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Amalio Blancoa
Universidad Autónoma de Madrid, España
ORCID: http://orcid.org/0000-0001-9395-2315
Luis de la Corte
Universidad Autónoma de Madrid, España
José Manuel Sabucedo
Universidad de Santiago de Compostela, España
RESUMEN
La naturaleza sociohistóricamente construida y compartida del
conocimiento y de la subjetividad que el construccionismo social parece
haberse arrogado en propiedad, forma parte de la historia de la ciencia
social. Por otra parte, la crítica al modelo causal-mecanicista como única
fuente de conocimiento, que el movimiento construccionista considera
una de sus principales aportaciones epistemológicas, se remonta nada
menos que a Kant. La verdadera aportación del construccionismo social
ha consistido en suprimir la experiencia como fuente del conocimiento
y de la subjetividad, negar la existencia de una realidad externa al
sujeto, mantenerse ontológicamente mudo frente a ella y desconfiar de
la posibilidad de cambiarla. Parece evidente que sobre estos cimientos
a
Autor de correspondencia. Correo electrónico:
amalio.blanco@uam.es no es posible, tal y como se ha pretendido, construir una psicología
social crítica. Frente a ella, y en sus antípodas, el realismo crítico
Para citar este artículo: Blanco, A., Corte, L. de la, de Martín-Baró parte de la existencia de una realidad objetiva cuyas
& Sabucedo, J. M. (2018). Para una psicología social injusticias y miserias denunció de manera insistente, se vale de métodos
crítica no construccionista: reflexiones a partir del
cuantitativos para analizarla; la estructura social es su marco de referencia
realismo crítico de Ignacio Martín-Baró. Universitas
Psychologica, 17(1), 1-25. https://doi.org/10.11144/Ja preferido a la hora de estudiar las diversas modalidades y manifestaciones
veriana.upsy17-1.pscc del comportamiento humano, no renuncia a la existencia de verdades
parciales y sociohistóricamente situadas y define como objetivo de su
quehacer teórico, el cambio social.
Palabras clave
construccionismo social; realismo crítico; psicología social crítica; teoría critica.
ABSTRACT
The sociohistorically built and created nature of knowledge and
subjectivity that social constructionism seems to have arrogated is part of
the history of social science. Moreover, criticism to the casual mechanistic
model as the only source of knowledge ─that the constructionist
movement considers as one of its main epistemological contributions─
goes back to none other than Kant. The real contribution of social
constructionism has consisted in deleting experience as a resource for
knowledge and subjectivity, denying the existence of an external reality
to the subject, keeping ontologically quiet towards it, pues, el nivel social en sus conexiones con
and distrusting the possibility of changing it. It seems los procesos mentales (la subjetividad) nuestra
evident that building a critical social psychology upon
these foundations is not possible. Opposing this, Martin-
principal preocupación, no parece sensato pasar
Baró’s critical realism is based on the existence of an por alto los términos en los que este se materializa
objective reality of which injustices and wretchedness he en la cultura y en el orden y la estructura
insistently denounced. This critical realism makes use of macro y microsocial en la que se desenvuelve
quantitative methods to analyze this objective reality, it la vida de las personas con las consecuencias
holds social structure as its preferred framework when
studying the different modalities and manifestations of
que de ello pueden derivarse a través de valores
human behavior, it does not deny the existent of partial y creencias culturales, pautas de socialización
and sociohistorically situated truths, and it identifies social diferencial, modelos de relación interpersonal
change as the objective of its theoretical work. e intergrupal, etc. Estos son los términos en
Keywords los que pretendemos desarrollar este artículo:
social constructionism; critical realism; critical social psychology;
critical theory. la necesaria interdependencia entre los niveles
objetivos y subjetivos de realidad; la necesidad
de tomar en consideración las consecuencias que
de ellos se derivan y de tomar partido respecto
A estas alturas del desarrollo de las ciencias a su permanencia o su cambio. En todos estos
sociales, caben pocas dudas de que los ámbitos, la posición epistemológica de Ignacio
términos en los que venimos a conocer Martín-Baró será obligado punto de referencia.
el mundo que nos rodea no son producto
de la naturaleza, sino construcciones sociales
(“social artifacts”) resultado de relaciones de
La necesaria interlocución entre
intercambio activo y cooperativo entre las
sensibilidad y entendimiento
personas, como reza el segundo de los principios
del construccionismo social (Gergen, 1985, p. En un corto ensayo sobre la teoría del
267; Gergen, 1996, p. 73; Gergen, 2015, p. conocimiento del materialismo dialéctico escrito
9). Pero al mismo tiempo, recordando con en 1963, Martín-Baró deja planteadas dos
ello el principio de irreductibilidad del Lewin propuestas que volveremos a encontrar, más
más gestáltico, convendremos también que elaboradas, en sus formulaciones teóricas de
estas construcciones pertenecen a “un nivel madurez. En la primera de ellas, y en
onto-epistémico irreductible a lo interpersonal, abierta contraposición con la principal tesis del
y, por supuesto, a lo individual” (Jiménez materialismo, afirma la existencia de “seres reales
Burillo, 2005, p. 6). Ese nivel de realidad que no son materia” (Martín-Baró, 2016, p. 85).
está acompañado además de otros tres: el El psicólogo social que devendrá después los
fisicoquímico, el más elemental; el biológico y el agrupará alrededor de la ideología y sorprenderá a
cultural. Entre ellos no hay “ruptura ontológica”, propios y extraños con esa heterodoxa definición
sino continuidad, intercambio, interdependencia de la psicología social como “el estudio científico
y mutua influencia, procesos todos ellos que de la acción en cuanto ideológica” (Martín-
conforman el núcleo duro de la perspectiva Baró, 1983, p. 17). Al defender la existencia real
psicosocial. Esta se ubica de manera preferente en de entes que carecen de un sustrato material,
el tercero de los niveles (vida inteligente, nivel el estudiante de filosofía cree haber quedado
mental, nivel social, son las denominaciones inmunizado contra el idealismo: “estamos lejos
propuestas), pero su razón de ser no solo no de toda sombra de idealismo”, afirma rotundo
excluye, sino que requiere y necesita la presencia (Martín-Baró, 2016, p. 86).
de los niveles previos alejándose así de viejos Siguiendo la huella de Santo Tomás (todo ser
dualismos respecto a los que el mismísimo Kant es “inteligible en potencia”), en la segunda de las
dictó sentencia en la obra cumbre de la filosofía propuestas sostiene que la naturaleza cognoscible
moderna, la Crítica de la razón pura. Siendo, de todo ser no implica que su existencia quede
encapsulada en el hecho de su cognoscibilidad, hace más de cien años nadie pone en tela de
sino que “su realidad, su existir es indiferente a juicio, lo estructural, que es donde lo social
que lo conozcamos o no” (Martín-Baró, 2016, encuentra regularidad y constancia, algo que el
p. 88). La existencia de una realidad que pasa construccionismo rechaza por principio. Desde
desapercibida a nuestra conciencia haciéndose su punto de vista, y por dejarlo resumido
visible por sus consecuencias en los distintos con una gruesa pincelada, las cosas irían,
niveles del comportamiento interpersonal e alternativa e indistintamente, del cielo (prioridad
intergrupal constituye hoy el eje de una larga epistemológica de los productos de la razón: lo
y sostenida tradición investigadora en el campo primario es el espíritu; la realidad queda reducida
del procesamiento automático e inconsciente de a la idea) a la tierra (lo primario es la materia,
la información (Dijksterhuis, 2010), que pone los hechos susceptibles de observación a través
seriamente en aprietos la (peregrina) idea de que de los órganos de los sentidos), y de la tierra
cuando no hay lenguaje y conversación, la acción (explicaciones basadas en hechos empíricamente
entre los interlocutores carece de significado comprobados que dan lugar a leyes universales)
(Gergen, 2011 entrevistado en Aceros, 2011, p. al cielo (descripciones basadas en percepciones
1007) y, por tanto, de consecuencias. e interpretaciones subjetivas de la realidad
Nos encontramos ante dos argumentos de apoyadas en convenciones lingüísticas), por
largo alcance, que sitúan a su autor muy lejos del recordar la conocida metáfora de Marx y Engels
construccionismo social 1 y acaban poniendo en Feuerbach. Oposición entre las concepciones
de manifiesto una clara falta de entusiasmo materialista e idealista.
de aquel estudiante de apenas 21 años por En el marco epistemológico de la psicología
los dualismos excluyentes a los que acabaron social, esta postura no reviste novedad alguna.
sucumbiendo naturalismo e idealismo, para dejar Ese fue el trayecto que siguieron, por ejemplo,
insinuada su apuesta por un flujo continuo Kurt Lewin en su Epistemología Comparada
entre subjetividad y objetividad en una suerte (Lewin, 1991), Lev Vygotski en su “síntesis
de síntesis dialéctica cuyo principal postulado dialéctica” (Vygotski, 1931/1995) y George H.
