, de cultivos de renta, maiz -Unidad V32-
en el caso de ciertos indigenas de las orillas deI
Putumayo, cacao y café, en el de los indigenas El bosque semi-deciduo es, coma su nombre
Colorados de la regi6n costera 0 los indigenas 10 sugiere, una formaci6n intermedia entre los
amaz6nicos mas integrados al mercado. Estos bosques siempreverdes (V31) y los bosques de-
tipos de utilizaci6n deI suelo aparecen en el ciduos (V34), y constituye la respuesta a un au-
mapa (incluidos en D31, D32 Y D33), pero son mento moderado deI numero de meses secos
los desmontes, por parte de grupos al6ctonos durante el aiio. Se trata alin de un bosque den-
para la implantaci6n de pastizales 0 de cultivos so, alto, estratificado y rico en especies, pero de
esencialmente perennes, familiares 0 industria- ellas, la mayor parte de leiiosas pierden sus
les (P31, P32, T43 Y T38, T40 respectivamente), hojas durante la estaci6n seca. La caida de ho-
los responsables de las mayores superficies jas es marcada sobre todo en los arboles gran-
desaparecidas deI bosque ombr6filo. des, pues los de estratos inferiores pueden
conservar su follaje. Por oposici6n a los bosques
El mapa muestra que vastas extensiones de ombr6filos, forman parte, con los bosques deci-
estos bosques estan aun intactas. Constituyen duos (V34), de los bosques trop6filos y, en dife-
la reserva de suelo deI pais, ampliamente mer- rentes nomenclaturas, también son llamados
mada por la politica de los ultimos decenios que bosques mes6filos (dry evergreen forest, halb-
la ha abierto a la colonizaci6n agricola y ha rati- immergrüner Wald).
ficado la ocupaci6n espontanea por parte de los
nuevos colonos. Los derechos de ciertos grupos Entre los arboles representativos de este
indigenas han sido reconocidos en adjudicacio- bosque se pueden mencionar Centrolobium,
nes colectivas realizadas en 1990 (612560 ha Guazuma, Vitex, Sapindus y algunos Ficus. La
para los Huaoranis) y 1992 (1300 000 ha para familia de las palmeras esta aun representada
otros grupos de la Amazonia y de la provincia por especies de los géneros Astrocaryum, Phy-
de Esmeraldas) -ver también la parte A VI Y el telephas e Ynesa. En la maleza se encuentran
mapa de la figura ClO-. diversas Tournefortia. Las numerosas forma-
ciones secundarizadas se caracterizan por Ce-
Zonas protegidas que cubren varias forma- cropia, Ochroma y Cordia. En las Galapagos, la
ciones vegetales conciernen parcialmente estos mayoria de estos bosques estan formados de
bosques. Otras estan localizadas unicamente Psidium galapageium y de Pisonia. En el Sur
en los bosques siempreverdes - Yasuni, Limon- de la isla Isabela predomina Sapindus.
cocha, Cuyabeno (ver figura C3)-. Estas vas-
tas extensiones de bosque, controladas por un El macizo de las colinas de Chong6n es el
personal muy restringido y sin un poder real mas extenso de los bosques semi-deciduos, en-
frente a los cazadores furtivos, actores de la contrandose bloques mas pequeiios disemina-
prospecci6n petrolera 0 inmigrantes no son, a dos en la regi6n litoral. Estos bosques estan
menudo, sino reservas virtuales. Pequeiias re- situados en regiones de condiciones climaticas
servas privadas, creadas para el turismo 0 por intermedias entre las de las regiones muy
un profundo deseo de conservaci6n deI propie- humedas con su cortejo de insalubridad y de
tario, gozan de una mejor protecci6n, pero en suelos empobrecidos y las regiones demasiado
superficies demasiado limitadas. secas con sus riesgos de pérdida de cosechas.
Han sido, y ello desde hace tiempo, derribados
En Galapagos, los bosques ombr6filos son, y quemados para liberar espacios agricolas
en las islas habitadas, parcialmente incluidos (D33 a D38, C32 a C38, C41 a C45, T32 a T37,
en las zonas reservadas a la utilizaci6n agrico- por ejemplo). Las actuales reliquias estan en-
la. Alli son por 10 tanto objeto de desmonte, so- tonces muy amenazadas y es probable que, en
bre todo para la implantaci6n de pastizales y este punto, el mapa ya no corresponda a la rea-
también estan amenazados indirectamente con lidad, debido a desmontes operados desde los
Los paisajes y los sistemas de produccion l Paisajes poco 0 nada antropizados 231
3.4 Bosques de las zonas calidas y muy secas daci6n mayor conduciria a la fisonomia de la
-Unidad V34--- unidad V38.
En la Hanura litoral deI Ecuador continen- Debido a la gran sequedad de estas zonas, la
tal, se encuentra una maleza relativamente utilizaci6n es muy reducida. Unicamente las
alta, pero abierta. Es un cactus candelabro (Ar- pocas partes planas y que disponen de suficien-
matocereus cartwrightianus), que marca el as- te cantidad de agua son cultivadas bajo la for-
pecto de la cobertura vegetal. En esta regi6n, ma de huertos (C48), 0 de plantaciones de caiia
esta ultima se singulariza igualmente por un de azucar (T32) cuando la tierra y el agua son
componente arborescente no despreciable, di- un tanto mas abundantes. Las demas utilizacio-
versas mimosaceas, cesalpiniaceas y Tabebuia. nes de estas zonas son la extracci6n familiar de
Los arbustos comprenden igualmente mimosa- leiia (a veces transformada aHi mismo en car-
ceas y cesalpiniaceas, aunque tambiên cappari- b6n), asi como el pastizal itinerante de caprinos
daceas, bignoniaceas, Croton, Jacquinia, Wal- en los Andes 0 de caprinos y bovinos en la regi6n
theria y Ziziphus. litoral.
Los fondos de los vaHes andinos se distin- 3.6 Praderas y mezcla de praderas con V35
•
guen por una vegetaci6n mas baja, a menudo -Unidades V36 y V37-
mas densa, y la menor frecuencia de arboles,
pero las cactaceas tienen aHi una mayor diver- La formaci6n herbacea V37, abierta y esta-
sidad. Por ejemplo, en la depresi6n de Cata- cional, esta limitada a las zonas mas arcillosas
mayo, esta familia cuenta con 7 especies repar- de la parte mas arida de la peninsula de Santa
tidas en 5 gêneros, entre ellos el unico cactus Elena. Se trata de una pradera de desarroHo
en «bola» deI Ecuador, un Melocactus. En el estacional cuyo aspecta varia de un ano al otro
otro extremo deI pais, en el vaHe deI Chota, ya segun las precipitaciones recibidas. Normal-
no se encuentran sina 4 especies deI género mente predominan las gramineas y se encuen-
Opuntia incluyendo O. tunicata, un cactus in- tran Cenchrus, Chloris, Eragrostis y Panicum.
troducido. Los arboles son aHi menos importan- Localmente y seglin las precipitaciones anua-
tes que en la llanura litoral. Se trata sobre todo les, se pueden producir pululaciones de espe-
234 Paisajes Agrarios deI Ecuador
cies lianescentes, Ipomoea 0 Luffa. Con precipi- Las plantas estacionales son esencialmente gra-
taciones aun mas importantes, Alternanthera mineas. Esta formaci6n es mas abierta y por 10
publifiora puede alcanzar tamanos y densida- tanto probablemente mas joven que las malezas
des notables; debido a su prolifaraci6n durante de la unidad V35.
El Nino de 1982-83, sus restos eran aun visibles
10 allOS después bajo la forma de tallos seme- Los terrenos desmontados en el Ecuador
jantes a los de un pequeno bambu seco. continental pueden ser objeto de un segundo
desmonte para una nueva tentativa de cultivo
Estas formaciones, llamadas «sabanas», se (V34) y, entretanto, servir de tierra de pasto
presentan bajo la forma, ya sea de grandes ex- itinerante y estaciona1. Las malezas de las islas
tensiones exclusivamente herbaceas, 0 de pra- Galapagos no tienen usa alguno.
deras mezcladas con manchas de plantas leno-
sas arborescentes 0 arbustivas. Las plantas le-
nosas que forman estas inclusiones son las men- Las dos siguientes formaciones ocupan un
cionadas en V35. Cuando estas praderas no tie- lugar aparte en esta leyenda. En efecto, esta
nen plantas lenosas, fueron representadas bajo ultima esta organizada, en el piso calido, segUn
la sigla V37, mientras que las que comprenden un gradiente de humedad y el determinismo de
un componente lenoso 10 fueron coma V36. Esta esas dos ultimas formaciones nada debe a la
ultima unidad no es entonces sino un mosaico humedad climatica de la zona. La existencia de
de las dos formaciones vegetales identificadas la una, V40, esta estrictamente vinculada a
con las siglas V35 y V37. substratos finos sometidos al vaivén de las ma-
reas, mientras que la otra, V39, mas compleja,
Como V32 esta situada en zonas aun mas reune formaciones de fisonomia original que
secas que las que corresponden a V35, su utili- expresan ya sea una degradaci6n de una cober-
zaci6n es practicamente nula. S6lo se puede tura vegetal c1imacica, 0 un estadio pionero
mencionar el pastizal extensivo y estacional de relativamente avanzado en la constituci6n natu-
ganado proveniente de regiones mas clementes. raI de tal cobertura vegetal climacica.
\ IBosques litoralesl
o SOkm
\\ ----====---====---'
:...., Escala de las tarjetas
.....
\ ~,
,--.
\
\
------
'/
----0 .
/
1 /
1 /
1 /
1 /
/ /
/ 1
/
/ f /
/ 1 /
/ 1 /
/ 1
/ 1
/
1
/
,
\ :
\'.
,'-, "\~
Manglares
, \
Otras tierras saladas .-;' \
" ,- " l
• Camaroneras ,, ,'" ... ,
-,' \ .,-
\
\
\
\
300
0+---
1969 1987
Anos
otras tierras ~
Manglar • 1d Camaroneras
sa a as
A continuaci6n se dan los nombres cientificos con sus nombres cornunes correspondientes. La
traducci6n fue obtenida a través de informaciones de campo coma de la revisi6n de publicaciones
que constan en la bibliografia. Para ciertos casos, la correspondencia entre los dos nombres puede
ser dudosa y, en otros casos, no fue posible encontrarla.
INTRODUCCION
Dentro de los paisajes antropizados de altura se distingue de igual modo entre un piso templa-
do y un piso frio, éste con paisajes y agricultura Hamados «de mayor altura», especificando asi su
posici6n mas elevada en altitud. Al interior de esos dos pisos, la estructura general de la leyenda
deberia organizarse en 4 partes: paisajes de mosaicos de vegetaci6n natural, los de praderas, los de
cultivos anuales y los de plantaciones perennes. Sin embargo, s610 los de cultivo respetan esta
divisi6n ya que, en el mapa el piso frio fue caracterizado unicamente por la presencia de cultivos
de mayor altura (unidades CIl y C12) y que, en esta obra, la discriminaci6n se hiz6 a base de
criterios adicionales (ver cuadro Al), acercandose a la divisi6n establecida en la «Geografia Fisica».
Este arreglo permiti6 ademas evitar un desmenuzamiento cartografico exagerado.
El piso templado se caracteriza también por el predominio deI maiz. Este cereal no puede crecer
en la zona fria con riesgos de helada pero esta siempre presente en los sistemas de cultivo de la
zona templada. Del mismo modo, entre el piso templado y el de las tierras bajas y calidas, el limite
se fija en el paso de las variedades de maiz suave a las de maiz duro y en la aparici6n deI cultivo
de cana de azucar.
El tamano de la propiedad, legible en los paisajes a través el tamano de las parcelas de cultivo y
el riego concurren tambien a individualizar los sistemas de producci6n dentro de una misma gama
de cultivos posibles. Constituyen el segundo nivel de clasificaci6n.
Algunos sistemas, con superficies bastante amplias, pueden ser individualizados y conforman
una unidad cartografica homogénea. Es el caso, por ejemplo, de la unidad P21 constuitida por los
pastos regados de las haciendas lecheras. En otros casos el gran desmigajamiento de los paisajes
andinos nos oblig6 a agrupar elementos algo disimiles en una misma unidad para no multiplicar
excesivamente su numero. Si los elementos comunes, en particular desde el punta de vista deI
modo de funcionamiento, de los cultivos sembrados 0 de la organizaci6n social, permiten hablar de
una unidad, distinguiremos, sin embargo, sus variantes geograficas coma tantas fisionomias
peculiares de un mismo paisaje.
Por fin, la ultima parte dara indicaciones de los mayores cambios en proceso en los pisos frio y
templado.
Los paisajes y los sistemas de produccion II Paisajes antropizadas de los pisos de altura 241
plantas que es posible cultivar en el piso frio, es paron en C12, el predominio de los 3 cultivos
la que permite obtener los mayores ingresos. El basicos es notorio, pero sus respectivas propor-
desmonte deI paramo ya no se efectua manual- ciones, en términos de superficie, coma la deI
mente como otrora, sino con tractor. Los suelos barbecho, son muy variables. A ellos se agregan
con alOfanos, ricos en materia organica, son a menudo otros cultivos coma la oca, el melloco,
sanos. No existen ni plagas en el suelo, ni gér- la mashua, la quinoa, la cebolla 0 el ajo.
menes deI hongo de la lancha-mildiu (Phyto-
phtora). Asi, el uso de insumos (abonos, produc- En el sistema simplificado (papa, cebada,
tos fitosanitarios) y, por 10 tanto, los costos de haba), la papa siempre encabeza la rotacion de
produccion, se reducen al minimo. Los rendi- los cultivos. Ocupa la parcela un ano 0 dos ma-
mientos son muy elevados en los primeros anos ximo. Le sigue luego el haba durante uno 0 dos
de cultivo, considerablemente superiores a los anos. Se siembra luego cebada, durante dos 0
que se obtienen en las parcelas de los terrenos tres anos y a veces cuatro 0 mas. Posteriormen-
antiguos. Los volumenes comercializados son te el campo se deja en barbecho (Gondard 1986).
importantes, proporcionando una real bonanza
financiera, y declinan luego. La papa es objeto de todos los cuidados.
Recibe abonos organicos 0 quimicos y varios ...
Los demas cultivos, haba y cebada, aparecen tratamientos fitosanitarios durante su cielo,
solo mas tarde, cuando los rendimientos de la aunque con diferencias importantes seglin los
papa bajan. Los otros tubérculos andinos tradi- recursos financieros de los cultivadores. Incluso
cionales, la oca y el melloco, no son sembrados los pequenos campesinos intentan al maximo
sino de manera muy marginal. Con el tiempo, asumir tales gastos pese a su elevado costo, con
CH se transforma en C12 que sigue siendo la la esperanza de obtener una ganancia conse-
situacion mas ampliamente difundida. cuente al momento de la comercializacion. Por
experiencia saben que sin esa atencion particu-
1.1.b Unidad C12 lar, la produccion seria irrisoria pues la planta
es exigente en elementos fertilizantes y muy
Se caracteriza por los cultivos de cebada, sensible a las plagas y enfermedades. Desgra-
haba y papa, cubre una superficie de 236 100 ha, ciadamente, por falta de dinero y sin tener
esencialmente en las zonas aItas y con una acceso al crédito (ver parte A VIII), a menudo
estacion seca marcada. Se localiza en las pro- se ven obligados a aminorar las dosis, 10 que
vincias centrales, entre los confines de Imba- incide negativamente en los rendimientos.
bura y Pichincha al Norte, y los de Canar y
Azuay al Sur. Alli los suelos son profundos y Las técnicas de cosecha son generalmente
relativamente ricos en nutrimentos pero sensi- manuales. Se puede ver cohortes de un cente-
bles a la erosion cuando estan cultivados, debi- nar de campesinos cavando las papas en las
do a los fuertes declives (pendientes a menudo grandes parcelas de las haciendas. Bajo la
superiores al 50 por ciento). mirada vigilante deI mayordomo quien conta-
biliza la produccion, los sacos que se van lle-
El vinculo con el mercado a través de la pro- nando son almacenados en las carpas blancas
duccion agricola esta muy poco desarrollado en que marcan temporalmente esos paisajes de
los minifundios. Bernard (1982) ha establecido altura.
que la mayor parte de los ingresos de las UPA
menores provienen de actividades desarrolla- El haba recibe menos atencion. Le sigue a la
das fuera de la propiedad, principalmente me- papa y aprovecha un suelo enriquecido. En las
diante la migraci6n para trabajo temporal 0 grandes propiedades se siembra poca haba,
estacional. salvo a veces con fines especulativos, para una
cosecha en verde. En este caso, la fecha de
Si bien la mada cebada-haba-papa caracte- siembra se decide en funci6n de una cosecha
riza a 10 que se podria definir coma la base programada antes de la semana santa. En
comun deI sistema de cultivo de altura, pues efecto, el haba es uno de los ingredientes esen-
esas tres plantas representan la produccion ciales de la fanesca, plata tipico de cuaresma, y
clave en la explotacion 'de los medios andinos en ese periodo la demanda aumenta considera-
mas altos, existen variantes vinculadas a las blemente determinando un alza significativa de
condiciones locales. Mientras en la unidad CH los precios.
la preponderancia de la papa sobre cualquier
otra utilizaci6n corresponde casi a un monocul- Los minifundistas cosechan mas bien el haba
tivo, en los sistemas de policultivo que se agru- en grano seco pues gran parte de la produccion
Los paisajes y los sistemas de producci6n II Paisajes antropizados de los pisos de altura 243
se destina al autoconsumo a 10 largo deI ano. caci6n de estas medidas, la producci6n nacional
Recogen igualmente los tallos que almacenan en de cebada cervecera no es suficiente y es nece-
hacinas cerca de las casas, coma reserva de saria la importaci6n de ese producto.
combustible doméstico.
Al término de la rotaci6n tipo, se produce un
La cebada se siembra en un suelo muy ablan- periodo de barbecho. Su duraci6n es mas 0 me-
dado por varias labranzas anteriores. Salvo en nos larga seglin las disponibilidades de tierra.
el casa de las parcelas mas pequeiias, donde es Corresponde en el paisaje a superficies mas 0
manual, la labranza se realiza con poderosos menos importantes que son dejadas en reposo.
tractores. Esta maquinaria, a la que se engan- Mas amplias en las haciendas, dada la superfi-
cha arado de discos, no puede labrar en subida, cie total de cultivo, disminuyen a medida que
pues, a 3 000 m de altitud, pierden alrededor deI se reduce el tamaiio de la explotaci6n y aumen-
30 % de su potencia, ni perpendicularmente a ta la densidad poblacional.
. la pendiente, pues se volcarian. Asi, s610 traba-
jan en bajada, en el sentido de la pendiente y Una cobertura herbacea se reconstruye de
vuelven a subir con los arados levantados por manera bastante rapida en los rastrojos que no
el borde deI campo. Como la siembra se realiza son incorporados después de la cosecha sino
en el mismo sentido, en cada bajada las ruedas dejados coma pasto para las ovejas. S610 elulti-
dejan hondas huellas y la parcela presenta mo aiio, justo antes de un nuevo cultivo de
rayas de arriba hacia abajo que funcionan papa, la parcela es sistematicamente esterco-
como regueras, por los que fluye el agua de lada con el redileo nocturno deI rebaiio fami-
Iluvia. En funci6n de las ondulaciones deI liar, antes de ser labrada. Los ovinos son ence-
terreno, se sobrecavaran barrancos, sobre todo rrados todas las noches en un corral que los
en las grandes parcelas, pues alli la distancia agricultores de las provincias centrales llaman
de flujo y, por 10 tanto, la concentraci6n de las «talanquera». Se 10 desplaza cada 5 a 8 dias,
aguas, es mayor. dejando en el suelo su huella cuadrada repetida
y benéfica.
La erosi6n hidrica no es el unico peligro de
un excesivo ablandamiento deI suelo. La ero- La exigüidad de las propiedades puede Ile-
si6n e61ica también se Ileva su parte. Los vio- var a la desaparici6n deI barbecho. Es el caso,
lentos vientos que soplan en las cordilleras por ejemplo, de las comunidades que ocupan
tienen un efecto erosivo importante. Este fen6- las tierras altas entre Punin, Flores y la laguna
mena es frecuente, pero particularmente mar- de Colta. La densida.d de la poblaci6n ha condu-
cado en la vertiente sur deI Chimborazo y en el cido a una divisi6n maxima de la tierra y en
cant6n de Guamote. Hemos observado en las cada propiedad toda la superficie es cultivada.
alturas de la hacienda de Totorilla una abla- La integraci6n de la ganaderia, aun de ovinos,
ci6n de mas de un metro de espesor. es muy dificil, pues los cultivos ocupan el
espacio que podria haber sido pasto natura1.
