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Para Calvino existe una importancia en retomar, durante la madurez, los libros que
dejaron alguna marca en nosotros en la juventud. Según él, durante la juventud se
comunica la lectura como una experiencia, un sabor y una importancia, pero
cuando se relee durante la madurez dicha lectura revela más significados, detalles
y niveles que pueden ser provechosos para el lector.
Otra condición para la existencia de un clásico es que tenga alguna significación
para quien está leyendo. Calvino escribe que un clásico nunca termina de decir lo
que tiene que decir para el lector, una lectura que no se agota y que cada vez que
se revisa ofrece algo nuevo para el lector. La lectura de un clásico, para Calvino,
debe cambiar el punto de vista de quien lo lee cada vez que lo hace, debe mutar y
resignificarse, lo que no significa necesariamente que todos nuestros clásicos
deban ser aquellos cuya belleza nos cautiva, también pueden ser obras cuyo
interés nos sea propiciado precisamente por la oposición que manifiesta frente a
nuestras ideas y modo de pensar.
La siguiente condición que plantea Calvino es la de que un clásico debe ser
original en el sentido de que un clásico es la primera vez que un algo, de suma
importancia para el lector, se dijo. Dentro de un clásico existe un descubrimiento
en la forma o el contenido que no necesariamente enseña algo nuevo, pero que si
sorprende por su frescura y novedad cuando se pone en contexto.
De ahí,
Los clásicos, para Calvino, son una búsqueda personal y no colectiva. No existe
“un clásico”, sino que existe “mí clásico”, ya que no todas las lecturas tienen la
misma significación e importancia para todas las personas que lo leen. Los
clásicos también son atemporales, la palabra no debe distraer al pensar que solo
es un clásico la que acumula más años de antigüedad, porque un clásico también
puede ser una lectura reciente.
Existe algo importante a lo que hace referencia el autor, y es en el amor que se
debe tener por el clásico. No existe obligación por leer obras “imprescindibles”, la
lectura de clásicos debe llegar por amor y gusto. Sin este amor, no puede existir el
concepto de clásico porque, según Calvino, un clásico no puede ser indiferente
para quien lo lee. Debe existir una relación particular con dicho libro o autor para
que pueda existir el concepto. Esta relación puede ayudar a definir al lector, o
puede entablar una relación de contraste, de cualquier manera, el vínculo debe de
existir y no debe pasarse por alto.
Así pues, después de desarrollar el concepto de clásico, Calvino expone una
relación de los clásicos con el momento en el que se releen. Es con esta relación,
con la que se encuentra el reconocimiento, concepto que responde a la pregunta
planteada.
Los clásicos se definen por las condiciones de la actualidad en la que se relean.
Calvino escribe que la trascendencia de los clásicos llega desde en lugar dónde se
los lea. Por esto, es tan importante dejar madurar la lectura. Cuando se tiene
experiencia de vida, y lecturas dentro del bagaje, el punto desde dónde se lee el
clásico es diferente y presupone una resignificación del mismo.
Nuestro mundo se ha moldeado por los clásicos, ya que su valor radica en que sin
importar el tiempo o la cultura desde donde se leen, estos siempre reflejaran el
momento actual, logrando adquirir vigencia al pasar los años. De los clásicos se
puede reconocer su lugar en el mundo, de donde proviene y quienes lo
continuaron, ya que un clásico es importante por lo que expresa por sí mismo pero
también por todo lo que hemos hecho y logrado con ella a lo largo de los años.
Calvino agrega que por ningún motivo debe de leerse exclusivamente a los
clásicos. La lectura así de estricta podría entorpecer el proceso de reconocimiento
ya que dejaría de existir una relación del clásico con la actualidad y el lugar desde
donde se está leyendo. Existe un vínculo de los clásicos con la actualidad, ya que
una redefine a la otra y le otorga nuevos valores, y viceversa. La lectura de
clásicos debe de estar balanceada con lectura de libros y autores de la actualidad.
Los clásicos nos sirven para entender quienes somos y adonde hemos llegado
Cada persona debe crear su biblioteca ideal de sus clásicos (los libros que hemos leído y que nos
proponemos leer, dejando un espacio para los descubrimientos ocasionales)
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todos escucharon hablar de Shakespeare y dicen conocer su Hamlet, pero muy pocos leyeron el
libro. Detrás del alardeo, una explicación posible puede ser que la tremenda influencia de algunas
creaciones sobre cada uno de nosotros, muchas veces no es directa, sino que se mete en la cultura
popular de formas diversas.
Si se quiere interpretar un texto para obtener toda su esencia se debe leer este y no las
referencias que pretendan explicar lo que este dice o quiere decir
Los clásicos como dice Calvino, representan riqueza para quienes los han leído pero lo es también
por quienes esperan por su lectura hasta la edad madura que es cuando de verdad pueden
apreciarse
Se tienen clásicos de referencia pero es nuestra labor definir quienes son nuestros clásicos
(importancia de las lecturas desinteresadas) identificación con el autor y sus obras
http://interzonaeditora.com/noticias/quot-leer-un-clasico-siempre-es-una-relectura-quot-266