será el principio de interacción mutuamente Mead en sus sucesivas y nunca bien ponderadas
constitutiva entre el ser humano (subjetividad) aproximaciones al estudio de la conciencia del
y la sociedad (Martín-Baró, 2016, p. 191). Los significado, y del principal de todos ellos, el
primeros pasos, algo tímidos, los dará en “Sufrir “self” (Mead, 1964, 1972). No son los únicos que
y ser”, otro ensayo de juventud (Martín-Baró, apostaron de manera decidida por la superación
2016). Su desarrollo más sistemático y con mayor de esa epistemología de dirección única a
conocimiento de causa llegará años después, en la que acabaron sucumbiendo el materialismo
plena madurez, siguiendo un sencillo argumento: empirista y el racionalismo idealista, y a la
no se pueden obviar los condicionamientos que ahora rinde culto el construccionismo
objetivos de la subjetividad, porque, a pesar de social. Max Horkheimer también lo hizo. Nos
que “no sea visible y con frecuencia resulte de interesa de manera especial su postura no solo
difícil o cuestionable medición, no quita para porque es una de las figuras más señeras del
que constituya una realidad objetiva, conocida o pensamiento filosófico del pasado siglo, sino
no” (Martín-Baró, 2016, p. 206). por ser el más cualificado representante de
Esos condicionamientos nos remiten al la teoría crítica: en realidad, el naturalismo
“carácter estructural e histórico de las realidades no está radicalmente equivocado, porque “el
y los actos humanos [y] nos alejan de todo espíritu está indisolublemente unido con su
tipo de reflexión ética idealista que no tome objeto, la naturaleza” (no hay ruptura ontológica
ese carácter en cuenta en una forma directa e entre los niveles de realidad), de suerte que
inmediata”, escribiría en otro ensayo de juventud todo proceso psíquico (“acto espiritual” es la
(Martín-Baró, 2016, p. 198). Junto a lo histórico, expresión que utiliza) “implica algún tipo de
que el construccionismo social prioriza y que materia o naturaleza”. Presentado como un
absoluto, el espíritu y sus productos (las ideas, conocimiento a priori al margen de los objetos).
los significados, los relatos, el lenguaje, los Ambas, sensibilidad (capacidad de recibir
repertorios interpretativos) devienen en puro representaciones de los objetos) y entendimiento
mito, escribía en La crítica de la razón instrumental (capacidad de producir representaciones, de
(1947), una las obras más emblemáticas del pensar sobre los objetos) resultan imprescindibles
pasado siglo (Horkheimer, 2002, p. 176). en la tarea del conocimiento: “el entendimiento
Recordemos que ese fue precisamente el no puede percibir y los sentidos no pueden pensar
argumento de Marx contra la “mistificación” que cosa alguna. Solamente cuando se unen resulta el
sufre la dialéctica en manos de Hegel: la idea conocimiento”, de suerte que “pensamientos sin
convertida en demiurgo de lo real. contenido, son vacíos; intuiciones sin conceptos,
Todo esto es cierto, pero sería injusto no son ciegas”, dirá en la Introducción al capítulo
recordar, y reconocer, que, en su origen, la dedicado a la lógica trascendental (Kant, 1994, p.
relación de interdependencia y mutua influencia 132). Aplicado a la psicología, ya en la década
entre el yo y el mundo, la naturaleza y la historia, de los 30 del pasado siglo, el mismísimo Vygotski
la biología y la cultura, etc., tiene como referente (1995) había postulado algo muy parecido: no
indiscutible la síntesis entre racionalismo y es posible una psicología sometida a la tiranía
empirismo con la que, de manera lapidaria, da de la razón, que se permita el lujo de prescindir
comienzo la Crítica de la razón pura cuya primera de la mente, de la conciencia, del significado, ni
edición data de 1781. En ella, Kant intenta una psicología tiranizada por la subjetividad, que
congraciar las dos tendencias aparentemente defienda la existencia de una psique (conciencia)
antagónicas entre las que se había debatido en estado puro, ingrávido, ajena a cuanto sucede
hasta ese momento la teoría del conocimiento: a su alrededor. Se hace necesaria una síntesis
el racionalismo metafísico de Descartes y el dialéctica.
realismo de los empiristas ingleses, con Bacon a Cabría decir, pues, que Kant fue el primer
la cabeza: “no se puede dudar que todos nuestros crítico del modelo causal-mecanicista del
conocimientos comienzan con la experiencia”, conocimiento humano; fue realmente quien
con la activación de nuestros sentidos ante la puso contra las cuerdas las bases objetivas
estimulación de un determinado objeto; pero no del conocimiento convencional (el realismo
todos ellos proceden de dicha experiencia, “pues baconiano), y no el movimiento construccionista
bien podría suceder que nuestro conocimiento como afirma Gergen (1985, p. 267). La cuestión
empírico fuera una composición de lo que que se dilucida, según consta en el Prefacio a la
recibimos por las impresiones y de lo que aplicamos primera edición de la Crítica de la razón pura, es
por nuestra propia facultad de conocer” (Kant, nada menos que la existencia de conocimiento
1994, p. 98. Las cursivas son nuestras), de lo que “sin valerse de la experiencia”; la posibilidad
el sujeto propiamente dicho pone de sí mismo (su de una “razón extraempírica”, de suerte que
manera de percibir e interpretar la realidad). cuando Kenneth Gergen afirma en el primero
El conocimiento es al mismo tiempo fruto de los supuestos del construccionismo social, que
de la experiencia (hechos, datos e impresiones no es la experiencia la que define los términos
sensibles que surgen al contacto con los objetos de nuestra comprensión del mundo (Gergen,
de la realidad: pensamiento empírico) y de 1985, p. 266), volvemos literalmente a Kant.
los pensamientos e ideas que, al margen de A pesar del escaso protagonismo que Gergen le
ella, pone de su parte (“aplica”) el sujeto: concede, el verdadero adalid de la crítica a la
hay conocimientos a priori (conocimiento puro) antinomia entre las perspectivas “exogénicas” y
que son “absolutamente” independientes de la endogénicas” es el filósofo de Könignsberg. Sin
experiencia. Junto al conocimiento “reglado embargo, contrariamente a lo que el propio autor
por los objetos”, Kant admite la posibilidad sostiene (Gergen, 1985, p. 271), en el transcurso
de que sea la experiencia la que pueda de su desarrollo, el construccionismo no ha
regularse por los conceptos (posibilidad de un trascendido esa antinomia, sino que ha ahondado
insistentemente en ella posicionándose al lado que la conciencia individual, no por eso deja
de la perspectiva endogénica y ha acabado de ser al mismo tiempo, debido precisamente
por abrir una brecha prácticamente insalvable a sus raíces histórico-sociales, una huella que
entre ambas posiciones. Primero, reduciendo la afecta a las personas en una de sus dimensiones
realidad a la cognoscibilidad y encapsulándola en psicosocialmente más relevantes: su pertenencia
convenciones lingüísticas y poniendo en cuestión grupal (en términos macro o microsociales) y
después la experiencia sensible (Gergen, 1985, p. categorial; una huella compartida cuya marca
272). perdura gracias a la (relativa) constancia y
regularidad (estabilidad) del orden y la estructura
El giro epistemológico que caracteriza a cualquier entidad supra-
individual en forma de normas, preceptos, leyes,
valores, costumbres, tradiciones, creencias, etc.
La naturaleza socio-históricamente construida y
Superadas ya las viejas hipótesis de un “Volkgeist”
compartida del conocimiento y de la subjetividad
al estilo germano del Wundt de la Psicología de los
humana ha contado con valedores de postín al
pueblos o de una “group mind” al estilo de William
menos desde La pobreza de la filosofía de Marx,
McDougall o Charles Ellwood, en la psicología
escrita en 1846, la Introducción a la dialéctica de
social actual tenemos sobradas noticias de esa
la naturaleza de Engels, que data de 1875 y, sobre
huella a través de los contenidos de la cognición
todo, desde que en 1883 Dilthey publicara la
socialmente situada (Semin & Smith, 2013)
Introducción a las ciencias del espíritu. Si a Kant
y socialmente compartida (Thomson & Fine,
le correspondió dar un vuelco a la teoría del
1999), ejemplos de conocimiento apriorístico y
conocimiento, Dilthey será el encargado de darle
de razón extraempírica en el sentido kantiano,
un giro epistemológico, abriendo el camino a la
que dan cobertura a problemas de tanta
diferenciación entre las ciencias naturales y las
relevancia social como el racismo, la xenofobia,
ciencias sociales (una aberración en toda regla
el antisemitismo, la homofobia, el machismo y un
para Kant) y de concederle carta de naturaleza
largo y preocupante etcétera.
