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En América Latina, Simón Bolívar (tuvo la idea de llegar a una unión de las naciones
latinoamericanas una vez alcanzada la independencia de España, lo cual pretendió iniciar
con el Congreso de Panamá en 1826.
En el sentido estrictamente económico, no es hasta el siglo XX que las naciones
latinoamericanas comienzan a pensar en la alternativa de la integración como una
posibilidad de mejorar el desarrollo de las regiones y de los países.
*Un hito fue la Conferencia Económica de Buenos Aires de 1957, los Estados
latinoamericanos manifestaron la conveniencia de establecer gradual y progresivamente
un mercado común latinoamericano.
*Más adelante, la CEPAL (Conferencia Económica para América Latina) dio
principios y recomendaciones sobre los cuales los países deberían organizarse para el
establecimiento de los modelos integracionistas y que servirían de guía de los tratados y
acuerdos que dieron origen al Mercado Común Centroamericano MCC y al Grupo
Andino CAN después.
Para mediados de los noventa, la situación cambia y se evidencia un nuevo auge de los
procesos de integración como alternativas para el desarrollo, nacimiento de Mercosur.
En mayo de 2010 se celebró en Los Cardales, Argentina, una reunión extraordinaria del
Consejo de jefes y jefas de Estado de UNASUR. Interesa destacar:
La designación reciente de un Secretario General adquiere relevancia por la enorme
sobrecarga que se ha auto impuesto UNASUR.
Más que las etapas previas CEPAL (de los años cincuenta), Asociación Latinoamericana de
Libre Comercio (ALALC) de 1960 o de la Asociación Latinoamericana de Integración
(ALADI) en 1980, el Mercosur encuentra sus antecedentes más destacados en el Acta de
Foz de Iguazú, de noviembre del año 1985, firmada por presidentes José Sarney y Raúl
Alfonsín. Dicha acta fue el corolario que luego se concretó en el Tratado de Asunción de
marzo de 1991.
Se buscaba dejar definitivamente atrás las hipótesis de conflicto y la pugna de liderazgos a
nivel continental entre ambos países.
En 1986 Brasil y Argentina dieron un paso más con la firma del Acta para la Integración
Argentino-Brasileña, que estableció el Programa de Integración y Cooperación
Económica (PICE).
El cambio de rumbo coincidió también con el relevo de gobiernos en Argentina y Brasil, en
acompañamiento directo con la nueva ideológica a nivel internacional: Menem y Collor de
Mello.
Este documento firmado el 6 de julio de 1990 Argentina y Brasil, proponía el
establecimiento de “un Mercado Común entre (ambos países), el que deberá
encontrarse definitivamente conformado el 31 de diciembre de 1994”. Llegar al 31 de
diciembre de 1994 al arancel 0 (cero).
Finalmente se llegó a la firma solemne del Tratado de Asunción el 26 de marzo de 1991.
Características generales
Objetivos y medios
Artículo 1: “los Estados Partes deciden constituir un Mercado Común, que deber estar
conformado al 31 de diciembre de 1994”.
Igualdad fiscal entre los socios (Art 7): Procede respecto de los productos originarios de
cualquiera de los Estados partes, que tendrán el mismo tratamiento fiscal en el territorio de
todos los demás socios.
Cláusula de la Nación más favorecida (Art. 8, inc. d): Se aplica de manera automática a
todos los Estados partes, respecto de cualquier franquicia, ventaja, favor, etc. que uno de
los socios conceda a un producto originario de o destinado a terceros países no miembros
de la ALADI.
Estructura institucional
En cumplimiento del Tratado de Asunción, en la III Reunión del Grupo Mercado Común
(GMC) celebrada entre los días 21 y 23 de octubre de 1991 en Asunción del Paraguay, se
creó un grupo ad-hoc con la finalidad de preparar un proyecto de Sistema de Solución de
Controversias para el período de transición.
A tal fin se aprobó el “Protocolo de Brasilia para la Solución de Controversias” el 17 de
diciembre de 1991, el cual fue suscripto por los cuatro Estados Partes y entró en
vigencia el 24 de abril de 1993.
Una primera etapa de negociaciones durante un breve periodo. Si las mismas fracasan, el
Grupo Mercado Común formulará recomendaciones, asesorado por expertos, si se
estimare necesario. Las recomendaciones que realicen estos órganos no son obligatorias.
Si la controversia aún no hubiera encontrado solución, se inicia la instancia arbitral, a
través de la conformación de un tribunal ad hoc, compuesto por tres árbitros. El laudo es
vinculante para las partes y no podrá ser apelado.
Los particulares, sean personas físicas o jurídicas, no pueden acceder a la instancia
arbitral.
El sistema de solución de controversias descripto es pasible de numerosas críticas.
