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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

Facultad de Ciencias Químicas


Bioquímica Clínica
Microbiología Clínica I
Ensayo

Nombre: Melissa Montalván

La considerable salmonelosis de S. typhi

Numerosos serotipos de Salmonella son patógenos para los animales y las personas, por eso
existe una gran cantidad de pruebas bioquímicas y serológicas para aislar e identificar este
organismo en el ámbito clínico. Una serovariedad como Salmonella typhimurium no es una
especie y sería más adecuado nombrarla como “Salmonella entérica serovar Typhimurium”
[ CITATION Tor07 \l 12298 ]. El presente ensayo describe la morfología, patogénesis,
manifestaciones clínicas, pruebas de laboratorio, epidemiología, tratamiento y control del
género Salmonella Typhi, al ser uno de los agentes más importantes debido a sus variadas
patologías.

S. typhi es una bacteria anaeróbica facultativa que puede en ocasiones sobrevivir en bajas
condiciones de oxígeno, su morfología microscópica son bacilos gramnegativos que no
producen esporas. La mayoría de las cepas son móviles debido a que poseen flagelos
peritricos, que rodean a la célula. Este género es el agente causal de patologías conocidas
como salmonelosis, entre ellas destacan las fiebres entéricas o tifoideas, produciendo
infecciones sistémicas graves [ CITATION Bet12 \l 12298 ]. Su período de incubación
abarca de una semana a un mes, siendo principalmente de dos semanas, a partir de la
ingesta de la bacteria proveniente de alimentos o agua contaminada. Los síntomas
predominantes son fiebre de intensidad variable, cefalea, diarrea, estreñimiento, tos,
náuseas y vómitos, anorexia, dolor abdominal y escalofríos.

Jurado, R. (2010) menciona que el diagnóstico se basa en el aislamiento de la Salmonella


typhi. Los hemocultivos son esenciales ya que durante la primera semana el 90% de los
casos suelen ser positivos, sin embargo se pierde sensibilidad con el pasar de los días. El
coprocultivo y el urocultivo suelen ser negativos en la primera semana y terminan siendo
positivos en el 75% de los casos en la tercera semana. Un diagnóstico que se está
descartando es el diagnóstico serológico ya que se caracteriza por su baja sensibilidad y
especificidad.

Como ya se mencionó anteriormente S. typhi causa la fiebre tifoidea en humanos, quienes


son sus únicos hospedantes. Esta patología prevalece principalmente en países en vías de
desarrollo. Hay aproximadamente 17 millones de casos anuales con casi 600,000 muertes,
principalmente en Asia y África. Las más altas incidencias se encuentran en Indonesia y en
algunos puntos del sureste asiático, como Papua Nueva Guinea, en donde puede alcanzar
niveles de 103 por cada 100,000 habitantes [ CITATION Edm08 \l 12298 ]. Ciertos
problemas de interés para la epidemiología comprende las diferencias de incidencia y los
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variados grupos de edad afectados, cuya respuesta se basa en los modos de transmisión y
sobrevivencia de la bacteria en el ambiente.

Los antibióticos utilizados para el tratamiento de la fiebre tifoidea han sido: cloranfenicol,
ampicilina, cotrimoxazol, quinolonas y cefalosporinas de tercera generación, sin embargo
se han descrito cepas resistentes al cloranfenicol, la ampicilina y el cotrimoxazol
[ CITATION Jur10 \l 12298 ]. También existen casos de complicaciones con mayor
gravedad clínica, cuyo tratamiento incluye reposición de volumen y dieta adecuada. Es
considerable mencionar que cuando ya existan casos de gravedad extrema se puede trabajar
con esteroides, transfusiones sanguíneas y cirugías.

En conclusión, la salmonelosis producida por S. typhi representa la forma más grave de


infección entre todas las patologías producidas por salmonellas, por lo tanto puede ser muy
peligroso si no existen las correctas medidas de sanidad, como el buen control de aguas
residuales, los sistemas de abastecimiento de aguas y la manipulación de alimentos, ya que
son normas primordiales que siempre deben llevar un manejo adecuado y responsable. La
inmunización también debe tomarse como una medida principal, sobre todo si se visitan
zonas endémicas.

Bibliografía
Betancor, L., & Yim, L. (2012). Departamento de Bacteriología y Virología. Obtenido de
Salmonella y salmonelosis:
http://higiene1.higiene.edu.uy/DByV/Salmonella_y_salmonelosis.pdf

Calva, E. (2008). Salmonella typhi y la fiebre tifoidea: de la biología molecular a la salud pública.
Obtenido de Instituto de Biotecnología, UNAM:
http://www.biblioweb.tic.unam.mx/libros/microbios/Cap4/

Jurado, R., Arenas, C., Doblas, A., & Rivero , A. (2010). Fiebre tifoidea y otras infecciones por
salmonella . Obtenido de FACMED:
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/pdf/Tifoidea_otras_salmonellas_Medici
ne201o0.pdf

Tortora, G., Funke, B., & Case, C. (2007). Estudio del mundo microbiano. Salmonella. En
Introducción a la microbiología (pág. 323). Ed. Médica Panamericana.

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