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2 EL ASESINATO DE GABRIEL GARCIA MORENO: MEMORIA DEL “GRAN TIRANICIDIO” Este trabajo ests dedicado a estudiar un hecho histrico de gran trascendencia que, por més de un siglo, ha sido objeto de apasionado debate: el ase- sinato del presidente Gabriel Garcia Moreno.! Se propone también avanzar una explicaciin. del acontecimiento y del impacto que lleg@ a tener en el futuro de la sociedad ecuatoriana El hecho fue lamaclo “el gran tranicidio” desde {que fue perpetradoen 1875, Se ha escrito mucho al respecto, pero nunca fue del todo aclarado. Aqui se ofrecen algunas pista para su esclarecimiento. La dictadura perpetua El segundo perfodo presidencial de Garcia ‘Moreno transcurrié desde 1869 en medio de con- trol y represin selectivos. Luego de haber vencido militarmente a la oposicién urbinista, de haber purgado el Ejrcito la Iglesia de contestatarios, Fity age Cuan se a en «com los grandes poderes que le dio la Carta Negra, ya no considerabs necesaris los fusilamientos ‘masivos, pero mantuvo un regimen de estricta vi gilanciay control. En ese marco se Hlev6 adelante tun notable esfuerzo de organizacién y construc cin del Estado. En 1874, cuando se acercaban las elecciones previstas para el afo siguiente, se co ‘menzé.a hablar de revlecién y el ambiente politico sealed. En Guayaquil se editaba desde 1873 el periéico {La Nueva Era. Su cardcte era literario, pero incluia ‘opiniones politics. Su ndmero 54 publics una co rrespondencia anénima contra la posible reelec- cién de Garcia Moreno, “Inmediatamente, la im prenta fue secuestrada, la correspondlencia acuse dda como sediciosa y Federico Proao y Miguel Valverde, levados el 10 de noviembre, alos cala- bozos de la policia de Guayaquil"? El periédico {guid imprimiéndose clandestinamente, pero en dliciembre, pese al sobreseimiento dictade por la Corte Superior, los redactores fueron detenides, Incomunicados y enviados a Quito, junto con el Dr, José Rafael Arizaga, que se presumia era el autor de la correspondencia, Frente a las presiones del Intendente de Policia, Proatoy Valverde creye ron “que es acto de sublime abnegacién no revelar el nombre del cobarde colaborador”. Fueron des terrados al Peri, via Napot EL gobierno arguments que la publicacion era parte deun golpe de Estado que se planeaba a favor del Di: Antonio Borrero, de quien Arizaga era ami- {go cercano, Pero, si bien era verdad que en varias ‘iudades habia un fuerte movimiento por la candi- dlatura de Bortero para la eleccién que se venia, no existi tal intento de golpe. A inicios de 1875, ante tun posible triunfo de Borrero, en los medio oficia Jes se concreté la candidatura de Garcia Moreno, Hasta quizd, como dicen sus partdatios, algin ‘momento pens6 en reliarse y buses infructuosa- mente un sucesor idGineo, pero com las presiones del lero y sus colaboradores inmediatos,y por su pro- Pia conviceién de que era necesario para detener a los “rojos’, acepts ser candidato. Tomé medidas para garantizar su triunfo. En enero de 1875, pocos ‘meses antes de las votaciones, decret6 “estado de sitio” en Guayaquil y Cuenca, que s© mantuvo vigente durante las semanas en que se suponta debian presentarse y promoverse as eandidaturas. ‘Con ese recurso podiaclisponer allanamientosy des- tierros para sus opositoes. Las elecciones se desarrollaron en medio de las protestas de la oposicién sobre la carencia de sgavantias para el sufragio, Garefa Moreno obtuvo 22.726 votos, frente a una escassima, y ms que sospechosa, votacién de sus adversarios El presi= lente tenia simpatias en amplios sectores infer clados por el clero y las clientlas de sus partida 5, que le habrian dado de todas maneras nume- esos votos. Pero la elecciénrefej las condiciones dictatorales del régimen. Por un lado, “incluso uno de sus bidgrafos mas amigables anot6 que wo= taron diez mil personas menos en 1875 que en 1868, que fue la ditima eleccién disputada”.