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Elementos para un análisis


ético del entorno
de la salud reproductiva
Dr. Juan Guillermo Figueroa Perea

Introducción
En este texto se proponen algunas reflexiones sobre el entorno de al-
gunos dilemas éticos que pueden generarse en el ámbito de la salud re-
productiva; sin pretender agotarlos ni hacer una revisión exhaustiva de los
mismos, el texto presenta una forma de analizarlos, para lo cual se toma en
cuenta el origen mismo del concepto de salud reproductiva, así como lo que
implica su referencia constante a la dimensión de derechos humanos.

Adicionalmente, se muestran ejemplos de análisis ético desde lecturas


normativas, políticas e ideológicas aparentemente similares pero con resul-
tados diferentes, por lo mismo, más que buscar respuestas únicas, se privile-
gia la necesidad de hacer explícitos los supuestos desde los cuales se valora
moralmente una conducta o comportamiento en el ámbito de la salud repro-
ductiva. Precisamente esa revisión de las referencias morales es el objeto
central de nuestra aproximación ética a un ámbito como la salud reproduc-
tiva, permeado por una heterogeneidad de valoraciones morales, políticas y
de relaciones de poder.

La primera sección del texto sintetiza algunos elementos para interpre-


tar la ética desde el punto de vista de la filosofía y se aclara el punto de
vista de referencia, ya que las personas utilizamos la expresión con signifi-
cados diferentes. Lo que se busca es contar con una postura explícita de esta
aproximación a la ética.
Figueroa Perea Elementos para un análisis ético del entorno de la salud reproductiva

En una segunda parte se presenta una lectura ética del concepto de sa- cial en el ámbito de la salud reproductiva, donde los dos componentes del
lud reproductiva, es decir, antes de presentar algunos dilemas éticos en la término aluden a dinamismos reconocidos como objeto de garantías indivi-
vivencia de la salud reproductiva se recuperan algunos elementos para mos- duales y de derechos humanos.1
trar que el origen mismo de la categoría y del concepto salud reproductiva
proviene de una preocupación ética.

En el tercer apartado se presenta un esquema de cómo analizar ética-


1. La ética como análisis sistemático de la(s)
mente un dilema de salud reproductiva, sin pretender una delimitación de moral(es)
lo que es bueno o malo en la salud reproductiva; lo más que se busca es
compartir algunos elementos para que cada lector evalúe su punto de vista La ética es un análisis sistemático de las morales y debe subrayarse el
sobre los temas de salud reproductiva. Es decir, no se plantea la bondad o plural pues no existe la moral, sino que existen códigos morales a lo largo
la maldad de un comportamiento en la salud reproductiva, sino que se com- del tiempo y del espacio.2 Existen diferentes prácticas sociales que se acep-
parten recursos para que quien lea el texto desarrolle un análisis ético de tan en América Latina que no se aceptan en otros contextos regionales y en
temas específicos. otros momentos históricos. Lo que hace la ética es estudiar los diferentes
códigos morales y decodificar cuáles son los parámetros con los que cada
En la cuarta parte del texto se presentan ejemplos de análisis éticos en el uno se ha ido construyendo. Dichos referentes subyacentes a los códigos
ámbito de la salud reproductiva, abordando un tema complejo como lo es son ‘los prejuicios’; es decir, los supuestos detrás de nuestros juicios. No se
el aborto. Es relativamente sencillo analizar el aborto desde el punto de vis- pretende calificarlos como más adecuados o no, sino simplemente evidenciar
ta de la ética, en especial si no se pretende llegar a certezas definidas unilate- algunos de sus referentes normativos.
ralmente. Resulta un avance importante decir “no podemos estar seguros”, a
defender una postura con argumentos dogmáticos o bien, poco explícitos. Otro elemento que le interesa a la ética es identificar quién definió las
normas morales, dado que era reconocido con autoridad o con poder para
La quinta y última parte aporta algunos elementos para pensar la ética hacerlo, pero a la par quién no fue considerado para definir un código moral
en el entorno de la salud reproductiva, desde una perspectiva de derechos determinado. Con esto lo que luego se puede hacer es preguntarse si es na-
humanos, los cuales han sido reconocidos como un paradigma moral que se tural y obvio que dichas personas no debían ser consideradas o si existió al-
ha ido negociando y definiendo desde la heterogeneidad cultural que carac- gún elemento de exclusión, intencional o no para que no ser consideradas.3-5
teriza a la población mundial. De ser así, ¿cómo revertir la exclusión?

Queda pendiente para otros textos, pero a la par se sugiere la necesidad ¿Qué sucede cuando las normas que rigen los arreglos de la cotidianidad
de nombrarlo, la dimensión de la reflexión ética que acompaña los proce- que compartimos hombres y mujeres excluyeron a una parte importante
sos de la investigación sobre salud reproductiva, pero desde un enfoque más de las personas? Un elemento relevante de este análisis ético es identificar
amplio que el que tradicionalmente se usa en los cuidados éticos institucio- quiénes definieron las normas y a la par quiénes no fueron considerados,
nalizados. debiendo haberlo sido. Eso va a ser muy relevante cuando pensemos que esa
norma afecta a personas que no fueron consideradas al definirlas; es decir,
La mayor parte de la atención se centra en códigos de ética en salud, en cuando un dilema afecta a una población y esa población no es claramente
comités de ética y en la formación ética de los investigadores. Sin embargo, considerada en la definición de la norma, emerge la posibilidad de la exclu-
es casi nulo el desarrollo de estrategias de cuidados éticos centrados en lo sión social y de la violación de sus respectivos derechos.6,7
que podría denominarse el “empoderamiento de las personas investigadas”.
Es decir, no basta crear comités, definir códigos y formar éticamente a los La reflexión ética permite identificar cómo cambian las normas en el
investigadores, ya que en los tres casos pareciera que los investigadores tiempo y además quiénes fueron los autores de esa transformación. Es decir,
están cuidándose a sí mismos. las normas morales cambian pero no en abstracto, sino porque personas con-
cretas se resisten a las normas que están vigentes en contextos específicos.
Nuestra propuesta sugiere pensar que los(as) investigados(as) y las in- Dicho de otra forma, los seres humanos somos capaces de hacer historia, a
vestigadas se pueden enriquecer en el proceso de la investigación, en espe- través del cuestionamiento de las normas, ya que más allá de lo teórico, si la

