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“AÑO DEL DIÁLOGO Y LA RECONCIALIZACION

NACIONAL”

La evolución de las campañas políticas

DOCENTE: Marcos Torres Paz


ALUMNO: Valentín Pantoja Guillermo
CARRERA: Derecho
CURSO: Ciencia Política

LIMA-PERÚ

2018
INTRODUCCIÓN
En este presente trabajo hablaremos acerca de cómo fue evolucionando las
campañas políticas en el Perú .hablar de campañas políticas es hablar la
relación que existe entre los ciudadanos y la política, una instancia en el cual
los políticos se preocupan por hacer llegar a los electores sus propuestas de
gobierno para un electorado está más interesado en conocer las alternativas
políticas que los diferentes partidos quieren desarrollar En este contexto
electoral, es decisivo el rol de los medios masivos de comunicación. Las
campañas políticas se distinguen de las campañas sociales.

Las campañas electorales movilizan gran cantidad de recursos y personas.


Atendiendo tanto a las organizaciones partidistas, a sus estrategias y estructura
interna durante las campañas; como a las consecuencias de la mediatización
que los medios de comunicación ejercen al transmitir el mensaje de los
partidos. En términos generales, la función más relevante que realizan las
campañas electorales para la teoría democrática es la de la legitimación del
sistema político. Ello debido a que, durante las campañas, se realiza una serie
de actividades litúrgicas que desembocan en la realización del acto ritual
legitimador de la democracia por excelencia: la votación para la elección de los
gobernantes.

Espero definir claramente de cómo fue evolucionando las campañas a través de


los tiempos y la influencia en los electores.
MARCO TEORICO

Capítulo I: Evolución de campañas políticas

1.1. Definición

Las campañas electorales están constituidas por un conjunto de actividades


destinadas a conseguir el voto para la elección de un candidato o partido
político determinado. Implican igualmente, disputas por la definición de los
problemas públicos, por el desarrollo de soluciones para los mismos -en
términos de políticas públicas-, y por formas de persuadir a grupos de votantes
para que se decanten por propuestas concretas.

Adicionalmente, hay que tener en cuenta que las campañas son procesos
comunicativos mediatizados por las organizaciones partidistas y por los medios
de comunicación, lo que obliga a analizarlas también desde este punto de vista.

1.2. Antecedentes históricos de las campañas políticas

La agenda de las campañas electorales dependía del tipo de coyuntura


electoral. En las coyunturas de transición democrática, las agendas se
organizaban en torno a la derogatoria de algún dispositivo legal que violentaba
las libertades civiles y políticas, la modificación de las normas electorales que
impedían las elecciones libres, limpias, competitivas e inclusivas y otras
demandas que favorecían dicha transición. En la coyuntura electoral de
transición de 1956, el candidato de Acción Popular añadió a la agenda electoral
la necesidad de realizar reformas oligárquicas. En las coyunturas de
continuidad autoritaria, como la del 1950, la agenda giro en torno al
mantenimiento del orden o su cambio y la lucha contra las fuerzas que
intentaban subvertirlo, además de la conveniencia de abrir el escenario electoral
a la realización de elecciones competitivas y democráticas, derogando las
disposiciones dictatoriales que las impedían.

Las campañas electorales se desarrollaban en las plazas políticas de las


ciudades grandes y medianas y en los medios de comunicación de masas,
especialmente en la prensa escrita y en la radio. La TV, que apareció en 1958
en el Perú, se hizo presente en las campañas electorales de 1962 y 1963,
implicando una educación de los candidatos a las peculiaridades de relación
personalizada que plantea este medio. Algunos de los candidatos, como Haya
de la Torre, acostumbrado a las plazas públicas, tuvieron dificultades para
acomodarse a las exigencias comunicativas de la TV. Por otro lado, las
movilizaciones en las calles y los mítines en las plazas eran generalmente eran
interferidos no sol por partidos de los candidatos adversarios sino también por
los agentes de los gobiernos de turno, dando lugar a enfrentamientos violentos
con inevitables heridas y contusos. En las campañas de 1962 y 1963, los
periodistas y analistas electorales hablaban de “manifestó metro”, una
herramienta imaginada para medir el respaldo popular a los candidatos.

Los diarios y los radios jugaron un papel importante en las campañas


electorales. La importancia política y sus posibilidades de éxito se medían por el
medio de prensa que los respaldaban. Algunos candidatos pudientes como
José Quesada, 1939, adquirió El Comercio, La Prensa, La Crónica.

