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ESCUELA DE POSTGRADO
DEPARTAMENTO DE DERMATOLOGÍA
MÓDULO ACNÉ
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INTRODUCCIÓN
Las glándulas sebáceas (GS) producen sebo por secreción holocrina, es decir, se debe a una
desintegración completa de sus células secretoras. La cantidad difiere entre los distintos individuos y
sitios anatómicos, pero están ausentes en palmas y plantas. Existen GS ectópicas o GS libres de los
labios, lengua, areolas, y algunas zonas genitales, las cuales no se encuentran conectadas a un
folículo piloso.
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La función de las GS depende de factores genéticos y de niveles hormonales. Estas glándulas
inician su funcionamiento en la etapa fetal. En la etapa de RN la producción de sebo es
relativamente alta, luego desciende rápidamente hasta la pubertad, periodo en que aumenta con la
adrenarquia. Los andrógenos parecen ser el factor más importante en el control del desarrollo
glandular y de la producción de sebo. El nivel de producción del final de la pubertad se mantiene
constante a lo largo de la edad adulta y posteriormente disminuye, después de la menopausia en las
mujeres y entre la sexta y séptima década en los hombres.
El sebo es un fluido viscoso de color amarillo claro. Está compuesto por triglicéridos, ésteres de
cera, escualenos, ácidos grasos libres, ésteres de colesterol y colesterol. El tiempo de renovación es
de 14 días y el flujo de sebo es relativamente continuo.
PATOGENIA
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Con el inicio de la pubertad, los andrógenos median la estimulación de las glándulas
sebáceas, provocando hiperseborrea. Además, ocurre formación de microcomedones en el
infundíbulo. Esto se debe a que los corneocitos, que normalmente se eliminan en el lumen del
folículo y se expulsan a través del orificio folicular, quedan retenidos y se acumulan, produciendo
hiperqueratosis. Estos dos acontecimientos, provocan un ambiente favorable para la colonización
por Propionibacterium acnes, el cual secreta numerosos mediadores inflamatorios y factores
quimiotácticos que aumentan el fenómeno inflamatorio.[3]
Uno de los mecanismos en que la hiperseborrea se asocia al acné, está dada porque el sebo
provee un ambiente anaerobio, rico en lípidos, en el cual el P acnés puede proliferar.[4]
La glándula sebácea se regula a través de las hormonas. Varias de ellas se han relacionado
con el acné, entre las que destacan: andrógenos, estrógenos, hormona del crecimiento, insulina, el
factor de crecimiento similar a la insulina 1 (IGF-1), los neuropéptidos y los glucocorticoides.
ANDRÓGENOS [5, 6]
Se ha visto que en la piel expuesta al acné, la enzima con mayor actividad es la 5- alfa reductasa.
4
Figura 3: Metabolismo de andrógenos en la glándula sebácea
En modelos in vitro, se ha visto que los andrógenos sólo producirían aumento del tamaño
de las glándulas sebáceas, pero no incrementarían la producción de sebo. Por ello se ha postulado
que se necesitan cofactores para tal acción. Una de estas moléculas son los receptores PPAR
(peroxisome proliferator-activated receptor). Los ácidos grasos libres, acido linoleico y andrógenos
activan este receptor. Los PPAR estarían involucrados en la maduración de la glándula sebácea y el
inicio de la cadena inflamatoria de esta enfermedad, y representarían un blanco en la terapéutica
del acné. Estudios demuestran que inhibidores de esta vía reducen significativamente la síntesis de
lípidos y las lesiones de acné.
ESTRÓGENOS
Su papel todavía no está bien aclarado, sin embargo, pueden afectar la secreción de material
sebáceo a través de varios mecanismos:
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2. Aumento de la producción de la Sex Hormone Binding Globulin (SHBG) en el hígado, con la
consiguiente disminución de la testosterona libre.
3. Por supresión de la producción de andrógenos ováricos por medio de la inhibición de la LH y
DSH.
