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Introducción ...................................................................................................................3
1 El Silencio (Textos budistas) ...............................................................................5
2 El Grito (Textos de los profetas) .....................................................................19
Conclusiones .....................................................................................................................27
Notas ......................................................................................................................................30
Cuestiones para la reflexión ....................................................................................32
Y en Tus silencios labras
el Grito que sostengo
y el Silencio que soy.
Pere Casaldáliga
José Ignacio González Faus. Jesuita. Miembro del Área Teológica de Cristianisme i
Justícia. Entre sus obras, cabe destacar La humanidad nueva. Ensayo de cristología
(10ª ed. 2016); Acceso a Jesús (9ª ed. 2000) o Proyecto de hermano, Visión creyente
del hombre (3ª ed. 2000). Sus últimos libros son: El rostro humano de Dios (3ª ed.
2015), Otro mundo es posible… desde Jesús (2009), Herejías del catolicismo actual
(2013) y Confío. Comentario al Credo cristiano (2014). Escribe habitualmente en La
Vanguardia. Es autor de numerosos cuadernos de Cristianisme i Justícia.
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INTRODUCCIÓN
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[Los hombres] piensan que el alma Los hombres de este mundo son
discriminante que se encuentra en egoístas y no saben amar y respetar
la raíz de esta vida de nacimiento y al prójimo. Además pelean por ne-
muerte es su verdadera naturaleza. cedades y viven trabajando sólo para
No saben que poseen dentro de sí un ellos mismos, envueltos en el mal y el
alma pura que es su fundamento últi- sufrimiento (p. 95).
mo, pero está cubierta con el polvo de
la duda e ilusión, originado por condi- Aquí parece abrirse una puerta al
ciones y causas externas (pp. 67-68). enfoque de los profetas, y al tema de
Esa alma es la naturaleza de Buda, o la necesidad humana de redención, li-
sea, la simiente de Buda (p. 71). beración, salvación, perdón o como se
quiera llamarlo. Pero no obstante:
También aquí cabe otro paralelismo
con la bíblica «imagen divina» del La ignorancia y el deseo tienen fuerza
hombre que, según el Génesis, es lo propia para originar todas las pasio-
mejor del hombre pero es también fac- nes de la razón o del sentimiento y
tor de su perversión: de su deseo de todos los sufrimientos (p. 81).
«ser como Dios».
Además, la última frase ¿no parece Sin duda. Pero ignorancia y deseo
implicar una cierta divinización anóni- cambian mucho según las condiciones
ma de Buda, en medio del agnosticis- sociales en que se encuentre uno: en
mo budista? muchos casos, el deseo no surge sólo
de la ignorancia sino también de la
[No obstante:] Aun diciendo que en necesidad. Marx definía bien al hom-
todos los hombres existe la naturaleza bre como un «ser de necesidades»; y
de Buda, es tan hondo el fango de las de necesidades muchas veces imperio-
pasiones que no es fácil que salgan sas: tanto que exacerban esa necesidad
los brotes. Por ello el dolor es tan uni- nuestra constitutiva y la vuelven causa
versal e ilimitado como es el número de sufrimientos causados a otros. Ade-
de infelices (p. 88). más:
Este párrafo precioso sugiere otra Los deseos humanos no tienen lími-
vez paralelismos evangélicos: «todos te y nunca se verán satisfechos. Es
son pecadores», decía Pablo. O expre- como beber agua salada que no quita
siones jesuánicas como la de «ovejas la sed (p. 84).
sin pastor», la «puerta estrecha»… Esa
gran dificultad llevará a la aparición Preciosa expresión de esa paradoja
de dos budismos: el Mahayana (gran constitutiva del ser humano que es, a
vehículo) que es el que consideramos la vez, «finito e insaciable», siendo así
aquí, y el Hinayana (pequeño vehí- que a la esencia de lo finito pertenece
culo). necesariamente el ser limitado, cir-
Un problema similar se le planteó cunscribible y, por tanto, saciable.
