solapa y no aceptar la verdadera esencia que se esconde detrás de tu vida diaria? Muchas veces incluso se hace parte de tu forma de vestir, como sucede con los asiduos al género gótico. ¿Puedes haber notado las miradas perversas a tu accesorio de cuero?, supongo que sí, sin embargo ir más allá de contestar a una insinuación, sea que sigas el juego o no (una mirada, risa curiosa, gesto cual sea), te puede convertir en un ser destinado a la locura del placer sin límites, y toda tu cristiandad aparece frente a ti. No considero algo normal tratar de ser pervertidos en la palabra, y tenerlo escondido como una enfermedad de la piel. El fin, es simple, ser…! no fingirlo.
El placer sexual no tiene que resumirse en un simple acto
sexual entre un hombre/mujer, mujer/mujer, hombre/hombre, o cualquier combinación posible. Nuestro cuerpo desde muy niños ya experimenta estímulos que nos conducen al placer, a la excitación. Para no ser juzgados como pervertidos, nos volvemos unos reprimidos, y esa si es una bomba a punto de estallar.
¿Tienes cierto tipo de curiosidad por el BDSM?, no hay porque
preocuparse, aquí no serás el gato que murió por curioso. Tienes varias opciones por experimentar dentro del mundo BDSM, el cual no vamos a considerar de antemano con “tener relaciones sexuales con dureza”, eso podrías considerarlo como sexo duro, que pueden incluir violaciones fingidas/consentidas (aquí cierto tipo de fetichismo, pero que no lo considerare BDSM). La satisfacción sexual en el BDSM se da a través de infinidad de prácticas, que podemos denominar juegos, realizados con nuestra pareja, o quienes formen parte de la sesión. Comúnmente termina todo con la práctica sexual, obviamente con tu pareja BDSM. Queda a consideración de cada participante el intercambio de parejas, pero aclaro, que eso no tiene nada que ver con la finalidad del juego sexual BDSM.
Líneas arriba cito pareja. Por una cuestión de confianza,
empezamos a entrar a este mundo con nuestras parejas actuales. Las sesiones profesionales, guiadas por un tutor son también valederas. En todo caso queda claro que debemos conocer el grado de profesionalismo de los mismos.
Entrando ya a estos conceptos es necesario definir los dos roles
sumun de esta práctica, que como mencione, incluye varias formas de goce y placer. Para evitar géneros lo definiremos Dominación y Sumisión.
¿Se nace dominante o sumiso?, para ambos casos, es un simple
no. La experiencia es la mejor maestra. Perfiles de macho conquistador, no pudiendo someter a una sumisa entrenada para ello, porque simplemente no trasmite la fuerza necesaria; lo mismo con sumisos dispuestos a los juegos de sometimiento más placenteros, terminan dándose cuenta que tienen un perfil de dominante increíble.
Lo importante de todo, es tener conciencia del rol que has
logrado descubrir, es el que te corresponde. Solo ello te permitirá llegar al placer infinito que es la práctica del BDSM.
Para la próxima veremos un poco más sobre perversión sexual