En los sistemas campesinos, la paja de la Pocas ovejas pacen en el borde de los caminos y
cebada es conservada en hacinas cerca de la ciertas parcelas de cebada no son sembradas
casa y sirve de alimento complementario para sino para ser cosechadas en·hierba, coma com-
el ganado. El grano es ya sea autoconsumido 0 plemento forrajero. La no reconstituci6n de la
vendido en el mercado. Todas las etapas de fertilidad de los suelos ya no permite el cultivo
cultivo siguen siendo poco tecnificadas y la de papa por falta de estiércol, salvo en muy
• cebada no recibe practicamente atenci6n pequeiias cantidades. La cebada tiende a ocu-
alguna entre la siembra y la cosecha. par 10 esencial de las superficies, con rendi-
mientos bajos. Por eIlo, no es sorprendente que
En los sistemas aplicados por las mayores esas zonas de densidades de poblaci6n relativa-
explotaciones, y, menos frecuentemente, por mente elevadas sean también lugares de fuerte
comunidades campesinas mas bien organizadas emigraci6n.
por la Iglesia 0 las ONGs, las cervecerias desem-
peiian un papel importante a través de los con- Los tubérculos andinos secundarios son
tratos de producci6n. Éstos preven la provisi6n cultivados en pequeiias propiedades indigenas.
de semillas seleccionadas, la asistencia de un Se trata de una supervivencia cultural que no
técnico que efectua un seguimiento deI proceso es mantenida por la demanda deI mercado. Las
de cultivo y aconseja la aplicaci6n de los trata- poblaciones urbanas ya casi no los consumen.
mientos fitosanitarios mas adecuados, y final- Para dar un orden de magnitud, las estadisti-
mente la compra de la cosecha. Pese a la apli- cas deI INEC-SEAN estiman en 388700 tonela-
244 Paisajes Agrarios deI Ecuador
das la producci6n de papa y solamente en 5600 Esta localizada en la franja arbôrea 0 arbus-
Y 3900 toneladas la de melloco y oca. La de la tiva de lugares donde hasta entances no habia
mashua no es ni siquiera estimada. Practica- presencia humana, otrora tierras de haciendas,
mente ha desaparecido deI agI'O ecuatoriano. Se deI Carchi y deI Azuay. Cubre una superficie de
encuentran a veces algunas plantas dispersas, 87400 ha. Los campesinos son sobre todo mesti-
en el borde de una parcela 0 mezcladas con un zos y han adquirido sus lotes a raiz de la Refor-
cultiva principal coma la papa. El meHoco es ma Agraria. Las explotaciones son de tamaiio
mas frecuente que la oca, tal vez mas de 10 que reducido y cuentan a veces con un terreno adi-
permiten pensaI' las estadisticas de superficies cional en el valle.
cultivadas. Se la integra entonces a la rotaci6n
después deI haba 0 en reemplazo de cHa, pero El sistema comienza con el desmonte ca si
siempre antes de la cebada, ya que coma siempre con fuego. Le sigue la implantaci6n de
tuberculo es mas exigente. un cultivo de papa, menos frecuentemente de
haba, que limpia el suelo pOl' las numerosas
El ajo y la cebolla pueden estaI' presentes en escardas que requiere. Viene luego la implanta-
diminutas panelas, en vista del ingreso moneta- ciôn de un pasto artificial, invadido rapidamente
rio que da su comercializaci6n (ver unidad C26). pOl' hierbas silvestres y siempre soporte de una
La quinoa, que es un cuJtivo nativo de las tierras ganaderia lechera de tipo familial' cuya produc-
frias, esta mas presente en los sistcmas de maiz, ci6n se transforma en el Jugal' en queso fresco, 0
deI piso templado (unidat!es C22 y C21). quesillo, destinado a los mercados urbanos.
producci6n de leche de los Andes, las cuencas coma ordeno mecanico para disminuir el perso-
lecheras deI Carchi, Pichincha y Cotopaxi. nal empleado, riego par aspersi6n, renovaci6n
regular de los pastos, rotaci6n temporal con
2.2.a Unidad P21 otro cultivo, generalmente de papa (Machachi).
El acceso al crédito era mas facil en el casa de
Cubre 336900 ha, desde la provincia deI Car- los ganaderos que en el de los cultivadores, y
chi hasta el Noreste de la provincia de Loja. para las grandes explotaciones mas que para
Las zonas mas representativas son las de los las pequenas.
cantones San Gabriel, Cayambe, Quito, Macha-
chi y Latacunga. En Riobamba y Cuenca, las A mediados de los anos 1990, la tendencia
• haciendas lecheras se localizan bajo los para- modernizadora de unos empresarios serranos
mos y bajo el cintur6n forestal, en condiciones propici6 la conversion a la floricultura de pocas
de mayor humedad. hectareas en algunas haciendas ganaderas.
2.2.c Unidad P23 Entre todos los tipos de utilizaci6n deI suelo
en el piso templado, este es el que tiene la mas
Se encuentra esencialmente en el sur de la amplia variaci6n interna. La unidad cubre apro-
Sierra, en particular en el Azuay, en la perife- ximadamente 147700 ha situadas principalmen- •
ria de la zona de fuertes densidades poblacio- te, al Norte, en la cuenca alta deI Chota, en
nales. Se asemeja a un subtipo de los tipos Mariano Acosta, San Gabriel y El Angel, en el
maizicolas en el que predominan los pastos y, centro en la cuenca de Guaranda, y al Sur, en
por 10 tanto, la ganaderia. Ocupa una superficie la franja que bordea a la alta cuenca de los rios
de 237 100 ha. Los pastizales permiten la inte- Jubones y San Pedro. Son zonas donde predo-
graci6n de la ganaderia familiar al sistema de mina la poblaci6n mestiza, ya sea deI punta de
producci6n y pueden ser considerados coma una vista cultural 0 bio16gico. Las propiedades son
reserva de tierra. siempre pequeiias.
El movimiento cotidiano deI ganado, que La unidad C21 se caracteriza por un tipo de
sube y baja deI maizal a las praderas, dibuja un policultivo original que incluye el trigo y el
cuadro caracteristico deI paisaje de la zona. Al maiz casi siempre asociado al fréjol, asi coma
mismo tiempo es esencial para la «durabilidad» parcelas reservadas a pastos y en ocasiones la
deI sistema por la transferencia de fertilidad de papa. Se distingue sin embargo muy claramen-
las praderas hacia los campos de maiz, coma 10 te de los otros tipos que incluyen también estos
es el «talanqueo» en la unidad C12. cultivos. Por ejemplo, en el norte de la Sierra,
la unidad P22 corresponde a una zona mas
Con la densificaci6n de la poblaci6n P23 evo- humeda, con mejores suelos y propiedades mas
luciona hacia los tipos de las unidades C21 0 extensas en las cuales dominan la ganaderia y
C22 (figura C7).
el cultivo de papa. En el centro, la unidad C25
esta en zonas mas secas y tiene poco maiz
2.3 Cultivos anuales-Unidades C21 a C26
mientras la unidad C22 esta casi exclusiva-
mente maizicola.
Este estrato, localizado entre 2200 - 2400 y
3000 - 3200 m.s.n.m., corresponde, por excelen-
El aspecta de los pastizales, el cultivo de la
cia, al piso deI maiz. No existe terruiio 0 sistema
papa y la intensidad de la erosi6n son elemen-
de cultivo que no 10 integre en mayor 0 menor
medida, ya sea en asociaci6n con otros cultivos tos reveladores de las dos variantes que pre-
en la mis ma parcela (maiz-fréjol, maiz-haba, senta C21 y que forman el fondo deI paisaje. En •
maiz-alfalfa, maiz-frutales, por citar s610 las el Norte, mas humedo y en un suelo de buéna
mas caracteristicas), 0 en complementariedad de calidad, los pastizales son mas ricos (Holcus la-
rotaci6n entre parcelas (cultivo de hortalizas, natus es frecuente), pues no deben soportar
maiz y trigo, maiz y cebada, maiz y chocho). una larga sequia, y la papa esta presente en
todas partes. En el Sur, el cultivo de la papa
El eucalipto acompaiia al maiz: bordea los desaparece incluso en las regiones aun hume-
campos y rodea a las casas. Los paisajes son los das. En efecto, aHi los suelos son ferraliticos y
de un boscaje mas 0 menos abierto segun el pobres, contrariamente a los ricos suelos volca-
tamaiio de las explotaciones y la densidad de la nicos deI Norte. En las regiones mas secas de
poblaci6n. Nab6n y de Nieves, las praderas de grama se
secan en el verano. La erosi6n de los suelos es
Habria sido necesaria mas de una docena de mas intensa, debido a una mayor fragilidad
tipos para expresar mejor la diversidad de las deI medio y deI sistema de cultivo en general.
Los paisajes y los sistemas de producci6n II Paisajes antropizados de los pisos de altura 247
C24 Maiz Chocho, cebada, habilla No Zona mas seca que las precedentes
C25 Trigo, cebada Lenteja, arveja, maiz No Zona seca, trigo en regresi6n
Los suelos son muy claros, los sètos poco den- 2.3.b Unidades C22 a 24-Predominio
sos, el cultivo de trigo sigue siendo bastante exclusivo deI maiz
importante y localmente puede predominar
sobre el de maiz. En todas estas zonas predomina amplia-
mente el maiz; las parcelas son muy fragmen-
Si bien los trigales son uno de los componen- tadas y los setos vivos numerosos. Estos ele-
tes principales deI sistema de cultivo C21, ya mentos deI paisaje reflejan estructuras comu-
no ocupan en el conjunto de la unidad el lugar nes de poblamiento, con una amplia mayoria
primordial que pudieron tener en otros tiem- indigena, y de tipo de propiedad exclusivamen-
pos. i,Depende esta evoluci6n solamente de las te minifundista.
caracteristicas econ6micas con el aumento ma-
sivo de las importaciones de trigo deI extran- El aspecta frondoso generalizado por la pre-
jero y alza rapida deI costo de los abonos, sin sencia de numerosas cortinas de eucaliptos en
cuya aplicaci6n los rendimientos siguen siendo estos tres sistemas maizicolas, ve variar, sin
irrisorios? El alza deI precio de los abonos ha embargo, su fisonomia seglin los lugares, al
tenido probablemente una incidencia muy igual que cambian los cultivos que acompaftan
fuerte en la regresi6n de la producci6n de trigo al maiz. Los factores explicativos de estos cam-
por parte de los pequeftos cultivadores. Otra bios deben buscarse en las condiciones de hume-
explicaci6n complementaria -el reducido dad y de temperatura, correspondiendo las pri-
meras a la vez al total y a la distribuci6n anual
tamafto de las propiedades que es uno de los
de las precipitaciones aunque también a la capa-
elementos estructurales de la unidad C21- no
cidad de retenci6n de los suelos, y estando las
permitiria una rentabilidad suficiente frente al
segundas directamente ligadas a la altitud.
precio deI trigo importado.
Existen en los Andes mas de 300 variedades
El incremento de la poblaci6n en terrenos de maiz con cualidades particulares y de una
limitados espacialmente acarrea una variaci6n gran adaptabilidad a los micro-medios. En un
de los elementos deI sistema de cultivo, privile- mismo puebla no se siembra el mismo maiz en
giando los cultivos mas productivos. Esta ten- los terrenos regados y en los campos de secano,
dencia trae consigo entonces, a medida que maiz blanco en donde se podra regar, maiz
aumenta la densidad poblacional, un abandono amarillo (morocho) en las colinas secas.
progresivo deI trigo en beneficio deI maiz. En
• este caso, la evoluci6n se orienta hacia C22 La duraci6n deI ciclo deI maiz es muy varia-
(maiz-fréjol) si el maiz se torna predominante ble. Entran en cuenta no solamente las varie-
-presi6n demografica fuerte-, 0 hacia el tipo dades cultivadas sino también la altitud de la
P23 si las praderas contimian ocupando un parcela. De una manera general, se puede
lugar importante -presi6n demografica redu- decir que las siembras tienen lugar en octubre-
cida por mayor emigraci6n. Esta diferenciaci6n noviembre y la cosecha en junio-julio-agosto, es
concuerda con la oposici6n entre las variaciones decir aproximadamente 8 a 9 meses después.
de la unidad C21, en el norte y el sur de los Se constata sin embargo que no son raros los
Andes. ciclos de 10-11 meses, pues el interés que atri-
248 Paisajes Agrarios deI Ecuador
buyen las sociedades campesinas andinas al • En los medios frescos y humedos, situados
maiz les hace sembrar hasta los ultimos limi- entre los 2800 Y 3200 m.s.n.m., el maiz y el
tes eco16gicos posibles. fréjol coexisten con:
-la papa (en parcelas distintas),
Asi, el maiz se revela coma el cultivo esencial -el haba (co-plantada con el maiz y el fréjol),
deI piso templado, que es el mas densamente -el chocho (sobre todo en los bordes deI campo,
poblado e, hist6ricamente, el mas intensamente ubicado ahi por su sabor amargo para los
utilizado en los Andes ecuatorianos. animales) y
-la quinoa (en parcelas distintas 0 co-plan-
El sistema ref:'rencial deI cultivo deI maiz se tada).
encuentra en la unidad C22 que es la mas am- En esta variante se observa igualmente la
pliamente difundida. Con relaci6n a eHa sera existencia de algunos pastos. La rotaci6n se
definida C23, marcada por el cultivo bajo riego hace entonces preferentemente deI pasto a la
de la alfalfa, y C24 que representa un medio papa y luego al maiz. Rara vez se efectua deI
mucho mas seco. maiz a la papa. En efecto, salvo que se rea-
lice un aporte importante de abono, 10 que
La unidad C22 es la mas ampliamente difun- financieramente no pueden asumir los mini-
dida. Ocupa 304600 ha en todas las cuencas an- fundios en estos sistemas maizicolas, la pro-
dinas, desde el Carchi hasta Loja, pero es mas ducci6n es muy baja. En cambio, el pasto, 0
frecuente en las provincias de Imbabura, barbecho herboso, que ha permitido al suelo
Pichincha, Cotopaxi, Bolivar y Azuay. reposar yser enriquecido con el estiércol deI
ganado, constituye un excelente precedente
La asociaci6n del maiz con el fréjol es muy de cultivo.
generalizada y corresponde a 10 que se podri& • En los meûios tf~mplados y mas secos, entre
llamar la situaci6n comun deI cultivo deI maiz los 2200-2400 Y 2900 m.s.n.m., no existe, alre-
en los Andes. El fréjol, que fija el nitr6geno, se dedor del maiz-frejol, otra asociaci6n caracte-
apoya en el maiz que le sirve de tutor. En reali- ristica. La gama de especies co-plantadas es
dad, es raro que haya s610 maiz y fréjol en una muy amplia, pero hay pocas pm'celas reser-
parcela. Se puede igualmente encontrar haba, vadas a estos cultivos y el «monocultivo» de
chocho, habilla, calabaza, zam bo, alfalfa, qui- maiz-fréjol ocupa la casi totalidad deI espa-
noa' arveja, cebada, papa ... Lo que de lejos cio agricola. En las partes altas de la zona
aparece como un campo fison6micamente muy maizicola de la cuenca Azogues, se puede
homogéneo, pues el m aiz predomina a la vez en incluso encontrar frecuentemente una aso-
volumén de material vegetal y en altura sobre ciaci6n con] a cebada sembrada en !ineas
las demas especies asociadas, es en realidad intercaladas. Al parecer, esta segunda va-
una parcela de cultivo de gran heterogeneidad riante corresponde también a una densifica-
como 10 ilustra la figura C6. ci6n mayor deI espacio agricola, marcada en
el paisaje por la desaparici6n deI pastolbar-
Las asociaciones alrededor deI maiz no son becho.
casuales. La calabaza, por ejemplo, se extiende
generalmente alrededor de las casas, donde uti- En las dos variantes, pero mas en zonas mas
liza el estiércol, mas abundante, que necesita. templadas, algunas parcelas reciben un
Las constantes que se observan en los paisajes se!:,'Undo cultivo anual, de arveja, después de la
reflejan una adaptaci6n y a veces una especia- cosecha deI maiz en choclo. La ganaderia esta
lizaci6n de los sistemas. Asi, en el tipo C22 se asociada al sistema, pero en menor grado que
pueden distinguir dos variantes. en la unidad C23.
.
Figura C6: Dos lineas de cultivo en dos parcelas de la unidad C22 (San Pablo deI Lago - Imbabura)
-
4f Jl.i
o\b
0 ~. ·0
0 ~
O·
s[I 0.,
2
~
4
3
• 4
0
0 ••
5 m
Los paisajes y los sistemas de producci6n II Paisajes antropizados de los pisos de altura 249
La unidad C23 cubre apenas 31000 ha en las La unidad C24 ocupa una superficie de
provincias de Cotopaxi, Tungurahua y Chimbo- 39 000 ha. Se situa, coma la unidad C23, en el
razo, entre 2300 Y 2800 - 2900 m.s.n.m. Se loca- centro de las cuencas de las provincias de Coto-
liza en suelos arenosos y recibe aproximada- paxi, Tungurahua y Chimbor·azo. Las precipi-
mente 500 mm de precipitaciones promedio taciones son similares (inferiores 0 iguaJes a
anuales. Esta unidad se singulariza por la 500 mm) y los suelos igualmente arenosos. Por
presencia de numerosas parcelas de alfalfa bajo falta de riego, el pedodima es alli muy seco y el
riego y en pequenas propiedades. cultivo de alfalfa es inexistente. Las legumino-
sas asociadas al maiz son el habilla, el chocho,
La alfalfa nunca es sembrada al voleo por la lenteja y a veces el garbanzo. La cebada se
los pequenos campesinos andinos. Se trans- cultiva en parcelas distintas que entran en rota-
planta, coma en practica horticola, a partir de ci6n con el maiz. Entre Cusubamba y Pujili, en
un almacigo 0 de esquejes tomados de viejas una meseta muy seca, arenosa y sometida a
plantas. Puede ser cultivada en terrenos de una fuerte erosi6n e61ica, se puede observar
secano pero casi siempre goza de abundante igualmente vicia y linaza, cultivada coma plan-
riego que garantiza una buena productividad. ta medicinal.
•
La parcela es cosechada progresivamente
seglin las necesidades de forraje de la explota- La habilla es sembrada alli en asociaci6n
ci6n, calculando que sea posible un nuevo corte con el maiz y el fréjol, 0 simplemente en lugar
cuando termine el corte en curso. de este ultimo ya que soporta dificilmente la
sequedad deI medio. De la misma manera que
El cultivo de la alfalfa permite el desarrollo el fréjol, se enrolla alrededor deI pie de maiz
de una pequena ganaderia doméstica y soporta que le sirve de tutor. Esta leguminosa esta poco
una densidad de poblaci6n mayor que las difundida fuera de las provincias de Cotopaxi y
demas asociaciones deI maiz. El ganado mayor Tungurahua.
es estacado cerca de las habitaciones y con-
sume también los residuos de cosecha y hierba El chocho puede co-plantarse con el maiz 0
de los bordes de caminos 0 acequias. sembrarse en una parcela distinta. Sorprende
la adaptabilidad de esta planta que puede en-
La alfalfa adquiere a veces un caracter de contrarse en zonas frias y humedas 0 en esas
cultivo de renta. Los excedentes de la cosecha zonas secas donde, a la limitaci6n agron6mica
se venden en el mercado y alimentan a una mayor de la sequia, se anade la de las heladas.
ganaderia «urbana», frecuente en la mayoria Los fen6menos de inversi6n térmica son muy
de los pueblos y hasta en las ciudades de los frecuentes en estas zonas que, par ser suma-
Andes. mente secas, tienen noches muy daras y por 10
tanto muy frias, puesto que la radiaci6n noctur-
No todas las zonas que asocian el cultivo deI na deI suelo es maxima. Por 10 demas, es proba-
maiz y el de la alfalfa pudieron representarse blemente una de las explicaciones de la espe-
cartograficamente a la escala de 1:1000 000, ya cializaci6n de la zona de San Marcos y Alaquez
que se trata a veces de franjas estrechas que, (Cotopaxi) en el cultivo de chocho en detrimen-
sin ser estrictamente ripicolas, estan ligadas a to deI deI maiz, a 2900-3 000 m.s.n.m.
la proximidad inmediata de un rio. Las aguas
se movilizan entonces gracias a pequenas des- Las practicas de cultivo deI chocho siguen
viaciones faciles de realizar y los terrunos ser- siendo bastante someras y ello conviene a los
pentean al igual que el rio, sin poder extender- «campesinos absentistas» de esta regi6n de
se mas alla de los limites que impone la morfo- fuerte emigraci6n temporal hacia Quito 0 a los
•
logia y el relieve deI fondo de valle. Las zonas de Calder6n, al noreste de la capital: labranza
de Totoras-Rosario, en la provincia de Tungu- preparatoria, siembra con algo de abono, a
rahua, y de Guano en la provincia de Chimbo- menudo muy poco -de medio a un quintal por
• razo, y min muchas otras, ilustran este vinculo hectarea-, sin deshierba ni tratamiento algu-
entre alfalfa y riego que dibuja estrechas cintas no, y se espera la cosecha la 6 11 meses mas
de verdura de un lado y otro de un cauce de tarde.
agua.
La cebada en la unidad C24, siempre es sem-
Por la diversificaci6n y la intensificaci6n que brada sola, en parcelas distintas. El aumento de
implica en el sistema maizicola, el tipo C23 su proporci6n en el espacio y la presencia de
constituye una transici6n hacia los tipos C26 y algunos campos de arveja marcan la transici6n
T23. hacia el tipo C25.
250 Paisajes Agrarios deI Ecuador
La cabuya (Fourcroya andin a) era igual- bamba en el triangulo entre San Andrés-San
mente integrada al sistema maizicola en la Juan-Calpi, a 3200 m.s.n.m., y la otra entre
parte central de la provincia de Chimborazo. En Guasuntos-Alausi-Tixan, entre 2400 y 3000-
San Gerardo, Guano, La Providencia, Gua- 3200 m.s.n.m. Corresponde a dos variantes
nando e Ilapo, se ven todavia algunas parcelas. diferentes con suelos, tamanos de las propieda-
Los rendimientos son muy inferiores a los que des y paisajes distintos. Las precipitaciones son
se obtienen en las plantaciones de los valles de inferiores a 500 mm al ano.