Gran parte de estas críticas subsisten respecto al sistema de solución de controversias
creado por el Protocolo de Olivos, como se verá en el apartado 3.2.7.
A partir de este Protocolo, la estructura institucional del Mercosur contará con los
siguientes órganos:
• El Consejo del Mercado Común (CMC): órgano superior del Mercosur
• El Grupo Mercado Común (GMC), órgano ejecutivo se pronuncia mediante
resoluciones.
• La Comisión de Comercio del Mercosur (CCM), asiste al G.M.C. se expide mediante
directivas o propuestas.
• La Comisión Parlamentaria Conjunta (CPC), órgano representativo de los Parlamentos
de los Estados Partes en el ámbito del Mercosur.
• El Foro Consultivo Económico-Social (FCES), órgano de representación de los sectores
económicos y sociales.
• La Secretaría Administrativa del Mercosur (SAM).
Luego del colapso político y financiero de la Argentina de 2001 y 2002, con su fortísimo
impacto en toda la región, la voluntad política e institucionalista no sólo se consolidó sino
que comenzó a producir impactos y resultados importantes a nivel de los gobiernos.
El 18 de febrero del 2002, reunidos en la Quinta Presidencial de Olivos y teniendo como
anfitrión al entonces novel Presidente argentino, Eduardo Duhalde, los Presidentes y
Ministros de Relaciones Exteriores de los cuatro países del Mercosur, firmaban el
largamente esperado Protocolo para la Solución de Controversias en el Mercosur.
Este instrumento entró en vigencia el día 2 de enero del año 2004, y derogó a partir de su
entrada en vigencia el Protocolo de Brasilia.
A partir del Protocolo de Ouro Preto, firmado el 17 de diciembre de 1994 y vigente desde el
1 de enero de 1995, el Mercosur tiene una estructura institucional básica compuesta por los
órganos que se detallan en el presente apartado.
Sin embargo, resulta importante señalar que con posterioridad a dicho Protocolo, se han
producido innovaciones institucionales de importancia. El siguiente cuadro, resume la
evolución de la estructura institucional del Mercosur posterior al Protocolo de Ouro Preto,
indicando las modificaciones a los órganos existentes, como así también, los nuevos
órganos que fueron creados a los fines de mejorar la eficiencia del proceso integrador:
Fuente (Galeano, 2011).
El CMC fue creado por el Tratado de Asunción (artículos 9 a 11), pero adoptó su actual
estructura y funciones por el Protocolo de Ouro Preto (artículos 1 a 8). Es el órgano
superior del Mercosur y le corresponde “la conducción política del mismo y la toma de
decisiones para asegurar el cumplimiento de los objetivos y plazos establecidos para la
constitución definitiva del Mercado Común” (Art. 3 P.O.P.). Al Consejo le corresponde por
consiguiente, definir las líneas generales del proceso de integración en un sentido amplio,
así como articular el esfuerzo político necesario para el desarrollo del mismo.
Está integrado por los ministros de relaciones exteriores y de economía de los estados parte
(Art. 4 P.O.P.) y se reúne las veces que considera oportuno, por lo menos una vez por
semestre con la presencia de los presidentes de los estados parte. Su presidencia, semestral,
se ejerce por rotación de los estados, por orden alfabético (Art. 5 P.O.P.). Sus reuniones son
coordinadas por los ministros de relaciones exteriores y a ellas pueden ser invitados otros
ministros o autoridades de nivel ministerial (Art. 7).
El Consejo del Mercado Común, mediante la DEC. Nº 11/03, IV CMC EXT – Montevideo,
6/X/03, ante la necesidad de avanzar en el fortalecimiento de la estructura institucional del
Mercosur, decidió crear, con carácter permanente, la Comisión de Representantes
Permanentes del Mercosur (CRPM) como órgano del Consejo del Mercado Común (art. 1),
estando dicha Comisión integrada por los Representantes Permanentes de cada Estado Parte
para el Mercosur y por un Presidente. Como Presidente actúa una personalidad política
destacada, de nacionalidad de uno de los Estados Partes, designada por el Consejo del
Mercado Común a propuesta de los Presidentes de los Estados Partes (art. 2).
El CMC toma sus decisiones por consenso y con la presencia de todos los estados Parte y
se pronuncia mediante decisiones, obligatorias para estos últimos (Art. 9 P.O.P.).
En el Protocolo de Ouro Preto (Art. 8) se detallan sus funciones y atribuciones, las más
importantes de las cuales son las siguientes:
• Velar por el cumplimiento del tratado de asunción, de sus protocolos y de los acuerdos
firmados en su marco.
• Formular políticas y promover las acciones necesarias para la conformación del mercado
común.
• Ejercer la titularidad de la personalidad jurídica del Mercosur.