* Por otro lado, el resultado enormemente disparsjo de las volaciones reflejaba claramente un control ab= soluto de las urnas, Robalino Dévilarecoge el testimonio de un opo- sitor moderado, sabre el estado de sitio decretado len enero de 1875: "Esa medida violenta, que inti= ‘mid6 a los pueblos, sirvi6, desde luego, para ase~ jgurar mejor la reelecién, que se hizo en mayo: pero fue condenada por la epinin publica y cen surada hasta por los amigos del Gobierno.” ¥ so- bre Ia eleccin deci: (Qc cer preempt dee Ione iets de contra des) Sno valencia inpopeandad el shor Cate Mme en toda as province Retina cent ca somes ly at cipro + Soyo mara ds opin pl, ine! a oe pe {ers por mock tempo) Cnt en nln Lego dea lin uments el descontentoy el goiero tons medidas conta lon conspired. rex Garcia Moreno vis» Gunyaqll en ably Als esap de un intento contra ida El Coronel Jou Antnio Polanco, de qlen se sospe- habe estaba tratando de derear al gebleno, fue separad desu mando en Guayaquil ta, dado a Quito. Que distancado del gobierno, Ea hermano del Dr. Manuel Polanco, etiiasta borrersta, Luego de su viaje el presidente consi- dleraba que habia logrado parar una insurreecién en Guayaguil y Cuenca En medio de la expectativa electoral a inicios de 1875, circul6 en el pas el foleto de Juan Montalvo Le dictadura perpetua, que convulsions los medios politicos."° Habfa sido escrito para aclarar un ari- culo del periédico Star & Herald de Panamé, que recomendaba la relecciin de Garcia Moreno, Cir- ‘ulé mucho en el exterior, pero sobre todo en Ecus dor. Hacia un recuento de los actos mas negativos ‘de Gareia Moreno, sobre todo de los atropelloscon- teaaslibertades, el predominio clerical ya influen- EI niicleo “duro” de la conspiracién era an ‘grupo de intelectuales radicales opuestos a Garcta Moreno por su clericalismo autoriario. Manuel Polanco era el mis experimentado y el principal mentalizador. Cornejo, Andrade y Moncayo eran jovenes idealistas que prepararon y participaron dliectamente en el asesinato, Polanco nacié en 1834 en una familia arstocrs: tica de Quito. Estudio en el Colegio San Femando -y luego jurisprudencia. En 1863 ingress en la Com- de Jess, pero en corto tiempo salié de ella y ‘se dealies al ejericio profesional, con éxito. Fue par- tidario de Garefa Moreno en 1868, pero ya en 1874 simpatizaba con Borreto. Se involucté en las cone piraciones de su hermano, el coronel José Antonio Polanco y partiipé en la conjura desde los fracas dos intentos de matar a tirano. Manuel Cornejo cra hijo de una familia acomodada de Quito, Era estudioso y dedicado, de earscter comunicativa y jocoso. "Pocos eran los jovenes de Quito que con- {aban con tantas amistades".