Debido a determinadas características químicas, físicas y biológicas que
presentan las fuentes hídricas en su estado natural, por lo general estas no cumplen con los estándares mínimos de calidad exigidos para la mayoría de aplicaciones donde se requiere este preciado líquido, en especial cuando se destina para consumo humano. Por ello, es muy importante que esta agua cruda se someta a una serie de tratamientos previos antes de ser utilizada, para garantizar la remoción total o parcial de dichas impurezas. Teniendo en cuenta esta situación, día tras día se busca desarrollar e implementar nuevas tecnologías con las cuales se puedan llevar a cabo estos procesos de forma más económica, eficiente y amigable con el medio ambiente. La desestabilización o coagulación del agua, ha sido siempre considerada una de las etapas más relevante del tratamiento, por ello se le ha dado mucha importancia a los agentes coagulantes utilizados, ya que sin ellos, esta fase fundamental no sería posible. Es por esta razón, que se ha investigado mucho sobre el tema, en la actualidad los coagulantes preferidos siguen siendo las sales minerales de hierro y aluminio, sin embargo, los polielectrólitos orgánicos sintéticos cada día adquieren mayor importancia. Vale la pena anotar que esto reactivos deben ser dosificados con mucho cuidado porque en exceso pueden llegar a ser nocivo para la salud. Como alternativa a estos agentes químicos, al inicio de los años setenta en varios países latinoamericanos se propuso utilizar coagulantes naturales extraídos de especies vegetales o animales locales para disminuir en parte o en su totalidad el consumo de coagulantes sintéticos. Esta iniciativa no tuvo un auge significativo debido a la producción y comercialización de polímeros sintéticos con mayor efectividad. No obstante, son muy diversas las fuentes naturales estudiadas en todo el mundo, con la intención ser utilizadas como coagulantes, para la clarificación del agua. Retomando un poco esta iniciativa, el objetivo principal de este trabajo es evaluar la capacidad que posee la Tuna (Opuntia ficus-indica) para remover turbidez y color presente en el agua cruda. El alcance de esta investigación experimental se limitará a comprobar la efectividad de un coagulante natural extraído de la Tuna, se espera que la información recopilada sirva como base para investigaciones futuras, que permitan establecer si es viable utilizar este producto a escala industrial, en los procesos de potabilización.
Objetivo:
Evaluar el poder coagulante de la Tuna (Opuntia ficus indica) para la
remoción de turbidez y color en aguas crudas. Determinar la eficiencia que posee este coagulante para remover la turbidez y color presente en una muestra de agua recolectada en el Canal del Dique. Comparar los resultados obtenidos de turbidez y color, con los parámetros establecidos por la normativa vigente.