(estatus epistemológico) a la autonomía de estas
Este hecho tan elemental e incontrovertible
últimas (“las ciencias del espíritu forman un
convierte una parte de la realidad subjetiva
sistema autónomo en sí mismo”, escribe en el
en una realidad parcialmente objetiva, que
Prólogo al primer volumen de la Introducción a
ciertamente plantea serios problemas al método
las ciencias del espíritu). Las denominadas ciencias
del espíritu no se sitúan “frente” sino “al lado usado por las ciencias naturales 2 . A Ortega
de las ciencias de la naturaleza”, y lo hacen en y Gasset, por ejemplo, le parecieron tan graves
una clave que bien merece la pena recoger en que los llega a identificar con la crisis de la
su integridad: “el material de estas ciencias está modernidad de la que ya empezaba a hablarse
constituido por la realidad histórico-social en la en su tiempo. Perdida la fe en la razón ilustrada,
medida en que se ha conservado como noticia queda abierto el camino para la potenciación
histórica en la conciencia de la humanidad y de una racionalidad histórica: “ha llegado el
en la medida en que se ha hecho accesible a la momento de que la razón que era solo física
ciencia como noticia acerca del estado actual de se libere de esta limitación y de que el hombre
la sociedad” (Dilthey, 1985, p. 57). crea en la razón histórica” (Ortega y Gasset,
Se trata de una clave que hoy en día damos 1983, p. 329). Ese mismo modelo de razón es
por sólidamente asentada en el campo de las el que aparece como argumento nuclear en la
ciencias sociales como reacción al reduccionismo Sociología del conocimiento de Karl Mannheim,
biologicista y mecanicista en las explicaciones primero, y posteriormente de Robert Merton.
de la vida social, del comportamiento y de Su tesis principal, formulada en otra de las
la psique (subjetividad) humana. Aunque el obras emblemáticas del pensamiento social del
receptáculo de esa huella no puede ser más pasado siglo, Ideología y utopía, tiene un aire
muy psicosocial: las formas y los productos
del conocimiento “no se pueden comprender influencia tuvo en la teoría lewiniana a la que
debidamente mientras permanezcan oscuros sus el propio Gergen (1985, p. 269) le concede un
orígenes sociales” (Mannheim, 2004, p. 34). papel protagónico en la implantación de una
Formulada en estos términos tan diáfanos, esta perspectiva “endogénica”, a través del énfasis que
tesis, tan amigable al construccionismo social, algunos de sus discípulos (Festinger y Schachter)
se despliega en no menos de tres poderosos hicieron en la importancia de la cognición, pero
supuestos que, sin embargo, acaban por alejarse parece hacerlo sin prestar la debida atención a las
de sus principales argumentos. consecuencias, visibles, medibles y cuantificables
El primero de ellos alude a la naturaleza de la cognición socialmente compartida (el
colectiva en la génesis de las ideas, de los juicios ejemplo de la violencia colectiva sigue siendo
sintéticos a priori, si seguimos el camino trazado válido).
por Kant: es un error creer que los pensamientos Todos los contenidos y formas que adquiere
y emociones que mueven a la acción tienen su nuestro conocimiento tienen, en segundo
origen en el individuo y “que pueden explicarse lugar, un referente histórico; se sitúan de
adecuadamente a base solo de la experiencia de manera inevitable “dentro del marco de una
su propia vida”. Esta hipótesis se apoya en la débil situación histórico-social de la cual emerge
“ficción del individuo aislado y capaz de bastarse poco a poco el pensamiento individualmente
a sí mismo”, en palabras de Max Horkheimer; diferenciado” (Mannheim, 2004, p. 35), dando
tiene como protagonista a un ser humano incapaz cuenta fehaciente del “arraigo del conocimiento
de ser concebido “dentro de una esfera de en la textura social” o, lo que es lo mismo,
interioridad estática”, en emblemática expresión de la prevalencia del ser sobre el pensar,
de Berger y Luckman, y contraviene la absolutez que será una de las líneas maestras de la
del yo como sujeto soberano de conocimiento teoría crítica (Horkheimer, 1974) y de las
en la que se ha instalado el construccionismo ineludibles relaciones entre el conocimiento y
social, que acabará por empequeñecerse en la sus factores existenciales (fundantes) a los que
absolutez del lenguaje como única fuente de Robert Merton, con Marx al fondo, prestará
conocimiento, como única realidad y como única una especial atención. La base existencial de
línea de acción. las producciones mentales tiene su origen en
En realidad, quienes piensan no son individuos dimensiones sociales (la estructura: posición
solitarios, sino que, según Mannheim (2004, social, clase, generación, rol ocupacional, modo
p. 35), son personas “que pertenecen a ciertos de producción, estructuras grupales, situación
grupos y que han desarrollado un estilo histórica, estructura de poder, etc.) y culturales
particular de pensamiento en una interminable (valores, ethos, clima de opinión, tipo de cultura,
serie de respuestas a ciertas situaciones típicas visión del mundo, etc.) (Merton, 1977, p. 52). De
que caracterizan su posición común”, que entre ellas, “los estudiosos de la vida intelectual
no se reduce a compartir meras “reglas han destacado la influencia corruptora de
de interpretación” (Gergen, 1996, p. 316), las lealtades grupales” (Merton, 1977, p.
sino que se traduce en reglas que definen 184), presente siempre en la construcción del
sentimientos y acciones (las normas y emociones conocimiento y de la acción humana de las que
intergrupales, sin ir más lejos) que dejan una el construccionismo no es una excepción.
huella perfectamente objetivable en la vida En tercer lugar, y como consecuencia (o
de las personas (basta para ello pensar en el como fundamento) inevitable de todo ello, hace
rastro que ha dejado la violencia colectiva en acto de presencia la naturaleza construida del
América Latina). Esta posición es irreductible orden social (Berger & Luckman, 1968) o
a la postura que puedan adoptar a título del desorden ordenado (Martín-Baró, 1989a,
individual las personas pertenecientes a esos pp. 13-90). Aunque sobradamente conocida y
grupos, siguiendo uno de los principios más reiteradamente comentada, conviene volver a
elementales de la teoría de la Gestalt, que tanta recordar los términos de la argumentación de
y cambio en el transcurso del devenir histórico científica, que acude en nuestra ayuda a la hora
(Gergen, 1973, p. 310), nos remite, como de dar respuesta a problemas sociales.
acabamos de ver, al núcleo duro del materialismo El problema que plantea la postura del
dialéctico, a la filosofía comprensiva de Dilthey, construccionismo social no lo constituyen los
a la teoría crítica de la Escuela de Frankfurt, argumentos (nada novedosos, insistimos) de los
a la sociología del conocimiento y a la teoría que se sirve, sino la naturaleza apodíctica de
sociocultural. su formulación: los hechos de los que se ocupa
Todas estas propuestas, cada una a su manera, la psicología social carecen de regularidad; los
ponen en tela de juicio la posibilidad de elaborar conceptos y teorías que manejamos tienen un
leyes de validez transhistórica y universal, a la carácter prescriptivo (sesgo valorativo): indican,
hora de abordar asuntos relacionados con la de manera políticamente interesada, lo que es
vida social o con el comportamiento humano; preferible y/o socialmente deseable; las teorías
todas se distancian de la acumulabilidad del psicosociales son herramientas para el ejercicio
conocimiento en el sentido de que a este del poder y del control social; la conducta
principio se le ha dado en la ciencia natural humana no es previsible, y cuando se pretende
y aceptan el supuesto de que la ciencia hacerla, coloca a las personas en una situación de
es algo más que la mera acumulación de especial vulnerabilidad; la subjetividad humana
datos; se muestran igualmente críticas con el es la única fuente fiable de conocimiento; no
modelo de sujeto individualista, hedonista y a- hay posibilidad de elaborar leyes generales sobre
histórico que ha (des)dibujado el positivismo la conducta social; la observación empírica
y admiten la naturaleza construida de la no genera una comprensión teórica de los
realidad social como resultado de prácticas y fenómenos psicosociales; la psicología actual
transacciones humanas históricamente situadas; no tendrá ningún valor en el futuro; los
todas convendrían igualmente en la naturaleza académicos tienen un acendrado prejuicio contra
transitiva de los hechos de los que se ocupa la aplicación; la única limitación de la teoría
la ciencia social, es decir de su dependencia es la que fija las convenciones del lenguaje;
del significado que las personas le atribuyen la psicología y la psicología social no pueden
y de la posibilidad de modificarlos como ser ciencias positivas; la experiencia y los datos
consecuencia del cambio en los significados procedentes de los órganos de los sentidos no
atribuidos; todas abren también la puerta forman parte del contenido de la subjetividad; los
a métodos alternativos de investigación, por estudios experimentales son socialmente vacíos
entender que los métodos experimentales y de y tan solo han servido para dar alas al poder
laboratorio pretenden “cerrar” artificialmente opresor, y así sucesivamente.
