ORACIÓN INICIAL

ORACIÓN DEL PROFESOR

Guía: En esta día en que nos hemos reunido a meditar acerca de lo que significa nuestra vocación
de docentes, maestros, profesores, queremos reconocer tu voz, Señor, queremos sabernos
llamados por Ti, queremos sentir cada día, Tu presencia en nuestras vidas, descubrir la mejor
manera de servirte a ti Dios nuestro y a nuestros hermanos. En un momento de silencio
dispongamos el corazón y la mente a entrar en la presencia de Dios.

Todos
Dame divino Maestro, un amor sincero por mis alumnos y un profundo respeto por
los dones particulares de cada uno.
Ayúdame a ser un profesor fiel y dedicado, con mis ojos puestos en el bien de
aquellos a quienes sirvo.
Que imparta el conocimiento humildemente, que escuche con atención, que colabore
de buena gana, y busque el bien último de aquellos a los que enseño.
Que esté presto a comprender, lento a condenar, ávido de animar y de perdonar.
Mientras enseño ideas y entreno en habilidades, que mi vida y mi integridad abran
sus mentes y sus corazones a la verdad.
Que mi cálido interés por cada uno les enseñe el sabor de la vida y la pasión por
aprender.
Dame la fuerza para admitir mis limitaciones, el coraje para empezar cada día con
esperanza, y la paciencia y el humor que necesito para seguir enseñando.
Acepto a cada alumno venido de tus manos. Creo que cada uno de ellos es una
persona de valor exclusivo, aunque ellos mismos no se vean así.
Sé que tengo la oportunidad de dar a muchos niños y jóvenes luz y esperanza, un sentido de
misión y entrega. Sé que Tú confías en mí y que estás conmigo.
Te pido que me bendigas a mí y a mis alumnos, sus sueños y esperanzas.
Que aprendamos de la sabiduría del pasado. Que aprendamos de la vida, y los unos
de los otros. Que yo aprenda de tu guía, por encima de todo, y de las vidas de
aquellos que te conocen bien.
Este es el verdadero aprendizaje: conocer cómo debemos vivir nuestra vida, conocer
cómo somos nosotros mismos, y escuchar tu voz en cada palabra que aprendamos.

Canción: Alma Misionera

Guía: Dios nuestro que enviaste a tu Hijo al mundo como la luz verdadera, concédenos el Espíritu que
nos prometiste, para que difunda la verdad y suscite la fe en nuestros corazones y en los de los hombres,
a fin de que por todos, renacidos a una vida nueva por el bautismo lleguemos a pertenecer a tu pueblo
santo, por Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
 REFLEXIÓN PERSONAL

La Estrella Escondida

Las estrellas celebraron su asamblea, y cada una sacó a relucir, como saben hacer relucir las
estrellas, sus propios méritos en la creación y en la vida del hombre, rey de la creación. La estrella
polar demostró cómo ayudaba a los hombres a fijar el norte de sus caminos y de sus mapas; el
sol describió el calor, la luz, la vida que hacía llegar a todos los hombres y mujeres de la tierra;
una estrella poco conocida reveló que ella fue la que confirmó la teoría de Einstein cuando pasó
oportunamente tras el sol durante un eclipse, y con ello hizo un gran servicio a la ciencia; y otras
mencionaron los nombres que habían hecho famosos y los descubrimientos a que habían dado
lugar. Cada una tenía algo que decir, y rivalizaban en fama y esplendor.

Sólo una pequeña estrella, remota y escondida, permanecía callada en la asamblea celestial.

No se le ocurría nada que decir. Cuando le llegó el turno y hubo de hablar, confesó que ella
nada había hecho por el cosmos o por el género humano, y que los hombres y mujeres de la
tierra ni siquiera la conocían, pues aún no la habían descubierto. Las demás estrellas se rieron de
ella y la tacharon de inútil, perezosa e indigna de ocupar un sitio en el firmamento. Las estrellas
están para alegrar el cielo, y ¿de qué sirve una estrella que ni siquiera se sabe que existe?

La pequeña estrella escuchaba todos los reproches que le dirigían sus hermanas, y algo se le
ocurrió mientras hablaban, y lo dijo al final:

«¿Quién sabe?», dijo parpadeando suavemente, «a lo mejor yo también estoy contribuyendo, a

mi manera, al progreso y bienestar de hombres y mujeres en la lejana tierra. Es verdad que no
me conocen, pero ellos no son tontos, y sus cálculos les dicen que para explicar el curso de otras
estrellas y cuerpos celestes que conocen, tiene que haber todavía alguna otra estrella que con su
atracción gravitatoria explique las desviaciones en los caminos de las demás. Por eso continúan
estudiando y observando y buscando, y con ello avanza su ciencia y continúa despierto su
interés». Las otras estrellas se habían callado mientras hablaba, y ella tomó ánimos con su silencio
y añadió algo al final que hizo pensar a todas:

«No es que yo quiera anteponerme a nadie, y tenéis mucho mérito todas con lo que habéis
hecho por los hombres y mujeres de la tierra; pero creo que yo también les estoy prestando un
servicio importante: que sepan que aún les queda algo por descubrir».