Apuela 0 de Lita. Las hojas rara vez alcanzan
un metro de largo, mientras que miden de 1,5 a La gama de cultivos de C25 es amplia. Pue-
2,3 m en la vertiente noroccidental mucho mas de ser similar a la de C24 distinguiéndose sim-
humeda, 10 que garantiza una productividad y plemente por una mayor frecuencia de parcelas
una calidad (longitud) de fibra muy superiores. de cebada que de maiz, coma es el casa al nor-
Las plantaciones de la provincia de Chimborazo oeste de Riobamba, 0 diferenciarse claramente,
son entonces abandonadas progresivamente. coma en el cant6n Alausi. En este sistema de
cultivo, la lenteja y la arveja entran en rotaci6n
Después deI despulpado, las fibras son lava-
das a mana y blanqueadas al sol. Luego son
con el trigo 0 la cebada. La arveja es cosechada
en seco, a la inversa de 10 que sucede general-
.
trenzadas en sogas 0 tejidas para elaborar cos- mente cuando es sembrada justo después deI
tales 0 el soporte de las alfombras de Guano. Ya maiz (ver la unidad C22).
no se hacen costales y casi se ha abandonado la
sogueria, reemplazada por cuerdas de nylon. La En la lIanura arenosa de Calpi, donde pre-
mana de obra masculina parte a la ciudad en domina el minifundio, los campos son abiertos,
busca de un empleo temporal, mientras que coma en el piso frio. Los paisajes son marc ados
muchas mujeres se ocupan en la confecci6n de por el predominio deI cultivo de la cebada y por
alfombras de pura lana, anudadas a mano. la abundancia de capulies, unico arbol de la
zona. Los limites de las parcelas son materia-
La introducci6n de especies que soportan las lizados, de trecho en trecho, por matas de penco
condiciones de sequia no es la unica inonvaci6n ode sigse.
en estos sistemas maizicolas. Se realiza también
en la elecci6n de las variedades cultivadas. Los En Tixan, Alausi y Guasuntos, cuando las
campesinos de la zona de Chingaso-Santa Rosa parcelas estan cercadas, se trata de muros edi-
de Cullog, entre Guano e Ilapo, en la provincia ficados con piedras 0 bloques de cangahua ex-
de Chimborazo, siembran un maiz cuyas plantas traidos en ellugar. En la vertiente, el desnivel
se mantienen enanas, sin superar los 70-80 cm entre las parcelas es subrayado por resaltos,
de altura. No por ello dejan de tener una bella algunos de los cuales parecen haber sido cons-
mazorca. Este maiz crece en pesimas condicio- truidos efectivamente para cortar la vertiente
nes agron6micas, 500 a 600 mm de precipitacio- y limitar el escurrimiento (terrazas). Los euca-
nes promedio anuales, vientos violentos y suelos liptos que segmentan los campos andinos deI
arenosos afectados por una fuerte erosi6n e61ica. callejon ya no se ven sino cerca de los pocos
Tales resultados positivos son el fruto de una pueblos donde también se encuentran algunas
variedad local particularmente adaptada a estas parcelas de maiz, coma huertos caseros, hacien-
condiciones extremas. do mas notable el vinculo habitat-maiz-euca-
lipto ya senalado. La zona era una zona de alta
Se sabe que los campesinos recogen de su producci6n de trigo en hacienda 0 propiedades
cosecha las semillas que utilizaran en la medianas. Este tiende a ser reemplazado por .
siguiente estaci6n. Las mejores mazorcas de la cebada.
maiz, desgranadas cuidadosamente, se conser-
van hasta la siembra. Ano tras ano y por un Entre Tixan y Guasuntos, las densidades de
largo periodo, esta selecci6n empirica habria poblaci6n son muy bajas y pueden probable-
dese.mbocado en la creaci6n de una variedad mente ser relacionadas con la antigua estruc-
excepcionalmente resistente a la sequia. tura agraria muy marcada por extensas hacien-
das con pocos reductos indigenas de proximidad.
2.3.c Unidad C25-Predominio de trigo y
cebada De una manera general, ya sea a causa de la
sequia y de la falta de riego, 0 de las pendientes
En zona también seca, la unidad C25 cubre o incluso de las bajas densidades de poblaci6n,
una superficie de 42000 ha. Se encuentra sola- estas zonas son bastante marginales en la agri-
mente en dos zonas, la una al noroeste de Rio- cultura andina.
Los paisajes y los sistemas de produccion II Paisajes antropizados de los pisos de altura 251
Las explotaciones con hortalizas diversifica- Los cultivos de hortalizas a campo abierto
das se encuentran, a altitudes inferiores a los corresponden a pequeiias e incluso muy peque-
3000 m, en la cuenca de Ambato, en San Luis y iias explotaciones. Las técnicas de cultivo son
Chambo, cerca de Riobamba, en Machachi, cerca las de huerto, con una gran cantidad de mana
de Quito, y en San Vicente, cerca de Cuenca. de obra por unidad de superficie y un aporte
Garantizan el abastecimiento de verduras a las importante de insumos, ya sean productos
0-
grandes ciudades andinas asi coma a los merca- fitosanitarios, semillas seleccionadas 0 incluso
dos de la Costa. Su localizacion se debe mas a estiércol. Este ultimo es sobre todo cornprado a
la proximidad de un gran mercado urbano y a los ganaderos ovinos deI paramo. Existe enton-
las vias de comunicacion que a una calidad ces una importante transferencia de fertilidad
peculiar deI medio. La zona cercana a Riobam- de arriba hacia abajo, de una zona de vegeta-
ba se dinamizo porque era el primer mercado ci6n natural hacia una zona de cultivo inten-
andino en la via ferrea que unia Sierra y Costa sivo. Los ingresos que da el tipo C26 son impor-
con flete cotidiano. Ambato esta en un cruce de tantes, sin comparaci6n con los de los cultivos
carreteras que unen la Sierra con la Costa y la mayores de cebada en altura 0 de maiz en el
Amazonia. piso templado.
Las explotaciones que cultivan cebolla 0 ajo El crecimiento deI consumo, vinculado al
estan mas dispersas y no pudieron ser repre- aumento de la poblacion y a la modificacion de
sentadas a nivel de este trabajo, con excepcion las costumbres alimentarias (verduras) princi-
de las zonas contiguas a Tisaleo, en el casa deI palmente en las ciudades, acarrea, coma en el
ajo, y de Mocha en el de la cebolla. Estas dos casa de la ganaderia lechera, un incremento de
zonas se situan en su mayor extension a una la producci6n. El mercado de los cultivos de
altura por encima de los 3 000 m. Alcanzan los hortalizas esta en expansi6n y las areas de pro-
3400 e incluso 3600 m.s.n.m. en Yanaurcu, por ducci6n especializadas se extienden, sobre todo
encima de Mocha. por dilatacion de las ya existentes: imitacion de
proximidad, experiencia y conocimientos téc-
La concentracion deI ajo en una sola zona se nicos en la zona; redes de comercializacion ya
explica por el monopolio de hecho que los indi- establecidas actuan en el mismo sentido.
genas Chibuleos han mantenido a la vez sobre
el cultivo y el comercio. Aparte de este terruiio Existe también una gran difusion de la pro-
donde la superficie sembrada en ajo es muy duccion de hortalizas en el campo. Los proyec-
importante, el cultivo es casi siempre difuso. Se tos de desarrollo publicos 0 privados incluyen
integra a los sistemas domésticos de altura en muy a menudo el huerto, ya sea para mejorar
los que aporta un ingreso monetario que, por la alimentacion de la familia 0 para que los
minimo que sea, es importante para el precario pequeiios campesinos desarrollen la utilizacion
equilibrio deI sistema. intensiva deI suelo y la agricultura comercial.
El resultado de la primera politica se refleja en
Si bien la zona de Mocha sigue siendo, a la aparicion de pequeiios huertos familiares en
justo tftulo, la mas renombrada por la calidad y el paisaje. Campaiias populares de sensibiliza-
la superficie de la produccion de cebolla, la difu- cion existen igualmente en las periferias urba-
sion deI cultivo en otras regiones es hoy en dia nas sobre este mismo tema. Los resultados de
muy efectiva. Como el ajo, desempeiia el papel la segunda tendencia, la deI desarrollo comer-
de cultivo de renta. El término puede parecer cial, son menos visibles: productores aislados
exagerado si se consideran los minimos ingresos no se vinculan facilmente con el mercado que
monetarios que permiten las reducidas areas requiere cierto volumen y los circuitos de comer-
que le estan reservadas en numerosas explota- cializacion rapida, necesarios para estos pro-
ciones de altura. Sin embargo, se trata bien de ductos altamente perecederos, no son genera-
252 Paisajes Agrarios deI Ecuador
lizados. A pesar de esas limitaciones, la unidad zona al sur deI Chimborazo- son plantaciones
C26 es un tipo de uso deI suelo en marcada pro- de hacienda. Necesitan una mana de obra nu-
gresi6n. merosa para la siembra y la cosecha. Después
deI secamiento, las flores son entregadas a una
2.4 Cultivos perennes-Unidades Tll a T23 planta extractora. Es una economia «industria1>,
en la cual todo esta centrado en el mercado y
Se reunen bajo este titulo las plantaciones de orientado hacia la exportaci6n.
arboles 0 silvicultura y la arboricultura frutal. El
piretro no es citado sino a titulo de informaci6n. La producci6n fue muy importante en los
En el mismo parrafo se menciona el guanto. aiios 1970, en grandes haciendas de Chimbo-
razo, Cotopaxi y Pichincha. El piretro era bus-
2.4.a Unidades Tll y T21-Silvicultura cado por ser muy eficiente coma insecticida y
rapidamente biodegradable al sol. Tiene pues
Estos dos tipos representan los bosques de una utilizaci6n autorizada en cultivos alimen-
pino (Tll) y de eucalipto (T21), con un limite tarios a pocos dias de la cosecha. La sustituci6n
altitudinal promedio a 3200-3300 m entre e11os. deI insecticida natural por su sintesis quimica ..
Las especies ex6ticas constitutivas fueron in- arruin6 el cultivo. Algunos pequeiios producto-
troducidas hace mas de un siglo en el casa de res continuaron en el marco de la explotaci6n
Eucalytus globulus y mas de medio siglo en el familiar hasta inicios de los aiios 1980, en el
de Pinus radiata. La forestaci6n es sin embargo Norte de la Sierra y en Tungurahua. El cultivo
reciente. Empieza con fuerza a partir deI dece- disminuy6 hasta no existir en nuestros dias.
nio de 1970. Los vistosos bosques de pino en el
paramo no deben hacer olvidar la plantaci6n de El guanto (Brugmansia sanguinea), fuente
parcelas y de bosques de eucaliptos en el ca11e- de atropina, cultivado en Carchi, corri6 una
j6n interandino. Marcan ahora el paisaje an- suerte idéntica. Un cultivo de rasgos similares,
dino y desde hace algunos aiios se desarolla la el de la sacha naranjilla (Datura sp), se insta16
exportaci6n de madera hacia paises deI sureste mas tarde (ver parte B IV6).
asiatico.
2.4.c Unidad T23-Arboricultura
Las plantaciones forestales estan general-
mente localizadas en grandes propiedades. No Los vergeles andinos de especies de clima
son raros sin embargo los casos de grupos cam- templado constituyen las grandes zonas fru-
pesinos que han plantado algunos con participa- teras de los Andes: en Ambato-Quero (Tungu-
ci6n laboral comunitaria; igualmente propieta- rahua) con la claudia, la manzana, la pera y el
rios que, por una parte, pueden reforestar pen- durazno, en Matus-Penipe (Chimborazo) con la
dientes y parcelas poco productivas 0, por otra manzana, y mas modestamente en Gualaceo
parte, buscan asi incrementar sus ingresos a (Azuay) con el durazno. Esta unidad totaliza
largo plazo. una superficie de 21400 ha.
Muy Fria
F"o nff
D22
m
D2"f-1------l':"O':'.....- - <
m
Templado
Calida
Gradie ,1 de ~
Cultivos daminantes
r.::.:.:l
~1
Dapa ~~~,,~ Cebada Tamana de la propiedad
Evoluci6n por
Plantaciones y . . . . . . . . P pequeno
[]]]] Pastas - - : - ' densificaci6n
cultivas perennes m mediano
D Maiz Hortalizas
de la poblaci6n d
9 gran e
Laextensi:5n vertical decaœ capn sab p-eienœ represenar el rargo I9rmK;oOQJpadoy no es rela::onroo oonlas~erli:iede cadassterm
254 Paisajes Agrarios deI Ecuador
viene coma factor discriminante de clasifica- ci6 la extensi6n de las plantaciones forestales
ci6n (C23, C24). El tamafio de las propiedades (T11, T21).
es reducido.
• Los pastos, exclusivos 0 asociados a cultivos, 3.2.c Reducci6n de la cobertura vegetal natural
estan localizados en zonas humedas, frias (P22)
o templadas (parte de P23) y secas con abun- La reforestaci6n no compensa, sin embargo,
dante riego (P21). En este casa el tipo de tenen- ni en superficie ni en calidad, la destrucci6n de
cia de la tierra es s610 de hacienda, mientras los bosques naturales, cuya desaparici6n en el
que el tamafio preponderante de la propiedad callej6n interandino (D2l) y a 10 largo de los
es mediano 0 grande en P22 y pequefio en P23. ejes viales de las vertientes externas (D22 y
En las vertientes externas, los pastizales re- D23), es cada dia mas importante. Alli, se nota
presentan superficies importantes en fincas la incidencia fuerte de la entrega de tierras en "
medianas (D22 y D23). Colonizaci6n (ver parte A VI).
• Los sistemas orientados hacia la arboricultura
(T23) se encuentran en clima seco, relativa- 3.2.d Densificaci6n de la poblaci6n rural (ver
mente calido y bajo riego. Las propiedades per- parte A V)
tenecen en su mayoria a «minifundistas empre- "
sariales», término que se puede aplicar tam- La evoluci6n de los sistemas pioneros puede
bien a muchas explotaciones horticolas (C26) sel' rapida. Con el aumento deI desmonte, D21
de pequefia superfice. evoluciona hacia P23 y C21, en el interior deI
• Los sistemas que integran el trigo (P22, C21 y callej6n interandino, mientras D22 se convierte
C25) parecen tener una connotaci6n étnica: la
en D23, en las vertientes externas. Con el tiem-
poblaci6n campesina que 10 siembra es esen-
po y la disminuci6n de los rendimientos de la
cialmente mestiza. Los indigenas siembran
papa, C11 evoluciona hacia C12.
preferentemente el maiz. La distribuci6n de
las zonas C21 es reveladora a este respecta;
La evoluci6n de los sistemas caracterizados
son todas zonas de poblaci6n mestiza. El can-
pOl' el cultivo deI trigo es muy evidente en la
t6n Saraguro es, desde este punto de vista,
ejemplar. La comunidad indigena de ese nom- disminuci6n de las superficies dedicadas a él.
bre se ubica en la cabecera cantonal y en Es asi como, con el tiempo, los trigales de las
algunos pueblos y caserios pr6ximos. Ahi se provincias de Bolivar y de Carchi han experi-
practica casi un monocultivo de maiz (C22). mentado una considerable regresi6n; C21 evo-
POl' el contrario, los pueblos mestizos deI luciona hacia C22, en especial en las zonas de
Oeste se encuentran en terrenos frumentarios densidad poblacional mas fuerte, como, pOl'
(C21). ejemplo, en la alta cuenca deI Rio Chota. Otro
casa es el de la unidad P23 que evoluciona
3.2 Factores de evoluci6n hacia C22 con aumento poblacional.
Participaci6n
en el mercado Cultivos
comerciales Ganaderia lechera
1 T23, C11, C26, P21, P22
importante D21
mediana
o Policultura + pocos
cultivos comerciales
C21,C23,C25,D22,D23
Grado de
capitalizaci6n
alto
mediano
ci6n deI tamaiio de la explota-
ci6n y de su participaci6n en el
mercado.
(la superficie de cada disco es pro-
porcional a la superficie ocupada
pOl' el conjunto de los sistemas que
reducida Policultura
o bajo
representa)
La unidad P21 identifica e~ sistema de las cuaria total, no funcionan sino con un capital
grandes explotaciones lecheras que dependen importante.
totalmente deI mercado por la comercializaci6n
de sus productos. Se le aiiadi6 la unidad P22 Sin embargo, es evidente que actualmente
conformada de medianas y grandes propieda- son las explotaciones de flores y los nuevos ver-
des igualmente orientadas hacia el mercado geles frutales los que, en superficies extrema-
por la venta de leche y papa. Estas explotacio- damente reducidas y con un muy elevado ratio
nes que cubren cerca de 400 000 ha, es decir capital/ha, constituyen por excelencia el sis-
mas de la quinta parte de la superficie agrope- tema mas orientado hacia el mercado.
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 257
INTRODUCCI6N
•
El piso bajo y câlido representa aproximadamente las tres cuartas partes de la superficie deI
pais y se reparte esencialmente entre la llanura amaz6nica (alrededor deI 52 % de la zona calida) y
la regi6n costera (44 %), Yel archipiélago de Galapagos.
El cuadro Al presenta las principales caracteristicas climaticas imperantes en este piso. Las
condiciones de humedad clasificadas en 6 zonas para la comprensi6n de su diversidad, pueden ser
agrupadas en 3 clases a fin de dar cuenta de la distribuci6n de los cultivos, de las unidades carto-
graficas y de los sistemas de cultivos. Estas tres grandes zonas de humedad corresponden a dura-
ciones de la estaci6n seca de menos de 4-5 meses (zona A, sin limitaciones hidricas importantes),
de 4-5 a 8-9 meses (zona B, con limitaciones hidricas medianas) y de mas de 8-9 meses (zona C, con
fuertes limitaciones hidricas). La figura C9 representa la 10calizaci6n de estas zonas en el piso
calido y el cuadro C3 resume las caracteristicas que permiten identificarlas facilmente en el
campo.
Las unidades cartograficas presentes en el piso calido, clasificadas seglin esas grandes zonas de
humedad, constan en el cuadro C4. En este, ciertas unidades cartograficas no aparecen en la zona
de humedad donde el analisis de los mapas parece localizarlas. Esto se debe esencialmente a la
escala de la figura C9: por ejemplo, relieves costeros incluidos en la zona C, que reciben importan-
tes precipitaciones ocultas, y que pertenecen en realidad a la zona B, no pueden individualizarse.
Las unidades cartograficas de los sistemas de cultivo, después de ser descritas seglin el orden
en el que estan clasificadas en la leyenda deI mapa a escala 1:1000000, son presentadas, al final
de este capitulo, en tres graficos (figuras C12, C13 y C14) en los cuales se destacan las principales
tendencias de su evoluci6n.
Porcentaje de la
superficie dei 70 22,5 7,5
pisocalido
1~ .. Principales ciudadees
L~,-" Carreteras principales
o 100 200 km
80 0 W
1 Grupos indfgenasl
...
"
~_ Carreteras principales
a =-__=_-==:::1
",1
100
__==--==- 200 km
...........
Numero de
Simbolo Grupo étnico
personas
~0 Shuar 40 000
260 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Sin
limitaciones
hfdricas
(zona A)
Limitaciones
hfdricas
medianas
(zona B)
•
Limitaciones
hfdricas
fuertes
(zona C)
>
Humedad creciente
El primer ocupante, después de haber desmon- si6n de los pastizales en esta primera unidad.
tado el terreno y construido una vivienda, Localizada al oeste de Manabi, al norte de la
vende la propiedad para lograr una ganancia y ciudad de Bahia de Caraquez, abarca en efecto
vuelve a instalarse en un frente pionero mas las primeras estribaciones muy escarpadas de
j6ven. la cordillera costera en las que apenas es muy
dificil extender los pastos. La unidad D37 se
La unidad D33 corresponde a una coloniza- situa de un lado y otro de Pedro Carbo y sobre
ci6n mas antigua, a un desmonte mas avanza- todo en la franja litoral norte, de ambos lados
do y, por 10 tanto, a un porcentaje mayor de cul- de la desembocadura deI rio Esmeraldas; los
tivos pero, sobre todo, de pastos. En la Amazo- relieves son menos acentuados y el clima es
nia, al igual que en el norte de la provincia de mas humedo, 10 que ha permitido una mayor
Esmeraldas, bosques y zonas plantadas de extensi6n de los pastizales.
arboles parecen disponerse un poco al azar. En
la provinda de Manabi, la repartici6n de los La unidades D35 y D36 se distinguen de las
componentes de las unidades en funci6n de la unidades anteriores por la presencia relativa-
morfologia, tal coma se observ6 en el casa de mente mas importante de cultivos. La unidad
D32, es aun mas marcada. Las zonas menos D35 se localiza en la peninsula de Santa Elena,
accidentadas corresponden a los pastizales, a al norte de la carretera Guayaquil-G6mez Ren-
menudo con propiedades de mayor tamano. Los d6n, al noroeste de Jipijapa, asi coma en la
relieves de pendientes fuertes siempre estan meseta localizada al este deI cabo San Lorenzo.
aun forestales con algo de arboricultura y pocos Las altitudes relativamente importantes de
cultivos anuales alrededor de un habitat muy esos lugares determinan una humedad atmos-
disperso. férica suficiente para permitir la presencia de
pastizales artificiales. Los cultivos estân repre-
2.2 La zona intermedia B sentados por el maiz, el mani, la higuerilla y,
muy localmente, el algod6n.
Comprende sobre todo las unidades de D34
hasta D38 presentes s610 en la regi6n costera. La unidad D36 se localiza entre Pueblo Vie-
En conjunto ocupa algo menos de 460000 ha jo, Balzar, Pedro Carbo y Daule, en el extremo
con, en ese orden y para cada una de las uni- suroeste de las bajas mesetas llamadas de Bal-
dades cartograficas, superficies aproximadas zar. Corresponde a relieves muy poco marca-
de 51000, 82000, 250000, 65000 y 12000 ha. dos, pero con suelos arcillosos y compactos, que
Las condiciones climaticas constituyen factores contrastan con la riqueza de las otras tierras de
limitantes para los pastizales que se amarillean la llanura deI Guayas. La vegetaci6n natural es
en la estaci6n seca. Salvo ciertas diferencias flo- sobre todo arbustiva. Los pastizales, parcial-
risticas, el aspecta de estas unidades es compa- mente abandonados, estân degradados y no son
rable al de las unidades D de la zona A. Sin em- productivos sino durante una reducida parte
bargo, si bien en la zona sin limitaciones hidri- deI ano. Antes deI rebrote, el ganado debe aco-
cas importantes representan un estado de tran- modarse con forraje seco en pie. Los cultivos
sici6n en la evoluci6n de la utilizaci6n de los son el maiz, sembrado bastante tarde a fin de
suelos, aqui unicamente las propiedades de las protegerlo de una estaci6n lluviosa muy fuerte
partes mas humedas pueden evolucionar hacia que, al embeber los suelos arcillosos, haria
sistemas mas intensivos y mas productivos. En podrir las plântulas, algo de algod6n y de arroz
las partes mas secas y en el casa de los propie- en los bajios. Las explotaciones son de tamano
tarios menos favorecidos -tierras pedregosas 0 muy variado, en general mediano, pero muy
escarpadas, falta de capital 0 de crédito-, esta recientemente se han creado numerosas gran-
evoluci6n puede no producirse y la vegetaci6n des plantaciones de mango al sur de Balzar.
natural, a menudo utilizada para el pastoreo Los bancos limosos de los rios, numerosos en
suelto, sigue siendo importante en superficie. esta unidad cartografica, pero de anchura muy
•
reducida coma para destacarse a la escala deI
Las unidades D34 y D37 son, desde el punta mapa, son el campo de los tradicionales verge-
de vista de la intensidad deI desmonte, los les tropicales con predominio deI mango (uni-
equivalentes respectivos de D32 y D33 de la dad T52).
zona anterior. A la vegetaci6n natural, mejor
representada en D34 que en D37, se asocian Finalmente, la uunidad D38 se caracteriza
esencialmente pastizales y pocos cultivos tales por la presencia de algo de arboricultura con
coma el maiz de subsistencia y algo de mani. Es predominio de cafetales que prosperan gracias
ante todo el relieve el que ha limitado la exten- a condiciones hidricas localemente favorables.
