Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
• Necesidades de proceso
• Seguridad de personas y bienes - Una instalación mal aislada representa
un peligro para el personal, pudiendo llegar a producir averías a otros
aparatos e incluso incendios.
• Reducción de pérdidas energéticas - Una instalación deficientemente
aislada reporta pérdidas cuantiosas de energía, o lo que es lo mismo,
económicas.
• Reducción de la contaminación ambiental
Uno de los aislamientos térmicos más comunes es el que se lleva a cabo en los
hornos industriales, pues es aquí donde se tiene que concentrar el calor y no en
otras áreas.
Para un aislamiento es de vital importancia elegir el material con el que se va a
aislar la instalación que genera el calor. Este material se determina en base a la
temperatura que alcanzan los aparatos.
Materiales
Materiales refractarios
Ladrillos refractarios, ladrillos aislantes, concretos aislantes, concretos refractarios,
morteros, apisonables, plásticos, piezas especiales.
Materiales Aislantes
Fibra cerámica, lana mineral, fibra de vidrio, perlita expandida, etc.
• Industria cementera
• Industria cerámica y vidrio
• Industria petroquímica
• Industria azucarera
• Industria química
• Industria siderúrgica
• Industria no ferrosa
• Industria del acero
• Industria minera
• Industria metálica
• Industria alimenticia
El calentamiento por inducción se emplea en:
Con este fin, debemos prestar una especial atención al correcto aislamiento
térmico –y también eléctrico – de un Horno de Inducción. Este tipo de hornos
suelen ser especialmente compactos con miras a optimizar la capacidad de fusión.
especialmente porque, debido a su menor tamaño, suelen requerirse piezas que,
además de una alta resistencia térmica, también ofrezcan elevada resistencia
eléctrica y unas propiedades mecánicas difícilmente alcanzables con otros
materiales.
PAMITHERM 41140
C-THERM 65100
MIGLASIL 362.50
2 - Historia
Para hacer frente a las condiciones anteriores fue necesario desarrollar nuevos
materiales refractarios especiales, lo cual fue posible gracias a una estrecha
colaboración entre los fabricantes de refractarios y los consumidores.
Sin duda los refractarios más antiguos que utilizaron los primitivos fundidores
fueron piedras naturales (granitos, areniscas, cuarcitas, esquistos de mica,
piedra pómez, etc.), las cuales eran cortadas en bloques de las dimensiones
apropiadas. Con dichos bloques, con un acabado un tanto grosero, se construía el
revestimiento del horno. Se sabe documentalmente que la piedra pómez se utilizó
para las paredes de los hornos de cocción. Muchas de las fundiciones de vidrio se
construyeron con piedra. De hecho, Robert Hewes, de la Temple Glass Company,
Temple, New Hampshire (E.E.U.U.), dice en una carta fechada en 1781 ‘Tendré
que enviar a buscar piedra para mi horno de fusión a 60 millas de distancia, lo que
me obliga a mandar 8 yuntas”.
Figura 1 Dos hornos antiguos para la obtención de hierro, de revestimiento
compuesto por piedras naturales (granito, arenisca, esquistos de mica)
Hasta mediados del siglo XVIII las piedras naturales fueron los materiales
refractarios más utilizados en los revestimientos de los hornos. Hacia esas fechas
aparecieron en el mercado los ladrillos de arcilla cocida (ladrillos silicoaluminosos
de bajo contenido en alúmina), que debido a su amplia adaptabilidad a muchas
aplicaciones de los hornos rápidamente experimentaron un gran desarrollo.
Hay que señalar que las piedras naturales siguieron utilizándose para la
construcción de hornos hasta finales del siglo XIX debido al mayor costo de estos
primeros ladrillos silico-aluminosos y a su pobre resistencia a las temperaturas
altas. Las piedras naturales como la cuarcita, incluso, se utilizaban hasta hace
poco tiempo para el revestimiento de los convertidores Bessemer. En Asturias se
revistieron los convertidores, incluso después de la guerra, con cuarcitas de
Galdacano (Vizcaya).
Refractarios básicos.
Los ladrillos eran de cromita y magnesita calcinada a muerte (se evita la excesiva
contracción que experimentarían los ladrillos durante su posterior exposición a alta
temperatura en el horno) mezcladas con una pequeña cantidad de cal, que va a
actuar como ayuda a la aglomeración (sinterización). A continuación la mezcla se
consolidaba sometiéndola a gran presión en un molde. Finalmente la pieza verde
se sometía al proceso de cocción.