también al cristianismo: recordemos el Destaquemos finalmente cierta to-
lenguaje de preceptos/consejos. nalidad «socrática» que pone la raíz
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última del mal en la ignorancia más apariencia y carencia de entidad
que en la maldad («no saben lo que (el panta rei heraclitano es visto
se hacen», dijo Jesús). Problema muy ahora como consecuencia de Par-
complejo del que ahora sólo cabe decir ménides, más que como oposición
que maldad e ignorancia están comple- a él). Aludo a Parménides para fa-
jamente entreveradas en nosotros. cilitar la comprensión de un lector
occidental; pero sería más correcto
haber aludido al hinduismo (ante-
1.2.3 La «causalidad» rior a Yajñavalka quizás), que es de
innegable fuerza metafísica, pero
Todas las cosas han sido originadas menos conocido entre nosotros.
por una serie de causas y de condicio-
nes. [Por tanto] no existe diferencia b) Pero el problema es que aunque
entre ellas (p. 52). Los hombres se todo tenga tan poca entidad, los
adhieren a los productos de su ima- hombres estamos instalados ahí, y el
ginación… Buda ve el mundo como sufrimiento es sentido ahí por el ser
una nube pasajera (p. 53). Buda ex- humano como bien real, insoporta-
plica que las cosas están fuera de la ble a veces.4 ¿Basta para superarlo
idea de ser y no ser, no son la exis- el que se diga que es «sólo aparien-
tencia ni la no existencia, no nacen ni cia»? Quizá bastaría en un mundo
mueren. Las cosas son, debido a una donde no existe la maldad sino sólo
serie de causas y condiciones. Por lo la finitud y la contingencia, pero ¿en
tanto, ese ser en sí no tiene existencia. este mundo concreto? Pensemos
[Sólo hay] formas aparentes que se por ejemplo en las víctimas atroces
presentan a los ojos humanos (p. 54). del Daesh o de la guerra de Siria.
[Aquí la traducción francesa añade: Quizá se podrá aminorar su inmen-
«Por sus deseos el hombre se adhiere so dolor desde ese nivel de con-
a apariencias»]. ciencia profunda, pero ¿suprimirlo?
Sí que es posible suavizar el dolor
Estos párrafos, que desbordan la ense- de las tres negatividades originales
ñanza del budismo y constituyen una («enfermedad, vejez, muerte»), y en
característica de casi toda la primitiva esto el budismo tiene razón. Pero ¿y
cosmovisión del Oriente, merecen un el dolor de las maldades posteriores,
comentario más extenso. de ahí derivadas?
11
En medio de este mundo de injusti- solver todas las peguntas últimas, esa
cias, de sufrimientos, de ignorancia, Ultimidad se manifieste por iniciativa
de deseos inalcanzables, de disputas propia (en el caso cristiano para decir
y de luchas por la vida, es muy difícil al hombre que le ama y quiere ayudarle
predicar. Buda vence estas dificulta- a llegar hasta Ella misma). Esa hipó-
des por su gran compasión (p. 29). tesis es precisamente la que ha hecho
aparecer, en los universos llamados
Notemos sin embargo cómo, en el religiosos, una palabra, «revelación»,
lenguaje de estos textos, la compasión que alude más a algo recibido que a
de Buda parece apuntar más a una en- algo encontrado.
señanza que a una redención. Pero, curiosamente, ese agnosti-
cismo budista no impide la existencia
de una auténtica fe,6 definida una vez
1.4 «Agnosticismo» sobre las como:
preguntas últimas
Creer en la sabiduría de Buda (p. 177).
El universo ¿de qué está constituido? Nada tiene tanto valor en este mundo
¿Es finito o infinito? ¿Cómo está cons- como creer en Buda…
truida la sociedad humana?
¿Estamos ante una versión budista
El budismo rehúye responder a esos de la paulina justificación por la fe?
problemas insolubles: Veamos cómo sigue:
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caer: si en vuestra habitación viviera rendija que permite la entrada del aire
una víbora, de seguro no podríais dor- solidario. Quede para otro momento
mir tranquilos. la comparación con los textos bíblicos
sapienciales sobre los pobres y la justi-
Llega la hora de mi fin. No olvidéis cia. Ahora resumamos todo lo anterior
que esta muerte es la muerte de la car- con una frase espléndida del budismo
ne… En estos cuarenta y cinco años zen japonés: «Cuando estás ilusionado
prediqué todo lo que había que pre- eres utilizado por tu cuerpo; cuando
dicar; no queda en mí ningún secreto estás iluminado utilizas tu cuerpo».
