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10 ACTITUDES

Primera actitud: una persona de éxito sabe lo que quiere

Esta afirmación parece obvia, pero no lo es en absoluto. Muchas personas van con el piloto
automático puesto y se dejan llevar por la inercia de sus vidas en lugar de parar un segundo y
reflexionar sobre qué es lo que quieren. Y cuanto más concretas y claras sean nuestras metas, más
posibilidades tenemos de conseguirlas, por eso es tan efectivo aplicar gamificación en la
evaluación del desempeño.

Segunda actitud: una persona de éxito no teme al fracaso

“Los perdedores son ganadores porque aprenden de sus experiencias” | Francisco Alcaide

Aunque contar con una persona cuya experiencia profesional sea intachable está bien, lo cierto es
que tiene más valor haberse caído y levantarse que no haberse caído nunca. Quien evita el
fracaso, está evitando el éxito.

Tercera actitud: una persona de éxito tiene una disciplina férrea.

“Una persona de éxito no deja que las distracciones le dispersen de su objetivo.” | Francisco
Alcaide

La constancia es otra de las grandes armas de una persona de éxito. Donde la gran mayoría
prefiere lo cómodo a lo necesario, un profesional de éxito perseguirá su objetivo
incansablemente, aunque esto implique dejar de lado otras actividades mucho más apetecibles.

Cuarta actitud: una persona de éxito es paciente

“No hay metas imposibles, pero sí tiempos imposibles” | Francisco Alcaide

Roma no se construyó en un solo día. Las personas de éxito lo saben y no desesperan mientras
llega el momento de triunfar. Como ya dijo Francisco, “la impaciencia y el cortoplacismo
son amantes de la mediocridad“.

Quinta actitud: una persona de éxito es autoresponsable.

“La autoresponsabilidad es centrarse en lo que vas a hacer, no en lo que va a pasar” | Francisco


Alcaide.

Existen dos tipos de personas: aquellos que están orientados a los resultados versus aquellos que
están orientados a las excusas. Una persona de éxito está en el primer grupo y no espera que las
circunstancias cambien para conseguir sus objetivos.

Sexta actitud: una persona de éxito está comprometida con su objetivo.

“Los obstáculos son la forma de diferenciar a los que quieren algo de los que lo consiguen” |
Francisco Alcaide

El compromiso que adquiere una persona de éxito consigo mismo o con un proyecto es siempre
del 100 %, hará lo que haga falta el tiempo que haga falta.

Séptima actitud: una persona de éxito es resiliente.


La resiliencia define la capacidad para superar periodos de adversidad o situaciones adversas. Las
personas de éxito no dejan que el primer obstáculo o error en el camino les mine la moral.

Octava actitud: una persona de éxito es mentalmente sana.

“Una persona de éxito tiene diálogos constructivos consigo mismo, no destructivos” | Francisco
Alcaide

La autocrítica destructiva es uno de los mayores frenos para triunfar. Por eso, una persona de
éxito no se flagela por cada mala decisión que comete ni se preocupa por los problemas que
todavía no han ocurrido.

Novena actitud: una persona de éxito está en constante aprendizaje.

“El mayor poder de las personas es su capacidad para aprender cosas nuevas”. | Francisco Alcaide

Décima actitud: una persona de éxito se mueve en entornos enriquecedores.

“Tendemos a imitar inconscientemente a las personas que nos rodean”. | Francisco Alcaide

Aunque una persona tenga las actitudes anteriores, si está en un entorno tóxico, no conseguirá
florecer.

VALORES EN EL NOVIAZGO

Respeto

Siempre se habla de respetar ideas, gustos, hábitos y costumbres, pero eso no significa estar de
acuerdo con todo, o permanecer indiferentes. Muchos de estos aspectos pueden no parecernos e
incluso disgustarnos y lo correcto será ayudarse mutuamente a corregirlos. Recordemos que
cuando existe un interés y cariño auténticos, siempre se buscará el bien de la otra persona.

Decencia

En el noviazgo siempre es necesario evitar todo aquello que sea provocativo: ropa, posturas,
caricias, palabras y hasta algunos tipos de baile, estos son recursos que utilizan las personas para
aprovecharse de la situación y lo único que buscan es una relación pasajera. Si deseas que te
tomen en serio y te aprecien de verdad, evítalas; así no darás la impresión de ser una “persona
fácil”. También es conveniente tener un horario adecuado para salir, pues siempre habrá
murmuraciones respecto a las parejas trasnochadoras.

Sana Diversión

Uno de los más grandes peligros que existen en los noviazgos, es la búsqueda constante de nuevas
diversiones. Lo más difícil es encontrar actividades que nos permitan vivir los valores y
conducirnos con respeto.

Autoestima

En apariencia la autoestima en un valor egoísta, donde proteger nuestro yo íntimo es lo más


importante para no salir lastimados. Pero la realidad es que la autoestima nos permite descubrir
todo lo bueno que tenemos (cualidades, habilidades, hábitos), así como nuestros defectos. Esto
nos permite desarrollar nuestras cualidades y buscar la manera de superar nuestras fallas. El
conocimiento propio nos brinda seguridad y confianza, tomando conciencia del valor que como
personas tenemos.

Compromiso

¿Compromiso en el noviazgo? Esto si que es novedad. Aunque parezca exagerado y fuera de


contexto, no debería extrañarnos hablar de este valor si lo consideramos como elemento
indispensable para desarrollar nuestra personalidad.

Fidelidad
En el noviazgo existe un compromiso de fidelidad. En todo caso, lo que se debe pedir es lealtad
para evitar que exista un doble juego durante mucho tiempo; es decir, un engaño. Con lo anterior;
se quiere referir, al hecho de que debe existir una libertad para cambiar de pareja; cuando alguno
de los que conforman la misma lo desee pero sin dejar de lado el respeto y la honestidad por la
persona actual.

Responsabilidad
Una pareja responsable de novios, evalúa esta lista para asumir la responsabilidad de iniciar
relaciones sexuales protegidas, esa es una decisión muy difícil y no tiene que estar influida por
otras personas.

PACIENCIA:

en una relación , no puedes olvidar que mucho pasan por duros momento y no puedes permitir
que al mas mínimo obstáculo pierdas la cordura y hagas una locura,al momento de una discusión
es muy importante ser paciente para aceptar las criticas y finalmente superarse cada día.

CONFIANZA:

si bien dice el dicho que no puedes confiar ni en tu sombra, PUES EN UNA RELACIÓN EN LA QUE
DESCONFIAS DE TU PAREJA, DIFÍCILMENTE FUNCIONA. La desconfianza lleva ser posesivo con tu
pareja, a quererle quitar su libertad, a ser celoso obsesivo, POR ESTO ES UN SENTIMIENTO QUE
DEBEMOS APRENDER A MANEJAR.

COMUNICACIÓN:

es tal vez la mas importante en una relación, debemos saber que en una relación nada se debe
guardar, las cosas deben hablarse, y tratar de solucionar cualquier problema para que después no
crezca y se convierta en un gran problema , ADEMAS NO HAY NADA MEJOR QUE UNA BUENA
COMUNICACIÓN EN VEZ DE PELEAS Y DISCUSIONES FUERTES.

VALORES

1. Respeto

El respeto es la capacidad de reconocer, apreciar y valorar a los otros teniendo en cuenta


que todos somos válidos. El respeto es un valor que requiere de reciprocidad, lo que implica
derechos y deberes para ambas partes. El respeto requiere aprender a escuchar a los otros
cuidando todas las formas de vida diferentes. Es un valor importante para la sociedad, ya que
genera apoyo y solidaridad en el grupo social.

Amor

El amor es uno de los valores fundamentales de la sociedad porque nos empuja a velar por la
felicidad del otro. Las relaciones sociales se basan en los fundamentos de afectividad en las
relaciones interpersonales que se mantienen en forma de amistad. El amor es un valor que induce
el bienestar en los otros, ya que nos esforzamos por agradar y querer a todos los individuos que
componen nuestra sociedad.