una realidad que es “abierta” por naturaleza; Puesto que la experiencia no es la única fuente
en todas ellas, de manera implícita o explícita, de conocimiento, esta queda reducida a meras
hay una crítica a la posibilidad de una convenciones lingüísticas; como la realidad se
ciencia libre de valores; además, no dudan que nos presenta de manera engañosa, la realidad
el conocimiento científico genera perspectivas no existe más allá de las ideas que tengamos
teóricas de validez solo parcial debido a sobre ella; puesto que no existe una verdad
las limitaciones cognitivas de nuestra mente, universal, la verdad no existe. La supuesta
que hacen imposible aprehender en un solo mudez ontológica (la razón depurada hasta el
intento (ni en un número finito de ellos) extremo de “renunciar incluso a la tarea de
todas las variables causales que contribuyen enjuiciar acciones y modos de vida de los
a la producción de los fenómenos que tratan seres humanos”, en palabras de Horkheimer,
de explicar. Finalmente, es importante señalar 2002, p. 50) y la renuncia a todo criterio de
que todas ellas, distanciándose claramente del verdad, dos de los supuestos más sobresalientes
construccionismo, dan por supuesta la utilidad del constructivismo, no salen precisamente muy
del conocimiento, una suerte de racionalidad reforzados a partir de estos enunciados enfáticos
con vocación de eternidad: “la verdad no existe; 1964, pp. 492-498). Stanley Milgram llevó a cabo
he ahí la verdad”. No es nuestra intención entrar sus 18 experimentos sobre la obediencia a la
en el debate de cada uno de estos temas, pero autoridad estremecido por el torrente de muerte
algunos de ellos merecen una especial atención. y destrucción producido por el antisemitismo
La naturaleza políticamente perversa que nazi y espoleado por las declaraciones de Adolph
acompaña al sesgo valorativo, por ejemplo, Eichman declarándose como un simple servidor
empieza a diluirse cuando, en vez de poner del Estado.
el foco de atención en la conformidad o en En los estudios de Milgram, podemos
el autoritarismo, hablamos de discriminación, encontrar argumentos para la obediencia y para
racismo, violencia, exclusión, etc. Entonces, la rebelión (véase, por ejemplo, el experimento
las prescripciones pierden el carácter indómito 17: Milgram, 1980, pp. 113-118). El famoso
que Gergen les atribuye para convertirse estudio de la prisión de Stanford estuvo presidido
en instrumentos de intervención capaces de por una severa crítica al sistema penitenciario
responder a esa noble tarea que George Miller norteamericano: a su ineficacia, al maltrato a
le atribuía a la psicología: ser un instrumento que estaban sometidos los presos en muchas
al servicio del bienestar humano (Miller, de ellas, a su incapacidad para cumplir el
1969). Martín-Baró se sumaría a esta posición objetivo, probablemente iluso, de rehabilitación,
en unos términos que ofrecen pocas dudas a su incapacidad para afrontar con garantías el
respecto a su postura abiertamente distante problema de la criminalidad en Estados Unidos
del construccionismo social: la psicología se (Haney & Zimbardo, 1998). Los experimentos
interesa y se introduce en los campos de la sobre la impasibilidad del espectador (Latané
familia, las relaciones laborales, la educación, & Darley, 1971) parten de la preocupación de
etc., “como un intento expreso de humanización, los autores por la inhibición de los residentes
de crecimiento humano y cultural: se trata de de un bloque de apartamentos ante la petición
comprender mejor a las personas, de entender de ayuda de una vecina atacada (y finalmente
más a fondo aquellos aspectos que permiten a asesinada) por un individuo. La intención de Jost
los seres humanos lograr una vida mejor, de y Banaji (1994; Jost, Banaji, & Nosek, 2004) no
profundizar en el planteamiento más adecuado es fomentar la explotación, la desigualdad y la
de aquellos problemas que enfrentan a los injusticia social, sino todo lo contrario: desvelar
individuos y los grupos y les impiden su desarrollo los mecanismos que sirven para la justificación y
y plenitud” (Martín-Baró, 2016, p. 181). mantenimiento de un statu quo y del orden social
Claro es que, al mismo tiempo, la psicología que las favorece y las alienta 3 .
puede servir, y ha servido de hecho, para El objetivo de Lippitt y White (1973)
todo lo contrario: para aplicar con éxito tampoco fue ensalzar los estilos autoritarios de
la tortura; para controlar y castigar a los liderazgo, sino mostrar las ventajas del liderazgo
disidentes; para justificar la guerra, el machismo, democrático; y las investigaciones de Susan
la xonofobia, el racismo y largo etcétera (la Fiske están claramente dirigidas a denunciar
psicología al servicio del poder: véase Teo, el sexismo ambivalente (Glick & Fiske, 1996).
2015, pp. 246-247) contraviniendo así su propia Otro tanto podríamos decir de los estudios
racionalidad científica y su propia racionalidad procedentes de la rica tradición empírica en torno
ética. Solomon Asch, por recordar una de al prejuicio (Allport, 1962), al prejuicio sutil
las investigaciones paradigmáticas, nos enseñó (véase al respecto la interesante reflexión teórica
que el conocimiento psicológico procedente de de Dovidio, 2001) o a la infrahumanización
estudios experimentales puede servir tanto para (véase la revisión de Rodríguez, Rodríguez, &
fomentar la sumisión y el control social como la Leyens, 2003): su intención no es fomentar
autonomía, y en las conclusiones de sus estudios esas conductas, sino denunciarlas. Por no hablar
hace una crítica severa a los modelos de grupo de las propuestas de Moscovici (1976) sobre
y sociedad basados en la conformidad (Asch, la capacidad de innovación de las minorías
activas, o las de Sherif y Sherif (1953) para la voluntad de cualquier instancia sobrenatural,
ofrecer soluciones al conflicto intergrupal. Un y condenar al sujeto a la resignación y a la
ejemplo especialmente significativo nos lo ofrece pasividad; es decir, encadenarlo al fatalismo.
Morton Deutsch, uno de los discípulos más Las relaciones entre conocimiento y poder
entusiastas de Lewin, en el corto pero suculento son bien conocidas, pero es muy posible
repaso de su vida académica. Sus estudios sobre que se hayan desorbitado en manos del
las relaciones cooperativas y competitivas, la construccionismo. Tomás Ibáñez, uno de sus más
reducción del prejuicio o la justicia distributiva genuinos representantes, presta una atención
son excelentes ejemplos del compromiso social de especial a este aspecto: si no es posible
la investigación experimental (Deutsch, 1999). construir conocimiento sobre lo social sin que
En pocas palabras, la psicología crítica no lo social quede afectado, “debemos admitir que
renuncia al potencial transformador de la cualquier científico social que sea realmente
investigación empírica, con Kurt Lewin y Martín- eficaz en tanto que científico (…) está actuando
Baró como ejemplos (Teo, 2015, p. 248). Por ineludiblemente como agente político” capaz de
estas y otras muchas razones (ejemplos de incidir sobre la realidad social (Ibáñez, 1992, p.
líneas de investigación) que se podrían haber 23). De nuevo una sentencia apodíctica que deja
aducido, decir que la psicología social tradicional un escaso margen para el acuerdo. La reducción
“forma parte de un todo un andamiaje cultural de la realidad social a la realidad política ya
dirigido a ocultar las contradicciones e injusticias resulta, en sí misma, problemática, sobre todo
sociales” (Ovejero & Ramos, 2011, p. 22) no cuando esa realidad la definimos en términos
parece que responda de manera fidedigna a microsociales, que son los más estrictamente
lo que ha sido el desarrollo de una parte psicosociales.
