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LOS APARATOS DE COMPUTACIÓN Y LA INTELIGENCIA Podemos considerar ahora despejado el terreno y estamos preparados para pasar al debate

acerca de nuestra pregunta: “¿saben pensar las máquinas?”.


El juego de la imitación
Las cosas se simplificarán para el lector si comenzamos por explicar nuestra propia
Me propongo considerar la pregunta siguiente: “¿saben pensar las máquinas?”. En lugar posición en esta cuestión. Creemos que dentro de un plazo de unos cincuenta años será
de intentar tal definición reemplazaré la pregunta por otra, estrechamente relacionada con posible programar computadoras con una capacidad de conservación de datos de 109 para
la primera y expresada en términos de relativa ambigüedad. que jueguen tan bien al juego de la imitación que el interrogador común no tendrá más
La nueva forma del problema puede describirse en términos de un juego que llamaremos del 70 por ciento de probabilidad de efectuar la identificación correcta al cabo de cinco
“juego de la imitación”. En él participan tres personas, un hombre (A), una mujer (B), y minutos de interrogatorio.
un interrogador (C) que puede ser hombre o mujer. El interrogador permanece en un Pasemos ahora a considerar las opiniones contrarias a la nuestra.
cuarto, separado de las otras dos personas. El objeto del juego para el interrogador es
determinar cuál de los otros dos es el hombre y cuál la mujer. Los conoce por los rótulos 1. La objeción teológica. El pensamiento es una función del alma inmortal del hombre.
X e Y y al final del juego debe decir que “X es A” e “Y es B”, o bien que “X es B” e “Y Dios ha dado un alma inmortal a todos los hombres y mujeres, pero no a los otros
es A”. animales ni a las máquinas. Por lo tanto, ningún animal ni ninguna máquina pueden
pensar.
El objeto de A en el juego es tratar de inducir a C a hacer una identificación equivocada.
Por mi parte, no puedo aceptar esta afirmación en ninguna de sus partes. Intentaré, sin
Para que el interrogador no reciba indicios por los tonos de voz, las respuestas se dan por embargo, responder a ella en términos teológicos.
escrito, o mejor aun, escritas a máquina. Lo ideal es tener un teleimpresor que comunique
los dos cuartos. El objeto del juego para el tercer jugador (B) es ayudar al interrogador. Me parece que el argumento citado más arriba implica una seria limitación a los poderes
La mejor estrategia para ella es dar, probablemente, respuestas veraces. del Todopoderoso. Se admite que existen ciertas cosas que Él no puede hacer, como que
uno sea igual a dos, pero ¿no deberíamos creer que Dios tiene libertad para dotar de alma
Ahora formulamos la pregunta siguiente: “¿qué sucederá cuando una máquina tome la a un elefante si lo considera necesario? En el caso de las máquinas puede invocarse un
parte de A en el juego? ¿Decidirá equivocadamente el interrogador con la misma argumento de términos exactamente idénticos.
frecuencia cuando se juega así el juego como ocurre cuando en él participan un hombre y
una mujer?” Con estas preguntas reemplazamos la nuestra original: “¿saben pensar las 2. La objeción de “cabezas hundidas en la arena”. Las consecuencias de que las
máquinas?”. máquinas pensaran serían horrorosas. Esperemos y creamos que esto no habrá de suceder.
Crítica del nuevo problema Nos agrada creer que el Hombre es, de alguna manera sutil, superior al resto de la
creación.
Además de preguntar “¿cuál es la respuesta a esta nueva formulación de la pregunta?”
cabe añadir “¿merece la pena investigar esta nueva pregunta?”. Decidimos investigarla No creo que este argumento tenga solidez suficiente para que requiera refutación. Más
sin mayores titubeos y con ello cortamos por lo sano un infinito retroceso. apropiada sería una nota de consuelo, que quizá convendría buscar en la teoría de la
transmigración de las almas.
El nuevo problema tiene la ventaja de trazar una línea bastante firme entre las aptitudes
físicas e intelectuales del hombre. La forma en que se ha planteado el problema refleja el 3. La objeción matemática. Hay una serie de resultado de la lógica matemática que
hecho en el requisito que impide al interrogador ver o tocar a los otros competidores, podemos invocar en la demostración de que existen limitaciones en los poderes de la
como tampoco oír sus voces. máquina en un estado de serie abierta. El resultado en cuestión se refiere a un tipo de
máquina que es en esencia una computadora digital con capacidad infinita. Establece que
El método de preguntas y respuestas parece ser indicado para su introducción en hay ciertas cosas que esa máquina no puede hacer. Si está programada para dar respuestas
cualquiera de los aspectos de la conducta humana que deseamos abarcar. a preguntas, como en el juego de imitación, habrá preguntas a las cuales dará una
Las máquinas involucradas en el juego respuesta equivocada, o bien en las cuales no responderá, por mucho tiempo que se le
conceda para responder.
(...)
La réplica categórica a tal argumento es que si bien está establecido que existen límites a
Puntos de vista conflictivos sobre la cuestión fundamental los poderes de una máquina determinada, se ha afirmado, sin presentar la menor prueba,
que no se aplican limitaciones semejantes al intelecto humano. En resume, entonces,
podrían existir quizá hombres más inteligentes que una máquina determinada, pero por
otra parte, también podrían existir otras máquinas mucho más inteligentes, y así
sucesivamente.
4. El argumento de la conciencia de uno mismo.
5. El argumento de los diversos obstáculos.
6. La objeción de lady Lovelace.
7. El argumento de la continuidad en el sistema nervioso.
8. El argumento de la informalidad de la conducta.
9. El argumento de la percepción extrasensorial.

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