(pp. 10-14).
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2 EL GRITO (TEXTOS DE LOS PROFETAS)
19
[de José]… Detesto ese fasto y odio genes de dioses (10 1,2). Ya no hay
esos palacios; entregaré la ciudad y verdad ni lealtad, ni conocimiento
sus habitantes (6,4-8). de Dios en el país, sino juramento y
mentira, asesinato y robo, adulterio
Escuchad los que oprimís a los pobres y libertinaje, homicidio tras homici-
y arruináis a los indigentes. Pensáis: dio… Los sacerdotes se alimentan de
¿cuándo pasará el sábado para ven- los pecados de mi pueblo y hacen ne-
der el trigo, para encoger la medida y gocio con sus culpas (4,1.8).
aumentar el precio, para comprar por
dinero al desvalido y al pobre por un Galaad es una villa de malhechores
par de sandalias? El Señor de Jacob con huellas de sangre. Sus sacerdotes
jura no olvidar jamás lo que habéis como banda de bandidos al acecho
hecho (8,4 y ss.). (6,8.9).
Oseas
Miqueas
Un poco posterior a Amós, pero del
Norte. Es el profeta que más compara Vivió en los siglos viii-vii: también del
la injusticia con la idolatría debido a la Sur, pero ya no critica sólo al Norte: la
historia personal de la prostitución de corrupción ha pasado de Israel a Judá.
su esposa. Jeremías parece haber be- Se dice que no sólo critica injusticias
bido mucho de él. Vivió además una concretas, el latifundio sobre todo,
época con varios golpes de estado vio- sino una pseudoteología que pretende
lentos. sustentarlas.
Israel era una vid frondosa, daba fru- Ay de los que planean maldades y tra-
to. Cuanto más fruto, más altares, man iniquidades en sus lechos, para
cuanto mejor iba el país, más imá- ejecutarlas al amanecer, porque tie-
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nen poder para ello. Codician campos la respuesta del Señor es tan sencilla
y los roban, casas y las ocupan… Os como tajante:
alzáis contra mi pueblo como enemi-
gos; arrancáis túnica y manto a quien Ya se te ha explicado lo que el Señor
transita confiado; echáis del hogar desea de ti: tan sólo que practiques la
querido a las mujeres de mi pueblo… justicia, que ames de verdad, con ternu-
(2,1.2; 8.9). ra, y camines humilde con tu Dios (6,8).
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niegan sus derechos a los pobres de tergiversa el derecho y queda lejos la
mi pueblo, que hacen su presa de las justicia: porque la honradez tropieza
viudas y saquean a los huérfanos!… por las plazas y la sinceridad encuen-
(10,1-2).15 tra cerradas las puertas (59,1.3.14)
22
inocente, sólo entonces habitaré con Habacuc
vosotros… ¿Creéis que este templo
que lleva mi Nombre es una casa de Conocido por sus «ayes» que pasan
bandidos? (7,4-7.11). por ser una de las críticas más serias a
todos los imperialismos. Desarrolló su
Quien quiera presumir que presuma actividad a finales del siglo vii.
no de su saber, ni de su valor ni de su
riqueza, sino de comprender que yo ¿Hasta cuándo, Señor, pediré auxilio
soy el Señor que establece en la tierra sin que me escuches?… ¿Por qué me
la lealtad, el derecho y la justicia, y se haces ver crímenes, me enseñas in-
complace en ellos (9,22-23). justicias, me pones delante violencia
y destrucción? La justicia no triunfa,
los malvados cercan al inocente y el
Sofonías derecho sale pisoteado… Tus ojos
son demasiado puros para estar mi-
Este autor, muy duro con las clases rando el mal, no puedes estar contem-
altas, pasa por ser el promotor de la plando la opresión. ¿Por qué, pues,
reforma de Josías después del largo e contemplas en silencio a los traidores
inmoral reinado de Manasés (siglo vii). y al culpable que devora al inocente?
