Sunteți pe pagina 1din 6

RADIOBIOLOGIA

Alumna: Cynthia Arias

INTRODUCCIÓN HISTÓRICA

Poco tiempo después del descubrimiento de Roentgen, los médicos observaron


que los rayos X parecían destruir células tanto normales como neoplásicas. El
propio Dr. Freund, tras haber observado que esta nueva radiación había
provocado la caída del pelo de uno de sus colaboradores, trató con rayos X el
nevus piloso de un niño. La observación de los efectos biológicos que se
desprendieron de las primeras aplicaciones empíricas de las radiaciones
ionizantes y el hecho de que su utilidad clínica originara un profuso empleo de
las mismas fueron los resortes que pusieron en marcha el estudio razonado de
estos efectos.

El propio Becquerel, en 1901, se causó una quemadura en el vientre por llevar


radium en un tubo de ensayo en el bolsillo de su chaleco, y Pierre Curie se
produjo deliberadamente una reacción similar en su antebrazo. Unos días
después presentó una comunicación en la Academia de Ciencias Francesas
que decía:

"La piel comenzó a enrojecer en una superficie de seis centímetros cuadrados;


la apariencia es la de una quemadura, pero la piel no me dolía o me dolía muy
poco. Al cabo de cierto tiempo, el enrojecimiento, aunque sin extenderse, se
hizo más intenso. Al vigésimo día se formaron costras, luego una llaga que
cubrimos con vendajes. El cuadragésimo segundo día, la epidermis comenzó a
regenerarse por los bordes hasta llegar al centro. Cincuenta y dos días
después de la acción de los rayos queda aún en estado de llaga una superficie
de un centímetro cuadrado, que adquiere un aspecto grisáceo, indicando una
mortificación más profunda" (Eric J. Hall. Radiobiology for the radiologist. J.B.
Lippincott Company, 1988).

Fue Foveau de Courmelles, que también en 1901 se produjo una quemadura


por radium, quien describió las propiedades biológicas de este tipo de
radiaciones como "químicas, penetrantes y destructivas". El optimismo por la
consecución de radiografías y curaciones fue seguido no obstante del
pesimismo, a causa de la frecuente aparición de quemaduras. Los sistemas
rudimentarios de medida de dosis, basados en el cambio de color de pastillas
de bario (técnica de Sabouraud y Noiré en 1904) o en métodos biológicos como
la dosis eritema resultaron insuficientes. A partir de aquí las investigaciones no
cesan. Estábamos en los albores de la Radiobiología.

CONCEPTO:

Es la ciencia que estudia los fenómenos que suceden cuando un tejido vivo ha
absorbido la energía cedida por las radiaciones ionizantes. Estos fenómenos
son las lesiones que se producen y los mecanismos que aporta el organismo
en funcionamiento para compensar esas lesiones.
Los efectos biológicos de las radiaciones ionizantes son el resultado del
esfuerzo de los seres vivos por controlar la energía absorbida como
consecuencia de su interacción con alguna radiación ionizante.
La Radiobiología estudia la serie de sucesos que tienen lugar después de la
absorción de energía, los mecanismos utilizados por los mecanismos para
compensarlos efectos de esta absorción de energía y las lesiones que la
misma, puede producir en los individuos.
Por otra parte, la radiación siempre se asocia con los daños que produce, pero
la radiobiología, basada en el estudio de la acción biológica de las radiaciones
sobre la materia, ha impulsado el conocimiento y desarrollo de disciplinas tan
importantes actualmente como la Radiología y la Medicina Física. Conocer los
mecanismos biológicos de lo que ocurre cuando el individuo se expone a
radiaciones ionizantes, junto con avances físicos, ha permitido el avance y el
perfeccionamiento de especialidades del campo de la Radiología, como son la
Radioterapia, la Medicina Nuclear, la Protección Radiológica y la Medicina
Física.

INTERACCIÓN DE LA RADIACIÓN CON LA CÉLULA

La radiación ionizante puede desplazar un electro de un atomo.

La ionización altera la estructura electrónica de la materia y por lo t5anto


sus propiedades.

En los tejidos vivos la radiación produce cambios químicos.

Cuando se estudian los cambios que suceden en el material biológico después


de una interacción con las radiaciones ionizantes, es importante tener
presentes las siguientes generalizaciones:

La interacción de la radiación con las células es una función de probabilidad,


una cuestión de azar, es decir, pueden o no interaccionar y si se produce la
interacción, pueden o no producirse daños.

