TRABAJO PRODUCTIVO

Asignatura: Ética cristiana

Docente: Ruth Roshy Mamani
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Integridad en el matrimonio. “No cometerás adulterio.”

Podríamos entender por adulterio como la violación de la fe conyugal, y, como causal una situación que

anuncia relación o causa de efecto

Pero las personas hoy en día cometer adulterio, tener hijos fuera del matrimonio lo ha tomado como parte

de la vida normal. Sin embargo, no se toma en cuenta el sufrimiento de los hijos o lo perjudicial que

podría ser para el futuro de sus hijos, con esta acción los hijos crecen con una inseguridad paternal o

maternal ya que las niñas necesitan amor paternal ya que ellos ven al padre como su novio y los niños a la

madre como su novia como lo explica. Nancy Van Pelt “hijos vencedores”.

Si analizamos tanto como los hombres y mujeres son distintas nuestras necesidades emocionales muchas

veces por falta de dialogo o expresión los matrimonios fracasan y se separan o cometen adulterio lo

vieron como salida.

Sin embargo, Dios nos dice en el séptimo mandamiento protege la santidad del hogar y expresa el valor

que Dios asigna a la lealtad en las relaciones, especialmente en la más íntima de la vida humana (Mal.

2:14-16). Cometer adulterio no solo despedaza nuestra integridad, sino que opaca la confianza

establecida con tu cónyuge y rompe una unión establecida por fe ante los ojos de Dios.

Elena G. de White indica. Hogar Cristiano Pág. 10. Indica que el hogar debe ser hecho todo lo que la

palabra implica. Debe ser un pequeño cielo en la tierra, un lugar donde los afectos son cultivados en vez

de ser estudiosamente reprimidos. Nuestra felicidad depende de que se cultive así el amor, la simpatía y la

verdadera cortesía mutua. El símbolo más dulce del cielo es un hogar presidido por el espíritu del Señor.

Si se cumple la voluntad de Dios, los esposos se respetarán mutuamente y cultivarán el amor y la

confianza.

Todo hogar cristiano debe tener reglas; y los padres deben, por sus palabras y su conducta el uno hacia el

otro, dar a los hijos un ejemplo vivo y precioso de lo que desean verlos llegar a ser.

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Debe manifestarse pureza en la conversación y debe practicarse constantemente la verdadera cortesía

cristiana.Elena G. de White indica. Hogar Cristiano Pág. 13. como vemos la palabra de Dios es clara y

los consejos de Elena G. debemos crear un hogar armonioso y todo ello lo podemos lograr si Dios es el

centro de nuestro hogar y con la confianza que se tiene entre esposos no importa lo doloroso que sea la

situación lo podremos superar y debe haber bastante dialogo y confianza.

Si se cumple la voluntad de Dios, los esposos se respetarán mutuamente y cultivarán el amor y la

confianza