Refractarios neutros.
Hoy en día el uso de los bloques de carbono para el revestimiento de los crisoles
de los hornos altos es una práctica habitual con la que se han eliminado, casi
totalmente, las perforaciones que eran una característica común cuando se
usaban ladrillos silico-aluminosos.
Estado actual
La norma española UNE (150 R836-68) define a los materiales refractarios como a
aquellos productos naturales o artificiales cuya refractoriedad (Resistencia
piroscópica) es igual o superior a 1500 ºC. Es decir, resisten esas temperaturas
sin fundir o reblandecer. La resistencia piroscópica se determina según la norma
UNE 61042
La definición anterior solo hace referencia a las temperaturas mínimas que debe
de ser capaz de resistir un refractario, sin tener en cuenta otro tipo de
solicitaciones o condiciones. Es importante precisar que la resistencia piroscópica
es una condición necesaria, pero no es suficiente para que un material sea
considerado como refractario, ya que además debe conservar a dichas
temperaturas elevadas una resistencia mecánica y/o una resistencia a la corrosión
suficientes para el empleo a que se destine. Una definición “ampliada”, que hace
mención al hecho de que no es solo la resistencia a la temperatura lo que se exige
a un material refractario, es la siguiente:
Es incompleta porque entre los materiales cerámicos se deben incluir los vidrios,
materiales inorgánicos, no metálicos y como las cerámicas, duros y frágiles, pero
que no presentan una estructura cristalina, porque un sobre enfriamiento ha
“Congelado” el carácter no cristalino del líquido original. Generalmente, además
los materiales cerámicos y refractarios no son completamente cristalinos, sino que
suelen presentar una cierta proporción de fase vítrea.
El constituyente matriz puede ser una fase vítrea o cristalina “micro cristales” de
composición más compleja que el constituyente disperso. La refractoriedad (o la
temperatura de ablandamiento) es menor para el componente matriz que para el
disperso. La naturaleza del constituyente matriz es, normalmente, compleja debido
a la presencia de los óxidos alcalinos (litio, sodio, potasio) y de los óxidos de
hierro, que disminuyen su refractoriedad.
Por último, una fase que está siempre presente en los materiales refractarios, en
proporción y distribución variables, es la porosidad. Esta influye decisivamente en
sus propiedades y características.
A.-Composición química.
E.-Proceso de fabricación.
F.-Uso.
Las materias primas utilizadas para su fabricación son las denominadas arcillas
refractarias y los caolines.
A5 - Refractarios de alto contenido en alúmina (contenidos de Al2O3 comprendidos
entre el 45 y el 56 % ).
A6 - Refractarios de muy alto contenido en alúmina (contenidos de Al2O3 > 56 %).
-Refractarios de alúmina pura.
-Refractarios de mullita sintética (2SiO2.3Al2O3).
-Refractarios del grupo de la sillimanita.
-Refractarios basados en el Al(OH)3 y en la bauxita.
-Refractarios de corindón.
Estos tipos de refractarios pueden correlacionarse con el diagrama binario de
fases SiO2-Al2O3 de la figura 10.
Hay que recordar que según LEWIS, un ácido es toda aquella sustancia
(Molecular o iónica) que puede aceptar un par de electrones y base toda sustancia
que puede ceder un par de electrones. Cada ácido posee la base correspondiente
(Conjugada). La relación entre un ácido y su base conjugada puede expresarse
por ecuación de reacción:
Un ácido y su base conjugada forman un par ácido - base.
Las substancias anfóteras son aquellas que se comportan como ácidos y como
bases, es decir presentan un doble comportamiento, siendo ejemplo característico
de ellas el hidróxido de aluminio, Al(OH)3, que al actuar como base se disocia en
iones
y al actuar como ácido cede protones y forma el anión AlO3H2−, el cual pierde el
agua al originar los aluminatos sólidos con el ión AlO2−, es decir
Son mezclas refractarias que pueden ser usadas directamente en el estado que
son suministradas, como es el caso de las masas plásticas o bien después de la
adición de un líquido apropiado, como es el caso de los hormigones o cementos
refractarios. Se forman así revestimientos monolíticos, sin juntas y con un espesor
no discreto.
Finalmente, también pueden presentarse los materiales refractarios en forma de
materiales fibrosos.
-Refractarios densos.
-Refractarios aislantes.
-Refractarios especiales.