® Era amigo personal de Garcia Moreno y no le tenia inquina, pero rep iaba su estilo de gobierno. En 1875 tenia 28 aos Roberto Andrade nacié en 1850 en Puntal (@otivar, actual provincia del Carchi, Hijo de un matrimonio de catorce hijos. studs en el Colegio San Diego de Ibarra y com los jesuitas en Quito, ‘Tavo conflctos y fue expulsado. Se gradué de bachiller e ingress a Derecho en la Universidad Central, pero no le gust la profesin, Desde joven rechaz6 los métodos represivos de Garcia Moreno y en 1875 era ya su enemigo. Abelardo Moncayo hacié en 1848. Algunos de sus detractores dicen ‘que nacis en Pasto, pero su bidgrafo establecis con razonable certeza que era quitefo2 Recibié la pri- ‘mera educacin en familia y la secundaria en cole- {lo privado. En 1860 pass al Colegio San Luis iri- {ido por los jesuitas, onde tuvo desemperio des tacado, En e505 alos ingres6 como novicio en la Compania de Jess y fue compatiero de Federico Gonzslez Suérez. Se Io destiné para profesor en Guayaquil, Riobamba y Cuenca, donde decidis abandonar la vida religiosa. Vuelto a Quito, desde 1871 era profesor de Gramatica en un colegio pri- vvado. Garcia Moreno le ofrei6 un cargo mejor pa ado, perolorechaz6. No quiso deberle un favor a quien consideraba tiano, Al calor de lecturas como la diatriba de Mon talvo, la conspiracién fue tomando forma, No es posible establecer quien tuvo la iniciativa de or. sganizar la trama, pero casi todos los testimonios coinciden en que Polanco fue el vinculo entre va- Figs de os actores. Andrade, por su parte, declaré La idea del asesinato fue mia".® Le apoyaban Portilla y los Moncayos. Polanco y Cornejo, en cambio, pensaban apresar a Garcia Moreno, obli- garlo a renunciar y dar wn golpe con apoyo de los militares, sin matarl.™ Al parecer no se legéa1un acuerdo, pero el principal problema era que no se hallaba sn contacto directo y confiable con la guar- nicién de Quito para comprometerla, Una nueva situacion parecié facilitar las cosas. A través de Juana Terrazas, se enteraron los cons Piradores de que el segundo jefe de Batallon No, ‘comandante Francisco Sénchez, “le habla pro- rmetido, en varias ocasiones, cooperar a la libertad dol Eeuador”.» Estaba dispuestoa comprometer al ‘cartel que estaba frente al Palacio de Gobierno para.el derrocamiento de Garcia Moreno. Andrade dice que el contacto lo hizo Manuel Cornejo, pero Ja mayoria de las narraciones cuentan que era amante de Abelardo Moncayo y que él, cuando le conté que “Sénchez dio en perseguirla, “en vez dearder en celos, le aconsejé “corresponder a sus tdeseos impuros, siempre que entrase en una cons piracién que se estaba tramando”= Juana Terra 23s, hermana de un candnigo,separada de su ma- rido y de vida un tanto libre, se constituyé en vin ‘culo central de la conspiracin, Sinchez pensaba que los conspiradores eran unos chiguills sin peso politico. Pidis hablar con arene ni alguien de més representacin. Se buscé para ello 1 Dr. Jonge Bueno, pero no fue lcalizado. Cornejo y Moncayo acudieron donde el anciano general José Martinez de Aparicio, pero se negé a partici- par ya que habfa dado su palabra de que no cons- Piraria. Su hijo Manuel parecié animarse, pero se retiré. Entonces fue delegado Manuel Polanco, quien se entrevist6 varias veces con el coronel y concert6 algunos aspectos de la conjura. En una ‘arta posterior a Abelardo Moneayo, Polanco cuen- ta lo que le habia dicho, junto con Jorge Bueno, al comandante: rnc sour omen pe ve de Sue el tana se hae ten saad rai a on fverea yal mando del valent capt ate y no ens ts el cel ued cicy mint des db ‘on le atnas Gescargadas, pata qe de ete modo i Los j6venes tenfan dudas de Polanco, pero si {uieron adelante, Sénchez puso la condicin de que le presentaran el cadiver de Garcia Moreno para smowilizarla tropa en el golpe de Estado, Temia que quedara vivo. Por ello, los conjurados resolvieron definitivamente el asesinato, Esa decisién se refor 26 cuando los conspiradores conecieron que Faus- tino Lemus Rayo participariaen la conjura y estaba

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