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ética permite revisar prejuicios y supuestos de los códigos morales, parale- antes de que esta adquiera forma, ya sólo podremos justificarla o renegar
lamente lo que hace es obligarnos a revisitar nuestra cotidianidad; es decir, de lo que pasó, mientras que si lo hacemos antes, podemos influir sobre la
cómo la hemos venido construyendo.8,9 Por ende, la ética estimula a adoptar misma.
una toma de posición ante la realidad.10 No es únicamente una reflexión teó-
rica, ya que si reflexionamos sobre las normas que rigen la sexualidad o la Uno de los códigos morales que ha identificado la ética con un mayor
reproducción, estamos también reflexionando sobre nosotros mismos.10,11 consenso en el nivel internacional y con amplio reconocimiento nacional es
el de los derechos humanos.6,7,13 Dicho código es un ejemplo de código moral
Como una de las posibilidades que tiene la ética es esa toma de posición centrado en la dignidad como supuesto principal, en especial cuando dichos
ante la realidad y que nos obliga a adoptarla no únicamente como una cosa derechos se interpretan no como recetas de comportamiento a seguir de
teórica, sino como una experiencia práctica, la ética lo que pretende es que manera uniforme, sino como potenciación de capacidades humanas y como
la gente al revisar sus códigos morales adopte ciertas conductas. No es lo un reconocimiento de los individuos titulares de los mismos, tomando deci-
mismo actuar de cierta forma por haber aprendido que algo es lo bueno y siones y asumiendo responsabilidades sobre su quehacer cotidiano.14
otra acción lo malo, que adoptar comportamientos determinados por crite-
rios de justicia, de equidad o de búsqueda del mal menor, entre otros posi-
bles referentes valorativos. Esto ayuda a no perderse en la discusión sobre
lo bueno y lo malo, en especial si se supone que sólo existe una definición
2. El entorno de la salud reproductiva
de la bondad y la maldad, sin reconocer la existencia de matices, como se
Comenzamos el segundo apartado señalando que la salud reproductiva,
comentará más adelante.
se presenta como una propuesta de reconocer la capacidad de decidir sobre
la reproducción, el tener acceso a embarazos y partos seguros, el asegurar
Más que obsesionarnos por la bondad o maldad de los comportamientos
tanto la sobrevivencia infantil como el bienestar materno y el acceder a re-
humanos, lo que interesa subrayar en este texto es la referencia a las con-
laciones sexuales sin infecciones de transmisión sexual y sin embarazos no
ductas a seguir, como resultado de una toma de posición ante la realidad
deseados.15,16
y no por una definición abstracta de bondad y de maldad. La ética trabaja
conceptos tan interesantes y difíciles al mismo tiempo, como la libertad,
Este concepto presenta interesantes analogías con terminología utiliza-
la responsabilidad y la justicia, combinando cada uno de los mismos con
da previamente para enmarcar acciones gubernamentales relacionadas con
categorías como coacciones internas y externas, conocimiento de causa y
los comportamientos reproductivos, aunque marca alguna distancia respec-
los procesos de no discriminación ni exclusión. Por lo mismo, es necesario
to a las mismas. Se ha usado la expresión control natal para aludir tanto al
acercarse desde una visión más integral de la ética al tema de la salud re-
control del propio cuerpo desde una lectura feminista, como al control de la
productiva y a la noción de dignidad, a la que se recurre constantemente en
población, pensando en lo que paso con otros cuerpos, desde una lectura de
reflexiones sobre el tema.
control del crecimiento poblacional.17
A final de cuentas, la ética está buscando asegurar que se respete la
A fines del siglo XIX y principios del XX se hablaba de control natal,
dignidad de las personas, concepto nada sencillo de definir de manera con-
pues las feministas planteaban “mi cuerpo es mío, nadie tiene porque meter-
sensuada. Sin embargo, se usa constantemente al defender posiciones diver-
se con él sin mi permiso”; con el tiempo los gobiernos retomaron el concepto
sas en el campo de la salud reproductiva; por eso proponemos que respetar
y pusieron el énfasis en el interés gubernamental por controlar los cuerpos
la dignidad de un individuo es estimularlo y facilitarle el camino para que
de las personas.18 Como además se asumía una lectura feminizada de la re-
ejerza como persona: tan sencillo y tan complejo como eso. La ética busca
producción donde las que se reproducen son las mujeres, se controlaban los
asegurar un respeto de la dignidad de los individuos, en la medida en que
cuerpos de las mujeres.19 (Figueroa y Rojas 2002). Después se pasó a salud
estos ejercen como personas y ejercer como tales es poder hacer historia.12
materna-infantil, en menor medida a la paternidad responsable y luego a la
señala que el primer derecho que tenemos los humanos es el derecho a la
planificación familiar.17
preocupación, y él se refiere a que tenemos la capacidad de ocuparnos de
la realidad antes de que la realidad ocurra, evitando con ello que seamos
Se ha usado la expresión salud materna e infantil para aludir al entorno
meros observadores de la misma. Es decir, si no nos ocupamos de la realidad
saludable del embarazo, a la par que se ha utilizado la categoría de planifica-