(1,2-4.13).
El día del banquete tomaré cuentas
a nobles y príncipes… Se acabaron Ay del que mete en casa ganancias
los mercaderes y desaparecieron los injustas y anda muy erguido para li-
usureros: registraré a Jerusalén con brarse de la desgracia (2,8).
linternas para pedir cuentas a los ale-
targados con vinos generosos…, sus
riquezas serán saqueadas, las casas Ezequiel
que se construyen no las habitarán
(1,9.12.13). Sacerdote de Jerusalén, del siglo vi,
muy crítico con su ciudad. Por su con-
Ay de la ciudad manchada y opreso- dición sacerdotal sospechan algunos
ra… Sus príncipes son leones rugien- que las denuncias de justicia social son
tes, sus jueces lobos hambrientos, sus adiciones posteriores. Pero precisa-
profetas unos temerarios desleales, mente Ezequiel es muy crítico con el
sus sacerdotes profanan lo sagrado… estamento sacerdotal.
Pero el criminal no reconoce su culpa
(3,1-4.5). En ti, los príncipes de Israel derraman
sangre abundante, despojan al padre y
Un comentarista alemán llega a a la madre, atropellan al forastero, ex-
escribir que en Sofonías aparece «la plotan al huérfano y a la viuda… En ti
auténtica condena profética de la evo- se practica el soborno para derramar
lución económica hacia el sistema ca- sangre, cobras unos intereses de usu-
pitalista».18 Quizá baste con decir que rero, te lucras a costa del prójimo y a
esa es la evolución de la codicia. mí me tienes olvidado… Pero yo es-
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toy batiendo palmas al ver los nego- Baruc
cios que haces y la sangre que hay en
ti… La casa de Israel se ha convertido Presunto compañero y portavoz de Je-
en escoria (22,6-7, 12-13.16). remías, cuyo nombre utilizó un autor
de entre los siglos iii y ii a. C., por lo
¡Ay de los pastores que se apacientan que algunas biblias le atribuyen [como
a sí mismos! ¿No son las ovejas lo capítulo final] una carta de Jeremías
que tienen que apacentar los pastores? claramente anterior. Pasa por ser el úl-
Pero vosotros os coméis su enjundia, timo profeta de Israel:
os vestís con su lana, matáis las más
gordas, no fortalecéis a las débiles ni ¿Dónde están los jefes de las nacio-
curáis a las enfermas, ni vendáis a las nes, los que atesoraban oro y plata en
heridas, ni buscáis las perdidas y mal- los que confían los hombres, y era in-
tratáis brutalmente a las fuertes… Y mensa su fortuna? (3,17)
luego mis ovejas tienen que pacer lo
que hollaron vuestras pezuñas y tie- «Sus dioses están recubiertos de oro
nen que beber lo que vuestras pezu- y plata, pero son falsos e incapaces de
ñas enturbiaron (34,2-4.19).19 hablar y no se libran del orín y la car-
coma. Les ponen mantos de púrpura y
Esto dice el Señor: ¡basta ya príncipes tienen que limpiarles la cara del polvo
de Israel! Acabad con la violencia y del templo que se les acumula enci-
la rapiña, y practicad el derecho y la ma… ¡Cuidado no os asimiléis a los
justicia. Dejad de atropellar a mi pue- extranjeros, no os dejéis dominar por
blo (45,9). el temor!… Sus sacerdotes venden
las víctimas de sus sacrificios para
aprovecharse y sus esposas las sazo-
Malaquías nan sin dar nada a los pobres y necesi-
tados» (Carta de Jeremías vv. 10-11,
Se lo sitúa en el siglo v a.C., cuando el 4,27).
Templo ha sido reconstruido y el cul-
to vuelve a funcionar tras el destierro.
Algunos intentaron identificarlo con el
reformador Esdras: 2.2 Budismo y profetas:
¿lenguajes opuestos?