No existen datos sobre las fuentes y el monto del financiamiento de las


campañas electorales, pero los datos informales y los trascendidos de la prensa
escrita comentaban de bolsas organizadas entre las elites oligárquicas para
determinar a determinados candidatos

El inicio del proceso de renovación de los estudios electorales coincidió


justamente con el retorno de la democracia en el Perú en 1980.

1.3. Campañas electorales en la actualidad

1.3.1 Participación del ciudadano

Las actividades que se llevan a cabo durante ese período, animan a la


población a involucrarse en el proceso electoral, esto es, incitan a la ciudadanía
a participar políticamente. Por ello, para la teoría democrática, uno de los
efectos más importantes de las campañas es que potencian el compromiso
cívico de la población y, por ende, refuerzan la legitimidad del sistema.

Ello implica, en los procesos electorales, que los ciudadanos deben tener la
información pertinente para elegir entre distintas alternativas electorales. Los
enfoques racionales subrayan que para que exista capacidad de elección
racional no se requiere saber cada detalle de los candidatos, de los programas
electorales y demás cuestiones relevantes.

1.3.2. Influencia de los medios

La cobertura que los medios hacen de la campaña, la gran mayoría de las


noticias repiten las posiciones ya conocidas de los partidos políticos. Desde
esta perspectiva, más que proporcionar información, las campañas electorales
son eventos de carácter principalmente ritual en los que todos los actores se
comportan de una forma acostumbrada y considerablemente previsible. Esta es
la perspectiva de las denominadas, genéricamente, video, que sostienen, en
términos generales, que el tipo de información que proporcionan o privilegian
los medios provoca una espiral de cinismo político en el electorado.

Desde esta óptica, los mensajes de los partidos durante las campañas
electorales persiguen cuatro objetivos:

• Dirigirse al electorado fiel al partido para animarlos a votar por él.

• Dirigirse a aquellos que están predispuestos a votar por determinada


candidatura. La campaña es utilizada para afianzar su apoyo latente.

• Intentar convencer a los votantes habitualmente hostiles de que harían mejor


votando por un candidato de otro partido.

• Dirigirse a lograr la abstención de los votantes de los otros partidos.

La función de persuasión de las formaciones políticas durante las campañas ha


ido adquiriendo una importancia creciente.
Las campañas electorales en un sentido moderno, sus artífices depositaron una
gran confianza en los medios (así como en otras formas de publicidad), en tanto
que son considerados instrumentos efectivos para persuadir a los votantes.

Conclusión

Las primeras investigaciones concluyeron que las campañas reforzaban, pero


no cambiaban el apoyo a los partidos. Lo que sí hacen las campañas
electorales, según estos autores, es “reforzar” las predisposiciones políticas de
los votantes.

La conclusión es que los temas a los que los medios conceden importancia son
los mismos que los ciudadanos consideran relevantes. Los análisis se centran
en estudiar cómo se produce la presencia de esos temas en la campaña, cómo
se persuade al electorado, cómo se da la lucha para que los temas estén en los
medios, cómo marcar la agenda de los medios y, por ende, la del electorado.

Las campañas ejercen una influencia considerable sobre los resultados


electorales: bien se rechazó o bien se siguió con la tradición de que tenían
“efectos mínimos”. Son importantes ya que a través de ello los partidos políticos
toman estrategias para persuadir al elector a favor de ellos. Ello se demuestra
en el incremento del gasto de los partidos políticos en la gestión de la
información, publicidad e investigación sobre los grupos de votantes que se
constituirán en el objetivo de la campaña (blancos o targets electorales).
Comentarios

Es previsible que las campañas políticas en nuestro país sean crecientemente


diputadas ideológica y electoralmente. Que las discusiones sobre plataformas,
proyectos de nación y propuesta de cambio sean crecientemente diversas. Que
el cuestionamiento de los méritos intelectuales, técnicos y morales de los
partidos y candidatos contendientes se incremente en tono y fondo. Por todo
ello, se hace preciso que las reglas electorales sean cada vez más amplias y
más comprensibles para todos.

Solo así podrá haber auténticos debates, claridad en las opciones y


posibilidades de decisión para un electorado cada vez más frustrado y, tal vez,
más dispuesto a abandonar el juego democrático.

Es cierto que las propuestas no suelen ser la parte más memorable o


persuasiva de los mensajes de campaña, pero el discurso necesita una mínima
oferta atractiva para persuadir al ciudadano y lograr su objetivo que es ganar las
elecciones electorales.

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