Axel Escamilla A01127466 Ondrej Sumavsky A01291621 Theo Scalbert A01292724 DESPLAZAMIENTO EXPANSIÓN En particular, las economías del Sureste Asiático mantenían altas tasas de interés que eran atractivas para los inversionistas extranjeros que buscaban altas tasas de retorno. Las economías asiáticas recibieron grandes inversiones y por lo tanto un dramático incremento en los precios de activos. Las economías de Tailandia, Malasia, Indonesia, Singapur y Corea del Sur experimentaron altas tasas de crecimiento del 8% al 12% del PIB. Lo anterior fue conocido como el milagro asiático. Entre 1985 y 1996, la economía de Tailandia creció a un promedio de más del 9% anual. En 1996 un fondo norteamericano había vendido $400 millones de la moneda Tailandesa. El baht tailandés estaba fijado al dólar en una tasa de 25 a 1. Indonesia tenía una baja inflación, un superávit de la balanza comercial de más de $900 millones así como reservas internacionales de más de $20 mil millones. EUFORIA
País experimentando exceso de inversión
Los niveles de deuda externa muy elevada.
La banca mundial estimaba antes de la crisis,
que la situación económica de la zona de Asia del sur este estaba estable, y que el área tenia un crecimiento fuerte y saludable. ANGUSTIA Malas inversiones por parte de los bancos.
Inversionistas pierden confianza en los bancos.
Crecimiento desmedido de las deudas de corto
plazo con el exterior; cuando estas superaron al nivel de reservas internacionales, los inversionistas extranjeros entraron en pánico, pues percibieron falta de liquidez en el país. REVULSION El 14 y 15 de mayo de 1997 el baht fue golpeado por un ataque especulativo masivo y cuando el gobierno tailandés falló en la defensa del baht contra especuladores internacionales, el boom económico tailandés se detuvo entre despidos masivos en el sector financiero, inmobiliario y de construcción. Los inversionistas comienzan a retirar su dinero del país ya que tienen miedo de perderlo. Se paralizan los proyectos inmobiliarios financiados por capital extranjero. Se comenzaron a deteriorar las carteras bancarias. CRISIS Efectos a nivel macroeconómico como reducción en monedas, mercado bursátil y otros precios de activos de varios países asiáticos. Muchas empresas colapsaron y millones de personas cayeron por debajo de la línea de la pobreza. Conmoción política dentro de países asiáticos. Renuncia del presidente de Indonesia y del primer ministro de Tailandia. Desinversión de Estados Unidos en algunos países asiáticos e inversión principalmente por parte de Europa. Retroceso de las ganancias producidas por el boom que se dio en años anteriores. Los inversionistas internacionales eran reacios a prestar dinero a países en desarrollo, creando una desaceleración económica en muchas partes del mundo. Se redujo el precio del petróleo aproximadamente en 8 dls. por barril a finales de 1998, lo que generó un apuro financiero en miembros del OPEP. (Organización De Países Exportadores de Petróleo) Esta reducción en los ingresos por petróleo contribuyó a la crisis financiera rusa en 1998. La crisis fue parte de una reacción global en contra del Consenso de Washington y de Instituciones Internacionales como el FMI y el Banco mundial, los cuales se volvieron impopulares en los países de desarrollo. CONTAGIO Comenzó el 2 de julio de 1997 con la devaluación de la moneda tailandesa. Por efecto dominó, Indonesia, Corea del Sur y Tailandia fueron los países más afectados por la crisis. Hong Kong, Malasia, Filipinas padecieron también la depresión. La República Popular China, India, Taiwán, Singapur y Vietnam fueron menos afectados, aunque también sufrieron por la pérdida de la demanda y de la confianza en la región. Lo que parecía ser una crisis regional se convirtió con el tiempo en lo que se denominó la "primera gran crisis de la globalización”