LAS DISTRACCIONES DEL SEÑOR SMITH

El señor Smith en su infancia andaba hundido en sus reflexiones, lo cual le tomaba

varias horas. Después de un tiempo sus vecinos de Edimburgo ya estaban
acostumbrados a las vueltas que realizaba por el barrio a horas inesperadas, su mirada
perdida y el movimiento de sus labios a quien todos llamaban sabios.
Si bien se sabe pocas cosas de la vida del Señor Smith, se puede afirmar que nació en
Kirkcaldy en 1723, fue a una escuela local en la cual destaco en los cursos de griego y
latín, donde la Universidad de Glasgow lo exonero del primer año en los estudios de
lenguas clásicas (Con tan solo 14 años). Años más tarde obtuvo una beca para Oxford
conociendo a su gran amigo David Hume, y saliendo de Oxford pronuncios algunas
celebres conferencias en Edimburgo.
Fue profesor en la Universidad de Glasgow, en Lógica y Filosofía moral, en lo cual tuvo
gran éxito ya que había estudiantes de otros lugares que iban a escucharlo
(Nombrándolo más tarde Padre de la economía). Siempre se consideró un filósofo
moral y decía que solo se mantendría un orden natural y social si esta se fundamentaba
en la razón.
Su primer libro publicado fue después de su muerte, llamada “Historia de la Astronomía”
además de un estudio sobre el origen de las lenguas. Smith trato de averiguar qué era
lo que mantenía unida a la sociedad ya que el ser humano es un ser egoísta, díscolo e
insolidario. Pero su primer libro publicado fue “La teoría de los sentimientos morales
(1759), la cual decía que “Los sentimientos morales” terminan siempre por prevalecer
sobre las crueldades y errores que la sociedad comete.
Smith fue tutor del duque de Buccleuch con el cual viajo durante tres años (1764 -1767),
conociendo a Voltaire, Francois Quesnay y los fisiócratas (con el cual tuvo una
discusión). A su regreso a Escocia, se encerró en Kirkcaldy donde vivía con su madre y
en 1776, escribió “Investigación sobre la Naturaleza y Causas sobre la Naturaleza y
Causas de la Riqueza de las Naciones” teniendo gran importancia en el futuro.
Este libro alcanzo una gran masa de lectores y fue el primero en explicar el por qué y
cómo opera el sistema que nos sacó de las cavernas y nos fue haciendo progresar en
todos los campos. Además gracias a la propiedad privada y a la división del trabajo se
desarrollaron unas fuerzas productivas formidables y en la competencia, con un
mercado libre, sin demasiadas trabas era el mejor mecanismo que distribuia la riqueza
(La libertad garantizaba la prosperidad y civilización).
 LOS SALARIOS DEL TRABAJO
El producto del trabajo constituye el salario del trabajo ya que originalmente el trabajador
tenia apropiado una parte de tierra por lo cual no había propietarios ni patronos con
quienes compartir.
Si se hubiera seguido con este mismo mecanismo, los salarios del trabajo habrían
aumentado, abaratando así las cosas aunque en apariencia muchas de ellas pudieran
haber resultado más caras y con todas estas mejoras en las facultades productivas que
originan la división del trabajo.
Pero este estado originario, donde el trabajador gozaba de todo el producto de su propio
trabajo, solo pudo perdurar hasta la primera apropiación de tierra y acumulación de
capital.
En cuanto la tierra, si esta se convierte en propiedad privada, este exige todo cuanto
producto obtiene o recolecta el trabajador. Siendo la renta la primera deducción del
producto de trabajo en la tierra.
Otro caso que podemos resaltar es cuando la persona que cultiva la tierra disponga de
lo necesario para mantenerse hasta la recolección, es decir, la subsistencia del
trabajador por parte del amo. A menos que este trabajo por parte del trabajador actué
como capital, generando beneficios siendo esta la segunda deducción por parte de la
agricultura.
Como se vio anteriormente el trabajo está sujeto a la misma deducción del beneficio.
Esto debido que los operadores de todas las artes y manufactureras necesitan de un
patrón, el cual participa en el producto de trabajo de sus operarios y con esta
participación se genera beneficios.