El depósito inicial de energía ocurre muy rápidamente, en un periodo de


aproximadamente segundos.

La interacción de la radiación con una célula no es selectiva: la energía


procedente de la radiación ionizante se deposita de forma aleatoria en la célula;
la radiación no elige ninguna zona de la célula.

Los cambios visibles producidos en las células, tejidos y órganos, como


resultado de una interacción con radiaciones ionizantes no son
específicos, es decir, no se pueden distinguir de los daños producidos por
otras causas.

Los cambios biológicos que resultan de las radiaciones se producen sólo


cuando ha transcurrido un determinado período de tiempo (período de
latencia), que depende de la dosis inicial y que puede variar desde unos
minutos hasta semanas o incluso años.
Los daños más importantes son los que afectan al núcleo, al ADN.

La respuesta más importante a la radiación es la MUERTE CELULAR.

Células en proliferación: Pérdida de capacidad proliferativa, a corto o largo


plazo.

Células diferenciadas: Pérdida de la función para la que se han especializado.

Procesos

Cuando las células absorben radiaciones ionizantes tienen lugar procesos de


ionización y de excitación, formándose moléculas estables o inestables o bien
radicales libres, con lo cual se producen nuevas reacciones químicas con las
moléculas contiguas.

Estos procesos de ionización o excitación pueden producirse en las


macromoléculas biológicas (por ejemplo, el ADN), o bien, en el medio en que
están suspendidos los orgánulos celulares (p. ej.: el agua). Y es aquí en donde
se ve la radiolisis del agua.

La acción de la radiación sobre la célula se puede clasificar en directo o


indirecto, según el lugar en el que se produzcan esas interacciones.

Acción directa

La acción directa ocurre cuando una partícula ionizante, o la radiación en


general, interacciona y es absorbida por una macromolécula biológica como el
ADN, el ácido ribonucleico (ARN), las proteínas estructurales y enzimáticas o
cualquier otra macromolécula de la célula, que se traduce en cambios de su
estructura o de su función. Así pues, el daño se produce por la absorción
directa de energía y por la subsecuente ionización de una macromolécula
biológica de la célula.

Acción indirecta

Comparada con la acción directa, la acción indirecta implica la absorción de


radiación ionizante por el medio en el cual están suspendidas las moléculas. El
medio de la acción indirecta es fundamentalmente el agua, dando lugar a la
formación de iones y de radicales libres. Las reacciones que produce la
radiación en la molécula de agua son consecuencia de los electrones formados
por ionización:

De estos productos, los más reactivos son los oxidantes: radical hidroxilo y el
reductor radical hidrógen, y esto es debido. Los radicales H· y OH· son
moléculas neutras con gran reactividad química pues tienen un electrón
desparejado que con muy poco esfuerzo tenderá a crear enlaces y robar así
átomos a otras moléculas que en el peor de los casos podrían ser biomoléculas
funcionales tales como proteínas o nucleótidos.
Los efectos de los radicales libres en la célula se multiplican por su capacidad
para iniciar reacciones químicas y, por lo tanto, para producir lesiones en
lugares distintos de la célula.

Aunque en la interacción de la radiación con el agua ocurren muchas otras


reacciones y se forman otros muchos productos, los radicales libres son un
factor fundamental en la producción de lesiones celulares (un radical libre se
caracteriza porque contiene un solo electrón orbital no aparejado que le hace
fuertemente reactivo, debido a la tendencia del electrón a no emparejarse con
otro electrón).

Comparación de las acciones

En resumen, la acción directa produce daños por la ionización de una


macromolécula biológica y la acción indirecta produce daños a través de
reacciones químicas iniciadas por la ionización del agua. Por tanto, la definición
de acción directa o indirecta, depende solamente del lugar de donde se
produzca la ionización y la absorción de energía en la célula.

Debido a que en la célula hay mayor cantidad de agua que de ningún otro
componente estructural, la probabilidad de que la radiación produzca daños por
acción indirecta, es mucho mayor que la probabilidad de que se produzca por
acción directa.

Además, la acción indirecta ocurre fundamentalmente, pero no exclusivamente


por la actuación de los radicales libres que resultan de la ionización del agua.
La ionización de otros constituyentes celulares, especialmente las grasas,
también pueden dar como resultado la formación de radicales libres.