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y caIido 263
estas dos especies se pueden agregar el pambil Otro cambio tiende a mejorar la alimenta-
(1riartea deltoides) cuyo tronco se utiliza ya sea ci6n deI ganado criado para la carne. Esos
coma pilar de vivienda 0 como tutor en las ganaderos aportan, ademas de las sales, un
bananeras 0 incluso para laminas de parquet complemento en forma de melaza, urea 0 estiér-
de un negro brillante. Entre los frutales, se col de aves, bananas no coniercializables (pro-
pueden mencionar el pechiche (Vitex gigantea), venientes a veces de la misma explotaci6n). Se
la uva (Pourouma cecropiaefolia) y el mani de realizan igualmente la vacunaci6n y un segui-
arbol (Caryodendron orinocense). miento de la reproducci6n, pero sin alcanzar el
nivel técnico de la ganaderia lechera.
La zona A es la predilecta de las grandes
explotaciones que superan ampliamente el 3.2 Zona B
centenar de hectareas. La ganaderia es alli la
actividad mas facil de arrancar y de mantener. Las unidades de pastizales ocupan una su-
Esas propiedades disponen frecuentemente de perficie total de 374 000 ha, principalmente en
tierras forestales. La tala deI bosque y la im- las unidades P33 y P34, 149 000 Y 128 000 ha
plantaci6n deI pastizal son a menudo confiadas respectivamente, y partes mas reducidas para
a mana de obra exterior que, a cambio de su las unidades P35 y P36, 97000 Y 58 000 ha res-
trabajo, puede sembrar para su uso maiz 0, pectivamente.
mas rara vez, arroz de secano. El cultivo es
implantado concomitantemente con la cober- Estos pastos comprenden también arboles
tura forrajera. aislados, esencialmente para dar sombra al ga-
nado. Los principales arboles son Erythrina y
El conjunto de la explotaci6n esta cercado y los Samanea en las partes mas humedas, y Cei-
subdividido en parcelas de gran tamafio. La ba hacia la franja mas seca. Los arboles de
ganaderia se destina sobre todo a la carne y la sombra estan totalmente ausentes en la unidad
carga se mantiene alrededor de un animal por de los pastizales inundables, P36.
hectarea. Los hatos son seguidos por un mime-
ro muy reducido de vaqueros a caballo cuyo Las unidades P33 y P34, localizadas esen-
principal trabajo es cambiar a las bestias de cialmente en Manabi y en la franja litoral deI
parcela. La ventaja de esta practica es poder norte de Esmeraldas, se distinguen por la
sustraer a la Reforma Agraria grandes super- presencia de algunos islotes forestales en P34.
ficies de tierra y no utilizar sino poca mana de La unidad P33 corresponde a las grandes pro-
obra, ademas no especializada. En esos casos, piedades de ganaderia extensiva que padecen
el propietario esta usualmente ausente de sus de la falta de forraje al final de la estaci6n seca.
tierras.
La unidad P35 esta situada entre Balzar y
Este sistema presenta variantes. La mas Ventanas, en una zona climatica de transici6n
interesante es la transici6n hacia la ganaderia entre las zonas secas deI Sur, con pocos pastiza-
lechera. Esta mutaci6n, aun poco expandida, no les bien manejados por falta de humedad, y la
es posible sino por la existencia de un sistema regi6n mas humeda deI Norte donde los cafeta-
de comercializaci6n. Implica la intensificaci6n les hacen su aparici6n. Predominan los pastiza-
de las practicas ganaderas: cambio de raz a les pero asociados a cultivos, sobre todo de maiz
bovina (cruces Holstein 0 Brown Swiss), vacu- y, en, menor grado, de algod6n y de arroz plu-
naci6n deI ganado, mejoramiento de la alimen- vial 0 de arroz de decrecida en las hondonadas.
tad6n (introducci6n de leguminosas en los
pastizales, aporte de complementos), divisi6n La unidad P36 (58000 ha) corresponde ,a un
de los pastos en parcelas mas pequefias para tipo particular cuya presencia no esta ligada a
explotar mejor la producci6n forrajera, aumen- las condiciones pluviométricas. Situada en la
to deI numero de empleados, vigilancia acre- zona seca, en partes muy ligeramente c6ncavas
centada de la reproducci6n (inseminaci6n arti- y con drenaje deficiente, sefiala praderas inun-
ficial) y seguimiento de la producci6n de cada dadas durante la esta.ci6n lluviosa. Todas estan
animal. Como este tipo de ganaderia demanda ubicadas en tierras aluviales, en la cuenca de
mas cuidados, no es emprendido sino por pro- subsidencia de las provincias de Guayas y de El
pietarios-ganaderos profesionales y no puede Oro, en el valle deI Chone, asi como en la lla-
ser confiado a un empleado. En contraparte, la nura situado al sur de BorbOn. La inundaci6n no
carga podria llegar a hasta 3 cabeûls por impide la ganaderia pues los bovinos chapotean
hectarea y los ingresos por unidad de superficie en el agua, 0 nadan, y se alimentan de un pasto
aumentar espectacularmente. acuatico.
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 265
Yuca, banano,
C31 Mafz X Unidad muy heterogénea
soya, pina
C32 Mafz Cana de azucar Unidad en disminuci6n
C33 Mafz X
C34 Mafz Higuerilla, manf
C35 Mafz Higuerilla, manf X
C36 Mafz Sarandaja
Unidad en disminuci6n 0
C37 AIgod6n Mafz, higuerilla X
con nuevas localizaciones
C38 AIgod6n Mafz, higuerilla X X idem
C41 Arroz
C42 Arroz X
C43 Arroz Mafz X
C44 Arroz Mafz X
C45 Arroz X Pastos inundables
Pastos localmente
C46 Hortalizas Mel6n, sandfa X
predominantes
C47 Hortalizas Manf
C48 Mafz, hortalizas Frutales
Cuadro C5: Las unidades de cultivos anuales deI piso bajo y calido
266 Paisajes Agrarios deI Ecuador
arroz, asi coma los cultivos mezclados de las humedas, los pastizales y la yuca son las pro-
parcelas deI fondo de los valles. ducciones mas frecuentemente asociadas;
-la pifia es cultivada tradicionalmente en los
Los cultivos anuales constituyen el elemento suelos arenosos a areno-lîmosos de la region
predominante de los paisajes pero se pueden de Milagro-Naranjito (zona B); este cultivo,
encontrar min algunas reliquias de vegetacion asi coma el de yuca, tienden a desarrollarse en
natural (C33, C35 y C38) y mas a menudo pas- la zona humeda de Santo Domingo-Quevedo.
tizales (C31, C37, C38, C42, C43, C44, C45 y
C46). Estas particularidades se presentan en el En la unidad C31 se encuentran tanto pe-
cuadro CS. La presencia de pastos en estas quefias coma grandes explotaciones. Las mas
unidades puede provenir tanto de la inclusion pequefias (de 4 a 10 ha) resultan de la division •
en ellas, por razones de representacion carto- de propiedades de 50 ha inicialmente. Alli la
grafica, de explotaciones ganaderas, como de la mana de obra es esencialmente familiar y la
presencia de pastizales en explotaciones dedi- tecnicidad limitada -salvo en el casa deI cul-
cadas principalmente a los cultivos de ciclo tivo de pifia-. Las grandes explotaciones,
corto. En efeeto, en numerosas pequefias explo- mecanizadas y muy tecnificadas, son producto
taciones subsisten parcelas reducidas de prade- de la reciente reconversion de las haciendas
ra para la cria de un bajo numero de vacas le- ganaderas 0 de arboricultura. En ambos casos,
cheras 0 de algunos animales de carga 0 de la produccion esta destinada esencialmente al
silla. Sucede incluso que esos pastos se encuen- mercado local y nacional y accesoriamente a la
tran temporalmente sin ganado, debido a una exportacion -yuca y pifia-.
descapitalizacion, habiéndose vendido la ultima
mula 0 siendo el deseo deI campesino el de colo- Desde 1986, las zonas de cultivos anuales se
car alli, alglin dia, una vaca. han extendido, en particular en la region de El
Empalme-Quevedo, con el reemplazo de los pas-
4.1 Unidades donde predomina el maiz tizales y de la arboricultura por el cultivo deI
(Unidades C31 a C36) maiz, de modo que la unidad C31, que cubre
aproximadamente 103000 ha en el mapa, seria
Cubren zonas situadas tanto en la region actualmente mucho mas amplia.
costera (C31, C34 y C35) coma en las tierras
calidas de la provincia de Loja, donde el des- La unidad C32 se encuentra a 10 largo de la
censo de la cordillera confunde Sierra y Costa vertiente occidental de los Andes, en la provin-
(C32, C33 y C36). En la region costera, las uni- cia de Loja (Amaluza-Alamor), en la parte baja
dades cartograficas caracterizadas por el maiz de las provincias de Chimborazo y de Azuay,
coma cultivo predominante incluyen siempre asi coma en Santa Isabel-Giron donde debe
una proporcion no despreciable de pastizales y compararse al tipo T33. Se distingue de C31
otros cultivos. La superficie total de estas por la inclusion de parcelas de cafia de azucar a
unidades es de alrededor de 473000 ha. veces bajo riego y cultivada para la produccion
atesanal de alcohol 0 de azucar no refinada
4.1.a Zona A (panela). Las explotaciones son de tamafio me-
diano 0 pequefio. Puede tratarse, coma en Ama-
A esta zona pertenecen unicamente las uni- luza, de parcelas obtenidas en el marco de la
dades C31 (103 000 ha) y C32 (72000 ha) que Reforma Agraria, producto de la division-venta
se encuentran también en la vecina zona B. Se de grandes dominios. En Santa Isabel, se trata
dara aqui su descripcion completa incluso de de explotaciones familiares antiguas. Otrora, el
los paartes incluidas la zona c1imatiica B, mas dominio de la cafia de azucar era mas extenso
seca. en los Andes. Hoy en dia tiende a disminuir
considerablemente (ver unidad T32).
La unidad C31 corresponde a un conjunto de
asociaciones de cultivos cuya unica caraeteris- 4.1.b Zona intermedia B
tica comun es el predominio deI maiz. Los cul-
tivos asociados son muy variables: Elle abarca las demas unidades cartograficas
-en la region de Quevedo, con suelos profundos donde predomina el cultivo de maiz. Tiene dos
y ricos, y sin importantes limitaciones hidri- centros de concentraci6n, uno en el seetor seco
cas, se practican dos cosechas anuales, casi de las provincias de Manabi y Guayas, el otro en
siempre una de maiz seguida de otra de arroz la provincia de Loja donde desbordan hasta la
o de soya; zona C con importantes limitaciones hidricas.
-mas cerca de los relieves, en zonas aun mas Sin riego, solo es posible una cosecha anual.
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 267
Las unidades C34 y C35 (29000 y 116000 ha) 4.2 Unidades caracterizadas por la presencia
estan situadas en la parte centro-occidental de de campos de algod6n (Unidades C37 y C38)
la regi6n costera, principalmente en los alrede-
dores de Tosagua, al oeste de Jipijapa, asi coma Aunque el algod6n es cultivado de manera
en el sur de Manglaralto y a 10 largo de la esporadica en casi toda la zona tropical seca, en
carretera Guayaquil-G6mez Rend6n. Alli los el mapa, se privilegi6 la zona de Pedro Carbo
suelos son ricos pero presentan texturas un que era aun, en los afios 1980, la gran regi6n
tanto pesadas. algodonera deI pais. En el mapa anexo a escala
1:1000000, la superficie total de la zona algo-
Aunque el maiz es el cultivo mas difundido, donera es de 38000 ha, 12000 ha en el casa de
esta de todas formas asociado en el paisaje al C37 y de 26000 ha en el de C38.
"
algod6n, al ricino y al mani. Las unidades C34
y C35 se diferenciaban inicialmente por una La unidad C37 corresponde esencialmente a
ocupaci6n agricola completa en el casa de C34, una franja situada al noroeste de Pedro Carbo,
mientras que C35, localizada en zonas mas de un lado y otro de la carretera Pedro Carbo-
secas 0 de relieve mas accidentado, y por 10 Jipijapa, donde el algod6n era practicamente el
tanto menos colonizadas, presentaba algunos unico cultivo de las propiedades familiares que
restos de bosque. Éstos han desaparecido casi son de tamafio pequefio a mediano. La unidad
por completo actualmente. C38 correspondia a una zona en via de desmon-
te, en la que el algod6n era el cultivo pionero.
Las explotaciones son de tamafio muy va- Asi, se encontraban islotes forestales residuales
riable, en general pequefias a medianas, pu- allado de campos de algod6n y algunos de maiz.
diendo algunas alcanzar un centenar de hecta-
reas. Las explotaciones grandes son numerosas Las caracteristicas de estas zonas corres-
en la regi6n de Tosagua, donde las casas de los pondian bastante bien a este cultivo. Los suelos
obreros agricolas constituyen el habitat disper- son profundos, ligeros y ricos pero, debido a la
so caracteristico de la zona. Los obreros alqui- abundancia de pendientes fuertes, la erosi6n es
lan, a un precio promedio comprendido entre importante al inicio de la estaci6n lluviosa,
30000 Y 40000 sucres/cuadra/afio*, algunas hec- cuando el suelo, recientemente labrado, esta
tareas de tierra (2 a 6) para sus propios culti- atin al desnudo.
vos de subsistencia.
Actualmente, el cultivo de algod6n se des-
En la provincia de Loja, las unidades carto- plaza hacia la regi6n de Bahia-Tosagua, y los
graficas C33 y C36 son muy similares. Alli se agricultores de Pedro Carbo tienden a reempla-
cultiva el maiz ya sea solo (C36 con 71 000 ha) 0 zarlo por el de maiz y de mani, asociados a la
asociado, en la misma parcela 0 en parcelas dis- ganaderia en las colinas, y al arroz en los bajios.
tintas, con sarandaja (C33 con 82000 ha). La
producci6n esta destinada esencialmente al mer- La cosecha deI algod6n es manual y las par-
cado de la agroindustria de alimentos para el celas son pequefias a fin de poder ser trabaja-
ganado 0 para aves de corral. En la regi6n de das con una limitada mana de obra, sobre todo
Catacocha, la producci6n de maiz es transforma- familiar. Sin embargo, este cultivo requiere
da en parte en el lugar para la cria de cerdos numerosos tratamientos fitosanitarios, consti-
destinados a la venta. tuyendo uno de los pocos casos de pequefias
explotaciones que emplean una cierta tecnici-
. Las parcelas son vastas, a menudo de una 0 dad y bastante insumos.
varias hectareas. La tierra puede pertenecer a
pequefias propiedades 0 a haciendas. En las 4.3 Unidades caracterizadas por cultivos de
haciendas, el cultivo es casi siempre practicado arroz (Unidades C41 a C45)
en aparceria, con prohibici6n para el aparcero
de realizar el segundo deshierbe deI maiz, a fin La mayor fracci6n de la producci6n de arroz
de que el hato, una vez efectuada la cosecha, deI Ecuador proviene de la llanura deI Guayas,
encuentre alli un forraje mas abundante (zona la cual esta sometida a frecuentes inundaciones
de Pindal). La siembra asociada de sarandaja en su parte mas baja. La superficie total es de
no tiene otro fin: algunas vainas pueden cose- aproximadamente 385000 ha.
charse en verde, coma se 10 puede hacer igual-
mente con las mazorcas de maiz, pero 10 esen- Los arrozales se encuentran en su totalidad
cial se destinara al forraje que se mantiene en en la zona climatica intermedia B y sufren de
pie para la alimentaci6n deI ganado. un exceso de agua en la estaci6n lluviosa en las
* Salvo indicaciones contrarias, los precios indicados se refieren a los afios 1991-1992
268 Paisajes Agrarios deI Ecuador
los supermercados «La Favorita", propietarios hortalizas (tomate, fréjol) asi como pies dis-
de esta explotaci6n. Sin embargo, los proble- persos de citricos y papayos. El riego no com-
mas fitosanitarios, abundantes en la zona prende obras importantes y el agua es simple-
htimeda, dieron cuenta de esa tentativa y hoy mente tomada aguas arriba mediante peque-
en dia esas tierras se utilizan para el engorde nos canales de tierra y a veces, cuando los
deI ganado. caudales son excesivamente bajos, acumulada
en pequenos estanques para permitir el riego
4.4.b Zonas B y C directo.
En estas zonas, la unidad C46 esta mejor Excepto los pastizales que pueden estar
representada. La pequena parte situada en el presentes en la unidad C46, los sistemas de
fondo deI valle septentrional deI Chota se cultivo practicados aqui se caracterizan por
distingue no s610 por su situaci6n sino también parcelas pequenas y un intenso trabajo de la
por su producci6n (tomate, fréjol, tomate de familia: ya sea que los cultivos exijan frecuen-
arbol y otras frutas). En las demas unidades, la tes controles y cuidados --cultivo de hortalizas
fisonomia es bastante heterogénea y los culti- de C46-, 0 las camas utilizadas en C47 deben
vos de renta variados. Las partes bajas de estos ser reconstruidas después de cada crecida 0 se
pequenos valles costeros estaban destinadas a deben mantener las miniredes de riego de
ser regadas gracias a embalses situados aguas C48.
arriba, pero la estructura predial de las tierras
regables, la irregular disponibilidad de agua
-condiciones climaticas, danos en los cana- 5 Plantaciones perennes (Unidades T31 a
les- hacen que coexistan sistemas tan diferen- T53)
tes como la ganaderia bovina en las mayores
propiedades (sin riego) y el cultivo de hortalizas Bajo este nombre se reunieron las unidades
bajo riego en las explotaciones mas pequenas. cartograficas caracterizadas por plantas que no
En la zona C, la extensi6n de los pastos es limi- deben volverse a sembrar después de cada cose-
tada. Entre las hortalizas se cultivan sobre todo cha. Éstas pueden ser herbaceas (cana de azti-
tomates, pimientos y vainitas (Vigna), pero se car, banano) 0 lenosas de tamano variado -ba-
practican también, en estaci6n htimeda, cultivos jas en el casa deI café arabica 0 deI té, media-
de cielo corto sin riego coma el me16n y la san- nas en el casa deI cacao 0 los citricos, altas
dia 0 ineluso el maiz. tratandose deI caucho--. En el mapa, las uni-
dades marcadas por cultivos perennes totalizan
Aparte de la ganaderia que tiene las mismas una superficie de mas de 19000 km 2 y repre-
caracteristicas que en otras partes, las otras sentan el 24,3 % de las tierras utilizadas deI
explotaciones utilizan la mana de obra familiar piso calido.
en muy pequenas parcelas pero con un empleo
racional de insecticidas, nematicidas, fungici- Por su mejor presentaci6n, los numerosos
das y abonos. La producci6n es comercializada tipos de plantaciones y de asociaciones reco-
en su mayor parte. nocidos en los paisajes fueron ordenados, a
veces arbitrariarnente, en tres temas:
Los cultivos de la unidad C47 (15000 ha) for- .silvicultura: concieme las unidades de arboles
man un sistema totaImente original. Se encuen- plantados ya sea por su madera 0 por su latex;
tran s610 en la regi6n de Zapotillo, cerca de la .plantaciones: retine las unidades donde predo-
frontera peruana. Alli se cultiva ellecho de los minan los cultivos monoespecificos 0 maneja-
• rios temporales a fin de aprovechar la humedad dos con una cierta tecnicidad;
residual. La producci6n se destina ya sea a la • arboricultura: abarca las unidades donde los
venta (cebolla para el comercio fronterizo con el cultivos perennes estan mas 0 menos mez-
Pern), 0 al autoconsumo (arroz, mani y horta- clados y donde el· nivel de tecnicidad es muy
lizas como el tomate). bajo.
Los huertos de vega de la unidad C48 (su- Las plantas perennes marcan profundamen-
perficie 20 000 ha) no forman un sistema pro- te los paisajes pero no exeluyen la presencia de
piamente dicho sino que son complementarios pastizales 0 de cultivos anuales, como 10 mues-
de las actividades de cultivadores que pro- tra el cuadro C6. Las reliquias forestales que
ducen sobre todo maiz en las unidades C21, pueden atin estar presentes en las unidades C
C33 y C35. En diminutas parcelas, se siembra de cultivos anuales, ya no existen en el grupo T
algo de maiz y de cana de azticar, algunas de los cultivas perennes.
