Universidad Centroamericana

“José Simeón Cañas”

Catedrático:
Carlos Edmundo Aguilar Martínez

Materia:
Ingeniería Geológica

Tema:
Aguas subterráneas

Integrantes:
Apellidos, Nombres No. De carné
Caballero Garméndez, Aldryng Josué 00070214
Flores Chavarría, Juan Alberto 00022714
Martínez Ordóñez, Julio Cesar 00051314

Ciclo 01/2015

11 de junio de 2015
 Agua Subterránea

¿Qué es agua subterránea?

Agua subterránea es toda aquella agua que se encuentra contenida bajo la superficie
terrestre en estratos geológicos determinados (mantos acuíferos).

Al agua subterránea también se le conoce como: agua del subsuelo y agua freática.

Ésta se encuentra debajo del suelo, entre grietas y espacios que hay en la tierra, incluyendo
arena y piedras. El área donde se acumula el agua en las grietas se llama la zona saturada.
La parte de arriba de esta área se le conoce como el nivel freático. Es necesario conocer sus
características hidrológicas para lograr su aprovechamiento adecuado. Las principales áreas
de recarga son las que corresponden a las de los macizos volcánicos que tienen alta
infiltración y cobertura vegetal permanente.

Siendo la hidrogeología la ciencia que estudia las aguas subterráneas, sus orígenes y
formación, las formas de yacimientos, su difusión, movimiento, régimen y reservas, su
interacción con los suelos y las rocas, su estado de agregación (sólido, líquido, gaseoso) y
sus propiedades (físicas, químicas, bacteriológicas y radiactivas); su explotación y su
respectiva regulación.

Las aguas subterráneas forman grandes depósitos que en muchos lugares constituyen la
única fuente de agua potable disponible. A veces, cuando circulan bajo tierra, forman
grandes sistemas de cuevas y galerías.
Entre los principales depósitos de agua subterránea se encuentran los acuíferos que son la
cantidad de agua arrastrada por los ríos que se filtra bajo el suelo; y también están los
llamados pozos y manantiales que estos son un flujo natural de agua que surge del interior
de la tierra desde un solo punto o por un área pequeña. Los manantiales pueden ser
permanentes o intermitentes, y tener su origen en el agua de lluvia que se filtra o tener un
origen ígneo.

Para poder explorar y posteriormente explotar las aguas subterráneas, debemos hacerlo por
medio de diferentes métodos, entre los cuales están:

➔ Una observación superficial o reconocimiento geológico: con el cual se puede

reconocer el material geológico más próximo a la superficie y se puede determinar
si este material es permeable o no; de ser permeable constituye un acuífero.
También con la simple observación superficial, podemos determinar aluviones (en
 los valles de un río) los cuales constituyen lugares donde es muy probable encontrar
agua subterránea.

➔ Una observación sub-superficial por medio de pozos de observación. Al perforar,

directamente se puede observar si hay o no aguas subterráneas.

➔ Una determinación geofísica de las condiciones del subsuelo. Generalmente es por

refracción sísmica; las ondas sísmicas se refractan diferente dependiendo de la
dureza del material y entre más duro sea es más compacto, por lo tanto constituyen
malos acuíferos.

Es importante destacar que el principal abastecimiento de las aguas subterráneas son las
precipitaciones pluviales. También que las aguas subterráneas participan en el ciclo
hidrológico, junto con las aguas superficiales.

¿Qué es el ciclo hidrológico?

El ciclo hidrológico se puede dividir en tres fracciones en donde aquí es necesario conocer
sus características para poder aprovechar dichas aguas adecuadamente. Cuando el agua de
los océanos se evapora esta llega a la atmósfera donde se condensa formando nubes, las
cuales pueden dar lugar a las precipitaciones pluviales, cuando estas, al momento de llegar
a la superficie terrestre dan lugar al escurrimiento superficial que puede incorporarse a ríos,
quebradas, lagos, etc. En segundo lugar las precipitaciones pluviales pueden retornar por
evaporación de las plantas. En tercer lugar una parte de estas se infiltra en la superficie para
llegar a la zona de saturación, donde aquí llegan a formar partes de las aguas subterráneas.

El origen de estas aguas está relacionado con las precipitaciones pluviales. Las
precipitaciones reciben diferentes nombres de acuerdo a la forma en que caen sobre la
superficie terrestre: llovizna, lluvia, granizo, aguanieve, nieve y copo de nieve.

¿Cómo se distribuye el agua en el subsuelo?

El agua subterránea se distribuye en dos zonas bien delimitadas.

1) Zona Vadosa: lo constituyen desde la superficie terrestre hasta el nivel freático.

Generalmente no hay mucha agua, pero ésta aumenta en la época lluviosa.

2) Zona freática o saturada: se encuentra desde el nivel freático hasta un material

impermeable que ya no permite el paso del agua de forma vertical hacia abajo.
Generalmente es donde hay grandes cantidades de agua (saturación) y éstos son los
verdaderos mantos acuíferos.
Imagen 1: nos muestra la zona vadosa y la zona freática en el subsuelo.

Acuíferos, manantiales y pozos.

Un acuífero es todo aquel estrato geológico que está parcial o totalmente saturado de agua
(agua subterránea). Los mejores acuíferos son los formados por arenas y gravas sin
consolidar, areniscas, tobas de granulometría gruesa, escorias volcánicas, materiales pétreos
laminares o fracturados.

Un Manantial es todo aquel conducto que hace que fluya de nuevo el agua subterránea
hacia la superficie. Todo manantial se origina cuando existe una intersección natural de la
superficie del terreno y el nivel freático.

Existen manantiales de agua caliente como por ejemplo los manantiales de aguas termales.
Se consideran termales porque solo sobrepasan unos 8°C a la temperatura ambiente.

Existe otro tipo de manantial llamado géyser, el cual lanza agua termal o muy caliente con
gran fuerza de forma intermitente.

Un pozo es un manantial artificial. Es una abertura artificial que intersecta la zona de

saturación, permitiendo la explotación del agua subterránea para diferentes fines.
Contaminación del agua subterránea.

También es importante tomar en cuenta la contaminación presente en aguas subterráneas

debido a que no existe agua completamente pura. A medida que el agua fluye por diferentes
rutas, se acumulan cuerpos de agua y se infiltra en las capas del suelo, va disolviendo o
absorbiendo los minerales o las sustancias que entran en contacto con ella. Algunos
contaminantes se originan de la erosión natural de las formaciones rocosas. Otros
contaminantes provienen de descargas de fábricas, productos agrícolas, o químicos.

Aguas subterráneas en El Salvador.

En El Salvador los principales depósitos de agua subterránea están localizados en la llanura

costera y en algunas depresiones del interior del país, constituidos por materiales aluviones
recientes y cuaternarios no consolidados. También se encuentran acuíferos importantes en
áreas constituidas por acumulaciones de materiales pliopleistocénicos, intercalados con
lavas y otros materiales volcánicos altamente escoriáceos y permeables.

Las grandes cuencas de potencial de agua subterránea más elevado son, por orden de
importancia, las de los ríos Lempa y Jalponga combinados, Grande de San Miguel y Paz.

El rendimiento seguro de los depósitos subterráneos existentes en el país se estima en 83

metros cúbicos por segundo. El aprovechamiento en gran escala del agua subterránea
podría implicar una disminución del orden del 10 por ciento de la escorentía superficial,
puesto que parte del rendimiento seguro corresponde al caudal base de los ríos que sería
interceptado antes de llegar a los cauces.
Agua subterránea de la república de El Salvador