Ejercitar el cuerpo es una actividad que es vista como necesaria,

y hasta como imprescindible, pues bien tan importante como es

el ejercicio para el cuerpo lo es para la mente. Y es que del
mismo modo que perdemos agilidad y elasticidad física a partir
de los 30 o 35 años, también nuestro cerebro sufre una perdida
constante, que es conveniente compensar. Los especialistas
afirman que el cerebro tiene una capacidad de rejuvenecimiento
si es estimulado y se ejercita de forma adecuada.
Continuar aprendiendo toda la vida y especialmente cuando
llega la edad de la jubilación parece ser la mejor medida
preventiva de las enfermedades que provocan deterioro mental
y pérdida de memoria.
Un cerebro sano implica, claro está , un estilo de vida saludable,
en el que dediquemos las horas adecuadas al descanso,
tratemos de cerrarle el paso al estrés y aprendamos a relativizar
los problemas cotidianos. Pero no menos importante es la dieta
que se elija, que debería ser equilibrada potenciando los
alimentos antioxidantes y moderando el consumo de grasas
saturadas, de excitantes como el café, de dulces y alimentos
procesdos y de tóxicos como el alcohol y el tabaco.
El cerebro humano es algo muy complejo se calcula que operan
en él un billón de neuronas. Y cada una de ellas pueden
establecer millones de conexiones entre si hasta llegar a una
cifra que se nos escapa, (alguien ha calculado esta cifra en
10.000 cuatrillones)
A medida que el cerebro envejece, las conexiones entre las
neuronas o sinapsis, se realizan con menor eficacia y los
mensajes que se transmiten pueden sufrir interferencias u
omisiones.
Es cuando pensamos que debemos hacer algo, y al poco rato ya
lo hemos olvidado. Por ello resulta vital ejercitar la mente para
mejorar la memoria, la concentración y la fluidez verbal
Decálogo básico para el cerebro

 Llevar una vida activa

 Mostrar una curiosidad constante por lo que pasa y por lo
que se desconoce
 Abrirse a nuevas experiencias ( cursos, actividades
creativas, etc)
 Reducir el estrés y evitar aquellos factores que puedan
provocarnos ansiedad.
 Dormir las horas necesarias para que la mente y el cuerpo
se recuperen bien
 Llevar a cabo actividades que hagan trabajar la memoria y
la capacidad de concentración.
 Participar en tertulias con amigos y colegas
Mercè Gómez ~Naturópata~ 1
Diplomada en Dietética Natural
E-mail: mercedes_salud@terra.es
  Cultivar el sentido del humor y el espíritu crítico
 Seguir una dieta saludable, moderando el consumo de
calorias y restringiendo las bebidas excitantes y el alcohol.
 Practicar ejercicios mentales, pasatiempos, crucigramas,
etc
 Tener momentos de relajación.
 No abusar de los medicamentos.
Al igual que nuestros músculos y huesos necesitan
determinados nutrientes, que transformados en energía,
sostienen a nuestro cuerpo y le permiten moverse y realizar
trabajos físicos, nuestro cerebro necesita alimentarse
adecuadamente para hacer frente a sus funciones de
memorización, concentración, reflexión...
Los neurotransmisores son los encargados de hacer posible todo
el sistema de comunicación cerebral, si no funcionan bien por
falta de los nutrientes imprescindibles, puede haber problemas
de concentración y memorización, y también puede verse
afectado el estado de ánimo.

¿Qué comer para tener más memoria?

Alimentos ricos en glucosa

La glucosa es el autentico carburante del cerebro. Para que los
circuitos cerebrales funcionen correctamente se precisan 4
gramos de glucosa a la hora. Cereales integrales: pan, pasta,
arroz.. , miel, etc.
Alimentos ricos en el complejo B
Este grupo vitamínico (sobre todo las vitaminas B1 y B6)tienen
una función protectora del cerebro e interviene en los procesos
de aprendizaje y memorización. La carencia de esta vitamina
puede provocar dificultades de concentración, vacíos de
memoria y cansancio. Levadura de cerveza, salvado de trigo,
germen de trigo, huevos, etc
Alimentos ricos en vitamina E
Un antioxidante que retrasa el envejecimiento. Frutos secos,
germen de trigo, aceite de oliva.
Alimentos ricos en magnesio.
Mineral muy importante ya que interviene en el buen
funcionamiento del sistema nervioso y tiene un efecto
ligeramente sedante. Cereales integrales, almendras, nueces,
levadura de cerveza, plátano, etc
Alimentos ricos en potasio.
Plátanos, albaricoques, tomate, uva, germen de trigo, etc
Alimentos ricos en tirosina

Mercè Gómez ~Naturópata~ 2

Diplomada en Dietética Natural
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Un aminoácido que interviene en la formación de las
catecolaminas, neurotransmisores que regulan la capacidad de
concentración. Pollo, huevos, plátanos y judías secas.
Alimentos ricos en lecitina y colina.
Estimulan la producción del neurotransmisor acetilcolina, que
interviene en la funciones de aprendizaje, atención memoria,
etc. Son ricos en lecitina, además de la lecitina de soja, los
huevos, la soja y el germen de trigo
Hay colina en : coles, coles de Bruselas, coliflor, espinaca,
lechuga, zanahorias, patatas.

Alimentos ricos en ácido glutámico.

Actúa como precursor de un importante neurotransmisor del
sistema nervioso central llamado GABA (ácido
gammaaminobutírico). Mejora la alerta mental y la claridad del
pensamiento. Germen de trigo, cereales integrales, avellanas.
Alimentos ricos en Omega 3 y 6 y yodo
La mitad de la masa cerebral está compuesta por ácidos grasos
insaturados, nutrientes que protegen la salud del sistema
circulatorio, manteniendo la sangre fluida y las paredes de las
arterias elásticas. El yodo mejora la capacidad de aprendizaje.
Pescado azul, semillas de lino, aceite de onagra, aceite de oliva.

Plantas medicinales
Gnkgo Biloba
Una planta que favorece la microcirculación cerebral y
contrarresta el envejecimiento del cerebro. Es el mejor remedio
par paliar la falta de memoria provocada por un insuficiente flujo
de sangre en el cerebro. Algunas investigaciones han
demostrado sus resultados en el tratamiento de la demencia
moderada.
Como tomarlo
Como extracto 15 gotas 2 veces al día durante 2 meses
seguidos, dejando intervalos de 1 mes de descanso.
En comprimidos: 2 comprimidos, 3 veces al día repartidos en las
comidas.
Milenrama, melisa, romero, menta piperita y bayas de
enebro. Aproximadamente a partes iguales. Debe utilizarse
una cucharada rasa de la mezcla por taza de agua hirviendo y
dejar reposar media hora. Se toma una vez al día, aunque puede
llegarse hasta tres.

Mercè Gómez ~Naturópata~ 3

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