270 Paisajes Agrarios deI Ecuador
Cuadro C6: Las unidades de cultivos perennes deI pise bajo y câlido
5.2.b Plantaciones de banano (Unidades T35 a den las plantaciones asi coma las unidades de
T37) acondicionamiento de las frutas. A menudo
forman parte de conglomerados agrocomercia-
Corresponden a explotaciones especializa- les que tienen acceso directo a los mercados
das en el banano de exportaci6n. En el mapa, exteriores. Alrededor de estas grandes planta-
las unidades cubren 155000 ha. Son propieda- ciones gravitan pequenos productores familia-
des medianas a grandes, donde el grado de tec- res cuya cosecha es acondicionada y comerciali-
nicidad es proporcional al tamano de la explo- zada por los grandes vecinos. A causa de la
taci6n. Se escalonan desde la regi6n septentrio- deficiente venta adual deI banano, esas peque-
nal humeda (zona de humedad A) hasta la lla- nas explotaciones satélites deberan, a corto
nura de la provincia de El Oro, en suelos alu- plazo, orientarse hacia otra actividad de renta.
viales ricos y bajo un clima seco, donde el bana-
no necesita un complemento hidrico por riego. La instalaci6n de la plantaci6n, el desmonte
(antiguo cacaotal a menudo), el trazado de
Unicamente la unidad T35 (23000 ha) cor- redes -vial, de riego y de drenaje- y la nivela-
responde a zonas donde las bananeras ocupan ci6n de las parcelas se realizan mecanicamente.
la principal parte de la superficie y hasta la to- Luego de la plantaci6n, los trabajos son efectua-
talidad de la unidad cartografica. Se encuentra dos por un equipo reducido de asalariados per-
en pequenos bloques en la provincia de El Oro, manentes, en el casa de las tareas corrientes, y
en suelos aluviales, ricos y bajo un clima seco por grupos de trabajadores temporales contra-
en el cual el banano requiere un complemento tados para obras determinadas tales coma la
hidrico por riego. limpieza de las plantas, el esparcimiento de
abono 0 de pesticidas y la cosecha. A menudo, el
Las unidades T36 y T37 (51000 y 81000 ha funcionamiento de la unidad de acondiciona-
respectivamente) corresponden a una asocia- miento esta a cargo de mana de obra femenina.
ci6n de plantaciones de banano-cacao, en el pri-
mer caso, y de banano-pastos y cultivos anuales Al momento deI acondicionamiento de las
en el segundo. Estas asociaciones no consti- frutas, se hace una elecci6n muy severa: las
tuyen sistemas de producci6n particulares en manos que contienen un banano manchado 0 de
los que las bananeras estarian ligadas a otros tamano fuera de la norma son rechazadas.
cultivos de renta; resultan de imposiciones car- Estos desechos tienen dos destinos: el consumo
tograficas resultando de las sucesivas reduccio- humano nacional y sobre todo el complemento
nes de escala. Asi, T36 es una asociaci6n espa- alimentario para el ganado bovino. TaI comple-
cial de plantaciones de banano y de cacao. mento es particularmente codiciado en las
Cubre una importante superficie de las tierras zonas menos htimedas donde los pastizales son
aluviales al este de Machala. Durante el boom improductivos durante un largo periodo deI
bananero iniciado en 1988, el cacao fue reem- ano. Parte de esos bananos desechados es ven-
plazado en gran parte por el banano y esa dida a las explotaciones lecheras de la regi6n
unidad se asemeja notablemente a T35. serrana.
La unidad T37 esta localizada de un lado y 5.2.c Plantaciones de palma africana (Unidad
otro de la carretera Quevedo-Santo Domingo- T38)
Quinindé. Los suelos ya no son aluviales aun-
que siguen siendo ricos pues se han desarrolla- Es alrededor de los anos 1960 cuando se
do a partir de cenizas vo1canicas recientes. Bajo multiplicaron las plantaciones de palma amca-
el clima htimedo que caracteriza a esta zona, na a 10 largo de la carretera Santo Domingo-
los pastos artificiales son abundantes asi coma Quinindé. Si bien los suelos de esta regi6n, pro-
los cultivos de maiz, yuca, etc. En esta regi6n, fundos y relativamente ricos por ser producto
algunas otras plantaciones destinadas al bana- de cenizas volcanicas, son apropiados para la
no de exportaci6n, pero de extensi6n demasiado palma amcana, la nubosidad sumamente im-
reducida coma para poder ser representadas, portante afecta a los rendimientos. Sin embar-
fueron incluidas en las unidades de arboricul- go, el desarrollo de la red vial, asi coma el im-
tura mixta, T49, T50 0 T51. pulso de los gobiernos a la producci6n de olea-
ginosas han favorecido la extensi6n, en parti-
La producci6n de banano para la exporta- cular hacia el norte y el sur de Santo Domingo.
ci6n, que se desarroll6 después de la Primera Las plantaciones cubren actualmente cerca de
Guerra MUIidial, se realiza sobre todo en explo- 70000 ha en la regi6n costera (80000 ha seglin
taciones de tipo agroindustrial. Éstas compren- la planimetria de las unidades en el mapa a es-
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 273
cala 1:1000 000). En esta regi6n, las plantacio- estatus un tanto particular. Son propiedad de
nes de palma africana se han desarrollado a colonos independientes 0 de empleados de la
expensas de pastizales 0 de bananeras y, mas empresa vecina cuya planta de procesamiento
recientemente, de bosques naturales. es la unica salida para la producci6n local. En
las condiciones particulares de la regi6n ama-
A fines deI decenio de 1970, se iniciaron plan- z6nica (presi6n por la propiedad de las tierras,
taciones en la Amazonia, en respuesta al déficit parasitos y enfermedades provenientes de la
de la producci6n nacional de grasas. Si bien el selva), conviene a las grandes plantaciones
clima, mas soleado que el de Santo Domingo, es mantener un cord6n sanitario y «social» de este
mas favorable a la palma (ver figura A2), los tipo.
suelos son mas pobres. Dos grandes plantacio-
nes se han instalado en esa regi6n, una cerca de 5.2.d Plantaciones de abaca (Unidad T39)
Coca (Palmoriente, con 5500 ha), la otra en los
alrededores de Shushufindi (Palmeras deI Representando una decena de miles de hec-
Ecuador, con 5 000 ha). Estas dos plantaciones tareas en todo el Ecuador, estan localizadas en
se instalaron desmontando la selva y son mane- la zona humeda de la alta llanura deI Guayas,
jadas por sociedades an6nimas. Estân rodeadas donde se han implantado desde hace aproxima-
de productores satélites que totalizan 1500 ha. damente 50 aiios. Una sola unidad cartografi-
ca, de menos de 2 000 ha de superficie, es re-
Los modos de producci6n son variables de presentada en el mapa a escala 1/1000 000;
acuerdo al tamaiio de la explotaci6n. En las corresponde a una concentraci6n particular-
grandes plantaciones, la palma africana es el mente elevada de esas plantaciones, al suroeste
unico cultivo de la explotaci6n. Las mayores, de la carretera Santo Domingo-La Concordia.
coma las de la regi6n amaz6nica, disponen de Otras plantaciones, no representadas en el
su propia planta de extracci6n que permite mapa, estan dispersas en toda la zona humeda
procesar la producci6n alli mismo. Como en el abarcando el norte de la provincia de Los Rios
casa de las plantaciones de banano, la instala- asi coma la parte costera de Pichincha (en las
ci6n de la plantaci6n se realiza con poderosos unidades T49, T50 y T51).
medios mecanicos. Los demas trabajos son
manuales con un equipo permanente, ademas Las plantaciones, de algunas decenas de
de la mano de obra contratada a destajo para el hectareas hasta varias centenas, estân general-
deshierbe de los circulos de plantaci6n, la lim- mente incluidas en explotaciones de gran
pieza de los arboles, el esparcimiento de abono tamaiio donde los propietarios estân ausentes y
o la cosecha. En promedio, se necesita 0,4 hom- que son manejadas por mayordomos. Si bien
brelha. este cultivo puede parecer semejante al deI
banano, su rendimiento econ6mico es clara-
En las plantaciones mas pequeiias, la palma mente inferior y se le dedican menos esfuerzos
africana puede asociarse a otra actividad, de las en cuanto a tratamientos fitosanitarios, mana
cuales la mas frecuente es la ganaderia. La de obra y abono. Las fibras, limpiadas en la
familia constituye el nucleo laboral permanente plantaci6n, son clasificadas y comercializadas
y los trabajos mayores son realizados por mana por cooperativas exportadoras.
de obra temporal. Estas pequeiias plantaciones
no disponen de una planta de extracci6n y lle- 5.2.e Plantaciones de té (Unidad T40)
van sus racimos a la gran empresa vecina --casa
deI Oriente-, 0 a pequeiias plantas dispersas El té esta representado, en el piedemonte
en toda la zona de producci6n -caso de la amaz6nico, por dos unidades cartograficas que
• costa-. Éstas son independientes 0 manejadas totalizan cerca de 3 000 ha seglin la planime-
por cooperativas de plantadores. Para obtener tria. Como en el casa de los cultivos de fondo
un aceite de buena calidad, los racimos, una vez de valle, estas superficies son muy exageradas
cosechados, deben llegar el mismo dia a la plan- para su mapaficaci6n yen realidad se trata de
ta sin sufrir muchos golpes. La mayor parte de dos plantaciones de aproximadamente 500 ha
las plantas extractoras son antiguas, adquiridas cada una, una cerca de Puyo que corresponde
de segunda mana en otras partes deI mundo y a la plantaci6n Aproandes (antiguamente Té
estan, por 10 tanto, sujetas a frecuentes desper- Zulay), y la otra, en Palora, a la plantaci6n Té
fectos que penalizan al productor. Sangay. Las plantaciones siguiendo las curvas
de nivel de arbustos cuidadosamente tallados
Las plantaciones satélites de las grandes constituyen un paisaje «peinado» caracteris-
explotaciones de la regi6n amaz6nica tienen un tico.
274 Paisajes Agrarios deI Ecuador
En los aiios 1970, alrededor de 30 explota- difundidos y son los mas ricos en especies. Los
ciones, de 5 a 10 ha cada una, creadas con la tres arboles frutales secundarios que mas mar-
ayuda de créditos deI Banco de Fomento, gravi- can el paisaje son el papayo (Carica papaya), el
taban en un radio de aproximadamente 20 km frutipan (Artocarpus incisa) y el zapote (Mati-
alrededor de Té Zulay a la que proveian su pro- sia cordata). Del frutipan no se consumen sino
ducci6n (sistemas satélites). En 1992 habian las semmas tostadas; la pulpa no es utilizada.
desaparecido, debido a las dificultades financie- Excepcionalmente, se pueden encontrar peque-
ras de Té Zulay en 1981. Esta empresa no pudo fias plantaciones de papayos para la venta a
pagar el precio de la cosecha a los pequeiios mediana escala. Otras especies son de menor
campesinos, quienes se vieron obligados a importancia: el guayabo (Psidium guajava), el
reembolsar sus deudas al Banco de Fomento. mamey (Mammea americana), la guanabana
(Annona muricata) y la pomarrosa (Eugenia
Las dos explotaciones actuales pertenecen a jambos).
grupos financieros que las manejan a la mane-
ra de las grandes plantaciones de cafia de azu- En las regiones mas secas de la zona B, se
car 0 de banano. Parte importante de la mana encuentran otras especies de las cuales la mas
de obra es contratada especialmente para la comun es el tamarindo (Tamarindus indicus)
cosecha la cual es procesada en el lugar en deI que se consume en jugo la pulpa que rodea
pequefias plantas que entregan un producto a las semmas. Entre las especies secundarias,
listo para su uso en el mercado nacional 0 a la se pueden mencionar dos particularmente bien
exportaci6n. difundidas en la provincia de Manabi, grosella
(Phyllantus acidus) y carambola (Averrhoa ca-
5.3 Arboricultura (Unidades T41 a T53) rambola). En esta zona, el maraii6n (Anacar-
dium occidentale) es plantado por su pedunculo
Bajo el nombre de «arboricultura tropical» carnoso, mientras su semma no se consume. En
se reunen paisajes agricolas donde predomina las partes mas secas coma en la peninsula de
el cultivo mezc1ado de plantas perennes lefio- Santa Elena, el ciruelo (Spondias mombin) es
sas, arbustivas y sobre todo arborescentes. Las plantado en vergeles monoespecificos 0 en las
unidades cartogrâficas correspondientes tota- cercas.
lizan 1 457000 ha.
Se puede igualmente c1asificar en este rubro
Algunas son originales y se individualizan a las plantaciones de coco (Cocos nucifera) fre-
facilmente. Se trata de sistemas muy localizados cuentes en las playas aunque también, en una
debido a condiciones particulares: los vergeles de menor medida, tierras adentro. En la regi6n
la franja mas alta deI piso calido (T41) y los costera, el mango (Mangifera indica) ocupa un
caracterizados por el mango (T52) 0 por los citri- lugar aparte. Es comun en los vergeles de las
cos (T53). Las unidades restantes constituyen zonas seca y humeda y puede ser abundante
una mezc1a, en proporciones variables, de plan- localmente (llanura deI Rio Guayas, regi6n de
taciones de café, cacao, pIatano y banano (cuya Zaruma). Gran parte de la producci6n se vende
producci6n no esta destinada a la exportaci6n). al borde de la carretera donde los transportado-
A estos cultivos perennes predominantes pueden res cargan las cajas y este modo de comerciali-
agregarse otros cultivos de especulaci6n que zaci6n no podra sinD disminuir cuando empie-
complejizan el sistema, coma especies arbores- cen a producir las grandes plantaciones mono-
centes secundarias, cultivos alimentarios de especificas mencionadas en la unidad D36,
cielo corto y pastizales. La presencia y la propor- aunque se ha previsto exportar la mayoria de
ci6n de los diferentes componentes son determi- la producci6n.
nantes en la caracterizaci6n de las unidades.
5.3.a Vergeles de la franja alta (Unidad T4l)
Entre los cultivos arborescentes secundarios,
se encuentran en estas unidades numerosos Se encuentran en los bajos valles interan-
frutales a veces agrupados en un vergel mezela- dinos, tales coma los de Guayllabamba y Patate
do, situado cerca de la vivienda. La producci6n donde ocupan 14000 ha seglin el mapa. Tratan-
de esos arboles es destinada primeramente al dose de zonas con mas de 5 meses secos al ano,
autoconsumo y los eventuales excedentes se el riego es necesario para asegurar la pro-
ofrecen a la venta al borde de la carretera. ducci6n y estos cultivos pueden asimilarse a un
oasis (sobre todo en el casa de la regi6n de
Es en las partes mas humedas de la regi6n Guayllabamba). Como a menudo en los oasis,
baja (zona A), donde tales vergeles estan mas las parcelas comprenden varios estratos: el
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 275
estrato arb6reo esta constituido de ârboles fru- por la broca de los granos tiende a desapare-
tales (aguacate y citricos). Los aguacates culti- cer. En las zonas de colonizaci6n mas reciente,
vados en estas tierras corresponden a varieda- en las colinas de suelos pobres de la Amazo-
des tradicionales que dan frutos relativamente nia, en especial al sur de Coca, se mantiene
pequeiios con una pepa grande, pero con una pese a la broca, pero presenta notables defi-
carne sin fibra y un sabor muy fino; son muy ciencias.
codiciados pese a la presencia, en el mercado, • En las zonas relativamente secas de la lla-
de los aguacates grandes, cultivados en la lla- nura deI Guayas, al sur de Quevedo-El Em-
nura costera. Los citricos son esencialmente palme (zona B, de humedad intermedia), las
mandarinos que soportan el mo relativo mejor grandes zonas representadas por una asocia-
que los naranjos. El estrato bajo es herbaceo ci6n cafetal-pasto (T43) se han transformado
con cultivos de fréjol de mata, lechuga 0 alfalfa paulatinamente, en los ultimos aiios. El café
vendida en el mercado. Al crecer, las coronas de arabica, aunque bien adaptado a la zona, ha
los aguacates pueden formar una b6veda conti- cedido lugar poco a poco, al igual que otras
nua que, por su sombra, elimina los estratos formas de arboricultura, a cultivos anuales y
bajos. sobre todo a la producci6n de banano para la
exportaci6n.
La producci6n esta sobre todo a cargo de • La zona humeda de Manabi (zona de hume-
pequeiias explotaciones familiares, salvo en dad intermedia B), tradicionalmente dedicada
Patate donde, en las pocas fincas mas importan- al café, sigue siendo la gran zona productora
tes, ademas deI aguacate y deI mandarino, se de café deI Ecuador. Por si sola, esta provincia
han desarrollado mas recientemente plantacio- posee los dos tercios de la superficie cultivada
nes puras de una especie arbustiva, el tomate actualmente con café arabica. Los suelos son
de arbol (Cyphomandra betacea). En todos los ricos y la garua en los relieves asegura un
casos, este tipo de explotaci6n requiere numero- abastecimiento regular de agua manteniendo
sos cuidados ademas de riego, controles fitosa- los suelos humedos durante la estaci6n seca.
nitarios y fertilizaci6n. Los principales cultivos asociados al café son
el banano, el platano y el maiz que es el culti-
5.3.b Arboricultura con predominio de cafetales vo de cielo corto mas frecuente. Los pastizales
(Unidades T42 y T43) representan un porcentaje bajo de la super-
ficie en las explotaciones de pequeiio tamaiio,
Las unidades ocupan una superfice total de pero pueden cubrir la mitad e ineluso los dos
520000 ha,alrededor de 130000 ha para la uni- tercios de las explotaciones medianas. Son
dad T42 y 390 000 ha para T43. Se distinguen predominantes (70 a 90 %) en las pocas explo-
por la abundancia de los pastizales en T43. En taciones de gran tamaiio (ver figura B35).
ambos casos, los bananos y platanos para la ali- • En las provincias de Loja y El Oro, el cafetal
mentaci6n familiar son la segunda planta en arabica es cultivado en las vertientes orienta-
importancia. das hacia el mar, desde los primeros relieves
hasta los 1600 m.s.n.m. Alli los suelos son
La repartici6n de las zonas cafeteras se medianamente ricos, presentando algunos pH
explica por condiciones elimaticas e hist6ricas: bajos y toxicidad aluminica. Al igual que en
• En la zona de humedad A de la Amazonia y de Manabi, gran parte de la alimentaci6n hidrica
la regi6n costera (al norte de Santo Domingo y esta asegurada por las precipitaciones ocultas
al pie de la Sierra), se cultiva ante todo el café de la garua. La producci6n de esta regi6n,
robusta, sin sombra. La fuerte humedad aunque goza de una reputaci6n de calidad,
impide el cultivo de la variedad arabica y deI sigue siendo marginal, por su volumen, y pro-
cacao, aunque se encuentran algunos pies ais- viene sobre todo de explotaciones familiares
lados. En esas zonas de colonizaci6n reciente a con pequeiias parcelas, en ocasiones bajo la
muy reciente, las propiedades son general- forma de huertos.
mente de 50 ha. El café ocupa apenas una • En la provincia insular de Galapagos, las
decena de hectareas de la explotaci6n, reser- pocas plantaciones de cafetales arabica son
vândose el resto a los pastos y a algunos culti- reliquias de un pasado mas agricola de esta
vos de subsistencia tales coma el maiz, la regi6n, cuando el café representaba, conjunta-
yuca, el banano y el platano -unidad T43-. mente con el ganado, la principal exportaci6n
En la regi6n costera, al igual que en la Ama- hacia el continente.
zonia, en las zonas de colonizaci6n mas anti-
guas y con suelos relativamente ricos, entre El café, tanto robusta coma arabica, se culti-
Nueva Loja y Shushufindi, el café, atacado va en pequeiias parcelas (l a 10 ha en explota-
276 Paisajes Agrarios deI Ecuador
ciones de 10 a 50 ha). La tecnicidad aplicada es Ineluso en las propiedades que tienen su-
limitada e ineluso inexistente, pese a los ata- perficies inferiores a las 50 ha, el cacao ocupa
ques de plagas y enfermedades que soporta. superficies mayores (deI orden de algunas
Como el bajo rendimiento econ6mico, debido al decenas de hectareas) que las plantaciones de
descenso de los precios a nivel mundial, no per- café en las explotaciones correspondientes.
mite contemplar el desarrollo 0 el manterumien-
to de este cultivo, las mutaciones observadas en En la parte meridional de la unidad T47
la llanura deI Guayas deberian extenderse. subsisten algunas grandes explotaciones cacao-
teras, de varios centenares de hectâreas. Algu-
El reemplazo, a 10 largo deI gradiente decre- nas de estas propiedades utilizan modos de
ciente de humedad, deI café robusta por el café producci6n antiguos coma una abundante mana
arabica, determina un cambio drastico en el de obra poco 0 nada calificada. Otras han opta- •
modo de utilizaci6n de la mana de obra. La do por la modernizaci6n y una mayor tecnici-
floraci6n y fructificaci6n deI café robusta estan dad, instalan una red de drenaje y hasta de
distribuidas a todo 10 largo deI ano. La cosecha riego, plantan variedades seleccionadas y esta-
es igualmente fraccionada y coma cada opera- blecen una eficaz comercializaci6n de sus pro-
ci6n atafie s610 cantidades reducidas, los miem- ductos, apreciados en el exterior.
bros de la familia bastan para realizar el traba-
jo. El café arabica, en cambio, tiene periodos En esta misma unidad T47, las pequenas
cortos de floraci6n y de fructificaci6n; la cose- propiedades que corresponden a la gran mayo-
cha se realiza de una a tres veces solamente. ria de los productores de cacao, pueden llegar a
Es necesario entonces contratar mana de obra formar un paisaje similar al de las grandes
exterior. plantaciones, es decir a dar una impresi6n de
un vasto monocultivo. Es el caso, por ejemplo,
5.3.c Arboricultura donde predomina el cacao en las primeras colinas de piedemonte, por
(Unidades T47 y T48) debajo de los 800 m.s.n.m., donde el cacao,
unico cultivo de numerosas pequenas explota-
Estas unidades estan situadas en la zona ciones, parece constituir una sola y extensa
humeda de la llanura deI Guayas. Se encuen- plantaci6n. En este caso, todos los trabajos
tran frecuentemente en la zona de humedad (cuidados a la plantaci6n, cosecha, procesa-
intermedia B y en ocasiones en la zona A, hacia miento en ellugar) son realizados por mana de
su limite con la primera. Su superficie es de obra familiar. La producci6n aHi es baja y la
137 000 ha aproximadamente. calidad deI producto mediocre a causa, tanto de
las condiciones elimaticas marginales para el
La unidad T47 (96000 ha), en la que el cacao cultivo, coma deI inadecuado procesamiento de
es ampliamente predominante, esta situada en la cosecha.
los conos de deyecci6n deI borde oriental de la
llanura costera, desde La Mana hasta Areni- 5.3.d Arboricultura de café y cacao (Unidades
Has. Al norte de una horizontal que pasa por T44 a T46)
Ventanas, los conos, cubiertos por cenizas vo-
lcanicas, ofrecen suelos ricos, mientras que los Esta localizada, al igual que la arboricultura
localizados al sur· de ese limite son mas pobres; con cacao predominante, en suelos ricos, en las
arcillosos a areno-pedregosos, presentan, sin zonas humedas de la Hanura deI Guayas, aun-
embargo, una permeabilidad conveniente para que también en las mesetas de Manabi, en par-
el cacao. Los cultivos asociados son de cielo ticular las situadas al este de Canoas y al sur
corto con algunas parceles de café y banano. de Flavio Alfaro, asi coma entre Quinindé y
Esmeraldas. La mayor parte se situa en la zona
La unidad T48 (41000 ha), situada principal- de humedad intermedia B y una parte mas
mente al oeste de Quevedo, en suelos particu- reducida en la zona humeda A. Las propieda-
larmente ricos, derivados de cenizas volcânicas, des son de tamafio pequeno a mediano. El con- .,
corresponde a una asociaci6n en el paisaje de junto de estas unidades ocupa una superficie de
grandes parcelas de cacao y de pasHzales. A 497000 ha.
mas de pastizales, se pueden encontrar parce-
las de cultivos de ciClo corto, de café y banano. En la unidad T44 (153000 ha), la proporci6n
Sin embargo, la importancia deI cacao esta dis- de café y cacao es mas 0 menos la misma. Sin
minuyendo, siendo reemplazado progresiva- embargo, a nivel de las explotaciones, se
mente por pastos 0 cultivos de cielo corto coma observa una tendencia a la especializaci6n en
arroz y/o maiz. una u otra de estas producciones de renta, a la
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 277
que se asocian cultivos alimenticios tales coma de Santo Domingo y al este de Pasaje. El
el platano. Estas zonas de café y cacao pueden banano y el café estân alli asociados a pastiza-
estar asociadas, en el paisaje, a pastizales (T45 les y al cultivo de yuca.
con 282 000 ha) y a zonas donde los cultivos - En la regi6n de Quevedo -parcialmente en la
anuales son notables (T46 con 62 000 ha), en zona intermedia-, la unidad T51 (superficie
especial en la regi6n oriental de Quevedo. Alli, 32000 ha), caracterizada inicialmente por una
la arboricultura ha disminuido considerable- asociaci6n banano-café-cacao-pastos y cultivos
mente, en beneficio de los cultivos primeramen- anuales, ha perdido esa fisonomia, debido a la
te de cielo corto (arroz, soya y maiz), y luego, extensi6n, en esa zona, de las superficies de
mas recientemente, de banano. banano para la exportaci6n.