muy significativa de esta disciplina. Claro es El apoyo prestado por el conocimiento
que ni a Deutsch ni a nadie mínimamente científico social a distintas formas de dominación
avezado en los contenidos de la psicología es un hecho difícilmente rebatible; también lo es,
social se le puede ocultar que hay estudios como acabamos de señalar, su contrario; pero al
experimentales carentes de interés teórico y mismo tiempo, cabría preguntarse por el sentido
alejados de cualquier asomo de compromiso de un conocimiento sobre lo social si lo social
social (Deutsch pone como ejemplo sus propios no quedara afectado (un conocimiento etéreo,
estudios siguiendo el paradigma del Dilema del vagando en el vacío), de la misma manera que
Prisionero), pero ello no convierte a los autores cabría preguntarse por el sentido que tendría
de los estudios experimentales y a los defensores el conocimiento sobre determinados aspectos de
de la metodología cuantitativa en esbirros del nuestra salud si esta no se viera positivamente
poder explotador y opresor. afectada, o todavía peor, si creyéramos, como
Huelga decir que todos los procesos implicados insinúa el construccionismo al negar validez
en estos estudios tienen un funcionamiento a la observación empírica, que no hay mayor
acorde con el tipo de sociedad, grupo y situación veracidad en un diagnóstico médico que en
en las que se hacen presentes, pero ello no el horóscopo. Actuar como un agente político
puede servir de excusa para desconocerlos o puede ser un objetivo manifiesto del científico
minusvalorarlos. No es desechable todo este social, pero también una consecuencia inevitable
conocimiento; tiene mucho de bueno, decía del resultado de sus teorías e investigaciones
Martín-Baró en el Prólogo a Sistema, grupo o del uso que se haga de ellas, el corolario
y poder, aunque su pretensión de crear un imprescindible de la imposibilidad de asepsia y
conocimiento de validez universal pueda ser de neutralidad intrínseca a la misma actividad
tildado de provinciano (Martín-Baró, 1989a, p. científica (una postura moral), o una intención
5). Por otra parte, pretender que la conducta atribuida por parte de los actores políticos
humana no es, en alguna medida, predecible, es (politización del conocimiento social).
condenarla al arbitrio, a la suerte, al destino o a
La naturaleza política de las teorías 2007; Fernández, Morales, & Molero, 2011;
psicosociales puede adquirir, pues, diversos Hombrados, 2013; Maya, García, & Santolaya,
rostros, todos igualmente legítimos, pero no todos 2007) y revisamos las distintas intervenciones
igualmente susceptibles de ser considerados, que en ellos se contienen, podemos observar:
definidos y agrupados bajo la etiqueta de “agentes a) que el componente político se podría
políticos”. En el caso de Martín-Baró, por intuir en casos como la intervención social y
ejemplo, así como el de todos sus compañeros comunitaria en el ámbito de la inmigración,
asesinados en 1989, fue una postura moral la intervención psicosocial con menores en
y, sobre todo, una interesada y manipulada situación de desprotección, la prevención del
atribución por parte del poder político y consumo de drogas en la población juvenil
económico salvadoreño. En la Introducción a o en los programas para mejorar el acceso a
Acción e ideología lo dejaba explicitado en un los servicios sociales de personas sin techo; b)
tono casi profético: corre peligro la vida de que en casos como el proyecto de prevención
quienes “pretenden iluminar los problemas que de SIDA en trabajadores temporeros, atención
están a la raíz del conflicto o contribuir a la a niños con asma en Nueva York, una
búsqueda de su solución” (Martín-Baró, 1983). intervención comunitaria para incrementar la
Por otra parte, como hemos señalado en algún donación de sangre en un campus universitario,
otro momento, “su noción de compromiso no fue la implementación de un programa para demorar
servil a ninguna fuerza política”, ni se sostuvo el inicio de la actividad sexual en adolescentes, el
sobre el poder político; fue antes y mucho más un desarrollo del sentido de comunidad, o internet
compromiso moral que un compromiso político y cambio comunitario en un barrio empobrecido
(De la Corte, 2001, p. 216), aunque eso no le de Chicago, hay que hacer un ejercicio muy
impediría pensar que la manera en la que venía imaginativo para encontrarlo; c) que en ninguno
desarrollando su actividad teórica acercaba su de los programas llevados a cabo, los agentes de
psicología social (su psicología de la liberación) a intervención han actuado como agentes políticos
una psicología de la acción cuyas consecuencias ni se han servido del poder político y d) que
se adentran, de manera inevitable, en el campo el poder puesto en práctica ha sido el poder
de las decisiones políticas (Martín-Baró, 1989a, de recompensa, el poder de experto o el poder
p. 7). de información, de acuerdo con la taxonomía
No obstante, la acción política, entendida propuesta por French y Raven (1974).
como una acción que refuerza o desafía el orden No parece, pues, que todas estas
político instituido, no es la única manera de intervenciones estén inspiradas por un agente
incidir sobre la realidad social ni la estrategia político, persigan el mantenimiento del statu
que ha utilizado la intervención a la hora de quo, o estén al servicio de una minoría
hacer productivo el conocimiento psicosocial. dominante interesada en seguir ahondando en
Ello supondría un empobrecimiento del propio la desigualdad, en la injusticia social o en la
concepto de poder y una injustificada renuncia opresión política. Tampoco parece que haya
a una mirada psicosocial en los términos sido ese el Leitmotiv de Lewin, Milgram, Asch,
propuestos por Cartwright (1959), French y Tajfel, Sherif, Zimbardo, entre los clásicos, o de
Raven (1974), Raven (1992) o Thibaut y Kelley Susan Fiske, John Bargh, Richard Petty o John
(1959): el poder como influencia persuasiva y no Dovidio, entre los investigadores de referencia
como imposición en el sentido weberiano. Para más actuales. Eso sería como pensar que el uso de
incidir sobre la realidad social, no es necesario la metodología cuantitativa lleva impreso dentro
actuar como un agente político. de sí, como una necesidad intrínseca, ponerse al
Si, a título de ejemplo, tomamos como servicio del poder opresor para dar cobertura a sus
marco de referencia algunos de los manuales fechorías.
sobre intervención psicosocial publicados en La monografía Psicología social crítica e
los últimos años (Blanco & Rodríguez Marín, intervención psicosocial. Reflexiones y experiencias
de investigación (Moncayo & Díaz, 2015) no nos “lo que hace reaccionaria o progresista a una
desvela, pese al título, la contribución que hace teoría no es tanto su lugar de origen cuanto su
la psicología social crítica de raíz construccionista capacidad para explicar u ocultar la realidad y,
a la intervención. Entre los 14 capítulos que sobre todo, para reforzar o transformar el orden
la conforman, se alude de manera general a social” (Martín-Baró, 1998, p. 294). Tampoco
algunas intervenciones, pero no se describe es el método, cabría añadir, el que define
ninguna de ellas en los términos consensuados como reaccionaria o progresista una manera de
al efecto: problema que se aborda, participantes abordar los procesos psicosociales. En definitiva,
en la intervención, actividades desarrolladas, la lectura de esta monografía no arroja luz sobre
resultados y evaluación de la intervención cuáles son las novedades que aporta la psicología
propiamente dicha. Lo más cercano a este social crítica a la teoría tradicional en torno a la
esquema tan elemental es el capítulo de Claudia naturaleza de lo psicosocial o a la intervención
Jurado en el que se describen algunas actividades psicosocial más allá de los manidos tópicos sobre
llevadas a cabo en organizaciones campesinas la construcción social de la subjetividad y la
paneleras, pero se hace como acompañamiento crítica a la metodología cuantitativa.
secundario a la historia de las organizaciones
campesinas en Colombia, a las distintas visiones El mundo de lo real (La realidad) como
de la participación o al desarrollo teórico de “a priori” existencial
los conceptos de cooperación y participación
(Jurado, 2015).
Si la huella de la realidad históricosocial es real
Por lo que respecta a la investigación, tan solo
y cómo podemos conocerla (qué es lo real y
el capítulo de Obando, Betancourt y Martínez
cómo podemos conocerlo) es la pregunta que
(2015) sobre los imaginarios patriarcales en torno
Berger y Luckman se plantean en las primeras
al género femenino cabe ser considerado como
páginas de La construcción social de la realidad.
una “experiencia de investigación” propiamente
La respuesta que avanzan está en perfecta
dicha, con la salvedad de que las autoras
sintonía con las posiciones epistemológicas que
se limitan a comentar los resultados de un
nos vienen acompañando desde el comienzo
interesante estudio llevado a cabo por dos de ellas
de este artículo (la síntesis kantiana entre
en 2010. El resto de la monografía está dedicado
entendimiento –racionalismo– y sensibilidad –
a reflexiones y especulaciones teóricas sobre
empirismo–, la síntesis dialéctica de Vygotski,
lo psicosocial (los cuatro primeros capítulos),
la filosofía galileana de Lewin, la relación entre
la psicología social crítica, la diferencia entre
espíritu y naturaleza de Horkheimer, la definición
atención psicosocial e intervención psicosocial,
de lo psíquico –la subjetividad– por parte de
con una particularidad que llama poderosamente
Mead, y el realismo crítico de Martín-Baró). Es
la atención: a lo largo de las numerosas
decir, se trata de una respuesta que se aleja de
reflexiones sobre lo psicosocial se prescinde
manera decidida de los dualismos excluyentes a
de referentes como George H. Mead, Kurt
los que han acabado sucumbiendo las posturas
Lewin, Muzafer Sherif, Henri Tajfel, Gordon
idealistas (el constructivismo social entre ellas) y
Allport, Solomon Asch, Stanley Milgram, Philip
positivistas desoyendo las recomendaciones de la
Zimbardo, etc., por mencionar tan solo a
principal figura de la filosofía moderna (Kant). Y
algunos de los más conocidos y reconocidos.