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ción familiar para enfatizar la capacidad de los individuos para organizar su Ahora bien, ¿cómo podemos sintetizar lo que se propone estimular des-
descendencia de acuerdo a sus preferencias y tomando diferentes decisiones de la salud reproductiva, como algo diferente a los términos y categoría
al respecto. Con otras prioridades, se ha recurrido a la expresión paternidad previamente utilizados? Con el riesgo de cualquier esquematización, desta-
responsable, queriendo hacer evidente la referencia a la población masculi- camos las siguientes cuatro dimensiones en la búsqueda de reducir los des-
na, algo que es menos claro en los conceptos anteriormente mencionados, encuentros anteriormente esbozados: interesa desfeminizar la reproducción
aunque básicamente como obstáculos de las decisiones reproductivas toma- evidenciando sus condicionamientos de género, ciudadanizar las políticas
das por las mujeres.20 públicas reconociendo a los titulares de derechos, desmitificar la sexualidad
como el espacio central de los varones y desesencializar las identidades de
La salud reproductiva surge con una necesidad de nombrar de otra ma- género que entran en juego en la construcción de los espacios reproducti-
nera la cotidianidad de la reproducción, de verla de otra forma, evidenciando vos. Es evidente que ello tiene implicaciones éticas en diferentes niveles.
la sexualidad y las relaciones de poder en los intercambios reproductivos.15
El sentido que busca enfatizarse con la salud reproductiva y con un concep-
to paralelamente utilizado, como los es el de derechos reproductivos, es que
se requiere de una lectura integral de los comportamientos reproductivos
3. ¿Podemos intentar un análisis ético
de la población, pero a la par una vigilancia cuidadosa de los conflictos y del entorno de la salud reproductiva?
dilemas que se han presentado en diferentes contextos entre las personas
e instancias que participan en la construcción de los entornos reproduc- A partir de los considerandos anteriores sobre el significado de la ética
tivos y de salud. Poder documentarlo y evidenciarlo posibilita sistematizar y el origen de la salud reproductiva, en este apartado se presenta de manera
los supuestos desde los cuales se originó el concepto de salud reproductiva, sintética una propuesta de esquema para desarrollar un análisis ético de
dándole con ello una lectura ética su definición. algunos de los dilemas teóricos, políticos, metodológicos y existenciales que
pueden llegar a presentarse en el ámbito de la salud reproductiva.* Para ello
Actores relevantes que en diferentes contextos entran en tensión al- se muestran y se comentan los diferentes componentes de un esquema que
rededor de la salud y la reproducción incluyen en primera instancia a las proponemos para un análisis ético de diferentes temáticas y dilemas en el
personas que se reproducen, a diferentes agentes institucionales que im- ámbito de la salud reproductiva:*
plementan políticas y programas que influyen en la reproducción, así como
actores sociales que definen normas que moldean dicho proceso. Paralela- a) ¿Cuáles son los principales dilemas en esta temática? Un primer mo-
mente, podemos mencionar a ciudadanos de ambos sexos, avalando o cues- mento consiste en identificar si realmente son dilemas éticos, por el
tionando aprendizajes de género y desigualdades sociales en los espacios hecho de poner en juego dos o más esquemas de valoración moral, o
reproductivos, así como a organizaciones e investigadores visibilizando ex- bien si se trata de disputas teóricas, metodológicas o incluso de malos
periencias, necesidades y derechos de quienes se reproducen. entendidos derivados de un uso ambiguo del lenguaje o de confusiones
en el planteamiento de un problema determinado.
Ahora bien, con estos personajes como referencia, podemos entender de
qué forma se originan algunos de los desencuentros en el entorno de lo que b) ¿Por qué es un dilema, desglosando normas que entran en conflicto
interesa englobar con la expresión salud reproductiva y que en el caso de no y reconociendo sus supuestos? En este caso se trata de identificar los
prevenirse, podrían repetirse incluso con esta nueva terminología. Dichos referentes normativos que entran en disputa ante una problemática
conflictos, dilemas o desencuentros emergen de la existencia de distintas específica; es decir, cuáles son los supuestos de las diferentes lecturas
cosmovisiones entre los actores anteriormente mencionados, de su diferente posibles de una temática que se busca resolver, a través de un análisis
acceso al poder en los intercambios cotidianos, a su poca práctica o bien falta ético. Muchas veces hacerlo explícito permite reducir diferencias dis-
de interés en dialogar con los otros personajes, o incluso a su resistencia a cursivas y a la par identificar coincidencias ideológicas, a pesar de todo,
interactuar con las diferentes interpretaciones de lo que se esperaría como o bien vertientes de solución del mismo.
conveniente o recomendable en el espacio de la relación entre salud y re-
producción. En este entorno es importante también la riqueza o el reduccio- * En Figueroa (1999) y Figueroa y Rodríguez (2000) puede verse un desglose más deta-
nismo que caracteriza a los recursos disciplinarios de los que se dispone al llado de los supuestos teóricos y prácticos para la puesta en práctica de este esquema
interpretar la reproducción. analítico.

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c) ¿A quién afecta directa o indirectamente el dilema en cuestión? y ¿en poblaciones en cuestión, ya que de alguna forma la investigación se
qué sentido las personas se ven afectadas de una manera distinta por el puede convertir en un ejercicio ciudadano de acompañamiento a las
hecho de ser varones o mujeres y por lo que ello significa socialmente? voces y necesidades de diferentes grupos poblacionales a los que afecta
Este momento del análisis lo que busca es evidenciar que los compo- una problemática específica de salud reproductiva.
nentes de la salud reproductiva afectan de manera distinta a varones y
a mujeres y que a pesar de ello, en muchas ocasiones se ignora la ex- f) ¿Qué diferencia hace que las personas sean hombres o mujeres en la de-
periencia y los puntos de vista de quien vive más de cerca el problema finición de las normas? y ¿fueron tomadas en cuenta por ser hombres o
en cuestión.21 mujeres? Este momento analítico pretende profundizar en la forma en
que una problemática afecta a personas en función de su sexo-género,
Es difícil imaginar una reflexión sobre el aborto sin tomar en cuen- pero además, en función de lo que socialmente se le atribuye como va-
ta a las mujeres que potencialmente y en la práctica viven el aborto, lor a dicha diferencia o especificidad. No se pretende afirmar que una
mientras que sería artificial discutir el cáncer de próstata sin tomar en persona que no es afectada o influida aparentemente por un dilema éti-
cuenta a la población masculina expuesta a dicho problema de salud. co, no pueda aportar conocimiento e información para la resolución del
Además de la especificidad por sexo de ciertos problemas, hace falta mismo, pero lo que sí parece contradictorio sería el invisibilizar las opi-
problematizar lo que socialmente significa ser mujer o varón y el valor niones y experiencias de quienes directamente viven una problemática
que se le da a ello, ya que si de acuerdo a diferentes autores tiene un en el ámbito de la salud reproductiva, o bien que por el hecho del valor
valor social diferente podría suceder que un dilema ético en sí mismo que socialmente se le atribuye a su sexo biológico tenga una autoridad
se deriva del hecho de que se le de una relevancia distinta a las expe- distinta en la resolución de un problema concreto que les afecta.22
riencias de salud enfermedad vividas por mujeres o por varones.
g) ¿Cómo han cambiado las normas en el tiempo? y ¿de qué procesos y ac-
d) ¿Cómo se ha resuelto (o intentado resolver) el dilema de referencia? tores sociales ha dependido el cambio? Uno de los elementos relevantes
y ¿cómo se definieron las normas para resolverlo? Cuando se logra del análisis ético, a través de su desglose de supuestos normativos y de
explicitar la forma en que un dilema específico ha sido resuelto en la identificación de personajes incluidos y excluidos en la definición
contextos específicos, es más sencillo explorar los supuestos detrás de de normas para resolver problemáticas específicas, es hacer evidente la
dichas respuestas sociales y adoptar posturas teóricas y políticas res- manera en que diferentes actores sociales se han acomodado y adap-
pecto a las mismas. Incluso, es más viable el evidenciar ambivalencias tado a lo existente, mientras que otros se han resistido e incluso han
o bien un ejercicio unilateral del poder de la autoridad o bien de los buscado transgredir las normatividades con el fin de hacerse presentes
usos y costumbres al abordar la problemática en cuestión. De paso, es en “su ejercicio como persona” y en la práctica de la titularidad de sus
posible evidenciar sesgos de género, de clase o de algún otro tipo en el derechos relacionados con el tema en cuestión. Es decir, las principa-
tema en cuestión, así como diferentes proceso de exclusión.3-5,21 les teorías de cambio social más que surgir desde las situaciones de
privilegio social han emergido desde la experiencia de grupos socia-
e) ¿De qué manera la población afectada por el dilema, fue tomada en les marginados o excluidos, en su proceso de hacerse presentes como
cuenta para la definición de normas? Este es un momento muy rele- titulares de derechos. Eso permite constatar que las normas sociales
vante a partir de una aproximación desde los derechos humanos, así que orientan y permean la solución de problemas específicos no son
como desde la concepción filosófica de la dignidad, ya que más que inamovibles en el tiempo y que por ende, los arreglos sociales actuales
imaginarse desde un punto de vista demagógico se propone desde una son perfectibles a futuro, a través del quehacer específico de actores so-
visión que reconoce la necesidad de incorporar a cualquier análisis éti- ciales.
co de dilemas el contexto de la población afectada por los mismos. Es
decir, es factible que existan poblaciones donde difícilmente pueden h) ¿Existen personas afectadas por el dilema que no lo perciban como tal
conocerse sus puntos de vista de manera directa, pensando por ejemplo o que no perciban posibilidades de influir sobre la solución del mis-
en personas con alguna discapacidad, infantes o personas de grupos mo..? y ¿por qué? Este momento analítico pretende hacer evidente la
étnicos que no dominan el lenguaje dominante en una sociedad de- necesidad de revisar la forma en que son tomadas en cuenta las per-
terminada, o bien alguna otra población. Sin embargo, en estos casos sonas específicas que son afectadas por un dilema o bien influidas por
la pregunta pretende recuperar el conocimiento acumulado sobre las las normas que han sido utilizadas para su solución. Incluso, este pro-