" 5.3.e Arboricultura donde predomina el banano 5.3.f Arboricultura caracterizada por el mango
(Unidades T49 a T51) (Unidad T52)
El banano para el consumo local es una pro- Representada en el mapa solamente por tres
ducci6n permanente de la arboricultura en la unidades que totalizan 29000 ha -valor exage-
regi6n calida. En efecto, el banano esta siempre rado por la cartografia- en la baja Ilanura deI
asociado, en las pequeiias y medianas explota- Guayas, este tipo de arboricultura es caracte-
ciones, al café y al cacao, al igual que a cultivos ristico de la mayoria de bancos con suelos limo-
de cielo corto coma el maiz y la yuca. El banano sos y ricos de las regiones secas 0 humedas,
dulce, y aun mas el platano, son parte impor- donde la proximidad de la napa freatica garan-
tante de la dieta cotidiana de la poblaci6n rural tiza una adecuada alimentaci6n hidrica de las
y urbana de la zona calida. En los paisajes, no plantas. La arboricultura aparece coma un
es fâcil distinguir el banano dulce deI platano y verdadero enredo en el que el mango cumple la
a continuaci6n el término banano se aplicara a funci6n de planta de sombra para el cacao, el
ambos variedades. banano y el café. Es en este tipo de arboricul-
tura don de estan mejor representados los
Se trata, casi siempre, de explotaciones fa- arboles frutales secundarios, (citricos, frutipân,
miliares, de tamaiio pequeiio a mediano; resul- zapote, etc.). Algunos cultivos alimentarios
tan de la evoluci6n de antiguos frentes pione- coma la yuca y el maiz garantizan la alimenta-
ros. Segllil sus tipos de producci6n y su locali- ci6n familiar deI agricultor que posee s610 algu-
zaci6n, la cosecha se orientarâ hacia el autocon- nas hectareas de tierra. La riqueza especifica y
sumo 0 hacia el abastecimiento de los grandes la producci6n de estos sistemas de producci6n
mercados locales. Las unidades cartograficas se deben tanto a las cualidades de los suelos
de arboricultura donde predomina el banano aluviales coma a la proximidad de la napa frea-
totalizan 249000 ha. tica pero, en contraparte, se corre el riesgo de
destrucci6n de las plantaciones al producirse
En la zona A el banano predomina a menu- crecidas excepcionales (1982-1983, por ejemplo).
do sobre los demas cultivos perennes. En la
zona B, de humedad intermedia, existe una Practicado tradicionalmente en este con-
yuxtaposici6n de parcelas de arboricultura de texto, se debe anotar sin embargo que el cultivo
cacao y café asi coma de parcelas de banano de mango toma una forma completamente dis-
para la exportaci6n que la escala deI mapa no tinta en las plantaciones recientes de grandes
permite separar. Asi: explotaciones en la Ilanura deI Guayas (ver
-La unidad T49 (63000 ha) se situa en la zona unidad D36).
A, al oeste deI eje Santo Domingo-Quevedo.
Cacao y café robusta estaban asociados al cul- 5.3.g Arboricultura caracterizada por los
tivo deI banano. Gran parte de las superficies citricos (Unidad T53)
correspondientes se han convertido a la fecha
• en plantaciones de banano para la exporta- Se encuentran en las partes bajas de anti-
ci6n. Una reducida superficie, en una zona guos ejes de comunicaci6n entre la regi6n coste-
sumamente humeda, al sur de San Francisco ra y las cuencas interandinas. Las unidades car-
de Onzole (Esmeraldas), sobre los aluviones togrâficas correspondientes totalizan 11 000 ha.
deI rio Cayapas, sigue siendo caracteristica de
esta asociaci6n en la que el banano y el café Durante la época colonial, se habia estable-
robusta son los principales elementos. cido este cultivo en la zona calida pero 10 mas
- La unidad T50 (154 000 ha) abarca zonas cerca posible de su mercado andino, en la sali-
igualmente muy humedas en los alrededores da de los principales ejes de circulaci6n entre la
278 Paisajes Agrarios deI Ecuador
A mas de los criterios principales ya mencio- Bajo este termino se hace referencia a sis-
nados -zona de humedad, tamano de la pro- temas cuyo modo de produccion depende estre-
piedad, riego, cultivo predimonante-, algunos chamente deI entorno de la explotacion. Las
criterios secundarios permitieron afinar la figuras C12 a C14 presentan dos modalidades
elasificacion. de tales sistemas: los sistemas satélites y los
sistemas locales. Se trata siempre de explota-
6.1a Tamaiio de la propiedad ciones pequenas.
Ciertos proprietarios de extensas tierras Los sistemas satélites son aquellos cuya
pueden satisfacerse con bajos rendimientos por actividad agricola esta ligada a la de de las
hectarea coma en el casa de la ganaderia exten- grandes explotaciones vecinas. El cultivo prin-
siva 0 deI cultivo deI abaca. También son pro- cipal, siempre un cultivo de renta, es el mismo
piedades que tienen todavia superficies nota- en ambos tipos de propiedad, pero el pequeno
bles con bosques naturales. productor depende deI mas grande para la
valoracion de su produccion, sea por el uso de
Por otra parte, los duenos de grandes pro- infraestructura (planta extractora en el casa de
piedades son a veces abiertos a cambios tecno- palma africana 0 de cana de azucar), 0 por el
16gicos, capaces de captar creditos y atentos a acceso al mercado (banano).
la evolucion de los mercados. Desde cacaoteros Los sistemas locales existen unicamente en
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y câlido 279
sencillos con poca tecnicidad, insumos reduci- sentan el nivel de mayor evoluci6n y rigidez. El
dos, escasas necesidades de mana de obra y una grado de tecnicidad es alto, las inversiones de
reducida participaci6n en el mercado. La gana- infraestructura son importantes y, dentro de la
deria extensiva tradicional tiene todavia mu- mano de obra, se constituye un mieleo de perso-
chas caracteristicas de un sistema sencillo, pero nas capacitadas y especializadas. Por 10 tanto,
requiere un acceso mas importante al mercado. los cambios de cultivo son mas dificiles que en
los otros casos y s610 se conocen las idas y
Los sistemas basados en cultivos de cielo vueltas entre el cacao y el banano.
corto representan un nivel intermedio de evolu-
ci6n. Son sistemas todavia flexibles ya que, de Los sistemas locales se caracterizan por su
un afio al otro, existe la posibilidad de cambiar reducida flexibilidad para cualquier cambio ya
de cultivo sin la necesidad de arrancar cultivos que los factores que determinaron su existencia
perennes en plena producci6n. El paso a la ga- son los mismos que impiden su transformaci6n.
naderia es también posible sin perdidas Por su parte, los sistemas satélites son estricta-
mayores. mente ligados a la evoluci6n deI uso deI suelo
de los grandes productores vecinos. Los peque-
Las propiedades con cultivos perennes in- fios productores practican los mismos cultivos
dustriales y la ganaderia lechera requieren un que los grandes pero son mas expuestos a las
cambio radical deI modo de producci6n. Repre- fluctuaciones deI mercado: en el casa deI té, la
S
i
n
r
i
e
9
o
c
o
n
r
.
i
e
9 Ganaderfas
o lechems
1
1 Sistemas locales
Grandes explotaciones 1 PequelÏas exploitaciones
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Paisajes antropizados deI piso bajo y calido 281
Vegetaci6n natural
Sin riego
.
Con riego
nes agicolas con la piiia, la yuca y el platano. zaciones espontaneas donde s610 subsisten
Las nuevas plantaciones de mango son también pequeiios jardines caseros.
parte de este esfuerzo. El intento -fracasado-
de multiplicaci6n de la cultura de la maracuya 6.2.d Zonas secas y riego
en la zona de Quevedo particip6 deI mismo
deseo de lanzar un producto nuevo al mercado En el Ecuador, se ven pocas alternativas
exterior. para el uso agricola de las zonas secas: se siem-
bran unas variedades de maiz de ciclo muy
6.2.c Cambios locales de densidad poblacional corto y el ricino -silvestre 0 sembrado-puede
proporcionar alglin ïngreso econ6mico. Ensayos
La tala de los bosques para la instalaci6n de de cultivos semi-industriales de ricino y de
colonos en la Amazonia y el piedemonte occiden- jojoba (Simmondsia chinensis) fueron abando-
tal de los Andes es el ejemplo mayor deI cambio nados sobre todo debido a la importante varia-
inducido por este factor. En la zona de coloniza- bilidad interanual de las precipitaciones. Sin
ci6n amaz6nica, las partes mas antiguas y mejor embargo, la bibliografia no carece de listas de
conectados a la red vial tienen una mayor den- plantas para alimentos, aceites, resinas, tani-
sidad poblacional y usos de las tierras mas in- nos, gomas, caucho, fibras, productos medici-
tensivos. nales que podrian ser probados.
La Reforma Agraria tuvo impactos menores También los perimetros regados son poco
en el piso bajo que en las tierras altas. Sin em- extensos: los embalses pequeiios -peninsula
bargo, las haciendas exentivas transformadas de Santa Elena- son rapidamente llenados por
por parcelaci6n dieron lugar, por una parte, a los aluviones- y las obras mayores -Poza
propiedades de tamaiio intermedio explotadas Honda- no llegan a cumplir con las metas fija-
con mejores rendimientos, incorporando una das. El gran proyecto de trasvase de las aguas
tecnologia mas avanzada y, por otra parte, pro- deI Daule hacia las tierras fértiles pero aridas
piedades pequeiias orientadas hacia el autocon- de la peninsula de Santa Elena permite espe-
sumo y una mezcla de cultivos de renta (arbori- rar, a corto plazo, un radical cambio deI paisaje
cultura con cultivos anuales -unidades T37, agricola en esta regi6n. Reducidas zonas rega-
T46, T48 y T51-, 0 con pastos). das muestran que propiedades pequeiias con-
tando unicamente con mana de obra familiar
Cerca de las grandes ciudades de la regi6n pero con un buen nivel tecnologico pueden
costera, el espacio periurbano pierde a menudo sacar un provecho importante de este aporte.
su vocaci6n agricola y se transforma en urbani-
Los paisajes y los sistemas de producci6n III Conclusi6n general 283
Partimos de la observaci6n atenta de los paisajes, los que hemos cartografiado minuciosamente,
en varias escalas, avanzando met6dicamente hacia la generalizaci6n (dell/200 000 -a veces deI
1150 000- hasta el 111 000 000) para cumplir con los requisitos deI MAG y con los términos de los
acuerdos suscritos entre el MAG y el ûRSTûM (hoy el IRD). El mapa de los paisajes agrarios deI
Ecuador es la sintesis de estos trabajos sobre el uso deI suelo y los paisajes vegetales.
Si bien los paisajes son la expresi6n deI equilibrio local de las fuerzas naturales, sociales y
econ6micas que se ejercen en un lugar, no son sino su apariencia visible. Por 10 tanto, nos pareci6
necesario enfrentar un nuevo reto. Hemos emprendido este libro para explicitar 10 que reflejan
pero no dicen los paisajes y explicar por qué varian de un lugar a otro.
A 10 largo deI estudio hemos tenido que abordar multiples campos, algunos de ellos alejados de
nuestras disciplinas iniciales. Lo hemos hecho debido a la coherencia que ésto le da a nuestra
tematica general de la estructuraci6n deI espacio rural mediante numerosos sistemas de pro-
ducci6n agricola.
La larga y desigual evoluci6n deI espacio agricola deI pais es otra fuente de diversidad cuya
huella se puede observar aun en nuestros mas. Las variaciones locales de la densidad poblacional
se traducen en la yuxtaposici6n de zonas "vacias", a menudo pobladas de arboles y de zonas inten-
samente cultivadas. La oposici6n entre los sistemas basados en las grandes propiedades (hacien-
das) y los que se reducen a escasas superficies (minifundios) refleja la heterogeneidad social y
econ6mica de las estructuras de tenencia de la tierra; la voluntad politica de facilitar el acceso a la
propiedad al mayor numero de agricultores ha hecho posible la emergencia de unidades de produc-
ci6n de tamaiio mediano -resultado de la reducci6n deI tamaiio de l~s haciendas y de la coloniza-
ci6n de las tierras bajas-, sin detener el aumento deI numero de las pequeiias propiedades. Final-
mente, es muy notable el hecho de que la evoluci6n de las técnicas de producci6n, desde la agri-
cultura itinerante hasta los grandes cultivos mecanizados, haya dejado muestras de cada etapa en
los sistemas de uso de las tierras deI pais.
La gran variedad de plantas que pueden cultivarse en Ecuador es otro poderoso factor de diver-
sificaci6n de la agricultura y una de las manifestaciones mas claras de un profundo mestizaje cul-
tural. La presencia en el mismo pais de los clasicos cultivos tropicales y de otros propios de la zona
templada se debe tanto a las posibilidades climaticas coma a la larga colonizaci6n espaiiola. Hubo
cruce de los patrimonios genéticos a través de adopciones reciprocas. En las tierras altas, los dos
cultivos predominantes son el de la papa en primer lugar, de origen andino, y el segundo, una gra-
minea introducida, la cebada. En ambos casos se encuentran cultivares locales que resultan de la
conservaci6n de antiguas cepas 0 bien de la adopci6n de nuevas variedades que responden a las
condiciones culturales y a la demanda de las poblaciones. En estas mismas zonas subsisten algu-
nos cultivos de plantas andinas endémicas. En la Amazonia, algunos grupos aun practican la agri-
cultura tradicional de roza y quema.
284 Paisajes Agrarios deI Ecuador
La causa de este bloqueo, si es que existe, no debe buscarse en una hipotética cuestion de men-
talidad de los campesinos sino, mas bien, en las condiciones estructurales de la produccion, parti-
cularmente en el tamaiio de las propiedades y la disponibilidad de capital. En efecto, hemos mos-
trado que aun los pequeiios productores andinos dan pruebas de dinamismo cuando cuentan con
los recursos necesarios: extension de las propiedades a raiz de la liberacion de las tierras por la
reforma agraria; progresion de la produccion lechera a fin de aprovechar el alza de los precios, a
veces en perjuicio de su propia alimentacion; aumento de la proporci6n de la cosecha de choclo con
la adopcion de nuevas variedades de maiz; introduccion de nuevos cultivos coma la cebolla, en los
sistemas de altitud y utilizacion de sus escasos recursos financieros para el cultivo de la papa,
cuando esperan vender parte de la produccion. En la mayoria de los casos se trata de una agricul-
tura de subsistencia.
En varias oportunidades hemos seiialado en el texto este aspecta fundamental de las evolu-
ciones recientes de la agricultura ecuatoriana, ligado al incremento de la poblacion. Este factor
permanecera vigente mucho tiempo mas, pero rapidamente se cruzara con otro nuevo, el que a su
vez influira cada vez mas en las dinamicas agrarias: la limitacion deI espacio. La tierra, coma
factor de produccion, sera un bien escaso.
Rasta ahora, parte de los grandes ciclos agricolas se fundaron en la integracion de nuevas
superficies, frentes pioneros de altura 0 desmonte de los bosques de las tierras bajas, desde una
perspectiva a menudo proxima al extractivismo 0 a la agricultura minera, tan poco preocupada por
la conservacion deI medio ambiente coma de su sustentabilidad. Esta expansi6n colonizadora no
puede extenderse indefinidamente; el espacio tiene sus limites, que han sido alcanzados en
Los paisajes y los ... III Conclusion general 285
muchas zonas y pronto 10 seran en otras. La intensificacion, que dispone de buenas margenes de
incremento, caracterizara sin duda las nuevas etapas de la agricultura nacional.
El porvenir de la agricultura ecuatoriana nos parece multiple, tan diverso coma sus actuales
sistemas de produccion. Se enfatizan a menudo los logros deI sector exportador _1 mundial en
0
les- pero el papel social de la agricultura de subsistencia sigue siendo inmenso y todavia con
amplias potencialidades. Al par deI crecimiento de las exportaciones, el reto deI aumento de la
productividad deI sector campesino parece coma una nueva frontera agricola poco explorada.
Anexos; fuentes 1
ANEXOS
Fuentes 1
Entrevistas II
Estadisticas II
Bibliografia II
Referencias generales II
Referencias especificas III
Parte A III
Parte B VI
Parte C XI
Tasa de cambio US $ - Sucre XIII
Indice de cuadros XIV
Indice de figuras XVI
Indice de autores XIX
FUENTES
Las fuentes mencionadas en los textos fueron clasificadas de acuerdo a su tipo: entrevistas,
estadisticas y referencias publicadas. Éstas ultimas se distribuyen en referencias generales, es
decir las utilizadas en varias partes de la obra, y las especificas, las mismas que se dan de acuerdo
a las grandes divisiones deI texto.
INIAP - Estaciones experimentales Santa Catalina, Santo Domingo, Pichilingue, Portoviejo, Boli-
che, Napo
Ingenio San Carlos, plantaci6n y procesamiento de caiia de azucar
ITI'O - International Timber Trade Organization (Ing Ermel Cabrera)
MADEXPO - Exposici6n de industriales de la madera 1993
PROEXANT - Promoci6n de Exportaciones No Tradicionales
MAG - Programa Nacional deI Algod6n, Portoviejo, Guayaquil
MAG - Programa Nacional deI Banano, Guayaquil
MAG - Programa Nacional deI Cacao, Guayaquil
MAG - Programa Nacional de Cereales, Santa Catalina
MAG - Programa Nacional deI Café, Portoviejo
MAG - Programa Nacional deI Maiz y de la Soya, Guayaquil ....
MAG - Programa Nacional de la Papa, Santa Catalina
MAG - PRSA, Proyecto para la Reorientaci6n deI Sector Agropecuario
PREDESUR - Programa de Desarrollo deI Sur
SENECA - Semillas Nacionales CA
TÉ SANGAY - plantaci6n y procesamiento de té
...y varios organismos y empresas olvidados en esta lista
...y numerosos agricultores de todo el pais entrevistados durante mas de 10 aiios de trabajo de
campo
BIBLIOGRAFfA
Referencias generales
Arbelaez E. P., 1978: Plantas utiles de Colombia. 4° édition Litografia Arco, Bogota, 832 p.
Bernard A., 1982: Diagnostico socioecon6mico deI agro ecuatoriano, volumen de sintesis. PRONA-
REG-ORSTOM, no publicado.
Collin Delavaud A., 1979: Les régions côtières de l'Equateur. Guayaquil et le dynamisme pionnier.
Institut des Hautes Etudes d~ l'Amérique latine, Paris, 578 p.
Frere M., Rijks J.Q. y Rea J., 1975: Estudio agrometeoro16gico de la zona andina. Informe técnico,
FAO - UNESCO - OMM, 375 p.
Gondard P., 1983 : La utilizaci6n deI suelo y los paisajes vegetales en la provincia de Loja. Aproxi-
maci6n a los sistemas de producci6n agricola. Cultura, Quito, 5(15), 285-358.
Gondard P., Le6n J. B. V. y Sylva P. Ch (coord), 1984: Transformaciones agrarias en el Ecuador.
Geografia bâsica deI Ecuador, tomo V, vol 1, IPGH - ORSTOM - IGM - CEDIG, Quito, 134 p.
Gondard P., 1986: La utilizacion actual deI suelo en los Andes ecuatorianos, mapa de Tulcan.
PRONAREG-ORSTOM, Quito, 46 p.
Gondard P., 1988: Des cartes, discours pour une méthode, cartographie de l'utilisation du sol et
des paysages végétaux dans les Andes équatoriennes. ORSTOM, Paris, 154 p. Re-edici6n
francesa de "Inventario y cartografia deI uso actual deI suelo en los Andes ecuatorianos",
1984, CEPEIGE - EDIGUIAS, 92 p.
Anexos; bibliografia III
Referencias especîficas
Parle A
Clima-suelos
Caiiadas L., 1983: El mapa bioclimâtico y ecol6gico deI Ecuador. Banco Central deI Ecuador, Quito,
210p.
De Noni G., Viennot M. y Trujillo G., 1990: Mesures de l'érosion dans les Andes de l'Équateur.