lo hacen además apoyándose en dos referentes de
Probablemente, se trate de uno de esos “falsos
contrastada y compartida autoridad, Durkheim y
dilemas” que no ha sido capaz de superar una
Weber, para darle la razón a ambos.
parte de la psicología social de habla hispana:
Los hechos sociales son cosas (Durkheim)
el que opone una psicología reaccionaria a una
y son significados (Weber). Se trata de dos
psicología progresista.
supuestos que no se contradicen: la sociedad
Sirva a este respecto la advertencia que hiciera
“posee facticidad objetiva” al tiempo que se
Ignacio Martín-Baró hace casi cuarenta años:
asienta sobre un conjunto de actividades que a actuar sobre el productor” (Berger &
“expresan un significado subjetivo”. Ambos eran Luckman, 1968, p. 83), que las instituciones
conscientes del carácter dual de lo social. El también tienen la capacidad de controlar el
resultado no es el recogimiento de la realidad comportamiento humano “estableciendo pautas
social en los reservados del sujeto ensimismado, definidas de antemano, que lo canalizan en
sino la existencia visible de una realidad sui una dirección determinada” (p. 76). Este hecho
géneris (Berger & Luckman, 1968, p. 35) es el que permite hacer predicciones respecto
erigida (construida) sobre el significado que al comportamiento y formular a partir de
hemos convenido en darle a los elementos ahí estrategias de intervención, tanto a nivel
que la conforman. Esos significados adquieren individual como colectivo (comunitario). El ser
facticidad objetiva a través de la habituación, humano piensa, construye y actúa sobre la
de la repetición de actos de acuerdo con realidad en la misma medida en que la realidad
el sentido otorgado a los componentes de piensa, interpreta y actúa respecto al ser humano
la situación estimular y de la existencia de a través de los modelos de relación interpersonal
pautas de comportamiento que se reproducen e intergrupal definidos y puestos en práctica por
de manera más o menos automática “con los otros, por el homo socius que todos llevamos
economía de esfuerzos” por parte del sujeto dentro.
(Berger & Luckman, 1968, p. 74). La habituación Entra de nuevo en escena la existencia de un
proporciona, pues, un trasfondo estable a la a priori existencial que, dicho de la manera más
actividad humana y constituye el antecedente comedida, enmarca las formas y los contenidos
necesario de la institucionalización de las pautas del conocimiento (del pensamiento) y de la
socioculturales y de los marcos estructurales; acción humana haciéndolas a veces necesarias y
de esa estructura que, al adquirir, como hecho obligatorias gracias a la constancia y regularidad
inherente a ella, regularidad y estabilidad, coercitiva de algunos de los componentes del
perfecciona una cualidad que ya existía en su orden y la estructura social. Martín-Baró lo
germen: la objetividad de sus componentes, de expresaría de manera algo más terminante en
suerte que pasan a experimentarse como algo que uno de sus trabajos de juventud previamente
existe “por encima y más allá de los individuos mencionados: “podríamos decir que el hombre,
[…] y como si poseyeran una realidad propia, que por el hecho de serlo, se encuentra con una
se presenta al individuo como un hecho externo circunstancia existencial a priori. Es decir, el
y coercitivo” (Berger & Luckman, 1968, p. 80). hombre, sin que de su parte ponga o quite nada,
Así, cuando se dice, con razón, que hay formas se encuentra arrojado a un mundo. Existir es,
de comprensión negociada de la realidad que ante todo, una referencia, al mundo” (Martín-
tienen un significado crítico en la vida social en la Baró, 2016, p. 127) 4 , pero no a un mundo en
medida en que están conectadas con actividades abstracto, sino a unas condiciones de vida que el
en las que están implicadas las personas (supuesto propio autor concretó en los estudios llevados a
4 del construccionismo social: Gergen, 1985, cabo en el Instituto Universitario de la Opinión
p. 268), parece obvio que estamos hablando Pública (IUDOP). En definitiva, “cada persona
de significados subjetivos dotados de facticidad elabora su existencia a partir de un sistema social
objetiva debido a su tipificación recíproca, fuente que encuentra ya como dato previo […]. Así,
y origen de su estabilidad y regularidad (de su cada sistema social es al mismo tiempo un dato
institucionalización) y a sus consecuencias sobre previo y un producto humano” (Martín-Baró,
los interlocutores convirtiéndose, así, al mismo 1989a, p. 49).
tiempo, en resultado de la construcción humana La naturaleza construida del orden y de la
y en condición preexistente al sujeto. estructura social no impide, pues, que algunas
La relación dialéctica entre el hombre (el de sus manifestaciones terminen adquiriendo
productor) y el mundo social (el producto) dimensiones reales sui géneris. Muchas de ellas
también supone que “el producto vuelve se presentan a los órganos de los sentidos en
unos términos muy cercanos a como lo hacen los atribuirles a los otros esas mismas cualidades.
objetos del orden natural. Pongamos un ejemplo El desarrollo de la conciencia del significado
para entendernos. De acuerdo con los datos es la clave de la subjetividad, dirá George
ofrecidos por el Grupo de Memoria Histórica H. Mead. Pero ese desarrollo solo el posible
(GNMH), entre 1958 y 2012 el conflicto armado bajo una condición: los otros. Los socii, tanto
colombiano causó la muerte de, al menos, a nivel personal como, sobre todo social (el
220.000 personas (Centro Nacional de Memoria “otro generalizado”: la comunidad o grupo social
Histórica [CNMH], 2013, p. 20). Sería un error organizados), se convierten así en pre-condición
pensar que este es un hecho perteneciente al de la conciencia, en condición necesaria para
mundo de la naturaleza. Será fácil convenir incorporar a la conciencia el significado de las
que se trata más bien de un dato incontestable cosas, de suerte que “el proceso del cual surge
(un hecho objetivo), que se sitúa, por derecho la persona es un proceso social que involucra
propio, en el espacio de la realidad social; de esa la interacción de los individuos del grupo e
realidad empedrada de significados que poseen involucra la pre-existencia del grupo” (Mead,
facticidad objetiva (seres reales que no son 1972, p. 193), y es ahí cuando, sin necesidad de
materia, recordando de nuevo a Martín-Baró). perder su carácter subjetivo, el significado pasa
El discurso de los actores armados está convertirse en un hecho social en los términos
plagado de excusas y justificaciones; “para del Durkheim de Las reglas del método sociológico:
ellos, la población es señalada como una hechos que “no tienen al individuo por sustrato”,
prolongación del enemigo”; son sus “bases que “reproducen, en parte, un modelo colectivo”
sociales”, “colaboradores”, “traidores”, etc. y se reconocen por el “poder de coerción externa
(CNMH, 2013, p. 38). Significados convertidos que ejercen o son susceptibles de ejercer sobre los
en hechos, que han segado la vida de cientos individuos” (Durkheim, 1978, p. 36).
de miles de personas en Argentina, El Salvador, El otro generalizado dota al significado
Guatemala o Chile. El conocido teorema de de objetividad; lo hace por la vía de las
William Thomas nos desvela el secreto: “si los consecuencias que su puesta en práctica en
individuos definen las situaciones como reales, las relaciones interpersonales tiene para las
éstas acaban siendo reales en sus consecuencias”. personas. Así lo entiende Charles Morris en la
Robert Merton consagra este teorema como introducción a la publicación más conocida de
uno de los grandes hitos de la ciencia social, Mead (Espíritu, persona y sociedad), aunque no la
porque “es aplicable instructivamente a muchos, más significativa de su producción teórica:
si es que no a la mayor parte, de los
[…] en el grado en que lo que el individuo
procesos sociales” (Merton, 1964, p. 419). Las
hace o dice es entendible, aceptable o cierto
interpretaciones que las personas hacen de las para cualesquiera otros individuos involucrados
situaciones sociales y de sus protagonistas tienen en una actividad común (y sin actividad común
su continuación en las acciones, interacciones no habría comunidad de significación), en ese
y relaciones mutuas que estas llevan a cabo. grado lo que es hecho o dicho tiene un nuevo
Tanto es así, que una definición originalmente tipo de universalidad; universalidad social. Tal
falsa (los estereotipos, sin ir más lejos) puede universalidad es, en un sentido del término, un
acabar convirtiéndose en verdadera debido a las sinónimo de objetividad. (Morris, 1972, p. 41)
consecuencias comportamentales que ella misma
Esa es la objetividad que ha convertido en
genera. Recuérdese a este respecto el amplio
hechos reales (empíricamente comprobables) el
rango de fenómenos sociales asociados a las
significado de “judío/a”, “yihadista” “subversivo/
llamadas profecías autocumplidas analizados por
a”, “mujer”, “afroamericano/a”, “infiel”, “tutsi”,
Merton.