Niveles de interacción

Los electrones producidos en la interacción de la radiación con los átomos que


forman el cuerpo llevan cierta cantidad de energía cinética. Estos electrones
pueden llegar a interaccionar con la célula en tres grandes regiones: a nivel del
núcleo, del citoplasma o de la membrana citoplasmática.

A nivel de la membrana. Cuando la interacción es a nivel de la membrana, se


pueden producir alteraciones osmóticas, lo que hace que la célula pueda recibir
mayor cantidad de fluidos del exterior o bien, que el citoplasma se salga de la
célula al medio exterior. En ambas situaciones, la célula puede sobrevivir, pero
sus funciones de duplicación pueden fallar.

A nivel del citoplasma. En virtud de que el citoplasma se compone


aproximadamente de un 70% de agua, podemos llegar a entender la
interacción de la radiación ionizante con ella si conocemos el efecto en la
molécula de agua (radiólisis).

A nivel del núcleo. Los cromosomas tienen en su interior el ácido


desoxirribonucleico (ADN), el cual tiene la capacidad de autoduplicarse. Si el
proceso de duplicación del ADN es normal, pueden ocurrir cambios o
alteraciones ocasionales en los cromosomas, pero a una frecuencia
sumamente baja.

Cuando existe algún cambio en la secuencia de la estructura química se


produce lo que se llama una mutación y a los agentes físicos o químicos que la
producen se les llama mutágenos.

Estas mutaciones pueden presentarse desde un simple cambio en la secuencia


de los elementos ADN hasta cambios a escala cromosómica, ya sea por
cambio de su estructura o por alteración en su número.

Las mutaciones pueden ocurrir de dos maneras: una natural o espontánea


(frecuencia muy baja) y la otra es inducida por mutágenos como las radiaciones
ionizantes o compuestos químicos.

Las células también son capaces de reparar los daños producidos por los
mutágenos químicos o físicos, mediante sistemas celulares de
reparación, los cuales pueden disminuir el efecto mutagénico de la
radiación.

EFECTOS DE LA RADIACION A NIVEL BIOLOGICO

• Efectos somáticos: Sólo se manifiestan en el individuo que ha sido sometido


a la exposición de radiaciones ionizantes por ejemplo el eritema.

• Efecto hereditario: No se manifiestan en el individuo que ha sido expuesto a


la radiación, sino en su descendencia, ya que lesionan las células germinales
del individuo expuesto, por ejemplo las mutaciones genéticas.

Según la dependencia de la dosis

• Efecto estocástico: Son efectos absolutamente aleatorios, probabilísticos;


pudiendo aparecer tras la exposición a pequeñas dosis de radiación ionizante.
No necesitan una dosis umbral determinada para producirse; si bien al
aumentar la dosis aumenta la probabilidad de aparición de estos efectos, que
suelen ser de tipo tardío. Se cree que el único efecto estocástico es el cáncer
radioinducido y las mutaciones genéticas.

• Efecto no estocásticas: Se necesita una dosis umbral para producirlos, por


debajo de la cual, la probabilidad de aparición de los mismos es muy baja.
Suelen ser efectos precoces, por ejemplo, el eritema cutáneo

FACTORES INFLUYENTES EN LOS EFECTOS BIOLÓGICOS

Existen diversas causas por las cuales los efectos producidos por la radiación
ionizante pueden ser más o menos severos, los cuales se agrupan en tres
clases: físicos, fisiológicos y ambientales.

Físicos. Dependen de las características de la radiación incidente, entre


éstos se tienen: la dosis total, distribución de dosis en el tejido, tipo de
radiación, dosis por exposición, rapidez de dosis e intervalo entre las
irradiaciones.

Fisiológicos. Estos dependen del individuo irradiado: edad, constitución


genética, sexo, metabolismo, nivel de respuesta a la tensión nerviosa, entre
otros.

Ambientales. El que se ha identificado a la fecha es la presión ambiental de


oxígeno.

Efecto oxígeno
El oxígeno es un potente radiosensibilizante, es decir, aumenta el efecto de la
irradiación. El oxígeno, al combinarse con los radicales libres, produce un
aumento de la vida media de éstos y la fijación del daño radioinducido.

Moléculas donadoras de H

Las moléculas donadoras de H, como las que contienen grupo sulfhidrilo (-SH),
pueden neutralizar los radicales libres, teniendo un papel protector, ya que se
ha demostrado que el aumento o disminución en los niveles intracelulares de
grupos -SH, origina cambios paralelos en la supervivencia celular.

S-ar putea să vă placă și