Os llamaré a juicio, seré testigo exacto
contra hechiceros, adúlteros y perju- Dejamos ahora la pregunta de muchos
ros, contra los que defraudan al obrero biblistas: las soluciones ofrecidas por
en su jornal, oprimen a viudas y huér- los profetas ¿eran eficaces? Esas pre-
fanos20 y atropellan al inmigrante sin guntas surgen siempre ante los críticos
tenerme respeto (3,5). «Tendremos de cualquier situación histórica. A no-
que felicitar a los arrogantes, pues los sotros nos interesa otra cosa.
malvados hacen fortuna mientras tien- ¡Qué contraste entre este lenguaje
tan a Dios impunemente»: así hablan y el anterior del budismo! Ese con-
hoy los fieles del Señor (3,15-16). traste persiste aunque reconozcamos
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que el lenguaje de los profetas no es sólo liberarse del deseo humano sino
sólo la denuncia aquí presentada, sino al revés: mantener el deseo y la pasión,
que tiene otros acentos de promesa, pero convirtiéndolos: transformarlos
consuelo, plegaria etc. Aun así, ¿son en deseo de justicia, de vindicación de
opuestos estos dos lenguajes? ¿O, más las víctimas.
bien, habría que comprender que son En cambio Buda no impone nada:
lenguajes complementarios y que nin- sólo busca iluminar la verdad de nues-
guno de ellos se mantendrá y llegará a tra realidad y, desde ella, el hombre ya
su plenitud sin el otro? Todo grito que no necesitará mandamientos o, si los
no brote de un auténtico «silencio» (de necesita, será sólo por su tremenda fra-
una riqueza interior) podrá ser «políti- gilidad que el budismo reconoce tam-
co» pero no será profético. bién. Es un buen ejemplo de aquella
El lenguaje de los profetas mantiene frase que hizo célebre D. Bonhoeffer:
siempre un esquema de denuncia, ame- sus enseñanzas valen «etsi Deus non
naza de castigo, y promesa final, al que daretur» (aunque Dios no existiera…).
se añaden otros oráculos contra las na- Por eso puede ser tan útil para el hom-
ciones paganas. Pero a éstas se las ame- bre de hoy.
naza sólo por su falta de ética (crueldad, Reconociendo estas diferencias, ha-
injusticia), aunque Dios se valga de gamos un resumen de la enseñanza de
ella para castigar a su pueblo. Mien- esos textos de los profetas, encerrándo-
tras que, en las denuncias contra Israel, los en otras «cuatro nobles verdades».
el factor principal de la queja es que Creo que serían éstas:
se trata del pueblo elegido por Dios
como «propiedad personal» (Ex 19,5), 1. Los oprimidos, los indefensos y las
del pueblo al que Dios ama de manera víctimas son los preferidos de Dios.
particular (de ahí las metáforas vistas 2. Precisamente por eso, el compro-
de adulterio etc). Por eso a la amenaza miso con ellos y por ellos es el úni-
sigue siempre la promesa de reconci- co culto verdadero que el hombre
liación: a pesar de lo duro de muchas puede dar a Dios, incluso aunque
denuncias, nunca falta el anuncio de un no crea en Él.
futuro mejor. En todos los profetas late 3. Dios rechaza todo otro culto que
una convicción de que la justicia es la no vaya vinculado a ese compro-
mejor y la única fuente posible de paz, miso, o que sirva de excusa para
interior y exterior. olvidarlo.21
Por tanto: en los profetas la com- 4. En la aceptación de las tesis ante-
pasión es siempre y primariamente riores se da la verdadera fe y el ver-
compasión hacia las víctimas, no me- dadero «conocimiento de Dios»,
ramente ante la capacidad de autoen- incluso aunque no se crea en Él.
gaño humana sino ante las salvajadas
y sufrimientos que puede producir esa ¿Se contraponen estas tesis a las
maldad, olvidando que «no son más cuatro nobles verdades de Buda, o más
que hombres», como rezaba el sal- bien las complementan y las llevan a
mista (9,21) y acentuaría el budismo. la cumbre? Según circunstancias de lu-
Por eso, el profetismo judío no busca gares, épocas y personas habrá que co-
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menzar por unas o por otras.22 Pero en puede significar «creer en el Amor»,23
la madurez humana y creyente deben pero en el Amor con mayúscula (ya
convivir y hermanarse ambas. Pues, que la palabra amor, junto a la palabra
como intenté mostrar en otra ocasión, Dios, son las más falsificadas e instru-
para un cristiano creer en Dios sólo mentalizadas del lenguaje humano).
