Seguridad en el trabajo

El cumplimiento de la Ley y el Reglamento de Seguridad y Salud en el Trabajo es de carácter

obligatorio para todas las empresas, cualquiera sea la forma empresarial que se haya adoptado:
persona natural con negocio, personas jurídicas como sociedad anónima (SA), sociedad anónima
cerrada (SAC), sociedad de responsabilidad limitada (SRL), empresa individual de responsabilidad
limitada (EIRL), e independientemente si son consideradas micros, pequeñas, medianas o
grandes.

Por: José Antón González - Abogado

Esas normas laborales establecen que el empleador garantiza en el centro de trabajo el

establecimiento de los medios y condiciones que protejan la vida, la salud y el bienestar de los
trabajadores. Igualmente, le asigna la responsabilidad de asumir las implicancias económicas,
legales y de cualquier otra índole a consecuencia de un accidente o enfermedad que sufra el
trabajador en el desempeño de sus funciones.

Además, las empresas se encuentran obligadas a implementar un sistema de gestión de la

seguridad y salud en el trabajo. Este sistema es un conjunto de acciones y documentos
conducentes a cumplir con la normatividad vigente en materia de seguridad y salud en el
trabajo, debiendo garantizar el empleador que el sistema sea conocido y aceptado por todos los
niveles de su organización.

Lo mínimo que deberá realizar el empleador es: 1. Entregar a cada trabajador copia del
reglamento interno de seguridad y salud en el trabajo, así como la descripción de
recomendaciones. 2. Cuatro capacitaciones al año. 3. Elaborar un mapa de riesgos con la
participación de los trabajadores.

En aquellas empresas que tengan 20 o más trabajadores debe conformarse un comité de

seguridad y salud en el trabajo con cuatro miembros, el cual estará integrado en forma paritaria
entre los trabajadores y representantes de los empleadores. Las empresas con menos de 20
trabajadores deberán nombrar un supervisor, a sugerencia de los propios trabajadores.

La Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) tiene a su cargo promover,

supervisar y fiscalizar el cumplimiento del ordenamiento jurídico, socio laboral y el de seguridad
y salud en el trabajo; es decir, fiscaliza y sanciona el incumplimiento de normas en esta materia.

Las multas se consideran leves, graves y muy graves. Las multas leves tendrán como mínimo el
pago de 0.5 UIT y como máximo las 30 UIT. Las graves, un mínimo de 3 UIT y un tope de 50 UIT,
y las muy graves contemplarán una escala de 5 a 100 UIT.

Fuente: Diario El Peruano

 Funcionarios tienen la obligación de señalar previamente los efectos del incumplimiento.

El inspector laboral deberá poner en conocimiento del sujeto inspeccionado la información o

documentación que no haya sido presentada, para luego proceder con la infracción de
obstrucción a dicha labor.

Este constituye el principal criterio procedimental adoptado por Resolución Directoral N° 019-
2015-GRC-GRDS-DIRTPE-DIT, de la Dirección de Inspección del Trabajo del Callao, que deja sin
efecto la sanción económica a una empresa.

Por tanto, para proponer la multa respectiva, el inspector de trabajo deberá requerir
expresamente los documentos faltantes e informar previamente que dicho incumplimiento
podría ser considerado una infracción a la labor inspectiva, explicó el laboralista Brian Ávalos
Rodríguez, miembro de Payet, Rey, Cauvi, Pérez & Abogados, al comentar esta decisión.

Fundamento

En este caso, la autoridad administrativa determinó que no se realizó una debida valoración de
la etapa de actuaciones inspectivas, de acuerdo con el numeral 7.2 del artículo 7 del Decreto
Supremo N° 019-2006-TR, reglamento de la Ley General de Inspección del Trabajo.

Esto se debe a que desde el primer requerimiento de comparecencia se evidenció que el

inspector de trabajo actuante no puso en conocimiento del sujeto inspeccionado que por la
falta de entrega de ciertos documentos podría ser pasible de una sanción económica.

Esta dirección indicó que el Estado, en uso de su potestad sancionadora, no puede vulnerar el
principio de legalidad, que rige en todo procedimiento administrativo y que resulta aplicable al
caso.

Más aún si de los hechos constatados el sujeto inspeccionado sí cumplió con presentar la
documentación requerida en las diligencias de comparecencias programadas, detalla la
autoridad.

Ávalos considera que la decisión es acertada al obligar a los inspectores a informar

previamente respecto de los documentos que se requieran y a señalar los efectos de su
incumplimiento.

Es importante precisar que las actuaciones inspectivas de investigación o comprobatorias son

diligencias previas al procedimiento sancionador. Estas se efectúan de oficio.

La sanción económica

En la práctica, cuando la autoridad laboral o la Sunafil verifican el cumplimiento de las

obligaciones laborales, suelen imponer multas muy graves de hasta 395,000 soles por
incumplir con la entrega de todos o alguno de los documentos requeridos, detalló Ávalos. Así
la Ley General de Inspección del Trabajo establece que constituye una infracción a la labor
inspectiva el impedimento de la fiscalización o negarse a prestar apoyo al inspector de trabajo,
agregó. En efecto, el reglamento de la Ley N° 28806 fija como infracción muy grave la negativa
a facilitar información para una inspección.

Fuente: Diario El Peruano