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fundizaría en la lógica de qué tanto se dan cuenta de la manera en que La propuesta comentada en los párrafos anteriores pretende acompa-
dichos dilemas o normas repercuten sobre las mismas. No se trata de ñar la documentación de casos críticos en el área de la salud reproductiva,
subestimar a las personas desde una lógica paternalista, pero sí de po- estimular análisis éticos específicos de algunos dilemas en temáticas que
ner a prueba la manera en que tienen conciencia del problema y de ejemplifiquen diferentes formas y dimensiones al abordar nuestra cotidia-
las condiciones de posibilidad teóricas y fácticas de intervenir en la so- nidad y sistematizar la discusión a partir de un esquema analítico que debe
lución del mismo. No se trata de una postura demagógica que pudiera depurarse a lo largo del proceso de reflexión colectiva. Todo ello, con el fin de
paralizar el abordaje de un problema hasta que se pueda asegurar que reflexionar sobre las condiciones de posibilidad para la puesta en práctica
toda persona afectada por el problema aporta su opinión sobre el mis- de ciertos consensos éticos alrededor del ejercicio de la reproducción.14
mo. Al contrario, se propone discutir qué hacer cuando se constata que
una persona no lo percibe como problema ni dilema, a pesar de que el Este esquema puede servir para repensar dinámicamente la discusión
análisis del tema la muestra como afectada por la situación en cuestión; sobre el entorno de la salud y la reproducción en tanto objeto de derechos,
¿es necesario tomar decisiones por ella, a partir del conocimiento acu- además de ser relevante como propuesta de investigación y de postura polí-
mulado, sin necesidad de problematizarla, o bien hace falta generarle el tica, al identificar procesos de resistencia social a la normatividad institu-
cuestionamiento, sin saber si necesariamente esa sería la preferencia de cional, así como los elementos de adaptación, reacomodo y transformación
la población en cuestión? Como puede verse este esquema no busca dar individual y grupal respecto a los cambios sociales y a las intervenciones
soluciones sino compartir una lectura ética de cómo desglosar algunos institucionales.23-27 No hay respuestas únicas, pero sí búsquedas constan-
de los componentes asociados al ámbito de la salud reproductiva, cuan- tes de negociación de nuestras diferencias.
do a la par se considera la dimensión de los derechos humanos como
recurso de los individuos para participar en sus respectivas historias
individuales y grupales.
4. Ejemplos de análisis ético en el entorno
i) ¿De qué manera diferentes procesos sociales estimulan o dificultan la de la salud reproductiva
participación de las personas en la solución de los conflictos? Un paso
adicional, dividido analíticamente pero imaginado de manera simultá- A continuación se presentan algunos ejemplos de análisis ético en el ám-
nea en términos temporales, lo representa el considerar algunos con- bito de la salud reproductiva, recurriendo para ello a diferentes dimensiones
dicionamientos sociales e individuales que pueden facilitar o complicar anteriormente señaladas.
el que personas específicamente afectadas por un dilema o que experi-
mentan conflictos muy concretos en el ámbito de la salud reproductiva, Entre la deontología y la teleología
se puedan dar cuenta de los mismos y paralelamente, se reconozcan
con autoridad y con los recursos necesarios para participar en su revi- De acuerdo con diferentes lecturas filosóficas las personas construimos
sión, discusión y posible solución. No obstante, no lo imaginamos úni- formas de valorar la realidad, de acuerdo a criterios deontológicos o bien
camente aprendiendo y repitiendo las normas existentes para ello, sino con criterios teleológicos.2,28 La lectura deontológica reconoce que entre lo
incluso con la posibilidad de transformar las normatividades vigentes, bueno y lo malo no hay matices; es decir los actos humanos se califican des-
a partir de la toma de distancia de su cotidianidad y de su capacidad de de una dicotomía, según la cual los comportamientos pueden ser calificados
pre-ocuparse de la realidad, al saberse coautoras de la misma. como intrínsecamente buenos o malos. En la contraparte la lectura teleo-
lógica reconoce un rango al valorar y ello le permite identificar diferentes
j) ¿Cuáles son los obstáculos para hombres y mujeres al participar en la matices, pues no existe lo totalmente bueno ni lo totalmente malo, ya que
transformación de las normas? Un paso siguiente consiste en profun- depende de los contenidos, de las situaciones y de las intenciones del queha-
dizar si las condiciones de posibilidad para abordar los dilemas, tan- cer humano. Una segunda característica es que de acuerdo a la deontología
to al evidenciarlos como al solucionarlos, están condicionadas por los el valor moral principal es el obedecer reglas socialmente definidas, mien-
aprendizajes de género de mujeres y de varones y si ello significa una tras que el valor principal desde la teleología es el actuar de acuerdo a la
diferencia en la forma de ejercer los derechos de cada persona, así como conciencia, la cual se construye y se ejerce en contextos específicos.2,28
el reconocimiento explícito a su dignidad como ser humano.
Es decir, se trata de dos formas de ver la realidad totalmente diferentes,