“inmigrante” y un innumerable etcétera. Como
Los objetos con mente que somos los humanos
acertadamente apuntan Gergen, Josselson y
se caracterizan por su capacidad de crear,
Freeman (2015), todos ellos son hechos
aprender, utilizar y transmitir significados, y para
del lenguaje, que han servido para oprimir, En el caso que nos ocupa, esa realidad
discriminar, dominar, etc., pero cuando lo han estaba empedrada de situaciones de miseria
hecho han dejado de ser una mera representación en las que “la mayor parte del pueblo
simbólica subjetiva para convertirse en hechos nunca ha tenido satisfechas sus necesidades
pertenecientes a una realidad social que, a más básicas de alimentación, vivienda, salud
través de la habituación, la repetición y la y educación” (Martín-Baró, 1998, p. 162);
institucionalización poseen, en parte, facticidad plagada “de negaciones, carencias, presiones
objetiva en los términos de Berger y Luckman incontroladas fuerzas incontrolables” (Martín-
(1968). Baró, 1998, p. 131); atravesada por una violencia
El sentido, la dirección y la urgencia de la que pasó a formar parte (y así sigue en la
crítica no ha de extrañar, pues, que la pasión actualidad) “del funcionamiento normal de las
por la realidad se convirtiera en uno de los estructuras sociales” (Martín-Baró, 1983, p. 376)
hechos fundantes de la ciencia social (Nisbet, y definida por el “carácter explotador y opresivo
1969), que el ser humano haya sido definido de las estructuras sociales”, que condenan al
como “un animal de realidades” (Zubiri), que ciudadano de a pie a una situación infrahumana
la principal fuente de luz sea la realidad, y (Martín-Baró, 1998, p. 208). Todas estas, y
que esta se convierta en marco y condición algunas otras, son las vicisitudes del proceso
de la verdad (Ellacuría), que sea la realidad social que caracterizó a la sociedad salvadoreña.
la que tiene que buscar a los conceptos Pero contrariamente a lo que postula el tercero
y no al revés (Martín-Baró), que el objeto de los supuestos del movimiento construccionista
de la psicología social sea el estudio de “la (Gergen, 1985, p. 268), estas vicisitudes no
realidad cotidiana tal y como es vivida por se limitan a las reglas interpretativas de una
la mayoría de la población centroamericana comunidad de lectores (Gergen, 1996, p.
y, más particularmente, salvadoreña” (Martín- 316), sino que han mostrado una demoledora
Baró, 1983, p. 4). Cuando, siguiendo el validez empírica plagada de negatividad (pobreza,
argumento de Kenneth Gergen, sostiene que represión política, violencia, muerte).
es necesario “situar y fechar el conocimiento Martín-Baró nunca desconfió
psicosocial” a fin de “no pretender vender como epistemológicamente de la realidad, sino de
universal lo que es local y parcial” (Martín- su condición fatalista, injusta, opresora; es
Baró, 1983), no está poniendo en tela de juicio decir, de su condición victimaria. La realidad
la facticidad objetiva de los hechos sociales ni (naturalmente construida) como principio
mostrando su renuncia a la observación empírica epistemológico: esa es la clave del realismo crítico
a favor del análisis del discurso. que posiciona a Martín-Baró en un escenario
Todo lo contrario: puesto que es “la historia epistemológico alejado del construccionismo
social concreta la que da sentido a la actividad social. Recordémoslo una vez más para despejar
humana en cuanto ideológica”, lo que está dudas:
proponiendo es definir, primero, los contornos
Que no sean los conceptos los que convoquen
del mundo de lo real, desvelar posteriormente
a la realidad, sino la realidad la que busque a
el entramado de ideas que le sirven de los conceptos; que no sean las teorías las que
apoyo y justificación (el fondo ideológico), definan los problemas de nuestra situación, sino
para dar finalmente un paso hacia la práctica que sean esos problemas los que reclamen y, por
(intervención) liberadora, lo cual “no es lo mismo así decirlo, elijan su propia teorización. Se trata,
que afirmar que la psicología social es o deba en otras palabras, de cambiar nuestro tradicional
ser simplemente historia” (Martín-Baró, 1983, idealismo metodológico en un realismo crítico.
p. 25). Todo ello con el objetivo de hacer una A los psicólogos latinoamericanos nos hace falta
psicología social “científica” pero sin perder “la un buen baño de realidad, pero de esa misma
referencia a un contexto y situación concretas”. realidad que agobia y angustia a las mayorías
populares. (Martín-Baró, 1998, p. 314).
familiares, etc.), situación económica, sistema como objeción a toda teoría es una teoría
escolar, sistema de salud (problemas de salud, suicida” (Ortega y Gasset, 1983, p. 158).
instituciones de salud, expectativas sobre el No ha sido precisamente este el caso de
futuro de la salud), guerra, opiniones políticas quienes han defendido los acontecimientos y
(preferencias partidistas, disposición al voto, productos de la historia como la principal
opinión sobre los candidatos presidenciales), dimensión del conocimiento social. No sería el
etc., de la población salvadoreña. Lo que allí caso, desde luego, de Marx, pero tampoco lo
queda reflejado son, naturalmente, opiniones fue de Mannheim y, sobre todo, de Merton
personales (la percepción e interpretación cuyas bases existenciales del conocimiento solo
subjetiva). Ello no obstante, que el 55.2 % de los pueden ser comprendidas a la luz de los productos
habitantes de los sectores marginales vivieran en históricos por excelencia: la estructura social y
una casa hecha de bahareque y que el 26.8 % la cultura (véanse, por ejemplo, los capítulos “El
careciera de agua y energía, no es una opinión, estímulo puritano a la ciencia” o “La ciencia y el
sino un hecho objetivo: “las condiciones de vida orden social”). Tampoco sería el caso de Vygotski,
de las personas, escribía Martín-Baró en el primer aunque es bien sabido el alto precio que tuvo
capítulo de la segunda entrega del IUDOP, no son que pagar por priorizar la cultura frente a la
en sí mismas cuestión de opinión, sino realidades estructura. Tampoco lo sería de Martín-Baró. La
objetivas, aunque pueden constituirse en objeto presencia de la estructura social es una constante
de la opinión pública” (Martín-Baró, 1989b, p. a lo largo de toda su trayectoria, desde comienzos
9). Hechos de este tenor los tenemos a mano de la década de los sesenta cuando en “Sufrir
con el mínimo esfuerzo. “La justicia social es una y ser” invoca la naturaleza apriorística de las
cuestión de vida o muerte. Afecta al modo en que circunstancias existenciales (Martín-Baró, 2016,
vive la gente, a la probabilidad de enfermar y al pp. 105-163) hasta la década de los ochenta
riesgo de morir de una muerte prematura […]. cuando traza los lineamientos de su Psicología de
La esperanza de vida de una niña que nazca hoy la liberación y aborda las raíces estructurales de la
puede ser de 80 años, si nace en determinados guerra (la lucha de clases, la polarización social y
países, o de 45, si nace en otros” (Organización la mentira institucionalizada) y sus consecuencias
Mundial de la Salud [OMS], 2008, p. 1). sobre la salud mental (el trauma psicosocial). Esas
El reciente informe “Estado Mundial de la circunstancias existenciales le habían permitido,
Infancia 2016” de Unicef, por ejemplo, afirma siendo un joven estudiante de Filosofía, rechazar
que “la desigualdad matará a 69 millones de niños de plano “todo apriorismo esencialista”: puesto
en 15 años” y que para 2030, 167 millones de ellos que no “no hay una esencia que pueda abarcar
vivirán en la pobreza. Estos también son hechos. ni definir la existencia humana, llegamos a
Circunscribir su existencia (la de la pobreza, el la conclusión de que cada existente es su
hambre, las condiciones infrahumanas de vida, existencia; es decir, existiendo, el hombre llega a
la carencia de los más elementales recursos ser” (Martín-Baró, 2016, p. 125).
de salud, etc.) a la deconstrucción subjetiva La relación entre esencia y existencia nos
que cada quien tenga a bien hacer de ello es remite a Marx, un autor sin el que resulta
como ver la realidad desde la orilla, de manera prácticamente imposible entender la propuesta
perezosa, sin querer saber lo que ocurre en el de Martín-Baró, Teo (2015) cita a Marx
mar embravecido de su interior. Esa es, dice entre los antecedentes teóricos de la psicología
Lucien Febvre, uno de los nombres propios de crítica. Como era esperable, Gergen (1985)
la historiografía moderna, la actitud adoptada no lo tiene en cuenta a la hora de delinear
por algunos historiadores bajo la influencia de los fundamentos del construccionismo social.