4. Regulando los genes implicados en el crecimiento de las glándulas sebáceas o en la
producción de lípidos.
INSULINA[3]
La insulina puede unirse al receptor de IGF-1, pero se han visto efectos directos distintos a
este último: estimulación suprarrenal y ovárica de producción de andrógenos, inhibición la
producción hepática de SHBG e inducción la secreción hepática de IGF-1. Ambas hormonas
amplifican el efecto estimulante de la GH en los sebocitos.
GLUCOCORTICOIDES[3]
Por otra parte, se ha visto que los pacientes aumentan sus lesiones en periodos de estrés.
Esto podría responder a la producción de esteroides adrenales, que afectarían a la glándula sebácea.
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NEUROPÉPTIDOS [5]
Los neuropéptidos (NP) son un grupo heterogéneo de péptidos activos que están presentes
en las neuronas del SNC y periférico. Sin embargo, se ha visto que las glándulas sebáceas humanas
expresan receptores funcionales de NP, como de Hormona Liberadora de Corticotropina (CRH),
melanocortina, sustancia P o péptido intestinal vasocactivo, entre otros. Existe evidencia que
neuropéptidos con y sin actividad hormonal pueden controlar el desarrollo de lesiones de acné
(explicando el rol del stress).
HIPERQUERATINIZACIÓN [3, 7]
A medida que el comedón se expande, los lóbulos de las glándulas sebáceas tienden a la
regresión. Debido a que la apertura hacia la superficie cutánea es angosta, se produce una
acumulación de queratinocitos sueltos y sebo, los que posteriormente, se van compactando,
creando concreciones lamelares. Luego de esto, se produce la ruptura de esta lesión, provocando la
salida de queratina y sebo, lo que resulta en un fenómeno inflamatorio. [7]
7
Entre los mecanismos de hiperqueratinización ductal se encuentran:
1. COMPOSICIÓN LIPÍDICA ANORMAL: menores niveles de lineolatos (6% en acné v/s 45% en
piel normal). Esto produce una disminución de la función de la barrera epidérmica. Además hay
incremento de los ácidos grasos libres y el escualeno, los cuales podrían se irritantes,
exacerbando la inflamación.
4. RETINOIDES: El alto flujo de sebo en los folículos proclives al acné, podría producir una
deficiencia local de vitamina A en el conducto. Estos retinoides pueden afectar la proliferación
de los queratinocitos y sebocitos, los cuales en modelos in vitro, inhiben la proliferación de estas
series celulares.
MICROORGANISMOS[3, 8-11]
Los folículos sebáceos son ricos en bacterias y hongos que pertenecen a la flora normal.
Entre los microorganismos más importantes destacan:
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Dos hechos relacionan de manera importante el P.acnes con el acné: el éxito terapéutico al
usar antibióticos y el empeoramiento del cuadro clínico ante la presencia de cepas resistentes y su
asociación con fallas terapéuticas.
Son múltiples los mecanismos por los cuales P.Acnes produce disrupción del epitelio folicular
con la subsecuente reacción inflamatoria. Entre estos destacan:
El P. acnes aparentemente no sería necesario para iniciar el proceso inflamatorio del acné, ya
que hay una proporción de lesiones inflamatorias estériles. Sin embargo, en las lesiones que sí están
colonizadas, esta bacteria cumple un proceso de intensificar el proceso inflamatorio. Este
microorganismo y/o sus productos, interactúan con queratinocitos y sebocitos que producen
citoquinas y a su vez atraen linfocitos no específicos. El sistema inmune reconoce a P. acnes a
través de receptores tipo toll 2 y 4. En el acné en sus formas severas, se detecta respuesta
inflamatoria CD4 y CD8 junto con células de Langerhans. Además, el organismo produce péptidos
antimicrobianos, como catelicidinas y defensivas, y estas respuestas son proporcionales al grado de
inflamación. De esta manera, el P. acnes actuaría como espectador presente, más que como
participante activo en el desarrollo de lesiones de acné.