• Negociar y firmar acuerdos, en nombre del Mercosur, con terceros países, grupos de
países y organismos internacionales, funciones que pueden ser delegadas por mandato
expreso al grupo mercado común.
• Pronunciarse sobre las propuestas que le sean elevadas por el grupo mercado común.
• Crear reuniones de ministros y pronunciarse sobre los acuerdos que le sean remitidos por
las mismas.
• Crear los órganos que estime pertinentes, así como modificarlos o suprimirlos; y adoptar
decisiones en materia financiera y presupuestaria.
Al Grupo Mercado Común le compete, al igual que al Consejo Del Mercado Común, la
administración y ejecución del Tratado de Asunción y de los acuerdos específicos y
decisiones que se adopten en el marco jurídico que en el mismo se establece (art. 9 del
T.A.).
El Grupo Mercado Común, por su parte, aunque dotado de competencia normativa, es
calificado como el órgano ejecutivo del Mercosur (arts. 13 del Tratado de Asunción y 10
del P.O.P.). Jerárquicamente se encuentra con carácter inmediato por debajo del CMC.
El Grupo Mercado Común (GMC) está integrado por cuatro miembros titulares no
ministeriales de cada país. Tres de esos cuatro miembros deben representar
obligatoriamente a los Ministerios de Relaciones Exteriores y de Economía, y a los Bancos
Centrales de los países miembros (art. 11 P.O.P.). Los miembros titulares y alternos de cada
Estado Parte “constituirán, para todos los efectos, la respectiva Sección Nacional del Grupo
Mercado Común” (art. 2, aptdo. 3 del Reglamento Interno del GMC).
La coordinación del GMC la realizan los Ministerios de Relaciones Exteriores. El GMC
puede invitar a otros funcionarios de rango no ministerial a participar de las reuniones. El
GMC tiene un presidente, que debe rotar entre los estados cada seis meses.
Entre las funciones y atribuciones del GMC se destacan (Art. 14 P.O.P.):
• Velar por el cumplimiento del Tratado de Asunción, de sus protocolos y de los acuerdos
firmados en su marco.
• Proponer proyectos de decisión al CMC.
• Tomar las providencias necesarias para el cumplimiento de las decisiones adoptadas por
el Consejo.
• Proponer medidas concretas tendientes a la aplicación del programa de liberación
comercial, a la coordinación de políticas macroeconómicas y a la negociación de acuerdos
frente a terceros.
• Fijar programas de trabajo que aseguren el avance hacia la constitución del mercado
común.
• Crear, modificar o suprimir órganos tales como subgrupos de trabajo y reuniones
especializadas, para el cumplimiento de sus objetivos.
• Manifestarse sobre las propuestas o recomendaciones que le fueren sometidas por los
demás órganos del Mercosur en el ámbito de sus competencias.
• Negociar, con la participación de representantes de todos los estados
Parte, por delegación expresa del CMC y dentro de los límites establecidos en mandatos
específicos concedidos con esa finalidad, acuerdos en nombre del Mercosur con terceros
países, grupos de países y organismos internacionales. El GMC, cuando disponga de
mandato para tal fin, procederá a la firma de los mencionados acuerdos. Además, cuando
sea autorizado por el CMC, podrá delegar los referidos poderes a la Comisión de Comercio
del Mercosur.
• Adoptar resoluciones en materia financiera y presupuestaria, basado en las orientaciones
emanadas del Consejo.
• Organizar las reuniones del CMC y preparar los informes que éste le solicite.
Finalmente, es importante destacar que el GMC se pronuncia por consenso, mediante
resoluciones, obligatorias para los estados Parte (Art. 37).
Precisamente, de entre las competencias que acabamos de recoger es sobresalen las
“atribuciones legislativas” para dictar resoluciones, así como la facultad de iniciativa de
proponer al Consejo Mercado Común la aprobación de Decisiones sobre materias de su
competencia, ejerciendo en estos supuestos “una suerte de iniciativa en relación al proceso
legislativo, cuando culmina con una Decisión instada por el GMC”. El Grupo Mercado
Común, preservado el papel del Consejo Mercado Común como “motor de la integración”,
puede ser calificado, con todo, como el órgano más dinámico y de mayor transcendencia
práctica en el momento actual del Mercosur (Martínez Puñal, 2005).
La Secretaría Administrativa del Mercosur (SAM) aparece por primera vez en el Tratado de
Asunción (TA) bajo la forma de un órgano auxiliar del GMC. En el Protocolo de Ouro
Preto su estatus se modifica, en tanto se la define como un órgano de apoyo operativo de
todo el sistema, responsable de la prestación de servicios a las demás instituciones del
Mercosur. Entre sus actividades reconocidas en el protocolo, se destacan: