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Santa Juana de Arco (1412-1431)

Con sólo 17 años esta joven mujer se transformó en una heroína nacional para
su país, Francia. El Papa Benedicto XVI se refiere a ella como una laica
consagrada en la virginidad, mística en medio de las realidades más dramáticas
de la Iglesia y de Europa. Con una espiritualidad cristocéntrica y mariana, se
involucra en la vida social y política de su País. Es el modelo de la mujer fuerte
que sigue los designios de Dios hasta el último suspiro. Murió quemada en la
hoguera pronunciando el nombre de Jesús.

Santa Hildegarda de Bingen (1089-1179)


Esta Santa alemana, Doctora de la Iglesia, ingresó al convento Benedictino de
Disibodenberg, a la edad de 8 años. Su obra contiene grandes reflexiones sobre
el misterio de Dios y la posibilidad del ser humano de conocerlo así como sus
trabajos de carácter científico, artístico y lingüístico. Benedicto XVI hablando de
ella nos dice: "... la atribución del título de Doctor de la Iglesia a Hildegarda tiene
un gran significado para el mundo de hoy y una extraordinaria importancia para
las mujeres. En ella se expresan los más nobles valores de la feminidad: por ello
también la presencia de la mujer en la Iglesia y en la sociedad se ilumina con su
figura, tanto en la perspectiva de la investigación científica como en la de la
acción pastoral."
Santa Catalina de Sienna (1347-1380)
Santa Catalina de Sienna aprendió a leer y escribir con dificultad cuando ya era
adulta, sin embargo esto no la limitó a tener una vida intelectual muy fecunda.
Su doctrina está contenida en tres grandes escritos: El Libro de la Divina
Doctrina, que es considerada una obra maestra de la literatura espiritual, su
Epistolario y su colección de Oraciones. Tenía una personalidad fuerte y auténtica
y muchos fueron los que acudieron a ella buscando ayuda. La llamaban "mamá"
ya que se consideraban sus hijos espirituales. Santa Catalina amaba con valentía
y autenticidad a Cristo, respetaba profundamente a la Iglesia y estaba
comprometida con ella.

Laura Bassi (1711-1778)


Laura Bassi es madre de 12 hijos, fue una mujer muy culta y formada desde una
edad muy temprana. Amaba las ciencias y dedicó su vida a la docencia e
investigación científica. Fue la primera profesora y catedrática del mundo, en la
Universidad de Bologna (la primera de la historia fundada por la Iglesia católica
en el Siglo XII). Enseño las cátedras de anatomía y filosofía y llevó, junto a su
esposo, un laboratorio para la investigación científica en su propia casa. Una de
sus mayores contribuciones fue la demostración de la no universalidad de la Ley
de Boyle (Ley de los gases ideales).
María Gaetana Agnesi (1718-1799)
Heredó de su padre, quién era profesor en la universidad de Bologna, la pasión
por las matemáticas, las lenguas extranjeras y la filosofía. Lejos de vanagloriarse
por sus dones tenía un profundo interés en la vida religiosa y un deseo muy
grande de ingresar al convento, deseo que no le fue permitido por su padre. La
fama que alcanzó hizo que Benedicto XIV la invitara como profesora en la
Universidad de Bologna cuando su padre enfermó. Su contribución al mundo
matemático fue notable para la época. Luego de la muerte de su padre estudió
Teología y Patrística. Finalmente se unió a la orden agustiniana en Milan, donde
murió a los 81 años.

Santa Teresa del Niño Jesús (1873-1897)


Teresa de Lisieux, es la más joven entre los santos
Doctores de la Iglesia. Sin haber tenido estudios de
teología aporta grandemente con sus intuiciones tan
claras sobre la fe y el amor a Dios. Vivió una vida
sencilla y oculta en el convento. Nos ha enseñado un
caminito de amor profundo e inocente, como el de un
niño para llegar a Cristo. En su obra, Historia de un
Alma, nos dice: «No me abalanzo al primer puesto,
sino al último... sí, estoy segura de que, aunque
tuviera sobre la conciencia todos los pecados que
pueden cometerse, iría, con el corazón roto de
arrepentimiento, a echarme en brazos de Jesús, pues
sé cómo ama al hijo pródigo que vuelve a él». Es
considerada, junto a San Francisco Javier, patrona de las misiones.
Santa Edith Stein (1891-1942)
Fue la última de 11 hermanos, nacida en el seno de una familia judía. Edith Stein
no era una mujer religiosa, por el contrario perdió la fe en Dios "Con plena
conciencia y por libre elección dejé de rezar". Escribe también que era una
feminista radical. Luego de ser asistente de Edmund Huserrl y muchos años de
estudio se encuentra con el Nuevo Testamento, Kierkegaard y los Ejercicios
Espirituales Ignacianos, lo que la impacta profundamente. En una visita que
realiza a unos amigos convertidos al catolicismo, se encuentra con la Biografía
de Santa Teresa de Ávila. Es bautizada e ingresa a la orden del Carmelo. Debido
a su origen judío, Sor Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein) muere en la
cámara de gas en el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau.

Santa Gianna Beretta Molla (1922-1962)


"Mi esposa era una santa normal", así define Pietro Molla a su esposa y continua:
"Siempre me pareció una mujer completamente normal pero, como me dijo
Monseñor Carlo Colombo, la santidad no está solo hecha de signos
extraordinarios, está hecha, sobre todo, de la adhesión cotidiana a los designio
inescrutables de Dios"
Gianna Beretta nació en Magenta una provincia de Milán, recibió una educación
cristiana por parte de sus padres. Consideraba la vida como un regalo maravilloso
de Dios y confiaba plenamente en La Providencia. Estaba convencida de la
eficacia de la oración. Fue Médico y se especializó en pediatría. A los 39 años es
diagnosticada con un tumor en el útero cuando tenía dos meses de gestación.
Madre de cuatro hijos, Gianna entrega su vida por salvar a su última hija, Gianna
Emanuela. Muere una semana después de haber dado a luz entre dolores
insoportables diciendo "Jesús, te amo. Jesús, te amo"
Flannery O´Connor (1925-1964)
Es considerada una de los mejores escritores del siglo XX. Esta mujer, refleja en
su obra un catolicismo ardiente, profundo y personal. Flannery vivió los últimos
10 años de su vida aquejada de lupus. Su obra es de un contenido espiritual muy
grande. Elena Buia Rutt (L´Osservatore Romano) refiriéndose a la obra de
Flannery O´Connor, dice: "... leer este tipo de literatura quiere decir frecuentar
una zona espiritual ardua; quiere decir mirar la realidad a la luz de un realismo
cristiano a veces desconcertante, que hace del límite del hombre un punto fuerte.
Una mirada que es tanto más despiadada cuanto más remite a una piedad más
grande e incondicional."

Beata Teresa de Calcuta (1910-1997)

“De sangre soy albanesa. De ciudadanía, India. En lo referente a la fe, soy una
monja católica. Por mi vocación, pertenezco al mundo. En lo que se refiere a mi
corazón, pertenezco totalmente al Corazón de Jesús”. Creo que no hace falta
mucha presentación a esta mujer católica que tanto ha influenciado al mundo en
los últimos tiempos, impactando la vida de católicos y no católicos

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