INFLAMACIÓN[12, 13]
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androgénica. Otros factores gatillantes podrían ser ambientales (dieta, tabaco) y neuroendocrinos
(stress).
P.ACNES E INFLAMACIÓN[3]
El desarrollo inflamatorio del acné se realiza a nivel molecular mediante la inmunidad innata
y adaptativa. De esta forma, los queratinocitos pueden reconocer señales externas de peligro por
medio de diferentes receptores de reconocimiento de patógenos
P.acnes libera enzimas líticas y lipasas que desencadenan la alteración del epitelio folicular.
Además, produce factores quimiotácticos de neutrófilos, los cuales potencian la reacción
inflamatoria.
Además, el P acnes, activaría el sistema inmune innato al unirse a los receptores toll-like
(TLR), lo cual desencadenaría la producción de mediadores inflamatorios como TNF-α, IL-8 e IL-1β,
por las células monunucleares a través del TLR-2. Este mismo microorganismo también puede
estimular la formación de C5α (vía clásica y alternativa). Por último, activa la respuesta inmune
adaptativa, ya que activa a los linfocitos TH1 (se encuentran en lesiones iniciales de acné inflamado).
Además, se ha visto que también activaría la cascada de la inmunidad humoral, pues se han
detectado anticuerpos séricos dirigidos a varias supuestas proteínas de superficie.
También, activa las vías de NF-kB y MAPK, contribuyendo a iniciar una respuesta
inflamatoria mediante atracción de macrófagos y células inmunes al sitio de la “infección”.
CITOQUINAS
Muchas citoquinas están involucradas en la patogenia del acné, pero sólo cuatro juegan un
papel esencial en la formación y paradojalmente en la regresión de las lesiones: IL 1α, INF gama,
TGF-alfa e IL-4.
IL 1Α juega un papel central. Secretada por el queratinocito activo estimula la formación del
comedón y estimula la inmunidad innata.
TNF ALFA, IL 6 Y 8 también secretada por el queratinocito amplifican la reacción
inflamatoria del folículo pilosebáceo y la quimiotaxis de PMN.
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Estudios in vitro también recalcan la importancia de las citoquinas en la evolución del acné. En el
infrainfundíbulo la IL 1α estimula la formación de comedones, el TGF la ruptura de este, e INF gama
y TNF alfa aumentan la difusión de la reacción inflamatoria. En una segunda etapa estas citoquinas
actúan sobre la diferenciación del queratinocito disminuyendo la producción de sebo, lo que
explicaría la regresión espontánea de las lesiones.
Por otra parte, las proteínas FoXO, son factores nucleares de transcripción modulados
genéticamente (conocidos como Forkhead), las cuales son una superfamilia de proteínas que
comparten un dominio de unión al DNA de 100 residuos llamado Forkhead. La deficiencia nuclear de
FoxO1, incrementa la transactivación de receptores androgénicas, modifica la actividad de los PPARs
y de genes claves involucrados en la proliferación de queratinocitos (aumentándola), lipogénesis
sebáceas y regulación transcripcional de la inflamación perifolicular mediada por NFkB.
NUTRICIÓN[14-17]
Existen múltiples datos que avalan el rol de la dieta en acné. La dieta occidental incluye
múltiples fuentes de hormonas de consumo diario.
La dieta occidental contiene mediadores que son sensados por el complejo mTORC1
(nutrient sensitive kinase mammalian target of rapamicin complex 1). Este complejo activa el SREBP,
un factor importante para la lipogénesis. Por otro lado, la leucina (mediador derivado de las
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proteínas) estimula esta interacción, convirtiéndose en ácidos grasos y esteroles para la síntesis
lipídica.