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no únicamente por las distintas clasificaciones de la cotidianidad, sino por- la dificultad de una respuesta o bien de la solución aplicable a todos los con-
que tienen supuestos muy diferentes de cómo ver la realidad y cómo posicio- textos por igual.
narse ante la misma. Estos contrastes dificultan la interacción entre quienes
se aproximan a la realidad con una y otra visión, e incluso más allá de las vo- En el primer caso –al que el autor denomina mujeres heterónomas–*
luntades explícitas de cada persona, por lo que se necesitan estrategias para las mujeres negaban la posibilidad de algún día recurrir al aborto, incluso a
dialogar desde las diferencias. La deontológica pareciera más rígida en sus pesar de que ellas tuvieran la experiencia de un embarazo no buscado. En el
categorías y opciones mientras que la teleológica ofrece una gama mayor de segundo caso –llamado por el autor como de las mujeres heterónomas–**
posibilidades. Mientras que la primera solamente clasifica en bueno y malo las mujeres antes que reconocer con certeza que recurrirían a dicha prác-
los comportamientos, la segunda encuentra variantes y posibilidades diver- tica, aclaraban que la decisión específica dependería de las circunstancias
sas para dar cuenta del valor moral de un acto en una situación específica. del caso, incluso aunque no negaran de manera categórica la posibilidad de
interrumpir un embarazo.
Entre la heteronomía y la autonomía
En el primer grupo los juicios usados eran más de tipo deductivo, a partir
Como una forma de hacer más específico este contraste, retomemos los de una norma preexistente, de una valoración culposa de la sexualidad y de
resultados de la investigación de Carlos Lista,29 quien llevó a cabo un estu- un supuesto en el que la maternidad es el destino obligado y natural de las
dio con mujeres católicas y les preguntó algunos elementos del contexto mujeres, por lo que parecería una contradicción querer interrumpir un em-
en el que se enmarca la posible decisión sobre un aborto; es decir, el autor barazo, tanto porque se asumía como “la consecuencia natural del ejercicio
quería identificar elementos que tomaban en cuenta dichas mujeres para sexual”, como porque era un bien deseable por su lectura identitaria de las
evaluar la posibilidad del aborto, pero más que centrarse en la pregunta de mujeres. En la contraparte, el segundo grupo de mujeres, construían juicios
si estarían a favor o en contra del mismo, quería conocer algunos supues- de tipo inductivo para dar cuentas de sus referentes morales, dialogando de
tos que consideran las personas para decidir sobre el tema. Les preguntaba alguna manera con las normas y con el contexto, con el fin de buscar una
sobre sexualidad y sobre la maternidad, a la par de indagar cómo definían forma de resolver el problema como un caso nuevo y no como algo prees-
las mujeres sus proyectos personales, cómo imaginaban al producto de un tablecido.
embarazo y de qué dependía el tipo de seguimiento de las normas que social-
mente existen relacionadas con dicha temática. En este segundo grupo se habla frecuentemente de la maternidad no
como algo obligatorio sino como un proyecto opcional sobre el que puede
Después de entrevistar a una muestra de mujeres, las agrupó en dos, de decidirse en momentos específicos, e incluso con una visión de la sexualidad
acuerdo a la regularidad de sus respuestas. Las personas de un primer grupo no necesariamente vinculada con el embarazo y la maternidad, sino con la
hablaban del feto como una persona, mientras que las del segundo grupo lo posibilidad del placer. Ante un embarazo no planeado, las mujeres del se-
describían como un conjunto de células o un producto en gestación, lo cual gundo grupo enfatizaban el derecho y la posibilidad de rectificar, más que
definía formas distintas de relacionarse con el mismo. Las primeras elabora- la obligación de asumirlo como un error que hay que asumir de manera
ban juicios abstractos como guía de lo que se debía hacer ante una situación inevitable, como se planteaba en el primer grupo. En el segundo esquema
específica, además de que reconocían que la autoridad que origina dichas un resultado no deseado se puede tratar de rectificar sin mayor problema, o
normas a cumplir está afuera de la persona y que no depende directamente bien como una estrategia posible derivada de la capacidad de preocupación
de su actuar; aludían a frases como que el aborto “es algo ilegal”, o bien “que de los seres humanos.
es un pecado”, así como a expresiones que se referían a “que la costumbre no
lo permite”; es decir aludiendo a un entorno institucional o social que está Vale la pena acotar que cuando Lista29 entrevistó a las mujeres no se
observando y calificando el actuar de una persona. privilegiaba indagar si estaban de acuerdo con el aborto en sí, sino cómo
construían sus argumentos sobre la posibilidad de necesitar recurrir al mis-
En la contraparte, las mujeres del segundo grupo elaboraban argu- mo ante situaciones concretas. Recordemos que eran dos grupos de mujeres
mentaciones más específicas, dentro de las cuales ocupaba un lugar muy católicas y lo que varió fueron los matices en los elementos que toman en
importante la libertad de los individuos, a partir del contexto de los indivi-
duos afectados por el problema. Incluso enfatizaban la necesidad de matizar * Mujeres cercanas a una aproximación deontológica.
las normas vigentes, a partir de la problemática en cuestión, reconociendo ** Mujeres cercanas a una aproximación teleológica.