Moraleja:_________________________________________________________________
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 PARÁBOLA DE LOS TALENTOS
““¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! En lo poco
has sido fiel; te pondré a cargo de mucho más…”
(Mt. 25,21)
Para hablar con Dios hace
falta la disposición interior:
elevar el pensamiento y el
corazón hacia Él; también la
disposición exterior: siempre
será más favorable para
nuestra oración que
dispongamos el tiempo y el
lugar adecuados, así como el
propio cuerpo.
Oración inicial
Señor, Dios nuestro, te doy gracias
porque estoy aquí para escuchar tu
palabra: en ella tú nos muestras tu amor
y nos haces conocer tu voluntad.
Haz callar dentro de mí todas las demás voces que
no sean la tuya. Manda tu Espíritu Santo a abrir mi
mente y a curar mi corazón, para que el encuentro
con tu palabra sea un encuentro con tu hijo
Jesucristo, palabra hecha carne, y así lo conozca
más y lo ame más. Amén
Texto: San Mateo 25, 14-30.
Lee atentamente el pasaje bíblico, al
leerlo fíjate en la palabras que utiliza
el Evangelio de San Mateo, puedes
subrayar las palabras o frases que
más han llamado tu atención.
Breve momento de silencio
“Escuchen también esto: es como un hombre que, al
irse de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus
bienes: a uno dio cinco talentos, a otro dos y a otro
uno, a cada cual según su capacidad, y luego se
marchó.
En seguida el que había recibido cinco talentos se
fue y se puso a negociar con ellos y ganó otros cinco.
También, igualmente el que había recibido dos ganó
otros dos. En cambio el que había recibido uno se
fue, cavó un hoyo en la tierra y escondió el dinero de
su señor.
Al cabo de mucho tiempo, vuelve el señor de
aquellos servidores y ajusta cuenta con ellos.
Llegándose el que había recibido cinco talentos,
presentó otros cinco, diciendo: señor, cinco talentos
me entregaste; aquí tienes otros cinco que he
ganado. Su señor le dijo:
¡Muy bien servidor bueno y fiel!, has sido fiel en lo
poco te pondré al frente de lo mucho; entra al gozo
de tu señor.
Llegándose también el de los dos talentos dijo:
Señor, dos talentos me entregaste; aquí tiene otros
dos que he ganado.
Su señor le dijo: ¡Muy bien servidor bueno y fie!,
has sido fiel en lo poco, te pondré al frente de lo
mucho; entra en el gozo de tu señor.
Llegándose también el que había recibido un talento
dijo:
Señor, sé que eres un hombre duro, que cosechas
donde no siembras y recoges donde no esparces.
Por eso me dio miedo, y fui y escondí en tierra tu
talento. Mira, aquí tienes lo que es tuyo. Más su
señor le respondió:
Siervo malo y perezoso, sabías que yo cosecho
donde no siembro y recojo donde no esparzo; pues
debías haber entregado mi dinero a los banqueros,
y así, al volver yo, habría cobrado lo mío con los
intereses. Quítenle, por tanto, el talento y désenlo
al que tiene diez.
Porque a todo el que tiene, se le dará y le sobrará;
pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.
Y a ese sirvo inútil, échenlo a las tinieblas de fuera.
Allí será el llanto y el rechinar de dientes”.
(Interiorizamos en un momento de silencio)
Responde interiormente las siguientes preguntas:
¿Qué tiene que ver esto con la vocación del
docente? ¿Qué cualidades tiene cada uno de los
siervos de la parábola? ¿A qué me invita esta
parábola?
1. Lectio
Para comprender mejor este
texto, debes saber que:
1º El talento, era originariamente
un peso de oro o de plata de
unos 36 kilos. Variaba su valor y los kilos según la
región. Flavio Josefo hablaba de talentos de 40 kilos.
En nuestra lengua castellana talento significa tres
cosas: 1. Moneda. 2. Inteligencia, capacidad
intelectual. 3. Aptitud, capacidad para el desempeño
de una ocupación.
2º Esta parábola, no tiene el objetivo pedagógico-
moral, que casi siempre se le atribuye: hay que
negociar con las cualidades que uno tiene, con los
talentos que Dios nos ha dado. Eso sabemos que es
así, lo entendemos por sentido común. El objetivo
que se propone Jesús es señalar con el dedo: que
“Dios es Así”, como ese hombre que repartió los
talentos y se marchó de viaje.
 Un comportamiento marcado por el miedo,
 Una obsesión por la rendición de cuentas,
que paraliza,
 Una preocupación por estar en regla,
 Una auténtica condenación.

