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- Circunstancias históricas que enmarcan el aparecimiento de los

filósofos políticos del Siglo XX estudiados en este trabajo. (Juan de Dios
Labbé)

Las principales corrientes del pensamiento filosófico-político que hemos de

trabajar a continuación son aquellas que surgieron dentro del siglo XX,
especialmente en Europa y Norteamérica. Estas fueron enmarcadas tras procesos
y eventos sociopolíticos que han determinado gran parte de la historia de la
humanidad. Fue el siglo XX el escenario en el cual se desplegó el fascismo,
además, tuvieron lugar la Primera y Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría.
Estos acontecimientos, en especial el avance del nacionalsocialismo y del
Socialismo Real fueron el contexto bajo el cual estos pensadores comenzaron a
articular nuevas formas de pensar y hacer política.

Will Durant, un filósofo norteamericano, escribe a finales de los treinta su obra

“Mansiones de la Filosofía”, en la que se propone desmenuzar y caracterizar los
distintos estadios y corrientes de pensamiento dentro de la filosofía occidental.
Más allá de la obra en sí misma, nos parece pertinente detenernos en la
“invitación”, preámbulo del cuerpo de la obra, ya que para la fecha (1927) sus
palabras parecen mantener vigencia hoy.

“El tránsito de la agricultura a la industria y de la aldea a la ciudad ha

elevado la ciencia, decaído el arte, liberado el pensamiento,
terminado con la monarquía y la aristocracia, engendrado la
democracia y el socialismo, emancipado a la mujer, dislocado el
matrimonio, roto el viejo código de la moral, destruido el ascetismo
con la voluptuosidad, substituido el puritanismo con el epicureísmo,
colocado la excitación sobre la alegría, hecho la guerra más
frecuente y más terrible, arrancándonos muchas de nuestras
creencias religiosas más caras y dándonos en cambio una filosofía
de la vida mecánica y fatal. Todo fluye, y nos cuesta encontrar algo
permanente y estable en la corriente” (Durant, W. 1940: 5-6)
Cada idea, noción o pensamiento es parida, producida y determinada por su
contexto histórico. Podríamos incluso señalar que existe una relación proporcional
entre el desarrollo material de la sociedad y el desarrollo de las ideas y espiritual
de la misma. En este sentido, el siglo pasado ha padecido grandes cambios dentro
de la esfera social, económica, cultural y política. Siendo ese el caso, nos parece
pertinente contextualizar espacial y temporalmente a estos autores.

Estos personajes están situados espacialmente entre Europa y Estados Unidos, y

sus principales obras fueron publicadas durante la segunda mitad del siglo XX,
donde el auge de los totalitarismos, la Guerra Fría y la Segunda Guerra Mundial
fueron los acontecimientos más significativos y más traumáticos en la historia de la
modernidad, conocidos hasta ahora como “crisis”.

“Los hombres y mujeres de mi generación crecieron bajo la sombra

de la Guerra Fría, (…) Más la Guerra Fría no fue nada comparado
con lo que la precedió: el periodo de conflictos más sangriento de la
historia de la humanidad, en el cual España, como la totalidad de los
países europeos, tuvo que sufrir las calamidades de la guerra.
Ciertamente, lo más grave fue el genocidio nazi, un holocausto real
(no meramente una posibilidad) orientado al exterminio total de un
pueblo, el judío. Estos crímenes, que han manchado nuestro siglo,
no son, en gran medida, sino el trasfondo de su filosofía política”
(Lessnoff, 2011: 9-10)

Como consecuencia de lo anterior, podemos señalar que los totalitarismos, la

aparición de nuevos medios de comunicación, la represión y posterior revolución
sexual, la emergencia de movimientos estudiantiles y de lucha por los derechos
civiles, entre otros, han permeado el pensamiento de estos autores, explicando de
diversas formas las nuevas formas de concebir la política, incluso ahora en el siglo
XXI.

Jacques Maritain, considerado uno de los pensadores del cristianismo más

importantes del siglo pasado, comenzó a publicar sus primeras obras en Francia a
un año de que la Primera Guerra Mundial tuviera lugar, y durante la SGM padeció
el exilio, impartiendo clases en universidades e institutos estadounidenses.
Glucksmann proviene de padres judíos perseguidos por los nazis, buscando
refugio en Francia. Discípulo de Althusser y Sartre, fue un filósofo cuya misión fue
denunciar la tiranía de la experiencia soviética.

Toni Negri, por otro lado, fue encarcelado, al igual que Arthur Koestler. Kolakowski
perseguido por las autoridades estalinistas en Polonia. Sin duda, el denominador
común de estos pensadores fue la constante persecusión y censura que
padecieron durante su producción intelectual. Esto podría considerarse como su
fuerza motriz, su impulso para replantearse la política moderna.