26
CONCLUSIONES
29
NOTAS
1. Sin olvidar que también la Carta a los Hebreos en la sabiduría de Buda. La fe es el mejor com-
(2,15) reconoce en el temor a la muerte una pañero de la vida, es el alimento para el largo
fuente de las servidumbres humanas. viaje de la vida, el máximo de los bienes. La fe
2. Así primero J. B. Metz y más tarde Castillo, es fuego: quema toda suciedad de las almas y
José Mª (2007) en Víctimas del pecado, Ma- las hace arder en deseos de iluminación. La fe
drid: Trotta. enriquece el alma, enseña la caridad sin apego.
3. Todas las citas que siguen provienen del libro La fe anima al hombre cuando el camino se
La enseñanza de Buda, editado por el Bukkyo hace aburrido y largo, y conduce a la ilumi-
Dendo Kyôkay de Tokio (5ª edición 1998) y nación. La fe nos hace sentir como si estuvié-
van acompañadas por comentarios míos. La ramos en presencia de Buda. La fe nos da la
traducción castellana de ese libro es de Mi- sabiduría de comprender que este mundo no es
yoko I. de Tamura, de la universidad de Naga- más que un juego momentáneo donde no exis-
saki. Conozco además otra edición bilingüe en te una verdad inmutable. La fe nos hace estar
inglés y francés (de 1981), y conviene adver- siempre con Buda, actuar siempre con Buda
tirlo porque no siempre coinciden exactamen- y desear vivir siempre con Buda. La mano de
te los textos de esas tres versiones, supongo Buda, venciendo la oscuridad de la duda que
que por la dificultad de ensamblar universos nubla el alma, introduce la luz de la fe». Pare-
lingüísticos tan distantes como el japonés y las ce darse ahí un proceso que pasa del creer «a»
lenguas occidentales. Lo que el castellano tra- Buda, a creer «en» Buda; una vinculación que
duce como «alma» es, en esas otras versiones, pasa de la doctrina a la persona. ¿Cuál sería el
mind o coeur. Además, la opción por la expre- fundamento de esa evolución progresiva?
sión «el ego», en los textos que cito, es una 8. «Buscador de la luz». Expresión típica del budis-
opción mía: porque me parece que hoy es el mo que se aplica muchas veces al ser humano.
término que mejor se acerca a lo que quieren 9. Algo parecido cabe decir del decálogo bíblico:
decir los textos budistas. ya es tarde para atender sólo a eso.
4. En paralelismo cristiano: podemos cantar con 10. Esa dificultad está bien reconocida en la si-
santa Teresa «quién a Dios tiene nada le fal- guiente enumeración de «veinte cosas difíci-
ta». Pero ¿vale eso para la inmigrante sin pa- les en este mundo» que traslucen un profundo
peles, con un marido en la cárcel, que vive de conocimiento de alma humana: «Es difícil ser
comedores de Cáritas y a la que van a echar de generoso; es difícil para el orgulloso aprender
su mísera casa por impago de alquiler? el camino de la iluminación; es difícil bus-
5. Hay aquí una parábola de un padre con dos car el camino sacrificando el egoísmo; es difí-
hijos, susceptible de una comparación con la cil nacer en el Reino de Buda en este mundo;
parábola evangélica de Lucas 15. No hay es- es difícil escuchar las enseñanzas de Buda; es
pacio para ello, pero señalo al menos que el difícil mantener el alma limpia de los instintos
hijo perdido (símbolo de la humanidad), no es del cuerpo; es difícil no desear cosas hermo-
llamado pródigo sino errante. sas y agradables; es difícil para el poderoso
6. Como Marx, a pesar de su ateísmo, tenía una no usar el poder; es difícil no enfurecerse al
fe inquebrantable en las leyes positivas y en ser insultado; es difícil permanecer puro cuan-
la dinámica triunfadora del materialismo dia- do se es tentado; es difícil estudiar amplia y
léctico. profundamente; es difícil no menospreciar a
7. Vale la pena presentar una rápida antología de los principiantes; es difícil alejar el orgullo;
textos sobre la fe (del apartado «El camino de la es difícil encontrar un buen amigo; es difícil
fe», pp. 176-82): «La fe del discípulo es creer seguir la doctrina y alcanzar la iluminación; es
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difícil no ser perturbado por las circunstancias 19. No hay que quedarse en la alegoría del texto:
externas; es difícil predicar conociendo la na- las ovejas del Señor son el pueblo de Israel.