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cuenta para decidir en un momento determinado. Eso es lo que posibilita no cuenta con la información genética suficiente para llegar a ser lo que
un análisis ético, en especial si no se obsesiona por una lectura rígida de lo potencialmente puede suponerse, sino que son necesarios diversos elemen-
bueno y lo malo como una dicotomía única. La reflexión ética enriquece pro- tos exógenos necesarios para desarrollo corteza cerebral. Por ello no puede
fundamente nuestra lectura de diferentes dilemas, si la tomamos no como asegurarse la certeza de la vida humana desde el principio del proceso, ya
el catálogo de buena conducta de las cosas que hay que hacer, sino como la que éste puede interrumpirse de manera natural.30
posibilidad de repensar los juicios que utilizamos cotidianamente para acer-
carnos a cualquier fenómeno que queremos entender, desde las diferentes No es de nuestro interés discutir en este momento la validez o no de
interpretaciones que existen del mismo en una sociedad heterogénea. alguna de las dos interpretaciones, como tampoco lo buscábamos en otras
dicotomías señaladas anteriormente, sino nuevamente hacer evidente que
De manera paralela nos interesa señalar que en este texto no interesa dependiendo de los supuestos de un proceso de valoración de una conducta
escoger o defender alguna postura como más válida en la reflexión moral, se llegan a conclusiones muy distintas, a pesar de compartir aparentemen-
como podría ser la disyuntiva entre la deontológica y la teleológica, ni entre te la pertenencia a una misma visión de la realidad. En la primera lectura
la heterónoma y la autónoma, sino ir evidenciando los distintos escenarios teológica se tiende a rechazar moralmente la posibilidad del aborto en casi
a los que se llega cuando se hacen evidentes algunos de los supuestos que todas las condiciones que algunos códigos civiles han calificado como ate-
orientan nuestros juicios, incluso pareciendo ser parte de una misma tradi- nuantes legales (como la violación, la malformación congénita y los riesgos
ción moral, como lo son los dos grupos de mujeres católicas, anteriormente para la salud de la mujer embarazada, entre otros), mientras que desde la
referidas. segunda aproximación, se acepta la posibilidad de que ante un embarazo
la persona tome decisiones, de acuerdo a su conciencia y reconociendo como
Entre dos posturas teológicas católicas información orientadora una lectura integral de la realidad en cuestión. En
la primera se tiende a proponer que las personas deben obedecer una norma
Más allá de las interpretaciones diversas que las personas pueden hacer que prohíbe y sanciona el aborto, mientras que en la segunda se reconoce que
en su cotidianidad sobre las normas morales que buscan dirigir su pertenen- los individuos deben obedecer a su conciencia, para lo cual deben informarse
cia a ciertas instituciones o agrupaciones sociales, a continuación interesa y asumir responsabilidades sobre sus diferentes decisiones.
mostrar incluso las diferencias entre intérpretes y estudiosos de una misma
tradición normativa en diferentes ámbitos del quehacer humano que reper- Puede identificarse algunas analogías con las categorías de deontología
cuten en las experiencias de salud reproductiva. Nos referimos a dos lectu- y teleología o bien de heteronomía y autonomía, comentadas en párrafos
ras teológicas de la “misma moral” institucional a propósito nuevamente del anteriores. A continuación veamos otra forma de avanzar en el análisis pero
tema del aborto.30 Recordemos que la teología lleva a cabo un estudio formal ahora poniendo en práctica algunos elementos del esquema comentado en el
recurriendo a la hermenéutica de los materiales reconocidos como válidos tercer apartado de este texto.
para guiar las normas de una determinada tradición, como lo es la católica,
para el caso que nos interesa mostrar a continuación.31 Un ejemplo del esquema de análisis ético

De acuerdo con la lectura institucional que más se conoce en la moral Una consideración importante que hace Mejía32 al abordar el tema del
católica, desde el inicio de un embarazo existe en ‘potencia’ la condición de aborto es que su análisis como dilema ético necesita basarse en circunstan-
ser humano en el producto de la gestación y por ende hay un interés por cias concretas, pues si nos referimos solamente a los principios que entran
protegerlo. Se argumenta que dicha gestación cuenta con la información en conflicto, no habría consenso posible, ya que dependiendo de cada cosmo-
ontológica para ser reconocido como humano, pues se interpreta que su visión se defenderá el derecho a la vida, al derecho al control del cuerpo y al
esencia humana es suficiente para asumir la existencia y la certeza de vida bienestar, entre otras dimensiones. Al pensar en qué personas son afectadas
humana desde el inicio del embarazo. En la contraparte, existe otra lectura por el dilema de la decisión de la interrupción del embarazo antes de la
teológica, también de los textos de la tradición católica, según la cual es viabilidad del producto, se afirma que la práctica del aborto inducido consti-
necesario identificar el momento del desarrollo de un embarazo en el cual tuye un dilema para la mujer que decide recurrir a él y para el prestador de
pueda asegurarse la obtención de la individuación, con el fin de poder hablar servicios que lo practica. A ello se añade que la razón para recurrir al aborto
del carácter de humano del producto; es decir, se considera que el cigoto y el momento del desarrollo en el que se induce tiene una influencia directa