Con respecto a la leche y sus derivados, sólo se ha visto una débil asociación con los
productos lácteos, a pesar de que existe evidencia bioquímica que asocia a la leche con esta vía de
señalización, de hecho, la leche también podría potenciar los efectos de los carbohidratos
hiperglicémicos. Además, la leche contiene esteroides anabólicos, hormona del crecimiento y otros
factores de crecimiento. La presencia de 5α- pregnanediona, 5α-androstenediona y otros
precursors de la 5α-dihidrotestosterona aumentan la potencia de la leche como factor estimulante
de acné
Se han observado niveles elevados de IGF-1 en hombres y mujeres adultos con acné.
Los niveles de IGF-1 en mujeres con acné se correlacionan con el número de lesiones de
acné, lesiones inflamatorias y niveles séricos de DHT y sulfato de dehidroepiandrosterona.
En pacientes post-adolescencentes existe una correlación entre la seborrea facial y los
niveles de IGF-1.
IGF-1 humano y bovino comparten exactamente la misma secuencia de aminoácidos.
La leche de vaca contiene IGF-1 e IGF-2 incluso después de los procesos de pasteurización y
homogenización. Estos superan la digestión y mantienen su actividad.
Niveles altos de consumo de leche incrementan los niveles de IGF-1 en 10-20% en adultos y
20-30% en niños.
GENETICA[3]
Los factores hereditarios tienen un rol en el acné. Las formas neonatal, noduloquística y
conglobata tienen influencias genéticas probadas. La aparición del cuadro en la posadolescencia se
relaciona en un 50% con la existencia de parientes de primer grado afectados. En la patogenia están
involucrados ciertas anomalías cromosómicas y fenotipos HLA, así como polimorfismo de genes y
citocromos. Por otra parte, hay síndromes diversos en que el acné es una manifestación, los cuales
están resumidos en el anexo 1.
FACTORES FAMILIARES
ESTUDIOS EN ETNIAS
12
En países occidentales también se observan diferencias entre etnias: los caucásicos son más
proclives que los individuos de raza negra y los japoneses. Las formas noduloquísticas son más
frecuentes en hispánicos y caucásicos que en afroamericanos.
ESTUDIOS EN MELLIZOS
GENES
Un polimorfismo en el citocromo humano P450 1A1 parece asociarse con acné. Este
citocromo se relaciona con el metabolismo de la vitamina A y su mutación puede alterar la eficacia
biológica de los retinoides naturales.
El polimorfismo del gen de receptor androgénico con trinucleótidos (CAG) repetidos tiene
gran relevancia con trastornos androgénicos. La alteración de la longitud repetida de éste puede
afectar la expresión mediada por genes androgénicos en los folículos pilosos u las glándulas
sebáceas en hombres y mujeres con trastornos androgénicos.
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ANEXO 1. SÍNDROMES GENÉTICOS ASOCIADOS A ACNÉ[3, 18]
SÍNDROME CARACTERÍSTICAS CLINICAS MUTACIÓN OTROS
Estatura baja, cierre Gen del receptor de factor de Se beneficia del uso
O
ACROENCEFALOSIN
NODULOQUIÍS
ECTRODACTILI
TICO.
noduloquístico severo.
Pioderma Gangrenoso (PG), En los casos con herencia PG y acné
artritis aséptica destructiva familiar, se ha identificado responden a
desde la infancia y acné mutaciones en el gen CD2BP1 glucocorticoides y
conglobata en adolescencia. (inhibidor de procesos dapsona. También
Pueden estar los tres como inflamatorios, por unión a pirina) se ha usado
PAPA
autoinflamatorias.
inflamación
granulomatosa
necrotizante.
Grupo heterogéneo de 95% de los casos hay déficit de la Se debe estudiar
ADRENAL
alopecia androgenética e
hirsutismo. En la froma
clásica, puede haber
virilizacion, infertilidad, talla
baja, pubertad precoz.
Resistencia al cortisol, En 7 de 30 pacientes reportados,
A
HEREDITAR
RESISTENCI
GLUCOCOR
SINDROME
IA
A
glucocorticoides.
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