Cahiers de Pédologie, ORSTOM, Paris, 5(1-2), 183 - 196.
Huttel Ch., 1988: Zonificaci6n bioclimâtica y formaciones vegetales en las islas Galâpagos. Cul-
tura, Quito, 24a, 221 - 233.
Nouvelot J.-F., 1984: Normas pluviométricas propuestas para el Ecuador. ~G - ORSTOM, mul-
tigr. 105 p.
ORSTOM - PRONAREG, 1978:
a) mapa de isohyetas promedias anuales (escala 1/1 000 000).
b) mapa de evapotranspiraci6n potencial promedio anual (escala 1/1 000 000).
c) mapa de déficits hidricos y de necesidades de riego, promedios anuales (escala 1/1000000).
Pourrut P., 1983: Los climas deI Ecuador. CEDIG, Quito, Doc. Invest. n° 4, 7 - 44.
Panorama hist6rico
Ayala E., 1997: Resumen de historia deI Ecuador. Corpotaci6n Editora Nacional, Quito, 162 p.
Asaro F. et al., 1981: Major Sources of Ecuadorian Archaeological Obsidian and Provenience
Assignment of Artefacts. Chemical Source Groups in Ecuadorian Obsidian, Quito, Banco
Central deI Ecuador & Lawrence Berkeley Laboratory.
• Batchelor B. E., 1980: Los camellones de Cayambe en la sierra de Ecuador. América Indigena,
40(4),671 - 689.
Bonifaz Andrade D., 1995: Guachalâ: Historia de una hacienda de Cayambe. Ediciones Abya-Yala,
Quito,52 p.
Borchart de Moreno C., 1981: El periodo colonial. In "Pichincha: monografia hist6rica de la regi6n
nuclear ecuatoriana", Segundo Moreno Yanez editor, Consejo Provincial de Pichincha, Quito,
193-274.
IV Paisajes Agrarios deI Ecuador
Borchart de Moreno C., 1983: Origen y Conformaci6n de la hacienda colonial. In "Nueva historia
deI Ecuador", Ayala Mora E. (Ed.), Corporaci6n Editora Nacional, Ed. Grijalbo, Quito, Vol 6,
139 - 166.
Cliche P., 1995: Anthropologie des communautés andines équatoriennes: entre diable et patron.
Recherches Amérindiennes au Québec, L'Harmattan, Paris & Montréal, 283 p.
Cuvi M. y Drriola R.,1988: Oleaginosas, cereales y agroindustria en la costa ecuatoriana. In
"Transformaciones agrarias en el Ecuador, Geografia agraria deI Ecuador", IPGH -
ORSTOM - CEDIG, Quito, Tomo V, vol 1, 95 - 107.
Deler J.-P., 1981: Genèse de l'espace équatorien. Essai sur le territoire et la formation de l'Etat
national. AD.P.F & Institut Français d'Études Andines, Paris, 279 p.
Dollfus O., 1981: El reto deI Espacio Andino. Instituto de Estudios Peruanos, Lima, 141 p.
Espinosa Soriano W., 1988: Los cayambes y carangues: siglos XV-XVI. El Testimonio de la Etno-
historia. Instituto Otavaleno de Antropologia, Quito, 3 tomos: 354,240 Y181 p.
Fauroux E., 1988: Las transformaciones de los sistemas de producci6n en el mundo rural ecuato-
riano de 1960 a 1980. In "Transformaciones agrarias en el Ecuador, Geografia agraria deI
Ecuador", IPGH - ORSTOM - CEDIG, Quito, Tomo V, vol 1, 109 - 132.
Gondard P., 1989: Cambios hist6ricos en el aprovechamiento deI medio natural ecuatoriano; papel
de la demanda social. Cultura, Quito, 24b, 567 - 577.
Gondard P. y Lopez F., 1983: Inventario arqueol6gico preliminar de los Andes Septentrionales deI
Ecuador. MAG - PRONAREG - ORSTOM, Quito, 274 p.
Harlan J. R., 1972: Les origines de l'agriculture. La Recherche, 29(3), 1035 - 1043.
Hartmann R., 1978: Mercados y ferias prehispânicos en el ârea andina. Boletin de la Academia
Nacional de Historia, Quito, 54(118), 214 - 235.
Haubert M., 1994: Rôle de l'État dans la structuration sociale en milieu rural: quelques réflexions
à partir de deux études de cas. In "Mutations sociales et articulation des espaces ruraux et
urbains", GEMDEV (Recherches francophones sur les dynamiques des tiers mondes n° 21),
Paris, 107 - 124.
Larrea C., Somaruga S. y Sylvia P., 1988: Agroexportaci6n, transnacionales y paisaje agrario. In
"Transformaciones agrarias en el Ecuador, Geografia agraria deI Ecuador", IPGH -
ORSTOM - CEDIG, Quito, Tomo V, vol 1, 71 - 94.
Marcos J., 1983: Elorigen de la Agricultura. In "Nueva historia deI Ecuador", Ayala Mora E. (Ed.),
Corporaci6n Editora Nacional, Ed. Grijalbo, Quito, Vol 1, 129 - 180.
Mazoyer M., 1995/96: Evolution et différenciation des systèmes agraires. Curso dictado en el "Ins-
titut National Agronomique de Paris-Grignon" de septiembre de 1995 hasta marzo de 1996.
Mills N., 1983: Economia y sociedad en el periodo de la independencia (1780-1845). In "Nueva
historia deI Ecuador", Ayala Mora E. (Ed.), Corporaci6n Editora Nacional, Ed. Grijalbo,
Quito, Vol 6, 127 - 163.
Mino Grijalva M., 1983: La economia de la Real Audiencia de Quito, siglo XVII. In "Nueva historia
deI Ecuador", Ayala Mora E. (Ed.), Corporaci6n Editora Nacional, Ed. Grijalbo, Quito, Vol 4,
47 - 103.
Oberem D., 1978: El acceso a recursos naturales de diferentes ecologias en la sierra ecuatoriana
(siglo XVI). In "Actes du XLIIo Congrès International des Américanistes. Congrès du Cente-
naire. Paris, 2-9 septembre 1976", Société des Américanistes, Paris, t. 2, 51- 64.
Porras G. P. 1., 1980: Arqueologia deI Ecuador. Gallocapitân, Otavalo, 312 p.
Porras G. P. 1., 1987: Nuestro ayer: manual de arqueologia ecuatoriana. Centro de Investigaciones
Arqueol6gicas, Quito, 326 p.
Ram6n G., 1987: La resistencia andina: Cayambe 1500-1800. Centro Andino de Acci6n Popular
(CAAP), Quito, 284 p.
Ram6n G., 1990: El poder y los Norandinos: la historia en las sociedades deI siglo XVI. Centro
Andino de Acci6n Popular (CAAP), Quito, 256 p.
Anexos; bibliografia v
Saint-Geours Y., 1980: Quelques aspects de la vie économique d'Equateur de 1830 à 1930. Bulletin
de l'Institut Français d'Etudes Andines, 9(3-4), 69 - 84.
Salazar E., 1980: Talleres prehist6ricos en los altos Andes deI Ecuador. Universidad de Cuenca,
Cuenca, 129 p.
Salazar E., 1988: El Hombre temprano en el Ecuador. In "Nueva historia deI Ecuador", Ayala
Mora E. (Ed.). Quito, Corporaci6n Editora Nacional, Ed. Grijalbo, vol. 1, 76 - 128.
Salazar E., 1996: Entre mitos y fabulas, el Ecuador aborigen. Corporaci6n Editora Nacional, Quito,
232p.
Salomon F., 1980: Los Sefiores étnicos de Quito en la época de los Incas. Instituto Otavalefio de
Antropologia, Otavalo, 370 p.
Vos R, 1988: Petr61eo, Estado y cambio agrario. Ecuador 1972-1984. In "Transformaciones
agrarias en el Ecuador. Geografia Basica deI Ecuador", Tomo V, Vol 1, IPGH - ORSTOM -
IGM, Quito, 15 - 37.
Wünsch G. et Piqué R, 1995: El periodo precerâmico en el Ecuador: una asignatura pendiente. In
"Primer encuentro de investigadores de la Costa ecuatoriana en Europa", Alvarez Aurelio et
al. Ed., Abya-Yala, Quito, 179 - 206.
Poblaci6n
Bataillon C., Deler J.-P. y Théry H., 1991: L'Amérique Latine. In "Géographie Universelle", Brunet
Red., Hachette - RECLUS, 480 p.
Delaunay D., 1990: La fecundidad. In "Transici6n demogrâfica en el Ecuador", Geografia bâsica
deI Ecuador, Tomo II, vol. 1, CEDIG - IPGH - ORSTOM - IGM, Quito, 129 - 185.
Gondard P., 1996: El Ecuador rural, 1950-1990: recomposici6n demogrâfica y territorial. Comuni-
caci6n al Congreso europeo de latinoamericanistas, Salamanca, no publicado.
Le6n J., 1990: Migraciones internas. In "Transici6n demografica en el Ecuador", Geografia basica
deI Ecuador, Tomo II, vol. 1, CEDIG - IPGH - ORSTOM - IGM, Quito, 76 - 146.
Le6n J. B. V., 1997: Los espacios demogrâficos. in "Ecuador, espacio y sociedad", PUCE - ORSTOM -
INEC - IPGH, Le6n ed., Quito, 17 - 45.
Portais M., 1990: La poblaci6n en el espacio ecuatoriano: evoluci6n hist6rica. In "Transici6n demo-
grâfica en el Ecuador", Geografia bâsica deI Ecuador, Tomo II, vol. 1, CEDIG - IPGH -
ORSTOM - IGM, Quito, 3 - 16.
Vos R, 1988: Petr61eo, Estado y cambio agrario. Ecuador 1972-1984. In "Transformaciones agra-
rias en el Ecuador", Geografia Bâsica deI Ecuador", Tomo V, Vol 1, IPGH - ORSTOM - IGM,
Quito, 15 - 37.
Tenencia
Barsky O. et al: 1982, Politicas agrarias, colonizaci6n y desarollo rural en Ecuador, CEPLAERS -
OEA, Quito, 76 p.
Camacho C., 1991: Evaluaci6n deI proceso de cambio en la tenencia de la tierra en la Sierra Norte
y Central (1974-1991). IDEA, Quito, mecanografiado, 18 p Y 20 P anexos.
Chiriboga M., 1988: La Reforma Agraria y los cambios en la distribuci6n de la propiedad rural
agricola 1974 - 1985. In "Transformaciones agrarias en El Ecuador", Geografia Agraria deI
Ecuador, Tomo V, vol. 1, IPGH - ORSTOM - CEDIG, Quito, 39 - 57.
Dubly A. y Granda A., 1991: Desalojos y despojos; los conflictos agrarios en Ecuador, 1983-1990.
fi
CDHU - El Conejo, Quito, 226 p.
Fauroux E., 1980: Équateur: Les lendemains de la réforme agraire. In "Complexe agro-industriel
et agric1uture familiale. Problèmes d'Amérique Latine". La Documentation Française, Notes
et Etudes Documentaires, Paris, 4567 y 4568, 103 - 137.
Fauroux E., 1988: Las transformaciones de los sistemas de producci6n en el mundo rural ecuato-
riano de 1960 a 1980. In "Transformaciones agrarias en el Ecuador", Geogrâfia Bâsica deI
Ecuador, Tome V, Vol. 1. IPGH - ORSTOM - IGM, Quito, 134p.
VI Paisajes Agrarios deI Ecuador
Gondard P. y Mazurek H., 1997: 30 aiios de Reforma Agraria y Colonizaci6n en El Ecuador, 1964-
1994. Comunicaci6n al 49° Congreso Internacional de Americanistas, Quito, en imprenta.
Trujillo J., 1988: La Colonizaci6n en el Ecuador. In "Transformaciones agrarias en El Ecuador",
GeografiaAgraria deI Ecuador, IPGH - ORSTOM - CEDIG, Tomo V, vol. 1,59 - 70.
Credito
Flores R A Y Lara E. M. O.,(Camacho S C. coordinator), 1995: Sistema de intermediaci6n finan-
ciera agropecuaria en areas rurales. IDEA (Instituto de Estrategias Agropecuarias), Quito,
Documento Técnico n° 66,115 p + 20 p anexos.
Gallard P., 1997: Memorias deI seminario-taller Crédito y Ahorro Rural, Loja-Vilcabamba, 7-9 de
Abri11997, COOPIBO, Quito, 82 p.
Guzman P. A YArroba R. A, 1988: Estadisticas econ6micas hist6ricas, 1948-1983. Banco Central
deI Ecuador, 547 pp.
Ramos H. y Robinson L., 1990: Crédito y politicas de crédito. In "El roI de la agricultura en el
desarrollo econ6mico deI Ecuador" Whitaker éd., IDEA, Quito, 309 - 338.
ParteB
Bosques
Balslev H. y Blicher-Mathiesen U., 1991: La "palma real" de la costa ecuatoriana (Attalea colenda,
Arecaceae) un recurso poco conocido de aceite vegetal. In "Las plantas y el hombre". Mem.
Primer Simp. Ecua. Etnobot. Bot. Eco., Abya-Yala, Quito, 47 - 62.
Barford A. S., 1991: Usos pasados, presentes y futuros de las palmas Phytelephantoidae (Areca-
ceae). In "Las plantas y el hombre". Mem. Primer Simp. Ecua. Etnobot. Bot. Eco., Abya-
Yala, Quito, 23 - 46.
. Boese K, 1992: Actividades agroforestales y silviculturales en la regi6n amaz6nica ecuatoriana.
Red agro-forestal ecuatoriana, Quito, 138 p.
Borgtoft Pedersen H. B., 1991: Management, extractivism and commercial use of wild palms in
Ecuador. In "Las plantas y el hombre". Mem. Primer Simp. Ecua. Etnobot. Bot. Eco., Abya-
Yala, Quito, 13 - 22.
Borja C. R y Lasso S. R, 1990: Plantas nativas para reforestaci6n en el Ecuador. Fundaci6n
Natura, Quito, 208 p.
Brandbyge J. y Holm Nielsen L. B., 1987: Reforestaci6n de los Andes Ecuatorianos con especies
nativas. CESA, Quito, 118 p (reeditado en 1991).
Campuzano G. P. y Valencia R M., 1974: Contribuci6n al catalogo de la flora deI Ecuador. Centro
de Capacitaci6n e Investigaci6n Forestal, Conocoto, multigr., 41 p.
CENDES - CORMADERA, 1991: Estadisticas deI Sector Forestal y Maderero deI Ecuador 1991.
Quito; 140 p.
CESA, 1989: Espécies forestales nativas en los Andes ecuatorianos. Quito, 50 p.
CESA, 1991: Investigaci6n con especies forestales nativas en el Ecuador. Quito, 132 p.
Estrella K, 1991: La naturaleza americana y las expediciones botanicas espaiiolas deI siglo XVIII.
In "Flora Huayaquilensis", Centro Cultural ARTES, 44 - 78.
FAO, 1988: Forest products. World outlook projections 1987-2000. FAO Forestry Paper n° 84, 350 p.
Lescure J. P., Balslev H. y Alarcon R, 1987: Plantas utiles de la Amazonia ecuatoriana. ORSTOM
- PUCE- INCRAE - PRONAREG, Quito, 407 p.
Mc Cormick L, 1987: Anlilisis econ6mico de inversiones en plantaciones forestales en Ecuador. Mc
Cormick ed, INFORDE - USAlD, Quito, 106 p.
MAG, 1989: Plan de acci6n forestaI1990-1995.
Narvaez J. C., 1976: Inventario de areas forestadas en el Ecuador. MAG Desarrollo F'orestal,
Quito, multigr., 147 p.
Anexos; bibliografia VII
Pasaca Mora V. E., 1983: Algunos nombres botanicos de la Flora Ecuatoriana. MAG - Centro de
Capacitaci6n Forestal, Conocoto, 132 p.
Spier H. P. y Biederbeck C., 1980: Arboles y lenosas para reforestar las tierras altas de la regi6n
interandina deI Ecuador. CAAP, Quito, 192 p.
Spruce R, 1908 : Notes of a botanist on the Amazon and Andes. Reeditado par Johnson Reprint
Corporation New York y Londres, 1970,2 vol, 518 + 542 p.
Pastos
Benitez A. R, 1982: Pastos y forrajes. Universidad Central deI Ecuador, Quito, 356 p (traducci6n
al espanol y adaptaci6n al Ecuador de "Les plantes fourragères tropicales" por Havard-Du-
"! clos B., 1967, Maisonneuve et Larose, Paris, 397 p.)
Bonifaz N., Campos M. y Castelo R, 1985: El Chame. Una nueva fuente de alimentaci6n e ingre-
sos. Fundaci6n Ciencia, Quito, 173 p.
DeWalt B. R, Uquillas J. E., DeWalt K. M., Leonard W. y Stansbury J., sin fecha: Sistemas de
producci6n y de alimentaci6n familiar de pequenos productores de leche de la sierra ecua-
toriana. FUNDAGRO, Quito, 75 p.
Dubly A., 1985: Los porcinos en la economia campesina deI cant6n Guaranda (Bolivar). FEPP,
Quito, 34 p.
Huttel Ch., 1981: Estudio sobre la productividad deI pasto Saboya en la costa ecuatoriana PRONA- .
REG - ORSTOM - CRM, multigr., Quito, 66 p.
IDEA, 1990: Condiciones de la producci6n lechera en la zona centro norte de la sierra ecuatoriana
y sus principales procesos de comercializaci6n. Memorias deI seminario y documento técnico.
Quito, 2 vol, 158 + 234 p.
INIAP - PROTECA, sin fecha: Manual Ganadero. Quito, 79 p.
INIAP - PROTECA, 1989: Manual de Pastos Tropicales. Quito, 53 p.
Lasso R y Robayo J., 1990: Condiciones de la producci6n lechera en la zona centro norte de la sierra
ecuatoriana y sus principales procesos de comercializaci6n. Fundaci6n IDEA, Quito, 158 p.
MAG - GTZ, 1991: Situaci6n de la pequena y mediana explotaci6n pecuaria en el Ecuador.
PROFOGAN, Quito, 330 p.
Molina O., 1978: Aspectos basicos para la planificaci6n de una explotaci6n lechera. INIAP, Santa
Catalina, Boletin divulgativo n° 79, 28 p.
Sere C., 1991: Participaci6n de la investigaci6n en el desarrollo de la lecheria de la sierra ecuato-
riana. FUNDAGRO, Quito, 83 p.
Cultivos principales
* Cultivos nativos y especies introducidas
Huttel C., 1983: De la diversité des plantes alimentaires commercialisées sur les marchés à Quito.
Jr. Agric. Trad. et de Bota. Appl., XXX (3-4),267-282.
Patino V. M., 1964: Plantas cultivadas y animales domésticos en América Equinoccial. Tomo 2
Plantas alimenticias. Cali, Imprenta Departamental, 364 p.
Patino V. M., 1967: Plantas cultivadas y animales domésticos en América Equinoccial. Tomo 3
Fibras medicinas, miscelâneas. Cali, Imprenta Departamental, 569 p.
Patino V. M., 1969: Plantas cultivadas y animales domésticos en América Equinoccial. Tomo 4
Plantas introducidas. Cali, Imprenta Departamental, 573p.
* Arroz
MAG - PNA, 1991: Estadistica arrocera, ano agricola 1991, MAG PNA, Guayaquil.
INIAP - PNA - ClAT, 1987: Plan nacional para mejorar la situaci6n deI cultivo de arroz en Ecuador.
* Banano
Alvarez R y Chang J. F., 1992: El Estado de tecnificaci6n de las bananeras ecuatorianas en 1989.
FUNDAGRO, Doc. Tec. n° 6,26 p.
VIII Paisajes Agrarios deI Ecuador
Charvet P. S., 1987: Los productores de banano in "El banano en el Ecuador", FLACSO-Corpora-
ci6n Editora Nacional, Quito, 111-185.
Larrea C. M., 1987: Empresas exportadoras y concentraci6n econ6mica in "El banano en el Ecua-
dor", FLACSO - Corporaci6n Editora Nacional, Quito, 67-109.
Pozo T. C., 1992: El cultivo deI Banano. Programa Nacional deI Banano, 48 p.
* Cacao
Crawfod de Roberts L., 1980: El Ecuador en la época cacaotera. Editorial tJniversitaria, Quito, 276 p.
Enriquez G. A., 1993: Cost production analysis of six farming systems of "National" cocoa (Ecua-
dor). Paper 41/CF Int. Conf. on Cocoa Economy, Bali, multigr. 9 p.
FAO, 1957: 1900-1937: Cacao, tendances actuelles de la production, des prix et de la consomma- ,.
tion, Roma. (datas parciales proporcionados por CIRAD, Montpellier)
Gill y Duffus, varias fechas: Cocoa statistics. (datos parciales proporcionados por CIRAD, Mont-
pellier)
Moyersoen M., 1993: Improving cocoa quality through farmer's organizations: the case of Ecuador.
Paper 09/CF Int. Conf. on Cocoa Economy, Bali, multigr., 17 p.
Prance G. T., 1985: The pollinisation of amazonian plants. In "Amazonia" Prance & Lovejoy ed.,
Pergamon Press, 166-191.
Soria V. J., 1993: Market and production prospectives for "Arriba" cocoa of Ecuador. Paper 07/WS
Int. Conf. on Cocoa Economy, Bali, multigr., 14 p.
* Café
Programa Nacional deI Café, 1983: Primer Censo Cafetero, Resumen Nacional. MAG - PNC, 530 p.
FUNDAGRO, 1992: Sistemas de producci6n agropecuaria y de alimentaci6n familiar alrededor de
café en âreas selectas de la Costa ecuatoriana. Documento técnico n° 8, Quito, 66 p.
* Cebada
INIAP, 1993: Inventario tecnol6gico, Trigo y cebada. Quito, 71 p.
* Maiz
Carrillo R. y Limongi R., 1995: Diagn6stico sobre problemas fitosanitarios en el cultivo de maiz en 8
cantones de Manabi. Octavo seminario nacional de sanidad vegetal. 25-27 de enero de 1995.
CESA, 1986: El maiz. CESA, Quito, 30 p.
Moreno F., sin fecha: El cultivo deI maiz en El Ecuador. INIAP, no publicado, Quito.