turaleza del hombre; es difícil mantener la paz 20. Típica pareja del lenguaje bíblico (junto con el
en el alma; es difícil no argüir sobre el bien y inmigrante) para designar a aquellos indefen-
el mal; es difícil encontrar y aprender un buen sos que no tienen valedor alguno y son por ello
método» (pp. 133-134). más pobres que los mismos pobres.
11. La primera bienaventuranza de Mateo puede 21. Impresiona la poca repercusión que esta ver-
significar pobres por el Espíritu (aquellos a dad ha tenido en el «culto cristiano», pese a la
quienes su opción por la justica va empobre- insistencia de los profetas y los salmos en este
ciendo), o pobres con espíritu (aquellos que mensaje. Con ello, ya no acudimos al templo
siendo pobres no luchan por la justicia desde a alimentarnos de Dios para poder cumplir Su
el resentimiento o el odio, ni buscando en ex- Voluntad, sino a aplacar o tener a raya a Dios
clusiva su propio provecho). para poder cumplir nuestra propia voluntad.
12. Para más explicaciones remito al capítulo 13, 22. Por ejemplo, en la catequesis infantil sería
«Progreso, maldad y bondad» de González poco pedagógico empezar directamente por
Faus, José I. (2010). Otro mundo es posible… los profetas, al menos en el primer mundo.
desde Jesús. Santander: Sal Terrae. 23. Cf. González Faus, José Ignacio (2014).
13. Schumacher, Ernst Friedrich (2011). Lo pe- ¿Dios?. Barcelona: Cristianisme i Justícia,
queño es hermoso. Tres Cantos: Akal Cuadernos n. 190.
14. Por supuesto, el original no dice eso sino 24. De la Cruz, Juan (1991). «Introducción a la
«vacas de Basán», una región famosa por sus Subida al Monte Carmelo», Obras completas,
pastos, cuya mención provocaría un impacto Salamanca, pp. 117-118. Podrían añadirse los
semejante al de mi traducción. versos 19-20 del capítulo 3 del cuarto evange-
15. Dicho sea entre paréntesis: cambiando algo el lio, con su insistencia en «ir a la luz» que evo-
vocabulario, este párrafo parece una descrip- ca la iluminación budista (o el capítulo 28 de
ción de buena parte de la España actual. Job por su comparación entre la mera técnica
16. Conviene leer íntegro todo ese capítulo, dema- y la verdadera sabiduría).
siado largo para citarlo aquí completo. 25. «El Reino de Buda», dice la edición castellana
17. Animal impuro por excelencia. buscando quizás analogías con la expresión
18. Das Alte Testament Deutsch, 25, 65. jesuánica Reino de Dios.
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CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN
En la segunda parte del cuaderno, el autor se fija en que el lenguaje de los profetas
mantiene siempre un esquema de denuncia, amenaza de castigo y promesa final.
Después de una presentación de cada profeta, sus enseñanzas para nosotros se
resumen en cuatro puntos:
• Los oprimidos, los indefensos y las víctimas son los preferidos de Dios.
• El compromiso con ellos y por ellos es el único culto verdadero que el hombre
puede dar a Dios.
• Dios rechaza cualquier otro culto que no vaya vinculado a ese compromiso o
que sirva de excusa para olvidarlo.
• El conocimiento de Dios se da en practicar la justicia.
4. Compara los cuatro puntos anteriores con las cuatro «nobles verdades» del budismo.
5. De los textos de los profetas, ¿cuáles te parece que tendrían vigencia hoy?
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