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en la valoración que se hace del hecho. Tan es así, que diferentes normativi- tada por este dilema, sino que hace referencia a su pareja e hijos si los hay,
dades y legislaciones se aplican a los diversos motivos y momentos. al ser en gestación y a la persona que lo practica. Adicionalmente, afirma
que indirectamente afecta a toda la sociedad, en la medida en que genera si-
Las razones van desde el que la continuación del embarazo constituya tuaciones de injusticia social, particularmente hacia las mujeres más pobres;
un peligro para la vida de la mujer hasta la libre demanda de las mujeres además se convierte en un problema de salud pública por las complicaciones
de interrumpir un embarazo que no desean, pasando por las malformacio- derivadas del aborto clandestino. Este hecho transgrede las normas mora-
nes genéticas, la inseminación artificial no consentida, cuando el embarazo es les prevalecientes en algunos contextos, generando incertidumbre respecto
producto de una violación y las razones socioeconómicas. El momento en de valores sobre los que se han construido algunos arreglos sociales. Lo que
el que se considere llevar a cabo la interrupción constituye otra dimensión Mejía propone es cómo atender esta problemática, sin violentar los dere-
al valorar; esto es, el aborto inducido durante el primer trimestre del emba- chos ni tomar decisiones unilaterales sobre el cuerpo de la mujer que vive el
razo es el que genera menos conflictos, por lo que en muchos contextos, se embarazo, ya que el hecho afecta de manera distinta a hombres y mujeres,
cuenta con las facilidades sanitarias y legales para recurrir al mismo. Exis- pues son ellas quienes deben enfrentar directamente las consecuencias de
ten lecturas que seguirían negando el aborto como posibilidad en cualquier ese embarazo.
situación, mientras que otras lo condicionarían en función de los motivos, de
los momentos y de las personas que lo deciden. La autora da un paso más y comenta que entre las personas que pueden
verse directamente afectadas por la resolución del dilema y que no lo per-
Mejía32 señala que la interrupción de un proceso relacionado directa- ciben como tal, están los hijos de la mujer que lo enfrenta. Otro personaje
mente con la vida humana, no puede ser considerada como bueno en esencia afectado son los proveedores de servicios de salud, en tanto tienen en sus
ni como algo deseable. Más bien lo presenta como un recurso para evitar manos una de las posibles soluciones del dilema. A estos actores sociales,
un mal mayor, en función de las condiciones con que cuenta la mujer ante un Mejía32 le añade la referencia de un alto porcentaje de hombres y mujeres
embarazo indeseado. En ese momento la persona puede ponderar su vida que no se perciben como afectados por este conflicto, por vivirlo como des-
con la del ser en gestación, tomando en consideración las circunstancias que tinos inevitables, sobre los que difícilmente se pueden tomar decisiones, en
pudieran verse afectadas ante una u otra solución al dilema y valorando los parte debido a la rigidez del ámbito normativo en el que se desarrollan. Por
mínimos requerimientos emocionales y materiales, así como el bienestar de ello, no siempre tienen clara conciencia de las posibilidades de decisión y de
sus hijos, cuando los hay. En este caso también entra en juego el proyecto transformación de las soluciones existentes del dilema.
de vida de la mujer, ya que se reconoce en muchos contextos que la materni-
dad es un destino inexorable de las mismas y por lo tanto se tiende a limitar Es claro que si las personas afectadas por el dilema fueran tomadas en
sus decisiones sobre su capacidad reproductiva, a la par que se cuestiona su cuenta, esto debería contemplarse desde una visión integral, donde las mu-
probidad moral si recurren al aborto. Por ello se le podría tratar de impedir jeres tuvieran un lugar privilegiado en tanto autoridades y en tanto seres
que tome decisiones incluso de acuerdo con su conciencia, sus necesidades y que requieren de información veraz, de un acompañamiento solidario y del
deseos, en especial si éstos contradicen las expectativas sociales. acceso a servicios de salud que cumplan con normas de calidad, ya que se-
gún la autora, cuando una mujer decide interrumpir su embarazo, persiste
En este momento de su reflexión, la autora alude al valor normativo de en ello hasta lograrlo, aún a costa de su vida.
las reivindicaciones sociales que han logrado las mujeres, lo que diversifica
el reconocimiento de sus capacidades y derechos, así como el acceso a las Esto permite concluir,32 tanto la necesidad de reconocer el valor de las
oportunidades para desarrollar sus potencialidades, a la par que se reducen decisiones tomadas por las mujeres en los ámbitos y dilemas que las afectan,
discriminaciones asociadas o legitimadas por su identidad de género. Me- como el evidenciar los arreglos sociales y las normas institucionales que
jía32 lo sintetiza señalando que este cambio moral permite resignificar la obstaculizan la participación de las personas en la resolución de dilemas
sexualidad y la reproducción como dimensiones humanas que posibilitan un específicos. Si hablamos de mejorar las condiciones de posibilidad para que
espacio de realización de las mujeres y no como experiencias de alienación mujeres y hombres no se vean enfrentados a este tipo de dilemas, las barre-
de las mismas. ras más importantes que habría que vencer se refieren precisamente a las
normatividades que emanan de instituciones que legitiman y reproducen
A pesar de lo anterior, la autora no plantea que la mujer sea la única afec- una particular concepción de los roles de género que limitan la capacidad

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de decisión de las mujeres en particular y de hombres y mujeres en lo ge- poco en sus posibles significados con el fin de redondear el análisis ético que
neral, debido a la falta de programas dirigidos a proveer a las personas la se viene proponiendo en esta serie de reflexiones.
información y los medios necesarios para poder tomar “libre y responsable-
mente” decisiones sobre su sexualidad y su vida reproductiva. A ello se aña-
de la falta de conciencia sobre la posibilidad y la capacidad que tenemos las
personas de participar en la construcción de nuestro entorno reproductivo;
5. Los derechos humanos como recurso para
el desconocimiento del derecho que tenemos de exigir que se provean los un análisis ético del entorno de la salud
medios necesarios para poder hacerlo, y nuestro papel como constructores
reproductiva
y transformadores de las normas sociales.
Un problema posible ante las diferentes interpretaciones morales de un
En este nivel se deben tomar en cuenta los factores culturales y jurídicos
dilema ético es no estar entrenados para convivir con la diferencia, así como
que obstaculizan la resolución del conflicto, entre los cuales deben desta-
para negociar las consecuencias distintas de nuestros actos desde lecturas
carse la penalización jurídica, la prevalencia de posiciones dogmáticas33,34 y
heterogéneas. Si reconocemos el valor de la diferente interactuaríamos para
la falta de servicios adecuados para prevenir embarazos indeseados, o bien
aprender de la misma, más que para descalificarla o imponer un solo punto
para tratarlos humana y técnicamente en las mejores condiciones para la sa-
de vista. Si no es válido ser diferente vamos a interactuar con la diferen-
lud física y mental de las mujeres que se ven afectadas por este dilema. Con
cia para descalificarla, para descartarla o para asumir con seguridad que la
el fin de poder contrarrestarlos, la autora sugiere documentar los factores
nuestra es la única posición correcta, mientras que si se reconoce el valor
subjetivos que obstaculizan la prevención de embarazos indeseados (cultu-
de la diferencia, se podrían negociar los desacuerdos, más que recurrir a un
rales, religiosos, morales); los factores objetivos que impiden el uso correcto
relativismo absoluto en donde cualquier conducta se permite, o bien, donde
y continuado de los métodos anticonceptivos (como el acceso a servicios de
se descalifican las diferentes a las nuestras.35-37
alta calidad); las consecuencias del aborto clandestino en el bienestar de las
mujeres; la incidencia de las complicaciones del aborto en la morbimortali-
Lecturas varias sobre los derechos como código moral
dad materna; las actitudes y valores asociados a la prevención del embarazo
indeseado y a la práctica del aborto entre la población, particularmente en-
Sin querer inventar nada nuevo, proponemos algunas reflexiones de
tre los prestadores de servicios y las potenciales usuarias.32
cómo repensar los derechos, pero simplemente revisando la teoría de dere-
chos humanos. Los derechos humanos fueron creados como un mecanismo
Concluimos este apartado señalando que a pesar de que este análisis ético
de defensa y de protección a las personas que eran excluidas, agredidas o
del aborto, trata de seguir algunos de los pasos propuestos en el tercer apar-
que potencialmente podían llegar a serlo; los derechos humanos buscan pro-
tado del texto, es posible que alguien más llegara a conclusiones diferentes
teger a las personas que en algún momento pueden ser discriminadas, ex-
al ir desglosando los actores involucrados en el dilema, la delimitación de
cluidas o agredidas. Los derechos humanos son mucho más que una elección
referentes valorativos que entran en juego, la forma en que cada quien es
de opciones, como en un mercado donde alguien puede escoger; de hecho se
tomado en cuenta para resolver el dilema, las personas que son consideradas
pueden leer como una figura jurídica que genera obligaciones y compromi-
para definir normas –o incluso cómo se han ido legitimando costumbres para
sos sociales, para tratar de asegurar que todas las personas puedan desarro-
ello- que orientan la solución del dilema, entre otras de sus dimensiones.
llarse como humanos, a través del ejercicio de sus diferentes capacidades,
Eso no significa un demérito del acercamiento ético, pero sí evidencia la
creando muchas veces nuevas respuestas a problemáticas existentes.
necesidad de ciertos acuerdos mínimos ante las diferentes interpretaciones
que pueden emerger desde el mismo, ya que evidenciar nuestro supuestos
Es decir, los derechos humanos constituyen un reconocimiento a la ca-
y prejuicios es mostrarnos en la forma en cómo hemos construido nuestras
pacidad que tenemos los seres humanos de participar en la construcción de
respectivas cosmovisiones.
nuestra cotidianidad, dentro de la cual también influyen otros actores socia-
les. Por ende, más que listar una serie de recetas y guías de comportamiento
En el siguiente apartado quisiéramos añadir a la reflexión de este tex-
que deben seguirse de manera homogénea, abren una gama de opciones que
to el hecho de que los códigos de derechos humanos han sido reconocidos
los individuos podemos ir moldeando pero que en especial necesitamos ne-
como un recurso de valoración moral ampliamente consensuado, incluso
gociar, debido a los efectos de nuestros actos en otras personas. Para ello
para convivir desde la diferencia. Por lo mismo, proponemos profundizar un

