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Dada la planta que se muestra en la figura 1, con dos sensores y1(s) y y2(s) y un solo actuador u(s),

se introduce una topología de control apropiada para regular la relación entre las dos variables.
𝑦2
a =
𝑦1
Ejemplos de este problema son los procesos de combustión, donde la relación combustible-aire
debe controlarse para mejorar la eficiencia de la combustión, o la mezcla de sustancias químicas,
donde la relación entre dos flujos tiene que ser constante o una función de una tercera variable.

𝑦2
Una solución intuitiva para controlar la relación a = es la topología propuesta en la figura 2.
𝑦1
Mide las señales y1(s) y y2(s), las divide, compara la división con la relación a (referencia) y aplica el
resultado (error) al controlador Gr(s) y válvula u(s).

Sin embargo, aunque esta solución parece ser una opción natural, la estructura no funciona bien
debido a la operación de división. Se propone una solución simple en la figura 3. Esta estructura de
control de relación evita la división. Calcula la referencia a, para después multiplicar la señal y1(s)
por la relación a. Luego, lo compara con y2(s), y aplica el error resultante al controlador G2(s) y la
válvula u(s).
En caso de que tengamos dos actuadores u1(s) y u2(s), uno para cada tubería, la estructura de
control mostrada en la figura 3 puede mejorarse con un controlador adicional G1(s), como se
muestra en la figura 4. Ahora, este controlador principal G1(s) regula el flujo, y el segundo
controlador G2(s) sigue el primero y controla la relación.

En esta nueva opción, el flujo y2(s) secundario se retrasa, en comparación con el mínimo deseado a
y1(s). Para resolver este problema, debemos acelerar el sistema secundario de control flujo. Esto se
puede hacer fácilmente agregando un bloque de pre-alimentación suplementario entre los dos
bucles.

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