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PENISNEID

"Nosotros sabemos menos acerca


de la vida sexual de las mujeres
que de los hombres. Pero no existe
razón para avergonzarse de esta
distinción; después de todo, la
vida sexual de la mujer adulta es
un continente oscuro para
la psicología".
Sigmund Freud.

Sigmund Freud desarrolló una de las teorías más importante de la sexualidad


humana indicando que desde el nacimiento uno posee una libido instintiva, esta
sexualidad hace referencia a toda serie de excitaciones y actividades que se
presenta en la niñez. La teoría sexual infantil hace mención a los pensamientos
del niño por el querer saber y por la curiosidad que sienten sobre la sexualidad,
la diferencia de los sexos y la procedencia del ser humano.
El término penisneid es un término alemán usado por primera vez por Freud
para referirse al punto clave de la sexualidad femenina, penisneid es traducido
como la “envidia del pene”. Braunstein, un psicoanalista argentino, en el 2001
indica que el término “envidia es un complejo sentimental constituido por deseo
y odio, deseo del objeto, odio de no tenerlo y el pene es un término que puede
entenderse de varias formas como el órgano genital, como el objeto libidinal,
como semblanza y como símbolo (falo).” Para poder desarrollar este apartado
vamos a referirnos al pene como símbolo, llamado en psicoanálisis falo, como
mencionan en el artículo “La envidia del pene” una reinterpretación a la luz de
la antropología del cuerpo, no se puede hablar de pene como órgano genital
porque la niña solo reconocería su identidad sexual como por contraste y
asociaría el pene con algo más material, el de tener o no tener pene y sería
una etapa superada porque ella se daría cuenta de lo que sí tiene que sería
una vagina, por otro lado no podemos referirnos al pene como objeto libidinal
porque solo nos referiríamos al objeto madre y objeto padre.
Para poder desarrollar por qué Freud indica que las niñas tienen envidia del
pene, es conveniente hablar sobre la primera teoría de la sexualidad infantil
que fue escrita en 1908 donde habla sobre la diferencia de los sexos, aquí se
presenta la creencia de que todos poseemos un pene, tanto hombres como
mujeres y es en el juego o en el observar de los niños donde se darán cuenta
de la diferencia anatómica entre ellos.
Según las teorías de la sexualidad, el saber de la diferencia anatómica es
donde la niña sentirá la envidia del pene porque ella al observar el órgano
genital del hombre sabe que no posee uno y es aquí donde ella quiere y anhela
poseerlo, por ende, sentirá la envidia, sabiendo esto Freud indica que se dará
un complejo de castración, cuando se habla de complejo, tanto de castración y
Edipo, se habla de una manera más cultural que natural a lo que Freud lo
introduciría como el significante. Ahora bien, se podría decir que existe un
fuerte lazo entre el complejo de castración y la falta de pene, siento este un
elemento fundamental para la envidia del pene.
Este complejo de castración en la niña comprende de 4 tiempos, el primer
tiempo corresponde a la idea de que todos poseen un pene, Freud indica que
el clítoris reemplazaría la idea del pene, a lo que nos lleva a un segundo tiempo
donde se da cuenta que el clítoris es demasiado pequeño para ser un pene,
como ya se había mencionado, a la hora que ella descubre visualmente que no
posee un pene es donde ella se siente castrada, solo habiéndose cumplido los
dos tiempos anteriores, nos llevaría al tercer tiempo donde tiene la idea que la
madre fue también castrada y por ello empezará un odio hacia ella por no
haberle dado un falo o por no haberle hecho hombre y por ultimo está la etapa
final que son las salidas que conllevan está castración, Freud indica que son 3 .
1. No hay envidia del pene: Esta primera salida corresponde a la reacción
de la niña ante el saber que no posee pene, si ella intenta tener una
rivalidad con el hombre, no tendría envidia del pene por lo que Freud
indica que esto puede traer consecuencias en un futuro.
2. Deseo de estar dotada del pene del hombre: Aquí ella puede negarse a
ser castrada y seguir creyendo que ella puede llegar a tener un pene y
querer siempre ser semejante al hombre y tener una masculinidad, esto
a un futuro puede con llevar a la homosexualidad.
3. Deseo de tener sustituto del pene: Para Freud esta es la posición
adecuada, aquí ella se da cuenta inmediatamente que es castrada y
esto le con lleva a tener tres cambios importantes. El primer cambio es
cuando la madre cede el lugar del padre, aquí se da inicio al complejo de
Edipo, el segundo cambio es de la zona erógena, hay un
desplazamiento de la libido, como indica Freud, el clítoris cede el lugar a
la vagina, por último, el tercer cambio es del objeto deseado, aquí el
pene cede lugar a un hijo, por ello, Freud indica que toma al padre como
objeto de amor.
Como podemos observar una vez pasado este complejo de castración, ello nos
remitirá al complejo de Edipo, es muy diferente esta etapa fálica con el del niño.
Cuando se habla de complejo de Edipo se habla de un conjunto de deseos
amorosos y a la vez hostiles hacia uno de los padres, en este caso sería el
deseo amoroso de la niña hacia el padre y la relación hostil con la madre,
¿pero por qué Freud indica que la niña siente ese amor hacia el padre? Es
justamente por esa “envidia del pene” que hará que se acerque a su padre, es
gracias a esa castración que se dio.
Habiendo expuesto el desarrollo psicosexual de la mujer en la niñez, nos
podemos dar cuenta que no existiría este desarrollo sin la envidia del pene,
pero podemos decir que ¿realmente existe esa envidia del pene?
Tenemos que tener claro que esta teoría, Freud lo elaboró en una época muy
distinta en la que ahora vivimos, pero ello no justica su postura machista, ya
que indicaba que las mujeres son “hombres sin penes” como algunos dicen él
era un misógino. Si bien Freud no abordó tanto la teoría sexual en la mujer con
la del hombre, no se puede decir que esta envidia del pene es algo que pasa
en todas las niñas, creo que hay algo más allá de esa envidia, concuerdo con
la teoría de Edipo porque es algo que se ha estudiado y es una cuestión que
culturalmente se puede observar, por ello, pienso que hay otro factor
determinante para que la niña dirija su amor hacia el padre, no concuerdo que
la niña vea al hombre como ser superior simplemente por el hecho que posee
pene.

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