2. Meditatio
En estos momentos pregúntense qué es
lo que les dice este texto, aplíquenlo
a sus vidas, a tu situación personal.
Aquí damos unas pistas para su
meditación:
1. ¿Qué me dice a mí en concreto la parábola de los
talentos, cual es la conducta del Señor conmigo,
y mi conducta con el Señor?

3° La parábola está estructurada por: un hombre que 2. El tercer siervo tenía miedo ¿Cuáles son los
se marcha de viaje y sus servidores. Antes de irse miedos que tenemos nosotros como personas y
de viaje hizo tres cosas: llamó, confió y dio. Que los como educadores?
llamó es claro; pero, ¿Qué diferencia hay entre
confiar y dar? Se confía algo cuando se tiene la
intención de recuperarlo después. Cuando se da
algo ya no se espera devolución. La relación entre lo
que se da y lo que se confía es diferente.Los 3. ¿Qué imagen de Dios transmito yo a los
talentos, en el texto, no designan solo los dones, alumnos: la de un Dios duro, exigente,
sino las disposiciones de los servidores. La controlador, que pide cuentas o de un Dios
capacidad de cada uno está medida por una cierta Padre, amigo, cercano?
suma: cinco, dos, uno.

4° A Jesús, en orden al Reino, le va a importar muy

poco que el discípulo sea inteligente o torpe, que
tenga muchos o pocos talentos; lo que realmente le 4. ¿Cuáles son los miedos que descubro en mis
importa es si dimos toda nuestra medida. Lo alumnos? Describo tres.
importante en el texto no es que ellos hayan
trabajado, sino que hayan ganado. Lo importante
para el Señor y para ellos, es que el dinero – talento
que recibieron produzca intereses. Dice Jesús: “yo
los elegí y los destiné a ir y dar fruto, y un fruto que 5. ¿Qué encuentran nuestros alumnos en nosotros:
permanezca” Jn. 15,16. ¿Quién es el primero en el Dureza o confianza?
Reino? El que sirve más, el que se hace servidor.
¿Quién es el que en el Reino gana más? El que ama
más.

5º El final de la parábola no es un castigo 6. ¿Conozco, valoro e impulso las capacidades de

propiamente hablando; simplemente se le revela la mis alumnos?
situación en la que está atrapado; ya qué hay un
falso concepto del Señor y esto ha originado la
tragedia del tercer siervo. En esta parábola queda
claro qué errores se cometen con una falsa imagen
de Dios. De una imagen falsa, de un Dios duro,
nace:
7. ¿Somos creativos, emprendedores, con
iniciativas como los dos primeros servidores, o
somos “conservadores” como el tercero?
8. En este momento recuerdo y hago la lista de los
dones, talentos, cualidades o aptitudes que he
recibido del Señor y que he podido desarrollar, y
agradezco a Dios por eso.
¿Qué me dice a mí hoy la palabra de Dios?
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Silencio de reflexión personal
3. Oratio
Momento de oración personal
Respondamos con nuestra oración
personal a Dios que nos ha hablado a
través de su palabra, en un momento de
silencio, cada uno responda al Señor:
Te doy gracias, Señor, por___________________
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Señor, te pido perdón por_____________________
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Señor, después de escuchar tu palabra, quiero
pedirte____________________________________
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Oración comunitaria
Guía: Te damos gracias Padre
porque por medio de tu Espíritu
nos das la fortaleza para
vencer los miedos que nuestra
vocación de docentes nos presenta.
Todos: Te damos gracias, Señor.
Guía: Perdónanos Señor, por las ocasiones en las
que aceptado el miedo, la pereza nos hemos
olvidado de que este servicio es por vocación y no
por profesión.
Todos: Perdón Señor, perdón.
Guía: Te pedimos nos ayudes a descubrir cada día
nuestra vocación, a enseñar, a transmitir, a amar, a
quienes nos has confiado.
Todos: Te rogamos, Señor.
De manera espontánea algunos pueden expresar
sus peticiones
4. Contemplatio-actio
Después de haber escuchado y
orado, ahora haz un propósito para tu
vida y busca cumplirlo fielmente.
Señor, después de haberte
escuchado me comprometo a: ________________
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Silencio de reflexión personal
Me llamas Señor…
Todos juntos decimos: Me llamas a ser tu Hijo, a
estar cierto en ello, me llamas a confiar en ti, en tu
voluntad, en la misión que tu Señor tienes para mí,
me llamas a proclamarte ante el mundo y mostrarte
como nuestro único Dios, ese Dios piadoso y
misericordioso, por que tus nos amas “A pesar De”