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se requiere superar una visión individualista de los derechos, con el fin de tenencia; mencionamos como ejemplo a las mujeres indígenas, las mu-
pasar a una lectura de los mismos, en tanto consenso de los compromisos jeres en zonas rurales y las mujeres pobres, así como mujeres con bajos
sociales que necesitamos, con el fin de asegurar un reconocimiento moral niveles escolares o bien inmersas en relaciones desiguales de género.
mutuo. Esto permitiría asegurar que se respeta la dignidad de los individuos
afectados por un dilema ético, en este caso específico de la salud reproduc- (b) Un segundo universo son las personas homosexuales, o bien, para ser
tiva. más incluyente, las personas no heterosexuales, con todas las variantes
de la no heterosexualidad, precisamente porque se identifican como
Posibles atentados a los derechos y exclusiones en su ejercicio gente que vive desde una orientación sexual considerada como “la di-
ferente” a la norma.
Otro momento relevante para un análisis ético consistiría en identificar
posibles formas de atentar a los derechos, con el fin de que tratemos de evi- (c) Otras personas excluidas han sido las personas solteras o bien las per-
tarlos, apoyándonos de una conciencia colectiva de acompañamiento crítico sonas no casadas, además de la población adolescente. Es decir, en mu-
del entorno de la salud reproductiva. Los derechos se pueden violentar por chos contextos normativos pareciera que la forma correcta de vivir la
invasión o por abuso, pero también se pueden violentar por negligencia, reproducción y de cuidar de la misma, supone un estado conyugal de-
por discriminación o por omisión. Este último término es complejo de ope- terminado y una etapa de vida específica, lo que deja lado a los demás.
racionalizar, ya que supone poder evidenciar personas que pueden llegar a
ser excluidas como autoridades en el momento de resolver un dilema ético, (d) Otra población a considerar son las personas que viven con VIH Sida y
pero además identificar actores sociales que no cumplen con su responsa- que quieren reproducirse, ¿qué tipo de acciones se puede imaginar para
bilidad. esta población?, ¿convencerlos de que no lo hagan o acompañarlos en
las condiciones más saludables y “dignas”? De otra manera, ¿cómo in-
En el proceso de ir especificando el concepto de derechos humanos, vale terpretar un derecho que asume que cada quien puede tomar sus deci-
la pena recuperar lo propuesto por algunas teóricas feministas,38 quienes siones y asumir las consecuencias de las mismas?
cuestionan que los derechos sean universales simplemente por definición,
por lo que proponen que es necesario que construyamos su universalidad. (e) Una población que no siempre es clasificada como objeto de posibles
Es decir, dicha categoría no puede ser universal como punto de partida sino exclusiones en la reproducción es la masculina. A diferentes estudiosas
como una aspiración a alcanzar, como punto de llegada. Cuando todas las del tema de la ciudadanía en la reproducción les resulta problemático
personas se encuentren incluidas desde sus especificidades en los derechos hablar de los derechos reproductivos de los varones, ya que se imagi-
entonces podremos empezar a hablar de que los derechos son universales; nan que éstos van a ejercerse en contra de los derechos de las mujeres.
antes solamente tenemos la intención de que lo sean, pues requerimos redu- No obstante, si se piensa en derechos reproductivos de los varones a
cir o eliminar múltiples exclusiones originadas desde diferentes criterios de la luz de relaciones de género que buscan ser más equitativas, parece
estratificación social. razonable hablar de derechos reproductivos de los varones: Si no ¿de
qué otra manera vamos a pensar que tenga sentido la presencia de los
Por lo mismo, algo que resulta necesario en cualquier tipo de análisis éti- varones en la cotidianidad reproductiva? Irónicamente los programas
co es mostrar quiénes han sido excluidos o podrían llegar a serlo en el ejer- de salud aunque se llamen de salud reproductiva siguen centrados en
cicio de sus derechos en el ámbito de la salud reproductiva, reflexionando las mujeres y eso genera otro tipo de dilema ético.
después sobre el tipo de respuesta que se le puede dar a dichas personas para
resolver dilemas inmediatos pero a la par para trabajar en contra de dicha (f) Una última población que interesa mencionar dentro de los posibles
exclusión. Sin pretender ser exhaustivo, la evidencia empírica que conoce- grupos excluidos en el ámbito de la reproducción como titulares de
mos nos permite afirmar que en muchos contextos no es posible que ejerzan derechos, son los creyentes de ciertas tradiciones religiosas. Cuando se
sus derechos en el ámbito de la salud reproductiva personas de varios de los enfrentan a un discurso institucional que manipula el tema de los de-
siguientes universos: rechos, no es tan claro cómo resuelven sus dilemas éticos en el espacio
de la salud reproductiva y valdría la pena investigarlo.
(a) Las mujeres como individuos (mientras siga existiendo inequidad en
las relaciones de género) y de acuerdo a sus diferentes grupos de per-

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