Moreno F., 1992: Inventario tecnol6gico, maiz Sierra. INIAP, Quito, 44 p.
* Palma africana
Chavez F. M., 1986: Enfermedades de palma africana en Ecuador y su combate. INIAP, Manual
n08, Quito, 18 p.
El Palmicultor, revista de ANCUPA, n02 y n06
* Papa
Andrade H., 1991a: Labores de siembra, cultivo y cosecha. In "Proyecto Kellog", FUNDAGRO,
Quito, 81-87.
Andrade H., 1991b: Algunas caracteristicas de las variedades liberadas por el programa de papa
deI INIAP. In "Proyecto Kellog", FUNDAGRO, Quito, 181-194.
Caceres J., 1991: Fertilizacion. In "Proyecto Kellog", FUNDAGRO, Quito, 89-105.
CESA, 1986: Las papas. Quito, 30 p.
FUNDAGRO, 1991: El cultivo tradicional de la papa en Cafiar. Quito, 32 p.
Gallegos P., 1991: Insectos y plagas en el cultivo de papa. In "Proyecto Kellogg", FUNDAGRO,
Quito, 145-149.
INIAP, 1992 : Tecnologias disponibles de los principales cultivos deI Ecuador, Coeficientes técni-
cos, costos, Quito.
Lopez, F., 1987: Breves apuntes sobre la producci6n y comercializaci6n de la papa en Tungurahua.
PRONAREG-MAG, Quito, 42 p.
Mufioz, F., 1978: Manual de cultivo de papa. INIAP, 4 p.
Anexos; bibliografia IX
Oleas A, 1991: Enfermedades de la papa por bacterias. In "Proyecto Kellog", FUNDAGRO, Quito,
127-140.
Orellana H., 1991: Enfermedades de la papa causadas por hongos. In "Proyecto Kellog", FUNDA-
GRO, Quito, 107-119.
Peterson W., 1992: El sistema tecno16gico de la papa en El Ecuador. FUNDAGRO, Quito, 109 p.
Uquillas J., 1992: La papa en los sistemas de producci6n agropecuaria de la Sierra ecuatoriana. 38 p.
Vega J. G., 1991: Enfermedades deI cultivo de la papa- por virus. In "Proyecto Kellog", FUNDA-
GRO, Quito, 121-125.
* Trigo
INIAP, 1993: Inventario tecno16gico, Trigo y cebada. Quito, 71 p.
Patiiio V. M., 1969: Plantas cultivadas y animales domésticos en América Equinoccial. Tomo N
Plantas introducidas. Cali,.573 p.
Peltre-Wurtz J., 1988: Le blé en Équateur, ou le prix de l'indépendance alimentaire. Cah. Sci.
Hum. 24(2), 213-223.
Pouille F., 1993: Étude préliminaire de l'utilisation, de l'évolution et de la dégradation des sols
andins dans les Andes équatoriennes. Exemple de la province de Bolivar. Document préli-
minaire, Université de Bordeaux III, CNRS - ORSTOM - IFEA, Bordeaux, 73 p + anexos.
Urriola R. y Cuvi M., 1986: La agroindustria alimentaria en El Ecuador en los aiios ochenta.
ILDIS - CEPLAES, Quito, 172 p.
*Yuca
INIAP, 1990: Guia técnica para producci6n de yuca. Boletin divulgativo n° 205, Portoviejo.
FUNDAGRO, 1992: El cultivo de la yuca en El Ecuador. R. Velastegui ed., Documento técnico n° 5,
Quito, 215 p.
Cultivas secundarios
* Cultivos altoandinos
Nieto C. C., Vimos C. N., Caicedo C. V., Monteros C. J. y Rivera M. M., 1992: Inventario tecno16-
gico. INIAP, Estaci6n experimental Santa Catalina, Programa de cultivos andinos, Quito,
mecanogr., 29 p.
Peralta E. 1. Y Nieto C. C., 1991: Diagn6stico agrosocioecon6mico a productores de melloco (Ullucus
tuberosus H. B. K.) en Ecuador. Comunicaci6n presentada al VlJO Congreso de cultivos andi-
nos, agosto 1991, La Paz. INIAP, Quito, mecanogr., 14 p.
* Flores
Buitron P., 1992: Impacto socio-econ6mico de las exportaciones en la mana de obra y mas efectos
en la zona, Pichincha. Tesis de la Facultad de Administraci6n Pontificia Universidad Cat6-
lica deI Ecuador (PUCE), Quito.
Corporaci6n Financiera Nacional, 1993: Cultivo de la Gypsophilia para exportaci6n. Informe de
gerencia de promoci6n de inversiones y proyectos, CFN, Quito, 35 p.
Corporaci6n Financiera Nacional, 1995a: Producci6n comercial de Rosas para exportaci6n. Informe
• de la gerencia de promoci6n, CFN, Quito, 59 p.
Corporaci6n Financiera Nacional, 1995b: Estudio deI sector floricola en el Ecuador. Informe de
gerencia de divisi6n de planificaci6n y evaluaci6n corporativa, CFN, Quito, 66 p.
EXPOFLORES - Fundaci6n Natura - MAG - PROEXANT, 1996: Manual para el manejo de pestici-
das en floricultura. Asociaci6n de exportadores de flores (EXPOFLORES) - Fundaci6n Natu-
ra - Ministerio de agricultura y ganaderia (MAG) - Promoci6n de exportaciones agrfcolas no
tradicionales (PROEXANT), Quito, 27 p.
Gasselin P., 1996: La explosi6n de la floricultura de exportaci6n en la regi6n de Quito: una nueva
dinamica agraria periurbana. Congreso Internacional de los Americanistas, Quito, 7-11 de
julio 1997, 13 p.
Heussler P, 1991: Producci6n de flores para corte. Informe EXPOFLORES, Quito, 7 p.
PROEXANT, 1992: Generalidades deI cultivo de flores tropicales. Promoci6n de exportaciones
agrfcolas no tradicionales (PROEXANT), Quito, 112 p.
x Paisajes Agrarios deI Ecuador
* Frutales de la Sierra
An6nimo, 1985: El cultivo de la mora. Instituto nacional de capacitaci6n campesina, Quito, 2
volumenes.
Badillo V. M., 1983: Caricaceae in "Flora of Ecuador vol n° 20". Swedish Research Council Publi-
shing House, Stockholm, 27 - 47.
Caicedo M. E., 1983: Estudio deI almacenamiento de durazno rosado de Sevilla en diferentes condi-
ciones. Jornadas Ecuat. de Ciencia y Tecnologia de alimentos, Ambato, Memorias 2, 108 - 116. ,
Camacho B. S., 1981: Fitomejoramiento de naranjilla. INIAP, Carta de frutales n° 14, 2 p.
Equiguren C. R., Defaz T. M., Revelo M. J., Cedefio R. G. y Zambrano D., 1985: Busqueda de resis-
tencia al nematodo deI nudo Meloidogyne spp.. INIAP, Quito, informe anual1984, 23 - 27.
Erez A, 1987: Arboles frutales caducifolios en Ecuador. Misi6n de evaluaci6n deI proyecto "Fruti-
cultura", INIAP - COTESU, 29 p.
Farre Massip J. M. Y Hermoso Gonzalez J. M., 1987: Informe deI viaje de exploraci6n sobre la
chirimoya, realizado a Ecuador y Peru entre el 1 de abril al 15 de mayo de 1987. Instituto
Nacional de Investigaciones Agrarias de Espafia, Madrid, 30 p.
Fernandez B. O. y Moreno M. 1. 1985: Evaluaci6n de pérdidas post-cosecha de tomate de arbol y
mora e inventario de embalajes utilizados. Tesis Ing. Alim., Ambato, 126 p.
Granges E. y Barahona E. M., 1985: Guia deI cultivo deI manzano. INIAP, Quito, Boletin divulga-
tivo n° 173, 19 p.
Mata B. A YVelastegui E. F., 1985: Evaluaci6n de pérdidas post-cosecha de babaco y mandarina e
inventario de embalajes utilizados. Tesis Ing. Alim., Ambato 171 p.
Morant B., 1991: Le développement de la culture de tomate d'arbre dans la vallée de Patate.
Mémoire CNEARC, Montpellier, 117 p + anexos.
Orellana AH., Padilla B. F. Y Mora C. E., 1984: Evaluaci6n de pérdidas que ocasionan las enfer-
medades rona y cenicilla deI manzano en la provincia de Tungurahua. INIAP, Informe téc-
nico anual1983, Quito, 13 - 17.
Ortega Arias J. O., 1985: Plasticultura y su incidencia en el cultivo de fresa, variedad Tufts ytres
distancias de plantaci6n. Tesis Ing. Agr., Quito, 90 p.
Tamayo G. 1. A, 1985: Estudio de las enfermedades deI peral Pirus communis en el cant6n Pillaro.
Tesis Ing. Agr., Ambato, 96 p.
Valarezo M. C. y Samaniego R. V., 1982a: Respusta de naranjilla a la aplicaci6n de N-P-K y cal.
Memorias de la 1° Conferencia internacional de naranjilla, INIAP, Quito, 109 - 113.
Valarezo M. C. y Samaniego R. V., 1982b: Estudio de los sistemas de cultivo de naranjilla y control
de la pudrici6n deI fruto causado por Colletotrichum sp. Memorias de la 1° Conferencia in-
ternacional de naranjilla, INIAP, Quito, 95 - 102.
Viteri P. D., 1992: El cultivo deI babaco en el Ecuador. INIAP ~ PROTECA - Programa de frutales,
Manual n° 19, 14 p.
* Frutales de la zona câlida
Fouqué A, sin fecha: Espèces fruitières d'Amérique tropicale. IFAC. Recolecci6n de articulos publi-
cados desde 1972 en la revista Fruits, IFAC, Paris, sin paginaci6n.
PROEXANT, 1992: Manual deI mango.
* Otros cultivos secundarios
INIAP, 1986: Cultivo deI sorgo granifero, guia breve.
MAG - PRSA, 1993: El sector agropecuario: comportamiento en 1992 y perspectivas para 1993.
Anexos; bibliografia XI
Parte C
Paisajes no antropizados
Acosta-Solis M., 1973: El paisaje y la cubierta vegetal deI reino de Quito al arribo de los conquis-
tadores. Bol. Inf. Cien. Ecuador, 14(105-106), 1- 17.
Acosta-Solis M., 1977: Conferencias fitogeograficas. Pub!. IPGH, Quito, 294 p.
Acosta-Solis M., 1982: Fitogeografia y vegetaci6n de la provincia de Pichincha. Consejo Provincial
de Pichincha, Quito, 131 p.
Acosta-Solis M., 1984: Los paramos andinos deI Ecuador. Publicaciones cientificas MAS, Quito, 222 p.
Balslev H. y De Vries T., 1982: Diversidad de la vegetaciôn en cuatro cuadrantes en el paramo
arbustivo deI Cotopaxi, Ecuador. Revista deI Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales, 3,
20 - 32.
Brandbyge J. y Azanza A, 1982: Report on the 5th and 7th danish-ecuadorean botanical expedi-
tions. Hep. Bot. Inst. Univ. Aarhus (Dinamarca), n° 5, 138 p.
Bravo Velasquez E. y Balslev H., 1985: Dinamica y adaptaciones de las plantas vasculares de dos
ciénegas tropicales en Ecuador. Rep. Bot. Inst. Univ. Aarhus (Dinamarca), n° 11,50 p.
Caiiadas L., 1983: El mapa bioclimâtico y ecolôgico deI Ecuador. Banco Central deI Ecuador Quito,
210p.
CLIRSEN - DINAF, 1990: Mapa forestal deI Ecuador.
CLIRSEN - DINAF, 1991: Inventario de manglares deI Ecuador continental. CLIRSEN, Quito, 437 p.
EIlenberg H., 1975: Vegetationsstufen in perhumiden bis perariden Bereichen der tropischen
Anden. Phyocoenologia, 2(3/4), 368 - 387.
Emperaire L. y Arnaud B., 1987: Végétation et flore. In "Loja préhispanique". Edit. Recherches sur
les Civilisations, Paris, 21 - 40.
Enock C. R., 1981: Ecuador: Geografia Humana. Corporaci6n Editora Nacional, Quito, 427 p.
Traducci6n de la edici6n americana -1914- por Bahamonde C. O.
Espinoza R., 1949: Estudios botânicos en el Sur deI Ecuador. Edit. Univ Loja, 2 tomos, 110 + 124 p.
Estrella E., 1991: La expediciôn de Juan Tafalla y la Flora Huayaquilensis. In "Flora Huayaqui-
lensis", Centro Cultural Arles, Quito, 11- 43.
Freire P. L., 1968: Muestrario e indice descriptivo de algunas especies arb6reas deI Noroccidente
Ecuatoriano. Th. Grado Ing.Univ. Nac. Loja, 132 p + an.
Gentry A, 1986: Sumario de patrones fitogeogrâficos neotropicales y sus implicaciones para la
conservaci6n en el Ecuador. Cultura (Quito), 24a, 401-420.
Humboldt A de, 1805: Essai sur la géographie des plantes....F. Schoell, Paris. Una la.mina fue
reeditada en "Humboldt's Way", National Geographic Magazine,1985, 168(3),318 - 351.
Huttel Ch., 1988: Zonificacion bioclimâtica y formaciones vegetales en las islas Galâpagos. Cultura
(Quito) 24a, 221 - 233.
Huttel Ch., 1995: Vegetaci6n en coladas de lava; islas Galapagos, Ecuador. FCD - ORSTûM,
Quito, 178 p.
INGALA-ORSTûM-PRûNAREG, 1987:
- Mapa de formaciones vegetales y uso actl;lal deI suelo, zonas agricolas de las islas Floreana,
Santa Cruz y San Crist6bal (escala 1/50 000)
- Mapas (6) de formaciones vegetales deI archipiélago de Galapagos; escala 1/100 000.
Ir
INGALA-ORSTûM-PRûNAREG, 1989: Inventario cartogrâfico de los recursos naturales, geomor-
fologia, vegétaci6n, hidricos y biofisicos de las islas Galapagos. INGALA Ed., 159 p.
Jaramillo J. y Coello F., 1982: Reporte deI trabajo de campo Ecuador 1977-1981. Rep. Bot. Inst.
. . Univ. Aarhus (Dinamarca), n° 6, 94 p.
Mena P. y Balslev H., 1986: Comparaciôn entre la vegetaciôn de los paramos y el cinturôn afro-
alpino. Reports Bot. Inst. Univ. Aarhus (Dinamarca), n° 12, 54 p.
XII Paisajes Agrarios deI Ecuador
Mufioz L., Balslev H. y De Vries T., 1985: Diversidad de la vegetaci6n en cuatro cuadrantes en el
paramo pajonal deI Antisana, Ecuador. Revista deI Museo Ecuatoriano de Ciencias
Naturales, 4, 21- 33.
Naranjo P., 1981: Indice de la flora deI Ecuador. Tomo 1. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito,
334p.
Naranjo P., 1983: Indice de la flora deI Ecuador. Tomo 2 Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito,
228p.
Ollgaard B. y Balslev H., 1979: Report on the 3rd danish botanical expedition to Ecuador. Rep.
. Bot. Inst. Univ. Aarhus (Dinamarca), n° 4, 141 p.
Paredes A., 1942: Una excursi6n botanica al Tungurahua. Bol. Inst. Bot. 8. r
Patzelt E., 1985: Flora deI Ecuador. Banco Central deI Ecuador, Quito, 192 p.
Prance G. T., 1978: The origin and evolution of Amazonian flora. Interciencia, 3, 451- 463.
Richards A. F., 1962: Active volcanoes of the archipielago de Colon. In "Catalog of the active volca-
noes of the World", Part XIV, Naples Int Ass. Vole.
Sarmiento F. R., 1987: Antologia ecol6gica deI Ecuador. Publ. Museo de Ciencias Naturales, Quito,
Monografia 7(2), 382 p.
Steele A. R., 1982: Flores para el Rey; la expedici6n de Ruiz y Pav6n y la Flora deI Peru (1777-
1788). Serbal, Barcelonne, 347 p. Traducido deI ingles "Flowers for the King; the expedition
of Ruiz and Pavon and the Flora of Peru". Ed Duke Univ. Press 1964.
Troll C., 1932: Vegetation map of the coastal regions of Ecuador and northern Peru. Fig 23 of
Suppl. l Coll. Geogr. Bd. 9.
Van Der Hammen T., 1988: Historia de la vegetaci6n y deI clima en la regi6n norandina. Cultura
(Quito), 24 à, 203 - 209.
Villavicencio M., 1984: Geografia de la Republica deI Ecuador. Corporaci6n Editora Nacional,
Quito, 505 p + mapas. 1 edici6n, 1858, Nueva York.
0
Whymper E., 1987: Travels amongst the great Andes of the Equator. Peregrine Smith, Layton -
USA, 456 P + 1 mapa. 1 edici6n, 1892.
0
WolfT., 1975: Geografia y Geologia deI Ecuador. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 798 p. 1 0
Evoluci6n deI cambio US D6lar - Sucres. Promedios anuales, venta,de d6lares,en el mercado libre
Fuentes: Guzman P. A. Y Arroba R. A., 1988; Estadisticas BeE, 1984-1998
1000
-
:: ,.1
/
--
•
100
-
=
= po
J
-
- . ./
- .n..
~
Ana
10
1950 1960 1970 1980 1990
XIV Paisajes Agrarios deI Ecuador
INDICE DE CUADROS
A CONDICIONES GENERALES P
1 Especies medrables mas mencionadas por los trabajadores deI sector maderero 69
2 Exportaciones deI sector maderero 1986-90 71
3 Distribucion de las plantaciones forestales en 1981 y 1976 72
4 Rendimiento de plantaciones forestales 74
5 Localisacion y caracteristicas de los tipos de ganaderia bovina en Ecuador 83
6 Pastos: superficies de acuerdo con las zonas de humedad 87
7 Pastos: produccion anual de forrage y precipitaciones (Panicum maximum) 87
8 Pastos: rangos de produccion de materia seca (tlha) de tres gramineas 96
9 Pastos: algunos panimetros de la ganaderia lechera en la Sierra 99
10 Pastos: estimacion de la rentabilidad de la ganaderia lechera 101
11 Pastos: otras crias de carne 103
12 Arroz: porcentajes de las superficies sembradas con las diferentes variedades 114
13 Arroz: algunas caracteristicas de las dos principales variedades 114
14 Arroz: superfices sembradas y numero de arrozicultores 115
15 Arroz: porcentajes de campesinos seglin el método de sembrio 117
16 Arroz: produccion y rendimiento de zonas arroceras en 1991 118
17 Arroz: costos de producci6n en América Latina 119
18 Banano: caracteristicas de las plantaciones 125
19 Cacao: edades de las plantaciones 131
20 Café: productores por clases de producci6n para las principales variedades 138
21 Maiz: hibridos y variedades mas usadas en la zona calida 152
22 Maiz: superficies de maiz suave cosechadas en la Sierra 152
23 Maiz: superficies de maiz duro cosechadas en el piso calido 154
24 Maiz: superficies cosechadas y produccion 156
25 Maiz: rendimientos en paises deI pacto andino 156
26 Palma africana: produccion seglin region y tecnologia 161
27 Papa: caracteristicas de algunos cultivares ecuatorianos 163
28 Papa: superficies sembradas y produccion 165
29 Papa: tamarlo de las propriedades 165
30 Papa: tiempos de trabajo 168
31 Soya: caracteristicas de los principales cultivares 170
Anexos; indice de cuadros xv
32 Soya: repartici6n de los agricultores y de las superficies 172
33 Trigo: superficies sembradas y producci6n por provincia 178
34 Trigo: evoluci6n de la producci6n nacional y deI rendimiento 181
35 Yuca: superficies sembradas y producci6n 185
36 Cultivos andinos: caracteristicas de algunos cultivos andinos secundarios 187
37 Flores: superfices cultivadas por especie 193
38 Flores: repartici6n de las exportaciones 197
39 Frutales de la Sierra 201
•
XVI Paisajes Agrarios deI Ecuador
ÎNDICE DE FIGURAS
A CONDICIONES GENERALES p
tI
. ,
Anexos; indice de autores XIX
INDICE DE AUTORES
A CONDICIONES GENERALES
1 Factores climaticos Huttel
II Factores morfo-edafoI6gicos Zebrowski
III Control deI agua
1 Inundaciones Zebrowski
2 Riego Huttel, Le Goulven
• IV Panorama hist6rico Gondard, Gasselin
y Poblaci6n........... Gondard, Zebrowski
VI Tenencia........................ Gondard, Zebrowski
VII Mano de obra agricola Huttel
VIIIAcceso al crédito Huttel, Gondard, Bourliaud
IX Exportaciones......... Gondard, Huttel
X Los tipos mayores de uso Huttel
Los cuadros y las ilustraciones -graficos y mapas- fueron realizados por Huttel
GEOGRAFlA BAsICA DEL ECUADOR
....".J
Charles Huttel
Claude Zebrowski
Pierre Gondard
J
Sintética y vasta a la vez, es una obra que estâ Hamada a satisfacer una necesidad de conocimiento y de
acci6n para todo ecuatoriano. Su objetivo no es otro que estudiar explicitamente todo 10 que en el pais es
testimonio de una relaci6n elemental: la deI hombre y su entomo fisico y social.
:1 Con el presente volumen, segundo deI tomo dedicado a la GEOGRAFIA AGRARIA, se concluye la publi-
PAISAJES AGRARIOS DEL ECUADOR presenta los componentes y la articu1aci6n de los paisajes
agrarios. Analiza las condiciones naturales, sociales, econ6micas e hist6ricas de la agricultura y ganderia;
\i incluye nutridas fichas de cultivo para los principales productos; esboza la organizaci6n de los sistemas de
producci6n agropecuaria.
. 1,
~ Dos caracteres peculiares hacen de esta investigaci6n una obra bastante original: -liga siempre las
, condiciones naturales y la inserci6n social y econ6mica de los productores, -se fundamenta en una amplia
. 1
• experiencia de la realidad nacional, adquirida par los autores a 10 largo de muchos aiios de trabajo en el
\ campo y de su recorrido por todas las parroquias rurales deI pais.
!