la epistemología posmoderna, y esa parece ser la Esa relación nos remite, más en concreto, al
actitud del construccionismo social. El extremo Prólogo de la “Contribución a la Crítica de la
relativismo que las acompaña acaba convertido Economía Política”. Recordemos una vez más
en escepticismo, “y el escepticismo justificado el tan reiteradamente citado supuesto: son las
condiciones materiales (“el modo de producción construccionismo social, muchas veces sin un
de la vida material”) las que condicionan la vida real conocimiento de causa.
social y la subjetividad; “no es la conciencia del El principio emancipación ha pasado a formar
hombre la que determina su ser, sino, por el parte constitutiva de nuestro quehacer, tanto
contrario, el ser social es lo que determina su en términos de investigación como en el marco
conciencia” (Marx, 1973, p. 518). de la intervención. No es este el momento
Martín-Baró retoma esta conocida cita en de describir con detalle los pormenores del
un epígrafe dedicado a la estructura social debate en torno a la ilusa libertad de valores
perteneciente al capítulo en el que va en el quehacer de la ciencia social, sino de
desentrañando las características del desorden recordar que la crítica al orden social existente
social al que se ve arrojada una parte importante y a sus más lacerantes consecuencias sobre la
de la población salvadoreña. Es en ese desorden, vida y la existencia de determinadas personas
y debido precisamente a él, donde ahondan forma parte de la teoría crítica de Horkheimer
sus raíces el carácter, el fatalismo, la violencia (1974, 2002), del realismo crítico de Martín-
y la guerra, la polarización, la salud mental y Baró (1998) y de la psicología crítica (Teo, 2015)
el trauma psicosocial. Respecto a todas estas cuyo referente en este apartado (pp. 248-249)
secuelas del (des)orden social, dice Ellacuría, no es precisamente el construccionismo social,
no cabe la mudez ontológica, sino denuncia sino los dos autores recién mencionados (Max
(tomar conciencia de la negatividad) y utopía Horkheimer y Martín-Baró): “los psicólogos
(tomar conciencia de la posibilidad de superarla). críticos no aceptan las estructuras actuales de
La primera pone sobre el tapete un tema la sociedad como realidades fijas” (p. 249)
clásico en la ciencia social: su aspiración moral, porque parten de supuestos claramente ajenos
que Nisbet (1969) observa nítidamente en al construccionismo social: a) la existencia y la
sus padres fundadores: “los grandes sociólogos preeminencia de la estructura social (el a priori
jamás dejaron de ser filósofos morales” (p. existencial); b) la imposible neutralidad respecto
34). Si partimos de que “la Psicología es, a los temas de los que nos ocupamos en la
tanto o más que otra ciencia, una tarea investigación (la violencia de género, la exclusión
fundamentalmente ética” (Martín-Baró, 2016, social, el racismo, la guerra, el terrorismo, la
p. 185), tampoco los profesionales de esta pobreza y un largo etcétera): “resulta absurdo
disciplina, con independencia del método del y aun aberrante pedir imparcialidad a quienes
que nos sirvamos en nuestras investigaciones, estudian la drogadicción, el abuso infantil o
dejaremos de ser, modestamente, filósofos la tortura” (Martín-Baró, 1998, p. 317), bien
morales. Y mientras no se demuestre lo contrario entendido que esta parcialidad moral no está
(y nadie lo ha hecho hasta el momento), no reñida con la objetividad que demanda cualquier
hay razón alguna para negarle ese compromiso a proceso de investigación y c) la posibilidad y
Lewin, Asch, Allport, Milgram, Tajfel, Zimbardo, necesidad de cambio.
Moscovici, Sherif, Mead, Fiske, Jost y un largo La denuncia y la utopía son los dos pasos
etcétera. necesarios y complementarios en la lucha por
El compromiso social, que es, a la postre, los derechos humanos: “la denuncia sin utopía
un compromiso moral, es tan evidente en el es, hasta cierto punto, ciega, pero la utopía sin
Lewin que investiga los estilos de liderazgo denuncia es prácticamente inoperante, más aún,
como en Susan Fiske, cuando estudia el sexismo eludidora del compromiso real” (Ellacuría, 1990,
benevolente. Tildar este elenco de estudios de p. 592). Denuncia de lo que está haciéndose y
una “experimentación socialmente vacía” por el esperanza y acción hacia lo que está por hacer
mero hecho de estar apoyada en datos empíricos (utopía), porque “la verdad de la realidad no es lo
(Ovejero & Ramos, 2011, p. 11) es una de las ya hecho; eso es solo una parte de la realidad. Si
cómodas falacias en las que se ha instalado el no nos volvemos a lo que está haciéndose y a lo
que está por hacer, se nos escapa la verdad de la
a medias: acepta la existencia de una “razón Baró, 2003, p. 338) y el trauma psicosocial como
extraempírica”, pero niega la existencia de un la “consecuencia normal de un sistema social
conocimiento “reglado por los objetos” y con basado en relaciones sociales de explotación y
ello acaba posicionándose de manera clara al opresión deshumanizadoras [...], como parte de
lado de la perspectiva endogénica. Es decir, una “normal anormalidad’ social” (Martín-Baró,
vuelve a la filosofía prekantiana, y con ello a 2003, p. 295). Ese es el marco (el desorden)
la absolutez de un sujeto cognoscente capaz de social que propicia la creación de víctimas,
bastarse a sí mismo, dando pie con ello al error convirtiéndose así en objeto de denuncia y de
de pretender explicar la totalidad de los procesos cambio.
sociales refiriéndose únicamente a su génesis
en la psique del individuo (Mannheim, 2004). Referencias
La recuperación de la realidad sociohistórica en
el desarrollo de la subjetividad por parte del
Aceros, J. C. (2011). Social construction
construccionismo social se ha visto desprovista
and relationalism: A conversation with
de dos de sus principales rasgos: el hecho de
Kenneth Gergen. Universitas Psychologica,
que dicha realidad es compartida, y que está
11(3), 1001-1011. Recuperado
inevitable y necesariamente acompañada de una
de http://revistas.javeriana.edu.co/index.p
estructura. Es precisamente ahí donde reside
hp/revPsycho/article/view/1001
un principio de objetivación, donde Berger y
Allport, G. (1962). La naturaleza del prejuicio.
Luckman encuentran la “facticidad objetiva” de
Buenos Aires: Eudeba.
los hechos sociales en unos términos que dejan
Asch, S. (1964). Psicología social. Buenos Aires:
poco lugar a la especulación: cuando el orden
Eudeba.
social se institucionaliza, se experimenta como
Berger, P., & Luckman, T. (1968). La construcción
algo que preexiste al sujeto, como un hecho
social de la realidad. Buenos Aires:
externo con capacidad de coerción, siguiendo
Amorrortu.
con ello la línea marcada por Durkheim en su
Blanco, A., & Rodríguez Marín, J. (Coords.).
clásica definición de los hechos sociales.
(2007). Intervención psicosocial. Madrid:
En esa misma dirección y en ese mismo
Pearson.
sentido, Martín-Baró invoca la existencia de un
Cartwright, D. (1959). Field theretical
“a priori existencial” definido por las condiciones
conception of power. En D. Cartwright
materiales y sociales en las que se desenvuelve
(Ed.), Studies in social power (pp. 183-220).
la vida de las personas, que lo sitúan lejos de los
Ann Arbor, MI: Institute for Social
supuestos del construccionismo social. Ese es el
Research.
marco que le sirve para desarrollar sus principales
Centro Nacional de Memoria Histórica. (2013).
aportaciones teóricas: la violencia, el fatalismo, la
¡BASTA YA! Colombia: memorias de guerra
salud mental y el trauma psicosocial. Todas ellas
y dignidad. Bogotá: Autor.
tienen como marco de referencia la estructura
Corte, L. de la (2001). Memoria de un compromiso.
social, un contexto macro y microsocial que las
La psicología social de Ignacio Martín-Baró.
posibilita, las refuerza, las envuelve en razones
Bilbao: Desclée de Brouwer.
justificadoras y las transmite de generación en
Deutsch, M. (1999). A personal perspective on
generación como si se tratara de un hecho
the development of social psychology in
enraizado en la propia naturaleza del sujeto. Así
the twentieth century. En A. Rodríguez &
es como la guerra civil salvadoreña se entiende
R. Levine (Eds.), Reflections on 100 years
en el marco de la lucha de clases, el fatalismo
of experimental social psychology (pp. 1-34).
como la interiorización de la dominación social,
Nueva York: Basic Books.
la salud mental como “la materialización en una
Dilthey, W. (1985). Crítica de la razón histórica.
persona del carácter humanizador o alienante de
Barcelona: Península.
un entramado de relaciones sociales” (Martín-