Libertad

La libertad es un valor que nos ayuda a realizarnos como personas. La libertad individual se
enmarca dentro de lo social. Esta dinámica está íntimamente relacionada con el respeto y la
responsabilidad. Si una sociedad no tiene la libertad como uno de los valores más importantes,
esta se torna represiva y dictatorial limitando la realización personal y social.

Justicia

La justicia es un valor importante porque busca el equilibrio entre el propio bien y el de la


sociedad. La justicia da a cada ciudadano lo que le corresponde para suplir sus necesidades básicas
para que pueda aportar a la sociedad. La justicia implica conjugar la libertad individual, la igualdad
y la interdependencia de cada miembro de una comunidad.

Tolerancia

La tolerancia es el valor que concede dignidad, libertad y diversidad en una sociedad, asumiendo
que todos somos diferentes. La tolerancia significa que abrazamos opiniones, estilos de vida y
creencias diferentes a las nuestras para relacionarnos como seres humanos.

Equidad

La equidad es tratar a todos por igual, independiente de su clase social, raza, sexo o religión. La
equidad es un valor fundamental para reforzar el respeto a las características particulares de cada
individuo y dar un sentido más profundo a la justicia como derecho fundamental.

Paz

La paz es un valor que busca formas superiores de convivencia. Es un ideal que evita la hostilidad y
la violencia que generan conflictos innecesarios. La paz es la base para la armonía consigo mismo y
con los demás para tener una vida serena y tranquila agradeciendo la existencia.

Honestidad

La honestidad es un valor social que genera acciones de beneficio común y se refleja en la


congruencia entre lo que se piensa y lo que se hace. La honestidad propicia un ambiente de
confianza si existe la sinceridad para uno y para los demás. La seguridad y credibilidad que la
honestidad genera ayuda a la construcción de una sociedad que valora la verdad, sin engaños ni
trampas.
Responsabilidad

La responsabilidad significa asumir las consecuencias de nuestros actos y cumplir con nuestros
compromisos y obligaciones ante los demás. La responsabilidad como valor nos hace conscientes
sobre las implicaciones, alcances y aspectos críticos que conllevan nuestras acciones y decisiones
tornando al ciudadano más maduro y más ético.

Lealtad

La lealtad es un valor que se relaciona con la formación de carácter. La lealtad es la fidelidad que
se tiene en las acciones y comportamientos individuales y sociales para ser dueños de la propia
voluntad. La lealtad impulsa a la consecución de objetivos que caracteriza a un emprendedor, por
ejemplo. Una persona leal conserva las amistades y relaciones por los valores que transmite sin
conformarse con los placeres pasajeros.
ACTITUDES EN EL MATRIMONIO

1. Muestra admiración hacia tu pareja

La admiración es un antídoto al desprecio. Recuerda las cualidades buenas de tu pareja. ¿Qué te


atrajo a tu cónyuge la primera vez? ¿Qué admiraste, originalmente, de tu pareja? Al nutrir tu
afición por tu cónyuge, puedes fomentar una actitud mucho más positiva hacia él o hacia ella.

2. Respeta a tu cónyuge

Las relaciones que empeoran con el tiempo, tienen como común denominador el respeto cada vez
más ausente. Tristemente, a veces la gente acaba tratando a su pareja peor de lo que ellos
tratarían a un extraño. Ya sea, tolerando la conducta irrespetuosa o ejerciendo una conducta
irrespetuosa, uno contribuye activamente a la muerte de su relación. ¿Alguna vez llamas a tu
cónyuge con sobrenombres ofensivos? ¿Regañas a tu pareja delante de amigos o familiares?
¿Consideras cómo tu pareja será afectada por tus comentarios o acciones crueles? Piensa las
maneras en que tú o tu pareja pueden cruzar la línea de la falta de respeto. Recuerda que sin el
respeto, el amor no puede sobrevivir, pues no hay a quien amar.

3. Acepta a tu compañer@

Tienes poder para exaltar o dejar por el suelo a tu pareja. Puedes hacer que tu relación sea un
refugio celestial o el infierno en la tierra. Recuerda que todos necesitamos sentirnos aceptados
por quienes somos. En vez de atacar a tu cónyuge, trata de entender su punto de vista. También,
haz un cumplido a tu pareja por las formas en que él o ella te apoya y provee para la relación. Es
fácil permanecer tan centrado en lo que está mal en la relación, que dejamos pasar lo que
realmente está funcionando bien.

4. Perdona y acepta el perdón

Si tu pareja, genuinamente, trata de pedir perdón, no le des la espalda. Algunas veces es inevitable
tener conflictos y surgen heridas. Cuando intentamos reparar estas heridas y somos
rechazados, repetidas veces, la relación recibe un golpe. Puede ser que necesites tiempo para
sanarte de algún resentimiento, amargura, o decepción, pero no cierres la puerta,
completamente, a los intentos de tu compañer@ de mejorar las cosas. Miren dentro de sí mismos
y trabajen juntos para poder curar todas esas heridas.

5. Nutre tu amistad

¿Sabes lo que a tu cónyuge le gusta o le disgusta? ¿Conoces cuáles son sus sueños,
preocupaciones, temores e ilusiones? ¿Sabes lo que tu pareja hizo el día de ayer? ¿Conoces qué
tipos de presiones encara en el trabajo? La base de un matrimonio saludable es una amistad firme.
Si un matrimonio no se ha construido en una amistad fuerte, con el pasar del tiempo puede que
resulte difícil permanecer conectados. Tomad un rato, diariamente, para fiaros el uno al otro.
Durante este tiempo, haced una prioridad el escuchar y aprender acerca de los pensamientos,
sentimientos, e ideas de tu pareja.

6. Apacigua las emociones fuertes

Cálmate. Cuándo el conflicto se agrava, la pareja puede ser "inundada" por emociones fuertes,
llevando a la aflicción física, empleando una táctica de encerrarse en si y de estar a la defensiva.
Trata de respirar profundamente o tómate un tiempo a solas. La mayoría de las personas
necesitamos, al menos, 20 minutos para realmente calmar nuestros cuerpos. Hagan un hábito el
tomarse un tiempo y regresen a los problemas, cuando puedan realmente estén dispuestos a
escuchar lo que la otra persona trata de decir sin ser agobiado.

7. Permite ser influenciado

En general, los hombres son los menos propensos a buscar un punto de acuerdo con sus esposas.
Si el hombre no está dispuesto a compartir la autoridad con su cónyuge, hay un gran porcentaje
de que la buena convivencia se destruya. Recordemos que tener un buen matrimonio implica dar y
recibir. Tú y tu pareja, estáis en el mismo equipo y necesitáis trabajar juntos por el bien de vuestra
relación.

8. Sé equilibrado

Mantén tu relación equilibrada, asegurándose que hay por lo menos cinco interacciones positivas
para cada negativa. La proporción 5 a 1 de interacciones positivas y negativas está ligada a la
estabilidad de un matrimonio, sin importar cual sea el estilo típico de resolver conflictos. Si hay
demasiada negatividad, la relación sufre.

9. Aprende a dejar cosas de lado

Aunque tu cónyuge pueda hacer cosas que te vuelvan loco, recuerda que puedes soportarlo. No
vale la pena luchar por cada cosita. Resuelvan los problemas que son viables y dejen los otros de
lado. Debes aprender a decidir si vale la pena chocar por esto o aquello.

10. Trabaja en ti mismo

Una relación es como un baile. Se mueven al unísono para crear algo que es realmente único.
¿Qué tipo de compañero eres tú? ¿Trabajas con tu pareja o usualmente tiras en otra dirección?
¿Sientes la presencia de sus dedos? ¿Le miras a los ojos o te enfocas sólo en tus próximos pasos?
Recuerda que tú controlas el 50% de lo que sucede en tu matrimonio. Cumple tu parte y asegúrate
de ser buena pareja.

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